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fromthe South Desde el Sur -wecemet continue‘ toefergrantedthat “No podemos seguir dando por ten. ‘ avsmnecntcrongeocneton Por sentado que el arte, ta cenciay trie en te gat Unio once soit tenica nos han de vende fuera Hast el gran Unamuno legs ‘ove inveten els (let THEM invent og decir: iQue i : ugh fm sre tle wat oper state "Que inventen ellost, aunque estoy seguro de que ésa fue tr he woul hae been wing to rectiy.1_ UNA afirmacién polémica que estara dispuesto a rectifiar Yo le woul have replied Excuse me, Don Miguel, but theones who invent arte ones whorl. ti otmoralyfetto diegardany fein te". ellos mandan ellos. No es moralmente lito hurtarnos a la vida en ‘hubiese contestado: perdone usted, don Miguel, pero si inventan ningun campo", abe Dite Eladio Dieste “Form is a language, and that language “La forma es un lenguaje, y ese lenguaje debe sernos inteligi- shoul eligbe tus we yeaa fr inteli- lene and therefore for expression, Prt of ‘modem ansityis due tothe lack oflegitimate sién, Parte del desasosiego modemo se debe a la ausencia de expressiveness becune we are surrounded by secretive things that deny us the communion Hey eng sae netanatcopecr i's hermetismo que es la negacién de lo que supondria la fraterni- wotkofmanin space”? These words of Elaaio Dieste, a man of few — dad que damos por supuesta y que naturalmente deberia leerse word ee supported by the statement of ath foundinalis wor ondthat perfect coherence ‘sven thought and acon would be enough Estas palabras de Eladio Dieste -hombre avaro de palabras- tran him aplecefhonourin contemporary ‘American architecture Mead tots his bold formal independence his spacial and construe 5 ij *rfecta coherencia entre pensamiento y accién bastaria para tive mastery, and his technical thoroughness, ope ee sf we will have to conclude that besides being otorgarle un lugar de excepcién en el horizonte de la arquitectura ‘exceptional he hos hardly any equa which in i te : ‘itself makes him almost anachronistic. Howelse a™mericana contempordnea. Si a ello sumamos su audaz indepen- can aposition be defined that gives aesthetis@—_dencia formal, su maestrla espacial y constructiva, su rigurosidad ‘moral dimension? What shall We ay of some- ‘one who makes us dscove things instead of ‘eingthem butgoesbeyondtheperpectveO! és, apenas registra compahia y resulta, por lo mismo, casi ana- ‘Feason to embrace, on the other hand, the risky. chiaroscuro of life? How shail we define some- _cr6nica. {De qué otro modo, si no, cabe definir una pestura que (ne who tests oniluminaton that cares is ; ie ension de FA ie ain: ubica a la estética en una dimensién de orden moral? «Cémo refe- Let’ let Dieste himself clear up these unusual yimnos a alguien que exige descubrir en vez de ocultar, pero exce- intentions: “We cannot, therefore, leave for the City ofthe future the beauty and dignity that we ‘e desperately eed to withstand the gous of 9 iesqoso claroscuro de la vida? {Cémo llamara quien ensaya una Me; we cannot out of prince postpone these ‘qalties although in reality we may have to —_iluminacién que carga con sus propias tinieblas? ble; estamos ansiosos de inteligibilidad y, por lo tanto, de expre- expresividad legitima, a que nos rodean cosas que ostentan un en la obra del hombre en el espacio", pueden ser respaldadas por fa profesion de fe de toda su obra, y técnica, habremos de concluir que ademas de excepcional su posi- diendo la plana perspectiva de la Razén para abarcar, en cambio, Scanned with CamScanner Dejemos que sea el mismo Dieste quien nos aclare estos inusuales propésitos: “No podemos, pues, posponer para l@ ciudad futura la belleza y la dignidad que tanto necesitamos para resistir el rigor de la vida; no podemos posponerlas como principio, aunque podamos tener que transigir en la préctica; hay que transigir cuando no hay més remedio y buscando siempre lograrlas”® Dieste es, antes que nada, un artista trascendente. En el sen- tido lato del-término, su obra trasciende varias atmésferas y dimensiones: la espiritual, la espacial, la temporal. Ademds de las aterias terrestres, él echa mano a las impalpablemente celes- tes, como la luz. Pensemos en las iglesias de Atlintida o de Durazno: en ellas la luz se constituye en un ingrediente insusti- tuible, sin el cual los edificios se desmoronarfan como sifallase la estructura, La luz es arrastrada hacia los puntos elegidos como por un imén, es amasada y fundida con los materiales para