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En esa misma línea, el tratadista Antonio Carrozza; y, Ricardo Zeledón Zeledón, señalan
que: "La función social de la propiedad agraria en América latina tiene como fundadamente
el hecho de que los bienes agrarios, por su naturaleza de el ejercicio del derecho propietario
agrario respecto de las actividades agrícolas, ganaderas, forestales y otras de carácter
productivo, asi como de conservación y protección de la biodiversidad, investigación y
ecoturismo, debe sujetarse a lo establecido en los Planes de Uso de Suelo, para determinar
su aptitud, y al empleo sostenible, conforme lo establecido en la Ley NO 1333 del Medio
Ambiente, la Ley NO-1700 y la Ley NO 1715 modificada por la Ley N° 3545.
Ahora bien, a efectos del cumplimiento efectivo y real de la FS O FES, de acuerdo al Art.
162 del Decreto Supremo N°29215, bienes productivos, deben ser adecuadamente
explotados. Con ello se busca superar la idea de la propiedad privada da concebida como
mercancía, convertida en capital productivo de renta, tendiente a la mera especulación para
tomar m una nueva concepción considerando el rendimiento de ella con vista a la
productividad".
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1.1.2 Función Económica Social
Función Económica Social
Las normas que regulan la FS y la FES, son de orden público por lo tanto son de
cumplimiento obligatorio e irrenunciables por acuerdo de partes, el INRA debe establecer
un sistema de control y seguimiento permanente, incluyendo, informes, denuncias y
resoluciones de las entidades agrarias competentes, así como las denuncias de las
organizaciones sociales; este sistema debe establecer los mecanismos, efectivos e
inmediatos para impulsar los procedimientos de reversión, de expropiación o la priorización
del saneamiento de la propiedad agraria.
En ese contexto, es pertinente señalar que para una correcta valoración del cumplimiento de
la FS o de la FES se debe tomar en cuenta algunos aspectos que son muy importantes, los
cuales analizaremos a continuación.
Por otro lado, es menester señalar que las TCO y comunidades indígenas. de conformidad
con el Convenio NO 169 de la OIT, cumplen la FS con el uso y aprovechamiento de sus
territorios que cubre la totalidad del hábitat de las regiones que ocupan, de acuerdo a sus
usos y costumbres o utilizan de alguna manera en la satisfacción de sus necesidades
económicas, sociales, culturales y espirituales del pueblo indígena u originario.
Ahora bien, para verificar en forma adecuada las áreas efectivamente aprovechadas se debe
tomar en cuenta la actividad de la propiedad objeto de saneamiento, consiguientemente
señalaré aspectos que se deben considerar en cada una de ellas:
Asimismo, el ganado cuya propiedad no sea del interesado no puede ser registrado como
carga animal del predio objeto de saneamiento, por tanto, no se valora como área
efectivamente y actualmente aprovechada, al momento de ejecución el proceso de
saneamiento. Las áreas con pastos naturales no constituyen área efectiva y actualmente
aprovechadas en ningún caso. En ese contexto, se considera ganado mayor las especies de
bovinos, equinos, acemilas y camelidos, y ganado menor, las especies de caprinos y ovinos.
Ahora bien, para el cálculo del área efectivamente aprovechada se debe considerar la suma
de superficies que resulten de:
1. La cantidad de cabezas de ganado mayor, por cada una se reconoce cinco (5) has, diez
(10) cabezas de ganado menor equivalen a una cabeza de ganado mayor. 2. Áreas con pasto
cultivado, con sistemas silvopastoriles.
Los animales de corral como aves y cerdos, son considerados parte de las actividades
complementarias a la agricultura y no se consideran actividad ganadera ni carga animal.
Son áreas de descanso aquellas de rotación que luego de haber sido cultivadas con mejoras
e inversiones productivas, se las deja de trabajar para su recuperación y posterior uso,
claramente identificables.
Cuando la superficie efectivamente aprovechada y en descanso sea más del treinta por
ciento (30%) y menor o igual al cincuenta por ciento (50%) de lo mensurado, se asigna una
proyección de crecimiento del cuarenta por ciento (40%) sobre lo efectivamente
aprovechado y en descanso.
2. En actividad ganadera:
3, En actividades agropecuarias:
Las servidumbres ecológicas legales, deben ser reconocidas como parte del predio cuando
éste cuente con antecedentes en Titulos Ejecutoriales o proceso agrario en trámite, no así en
posesiones. Es importante señalar que no se reconoce el derecho de propiedad agraria
cuando en el predio únicamente existan servidumbres ecológicas legales Las áreas de
servidumbre ecológica voluntarias bajo manejo, para ser reconocida como área con
cumplimiento de FES además de estar legalmente aprobada y autorizadas por la ABT o
MDRyT, según corresponda y se debe verificar en campo el cumplimiento de su
autorización y plan de manejo. De no cumplirse con uno de estos requisitos da lugar al
incumplimiento total de la FES en la superficie donde se desarrolla dicha actividad.
2.2.4.1. Desmontes
2.2.4.2. Inversiones
Ahora bien, la actividad de verificación en campo se debe realizar una vez que las
condiciones en los predios afectados así lo permitan. Sin embargo, las demás actividades
desarrolladas en los procesos iniciados o por iniciar, deben tramitarse y concluirse,
conforme a las normas vigentes sobre la materia.
Las actividades productivas ejecutadas por el arrendatario o aparcero, solo constituyen FES
a favor del propietario, cuando exista área efectivamente aprovechada por éste, toda vez que
en el saneamiento ésta previsión alcanza únicamente a los predios con proceso agrario
titulado y en trámite. La superficie que cumple FES por el arrendatario o aparcero no debe
exceder el cincuenta por ciento (50%) de la superficie efectivamente aprovechada por el
titular del derecho.
A pesar de que la Ley no lo establezca de manera explicita, el proceso de saneamiento debe ser
entendido fundamentalmente como un proceso social dirigido a recuperar tierras que han sido
ilegalmente acaparadas en demasía e improductivas, para su consiguiente redistribución a favor
de quienes carecen de tierras. En el caso de las tierras indígenas, debe ser asumido como el
proceso dirigido a formalizar el derecho propietario sobre las mismas, que nace de su ocupación
ancestral y es reconocido como originario tanto por la CPE, como por la propia Ley N° 1715.
De acuerdo a lo desarrollado en la SCP 2163/2013 de 21 de noviembre, se tiene que el
saneamiento es calificado como: "...el procedimiento técnico jurídico transitorio destinado a
regularizar y perfeccionar el derecho de propiedad agraria, se ejecuta de oficio o a pedido de
parte; por su parte el Art. 65 norma que dicho Instituto, en coordinación con las Direcciones
Departamentales queda facultado para ejecutar y concluir el saneamiento de la propiedad
agraria en el plazo máximo de diez años a partir de la publicación de esa Ley. Finalmente, dicha
ejecución está sujeta al procedimiento previsto en el Reglamento aprobado por el D. S. 29215".
1.2 Finalidades
2. Finalidades
Articulo 66 (Finalidades)
El Saneamiento Simple de oficio son ejecutados por los Directores Departamentales del INRA,
dictando resoluciones determinativas de áreas de Saneamiento Simple de oficio, con base en la
actividad de diagnóstico especificando su ubicación, posición geográfica, superficie, límites y
plazo estimado de ejecución, cuando exista uno de los Siguientes aspectos:
2. Proceso agrario en trámite, con especificación datos que sirvan par individualizarlo o
documento público o privado reconocide priv respaldado por certificación de autoridad social o
tradicional, declaratoria herederos o certificado de defunción o testimonio de sentencia
ejecutoria con antecedentes de dominio en un proceso agrario en trámite 3. Posesión legal
anterior a la vigencia de la Ley NO 1715 debidamente acreditada a través de certificaciones
emitidas por autoridades de la comunidad, colonia o autoridad de la región donde corresponde,
sin embargo, estos aspectos son acreditados a través de l verificación in situ.
Por otro lado, las comunidades campesinas, colonias, pueblos y comunidades indigenas u
originarias podrán presentar su solicitud por medio de sus organizaciones sociales o sindicales
acompañando copias simples de documentos que acrediten la existencia de la organización y la
elección de representantes.
Los Directores Departamentales del INRA, recibida la solicitud de saneamiento, requieren a sus
órganos competentes la elaboración de un informe técnico legal el cual debe ser efectuado en un
plazo no mayor a cinco dias calendario, determinando lo siguiente:
Ahora bien, una vez evaluada la solicitud los Directores Departamentales del INRA, en el plazo
de cinco (5) días calendario, con base en el informe referido supra, deberán emitir un Auto a
través del cual se debe: 1. Intimar la subsanación de requisitos de forma y contenido de las
solicitudes, bajo apercibimiento de rechazo, fijando plazo al efecto. 2. Admitir las solicitudes
que reúnan los requisitos de forma y contenido, así como de las solicitudes observadas, cuyas
deficiencias hubieran sido subsanadas dentro de plazo. Además, se debe establecer la tasa de
saneamiento y catastro, aplicables al predio objeto de saneamiento, cuyo pago condicionará la
emisión de la Resolución Determinativa de Área. asimismo, en caso de resultar que varias
solicitudes tengan un antecedente común podrán ser acumuladas.
En tal sentido, en el supuesto caso de que se hubiera admitido y efectuado el pago de la tasa de
saneamiento y catastro, los Directores Departamentales del INRA, debe dictar Resolución
Determinativa de Area de SAN-SIM a pedido de parte, especificando su ubicación y posición
geográfica, superficie y límites, con base en las superficies que consten en las solicitudes
admitidas.
Sin embargo, en caso de inactividad atribuible a la parte interesada, por más de tres meses
computable desde la última actuación cursante en el proceso se debe disponer la caducidad del
procedimiento y como consecuencia el archivo definitivo de los antecedentes y la cancelación
del registro de su solicitud, consiguientemente ordenada la caducidad del procedimiento de
saneamiento del predio, este únicamente es posible sanear de oficio. Sin embargo, corresponde
aclarar que en la actualidad ya no se ejecuta saneamiento a pedido de parte, considerando que
las propiedades faltantes para la conclusión del proceso de saneamiento, son predios que en su
mayoría tienen conflicto, en consecuencia, el saneamiento se ejecuta de oficio.
Ahora bien, los Directores Departamentales competentes del INRA, con base en la actividad de
diagnóstico, deben remitir el proyecto de Resolución Determinativa de Área, a la Comisión
Agraria Departamental (CAD) que dicha instancia emita el Dictamen en un plazo de quince (15)
días calendario, el cual es computable desde la recepción del Proyecto de Resolución
Determinativa de Área; vencido el plazo previsto, emitido no el Dictamen, se debe emitir la
Resolución Determinativa de Are especificando su ubicación y posición geográfica, superficie,
limites y plazo estimado de ejecución, siendo que el criterio de determinación de áreas de
Saneamiento Integrado al Catastro Legal, es la priorización de la formación del Catastro Legal.
3. En caso de que las propiedades de terceros debidamente saneadas abarquen extensiones que
disminuyan significativamente las tierras del pueblo o comunidad indígena u originaria, el
INRA debe sustanciar un procedimiento de compensación de tierras comunitarias de origen, con
el objeto de dotar tierras en superficie y calidad suficiente en zonas donde existan tierras
disponibles, de acuerdo a la CPE, Ley 1715 de 18 de octubre de 1996, modificado por la Ley
3545 de 28 de noviembre de 2006, y el Decreto Supremo 29215.
Ahora bien, dentro de esta modalidad de saneamiento, tenemos los procedimientos de dotación
de TCO y de conversión de otros tipos de
propiedad en Tierras Comunitarias de Origen, a cuyo efecto analizaremos cada una de ellas.
Ahora bien, las solicitudes de dotación, deben ser presentadas por las autoridades legitimadas o
por sus representantes orgánicos o convencionales, ante las Direcciones Departamentales del
INRA las cuales a su vez son revisadas y respondidas por la Dirección Departamental en el
término de cinco (5) días, computables a partir de la recepción de la solicitud, teniendo como
domicilio de los solicitantes, el fijado por estos en la ciudad asiento de la Dirección
Departamental del INRA competente. En caso de no fijar domicilio se tendrá como tal la
secretaría de la Dirección Departamental del INRA competente.
De acuerdo al Art. 357 del Decreto Supremo N°29215, las solicitudes de dotación de TCO
referidas ut supra, deben ser presentadas por escrito. Acompañando la siguiente documentación:
a) La personalidad jurídica del peticionante; en caso de no existir una certificación que acredite
que se encuentra en trámite, con cargo a su presentación posterior.
c) Acta de asamblea del pueblo indígena u originario solicitante en la que conste su voluntad de
iniciar el saneamiento de Tierra Comunitaria de Origen:
d) Relación de comunidades, lugares o equivalentes que integran la persona jurídica solicitante,
según sus características. e) Croquis de ubicación que individualice la tierra objeto de la
solicitud.
Sin embargo, se deben respetar los derechos de quienes opten por mantener su derecho
individual o sean ajenos a la comunidad. Asimismo, dos o más comunidades pueden acogerse a
este trámite, aunque sus Títulos Ejecutoriales hayan sido obtenidos en diferentes procesos
agrarios, o adherirse a la solicitud principal antes de efectuarse la georeferenciación previa
aceptación de los que iniciaron el trámite de conversión. Anteriormente, la Dirección
Departamental competente del INRA, debe disponer la revisión de las solicitudes y la
subsanación de los requisitos de forma y contenido que no se hubiesen cumplido, fijando plazo
al efecto, bajo apercibimiento de rechazo. En tal sentido, sobre la base de la documentación
presentada, debe emitir Auto, disponiendo lo siguiente:
1. La admisión de la solicitud que reúna los requisitos de legitimación, forma y contenido, así
como, las solicitudes observadas cuyas deficiencias hubieren sido subsanadas dentro del plazo
fijado al efecto, para que la unidad técnica de su dependencia realice la georeferenciación del
área objeto de la solicitud; se oficie al registro de Derechos Reales de su jurisdicción. Para la
emisión de certificados alodiales sobre los predios objeto de la solicitud, en caso de conversión
a TCO; que el Viceministerio de Tierras certifique el Registro de Identidad como pueblo
indígena u originario, el cual debe contener lo siguiente:
El rechazo de las solicitudes que no reúnan los requisitos exigidos. Así como de las solicitudes
observadas, cuyas deficiencias no hubieren sido subsanadas dentro del plazo fijado al efecto.
Empero, en caso de existir sobreposición entre la superficie solicitada y áreas de saneamiento
predeterminadas, el Director Departamental debe aceptar la solicitud en toda su extensión.
1. Descripción del hábitat, que incluye la ocupación actual e histórica del pueblo sobre el
espacio territorial solicitado y pronunciamiento sobre si el área demandada es suficiente o
insuficiente para el pueblo indigena u originario, 2. Descripción y análisis del acceso y vivencia
de su espacio territorial, incluye características socioculturales, sistema de producción y manejo
de
recursos naturales. El Informe de Necesidades y Uso del Espacio Territorial, debe ser expedido
por el Viceministerio de Tierras, en el plazo máximo de sesenta (60) días calendario,
computables a partir de la recepción de la solicitud, bajo responsabilidad. A cuyo efecto
debiéndose remitir a conocimiento de la Dirección Departamental del INRA solicitante, en el
marco de lo dispuesto en el Art. 364 del Decreto Supremo Nº 29215, modificado por el Decreto
Supremo NO 3467 de fecha 24 de enero de 2018.
1. Etapa preparatoria
Esta etapa da inicio al procedimiento común de saneamiento que a su vez se clasifica en tres sub
etapas: 1) Diagnostico y Determinativa de Área: 2) Planificación; y 3) Resolución de inicio del
procedimiento.
1.1.1 Diagnóstico
1.1. Diagnóstico
Esta actividad consiste en la evaluación previa sobre las características de las áreas objeto de
saneamiento, donde de acuerdo al Art. 292 del Decreto Supremo. N° 29215, se debe establecer
lo siguiente:
La Resolución de Inicio del procedimiento debe ser emitida por los Directores Departamentales
del INRA y tiene por finalidad instruir la ejecución del procedimiento de saneamiento e intimar
el apersonamiento de propietarios y poseedores de un área o polígono, pudiendo dictarse
simultáneamente con la resolución determinativa de área, cuando operativamente sea posible o
se trate de saneamiento a pedido de parte; sin embargo, cuando se establezcan polígonos de
trabajo, estos deben especificar su ubicación, posición geográfica, superficie y límites.
Asimismo, se puede determinar, para el área o polígono específico, la aplicación del
procedimiento especial de saneamiento sin más trámite, el trámite para la identificación de
tierras fiscales o con incumplimiento de función económico social o la aplicación del
saneamiento interno.
Ahora bien, la Resolución de Inicio del Procedimiento, dictada por cada área o polígono de
saneamiento, se debe intimar a los propietarios, sub adquirentes y poseedores a efectos de que
se apersonen y presenten la documentación correspondiente ante los funcionarios públicos
encargados de la sustanciación del procedimiento, dentro del plazo establecido en la
Resolución, el mismo que no debe exceder de treinta (30) días calendario.
Esta etapa se inicia con la publicación de la resolución de inicio del procedimiento y comprende
las actividades a realizarse en campo, bajo el siguiente detalle: 1) Relevamiento de información
en campo, 2) Informe en Conclusiones y 3) Proyecto de Resolución Final de Saneamiento, estos
dos últimos puntos precedentes, cuando medien razones de fuerza mayor, pueden ejecutarse en
la Dirección Departamental, debiendo entenderse por fuerza mayor como el obstáculo externo,
imprevisto o inevitable que origina una fuerza extraña al hombre que impide el cumplimiento de
dicha facultad. (Incendios, inundaciones, y otros desastres naturales).
Esta actividad, a su vez comprende las siguientes tareas: 1) Campaña pública, 2) Mensura, 3)
Encuesta catastral, 4) Verificación de la función social y función económica social, 5) Registro
de datos en el sistema y 6) Solicitud de precios de adjudicación, que deben ser ejecutadas dentro
del plazo establecido en la resolución de inicio del procedimiento, ahora bien, únicamente en
caso de denuncias por irregularidades o actos fraudulentos o como resultado del control de
calidad, supervisión y seguimiento, previsto en el Art. 266 del Decreto Supremo 29215, se
puede anular obrados y en consecuencia disponer la nueva ejecución de estas tareas, que
estudiaremos más adelante. Durante el relevamiento de Información en Campo, las personas
interesadas deben tener acceso a la información generada, obteniendo una copia de la misma y
pudiendo realizar observaciones a los datos cursantes en dicha información.
2.1.2. Mensura
Por otro lado, el Informe en Conclusiones debe contener la evaluación de datos técnicos sobre la
ubicación del predio, superficie y límites del predio objeto de saneamiento con la finalidad de
establecer la clasificación de la propiedad. Asimismo, debe existir pronunciamiento sobre el
análisis de los conflictos o sobre posiciones, a cuyo efecto, con la finalidad de garante ejercicio
del derecho posesorio y de propiedad agraria, en el marco de lo dispuesto en la Disposición
Transitoria Primera de la Ley N.º 3545 sede considerar las medidas precautorias establecidas en
el Art. 10 del Decreto Supremo N.º 29215.
Ahora bien, en el caso de polígonos de trabajo en los que no se hubieren apersonado las
organizaciones sociales o sectoriales, la actividad debe ser promovida, organizada y cumplida
únicamente con la asistencia voluntaria de propietarios, beneficiarios y poseedores del área de
trabajo.
Concluida la actividad del Informe en Conclusiones y con base en las sugerencias expuestas, en
un plazo no mayor a quince (15) días calendario por polígono, los responsables de esta actividad
deben elaborar proyecto de la resolución final de saneamiento por cada proceso agrario titulado,
en trámite o posesión, por organización social o por predio cuando corresponda conjuntamente
los planos prediales. Dichas resoluciones deben ser aprobadas por el Director Departamental
competente, previa a su remisión a la Dirección Nacional del INRA.
Ahora bien, el Art. 266 Par. IV del Decreto Supremo NO 29215 modificado por DOS. NO 4320
de 31 de agosto de 2020, establece que: "como resultado de la aplicación del control de calidad,
supervisión y seguimiento, la Dirección Nacional del Instituto Nacional de Reforma Agraria,
mediante Resolución Administrativa fundamentada, podrá disponer: a) La anulación de
actuados de saneamiento por irregularidades, graves faltas o errores de fondo; b) La
convalidación de actuados de saneamiento, por errores u omisiones subsanados; c) La
prosecución de los procesos de saneamiento objeto de controles de calidad, supervisión y
seguimiento, y asimismo, La aplicación de medidas correctivas o reforzamiento en programas
de capacitación u otros que ameriten el caso; y, d) El inicio de procesos administrativos, civiles
o penales para los funcionarios responsables».
Las atribuciones de la Dirección Nacional del INRA respecto a los controles de calidad, el
relevamiento de información y estándares de calidad de las actuaciones cumplidas, la
investigación en gabinete y campo, hechos irregulares y actos fraudulentos, para concluir:
"Como resultado de la aplicación del dicho control de calidad, supervisión y seguimiento, podrá
disponer: a) La anulación de actuados de saneamiento por irregularidades, graves faltas o
errores de fondo, b) La convalidación actuados de saneamiento, 129 1 por errores u omisiones
subsanados, c) La prosecución de los procesos de saneamiento objeto de controles de calidad
supervisión y seguimiento, y, asimismo, la aplicación de medida correctivas o reforzamiento en
programas de capacitación u otros que ameriten el caso; y, d) El inicio de procesos
administrativos, civiles o penales para los funcionarios responsables". Aquella norma otorga a la
autoridad administrativa cuatro opciones frente al proceso de control de calidad, supervisión y
seguimiento, planteando, entre estas, una o varias alternativas, pero no se debe entender que la
frase "podrá disponer" da opción a que pueda determinarse algo fuera de las alternativas de los
incisos a), b), c), y d) del artículo analizado uno o varias una facultad discrecional.
Por otro lado, en el marco de lo dispuesto en el Art. 27 de la Ley No. 1178 de fecha 20 de julio
de 1990, concordante con los Inc. s) Art. 1 10 del Decreto Supremo NO 29894 de fecha 07 de
febrero de 2009 y el Inc. c) A 30 del Decreto Supremo No. 28631 de fecha 08 de marzo de
2006, el Viceministerio de Tierras, tiene la facultad fiscalizadora, sin embargo, considerando
que la fiscalización se efectúa con carácter posterior, lo que significa que las fiscalizaciones
deben efectuarse posterior a la emisión de la Resolución Final de Saneamiento o concluido en
todas sus etapas, empero no es menos cierto que en materia agraria no ocurre aquello, siendo
que contra las resoluciones finales de saneamiento, únicamente procede contencioso-
administrativo ante el Tribunal Agroambiental conforme el Par, V Art 76 del Decreto Supremo
No. 29215, en consecuencia quedando agotada la vía administrativa en el marco del Inc. c) Art.
90 del mismo cuerpo legal.
En ese contexto y en el marco del Inc. s) Art. 110 del Decreto Supremo NO 29894 concordante
con el Par. I Art. 266 Bis incorporado a través del Decreto Supremo NO 4320 de fecha 31 de
agosto de 2020, el Viceministerio de Tierras independientemente de la facultad fiscalizadora,
tiene la facultad de intervenir durante la ejecución del proceso de saneamiento con la finalidad
de realizar análisis y evaluación de la documentación correspondiente, ante indicios de
irregularidades, actos fraudulentos y/o acciones ilícitas, a cuyo efecto pudiendo disponer lo
siguiente: a) La nulidad de actuados, en caso de confirmar los extremos denunciados, sin
perjuicio del inicio de las acciones legales en el ámbito civil, penal y otras que correspondan; b)
La prosecución del proceso de saneamiento, cuando sean desvirtuadas dichas denuncias; c)
Disponiendo la subsanación, enmiendas de errores y/o omisiones identificadas en el proceso de
saneamiento, cuya finalidad es la prosecución y conclusión del mismo.
