Professional Documents
Culture Documents
Con 35 Años
Con 35 Años
Mi mujer se habia vuelto una inapetente sexual y no habia forma de poder mantener una
relacion medio normal con ella...
Hasta que un dia decidimos que aquello no podia seguir así y coincidimos en que lo
mejor para los dos era el divorcio...
Podria ver a mi hijo cuando quisiera y pasar con el fines de semana alternos, pero
durmiendo siempre en casa de su madre...
La situacion financiera en que quede, me dejaba poco margen de maniobra para alquilar
un piso, gastos normales y comer, asi es que no me quedaba otro remedio que volverme
a casa de mis padres...
Bueno, en realidad, al apartamento de mi madre, ya que hacia dos años que habia
muerto mi padre de un infarto y mi madre, con 60 años, viuda y sola, habia vendido su
centrico piso por una buena cantidad de dinero y se habia comprado un apartamento en
una zona periferica por menos de la mitad del precio de venta de su piso, con lo que
ahora vivia en ese apartamento y tenia una buena suma de dinero en el banco...
Mi madre encantada que me fuera a vivir con ella (Nunca se había llevado bien con mi
mujer), para ella yo seguia siendo su niño, a pesar de tener ya 35 años...
Mi madre a sus 60 años, seguia trabajando, era funcionaria, y eso la mantenia activa...
Era una mujer moderna en todos los sentidos, vestia bien, se cuidaba... Aparentaba
menos edad de los 60 años que tenia...
Una mujer muy normal, pequeñita y coqueta, pelo rubio muy corto, a lo garson... tenia
todo lo que una mujer tiene que tener, pero no destacaba por nada...
El unico problema era que su apartamento no tenia mas que un dormitorio y ademas el
unico cuarto de baño estaba dentro del dormitorio...
Eso sí, el dormitorio estaba bien, con una cama de matrimonio de 150 y un armario
empotrado que ocupaba una pared completa...
La idea era que yo dormiria en el sofa-cama del salon, que era amplio y comodo...
Para empezar, mi madre tenía que dormir con la puerta del dormitorio abierta y la
persiana de la ventana entreabierta, para que si yo iba por la noche al baño, no tuviera
que dar la luz y despertarla...
Otro problema y gordo, era que por las mañanas los dos entrábamos a la misma hora a
trabajar y teniamos que utilizar el baño y vestirnos en su dormitorio (Toda mi ropa
estaba en el armario del dormitorio)...
Esta situacion hizo que poco a poco nos fueramos adaptando a ella y que nuestra
confianza, necesariamente, fuera siendo cada dia mayor...
El tercer dia cuando entre en el domitorio de mi madre, para ir al baño, ella se estaba
cambiando y entre justo cuando estaba en bragas y se acababa de quitar el sujetador...
Yo un poco cortado la pedi disculpas, ella me dijo que no pasaba nada y siguio a lo
suyo, sin darle la menor importancia...
Era la primera de las muchas veces que veria sus tetas, y por ello, me fijé en ellas, no
eran muy grandes, pero tampoco de esas pequeñas pegadas, le colgaban ligeramente,
tenia unas areolas marron claro y unos pezones oscuros y prominentes, que destacaban
sobre su piel blanca...
Para su edad, mi madre tenia unas tetas muy bonitas, agradables a simple vista...
Al principio habia situaciones, como esta, incomodas para ambos, pero poco a poco
fuimos perdiendo el pudor y haciamos las cosas que teníamos que hacer, con toda
naturalidad...
También recuerdo la primera vez que la vi desnuda, fue una situación parecida a la de
las tetas, se acababa de duchar, yo estaba en el salon viendo la tele y esperando que
terminara de ducharse para ir al baño...
Cuando dejé de oir la ducha, esperé unos minutos para darle tiempo a salir y vestirse y
despues entre en el dormitorio, la pillé en pelota picada, dandose una crema por todo el
cuerpo...