hacer- la indistinta dé ellos, es exaltada hasta la transfiguracion. La luz anuncia, asi la presencia divina (o, en todo caso, articula el simu- lacto perfecto de tal presencia). Le Corbusier afirmé alguna ver, ante alguien que lo interro- gaba acerca del convento'dominico de La Tourette: “No soy reli- gioso, pero poseo el sentido de lo sagrado”. A diferencia suya, igioso, y su “sentido de lo sagrado” significa algo més que mero turismo del espiritu; es, simplemente, el aire que ianamente, su integra concepcién vital, el mo cimiento de su cosmovisin. “La Eucaristia, en la misa -sostiene-, ¢ el sacrificio de nuestra fe, pero es también una comida alrede- 7 altar que recuerda la piedra de los sacrificios milenarios y el dorde una mesa |. Pienso que las dos cosas tienen sentido: altar-mesa que haga presente la ultima cena”*, He aqui alguien ‘que, como Teresa de Avila, sabe pasar de los éxtasis a los puche- 0S y que puede congelar una pardbola en gestos espaciales que, Como todds los que de él provienen, posee la economia deshu- da de lo esencial, Scanned with CamScanner’ ee Le Corbusier once replied to someone who knows how to move between ecstasies and there is nothing superfluous, and which the arable splendour of flower, foliage, dry leaves: sition conceals a close but secret link with the The complementary dialogue of two arts who dream their dreams from the South. work hast the highest degree the same good qualities that characterize the easter folk, the people ‘among whom he lives and for whom he ‘cartes out his tad: itis simple to the point of transparency without ever becoming too schematic or predictable, In modesty, it ‘avoids being too emphatic, but without be coming timorous;it delivers its discourse with serene fmness and conviction. tis the archi- tecture ofa land that Is known for different disproportions: the infinite open fields, the ‘amazing heavens, the river that mingles with the sea, But Dieste's vaults, walls, and bricks interpret that physical ealty without altering their meesute or breath. Against the chal- lenge of vastness, we have the shelter of his magic scale of the strict wisdom of his limits, ‘and ofthe sold strength of his materials (OF course he explains al ths in his colloquial ‘and poetic manner: “The greatness and the mystery of the world are felt much more strongly (remember our childhood) beside a mall window that allows us to centre our ‘attention and perceive like a flash of lightening the amazement ofthe beyond, the substance ofthat greatness and mystery. A drop of water ‘sasinfinte asthe frmament."* These images came one after another while I sit by my window that looks out over the Plata River, toward the other hypothetical shore, toward the white, green, and sky-blue ‘homeland of Eladio Dieste. Uruguay, to which we are joined by blood, indivisible destiny, love, and bitterness that all the family feel That Eastern Nation that Figari depicted in the tumultuous grace of his candomblés, and Which Joaquin Torres turned upside down (so ‘ne one would doubt that his north star was in the south) and in which Eladio Dieste has ‘been raising his moments of water, fre, and earth forthe last half century. At ths wintery ‘midnight, | remember our last meeting In ‘Montevideo. ican see him raising his hand to say goodbye atthe door of his house crossed by the birds, rent by shadows, assailed by winds from over the river, so alone and capo- eof nventing an architecture worthy of the Southern Cros, Esto mismo puede observarse en su bellisima casa de Punta encadenamiento Gorda. Sus ambitos se engarzan en un sabi de muros, patios y estancias en los que nada sobra, y a los que el paso de las estaciones viste con el esplendor insuperable de las flores, del follaje, de las hojas secas 0 de las ramas color ceni: za, Destacandose en el ascetismo casi monacal de la sala de paredes blanqueadas, el lujo de una sola, magnifica pintura: un Torres Garcia cuya nitida composicién esconde un estrecho y secreto vinculo con la poderosa sintesis expresiva de la arqui- tectura. El diélogo complementario de dos artistas que suefian sus suefios desde el Sur. ‘Agreguemos, ademés, que su obra posee en grado sumo las mismas buenas cualidades que caracterizan al pueblo oriental, a la gente entre la que vive y para la que don Eladio desarrolla su oficio: es simple hasta la transparencia, sin rozar jamés.ni el esquematismo ni la previsibilidad; siendo pudorosa huye de to enfético, pero sin caer en la timidez; sostiene su discurso