nada! Realmente, no debe emplearse ningtin medicamento sin estar previamente © seguros de su actividad. Y volviende a los hipotensores, como deciamos, Ja ma- yorla de ellos no sirven. Yo he visto enfermos en los que su médieo deci ‘Toma Ju hipotensor y sigue, sin embargo, con la misma presién arterial que antes de tomarlo”, Pero es quo hay también hipotensores que si son Gtiles, bajan Ja pre- gién de momento, pero inmediatamehte la suben, como por ejemplo los nitrites, los derivados ésteres de colina cuando se emplean en gran cantidad y persisten- temente, Ahora bien, hay que tener presente lo siguiente: 1a sobretensién de lujo puede bajarse y ello se obtiene simplemente con los sedantes, pero produ cirle a un sujeto bajas agudas de presién arterial no tiene ningun objeto, Cuan- do el enfermo tenga erisis vasculares, empleatemos esos medicamentos anties- pasmSdicos vasculares, pero provoearles una hipotensién aguda, como se pro- - yora con la sangria, con la purga, etc., jams debe hacerse. Bajar bruseamente In tensién al hipertenso es el mejor modo de favorecer la aparicién de la hemo- rragia cerebral, Por ultimo, podemos decir que en general Ig mayor contraindicacién para el empleo de remedios que existe es In siguiente: en toda enfermedad que tiene un medicamento especifice que la cura, estin dontraindicados todos jos demés remedios, Como un ejemplo les referiré a ustedes lo que ha ocurrido con el tra- tamiento de las anemias por el higado: el higado es’ un medicamento que no sirve para tratar mds que wn tipo de anemia, que es 1a anemia perniciosa, en 1a ‘que Ia toma del higado y la aplicacién de extractos producen las curaciones més teatrales que se pueden ver en ln practice; pero en vista de esto, los médicosy Ein pararse a pensar por qué el_higado hace ese efecto en la anemia perniciosa, han comenzado € utilizarle para el tratamiento de las anemias y a todo sujeto ‘anémico, sea cualquiera la naturaleza de su anemia, se Je da higado; ahora, bien, ~ no es lo malo que sé le dé higado, porque esto no e perjudicial, sino que se Je deje de dar Jo que ¢s ‘util para aquel caso,. Figdrense que hoy sabemos que el arsénico, que ha sido la base del tratamiento de las anemias; no sirve para nada, que puede provocar erisia reticulocitarias, pero que no provoca crisis de glébu- los, pues si a Un enfermo que tenga una anemia posthemorrigica se le trata con arsénico o higado no se va a mejorar jamais, 'y asi vera ustedes enfermos que alos dos.meses de haber tenido una gran hemorrdgia siguen anémicos, a pesar, segin dice su médieo, de que se les esti dando “su higado"; en una enferme- dad como ésta, que tiene un remedio tan claro, el hierro, no hay por qué dar otra cosa que éste, my x Estudiar las contraindicaciones de unos cuantos remedios seria, como tiste- des ven, una cosa muy larga, y no hemos hecho nada més que esbozar elgim - capitulo, En ellos pueden ustedes ver lo siguiente: que el médico ha de tener siempre un concepto citntifico de su profesién, que no se puede tratar jamés a Jos enfermos por un empirismo més'o menos trigico. Muchas veces, cuando yo eatoy pasando visita 0 estoy en la policliniea, veo entre tantos “mirones” como se acercan, que no Vana hacer nada én absolute, que cuando uno dice-una cosa; apuntan, y hay quien apunta cuando-uno dice una receta;~éstos'son eolecciona- dores de recétas, que Inego las sueltan, como aquel médico de la obra de Tirso dé Molina que sacaba la receta y decia: “Dios te la depare buena”. Estos indl- viduos son la expresién del