Asimismo, si bien el Par. II del Art. 266 Bis del mismo cuerpo legal señala que el
Viceministerio de Tierras, puede intervenir después de emitida la Resolución Final de
saneamiento, con la finalidad de verificar si las notificaciones fueron realizadas en apego a la
normativa vigente, sin embargo, corresponde señalar que la nulidad de notificaciones se
encuentra regulada por el Art. 74 del Decreto Supremo NO 29215.
Es preciso señalar que con la emisión de la Resolución Final de Saneamiento queda agotada la
vía administrativa (71) y es impugnable únicamente mediante proceso contenci0S0
administrativo, conforme lo dispuesto en el Art. 68 de la Ley NO 1715 y el Art. 76 Par. V del
Decreto Supremo NO 29215, en el pazo de treinta (30) días calendario, computables a partir del
día siguiente de su notificación.
Por otro lado, corresponde señalar que la resolución final de saneamiento, queda ejecutoriada y
firme, ante la renuncia expresa al término de impugnación: una vez se haya vencido el plazo
para impugnar ante el Tribunal Agroambiental; 0 cuando dicho Tribunal haya resuelto la
demanda contenciosa administrativa, declarando improbada la demanda. Sin embargo, en los
dos primeros casos, con la finalidad de desvirtuar la interposición de la demanda contenciosa
administrativa en contra de la resolución notificada, se debe solicitar certificación o informe del
Tribunal Agroambiental.
Es importante señalar que existen tres formas de emisión de la resolución final de saneamiento y
son los siguientes: 1) Resolución para Procesos Titulados, 2) Resolución para Procesos Agrarios
en Trámite y 3) Resolución para las Posesiones.
1. Confirmatoria,
2. Anulatoria y de Conversión.
3. Anulatoria.
4. Reversión.
Empero cuando se considere situaciones juridicas mixtas entre titulados, procesos en trámite y/o
poseedores legales, respecto a la superficie objeto de saneamiento, corresponderá que se emita
una sola resolución conjunta, sujeta a la jerarquia mayor. En estos casos los derechos deben
establecerse en un sólo Título Ejecutorial y plano. Asimismo, si en la emisión de resoluciones
confirmatorias y anulatorias y de conversión, se identifica una superficie parcial que incumple
la FS o FES, ésta debe ser afectada a favor del Estado como tierra fiscal, susceptible de
consignarse y registrarse en forma expresa a nombre del INRA, en la misma resolución.
1. Declarar la validez del proceso agrario que dio mérito al Título Ejecutorial emitido,
respecto a las superficies que cumplan la función social o económico social.
2. Dejar sin efecto los Títulos Ejecutoriales emitidos y se proceda a la cancelación de
partidas.
3. La emisión de nuevos Títulos Ejecutoriales con datos actualizados y correctos
resultantes del saneamiento.
4. El replanteo de limites cuando la superficie objeto de reconocimiento de derechos fuera
inferior a la mensurada.
1. La subsanación de los vicios de nulidad relativa que afecten los Titulos Ejecutoriales y
proceso agrario que sirvió de antecedente respecto a las superficies que cumplan la
función social o económica social.
2. La nulidad de los Títulos Ejecutoriales emitidos y la cancelación de partidas de
propiedad que deriven de los mismos.
3. La emisión de nuevos Títulos Ejecutoriales.
Se emite resolución anulatoria, cuando el Título Ejecutorial esté afectado por vicios de nulidad
absoluta, o cuando el Titulo Ejecutorial esté afectado por vicios de nulidad relativa y no exista
cumplimiento de la FS o FES, en cuyo caso se debe disponer lo siguiente:
La nulidad de los Títulos Ejecutoriales y proceso agrario que sirvió de antecedente y calidad
fiscal de las tierras a nombre del Estado, 2. La cancelación de partidas de propiedad en oficinas
de Derechos.
Reales que tengan como antecedente de dominio el titulo ejecutorial anulado. 3. La cancelación
de partidas de gravámenes e hipotecas en oficinas de Derechos Reales, que recaen sobre las
superficies comprendidas en Títulos Ejecutoriales anulados. 4. El desalojo conforme lo
dispuesto en los artículos 453 y 454 del los Decreto Supremo 29215. 3.1.1.1.4. Resolución de
Reversión
Se emite Resolución de Reversión, cuando el Titulo Ejecutorial esté exento de vicios de nulidad
y exista el incumplimiento total o parcial de la FES y se debe disponer lo siguiente:
1. La reversión total o parcial, según corresponda, de las tierras a dominio del Estado y en
consecuencia la cancelación de los Títulos Ejecutoriales y proceso agrario que sirvió de
antecedente y la calidad de tierras fiscales, si corresponde.
2. La cancelación de las partidas de propiedad en oficinas de Derechos Reales que tengan
como antecedente de dominio el Titulo Ejecutorial anulado.
3. La cancelación de partidas de gravámenes e hipotecas en oficinas de Derechos Reales,
que recaen sobre las superficies comprendidas los titulos ejecutoriales anulados
4. La adopción de medidas precautorias. 5. El desalojo conforme lo dispuesto en los
artículos 453 y 454 del Decreto Supremo 29215. 3.1.1,2, Resoluciones para Procesos
Agrarios en Trámite.
En el caso de predios con antecedente en procesos agrarios en trámite, el Director Nacional del
INRA, recibidos los antecedentes, cuando sea competente, debe dictar resolución administrativa
dentro del plazo improrrogable de quince (15) días calendario, computables a partir de s
recepción,
Sin embargo, cuando el Director del INRA no sea competente para dictar resoluciones en el
proceso de saneamiento, por conducto regular debe remitir los antecedentes al Presidente del
Estado Plurinacional de Bolivia para que esta autoridad, conjuntamente el Ministro de
Desarrollo Rural y Tierras, recibidos los antecedentes dicten Resolución Suprema los cuales
pueden ser las siguientes:
1. Confirmatoria.
2. Modificatoria.
3. Anulatoria.
4. De improcedencia de la titulación.
Empero, cuando se considere situaciones jurídicas mixtas entre procesos en trámite y/o
poseedores legales, respecto a la superficie objeto de saneamiento, se debe emitir una sola
resolución conjunta sujeta a la jerarquía mayor, en estos casos los derechos deben establecerse
en un sólo Título Ejecutorial y plano. Ahora bien, si en la emisión de resolución confirmatoria y
modificatoria se identifica una superficie parcial que incumple la FS o FES, esta debe ser
afectada a favor del Estado como tierra fiscal, susceptible de consignarse y registrarse en forma
expresa a nombre del INRA, en la misma resolución.
Se emite la resolución confirmatoria, cuando se establezca que el proceso agrario está exento de
vicios de nulidad y con cumplimiento de la FS o FES. disponiendo lo siguiente:
La resolución anulatoria, procede cuando el proceso agrario esté afecta de vicios de nulidad
absoluta, en cuyo caso se debe disponer lo siguiente:
1. La nulidad de las resoluciones ejecutoriadas y minutas de transferencia protocolizadas,
cursantes en antecedentes y del proceso agrario en trámite; así como el archivo
definitivo de obrados si afectare a todos los beneficiarios y predios, declarando la
calidad fiscal de los temas nombre del Estado.
2. La cancelación de partidas de propiedad, gravámenes, hipotecas e inscripciones
preventivas de propiedad que tengan como antecedente de dominio la sentencia
ejecutoriada cursantes en obrados y minutas de compraventa protocolizadas, ante
oficinas de Derechos Reales 3. El desalojo conforme lo dispuesto en los artículos 453 y
454 del Decreto Supremo 29215.
En el caso de las posesiones, previo dictamen técnico y/o legal si considera conveniente, El
Director Nacional del INRA, debe emitir la resolución administrativa, dentro del plazo
improrrogable de quince (15) días calendario, computables a partir de la recepción de
antecedentes y los tipos de Resolución pueden ser los siguientes:
a) Dotación
b) Adjudicación
c) Transferencia gratuita a las Municipalidades d) Tierras fiscales
2. No constitutivas de derecho, aplicables en el caso de ilegalidad de la posesión.
Se dicta Resolución de Tierras Fiscales, respecto de aquellas superficies que no hubieren sido
objeto de pronunciamiento o resolución, reconociendo la condición de tierra fiscal como
resultado de saneamiento, dando lugar a su registro definitivo en Derechos Reales a favor del
INRA en representación del Estado y en un Mapa Base previsto para la formación del catastro
legal. Esta resolución puede ser emitida por área o polígono, donde además debe disponer el
desalojo conforme lo dispuesto en los Arts. 453 y 454 del Decreto Supremo 29215.
El Titulo Ejecutorial es un documento público a través del cual el Estado reconoce el derecho de
propiedad agraria a favor de sus titulares, el cual es otorgado una vez que la Resolución Final de
Saneamiento se encuentra ejecutoriada; ahora bien, los títulos ejecutoriales deben estar escritos
en idioma castellano y consignar las siguientes características establecidas en el Art. 394 del
Decreto Supremo NO 29215 donde establece lo siguiente: "ARTÍCULO 394,-
(CARACTERÍSTICAS). Los Títulos Ejecutoriales se emitirán por escrito, en idioma castellano
y consignarán las siguientes características:
a) Escudo Nacional;
Asimismo, de acuerdo al Art. 395 del mismo cuerpo legal, los Títulos Ejecutoriales deben
contener lo siguiente:
h) Otras especificaciones.
III. El plano predial constituye parte indisoluble del Título Ejecutorial, debiendo estar adjunto al
mismo.
IV. En caso de pequeña propiedad con varias parcelas discontinuas, se podrá emitir un solo
Titulo Ejecutorial por todas o por cada una de ellas, conforme la solicitud del propietario, V.
Los Titulos Ejecutoriales se otorgarán en doble ejemplar; uno para el titular del derecho y otro
para archivo en el Instituto Nacional de Reforma Agraria".
2. Identificación de Tierras con incumplimiento de función económico social que cuenten con
antecedentes en procesos titulados o en trámite. Este procedimiento especial de saneamiento
debe ser ejecutado por las Direcciones Departamentales del INRA, a denuncia, de oficio o por
instrucción del Director Nacional, cuando se identifiquen tierras sin actividad productiva.
Dentro del trámite de identificación de tierras fiscales, se debe ejecutar bajo el siguiente
procedimiento:
3. Dentro del plazo señalado anteriormente, se procede a la mensura y delimitación de las tierras
fiscales. Si se establece la existencia de derechos agrarios con base en títulos, trámites o
posesiones legales; asimismo se debe disponer que se tramite como tierras con incumplimiento
de la Función Económica Social, de acuerdo a lo previsto en el Inc. d) del Art. 350 del Decreto
Supremo 29215. a tal efecto, en los siguientes cinco (5) días calendario de vencido el plazo, se
debe elaborar el informe técnico y legal que establezca la condición de las tierras fiscales, su
disponibilidad y en consecuencia proyectándose la Resolución Final de Saneamiento, que se
remitirá junto a sus antecedentes, a la Dirección Nacional del INRA.
4. Ulteriormente el Director Nacional del INRA en el plazo de cinco días, debe emitir la
Resolución de Tierra Fiscal, respecto de aquellas superficies que no hubieren sido objeto de
pronunciamiento o resolución reconociendo la condición de tierra fiscal como resultado de
saneamiento dando lugar a su registro definitivo en Derechos Reales a favor del Instituto
Nacional de Reforma Agraria en representación del Estado, aclarando que esta resolución puede
ser emitida por área o polígono. Asimismo, en dicha Resolución también se debe disponer el
desalojo conforme lo dispuesto en los Arts. 453 y 454 del Decreto Supremo 29215.
Económica Social Para el caso de las tierras con incumplimiento de la función económica
social, se deben sujetar a las etapas y actividades previstas para el saneamiento común;
priorizando la ejecución de su saneamiento y adoptando las medidas precautorias que
correspondan, conforme las previsiones del Art. 10 del Decreto Supremo 29215, sin embargo, el
inicio de la ejecución del saneamiento priorizado no puede ser mayor a quince (15) días
calendario.
La práctica de estos últimos años muestra que las modalidades de saneamiento de: Saneamiento
Integrado al Catastro (CATSAN) Saneamiento Simple (SAN-SIM) y Saneamiento de Tierras
Comunitarias de Origen (SAN-TCO), tienen una formulación compleja que requiere
simplificarse y esta simplificación se ejecuta a través del saneamiento interno, que es el más
aplicable dentro de los tres procedimientos especiales. En tal sentido, es importante señalar que
el saneamiento interno, a constituirse en un procedimiento especial, es aplicable en todas las
modalidades de saneamiento de la propiedad agraria; sin embargo, únicamente procede a favor
de las colonias y comunidades campesinas qu tengan derechos o posesiones individuales a su
interior. Las áreas de uso común deben ser preservadas conforme su aptitud y uso tradicional, lo
cuales deben ser tituladas a favor de la colonia.
En consecuencia, corresponde señalar que el saneamiento interno, ese instrumento de
conciliación de conflictos y la delimitación de linderos basados en usos y costumbres de las
comunidades campesinas y colonias, sin constituir una nueva modalidad de saneamiento,
pudiendo sustituir actuados del procedimiento común de saneamiento, este puede ser total o
parcial de las actividades de Diagnóstico y Planificación, Campaña Pública y Relevamiento de
Información en Campo, siempre que los productos del saneamiento interno sean revisados y
validados por el INRA, asimismo el saneamiento interno puede ejecutarse en forma conjunta
cuando exista convenio. Empero, la ejecución del saneamiento interno debe ser previamente de
conocimiento del INRA para ser incluido en la Resolución Determinativa de Área Y de Inicio
del Procedimiento. Asimismo, la definición del perímetro está a cargo de la entidad ejecutora
del proceso de saneamiento, conjuntamente con las personas interesadas, aspecto sobre el cual
el Tribunal Agroambiental estableció similar entendimiento, mediante
1. Fijar domicilio común para actos procesales formales y nombrar representantes para
actuar, a nombre de la comunidad y de las personas interesadas, en el proceso de
saneamiento y titulación de sus tierras.
2. Fijar la forma de convocatoria y notificación de los interesados en el proceso según sus
usos y costumbres.
3. Determinar los linderos al interior de su organización firmando actas de conformidad.
4. Conciliar y resolver los conflictos al interior de su organización.
5. Registrar en libros de actas, datos sobre las personas interesadas, los predios y los
derechos sobre los mismos.
6. Recabar copias de documentos respaldatorios de los derechos y de la identidad de las
personas interesadas.
7. Emitir certificaciones sobre la posesión, el abandono de la propiedad agraria y otros.
En todos los casos, en el marco de sus usos y costumbres, se debe preservar la unidad de las
organizaciones sociales. Ahora bien, los resultados de saneamiento interno involucran en sus
efectos a los predios ocupados por las personas que se sometan al mismo, sin embargo, en caso
de presentarse conflicto con colindantes de otras organizaciones o beneficiarios de otros
predios, debe pasar a conocimiento del INRA, para que dicha institución proceda al
procedimiento común de saneamiento.
Empero, en el caso de que no exista conflicto, los resultados del saneamiento interno deben ser
puestos a conocimiento y consideración del INRA, para su validación conjunta con la colonia o
comunidad, a cuyo efecto el INRA debe emitir el informe en conclusiones y las resoluciones
finales de Saneamiento que correspondan; aclarando que las notificaciones con las actuaciones
de saneamiento, incluyendo la Resolución Final de Saneamiento deben ser realizadas al
representante de las colonias y comunidades campesinas.
Con carácter previo es pertinente señalar que la palabra recurso proviene del latin "recursus",
que significa, "curso retrógrado, corrida para atrás. camino de vuelta, vuelta, posibilidad de
volver".
Los recursos son, genéricamente hablando, medios de impugnación de los actos procesales.
Realizando el acto, la parte agraviada por él tiene. dentro de los límites que la Ley confiera,
poderes de impugnación destinados a promover la revisión del acto y su eventual modificación.
1. Definición
Manuel María Diez, citado por Pablo Dermizaky Peredo, señala que:
Es una pretensión deducida ante un órgano administrativo por quien tiene derecho a ello con el
fin de obtener la revocación o modificación de un acto administrativo dictado por ese mismo
órgano o por el inferior jerárquico". Por su parte Cassagne define que: "Es toda impugnación, en
término, de un acto o reglamento administrativo que se dirige a obtener, del órgano emisor del
acto, el superior jerárquico u órgano que ejerce el control de tutela, la revocación, modificación
o saneamiento del acto impugnado".
El profesor Rubén Correa Freitas, señala que “para que haya un recurso administrativo, es
necesario que haya un acto administrativo contrario a la Constitución o a las leyes, decretos o
reglamentos o este sea inconveniente o inoportuno". El Doctrinario Roberto Dromi, señala que
"el "recurso" en su concepto general, es el medio por el cual se acude a un juez o a otra
autoridad con una demanda o petición para que sea resuelta, y en sentido restringido, es el
medio administrativo específico por el que se impugnan solamente actos administrativos a
objeto de defender derechos subjetivos o intereses legítimos".
Para el profesor Allan R. Brewer-Carías es: "La garantía por excelencia del derecho a la
defensa, es el derecho de los interesados a impugnar o atacar, en sede administrativa, los actos
administrativos emanados como resultado del procedimiento administrativo.
Administración, del control interno sobre sus actos administrativos. En consecuencia, podemos
señalar que los recursos administrativos surgen, como un remedio, a la actuación de la
administración; es decir, son medios legales que el ordenamiento jurídico franquea a los
administrados para lograr, a través de la impugnación, que la Administración rectifique o
modifique su proceder. Constituyéndose en la garantía del administrado para una efectiva
protección de su situación jurídica.
.2 Procedencia
2. Procedencia
1. Los actos administrativos que afecten, lesionen o pudieren causar perjuicio a los
derechos subjetivos o intereses legítimos de las personas y que impidan la prosecución
del trámite, sin resolver el fondo de la cuestión planteada.
2. Contra las resoluciones administrativas, que no definan derecho propietario.
3. Contra las providencias, autos y resoluciones simples dictadas por las autoridades,
únicamente procede recurso de revocatoria ante la misma autoridad y recurso ulterior,
Lo que significa que posteriormente no se puede plantear Recurso Jerárquico.
4. Forma de presentación
6. Admisión
En el marco de lo previsto en el Art. 80 del Decreto Supremo No. 29215. los plazos se
suspenden en los siguientes casos:
7. Término de prueba
La autoridad encargada de la sustanciación del recurso, de oficio o a pedido del recurrente, tiene
la facultad de disponer la producción de prueba cuando estime que los elementos reunidos en las
actuaciones no fueren suficientes para resolverlo. El plazo para la producción de prueba, no
puede ser mayor a diez (10) días calendario.
2. Que la misma autoridad que dictó la resolución impugnada o la autoridad competente para
resolver el recurso, de oficio o a pedido de parte, disponga su suspensión en los siguientes
casos:
Por otro lado, se debe tener presente que la interposición de la demanda contenciosa
administrativa, suspende la competencia del Instituto Nacional de Reforma Agraria para el caso
concreto.
9. Silencio administrativo
Transcurrido el plazo previsto sin que la autoridad hubiera dictado la resolución que resuelva el
recurso planteado, el recurrente debe considerar denegada su solicitud, por silencio
administrativo negativo, pudiendo deducir el recurso administrativo que corresponda, sin
perjuicio de las responsabilidades administrativas emergentes.
Los recursos administrativos franqueados por la normativa agraria, más propiamente por el
Decreto Supremo NO 29215 son dos: Recurso Revocatoria y Recurso Jerárquico. En tal sentido,
se debe tener presente, que el recurrente a elección puede presentar ante la misma autoridad que
emitió la resolución objeto de impugnación, ya sea como el recurso de revocatoria, o
directamente el recurso jerárquico si está previsto este recurso. Toda vez que no es
indispensable agotar subsidiariamente el recurso de revocatoria, para posteriormente plantear
recurso jerárquico; ejemplo, si una persona es notificada con una resolución que lesione sus
derechos subjetivos, a elección suya puede plantear recurso de revocatorio o recurso jerárquico.
Por otro lado, también puede darse la figura, de que el administrado por descuido se hubiera
hecho vencer con el plazo para plantear el recurso de revocatorio que es de cinco días, en este
caso lo recomendable es que el administrado pueda plantear directamente recurso jerárquico,
considerando de que aún se encuentra dentro del plazo para plantear jerárquico, que es de
quince días calendario, empero siempre que esté dentro del plazo para plantear el recurso
jerárquico.
La autoridad competente debe resolver el Recurso de Revocatoria dentro del plazo de diez (10)
días calendario, computable a partir de su interposición o a la recepción de actuados para su
resolución, dicha resolución debe ser emitida en una de las siguientes formas:
1. Desestimando, cuando hubiese sido interpuesto fuera de término de cinco (5) días
calendario, en el marco de lo dispuesto en el Art. 85 del Decreto Supremo 29215, o por
un recurrente no legitimado; no cumpla con los requisitos esenciales de forma; o la
materia del recurso no esté dentro del ámbito de su competencia en razón de materia o
territorio.
2. Revocando total o parcialmente cuando la resolución recurrida vulnera derechos
subjetivos de la parte actora.
3. Rechazando el recurso y confirmando en todas sus partes la resolución de instancia
recurrida, cuando el acto administrativo se encuentre conforme a derecho, vale decir
que no exista ninguna vulneración de derechos subjetivos.
El profesor Pablo Dermizaky Peredo señala que: "El recurso jerárquico es llamado en España
recurso de alzada, es el que se interpone ante la autoridad jerárquicamente superior a la que ha
remitido una resolución que el recurrente pide se anule o modifique de cuyos elementos
esenciales es la facultad que tiene el superior de suspender y revocar los actos del inferior...
Según Puchetti, Antonio Corrado el recurso jerárquico es "un instituto jurídico querido y
dispuesto para asegurar un remedio, sui generis, a favor del ciudadano contra los actos
administrativos.
La autoridad competente, debe resolver el Recurso Jerárquico dentro del término de veinte (20)
días calendario, siguientes a su interposición o la recepción de actuados para su resolución. Sin
embargo, cuando la resolución del recurso sea de competencia del Ministerio de Desarrollo
Rural y Tierras. el plazo para resolver es de treinta (30) días calendario, el cual debe ser resuelto
en una de las siguientes formas:
1. Desestimando, cuando hubiese sido interpuesto fuera de término quince (15) días
calendario, en virtud a lo establecido en el Art. 88 del Decreto Supremo 29215, o por un
recurrente no legitimado; no cumpla los requisitos esenciales de forma; o la materia del
recurso no esté dentro del ámbito de su competencia en razón de materia o territorio.
2. Revocando total o parcialmente cuando la resolución recurrida vulnera derechos
subjetivos de la parte actora.
3. Rechazando el recurso y confirmando en todas sus partes la resolución de instancia
recurrida, cuando el conforme a derecho, vale decir que no exista ninguna vulneración
de derechos subjetivos.
Las resoluciones emitidas por las autoridades competentes, deben ser debidamente motivadas y
fundamentadas, cumpliendo lo previsto por los Arts. 65 y 66 del Decreto Supremo 29215.
Extremo sobre el cual el Tribunal Constitucional Plurinacional, estableció similar
entendimiento, a través de las siguientes constitucionales: SCP N° 1302/2015-S2 de fecha 13 de
noviembre de 2015, y SCP 1083/2014 de fecha 10 de junio de 2014, entre otros.
