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Thunupa y el mito del

nacimiento del héroe


Por Jorge Alurralde Palma

Has humanas a modo de pies con mismo Kon-ticci-wiracocha, es


sandalias, impresas en la mis- hermano de éste, lo que ayuda-
ma peña. La del pie izquierdo ría a esclarecer el enigma de
antecede como de persona que su origen. Las dificultades que
hacía fuerza. La tradición de tiene que sobrellevar, asimis-
los naturales es, que desde aque- mo, no aparecen durante la ni-
lla piedra predicaba el Sto. ñez o la infancia del héroe, ca-
Apóstol Tomás, a quien se atri- racterística que es universal en
buyen estas huellas y que al los mitos heroicos como lo ha
oírle se enchían de gente los observado Otto RanK; por otra
campos. & la provincia de parte, los peligros que corre y
Santa Cruz de la Sierra que finalmente le llevan a la muer-
confina con las del Paraguay te, su viaje sobre las aguas
escribe Zeballos (7) que se vie- del Titicaca maniatado a una
ron en una piedra más huellas embarcación o tronco de árbol,
como una cruz y que esta piedra son aventuras propias de la ni-
por cierta ocasión que refieren ñez de los héroes; faltaría por
la trajeron los españoles a la consiguiente el rescate o la re-
ciudad y la pusieron en la Igle- surrección del mismo, la ven-
sia Mayor con mucha venera- ganza sobre los causantes de su
ción, dando a entender cosa sa- infortunio o, el reconocimiento
grada" (8). de sus méritos y el goce del ran-
go y honores que le correspon-
No faltaron sin embargo, otros den. Por lo mismo, necesaria-
cronistas que rectificando tales mente tenemos que preguntar-
apreciaciones volvieron a tratar nos cuáles pudieron ser las cau-
la misma leyenda; es el caso sas que coadyuvaron para la
de Fray Antonio de la Calan- formación de este mito. Una ca-
cha quien "se refería a una racterística que resalta parece
tradición con relación a un dis- ser su disconformidad con el
cípulo de Tonopa, llamado Taa- sistema social o familiar de
pac, diciendo que los indios de entonces. Thunupa sería, en el
las orillas del lago lo habían meior de los casos, un típico
muerto, colocado su cuerpo so- "héroe nacional", vinculado con
bre una balsa, y que se habían la evolución del otrora vasto
botado ese embarcación en la imperio Kolla o, un héroe de la
gran laguna citada; y luego, resistencia aymara contra la
empujada por las olas y los hegemonía del Incario, o mejor
vientos... navegó con gran ve- todavía, la lucha en el terreno
locidad, causando la admira- social del hombre-masa con el
ción de los mismos que le ha- hombre de la aristocracia", pa-
bían muerto, habiendo aumen- gado de su misión divina y es-
tado su terror por el hecho de píritu de previsión, activo y
que el lago, que ahora tiene calcu^dor" (10).
muy poca corriente, no tuviera En otro sentido, como porta-
entonces ninguna... dor de una vara y luego de una
cruz, mostraría al vivo, los con-
Cuando la balsa con su tesoro flictos de índole ético-social, en
alcanzó la playa de Cachamar- atención a los esfuerzos des-
ca, donde está ahora el Desa- plegados por el héroe para im-
guadero (esta tradición está plantar entre los nativos, nor-
bien establecida entre los in- mas morales de orden frente al
dios), esta misma balsa, atra- caos y a la rebeldía del espí-
vesando lá tierra abrió un ca- ritu del mal, encarnado en Ma-
nal, que antes no existía, pero kuri: igualmente, mostraría con-
que desde entonces no ha dejado flictos de índole familiar y las
de correr. Sobre sus aguas fue rivalidades subsistentes entre
el cuerpo sagrado hasta el pue- padres e hijos por la excesiva
blo de Aullagas" (9). autoridad de los primeros o la
evidente pasividad de los segun-
Resulta valioso observar en dos, dentro de los límites cerra-
todas las citas que hemos con- dos de la comunidad primitiva,
trapuesto más arriba, que el sin descontar los problemas de
héroe aparece a una edad ma- carácter religioso debido a la
