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, hn 6A ak iipsnde Abiior Dos suesivs cubis {Visi “of Tomorrows En ells se pueden apre: slat os exo perteneclentes 4 sfiteada ex: ‘uolawafica britanica, “Vision” se pubico desde el mensuat inglés 1969 ‘hasta 1970, totaizando extctamente oes Después del paréntesis de la Gran Gui rra, fue un libro el que desperté el interés de cuantos soflaban la fuga de la Tierra; Die Rakete zu den Planete: riumen (‘Los cohetes en el espacio interplanetario”), publicado en 1923, a expensis del propio Hermann ‘Oberth, un técnico rumano naturaliza- do aleman que hoy, con casi noventa afios, vive apartado en un pueblo cer- cano a Munich. Sus hipdtesis inspira- ron en Alemania dos novelas de Otto Willi Gail, publicadas en EE,UU, en Science Wonder Quaterly: The Shot into Infinity (1929), donde hablaba de la rivalidad entre ‘un alemén y un soviético por disputar el honor de con- ducir la primera nave a la Luna; gana el alemén, protagonista de la siguiente, ‘The Stone from the Moon (1930). Pero, hecho muy importante, fue sobre las paginas de Oberth donde se formé la escuela alemana de técnicos espaciales (Walter Hohmann, Hermann Noordung, Rudolf Nebel, Eugen San- ger, Willy Ley, Werner von Braun) y estudiaron Tos pioneros _franceses como Robert Esnault-Pelterie y Max Valier. Mientras que en los EE.UU., en marzo de 1926, Robert H. Goddard lanzaba a $7 metros de altura el pri- mer y mindsculo cohete a combustible liquido (bencina y oxigeno), un grupo de jovenes comenzaba a efectuar sus experimentos con pequenos cohetes primitivos en un campo de los alrede- dores de Berlin, pomposamente bauti- zado “Raketenflugplatz” (acropuerto de los cohetes), que lam6 pronto la atencién del Tercer Reich. Fueron los "| artifices directos e indirectos de los V-2, los primeros cohetes modernos lanzados desde Peenemiinde, y fue uno de ellos, Werner von Braun, cepcional técnico y organizador, quien cuarenta aflos mis tarde haria’ partir el primer satélite artificial norteamei cano, y mas tarde construiria el “Sa- turno”, que levé a los norteamerica- nos aa Luna, VISIONE ed Las primeras excursiones con combustibles Iiquidos En los aflos treinta y cuarenta, mien- tras tanto, en Inglaterra y en los EE.UU. la’ ciencia-ficcién aparece en estrecha relacion con la historia de la aerondutica, ya que muchos textos de ivulgacion’ sobre la propulsion y la ploracion espacial fueron escritos por gente que se ocupa profesional- mente de cienciaficcion. David Lasser (director y asesor de Wonder Stories) escribe en 1931 The Conquest of Spa- €e y junto con un grupo de amigos es critores funda la American Interpla- netary Society, después amada American Rocket Society; Edward Pendray, un periodista cientifico que escribe ciencia-ficci6n con el pseudé- imo de Gawain Edwards, publica en 1935 The Coming Age of Rocket Po- wer; Philip E. Cleator, ingeniero de profesion, eseribe en 1936 Rockets through Space y funda la British In- terplanetary Society, a la cual se ad- heririin jovenes apasionados como Eric Frank Russell, William F. Temple, y naturalmente Arthur C, Clarke, quien iciard en la inmediata posguerra una brillante carrera de escritor con su pri- mera obra de divulgacion (Prelude t Space, 1951, dentro de la narrative Interplanetary Flight, 1950, y The Ex- ploration of Space, 1951, dentro del ensayo), hasta el triunfo cinematogrd- fico de 2001: una odisea del espacio. En los mismos afos, entre la guerra y Ia posguerra, se dedicard totalmente escribir también Willy Ley, que habfa dejado el grupo de los primeros mi- silistas alemanes, pero que luego migrd a los EE.UU. y Meg6 a ser cronista fiel de los comienzos de la era espa- cial, estrechando lazos con el mundo de la ciencia-ficcién norteamericana huésped frecuente de la convencién, escribe algunos relatos, pero sobre todo, tiene durante mucho tiempo una columna de divulgacion en la 65 éMas veloces que la luz? EI mundo cientitico ha celebrado hace tres aitos el centenario dal nacimionto de Albert Einstein, Un cientifico a quien debemos re- eonocimiento por lo menos dos generacione de excrtores do cienciafecion por sus apor ‘es, s08 extrapolaciones, la hipotesis de tra bajo que sus teorias han sugerio. Grandisima mente matematica y fi6sofo de Ja naturaleza, espiitu inquieto y_ de serenidad enorme, indferente a todo prine pio de autoridad y sin embargo a la busque- Ga de una “religion césmica” que trascien- a a toda religion consttuida, Einsten, in- ‘eansablemente, ha hecho de st teoria de la felatividad und verdadera mina de ideas que provee # manos lenas alos autores de cien- ciaficcion. PPensamos particularmente en 1a relatividad restrngida (Tormulada en 1905), con la inva Tiabilidad de la velocidad de la luz, una velo- tidad absoluta, que no se puede Superar ni iguala, idéntica para todos los observadores. Una velocidad limite para el universo conos 0, {Cust ha influido este concepto en las historias de cienca-iccidn que hablan de via- js en el espacio profundo,estimulando su- festivasescapatoras para superaro, como la ‘ambullida en el hiperespacio? Pero, zes imposible concebir, al menos ted caménte, matemticamente, velocidades si- periores a fa de la Tuz, a los 299.796 kilome- {tos por segundo? Hace diez alos un fisieo norteameticano de la Columbia University, Gerald Feinberg, hizo una hipdtesis sobre la enistencia de una nueva clase de particulas Subatomicas, los “taquiones”, dotados_ de saratoristies totalmente particulars, Pre- fguntados Scholes y Rabkin en su reciente estudio sobre la “cienciacficcion’” y sus re-| ates argumentos dijeron: “Los taquiones tienen la velocidad de la luz como limite in- ferior, respeeto de su propia velocidad, lo ‘mismo que los mesones tiene tal velocidad como limite superior. La teorfa de Einstein prueba la imposibilidad de 1a existencis de fos taquiones y son complejas las causas que hhacen a la masa total del universo opuesta Ja degeneracion de la energia, extraida de la segunda ley de Ia termodinémica, para supo- er