En el marco de lo dispuesto por el Art. 84 del Decreto Supremo 29215. las Resoluciones
Administrativas notificadas, no recurridas dentro de los plazos establecidos o cuando medie
renuncia expresa al término de impugnación, quedan ejecutoriadas, Asimismo, causan estado en
sede administrativa, cuando se trate de actos administrativos contra los cuales no proceda
ningún recurso administrativo, vale decir no existe ningún recurso ulterior, en el marco de lo
dispuesto por el Art. 90 inciso a) de la normativa referida líneas arriba.
La distribución de las tierras fiscales se encuentra a cargo del INRA, en todo el territorio del
Estado Plurinacional de Bolivia, de conformidad con los Arts. 3 Par. V, 42 y 43 de la Ley NO
1715, modificada por Ley No. 3545 y el Título IV del Decreto Supremo No. 29215, no siendo
aplicable al procedimiento de saneamiento de la propiedad agraria, ante tal extremo se tiene dos
modalidades de distribución de tierras fiscales: 1. La dotación y 2. La adjudicación, siendo que
la primera es a título gratuito y el segundo a título oneroso, aunque de acuerdo a la Constitución
Política del Estado el Art. 395 únicamente hace referencia a la dotación de las tierras fiscales a
favor de indígena originario, campesinos, comunidades interculturales originarias,
afrobolivianos y comunidades campesinas que no las posean o las posean insuficientemente. Sin
embargo, preliminarmente es pertinente estudiar la disponibilidad de la tierra fiscal.
Con carácter previo a ingresar a las modalidades de distribución de tierras, debemos tener
presente que el INRA, debe identificar la existencia de las tierras fiscales, los cuales a su vez se
clasifican en: tierras fiscales disponibles y las tierras fiscales no disponibles, extremos estos que
estudiaremos a continuación:
Son considerados tierras fiscales disponibles aquellos, sobre los cuales. si procede la
distribución de tierras, sea esta en la modalidad de dotación o adjudicación en los casos
establecidos en el Art. 92 Par. I del Decreto Supremo No. 29215, donde señala lo siguiente: "I.
Son tierras fiscales disponibles:
Las tierras fiscales cuyos derechos de concesión forestal hubiesen caducado o se los hubiese
revocado o anulado, conforme a la Ley No. 1700 de 12 de julio de 1996, Forestal; y Las que
fueran objeto de una declaración de nulidad sin dar lugar a la dotación o adjudicación simple,
prevista en el Artículo 50 de la Ley No. 1715 y que los afectados por la nulidad no cumplan la
función social o la función económico-social".
Son consideradas tierras fiscales no disponibles, aquellas, sobre las cuales no procede ninguna
modalidad de distribución de tierras, en el marco de lo previsto en el Art. 92 Par. II del Decreto
Supremo N°29215, donde señala lo siguiente:
b) las áreas protegidas del sistema nacional de áreas protegidas que se encuentren bajo gestión
del Servicio Nacional de Áreas Protegidas y aquellas en las que de acuerdo a su ley o decreto
supremo de creación y a su plan de manejo vigente estén prohibidos expresamente los
asentamientos humanos, salvo la compatibilidad de estas áreas con los pueblos indígenas u
originarios. Las restantes áreas protegidas creadas por norma de menor jerarquía no se incluyen
en este inciso.
b) Aquellas tierras que sean requeridas por instituciones o empresas públicas para la ejecución
de proyectos u obras de interés nacional. Seran declaradas no disponibles hasta el cumplimento
de su implementación. mediante resolución administrativa del Director Nacional del Instituto
Nacional de Reforma Agraria".
Una vez identificadas las tierras disponibles, el Director del INRA Departamental donde sea
identificada la tierra fiscal, a objeto de dar inicio a los procesos de distribución, debe remitir
antecedentes al Director Nacional del INRA en un plazo no mayor a diez días calendario, para
que una vez cumplido el procedimiento establecido por los Arts. 94, 95 y 97 del Decreto
Supremo 29215.
El Director Nacional del INRA debe emitir la resolución de modalidad de distribución de tierras
en el plazo perentorio de diez días calendario sea esta en la modalidad de dotación o
adjudicación, a cuyo efecto debiendo publicarse la resolución por una sola vez en un medio de
difusión nacional además de comunicados en medios radiales en la zona donde se encuentra
ubicada la tierra fiscal, así mismo se debe poner en conocimiento de las organizaciones sociales
miembros de las Comisiones Agrarias Departamentales.
Sin embargo, cuando medien razones fundadas de interés público, calificada mediante
Resolución Suprema o cualquier norma legal de rango superior, las modalidades de distribución
pueden ser modificadas con arreglo al procedimiento establecido para su determinación,
salvando los actuados existentes.
1.2.1. Dotación de Tierras Fiscales
2.1. Dotación de Tierras Fiscales
Ahora bien, al momento de proceder a la dotación de tierras fiscales, e INRA, en el marco de las
políticas nacionales, debe considerar, si fare necesario, el reagrupamiento de familias y
comunidades, de manera que sea sostenible para la implementación de políticas de desarrollo
rural conforme las características del uso de la tierra, esta valoración es aplicable en aquellas
comunidades cuyos miembros hubiesen abandonado las tierras, previa verificación y consulta
con la comunidad beneficiaria. Asimismo, las dotaciones se deben efectuar considerando las
preferencias legales bajo de siguiente criterio: 1. En favor de pueblos y comunidades, indígenas
u originarias, campesinas y colonizadores que residan en el lugar y no posean tiem. 2. En favor
de pueblos y comunidades, indígenas u originarios, campesinas y colonizadores que residan en
el lugar y posean tierra insuficiente.
3. En favor de pueblos y comunidades, indígenas u originarias, campesinas y colonizadores que
no residan en el lugar y que no posean o la posean insuficientemente. En el procedimiento de
dotación ordinaria a su vez se ejecuta si programas de asentamiento y con programas de
asentamiento, motivo para cual señalaremos las diferencias entre cada uno de ellos de la
siguiente manera:
La dotación sin programas de asentamiento es efectuada una vez que haya sido seleccionada la
comunidad beneficiaria, en mérito al análisis, valoración de las preferencias legales y si se
establece que la dotación deba contemplar la implementación de programas de Adentramientos
Humanos, previo dictamen legal si considera pertinente, el Director Nacional del INRA debe
dictar resolución de dotación a favor de la comunidad seleccionada, en el plazo de quince (15)
días, de acuerdo a lo establecido en los Arts. 117 y 118 del Decreto Supremo 29215. Asimismo
en virtud a la Disposición Final Décimo Primera de la Ley NO 3545, el Estado debe apoyar en
lo técnico y económico a las comunidades campesinas, indígenas y originarias, beneficiadas con
dotación de tierras fiscales, para el efectivo desarrollo de sus potencialidades productiva,
conforme el uso sostenible de la tierra.
Los programas de asentamientos humanos, deben ser elaborados por el Ministerio de Desarrollo
Rural y Tierras, a través del Viceministerio de Tierras, en el marco de lo dispuesto en el Art. 1
IO inciso b) del Decreto Supremo 29894 de 07 de febrero de 2009, considerando las
necesidades socioeconómicas a objeto de satisfacer intereses públicos especiales de la
comunidad beneficiaria, el cual debe ser puesto a conocimiento del Director Nacional del
INRA, aunque éste en casos de necesidad y urgencia, tiene la facultad de autorizar el
asentamiento humano de los solicitantes en las tierras objeto del trámite de dotación, con cargo
a las modificaciones que se pudieran introducir en el programa de asentamientos humanos.
Asimismo, los programas deben ser ejecutados en un plazo no mayor a dos años, salvo razones
de fuerza mayor.
La autorización de asentamiento humano debe ser emitida por el INRA en el plazo de cinco días
calendario computable a partir de la recepción programa de Asentamientos Humanos, mediante
Resolución Administrativa debidamente motivada y fundamentada,
2.1.2.1. Solicitud
La solicitud de dotación simple se debe presentar por la comunidad afectada con la sentencia de
nulidad absoluta, ante la Dirección Departamental del INRA competente, es decir, lugar donde
esté ubicada la tierra objeto de solicitud de dotación, dentro del plazo perentorio improrrogable
de noventa (90) dias calendario, computables a partir de la ejecutoria de la sentencia declarativa
de nulidad absoluta, vencido el plazo referido supra, si no mediare solicitud, la persona afectada
con la sentencia de nulidad no puede beneficiarse con la dotación simple y la tierra disponible
puede distribuirse a través de otro procedimiento concordare con modalidad de distribución que
se determine.
Ahora bien, la solicitud de dotación simple, se debe presentar por es y cumpliendo los siguientes
requisitos:
Los Directores Departamentales del INRA, dentro de los dos (2) días hábiles de recibida la
solicitud, deben requerir lo siguiente:
En base a los informes técnico y legal, emitidos en el marco del Art. 122del Decreto Supremo
NO 29215, se debe:
2.1.2.5. Resolución
El afectado con la sentencia de nulidad que no se hubiere beneficiado la dotación simple, estará
sujeto al procedimiento de desalojo.
La adjudicación es a título oneroso a precio del valor del mercado y procede a favor de personas
naturales o jurídicas, la cual a su vez se constituye en una de las modalidades de distribución de
tierras por el Estado, a efectos de constituir derecho de propiedad sobre Solares Campesinos
Pequeñas Propiedades. Medianas Propiedades y Empresariales, en el marco de lo establecido en
el Art. 42 de la Ley NO 1715 concordante con el Art 126 y 127 del Decreto Supremo 29215. A
cuyo efecto la normativa agraria prevé dos formas de adjudicación, conforme se detalla a
continuación: 1 Ordinara y 2). Simple, en tal sentido estudiaremos el procedimiento de cada una
de las formas de adjudicación.
Ahora bien, una vez emitida la resolución determinativa de modalidad de distribución de tierras
fiscales, el Director Nacional del INRA, debe solicitar a la ABT el precio base y el precio tope
de Adjudicación de la tierra objeto de distribución, ulteriormente recibido el precio de
adjudicación, Dirección Nacional del INRA, con base en la información y da proporcionados
por la ABT. Tratándose de Solares Campesinos y Pequeñas Propiedades, además del precio
base, debe fijar un precio tope de adjudicación, tomando en cuenta necesariamente la función
social que se cumplan.
Los Directores Departamentales del INRA, recibidos los antecedentes el plazo de diez (10) días
calendario, debe disponer la publicidad de áreas de adjudicación conforme a lo previsto en el
Art. 144 del Decreto Supremo 29215 y debe poner en conocimiento de organizaciones sociales
matrices campesinos, e indígenas a efecto de que terceros legitimados presente solicitudes de
adjudicación. La publicación se debe efectuar en un medio de comunicación de alcance
nacional, por una sola vez y en una radiodifusora de alcance nacional o local con la finalidad de
asegurar su mayor difusión, asimismo facultativamente, la publicación también se puede
realizar en otros medios de difusión, como radioemisora, televisión, carteles, murales, volantes,
o afiches, que se juzguen útiles y que contribuyan a facilitar la concurrencia de interesados,
dicha publicación debiéndose especificar necesariamente los siguientes aspectos:
Las solicitudes de adjudicación pueden ser presentadas por las personas legitimadas o sus
representantes orgánicos o convencionales, dentro del plazo perentorio e improrrogable de
treinta (30) días calendario, siguientes a la publicación de áreas de adjudicación, ante las
Direcciones Departamentales del INRA, que conocen el procedimiento, asimismo dichas
solicitudes deben ser presentadas por escrito y deben contener lo siguiente: 1. Acompañe los
siguientes documentos, según la legitimación invocada:
Las solicitudes pueden ser recepcionadas por el INRA Departamental por las Jefaturas
Regionales autorizadas por el INRA, a cuyo efecto los Directores Departamentales del INRA,
recibidas las solicitudes, debe requerir la valoración correspondiente y en consecuencia remita
informe legal sobre la presentación y el cumplimiento de los requisitos de forma y contenido
exigidos, que debe ser expedido en el plazo máximo de cinco días hábiles. Ulteriormente los
Directores Departamentales del INRA, con base en el informe legal, en el plazo de tres (3) días
hábiles deben realizar lo siguiente:
El concurso público calificado consiste en que admitidas las solicitudes de adjudicación, los
Directores Departamentales del INRA , deben dictar resolución:
Ahora bien, en el caso de los Solares Campesinos Y Pequeñas Propiedades se debe proceder al
concurso de precios entre las ofertas habilitadas, teniendo preferencia la oferta mayor sobre el
precio base y en caso de igualdad de ofertas, de la misma forma que en el caso anterior se debe
proceder al sorteo.
Al término del acto, se debe levantar acta que especifique tiempo y lugar de la audiencia,
relación de oferentes habilitados y presentes y monto de las ofertas; dicha acta debe ser firmada
por el servidor público designado, DERECHO PROCESAL AGRARIO Notario de Fe Pública
interviniente y los oferentes presentes que desees hacerlo, y elevada a conocimiento de su
Director Departamental con todos los antecedentes.
2.2.1.6. Adjudicación
Los Directores Departamentales del INRA, dentro de los dos (2) días hábiles siguientes a la
recepción del acta de recepción de ofertas, y en su caso, del acta de apertura y/o mejora de
ofertas, debe remitir a la Dirección Nacional, el respectivo proyecto de resolución, con todos los
antecedentes A cuyo efecto el Director Nacional del INRA dentro de los cinco (5) días hábiles
de recibido el proyecto, debe dictar la resolución disponiendo lo siguiente:
El precio de adjudicación debe ser pagado dentro del plazo perentorio improrrogable de tres (3)
días hábiles, computables a partir de la notificación con la resolución de adjudicación y
titulación, mediante dos formas:
La falta de pago del precio de adjudicación, deja sin efecto a adjudicación y habilita se dicte una
nueva resolución de adjudicación y titulación en favor del oferente que presentó la oferta
admisible que precede en monto, a la del adjudicatario anterior, y al cobro de la garantía de
seriedad de oferta.
Las ofertas se pueden retirar antes de la apertura de las mismas, en cuyo caso se deben devolver
las garantías, sin embargo, si la oferta se retira después de abierta la misma y antes de dictada la
resolución de adjudicación, el oferente pierde las garantías en favor del INRA.
1. Los casos señalados en los Núm. 1, 2 y 3 del Par. III del Art. 50 de la Ley NO 1715.
2. Los casos en los que la sentencia de nulidad absoluta del Título Ejecutorial se funde en
la existencia de otro emitido con anterioridad.
3. Los casos en los que se compruebe, que el título fue obtenido mediante la comisión de
un delito.
2.3.1. Procedimiento
4. El precio de adjudicación se debe sujetar al régimen establecido en el Art. 148 del Decreto
Supremo 29215. Sin embargo, la falta de pago de sin efecto la adjudicación y se debe habilitar a
distribuir la tierra a través de otro procedimiento concordante con la modalidad de distribución
que se determine.
Ahora bien, el afectado con la sentencia de nulidad que no se hubiere! beneficiado con la
adjudicación simple, renuente a la entrega de la propiedad agraria, está sujeto al desalojo de
asentamientos y ocupaciones ilegales, de acuerdo a lo previsto en los Arts. 447 y 449 del
Decreto Supremo 29215.
La reversión como institución específica del Derecho Agrario, se encuentra regulado por el Art.
51 de la Ley No. 1715, el cual hace referencia al prefijo 'rever" que significa volver a ver, y el
sub «sion", que se refiere a la acción o efecto.
Dentro de la lengua española, podemos encontrar diversas acepciones, con lo que la reversión,
no es otra cosa que la restitución de una cosa a la propiedad del dueño que antes tuvo, es decir al
pueblo boliviano sin que medie indemnización alguna, tomando en cuenta los alcances de los
Arts. 348 y 349 de la CPE; entonces la reversión, en esencia significa recuperar la cosa, o bien
la retrocesión, que es la cesión del derecho que se había cedido, acciones que de ninguna
manera pueden ser imprescriptibles: por lo que el derecho agrario establece la posibilidad de
realizar las verificaciones de la FES pasado 2 años a partir de la titulación de la tierra y
posteriormente en el mismo plazo computable desde la última verificación de la FES del predio.
En esa misma línea, el Profesor Ruffo Nivardo Vasquez Mercado señala que: "La reversión es
la restitución de la propiedad agraria al dominio originario de la nación sin indemnización
alguna, cuando su uso perjudique el interés colectivo".
Independientemente de posibles mutaciones del derecho. Sin embargo, para aplicar un nuevo
procedimiento de reversión deben transcurrir por lo menos dos años desde la última verificación
de la FES, no pudiendo efectuarse con anterioridad.
1.3 Procedimiento
3. Procedimiento
El procedimiento de reversión se puede iniciar a denuncia efectuada por las entidades o las
organizaciones especificadas en el Art. 32 de la Ley No. 3545, o de oficio, cuando el INRA
identifique predios que no estén cumpliendo la FES o a denuncia de cualquier persona
particular.
Las denuncias presentadas ante la Dirección Nacional del INRA deben competente, a efectos de
que esta inicie el procedimiento de reversión, bajo constancia, de conformidad con el Art. 162
del Decreto Supremo 29215 En el caso de que las denuncias sean efectuadas por particulares, el
mismo debe ser presentado por escrito o en los formularios diseñados por el INRA, detallando
los siguientes datos:
Sin embargo, la ausencia de uno de estos datos, no impedirá el inicio del proceso, siempre que
los demás permitan identificar el predio. Aclarándose que el denunciante particular, no es parte
en el procedimiento, empero puede participar del procedimiento en calidad de control social.
Por otro lado, si la denuncia es efectuada por la ABT o por el Servicio Nacional de Áreas
Protegidas (SERNAP), además de lo descrito en el punto anterior debe acompañar sus actuados
institucionales y toda información pertinente que curse en su poder.
Con los antecedentes descritos anteriormente, el Director Departamental competente del INRA,
en el plazo máximo de veinticuatro horas debe disponer que, por el área correspondiente, se
elabore un informe preliminar con el objeto de valorar la denuncia y sugiera el curso de acción a
seguir. Adicionalmente, pudiendo requerir a otras instituciones información un para la
sustanciación del procedimiento.
1. Identificación del o los titulares del derecho de propiedad o los que figuren como
subadquirentes en el registro de transferencias de la propiedad agraria.
3. La clase de propiedad a la que pertenece, sea por titulación, por efecto de fusión de predios o
resultado de una subdivisión de propiedad titulada como Mediana Propiedad o Empresarial.
Con los datos descritos en el informe preliminar, el Director Departamental del INRA, el mismo
día de recibido dicho informe, debe emitir auto de inicio, si se estableció la procedencia del
procedimiento: de remisión a otro procedimiento o de rechazo, según corresponda. Ahora bien,
el Auto de Inicio del procedimiento de reversión, con base en el informe preliminar, debe
disponer lo siguiente:
2. Notificación
Dictado el Auto de Inicio del procedimiento de reversión, se debe notificar en el plazo de cinco
(5) dias calendario conforme a la forma y procedimiento establecido en el Art. 70 del Decreto
Supremo 29215, asimismo a los fines de este procedimiento, se tendrá como domicilio el predio
objeto de reversión cuya ubicación esté establecida en el proceso de saneamiento o en el registro
de transferencias, cuando sea resultado de una mutación del derecho.
3. Control Social
Dentro los cinco (5) días calendario de dictado el Auto de Inicio del procedimiento de reversión,
a efectos del control social, se debe poner conocimiento:
1. Del Presidente de la CAD y de sus miembros para que estos a su vez hagan conocer a
sus afiliados ubicados en la zona donde se ubica el predio los predios
2. De la ABT o del SERNAP, si son denunciantes o si se considera importante su
presencia del denunciante particular, si corresponde.
Los Directores Departamentales del INRA, una vez recibido el informe con los antecedentes y
el proyecto de resolución, debe elevar inmediatamente los actuados ante el Director Nacional
del INRA a efectos de que este emita la Resolución.
7. Resolución y su Ejecutorial
Una vez recibidos los antecedentes del procedimiento, el Director Nacional del INRA previo
dictaren, si considera necesario, en el plazo no mayor a tres (3) dias calendario, debe emitir la
Resolución Final de Reversión y estos pueden ser resueltos de la siguiente forma:
1. De reversión total o parcial, cuando se hayan cumplido todas las formalidades del
procedimiento y se haya establecido la causal de la respectivamente. reversión,
2. De desestimación del procedimiento al establecer que no se ha establecido la causal de
reversión.
1. Intimar el retiro de mejoras separables existentes en la tierra revertida, dentro del plazo
perentorio de diez (10) días calendario a la ejecutoria de la resolución, bajo
apercibimiento de lanzamiento al tercer día y consolidación en favor del INRA, en
representación del Estado, de las mejoras que por su naturaleza no puedan separarse o
siendo separables no fueran retiradas al vencimiento del plazo, como compensación por
los daños causados.
2. La cancelación de los registros de propiedad que existieren sobre el predio y de las
partidas correspondientes a hipotecas, anticresis y gravámenes que recaen sobre la
misma.
3. La inscripción en el registro de Derechos Reales de la tierra revertida levantar a nombre
del INRA, en representación del Estado.
7.3 Notificación
Una vez emitida la resolución final de reversión o de desestimación, en los dos (2) dias
siguientes debe ser remitida a la Dirección Departamental del INRA que sustanció el
procedimiento, para que en el plazo de cinco (5) días calendario de recibida la resolución se
notifique conforme el Art. 70 del Decreto Supremo 29215.
7.4. Impugnación
7.5. Ejecutoria
La expropiación "Es el acto por el que el Estado priva a una persona del derecho de propiedad
sobre un bien, cuando así lo requiera la utilidad pública o cuando la propiedad no cumple una
función social, calificada conforme a ley previa indemnización justa.
Para el profesor Calle, la expropiación de la propiedad agraria, es una institución del Derecho
Agrario en virtud a la cual el Estado con fines de utilidad pública o social, adquiere bienes de
una persona limitando el derecho de propiedad, conforme al procedimiento determinado en los
preceptos legales que rige al efecto y mediante el pago de una indemnización justa.
1.2 Causales
2. Causales
En tal sentido, conforme las causales ya citadas, estudiaremos cada una de ellas.
1.2.1. Expropiación por Causa de Utilidad Pública
2.1. Expropiación por Causa de Utilidad Pública
2.1.1.1. Procedimiento
1. Las áreas en las cuales se efectuará la expropiación, se debe tomar prioritariamente las áreas
que se encuentren al interior de la demanda de saneamiento que el pueblo indígena beneficiario
hubiese planteado y fuese admitida por el INRA, o la solicitud de distribución de tierras fiscales,
según se trate, excluyendo aquellas que correspondan a solares campesinos. pequeñas
propiedades, propiedad comunal y tierras comunitarias de origen.
2. Para la selección del área se debe tomar en cuenta factores como la accesibilidad, solución de
continuidad con las áreas dotadas, sitios de valor histórico o cultural y potencial productivo para
el pueblo indígena, en estos casos, aunque no se encuentren dentro del área demandada.
¿Quiénes tienen legitimación activa para solicitar? Están legitimados para requerir la solicitud
para el inicio del procedimiento de expropiación para fines de reagrupamiento redistribución, y
de conservación y protección de la biodiversidad:
Ulteriormente el Director Nacional del INRA a través de sus órganos competentes, en un plazo
no mayor a tres días calendario, debe elaborar informe técnico legal respecto a la solicitud
presentada, que debe considerar mínimamente los siguientes aspectos:
Se debe tener presente, que en cualquier momento y hasta la etapa de verificación, los titulares
acreditados o acreedores pueden presentar prueb documental preconstituida que demuestre el
desarrollo de actividad productiva, así como la inversión realizada, para que la misma sea
evaluada en la etapa de verificación asimismo los acreedores que hubieran registrado su
acreencia en el registro de Derechos Reales y se hubieren apersonado al proceso de
expropiación, deben ser pagados con la indemnización, en la medida de su acreencia y de
acuerdo a lo previsto por el Art. 63 de la Ley No 1715.