con fir- meza serena y conviccién. Es la arquitectura de una tierra que esté definida por varias desmesuras: la del campo infinito, la de los cielos de vértigo, la de un rio que se confunde en mar. Pero las bévedas, los muros, el ladrillo de Dieste interpretan esa realidad fisica sin trastornar su medida ni su aliento; al desafio de la inmen- sidad le oponen el reparo de su magica escala, de fa estricta sabi- durla de sus limites, de la sélida fortaleza de su materialidad. Claro que él explica mejor todo esto a su manera coloquial y postica: “La grandeza y el misterio del mundo se sienten mucho més ~recordemos nuestra nifiez- al lado de ura venta- na pequefia que nos permite centrar nuestra atencién y perci- bir como en un relémpago de asombro el ‘mas alld’, sustancia de esa grandeza y ese misterio. Tan infinita es una gota-de agua como el.firmamento”*, Estas imagenes se suceden una tras otra, mientras escribo estas lineas sentado frente a mi ventana que mira al Plata, hacia {a otra, adivinada orilla, hacia la patria blanca, verde y celeste de Scanned with CamScanner Eladio Dieste. Ese Uruguay al que nos une la sangre, el indivisible destino, el amor y el rencor que arrastra toda familia. Esa Nacién Oriental que Figari reflejé en la gracia tumultuosa de sus can- dombes, a la que Joaquin Torres puso patas arriba -para que no quedasen dudas de que su norte era el Sur-, y en la que Dieste levanta sus monumentos de agua, fuego y barro desde hace mas de medio siglo. En esta medianoche todavia invernal recuerdo uestro Ultimo encuentro en Montevideo. Lo veo levantando la mano en sefial de despedida, en la puerta de su casa cruzada por las nubes y los péjaros, desgarrada de sombras, agitada por los vVientos que desata el rio, tan solo y tan capaz de inventarse una arquitectura digna de la Cruz del Sur. Alberto Petrina Buenos hires, septiembre 1996 Novas [Alberto Petina, “Eladio Dieste. Una estétiea de laética, Summa n® 247, Buenos Aires; marzo 1968, p32. Alo Diese, "Estetica y dsefo",Trazo n* 24 (Revista del Centro de Estudiantes de tu ‘Arquitectura), Montevideo, noviembre 1992, pp. 65 y € 3 Eagle Diese, lado Diest, La estructura cerkmica, Colece 7 Lie De ad Coleccion Somosur ns 1, sca 4bgem, pp: 118 120, S.tbidem, pp. 94, 102, ores ; ‘.Peting, Albena “ado Dee, Una este de ‘Suna 20 Buenos Ares rch 9882 as 2. Bae, “tea y Disa Ta Mant Cate for rect Stadt, 24 met ta301 6566 2.0 ai, adi ite a ic cee areal Somos Cole 1982297 sa 120 Scanned with CamScanner Eladio Dieste at the Axis of History The work of lado Diese ke any werk al of Significance, can be interpreted in many fash- fons, can be seen from the point of vew of @ _mere spectator who enjoys architecture dnd who wil be moved by these wide spaces in which form, matter, and fight creote atmospheres of ‘great beauty. can be seen from the pont of ew ofthe technician, who will adie the wis- dom with which the bold ingenious structures were created. The sociologist wil reflect onthe relationship between the creator and his com- ‘munity. The economis, based on Dieste's actions ‘and ideas, il rethink the tree meaning of eco ‘omy. Final the architectural rw want to ‘igure out the storia! meaning ofthis work, The specter, the average person with no specialization, cannot help being moved when he enters into those grand spaces and feels surrounded by an atmosphere of controled light that accentuates the becutiful curved forms. This atmosphere helps vertebrate the large space and give ta more human dimen sion, so the person passing through will ot fee! lost and reduced toa mere obec. The rich tex ture ofthe brick cb offers a familar, everyday, ‘homelike feeling which help him quietly enjoy the spacial and formal chnest. When he sees ‘Atléntida Church, he wil surely feel thot the ‘curved walls ond the wavy form ofthe rof are the result ofthe fe flow ofthe designers pen ‘becouse an eosy spontaneity seems to preside the definition ofthe forms. However, these ele- ‘gant walls anda theroofarerealy formed by geometric figures which are carefully designed to stabilize thewalland help the roof, whichis@ double curvature shell work structural. The technicians, both the architectural de- signer and the structural designer, and the builder must admire the genius with which the structural and constructive problems have ‘been resolved and their excelent architectural ‘results. The reasons for astonishment increase ‘0s we contemplate the boldness of structures that invariably appear to be the result of