fromthe South Desde el Sur
-wecemet continue‘ toefergrantedthat “No podemos seguir dando por ten. ‘
avsmnecntcrongeocneton Por sentado que el arte, ta cenciay
trie en te gat Unio once soit tenica nos han de vende fuera Hast el gran Unamuno legs
‘ove inveten els (let THEM invent og decir: iQue i :
ugh fm sre tle wat oper state "Que inventen ellost, aunque estoy seguro de que ésa fue
tr he woul hae been wing to rectiy.1_ UNA afirmacién polémica que estara dispuesto a rectifiar Yo le
woul have replied Excuse me, Don Miguel, but
theones who invent arte ones whorl. ti
otmoralyfetto diegardany fein te". ellos mandan ellos. No es moralmente lito hurtarnos a la vida en
‘hubiese contestado: perdone usted, don Miguel, pero si inventan
ningun campo",
abe Dite Eladio Dieste
“Form is a language, and that language “La forma es un lenguaje, y ese lenguaje debe sernos inteligi-
shoul eligbe tus we yeaa fr inteli-
lene and therefore for expression, Prt of
‘modem ansityis due tothe lack oflegitimate sién, Parte del desasosiego modemo se debe a la ausencia de
expressiveness becune we are surrounded by
secretive things that deny us the communion
Hey eng sae netanatcopecr i's hermetismo que es la negacién de lo que supondria la fraterni-
wotkofmanin space”?
These words of Elaaio Dieste, a man of few — dad que damos por supuesta y que naturalmente deberia leerse
word ee supported by the statement of ath
foundinalis wor ondthat perfect coherence
‘sven thought and acon would be enough Estas palabras de Eladio Dieste -hombre avaro de palabras-
tran him aplecefhonourin contemporary
‘American architecture Mead tots his bold
formal independence his spacial and construe 5 ij
*rfecta coherencia entre pensamiento y accién bastaria para
tive mastery, and his technical thoroughness, ope ee sf
we will have to conclude that besides being otorgarle un lugar de excepcién en el horizonte de la arquitectura
‘exceptional he hos hardly any equa which in i te :
‘itself makes him almost anachronistic. Howelse a™mericana contempordnea. Si a ello sumamos su audaz indepen-
can aposition be defined that gives aesthetis@—_dencia formal, su maestrla espacial y constructiva, su rigurosidad
‘moral dimension? What shall We ay of some-
‘one who makes us dscove things instead of
‘eingthem butgoesbeyondtheperpectveO! és, apenas registra compahia y resulta, por lo mismo, casi ana-
‘Feason to embrace, on the other hand, the risky.
chiaroscuro of life? How shail we define some- _cr6nica. {De qué otro modo, si no, cabe definir una pestura que
(ne who tests oniluminaton that cares is ;
ie ension de FA
ie ain: ubica a la estética en una dimensién de orden moral? «Cémo refe-
Let’ let Dieste himself clear up these unusual yimnos a alguien que exige descubrir en vez de ocultar, pero exce-
intentions: “We cannot, therefore, leave for the
City ofthe future the beauty and dignity that we
‘e desperately eed to withstand the gous of 9 iesqoso claroscuro de la vida? {Cémo llamara quien ensaya una
Me; we cannot out of prince postpone these
‘qalties although in reality we may have to —_iluminacién que carga con sus propias tinieblas?
ble; estamos ansiosos de inteligibilidad y, por lo tanto, de expre-
expresividad legitima, a que nos rodean cosas que ostentan un
en la obra del hombre en el espacio",
pueden ser respaldadas por fa profesion de fe de toda su obra, y
técnica, habremos de concluir que ademas de excepcional su posi-
diendo la plana perspectiva de la Razén para abarcar, en cambio,
Scanned with CamScannerDejemos que sea el mismo Dieste quien nos aclare estos
inusuales propésitos: “No podemos, pues, posponer para l@
ciudad futura la belleza y la dignidad que tanto necesitamos
para resistir el rigor de la vida; no podemos posponerlas como
principio, aunque podamos tener que transigir en la préctica;
hay que transigir cuando no hay més remedio y buscando
siempre lograrlas”®
Dieste es, antes que nada, un artista trascendente. En el sen-
tido lato del-término, su obra trasciende varias atmésferas y
dimensiones: la espiritual, la espacial, la temporal. Ademds de las
aterias terrestres, él echa mano a las impalpablemente celes-
tes, como la luz. Pensemos en las iglesias de Atlintida o de
Durazno: en ellas la luz se constituye en un ingrediente insusti-
tuible, sin el cual los edificios se desmoronarfan como sifallase la
estructura, La luz es arrastrada hacia los puntos elegidos como
por un imén, es amasada y fundida con los materiales para hacer-
la indistinta dé ellos, es exaltada hasta la transfiguracion. La luz
anuncia, asi la presencia divina (o, en todo caso, articula el simu-
lacto perfecto de tal presencia).
