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MÓDULO 1: LA COMUNICACIÓN ORAL

PERFIL DEL DOCENTE EN RELACIÓN CON LA DIDÁCTICA DE LA


EXPRESIÓN ORAL

1. Demostrar dominio en el uso del lenguaje como instrumento de comunicación.


2. Reconocer la diversidad lingüística nacional y regional.
3. Expresar el pensamiento, su forma oral y escrita según las normas lingüísticas.
4. Comunicar las ideas con la debida acentuación, articulación y entonación. 5.
Emplear la lectura como fuente de información, aprendizaje y placer. 6. Expresar
las ideas utilizando un vocabulario rico y preciso.
7. Interactuar en diferentes situaciones comunicativas, con sentido crítico y
argumentación lógica.
8. Aplicar estrategias innovadoras y recursos variados en la enseñanza de la lengua y la
literatura.
9. Crear experiencias que ayuden a comprender la importancia de la aliteratura, el uso del
lenguaje y la realidad comunicativa.
10. Emplear oportunamente los recursos didácticos.
11. Utilizar criterios pertinentes de evaluación en las diferentes áreas de la lengua.
La competencia oral y escrita en la educación superior
Luis Bernardo Peña Borrero
(Resumen)

Así como el ser humano necesita de herramientas materiales para potenciar sus capacidades
físicas, para el pleno desarrollo de sus capacidades superiores, requiere de la manifestación
de herramientas culturales de naturaleza simbólica: los distintos lenguajes y formas de
representación, los mitos, los relatos, las metáforas, los sistemas de notación, las disciplinas
del conocimiento, los modelos científicos y los modos discursivos que se utilizan para
interpretar y negociar significados.
Del repertorio de mediaciones que intervienen en el proceso educativo, el lenguaje es la
más importante, pues aparte de ser un instrumento indispensable para participar en las
actividades académicas, actúa como mediador de la actividad mental por la cual los
estudiantes aprenden, reflexionan y entran a participar en el diálogo continuado en el que se
construye el conocimiento. Pero el significado más profundo que tiene el dominio del
lenguaje en la formación universitaria es la posibilidad que ofrece a educadores y
educandos de construir una visión del mundo y una mejor comprensión de sí mismos.
La importancia que tiene el lenguaje en la formación universitaria se sintetiza en tres
funciones principales: la función comunicativa, que sirve como instrumento para enseñar,
evaluar y hacer público el conocimiento; la función social, como mediador en las
relaciones interpersonales, los acuerdos y los proyectos cooperativos; y la función
epistémica, como herramienta intelectual y de aprendizaje. El énfasis dado a la primera de
estas funciones ha hecho que se subestime la importancia que tiene el lenguaje como
herramienta psicológica y cultural y como mediación en los procesos de formación propios
de la educación superior.
El lenguaje no es un código independiente de otros sistemas de representación; sino un
componente más entre el variado repertorio de herramientas simbólicos que median los
distintos modos de actuar de los seres humanos. Por lo tanto, la lectura, la escritura y la
expresión oral deben verse enmarcadas en una perspectiva mucho más amplia, en una
perspectiva semiótica que reconoce la posibilidad que tiene el ser humano de utilizar
distintos instrumentos simbólicos, no solamente el lenguaje, para construir la realidad y
para
interactuar con otros, en situaciones y con propósitos diferentes.
La lectura, la escritura y la expresión oral son manifestaciones concretas del lenguaje que
atraviesan todas las prácticas discursivas propias de la cultura académica (la investigación,
las conferencias, los exámenes las tesis de grados, los ensayos y otras); las tres
manifestaciones designan prácticas concretas, que ocurren en contextos de aprendizaje y
con fines específicos: hacer una exposición en clase, sustentar una tesis y otras. Lo
importante no es la lectura o la escritura en sí, sino que los profesores y estudiantes las
utilicen para pensar y aprender mejor. Más que como sustantivos abstractos, deberían
funcionar como formas verbales: leer, escribir, hablar.
El dominio de la lectura y la escritura es un factor determinante en la calidad de los
procesos de formación, al punto de que muchos de los problemas que encuentran los
estudiantes en su proceso de inclusión a la cultura académica y las diferencias que se
observan en su desempeño tienen su raíz en un escaso dominio de la palabra hablada y