Previa verificación en cada uno de los predios ubicados al interior del área de expropiación, el
INRA, una vez recibido el dictamen técnico de monto indemnizatorio de los predios, en el plazo
de siete días calendario debe elaborar el informe en conclusiones que de manera expresa
establezca lo siguiente:
1. Si existen indicios o se ha evidenciado el incumplimiento de la Función Económico
Social, en alguno de los predios ubicados en el área, se sugerirá la dictación de auto de
conversión a procedimiento de reversión o se derive para la emisión de resolución de
reversión, respectivamente. En este último caso, se tendrán por válidos los actuados
realizados.
2. En caso que existan predios sobre los cuales no se hayan apersonade sus titulares y se
hubiese procedido a la verificación de mejoras se debe hacer notar tal situación, y se
debe sugerir el depósito del monto indemniza en una cuenta especial del INRA, que
puede ser cobrada por el titular expropiado, sujeto a las reglas de prescripción.
3. Con referencia al resto de los predios identificados en el área sobre los cuales si se
apersonaron sus titulares y se ha evidenciado el cumplimiento de la FES y verificado la
existencia de mejoras se debe tomar en cuenta o Dictamen, que determine el monto
indemnizatorio, para cada uno de los predios, remitiendo los antecedentes al Director
Departamental.
4. Se debe adjuntar proyecto de resolución expropiatoria por cada predio, si
correspondiere.
Ulteriormente remitidas que fueran los antecedentes del procedimiento, el Director Nacional del
INRA, previo dictamen si considera necesario, en un plazo no mayor a diez días calendario debe
emitir la Resolución Final de Expropiación o de conclusión del procedimiento cuando existan
fundados motivos técnicos y legales y considere no viable la expropiación. La referida
resolución final únicamente es impugnable ante el Tribunal Agroambiental en el plazo de 30
días calendario, la cual además queda ejecutoriado una vez que dicho plazo haya vencido o el
Tribunal Agroambiental haya declarado improbada la demanda.
1. Que en el área hubiesen existido planes estatales de recuperación y manejo del recurso
tierra y brindado apoyo a través de programas de capacitación, asistencia técnica e
inversión, destinados a evitar el mal uso de la tierra.
2. Que la comunidad hubiese sido previamente comunicada y apercibida reiteradamente
por la autoridad competente para adecuarse al empleo sostenible y a la aptitud de uso
del suelo. 3. Las comunidades dotadas o que se encuentren en tierras erosionadas no
tienen responsabilidad sobre su uso insostenible, debiendo el Estado implementar
ineludiblemente políticas de recuperación y manejo del recurso tierra.
2.1.2.1. Procedimiento
Si la denuncia fuere hecha por parte de la ABT, o el SERNAP debe contener además de los
requisitos señalados en el Art. 244 del Decreto Supremo N 29215, los informes o resoluciones
emitidas, con todos los antecedentes que acrediten el uso indebido de la tierra.
Sin embargo, el INRA en el marco de sus facultades, cuando tenga evidencia por via directa o
indirecta que determinadas tierras comunales no se usan conforme a su capacidad de uso mayor,
debe iniciar de oficio el procedimiento de expropiación. Debiendo entenderse por vía indirecta
la denuncia formulada de manera escrita por cualquier persona o entidad no facultada para
denunciar directamente. Teniendo claro que el denunciante no es parte en este procedimiento,
únicamente puede participar como control social.
Previa verificación de los predios ubicados al interior del área de expropiación y la elaboración
del Informe en Conclusiones, el Director Departamental competente del INRA, recibido el
Dictamen Técnico de monto indemnizatorio, en un plazo no mayor a dos (2) dias calendario,
debe remitir los proyectos de Resolución de todos los predios y lo actuado, ante la Dirección
Nacional del INRA.
Ulteriormente, una vez remitidos los antecedentes del procedimiento, el Director Nacional del
INRA, previo dictamen si considera necesario, en un plazo no mayor a diez dias calendario debe
emitir la Resolución Final de Expropiación o de conclusión del procedimiento cuando existan
fundados motivos técnicos y legales y considere no viable la expropiación. La referida
resolución final únicamente es impugnable ante el Tribunal Agroambiental en el plazo de 30
días calendario, conforme lo dispuesto en el Art. 76 Par V del Decreto Supremo Nº 29215, la
cual además queda ejecutoriado una vez que dicho plazo haya vencido o el Tribunal
Agroambiental haya declarado improbada la demanda.
Departamentales del INRA cuando tenga evidencias del incumplimiento de la FS, o por la
Dirección Nacional que instruya su inicio a la Dirección Departamental competente.
1. Identificar las generales de ley del denunciante, el cual debe citar de manera expresa si es que
ejerce una representación orgánica o convencional. debidamente acreditada.
2. Identificar el nombre del predio, la ubicación geográfica del área, estableciendo algunas
coordenadas, superficie aproximada, colindancias u otras referencias que identifiquen el área.
Previo Informe técnico y legal, el Director Departamental del INRA. debe dictar Auto de Inicio,
el cual debe ser notificado de manera expresa en los próximos cinco días siguientes a la
dictación del auto de inicio del procedimiento al:
1. Denunciado y denunciante, empero en caso de que el titular del predio no fuese habido
se puede optar por la notificación cedularía o edicto en caso de desconocerse su
domicilio actual.
2. Presidente de la CAD, para que este a su vez instruya se ponga en conocimiento de los
miembros acreditados.
3. Al ABT, para que tome conocimiento del procedimiento y fije el monto indemnizatorio.
Es importante señalar que en cualquier momento y hasta la inspección ocular, las partes pueden
presentar prueba documental preconstituida que demuestre el cumplimiento de FS, así como la
inversión realizada, para que la misma sea evaluada en la inspección ocular y registro de datos
del valor indemnizatorio, sin embargo, al vencimiento del plazo para la presentación de
descargos por el titular del predio requerido en expropiación, se procede de la siguiente manera:
1. Si no hay respuesta en el plazo establecido, mediante Auto exprese el Director Departamental
debe disponer para que se proceda a expropiación sin más trámite, debiendo elaborarse el
respectivo proyecto.
La audiencia de inspección ocular se realiza de forma continuada en un solo acto hasta recoger
toda la información de campo; una vez iniciada dicha inspección, no puede ser levantada, a no
ser por imposibilidad absoluta de realización, a cuyo efecto se debe fijar para una fecha próxima
inmediata. Una vez constituidos en el lugar objeto de la denuncia, el funcionario del INRA
asignado al efecto debe instalar el acto de inspección ocular y se debe establecer lo siguiente:
Una vez concluida la inspección ocular en el plazo de cuatro días calendario, se debe elaborar
informe circunstanciado que, de manera expresa, sugiriendo lo siguiente:
El Director Nacional del INRA, previo dictamen emitida por la ABT, si considera necesario, en
un plazo no mayor a diez (10) días calendario debe emitir la Resolución Final, bajo las
siguientes formas:
2.2.7. Notificación
Una vez emitida la Resolución en un plazo no mayor a dos días calendario, la Resolución de
Expropiación debe ser remitida a la Dirección Departamental del INRA para que esta proceda a
su notificación en un plazo no mayor a cinco días calendario.
2.2.8. Impugnación
A los efectos del control de legalidad, en el marco de lo dispuesto en el Art. 76 Pár. V del
Decreto Supremo 29215, la resolución final de expropiación es impugnable únicamente
mediante proceso contencioso administrativo.
La Resolución se considera ejecutoriada y firme una vez vencido el plazo hubiese resuelto el
proceso contencioso administrativo, declarando para impugnar ante el Tribunal Agroambiental
o cuando dicho Tribunal improbado la demanda planteada.
Desde el punto de vista del Derecho Civil, el contrato constituye una especie particular de
convención, cuyo carácter propio consiste en ser productor de obligaciones.
El Art. 450 del Código Civil nos da una noción de contrato diciendo que "Hay contrato
cuando dos o más personas se ponen de acuerdo para construir, modificar o extinguir entre
si una relación jurídica".
Para la mediana propiedad y la empresa agropecuaria, el Art. 169, disponía que estaban
sujetas al cumplimiento de la FES. Así establecido el derecho propietario, se generan una
serie de derechos y obligaciones, los sujetos agrarios requieren de una variedad de actos
jurídicos para cumplir sus actividades productivas. Aquí es donde surge la necesidad de
generar una vasta relación entre personas naturales o jurídicas, estableciéndose vínculos de
tipo laboral, comercial, financiero y otros actos, los cuales se traducen en determinados de
contratos.
Los actos jurídicos agrarios a diferencia de los actos jurídicos civiles, tienen peculiaridades
que rebasan los intereses meramente privados, son actos que tienen efectos de enorme
trascendencia social, económica y política.
La noción de contrato agrario autónomo parte de una vieja concepción acerca de que éste
consistiría un acuerdo de voluntades en el que el propietario del fundo cede el goce del
mismo a un tercero. Se trata, en primer término, de un reduccionismo que elimina la
posibilidad de considerar como agrarias otras contrataciones cuyos rasgos son los mismos
que los del ámbito civil y comercial, pero que por la naturaleza del objeto de las mismas se
diferencian claramente de aquellas En segundo lugar, se trata de una relación vinculante en
términos de propietario-arrendatario exclusivamente y no incorpora la esencia productiva
como objeto del contrato. Y si como indica la doctrina más sólida, la esencia de lo agrario
no es la propiedad sobre el fundo que bien puede ser resuelta en términos del contrato civil,
sino la empresa, es decir, la movilización de un proceso en el que interviene el suelo, el
trabajo, el capital, los insumos, la tecnología, el mercado y el consumo, en una dimensión
que supera el interés privado, para hacerse socialmente sostenible, es dudosa la definición
de un contrato agrario genérico pero reducido a relaciones solamente patrimoniales.
"En consecuencia afirman Brebbia y Malanos- contratos agrarios serían aquellos cuya
función económico-social consista en dar vida a una empresa agrícola y reglar su
funcionamiento, y en este caso la correlación entre empresa y contrato es particularmente
intensa, de tal modo que a cada tipo de contrato corresponde un tipo de empresa Del
contrato nace la empresa, éste es fuente, claro está de derechos y obligaciones, pero debe
tenerse en cuenta que la constitución de la empresa no es suficiente, pues ella tiene inicio
solamente cuando de hecho nace la iniciativa económica es decir que el nacimiento es un
acto ulterior característica que la doctrina llama principio de efectividad "(By M. 1997, p
358)
Brebbia al definir la explotación agraria se refiere a todas las formas de trabajo y relaciones
vinculadas a la producción rural.
"en cuanto se haya dirigido a obtener productos del suelo mediante la transformación o
aprovechamiento de las sustancias fisicoquimicas, en organismos vivos de origen animal o
vegetal, controlados por el agricultor en una situación distinta a la comercial que debe estar
enderezada a constituir actos de comercio, lo que no ocurre en el caso toda vez que la venta
mercantil es la segunda fase del proceso económico de intermediación en el cambio: la
producción natural del fundo -cosechas y crias-no es un negocio jurídico contractual y, por
consiguiente, no puede servir de antecedente a la venta mercantil, ni es comerciante el
agricultor que vende los productos de su campo" (B.1983 pp.97-98)
De la misma manera, el que los productos de la agricultura o pecuaria, que sean utilizados
como materia prima por la industria, no convierten a e industrial, son intensos y se
resuelven en un proceso ininterrumpido. Aquellos en parte de la industria. Si los nexos del
ciclo productivo agrícola podemos hablar de agroindustria.
comunes diferentes a otros. Según Brebbia los contratos agrarios se caracterizan por ser
"bilaterales, onerosos, formales y de tracto sucesivo, y acentuadamente intuitu personae,
cuando no intuito familiae"(B. 1983 p.93).
Por su parte el profesor argentino Humberto Campagnale (h), en su manual teórico práctico
de los contratos agrarios privados, identifica los caracteres de éstos de la siguiente manera:
a) Generales:
1. La producción.
2. Tiene lugar en las zonas rurales.
3. Las partes están obligadas a preservar los recursos naturales renovables.
4. No son especulativos.
5. Los plazos se someten al ciclo evolutivo del objeto agrario,
b) Jurídicos:
1. Bilaterales.
2. Consensuales
3. Onerosos.
4. Conmutativos.
Generalmente formales.
c) Autonomía de la voluntad
La autonomía de la voluntad entre las partes está restringida por regulaciones generales
vinculadas a la conservación de los recursos naturales (de desarrollo sostenible diríamos
nosotros), en las que interviene la autoridad estatal y sólo se manifiesta en el momento de la
celebración del contrato que es apenas la primera fase de la "relación jurídica agraria"
Según el autor se parece al contrato de adhesión con la diferencia de que no existen
cláusulas preestablecidas, sino que es implícito el sometimiento de las partes a las normas
especiales.
En la legislación agraria boliviana varias de estas características están implícitas, pero las
relaciones agrarias han legitimado formas contractuales innominadas que son las más
utilizadas en la actividad agrícola y pecuaria.
Clasificación de los contratos agrarios el mismo profesor Campagnale clasifica los contratos
agrarios en los siguientes:
1. Públicos.
2. Privados.
b) De acuerdo al objeto:
c) Por el vinculo:
1. Asociativos.
2. Disociativos.
d) Por la forma:
1. Verbales.
2. Escritos.
e) Por su publicidad:
1. Registrables.
2. No registrables.
1. Onerosos.
2. Gratuitos.
1.4 Contratos agrarios definidos por Ley
4. Contratos agrarios definidos por Ley
Una vez deslindado el régimen agrario del civil, por la Reforma Agraria de 1953, el único
contrato definido fue el de trabajo agrícola. Un Titulo (el X) con dos artículos del D.L
03464 era todo lo previsto acerca del "Régimen del Trabajo campesino" que prohibía el
colonato y toda forma de trabajo gratuito (Art. 144), estableciendo el salario como única
forma de remuneración del trabajo (Art. 145). Recién 7 años después fue creada la
Dirección General de Trabajo y Justicia Campesina (Ley No.31 de 18.11.1960; D.S. 5702
de 10.2.1961, elevado a Ley el 22.12.1967) con atribuciones y competencias para resolver
litigios laborales agrarios (agrícolas y ganaderos) emergentes de contratos individuales o
colectivos y para fijar el salario mínimo en cada región, así como establecer cuáles son los
usos y costumbres que debían respetarse.
Sin embargo, la indicada Dirección, también tenía atribuciones para resolver cuestiones
referidas al sabotaje de la producción, al abandono de la propiedad, al robo, incendio,
destrucción, etc., a conflictos de linderos, etc., de manera que, en más de treinta años la
Dirección de Trabajo Campesino se ocupó más de resolver temas referidos a cuestiones
distintas al trabajo, por cuanto la relación laboral en el campo solo excepcionalmente es
salarial.
En efecto, el D.S. 5749 de 24.3.1961, reiterando el régimen de salarios como única forma
de retribución del trabajo agrario, prohíbe categóricamente los "contratos de compañía o
aparceria" (Art. 1) y admite sólo excepcionalmente los de arrendamiento (que serán
analizados en el apartado siguiente).
Por su parte el Código Civil promulgado en 1975, en su Art. 214 determina que "El
arrendamiento, la aparceria, la medianería y cualquier sistema de explotación indirecta de la
tierra, no serán admitidos en la pequeña propiedad ni en el solar campesino" lo que
implicaría la derogatoria de las normas anteriores si no se estableciera en el mismo Código
que lo expresamente no establecido se rige por las leyes especiales.
En este caso por las normas agrarias vigentes hasta 1996. Esta persistente exclusión de la
aparceria como forma legal de la contratación agraria. está fundada en una fuente ideológica
que mecánicamente identifica la misma con formas precapitalistas de explotación, que se
pretende eliminar por decreto, sin conseguirlo. Casi medio siglo la prohibición de la
aparceria no fue cumplida por los sujetos agrarios que la tienen, hasta hoy, como la forma
usual más frecuente de relaciones agrarias, tanto en la agricultura cuanto en la ganadería.
Arturo Urquidi, en 1976, sostenía que la aparceria continuaba vigente en la práctica agraria,
ya que: "Pese a la supresión de la compañía o aparceria, en el hecho subsiste en pleno vigor
esta forma de contrato rural, porque los campesinos se niegan a obedecer la prohibición
legal pertinente" (URQUIDI. 1976. p. 39)
Esta observación además de criticar la falta de consecuencia entre texto legal y la realidad,
sugiere realizar estudios que establece la pertinacia con que los productores agrarios
sostienen la práctica de la aparceria Ya en 1960 en un balance de la Reforma Agraria,
Fausto Beltrán y José Fernández, advertían: "puesto que las remuneraciones en dinero son
excesivamente bajas, los campesinos prefieren el trabajo en compañía, forma semifeudal de
explotación que significa desventaja en el reparto de ingresos para las personas que trabajan
la tierra." (BELTRAN-FERNÁNDEZ. 1960, p.136) Como una rara coincidencia con esta
reflexión de expertos, en 1960 se introduce una mención legal al contrato de aparceria
pecuaria, en la ley Ne 80, de marcas y señales, que textualmente dice: "Artículo 10mo.- Los
contratos de aparceria ganadera para que surtan efecto legal, deben ser registrados en las
Asociaciones. Cooperativas o Cámaras Departamentales de Ganadería, en las que se
registrarán los distintivos a usarse"
Esta misma ley determina que el poder Ejecutivo reglamentará los institutos establecidos,
pero hasta hoy, en más de 40 años no se promulgó reglamento alguno.
Esta situación ha dejado un vacío normativo enorme ya que siendo un contrato prohibido no
podía reclamarse su cumplimiento hasta 1996 y desde entonces, careciendo de definición
legal y de reglamentación, se lo practica de facto, sin las garantías para las partes, librado a
la buena fe de los contratantes, la misma que frecuentemente se mide con la vara del poder
económico del propietario y no en base a los intereses de la producción y del hombre de
empresa o aparcero.
La resistencia a regular este contrato agrario por antonomasia, puede provenir de dos
cauces: la ya mencionada "razón" ideológica presuntamente antifeudal y la intención de
mantener una suerte de discrecionalidad del patrón para someter a los peones e incluso a
empresarios agrarios sin tierra
En efecto, desde las leyes mesopotámicas más antiguas, pasando por las de Hammurabi
mencionadas en el capítulo correspondiente, la aparcería es una relación agraria reconocida.
Pero es el Derecho Romano la fuente etimológica de tal instituto que era conocido como el
colonus partiarus. contrato sinalagmático por el cual una parte cede a otra el goce de un
fundo recibiendo en retribución un porcentaje de los frutos. No es el pago de arrendamiento
en especie por cuanto no se trata de un equivalente a una suma de dinero por locación, sino
a un cierto porcentaje del producto lo que significa un monto indeterminado al realizar el
contrato. Tampoco es un contrato de sociedad, por cuanto no existe el affectio societatis
(intención de asociarse o formar sociedad). Es colonato parciario o colonia partiaria, luego
aparceria.
De manera que, en orden al prejuicio sobre la aparcería, debemos afirmar que las
formaciones sociales de la antigua Mesopotamia y de la Roma de aquellos tiempos no eran
feudales ni semifeudales, sino esclavistas. Cierto es que persistió en el feudalismo, pero
también y de manera vigorosa persiste en formaciones sociales capitalistas altamente
"dustrializadas, como en varios países europeos y en la Argentina. De manera que no podría
considerarse una relación típica de una formación social u otra, sino como una forma de
encarar la producción y distribución granas coexistente en casi todas ellas. Por eso no existe
razón alguna para no establecer un régimen jurídico del contrato de aparcería.
Este concepto se adecua a nuestra práctica ya que la división de los frutos no siempre se
hace "por mitad", sino aplicando a la semilla, instrumentos o maquinaria, riego artificial,
insumos, etc., un porcentaje en el momento del reparto, teniendo en cuenta quién los
proporcionó. Lo general, sobre todo en el occidente, es la sola cesión del fundo por el
aparcero-dador, teniendo el resto de las responsabilidades el aparcero-productor y en este
caso los frutos se reparten por mitad.
La aparceria pecuaria tiene la misma naturaleza que la agrícola con la diferencia que en
aquella, no basta la cesión del fundo, sino la de semovientes cuyas crías son motivo del
reparto. En cuanto a la capitalización o mejoras, consiste en la aparceria en la cual la
totalidad o parte de los frutos se incorpora o reinvierte en el fundo o el hato ganadero,
acrecentando la hacienda del propietario. Estos aspectos que son sin duda importantes están
contemplados en la práctica consuetudinaria. Pero hace falta regular, cuando menos los
siguientes aspectos:
En el primer caso, el propietario es al mismo tiempo el productor del fundo. tanto por la
extensión exigua del mismo, cuanto por la imposibilidad de introducir tecnología y
financiamiento que multiplique su rendimiento, cumpliéndose el precepto constitucional de
que el trabajo es la fuente fundamental de la propiedad agraria. En el segundo sería
imposible tal correlación y es entonces que se hace compleja la vinculación entre
propietario y empresario que suelen ser distintos. La legislación anterior a la ley 1715,
reconocía ciertos contratos de arrendamiento El citado D.S. No.5749 de 24.3.1961, admite
el contrato de arrendamiento bajo condiciones excepcionales, cuando el propietario
acreditara su imposibilidad de trabajar la tierra, bajo un plan de trabajo y con intervención
de funcionarios públicos, so pena de considerarse abandono de la propiedad, como causal
de reversión. También determina que cuando no pudiera aplicarse el sistema salarial, se
establecerá sistemas de trabajo colectivo, organizándose cooperativas. En ningún caso se
admite el arrendamiento que se funde en la renta del suelo. La abrogatoria expresa de tal
disposición por la ley 1715, seguida de su implícito reconocimiento sujeto a reglamentación
que no se ha realizado hasta hoy, pone este contrato, vigente en la práctica, en virtual
interdicción jurídica. El arrendamiento agrario se practica, bajo formas encubiertas y
eliminada la prohibición.
Ha dejado de ser ilícito, aunque no este reglamentado, por lo que se suele aplicar normas
civiles o comerciales, en acuerdos privados que no se protocoliza. Urge, como en el caso de
la aparceria, establecer normas específicas para el contrato de arrendamiento agrario, que no
es el de la simple locación de un fundo, sino la cesión del este para realizar un trabajo de
producción agrícola o pecuaria. La agrariedad de dicho contrato debe especificarse en
normas que definan, cuando menos:
La doctrina sobre el arrendamiento agrario es clara respecto del objeto especifico de este
contrato. Ya que en el deben intervenir dos sujetos, el propietario y el empresario para lo
que uno cede el predio y otro realiza un trabajo productivo sin lo cual dejaría de ser agrario,
para constituirse en alquiler o locación.
Campagnale, define así este contrato: es el acuerdo entre dos o más personas, de las cuales
una es productor agropecuario, en virtud de la cual una cede el uso y goce de un inmueble
ral convo objeto es la explotación agropecuaria en cualquiera de sus especializaciones,
ubicado fuera de la planta urbana de las ciudades o pueblos, abonándose por ese uso y goce
un precio en dinero" (CAMPAGNALE, 1983. pp.87-88)
En todo caso, la solución no debe ser esa porque la figura de la locado condutio, de carácter
romano y de plena aplicabilidad en América latina, debe ser modernizada, como lo ha sido
en otros ordenamientos jurídicos, de tal suerte que no solo sirva para superarla
contradicción con el principio del cumplimiento de la función social de la propiedad, sino
que también pueda convertirse en un adecuado instrumento para nutrir ese principio y
redimensionarlo permitiendo se cumpla también respecto de la empresa y de los contratos."
(CARROZA-ZELEDÓN, 1990, p.285).