Le Corbusier afirmé alguna ver, ante alguien que lo interro-
gaba acerca del convento'dominico de La Tourette: “No soy reli-
gioso, pero poseo el sentido de lo sagrado”. A diferencia suya,
igioso, y su “sentido de lo sagrado” significa algo
més que mero turismo del espiritu; es, simplemente, el aire que
ianamente, su integra concepcién vital, el
mo
cimiento de su cosmovisin. “La Eucaristia, en la misa -sostiene-,
¢ el sacrificio de nuestra fe, pero es también una comida alrede-
7
altar que recuerda la piedra de los sacrificios milenarios y el
dorde una mesa |.
Pienso que las dos cosas tienen sentido:
altar-mesa que haga presente la ultima cena”*, He aqui alguien
‘que, como Teresa de Avila, sabe pasar de los éxtasis a los puche-
0S y que puede congelar una pardbola en gestos espaciales que,
Como todds los que de él provienen, posee la economia deshu-
da de lo esencial,
Scanned with CamScanner’
ee
Le Corbusier once replied to someone who
knows how to move between ecstasies and
there is nothing superfluous, and which the
arable splendour of flower, foliage, dry leaves:
sition conceals a close but secret link with the
The complementary dialogue of two arts
who dream their dreams from the South.
work hastthe highest degree the same good qualities
that characterize the easter folk, the people
‘among whom he lives and for whom he
‘cartes out his tad: itis simple to the point of
transparency without ever becoming too
schematic or predictable, In modesty, it
‘avoids being too emphatic, but without be
coming timorous;it delivers its discourse with
serene fmness and conviction. tis the archi-
tecture ofa land that Is known for different
disproportions: the infinite open fields, the
‘amazing heavens, the river that mingles with
the sea, But Dieste's vaults, walls, and bricks
interpret that physical ealty without altering
their meesute or breath. Against the chal-
lenge of vastness, we have the shelter of his
magic scale of the strict wisdom of his limits,
‘and ofthe sold strength of his materials
(OF course he explains al ths in his colloquial
‘and poetic manner: “The greatness and the
mystery of the world are felt much more
strongly (remember our childhood) beside a
mall window that allows us to centre our
‘attention and perceive like a flash of lightening
the amazement ofthe beyond, the substance
ofthat greatness and mystery. A drop of water
‘sasinfinte asthe frmament."*
These images came one after another while
I sit by my window that looks out over the
Plata River, toward the other hypothetical
shore, toward the white, green, and sky-blue
‘homeland of Eladio Dieste. Uruguay, to which
we are joined by blood, indivisible destiny,
love, and bitterness that all the family feel
That Eastern Nation that Figari depicted in
the tumultuous grace of his candomblés, and
Which Joaquin Torres turned upside down (so
‘ne one would doubt that his north star was in
the south) and in which Eladio Dieste has
‘been raising his moments of water, fre, and
earth forthe last half century. At ths wintery
‘midnight, | remember our last meeting In
‘Montevideo. ican see him raising his hand to
say goodbye atthe door of his house crossed
by the birds, rent by shadows, assailed by
winds from over the river, so alone and capo-
eof nventing an architecture worthy of the
Southern Cros,
Esto mismo puede observarse en su bellisima casa de Punta
encadenamiento
Gorda. Sus ambitos se engarzan en un sabi
de muros, patios y estancias en los que nada sobra, y a los que
el paso de las estaciones viste con el esplendor insuperable de
las flores, del follaje, de las hojas secas 0 de las ramas color ceni:
za, Destacandose en el ascetismo casi monacal de la sala de
paredes blanqueadas, el lujo de una sola, magnifica pintura: un
Torres Garcia cuya nitida composicién esconde un estrecho y
secreto vinculo con la poderosa sintesis expresiva de la arqui-
tectura. El diélogo complementario de dos artistas que suefian
sus suefios desde el Sur.
