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Dedico este libro a los cientos de

alumnas que me instaron a escribirlo


casi a diario durante todo este período
de pandemia. Ellas saben quiénes son.
Gracias siempre por estar, por ser, por
confiar en mi trabajo y por escucharse
a ustedes mismas…

“Cualquier
tecnología lo suficientemente avanzada
es indistinguible de la magia”.

Arthur C. Clarke

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ÍNDICE

PRÓLOGO……………………………………………………………………………………………………………… 4

CAPÍTULO 0 – ANTES DE COMENZAR - ¿QUÉ ES LA METAFÍSICA?………………………… 6

CAPÍTULO 1 – DIMENSIONES ENERGÉTICAS………………………………………………………… 7

CAPÍTULO 2 – TU SISTEMA DE CREENCIAS…………………………………………………………… 13

CAPÍTULO 3 – CÓMO COCREAMOS- MANIFESTAMOS NUESTRA REALIDAD…………. 18

CAPÍTULO 4 – DUALIDAD: LUZ Y OSCURIDAD……………………………………………………….. 21

CAPÍTULO 5 – LA NATURALEZA Y NOSOTROS, LOS HUMANOS……………………………… 28

CAPÍTULO 6 – POR QUÉ LAS COSAS A VECES SIMPLEMENTE NO RESULTAN…………. 31

CAPÍTULO 7 – SIEMPRE SOMOS SOBERANAS DE NUESTRA ENERGÍA, PORQUE SOMOS


ENERGÍA…………………………………………………………………………………………………………………. 34

CAPÍTULO 8 – CÓDIGOS ENERGÉTICOS…………………………………………………………………… 36

CAPÍTULO 9 – HACIA DÓNDE VA LA EVOLUCIÓN HUMANA Y EL “DESPERTAR”


ESPIRITUAL…………………………………………………………………………………………………………….. 38

CAPÍTULO 10 – EPÍLOGO……………………………………………………………………………………….. 40

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PRÓLOGO

Escribo este libro con mucho amor y humildad a pedido de mi comunidad que me lo viene
pidiendo hace más de un año, debido a que en cada curso que doy surgen dudas y esas
dudas, en el rubro al que me dedico, solo son plausibles de ser respondidas desde la
metafísica.

Trataré de recopilar mis nueve años de caminar, aprendizaje y descubrimiento en estas


páginas, entendiendo que quizás en una segunda edición haya mucho que agregar. Las
escribo para que ojalá sean comprensibles para cualquier persona, incluso sin
conocimientos previos, y también que sean un gran aporte para quienes ya han
comenzado a transitar este sendero que denominamos espiritual, aunque, como te darás
cuenta en estas páginas, la vida entera es espiritual.

Comencé mi despertar consciente el año 2012, luego de conocer el Reiki como


herramienta. En ese tiempo había leído muy poco de estos temas, pero intuitivamente
muchas cosas comenzaron a tomar sentido. Como les he comentado a través de mis
redes, esto ocurrió luego de una desilusión amorosa, un despido laboral, un gran
endeudamiento y la pérdida de mi independencia que tanto me había costado ganar hacía
tres años.

Acá sintetizo contenidos que me hubiera gustado haber conocido en ese tiempo, con
respecto al manejo consciente de la realidad, a la energía de personas y lugares, a la
conexión con seres de otros planos y sobre todo, al por qué y para qué estamos acá. He
procurado hacerlo de la manera más sencilla posible y sobre todo, de la forma más
amorosa y acuariana, es decir, sin postularlos como algo absoluto sino como algo que
puede o no hacerte sentido. Asimismo, he empleado el pronombre femenino a lo largo de
todo este escrito porque le hablo principalmente a mujeres, pero si este no te identifica,
cámbialo en tu mente por el que te acomode

De corazón espero que esta información canalizada durante todo este tiempo te sirva y te
ayude muchísimo en tu día a día, donde, como reza el título de este libro, siempre hay
magia...

Tammy

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© TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS – AMÉRICA TAMARA MUÑOZ SOBARZO

PROHIBIDA LA REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL DE ESTE ESCRITO SIN PERMISO DE SU


AUTORA O SIN MENCIONAR A LA FUENTE.

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CAPÍTULO 0

ANTES DE COMENZAR

¿QUÉ ES LA METAFÍSICA?

El prefijo griego “meta” significa, entre otras cosas “más allá de…”, por lo tanto, es correcto
decir que la metafísica es todo lo que está más allá de los confines de la física como ciencia.

Muchas cosas que te explicaré acá no tendrán un asidero en el mundo material. No puedo
demostrarte con fotos o imágenes cómo sale el Reiki de tus manos o por qué esa persona
con la que no sientes afinidad está a un nivel vibratorio distinto al tuyo, pero sabrás que es
cierto porque lo vas a SENTIR.

Por ejemplo, cuando llegas a un espacio que luce lindo y limpio, pero algo no te gusta, es
probable que estés sintiendo una vibración energética muy distinta a la tuya (lo que no
significa que tú “estés bien energéticamente” y ese espacio “esté mal”) simplemente ambos
vibran en frecuencias distintas y es a eso a lo que me refiero cuando te digo que no tenemos
una comprobación empírica de lo que te enseñaré en este libro.

Lo mismo pasa cuando hablas con una persona que todos adoran, que te propone algo que
luce, en el discurso, muy beneficioso, pero algo no te calza, o no te agrada. Es nuevamente
lo mismo, simplemente niveles vibratorios distintos. El único consejo que puedo darte en
estos casos es que te escuches a tí misma y sigas las indicaciones de ese mensaje interior.

A eso, en metafísica, le llamamos RESONAR. A todo lo que en tu corazón sabes que es real,
verdadero, que es para tí, y te hace sentido. Todo lo que veas en tu realidad manifestada, o
incluso lo que te explique en este libro, confírmalo con tu corazón siempre. Nunca creas en
nada solo porque sí, conéctate con tu corazón, y revisa si realmente está alineado con tu
esencia.

Allí está tu principal maestro.

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CAPÍTULO 1

DIMENSIONES ENERGÉTICAS

En la Biblia, se dice que Dios creó el mundo en seis días y que descansó el séptimo. Esto es
una metáfora de que todo lo manifestado tiene siete dimensiones, o planos, o como le
quieras llamar según tu creencia. Por eso se dice que el número siete es un número de
“buena suerte”, en realidad es un número maestro de manifestación, de bajar a la realidad
concreta cualquier cosa desde el campo de las ideas y emociones.

La última dimensión - la séptima - es la más elevada y es la que corresponde a la energía en


estado puro, a la cual llamamos Dios, Creador, Universo, Fuente, Uno, etc.

Por ende, esta metáfora nos habla de que sí existe una fuente universal de energía de todo
lo creado, donde obviamente esta energía no puede crearse a sí misma porque ya existe.
Por eso fueron seis días de creación y uno de descanso.

Y a su vez, nosotros también existimos en paralelo en esas siete dimensiones, y tenemos la


capacidad de movernos entre ellas a voluntad, siempre y cuando seamos conscientes de
ese poder.

Por eso tenemos siete chakras principales, son los siete vórtices energéticos que nos
conectan con esas siete dimensiones, desde la más básica y terrenal a la más etérea. Somos
algo así como un edificio con siete pisos, entre los cuales podemos movernos dependiendo
de lo que necesitemos. Vamos al primero cuando hablamos de dinero, de negocios, y al
séptimo cuando necesitamos orientación divina de nuestros maestros y guías. Los animales
también tienen esos siete niveles, solo que en forma menos consciente. Desde ese enfoque
el ser humano es un ser muy completo y sobre todo bastante “equipado”, sin embargo, la
mayoría de los seres humanos emplea solo una pequeña parte de las capacidades que nos
ofrece la existencia en estas siete dimensiones.

Nuestro cuerpo físico es solo una de esas siete capas. A esta dimensión física la llamaremos
“3d” o “matrix” indistintamente a lo largo de este libro.

Acá hago énfasis en que algunas disciplinas o enfoques espirituales subdividen algunas de
estas dimensiones, quedando un total de diez cuerpos o dimensiones, o incluso doce. Yo no
estoy en desacuerdo con ese enfoque, pero sí quiero que, nuevamente, veas si resuenas

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con esa información, entendiendo que siempre tienes la autoridad y maestría de
determinar la información que ingresa en tu campo.

La mayoría de los seres humanos viven prácticamente toda su vida consciente únicamente
de su existencia en la matrix, siguiendo sus normas, conectadas con la lógica del tiempo y
del espacio. Algunas cosas deseables de hacer para tener éxito en esta dimensión material
son:

- Tener un título universitario o similar.


- Tener un trabajo remunerado.
- Entregar tu tiempo a cambio de un sueldo, quedando muy poco espacio para la
creatividad, el goce y el ocio.
- Tener una pareja e hijos en lo posible.

Y no estoy diciendo que esto sea malo, en absoluto, yo misma mientras escribo este libro
llevo una vida conectada con algunos de estos parámetros. Lo que sí quiero es que seas
consciente de que esa es UNA MANERA de vivir la vida, no la única. Lo más sagrado que
tenemos los seres humanos en este plano material es el libre albedrío o la capacidad de
decidir, pero de eso hablaremos en detalle más adelante.

La matrix se sustenta en nuestro sistema de creencias, las cuales han sido descargadas en
nuestra mente desde que nacimos. También profundizaremos en esto en otro capítulo.

Volviendo a las dimensiones, las tres primeras dimensiones corresponden al mundo


mineral, vegetal y animal respectivamente. Nuestros tres primeros chakras nos conectan
con esa realidad material, y podríamos decir que de ellas se compone nuestro cuerpo físico.

