La integridad, palabra que deriva del latín integer que significa “entero”.

Entereza

Fortaleza para mantener las propias ideas, juicios o decisiones.

Se considera íntegro a un individuo cuando es honesto, tiene firmeza en sus acciones y actúa de
manera correcta.

La integridad es algo que se está perdiendo, y los esfuerzos de vivir una vida integra se están
disolviendo.

Lo opuesto a la integridad es corrupción.

La corrupción es algo que deriva del pecado, de contaminación.

Dn 6:1-4: “Pareció bien a Darío constituir sobre el reino ciento veinte sátrapas (gobernadores de
provincias), que gobernasen en todo el reino. Y sobre ellos tres gobernadores, de los cuales Daniel
era uno, a quienes estos sátrapas diesen cuenta, para que el rey no fuese perjudicado. Pero Daniel
mismo era superior a estos sátrapas y gobernadores, porque había en él un espíritu superior; y el
rey pensó en ponerlo sobre todo el reino. Entonces los gobernadores y sátrapas buscaban ocasión
para acusar a Daniel en lo relacionado al reino; mas no podían hallar ocasión alguna o falta,
porque él era fiel, y ningún vicio ni falta fue hallado en él.”

Daniel se calculaba que tenía alrededor de 80 años en ese tiempo, pero podemos ver según el
capítulo 1 de este libro que siempre busco mantenerse íntegro delante de Dios

Así como los sátrapas anda el león rugiente buscando devorarnos, por eso tenemos que ser
sobrios y velar osea ser prudentes y mantenernos despiertos (1P 5:8)

Cuando entra el pecado en el hombre, empieza a corromper su mente y su corazón, empieza a

apartarlo de la luz y claridad, por eso mantenemos los pecados ocultos (no permitir que nos vean
el celular), pero así como Dios los conoce a través de su omnipresencia, nuestro enemigo el diablo
tiene una red de angeles caídos que trabajan para él y que nos saben cada paso en falso que
damos.

Por eso la Biblia dice

Stg 5:16: “Confesaos vuestras ofensas (pecado) unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis
sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.”
En un mundo corrupto, lleno de mentiras, miedos a las consecuencias, en una sociedad con
abundancia codicia y deseos engañosos Dios nos dice que tenemos que ser luz, diferentes, que
tenemos que mostrar el Reino de los cielos acá en la tierra, que si alguien viene a buscar algo
nuestro se lleve la misma decepción que los sátrapas. (Fotos de desnudos)

No podemos considerarnos cristianos si no deseados tratar de vivir una vida en santidad. Estamos
llamados a no mirar la santidad de los demás sino observar nuestra propia vida delante de Dios.