‘Agreguemos, ademés, que su obra posee en grado sumo las
mismas buenas cualidades que caracterizan al pueblo oriental, a
la gente entre la que vive y para la que don Eladio desarrolla su
oficio: es simple hasta la transparencia, sin rozar jamés.ni el
esquematismo ni la previsibilidad; siendo pudorosa huye de to
enfético, pero sin caer en la timidez; sostiene su discurso con fir-
meza serena y conviccién. Es la arquitectura de una tierra que
esté definida por varias desmesuras: la del campo infinito, la de
los cielos de vértigo, la de un rio que se confunde en mar. Pero las
bévedas, los muros, el ladrillo de Dieste interpretan esa realidad
fisica sin trastornar su medida ni su aliento; al desafio de la inmen-
sidad le oponen el reparo de su magica escala, de fa estricta sabi-
durla de sus limites, de la sélida fortaleza de su materialidad.
Claro que él explica mejor todo esto a su manera coloquial
y postica: “La grandeza y el misterio del mundo se sienten
mucho més ~recordemos nuestra nifiez- al lado de ura venta-
na pequefia que nos permite centrar nuestra atencién y perci-
bir como en un relémpago de asombro el ‘mas alld’, sustancia
de esa grandeza y ese misterio. Tan infinita es una gota-de
agua como el.firmamento”*,
Estas imagenes se suceden una tras otra, mientras escribo
estas lineas sentado frente a mi ventana que mira al Plata, hacia
{a otra, adivinada orilla, hacia la patria blanca, verde y celeste de
Scanned with CamScannerEladio Dieste. Ese Uruguay al que nos une la sangre, el indivisible
destino, el amor y el rencor que arrastra toda familia. Esa Nacién
Oriental que Figari reflejé en la gracia tumultuosa de sus can-
dombes, a la que Joaquin Torres puso patas arriba -para que no
quedasen dudas de que su norte era el Sur-, y en la que Dieste
levanta sus monumentos de agua, fuego y barro desde hace mas
de medio siglo. En esta medianoche todavia invernal recuerdo
uestro Ultimo encuentro en Montevideo. Lo veo levantando la
mano en sefial de despedida, en la puerta de su casa cruzada por
las nubes y los péjaros, desgarrada de sombras, agitada por los
vVientos que desata el rio, tan solo y tan capaz de inventarse una
arquitectura digna de la Cruz del Sur.
Alberto Petrina
Buenos hires, septiembre 1996
Novas
[Alberto Petina, “Eladio Dieste. Una estétiea de laética, Summa n® 247, Buenos
Aires; marzo 1968, p32.
Alo Diese, "Estetica y dsefo",Trazo n* 24 (Revista del Centro de Estudiantes de
tu
‘Arquitectura), Montevideo, noviembre 1992, pp. 65 y €
3 Eagle Diese, lado Diest, La estructura cerkmica, Colece 7
Lie De ad Coleccion Somosur ns 1, sca
4bgem, pp: 118 120,
S.tbidem, pp. 94, 102,
ores ;
‘.Peting, Albena “ado Dee, Una este de
‘Suna 20 Buenos Ares rch 9882
as
2. Bae, “tea y Disa Ta Mant
Cate for rect Stadt, 24 met
ta301 6566
2.0 ai, adi ite a ic cee
areal Somos Cole 1982297
sa 120
Scanned with CamScannerEladio Dieste
at the Axis of History
The work of lado Diese ke any werk al of
Significance, can be interpreted in many fash-
fons, can be seen from the point of vew of @
_mere spectator who enjoys architecture dnd who
wil be moved by these wide spaces in which
form, matter, and fight creote atmospheres of
‘great beauty. can be seen from the pont of
ew ofthe technician, who will adie the wis-
dom with which the bold ingenious structures
were created. The sociologist wil reflect onthe
relationship between the creator and his com-
‘munity. The economis, based on Dieste's actions
‘and ideas, il rethink the tree meaning of eco
‘omy. Final the architectural rw want to
‘igure out the storia! meaning ofthis work,
The specter, the average person with no
specialization, cannot help being moved when
he enters into those grand spaces and feels
surrounded by an atmosphere of controled
light that accentuates the becutiful curved
forms. This atmosphere helps vertebrate the
large space and give ta more human dimen
sion, so the person passing through will ot fee!
lost and reduced toa mere obec. The rich tex
ture ofthe brick cb offers a familar, everyday,
‘homelike feeling which help him quietly enjoy
the spacial and formal chnest. When he sees
‘Atléntida Church, he wil surely feel thot the
‘curved walls ond the wavy form ofthe rof are
the result ofthe fe flow ofthe designers pen
‘becouse an eosy spontaneity seems to preside
the definition ofthe forms. However, these ele-
‘gant walls anda theroofarerealy formed by
geometric figures which are carefully designed
to stabilize thewalland help the roof, whichis@
double curvature shell work structural.