escrita. En este sentido, puede decirse que la universidad constituye una auténtica
comunidad textual, entendida como aquella que gira alrededor de la producción, recepción
y el uso social de textos, cuyos significados están mediados por prácticas sociales, e
intercambios comunicativos. Visto en este contexto, el ingreso del estudiante a la
universidad supone una
adaptación a nuevas formas de comprender, interpretar y organizar el conocimiento. La
lectura en la universidad no es solo más extensiva, sino intensiva en relación con la
densidad y complejidad de los textos, que exigen del estudiante un mayor rigor y
profundidad analítica. Más que una habilidad técnica, es una forma de participar en el
proceso de construcción de conocimiento. Es una forma de compartir los paradigmas,
representaciones y los modelos de interpretación propios de las ciencias, entablar una
conversación con los mejores maestros de todos los tiempos y hacerse partícipes de su
magisterio. El ejercicio de una lectura autónoma le enseña al estudiante estrategias para
autorregular su proceso de aprendizaje y lo prepara para continuar aprendiendo a lo largo de
la vida. La escritura en la universidad constituye una poderosa herramienta intelectual, cuya
función va mucho más allá de comunicar y evaluar el conocimiento aprendido. El énfasis
que se le ha dado como dispositivo de comunicación y evaluación ha relegado a segundo
plano, su función mediadora como herramienta de pensamiento. El texto escrito constituye
un “objeto mejorable” que le ayuda al estudiante a tomar una mayor conciencia del proceso
mediante el cual construye significados, a explorar nuevas ideas, detenerlas en el tiempo
para someterlas a un análisis más riguroso, hacer explícitas sus relaciones y descubrir ideas
de las que no tenía una toral conciencia antes de empezar a componer el texto escrito. Por
otra parte, las exigencias propias de la escritura científica obligan al estudiante a pensar de
una manera mucho más rigurosa y a escribir de acuerdo con la estructura discursiva y las
convenciones propias de los géneros académicos.
Sin embargo, la enseñanza del lenguaje escrito no debe reducirse a un mero formalismo
gramatical y a una práctica poco reflexiva, poco motivadora que coarte al estudiante la
posibilidad de encontrar otras maneras de escribir, sustrayendo a la escritura el potencial
para explorar y crear nuevas ideas.
El énfasis reciente dado a los programas de escritura universitaria en la enseñanza de los
géneros textuales tradicionales de la cultura académica: resumen, reseña, informe
científico, ensayo, representa un avance importante; sin embargo se debería ofrecer a los
estudiantes, aparte del aprendizaje de los géneros académicos tradicionales, la posibilidad
de explorar otras formas de escribir ciencia, con las que se sientan más identificados en este
momento de transición desencadenado por las nuevas tecnologías de la información y la
comunicación.
El computador y la Internet han transformado la lectura, la escritura y las formas de
comunicación de una manera mucho más dramática que cualquier otra tecnología. El paso
del texto impreso al texto digital ha hecho que un mayor número de lectores tengan acceso
a
un volumen de información antes nunca imaginada. Este aumento exponencial en la
circulación de conocimientos exige a los estudiantes afinar su competencia para buscar,
seleccionar y evaluar críticamente la información y para moverse con fluidez a través de
diferentes tipos de textos. El estudiante tendrá que convertirse por necesidad, en un lector
estratégico, capaz de trazar mapas y encontrar sus propias rutas para navegar sin
extraviarse por este mar de información.
El texto electrónico, se caracteriza por su fluidez y movilidad, y por propiciar una relación
mucho más interactiva entre autor y lector. Ahora cualquier lector puede convertirse en un
lector-escritor, rompiendo así la brecha histórica que ha separado al autor y al lector. La
escritura se está convirtiendo, cada vez más, en una creación colectiva. Todo esto nos
obliga a redefinir nociones tradicionales como las de autoría, voz, género, estructura y
coherencia textual, que en los textos digitales adquieren un significado diferente. Por otra
parte, las tecnologías emergentes están dando origen a textos y formas multimodales de
comunicación. El texto verbal y la imagen se Inter penetran tanto que es imposible saber
hasta dónde llega
