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LA RENTA DE LA TIERRA: ALGUNOS ANTECEDENTES TEORICOS RosaLua Topano* Este trabajo constituye una apretada sintesis de la teoria de ta renta de Ia tierra, Estd dirigido a investigadores que no tienen una formacién hdsica en igoria econdmica, y fue hecho con el objetivo de aclarar conceptos tedricos en la realizacién de una investigacién sobre el mercado le la tierra en Santiago de Chile, A pesar de que se presenta bajo supuestos muy restrictivos, consideramos que es de utilidad, antes de entrar al estudio de casos concretos en pertodos coneretos, un examen de la teoria que permita aclarar los conceptos mds generales. Si bien el obje- tivo tillimo se refiere al suelo urbano, puesto que el desarrollo tebrico mis extenso y coherente se ha dado en lo referente a la tierra agricola y, creyendo que ayuda so- bremanera a dilucidar conceptos relatives a la renta whana, es que tna extensa parte de este trabajo estd dedicado a ta renta agricola. Creemos que el estrecho paralelo que aparece en la literatura sobre el tema entre el caso agricola y el urhano es cuestionable, pero no parece posible superarlo en el presente estado de desarrollo tedrico, el que, a su vez, exté demandando mayor inces- tigacién empirica. Es por esto que esperamos que la investigacién antes mencionada podrd contribuir en alguna medida al avance de la teoria de la enta urbana. Para Adam Smith, Thomas Maltus, David Ricardo, Carlos Marx y otros clasicos, el desa- rrollo de Ja teorfa de Ja renta se orienta al es- tudio de la distribucién de Ia masa de produc- to, excedente total de la sociedad entre distin- tos grupos sociales, siendo Ja renta una de las formas que adopta. Se relaciona a los conflic- tos que surgen entre capitalistas y propicta- rios de la tierra y a Ja discusién de Xn legit mitad de la renta, considerando que ésta no es el resultado de ningiin esfucrzo por parte de los propietarios de la tierra, considerados como un grupo ocioso frente a los capitalistas WProfessr investigaéor, Instituto de Planificacién del De- rolls Urbano, CIDUAPU. que arriesgan su capital y organizan la pro- duccién !, Sus preoenpaciones se Tigaban a la indaga- cién sobre Ja teoria del valor, que se manifes- taba claramente en la pregunta: ade dénde proviene el valor de cambio de las fuerzas de Ja naturaleza no producidas? Luego, con los neoclésicos, esta discusién queda de lado y la tierra pasa a ser consi- derada como un factor de la produccién igual a los otros y que, por Jo tanto, se retribuye de] mismo modo, de acuerdo a su productivi- Tiichanan, editor de La rlguesa de las naciones, de Adam hy de, st. epoca, dice nada cou la. tepreduce:s provedia a costa de etra clase”, a8 REVISTA EURE dad marginal, perdiondo relevancia el tema de la renta dentro de la teorfa cconémica, La preocupacién sobre Ja renta de la tierra renaci6 con el interés en la renta urbana, di rigi¢ndose fundamentalmente a la explicacién de Jos patrones de uso del suelo. Las cuestiones de las que se ocupaban los clasicos comenzaron a aparecer muevamente en los iiltimos aiios, en cuanto al cuestiona- miento de la legitimidad de] propietario para actuar sobre Ja tierra sin controles y se habla de la funcién social de Ia propiedad terri- torial Es el caos a que han Ilegado las ciudades, que impide el funcionamiento del sistema den- tro de ciertos margenes de eficiencia, lo que lleva a cuestionar Ia propiedad absoluta de la tierra, sin que esto implique ni mucho me- nos (en la gran mayoria de los autores) el cuestionamiento de la propiedad privada como institucidn basica del sistema capitalista, Antes de entrar al estudio de Ja renta del suelo urbano se tratar de aclarar conceptos bisicos de Ia renta en su aplicacién al caso agricola, dado que es en ella donde se han hecho las contribuciones tedricas fundamenta- les de las que posteriormente ha derivado la aplicacién al caso urbano. 1. ANTECEDENTES DE LA TEORIA DE LA RENTA Petty, Cantillén, y en general los autores cercanos a Ja época feudal, consideran la ren- ta dol suclo como Ia forma normal de plus- valia, mientras que Ia ganancia para ellos se confunde con el salario, o a lo sumo, con una parte de la plusvalia que el capitalista arran- ca al propictario de Ia tierra Para los fisiécratas del siglo XVI el capi- tal agricola es el Gnico capital productor de Por ejemplo, 1a Dedlaracién de Caracas, Conferene Pleparatorin dele Conferencia del TabRat da Insist en la aecosidad de dale = 1a, propiedad tua clare sentido. de fanciSn social >, y el In ‘Confereneia dle lox Nachones Unidas sobre Vancouver deTs tien orm ide Hbite tos Aventomicntos Humanoy, Vancouver, 9] de mayo~11 de fonio do 1976. (Nacloncs Unidas, Nueva York, 1976), 1. 64 MTa tert... mo puede ser tyatada como un bien ordinsrio controlado por iadividuos ¥ sujate 0 Tas presiones ¢ ineficien- fits dol mereuy” “gs indispensable el comtial piblica Ge a wilizckia det suelo para peoteper sw piblica plusvalia y el trabajo agricola el tmico traba- jo creador de plusvalia y iinico productivo. David Ricardo presenté a principios del si- glo XIX un tratamiento de la renta que ain hoy constituye el fundamento de la mayor parte de Ja teoria. Segin Ricardo, la renta €s aquella parte del producto que se paga al propietario de Ja tierra por el uso de “las ener- gias originarias ¢ indestructibles del suelo”. Adam Smith afirma que “la tierra, en casi to- das las circunstancias, produce una cantidad més grande de alimentos de la que es nece- saria para mantener todo el trabajo. preciso para Tlevarla al mercado en las condiciones mas liberales posibles, El sobrante es siempre mas de Io que serfa suficiente para reponer cl capital que emplea este trabajo, ademas de beneficios, De tal suerte, siempre queda algo en concepto de renta, para el propietario” *. ste razonamiento leva a Adam Smith a concluir