The technicians, both the architectural de-
signer and the structural designer, and the
builder must admire the genius with which the
structural and constructive problems have
‘been resolved and their excelent architectural
‘results. The reasons for astonishment increase
‘0s we contemplate the boldness of structures
that invariably appear to be the result of
legica, natural decisions
Eladio Dieste,
en el eje de la Historia
La obra de Eladio Dieste, como toda obra prertada de signifi-
cados, admite multiples lecturas: las del mero espectador/fruidor
de arquitectura, que se sentiré emocionado en esos amplios
espacios, en los que forma, materia y luz crean ambientes de
indudable belleza; la del técr
‘0 que admiraré la sabiduria con fa
‘que se crearon estructuras de’ una audacia y un ingehio admira-
bles; la del socidlogo, que deberd reflexionar sobre la relacién de
este creador con su comunidad: la del econoimista, que a partir de
las acciones y las ideas de Dieste, se verd incitado a repensar el
verdadero sentido de la economia; la del critico de arquitectura,
een fin, que querrd desentrafiar el sentido histérico de esta obra.
El espectador, el ciudadano corriente, no especializado, no
puede sino sentirse emocionado al entrar en esos amplios espa-
ios y sentirse envuelto en una atmésfera de luz controlada, que
hace resaltar las bellas formas curvas, las que a su vez permiten
que la gran escala del espacio no resulte inasible, que mantenga
su dimensién humana, que no empequefiezca a quien lo transi-
ta, reduciéndolo a un mero objeto sin significacién. La rica textu-
ra del ladrillo, asimismo, le brinda un sentimiento de familaridad
con lo habitual, con lo doméstico, y le permite gozar con sereni
dad de la riqueza espacial y formal.
Sentiré seguramente, en laiglesia de Atlintida, que ios muros
fuertemente curvados y la ondulacién de la cubierta son el resul-
tado del libre‘discurrir del lépiz del diseftador, pues una fécil
espontaneidad parece presidir la definici6n de las formas. Pero
es0s elegantes muros estan formados, en realidad, por figuras
geomeétricas, como lo es la misma cubierta, figuras diseftadas
cuidadosamente para lograr la estabilidad del muro y-el buen
funcionamiento estructural de la cubierta,
Scanned with CamScanner£1 técnico, tanto el disefiador de arquitecturas como el de
estructuras, asi como el constructor, no dejarén de admirar el
jo resueltos los problemas estructurales y
ingenio con que han
constructivos, y sus excelentes resultados arquitecténicos.
Los motivos de asombro se multiplican ante la audacia de
unas estfucturas que aparecen invariablemente como resultado
nes légicas, naturales.
de deci
El sistema de diserio y de construccién permite adelgazar las
cdscaras hasta limites visualmente insdlitos (espesores de 6 6 10
snsese en el doble voladizo de 14 metros a cada
centimetros).
lado de una hilera unica de pilares centrales en la Estacién Ter-
‘minal de Salto; en las bévedas de 35 metros de luz y 6 de voladi
z0 del Mercado de Porto Alegre, que aparecen como fajas
ondulantes, apenas levantadas para dejar entrar la luz en el gran
espacio interior; en la esbeltez de unas b6vedas recortadas con-
ta el cielo como finas laminas lanzadas al espacio.
La fina trama de acero que absorbe flexiones, los encofrados
‘méviles para los que ideé artefactos muy simples, casi primitivos,
el pretensado que permite rigidizar estructuras livianas, son algu-
1nos de los elementos técnicos que han permitido estas realiza-
ciones, manteniendo siempre un empleo racional de energia
humana y mecénica, y evitando inutiles dilapidaciones en aras de
un innecesario exhibi
nismo tecnolégico. Volveré en seguida
sobre este tema, al referirme al concepto de economia de Dieste.