El mismo Carrozza, sugiere introducir normas como el canon o precio que debe ser fijado
por el Estado y su falta de pago no debe motivar el desalojo antes de la cosecha; la duración
que permita al productor recuperar sus inversiones y disfrutar de los resultados de su
trabajo, con opción de prorroga y tácita reconducción; pago efectivo de las mejoras por
parte del propietario y derecho preferencia del arrendatario para convertirse en propietario.
Estas ideas, más las que hemos sugerido líneas arriba, pueden ser la base para superar el
vacío legal en materia de contratos de arrendamiento y aparcería.
La legislación argentina ha estructurado una sólida malla normativa que merece ser
estudiada específicamente (no es este el lugar). Baste citar la ley 13.246 que establece el
carácter público-económico de la contratación agraria, de la irrenunciabilidad de los
derechos, de la inembargabilidad de maquinarias, herramientas, enseres, semillas, animales
de trabajo, muebles, ropas, etc., del arrendatario, los plazos, la tácita reconducción, etc.
igualmente la ley 22.298 que regula la cesión del pastoreo de rastrojos, de la extinción por
mutuo disenso, pérdida de la cosa arrendada, imposibilidad de destino especial distinto para
el cual se arrendó, vicios redhibitorios. Muerte del arrendatario, etc. Ambas normas definen
los rasgos de la aparcería en todas sus clases, además de la explotación racional.
Por su parte ¡as leyes 11.170.11.627 y 13.246. definen de manera detallada el régimen de
las mejoras y su valuación, retención y pago. Se trata de una normativa completa que tiene,
además, una jurisprudencia continuada y copiosa que ha permitido llenar vacíos o lagunas
de manera continua.
Sin embargo, estamos muy lejos de sugerir una imitación normativa para llenar nuestras
lagunas. Cada realidad agraria requiere de normas que se adecúen a sus características y ya
hemos visto que la marcada diferencia entre una agricultura ligada al mercado internacional,
capitalista y agroindustrial, y la campesina parcelaria de subsistencia, no pueden recibir el
mismo tratamiento, mucho más en un medio ecológico, social y culturalmente tan variado y
contradictorio.
1.5 Transmisión de derechos agrarios
5. Transmisión de derechos agrarios
La transmisión de la propiedad agraria está sujeta a las limitaciones de sucesión inter vivos
y mortis causa; limitaciones que básicamente están dirigidas a evitar el fraccionamiento de
la propiedad agraria y conservar la misma bajo el principio de la función social y
económica.
La Ley 1715 en su Art. 48 expresamente dispone que, "La propiedad agraria bajo ningún
título podrá dividirse en superficies menores a las establecidas para la pequeña propiedad.
Las sucesiones hereditarias se mantendrán bajo régimen de indivisión forzosa. Con
excepción del solar campesino, la propiedad agraria tampoco podrá titularse en superficies
menores a la pequeña propiedad". Analizando esta norma, encontramos que en un solo
artículo se han incluido varios aspectos importantes, vinculados precisamente a la
indivisibilidad y la función social de la tierra. Cuando la norma dispone que "bajo ningún
título podrá dividirse", presumimos que sus alcances llegan a todas las clases y formas de
propiedad aojarla. La indivisión forzosa en las sucesiones hereditarias, marca un profundo
sentido previsor tendiente a evitar el minifundio.
La transmisión de la propiedad agraria inter vivos, en aplicación del Art. 41, Parágrafo 1,
Numerales 3. y 4. está permitido para la mediana propiedad y la empresa agropecuaria
cuyas tierras pueden ser "transferidas, pignoradas o hipotecadas conforme a la ley civil".
Para todos estos casos el D.L. establecia tramitar ante el CNRA la "Autorización de
Transferencia" respectiva.
Del análisis comparativo de la Ley 1715 del SNRA y el referido D.L. 16536, encontramos
aspectos muy interesantes que bien podrían reorientar el régimen de transmisión de tierras
agrarias en una legislación futura, permitiendo ciertos grados de transmisibilidad que de
facto ya se operan, estableciendo estrictas limitaciones para evitar el minifundio.
La nueva Constitución Política del Estado, en su Art. 394, Parágrafo II, dispone que la
indivisibilidad de la pequeña propiedad, "no afecta el derecho de sucesión hereditaria en las
condiciones establecidas por ley". Al no mencionarse la sucesión hereditaria en las demás
clases de propiedad, obviamente no será aplicable en todas ellas.
Por otra parte, encontramos una incongruencia jurídica con lo establecido en el Art. 56 I,
que expresamente dispone que, "Toda persona tiene derecho a la propiedad privada
individual o colectiva, siempre que ésta cumpla una función social", El Parágrafo III,
“garantiza” el derecho a la sucesión hereditaria. Si esto es así, en todas las clases de
propiedad agraria. Debería aplicarse la sucesión hereditaria
La disposición final cuarta de la ley 1715, incorpora a los trabajadores asalariados del
campo al ámbito de la Ley General del Trabajo. O sea que los contratos individuales y
colectivos deben observar las modalidades y cumplir con los requisitos establecidos en la
legislación laboral.
Cabe anotar que la contratación agraria, ni cuando estuvo sometida al régimen especial
agrario, bajo supervisión estatal, mediante la Dirección de Trabajo y Justicia Campesina, ni
ahora, durante la vigencia de la ley 1715. se asimila a la contratación industrial, con
excepción del trabajo temporal o el vinculado a la agroindustria, que debe tener un
tratamiento distinto.
En la legislación laboral hay varias leyes y decretos que regulan el trabajo agrícola.
Así tenemos la ley de 22 de noviembre de 1945 que establece a favor de los siringueros
(trabajadores que extraen la goma del árbol y la convierten en bolacha mediante el desfume
o ahumado), para los cuales el empresario destinará el 25% de sus utilidades anuales en
calidad de prima anual. El contrato a suscribirse en triple ejemplar ante la autoridad del
trabajo es obligatorio. Las empresas que no dispongan de asistencia médica para los
siringueros pagarán a estos un bono equivalente al 100% del salario.
La R.S. 158244 de julio de 1971 amplia a los trabajadores de goma y castaña los regímenes
de enfermedad, maternidad y accidentes de trabajo, a cargo de los empresarios. La R.S.
158243 de 15.7.1971 define a los trabajadores de las plantas beneficiadoras de castaña, a los
que la transportan en medios de la empresa, a quienes realizan ja selección, descascarado,
quebrado, sancochado, secado, embalaje, etc., aunque realicen este trabajo en sus domicilios
particulares.
3. Dura todo el tiempo de la zafra o cosecha y no puede ser rescindido sino por las causales
establecidas en el Art.16 de la LGT. Y el 9 de su Reglamento. Se prohíbe todo cobro a los
trabajadores de cualquiera contribución en el trayecto al lugar de trabajo o en el retorno al
de su origen. Los empleadores pagarán el transporte y viáticos del trabajador y su familia,
desde su lugar de origen hasta el del trabajo. El empleador proporcionará vivienda al
trabajador y alimentación gratuita durante los primeros 15 días.
10. El monto indemnizable se calcula por el salario percibido los últimos 15 días.
Esta norma ha eliminado parcialmente las formas de sobre explotación de los zafreros y
cosechadores de algodón que, como trabajadores de temporada, eran tratados con
discrecionalidad por los empresarios.
Otras formas tradicionales, pero no legisladas, que podrían asimilarse a las del contrato son
las obligaciones de reciprocidad y complementariedad, como el Ayni, la Minka, la aynuka,
que constituyen mecanismos de cooperación y retribución equivalente en trabajo, o
preservación colectiva del suelo, que hemos analizado en el capítulo referente al régimen
agrario precolonial y que subsisten hasta hoy. Merecen estudiarse y convertirse en normas
generales, ya que los usos y costumbres, en los que se insertan en la definición legal no son
solamente parte de prácticas consuetudinarias locales sino manifestaciones de un verdadero
derecho originario que tiene su base en la solidaridad grupal, muy superior a la asociación
cooperativa.
Hay otra convención que enlaza la producción agrícola y pecuaria al mercado, que no la
realizan comerciantes en el sentido estricto, ya que, si bien en algunos casos compran el
producto en el lugar de la cosecha, pagando por él en dinero o en especie, combinan formas
de arrendamiento de servicios, locación, aparcería, maquila y otros. Son los contratos de
rescate, muy frecuentes en el occidente y en regiones alejadas del subtrópico y el trópico.
Muchas veces tales rescatiris no pagan en dinero y/o financian sus compras
comprometiendo el mismo producto mediante contratos adicionales de warrantt que, en este
caso, es una suerte de prenda agrícola que beneficia no al productor sino al intermediario
comercializador que, incluso patenta marcas internacionales de calidad con producción aje
no es suya. Por lo tanto, no se trata de simples comisionistas o brokers que también los hay)
que cobran un porcentaje del precio por poner en contacto al productor con el comprador
mayorista frecuentemente en el, pero, sino de intermediarios que subsumen el producto
agrícola en la mercancía o materia prima aun cuando éstas no hayan sido transformadas,
sino habilitadas únicamente para su exportación avado, tostado, secado, molido,
acondicionado con persevantes, o alado, etc.)
Por eso es necesario regular este tipo de contratos no comprendidos en el fuero agrario y
que son sometidos a regímenes distintos (civiles o comerciales) sin tomar en cuenta la
naturaleza de la producción agraria.
El contrato de pasturaje o pastaje muy frecuente en las regiones norte y oriental de Bolivia,
consiste en que una de las partes se obliga a permitir temporalmente el uso de su fundo y el
consumo del pasto para alimentar al ganado de la otra parte, a cambio de un precio por
cabeza y tiempo, que puede ser pagado en especie. Frecuentemente, se trata de un periodo
de engorde del ganado enflaquecido en largos recorridos desde su lugar de origen, a fin de
habilitarlo para el mercado.
Esto no cambiaba su condición de empresarios agrarios, pero cuando los insumos (incluso
los alimentos) dejaron completamente de ser producidos y controlados por ellos y pasaron a
manos de transnacionales dueñas de las patentes y del material genético e insumos, teniendo
a su cargo el trabajo zootécnico de la crianza, faenado, con los riesgos consiguientes a su
coste (plagas, variaciones en el mercado, etc), los simples proveedores de insumos se
convirtieron en quienes controlaban la cadena productiva, imponiendo precios y
condiciones para sus productos, lo que sumado a las pérdidas por la inseguridad de la
producción, acabó por convertir a los empresarios avícolas en dependientes de aquellos.
Esta relación implica un contrato innominado muy complejo, ya que no se trata de locación
de predio o de servicios únicamente, pues el dueño del predio y las instalaciones y el que
realiza el trabajo zootécnico de la crianza es el mismo y debe correr con los riesgos de
plagas u otras eventualidades. estando obligado a entregar al proveedor de material genético
e insumos, los huevos o pollos de cierta calidad e incluso marca, cobrando un porcentaje de
utilidades, una vez deducidos los costos. Aquí se ligan las relaciones de locación de
servicios o contrato de obra y producto, con los de concesión, franchising, maquila,
agroindustria, pero el hilo conductor es un contrato agrario por su naturaleza y sui generis
por su forma. Y no en todos los casos se establece las mismas relaciones, por lo que resulta
importante la formulación de normas que permitan garantizar el interés de las partes,
especialmente para el caso, los del productor agrario, ahora inerme.
Como lo recuerdan Brebbia y Malanos, tiene antecedentes remotos en el locatio operis del
Derecho Romano cuando un propietario de fundo encargaba, por ejemplo, a un empresario
la recolección de su producción de aceitunas para que la transformara en aceite,
compartiendo el producto final.
En nuestro medio, se aplica este contrato en los dos tipos de agricultura: en la de pequeña
escala, cuando el productor de cereales, por ejemplo, pacta con molineros para convertir en
harina su producto, no a cambio de un precio, sino de participación en el producto final.
Igualmente, los productores de cerdos, frutales o viñas, participan de los embutidos, de las
mermeladas o del vino. En la región oriental, sobre todo en Santa Cruz ocurre, con menos
frecuencia, pero en volúmenes mayores, con la producción de caña de azúcar, algodón,
girasol, soya, arroz, etc., los mismos que podrían tener un amplio campo de expansión, para
compartir entre el productor agrícola o pecuario y el dueño de ingenios, los costos y riesgos.
(...) tampoco se trata de un contrato agroindustrial (...) ya que no existe otra obligación para
el maquilero que la de elaborar la caña recibiendo como pago un porcentaje
predeterminado, y no existe el complejo de obligaciones de dar y hacer que tipifican a este
contrato. Falta en rigor la reciprocidad, que es de la esencia del contrato agroindustrial.
Pareciera que estamos frente a contrato de integración un vertical..."(BREBBIA Y
MALANOS, 1997, p.605). Urge elaborar y promulgar una normativa en tan importante
aspecto de la contratación agraria.
Cuando están escindidos los eslabones del proceso productivo se producen distorsiones que
afectan siempre al productor primario que es el que más riesgos asume invirtiendo mayores
recursos y es el que menos beneficio obtiene. De esta suerte la integración vertical de la
agricultura o la pecuaria, con la industria y la comercialización, incluso con el
financiamiento, enlaza en uno solo ese complejo movimiento que tiende a desplazar la vieja
y tradicional concepción de la empresa agricola o pecuaria, divorciada de la industrial, de la
comercial, sobre todo en un mundo globalizado.
Por lo tanto, los contratos agroindustriales no son sólo de interés de los grandes
empresarios, sino de todos los productores que hoy se ven limitados por la inexistencia de
normas expresas, debiendo aplicar por analogía reglamentaciones civiles y comerciales, con
las desventajas que imponen estas a la actividad agraria que, como hemos visto, tiene sus
peculiaridades sociales y públicas que deben merecer un sistema protectivo.
Carrozza y Zeledón, advierten que la producción agrícola (podríamos agregar pecuaria) que
debe ser transformada industrialmente para su materia prima, es decir como una mercancía
que se realiza en la compra- comercialización y consumo, no puede introducirse al mercado
como simple venta, para que el industrial la adquiera en el estado en que es ofertada, lo que
implica una relación contractual civil-comercial, sino que ahora es necesario planificar la
producción en función de las características requeridas por la industria, adecuar la oferta, en
calidad y cantidad, a la demanda, o sea que el contrato se realiza antes de la cosecha, para
comprar no el producto sino cierto tipo de producto que el industrial se obliga a adquirir
como cosa futura, verde o no nacida.
Esto lo asimilaría a un contrato asociativo. Pero los indicados autores consideran que siendo
la causa mixta puede haber contraprestaciones de diversa indole, aconsejando asumir ja
generalización del Derecho Francés que habla de "multiplicidad de obligaciones reciprocas,
distribuidas entre dos partes". Brebbia y Malanos citan a los italianos Confortini y
Zimatore, para quienes los contratos agroindustriales: "son acuerdos entre agricultores y
empresarios comerciales que tienen la finalidad, a través de una integración de las
actividades agricolas y comerciales, realizar un intercambio de productos de caracteristicas
cualitativas determinadas, por una suma determinada de o7nero"(Cit BREBBIA Y
MALANOS, 1997, pp.592-3)
Sobre el trabajo eventual, con posterioridad a la Ley de Reforma Agraria de 1953, se han
emitido varias Resoluciones Supremas y Resoluciones Ministeriales que regulan aspectos
como, ¡el derecho preferencia de contratos, suministro de artículos de primera necesidad,
atención en los casos de enfermedad, maternidad y accidentes de trabajo, escalas mínimas
de tarifas para trabajadores a destajo y otros.
Para desarrollar las actividades agropecuarias y otras establecidas por ley, se requieren de
recursos, cualquiera sea el tipo de propiedad agraria, requerirá siempre de los medios
económicos para desarrollar sus actividades. En nuestro país, tratándose de la mediana
propiedad y la empresa agropecuaria, el régimen de contratación de créditos se desarrolla en
el ámbito de la ley civil. El Estado en muchas de estas operaciones interviene procurando
recursos de países cooperantes para canalizar los mismos a sectores particularmente de
tierras bajas, mediante la intermediación de la banca privada. Como es de conocimiento
público, estos recursos están destinados fundamentalmente a la producción de exportación.
En las propiedades colectivas, como son las comunarias, y tierras comunitarias de origen,
por las limitaciones legales de ser inalienables, indivisibles. Irreversibles, inembargables e
imprescriptibles, tienen disminuidos y acaso suprimidas sus posibilidades de constituirse en
sujetos de crédito, debido básicamente a que la propiedad siendo colectiva es de todos en
general y de nadie en particular, cuyos títulos ejecutoriales son o proindivisos o únicos. los
cual les impide contratar créditos de índole privada.
En la primera edición de este Compendio decíamos que, en los hechos. estas normas eran
decorativas porque no se destinaron recursos del Estado ni se viabilizaron créditos de
desarrollo y de fomento para estos importantes sectores. Asimilando las experiencias del
pasado, el Estado debería organizar estos créditos de desarrollo y fomento para impulsar a
pequeños productores y comunidades, para mejorar cualitativa y cuantitativamente su
producción para el consumo interno.
Es importante destacar que en el Art. 47, Parágrafo III, de la nueva Constitución Política del
Estado, en forma expresa dispone que, "El Estado protegerá, fomentará y fortalecerá las
formas comunitarias de producción"
A su vez en el Art. 136 se ha incluido como política sectorial que, "El Estado apoyará a las
organizaciones de economía comunitaria para sean sujetos de redito y accedan al
financiamiento". Abrigamos la esperanza de que estas normas fundamentales se plasmen en
realidad.
El proceso contencioso administrativo según Bielsa "es un proceso jurisdiccional defensivo del
derecho del administrado".
Para Guillermo Cabanellas es "una reclamación o apelación que se interpone, contra las
resoluciones definitivas de la administración pública y proceden del poder ejecutivo, cuando
desconocen un derecho particular o lesionan un interés jurídicamente protegido"
En tal sentido, corresponde examinar si los actos administrativos fueron llevados a cabo dentro
los márgenes de la normativa que regula dicha tramitación, y si estas incidieron en la decisión
final del proceso de saneamiento. Por lo tanto, el presupuesto básico para la procedencia de esta
demanda es la existencia de oposición entre el interés público y el privado. Al respecto, el
procesalista Fassi refiere que "la cuestión de puro derecho no depende de la inexistencia de
hechos controvertidos, pues puede haberlos y la dificultad versa sobre la valoración de pruebas
agregadas a los autos, en cuyo caso tampoco cabe apertura a prueba.
Según el tratadista Alsina, el plazo es el espacio de tiempo dentro del cual debe ejecutarse un
acto procesal que tiene 6 por objeto regular el impulso procesal haciendo efectiva, la preclusión
de las distintas etapas del proceso que permitan su desarrollo progresivo,
En ese contexto, la demanda contenciosa administrativa, en el marco del Art. 68 de la Ley No.
1715, concordante con la Disposición Final Vigesima Quinta del Decreto Supremo No. 29215,
se debe plantear en el plazo de 30 dias calendario, computables desde el día siguiente de la
notificación con la Resolución Final de Saneamiento. Reversión Expropiación y Distribucion de
Tierras. Empero, en caso de que la demanda sea presentada fuera del plazo referido supra, el
mismo será rechazado por haberse presentado en forma extemporanea.
En materia agraria, en el marco de lo dispuesto por el Art. 76 Par. V del Decreto Supremo
29215, la demanda contenciosa administrativa procede en contra de los siguientes actos
administrativos:
La demanda contenciosa administrativa debe cumplir los requisitos establecidos por el Art. 327
del Código de Procedimiento Civil, donde señala lo siguiente.
La demanda constituye el acto procesal por el cual el actor o demandante promueve la acción,
solicitando al juzgador (Tribunal Agroambiental) para que intervenga a fin de que, una vez
valorado el fondo del proceso, dicte sentencia efectuando una valoración fáctica y jurídica
dentro del proceso. Ahora bien, para que sea válida y admisible la demanda, necesariamente
debe cumplir con los requisitos indispensables que constituyen su esencia misma: por lo tanto,
si falta alguno de estos, el juzgador se encuentra facultado para ordenar que se subsanen las
omisiones o deficiencias, bajo conminatoria de no admisión de la demanda.
Al respecto, el profesor Hugo Alsina señala que: "no existen 2 fórmulas sacramentales para la
redacción de la demanda, pues como consecuencia de la espiritualización del derecho, han
desaparecido aquellas expresiones rituales que tuvieron su más alta expresión simbólica en las
legis actiones de los romanos".
En la demanda se debe precisar a la autoridad que va dirigida la demanda, que en este caso es el
Tribunal Agroambiental, la instancia que tiene competencia para conocer y resolver los
procesos contenciosos administrativos, en el marco de lo dispuesto en el Art. 189 Núm. 3 de la
CPE y los Arts. 36 Núm. 3 y 68 de la Ley No. 1715, extremo que se constituye en un
presupuesto procesal para que se establezca una relación jurídica procesal valida.
Consiguientemente siendo que la propia norma es clara, en la praxis se estila indicar de la
siguiente manera: "SEÑOR PRESIDENTE Y MAGISTRADOS DEL TRIBUNAL
AGROAMBIENTAL" Sin embargo, no basta con cumplir con este requisito en la demanda,
sino que además en todos los memoriales que se presentan en el proceso, siendo que esto
determina que el Tribunal Agroambiental admita, conozca y resuelva el caso en cuestión. Al
respecto, el profesor Vescovi, con mucho criterio se interroga cuando indica "qué sucede
cuando por error se designa equivocadamente el tribunal presentándose por ende la demanda
ante la sede que no corresponde. En tal hipótesis que no exista ningún plazo especial para
presentar la demanda. como sucede en la generalidad de los casos, cuando el demandante
verifique su error puede pedir al tribunal en que presentó la demanda que se desglose el escrito,
procediendo luego a presentarlo en el juzgado correcto".
El demandante o actor se constituye en el sujeto procesal activo, dentro del proceso contencioso
administrativo, considerando que este es necesaria para dar nacimiento al proceso, ya que sin
este sujeto procesal no puede existir la demanda, pues no es posible pensar en un proceso
jurisdiccional sin la participación de sujetos procesales que necesariamente deben actuar en la
causa, para darle validez y vida a la misma demanda contenciosa administrativa.
Para fines procesales es necesario que el demandado esté plenamente identificado en el proceso
en la forma más precisa y concreta, toda vez que sin demandado no hay proceso jurisdiccional.
En tal sentido, se debe señalar el nombre completo y domicilio del o los demandados, esto con
la finalidad de notificación con la demanda contenciosa administrativa principal, siendo que
como se dijo en el punto anterior, que las ulteriores actuaciones, en la actualidad son notificados
en la Sala del Tribunal Agroambiental.
Al respecto, el tratadista Gozaini señala "está claro que esa individualización del demandado no
tiene extremos sacramentales, pero ostenta si un mínimo de seguridades a cubrir que prohíbe las
enunciaciones genéricas, vaga o imprecisas, como por ejemplo (a quien resultare propietario, o
a tenedores poseedores y cualquier ocupante). Además, como el actor cuenta con las diligencias
preliminares para obtener las informaciones indispensables para constituir regularmente un
proceso que permite exigir declaración jurada sobre hechos relativos a la personalidad. cabe
interpretar lógico este recaudo.
En ese contexto, con carácter previo a plantear la demanda Contenciosa Administrativa, se debe
revisar. si la Resolución objeto de demanda, es Administrativa o Suprema, pues en el caso de
Resolución Administrativa, la demanda debe ser planteada únicamente en contra del Director
del INRA. Empero si la Resolución objeto de demanda es una Resolución Suprema. la demanda
debe ser planteada en contra del Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia y el Ministro de
Desarrollo Rural y Tierras.