legica, natural decisions Eladio Dieste, en el eje de la Historia La obra de Eladio Dieste, como toda obra prertada de signifi- cados, admite multiples lecturas: las del mero espectador/fruidor de arquitectura, que se sentiré emocionado en esos amplios espacios, en los que forma, materia y luz crean ambientes de indudable belleza; la del técr ‘0 que admiraré la sabiduria con fa ‘que se crearon estructuras de’ una audacia y un ingehio admira- bles; la del socidlogo, que deberd reflexionar sobre la relacién de este creador con su comunidad: la del econoimista, que a partir de las acciones y las ideas de Dieste, se verd incitado a repensar el verdadero sentido de la economia; la del critico de arquitectura, een fin, que querrd desentrafiar el sentido histérico de esta obra. El espectador, el ciudadano corriente, no especializado, no puede sino sentirse emocionado al entrar en esos amplios espa- ios y sentirse envuelto en una atmésfera de luz controlada, que hace resaltar las bellas formas curvas, las que a su vez permiten que la gran escala del espacio no resulte inasible, que mantenga su dimensién humana, que no empequefiezca a quien lo transi- ta, reduciéndolo a un mero objeto sin significacién. La rica textu- ra del ladrillo, asimismo, le brinda un sentimiento de familaridad con lo habitual, con lo doméstico, y le permite gozar con sereni dad de la riqueza espacial y formal. Sentiré seguramente, en laiglesia de Atlintida, que ios muros fuertemente curvados y la ondulacién de la cubierta son el resul- tado del libre‘discurrir del lépiz del diseftador, pues una fécil espontaneidad parece presidir la definici6n de las formas. Pero es0s elegantes muros estan formados, en realidad, por figuras geomeétricas, como lo es la misma cubierta, figuras diseftadas cuidadosamente para lograr la estabilidad del muro y-el buen funcionamiento estructural de la cubierta, Scanned with CamScanner £1 técnico, tanto el disefiador de arquitecturas como el de estructuras, asi como el constructor, no dejarén de admirar el jo resueltos los problemas estructurales y ingenio con que han constructivos, y sus excelentes resultados arquitecténicos. Los motivos de asombro se multiplican ante la audacia de unas estfucturas que aparecen invariablemente como resultado nes légicas, naturales. de deci El sistema de diserio y de construccién permite adelgazar las cdscaras hasta limites visualmente insdlitos (espesores de 6 6 10 snsese en el doble voladizo de 14 metros a cada centimetros). lado de una hilera unica de pilares centrales en la Estacién Ter- ‘minal de Salto; en las bévedas de 35 metros de luz y 6 de voladi z0 del Mercado de Porto Alegre, que aparecen como fajas ondulantes, apenas levantadas para dejar entrar la luz en el gran espacio interior; en la esbeltez de unas b6vedas recortadas con- ta el cielo como finas laminas lanzadas al espacio. La fina trama de acero que absorbe flexiones, los encofrados ‘méviles para los que ideé artefactos muy simples, casi primitivos, el pretensado que permite rigidizar estructuras livianas, son algu- 1nos de los elementos técnicos que han permitido estas realiza- ciones, manteniendo siempre un empleo racional de energia humana y mecénica, y evitando inutiles dilapidaciones en aras de un innecesario exhibi nismo tecnolégico. Volveré en seguida sobre este tema, al referirme al concepto de economia de Dieste. ‘Quizés el secreto resida en su concepto de unidad esencial de todos los elementos que inte nen en la obra: materiales, for- imas, procesos constructivos, mano de obra. Toda su obra est Vinculada al uso de un material: la cerdmica armada -ladrillo y ‘acero- especialmente adecuada para estructuras laminares que ecesitan particulares cualidades de rigidez y peso. Pero es la forma la que confiere al material su capacidad para resistir las Solictaciones; la forma es el factor que permite el didlogo entre lo.que hay que resistiry la capacidad de hacerlo, Por eso las for- mas empleadas por Dieste ~bévedas céscaras, superficies reala- The detion on constcion yy 1 (sl the shes own og va limits thicknesses o 5 yg Met we carn a metres each side ofa singe roy og <8 pillars atthe Sato bus station, of pg with @ 35 span and 6 m enh we Porto Alegre market, which appear g.