‘Quizés el secreto resida en su concepto de unidad esencial de
todos los elementos que inte
nen en la obra: materiales, for-
imas, procesos constructivos, mano de obra. Toda su obra est
Vinculada al uso de un material: la cerdmica armada -ladrillo y
‘acero- especialmente adecuada para estructuras laminares que
ecesitan particulares cualidades de rigidez y peso. Pero es la
forma la que confiere al material su capacidad para resistir las
Solictaciones; la forma es el factor que permite el didlogo entre
lo.que hay que resistiry la capacidad de hacerlo, Por eso las for-
mas empleadas por Dieste ~bévedas céscaras, superficies reala-
The detion on constcion yy
1 (sl the shes own og
va limits thicknesses o 5 yg Met
we carn a
metres each side ofa singe roy og <8
pillars atthe Sato bus station, of pg
with @ 35 span and 6 m enh we
Porto Alegre market, which appear g.*
soshes, barely raised tet ight ny
inside spac. Think ofthe thinness
seen against the sky asf they were
hurled ar space
The fie ste! mesh tho bso eng
‘moveole omar fr hich heconeipn
very simple almost rimitve arisen
prestessing that helps mate lok sun,
"gid are some of the techie eee tg
have allowed these onsractons ob tui 4
rational wseof human and mechan enegy
has always been maintained and sees su.
dering 05. rest of unnecessary tech
exhibitionism hasbeen avoided Iwiloneac
to this topic right amcay when I refer to Diete's
sense ofeconomy.
Perhaps the secret resides in his concept ef
essential unity of al he element that oppecr
ini work: materia, forms, construction po-
cesses, workers. All of his work linked tothe
se of a materia reinforced ceramics (rick
‘and sted, which are especialy suited fsa
structures that call for partial qualities of
rigidity and weight, However isthe fom that.
ives the material its capacity to withstand
stresses; frm is the factor that pris te
dialog between that which must be withstood
‘and the copaciy to withstand. Therefore te
forms used by Dieste: shell vaults, ruled
surfaces, catenary sections, do not arise oma
geometric proposal or a purely decoratvt
design they ae intrinsically ted to stot)
needs. However, forms and structures ae
designed together with the constructive fm
that wll put them in place. Al of hiss st
taneous with a technology that i es)
understand and to carry out by the worke”
Which allows us to take advantage of ther
‘experience in dealing with problems that a
dificult solve such as these forms.
Therefore when this engineer who os eo?
cated at an excellent school derived tom
French polytechnic school, developed
‘manner of design and canstracin he
‘ach himof cove "When | ul area se
‘he gear
re
hn
Scanned with CamScannerfind myself creating architecture without set-
ting out to do so. I was also conscious of the
{erm and saw that instead of eluding me, it
spoke tome, and asit spoke tome, ithelped me
solve the purely structural forms.”
We must not overlook a facet of his persona-
lity without which the character and orienta
tion of his work could not be understood: his
profound human and social sensitivity, his
‘comprehension and his respect for the people
with whom and for whom he works, his int
‘mate relationship with his country, his inten
tion to insert his work inthe historical, social,
economic, and productive cicumstances of
Uruguay. Ceramics have been the traditional
‘materalin his country, and therefor, there are
shied bricklayers who are easly able to carry
‘out any new modes thatthe innovative struc-
tures require. The conception ofthe construc-
tive methods needed to cary out the new
structuresrestedon the silliness of the work
capable, in many cases, of coming up with
solutions to practical problems that arose
during the work.
The sociologist or the cultural historian will
be able to verify how these relationships with
is community and the perception of his pos-
sibilities, needs, and abilities are the result of
projects that are rooted in their surroundings,
which, besides, have ennobled the task ofthe
‘humblest labourer and required him to delve
into bis mental resources.
Itcan also be seen how this human attitude
was at the base of a technological attitude
tending to advance and improve the local
‘human resources and materials and leaving
behind any untiuitful attempts to join the
‘ranks of simple technological imitation of the
international centres.
Inhis human attitude, we also find the root of
‘his concept of economy, which would merit a
deep study by the specialists on that topic
Dieste differentiates between financial eco-
‘nomy, in other words, having to do with
‘money, and cosmic economy, which for him
Iimples “agreeing with the deep order of the
world." According to Dieste, there are two
‘opposing views of reality: “the apparently
practcaland the deeply practical the firs view
's an order which allows disorder and then
squanders resources that could be used in
favour of mankind and the world. These con-
‘cepts explain his understanding of technology,
das, secciones de catenaria~ no surgen de una propuesta geo-
métrica o de una voluntad de disefio puramente figurativa: estén
intrinsecamente ligadas.a unas necesidades estructurales. Pero
formas y estructuras estén pensadas conjuntamente con los pro-
cedimientos constructivos que las materializarén. Y a su vez con
una tecnologia facil de comprender y de realizar por el obrero,
que permite aprovechar su experiencia para abordar problemas
de dificil soluci6n para estas formas.