Nuestro chakra raíz (zona ano-genital) nos habla de los instintos y la seguridad, nuestro
chakra sacro (bajo vientre) nos habla del placer y la creatividad, y nuestro chakra plexo solar
(abdomen) nos habla del fuego y el ímpetu, a través de este absorbemos energía del sol, de
otras personas y transformamos lo que comemos, ya que se ubica en el abdomen. Todas
las pasiones, los impulsos más instintivos, el placer, la percepción física están asociadas a
estos tres primeros chakras. De este mundo material nos habla el arcano El Diablo, de todo
lo meramente físico, y que eventualmente nos puede esclavizar.

En el centro de nuestro pecho tenemos el cuarto chakra: anahata chakra o “el no tocado”.
Acá empieza la conexión álmica y espiritual, ya que la cuarta dimensión nos habla de que
somos almas encarnadas en un cuerpo físico, teniendo una experiencia de aprendizaje.
Nada puede tocar al corazón. No hay magias para que nos amen, ni nos toleren. Y por eso
es posible decir que la conexión álmica, con otras almas encarnadas o no, proviene de la
cuarta dimensión. Cuando alguien abandona este plano material, sigue conectado con

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nosotras a través del corazón, y eventualmente mientras dormimos o meditamos podemos
volver a interactuar con esa persona.

En ese plano, al igual que este y que en todos, hay dualidad, por ende, hay almas
desencarnadas luminosas y oscuras. Pero no hay nada que temer, ningún alma
desencarnada puede hacernos daño, salvo que nosotros, desde nuestro sistema de
creencias, le demos poder para ello.

Cuando nos olvidamos del corazón y nos apegamos en exceso a este plano material, este se
enferma. Vienen las cardiopatías. Es su forma de que volvamos la atención hacia él.
Mientras él lata, tenemos vida. Es un órgano inteligente y de energía autogenerada. Por eso
decimos que es una puerta y que en él habita nuestra esencia divina, la llama trina, nuestra
divinidad interior. Nuestro principal maestro.

Los brazos, a su vez, son extensiones electromagnéticas de nuestro corazón, por eso
debemos cuidar lo que hacemos con nuestras manos y procurar que esté lo más alineado
posible con nuestra esencia. Por eso cuando amamos a alguien espontáneamente
queremos abrazarlo, y cuando alguna persona no nos gusta energéticamente, nos cruzamos
de brazos. Asimismo, la apertura de nuestro pecho, que tanto trabajamos en Yoga, le
provee al corazón el espacio necesario para su expansión a nivel sutil y material.

Por eso podemos canalizar energía Reiki y se dice que Reiki es amor, es energía pasada por
nuestro corazón, desde la más alta esencia y vibración. Todos los seres humanos podemos
convertirnos en reikistas y dar esta medicina energética si así lo decidimos.

El corazón nos comienza a conectar con lo que llamamos la auto-maestría. Toda maestría o
atributo elogiable que veamos en otra persona en cualquier área de la vida no es más que
un reflejo de nuestra maestría interior. Y toda dificultad o error que vemos en otra persona,
también es un reflejo interior. Mientras más luz emanes y más luminosa te sientas, más
oscuridad verás a tu alrededor o dentro de ti misma, por eso a veces el sendero espiritual
nos va poniendo a prueba, entendiendo siempre que podemos aprender desde el drama o
desde el goce en nuestro legítimo libre albedrío.

Sin la dualidad no tendríamos discernimiento. Sin dualidad no sabríamos clasificar, y la


mente necesita contrastes para comprender. También profundizaremos en este tema más
adelante.

En la quinta dimensión tenemos el inicio de nuestra mente y emociones, el inicio de toda la


manifestación. Allí están nuestros maestros ascendidos, guías, arcángeles y ángeles.
Contamos con su apoyo en toda nuestra vida material y no hay una sola alma encarnada
que venga sin su comité espiritual. Como es arriba es abajo. Pero ellos no pueden intervenir

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en forma directa sin que se lo pidamos en nuestra vida, ya que lo más sagrado que tenemos
los seres humanos es el libre albedrío, por eso es tan grave alterar la libertad de otros
haciendo hechizos. Esta dimensión se vincula a quinto chakra: la garganta

Acá nos hacemos conscientes de los límites, de las relaciones con otras personas, de nuestra
voz. Nuestra voz graba el akasha que es la sustancia que impregna todo lo que existe, el
éter. También nuestras acciones (y sí, desde el akasha se baja la información que se obtiene
en una lectura de Registros Akashicos)

Y por eso cuando nos hemos sometido a lo que otros nos dicen, o hemos renunciado a
nuestro libre albedrío, perdemos la voz literalmente hablando. No hay dos voces idénticas,
porque no hay en la quinta dimensión dos almas iguales en vibración o en comités
espirituales.

Nuestra voz tiene el poder de bendecir o maldecir, también es importante ser conscientes
de que el hablar emplea mucho prana (energía). Cuida tus palabras, porque tienen poder.
Cuida lo que dices, porque se manifiesta en tu realidad. Las palabras tienen sustancia en
términos metafísicos y por eso con nuestras palabras podemos elevar o humillar a otra
persona.

Nuestro sexto chakra (entrecejo) nos conecta con la sexta dimensión, también con la cuarta
y quinta. Toda canalización de información, conexión con seres de otros planos y la
consciencia de las leyes universales proviene de él. La mente que discrimina entre la razón
y la intuición, y que une ambas para tomar decisiones, se ubica acá.

Es importante distinguir eso sí, que nuestra mente es algo así como una antena que
“sintoniza” pensamientos de la mente universal o colectiva, por ende, nuestra intuición nos
hace discriminar si lo que pensamos realmente proviene de nosotras o es un pensamiento
colectivo al que me “enganché”. Ver noticieros, muchas redes sociales, o conectarnos
demasiado con creencias colectivas activa creencias limitantes propias y es por eso que no
es saludable ver televisión todo el día ni enganchar con creencias que no nos pertenecen.

La meditación nos permitirá ordenar nuestros pensamientos, discriminarlos de nuestra


intuición y conocer la verdad de quienes somos. También nos permitirá entender que no
somos nuestra mente, ni nuestro cuerpo. Somos amor puro, amor infinito. Aunque es el
ego – una parte importante de nuestra existencia acá en la tierra- el que se va identificando
con creencias sobre nosotras mismas o los demás.

No vemos la realidad en forma objetiva. La estamos decodificando constantemente


mediante nuestras creencias y esas creencias son las que van conformando el ego.

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Nuestro séptimo y último chakra principal, la coronilla, nos conecta con la divinidad,
Universo. Dios. Como le quieras llamar. Nos abre en amplia consciencia y activa nuestra
presencia divina. Somos, cada una de nosotras, una parte de la divinidad. Toda la
humanidad en su conjunto también es la divinidad.

Namasté o Sat naam justamente significan “saludo a la divinidad en ti”. Ambos son saludos
yóguicos. No saludo a tu mente ni a tus creencias, saludo a tu esencia divina.

Al cierre de este capítulo es importante que comprendas que no eres tu sistema de


creencias, ni tu mente, ni tu cuerpo físico. Eres un alma encarnada, que tiene una mente
para decodificar la realidad, tiene un sistema de creencias que te hace sentir protegida y a
salvo y un cuerpo físico que es tu vehículo en este plano material.

Por eso es tan importante que habites tu cuerpo físico con amor. Sea como sea, sin él, no
estarías acá. Y tu alma no tendría el privilegio hermoso de aprender, que es a lo que vinimos,
finalmente.

Algunas visiones metafísicas distinguen un octavo chakra que estaría representado por el
aura, o el campo electromagnético de tus pensamientos alrededor de tí. Si entendemos que
un chakra es, desde la filosofía yóguica, un vórtice generado por energía femenina- fría – y
masculina-caliente, el aura no cumple con ese requisito. Pero es una parte importante a
nivel energético y la que marca nuestra presencia cuando estamos con otras personas ya
sea física o virtualmente. Es el aura lo que percibes cuando interactúas con alguien y, no
sabes por qué, te gusta o te disgusta mucho. El aura la podemos proyectar hacia otros
espacios físicos y parte de ello es lo que hacemos cuando enviamos una sesión de sanación
energética a distancia. También una impresión de nuestra aura se queda en las fotografías
y en los videos, y debido a ello, cuando los vemos, tenemos la idea de que estamos en
presencia de esa persona.

También nuestra consciencia se “evapora” cuando consumimos plantas de poder como la


marihuana, el San Pedro o la Ayahuasca, y por eso recuperamos consciencia de estas otras
dimensiones que habitamos. El consumo de estas sustancias no es necesario para manejar
tu energía ni aumentar tu consciencia, pero si decides hacerlo, siempre sé responsable con
su consumo.

Algo similar ocurre cuando dormimos, nuestra consciencia queda libre para irse a otros
planos, si tu energía es muy volátil – muy Piscis o escorpio – te recomiendo sellar tu energía
antes de dormir mediante alguna oración de protección o con algún método que conozcas,
sobre todo a la altura del plexo solar – abdomen - la oración que de seguro hacías cuando
niña del “Ángel de la guarda” también ayuda. Por eso tenemos sueños vívidos, se
recomienda además nunca dormir en frente de un espejo ni tampoco en presencia de velas,

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ya que ambos instrumentos abren portales o puertas astrales por las que tu alma puede
viajar y, debido a la dualidad, tener “buenas” o “malas” experiencias.

Muchas de ustedes dicen soñar conmigo, recibo cientos de mensajes al mes que dicen eso,
es posible que tu alma durante el sueño interactúe con la mía o bien, al revés. Yo trato de
sellarme todas las noches ya que, al tener gran cantidad de elemento agua en mi carta natal,
mi energía se expande y se evapora muy fácilmente.

Esto no es algo “malo”, pero si puede resultar agotador, si crees que tu energía es de este
tipo, procura aprender a meditar o alguna técnica que te permita ser más consciente de tu
energía y manejarla a voluntad.