que la renta es parte del precio del producto, cosa que Inego discutiré. Ricardo. Se veré mas adelante que la renta diferencial no forma parte del precio del producto, pero que existen otros tipos de renta, a los que Ricardo no se refirié, que si entran en cl pre- cio, En la primera colonizacién de un pais en el cual existe abundancia de tierra rica y Fertil, requiriéndose cultivar tan s6lo una porcién re- ducida para el sostenimiento de la. poblacién existente, no habra renta, ya que nadie pagaria por ef uso de la tierra cuando todavia no es de propiedad privada una gran extensién de ésta y donde quedan grandes extensiones a disposicién de quienes deseen cultivarlas. Say dice, y con razén, que “la tierra no ex el dnico agente de la naturaleza que posee ap- titudes productivas, pero el mico, 0 casi el nico, del que un conjmto de-hombres puede apropiarselo para ellos... apropiindose, por tanto, de los beneficios’ Si toda la tierra tuviera las mismas propie- dades, su cantidad fuera ilimitada y su cali- dad niforme, su uso no ocasionarla ningdin cargo, a menos que brindara ventajas peculia- David, Ricardo, Pstwcipion de ccoromia polities y tribula- iin, cap. XXIV, “Docttina de Adan Smith aceren de Ta re th de le tier”, p, 243 (Fondo de Cultura Boonie, Méxi- 9, 1980). ‘S Jean Baptista “Beonomie Politique’, tome I, p. 124, LA RENTA DE LA TIBRRA 39 res de situacién, Esto es lo que més tarde diré Von Thiinen, qnien supone una superfici homogénea en todo sentido, quedindole s6lo diferencias en cuanto a situacién. Con el progreso de la sociedad, cuando se inicia ef cultivo de la tierra de segundo gra- do de fertilidad, principia inmediatamente la renta de la tierra de primera calidad, y la magnitud de dicha renta dependera de la di- ferencia en la calidad de estas dos porciones de tierra, Del mismo modo, la renta comienza, en Ta segunda, cuando se inicia el cultivo en las tierras de la tercera calidad, al mismo tiem- po que sumenta la renta en la primera, ya ye ésta debe ser siempre superior a la segun- la, En la tierra de la peor calidad en cul- tivo no se paga renta y es cl producto de ésta el qne determina sti valor de cambio. Es decir que, para Ricardo, Jas tierras mas ferti- es son Jas primeras que se ponen en uso, y Jas tiesras menos favorccidas son puestas en uso a medida que se incrementa Ia demanda de prodactos agricolas y su precio, Sin embargo, veremos més adelante al tratar los distintos tipos de renta en mayor detalle, que la teorfa de la renta diferehcial es com- patible con cualquier orden en el cultivo de tierra v con cualquier cambio de los precios, ascendontes, descendentes y constantes, En realidad, el orden de cultivo de tierras y la variacién en los precios agricolas depen- deri del progreso de la tecnologia agricola, de los medios de transporte, la evolucién de los mercados locales, asi como de hechos for- tuitos (oenpaciones de tierras, ete.). E] cereal no se encarece porque haya que pagar renta, sino que dehe pagarse renta por- que el cereal es caro, dice Ricardo. La renta no es ni puede ser un elemento del precio, ya que, aumque no se pagara renta, el cereal no cambiarfa de precio, ya que éste est regulado justamente por el producido en las Herras me- nos productivas que no pagan renta alguna. Ksta afirmacién se debe a que Ricardo s6lo consider la renta diferencial. Veremos mas adelante que en otros tipos de renta sta es un elemento del costo Si bien Ricardo predica wm aumento cons- tante de los precios agricolas y Ia renta, ad- mite que la acumulacién de capital fren y hasta puede revertir el crecimiento de la renta, Esta se debe a que es posible que el ca- pital pueda emplearse de manera més. pro- ductiva en las tietras que va so encuentran bajo cultivo, y aunque el rendimiento sea me- nor que la primera inversién de capital en esas tierras, puede ser mayor que en tierras de calidad inferior. Asi como Ricardo basé su anilisis de la ren- ta on las diferencias de fertilidad (a pesar de reconocer Jas ventajas provenientes de Ja cereania del mercado), Von Thiinen desarro- Iié su teoria de Ja renta basada en Jas diferen- cias de localizacién de las tierzas con respecto al mercado, las que se suponian de calidad homogénea. Para Von Thiinen la renta que cada cultive puede generar en cada ocalizacién sera igual al costo de transporte de su producto, en com- paracién con el sitio mds lefano; en esta locali- zacién no se genera renta del suelo, La renta de la tierra, derivada del cultivo de un pro- ducto, puede ser expresada como una funcién de la distancia de la siguiente forma® R= E(p-a) —Efk Variable dependiente R renta por unidad de superficie Variable independiente k = distancia Constantes o pardmetr E = rendimiento por unidad de superficie Pp = precio por unidad de producto a = costo de produccién por unidad de producto f = tasa de transporte por unidad de dis- tanci Una unidad de superficie de tierra en el lus gar de mercado dari una renta igual al ren- dimiento por hi (E) por el ingreso neto por unidad (p—a). TBVer, Eiger $. Dunn Je, The Location of Agriouttwrat Production (Gainsville University of Florida Press, 1854). 