Asi pues, este ingeniero formado en una excelente Facultad
derivada del Politécnico francés, al desarrollar este modo de
disefar construir, se encontré, como é! mismo lo dice, con que
“al construir grandes galpones estaba haciendo arquitectura”
aunque no se lo propusiera; que tenfa ademés conciencia de la
forma y de que ésta no le hufa, le hablaba, y al hablarle le ayuda-
baa resolver problemas estrictamente estructurales.
No puede dejarse de lado una faceta de su personalidad sin
la cual no podrian comprenderse el caracter y la orientacién
de su trabaj
u profunda sensibilidad humana y social, su
comprensién y su respeto por las gentes con las que trabaja y
para las cuales trabaja, su intima relacién con su pais, suinten-
ci6n de insertar su obra en las circunstancias histéricas, socia-
les, econémicas y productivas del Uruguay. La cerdmica ha
sido el material tradicional de su pats, y, por tanto, hay all
obreros habiles en su manejo, capaces de asumir sin dificulta-
des cualquier nuevo modo de uso que exijan estructura
no-
vadoras. La ideacién de los métodos constructivos necesarios
para llevar a cabo las nuevas estructuras tenfan como soporte
slido la habilidad de los obreros, capaces, en muchos casos,
de idear ellos mismos soluciones a problemas practicos que
surgian en la obra,
EI sociélogo o el historiador de la cultura podran constatar
‘como estas relaciones con su comunidad, la percepcién de sus
posibilidades, de sus necesidades, de sus habilidades, han dado
como resultado unas obras enraizadas en su medio, que, ade-
Scanned with CamScannerims, han enaltecido la tarea del més humilde operario poniendo
en juego los mejores recursos de su ingenio.
Podrén, asimismo, constatar de cémo esta actitud humana ha
estado en la base de una actitud tecnolégica tendente al avance
y mejoramiento de los recursos humanos y materiales locales,
dejando de lado cualquier infructuosa tentativa de integrar las
filas del vedetismo tecnolégico de los centros internacionales.
También en su actitud humana encontramos la raiz de su
concepto de.economia, que mereceria una profunda reflexién
por parte de los especialistas en ese tema, pues Dieste distingue
entre la economia financiera, esto es, referida al manejo del dine-
ro, yla economia césmica, que implica, para él, “estar de acuerdo
con el orden profundo del mundo”. Hay, segin Dieste, dos
modos enfrentados de ver la realidad: “el aparentemente practi-
co y el hondamente préctico; el primero tiene en cuenta un
orden cuya existencia permite el desorden y la dilapidaci6n de
los que no sirven al mundo y a los hombres, sino que los usan’.
Estos conceptos nos explican su modo de entenderlla técnica, en
{intima relacién.a los recursos naturales y humanos de su lugar.
Por mi parte, como critica de arquitectura, me ha asombrado
siempre la condicién anticipatoria del pensamiento de Dieste.
En efecto, la critica al Movimiento Moderno, hacia 1950-1960,
no se centraba en los procesos de ideacién, sino en las pro-
puestas urbanisticas Jacobs, Rossi), o en cuestiones linguisticas
yde composicién (Venturi). £n tanto que la obra de Dieste, ya en
1950, representaba una critica mas profunda, que afios después
formularia por escrito. Pues al intentar reutilizar “la ingente
masa:de la sabiduria constructiva tradicional’, estaba ya inten-
tando escapar a las consecuencias que para el proyecto arqui:
tecténico ha tenido la Revolucién
Industrial, y que
caracterizarian a la arquitectura del Movimiento Moderno. As{,
@ que “la claridad racional de los entramados planos
~derivados de la construccién de esqueletos en hierto- debe
haber tenido un efecto muy grande, aun sobre los aspectos
which has an in
a 00 int rang
UIE OF the he
As for as am concerned anon
Liha ony te ann
Dieses thoughts aheadorh a,
round 1950, ecto
Mover so cet ong
‘Processes buton urban development,
(cobs Ros) eron inguin
uestions enh Meanie peg
Ale Showed 0 ese cin yt
ci tht he ost ptt wt
later Upon tying toc new tote na
Imousmesseradtonal concise
hewasatead tying toeepetecinewn,
Ces tht the Indust Revotion a
10 architecture ond which woul chances
Modemis architecture. There ke wna
that “the rational clarity ofthe et omen,
derived fom the constuction oie sieeon,
‘must have hod great fect even on te co,
postiveospectsofarchtecure...heasenty
rocessment thatthe buling coulda
bebroken down ito at mewors end
frameworks were easy toca. Ad is
is one reaon they ty to reduce eveything»
fat ciara... Thetecnolgcalandthese
‘cal mastery ofthe plane must have been very
‘portant forthe evolution of constuction and
therforeofarchtecture. Tadonlmetos
were not as easy to anahse...They were ae
old adjustments of forms that oul ot be
ulated but were quessed a ested... rt
controlled with mechanical clarity and analy
sis, but were put into practice with great efor.