dura y ka. pocos datns que de- introducción- de un nuevo culto
lineado, señalando en él este no- de tino agrario, como sostiene
table camino. Después en el li- el estudioso argentino Samuel
bro que sacó, a luz (6) expli- A. Lafone.
có mejor esta tradición. Las
huellas impresas dice que están Esto último podemos sinteti-
en una gran peña al fin de la zar diciendo que, el héroe tie-
playa, frontero de la Barra de ne que vencer la creciente hos-
S. Vicente, menos de un cuar- tilidad social, que en el mito se
to del pueblo. El camino afirma simboliza por el abandono en el
que le vio, y, que es de ocho agua, como la resistencia a que
palmos de ancho, cubierto de el héroe nazca. El abandono al
yerba muy menuda, siendo la agua según Otto Rank, no es ni
de los lados de más de media más ni menos, que la expresión
vara. En la ciudad de Asump- simbólica del nacimiento. Los hi-
ción como escribe el mismo p. jos nacen del "agua". La ces-
Antonio Ruíz está una peña en ta, arquilla o receptáculo (en
cuya planicie se ven dos hue- este caso la embarcación), sig-
serían la Cruz de Carabuco y nifican, simplemente, el vientre,
unas huellas de pies humanos de modo que el abandono repre-
que señalarían el itinerario del senta directamente el proceso
apóstol, noticia que recogemos del nacimiento, si bien está re-
del erudito Antonio de León Pi- presentado por su opuesto". Ten-
nelo. Dice así: "El p. Manuel gamos en cuenta que en los mi-
Nobrega afirma haber visto en tos complementarios de Kon o
el Brasil impresas en una pie- de Wiracocha, la relación em-
dra unas huellas de me huma- pieza con inundaciones y en es-
no, como lo refieren Thomás Bo- tos se hace alusión constante a
nio Eugubino, Fr. Tomás de Ma- las aguas, sean estas marinas,
huenda, Fr. Juan de la Puen- pluviales o lacustres.
te, el p. Pedro de Ribadeneyra,
y Fr. Gregorio García. Estas El mito del diluvio, asimis-
huellas es tradición haber de- mo, está incorporado a estas le-
jado estampadas el apóstol Sto. yendas y a otras de origen su-
Tomás, y que están en aquella damericano. El símbolo del
provincia, donde hasta hoy es agua, "esas oscuras aguas de la
conocida un camino que va des- muerte", son en Thunupa "a-
de el pueblo de San Vicente guas de la vida" (11); y de esas
en 24 g. Australes de la costa aguas surgen los más importan-
hasta la ciuda dde Asumpción tes dioses de la mitología pre-
cabeza del Paraguay, que serán colombina. Aquí cobra signifi-
por línea recta las de esta tra- cado otro símbolo, el de la
vesía 200 leguas. Luego dicen "madre", el mar o "cochama-
que pasa desde allí a la lagu- ma", que le abrirá sus brazos
na de Paitití. que serán otras en postrer homenaje. La em-
tantas, la cual se llama así co- barcación mortuoria rudimenta-
rrompida la voz de Pay Tome, ria o callapo, hecha de troncos
en que quedó el nombre del de árboles o de tallos de toto-
Apóstol santo. Prosigúese aquel ra, tiene igualmente significa-
camino por otras 200 leguas has- ción femenina, puesto que es
ta llegar al pueblo de Carabuco un "símbolo del cuerpo mater-
en el Perú, donde se venera no" (12) de esta manera, Thunu-
una milagrosa Cruz que algu- pa encuentra cierto paralelis-
nos afirman ser del tiempo de mo con otros héroes solares uni-
S. Tomás, y que la dejó allí. versales como Ogiges, Osiris,
Este camino es opinan que nun- Jonás, etc., que realizan tam-
ca se ha cubierto de hierba, y bién viajes nocturnos por mar
que así está muy patente, como siguiendo el clásico derrotero es-
lo escribe el p. Eusebio (5), tudiado por Frobenius, aunque
con la noticia que' ahí en la nos inclinamos a considerarlo
provincia de Toyaobe de haber más bien un genuino héroe lu-
pasado por ella un varón santo nar, puesto que está asociado
que atravesó el Perú y volvió con símbolos como el agua y el '
al Paraguay, de cuyo origen aire, pero esto será tratado en"
quedó señalado aquel camino. próximo artículo.
El p. Antonio Ruíz de Montoya
religioso de la Compañía de