También por esta razón se dice que de noche se sueña con almas desencarnadas, que ya
partieron de este plano material, o bien se tienen “malas” visiones, o atemorizantes. Porque
en sueños accedemos a estas interdimensiones más o menos conscientemente,
dependiendo de tu nivel de manejo metafísico.

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CAPÍTULO 2

TU SISTEMA DE CREENCIAS

Los seres humanos decodificamos la realidad a través de un sistema de creencias. Es


imposible no tenerlo y vamos a decir que es algo así como el sistema operativo de tu mente.
El problema es que, si llevas una existencia limitada a cualquier nivel (físico, económico,
emocional, etc.) es tu sistema de creencias el que sostiene eso. Por eso decimos que hay
que CREER para VER. No al revés.

Todo lo que existe a nivel físico, existió primero a nivel mental-emocional. ¿Dónde existía
tu casa antes de comprarla? ¿Dónde existían tus hijos antes de tenerlos?

Todo parte en la mente y en la emoción. Es la raíz de todo lo que hacemos y lo que no


hacemos en nuestra vida. Si tu sistema de creencias es más limitante, pensarás que eres
capaz de cosas limitadas. Si tu sistema de creencias es expansivo, pensarás que eres capaz
de cosas expansivas.

El sistema de creencias a grandes rasgos se compone de las creencias de tus ancestros y de


las creencias que han ido anclando tanto los sucesos traumáticos como los beneficiosos a
lo largo de tu vida. La emoción que se siente en esos episodios va grabando el subconsciente
y comandando el consciente.

Vamos a entender el subconsciente como “la pieza de atrás” de la mente. A grandes rasgos,
la idea es SER CONSCIENTE de la mayor cantidad de cosas que hay en esa habitación y, sobre
todo, tenerla lo más limpia posible. Y es ahí donde entra la meditación.

Cuando meditamos nos hacemos conscientes de esa habitación. Cuando dormimos


también. Y como la mente es una antena, cada vez que alguien dice algo que “sintoniza”
nuestra mente, también se va almacenando en esa “pieza”.

Imagina la cantidad de información que debe haber almacenada ahí si sumamos todos los
estímulos que has recibido a lo largo de tu vida. Todo mensaje no procesado
conscientemente se va hacia allá.

Por eso decimos que meditar es poner la mente en orden. Hacer foco. Y además debes tener
en cuenta que la mente es automática, percibe un estímulo cada aproximadamente 4

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segundos, por eso yo siempre digo en mis cursos que es “como un niño que todo el tiempo
va a querer meter los dedos en el enchufe”. Yo debo educar a mi mente. Tengo una mente,
consciente y subconsciente, pero dominarla depende de mí.

Lo más importante, repito y perdón lo majadera con este tema: NO ERES TU MENTE NI TUS
PENSAMIENTOS.

Y por eso se considera que meditar es una actividad básica y necesaria de limpieza de
información. Así como limpias tu casa o tu cuerpo a diario, así mismo es necesario meditar
a diario, aunque sean 3 minutos.

Cada creencia que tenemos está ahí para ayudarnos a entender y decodificar la realidad,
cumple la función de protegernos y mantenernos a salvo. Pero entre más consciente sea de
mis creencias limitantes, menos poder tendrán estas sobre mí.

Lo más hermoso de todo esto: podemos modificar nuestro sistema de creencias a voluntad,
podemos expandirlas constantemente.

Lo peor de todo esto: la gran mayoría de la población no es consciente de sus creencias.

MEDITACIÓN SIMPLE PARA PRINCIPIANTES

Siéntate con tus piernas cruzadas en el piso o sobre una silla con los pies descalzos, piernas
rectas y pies apoyados en el piso. Pon tus manos abiertas hacia el cielo sobre tus rodillas o
tu regazo. Cierra tus ojos y lleva el foco primero sobre tu respiración, procura inhalar lo más
largo, lento y profundo que puedas. A continuación, lleva tus hombros hacia arriba, atrás y
abajo para abrir tu pecho. Permanece inhalando y exhalando largo, lento y profundo
siempre por tu nariz.

Hazlo por un mínimo de tres minutos al día.

Al finalizar, da gracias ya sea con tus manos juntas al centro del pecho o sobre el mismo, a
la divinidad, Fuente, Dios, como le quieras llamar. Bebe un vaso de agua o algo que te
permita volver al aquí y ahora y continúa con tu día. La mejor hora para meditar es justo
antes de dormir o justo después de despertarte, ya que el subconsciente está “reiniciando
sistema” por decirlo de alguna manera metafórica.

ALGUNOS EJEMPLOS DE CÓMO OPERA UNA CREENCIA

Hoy, año 2021, usamos internet para casi todo en la vida. Para eso debemos tener la
creencia, por ejemplo, de que puedes usar internet, de que internet es confiable, de que a
través de tu dispositivo puedes conectarte con cualquier persona en cualquier lugar del
mundo, a través de audio y video, en tiempo real.

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Si le hubieras dicho eso a tu abuela, o bisabuela, te habría dicho que estás loco, que eso es
imposible o que es brujería.

Yo soy una convencida de que lo que los seres humanos comprendemos de nuestro mundo
material es muy poco, apenas una pequeña parte. Lo entretenido es que estamos
despertando poco a poco y abriéndonos cada vez a comprender más cosas.

Otro ejemplo que doy siempre en mis cursos es el de la infancia, si de niñas vimos que
nuestro padre engañaba a nuestra madre, se almacena en nuestro subconsciente la idea de
que los hombres engañan, son malos y poco confiables. Quizás, debido a esa creencia, a lo
largo de mi vida atraeré hombres que me hagan eso.

Porque el universo es un algoritmo, y me muestra afuera lo que hay dentro. Responde a mis
creencias. Me muestra más de aquello en lo que pongo mi foco.

Tal como Instagram, donde si le doy like a fotos de gatitos, me muestra más fotos de gatitos,
así mismo el universo me muestra en lo que más me enfoco. Sea esto positivo o negativo
para mí.

Porque el universo no tiene sentido del humor. Es literal. Si algo es bueno, malo, mejor o
peor, esa etiqueta se la pone mi sistema de creencias.

Tú solo debes encargarte de vibrar, pensar, decir, y hacer lo que REALMENTE quieres atraer
a tu vida y dejar de dar mensajes erróneos.

Hemos dicho previamente que somos un alma. Y esa alma no viene “en blanco” a este plano
material. Viene con una memoria asociada a todas las veces que ha encarnado, ya sea en
este planeta o en otros (sí, hay otros planos materiales como la tierra, pero no
profundizaremos en eso en este libro, solo quiero que sepas que en este Universo existen
muchos espacios terrenales donde eventualmente tu alma encarnó antes de estar acá y esa
memoria también te acompaña hoy en día)

Por ende, tenemos un sistema de creencias más o menos limitante o expansivo compuesto,
a grandes rasgos, de:

- Las memorias de vidas pasadas.


- Las memorias de nuestros ancestros, traspasadas a través de nuestro ADN (algunos
enfoques metafísicos dicen que, en efecto, el ADN es el sistema de creencias
heredado)
- Las experiencias que vivimos en nuestra primera infancia, de los 0 a los 7 años- las
más básicas- y por lo menos hasta los 21 años en total.

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- Cualquier experiencia posterior que ancle una emoción muy “positiva” o “negativa”
grabará también mi sistema de creencias.

Por lo tanto, vamos a decir que una creencia es algo que le parece posible a tu cerebro, ya
sea limitante o expansivo. ¿Por qué tienes esa creencia? Eso es parte de tu camino de
autoconocimiento. La pregunta clave es ¿De qué me sirve esta creencia?

Siempre hay una utilidad asociada, hasta en la creencia más limitante.

Por ejemplo, cuando yo tenía 7 años fui con mi papá a una feria en Peñaflor a vender
artículos de greda para el día de la mamá, un domingo. Puedo recordarlo como si fuera
ayer, yo andaba con un buzo negro con morado, y no vendimos ni un solo artículo en toda
la mañana. Nos habíamos ubicado “de coleros” en la feria (que es la zona no autorizada y
sin permiso, ubicada siempre al final)

Te cuento esto porque cuando fundé quierete.cl yo tenía la idea de que era mala vendiendo,
pese a que había vendido muchas cosas en mi vida (desde todos los productos por catálogo
que te imagines hasta tejidos hechos por mí, joyas de plata y carteras). Cuando me hice
cargo de esa creencia, llegué a ese recuerdo, lo abracé y bendije, y lo solté.

Cada vez que tenemos una creencia limitante anclada a un recuerdo traumático, una parte
de nosotras se queda en ese recuerdo, repitiendo ese patrón una y otra vez. En mi ejemplo
el patrón era validar “soy mala para vender”. Porque nada le gusta más a la mente que
comprobar afuera la información que tiene dentro.

Nuevamente, reitero, el universo es un algoritmo.

EJERCICIO SIMPLE PARA SABER DE DÓNDE VIENE UNA CREENCIA LIMITANTE.

Siéntate cómodamente, con tus piernas cruzadas o estiradas, espalda recta, pecho abierto
y levantado. Cierra tus ojos y lleva tu foco a tu respiración, conéctate con esa creencia
limitante que sabes que tienes, por ejemplo “Tener mucho dinero me hace una mala
persona” y pregúntate:

- ¿Cuándo fue la primera vez que sentí esto?


- ¿Qué estaba ocurriendo en mi vida?
- ¿Es una creencia mía o heredada de otra persona?
- ¿Qué estaba aprendiendo mi alma – en positivo- con esta experiencia?

A veces, cuando nuestra creencia proviene de un suceso traumático, cuesta ver el


aprendizaje, por eso si tu creencia viene de un suceso en extremo doloroso te recomiendo
buscar ayuda psicoterapéutica. Ser responsables de nosotras mismas es clave y esa

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responsabilidad parte de comprender que hay “puntos ciegos” en situaciones muy
dolorosas, complejas o traumáticas, donde voy a necesitar la ayuda de otra persona lo
suficientemente preparada para poder ver con claridad. Eso está perfecto y es importante
que, como terapeutas holísticas, demos el lugar que le corresponde a la psicoterapia.