La pedí disculpas como la vez anterior y ella me contestó de igual manera, que no
pasaba nada y siguio a lo suyo como si yo no estuviera alli delante, mirandola con cara
de lelo, durante unos segundos...
Durante esos segundos mis ojos "escanearon" su cuerpo... Un cuerpo menudo, terso, de
piel extremadamente blanca, sobre la que destacaban los oscuros pezones de sus tetas,
un culo redondito, sin cartucheras, ni celulitis en los muslos y una mata de pelo rubio,
en su pubis, que apenas destacaba, dado que lo tenia perfectamente recortado...
Sin darnos cuenta, en apenas 15 dias, habiamos pasado a convivir como una pareja de
echo, con la unica salvedad, que no dormiamos juntos...
Como era verano, andábamos por la casa con ropa ligera y cómoda, yo con un pantalón
de pijama encima de los calzoncillos y una camiseta de algodón y mi madre igual sin
sujetador debajo de su camiseta...
En esa estrecha convivencia, yo sin poder evitarlo tenia las normales erecciones, que los
primeros dias trataba de disimular como podia, pero poco a poco fui relajandome,
viendo que mi madre disimulaba y lo habia aceptado como algo normal...
Estos primeros dias fueron transcurriendo con toda la normalidad posible, en un proceso
de adaptacion, sin ninguna muestra de atraccion sexual, al menos aparentemente, por
ambas partes, aunque mis erecciones cada dia eran mas frecuentes, dadas mis logicas
necesidades...
Yo asumí que mi madre habia decidido hacer una abstracion de ese tema... que para
ella, mis erecciones eran algo normal y que mi polla, cuando por casualidad me veia
desnudo, solo era una parte mas de mi cuerpo... como una mano o un pie...
Pero... Eramos un hombre y una mujer, conviviendo en un espacio reducido, con una
confianza y una familiaridad que cada vez era mas parecida a la de una pareja que la
propia de madre-hijo en una situación normal...
Pero es que, nuestra situación no era para nada normal... Aunque nosotros hacíamos
todo lo posible porque lo fuera...
Cuando por la noche nos sentábamos en el sofá después de cenar a ver la tele, mi madre
se acurrucaba a mi lado, yo la pasaba mi brazo derecho por encima del hombro y ella
descansaba su cabeza en mi pecho...
En esa posición que era la más habitual, yo la daba besos en la cabeza y en la frente de
vez en cuando y a ella la encantaba que se los diera, apretaba mi mano con la suya en
señal de aprobación y cariño...
Era nuestra hora de relax y nos hacíamos cariñitos, caricias y besos sin malicia alguna,
al menos al principio, porque cuando fuimos cogiendo confianza, los roces eran más
atrevidos y a mí se me empezaba a notar mucho el cambio, cosa que evidentemente con
la ropa que llevaba, a mi madre no le podía pasar inadvertido...
Yo en ningún momento me había planteado tener nada con mi madre y desde luego no
quería provocar ninguna situación violenta que pudiera poner en peligro nuestra
convivencia, por la cuenta que me tenía...
Pero no había nada malo en juguetear un poco, mientras ella disfrutará jugando y eso es
lo que hacíamos juguetear...
Pero, claro, los que estaban en esa situación, jugando con fuego, eran, además de madre
e hijo, un hombre de 35 años que llevaba tiempo sin comerse una rosca y una mujer de
60 años, que parecía una jovencita enamorada, que llevaba más de dos años de obligada
abstinencia y que ahora con ese hombre a su lado, su cuerpo se había despertado del
letargo y agradecía cualquier caricia o muestra de cariño...
Así las cosas, nuestros besos y caricias cada vez se fueron haciendo más efusivos...
Yo como veía que ella era feliz la achuchaba y la besaba cada vez con más entusiasmo
sin llegar a besarla en la boca pero si en la cara y en el cuello, al que debido a su pelo
corto, tenia facil acceso...