T
Jesús que con claridad y espí- NOTAS
aumaturgo, caudillo o per- anduvo con anterioridad a la otros agentes físicos, desbordó ki, don Juan de Santa Cruz Pa- tando donde un kuraka llamado sos que a ellos les parecía el
sonaje legendario, Thunu- ritu asistió muchos años a la con-
conquista por tierras america- vaciándose parcialmente. Esta chacuti, según Tschudi, no es Apo Tampu, maldijo a la ciu- día de hoy como estos brevia- versión de las infinitas naciones (1) Dr. J.J. Tschudi "Historia
pa marca el nacimiento nas predicando el Evangelio. suposición no debe descartarse más que una variación de la le- dad de Yamquisupa, capital de rios que los sacerdotes traían en del Perú antiguo' Pág. 156
del héroe en la mitología que confinan con el Paraguay,
El enigmático Titicaca, en cu- por lo mismo que en la "cosmo- yenda de Ticci-wiraccocha, "Re- la provincia de Kollasuyo, pro- las manos"; vivendo en esta corte truxo un (2) Id. Pág. 157.
andina. Reúne en su me- yas aguas no se posaban las gonía de los indios peruanos (y fiere que llegó al Tawantinsuyo fetizando que sería destruida por (3) Ibid Pág. 163
teárica existencia aquellas virtu- mapa de todas ellas bien de-
aves, escenario grandioso de los altoperuanos) no se encuentra un hombre barbudo, de talla el agua a causa de que allí se Han sido precisamente estos el alto dé kátsapucara, se sacri- (4) Ibid Pág. 164.
des extraordinarias propias de poderes sobrenaturales del hé- mención alguna de los autores mediana, luenga cabellera, de hizo burla de él y se le insultó. detalles los que han colaborado (5) A. De León Pinelo "El pa-
los semidioses y el halo que ro- ficaba ante el ídolo de mujer
roe andino, agítanse dóciles y el o cronistas acerca de los terre- edad madura y pelo canoso; era Después se irritó al ver que en para que escritores poco escru- y destruyó el sitio por el fuego; raíso en el Nuevo Mundo"
dea su nombre lo perfila nítida- río Desaguadero reconócele su motos, ni de los volcanes, (ya delgado de contestara y neva- tsamarkaka hasta el mar, don- pulosos hayan metamorfoseado Pág. 218.
mente a través de los tiempos. luego llegó adonde los kinama-
origen cuando las tierras ribe- sean de la lava o fuego), pero si ba un bastón de peregrino en de desapareció (3). la figura del taapac —hijo del res, en ocasión que celebraban
Vinculado a los dioses tutela- reñas se separan respetuosas se los menciona en las leyendas la mano; instruyó a los hom- creador— "agregando cosas que (6) Id. Pág. 218.
res del Kollao, se alza a la par con grandes fiestas un matri-
para dar paso al callapo en el de varios otros pueblos indios bres con mucho cariño, llamán- En esta relación como en otras no constaban en la leyenda pri- monio, v como por esta causa (7) Ibid Pág. 218.
de Ticci-wiracocha, el creador, que viajan los despojos del már- americanos como los araucanos dolos sus hijos; al recorrer el Thunupa muéstrase como perso- mitiva; por ejemplo aquello de (8) Ibid Pág. 218.
• se confunde en un extraño pa- no acudieron a oír sus seremo-
tir asesinado, hacia el sumide- y yurakares en el sur, y los país verificó varios milagros, naje exótico, y algunos cronis- llevar un libro en la mano; en n°s, transformó a los hombres
recido con el hermano de éste, ro insaciable del ávido Poopó. mayas y mexicanos en el nor- sanando a los enfermos, con tas inclusive, precisaron deta- una palabra no se puede negar (9) Fray Antonio de la Calan-
Kan el destructor, que también rv~Hroc. one h'"o lo mismo
te" (1), por esto "hay que ex- sólo tocarlos y hablaba todos lles sobre su indumentaria, co- que hubo marcado empeño en cha "Crónica moralizada".
•urge de las aguas para retor- Este mito, quizá el más anti- trañarse mucho de que en ¡os los idiomas. Se dio el nombre demo Betanzos que aseguraba acreditar la leyenda de Santo (10) Louis Bfudin "La vida cuo-
tar a la kochamama después guo de que se tenga noticia, re- mitos religiosos de los perua- Tonapa y también de Torapaka "llevaba una vestidura blanca Tomás, que surgió en diversas Tiawanaco. que habrían he?ho tidiana en el tiempo de los
de deslumhrar con prodigiosos laciona a Thunupa con la fun- nos no se haga mención de las wirankonsapatsayatsixkatsan, o- que le daba hasta los pies y formas en todo Sud América" exactamente lo mismo; y que últimos Incas" Pág. 78.
milagros. Luego, este "fantas- ción de Thiawanaco y data in- erupciones de fuego subterrá- tros lo llamaban pah' tsakan, o que esta vestidura traía ceñi- (4). después de estas y otras co- (11) C. G. Jung "Transformacio-
ma Kholla" al decir de Garcila- discutiblemente de aquel período neo ni de los terremotos siendo finalmente kumakuykamayox, el da; y que traía el cabello corto sas dio término a sus corre- nes y símbolos de la libi-
so —inquieta ya no sólo a los mítico anterior a la conquista así que estos fenómenos natura- siervo y el predicador. y una corona hecha en la ca- rías llevando en una mano una do".
naturales de la hoya lacustre si- quechua, cuando la tierra se les, se producen en Los Andes beza a manera de sacerdote, y Vestigios de la predicación de vara y en la otra un libro (sic)
no también a los crédulos cro- con tanta frecuencia como vio-
vio sacudida por violentos te- En seguida refiere una larga que andaba destocado, y que San Bartolomé en las Indias y siguiendo el curso del río (12) Otto Rank "El Mito del na-
nistas españoles, para quienes rremotos, o el lago Titicaca, a lencia" (2). La descripción que historia de este Tonopa o Tora- traía en las manos ciertas co- nemos de su geneaología nos cimiento del héroe".
es él mismo San Bartolomé que causa de lluvias torrenciales u sobre Thunupa nos da el Yam- Inclinan a pensar que si no es el
paka, de la que resulta que es-

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