Luego de hacer este ejercicio, te recomiendo escribir el relato completo en una hoja, leerlo
en voz alta, y cerrar ese relato con la siguiente frase “Este ya no es mi nivel de consciencia,
esto ya no me determina, hoy escribo una nueva historia” y lo quemas, a modo de
transmutación. Si te da miedo quemarlo, entiérralo en una maceta o tierra firme. Las
cenizas puedes echarlas en tierra o botarlas por el desagüe.

La tierra y el fuego son excelentes transmutadores ya que pertenecen a la naturaleza.

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CAPÍTULO 3

COMO COCREAMOS – MANIFESTAMOS NUESTRA REALIDAD

La realidad que vemos manifestada en el exterior, acá en la matrix o 3d, es un reflejo de mi


interior, sin embargo acá quiero ser enfática en que no somos dueñas del libre albedrío de
otras personas, por ende si otra persona actúa mal en mi contra puede ser que yo tuve esa
creencia en mí misma, pero ella también es responsable de sus actos, así que no eres
responsable de haber atraído a un abusador, por ejemplo, aunque eventualmente tus
creencias respecto a ti misma impidieron que te dieras cuenta a tiempo de lo que ocurría.

La ley del karma nos dice que todo lo que damos, vuelve a nosotras, como un boomerang.
Así que sé amor, expande amor, expande luz, y eso recibirás de vuelta.

Si quieres ser abundancia, sé abundancia, expande abundancia, cree en abundancia y eso


vendrá de vuelta.

Sin embargo, he podido observar en mis casi 8000 alumnas a la fecha que hay personas muy
buenas, muy dulces, a las que les cuesta muchísimo recibir abundancia o cosas buenas de
vuelta. Esto pasa porque no se sienten merecedoras, y eso está directamente conectado
con el amor propio. Si el universo quiere darte cosas buenas, pero tú estás cruzada de
brazos, negada a ello, nada puedes recibir. Es importante comprender que nuestra única
función es abrirnos a recibir lo que es nuestro por derecho divino, y expandir nuestro
sistema de creencias lo más posible para poder entender que nada depende exclusivamente
de nosotras, por eso hablamos de COCREAR la realidad. Una parte la hace el Universo, la
otra la hacemos nosotras, de acuerdo con el propósito de nuestra alma y con los talentos y
dones que en esta encarnación nos fueron dados.

Me hice astróloga y maestra de Registros Akashicos precisamente para comprender esto,


que en mi caso personal me costó años entender – y la verdad escribo este libro pensando
en lo que a mí me hubiera gustado leer en ese momento donde me sentía extraviada-

Los seres humanos somos infinitos y a la vez, limitados, no podemos estar presentes en
muchos lugares ni dedicarnos a miles de cosas al mismo tiempo, necesitamos un foco. Y
cualquier herramienta que te ayude a conocerte a ti misma te ayudará precisamente a
generar ese foco y a actuar. La acción es lo que modifica nuestra realidad manifestada y
generalmente esa acción es precedida de emoción, que es una de las fuerzas más potentes
de las que disponemos los seres humanos.

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Es necesario comprender que para conocer lo “bueno”, necesitamos la presencia de lo
“malo”, ya que la mente comprende a través de contrastes.

No conoceríamos la abundancia si no existiera la escasez. No conoceríamos la salud si no


existiera la enfermedad, por eso es necesario decidir conscientemente a diario estar en la
polaridad luminosa, entendiendo que eventualmente también percibiremos oscuridad.
Reitero, a más luz, más oscuridad verás en tí o proyectada en otras personas o situaciones.

Y por eso es necesario comprender que somos espejos, que todo lo que está en nosotras lo
vemos en otras personas, y por eso sentir envidia no tiene sentido, mejor agradécele a esa
persona que te muestra que eso que ella vive, también es posible para tí.

Además, como el mundo lo decodificamos de acuerdo con nuestras creencias, lo que a tí te


parece fabuloso, quizás a otra persona no tanto, por eso cuando nos conectamos con una
situación o persona es esencial comprender que entran en el juego nuestro sistema de
creencias y nuestra intuición. Tener una práctica espiritual diaria – meditar, por ejemplo- te
ayudará a estar conectada con tu intuición y poco a poco irás dándote cuenta de que lo
mejor que puedes hacer es construir tu propio camino, escucharte, y tomar de otras
personas o creencias lo que te resuene.

La co-creación exitosa de la realidad, a su vez, requiere el manejo de las leyes universales y


el desarrollo de virtudes. Algunas de ellas son:

Leyes universales:

- De reciprocidad o intercambio, significa devolver algo a cambio de todo lo que


recibo. Y dar siempre proporcionalmente a lo que ganas. Quien mucho gana mucho
debe dar, y quien quiere recibir más, debe dar. La energía del dinero está muy sujeta
a la reciprocidad.
- De causa y consecuencia, toda causa tiene una consecuencia, y la brecha entre
ambas constituye el tiempo. En la matrix el tiempo existe solo para que nos demos
cuenta de la relación entre ambas.
- De polaridad, todo es polar, dual, por lo tanto, escoger el polo donde transito es una
elección consciente diaria, pero para comprender la realidad finalmente es
necesario entender que los polos son solo opuestos de una misma energía.

Virtudes:

- La paciencia nos enseña en la co-creación de la realidad que la matrix es densa y


algunas manifestaciones pueden tomar algo más de tiempo, lo que no significa que

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no se vayan a materializar. Siempre en mis cursos digo: SUELTA, DECRETA, LIBERA Y
CONFÍA.
- La responsabilidad nos enseña en este mismo aspecto que lo que veo manifestado
en mi realidad fue primero co-creado consciente o inconscientemente en mis
creencias, mente y emociones (a lo que llamo en mis programas la frecuencia 5d)
ser conscientes de esto nos llevará a co-crear la realidad siempre en forma más
consciente y elevada.

Por ende, es correcto decir que lo que hay en nuestra realidad manifestada es una mezcla
de nuestros pensamientos, creencias, el actuar de nosotras mismas y el de otras personas
en nuestra vida. Pero siempre tenemos libre albedrío, solo hay que estar atenta a las
señales.

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CAPITULO 4

DUALIDAD: LUZ Y OSCURIDAD

La mente humana y colectiva organiza la información a base de pares. Ahora mismo escribo
este capítulo desde un vuelo Santiago – Madrid donde mi reloj dice que, de acuerdo con los
cálculos del piloto, quedan cuatro horas para aterrizar. Si eso es mucho o poco, mi mente
lo decide tal como les conté previamente en base a mi sistema de creencias. Y ese sistema
de creencias evalúa eso en función de mis experiencias sobre cuántas cosas se pueden hacer
en cuatro horas, como, por ejemplo, terminar este libro.

Por ende, es normal y común que nuestra mente al conocer a otra persona, por ejemplo,
evalúe si es buena o mala, confiable o no, más o menos similar a nosotras mismas. Luego
de eso la mente subconsciente dice, por ejemplo, que es seguro o inseguro trabajar con
dicha persona.

Así que cuando vemos mucha luz en otra persona solo estamos viendo nuestra propia luz
proyectada. A mí muchísimas alumnas al terminar un curso me dicen palabras hermosas –
gracias siempre chicas queridas por tanto amor- pero mi ego comprende que en el fondo
no soy yo, sino su propio reflejo lo que ven en mí, y me siento tremendamente bendecida
de poder activar en ustedes su potencial luminoso.

Cuando otra persona nos parece “mala”, “oscura” ocurre exactamente el mismo proceso,
algo hay de tí en esa persona o situación. Siempre cuidar que la mente busca “engancharse”
a situaciones donde se siente a salvo y por eso cuando venimos de una crianza abusiva, por
ejemplo, normalizamos formas de relacionarnos en pareja que nos dañan, pero nos damos
cuenta tarde de ello.

Si algo me ha enseñado la astrología es que no somos solamente luz y oscuridad. Somos el


medio día, la media tarde. Somos los nueve planetas que la astrología occidental considera
en su simbolismo y muchísimo más. La carta natal es el mapa, pero la persona siempre es
el territorio. No por navegar google maps todo el día puedo decir que CONOZCO esos
lugares.

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Ser astróloga es uno de los roles que más me gusta en el camino que he llevado en
@quierete.cl porque me ha permitido “ponerle nombre” a muchas facetas de mi
personalidad que no entendía y a las de las más de 600 personas que han confiado en mí a
la fecha para leer su carta natal. Pero reitero, que somos más que eso. Siempre post lectura
llega el ego y dice cosas como las siguientes “Pucha, tengo Venus en Escorpio, no puedo ser
fiel, así que todas mis parejas se van a tener que bancar que las engañe”.

El ego, una vez más. Lo necesitamos eso sí, sin ego no veríamos donde terminamos nosotras
como personas y donde comienza el resto. Pero siempre hay que vigilarlo.

Asimismo, en este plano tridimensional hay luz y oscuridad, seres humanos que eligen la luz
día tras día y seres que eligen la sombra.

Seres mitológicos que en los relatos dañan a los humanos, por ejemplo, están en esa lista.
Pero inclusive para esos seres, en su sistema de creencias, eso es la luz. ¿Te das cuenta de
lo complejo que es?

En la quinta dimensión- que está superpuesta a esta en otro nivel vibratorio, pero no “más
arriba” ni “más abajo” que esta- encontramos, por ejemplo, a los arcángeles, ángeles y
maestros ascendidos. Esos seres de luz de los que nos habla desde el Corán y la Biblia hasta
maestras metafísicas como yo y muchas otras. Algunos enfoques metafísicos opinan que
esos seres inclusive son la propia luz de la humanidad proyectada hacia esa dimensión, por
ende, sería correcto decir que los arcángeles, más que seres separados de nosotras como
humanidad, son la acumulación de nuestra luz, proyectada en una vibración determinada.