40 REVISTA EURE A medida que nos alejamos del mercado, la renta maxima por unidad de tierra dismi- nuye por cada unidad de distancia a uma ta- sa igual al producto del rendimiento por la tasa de transporte, A una cierta distancia, ky, Ja renta es absorbida totalmente, Cuando se cultiva més de un producto, Ja renta que se pagard en cada punto sera la ms alta posible, cultivandose sélo el producto que dé origen a ella. Marx toma en cuenta los dos factores (fer- tilidad y situacién) en Ja generacién de la ren- ta diferencial, pero introduce ademas otros factores, como las diferencias en e] uso de ca- pital de explotacién y la introduccién de me- joras permanentes. Continiia su investigacién de la renta en la Kinea de los clisicos, especialmente Ricardo, pero introduce sustanciales diferencias al con- siderar la existencia de otro tipo de renta que nace de la institucién de la propiedad priva- da misma y no de la diferencia en los costos de produccién, como es la renta absoluta, En cnanto a la renta urbana, Adam Smith hace sélo una breve referencia, dieiendo que es improductiva y que su propietario es un monopolista, Tampoco Ricardo hace mayor referencia a este tema, Para John Stuart Mill® es un problema de monopolio, El valor de una oferta fija y li- mitada de suelo para edificacién en una’ ciu- dad de extension definida sera tal que la demanda se iguale a la oferta. Alfred Marshall*, en el capitulo de sus “Prineipios” sobre tierra urbana, se refiere casi exclusivamente a los usos de las actividades que brindan beneficios, tales como industria y comercio. Pone énfasis en Ja importancia de Ta localizacién dentro de Ia ciudad y define un “valor de situacién” como Ja suma de los va lores monetarios de las. ventajas locacionales del sitio, Para Marshall el valor del sitio es el precio que éste alcanzaria si se lo despe- jara de edificios y se vendiera en mereado li- bre y seria igual al valor de situacién més la renta agricola. Soha Stuort Mil, Pri York, Lonamins Green), "TAlfeed. Marshall, Principles of Economiey (London, Me Millan, 1918), ciples of Bolitical Economy (Now En la tierra industrial, al igual que en la tierra agricola, los utilizadores potenciales de tierra hacen ofertas para varios sitios, basén- dose en sus ventajas locacionales y el mejor postor obtendré In tierra, Richard M, Hurd’ desarrolla una teorfa de la renta urbana que tiene gran similitud con la teoria de Von Thiinen para la agricul- tura, A medida que una ciudad crece, debe usarse tierra més distante: la diferencia entre la “deseabilidad” de ambas es el origen de la renta en la Jocalizacién mas cercana, pero la segunda no genera renta, Cuando entra en uso una tierra atin més alejada, la renta del suelo pasa a un nivel més alto en las dos primeras tierras, pero no en Ia tercera, que no pagaré venta. En la década de 1920 surge abundante li- teratura en relacién a la ciudad, Robert Haig® sefiala que la renta aparece como la carga que el poscedor de un sitio re- Jativamente accesible puede imponer como consecuencia de] ahorro en los costos de trans- porte que el uso de su sitio hace posible. El transporte constituye un medio para vencer la friecién del espacio y cuanto mejor sea el transporte, menor sera’ la friecién, La renta del sitio y los costos de transporte represen- tan el costo de friccién, Asi, el usuario del si tio paga como costo de friecién los costos de transporte y Ia renta, que es el ahorro en cos- tos de transporte. Esto supone que el ingreso y otros costos son constantes. Si el ingreso varia con la localizacién (por ejemplo, para un comercio ¢} volumen de demanda puede variar con la localizacién), la renta seria fun- cidn, ademds, de otros factores y ciertos pun. tos del espacio tendrian ventajas adicionales Las teorias de Beckman ", Wingo"! y Alon. so? son similares en muchos aspectos, y se orientan fundamentalmente a la renta re dencial Wihard M. Hurd, Prinoiptes of City Lond Values (New York, "The. Record ama Guide, 1903). O'Rabert Hisig, “Toward a Underitending of the Metron olis”, Ouarteriy Journal of Economics (May 1926). 10 Martin Beckman, "Oa the Distribution of Reni and sidential Density. ia Cities", Seminar on Mathematical Appl ition inthe Social Sciences, Vale University, Feb, 1957 S2'Londan Wingo, Transportation ard Urben Lond (Reson ces for the Future, Washington, D.C, 1961). “2 Will, Aloneo, Location’ and Lind Use (Harvard Unie versty Press, 1984). LA RENTA DE LA TIERRA a Las rentas y los costos de transporte son considerados complementarios, siendo su suma constante e igual a los costos de transporte a la localizacién residencial mas lejana, Es decir, que la renta absorbe por medio de la competencia entre los usuarios potenciales el ahorro en los costos de transporte que implica la cercania al centro y en el punto més lejano Ia renta es igual a cero. Suponen que cada fa- milia elige su localizacion de manera que maxi- mice el espacio (tamaiio del sitio) que pue- de ocupar, de acuerdo con el gasto destinado a vivienda en su presupuesto, E] gasto pro medio en residencia mas costo de transporte es una funcién bien definida del ingreso, El tiempo y la incomodidad del transporte no entran en las decisiones locacionales ni facto- res, tales como el “status” de ciertos barrios, el paisaje, ete. ‘Todo este grupo de teorias (desde Hurd en adelante), cuyo objetivo cs la explicacién de los patrones de uso del suelo urbano, estén directamente inspirados en Von Thiinen, y co- mo teorias de Ia renta del suelo tienen gran similitud, es decir, se trata de la teoria de la renta diferencial por situacién referida fun- damentalmente a los diferenciales de costos de transporte, IL La Teon{A DE LA RENTA AGRICOLA EN MARX La teoria de Ia renta supone un régimen capitalista de produccién plenamente desarro- lado; esto implica que se dan: la libre concu- rrencia de capitales, la posibilidad de que éstos se transfieran de ma rama de Ia pro: duceién a otra, la nivelacién de la tasa de ganancia y salarios iguales en todos los secto- res produictivos. Los agricultores son obreros asalariados, em- pleados por un capitalista, el arrendatario, el cual paga al propietario de la tierra una su- ma de dinero, la renta, contractualmente esta- blecida a cambio de la autorizacién para inver- tir su capital en este campo especial de la pro- duccidn, Entonces, la propiedad territorial es un mo- nopolio que Je permite al propietario imponer un tributo al arrendatario capitalista, operan- do como un obstaculo a la libre inversién de capital en esta esfera de la produccién. Pero también es un monopolio frente