Es importante citar el nombre y domicilio del o los terceros interesados siendo que se constituye
en uno de los requisitos de admisibilidad, esto con la finalidad de que el tercero interesado
pueda asumir defensa, toda vez que Sentencia que emita los Magistrados del Tribunal
Agroambiental puede afectar sus derechos o garantías constitucionales. Toda vez que, lo
contrario vulnera el derecho a la defensa y en consecuencia conllevaría a futuras nulidades,
conforme así ha establecido el Tribunal Constitucional Plurinacional.
La demanda contenciosa administrativa debe contener la relación precisa de los hechos, porque
entiende que es la base y esqueleto fundamental de la demanda, u sin los hechos no hay
demanda.
El profesor Romero con total precisión señala, que "las enunciaciones de los hechos tienen
como fin poner de manifiesto la causa petendi, es decir, la causa, razón o fundamento por el
cual, se deduce la pretensión contenida en la demanda.
En este apartado el actor debe consignar todos los hechos que considere relevantes para la
estimación de la demanda. Se exige que se expongan de manera numerada y separada, asimismo
junto a la exposición de hechos deben relacionarse los documentos, medios o instrumentos, que
se aporten junto con la demanda como medio de prueba. La claridad en la exposición reviste
importancia. por cuanto al demandado le incumbe la carga de reconocerlos o negarlos
categóricamente y, por lo tanto, aquella exigencia es decisiva a los efectos de valorar su silencio
o sus respuestas evasivas. El propósito de exigir al demandante la enumeración de los hechos
que sustentan su pretensión con precisión, orden y claridad, tiene como correspondencia la
exigencia al demandando para que éste también exponga su posición sobre los hechos expuestos
por el demandante, debiendo procesar numeradamente en cuáles da su conformidad y en cuales
no asegurándose con esta exigencia el derecho de contradicción y de defensa del demandado.
Al respecto, el profesor Vescovi señala que "en la demanda debe detallarse todos los hechos que
tienen trascendencia en el asunto de que se trata, Mediante la descripción de los hechos el actor
busca que el tribunal y la contraparte comprendan lo sucedido, a efectos de que el primero
ampare al actor en lo que pide. En efecto, como señala Carnelutti el primer cometido para
juzgar es el reconstruir el hecho; no podría el juez proceder a la comparación del hecho con la
hipótesis antes de haberlo reconstruido Tener razón o sin razón en el proceso depende de la
valoración jurídica de un hecho. Para tener razón es necesaria la coincidencia de un hecho con
la hipótesis legal. La razón de la pretensión no es, pues, el hecho ni la norma jurídica sino la
afirmación de un hecho coincidente con la hipótesis legal de una norma jurídica
Es lo que se ha denominado el Principio iura novit curia, según el cual la omisión de la demanda
del derecho en el cual el accionante apoya su acción. puede y debe ser suplida por el juez. El
derecho puede ser variado por el mbunal sin que implique variación de la demanda".
Al respecto el profesor Ticona señala, que "es innegable que por el principio WRA NOVIT
CURIA, el Juez es quien debe aplicar el derecho pertinente, ante el error o la omisión en la
invocación por las partes, sin embargo, ello no significa que en la demanda no se exprese la
institución jurídica cuya protección se reclama. Recordamos que, una de las condiciones de la
acción, reconocida por la doctrina, es que la acción esté amparada por la ley, es decir, que sea
un caso justiciable. EL IURA NOVIT CURIA es de aplicación posterior a la demanda".
En esa misma línea el tratadista Romero, dice "el actor debe manifestar en qué normas legales
funda su petición. Esta exposición del derecho tiene por objeto facilitar la tarea del Juez, pero en
rigor de verdad no constituye realmente un requisito, porque conforme al principio "iura novit
curia" (el juez conoce el derecho) el juez es libre de elegir las normas que considere aplicables,
y de calificar técnicamente los hechos expuestos y la acción deducida. El silencio o error sobre
la calificación a las normas aplicables, no tiene consecuencias ni es obligatorio para el actor.
2.3.8. Petición
La demanda contenciosa en materia agraria, debe contener este último requisito, que consiste en
la firma por la parte actora o mediante apoderado con facultades de plantear demanda
contenciosa administrativa hasta su conclusión, Además la demanda debe ser firmada por el
abogado patrocinante.
Una vez, cumplido con los requisitos de admisibilidad, se debe admitir la demanda, mediante
Auto y en consecuencia correr traslado al o a los demandados y los terceros interesados.
La contestación, debe observar las mismas reglas previstas en el Art. 327 Código de
Procedimiento Civil, en todo lo que fuere aplicable, asimismo la entidad ejecutora del proceso
de saneamiento debe remitir todos los antecedentes administrativos que conformaron el proceso
en sede administrativa, a efectos de su valoración por parte de los Magistrados del TAP, sin
perjuicio de que el demandante también adjunte. Toda vez que, el objetivo de la demanda
contenciosa administrativa, es que el Tribunal Agroambiental tenga todos los elementos para
ejercitar el control de legalidad que hace a este proceso, considerando que como ya se señaló el
procedimiento es de única instancia, lo que significa que no existe etapa probatoria alguna en su
estructura o secuencia procesal.
El tratadista Español Saenz Jiménez definió a la contestación como "la conducta activa del
demandado, oponiéndose a la pretensión deducida por el actor, se manifiesta a través de la
contestación que constituye aquel acto procesal de parte, en virtud del cual el demandado
impugna los hechos y fundamentos del derecho aducidos por el demandante, o bien alega otros
hechos que desvirtúan la eficacia de aquellos".
Se entiende, por plazo, al transcurso del tiempo previamente establecido durante el cual o al
cumplimiento del mismo deben realizarse ciertos actos procesales, cuya finalidad, es la de hacer
efectivos el principio de la preclusión y el impulso procesal dentro de los plazos establecidos En
esa misma línea el tratadista Alsina, refiere que el plazo es el espacio de tiempo dentro del cual
debe ejecutarse un acto procesal que tiene por objeto regular el impulso procesal haciendo
efectiva, la preclusión de las distintas etapas del proceso que permitan su desarrollo progresivo.
Ahora bien, el demandado, una vez corrido traslado o una vez notificado con la demanda
contenciosa administrativa, debe contestar la demanda en el plazo de quince (15) días hábiles,
más el plazo de distancia que corresponda, que en este caso, considerando que el domicilio del
Presidente, Ministro de Desarrollo Rural y Tierras y el INRA se encuentran ubicados en la
ciudad de La Paz, se deberá aplicar tres (3) dias de plazo distancia, es decir un dia Por cada
doscientos kilómetros, en el marco de lo dispuesto en el Art. 345 del Código de Procedimiento
Civil.
2.4.2. Pronunciamiento sobre los hechos alegados en la demanda
La contestación a la demanda debe ser presentada ante una de las Salas Procedimiento Civil, es
decir, debe ser escrito con total precisión sorteadas del Tribunal Agroambiental, conforme el
Art. 346 del Código de puntualidad y claridad, negando o reconociendo en forma expresa los
hechos que han sido planteados en esta. La contestación no puede ser genérica y limitarse
únicamente a negar o admitir los hechos sin especificar cada uno de ellos. Siendo evidente, que
en la contestación necesariamente el demandado debe pronunciarse sobre los hechos alegados
en la demanda, puesto que cuando no existe pronunciamiento sobre un hecho alegado, se tiene
por admitida tales hechos.
Como señala el profesor Parajeles, el demandado debe "contestar hecho por hecho, bajo
apercibimiento de tener por admitidos los hechos sobre los que no haya dado respuesta en la
forma expresada. Por su parte el profesor Castellanos Trigo Gonzalo, señala que: "constituyen
respuestas evasivas, aquellas manifestaciones retientes, parcas o ambiguas del demandado,
como por ejemplo, indicar que no reconocen ni niegan los hechos expuestos en la demanda,
dejan dudas sobre los hechos o realizan respuestas indirectas o de doble sentido".
Es expresa cuando el demandado admite el hecho invocado o afirmado por el actor en términos
claros y positivos; a su vez, se divide en simples (admisión lisa y llana del hecho) y cualificada
(cuando a la admisión del hecho se le agrega una causa de exculpación: en este caso existe una
inversión de la carga de la prueba correspondiendo al demandado probar la eximente).
2.6. Dúplica
"Se designa con este nombre, y también con la duplicación o contrarréplica, el escrito o trámite
con que se suele contestar a la réplica dada por el actor a la contestación de la demanda: o sea,
la confirmación o ampliación de los alegatos de ésta"
Ahora bien, una vez corrido traslado con la réplica, el demandado tiene el derecho a ejercer la
dúplica en el plazo de diez (10) días hábiles del dia siguiente a su notificación con la réplica
conforme lo previsto en el Art. 354 Par II del Código de Procedimiento Civil; de lo que se
infiere que no corresponde efectuar la duplica si es que la parte actora no presentó la réplica o
no presentó en plazo la misma.
Después de haber corrido los traslados o vencido los plazos para ejercer replica o duplica, en el
marco de lo dispuesto en el Par. III Art. 354 del Código de Procedimiento Civil, se decreta autos
para sentencia, el cual es dictado por los Magistrados de la Sala competente del TAP, en el
plazo de 48 horas, y tiene los siguientes efectos:
El primer efecto que produce la providencia del llamamiento (1 para sentencia es que, a partir
de la fecha de la providencia, los Magistrados del Tribunal Agroambiental tienen el plazo de 40
días para dictar sentencia. conforme el Inc. 1). Par. I del Art. 204 del Código de Procedimiento
Civil Segundo porque se cierra la discusión en el proceso, vale decir, implica la preclusión del
debate, desde entonces queda cerrada toda discusión y no puede presentarse más escritos, ni
producir más pruebas, salvo que los Magistrados consideraren oportunos para contar con
mayores elementos de sentencia se suspende por los días que se requiriere la producción de la
convicción para dictar sentencia. En el referido caso, el plazo para dictar prueba, con la
finalidad de emitir sentencia bajo el principio de verdad material, a cuyo efecto pudiendo
requerir informe a la entidad ejecutora del proceso de saneamiento o al geodesta del TAP.
Tercero, no pueden alegarse nulidades de procedimiento que debieron haberse reclamado en su
oportunidad, lo que significa que también precluye tal derecho, por el principio de saneamiento
procesal
2.9. Sentencia
"El vocablo sentencia sirve para denotar, a un mismo tiempo, un acto jurídico procesal y el
documento en que él se consigna. Como acto, la sentencia es aquel que emana de los agentes de
la jurisdicción y mediante el cual deciden la causa o punto sometidos a su conocimiento. Como
documento, la sentencia es la pieza escrita emanada del tribunal, que contiene el texto de la
decisión emitida" Por sentencia en sentido propio o estricto cabe entender la resolución
jurisdiccional que pone fin al proceso de conocimiento normalmente desarrollando, decidiendo
sobre el fundamento de cuestiones previas.
En ese contexto podemos señalar que la sentencia es el acto procesal que pone fin al litigio,
reconociendo o no la pretensión del actor: vale decir, decide en el fondo del proceso
contencioso administrativo. Consiguientemente, debe estar debidamente motivada y
fundamentada, toda vez que la garantía al debido proceso, entre su ámbito de presupuestos,
exige que toda resolución sea debidamente fundamentada; lo que significa que la autoridad que
dicte una resolución ineludiblemente debe exponer los hechos.
Sin embargo, dicha motivación no significa que la exposición sea ampulosa de consideraciones
y citas legales, sino que sea concisa, pero clara y satisfacer todos los puntos demandados,
debiendo expresar los magistrados del Tribunal Agroambiental, sus convicciones determinativas
que justifiquen razonablemente su decisión en cuyo caso las normas del debido proceso se
tendrán por fielmente cumplidas, extremo sobre el cual estableció similar entendimiento el
Tribunal mediante SCP 1315/2011 -R de fecha 26 de septiembre de 2011..
En principio, es menester señalar que el Titulo Ejecutorial es por esencia, el resultado de un acto
administrativo que se emite por autoridad competente Juego de haberse tramitado el respectivo
proceso administrativo acorde a las normas agrarias vigentes durante el desarrollo del proceso
administrativo de saneamiento, cuya validez y eficacia puede ser objeto de cuestionamiento por
la persona que se sienta agraviada a través de la demanda de nulidad de Titulo Ejecutorial y del
proceso que sirvió de base para su emisión. Toda vez que el Art. 189-2) de la Constitución
Política del Estado y del Art. 36-2) de la Ley N° 1715 establece que es competencia del
Tribunal Agroambiental, conocer causas de nulidad y anulabilidad de títulos Ejecutoriales y de
procesos agrarios que hubieren servido de base para la emisión de los mismos, tramitados ante
el ex Consejo Nacional de Reforma Agraria, el ex Instituto Nacional de Colonización y el
Instituto Nacional de Reforma Agraria.
1. Definición
El profesor Alsina, señala que: "La nulidad es la sanción, por la cual la ley priva a un acto de
sus efectos normales, cuando en su ejecución no se han guardado forma prescritas por aquella; y
que, los medios de que las partes disponen para obtener la declaración de una nulidad procesal
son: el incidente, el recurso, la excepción y la acción de nulidad".
González Pérez y Gonzales Navarro, refieren que: "la infracción del ordenamiento jurídico
puede determinar que el acto no produzca sus efectos normales "invalidez" o que, produciendo
sus efectos normales, se produzcan otros anormales "irregularidad". Los actos irregulares, en lo
que se producen estas infracciones, son actos que producen los efectos ordinarios, normales, que
pueden determinar otros efectos anormales como puede ser exigencia de responsabilidad al
titular del órgano que dictó dicho acto. Son actos que traducen en vicios denominados
transgresiones improcedentes, irregularidades no invalidantes, vicios irrelevantes, o vicios
inoperantes.
Por su parte Bocanegra, señala que: "la nulidad o invalidez absoluta nace en el Derecho Civil a
partir de la figura del negocio jurídico, afirmándose que cualquier infracción del Ordenamiento
jurídico provoca, en principio la nulidad, quedando reducida la anulabilidad a aquellos
supuestos en los que el ordenamiento jurídico reconoce a una de las partes en el negocio
jurídico la acción concreta para pedir su nulidad, dentro de un plazo, al entender que puede
lesionar sus derechos, de manera que si deja transcurrir dicho periodo de tiempo sin ejercitar la
acción el negocio jurídico se convalida, convalidación que también puede producirse por
consentimiento del lesionado en sus derechos o su representante. Para el profesor Calle, la
nulidad absoluta de títulos ejecutoriales, procede cuando los actos administrativos dieron lugar a
la extensión del Título Ejecutorial contengan vicios insubsanables o inexistencia jurídica
propiamente dicha.
2.1. Demanda
Por lo precedentemente descrito, la demanda debe estar planteada, en forma coherente y precisa,
exponiendo las razones por las que considera que ha existido violación del orden público: la
fundamentación debe ser vinculada al tipo de vicio de nulidad que se acusa, en consecuencia,
corresponde señalar que en virtud al Art. 50 Par. I de la Ley No. 1715, la demanda de nulidad
absoluta procede en los siguientes casos:
b) Ausencia de causa, por no existir o ser falsos los hechos o el derecho invocado
Por otro lado, corresponde señalar que de acuerdo al Par. VI del Art 50 de la Ley 1715, la
nulidad relativa o anulabilidad procede en el siguiente caso Cuando existan irregularidades u
omisiones que no llegan a impedir la existencia de alguno de sus elementos esenciales. En cuyo
caso los Títulos Ejecutoriales que adolezcan de estos vicios, pueden ser subsanados y
confirmados si la tierra se encontraré cumpliendo FES, caso contrario deben ser anulados.
La validez y eficacia del Titulo Ejecutorial puede ser objeto de cuestionamiento por la persona
que se sienta agraviada a través de la demanda de nulidad de Titulo Ejecutorial y del proceso
que sirvió de base para su cumpliendo los requisitos establecidos por el Art. 327 del Código de
Procedimiento Civil, donde señala lo siguiente:
En tal sentido, tiene la obligación de Una vez cumplido con los requisitos de admisibilidad, se
debe admitir realizar el examen meticuloso de la demanda, mediante Auto y en consecuencia
correr traslado al o a los demandados y los terceros interesados.
Cuando la demanda no cumpla los requisitos establecidos en el Art. 327 del Código de
Procedimiento Civil, se debe disponer la subsanación de los defectos, en el plazo de 3 días, bajo
apercibimiento de tenerse por no presentada la demanda. A cuyo efecto una vez cumplida con
las observaciones se deberá admitir la demanda, caso contrario se tiene por no presentada.
¿La demanda de nulidad o anulabilidad de títulos ejecutoriales se puede ampliar y/o modificar?
La demanda de nulidad o anulabilidad de título ejecutorial se puede ampliar y/o modificar, hasta
antes de la contestación, en consecuencia, debiendo notificarse con la ampliación o con la
modificación de la demanda, con los mismos efectos de la demanda principal.
Corrido traslado o una vez notificado con la demanda de nulidad o anulabilidad de título
ejecutorial, en cumplimiento al Art. 345 del Código de Procedimiento Civil, el demandado debe
contestar la demanda en el plazo de quince (15) días hábiles, más el plazo de distancia que
corresponda.
Asimismo, dicha respuesta debe observar las mismas reglas previstas en el Art 327 del Código
de Procedimiento Civil a cuyo efecto debiéndose adjuntar pruebas de descargo, a efectos de su
valoración por parte de los Magistrados del Tribunal Agroambiental, sin perjuicio de que el
demandante también adjunte, con la finalidad de que dicha instancia tenga todos los elementos
para ejercitar el control e legalidad que hace a este proceso, en virtud de que como ya se señaló
que el procedimiento es de única instancia.
Al respecto el tratadista Español Saenz Jiménez, definió la contestación como "la conducta
activa del demandado oponiéndose a la pretensión deducida por el actor, se manifiesta a través
de la contestación que constituye aquel acto procesal de parte, en virtud del cual el demandado
impugna los hechos y fundamentos del derecho aducidos por el demandante, o bien alega otros
hechos que desvirtúan la eficacia de aquellos".
Por otro lado, en el marco del Art. 346 del Código Procedimiento Civil. la contestación a la
demanda, debe ser presentada ante una de las Salas sorteadas del Tribunal Agroambiental, el
cual debe ser escrito con total precisión, puntualidad y claridad, negando o reconociendo en
forma expresa los hechos que han sido planteados en esta. La contestación no puede ser
genérica y limitarse únicamente a negar o admitir los hechos sin especificar cada uno de ellos.
Por su parte el profesor Gonzalo Castellanos Trigo, señala que: "constituyen respuestas
evasivas, aquellas manifestaciones retientes, parcas o ambiguas del demandado, como, por
ejemplo, indicar que no reconocen ni negan los hechos expuestos en la demanda, dejan dudas
sobre los hechos o realizan respuestas indirectas o de doble sentido".
Siendo que nos encontramos en un proceso de puro derecho, una vez corrido traslado con la
contestación de la demanda, en el marco de lo establecido en el Art. 354
2.5. Duplica
“Se designa con este nombre, y también con la duplicación o contrarréplica, el escrito o trámite
con que se suele contestar a la réplica dada por el actor a la contestación de la demanda; o sea,
la confirmación o ampliación de los alegatos de ésta.
Ahora bien, una vez corrido traslado con la réplica, el demandado tiene el derecho a ejercer la
dúplica en el plazo de diez (10) días hábiles del día siguiente a su notificación con la réplica
conforme lo previsto en el Art. 354. Par II del Código de Procedimiento Civil; de lo que se
infiere que no corresponde efectuar la dúplica si es que la parte actora no presentó la réplica o
no presentó en plazo la misma.
Después de haber corrido los traslados o vencido los plazos para ejercer réplica o dúplica en el
marco del Par. III del Art. 354 del Código de Procedimiento Civil, se decreta autos para
sentencia, el cual es dictado por los Magistrados de la Sala competente del Tribunal
Agroambiental, en el plazo de 48 horas y tiene los siguientes efectos:
El primer efecto que produce la providencia del llamamiento para sentencia es que, a partir de la
fecha de la providencia, los Magistrados del Tribunal Agroambiental tienen el plazo de 40 dias
para dictar sentencia, conforme el Inc. 1). Par. I del Art. 204 de Código de Procedimiento Civil.
Segundo, porque se cierra la discusión en el proceso, vale decir, implica la preclusión del
debate, desde entonces queda cerrada toda discusión y no puede presentarse más escritos, ni
producir más pruebas, salvo que los Magistrados consideraren oportunos para contar con
mayores elementos de convicción para dictar sentencia. En dicho caso, el plazo para dictar
sentencia se suspende por los días que se requiriere la producción de la prueba, con la finalidad
de emitir sentencia bajo el principio de verdad material, a cuyo efecto pudiendo requerir
informe a la entidad ejecutora del proceso de saneamiento o al geodesta del Tribunal
Agroambiental. Tercero, no pueden alegarse nulidades de procedimiento que debieron haberse
reclamado en su oportunidad, lo que significa que también precluye tal derecho, bajo el
principio de saneamiento procesal.
1.2.7. Sorteo, 1.2.8. Sentencia
2.7. Sorteo
2.8. Sentencia
La sentencia es el acto procesal que pone fin al litigio, reconociendo o no la pretensión del
actor, vale decir, decide en el fondo del proceso de nulidad y anulabilidad de título ejecutorial,
consiguientemente debe estar debidamente motivada y fundamentada, toda vez que el derecho
al debido proceso, entre su ámbito de presupuestos exige que toda sentencia o resolución sea
debidamente motivada y fundamentada, lo que significa que la autoridad que dicte una
sentencia o resolución ineludiblemente debe exponer los hechos, realizar la fundamentación
legal y citar las normas que sustentan la parte dispositiva de la misma.
Toda vez que, cuando se omite la motivación y fundamentación, no sólo suprime una parte
estructural de la misma sino también en los hechos toma una decisión de hecho no de derecho,
que vulnera de manera flagrante el citado derecho, que permite a las partes conocer cuáles son
las razones para que se declare en tal o cual sentido o lo que es lo mismo, cuál es la ratio
decidendi que llevó a tomar la decisión.
Sin embargo, dicha motivación no significa que la exposición sea ampulosa de consideraciones
y citas legales, sino que sea concisa, pero clara y satisfacer todos los puntos demandados,
debiendo expresar el juzgador, sus convicciones determinativas que justifiquen razonablemente
su decisión en cuyo caso las normas del debido proceso se tendrán por fielmente cumplidas.
• Probada la demanda de Nulidad de Titulo Ejecutorial, por consiguiente, se anula y se deja sin
ningún efecto legal el Titulo Ejecutorial objeto de demanda, disponiéndose la cancelación de su
registro en Derechos Reales
Ahora bien, con la finalidad de estudiar el proceso Oral Agrario, es menester señalar que las
competencias de los Jueces Agroambientales, se encuentran establecido en el Art. 152 de la Ley
del Órgano Judicial y el Cap. 11 la Ley No. 1715 de 18 de octubre de 1996, donde establece los
procedimientos del proceso oral agrario, instituyendo las diferentes etapas a seguir para su
sustanciación; aclarando que en su Disposición Transitoria Primera del mismo cuerpo legal.
Señala que durante la vigencia del saneamiento de la propiedad agraria los jueces agrarios sólo
podrán conocer y resolver acciones interdictos agrarios respecto de predios que aún no hubiesen
sido objeto del proceso de saneamiento mediante la resolución que instruya su inicio efectivo o
respecto de aquellos predios en los que el saneamiento haya concluido en todas sus etapas.
En tal sentido, estudiaremos las tres etapas del proceso oral agrario que son; 1) Etapa
Preliminar, 2) Etapa de Juicio Oral y 3) Etapa Conclusiva.