uno y comienza el otro. La información circula cada vez más a través de distintos medios.
En este nuevo contexto de comunicación la noción de género, entendido como una
estructura estática tiene que cambiarse y aprovechar las posibilidades que ofrecen las
nuevas tecnologías para responder a situaciones discursivas y a contextos comunicativos
cambiantes. La importancia que ha venido ganando en las últimas décadas la investigación
en la universidad ha contribuido a que exista una comprensión más profunda del problema
lo cual ha motivado a las universidades a estudiarlo y pensar estrategias para su solución.
Sin olvidar la función primordial que tiene el discurso oral como instrumento formativo en
la universidad.
La exposición y la discusión oral siguen siendo un método efectivo para comunicar el
conocimiento y la circulación de las ideas en la universidad. El diálogo académico, el
debate y la argumentación están mediados siempre por la palabra oral; ella precede y
acompaña todo el proceso de preparación, interpretación y crítica de los textos escritos.
Aunque la teoría de la superioridad de la escritura sobre el habla cuenta con una larga
tradición en la historia de la cultura, la experiencia cotidiana nos enseña que, más que
formas discursivas opuestas, el texto escrito y el discurso hablado funcionan de manera
complementaria, cada uno con sus propias especificidades y funciones diferentes.
La explicación o el intercambio oral ayudan a la comprensión de un texto complejo o
pueden servir como punto de partida para la escritura de un texto que los estudiantes
redactan como resultado de un trabajo cooperativo. Sin embargo, se transita con mayor
frecuencia del habla al texto con el fin de contextualizarlo, complementarlo o enriquecerlo
y aprovechar así las relaciones intertextuales que existen entre ellos.
A su llegada a la universidad, se espera que el estudiante haya desarrollado las
competencias orales y escritas básicas que incluyen: utilizar estrategias que garantizan la
coherencia, cohesión y pertinencia del texto; aplicar las reglas sintácticas, semánticas y
pragmáticas en su producción; elaborar una primera versión y reescribir el texto, a partir de
su propia valoración y del efecto causado en sus interlocutores; producir ensayos de
carácter argumentativo, en los que desarrolla sus ideas con rigor y atendiendo a las
características propias del género.
En otras palabras, se espera que el estudiante sea capaz de elaborar hipótesis de
interpretación, atendiendo a la intención comunicativa y al sentido global del texto leído;
construir reseñas críticas y asumir una actitud crítica frente a los textos que escribe y
elabora. Sin embargo, tanto la experiencia de los docentes como algunas investigaciones
demuestran un desarrollo deficiente de estas competencias, como para responder a las
exigencias propias de los estudios universitarios. Los estudiantes universitarios tienen serias
dificultades para comprender y producir textos académicos; exponen sus ideas de forma
aislada y esquemática; no desarrollan un plan previo ni un proceso sistemático de
producción textual; desconocen los géneros y las convenciones de la escritura académica;
tienen problemas de coherencia y de cohesión en el desarrollo de las ideas o transcriben
literalmente de los textos que leen, sin una apropiación y valoración crítica.
Estos problemas no se limitan a la lectura y la escritura. También se observan serias
debilidades en la expresión oral de los estudiantes universitarios, no solo al comunicar sus
ideas oralmente con seguridad, precisión y propiedad, sino para escuchar con atención,
respetar y tener en cuenta los argumentos y las opiniones de sus interlocutores. Inclusive
así, son escasas las universidades que ofrecen estrategias explícitas para la formación de la
expresión oral de los estudiantes, una competencia que resulta crucial no solo para sus
estudios, sino también para el ejercicio profesional y para participar activamente en la
construcción de lo social.
El reconocimiento de estos problemas y la toma de conciencia sobre la función critica que
tiene el lenguaje oral y escrito en la educación superior ha llevado a un gran número de
universidades a emprender proyectos enfocados en la investigación y el desarrollo de la
competencia oral y escrita, como una condición para el desarrollo de las demás
competencias para lograr que el estudiante participe en su proceso como protagonista, no
como espectador.