a Ios produc- tores directos que les impide el acceso a la tierra; la separacién de la tierra de los produc- tores directs constituye um presupuesto del régimen capitalista de produccién y, por lo tanto, el aspecto de la propiedad territorial que interesa a los capitalistas v que hace que accedan a pagar el tributo, En la medida en que se revohicionen las técnicas de produc- cidn agricola puede Hegar a desaparecer esa funcién de la propiedad territorial, pues lo que separaria de la tierra al productor ditec- to serfa la mayor eficacia de la agricultura capitalista, De ahi cn adelante, la propiedad perderia Ja razén de ser para el capitalista y pasarfa a representar slo desyentajas. En la agricultura capitalista se distinguen tres grupos diferentes de actores: los capita- listas, los obreros asalariados y los propieta- rios de la tierra, Los beneficids que exceden la ganancia media del capital son captados del conjunto de los capitalistas mediante el monopolio de Ja tierra por sus propietarios. La fasién del propietario de Ia erra con el capitalista en la figura de] propietario-capita- lista no implica la desaparicién de Ia renta, aun cuando si puede quedar oscurecida su per- cepcién al confundirse con ta ganancia en el flujo total de beneficios, La renta apareceria en su forma capitalizada como precio de la tierra en la compraventa. Se definen aqui tres clases bdsicas de ren- ta: la renta diferencial, Ja renta absoluta y la renta de monopolio. 1. Renta diferencial Se parte del supuesto de que los productos que pagan una renta se venden por sus pre- cios de produccién, es decir, que sus precios de venta son iguales a sus elementos de costo (esto es, la retribucién pagada a la fuerza de trabajo empleada en la produceién de la me cancia y las materias primas, la parte del ca. pital fijo gastado en la produccién de la mei cancia mas las materias ausiliares empleadas) mas una ganancia determinada por la cuota general de ganancia calculada en base al ca- pital total de la sociedad, Este precio de pro- duccién no se determina por el precio de costo individual de cada capitalista, sino por el 2 REVISTA recio de costo medio de la mereancia bajo las condiciones medias del capital en la rama de produceién en su eonjunto ™. Supongamos que una minorfa de producto- res de una rama produce a menores costos por- que utiliza una fuerza natural que no debe retribuir (por ejemplo, un salto de agua para producir energia eléctrica en lugar de utilizar carbén que es extraido aim cierto costo), El precio de produccién se determina por el pre- cio de costo medio de la mercancia bajo las condiciones medias en la rama de produc- cién, Aquella minoria vendexa sus mercancias a ese precio, pues es el que predomina en el mercado, pero debido a que su precio indivi- dual de produccién es menor, obtienen una ganancia extraordinaria La ganancia extraordinaria industrial proce- de generalmente de la diferencia en la magni- tud-del capital utilizado en relacién al pro- medio de la rama o del empleo mis eficaz de] mismo. La competencia tiende a borrar tales dife- rencias. Pero cn el caso que estamos viendo, la ganancia extraordinaria mace de la mayor ca- pacidad natural productiva del trabajo unida al empleo de uma fuerza natural. pero ésta no se halla a disposicién de todos Jos capitales invertidos en la rama, sino que cs una fuerza monopolizable que no puede crearse por obra del proceso de produccién del capital. Ahora bien, si esa fuerza est4 en manos de individuos, los propietarios de Ja tierra que pueden impedir la inversién de capital, esa ganancia evtraordinaria se convertiré en renta (en nuestro ejemplo, esa renta corresponderé al propietario del terreno que contiene el sal- to de agua), La ganancia extraordinaria existiria: aun- que no existiese propiedad privada del suclo: la propiedad no es Ja causa de que la gananci extraordinaria se produzca, sino de que adopte Ja forma de renta del suelo, pasando de manos del capitalista a las del propietario de la tierra, La renta diferencial no nace de] aumento absoluto de la capacidad productiva del ca- mis adelante que esto n0 e4 esticlamente ast BURE pital o del trabajo apropiado por él, sino de la mayor productividad relativa de ciertos ca- pitales, La renta diferencial no influye en la deter- minacién del precio de las mercancias, sino que lo presupone. 1.1. Renta diferencial I Las dos causas generales de la venta dife- rencial, independientes del capital, son la fer- tilidad y In sitnacién LL. Fertilidad natural Existe una intensidad normal de capital por unidad de superficie cultivada, en consonan- a con la técnica de produccién vigente. asi como Ja necesidad de los capitalistas de aju tarse a ella si quieren obtener Ja ganancia me- dia, Supongamos que, dada la magnitad de la demanda de alimentos, es necesario recurrir én en tierras menos fértiles, Enton- ces, inversiones iguales de capital rinden vo- limenes de produccién distintos y presentan precios individuales de produccién distintos, ms bajos en las tierras més fértiles, Pero el precio a que se venden las mereancias de fa rama’ debe ser el mismo, En los productos agricolas, forestales, mineros, ete., no se les puede imponer el precio medio de la masa to- tal de la mereanefa, como ocurre con las de- mas ramas de la economia, porque la escasez de tierras mejores obliga al capital a invertirse tambien en las tierras de inferior calidad, y si se impusiese cl precio medio, los capitales invertidos en tales tierras no podrian obtener la ganancia media, Como ésta constituye una condicién para la inversién de capital en la agricultura, dicho precio no serfa compatible con la produccién. E] precio de produccién que se impone es el que esti determinade por Jos eapitales in- vertidos en las tierras inenos fértiles, La ga- nancia extraordinaria no nace de las diferen: cias de fertilidad