tipo de:-médicos que yo no hubiera querido nunca que fueran ustedes, Ya sé que algunos de ustedes, dentro de unos dias, s¢ van a convertir de repente de ser Fulano a ser don Fulano, se déjaran barba y leva- rin un bastén, quizd heredado de sus tieyores; pero no deben perder de vista que sélo con una, actitud sincera y cientifica sirven ustedes noblemente al obje- tivo de nuestra profesién, No quiero decir’con esto que para percutir haya queENTENEE DIAZ wis hacerlo por logaritmos, pues ya saben ustedes que yo no creo esto. Bn las Jee: “clones que durante estos tres cursos nos han‘ venido asociando, yo, quiza sea. éste el momento de decirselo a ustedes, no he querido dar lecciones de las lla- madas pricticas; es'decir, he tenido a ustedes el suficiente respeto y sentido la suficiente necesflad de eumplir mi obligaclén, para no administraries papilla cientifiea; ademas, tengo.la convicclén de’ que no hay cosa mis dificil que en- sefiar, como no sea ot aprender, pero con Ja diferencia de que el que ensefia se da cuenta de cudn dificil es ensefiar, de cuanto trabajo euesta meter dentro del es- piritu de los demas aquellas cosas que uno eree qué son Jas mejores, en tanto que el sujeto-que apronde no se da cuenta de lo dificil que es aprender; generalmen- te se cree que sabe, y cree que sabe porque las cosas que a un hombre sé le dicen, generalmente’ 61 coge las que ya sabe, y todo lo mis que hace es ampliar un poco en aquella direccién Jas que le eran ya sabidas previamente. Con él tiempo volvertin ustedes @ leer un Ubre pequefio que rehusan ahora porque Je creen-elemental, y entonces, cuando ya hayan leido otros mejores, verin, al yolver a aquél, que tiene muchas eosas estimables que no les eran-conocidas. No se puede tener In pretensiém de-que si se les ensefian cosas muy elementales- las van 9 aprender todas; cuando se explica para el estudiante malo, éste, jus: tamente por serlo malo, no aprende nada, pues no tiene interés en ello, y ea. - cambio el bueno pierde interés’ y por otra parte se deprime y deja de tener. el . concepto alto y:elevado de la disciplina’ cientifica. En las lecciones que led he explicndo ‘no“he' preterdide ensefiarles 1a clinica médica; porque elle lo concep- ‘to imposible en-absoluto; algunos de mis eolaboradores que llevan en mis nas nos nueve,aiios saben que empiezan ahora a aprender, y yo, que evo muchos afios dedicade.a 1a clinica médica, sin. embargo; tengo. cada dia la senisacién mag- nifica, que me lena dé satisfacclén, de que cada ver que veo un enformo estoy viendo cosas nuevas. jCémo van ustedes a tener la mentecater de creer que en : tres afios de un contacto intermitente puedan saber la clinica mi ini‘propésito ante ustedes ha sido, no ensefiarles la clinica médica, sino ensefiar. “ps {Jes la manera de la cliniea médica, el modo:de la clinica médiea, hacer que uste- fes sepan que Ja clinica. médica es algo hermoso, bello, porque en ella hacemos un ejercicia constante de discurrir con las bases que tenemos, porque siempre ::Podemos tener una idea nueva ante un enfermo, porque especificamos delante de |, © cada persona enferma, una vez que sabemoa que no éstamos simplemente ante “~"<'un estémago ulcerada nl un higado enfermo, sino ante una persona. en que accl- dentalmente se ha ulcerado una mucosa; yo nunca he querido hacer lo que UNA arund ha amado médices de maquina régistradora;-ha sido mi intento ef ha. cerles a ustedes saber que se Ucga al dingnéstico a través de una elaboracién mental de diseurso; por eso quini algunas veces