exstenca. Si Tues posible recoger taguiones, como’ es posible hacer con los jones, y adaptarlos como medio de propul sin, seria efectivamente posible dirigir la diresein del tiempo y hacer real el sueiio de Ja cionciaficeién del “ ‘un modo de ir y veri tiempo necesario para atravesar el esp que suera los dos puntos 10 0$ otro el sistema escogido por Ia cien cia-ficeiOn para desarrollar velocidades como la de la luz, Bscribe Isaac Asimov: *jSera posible reducir Ia materia a un rayo de foto- nes (las particulasinfinitesimales que forman la luz y otro tipo de energia radiante) que reprodizca exactamente las caracteristicas el patron de materia empleada? Si es posi- ble, un rayo del generador podria ser envia do's traves del espacio a una especie de es tacién receptora que deberia efectuar la re- 66 7 Pe ad Les 34 - Una serie de Proyectos de maguinas {it dos primers, como puede ape td dewndic, qu Seups. eee postefonmente conversién en materia del rayo de fotones. Sila trasferencia de materia (0 teletranspor- te, como también lo llama la eiencia-ficei6n) resultara posible, un astronauta, entonces, podria ser transferido a cualquier punto dei universo, a la velocidad de Ia luz. Para el mis- mo astronauta, ningin intervalo de tiempo habrd pasido desde el momento de la con- n en fotoneshasta aquel de la reconver- sion en materia”. EL universo podria semejarse al patio de casa... Pero si tal sisiema de transporte le- fase a ser realidad, y silos taquiones existen realmente, y si um dia fuésemos capaces de utilizar 10s fotones en el teletransporte, en- tonces no existiré para el hombre ningin lis mite. Para decitlo entonces con Asimov: “ahora, todo el inmenso universo se conver- tird nada més que el patio de casa de la hue ranidad..", Volvamos a poner los pies un poco mis en tierra. Sin Megar a superar la velocidad de Ta luz, podremos igualmente aleanzar una velo- cidad por ahora imposible usando la reaceién. explosiva entre mataria y antimateria, ne- cesaria para el despegue de una astronave. De esto han hablado ya muchas veces los autores de ciencia-ficcion, pero un reciente estudio dirigido por los investigadores del Jet Propulsion Laboratory de Pasadena, Califor- nia, da hoy una patina de realidad cientifica «tales hipdtesis. Bastard emploar, por ejemplo, treinta mili. ‘gramos de antimateria con cuatro toneladas de hidrégeno o de agua para poder ast dar luna velocidad del orden de los treinta kil6- metros por segundo, suficientes para llegar a Ja Luna en apenas cuatro horas un vehiculo, za 54 - Las dos iustr- lone dts aca mc fran ol espectacular pegue. de dos cohe ftno diveeramente deste superficie del mar y ‘ot mediante una espe le de tobosin.| automético del peso de una tonelada, Una astronave de diez toneladas podria, en cam bio, Hegar a Marte en una semana, emplean- do cuarenta toneladas de agua y diez gramos. de antimateria, Un kilo de antimateria le- varia la misma astronave hasta Plutén en un mes, ¥ cin kilos de antimatera (con tare pectiva cantiad de agua) conduciria a las Estrellas ms vesinas en cincventa alos, mar- chando a una velocidad igual aun dein de la dela lor, Sostionen ios cientificos del JPL que han realizado tal estudio: “Hoy sabemos como obtener antimateria en nuestros acclerado: res de particulas. Necesitariamos redueir mu- cco las dimensiones de esta méquine para poder instalarla a bordo de un vehiculo es- pacial, Pero la dificultad téenica no es irre- versbie. Se trata, sobre todo, de un proble- ima de costes y de elecciones®. Las estrelli, quizd, estén menos lejanas de cuanto se pue- de pensar. Pero hoy en dia habria que pre- imtarse si el hombre quiere realmente al- eanzarlas. (Ep) juno de os mximos expertos fn téenica de'yuclos de cohen, Radieado en los EE.UU" desde 1938, ha desasolado una exitosa Actividad como escrito. revista Galaxy hasta su. muerte, en 1969, tres semanas antes de la partida de la “Apolo XI” ala Luna: una cruel burla del destino, Los viajes espaciales de la ciencia-fic- jon no pueden ser menos que los de Ia ciencia, Pero cuando se abandona el sistema solar para dar el gran salto de una estrella a otra, entonces la ciencia no basta. Es la época de las astronaves- planeta en la cual se suceden las gene- Taciones de astronautas enviados a fundar colonias terrestres alrededor de has estrellas; es Ia época de Universe (1941) de Robert Heinlein, de Non Stop (1958) de Brian Aldiss, En la Tierra, mientras tanto, los com- bustibles quimicos permiten las prime- ras excursiones mas alla de la atmésfe~ ra, en Orbita terrestre y después en la Luna, El “Saturna V" lanza tres hom- bres hacia el satélite, con un primer estadio a queroseno y oxigeno liqui- do, el segundo y el tercer estadios ambos a hidrégeno y oxigeno liquido, uno como combustible y el otro como. comburente. Son los combustibles criogénieos, que deben mantenerse a temperaturas de —250° centigrados, casi en el limite del cero absoluto, mientras que las partes externas del cohete, por efecto del roce con el aire durante su ascenso, se calienta hasta miles de grados, Se mira atin mis lejos. En los EE.UU., en 1958, se inicia el proyecto NER- VA, para la construceién de un motor nuclear aparejado a otro de propulsor quimico. El principio del motor nu- clear es simple: el gas hidrdgeno que sirve para refrigerar el reactor se calien- ta hasta cerca de 3000 grados antes de ser expulsado. La fuerza de empu- Je obtenida es de de & km/seg., el doble de la de los motores quimi- cos. Pero los problemas técnicos a afrontar son enormes: jqué sucederia si, por ejemplo, en el espacio se ¥ case una situacion de emergencia simi lar a la de marzo de 1979, en Three Mille Island, cerca de Harrisburg? 