de las tienas en si mismas, sino de que las diferentes fertilidades determi. nan rendimientos distintos en capitales ignales, 11.2. Factor situacién Supongamos que las tierras menos fértiles estin a distintas distancias del mercado y que LA RENTA DE LA TIERRA 43 el precio individual de produecién en todas ellas es igual en el lugar de produccién; en los centros de consumo serdn distintos en la magnitud del costo de transporte. El precio de produccién de las tierras més alejadas se- ra el que determine el precio general de pro- duceién; asi, los capitalistas mejor situados ob- tendrin una ganancia extraordinaria, 1.1.3. Inversién en mejoras permanentes de la tierra y la renta diferencial Se refiere a mejoras, tales como drenajes, ca- nales de riego, desmontes, edificios de explo tacidn, ete. Tomemos como ejemplo la roturacién de nuevas tierras de cultivo: aunque la produc- tividad del capital invertido sea igual que en Jas tierras antiguas, su producto debe tener im precio individual de produecién superior, porque este precio debe permitir cabrir los in- tereses (y la depreciacién) del capital inverti- do, Este’ precio debera determinar el precio general de produccién, es decir, que los inte- reses estaran entrando en la determinacién del precio de produccién, De esto se desprende que las tierras peores anteriormente cultivadas. pueden rendir una renta diferencial cuando se amplia la frontera agricola, renta determi- nada por los intereses del capital invertido en habilitar las nuevas tierras, pero no porque es- tos intereses sean una renta, sino porque el ca- pital invertido en las tierras roturadas incluye un gasto que ya no existe en las ticrras anti- guas, pues ya se ha cancelado. La renta que arrojen las tierras ya dotadas de su inversion (una vez cancelada) ser& una renta diferencial, tal como si poseyeran esta ventaja por obra de la naturaleza y las otras tavieran que adquirirlas por la mano del hom- bre. Las inversiones_ en mejoras permanentes afectan la renta diferencial I. porque actiian a través de Ia modificacidn de la fertilidad na- tural de la tierra, 1.2. Renta diferencial 1 Esta forma de venta diferencial se presenta cuando, en lugar de invertir capital extensi- vamente, incorporando nuevas tierras al eulti vo a una intensidad de capital dada, se con- centra_en wma superficie limitada de tierra (se refiere al capital de explotacién) EI desarrollo del cultivo limita el desarrollo de la venta diferencial 1, Partamos de que las tierras en cultivo se han agotado y «que la de- manda de alimentos va en amnento. Con cul: tivo extensivo esto supondria el paso a tierras cada vez. peores v precios de las subsistencias en alza. Pero al ser posible aumentar Ja inver- sién de capital en tierras cn cultivo, la satis- faceién de la creciente demanda de alimentos es compatible con precios constantes v a ta baja y con alza en las rentas. A las diferencias en fertilidad y situacién aqui se agrega Ia diferencia en Ja distribu. cién del capital y del crédito entre arrenda- tarios, EI cultivo intensivo parte de una situacién en que predomina cierta inversién media nor- mal del capital en la agricultara, unas cuan- tias de renta por tipo de tierra dada y una determinada renta total del conjunto de los propietarios de la tierra. A partir de abi, al- gunos capitalistas agricolas empiezan a utili- zar técnicas mas productivas en las tierras me- jores, lo que les permite obtener ganancias extraordinarias mientras rige el contrato de arriendo, Cuando el contrato termina y el te- rrateniente recupera la posesién de sti tierra, pueden suceder dos cosas 1. Si el método de produccién mas inter sivo en capital se generaliza durante la vigen- cia del contrato y se convierte en una nueva inversién media hormal, por efecto de la com- petencia entre capitalistas, la ganancia extra- ordinaria se convertiré en renta, 2, Si la nueva inversion mas productiva continiia siendo algo excepcional, la ganancia extraordinaria seguir perteneciendo a_ los arrendatarios capitalistas. El propietario de la tierra no puede convertir en renta Ja ganancia extraordinaria excepcional. En periodos de abundancia de capital y eré- ditos, las nuevas técnicas se impondran rapi- damente, En periodos de demanda floja se nm Tentamente. ‘Tan pronto se generaliza el cultivo inten- sivo, la ganancia extraordinaria se convierte en renta diferencial, pero bajo su forma I; la “4 REVISTA EURE segunda forma de Ia renta diferencial no exis- te como forma distinta de la renta diferen- cial I, sino en tanto ganancia extraordinaria, Cuando se transforma en renta se confunde con la primera; ya no se puede hablar de ren- tas diferenciales I y II, sino sélo de renta di- ferencial. En cuando al precio de Ia tierra no es indi- ferente el cultivo intensivo 0 extensivo de la misma, El método intensivo eleva la cuantia de la renta en las diferentes tierras, por lo tanto, ¢] precio de éstas que no es sino renta capita. lizada, 2. Renta absoluta En cl antlisis de la renta diferencial se par- tid de] supuesto que las tierras peores no de- vengaban renta, ya que se suponia que el pro- ducto agricola sé vendia al precio de produc- cién de mercado, el cual se determinaba en Jas tierras peores. Pero esto supondria la inexistencia de la propiedad privada sobre e! suelo, va que no puede suponerse que el propietario lo otor- gue gratuitamente; sin embargo, en la renta diferencial va implicita la propiedad privada territorial, puesto que sin ella Ja ganancia ex- traordinaria no se convertiria en renta del suelo. Por lo tanto, para que la tierra peor pueda entrar en explotacién, es necesario que el pre- cio comercial se eleve por encima del precio de produccién hasta que esa tierra también arroje una renta, $i “P” es el precio de produc- cidn y “r” Ja renta, el precio comercial deberd elevarse hasta “P” + “r”, La renta diferencial