nox hemos detenido en enfer- medades en aparienciz: poco importantes estudiando su patogenia, Recuerdo que suando les explicaba sobre el infantilismo intestinal o gobre el esprue no tropical + o la alcaptonuria, dediqué varias leceiones a estos asuntos que parece que no son importantes, pues pocas veces-van ustedes. ver um caso; pero es que del estudio de la patogenia de una de estas enfermedades se deduce una cantidad enorme de ensellanzas, -y ereo més ‘itil esa que acumular una serie de explica- ~ ciones mis someras para explicarles todo et “programa”. Todo el programa no Jo podria explicar bien, uo en tres cursos, sino ew toda mi vida; es tan élastica el programa, que lo tiene'uno que ir haciendo en.¢l curso de su vida, Si ustedes * adquieren ese estilo de médicos, y en algo se debe eso a mis explieaciones, én sera mi mayor satisfaccién, y sobre todo el que ustedes, en su actuacida profe- sional, que van a empezar pronto, no olviden que son universitarios y que son hombres de ciencia, For ser universitaries no olviden nunca a la Universidad,PATOLOGIA MEDICA tn Facultad donde han estudiag;, quiero decir no nos ob eso eg Una cosa THUY incidental; quiz euando Pash algin tiem! vidado, ¥ posiblemente, si esto ocurre, seri gue tengan razon; Bi too no importa; lo que no, debe Dividar es el alma moter de le Fa Gicina, ;Cudmtos médicos 20 vuelven por 18 Facultad de Medicina yl jnoluso con horror! Bsto 63 ‘iste; ustedes a¢ han educado 8 ‘alla; si han recl- pido una educacion deficients, © ‘odo caso es culpa de todos, PUSS estas defi- Preneias se subsanardn el dia de po"Focultad de Medicina forme part? del com Senaus popular; miestras denlo de todo el pais espaol no esté metida la im- + portancia de le ‘Universidad, ésta DO podrd florecer aunea. Estamos ereyendo gue la ‘Universidad la tiene que jhacer un Pstado, como el egpaiol, que tHexe we etos problemas por delantes I ‘Universidad la tienen que Bact? ustedes, Pes “ada uno en su medio debe ive hacer su propaganda, No olviden, por filtime, como les decia, que Son hombres de ciencia. ‘Verin como algunos de ustedes © sus campaseros, em cuanto Pt ‘trea afos en un pueblo y heyan purgado In- Spbigamente a dos o tres persona’ + 2 posar de eso sobreviven, YS 10 pay quien Jes hable; créen que son ¢l AFC fie Ta sabiduria o que 1a cleneia °° divide én dos eapituloa: uno, eb,de Iss pocas jdeas y erroneas que ellos Pores y otro, ede Jos restantes conceimlentos (16 28 ‘poueen y son camelos’ ‘Cuando vean_uste- ges a un compaiiera que les dice ‘sencilla y Hanamente que ‘aquello no le interesa fo que no Jo entiende, pueden. Ce redes formarse buena idea, Ge €i, aunque cousi- nocimientos Som. jimitados, Pero desconfien siempre ‘del hombre Wentos les declara.que “todo quello: es pura interesa.son 128 cosas prae- @ protaata, en reniidad, Jo que Hay 6s ua Gisguste-profundo ‘deseo de no congesarse 12 personal ineapa- eidad. No tienen ustedes por, qué dejarse-arrastrar jamis. esas tristes Pe quefieces que pueden, crentualmente, encontrars@, €0 5 ‘ambiente. Ninguno £0- Sos tan Fequafio que tengamos Ya obligacion de semuir gervilmente una deter jninada rata, Mi mayor flcgria seria: saber de ustedes 1c saben sacwdirse de TAI infuencia, que no olvidan Jos Migs que hemos pasade juntos discutiendo ¥ discurriendo enfermos, averiguando-hechos ¥ fraguando horizontes, Y no crea ‘ustedes que por él hecho dé ‘sheontrarse en wn medio ‘pequafia y_com poces ™o~ dios tienen disculpa para podersé cruzar de brazos. Sigan eatudiando intensa- mnente y sepan que 6a ‘el sitio menos afin en apariencia 5°. jpuede pensar DOT €D- : cima del nivel de-tierra, ¥ se puede Wega ‘a conclusions. enteramente centifi- cas, Para esto n0 es indispensable poseer aparatos complieados, sino erearse 30 que podemos Hamar Iv aetitad tientifica, que consiste en tener curiosided y avi- gez, MacxeNsie era un poure madico de un pueblo, y MACKENZE ‘na escrite todo al capitulo de las arritmias sencillamente con wn pequeio poligrafo que cons truyd. Banting ere médieo- de guardin de un sanatorio que no tenia ninguna im- portancia, y explicando allt a vhos qlumnos que no sabiem nada, concibié Ia ma- nera de obtener Tainslina. ‘Otros tantos miles de ejemplos podriames poner ae Jo que puede el espiritu atento, ‘a-cabeza, previemente formads, desde. Anquiti- Jes, que deseubrid su famose ‘prineipio por el hecho ‘trivial de bafarse, que to~- ‘dos repetimos sin. descubrir nada, -y NEWTON, due ‘viendo caer una Manzana des: eubrié las leyes de le gravitacién universal; °s “gneillamente que et mismo fo némeno, cuando se mira sin interés ninguno, no significa ads. ¥ cuando se mire bon atencién cientifica, supon® algo, Naturalmente que ustedes iran a medios que son hostiles porgue no #07 seeveraltarios, pero Ia culpa de e808 tienen los que han ido antes y no RAT sabido seguir siendo ‘mnivarsitarios; ism ustedes & . medios donde les ‘diran: “No estudie usted tanto, que se VA a ynatar; gpor quéyy no sale a despejarse?” jComo si los hombres debiéramos despejarnos nunca! Hemos nacido para no despejarnog; el hombre que se despeja esté perdido, ¥° ustedes han de evitar caer en Ja tentacién de no estudiar o de ejercer su Pro- fesién de un modo rutinario. : No quiere esto decir que vayan x descubrir grandes cosas, pero ai que tengan un espiritn atento, El primer enemigo de ustedes ser a veces ese tipo de médi- co qué, con mata intencién en el fondo, se lds acerea con aire protector o falsa- mente amistoso diciéndoles: “Hola, eompaiero”, ante cuyo saludo io mas ade- euado es muchas veces abrocharse Ia americana como actitud defensiva, pues no hay nada més cruel que la ignorancia, Cuando ocurrié en Espafia lo de Asuera, todo fué debido a lo siguiente: los médicos-que no estudian, que son desgraciadamente ain bastantes, afortunada- mente no Ja mayoria, tienen un odio profundo, odio de clase (aqui si que hay odio de clase), contra les médicos que st estudian, y, naturalmente, Ja felicidad de aquella gente se manifests quando una maiana parecié que las enfermedades se podian curar sin diagnosticarlas. ;Fijense si esto es formidable para el su- jeto.que se va a Ja tumba sin haber diagnosticado nunca un enfermo! Ver que no hacia falta diagnosticar, que eso del pereutir y del metabolismo son tonte- xias, produjo una sensacién_enorme, y-eaes-médicos que no estudian.se dijeron: “Xk partir de hoy todos somos iguales y ahora vamos a ver quién toca la nariz mejor”. Con todo, lo principal es qie ustedes ni se dejen contagiar por esa acti- ~~ ‘tud, ni caigan en la tentacién de responder en Ja misma forma. Cuando oigan _, Ustedes bajaa ¥ miserables eriticas, no propendan a hacerlas anita procures i ~-elévar surespirity en todo momento, tener siempre el coraatn arfba y darse : cnenta-de que esas cosas no son sino expresién de la reaccién impotente de la . gente, Hallay4n muy lamentable cuaude veam en el principlo de la profesién al- gunos médicos charlatanes, pretenciosos y desaprensivos que tienen mas que .: de médicos, de sangradores 0 de-euranderos, y cuando vean en algunos de ellos