68 La técnica suministra nuevos temas alos escritores Los técnicos espaciales, en sus proyec- tos, suministran nuevos puntos de arrangue también a los escritores de ciencia-ficci6n. Como la_ propulsion ionica, basada en la expulsion de iones positivos (0 sea, de dtomos que esti ban atrapados en un electron), debida- mente acelerados en un campo elec tromagnético. El resultado puede ser una potencia 150 veces superior a la de los motores quimicos. La propul- sin idnica existe en la realidad tam- ~ bign, aunque sea en forma experimen- tal, El 13 de febrero de 1970, los nor- teamericanos pusieron en Orbita_un satélite con motor a propulsién iénics el SERT 2, que funcioné durante alg 8 En cambio, a un futuro to- dayia_mitico pertenece la propulsion fot6nica, en la cual las particulas ex- pulsadas' por la tobera de la astronave serdn nada menos que los fotones de a luz: a través de una aceleracion len- ta y progresiva, seré posible acercarse a la velocidad ‘de la luz. Pero existe otra utilidad de tos fotones, bastante ms accesible: aquella que se aprove- cha de Ia energia eléctrica de la radia- cidn luminosa del sol para impulsar tuna astronave a “vela"”. Los cientifi- cos del Jet Propulsion Laboratory estén estudiando la posibilidad de construir un vehiculo automitico de este tipo para interceptar al cometa Halley en su proxima visita al sistema solar, en 1986: tendré una “vela” de plistico, de 800 metros cuadrados, de tun espesor de 2,5 milésimas de mil metro, recubierto de una capa delga- ima de aluminio, Pero los escritores de ciencia-ficcién ya eran duenos de ella desde hacia tiempo. La primera mencion de la “vela solar” esté —como se lee en una publicacién de la NASA— en un ar- ticulo aparecido en mayo de 1951 en Astounding Science Fiction. Y Poul Anderson se sitve de ella diez anos by AlGis SuDRYS 1a vida de “Infinity Science Fetion” fue breve veinte numero. De noviembre de 1955» novi bre de 1988. Sin embargo en ella apareefan nom bres importantes, como olde Algis Budeys, més tarde, en el relato del ciclo de Flying Mountains (“Las montafas vo- antes”): “Los veleros solares eran lentos, sus pequefias travesias mis reves requerian meses: pero aquel viento constante no cesaba mas, se debilitaba a medida que se alejaba ha- cia las estrellas, pero disminuia tam- bien la gravedad solar, y en la propor- cién exacta”. Del mismo periodo es el relato de Clarke, The Wind from the Sun (1965), en el cual esti descrita vividamente una aventura de enorm: veleros espaciales, “el sutil rumor de viento que sopla entre los mundos”. A velocidad proxima a la de la luz, los escritores de ciencia-ficcién saben bien que aparecen los efectos de la relativi- dad prevista por Einstein: la masa tiende al infinito, el tiempo se acerca a cero. E. E. Smith (The Skylark of Space, 1928) podfa permitise decir (Orth en el et del fim * Derecha: Herma ‘mujer en ts Luna" Abajo: “Vertex” sevsta norteamericana de ficclon aparelda en 1973 y, que se publico hasta 1975. despues de dca admeros fn ella spare fen importantes nombres de i clenciaficion y Je incienda, en particular dele astongutica, 1 finieg ndimero publieado de Fiction”, 'A cargo de James Bish, [a revista conto on Ia colaoracion de importantes esertores de ‘dencis-fieegn, La fecha es de junio de 1958 ‘Vanguard Science neeouaoeD NGUARD rere FIRST ISSUE KORNBLUTH JONES. DEL REY DE CAMP Rata) que, después de todo, Ia teoria de Einstein era s6lo una teoria y enviar a sus héroes a corretear por las gal xis sin mas problemas. Lo mismo han hecho otros famosos autores de hi torias espaciales de la época, hasta con ingeniosos argumentos: Leinster, Ha- milton, van Gogt. Los autores’ més modemos prefieren, en cambio, con- templar al hombre en lugar de a ia ma- quina: los protagonistas de Return to Tomorrow (1954) de Ron Hubbard. aquellos de Ghetto (1954) de Poul Anderson, aquellos de Tumannost An- dromedy (1958) de Ivan Efremov, son seres condenados a vivir en el es pacio, marginados, siempre erradica- dos de su propio tiempo y de su pro- pio mundo, para quienes un puflado de afios en las naves interestelares co- rresponde a siglos transcurridos en la Tierra, La ciencia-ficcién sirve a los cientificos También Poul Anderson, en el ciclo de “Flying Mountains” (“Las montafas volantes”), recoge el hidrégeno del es- pacio para quemarlo en los reactores ¢ inventa la girogravedad: un medio para sustraerse de la gravedad median- te un generador de energia, Y Jack Wi- lliamson (The Legion of Space, 1934) escoge un motor que genera campos de fuerza que actéan contra Ia curva- tura del espacio, inducida por la p' sencia de una masa, para conducir la nave espacial alrededor del espacio, y también a través del espacio, Se introduce asi uno de los grandes Iu- gares comunes de la ciencia-ficeién, una de las convenciones que los lecto- res técitamente aceptan para superar ciertos callejones sin salida téenicos y narrativos, pero sabiendo bien que no tenemos un correlativo en la realidad prictica, Se trata del hiperespacio, una dimension en la cual no valen mas los. parimetros fisicos que conocemos, pero de los cuales se sirven los nave- gantes interestelares para abreviar los tiempos necesarios para viajar de un lado a otro del espacio ordinario. El concepto de hiperespacio, de otra dimension espacio-temporal, que pa- recfa relegado a la ciencia-ficcion, forma parte sin embargo en estos aflos del lenguaje de los astrofisicos al refe rirse a una de las mas fantistica pros- pectivas de la ciencia de hoy: la hipé- tesis de los agujeros negros, estrellas colosales que han concentrado toda su masa en una esfera reducidisima de la cual no dejan que la luz, que ellas mismas producen, salga del “embudo sravitacional” en’ el interior del cual nuestras leyes fisicas son pulverizadas y transformadas de manera inimagina- ble, quiz4 como sugiere Carl Sagan, el astrofisico més ecléctico y fantasioso, “tiinel de pasaje”” hacia otras dim: siones, atravesando los cuales una tronave podria emerger en otra parte de este 0 de otros universos. Larry Niven, en Neutron Star (1968), ya ha contado Ia lacerante fuerza gravi tacional de una estrella de neutrones, un estadio inmediatamente precedente al del agujero negro, Pero, ,no podre mos ahora usar los mismos agujeros negros como gigantescos “aceleradores espaciales"? Idea ya tomada y amplia- da de