* soshes, barely raised tet ight ny inside spac. Think ofthe thinness seen against the sky asf they were hurled ar space The fie ste! mesh tho bso eng ‘moveole omar fr hich heconeipn very simple almost rimitve arisen prestessing that helps mate lok sun, "gid are some of the techie eee tg have allowed these onsractons ob tui 4 rational wseof human and mechan enegy has always been maintained and sees su. dering 05. rest of unnecessary tech exhibitionism hasbeen avoided Iwiloneac to this topic right amcay when I refer to Diete's sense ofeconomy. Perhaps the secret resides in his concept ef essential unity of al he element that oppecr ini work: materia, forms, construction po- cesses, workers. All of his work linked tothe se of a materia reinforced ceramics (rick ‘and sted, which are especialy suited fsa structures that call for partial qualities of rigidity and weight, However isthe fom that. ives the material its capacity to withstand stresses; frm is the factor that pris te dialog between that which must be withstood ‘and the copaciy to withstand. Therefore te forms used by Dieste: shell vaults, ruled surfaces, catenary sections, do not arise oma geometric proposal or a purely decoratvt design they ae intrinsically ted to stot) needs. However, forms and structures ae designed together with the constructive fm that wll put them in place. Al of hiss st taneous with a technology that i es) understand and to carry out by the worke” Which allows us to take advantage of ther ‘experience in dealing with problems that a dificult solve such as these forms. Therefore when this engineer who os eo? cated at an excellent school derived tom French polytechnic school, developed ‘manner of design and canstracin he ‘ach himof cove "When | ul area se ‘he gear re hn Scanned with CamScanner find myself creating architecture without set- ting out to do so. I was also conscious of the {erm and saw that instead of eluding me, it spoke tome, and asit spoke tome, ithelped me solve the purely structural forms.” We must not overlook a facet of his persona- lity without which the character and orienta tion of his work could not be understood: his profound human and social sensitivity, his ‘comprehension and his respect for the people with whom and for whom he works, his int ‘mate relationship with his country, his inten tion to insert his work inthe historical, social, economic, and productive cicumstances of Uruguay. Ceramics have been the traditional ‘materalin his country, and therefor, there are shied bricklayers who are easly able to carry ‘out any new modes thatthe innovative struc- tures require. The conception ofthe construc- tive methods needed to cary out the new structuresrestedon the silliness of the work capable, in many cases, of coming up with solutions to practical problems that arose during the work. The sociologist or the cultural historian will be able to verify how these relationships with is community and the perception of his pos- sibilities, needs, and abilities are the result of projects that are rooted in their surroundings, which, besides, have ennobled the task ofthe ‘humblest labourer and required him to delve into bis mental resources. Itcan also be seen how this human attitude was at the base of a technological attitude tending to advance and improve the local ‘human resources and materials and leaving behind any untiuitful attempts to join the ‘ranks of simple technological imitation of the international centres. Inhis human attitude, we also find the root of ‘his concept of economy, which would merit a deep study by the specialists on that topic Dieste differentiates between financial eco- ‘nomy, in other words, having to do with ‘money, and cosmic economy, which for him Iimples “agreeing with the deep order of the world." According to Dieste, there are two ‘opposing views of reality: “the apparently practcaland the deeply practical the firs view 's an order which allows disorder and then squanders resources that could be used in favour of mankind and the world. These con- ‘cepts explain his understanding of technology, das, secciones de catenaria~ no surgen de una propuesta geo- métrica o de una voluntad de disefio puramente figurativa: estén intrinsecamente ligadas.a unas necesidades estructurales. Pero formas y estructuras estén pensadas conjuntamente con los pro- cedimientos constructivos que las materializarén. Y a su vez con una tecnologia facil de comprender y de realizar por el obrero, que permite aprovechar su experiencia para abordar problemas de dificil soluci6n para estas formas. Asi pues, este ingeniero formado en una excelente Facultad derivada del Politécnico francés, al desarrollar este modo de disefar construir, se encontré, como é! mismo lo dice, con que “al construir