1. Etapa preliminar
El proceso oral agrario implementado por la Ley del Servicio Nacional de Reforma Agraria,
resulta ser un proceso mixto, ante la inexistencia de un proceso oral puro como tal, toda vez que
en materia procesal ni la oralidad puede prescindir de la escritura ni la escritura de la oralidad;
la fase escrita del proceso oral agrario, se encuentra precisamente contemplada en esta etapa o
fase inicial, que comprende los actos procesales como la demanda, su admisión, el
emplazamiento o citación, la contestación, la reconvención y contestación o responde a esta,
siempre y cuando se plantee la contrademanda o la mutua petición.
Ahora bien, conforme se estableció anteriormente, estudiaremos la etapa preliminar dentro del
proceso agrario de competencia de los jueces agroambientales, considerando los siguientes
aspectos.
1.1.1. Demanda
1.1. Demanda
Juan Monroy Galvez, manifiesta que el derecho de la acción es el medio que permite esta
transformación de pretensión material o procesal, Sin embargo, este medio por no ser abstracto,
necesita de una expresión concreta, de allí que se instrumente a través de un acto jurídico
procesal llamado demanda, que es una declaración de voluntad a través de la cual el pretensor
expresa su pedido a tutela jurídica al Estado y a su vez manifiesta su exigencia al pretendido.
140 VÁSQUEZ MERCADO, Rumo Nivardo, El Proceso Oral Agrario en Bolivia. Primera
Edición, Imp. KIPUS., 2006 Pág. 34.
Por su parte el Autor Hugo Alsina, señala que la "Demanda es el acto procesal por el cual el
actor ejercita una acción solicitando del Tribunal la prestación, la declaración o la constitución
de una situación jurídica, según sea, en efecto la naturaleza de la acción deducida, la demanda
será de condena declarativa o constitutiva.
Asimismo, Juan Decker Morales, dice que "La demanda es un acto procesal que presupone la
manifestación de voluntad y constituye una de las formas de ejercitar la acción. Mediante ella el
actor solicita pronunciamiento de la sentencia definitiva que ponga fin a la Litis o controversia".
La demanda debe cumplir los requisitos establecidos en el Art. 79 Par. 1 Núm. 1 y 2 de la Ley
No. 1715 y el Art. 110 del Código Procesal Civil, donde señala lo siguiente:
La demanda será escrita, salvo disposición expresa en contrario, y deberá reunir los siguientes
requisitos de forma y contenido:
En ese contexto, la demanda constituye el acto procesal por el cual el actor o demandante
promueve la acción, solicitando al juzgador (Juez Agroambiental) que intervenga a fin de que
oportunamente dicte Sentencia. Ahora bien, para que sea válida y admisible la demanda,
necesariamente debe cumplir con los requisitos indispensables que constituyen su esencia
misma; por lo tanto, si falta alguno de estos, el juzgador se encuentra autorizado para ordenar
que se subsanen las omisiones o deficiencias, bajo conminatoria de no admisión de la demanda.
Al respecto el profesor Hugo Alsina, señala que: "no existen formulas sacramentales para la
redacción de la demanda, pues como consecuencia de la espiritualización del derecho, han
desaparecido aquellas expresiones rituales que tuvieron 'sus más alta expresión simbólica en las
legis actiones de los romanos.
El Juez Agroambiental, se constituye en el director del proceso, razón por la cual desde el inicio
mismo debe cuidar que el proceso se desarrolle sin vicios de nulidad, asimismo debe evitar que
se tramite un proceso que no tiene razón de ser; es decir, que se manifieste de una forma
improcedente o cuando el mismo sea presentado en forma extemporáneo.
En tal sentido, tiene la obligación de realizar el examen meticuloso de la demanda. Una vez
cumplidos con todos los requisitos de admisibilidad establecidos en el Art. 79 de la Ley No.
1715 y el Art. 110 del Código Procesal Civil, el Juez Agroambiental debe admitir la demanda,
mediante auto y correr traslado al o a los demandados y los terceros interesados.
Cuando la demanda no cumpla los requisitos establecidos en el Art. 79 de la Ley No. 1715 y el
Art. 110 del CPC, previa admisión deberá disponer la subsanación de los defectos, en el plazo
de 3 días, bajo apercibimiento de tenerse por no presentada la demanda en consideración al Art.
113 Par. I del CPC. A cuyo efecto una vez cumplida con las observaciones se admite la
demanda, caso contrario se tiene por no presentada.
Tomando en cuenta el Art. 115 del CPC, la demanda se puede ampliar hasta antes de la
contestación de la demanda, debiendo notificarse con la ampliación o con la modificación de la
demanda, con los mismos efectos de la demanda principal.
La contestación, debe observar las mismas reglas previstas para la demanda conforme así lo
establece el Par. III del Art. 79 de la Ley No. 1715, a efectos de su valoración por parte de Juez
Agroambiental. Toda vez que, el objetivo de la demanda, es que el Juez Agroambiental tenga
todos los elementos para ejercitar el control de la legalidad que hace a este proceso. Asimismo,
al momento de la contestación a la demanda, puede hacerlo oponiéndose a ella, ofreciendo
prueba e interponiendo las excepciones previstas en el Art. 81 de la Ley No. 1715, aclarando
que todas las excepciones deben ser planteadas todas juntas en un mismo memorial, los cuales
estudiaremos en el capitulo XVIII del presente libro.
Se entiende por plazo, el transcurso del tiempo previamente establecido durante el cual o al
cumplimiento del mismo deben realizarse ciertos actos procesales, cuya finalidad, es la de hacer
efectivo el principio de la preclusión y el impulso procesal dentro de los plazos establecidos.
Ahora bien, el demandado una vez corrido traslado o una vez notificado con la demanda, debe
contestar la demanda en el plazo de quince (15) días calendario, más el plazo de distancia que
corresponda conforme así lo establece el Art. 79 Par, 11 de la Ley N° 1715. La contestación a la
demanda debe ser presentada ante el Juez Agroambiental donde radica el proceso, el cual debe
ser escrito con total precisión, puntualidad y claridad, negando o reconociendo en forma expresa
los hechos que han sido planteados en esta. La contestación no puede ser genérica y limitarse
únicamente a negar o admitir los hechos sin especificar cada uno de ellos.
Según el profesor José Decker Morales ('La reconvención es una nueva demanda contra el actor,
pero no pretende destruir la acción del demandante, sino que persigue la declaración o el
reconocimiento del derecho invoca en ella, que puede ser de la misma o distinta naturaleza de
los fundamentos de la demanda.
Ahora bien, una vez planteada la reconvención, este se debe correr en traslado, para que la
misma sea contestada en un plazo de 15 días calendario, observando los mismos requisitos
señalados para la demanda, conforme así lo dispone el Art. 80 de la Ley N° 1715.
Esta etapa del proceso oral agrario, comprende el juicio oral propiamente dicho y se inicia con
el señalamiento o citación a las partes a la audiencia. Conforme lo previsto en el Art. 82 de la
Ley No. 1715 y concluye con el desarrollo de las actividades procesales establecidas en el Art.
83 de la mencionada norma agraria; actividades procesales que deben ser imperativamente
cumplidas, desarrolladas en la audiencia central o en su caso, la complementaria cuando no se
hubiere recepcionado toda la prueba. Para cuyo cometido, con carácter previo, el juez
agroambiental, mediante la providencia correspondiente, debe fijar día y hora especifica dentro
los 15 días siguientes a la respuesta a la demanda o reconvención o, vencido, dicho plazo
otorgado al demandado para responder a las mismas, conforme así se encuentra previsto en el
Art. 82 Par. I de la Ley No. 1715.
Es importante señalar, que esta etapa oral, es de fundamental importancia toda vez que durante
su sustanciación o desarrollo, se persiguen una serie de finalidades corno ser la ratificación de la
demanda o alegación de hechos nuevos, el cumplimiento de los presupuestos procesales
necesarios para que el juicio oral tenga existencia jurídica y validez formal, objetando al efecto
la capacidad de las partes y la investidura del juez, asimismo, evitar el proceso, a través de la
conciliación y la cosa juzgada, así como depurar el procedimiento, resolviendo nulidades
advertidas por el juez o acusadas por las partes, en virtud de la facultad saneadora conferida al
juzgador. Del mismo modo, limitar su objeto, admitir y recepcionar las pruebas propuestas y
emitir las resoluciones pertinentes, así como resolver los recursos que puedan presentarse
durante su desarrollo, claro está, con excepción de la sentencia.
La Etapa Conclusiva comprende la Sentencia dictada dentro del proceso oral agrario, Sentencia
que, conforme determina el Art. 86 de la Ley N° 1715, debe ser dictada en audiencia sin
necesidad de alegatos de las partes. Pues si bien la precitada norma señala que la Sentencia debe
dictarse en audiencia. Sin embargo, debe quedar claro que la misma no es parte de las
actividades procesales previstas en el Art. 83 del mismo cuerpo legal; por ello, la dictación o
emisión de la Sentencia, constituye otra etapa del proceso oral agrario.
3.1. Sentencia
En sentido propio o estricto cabe entender que la resolución jurisdiccional, que pone fin al
proceso de conocimiento normalmente desarrollando, decidiendo sobre el fundamento de
cuestiones previas que no pudieron ser resueltas como artículo de especial pronunciamiento.
1. El encabezamiento, con determinación del proceso, nombre de las partes intervinientes y sus
generales y, objeto del litigio.
2. La parte narrativa con exposición sucinta del hecho y del derecho que se litiga.
3. La parte motivada con estudio de los hechos probados y en su caso los no probados,
evaluación de la prueba, y cita de las leyes en que se funda, bajo pena de nulidad, Esta parte,
para el caso de fundarse en jurisprudencia ordinaria o constitucional, se limitará a precisar de
manera objetiva las razones jurídicas del precedente, sin necesidad de hacer una transcripción
del fallo que oscurezca la fundamentación.
Ahora bien, el Código Adjetivo Civil y mucho menos la Ley NO 1715 establecen ninguna
clasificación de la sentencia; sin embargo, doctrinalmente existen diversas clasificaciones; no
obstante, a 'los efectos de nuestro propósito, no interesa entrar en consideraciones de esa índole,
considerando la finalidad práctica de esta obra. Por ello, adoptaremos la clasificación tradicional
y de mayor difusión, que clasifica a las sentencias en: declarativas, condenatorias y
constitutivas.
Según el profesor panameño, Boris Barrios González, se entiende como sentencia constitutiva
como aquella que modifica, constituye o extingue un estado jurídico o una relación jurídica.
Ahora bien, entrando al análisis de lo que es la emisión de la sentencia en el proceso oral en
materia agraria, conforme establece el Art. 86 de la Ley No. 1715, la misma debe ser
pronunciada en audiencia, sea esta en la audiencia central o la audiencia complementaria.
Es decir, apreciando las mismas de acuerdo a la valoración que les otorga la Ley y conforme a
su prudente criterio o sana crítica, toda vez que la ley, la doctrina y la uniforme jurisprudencia
nacional adoptada establecen que la valoración de la prueba compete privativamente a los
jueces, siendo soberanos en su valoración, con facultad incensurable en casación, si no se acusa
y se demuestra que hubiesen incurrido en error de derecho o de hecho.
En este acápite es necesario dejar claro que el cuarto intermedio dispuesto, debe tener
constancia expresa en el acta de audiencia, señalando además día y hora para su reinstalación
con la única finalidad de dictar la sentencia en dicha audiencia, tal cual establece el Art. 86 de la
Ley No 1715.
Consiguientemente, el hecho de que el juez dicte Sentencia al margen de los plazos establecidos
por Ley, no importa pérdida de competencia, tal cual establece la línea jurisprudencial adoptada
por el Tribunal Agroambiental, en virtud al principio de inmediatez que rige la justicia agraria.
Sin embargo, en ambos casos, reinstalada, la audiencia corresponde dar lectura a la sentencia
emitida y concluida, la misma proceder a la notificación de las partes conforme a ley, a objeto
de que estás si consideran conveniente hagan uso de los recursos franqueados en el Art. 87 de la
Ley No. 1715, que estudiaremos en el capítulo XIX del presente libro.
Según el tratadista Eduardo J, Couture, "En su más amplio significado, la excepción es el poder
jurídico de que se halla investido el demandado, que le habilita para oponerse a la acción
promovida contra él, la excepción es en cierto modo la acción del demandado".
El profesor Gonzalo Castellanos Trigo, señala que "Se entiende por excepción toda defensa que
el demandado opone a la pretensión del actor, sea que se nieguen los hechos en que funda la
demanda, sea que se desconozca el derecho que de ellos pretenda derivarse, sea que sea límite la
regularidad del procedimiento con el fin de destruir la pretensión jurídica incoada en la
demanda.
Por su parte, el profesor Enrique Ulate Chacón, señala "Las excepciones son mecanismos que la
ley concede al demandado para ejercer su derecho de defensa frente al actor. En su más amplio
significado, que le habilita para oponerse a la acción promovida contra él. En cierto sentido, es
la acción del demandando.
Para el investigador Calle, las excepciones son un medio de defensa, de fondo y de forma, por el
cual el demandado opone resistencia a la demanda, resistencia que tiene la intención de destruir
la marcha de la acción o la acción misma; es decir, que, sin negar el fundamento de la demanda,
trata de impedir la prosecución de la causa, paralizándolo momentáneamente o extinguiéndolo
definitivamente.
Tomando en cuenta el Art. 81 de la Ley No. 1715, dentro del proceso oral agrario, las
excepciones admisibles son las siguientes:
1. Incompetencia
2. Incapacidad o Impersonería
3. Litispendencia,
4. Conciliación
5. Cosa Juzgada.
De lo descrito, se infiere que en materia agraria no hace una distinción de las excepciones
previas o perentorias, toda vez que, únicamente se limita a establecer el momento procesal
oportuno para plantearlas, señalando que las mismas deben ser opuestas todas juntas y a tiempo
de contestar la demanda o a la reconvención.
Asimismo, se debe tener presente que las excepciones planteadas, deben ser resueltas dentro las
actividades procesales cumplidas en el desarrollo de la audiencia, conforme a lo dispuesto en el
Art. 83 Núm. 3 de la Ley No. 1715. En consecuencia, para mayor comprensión estudiaremos a
continuación estudiaremos las excepciones referidas líneas arriba.
En el primer caso, el Art. 33 de la Ley No. 1715, modificado Por la Ley 3545, establece lo
siguiente: "ARTICULO 33 (Competencia y Jurisdicción Territorial) I. El Tribunal Agrario
Nacional tiene jurisdicción y competencia en todo el territorio de la República; los jueces
agrarios en una o varias Provincias de su distrito judicial; II. Cada distrito judicial agrario tendrá
tantos juzgados, cuantos sean creados por el Tribunal Agrario Nacional, de acuerdo a sus
necesidades. Estos podrán ser itinerantes dentro su competencia territorial. Corresponde al
Consejo de la Judicatura proveer los recursos para su implementación y funcionamiento; III. La
competencia territorial es improrrogable".
De lo descrito, se colige que la competencia en razón de territorio, se refiere al espacio
territorial donde el juez agroambiental tiene facultades para conocer y resolver las causas, en
consecuencia no es improrrogable, lo que significa que no pueden conocer acciones o causas
que se encuentran fuera de las provincias donde ejerce su función jurisdiccional; por ejemplo, el
Juez Agroambiental de Viacha no puede conocer una causa de Caranavi, pues si bien se
encuentra en el mismo departamento, empero, es otro asiento judicial, en tal sentido no tiene
competencia en razón de territorio, pues lo contrario sería objeto de excepción de
incompetencia.
La competencia de conocer y resolver acciones o causas, únicamente con relación a los predios
que se encuentran en área rural, de ahí que con relación de los predios que se encuentran en área
urbana son competencia de los jueces ordinarios; sin embargo, la SC 0378/2006-R, refiere que
"la delimitación de la competencia en razón de materia entre la jurisdicción ordinaria y la
jurisdicción agroambiental debe definirse no solo a partir de la ubicación del inmueble objeto
del litigio sino que debe tomarse en cuenta otros elementos imprescindibles para determinar la
jurisdicción aplicable.
El Dr. Gonzalo Castellanos Trigo, señala que "En el ámbito doctrinal, la impersonería
solamente se presenta cuando existe "representación indebida o insuficiente de algún sujeto
procesal que actúa en la causa, ya sea de una persona individual o colectiva, en el caso de que
sea defectuoso o insuficiente el mandato invocado por quienes pretendan representar a aquellos.
El Profesor Carlos Arellano Garcia, señala lo siguiente: "dentro de nuestro mundo forense, se
alude a personalidad y falta de personalidad, o personalidad acreditada, cuando aparece que en
el proceso se ha tenido el derecho de intervenir como parte, o como tercero, o como
representante de una parte o de un tercero, cuando se han aportado elementos de prueba para
demostrar que se es parte o tercero o que se tiene la calidad de representantes de una parte o de
un tercero.
De lo descrito, se colige que la litispendencia evita tramitar dos pretensiones idénticas, pues no
resulta correcto que se emitan dos decisiones judiciales sobre la misma pretensión, respecto a
dicha excepción en materia agraria se encuentra establecida como una de las excepciones
prevista en el Art. 81 Núm. 3 de la Ley No. 1715.
En consecuencia, corresponde que nueva causa sea acumulada al proceso anterior, a cuyo efecto
se debe cotejar la identidad de partes procesales (sujetos que participen como demandante y
demandado), causa (fundamento o título de la pretensión consiste en la invocación de una
concreta situación de hecho a la cual el actor asigna una determinada consecuencia jurídica) y
objeto (es el efecto jurídico que persigue), existiendo similitud entre los requisitos descritos
procede la litispendencia, como describe la doctrina aplicable y debe ser resuelto en el
desarrollo de las actividades de la audiencia.
Ya sea mediante una conciliación verificada como diligencia previa o intra proceso, en cuyo
caso, el acta de conciliación adquiere la calidad de cosa juzgada; por ello, al momento de
responder a la demanda o a la reconvención y oponer la excepción de conciliación debe
acompañarse testimonio del acta de conciliación o indicarse el expediente donde se efectuó la
conciliación con el fin de disponerse su remisión al juzgado para el día de la audiencia señalada
a los fines del Art. 83 de la Ley 1715. Si dicha conciliación es sobre las mismas o parte de las
pretensiones que se dilucidan en el proceso agrario en cuestión, disponer la procedencia de
dicha excepción, en todo o en parte, mediante resolución motivada, de modo que, en el primer
caso, ponga fin al litigio y, en el segundo, la demanda prosiga únicamente sobre los puntos no
conciliados; pues no debe perderse de vista que la conciliación suscrita ante el juez.
Quien tiene autoridad de cosa juzgada, inatacable e inmutable, si es que en su relación se han
observado los elementos o requisitos de validez, como ser: la capacidad de las partes, la
personería, el consentimiento sin vicios, objeto lícito, causa lícita y la forma, al igual que la
conciliación suscrita en los centros de conciliación surte los efectos jurídicos de la transacción
con autoridad de cosa juzgada, cuando en su suscripción se ha observado la prescripción
contenida en el Art. 33 de la Ley N° 708 de fecha 25 de junio de 2015.
La cosa juzgada es lo resuelto en juicio contradictorio, ante un juez o tribunal, por sentencia
firme, contra la cual, no se admite recurso alguno de impugnación salvo algunos casos
excepcionales. Es la autoridad y la fuerza que la Ley atribuye a las sentencias ejecutoriadas; la
autoridad se refiere a la característica de que lo fallado en ellas se considera como irrevocable e
inmutable; y la fuerza, consiste en el poder coactivo que dimana de la cosa juzgada, o sea que
debe cumplirse lo que en ella se ordena.
En materia agraria, el Art. 81 Par. I Núm. 5 de la Ley No. 1715, dispone la excepción de cosa
juzgada con la finalidad de frenar la pretensión de plantear una nueva demanda, cuando en otro
proceso anterior ya haya sido conocido y resuelto mediante Sentencia ejecutoriada; sin
embargo, es importante señalar que para su procedencia debe reunir tres requisitos que son: los
mismos sujetos procesales, objeto y causa. Esta excepción debe ser resuelta por el juez
agroambiental durante el desarrollo de las actividades procesales de la audiencia, conforme lo
previsto en el Art. 83 Núm. 3 de la Ley No. 1715, declarando probada o improbada la excepción
planteada.
Asimismo, los efectos de la cosa juzgada se puedan analizar desde dos puntos de vista,
conforme así lo estableció el Tribunal Constitucional, mediante SCP 0450/2012 de 29 de junio
2012, estableció lo siguiente: los efectos de la cosa juzgada se manifiestan bajo una doble
perspectiva: formal y material. Así, la característica o efecto de la cosa juzgada formal es la de
su inimpugnabilidad o firmeza. Producen este efecto cualquier resolución firme o lo que es lo
mismo, cuando frente a ella no exista ningún otro recurso previsto en la ley (la excepción sólo
se presenta cuando existe de por medio una lesión al contenido esencial de un derecho
fundamental), hayan transcurrido los plazos para recurrirla o se haya desistido del mismo.
En este sentido, las faltas del Tribunal Constitucional como los de la Corte Suprema de Justicia,
surten los efectos de cosa juzgada formal (con la única excepción a esta regla antes referida), en
la medida en que no hay ningún órgano judicial que pueda revisar sus decisiones; empero, al
efecto negativo aludido se tiene otro de naturaleza positiva, que se expresa en el deber jurídico
que tiene el órgano encargado de su ejecución de hacer efectiva la decisión contenida en el fallo
en los términos establecidos en ella. Desde su vertiente material, la cosa juzgada despliega su
eficacia frente a los otros órganos judiciales o administrativos, que lleva un mandato implícito
de no conocer lo ya resuelto, impidiendo con ello la apertura de otros procesos nuevos sobre el
mismo asunto (este efecto sólo la producen las decisiones firmes sobre el fondo); como único
medio de alcanzar la paz jurídica, evitando, de un lado, que la contienda se prolongue
indefinidamente y de otro, que sobre la misma cuestión puedan recaer resoluciones
contradictorias, lesionando la seguridad jurídica procesal (asi, SSCC 0029/2002, 0094/2002-R.
0554/2003-R, entre otras)".
De lo señalado se desprende que la cosa juzgada tiene dos facetas, una formal y otra material; la
formal se refiere a la imposibilidad de reabrir el debate en el mismo proceso donde se dictó la
resolución, porque pronunciamiento quedó firme, ya sea porque las partes consintieron o porque
el se agotaron los recursos ordinarios y extraordinarios viables al caso; no obstante a ello, cabe
aclarar que la cuestión puede reabrirse en otro proceso, de ahí el carácter formal de la
manifestación de la "cosa juzgada".
Cuando el fallo adquiere la calidad de cosa juzgada formal y material, no procede en su contra
ningún proceso ordinario, ni extraordinario de impugnación, ni otra instancia procesal, y se abre
la última fase del proceso, como es la de ejecución, que implica el cumplimiento coercitivo de
lo determinado en ella; y se lo hará ante la autoridad que dictó la resolución en primer grado,
dentro del mismo expediente, guardando una unidad y continuidad procesal.
Consiguientemente, se concluye que contra todo fallo o Sentencia judicial que adquiere calidad
de cosa juzgada no procede ningún otro recurso que permita modificarla o ser alterada en su
contenido, carácter que implica la irrevocabilidad que adquiere los efectos de la misma.
Sentencia judicial que debe ser acatada y respetada por todos aquellos vinculados a ella, pues
cuando ésta queda firme adquiere inmutabilidad o impugnabilidad, ya que esa firmeza impide
que el fallo sea modificado, revocado o anulado, carácter inmutable que obliga al respeto de su
contenido y en resguardo de la seguridad jurídica y restará únicamente su ejecución.
Según el doctrinario Lino Palacios, "Los recursos, son los actos procesales mediante los cuales,
la parte que se considera agraviada por una resolución pide su modificación o anulación, total o
parcial sea mediante el mismo juez o tribunal que la dictó o a un juez o tribunal jerárquicamente
superior".