miéviles paco nobles y actitudes tacticas para guitarse los enfermos unos a otros. Recuerdo una consulta que tuve.con un médico de cabecera y otro que habia ido antes; el médico de cabecera era un muchacho joven, disereto, estudioso, de buen sentido, que habia diagnosticado muy bien al enfermo de. pulmonia y __., le habia puesto los remedios que-le parecieron;el enfermo seguia agravandése, " ‘\muaturalmente; ‘a medida que pasaban los dias, pero en esto Hegé un viejo madi- co famoso, buen “saludador”, que faé’en consulta a la.casa aquella y se Mevd ‘Jas manos 2 Ia cabeza y dijo: “Le esté matando, esté curdndole la pulmonia de abajo arriba y se cura de arriba abajo, pues si s¢ cura de abajo arriba va progre- sando y se corre hacia la garganta" (la pulmonia era de Iébulo inferior dere- eho); pues bien, aquella gente comprendia aquello muy claro y pusieran verde al otto pobre médico; yo fui alli y, claro, les dije que para mi aquello era com~ pletamente nuevo y puse las cosas en su sitio, Ahora bien, aquel médico, ade- mds de ser un desaprensivo, era un pobre tonto; pera cuando se trate de un médico mds cuca no diré jqué barbaridad!, sino que miraré al enfermo con alre de lastima y chascarA un poco la lengua, y entonces es peor todavia, Mas Mo porque reciban esas pruebas de “carifio" alguna vez respondan con él mismo trato; les he dicho antes que no olviden que son hombres de ciencia y universi- tarios, y frente a esas miserias ustedes debew estudiar; cuando un compafiero les robe Tin CHEEFRG, SSENCION; CUAnS tn GHFérmo les achaque errores que ws- * tedes han cometido, reconézcaulos en su interior y aprendan, muerdan ustedes elerror, porque dentro de eada error, cuando oa bien masticado, hay una ense- fianza; cuando el.error no.sea tal error, sino una coda qué a ustedes les achacan, no les importe, y'vayan a los libros y sigan estudiando; frente a todas las cosasPATOLOGIA MEDICA : 103 que puedan distraerles su verdadero camino, estudien ustedes y tengan siempre elespiritu atento; no olviden a Ja Facultad de Medicina, y sobre todo, no crean nunca que saben; yo, naturalmente, sé muy poco, pero ‘puedo Weciries a ustedes qué me he pasado y pienso pasarme toda mi vida procurando mejorarme, y cada dia me encuentro casi un poco mejor, pero viendo qué me falta mas camino que recorrer; a medida que se acerca uno a la loma, se encuentra que hay otras montafias mas altas atin, Recuerde que Goethe empezd a aprender sinserito en avanzada edad, y lo hizo con la misma ilusién con que comenzé sus primeros estudios, El estudio, el deseo de progresar y de mejorarse, la satisfaccién de comprender cosas que antes nos parecian incomprensibles, de interesarnogs por cosas que antes habian pasado por nuestra Jado ‘sin sugerirnos nada, es la ex- presién mas clara de este divino soplo que Dios ha puesto en el espiritu del hom- bre, Sean ustedes médicos practieos, si; pero médicos practices de cierto tone cientifice, de una eterna curiosidad y de un eterno entusiasme, Sean ustedes nobles y Ieales, vayan. al fondo de Jos problemas y no se preocupen é2 la forma aitorna eon qué a veces se revisten los éxito Taleo’ Busquin ustedes tH Tas 8as Ia aulenticidad, sin Io cial jamiéstograrda atimentar sus conecimientos, recibir ni dar ninguna ensefianza, Y¥ si no olvidan ustedes estos Ultimos consejos ‘que hoy les expreso sintéticamente, de los que he proctrado durante estos tres afios darles ejemplo continuo, ser4 infinita mi satisfaceldn y me sentiré muy “honrado de considerarles mis diseipulos. o-oo te . ‘