Cuando la besaba en el cuello ella se apretaba más a mi y se reía porque decía que la
hacía cosquillas...
Ni que decir tiene que a mi con estos cariñitos la polla se me ponía como cuello de
avestruz y me salía un bulto perfectamente visible en mi entrepierna...
Mi madre al tener su cabeza apollada en mi pecho, lo tenía que ver perfectamente, pero
no decía, ni hacia nada, ella solo se dejaba hacer...
Así las cosas, yo cogía la mano que normalmente tenía sujeta con la mía y la ponía
encima de mi bulto, la dejaba allí quieta y hacia contracciones con mi polla, para que
ella la sintiera moverse...
Ella, naturalmente la sentía, pero no decía nada, solo apretaba su cuerpo contra el mío y
se le escapaba algún suave suspiro...
Yo aprovechaba para besarla por la cara y por el cuello y no tenía que esforzarme
mucho para que mi polla palpitara...
Ni que decir tiene que antes de irme a dormir, casi todas las noches me tenia que
desahogar en el baño, procurando ser rapido y sin hacer ruido, para que mi madre no se
enterara, aunque seguro que ella se lo imaginaba...
Todo, en nuestra diaria convivencia se habia vuelto normal para los dos, eramos
felices...
Pero... habia un pero...
Para mi madre, con su edad, el sexo no era ninguna necesidad, ella se conformaba con
el cariño que yo le daba, no necesitaba mas... Con esas pequeñas cosas se sentia
satisfecha y feliz...
Pero... ella sabia que para mi esos jueguecitos que nos traíamos por las noches, no solo
no eran suficientes, sino que me producian un estado de excitacion que a bien seguro
tenia que calmar en el baño antes de irme a dormir...
Tenia claro que yo necesitaba sexo y ademas sabia que mi divorcio se habia producido
precisamente por ese motivo, por falta de sexo y ella, una vez que se habia
acostumbrado a mi compañia, no queria volver a quedarse sola...
Ella no iba a forzar nada, pero iba a poner todo lo necesario por su parte, para que si yo
queria tener sexo, lo tuviera, sin necesidad de tener que buscarlo fuera de nuestro
hogar...
Asi es que, una noche, cuando estabamos en el sofa viendo la tele, sin andarse con
rodeos, me dijo...
- Cariño, llevamos ya mas de un mes conviviendo juntos, nos hemos visto desnudos
montones de veces y aqui en el sofa nos abrazamos y nos damos cariñitos, asi es que,
¿que sentido tiene que no podamos dormir juntos en mi cama?...
Y añadio...
- Mi cama es enorme para mi sola y lo de tu dormir en el sofa, para unos días está bien,
pero de forma definitiva no tiene sentido, asi que... ¿Que te parece si te vienes a dormir
a mi cama desde esta misma noche?
Yo ya sin andarme con rodeos, decidí dejar las cosas claras, para que mi madre supiera
a que atenerse...
- Joder, mamá, pues que ya sabes que me paso el dia empalmado y en la cama, eso
puede empeorar...
Para mi sorpresa, mi madre, también sin andarse sin rodeos, me dijo...
Joder, mi madre estaba dando por hecho que la iba a tocar con mi polla en otras partes
de su cuerpo...
Me quedé otra vez sin saber muy bien que decir, no queria meter la pata y estropearlo
todo, pero tampoco queria que no le quedara claro a mi madre lo que iba a suceder si me
acostaba con ella...
Que me iba a correr en la cama en cuanto nos tocaramos y lo iba a poner todo perdido...
- Si... Porque es lo que va a pasar, si como es logico, nos abrazamos y nos hacemos
cariñitos como aqui en el sofa...
- Estupendo, pero que sepas que lo pondré todo perdido, porque mis corridas son muy
abundantes...
La respondi, pensando en que me iba a decir que me pusiera un preservativo, o algo por
el estilo...