autores como Joe Haldeman (The Forever War, 1972) y Edwin C Tubb (Breakaway, 1975), pero que pueden ofrecer ain numerosos esti- mulos a la especulacion de los escri tores no menos que a la de los cientifi- Pero, para alejarse de la Tierra, no hay otro medio que Ja astronave? En jente relato The Fountains of (1977), Arthur C. Clarke la idea del “ascensor espacial” un sistema de cabinas y de comparti- mientos que pueden unir la superficie terrestre con una estaci6n espacial sis- tematizada en érbita geoestacionaria 2 36 mil kilOmetros de altura, Un pro- 0 yecto de asombrosa complejidad te nol6gica, que sin embargo, habia sido sugerido 0, un poc en broma 1966 por un grupo de . Escribe Clarke un uno d Ios: sus articu “Debo confesar que yo no cons deraba esta idea mis que un sueio fantastico hasta que el cosmonauta Alexei Leonov me dio una copia de su. magnifico libro estrellas nos observan’, publicado en 1967. jlma- ginen ahora mi sorpresa cuando vi q los soviéticos ya. habian concebido la mismisima idea de un modo totalmen- te independiente: el ascensor espa- cial!” de un no juzguemos {Fantasia tecnold; critor’ Brobablemente, pero tan deprisa, Proviene de aquella perso- nna que en 1945, en la revis nica Wireless World, propus mera vez la id tres satélites a radiot pri a de poner en orbita mente ¢ para de telecomunic otro del mundo. Di puss, el Telstar con por primera en directo los aparatos de televi- sion entre Europa y América, Hoy, las espaciales” representan el ds consistente surgido de la actividad astrondutica de otro inténeo un punto a te alos des- ‘ela solar durante una cifa con un coma, [a NASA busea, donde hace tempo, nue de propulsion, como la de isa propulsion a anronave “azadors Abe: Esa nave, vii en ts scones ‘as; dri hacia un cen 0 sores functonan, tal vez Se prcduo un “ro” cost bastante insolita en el espacto profund, describe una astronave tripulada, le fascin6,| Jos fondos necesarios para la empresa, una Oberth era el padre de la teorfa de los cohe-| joven estudiante de astronomia indecise tes. La situacion madur6, y en base a la linea | acerca de si amar a uno 4 otto, una trazada por Lang, Thea von Harbou (esposa] da espia que trabaja para un grupo financls del director, n.d.) habia escrito el argumen-| ta con la esperanza de que en la Luna haya to de Die Frau im Monde (‘La mujer en la| oro. El historiador cinematosrafico Krakauer Luna’). Faltaba solamente un asesor cienti-| habia de “‘piadoso enredo” y de ™ fico. Lang telefones a Mediasch y Oberth] emotiva” a propdsito del film. fue" Pero a Oberth esto le importaba poco. Lo Oberth, cuentan las erénicas, lag6 la earca-| que le interesaba era que Lang le contiara el jada cuando leyé la trama, una mezcolanza| encargo de dirigit la parte cientifica de su melodramatica con un joven y pobre cienti-| trabajo y quizd de realizar, coincidiendo con fico que habia proyectado un cohete para ir| su presentacion, un verdadero cohiete. ;Qué a la Luna, un ingeniero acaudslado que tiene] mejor lanzamiento publicitario? Los produc histgrea dela narrativay de cine de clencia ficeion, dicen pocas costs simplemente no hablan: Pero hubo un momento, hace mis de meio siglo, en el cual la tora dela astro ndutica se unié a la de la clenciaficein, Entre 1928 y 1929, cuando el director de cine Fritz Lang y el gran tedrico de coliees Hermann Oberth, se encontraron para taba jer juntos en el mismo objetivo, Parece un episodio de poca mont, pera que tivo fan damental importancia para el desarrollo in cial de a invesigacin sobre la propulsion Gierta-amplitud en fos manualos de historia dela milstisticay dela astronsutien Todo comenzo en octubre de 1928. En Ale ania, Fritz Lang ee el director mis famnoso Yinis rico, a raz del éxito de “Die Nibe iungen”'y ‘de "Metropolis", pelfeulas que trataban tna femitica puramente de clenea jecion, Lan se habia entusiasmado con las espectiaciones sobre el futuro, y se habla procurado todo To que tena que ver con el tema de los cohetes y dla navegacion espa | Heinz Gartmann, en su meticulosa histo de los primeros atios de la era espacial, es cribe: “Los libros estaban amontonados so: bre su mesa. El ocupadisimo director slo ha bia tenido tiempo para recorrer sus indices, encontrando una cantidad de alusiones a astronaves y cohetes Iunares, Quedaron, sin embargo, “El cohete en el espacio interpla netario”, no obstante el espinoso entodo de Formulas, La tercera parte, en la cual Oberth de ext tipo. El mismo Lang. entonces, Ie para la constracsin del chit, berth comienen a tabsjr, con la ayuda de Willy Ley, de apenas veintidos ats, pero ya bailante oxperimentador misiistico babi divulgador. Oberth debe comprometerte, at, fon que debe aceptar los ificlis compromi do ls tic el fil construyeron uns nave luna? ("Es muy” grande dsfavorable"), lena de cuadrantesy de ag ‘otra, debe tabajr con tempos reducidis ‘mos (tres meses, tres meses y medio debian bastar part la realzacion de fin) para pro- yectar construire cate. ¥ Obert, to Lega al extrerno que pone avisos en ls pe onoce Rudolf Nebel, que de on Braun por “La mujer en Ja Luna”. La UFA quiere un cohete de 15 metios de largo para improsionar al publico. Oberth y Nebel estudian el proyecto de un cohete de dos metros que debe clevarse hasta anuncia, en cambio, que el cohete del profe sor Oberth se elevard hasta unos 70 1 80 kilometros. La expectacion es grande, Willy Ley escribe un articulo tras otro que le piden los periddicos y revistas No obstante las numerosas eriticas, Oberth sa emplear combustibles iquidos, mas precisamente bencina y oxigeno liquide, Quiere.verificar personalmente Ia reaccion de un combustible de este tipo, mezelando en su laboratorio bencina y aire liquido. Se produce una fuerte explosion y Oberth es arrojado contra las paredes: sale con serias, Tesiones en los ojos y un timpano reventa- do. Reemprende los experimentos con ayor prudencia y construye un modelo con unas nuevas toberas: el prototipo dara resultados positivos en las pruebas estéticas| cfectuadas, Mientras