¿Qué creo yo? Lo que te resuene. Si a tu mente le parece bien pensar que son seres aparte,
adelante, si le parece bien pensar que somos nosotras en otra dimensión, también está
perfecto.

Mi enfoque seguirá siendo el de la era de Acuario, donde cada una debe decidir qué creer
en concordancia con su corazón, no delegando nunca en otras personas el poder co-
creativo del que dispone.

En esa misma dimensión tenemos, además, seres “más oscuros” llamados entidades. En
algunas redes sociales, maestras espirituales muy jóvenes confunden un poco diciendo que,
por ejemplo, la Madre María – sí, la de la Biblia – es una entidad. A mí me ayuda mucho
comprender que en estricto rigor una entidad elige lo que a nosotras nos parece la sombra
y una maestra ascendida elige lo que a nosotras nos parece la luz.

Pero si tú eliges “echarlos todos en el mismo saco” está perfecto. Nuevamente, consúltalo
con tu corazón.

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Seres como las hadas, gnomos, los seres llamados elementales, también están junto a otra
dimensión, algunos enfoques metafísicos los sitúan cerca de la primera dimensión y otros
sobre la segunda, entendiendo ambas como la configuración de la naturaleza mineral y
vegetal, respectivamente. Sobre este tipo de seres no he leído tanto pero sí sé que, cuando
era niña, tenía muchísimos amigos imaginarios viviendo precisamente en un espacio muy
rural. Sin duda que debo haber dialogado con estos seres y lo olvidé. Me debo una regresión
a esos primeros diez años de vida donde partió mi interés por la magia y lo invisible.

Las almas de quienes han abandonado este plano material y de quienes van a encarnar
también están en una dimensión superpuesta, la cuarta. También hay almas más o menos
luminosas dependiendo de la última emoción que sintieron antes de irse y por eso a veces
soñamos con estas personas o bien las sentimos cerca nuestro.

Cuando se habla de “brujería” o “magia negra” quienes se dedican a esto suelen contactar
a seres “más oscuros” para usar su energía y perjudicar a otra persona. Por eso se dice que
la hechicería no tiene ética. Es cierto. Pero yo creo que los seres humanos debemos
desarrollar el discernimiento y para ello debemos comprender que el libre albedrío de los
demás es sagrado. No existen trabajos de magia que alteren a una persona con creencias
luminosas firmes o que se ha blindado energéticamente a sí misma mediante su propio
trabajo interno. Tampoco existen trabajos de magia para que alguien nos ame, sí para que
se obsesione sexualmente con nosotras, pero eso no es amor.

Sé luz, y atraerás luz. Acepta tu propia sombra y obsérvala. Porque eres el infinito. No eres
solamente luz, no eres solamente oscuridad. Es la mente la que complica las cosas y te va
situando en esos polos de acuerdo con lo que va ocurriendo en tu vida y a la interpretación
que tu propia mente hace de esos acontecimientos y la carga emocional que les asigna.

Sí te pido que seas responsable en tus prácticas espirituales y te dejaré algunas


recomendaciones a base de mis tres años enseñando y mis casi diez desde que conocí y
comencé a practicar el Reiki, que fue lo primero que despertó mi consciencia:

- Cuando enciendas una vela siempre intenciónala hacia la luz. Puedes simplemente
decir “que solo luz baje por acá, gracias”. Las velas en conjunto sobre todo abren
puertas energéticas por donde, como dije en este capítulo, puede bajar luz y
oscuridad.

- Procura no dormir en frente de un espejo y si lo haces, protégete energéticamente


antes de dormir y al despertar. Cuando estamos dormidas perdemos algo de control
sobre nuestra aura -dependiendo de tu constitución energética- lo que puede
ocasionar pesadillas o experiencias como la llamada “parálisis del sueño” que

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consiste en estar despierta, pero no poder mover tu cuerpo justo al despertar. Si
puedes mover de lugar el espejo, tanto mejor. Los espejos, sobre todo confrontados,
también abren puertas energéticas hacia otras dimensiones.

- Si lees Tarot, péndulo, runas, oráculo, o cualquier herramienta mágica, siempre


procura abrir y cerrar el proceso de acuerdo con la forma en que te haya enseñado
la persona de quien aprendiste o bien de acuerdo con tu creencia, pero este tipo de
prácticas también abre puertas energéticas las que, dependiendo de la energía que
se mueva en la lectura puede ser más o menos luminosa.

- Hazte el hábito de meditar, aunque sean tres minutos por día, eso te permitirá tener
mayor consciencia de tu intuición y sobre todo, mayor consciencia de muchas de las
cosas que te he explicado en este libro y mayor auto-observación. Observarnos a
nosotras mismas y nuestros comportamientos es el primer paso a una mayor
consciencia.

- Cuando veas demasiada oscuridad en una situación o persona, pregúntate ¿es


realmente así?, recuerda que siempre somos soberanas de nuestra energía y
tenemos una intención muy poderosa con la que podemos, al instante, iluminar o
ensombrecer desde nuestro hogar hasta un vínculo.

NIVELES VIBRATORIOS - ¿EXISTE LA “LIMPIEZA ENERGÉTICA”?

Por supuesto que sí, existen miles de formas de limpiar y proteger nuestra energía y así
como nos duchamos a diario o como limpiamos nuestra casa deberíamos tener ese hábito.
No es difícil limpiarse energéticamente, pero recuerda que, nuevamente, dependemos de
nuestras propias creencias. Si me siento muy densa, negativa y triste, aunque maneje
muchas técnicas quizá me va a costar limpiar mi energía. Puedes pedir ayuda y es a eso a lo
que se dedican muchísimas de mis alumnas y yo misma. Pero sé consciente de que eres
SOBERANA DE TU ENERGÍA, así, con mayúsculas.

A muy grandes rasgos encontramos dos polos vibracionales, entendiendo la vibración como
la frecuencia que emite un objeto, persona, situación o lugar, ya que en estricto rigor todo
lo manifestado es energía en movimiento y expansión. No existe la energía positiva ni
negativa, existe simplemente la vibración más lenta o densa y la vibración más alta o rápida.

Un edificio, por ejemplo, debe ser denso para resistir el peso de todas las personas que allí
habitan, pero también flexible para no caer en caso de un terremoto. La energía de

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personas, animales y plantas es muy moldeable y está dada por los pensamientos que nos
circundan, nuestras emociones, la interacción con otros seres y el foco que hacemos a cada
momento.

El primer polo y el más elevado es el amor, luego la escala pasa por diversas emociones de
“alta vibración” hasta bajar y llegar al miedo, siendo esta la frecuencia más baja. El miedo
es la fe en el caos, o en el mal. La fe en que algo “malo” va a ocurrir. Por eso es esencial
evitar sentir miedo todo el tiempo o cuando este se presenta observar por qué viene y qué
debo aprender de esa experiencia. No negar nuestras emociones “densas” es clave en
nuestro camino de autoconocimiento. Siente esa emoción y pregúntate ¿qué aspecto de mí
se me está mostrando? ¿qué debo aprender? Las emociones “negativas” debemos vivirlas
también, observarlas y fluir con ellas.

Porque, reitero, el alma vino a este plano material a aprender.

Un hogar donde se discute mucho, donde sus habitantes están tristes o enojados la mayor
parte del tiempo, quizá se sentirá pesado a nivel energético. La energía se mueve en
círculos, pero, como nuestros hogares acá en occidente no son circulares, es importante
poner atención en las esquinas ubicando algún elemento que transmute energía. Las
piedras siempre y cuando estén limpias a nivel energético son una buena opción – puedes
limpiarlas con tu intención más un chorro de agua simplemente o con cualquier método
que te haga sentido-, también las plantas. Hay muchos objetos hoy a los que se les asigna
la cualidad de ser transmutadores energéticos. Elige el que te resuene.

Una persona que está constantemente en “piloto automático”, no observa sus actos ni sus
emociones, y solo vive de la mejor manera que puede, podría decirse que está “dormida” a
nivel espiritual, aunque este término también es tramposo ya que finalmente cada persona
está lo suficientemente despierta de acuerdo con su nivel evolutivo espiritual. Pero
hablamos de “despertar” cuando vamos haciéndonos conscientes de todo lo que te he
explicado en este libro y muchas cosas más allá. En resumen, cuando logras ver más allá del
aquí y ahora.

Cuando siento que alguien “ensució” mi energía puedo limpiarla de la manera que me haga
sentido. Desde Intencionar que el agua de la ducha te limpia hasta darte un baño de tina
con sal de mar por unos minutos, entendiendo que la sal es un potente elemento
transmutador. También si siento que iré con una persona que me desestabiliza a nivel
mental o emocional puedo Intencionar protegerme con alguna oración o visualización.
Recuérdatelo constantemente mientras estés con esa persona. Verás que te sientes
distinta.

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Y nunca olvides que, si alguien logra desestabilizarte mucho, o una situación, o un lugar, tú
diste permiso desde tus creencias para que eso ocurriera.

EJERCICIO SIMPLE PARA PROTEGER TU ENERGÍA A DIARIO

Solo de este tema podría escribir otro libro más, pero te dejaré a continuación la protección
que menos conocimiento requiere y que he visto que es más efectiva independiente de las
creencias que tengas.

Visualiza que estás envuelta en una nube energética, esta se extiende aproximadamente a
20 centímetros en todas direcciones, incluida tu cabeza y debajo de tus pies. A continuación,
haciendo chasquidos con tus dedos visualiza que la sellas, que se blinda y se expande un
poco más, aproximadamente a 90 centímetros en todas direcciones. Visualízala en color
dorado o plateado. Respira largo y profundo durante este proceso y termina, diciendo
“Estoy protegida, protegida, protegida. Solo yo decido qué ingresa a mi energía y ahora elijo
que ingrese solo la luz. Gracias, gracias, gracias”

¿CUÁNTO VALE UNA LIMPIEZA ENERGÉTICA? ¿SE DEBE COBRAR?