Yo ya, nervioso y sin saber muy bien de que estábamos hablando la pregunte...
- Joder, hijo ¿Te estas haciendo el tonto? Pues dentro de mi, ¿De quien va a ser?...
Yo, con voz entrecorgada por el morbo que me produjeron aquellas palabras la dije...
- ¿Me vas a dejar desahogarme dentro de ti?
- Si mi amor, tu necesitas tener sexo con una mujer y yo estoy dispuesta a ser esa mujer
si tu quieres...
- ¿Que si quiero?... Bufffff, llevo deseandolo desde el primer dia que te vi desnuda...
Gracias mamá, eres la mejor madre del mundo...
- La verdad es que yo también deseo sentir las sensaciones del sexo en mi cuerpo,
aunque, entre mi edad y los años que llevo sin usarlo, no se si todavia me funcionara..
Cuando acerqué mis labios a los suyos, ella los entreabrio, yo suavemente introduje mi
lengua dentro de ellos y ella salio a mi encuentro con la suya... Nos fundimos en un
beso que duró varios minutos...
- Desde hoy es toda tuya mama, puedes hacer con ella lo que quieras...
Mi madre me miro con un brillo en sus ojos que era la primera vez que yo la había visto
asi y con una voz ronca, también nueva para mi me dijo...
Mi madre con una rapidez y una facilidad que me dejó anonadado, me bajo de un solo
golpe el pijama y el calzoncillo, sacó mi polla y se la empezo a comer con su boca, sus
labios, su lengua...
Bufffff... No paró hasta que no me corrí en su boca y siguio chupando y tragando mi
corrida, hasta que no quedó ni una gota que manchara el sofa...
Pense que era la primera vez que ponia en practica su infalible metodo para no ponerlo
todo perdido... Correrme dentro de ella y habiamos empezado por su boca...
Cuando sali del baño, limpio seco y en pelota picada, alli estaba mi madre tumbada en
la cama, completamente desnuda, esperandome...
Bajé mi mano hasta su sexo, ella levantó sus rodillas y abrió sus piernas para facilitarme
el acceso...
Con mi dedo corazon empecé a urgar en su coño, estaba suave, pero seco, nada que ver
con el coño de mi mujer, al que yo estaba acostumbrado...
Era lo normal, en una mujer de su edad y que ademas llevaba años sin tener sexo...
Estaba claro que tendría que lubricarlo bien si queria poder meter mi polla dentro de el,
asi es que, dejé las caricias, cogí una almohada, la coloque debajo de su culo, con su
ayuda y me prepare para lubricarle bien el coño con mi lengua...
Mi madre no decia nada, solo cooperaba y se dejaba hacer, confiando totalmente en que
su hijo sabia lo que hacia, abrió sus piernas de par en par dispuesta para recibir el sexo
oral para el que su hijo la estaba preparando...
Habiamos dejado la luz dada, asi es que me tumbé en la parte baja de la cama, meti mi
cabeza entre sus piernas y con mis dedos pulgares, abrí lo que queria que fuera mi
instrumento de placer...
Sus labios mayores se abrieron, dejando a la vista los menores, aun pegados, tenian un
color morado claro, seguí separando un poco mas con mis dedos, sus labios menores se
abrieron y aparecio la sonrosada entrada a su vagina...
Meti mi lengua bien ensalibada y comence a lamerla por todos lados, llenando bien
todos sus rincones con mi saliva...
Endurecia mi lengua y la metia todo lo dentro que podia...
Subi hacia la parte superior buscando su clitoris, que como suponia, estaba totalmente
retraido...
Apreté con mis labios ligeramente entreabiertos donde se suponía que debia estar
escondido y con mi lengua lo buscaba afanosamente...
Al cabo de un rato trabajandomelo, por fin lo consegui, note con mi lengua un pequeño
bultito que sobresalia del resto..