se caracteriza porque en ella la propiedad territoria| sdlo absorbe la ganancia excedente que quedaria en manos de] arrendatario si la propiedad no se inter- pusiese, No es Ia causa que crea esta parte integrante del precio, sino s6lo la causa de la transferencia a manos del propietario de la tie- va, En cambio, cuando una clase de tierra no puede ser cultivada hasta que arroje una renta, la propiedad de la tierra es la causa creadora de} alza del precio. Pero el mero hecho de la propiedad jurfdica sobre la tierra no procura renla alguna al propietario, sino que le da la potestad de sustraerla de explotacién mientras las condiciones econémicas no le permitan va- lorizarla de tal modo que le deje un rema nente. Para que exista renta absoluta, es necesario (aunque no suficiente) que Ja relacin entre capital y mano de obra utilizada sea menor en esta rama que para el conjunto, lo que sig- nifica que la productividad del trabajo es me nor en esta rama, Esto implica que la ga- nancia que se genera en esta rama es mayor que el promedio, Jo que hace que el valor del producto sea mayor que su precio de produc- cién, ya que en’ la determinacién del precio interviene la cuota general de ganancia, mien- tras que en la determinacién del valor intere- sa la parte de fa masa de ganancia total que se genera en esta rama. Sin embargo, el mero hecho de que el va- lor de los productos agricolas arrojen un re- manente sobre su precio de produccién no basta para explicar la existencia de la renta absoluta, Hay toda una scrie de productos cuyo valor es superior a su precio de produc- cidn, sin que por ello arrojen una ganancia susceptible de convertirse en renta, Su exis- teneia y el concepto de precio de produccién y de la cuota general de ganancia que este precio implica, responde al hecho de que las mercancfas no se vendan por st valor, Los precios de produccién nacen de wna compen- sacién de los valores de las mercancias, la cual distribuye la masa total de beneficios no en la proporcién en que ha sido producida, sino en proporcién a Ja magnitud de los capitales invertidos. Se da por supuesto aqui. que ante la compe- tencia de Jos capitales no se interpone ninguna barrera que impida reducir el valor al precio de produccién y, por consiguiente, disteibuir cl excedente de ganancia que se genera en esta rama de la produccién proporcionalmen- te entre todas las ramas explotadas por el ca- pital. Si el capital tropezase con la potencia extrafia a la que no pudiera sobreponerse res- tringiendo su inversién en determinadas ra- mas o admitiéndola sélo en condiciones que excluyen en todo 0 en parte aquella compen- sacién general para formar Ja ganancia media en fas ramas en que ello ocurriese, el rema- nente de valor de las mereancias sobre su pre- cio de produceién engendraria ma gananeia excedente que podria convertirse en renta. La LA RENTA DE LA TIERRA “5 propiedad territorial es esta potencia extrafia que no permite ninguna inversién nueva de capital en una tierra no cultivada o arrendada sin exigit renta. En suma, la posibilidad de Ja renta absolu- ta depende de que el valor del producto su- pere el precio de produccién, es decir, del atraso relativo de la productividad del trabajo en [a agricultura respecto a la media social; esta posibilidad se hace efectiva porque la pro- piedad territorial restringe la competencia de capitales por medio de Ja limitacién de la ofer- ta de tierra a disposicién del capital, Tal ac- cién de los propictarios de la tierra convierte el exceso de valor del producto agricola so- bre su precio de produccién en renta absoluta, lo que impide a este valor cxcedente formar parte del fondo social de beneficios a disposi- cin de los capitalistas para ser repartido en- tre ellos de acuerdo a la cuota general de ga naneia, La ganancia generada en cada rama forma el fondo social de beneficios que se reparte entre los distintos capitales, segiin la cuota general de ganancia en proporcién al capital atilizado, La renta absoluta es una intercepeién de la ganancia que excede la media, impidiendo que pase a formar parte de] fondo social, lo que elevaria la tasa general de ganancia, pero re- dueiria la tasa de ganancia de la rama de que se trata al nivel de la general. 3. Renta de monopolio Aparace cuando es posible cobrar un precio (de las mercancias) de monopolio indepen- diente del precio determinado por el precio de produceidn y el valor del producto. La oportunidad de cobrar un precio de mo- nopolio crea la oportunidad para el terzate- niente de captar una renta de monopolio. Es la existencia de un precio de monopolio el que permite la existencia de la renta, al con- trario de lo que ocurre con la renta absoluta en que es la necesidad de que quede wn re- manente susceptible de convertirse en renta la que hace subir el precio de la mercancia hasta darle cabida a la renta, EI primer caso es un monopolio en sentido estricto, se trata de la apropiacién de tierras o productos naturales existentes en cantidades muy limitadas por un grupo reducido de pro- pietarios. El precio y la renta de monopolio surge de la desaparicién de la competencia de capitales En la renta absoluta, Jos propietarios de la tierra retienen para si, parte o todo el exce- dente de la rama en lugar de que pueda fluir a otros sectores (de manera de igualar la ta- sa de ganancia), En la renta de monopolio se obtienen excedentes de otras ramas. ‘Tanto la renta absoluta como la renta de monopolio entran en los costos de produccién, no asi la renta diferencial. Es por esta razén que cuando la renta absoluta y/o la renta de monopolio son dominantes en la determina. cién del precio de la tierra en una localiza- cién o circumstancia dada, sera el precio de Ja tierra el que determine el uso al que ser destinada, Mientras que cuando la renta di- ferencial es dominante, es el uso de la tierra