Esguince de tobillo

La articulación del tobillo está situada entre la pierna y el pie, y posibilita que este último se mueva
para arriba y para abajo (flexión y extensión). La tibia y el peroné son las estructuras óseas ubicadas
en la pierna y en la ranura que forman se acopla el talud del pie. Son los ligamentos los tejidos que
sujetan y estabilizan los huesos del tobillo.

Un esguince de tobillo es una lesión que ocurre cuando el tobillo se tuerce o gira de manera
anormal, es el deterioro que sufren los ligamentos cuando son estirados más allá de su rango de
movilidad normal. Puede consistir en un desgarro ínfimo de las fibras del ligamento hasta una rotura
completa del mismo.

El ligamento interno del tobillo está formado por dos capas, siendo la más relevante la que se
encuentra más profunda. Su rotura suele ir asociada a una fractura ósea severa.

El ligamento externo del tobillo está compuesto de tres bandas separadas: una anterior, una medial y
otra en el medio posterior. Las que pueden verse afectadas en un esguince con más asiduidad suelen
ser la anterior y la medial.

Los huesos de la pierna, la tibia y el peroné, se articulan también entre sí por encima del tobillo. Se
ven reforzados por un ligamento anterior y otro posterior. Entre un 10 y un 20% de los casos de
esguince, tiene afectación de este ligamento anterior. Y aunque suele no precisar de cirugía, su
recuperación es lenta.

Causas

Las causas en general que involucran la aparición de esta lesión son en su mayoría de origen
mecánico y traumático, en donde la persona realiza un movimiento de flexión plantar e inversión
forzada del pie apoyando todo el peso sobre él distendiendo el tejido ligamentario de la cara externa
del mismo.

Se produce por una flexión plantar e inversión forzada del pie, esto suele suceder mucho al momento
de practicar deportes de carrera como el fútbol, atletismo, tenis u otros donde se requiera la
realización de cambios bruscos de dirección.
También está asociado en su mayoría a mujeres en período de gestación dado a la alta segregación
de hormonas que promueven la laxitud articular.

Signos

Tanto en una fractura, como en un esguince la sintomatología es semejante, pudiéndose llegar a

confundir la primera con el esguince.

Dolor, con frecuencia, súbito y riguroso.

Inflamación.

Hematomas.

Impotencia para andar o cargar peso sobre la articulación afecta.

Ante el esguince se puede encontrar rigidez articular. Al palpar la zona lesionada en caso de fractura
se produce dolor, pudiendo existir deformación de esa área.

Según el grado del esguince la inflamación y el dolor varían, siendo muy intensos en esguinces más
severos.

Al ser una lesión tan común, a nivel médico se ha establecido una clasificación especial para los
esguinces de los ligamentos del tobillo para determinar la gravedad de la misma, en donde se
establece lo siguiente:

Primer grado: Compromiso (distensión o rotura) del ligamento peroneo astragalino anterior.

Segundo grado: Rotura del ligamento peroneo-astragalino anterior y compromiso (distensión o

rotura) del ligamento peroneo-calcáneo.

Tercer grado: Compromiso (rotura o distensión) de todos los ligamentos externos del tobillo. De ésta
manera, se puede identificar a través de algún estudio imagenólogico la afectación de alguna de
éstas estructuras antes mencionadas.
Síntomas

Esta lesión refiere múltiples sintomatologías donde se resaltan:

Dolor intenso en la cara externa del pie que se agrava al movimiento

Hinchazón e inflamación generalizada en dicha zona

Presencia de edema y retención de líquido

Limitación o disminución del rango de movimiento en la articulación del tobillo y pie

Sentimiento de inestabilidad articular

Zona afectada

Inversión (lateral) del tobillo

El tipo más común de esguince de tobillo ocurre cuando el pie tiene una fuerza, generalmente el
peso corporal, lo que hace que gire internamente en un grado más alto de lo que se supone que
debe hacerlo, afectando el lado lateral del pie. Cuando ocurre este tipo de esguince de tobillo, los
ligamentos externos o laterales se estiran demasiado. El ligamento talofibular anterior es uno de los
ligamentos más comúnmente afectados en este tipo de esguince, seguido del ligamento
calcaneofibular y el ligamento talofibular posterior respectivamente, este último encontrado en
esguinces de tobillo más severos. Aproximadamente el 70-85% de los esguinces de tobillo son
lesiones por inversión.

Inversión de tobillo

Cuando el tobillo se invierte, se dañan los ligamentos talofibular anterior y calcaneofibular. Este es el
esguince de tobillo más común.

Eversión (medial) de esguince de tobillo

Un tipo menos común de esguince de tobillo se denomina lesión por eversión y afecta el lado medial
del pie. Esto sucede cuando, en lugar de que el tobillo gire medialmente, lo que resulta en una lesión
de inversión (el pie gira demasiado hacia adentro), el tobillo gira lateralmente, lo que resulta en una
lesión de eversión (cuando el pie gira demasiado hacia afuera). Cuando esto ocurre, el ligamento
medial o deltoides se tensa.

Esguince de tobillo alto (sindesmótico)

Un esguince de tobillo alto es una lesión en los ligamentos grandes por encima del tobillo que unen
los dos huesos largos de la parte inferior de la pierna, llamados tibia y peroné. Los esguinces de
tobillo alto comúnmente ocurren por una torsión repentina y contundente del pie hacia afuera.
Tratamiento para el esguince de tobillo

El tratamiento médico para el esguince de tobillo se basa en la aplicación de férulas o

inmovilizadores parciales para el tobillo, además de indicar la ingesta de medicamentos analgésicos y
antiinflamatorios. En casos graves de esguinces en 3er grado se puede llegar a intervenir
quirúrgicamente el problema.

El tratamiento fisioterapéutico debe estar presente desde el primer día de haber ocurrido la lesión,
donde, se pueden aplicar múltiples técnicas de tratamiento que ayuden a controlar la sintomatología
presente destacando:

Aplicación de agentes físicos: Termoterapia, crioterapia (hielo), electroterapia, ultrasonido, entre

otros.

Terapia manual ortopédica:

Movilizaciones intraarticulares

Ejercicios terapéuticos

Reeducación de la marcha