Lo atrape con mis labios y apretandolos contra los lados, conseguí hacerlo salir
definitivamente de su funda...
Sin dejar de apretar con mis labios, comence a presionarlo directamente con mi lengua...
Note como mi madre empezó a mover sus caderas y a soltar gemidos de placer...
Acelere mis caricias bucales y comencé a lamer y chupar por todas partes, clitoris,
vagina, labios, todo...
Habia metido mis manos debajo del culo de mi madre y con mi cabeza metida entre sus
piernas, me la estaba comiendo como si fuera una tajada de sandia madura...
De pronto, mi madre tenso todo su cuerpo, aprisiono mi cabeza con sus piernas y
lanzando gritos de placer, comenzó a correrse en mi boca...
Yo pensé que ese era el momento propicio para intentar la penetracion, ya que nunca iba
a estar su coño tan lubricado como en ese momento...
Me puse de rodilla entre sus piernas, ella seguia con la almohada debajo de su culo, asi
es que en esa posición, mi polla quedaba prácticamente a la altura de su coño...
Agarre con una mano mi polla que estaba tiesa y dura como un palo, apuntando al techo
y la dirigi a la entrada de aquel deseado agujero...
Ayudado de mi mano se la pase bien por todo el coño, humedeciendola con los flujos de
su reciente corrida, la enfile y una vez enfilada, apreté ligeramente, hasta conseguir que
mi prepucio quedara incrustado en la entrada de su vagina...
En esa posicion, mire por primera vez la cara de mi madre... Estaba con los ojos abiertos
como platos, tensa, espectante y deseando que pasara lo que tuviera que pasar...
Yo lo estaba haciendo de aquella manera, precisamente por eso, porque sabia que mi
madre estaria tensa y esto podia hacer que sus músculos se contrayeran, dificultando la
penetracion y causandola dolor, cosa que yo queria evitar a toda costa...
- Mamá, ahora voy a comenzar a meterme dentro de ti, lo voy a hacer despacito y
suavemente, sin ninguna prisa, asi es que relajate, porque asi entrará mejor... Si te hago
daño, me lo dices y paro inmediatamente... ¿Vale?
- Vale mi amor...
Sin dejar de mirarla a la cara, la agarre con mis dos manos por las caderas y comence a
apretar suavemente... Mi polla comenzó a deslizase sin ninguna dificultad por aquel
estrecho y apretado pasadizo...
Mi madre abria y cerraba su boca en un jadeo con el que se intercalaban unos ligeros
quejidos, que indudablemente no eran de dolor, porque la expresion de su cara había
pasado a ser una expresión de felicidad y placer...
Ninguno de los dos deciamos nada, solo jadeos y respiracion entrecortada por ambas
partes...
Yo seguia a lo mio, avanzaba y retrocedia, para que mi polla se fuera lubricando bien...
Cuando retrocedia, al volver a avanzar, me introducia cada vez un poco mas, hasta que,
por fin, y sin ninguna dificultad, los 16 cm de mi polla entraron totalmente dentro de la
vagina de mi madre...
En este punto pare y le dije a mi madre, que me miraba espectante, porque no sabia
porque habia parado...
- Mamá, estoy totalmente dentro de ti... He vuelto a entrar por donde sali hace 35 años,
ahora te voy a follar hasta que me corra, cuando me vaya a correr, parare, me quedaré
quieto, para que sientas el calor de mi corrida en lo mas profundo de tu cuerpo,
disfrutalo mamá, porque será un momento unico en nuestras vidas...
- Gracias mi amor, pero que bueno eres conmigo, mi vida, nunca nadie me habia tratado
con tanto cariño y tanto amor, no te imaginas el placer que estoy sintiendo teniendote
dentro de mi, es algo imposible de explicar con palabras...
Y ahora voy a disfrutar viendo como disfrutas tu y voy a disfrutar sintiendo como te
derramas dentro de mi...