Por ley de intercambio, que es una de las tantas leyes del universo, siempre que hacemos
algo deberíamos recibir algo a cambio. Una de las cosas bonitas de esta era es observar que,
más que nunca, se nos demuestra que todo es energía. Lo que vemos, por ejemplo, en las
redes sociales cuando una persona con muchos seguidores recibe algo a cambio de
mencionar otra cuenta. Todo es energía vibrando a distintos niveles y hoy una mención en
redes sociales puede ser equivalente a dinero o a un objeto.

Por ende, sí, se debe cobrar en dinero o especies o no hacerlo si te sientes en deuda con la
persona la que le das ese regalo. Hay personas con quienes estamos siempre “en deuda”
debido a grandes favores o a lo que han hecho por nosotras a lo largo de nuestra vida, como
nuestros padres, por ejemplo.

Pero acá ocurre algo que me apena mucho y fue uno de mis propósitos al fundar
@quierete.cl, hay personas malintencionadas que, al verte desesperada, te dicen que sí,
que estás súper contaminada, usan herramientas como el Tarot para causar miedo y
afianzar lo que dicen y finalmente te ofrecen una lectura energética de precios que superan
con creces el sueldo de un mes. Nunca una tarotista debería trabajar desde ese espacio de
miedo y siempre, todo lo que te digan en una lectura, cotéjalo con tu corazón. Es clave que
quienes nos dedicamos a leer el Tarot siempre le devolvamos el poder al consultante del
proceso co-creativo de su realidad y si hay algo a lo que dedico mucho tiempo en mi

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formación de portadoras de cruz egipcia es precisamente eso, que limpiamos
profundamente la energía con un instrumento sagrado, pero la persona debe empoderarse
de sus creencias para no volver a “contaminarse” de esa manera.

Lamentablemente en este rubro, si así le queremos llamar – como en cualquiera la verdad-


hay personas inescrupulosas que hacen este tipo de acciones y que terminan en que la
gente cree que el Tarot es para testear contaminaciones energéticas o bien un instrumento
de miedo o maldad. No es así. El Tarot es un instrumento sagrado que solamente nos
muestra algo que, a simple vista, no podemos ver, a través de su poderosa simbología.

En resumen, sí, está bien pagar o cobrar por una limpieza energética, pero esos precios no
necesariamente deberían ser tan elevados. Siempre haz lo que te resuene y no le entregues
nunca tu poder a otra persona que puede aprovecharse de tu vulnerabilidad para hacerte
creer cosas que no son.

27
CAPÍTULO 5

LA NATURALEZA Y NOSOTROS, LOS HUMANOS

Los lugares naturales son espacios de alta transmutación energética. Vivir en un entorno
rural, o cerca del mar, o la montaña, va a mejorar nuestra vibración energética. Debido a
las frecuencias que hoy nos atraviesan en la vida urbana, como las redes de Wi-FI, llevamos
una vida un poco menos saludable a nivel energético salvo que hagas un trabajo consciente
en ti. Puedes vibrar muy alto incluso viviendo en la ciudad si eres cuidadosa con tus
pensamientos, procuras comer en consciencia y sobre todo cuidas tus emociones. No es
necesario irse a vivir un lugar natural para vibrar alto ni tampoco el que hagas eso
garantizará que todos tus problemas se acabarán.

La mente en ese sentido es tramposa y nos hace creer que, si hacemos X, Y o Z todo se va a
simplificar. Lo cierto es que el alma vino a aprender, así que permanentemente estaremos
en eso en este plano material, y recobrando nuestro poder personal nos damos cuenta de
que esas lecciones podemos aprenderlas siempre desde el miedo o desde el amor.

Los vínculos emocionales que vamos formando a lo largo de la vida nos hablan muchísimo
de esto y generalmente la relación que tenemos con nuestros padres, hermanos, hijos y
parejas importantes serán donde haya mayor potencial de aprendizaje. Generalmente son
almas que hemos conocido en vidas pasadas y hemos acordado aprender mutuamente en
esta vida, pero nuevamente no olvidar que a la mente también le gusta justificarse y no
porque conozcas a alguien desde una vida pasada significa que vas a aguantar sus abusos.

La naturaleza nos enseña mucho de nuestra energía humana. Si la miramos con atención es
abundancia en sí misma, fluye y se transforma constantemente. La naturaleza no se
pregunta si va a amanecer mañana o si ese tomate que está madurando realmente va a
madurar. La naturaleza simplemente ES. Y ese es el aprendizaje más valioso que deberíamos
absorber de ella. Es simplemente energía en constante expansión. Libre de creencias.

Muchas veces cuando estamos aprendiendo a manifestar surgen comportamientos como


controlar si eso que quiero manifestar en realidad ocurrirá o si realmente hice bien mis
decretos, por ejemplo. La naturaleza nos enseña que todo eso son complicaciones de la

28
mente y que todo ocurre a través nuestro para el mayor aprendizaje y evolución de nuestra
alma. Todo es perfecto tal y como es.

Los animales también tienen alma, aunque son almas un poco más “pequeñas” que el alma
humana, tienen registros akashicos, aura y chakras como nosotros y están acá para
enseñarnos grandes lecciones. Tener un animal junto a ti puede enseñarte mucho y sobre
estos supuestos es que muchas personas – como yo- en este camino espiritual nos volvemos
veganas. No es obligación serlo para llevar una vida consciente – como nada lo es, en
realidad- pero esa es la razón por la que la carne es algo que muchos abandonan una vez
que elevan su nivel de consciencia. Ser consciente de cómo se producen los alimentos que
comemos, la energía que traen desde que son cultivados hasta que los digerimos, también
es consciencia. La comida altamente procesada y con muchos añadidos químicos puede
quitarle mucha energía a tu cuerpo físico para poder ser digerida y personalmente creo que
es una de las mayores trabas a llevar una vida más consciente. Pero nuevamente, equilibrio.
No comas jamás con culpa y siempre escucha a tu cuerpo físico cuando quieras comer algo.

La consciencia de mi cuerpo físico es, después de la abundancia, de las mayores lecciones


que he tenido en esta encarnación y esto ha sido clave para aceptar que tu peso y tu forma
física dependen de tu constitución energética y no solo de cuánto comes. Come en
consciencia plena siempre más allá de lo que la mente o las creencias te dicen.

La creencia dice, por ejemplo, que cerca de las 18 horas en Chile, mi país “se toma onces”,
que es algo así como la hora del té. En Chile solemos comer pan o algo dulce junto a un té
o un café. Si aplicas consciencia plena verás que quizás sí todos los días quieres hacer esa
comida o bien un día sí y otro no. O que incluso tu cuerpo tal vez a esa hora te pida una
ensalada o algo más liviano. Nuevamente y como siempre: consciencia. Atención plena. En
el amor más elevado posible con tu cuerpo físico que es el que te permite esta experiencia
terrenal y también su forma la decodificamos de acuerdo con un sistema de creencias que,
los últimos doscientos años al menos, les ha hecho mucho daño a las mujeres. Estamos en
un momento de cambio de paradigma muy hermoso donde podemos decidir si ser madres
o no, o cómo lucir, o donde se cuestiona incluso si somos realmente mujeres porque
queremos o porque se nos enseñaron ritos asociados a nuestra genitalidad. Nuevamente,
consciencia. Lo que tu corazón te diga estará bien para ti.

Finalizo este capítulo contándote que la energía femenina y masculina está presente en
todo lo que existe y también en cada ser humano. Cuando nos identificamos como hombres
o como mujeres estamos eligiendo una de las dos polaridades conscientemente pero
también al estar en un momento de cambio cada vez veremos más personas que ponen en

29
tela de juicio esta dualidad que a nuestra mente le encanta. Somos un sagrado femenino y
un sagrado femenino en expansión. Somos intuición y acción. Somos el todo.

La naturaleza nos demuestra esto a cada momento. La tierra es ying, femenina, energía
introspectiva que gesta la vegetación. El aire es yang, energía masculina, expansiva, que
mueve la energía del ambiente. El agua es considerada energía ying, femenina,
introspectiva y el fuego, energía masculina, yang, expansiva. Los elementos también están
presentes en nosotras mismas, correspondientemente el agua en nuestras emociones, el
fuego en nuestro ímpetu y deseo, el aire en nuestra mente y pensamientos y la tierra en
nuestro cuerpo físico. Por eso los oros nos hablan de abundancia: sin cuerpo físico no hay
dinero, no hay abundancia, no la percibiríamos. Ama tu cuerpo físico como a nada en este
mundo porque te permite vivir esta experiencia terrenal.

Jamás deberíamos opinar sobre otros cuerpos ni sobre cómo otras personas deciden sobre
él, por la misma ley del libre albedrío. Ser respetuosas con las decisiones que otras personas
toman sobre su apariencia física o sobre su genitalidad o los rituales que acompañan su
socialización es crucial. Enseñar esto a las generaciones que nos precedieron es clave y
también ser compasivas con la idea de que, a la mente de nuestros padres o abuelos, le
cuesta aceptar este momento de enorme cambio de consciencia. Como te puedes dar
cuenta simplemente unas generaciones aprenden de otras y todo está ocurriendo siempre
para el mayor bien de la humanidad.

Todo lo decodificamos a la luz de nuestro sistema de creencias, como expliqué previamente,


y la poca comprensión sobre las orientaciones sexuales diversas o sobre las identidades de
género diversas es simplemente la inflexión que está ocurriendo entre el sistema de
creencias que estamos abandonando y el que estamos adoptando para los próximos dos
mil años sobre la tierra, que será lo que dure esta era de Acuario que recién empezamos
tímidamente a transitar.