grandes galpones estaba haciendo arquitectura” aunque no se lo propusiera; que tenfa ademés conciencia de la forma y de que ésta no le hufa, le hablaba, y al hablarle le ayuda- baa resolver problemas estrictamente estructurales. No puede dejarse de lado una faceta de su personalidad sin la cual no podrian comprenderse el caracter y la orientacién de su trabaj u profunda sensibilidad humana y social, su comprensién y su respeto por las gentes con las que trabaja y para las cuales trabaja, su intima relacién con su pais, suinten- ci6n de insertar su obra en las circunstancias histéricas, socia- les, econémicas y productivas del Uruguay. La cerdmica ha sido el material tradicional de su pats, y, por tanto, hay all obreros habiles en su manejo, capaces de asumir sin dificulta- des cualquier nuevo modo de uso que exijan estructura no- vadoras. La ideacién de los métodos constructivos necesarios para llevar a cabo las nuevas estructuras tenfan como soporte slido la habilidad de los obreros, capaces, en muchos casos, de idear ellos mismos soluciones a problemas practicos que surgian en la obra, EI sociélogo o el historiador de la cultura podran constatar ‘como estas relaciones con su comunidad, la percepcién de sus posibilidades, de sus necesidades, de sus habilidades, han dado como resultado unas obras enraizadas en su medio, que, ade- Scanned with CamScanner ims, han enaltecido la tarea del més humilde operario poniendo en juego los mejores recursos de su ingenio. Podrén, asimismo, constatar de cémo esta actitud humana ha estado en la base de una actitud tecnolégica tendente al avance y mejoramiento de los recursos humanos y materiales locales, dejando de lado cualquier infructuosa tentativa de integrar las filas del vedetismo tecnolégico de los centros internacionales. También en su actitud humana encontramos la raiz de su concepto de.economia, que mereceria una profunda reflexién por parte de los especialistas en ese tema, pues Dieste distingue entre la economia financiera, esto es, referida al manejo del dine- ro, yla economia césmica, que implica, para él, “estar de acuerdo con el orden profundo del mundo”. Hay, segin Dieste, dos modos enfrentados de ver la realidad: “el aparentemente practi- co y el hondamente préctico; el primero tiene en cuenta un orden cuya existencia permite el desorden y la dilapidaci6n de los que no sirven al mundo y a los hombres, sino que los usan’. Estos conceptos nos explican su modo de entenderlla técnica, en {intima relacién.a los recursos naturales y humanos de su lugar. Por mi parte, como critica de arquitectura, me ha asombrado siempre la condicién anticipatoria del pensamiento de Dieste. En efecto, la critica al Movimiento Moderno, hacia 1950-1960, no se centraba en los procesos de ideacién, sino en las pro- puestas urbanisticas Jacobs, Rossi), o en cuestiones linguisticas yde composicién (Venturi). £n tanto que la obra de Dieste, ya en 1950, representaba una critica mas profunda, que afios después formularia por escrito. Pues al intentar reutilizar “la ingente masa:de la sabiduria constructiva tradicional’, estaba ya inten- tando escapar a las consecuencias que para el proyecto arqui: tecténico ha tenido la Revolucién Industrial, y que caracterizarian a la arquitectura del Movimiento Moderno. As{, @ que “la claridad racional de los entramados planos ~derivados de la construccién de esqueletos en hierto- debe haber tenido un efecto muy grande, aun sobre los aspectos which has an in a 00 int rang UIE OF the he As for as am concerned anon Liha ony te ann Dieses thoughts aheadorh a, round 1950, ecto Mover so cet ong ‘Processes buton urban development, (cobs Ros) eron inguin uestions enh Meanie peg Ale Showed 0 ese cin yt ci tht he ost ptt wt later Upon tying toc new tote na Imousmesseradtonal concise hewasatead tying toeepetecinewn, Ces tht the Indust Revotion a 10 architecture ond which woul chances Modemis architecture. There ke wna that “the rational clarity ofthe et omen, derived fom the constuction oie sieeon, ‘must have hod great fect even on te co, postiveospectsofarchtecure...heasenty rocessment thatthe buling coulda bebroken down ito at mewors end frameworks were easy toca. Ad is is one reaon they ty to reduce eveything» fat ciara... Thetecnolgcalandthese ‘cal mastery ofthe plane must have been very ‘portant forthe evolution of constuction and therforeofarchtecture. Tadonlmetos were not as easy to anahse...They were ae old adjustments of forms that oul ot be ulated but were quessed a ested... rt