_ Engineers now have at hand many means of
buicing thot con be easly measured od i
which a quick analy takes the place cog
‘and uncertain processes.” He also points out
that his proces has made us pooen ee
ways
His criticism of breaking down the projet
into planes, reducing architecture to obs
formulas to meet te needs of simplistic
tural cocuction, as we have sen is a ir
ited tothe theoretical fla but arses tom i
‘own experience exploring other systems in
which calculation does not dominate och
tecture; rather form, matter, and construction
intimately cooperating define the parame
‘natural and human reso
ra
87a ny
In
hehe
of calculation,
However, these observati
inuence of the constructive and cafeuato”
tons about th
Scanned with CamScanner‘methods on architectural design are very ori
al, Without a doubt, his education as an eng
‘eer and his experience as a builder led im to
‘adopt tis opproach, unheard ofin the studies
by historians and erties. (Years laer, Reyner
Banham, who also studied engineering, would
come to similar conclusions upon studying
‘architecture from the point of view of environ
‘mental conditioning)
In these times of disorientation and decon-
struction of the architectural organism, the
intimate unity of thought and development in
Dieste's work acquires a very special meaning:
‘some people would ike to understand tas an
‘anachronism; others, perhaps, 0 marginal.
However, in the context of architectural
thought, the ideas formulated and put into
practice by Deste seem visionary: on one hand,
we have his ertcism ofthe reductionism de-
‘rived from breaking down the project into
plans; on the other hand, his acceptance (and
theadoption) of complexity and indecisiveness
characteristicof traditional construction meth-
‘ods. These are ideas that mould the paradigms
of curent thought: the rejection ofall reduc-
tionism, the acceptance of complexity, indeter-
‘mination, and randomness, as well as the
recognition of historical, cultural, and regional
singularities, something that Latin American
‘thought has developed ot great length in the
last few decades.
Seen from this point of view, the historical
significance ofthe work and personality ofEla-
dio Dieste could be read as. visible sign ofthe
turning point that sooner or later had o occur
inthe historical current of architecture, closing
the cycle of analytic thought to inaugurate a
new cycle, presided by holistic thought.
compositivos de la arquitectura. .. El proceso de montaje hacia
que el edificio pudiera de una manera natural descomponerse
‘en entramados planos, y estos entramados eran calculables...
Y ésta es una de las razones por las que se tratara de reducitio
todo a esquemas planos. [..] El: dominio tecnolégico y teérico
del plano debe haber tenido una gran importancia en la poste-
rior evolucién de la construccién y consiguientemente de la
arquitectura. [..] Las técnicas tradicionales no eran déciles al
andlisis [.] eran ajustes seculares de formas que no se calcula-
ban, se intuian, se probaban... no se dominaban con la claridad
del andlisis mecénico, sino que se dirfa que vivian con penoso
esfuerzo, [.] ahora los técnicos tenian a mano formas de cons-
truir que podian dimensionarse con seguridad, en las que se
sustitufan con un répido andlisis procesos largos e inciertos”. Y
sefala que para la arquitectura éste fue un proceso empobrece-
dor en varios sentidos. 3
Su critica al sistema de descomposicién del proyecto en pla-
nos, a la reduccién de la arquitectura a formulas abstractas para
ajustarse a las neces
lades de un célculo estructural simplista,
como se ha visto, no se limita al campo teérico, sino que'surge de
su propia experiencia, exploratoria de otros sistemas, en los que
no es el célculo el que domina la arquitectura, sino que forma,
materia y construccién, colaborando intimamente, definen los
pardmetros del célculo.
Ahora bien, estas observaciones acerca de la influencia de los
métodos constructivos y de célculo en el disefio arquitecténico
son de una gran originalidad. Sin duda su formacién como inge-
niiero y su experiencia como constructor le llevaron a adoptar ese
enfoque, inédito en los estudios de historiadores y criticos. (Algo
parecido hacia aiios después, Reyner Banham, que también
habia tenido una formacién ingenieril, al estudiar la arquitectura
desde el punto de vista del acondicionamiento ambiental.)