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CAPITULO 6

POR QUÉ LAS COSAS A VECES SIMPLEMENTE NO RESULTAN

Quienes hemos decidido asumir una voz para hablar de espiritualidad, a veces hemos vivido
situaciones de gran dolor y desconexión para poder llegar hasta acá. Eso puede y no puede
ocurrir. Puedes adquirir mayor consciencia en un proceso hermoso y libre o en uno sombrío
y triste. Son las elecciones que vamos haciendo.

Pero es importante comprender que a veces las cosas no resultan no porque alguien “nos
haya hecho una magia”, sino porque simplemente eso no era para nosotras en ese
momento. Nuestro Yo Superior, o Ser Superior, es la dimensión más elevada de nuestra
alma y la que se encarga a muy grandes rasgos de que el alma encarnada no se “desvíe” de
lo que debe aprender y lo que debe lograr en esta encarnación. A eso le llamamos el
propósito de vida, o el nodo norte o real de la carta natal. Acá nuevamente tener cuidado
porque la mente dice “Entonces el propósito hay que cumplirlo rápidamente” y si tú ya
conoces el tuyo, ya sea por una revelación personal o por alguna lectura, quizá te habrás
dado cuenta de lo desafiante que puede ser.

Así que no es una carrera ni un checklist. Es un aprendizaje grande de tu alma que puede ir
subdividiéndose en propósitos más pequeños y no siempre tienes que dedicarte a ello en
términos laborales.

Y sí, adivinaste, tampoco pasa nada malo si no lo cumples. Para explicarlo en simple, el alma
pacta un gran aprendizaje para una encarnación determinada antes de llegar a este plano
material, el cual puede ir presentándose de diversas maneras a lo largo de la vida. Si no lo
cumples simplemente el alma evoluciona un poco menos, pero siempre puede volver a
encarnar para ello. El propósito no es nunca algo simple y tener plena consciencia de él y
de que quizá no estará sintonizado con lo que tu ego quiere es una clave de consciencia.

Si quieres que otra persona te ayude a descubrirlo, la astrología, la numerología y los


Registros Akashicos te pueden ayudar. Pero tú también puedes ir descubriéndolo poco a
poco conociéndote, meditando y aplicando consciencia plena. Algunas preguntas que
ayudan son las siguientes:

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- ¿Qué disfruto mucho hacer?
- ¿Cuáles son las instancias más desafiantes para mí?
- ¿Qué actividades me hacen sentir plena?
- ¿Dónde me siento un aporte para los demás?
- ¿Qué actividades me permiten desplegar mi máximo potencial?

Te recomiendo que tengas una lectura solo cuando te sientas preparada para absorber la
información desapegada del ego, ya que muchas veces las personas se obsesionan con
saber su propósito y luego dicen que “no les gusta” o peor aún, llegan conmigo a una lectura
esperando que yo “confirme” una lectura que hizo otra persona.

El propósito del alma es sagrado y nadie más que tú puede saber si lo que se te dice en una
lectura es cierto o no. Procura meditarlo en la más alta consciencia entendiendo que tu
autoconocimiento puede condicionar la forma en la cual recibas esta información.

A los 24 años yo estaba muy endeudada y pasándolo pésimo no solo económicamente sino
a todo nivel en mi vida. Una persona que leyó mi carta natal me dijo que yo iba a enseñarle
a muchas personas sobre el dinero, la abundancia y el proceso de creación de la realidad a
partir del amor propio. Yo en ese entonces no tenía el nivel de autoconocimiento que tengo
hoy y mi ego estaba muy apegado a ser académica y a la literatura. Me sentí estafada mucho
tiempo hasta que los últimos tres años todo ha cobrado muchísimo más sentido, porque
estoy segura de que mi mensaje hoy no tendría la potencia que tiene sin que yo hubiera
pasado por esas experiencias tan extremas con respecto al uso del dinero y a la
correspondencia de este con nuestra autovaloración.

Así que, con el tema del propósito, mucha, mucha consciencia.

Y a veces las cosas simplemente no resultan porque no están alineadas con nuestro
propósito en ese momento en específico, lo que no significa que estarán así toda la vida.
Todo está constantemente transformándose y recreándose, por lo que no aferrarnos nunca
a unas circunstancias específicas es clave para abrir los brazos a todo lo que el Universo nos
tiene preparado.

¿Te imaginas lo que hubiera ocurrido si me hubiera quedado aferrada a mi identidad de


profesora de literatura?

Nada malo, por cierto. Pero mi mensaje hoy como lo conocemos no existiría. Y por lo mismo,
no sé dónde esté mañana, pero siempre le pido a mis maestros, guías y seres queridos, que
me muestren el camino de la manera más clara posible y que me permitan abrirme a lo que
ellos tengan para mí en esta encarnación, aunque a mí no me guste de buenas a primeras
o no lo entienda.

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No porque no entiendas algo significa que no está bien para ti. Y tú puedes pedirles lo
mismo a tus guías todos los días, en la forma y tiempo que te resuene. No necesitas rituales
especiales. Toda esa magia que buscas fuera, ya está viva dentro de ti.

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CAPITULO 7

SIEMPRE SOMOS SOBERANAS DE NUESTRA ENERGÍA, PORQUE SOMOS ENERGÍA

Todo lo que está en este plano material, desde la naturaleza hasta las cosas creadas por los
humanos, es energía. También lo son nuestras palabras, emociones y pensamientos. Por
ende, ser conscientes en todo momento es fundamental. La meditación ayuda mucho a eso
y sobre todo a observar la realidad más que juzgarla. Siempre, en cualquier situación,
podemos escoger un rol más activo o pasivo, y el que nos dará más poder será el rol activo,
aunque a veces simplemente no tenemos que hacer nada.

Por ejemplo, supongamos que quieres atraer a tu vida un empleo, has hecho todo lo
posible, has decretado, hecho rituales, intencionado a diario, y nada. Cuando algo que
deseas con todo tu corazón no ocurre es un indicio de que debes soltar. Fluir. Ser. A veces
la mente se sitúa en un espacio de control de la realidad y, como te expliqué previamente,
eso tampoco facilita el proceso. La energía simplemente se expande, se contrae y fluye. Sé
lo que quieres atraer. Sé eso con tus pensamientos, con tus emociones y tus acciones. Lo
demás vendrá siempre por añadidura.

Nunca nadie podrá perjudicarte salvo que tú, con tus creencias, le hayas dado permiso.
Supongamos que tus creencias te dicen que, de acuerdo con cómo interpretas a X persona,
esta es malintencionada. Recuerda que tu mente opera como un algoritmo y si haces foco
en eso, verás su mala intención en muchas cosas. Ahí le diste ya mucho poder. Y si quizás
esa persona efectivamente es mal intencionada, y sabe manipular energías densas, sí podría
hacer algo para perjudicarte. Y ese algo eventualmente podría alcanzarte porque tú, con
tus creencias, abriste ese cordón energético.

Cuando alguien no te agrade simplemente pide a tus guías y maestros que se te muestre la
realidad, no la distorsión. Pide que se te muestre qué tienes que aprender de esa persona
o de ese vínculo o situación. Pero renuncia al drama y a la victimización, que es el
mecanismo que se activa en el ejemplo anterior. Finalmente, la mente actúa así para
protegerte, pero eso solo atraerá más drama y más victimización. Quizás estés en esa
frecuencia en este momento y estés sintiéndote culpable por eso, pero créeme que hiciste
lo que mejor podías hacer. Nada más. Lo hermoso de la vida acá en la tierra es que todos
los días podemos escoger tener nuevas creencias y salir de cualquier situación que nosotras

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mismas hayamos creado. Asimismo, si conoces a alguien que está pasando por procesos de
mucho drama, apego y victimización, sé compasiva y evalúa por qué la vida te pone eso
delante, a veces se nos muestran nuestros puntos ciegos o nuestras sombras, a veces
simplemente nos toca observar, a veces, incluso, quizá nos toca aceptar. Pero tampoco es
tu responsabilidad sacar del drama a todas las personas que conoces, que es lo que uno
suele hacer cuando comienza un proceso de mayor consciencia. Le predicamos a todas lo
que hemos aprendido y queremos sanarlas a todas, pero eso no es nuestra responsabilidad.
Comparte lo que has aprendido con quienes resuenen contigo y nunca obligues a nadie a
que resuene o haga algo que no quiere. Cada uno tiene su tiempo y tú el tuyo. Intentar
sanarlos o salvarlos a todos solo te quitará energía. Ocúpate de tu transformación, y verás
que todo se transformará en tu presencia.

35
CAPITULO 8

CÓDIGOS ENERGÉTICOS

A través de mis redes sociales y mis propias alumnas me preguntan mucho que cuál símbolo
es mejor, o cuál amuleto, o cuál gema, o si realmente sirve la numerología, o los códigos
sagrados, y así largamente.

La respuesta es: lo que a ti te resuene.

Los amuletos, símbolos, códigos, enfoques, son simplemente formas de decodificar la


realidad, lo mismo ocurre con el Tarot y la astrología. Nos permiten darle nombre a lo que
ya intuimos o bien comprender de mejor manera la realidad. La humanidad ha hecho esto
a lo largo de los siglos desde siempre y por eso tenemos símbolos y amuletos desde que
existe el mundo y asimismo seguirán existiendo. Los seres humanos a veces necesitamos
recordar a través de ritos lo que somos en el mito, entendiendo el rito como lo que ocurre
en la realidad concreta y manifiesta, y el mito como la idea o creencia que tenemos con
respecto a algo. El concepto de mito nos remite a algo sagrado para quien lo cree y no habla
de algo falso o incomprobable como muchos creen.