el que determinaré el precio. TH, RENTA DE LA TIERRA URBANA La principal distineién entre Ja tierra urba- na y la agricola es que Ja urbana no opera como medio de produccién natural, sino co- mo el espacio obligado para el desarrollo de la vida humana y Ta realizacién de todas Tas actividades productivas y no productivas El suelo industrial que, al igual que el es- pacio para vivienda, se demanda s6lo como es- pacio, puede concentrar grandes capitales en terrenos relativamente reducidos, por lo que la presion ejercida por la acumulacién de ca- pital sobre la demanda de tierra whana es pequefia en relacién a su magnitud. Por otra parte, el precio de produceién re: gular en las industrias que reducen costs por situarse en el mercado urbano esta determina- do por Jas industrias peor ubicadas en Ja cit- dad; aquellas que ocupan lugares ventajosos obtienen una ganancia extraordinaria igual a la economfa ckectuada en los costos de trans- porte. Dicha ganancia se transforma en renta por la competencia de los capitalistas para ocu- par los lugares mas vantajosos, Si se abstraen los fendmenos especulativos presentes en las cindades de rapido crecimiento y la renta di- 46 REVISTA BURE ferencial asociada a la cancelacién del valor de las inversiones en mejoras permanentes de la tierra, Ja renta de la tierra del perimetro urbano deberian coincidir aproximadamente con Ja renta agricola en las Herras contiguas ya que si la primera fuera menor que la se. ganda, las tierras se dedicarfan a Ia agricul- tura, y si fuera mayor la competencia entre los propietarios de la tierra se encargarfa de reducirla, La especulacién urbana se basa prineipal- mente en la relacién de la oferta de tierras ur- banas y suburbanas para poder obtener parte de las rentas futuras derivadas del répido cre- cimiento de las ciudades, Ademas, la infraes- tructura vial y Ios servicios piblicos se distri- buyen en forma muy desigual en el espacio urbane y su desarrollo depende casi siempre de la accién directa de los organismos del Es- tado, Los propietarios de Ja tierra urbana que saben esto dejan sin arrendar o vender una parte importante de sus tiervas para obtener el aumento futuro de Ja renta por aquellas que entren al mercado. La renta urbana aumenta necesariamente no sélo con el crecimiento de la poblacién (au- mentando la necesidad de habitacién), sino también con el desarrollo del capital fijo que se incorpora a la tierra (edificios, ferrocarri- les, ete) En la renta diferencial de las tierras urba- nas el factor situacién es predominante, Renta urbana por situacién en vivienda A medida que las viviendas estin més ale- jadas del lugar de trabajo, los habitantes de ellas incurren en un costo monetario adicio. nal por el transporte, y aumenta el tiempo pa- ra trasladarse al Ingar de trabajo, lo que equi vale a un aumento en su jornada laboral. Los trabajadores tratarén de mejorar su situacién desplazindose hacia el centro, lo que aumen- ta la demanda de viviendas mejor ubicadas y por lo tanto, Ja renta hasta el punto en que compense Ja economfa en transporte de los mejor situados. ‘También presiona sobre la demanda de ca- sas mejor ubicadas, e] intento por reducir Ja jornada de trabajo afectada por el tiempo de traslado hasta el lugar donde se realiza. Los habitantes del centro pueden tender a trasladarse hacia las afueras para elevar su sa- Jario real a costa de um aumento en la jomada Jaboral, Renta urbana por “calidad” de la tierra En el punto anterior se suponia el desarro- Vo de las ciudades en tierras homogéneas, Si se considera un espacio heterogéneo con ac cidentes topograficos, la misma clase de edi- ficacién presentars costos diferentes, segin donde sea construida, los que dependerin de Jos obstéculos para urbanizar las tierras, do- tarlas de servicios péblicos y la misma cous- truccién de las viviendas. Estas caracteristi- cas se resumen en el concepto de “construibi lidad”, que serfa anélogo al de fertilidad pa- ra la tierra agricola, El intento de aumentar el salario real trasla- dandose a viviendas mas baratas sélo consi- gue convertir en renta la diferencia de costo, Otros factores que introducen heterogenei- dad entre los terrenos urbanos pueden scr en. tlobados en el concepto. de “habitabilidad” Las extemalidades, debidas a Ia contamina- cién del aire, el agua, microclimas, etc., pue- den convertitse en renta de la tierra Las disposiciones de zonificacién que per- miten mayor densidad y, por Io tanto, mayor rendimiento, asi como las disposiciones que permiten usos més rentables, también pueden convertirse en renta del suelo, en algunos ca- sos en renta diferencial, en otros, en renta de monopolio, 0 ambas a Ja vez, La inversién sobre Ja tierra urbana cumple una funcién similar a la inversién en mejoras permanentes de Ja tierra en Ja agricultura, e decir, confiriendo calidades nuevas a la tie- rra, Una vez recuperada la inversién de capi- tal con sus intereses permite una renta dile- rencial que esté determinada por las tierras en las que Ia inversién no ha sido atin cancelada, También influyen las variaciones en el p cio de reposicién de Ia urhanizacién, los ser- vicios y la vivienda, Tal como se vio cn Ja ren- ta agricola, las tierras donde la inversién ha sido cancelada funciona como si las mejoras introducidas fueran propiedades naturales de esas tierras (Ejemplo: provision de ciertos servicios) LA RENTA DE Renta diferencial I La inversién intensiva de capital en edif cigs permite multiplicar e espacio habitable por el niimero de pisos, n, aumentando el firea susceptible de devengar renta en n-1 veces, Mientras ¢] capitalista sea un innova- dor, podrd realizarse uma ganancia extraor- dinaria, ya que é) pagara renta por una su- perficie @, pero cobrara por una superficie de na. Pero cuando el promedio de los capita- listas construyen edificios de n pisos, la nor- ma ser