En estos tiempos de descentramiento, descomposiciOn,
deconstruccién, del organismo arquitecténico, la intima unidad
Scanned with CamScanner—
en la concepcién y desarrollo de la obra de Dieste adquiere un
significado muy particular: algunos querran leerla como un ana-
cronismo, otros, quizés, como una produccién marginal. Sin ~
embargo, en el contexto del pensamiento arquitecténico, las
ideas puestas en practica y formuladas por Dieste aparecen como
una visionaria anticipacién: por una parte, su critica al reduccio-
nismo derivado de la descomposicién del proyecto en planos; por
otra, su aceptacién -y la adopcién- de la complejidad y la inde-
terminaci6n propia de los métodos tradicionales de construccién. =
Pues éstas son ideas que aparecen conformando los paradigmas
del pensamiento actual: el rechazo a todo reduccionismo, la
aceptacién de la complejidad, la constatacién de la indetermina-
cién y de lo aleatorio, asi como el reconocimiento de la impor-
tancia de las singularidades histéricas, culturales y regionales
~algo que, por lo demas, el pensamiento latinoamericano de las
< Uiltimas décadas ha desarrollado ampliamente.
Visto en esta perspectiva, el significado histérico de la obra y
la personalidad de Eladio Dieste podria leerse como un signo
Visible del punto de inflexién que tarde o temprano deberia pro-
ducirse en Ia corriente historica de la arquitectura, cerrando el
ciclo del pensamiento analitico para inaugurar un nuevo ciclo,
presidido por un pensamiento holistico.
Marina Waisman
Scanned with CamScannerIntroduction
In an interview with architecture students
ftom Montevideo | wes asked how Modem
Jchtectureftnt the national ely andthe
relationship this reality had with building and
construction technologies,
The orchitecture that we cal modem e
merged in socal, culturally ond above all
industaly developed counties that are very
diferent from our rations. ts answers tothe
problems of this society always seem incom-
plete to me. Their Solutions tend to be suitable
from the technological point of view, that i
suitable for ther but nacalwoys for us
There ore sltions that dont seem in any
way rational tome. For example the excessive
andattimesteneticus of exterior alas wall
Theuseofaglasswallcon be defended when t
Jinks an itror space withthe exerci. ow.
ever, what ratonajusiiation canithaveina
very tal building? Ie is tue that moder con-
struction techniques allow the interior to be
equipped to avoid the problems that an exces-
‘Siveuse of glass can couse bu thisis done ata
cost that isnot alvays justifiable. In alent
societies possible defense of these kinds of
constructive solutions could be formulated but
Inthe case of our societies, these solutions can
ot be usted. a poor county ke ours itis
economically absurd to constuct buildings
hich are equipped at the level of Rockefeller
Center In wth, this is done quite often. Tis
does nt tok into account the national ealty
and implicates a ack of suitability, modesty
and seriousness when facing the architectural
and construction problems that are specifi to
courvery diferent environment.
1 discovered in brick a material with unl
ited possible, almost completely ignored
ty modern technology, and began to study
dnd use it structural. The structural use of
‘brick until now has been limited and poorly
Jmplemented. nthe United Stats, for exam-
le brick production technology s very refined
butts used above ail as a material to cover
structures. When brick is used structural itis
to repeat the forms already escovered and in
Use with enforced concrete.
AA sound and sensible architecture requires
Introduccién
En una entrevista que me hicieron los estudiantes de arqui-
tectura de Montevideo en 1965, me preguntaron cémo encua-
draba a la Arquitectura Modema dentro del marco de la realidad
nacional y cémo se relacionaba esa realidad desde el Angulo de
lo constructivo,
La arquitectura que llamamos Moderna surgié en paises de
desarrollo social, cultural sobre todo industrial completamente
distintos a'los nuestros. Su respuesta a los problemas de esas
sociedades me parece casi siempre incompleta; suele ser més
adecuada desde el punto de vista tecnolégico, pero adecuada
para ellos, no siempre para nosotros.
Hay soluciones que no me parecen racionales en ningtin caso;
or ejemplo, el abuso, que llega a ser frenético, de las paredes
exteriores de cristal. Puede defenderse una pared de vidrio cuan-
do vincula un espacio interior a uno exterior; pero squé justifica-