tanto, Lang emplea mis tiempo del previsto para el montaje de Ia pelicula y Oberth se iusiona de tener ahora el suficien: te para fabricar su cohete antes del estreno del film. Construye un modelo de madera a tamaflo natural del cohete y la UFA divul ga la foto para demostrar que los trabajos se contintian alegremente, Pero todo es indtil, aunque Oberth lega bajar eatorce, quince horas al dia. Di im Monde, va a ser proyectada p mera vez en Berlin, el 5 de octub es el timo film mudo de La: circulacién la primera pelic pero igualmente log Fun gran éxito Del cohete que debfa acompanar al estren del film, la UFA comunica oficialmente que se deben esperar condiciones meteorold [gicas mas favorables. Poco después nadie se acuerda més del asunto. La UFA ofrece Oberth y a sus colaboradores el utilaje em pleado en. sus propios establecimientos, | Fampa de lanzamiento, Oberth todo esti bastante satisfecho: trabajando a ritmo infernal, en medio de errores y di flcultades, ha podido aprender muchas co: sas. (fp.) "= 1 - El ciemttico alemén Hermann Oberth, # Una extiana imagen de Fritz Ling detris’ de cdmara tomavistax (durante la fimacion de Mero polls) ® 3" Fritz Lang en et "et™ dal film que cea Fis con la colaboracon de Hermann Obert, Sonora, | mujeren la Lana" “Selence and Invention”, uno de tos almanagues compuesto de centene y cenenstes des Seinte tanto en Gran Bretaha como en fos Estadon Unidos. Eran ‘anos de grandes entusismos por los innumerables iventos ydeseubrimientos que he fan enracterizado el glo recien inicio {eon 1s En la péging anterior: Espectacular atardeoer so be el iar de un mundo dsconoeido. Parece que et astonauca'y el extrno saurio eatin apreciando fa belleza del paises Listims que en est plane, Dareido ala Tierey el aie sea irespiable para los Seres humans, como lo demucstra el traje here fico del huespea legado del espacio, Los Crononautas por FERRUCCIO ALESSANDRI La tinica manera efectiva para el hom- bre de viajar en el tiempo es la memo- ria para volver al pasado y la imag cién para anticipar el futuro. Pero el hombre siempre dese6 poder volver al pasado para corregir sus propios erro- res o para llegar a saber Io que le es- pera, En todas las edades, una de las profesiones mas beneficiosas ha sido la del profeta y también hoy, después de haber alcanzado la Luna, prosperan por todas partes los magos y los clari videntes, consultados con extrema seriedad incluso por los hombres de gobierno, Naturalmente, esté admitido que a la luz de los conocimientos modemnos los, viajes en el tiempo no entran ni en el campo de la posibilidad remota aungue estén apareciendo fascinantes teorias sobre el tiempo invertido en los agujeros negros. En la ciencia-fic cin, en cambio, representa uno de sus filones principales: la_menos “posi- ble” de aquellas maravillas de lo posi- ble que la ciencia-ficcion representa Por seductora yaparentemente sim- ple, la idea del viaje en el tiempo esta entremezclada en el mismo concepto de tiempo, uno de los fundamentos de todas las ‘grandes concepciones filo- séficas, que le dieron diversas interpre- taciones. En’un iltimo andlisis, no sabemos siquiera si el tiempo existe, sino es en términos de percepciones subjetivas y de construcciones racio- nales. De ahora en adelante, nos refe riremos al concepto de tiempo enten- digéndolo slo en su acepcién mis comin y tradicional, como una cuar- ta dimensién a través de la cual viajan las otras tres, o la cantidad de degra dacién de la’ energia que leva al Ii mite de la entropi Los. primeros viajes literarios en el tiempo se pueden remontar a 1843. En aquel afio, contemporineamente, se publicaban’ A Christmas Carol in Prose (“Cuentos de Navidad”) de Charles Dickens y A Tale of the Ragged Mountains (“Historia de las Ragged Mountains”) de Edgar A, Poe. Telato de Poe de un hombre que retrocede sesenta alos es ambiguo: quiz se trate de una alucinacién de morfina. Pero la historia de Dickens toca muchos temas de la ciencia- ficcion moderna. Su personaje, Ebeze- ner Scrooge, visita el propio pasado y el propio futuro, como observador in- dependiente y se ve actuar a si mismo. En base a estas observaciones, decide cambiar su propio modo de vida, mo- dificando asf su futuro y el de los de- mds, y éste es un concepto tipico de Ja ciencia-ficcion “temporal”: las alte raciones de un cierto periodo tienen consecuencias en el periodo siguiente. En 1889, Mark Twain publica su libro ‘A Connecticut Yankee in King Ar- thur’s Court (“Un yanqui en la corte del rey Arturo”), en el,cual el prota- gonista se encuentra arrojado inexpli- cablemente al mundo medieval, donde tiene la ocasion de demostrar la supe- rioridad del hombre modemo, Intere- sante (ademés, naturalmente, de los di- vertidos y continuos enfrentamientos de mentalidad de sus personajes) es su regreso: un dia se duerme y se despi ta en el presente, Casi una anticipa- cion de la hibernacin. A fines de 1800 el tema empieza a interesar a varios escritores, como Edward P. Mit- chel, que con su The Clock That Went Backward en 1891 envia dos mucha- chos a la Holanda del siglo XVI, y como, naturalmente, H. G. Wells, el padre de la ciencia-ficcién’ moderna, que en 1895 escribe The Time Machi- ne (“La maquina del tiempo”). En esta novela, el protagonista cons- truye y utiliza una maquina que le permite viajar al futuro, donde presen- cia la transformacién acontecida de la humanidad en dos clases sociales con grandes diferencias fisicas, y luego al fin de la Tierra sin més humanidad. (Continéa proximo fasciculo) 15 Acerca dela supervelocidad de Isaac Asimoy Hasta hace doscientos anos el hombre no po: dia superar, en tierra, Ia velocidad de un ea: ballo 0, en el mar, el impulso del viento} sobre las velas de un barco. A pesar de que] soflase y proyectase miquinas voladoras, en vidiando y estudiando a los pijaros, no sa ba sor libre on el aire. Lego vino la época del vapor. Los hermanos} Montgolfier se alvaron en el primer globo| de aire caliente, realizando en 1783 una ma ravillose excursion