Sin mas preámbulos, teniendola bien sujeta por las caderas comence a follarme a mi
madre con verdadera pasion...
Mi madre ponia sus manos en mi pecho, abria los brazos y se agarraba a las sabanas y
no paraba de jadear y dar gritos contenidos de placer...
No deciamos nada, solo nos mirabamos, jadeabamos y follabamos como creo que
ninguno de los dos habíamos follado nunca...
- Si mi vida, correte dentro de mi, inunda mis entrañas con tu leche calentitaaaaaa...
Tal y como la habia dicho, me pare, con mi polla metida hasta el fondo y comence a
lanzar chorros de leche, dentro de lo mas profundo del cuerpo de mi madre...
Nos volvimos como locos, yo me tire encima de ella, la abrace y comence a comerme su
boca...
Ella rodeo mi cuerpo con sus piernas y sus brazos y correspondió a mi beso con la
misma pasion...
Asi estuvimos, hasta que nuestros cuerpos quedaron satisfechos y poco a poco se fueron
relajando...
Yo, que habia comenzado a correrme antes, cuando mi polla dejo de soltar semen y se
relajó, segui sintiendo las contracciones de la vagina de mi madre durante algunos
maravillosos minutos mas...
Cuando finalmente nos tranquilizamos, sin sacar la polla, me apoyé sobre mis codos,
dejando de aplastar a mi madre y quedamos en la posicion del misionero...
Las tetas de mi madre se movian al ritmo de su aun agitada respiracion y a mi me
encantaba verlas subir y bajar de aquella forma...
En esa posicion, descansando sobre mis brazos y con la polla aun dentro del coño de mi
madre, la dije...
- Me alegro mucho mamá, para mi también ha sido algo muy especial, saber que me
estaba corriendo dentro de mi madre, me ha producido unas sensaciones totalmente
nuevas para mi...
- No cariño... ¿Porqué?
- Pues porque te habras dado cuenta que aun sigo estando dentro de ti...
- Pues si no estas cansada, voy a seguir dentro y voy a volverte a follar, esta vez, ya
sabiendo que no hay problemas, sin contemplaciones...
Y dicho y hecho, comence primero a moverme despacito hasta que mi polla fue
recuperando su dureza, para luego empezar a follarme a aquella mujer sin ningun tipo
de consideracion filial...
Como los dos acabábamos de corrernos, la cosa iba para largo, asi es que cuando
llevabamos un rato follando en la posición del misionero, cambiamos a la del perrito...
Puse a mi madre a cuatro patas, ella agarró una almohada para apoyar la cabeza y su
culo en pompa totalmente a mi disposición...
La agarre por la cintura, apunte mi polla y de un solo viaje se la metí hasta el fondo de
su coño, del que salian borbotones de mi y semen y sus jugos, que escurrian por sus
muslos, hasta la cama...
En esa posicion, mi madre tuvo otro orgasmo, porque es la posición donde mas se
estimula el punto G, eso las vuelve locas y es de lo mas normal que las mujeres se
corran y mi madre, se ve que no iba a ser la excepción...
Agarró la almohada y con ella ahogaba los gritos de placer que salian de su boca, luego
cayó desmadejada hacia adelante...
La dejé que cogiera aliento y para que descansara, me tumbe de espaldas y la dije que se
montara encima de mi...
Ella se sentó a horcajadas sobre mi, con su mano guio mi polla hasta la entrada de su
palpitante coño y sentándose sobre ella, se la metió hasta el fondo, quedando
literalmente ensartada en mi palo....
La agarre de sus manos para que mantuviera el equilibrio y ella comenzo a cabalgar
sobre mi, con penetraciones profundas y rápidas que hicieron que en pocos minutos, nos
corrieramos otra vez los dos, gritando como locos por el intenso placer que estábamos
sintiendo...
Cuando recobramos el aliento, coincidimos en que nos tendríamos que duchar, porque
teniamos los dos nuestras partes bajas totalmente empapadas de nuestros fluidos...