controlled with mechanical clarity and analy sis, but were put into practice with great efor. _ Engineers now have at hand many means of buicing thot con be easly measured od i which a quick analy takes the place cog ‘and uncertain processes.” He also points out that his proces has made us pooen ee ways His criticism of breaking down the projet into planes, reducing architecture to obs formulas to meet te needs of simplistic tural cocuction, as we have sen is a ir ited tothe theoretical fla but arses tom i ‘own experience exploring other systems in which calculation does not dominate och tecture; rather form, matter, and construction intimately cooperating define the parame ‘natural and human reso ra 87a ny In hehe of calculation, However, these observati inuence of the constructive and cafeuato” tons about th Scanned with CamScanner ‘methods on architectural design are very ori al, Without a doubt, his education as an eng ‘eer and his experience as a builder led im to ‘adopt tis opproach, unheard ofin the studies by historians and erties. (Years laer, Reyner Banham, who also studied engineering, would come to similar conclusions upon studying ‘architecture from the point of view of environ ‘mental conditioning) In these times of disorientation and decon- struction of the architectural organism, the intimate unity of thought and development in Dieste's work acquires a very special meaning: ‘some people would ike to understand tas an ‘anachronism; others, perhaps, 0 marginal. However, in the context of architectural thought, the ideas formulated and put into practice by Deste seem visionary: on one hand, we have his ertcism ofthe reductionism de- ‘rived from breaking down the project into plans; on the other hand, his acceptance (and theadoption) of complexity and indecisiveness characteristicof traditional construction meth- ‘ods. These are ideas that mould the paradigms of curent thought: the rejection ofall reduc- tionism, the acceptance of complexity, indeter- ‘mination, and randomness, as well as the recognition of historical, cultural, and regional singularities, something that Latin American ‘thought has developed ot great length in the last few decades. Seen from this point of view, the historical significance ofthe work and personality ofEla- dio Dieste could be read as. visible sign ofthe turning point that sooner or later had o occur inthe historical current of architecture, closing the cycle of analytic thought to inaugurate a new cycle, presided by holistic thought. compositivos de la arquitectura. .. El proceso de montaje hacia que el edificio pudiera de una manera natural descomponerse ‘en entramados planos, y estos entramados eran calculables... Y ésta es una de las razones por las que se tratara de reducitio todo a esquemas planos. [..] El: dominio tecnolégico y teérico del plano debe haber tenido una gran importancia en la poste- rior evolucién de la construccién y consiguientemente de la arquitectura. [..] Las técnicas tradicionales no eran déciles al andlisis [.] eran ajustes seculares de formas que no se calcula- ban, se intuian, se probaban... no se dominaban con la claridad del andlisis mecénico, sino que se dirfa que vivian con penoso esfuerzo, [.] ahora los técnicos tenian a mano formas de cons- truir que podian dimensionarse con seguridad, en las que se sustitufan con un répido andlisis procesos largos e inciertos”. Y sefala que para la arquitectura éste fue un proceso empobrece- dor en varios sentidos. 3 Su critica al sistema de descomposicién del proyecto en pla- nos, a la reduccién de la arquitectura a formulas abstractas para ajustarse a las neces lades de un célculo estructural simplista, como se ha visto, no se limita al campo teérico, sino que'surge de su propia experiencia, exploratoria de otros sistemas, en los que no es el célculo el que domina la arquitectura, sino que forma, materia y construccién, colaborando intimamente, definen los pardmetros del célculo. Ahora bien, estas observaciones acerca de la influencia de los métodos constructivos y de célculo en el disefio arquitecténico son de una gran originalidad. Sin duda su formacién como inge- niiero y su experiencia como constructor le llevaron a adoptar ese enfoque, inédito en los estudios de historiadores y criticos. (Algo parecido hacia aiios después, Reyner Banham, que también habia tenido una formacién ingenieril, al estudiar la arquitectura desde el punto de vista del acondicionamiento ambiental.) En estos tiempos de