que el ducio de la tierra se apropie do una renta correspondiente a la superficie nua, transformandose en renta la ganancia ex- traordinaria de (n-1), debido al cambio en la intensidad normal dei capital, Vemos asi que en un primer momento puede no ser Ja alta renta del suelo la qne induce a la construe- cién en altura, sino a la inversa, Renta de monopelio Los estratos de altos ingresos eligen como lugar de residencia aquellas Areas de la ciu- dad de mayor belleza del paisaje natural y/o urbano, las’ que por factores histéricos fueron dotadas de mejores servicios publicos y de recreacién o simplemente aquellas que les per- miten mantenerse separados de los grupos de menores ingresos. Los propietarios de esas tierras _perciben una renta de monopolio creada por el solo he- cho de ser las elegidas de aquellos estratos. La alta renta urbana en estos barrios asegi ra que s6lo ciertas personas vivan en ellos. La renta es cmpleada como barrera de autosegre- gacién social, Pero, a su vez, el proceso se realimenta, ya que la concentracién en esos barrios de Ta mayor capacidad de consumo atrae la loca- lizacién de servicios y comercio de lujo, Estas tierras se distinguen de las que no cuentan con estos servicios, creandose wna renta dife- rencial por calidad. También en los barrios obreros puede pre- sentarse renta de monopolio por la presién de demanda de viviendas cercanas a los lugares de trabajo como medio de reducir el tiempo de transporte, que equivale a uma reduccién de la jomada laboral; esta sucede en el caso LA TIERRA ar que quede a disposicién de los trabajadores mas alejados una parte de su salario por el pago de una menor renta, Intervencién del Estado 1 renta La intervencién del Estado tiene directas implicancias en la generacién y apropiacién de la renta, Los planes urbanos, por ejemplo, cambian las expeetativas sobre el futuro v, por lo tanto, afectan la renta, A la vez, el conoci- miento anticipado de las politicas del gobier- no y de las obras qne realizara el Estado dan la posibilidad de realizar ganancias extraor- dinarias a los que poseen Ja informacién, ya que pueden anticiparse a adquirir tierras cu. yo precio todavia es el resultado de una baja renta, La inversién en capital social basico incide en Ja renta diferencial, lo mismo que la pres- tacién de servicios piblicos, Jas politicas de precios, tarifas v wubsidios al transporte pi- blico y privado. La politica de renovacién urbana, el régi- men de la tierra publica, Ia regulacién y_con- trol de las empresas inmobiliarias, la politica de vivienda, la politica impositiva dirigida a Ia tierra, afectan en forma diferencial el suelo urbano o la capacidad especulativa de los propietarios, confiriendo privilegios monopé- licos a algunos de ellos. La politica eondmica en general, afecta la renta del suelo ya que puede impulsar el pa saje de inversiones productivas a inversiones especulativas en tierras (y viceversa) 0 ha- ciendo cambiar el objeto de especulacién ha- cia (0 desde) la tierra. (Por ejemplo, en pe- riodos de inflacién, la gente suele desprender- se de ciertos valores para adquirir ticrras, é- tas aumentan su precio mds que el indice ge- neral, lo que refuerza el proceso). ‘Ningtin conjunto de conjeturas se conside raré como una teorfa cientifica factual sino constituye un sistema hipotético deductivo propiamente dicho, si no suministra explica- cidn y previsién y si no es contrastable” *. FEMA Bunge: Le Investigacisn Cientiica (Artal, Bae celons, 1969). Big, 417 4s REVISTA EURE No existe teoria de la renta urbana en este sentido, Lo que aqui se ha expuesto podria considerarse como una recopilacién de ideas mais o menos inconexas que en su mayor par- te suxgen por analogia con la teoria de la ren- ta agricola, aunque tratando de apuntar a las diferencias y a introducir elementos que no aparecen en ésta, En esta tarea se pierde co- herencia y se mezclan distintos niveles de abstraccién. Este trabajo no tenfa mayor pretensién que aclarar ideas a] interior de un equipo de in- vestigacién, y el motivo de su publicacién obedecié simplemente a tratar de extender a un mayor néimero de personas la preocupacién por los vacfos tedricos que se presentan en el estudio de la renta urbana. Esperamos que las investigaciones que se estan levando a ca- bo en distintas ciudades latinoamericanas con- tribuyan a lenarlos. BIBLIOGRAFIA, Alquier, Francois, “Contribucién al estudio de la renta’ de! suelo urbano”, Ideologéa, Diserio y Socie- dad. Universidad Nacional de Colombia. Centro de Estudios. Doe, N° 6, julio de 1972. Arango, Mariano, “La renta del suelo en Marx y la venta urbana del suelo”, Cuademos Colombianoe 6, Afio II, segundo trimestre 1975, Alonso, William, Location and Land Use. Toward a General Theory of Land Rent (Harvard University Press, Cambridge, 1964). Dunn, Edgar, The location of Agricultural Produc tion University of Florida Press, Gainsville, 1954. Harvey, David, Social Justice and the City, Johns Hopkins University Press, Baltimore, 1973. Lamarche, Frangois, “Property Development and the Economic Foundation of the Urban Question”, So- ciologie et Societés, N° 4, 1072. Lipsey, Richard, Introduccién a la economfa posi- tiv. Vincens, Barcelona, 1974. Marx, Karl, Bl Capital, Fondo de Cultura Econémi- ca, México, 1948, Neutze, Max, “Urban Land Policy in Five Wester, Countries”, Journal of Social Policy, Vol. 4, Patt 3, Tuly, 1975. Ricardo, David, Principios de Economia Politica y Tributacion, Fondo de Cultura Econinica, Méxi- 0, 1958. Sinclais, Robext, “Von Thiinen and the Urban Sprawl", Annals of the Association of American Geography, Vol. 57, N? 1, marzo, 1967. Yujnovsky, Oscar, “La renta del suelo y la configu. racién del espacio y medio ambiente urbanos”. Re- vista Interamericana de Planificactin, Vol, XI, N¥ 41, marzo, 1977,

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