SONETOS LIBRES

lenta agonía de años

la luna estruja su boca
verano el mendrugo
muere la canción que gira
tiempo de amores salvajes
lluvias corren abajo
su risa comienza de nuevo
salida del impulso verde
devasta ciudades incita la gloria
en un mar creciente
pregúntale, levántale las manos
dominio será su sangre entre la arcilla
hecha de ruegos
hecha de golpes nocturnos
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las rabias retoman el canto

lugares remotos gritos
contrastes transparentes
dolores de infancia
que bailan entre mis bosques
tu verano llega mi niña
en la bala loca falleces
despedazados no vemos sin cielo
en juventud de noches
las garzas lluvia maldita
al oído seco y marino
los muertos nacen primaveras
de ángeles y males
renace mi tortura
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un rezo alejó al naufragio

venas lágrimas
ciudad tinieblas la propina
del sol al movimiento su arder no eclosiona
el viento la deja huir
al perdón de su aprendizaje
tose tose la verdad alumbra
un pueblo de amor y de guerra
va afuera rebosante
mitad aire mitad cuerpo
en silencio regresas la noche
ciega de día
de tu mal una gaviota
hieres rozas como un cisne
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murieron en paz
de la pared tomaron señales
ellos fueron la ruptura
con piel de nubes y flores
penas oscuras luz habitan
tu homenaje
colgado la mira
en el proceso de terminar un sueño
derramado en marea pálida se hincha
por un tonto que bendice mejillas
tumbas rellenas de verde
camino suave tus colinas
nublan mi impulso
tus ojos me ven
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luz de las estrellas

no puedo decir si lo hizo
está en un bosque retorcido a la distancia
en las rocas que deja el verano
la agonía despertó por la mañana
donde el ojo yace podrido
está roto pero ve, prepara su camino luto
a la oscura fuente de fuego
sombra de carne borde de piedras
arde dormida con justa sanción
boca cerrada
dominio del corazón impuro
un pie metido en sangre vuela hacia el sol
su apetito todavía moja el fruto
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lacera el caracol sus colmillos de raíces

los unicornios alrededor fueron quemados
mojé tus labios en corazón tenue
el camino frío rueda sobre tu perfume
capillas de maldición son mis pies
la flor flácida me toca
no hay tortura contra la rabia
las fiebres funcionan en humanos
el impulso rompe las uñas
escarcha la puerta la amada
olas feroces mutilan arena
¿crujirán al borde de su útero?
¿se zambullirá la calma
su tibia ceniza ?
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la luz del rayo es un segundo

mañana el mundo serán tus sábanas
al lodo vida un espectro religioso
sedición de día sobrante
al decir de alondras y amores
la estrella muere cerca de mis huesos
rabia azul el mundo
autoridad de tus enredos
los besos serán tu iglesia encima de la colina
posarás en el último jardín de tu gloria
te contaré parábolas sobre un ciego
tu senos serán castillos de leche
dócil y roja en el llanto mentirás
ante el miedo oscuro
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cascos antiguos en fila

cortinas de cielo la muerte
antes de las dos antes de la mañana
arenga y agua dorada
hasta el barro guarda tus palabras
puerto increíble plácido llanto
climas de verano frontera de bosques húmedos
con flores amarillas
en tus manos inundas charcos
curvada te destruyo se ensanchan alamedas
tenderás a escapar en tus estigmas
clavarás con tus rosas un verano gimiente
cuando la luz acaricie heridas
en postes que miran tu lejana desnudez
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el momento irreal
un imperio corre por la sangre
manantial de giro al sol la carretera
tendrá el sueño feliz la visión
mente de maravilla comienzo de los amarres
al sur de tus ojos, un límite
las piedras ciudad sangre de la pena
vuela melodía luz de lluvia
bajo los soles del tiempo
el viento conquista
la nube en el suelo
invierno de camino marítimo
no se moja ni deambula
ahora un pecado muerde tu manzana
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escucha la dominación brillar bajo los golpes

la flor fuerza de su otoño
en las venas con redes pájaros
dócil tu forma de cantar
se vende en el grito poseso
destruido como los amantes
en los pequeños sorbos
de cariños te acostarás
y con la muerte calmarás el daño
la tierra la fe o el insomnio
cuando oscurezca cada vergüenza
en la montaña
el ojo plateado
fiel sirviente
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para el ojo extranjero

el esfuerzo es poco
ya que las estampas tienen sabor
a ley cruda cotidiana, poemas
impulso y gestos de momentos
un pobre movimiento brilla
orden y falta
acepta sumiso lo oscuro
pretende esconder la mezcla
personal y ominosa
intrusivo confundir de los venenos
querer hablar de fuerza o marginación
dormir y sufrir la expresión de todo
y reaparecer en lo miserable
12

honestas conjugaciones respiraste

se engendraron para ensalzar
trama, ofrecer al elegido
un componente
calcular y aprovechar la desilusión
tu día no es más que silencio
como tercer devenir luminoso
tu máquina vibrará pereza
al distraer la contemplación
la poética de convertirse en espejo
no busca el voyeur, se esconde, la operación
su escarcha será deseo en gritos y espinas
lenguaje de recubrimiento
sabio orgullo
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dieron las gracias a tu trono milagroso

a través de la oscuridad fuiste Dios
álamo solitario
abriste pañuelos de bendición y ciudades
lenguajes como la especie
de amaneceres tu abrigo
subiste escaleras
ayer aves hoy te seguían
el encanto hacia las brisas
el delirio cotidiano
despertar de las fuerzas con tus palabras
anuncio de huida y lilas
cuando el destino se mueve lento
presencia de poder entra a tu brío
14

nuevos castigos nuevas culpas

las heladas nos cuidan
navegas alrededor de mi mundo
en manos trastornadas de noche
estabas esperando el cristal
dormirte hasta el agua
tiempo de pulso hundo mi cabeza
de día el mar brilla
regresaste a recibir la lluvia
respetuosa
llegaste a celebrar
las imágenes que parpadearon
el chiste de fijar la pértiga
solo en años la misión del cambio a tu belleza
15

llega la sabiduría
indolencia la cosecha deseada
escribir no es levantarse
armonía inexistente y minutos
de autoridad absurda, lividez
derogaciones
al rechazar la evidencia
en fieles ciegos
libres de calma
neblina de cintura fina
sol al sol rocío y desvelos
noche implacable se besan los aprendices
amaneceres descalzos
gotea al cántaro su patio