descentramiento, descomposiciOn, deconstruccién, del organismo arquitecténico, la intima unidad Scanned with CamScanner — en la concepcién y desarrollo de la obra de Dieste adquiere un significado muy particular: algunos querran leerla como un ana- cronismo, otros, quizés, como una produccién marginal. Sin ~ embargo, en el contexto del pensamiento arquitecténico, las ideas puestas en practica y formuladas por Dieste aparecen como una visionaria anticipacién: por una parte, su critica al reduccio- nismo derivado de la descomposicién del proyecto en planos; por otra, su aceptacién -y la adopcién- de la complejidad y la inde- terminaci6n propia de los métodos tradicionales de construccién. = Pues éstas son ideas que aparecen conformando los paradigmas del pensamiento actual: el rechazo a todo reduccionismo, la aceptacién de la complejidad, la constatacién de la indetermina- cién y de lo aleatorio, asi como el reconocimiento de la impor- tancia de las singularidades histéricas, culturales y regionales ~algo que, por lo demas, el pensamiento latinoamericano de las < Uiltimas décadas ha desarrollado ampliamente. Visto en esta perspectiva, el significado histérico de la obra y la personalidad de Eladio Dieste podria leerse como un signo Visible del punto de inflexién que tarde o temprano deberia pro- ducirse en Ia corriente historica de la arquitectura, cerrando el ciclo del pensamiento analitico para inaugurar un nuevo ciclo, presidido por un pensamiento holistico. Marina Waisman Scanned with CamScanner Introduction In an interview with architecture students ftom Montevideo | wes asked how Modem Jchtectureftnt the national ely andthe relationship this reality had with building and construction technologies, The orchitecture that we cal modem e merged in socal, culturally ond above all industaly developed counties that are very diferent from our rations. ts answers tothe problems of this society always seem incom- plete to me. Their Solutions tend to be suitable from the technological point of view, that i suitable for ther but nacalwoys for us There ore sltions that dont seem in any way rational tome. For example the excessive andattimesteneticus of exterior alas wall Theuseofaglasswallcon be defended when t Jinks an itror space withthe exerci. ow. ever, what ratonajusiiation canithaveina very tal building? Ie is tue that moder con- struction techniques allow the interior to be equipped to avoid the problems that an exces- ‘Siveuse of glass can couse bu thisis done ata cost that isnot alvays justifiable. In alent societies possible defense of these kinds of constructive solutions could be formulated but Inthe case of our societies, these solutions can ot be usted. a poor county ke ours itis economically absurd to constuct buildings hich are equipped at the level of Rockefeller Center In wth, this is done quite often. Tis does nt tok into account the national ealty and implicates a ack of suitability, modesty and seriousness when facing the architectural and construction problems that are specifi to courvery diferent environment. 1 discovered in brick a material with unl ited possible, almost completely ignored ty modern technology, and began to study dnd use it structural. The structural use of ‘brick until now has been limited and poorly Jmplemented. nthe United Stats, for exam- le brick production technology s very refined butts used above ail as a material to cover structures. When brick is used structural itis to repeat the forms already escovered and in Use with enforced concrete. AA sound and sensible architecture requires Introduccién En una entrevista que me hicieron los estudiantes de arqui- tectura de Montevideo en 1965, me preguntaron cémo encua- draba a la Arquitectura Modema dentro del marco de la realidad nacional y cémo se relacionaba esa realidad desde el Angulo de lo constructivo, La arquitectura que llamamos Moderna surgié en paises de desarrollo social, cultural sobre todo industrial completamente distintos a'los nuestros. Su respuesta a los problemas de esas sociedades me parece casi siempre incompleta; suele ser més adecuada desde el punto de vista tecnolégico, pero adecuada para ellos, no siempre para nosotros. Hay soluciones que no me parecen racionales en ningtin caso; or ejemplo, el abuso, que llega a ser frenético, de las paredes exteriores de cristal. Puede defenderse una pared de vidrio cuan- do vincula un espacio interior a uno exterior; pero squé justifica-

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