de diez minutes. Aquel| loa cs Ceti otal fe it-un globo de hidrogeno (gas mas ligero {que ef aire). El hidrogeno hace que el globo. pueda alzarse y naveyar a la altura de Las, fnontafias, El vapor producido por la ebu- Tlicién del agua revel6 la fuerza extraordina- ria que puede llegar « desarrollar bajo pre: Sidny siendo ete origen de los barcos a vapor y de lis Iocomotoras. Fue posible hacer explotar los vapores de bencina en una. cimara unida a un pistOn, y el automévil y el avion fueron una realidad. Y, finalmente, las lamas de los gases de ‘escape, violeniamente diigidas por debajo, permitirin a los enotmies cohetes alzarse en la almésfera y penetrar en el espacio. En menos de dos sighos, el hombre hha lle zzado a los limites extremos de la velocidad) posible, Un astronauta que describe alrede dor de ia Tierra una drbita en 90 minutos, a luna distancia de 160. kil6metros sobre la, superficie terrestre, desarrolla una velocidad de casi 8,5 km por segundo, maxima velo- ‘edad posible, superada Ia cual se proyectar fen el espacio. A esta velocidad, la fuerza de alraccion {errestre y la fuerza centrifuga que tiende a alejarlo de la Tierra, se igualan; asi, of astronauia puede mantener una distancia) onstante de nuestro planeta. Es obvio que) no puede mantenerse toda la eternidad; sin el encendido de los cohetes que regulan a) velocidad, el roce constante de los gases) raros en los estratos mis altos de la aims fera le harian disminuir la velocidad, ob! sgando a la eipsula a descender, de modo tal ue su érbita penetraria en. los estratos at) mosféricos mis bajos, donde los gases son| mis densos, y se prenderia fuego como un] mete 5 km/s 0 29.000 km/h es a] exacta velocidad nevesaria part compensat| la fuerza de la atraccion terrestre en proxi: midad de la superficie de nuestro. planeta Para huir a esta atraccién se debe aleancar,| si logra hacerlo, una velocidad del orden de| Tos 40.000 kilometros por hora. Asi han po-| ‘ido realizarse las magnificas misiones a Ve-| nus, Marte y la Luna y, sobre todo, los ex traordinarios resultados de la Apolo VII y X. ‘Transcurrievon exactamente 186 allos entre| los primeros 10 minutos en el cielo y los) primeros 10 dias en el espacio, Se necesitan enormes cantidades de combus tible para aumentar la aceleracion. A la velo cidad de 40.000 km/h w 11 km/s se vence la atracci6n terrestre, y en adelante, disminuye| ‘a medida que se aloja de ella, A esta velo« 76 - Hones de kilmetros, y una distancia tal dad se puede Hegar tain lejos como se quiera sin consumo de earburante, aunque se debe| hnuir de la atraccién de otros cuerpos celestes| voluminosos. Asi, siempre que se tenga el tiempo suficiente, es posible Megara cual- quier punto del vniverso. Pero aqui esté cl problema, porque el tiempo necesario es: enorme, Las distancias interplanetarias entre los vecinos mundos de Venus y de Marte son| notables y fa velocidad de 11 kmys, insufi- Ciente. Se necesitarfan otros dos altos para’ Tegar a la Grbita de Jupiter, y a esta veloci- dad mas de quince afios para llegar a la de. Plutén. Resolver el problema de la duracién del viaje con el aumento de la aceleracién es una| solucién que presenta sus dificultades. Para] aumentar la aceleracién se precisa carburan te, una enorme cantidad de carburante, y si se’ quiere obtener una velocidad verdadera- mente elevada usando productos quimicos, {del tipo de los que se dispone actualmente, llegar a ki Luna requeriria una cantidad de. cearburante tal que se precisiria un vehicu:| To de dimensiones desmesuradas. A esto se Te puede objetar que el producto quimico rio es todo, Explosiones nucleares controla- das imprimirin a los gases de salida veloci- ddades superiores a aquellas obtenidas por los ‘combustibles quimicos y este mayor imput so permitiri una aceleracién prolongada | tuna velocidad de vuelo espacial superior en| proporcién a ln masa de carburante, Un} Cohete nuclear, con estadio nico, transpor | {aria combustible suficiente para'tlevarlo a) Jos mas lejanos planctas del sistema solar. Poro tampoco la energia atomica es suficien- te para redueir a una medida posible la du- racion del viaje. [a aceleracion no puede superar un dato’ Himite: md alls de una determinada presion al cuerpo humano se aplasta. En consecuen cia, existe una velocidad limite para un viaje de ‘cierta duracién. Hasta que dependamos de tin motor a reacci6n, sea quimico o nu- clear, pasarin muchos aflos antes de poder estar en condiciones de explorat fos eonfines de nuestro sistema solar. El esfuerzo de un| Viaje que dure tanto tiempo no es insosteni ble, en especial si esti bien pagado, aunque | no permitiré al hombre salir de los confines del universo. {Qué cosas conocemos de las regiones que estin mis a de estos confines? La inmensidad del espacio supera la imagina- cién humana. Nuestro Sol forma parte de| ‘una galaxia que, segin los astronomos, seria similar a una enorme galaxia de Andromeda_ fen forma de espiral. Despraciadamente esta- mos situados de tal modo que s6lo podemos luna pequena parte de nuestra galaxia, la LLictea, que comprende en su sistema Vi 135 millones de millones de estrlls. Gran parte de estas estrellas tienen sistemas pla Retarios, y- sobre estos plancias hay cond Clones part penn clas formas Je vids Nose trata Je una fantata, Los coxmdlogos Y los bidlogos estan de acuerdo en admit Que la aparcién de via y de planetx es inherent la exons “de uba. ete ‘ataos capacitados para legar a sts c= fellas que, posbemente esten dotadas de tsistema panetario gu, a vet, puedan estar habitadas por lalguer forma Ge vida intligente? Despraciadamtente, fa mis cea: nde els carla dist de nororor 40k 20 kryo, qu significa congelar. Actualmente | constituye una barrera formidable. Un ve Iniculo que viajase a una velocidad de 11 km/s cemplearia miles de afios para acercarse a Ia estrella mas cercana, dos billones de ahos para llegar al extremo opuesto de nuestra g faxia y cuarenta billones de aftos para lee ala galaxia mus cercana: la nebulosa de An ‘dromeda, La inmensidad del espacio supera toda con- | cepeidn humana. Observa las estrellas. La mayor parte de ellas estin tan lejanas que ‘transcurren millones de aftos para que su liz, {que visja a 300.000 km/s, nos alcance. En ‘otros {érminos, estamos contemplando es: tellas fésiles. No. disponemos.de_medios ‘para saber si [a estrella que produce esta luz todavia existe. El sistema solar es una peque- fia isla en el vasto ovéano del espacio. Pasar de un sistema planetario a otro supone pro ‘blemas mucho mas complicados que no los tiene In cireulacién dentro del mismo siste- ‘ma solar. Dejando el elemento tiempo inva- riable, se podria emplear tanto combustible nuclear como para alcanzar la velocidad de 1100 kin/s, pero se necesitarian siempre un imillar de anos para ogar a Ia estrella més cercana y otro millar para regresar. Para re- solver este problema se podria constituir un vehculo de dimensiones tales como para servir de mundo en miniatura; un vehieulo que tenga la capacidad de regenerar el aire ¥ el agua, fabricar energia auténoma con la Ayuda de reactores especiales, cultivar los ali | mientos, dar un pequeno confort a quienes transporte, Sobre este vehiculo podrian na cer y morir generaciones enteras de hombres. Finalmente, la trigésima generacion que lle ‘gue a la estrella mas cercana, quizis haya ol- Vidado la Tierra, los objetivos del viaje 0 conserve un recuerdo vago que se transfor mma en leyenda, Pero admitiendo que la tri- aésima goneracién haya conservado todas las instrucciones del viaje, podria verificarse 1a hipétesis de que ya no le importe volver a la Tierra y que continGe viviendo en el tnico mundo que ha conocido viajar sin parar en este universo en miniatura. Esta era la tess original, y todavia l6gica, de_un relato de jenciaiceion de R. Heinlen titulado: Universo. Ademds, no es féeil creer que los habitantes de Ia Ticrra estén entusiasmados por cons: ‘ruir una cépsula en la cual el retorno no seri posible sino después de siglos. Los hombres han emprendido obras de larga duracion, ‘como por ejemplo las catedrales de la Edad Media, s6lo cuando To proyectado, aunque de lenta evolucion, era visible. ;Quign se freceri como voluntario. para esta espe- tie de prision cruel y de exilio permanen- te? Mientras tanto, los futuros servicios de inyestigucion espacial continuarén, probable mente, como la NASA, seleccionando indivi- duos para hacerlos astronauts, Es necesario procurar evitar los viajes dema- siado largos. Se podria congelar los tripulan- tes de ki nave espacial por un periodo deter- minado. Arthur C. Clarke usd una variante de este método en 2001: uma odisea del es- pacio, Una ver encontrado et objetivo, un Aparato automatico descongelaria y desper taria a ln tripulacion. Este procedimiento hoy cientifico es llamado eridnico, del grie~ no se conoce un método que permita la hi bernacion de seres humanos en condiciones de vitalidad ininterrumpida sin perjudicar algunas de las funciones fisiologices, aunque esto 20 nos impide creer que un dia u otro se descubra un procedimionto con estos ¢ tos. Gracias a una téeniea de hibernacién muy avanzada, la tripulacion de una nave espacial podria llegar a su destino, Los astronautas serian reanimados en turnos, de modo que uno de ellos: pudiese estar vigilando. A su “despertar” todos recordarian inmediata mente el objetivo de su misin y se puede esperar que quieran reemprender el camino hacia ta Tierra. Miontras tanto habrin trans ccurrido miles de atios y el interés por esta mision se habri perdido. Existiri, posible ‘mente, una barrera linguistica. Si los asteo: nautas salidos en el aio 2000, velvieran en el 4000, éstos hablarian siempre el lenguaje del 2000, en Ia Tierra, en cambio, la lengua habri tenido una ripida evolucién, Una len gua es una cosa viva y cambia ripidamente Es necesario, por lo tanto, eliminar los viajes largos y aumentar la velocidad. Uno de los medios para obtener estos resultados es ut: lizar la impulsion de los iones, En vez de usar Bus caliente de las reacciones quimicas 0 nucleares, en grandes cantidades para le pro ulsion posterior, pueden utilizarse los jones. Los jones son parte del étomo cargados de energia eléctrica. Se obtendria, de este modo, la velocidad de 160,000 kmjs 0 mas Jo que permitiria Megara ta estrella mis cer cana en el periodo de duracién media de la vida de un hombre. Muchas docenas de estre llas vendrian a encontrarse a una distancia de la Tierra inferior a os eincuenta aftos. Estas estrellas, sin embargo, estin entre lus mis ‘ereanas a nosotros, pero, jedmo se hari con las lejanas? Si un astronaut se lanza al espa cio a una velocidad progresiva, el tiempo, para él, disminuird cada vez mis: el principio fevolucionario de Einstein expuesto en la teoria de la relatividad. La lentitud dl tiempo, que es notable a velocidad superior a los 251,000 km/s, Mega a ser enorme ‘cuando supera los 290,000 km/s, Los astronautas que viajen en el espacio a wt velocidad superior a Jos 290,000 kin/s serdn capaces de llegar al otro extremo de nuestra galaxia en un periodo que les parece i de 25 altos. Ese seri su tiempo subjetivo: tun tiempo que se ha hecho mas lento, En la Tierra, en cambio, ya que el tiempo habrd transcurido normalmente, el intervalo pare cerd mucho mas grande. Existe, todavia, otra velocidad ms alli de la cual ningiin hombre puede vigjar: Ia velocidad de la luz en el ¥acio, 300,000 km/s. Segtin la teoria de Eins fein, a esta velocidad el tiempo se detie totalmente. Este fenémeno es un problema ificil_ para los autores de cienciafiecion: Para hacer que sus cohetes sean capaces de esplazarse de una galaxia a otra en pocas semanas o en pocos meses, han debido inven tar nuevos sistemas de propulsién con los ‘eales superar Ia dificultad expuesta en la teoria de Einstein, Las comunicaciones entre una estrella_y otra, Esto ilumina un aspecto nuevo. ;Es absolutamente necesario transportar en eles pacio un cuerpo dotido de masa? Para trans mitir un mensaje de un continente a otro, no «nce