Por ejemplo, el rito de rezar el “Ángel de la guarda” antes de dormir, nos conecta con el
mito de que un ser de luz, en otro plano dimensional, nos cuida, y que es necesario recordar
esto justo antes de dormir. Todo rito debe tener un mito que lo respalde y es esencial que
ese mito a tu sistema de creencias le parezca sagrado y posible. Por eso cuando realizamos
rituales cuyo mito desconocemos no siempre “funcionan” y a veces incluso un rito creado
por nosotras mismas puede tener incluso más peso energético que el que vimos en
televisión o el que escuchamos al astrólogo de moda.

La cruz egipcia, por ejemplo, no es otra cosa que la plantilla energética humana, la conexión
de lo femenino y masculino, y la expansión de nuestro cuerpo físico considerando nuestros
brazos como extensión electromagnética del corazón. Nos conecta con la idea de estar vivas
en este plano material y precisamente la palabra egipcia Ankh significa vida. Y vida implica
estar en contacto con la energía más pura y armoniosa que sea posible para nosotras, y es
por eso por lo que este instrumento sagrado permite hacer limpiezas energéticas, o
protegernos, por ejemplo. Esto no significa que esta sea la única forma de hacer estos
procedimientos, es una de miles. Asimismo, ningún enfoque energético ni metafísico es

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absoluto y estos solo adquieren peso en la medida que ese rito tenga correspondencia con
un mito válido para nuestro sistema de creencias. Por eso hay quienes resuenan con el Reiki,
lo practican, y tienen excelentes resultados, y así con cada enfoque o técnica metafísica. Lo
más importante es que a ti te haga absoluto sentido y también a quienes te pidan ayuda.

Los egipcios, por ejemplo, vetaron al mal, encarnado por el dios Seth, durante siglos. Su
culto se prohibió y se consideraba el análogo del demonio en nuestra cultura. Esto porque
en el mito egipcio Seth encarna la venganza y la destrucción contra su hermano Osiris, a
quien Isis, la otra hermana, logra revivir con la ayuda del Ankh.

En la Edad Media, por ejemplo, la iglesia católica habría considerado hereje todo lo que está
en estas páginas y este sería un libro prohibido. Por eso es importante comprender que
todo enfoque totalitario de la realidad es riesgoso, nos quita poder y nos divide. Hoy más
que nunca, en las puertas de esta era de Acuario a la que le quedan 2000 años más,
debemos recordar que somos maestras de nosotras mismas, que tenemos un rol en la
sociedad y que nada es individual sino siempre social y colectivo. La polera que estás usando
ahora, por ejemplo, es posible que haya sido fabricada en profunda esclavitud al otro lado
del mundo, y eso también es consciencia. A eso le llamamos el proceso acuariano de
consciencia o la nueva era, como se le viene llamando hace aproximadamente cien años en
diversos textos y enseñanzas metafísicas, a este momento donde cada ser humano está
llamado a ser libre y soberano, y a ayudar al colectivo encontrando su rol único que solo
adquiere sentido en la tribu. A eso, hoy, le llamamos despertar. Y para que eso ocurra es
que, precisamente en estos años 2020-2021, está pasando todo lo que pasa en el mundo
con la pandemia del Covid-19.

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CAPITULO 9

HACIA DONDE VA LA EVOLUCIÓN HUMANA Y EL “DESPERTAR” ESPIRITUAL

Tal como acabo de señalar en el capítulo anterior, estamos asistiendo a momentos de gran
cambio y evolución. Son tiempos desafiantes donde deberemos comenzar a usar mucho
nuestra intuición y distinguir los pensamientos propios de los de la mente colectiva, para
poder vivir en la más alta consciencia. Por eso muchas personas en todo el mundo se están
interesando cada vez más por la espiritualidad y se ha vuelto muy común tener una opinión
paralela a la de las iglesias o religiones con respecto a la trascendencia humana. En esta era
de Acuario quizás lo más desafiante sea precisamente dejar de delegar en guías terrenales,
como yo, el qué pensar sobre una situación, o qué hacer. Tendremos 2000 años para eso.

El rol de quienes hemos tomado una cierta voz de liderazgo es solamente despertar tu
curiosidad y el inicio de este camino, que en esencia solo puede ser recorrido por cada
persona siempre y cuando así lo decida. Nunca se predica la evolución ni se obliga. Así nacen
las sectas y los abusos al interior de organizaciones que poco a poco van coartando tu forma
de pensar y de ser. Debemos ser cuidadosas precisamente con la idea de salir de un
paradigma para justamente entrar en otro. Y es posible que con este libro te esté ocurriendo
eso, pero quiero que sepas que mi intención ha sido otra: ampliar tu visión sobre la realidad
que te rodea. Y es posible que estés en este preciso instante discrepando de muchos
planteamientos que haya hecho a lo largo de estas páginas y está perfecto. O que estés
“casándote” con muchas ideas que te hayan surgido. Ten cuidado siempre. La realidad no
es absoluta ni tiene una única manera de ser decodificada ya que el foco de la mente
humana es relativamente limitado, por ende, por ejemplo, llegar a tener cero creencias
limitantes es casi imposible. Lo que busqué con este libro fue, eso sí, que seas consciente
de que tu sistema de creencias condiciona tu realidad y de que, así como escogiste unas
creencias, siempre puedes cambiarlas y escoger otras.

La mente colectiva se nos presenta de muchas maneras diferentes y una de ellas es


poniendo pensamientos limitantes o que nos sumen en la frecuencia del miedo que no son
nuestros, lo que hoy es tremendamente fácil debido al auge de las redes sociales y los
medios de comunicación. La respuesta siempre está en tu corazón y todo lo que leas,
escuches o absorbas siempre pásalo por allí. Toma lo que te haga sentido y deja ir lo que

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no. No te quedes en el drama de que otra persona cambie sus creencias. Recuerda siempre:
sé lo que deseas en tu vida, y todo se transformará en tu presencia.

Mis alumnas me preguntan mucho si en algún momento esa mente colectiva se apaga, o se
apagará, o si puedo librarme de ella. La respuesta es sí y no. Esa consciencia colectiva es
sostenida por las personas cuando permanecen despiertas – y por eso entre más personas
en alta consciencia, más luz se seguirá expandiendo, ya que todos somos uno como nos
recuerda la hermosa geometría sagrada de la flor de la vida-. Por este motivo, a veces
despertamos cerca de las 3 am o de madrugada, porque en algunas ciudades es la hora a la
que la consciencia o mente colectiva duerme y, si nuestra mente está muy enganchada a
ella, deja de recibir información y despiertas. Este horario varía según las costumbres de
cada ciudad, y es posible que en ciudades cono New York, que tienen mucha actividad toda
la noche, quizá no duermas tranquila o sueñes mucho, porque hay muchísima información
en esa mente colectiva sostenida por todas las personas que habitan en Manhattan, por
ejemplo.

No es la hora del demonio ni es signo de que nadie está haciendo nada en tu contra. Procura
desconectar conscientemente de ella antes de dormir apagando una media hora antes tu
celular o televisor, y entrar en un espacio de quietud justo antes de dormir, lo mismo al
despertar. Ambos momentos son muy importantes para el funcionamiento de tu mente
consciente y subconsciente, las cuales sí, moldearán tu realidad a través de tus creencias.

Tanto al dormir como al despertar procura entrar en un espacio sagrado con música,
mantras, afirmaciones, agradecimientos, aromas, o cualquier cosa que le indique a tu
mente que estás a salvo, que estás bien, que eres luz y amor.

Esto también te irá ayudando a unir tu intuición a la mente y a tener un mayor


discernimiento de la realidad, el que te pondrá en el lugar que te corresponde por derecho
divino en este momento de gran despertar colectivo.

Deseo de todo corazón haber sido un aporte con estas páginas a que puedas vivir una vida
más plena y feliz, y con mayor comprensión de lo que ocurre a tu alrededor, entendiendo
que ningún ser humano nunca tendrá todas las respuestas.

Gracias por leer hasta acá. Y que sea un despertar hermoso, pleno de evolución y
consciencia

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CAPÍTULO 10

EPÍLOGO

Quizás llegas a esta página con más preguntas que respuestas, y está perfecto que así sea.

Quizás te sientes confundida, y quiero que sepas que también está bien.

Todo está bien y está ocurriendo de la mejor y más elevada manera para la evolución de tu
alma.

Pero si pese a todo ello quieres hacerme una pregunta, aporte o comentario, quiero que
sepas que puedes escribirme cuando quieras a hola@quierete.cl

Estaré encantada de leerte y de ayudar en lo que pueda.

Agradezco a mis maestros, guías y seres queridos, de otras dimensiones y de esta, por
facilitar el proceso de canalización de todo el saber que comparto en @quierete.cl

Gracias especiales a mi maestra Niria que me ayudó hace algunos años a ponerle nombre a
muchas cosas que intuía y sobre todo, despertó mi interés por estudiar metafísica.

Gracias especiales también a cada persona importante en mi vida, como mi pareja, Patricio,
amigas y familia, que a través del vínculo que tienen conmigo me han permitido
comprender muchísimo más la realidad que me circunda.

Gracias especiales a mis más de 8000 alumnas a la fecha, que me han permitido canalizar y
sobre todo aprender muchísimo a través del proceso de enseñanza. Ustedes creen que yo
les enseño, pero en realidad yo aprendo tantísimo más de cada una.

Gracias, finalmente, a la hermosa ciudad de Madrid que me sostiene mientras termino estas
páginas, por su energía expansiva y por permitirme conocer el perdón sobre todo al pueblo
español y la historia de dolor que nos un, ocurrida hace 500 años. La historia nos enseña
permanentemente que siempre estamos a tiempo de una mayor comprensión de todo lo
que acontece y de la responsabilidad que le cabe a cada una de nosotras en el proceso
cocreativo de la realidad.

Tamara Muñoz Sobarzo

Octubre 2021

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