Nos metimos en la ducha los dos juntos y nos ejabonamos el uno al otro, entre risas y
bromas...
Cuando volvimos a la cama, limpios y secos, nos arropamos con la sabana y nos
abrazamos como dos recien casados en su noche de bodas...
Estabamos cansados, pero no teniamos sueño, seguiamos con la adrenalina a tope, asi
que comenzamos a charlar y a veces en serio y a veces entre bromas y risas, nos fuimos
haciendo confidencias...
Mi madre me confesó que su vida sexual habia sido un desastre hasta esa noche...
Que mi padre era de los de llegar y pegar, sin previos ni fantasias, siempre de la misma
manera, el misionero de toda la vida y para de contar...
Que esta noche habia sabido por primera vez lo que era un verdadero orgasmo...
Que ella solo habia tenido algunas veces, muy pocas, algun amago de orgasmo...
Y que eso la habia generado una inapetencia sexual endemica, que la habia mantenido
ajena a todo lo referente al sexo...
Que cuando la dije si podía ir a vivir con ella se llevó una gran alegria, pero que en
ningún momento pensó que pudiera haber ningun tipo de atracción accion sexual, al
menos por parte de ella, ya que si no la sentia por nadie, por su hijo muchisimo menos...
Que incluso pensó que lo logico era que durmieramos los dos en la cama, porque era
muy grande y habia espacio de sobra para los dos...
Que me propuso dormir en el sofá, porque no queria que yo viera lo de dormir con mi
madre como algo poco convencional, que luego con el tiempo ya iriamos viendo...
Que las primeras veces que me vio mi pene, tanto en reposo, como empalmado, no
sintió absolutamente nada, que para ella era una parte mas de mi cuerpo...
Que todo empezó a cambiar cuando empece a poner su mano encima de mi polla y la
hacia palpitar...
Que esa cosa tan aparentemente insignificante, habia despertado algo que estaba latente
en lo mas profundo de su subconsciente...
Que para ella, sentir las palpitaciones de mi pene en su mano, se convirtió en una
especie de droga...
Que se pasaba el dia deseando que llegara la noche para volver a sentir esa sensacion...
Que segun fueron pasando los dias, cada vez era mayor su deseo de agarrar aquella
palpitante cosa con sus manos...
Y que, finalmente, empezo a desear con toda su alma, tener aquello dentro de ella...
Tenia que conseguir tener aquella cosa que habia visto varias veces y que cada vez que
pensaba en ella le subian las calmas, dentro de ella, la necesitaba...
Que habia visto como me ponia por las noches, cuando me besaba y me achuchaba y
que esa noche habia decidido dar el paso definitivo, sabiendo que yo también lo estaba
deseando...
Y finalmente, me dijo que los dos dias mas intensos de su vida se los habia
proporcionado yo, el dia que naci y hoy...
Yo por mi parte la confesé que mi vida sexual con mi exmujer era parecida a la suya
con mi padre, pero a la inversa...
Que últimamente no conseguia mantener ningun tipo de relacion sexual con ella...
Que a mi me empezó a pasar lo mismo que a ella, me pasaba el dia deseando que llegara
la noche, para poder sentir su mano sobre mi pene y comermela a besos...
- Bueno cariño yo creo que por hoy hemos tenido bastante, has regado, bien regado mi
"seco jardin", asi que si te parece bien vamos a descansar...
- Si mamá, mañana será otro dia, y te prometo que ya no dejare que se vuelva a secar tu
"jardin", te lo regare bien regado todos los dias...
Mi madre había agarrado mi polla con una de sus manos y sin soltarla se quedó dormida
con su cabeza apollada en mi pecho...
El día siguiente fue el primer día del resto de nuestra vida como madre e hijo y como
pareja de hecho...
Y a partir de ese dia regue el "jardin" de mi madre todos los dias y algunos dias mas de
una vez...