despacharlo, basta redusna SSraonte eetrca ‘de inensdad arable 2 velocidad de fa liz ara después recone teiro en su forma ovginal de document Una teoncaandogs e-us0 para tans Tas Toogratis de Mate torts por el Ma finer TVs [Es posble reduirla mater n mayo vacable de. fotones (partes Componen la zy otras frnas de aes fadiante) ce la Teproduzcaexactamentt teceplor dado y converte en dupieao de [e'mateia. Un cayo We fotones de est tip que al medio cred graves proba J's embargoes verdad ques ene 1800 tne hubieen dicho que el hombre Negara Is Lina, habria puesto la misma objecon Si fa" “ianaferenia de mas Hoga sr Posibl, se poded enviar un astronauts al Spas aa velocidad de lars y ests €1 aso del tempo, mientas qu en a Teva suede una nave espacial Gestrollr na ve: iccidad superior a ade la luz! Hast hace poco tempol ress hula sda: No Sicmore spin Is teori de Einstein, de a aus Hoy nadie dada a veloeidad din hz afimmacin, Gerald Feinberg dela Univer dad te. Columbia, expus esa hits Sse considera Ia velocidad dela le como tin miro invisbe einfanqueable; x post pensar ue exe mo tine dos lease De S10 lado, podria existir in univers eater de" particule capac de" tasladarse ms velosmente que Iz. El denomina' esas partici ultracrpides con cl nombre de {aguione qu en gieposgifica pide, larkad> Guanto mr energin sents on olea mds cantdad, Tos taguions legan ala Yelocidad de a Iiz. Menos energia, pose, | ns ear, Megando asta elcid dé Illes de aos de luz por segundo Los taguiones no. pueden set diiidos por meio" del colson entre los, como ls partsulas de Einstein, Se deyplaran tan insfiiente ‘para poderls. indvidealiar Hasta ahora, fos fisos se han esforrada aa txito, a descelerr In chipa, himiioa brodicida por lo taquones: Paco ato 90 exien Feinberg sostiene que pueden ex tir. Esto sai que, aunque todavia no haya sido pole encoataros, sos podria crear {Quiet Todo const oh aber encon trar el sxmino adccusde, pontrse en ut fel dupitado el iss, tn fej planets, Por qué no seguir adler de fotones? Si el rayo suficiente, llegaria a la estrella més cercana en S segundos. Este intervalo de tiempo seria igual, tanto para los viajeros como para los hombres que estuviesen en la Tierra Se podria tecorrer la galaxia en un minuto y canzar las galaxias Iejanas en una. sem Con el rayo de taquiones el universo entero fenderia a sumir la dimensi6n de una man cha, Se podrian transmitie mensajes de una estrella a otra por rayos en modilacién de frecuencia, De este modo, los transportes y las comunicaciones.serfan posibles. desde cualquier distancia y en un intervalo brevi simo. Por lo tanto, no es imposible imaginar el dia (quiza no lejano) que se pueda superar Jo imposible y reducir al universo ala dime sidn humana Abajo: Una cubierta de “Satelite Science Fiction”, Dublcada en 1956 en los Estados Unidos, Apare 1959, " Eh a eet con ts ve ay her oe Tee TT om SCNCE FACTION Edited by VARGO STATTEN 7 Doves: Los don enomes panes sles, qe an a parntanent inca acon tres a se considera of GBroahs deine, Clor que casctenex ete mo- Inento“explosiva”. Probablemente, los acum Ares de ehergia no habrin soporiado ta impre- Ste sbrecargs Ironia de la aberter a estacion ‘guedard a scuras. {para ts época) cabierta eaten Abe ubligada entre el tr = aba tambien do ‘Romor y hecho "misteriwoe” en gener Una igus Ca Pio i DATOS TECNICOS Nacionalidad: Federacién Planotaria Te Funciones: ransporte de pi jones! 705 metros de largo edad Tripulacion: 25 ent dinados 3 200 pasaje ‘unidades. me Propulsion: . motores nucl Defensa Escudo diamagndti COLISION DETRAS DE LA LUNA Pe usa Cu eon ae cc Relief), es una enorme maquina destinada ya sea para carga, transporte de minerales en bruto desde Plut6n a Marte, o para el servicio de pasajeros eek tae ee uo gem te cd Poe eu neem etre ere nr eee inch wri ie Mt une Mee a terse Ric meses, alternados con otros turnos de reposo, transcurridos en su planeta ney Psa cen esate ete sce as ae Pe Cen te rane age a kee eae cc? Luego de descargar en la Luna los materiales para su procesamiento en las Mea eee eee Cee ao Pee mcs eee ae cage ee aoe eeu eee anc ee ano cer toronto El pequefio DIPLOCO3, del cual se distinguen s6lo algunos fragmentos, volvia de una mision secreta en un planeta del sistema Llande. Les relaciones entre la Federacion Terrestre y LAL-4 atravesaban un momento particularmente delicado, Parece que elementos indigenas, contrarios a un acuerdo entre los dos goblernos, con la ayuda de un cémplice terrestre, lograron sabotear el calculador del DIPLOCO, indispensable para establecer PMc een rele ecient ge eI amon ee cern en Ey Bre eticgstar ote aon ir ee rs cere atid Tap eoce cs eum Aes a ner eR auc Ic Cate G alee tice reat aceon a previsién del aterrizaje. Pocos millares de kilémetros més alld, el DIPLOCO Pe cre cca eM asics ec Be soca mec yee Ot Sr ce eget ees omer eure rc es) Ru same een ee cen Lats resuliaron fatales, Pero, a causa de este incidente, las relaciones entre LAL-4 eC et ecu noc nea Pee rice ne Mace a eee) eat SN Ree ecu ch ecient eC Sit cues Macias a crt ” [ Eseala = 1: 5000 MIREL -MR2 |_Dim, reales = 705m _~ ESCUDO DIAMAGNETICO TORRES DE CONTROL REACTORES PARA TANQUES DE OXIGENO DESPLAZAMIENTO LATERAL (DURANTE EL VUELOESPACIAL) Vista lateral ‘ALERONES PARA EL VUELO REACTORES EN ATMOSFERA PRINCIPLES TANQUES DE HIDROGENO Vista desde arriba UNIDAD MECANICA 223 (partes terminals): BED Pinzas cleotromagnéticas BBB brazo mecén,(seee. A) BABY oraz0 mecén, (ec. 8.) MIREL-MR-2 corte de las funciones) F | 809 empalme curvo Propulsion y combustible 1 BBY Generador de intrarrojos Cara de rr on bro BY Fv. de raprension Cortana y pers Elementos de conte y defensa Bd Gon, ROSS de seguridad 3: transportados: aos: del 2280 al 2300 =e BE Tetecémare GAALMZ Muon at al % BBD Faro 115238 aa BIB) Unién al cuerpo & IB Gen. electromagnstica nos 15 millones de toneladas Hire rm 90) $ Cho: ' mtones de tonelagat yee, IG a Geer Te Rar eNO) Tea} http://fantaciencia. blogspot.com

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