Actividad individual:
✓ Analice el tema leído y prepare, con sus palabras, un comentario bien sustentado. Entregue el
trabajo en la fecha que se le indique.

LOS VICIOS DEL LENGUAJE

Llamamos vicios del lenguaje a las palabras o a las construcciones lingüísticas


equivocadas. Son aquellos usos incorrectos del lenguaje, que empleamos cuando
hablamos o escribimos, los cuales producen una deformación del lenguaje.
Algunos vicios del lenguaje son: barbarismo o extranjerismo, solecismo,
anfibología, cacofonía, pobreza de vocabulario, redundancia y pleonasmo, entre
otros.
VICIOS DE BARBARISMO SOLECISMO ANFIBOLOGÍ
LENGUAJE O A
EXTRANJERIS
MO

DEFINICIÓN (palabras Es el resultado Consiste en la


impropias o mal de una construcción
escritas) o deficiente de frases u
(palabras o frases construcción oraciones que
de otras lenguas). gramatical; es generan un
decir, la falta doble sentido o
de más de una
concordancia interpretación.
.

EJEMPLOS Este sombrero es de Siéntate en la Vendo


mil nuevecientos. mesa. medias para
En lugar de: En lugar de: damas de
Este sombrero es de Siéntate a la licra.
mil novecientos mesa. En lugar de:
Paga el ticket del Vendo medias
estacionamiento. de licra para
En lugar de: dama.
Paga el boleto del
estacionamiento

Fuente: Romo, M. (2015)


Español II
México, Editorial Book Mart

Actividad individual:
✓ Investigue otros vicios del lenguaje, léalos, analícelos y estudie el PPT, que se le ofrece de los
vicios del lenguaje, como complemento, para el ejercicio del 23 de octubre.

TÉCNICAS DE EXPRESIÓN ORAL

Actividad individual:

Escuche con atención el siguiente vídeo y haga sus propias conclusiones.

https://www.youtube.com/watch?v=_1zofPR8nic
Asignación 4 CUADRO COMPARATIVO: TÉCNICAS 19/10/2023
(individual) DE EXPRESIÓN ORAL
Investigue 10 técnicas de expresión oral; fundamente
la comparación con base a:
✓ Concepto, definición; es decir qué es y en qué
consiste la técnica.
✓ Procedimiento: Explique paso a paso cómo se
organiza y se lleva a cabo cada técnica de expresión
oral.
✓ Participantes y duración de la técnica: El número
de participantes que deben intervenir en cada
técnica, la función que desempeñan los
participantes y en qué tiempo aproximado se
aplica la técnica.
Estructura: Hoja de presentación, contenido, bibliografía
según las Normas APA
Observe con atención y tome notas sobre las NORMAS APA; pero
usted tiene la libertad de seguir investigando sobre el tema. Esto le
ayudará a presentar mejores trabajos por escrito.
✓ https://www.youtube.com/watch?v=o-EjwvexOFk
Ejercicio 1 EJERCICIO 1: 23/10/2023
(individual) TEMAS Debe llevar al
a-Familiarización con los programas de educación aula mínimo 10
primaria Perfil docente. centavos para la
b-La competencia oral y escrita en la educación copia de su
superior c-Técnicas de expresión oral prueba.
d-Vicios del lenguaje. (Recuerde investigar más sobre el
tema).

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