Por su parte el profesor Enrique Ulate señala que "La razón de ser de los recursos, radica en la
posibilidad de errores del juzgador al tramitar los procesos agrarios, o bien al resolver
cuestiones de fondo. Por lo tanto, conviene que existan alguna forma de reexaminar las
decisiones judiciales, para ajustarlos en mayor medida a criterios de equidad y de derecho. Pero
ello no debe ir en detrimento de la celeridad procesal y de los principios de la oralidad; es decir,
tampoco es permisible otorgar indefinidamente recursos a todo tipo de resoluciones, pues ello
significaría la existencia de procesos interminables.
1. Resolución judicial previa, es decir, presupone el dictado de una resolución para que
funcionen los recursos, ya que, si se trata de una actuación judicial, la misma debe ser objetada
mediante el respectivo incidente.
3. Resolución no pasada en autoridad de cosa juzgada: como es sabido los recursos, sean
ordinarios o extraordinarios no son admisibles cuando la resolución impugnada ha pasado en
autoridad de cosa juzgada. Consiguientemente, para que se active un medio de impugnación de
una determinada resolución judicial en el proceso oral agrario, es necesaria la existencia de una
resolución judicial previa, sea este un mero decreto, un auto interlocutorio, o en su caso una
sentencia; asimismo, la declaración la calidad de cosa juzgada, sea esta forma o material
dependiendo del tipo de proceso en el cual ha sido emitido, tomado en cuenta que los jueces
agroambientales conocen tanto los procesos sumarios como los ordinarios 0 de conocimiento.
El profesor Vescovi, señala que "El recurso de reposición, conocido per algunos sistemas,
también, bajo el nombre de revocatoria o reconsideración, constituye un medio impugnativo que
tiene por objeto que el mismo órgano que dictó una providencia la revoque por contrario
imperio.
Por otro lado, es importante aclarar que no procede contra la sentencia definitiva, en virtud del
principio de irretractabilidad, pues queda agotada la jurisdicción del juez o tribunal y estas
resoluciones no pueden ser revocadas caso contrario la justicia no seria y definitiva. En
consecuencia, quedando claro que el ámbito de aplicación está dado por el objetivo del recurso,
o sea, la reposición o reforma de las providencias o autos interlocutorios, que tienen por fin
ordenar el proceso y corregir posibles errores.
Para Colombo, "las providencias simples son las que implican el ejercicio de la facultad de
dirigir la marcha del proceso, dándole el curso ritual que en determinado momento resulta
oportuno". En ese contexto, corresponde señalar que por providencias y autos simples se
entienden como las ordenes, mandatos, etc., mediante las cuales el juez desarrolla sus facultades
como director del proceso, para llevar a cabo su función primordial.
Asimismo, es menester señalar que este recurso tiene por finalidad evitar dilaciones en el
proceso oral y los gastos de una segunda instancia, pero también evitar abusos. Su ámbito de
aplicación es muy limitado; el plazo breve y rápida la tramitación.
Según el doctrinario Gonzalo Castellanos Trigo señala que "Este recurso responde a los
principios de celeridad y de economía. El primero de ellos está resguardado por la agilidad que
significa la revisión directa de su pronunciamiento parte del juez, a quien el Código le ofrece la
oportunidad corregirlo; y el segundo, no solo por la economía de gasto, sino también procesal,
pues la parte agraviada se ahorra mucho tiempo si la cuestión es solucionada en la instancia.
De lo descrito se infiere que en materia agraria este recurso debe ser interpuesto simplemente
como recurso de reposición, pues no es posible presentar alternativamente con el de apelación,
toda vez que, en materia agraria, no existe la misma estructura como el de Tribunal
Departamental de Justicia.
El recurso de Reposición tiene dos modalidades de interponerse: por escrito u oral en las
audiencias públicas y contradictorias que se presentan en el proceso; por lo tanto, este recurso se
interpondrá verbalmente en la misma audiencia, ya sea en el acto preliminar o complementaria,
o por escrito debidamente fundamentado en el plazo de 3 días hábiles, contados a partir del dia
siguiente a la notificación con la providencia, decretos o auto interlocutorio; en este último caso
siempre que no hubieren sido dictadas en audiencia.
El recurso planteado por escrito, bajo el principio de contradicción y bilateralidad se debe correr
traslado a la otra parte, con la finalidad de que en el plazo de 3 días hábiles responda al recurso.
Cumplido el plazo, con la respuesta o sin la respuesta al recurso, el Juez Agroambiental o el
Tribunal Agroambiental que dictó providencia o auto interlocutorio debe dictar resolución sin
otro trámite, que puede ser manteniendo, modificando, dejando sin efecto o anulando la
providencia o auto interlocutorio impugnado por la parte interesada.
Asimismo, corresponde señalar que con el objeto de que no se abuse del recurso objeto de
estudio, no procede plantear nuevamente recurso de reposición, caso contrario se ingresaría a
una cadena interminable de recurso y contra recurso, toda vez que la resolución que modifique o
deje sin efecto la resolución impugnada es inimpugnable en virtud al Art. 255 del Código
Procesal Civil.
En Bolivia, la jurisdicción agroambiental está constituida por una instancia superior colegiada
que es el TAP, con competencia a nivel nacional y los juzgados agroambientales que desarrollan
el proceso oral agrario en una sola instancia, de ahí la naturaleza extraordinaria del recurso de
nulidad o casación que no constituye en materia agraria una instancia adicional del proceso,
entonces además de su objeto impugnativo a favor de quién se sintiere agraviado en sus
derechos con la sentencia emitida, uno de los objetos del recurso extraordinario de casación es
uniformar C; la correcta aplicación de las normas agrarias y por ende crear jurisprudencia
agroambiental.
Asimismo, corresponde señalar que procede contra los autos interlocutorios definitivos y contra
las sentencias dictadas por el Juez Agroambiental, dentro de un determinado proceso. Este
recurso como medio de impugnación de las resoluciones judiciales, puede plantearse durante la
sustanciación del proceso oral y al término del mismo. En el primer caso, surge durante el
desarrollo de las actividades procesales establecidas en el Art. 83 de la Ley N° 1715, cuando a
momento de resolverse las excepciones opuestas puedan dictarse Autos definitivos que pongan
fin al litigio.
En el segundo caso, cuando el juez agroambiental en la fase conclusiva del proceso oral dicta
sentencia, ya sea aceptando o rechazando las pretensiones que han hecho valer las partes. El
recurso, debe ser presentado ante el mismo Juez cuyo fallo es objetado, en un plazo de ocho días
perentorios, es decir dicho plazo corre de momento a momento, computables a partir de la
notificación con la sentencia o auto interlocutorio definitivo, conforme establece el Art. 87 de la
Ley N°1715. observando los requisitos contenidos en el Art. 274 del CPC, referidos tanto a la
casación en el fondo como en la forma.
Ulteriormente el juez corre en traslado a la otra parte para que conteste dentro del mismo plazo.
Con la contestación del recurso o vencido el plazo señalado al efecto, el juez si corresponde,
concede el recurso y ordena la remisión del expediente ante el Tribunal Superior que en este
caso es el Tribunal Agroambiental, siendo que, en el marco de lo establecido en el Art, 87 de la
Ley No. 1715 referido supra, es la instancia que tiene competencia para conocer y resolver los
recursos de casación y nulidad. Empero si dicho recurso fuere presentado fuera de término de 8
días, el recurso es inadmisible, es decir, el juez agroambiental tiene competencia para negar el
recurso, en mérito a que precluye el derecho de recurrir.
Según el doctrinario Gonzalo Castellanos Trigo, señala que: "se debe dejar claramente
establecido que, de acuerdo a la doctrina, son diferentes el recurso de casación y el de nulidad,
pues persiguen fines y objetivos diferentes. Lo que ocurre es que, de acuerdo a nuestra
legislación, ambos recursos (casación y nulidad), pueden interponerse al mismo tiempo o en
forma conjunta o simultánea, por lo que algunas veces llegan a confundirse como si tratara de
un solo recurso".
Efectivamente, en el proceso oral agrario, el objeto del recurso de casación es doble. Por una
parte, el recurso de casación en el fondo, distingue como su objeto en las sentencias emitidas
por los jueces agrarios, la infracción de leyes sustantivas, con cuya aplicación se definen los
derechos y obligaciones controvertidos y por otra parte, el recurso de casación en la forma, que
distingue su objeto cuando hubo quebrantamiento de las leyes adjetivas que regulan el
procedimiento agrario; o sea la parte puramente formal.
Asimismo, es necesario aclarar que el recurso de casación no constituye una segunda instancia,
por el contrario se la considera como una demanda nueva de puro derecho y se sujeta al
cumplimiento de requisitos específicos que determina la ley, por ser un recurso extraordinario
que procede sólo en los casos que la ley señala y juzga las infracciones o quebrantamientos de la
Ley, en las sentencias dictadas por los jueces agroambientales. Ahora bien, con la finalidad de
evitar dichas confusiones, a continuación, analizaremos ambos recursos estableciendo sus fines
y objetivos.
En ese contexto, podemos decir que, en síntesis, tiene por objeto invalidar determinadas
sentencias o autos definitivos cuando se han pronunciado con infracción de la ley, influyendo
dichas infracciones sustancialmente en lo dispositivo del fallo, ahí tenemos, si la sentencia
contiene violación aplicación errónea o indebida de la ley, si contiene disposiciones
contradictorias y cuando en la apreciación de la prueba, se hubiere incurrido en error de hecho o
de derecho.
En tal sentido es importante señalar que "el recurso de casación está instituido para proteger dos
finalidades esenciales: la defensa del derecho objetivo y la unificación de la jurisprudencia. La
primera finalidad, es la correcta aplicación de la Ley en los fallos judiciales de todo el país, con
ello se busca el imperio de la seguridad jurídica, la igualdad de los ciudadanos ante la Ley. La
segunda finalidad es unificar la jurisprudencia, con el objeto de un interpretación común de la
norma juridica en todo el territorio del Estado Plurinacional de Bolivia; para ello se requiere un
órgano nacional de casación". Ahora bien, de acuerdo a lo establecido por el Art. 271 del CPC,
el recurso de casación en el fondo procede en los siguientes casos:
También llamado "error inprocedendo" y según el profesor Alfredo Palacios Antezana, "el juez
puede incurrir en error in procedendo, cuando se desvía o se aparta de los medios señalados por
el derecho procesal, en la dirección del proceso; por error de las partes o por error propio. Puede
ser que ese apartamiento disminuya las garantas del contradictorio y privar a las partes una
legítima y plena defensa de sus derechos. Este error compromete a la forma a la estructura
externa, a su modo natural de realizarse.
De lo descrito, se colige que el recurso de casación en la forma, procede cuando existen vicios
procesales o errores de procedimiento, de modo que el Tribunal de casación anule obrados hasta
el vicio más antiguo. Por su parte Esteban Miranda Terán, señala que "las causales para
interponer el recurso de casación en la forma, señala que este medio de impugnación procederá
por haberse violado las formas esenciales del proceso o cuando la sentencia o auto hubiera sido
dictado:
1. Por un Juez Agrario contraviniendo a lo dispuesto por ley; por ejemplo, sin que el demandado
hubiera sido legalmente citado."
3. Otorgando más de lo pedido por las partes o cuando la sentencia no contenga disposiciones
claras y concretas respecto a las pretensiones de las partes.
2.2.3.1. Improcedente
Se declara improcedente el recurso con costas, cuando fuere interpuesto fuera de término (de los
8 días que prevé la ley), con el respectivo apercibimiento al Juez por no haber observado el
plazo, cuando el recurrente no hubiere citado en términos claros, concretos y precisos la
sentencia o el auto definitivo recurrido, cuando el recurrente no se hubiere especificando en que
consiste la violación, falsedad o error o cuando el recurrente no haya intervenido en el proceso
oral agrario o si carece de representación legal.
2.2.3.2. Infundado
Se declara infundado, cuando no se encontró haber sido violada la Ley o Leyes acusadas en el
recurso, evidenciándose que el juez actuó correctamente.
Se anula el proceso hasta el vicio más antiguo si la sentencia fue dictada por un Juez
incompetente o impedido o cuya excusa o recusación esté pendiente o hubiera sido declarada
legal por el Tribunal, lo mismo si en el fallo del Juez se hubiera otorgado más de lo pedido por
las partes o hubiera dejado de pronunciarse sobre alguna de las pretensiones deducidas en el
proceso y ello se hubiera reclamado oportunamente, también se anulará el proceso por la
ausencia de alguna diligencia o trámite declarados esenciales, siempre que esta ausencia esté
penada con nulidad por Ley, Al respecto y conforme a la jurisprudencia constitucional
desarrollada en Bolivia, para que opere la nulidad, además se debe tener presente los principios
de especificidad que consiste en que no hay nulidad sin ley específica que la determine y el
principio de trascendencia que determina que no hay nulidad si la violación no tiene gravitación
trascendente, toda vez que el fundamento de la nulidad es el perjuicio cierto e irreparable,
siendo por tanto la nulidad un remedio excepcional de última ratio y solo debería aplicarse
cuando aparezca una infracción insubsanable.
En el proceso oral agrario, el recurso de compulsa procede en caso de negativa indebida del
recurso de casación o nulidad, o por concesión errónea del recurso; consiguientemente, según el
Art. 279 del CPC, aplicado por el régimen de supletoriedad establecido por el Art. 78 de la Ley
N°1715.
El constituye una queja interpuesta ante el Tribunal Agroambiental, con la finalidad de que
declare la legalidad o ilegalidad de la resolución objeto del recurso, ya que solo a ese fin se abre
la competencia del tribunal superior.
Mediante una crítica eficaz, razonada o un análisis concreto y argumentado. Ahora bien, una
vez interpuesto el recuso de compulsa, no es necesario que el juzgador lo admita o lo rechace, si
no directamente debe darle el procedimiento que determina la ley, porque el juez compulsado
no tiene facultades para rechazar el recurso, caso contrario se convertiría en juez y parte,
afectando seriamente el debido proceso y derecho a la defensa.
El Art. 281 en su Par. I del Código Procesal Civil de manera clara establece que, aceptado el
memorial de compulsa, la autoridad judicial competente, decretará en el acto y sin mayores o
demoras se remitan fotocopias legalizadas de las piezas estrictamente necesarias al superior en
grado, en consecuencia el juez agroambiental anunciado de compulsa no puede negarse a
extender las fotocopias, a la parte interesada de ese recurso y no dar lugar a que exista una in
limine, por entender que la parte no tiene derecho a compulsar. Asimismo, el juez
agroambiental debe conceder al Secretario un plazo prudencial e improrrogable para la emisión
de fotocopias solicitadas, con la finalidad de no dejar abierto el plazo en forma indefinida.
Remitidos que fueran las fotocopias al Tribunal Agroambiental realizado el sorteo de la causa a
la sala respectiva, debe dictar resolución en el plazo de tres días de recibida la causa, declarando
la legalidad o ilegalidad de la compulsa, en consecuencia, deben ser ágiles en la tramitación del
recurso de compulsa.
2.3.3. Resolución
El Tribunal Agroambiental, que debe resolver el recurso de compulsa, tiene dos opciones o
formas de resolución: declarando legal o ilegal, puesto que sólo analiza, razonada y
juridicamente, si el recurso fue bien o mal denegado por el inferior o concedido el recurso en un
efecto diferente. Inicialmente este es el único análisis que debe realizar el Tribunal
Agroambiental que conoce y resuelve el recurso de compulsa.
Asimismo, es pertinente aclarar que en el marco de lo dispuesto en el Art. 283 del CPC,
declarada legal la compulsa, todo lo actuado por el juez agroambiental, desde interposición del
recurso de casación es nulo de pleno derecho, imponiéndose multa al inferior, en este caso al
Juez Agroambiental, que se hace efectiva mediante el descuento del salario que percibe el juez.
Por otro lado, si el Tribunal Agroambiental determina que la autoridad judicial inferior actuó
correctamente al denegar el recurso de casación, debe declarar ilegal la compulsa; es decir,
confirmar la resolución impugnada y ordenar la devolución del proceso en el día, al inferior
para que siga con la tramitación de la causa, en consecuencia, el compulsante debe ser
condenado al pago de costas y multa que serán regulados en la misma resolución: empero,
deben efectivizarse en el juzgado inferior.
Es importante señalar que mediante este recurso se reexamina una sentencia que tiene la calidad
de cosa juzgada empero que dicha sentencia hubiera sido obtenida por algún fraude procesal en
desmedro de una buena y transparente justicia. Como señala Podetti que la revisión
extraordinaria de sentencia "es el remedio procesal extraordinario encaminado a examinar de
nuevo una sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada, cuando se ha llegado a ella por medio
ilícitos o irregulares, sin culpa o negligencia del vencido. prescindiendo o incorporando nuevos
elementos de prueba en el nuevo juicio".
Por su parte el profesor De Santo, señala que "el recurso de revisión si constituye una tercera
instancia, expresión exacta si se la entiende referida exclusivamente a las cuestiones procesales,
porque en esta materia la impugnación provoca un nuevo examen de hecho y de derecho, con la
única particularidad que la distingue de la apelación de que el decisorio recurrido debe poseer
naturaleza definitiva".
Sin embargo, otros autores entienden que esta revisión consiste en un recurso: y otros que es
una acción autónoma, pues el proceso está terminado y la sentencia ejecutoriada. Ahora bien, en
materia agraria, el recurso extraordinario de revisión de sentencia es aplicable conforme lo
establecido en el Art. 20 Núm. 10 de la Ley 3545 donde entre otras atribuciones de la Sala Plena
del Tribunal Agroambiental señala "Conocer y resolver los recursos extraordinarios de revisión
de Sentencias Ejecutoriadas en el proceso oral agrario", concordante con lo previsto en la Ley
del Órgano Judicial y los Arts. 284 al 291 del CPC.
1. Cuando se hubiere fundado o instaurado en documentos declarados falsos por otra sentencia
ejecutoriada que se hubiere dictado con posterioridad a la sentencia que se tratare de revisar. Por
ejemplo, cuando se ha ganado un proceso de reivindicación gracias a un documento público y
luego ese documento es declarado falso o aparente.
2. Que habiéndose dictado sentencia exclusivamente en virtud de prueba testifical y han sido
condenados por falso testimonio en las declaraciones que sirvieron de fundamente a la
sentencia. Por ejemplo, si la sentencia tiene como fundamento un documento y no en virtud a la
prueba testifical, aunque sean declaradas falsas las declaraciones testificales la sentencia es
válida y no procede el recurso extraordinario de sentencia.
4. Presentación de copias o fotocopias del recurso como partes intervinientes en el proceso que
se reverȧ.
Asimismo, puede interponer este recurso una persona que no intervino en el proceso, cuando
existe fraude procesal, colusión o la resolución se hubiere obtenido por actividad dolosa del juez
agroambiental; es decir, cuando hubo total indefensión por desconocimiento del proceso, que
fuera seguido sin citación debida a la parte.
Ahora bien, este recurso se debe interponer en el plazo fatal de un año calendario (conforme el
calendario gregoriano) computables del día hábil siguiente a la ejecutoria de la sentencia; es
decir, de la que se pretende rever con el presente recurso. Sin embargo, si durante un año, no se
hubiere fallado todavía en el segundo señaladas en el Art. 284 del CPC, bastará que el
interesado haga protesta formal de usar el recurso, el cual debe ser formalizado dentro de los
treinta dias de contar de la ejecutoria de la misma.
Por otro lado, es importante señalar que, si el recurso es presentado fuera del plazo de un año, o
en el plazo complementario de treinta días de ejecutoriada la segunda sentencia pendiente,
corresponderá al Tribunal Agroambiental, rechazar la demanda in limine; es decir, sin revisar el
fondo. por ser extemporáneo.
Por otro lado, es importante señalar que el Art. 400 del CPC establece que: "I. La ejecución de
sentencias pasadas en autoridad de cosa juzgada no podrá suspenderse en ningún caso, por
ningún recurso ordinario o extraordinario, ni el de compulsa, ni el de recusación, ni por ninguna
solicitud que tendiere a dilatar o impedir el proceso de ejecución, que serán rechazados en
forma inmediata. II. Sin embargo si existiera acusación por falsedad material o ideológica en
materia penal que recayera sobre el documento base de la acción, se suspenderá
provisionalmente su ejecución: más si se opone su falsedad como excepción civil, la autoridad
judicial según las circunstancias podrá suspender provisionalmente su ejecución".
Una vez cumplidos los trámites correspondientes, el Tribunal Agroambiental, debe dictar la
resolución definitiva resolviendo el recurso de revisión y a tal efecto tiene dos alternativas o
formas de emitir resolución: Declarando fundado o rechazando el recurso; es decir, la sentencia
será declarada fundada o rechazada y hará cosa juzgada material; lo que significa que no cabe
ningún otro recurso para impugnar dicha resolución, a cuyo efecto estudiaremos las dos formas
de resolver.
Si bien la Acción de Amparo Constitucional (AAC) no es una etapa más del proceso
administrativo en materia agraria y de la jurisdicción agroambiental, sin embargo se debe tener
presente que producto del proceso de saneamiento ejecutado por el INRA: proceso contencioso
administrativo ante el Tribunal Agroambiental, y procesos agrarios que son competencia de los
jueces agroambientales, en caso de que se conculquen derechos y garantías constitucionales el
administrado o los sujetos procesales tienen la facultad de plantear la Acción de Amparo
Constitucional, a cuyo efecto estudiaremos el procedimiento de dicha acción.
1. Naturaleza jurídica
En suma, la AAC en su dimensión procesal, se concibe como una acción que la Norma Suprema
otorga a la persona, la facultad de activar la constitucional en defensa de sus derechos
fundamentales y garantías constitucionales, cuando estos hubieran sido conculcados. justicia En
tal sentido, la Acción de Amparo Constitucional en materia agraria se puede plantear contra los
siguientes actuados:
1. Contra los Actos Administrativos contra los cuales no exista recurso ulterior.
2. Resolución Jerárquica
3. Sentencia emitida por el Tribunal Agroambiental.
Como bien se ha desarrollado, en el CAPÍTULO X, sobre Recursos Administrativos que
procede en contra de los Actos Administrativos establecidos en el Art. 76 del Decreto Supremo
NO 29215 y que una vez emitida la Resolución Jerárquica y notificada al administrado queda
agotada la vía administrativa, consiguientemente cumple con el principio de subsidiariedad,
habilitando la AAC, empero, también se debe tener presente que la vía administrativa queda
agotada cuando se trata de actos administrativos sobre los cuales no procede ningún recurso
administrativo, o cuando habiéndose resuelto el Recurso de Revocatoria no exista recurso
ulterior, extremos con los cuales también se cumplen el principio de subsidiariedad, lo que
significa que si existe vulneración de derechos y/o garantías constitucionales procede la AAC.
Por consiguiente, la AAC forma parte del control reforzado de constitucionalidad o control
tutelar de los derechos y garantías al constituirse en un mecanismo constitucional inmediato de
carácter preventivo y reparador destinado a lograr la vigencia y respeto de los derechos
fundamentales y garantías constitucionales, siempre que no exista otro medio de protección o
cuando las vías idóneas pertinentes una vez agotadas no ha restablecido el derecho lesionado, lo
que significa que de no cumplirse con este requisito, no se puede analizar el fondo del problema
planteado.
Por tanto, tampoco otorgar la tutela, extremo que mereció similar entendimiento por parte del
TCP, a través de la sep 0031/2012 de 18 de junio de 2012 y sep 1770/2013 de 21 de octubre de
2013, donde señala que: "en efecto, el principio de subsidiariedad de la acción de amparo
constitucional supone que este medio de defensa no podrá activarse en tanto no se agoten otros
medios o recursos legales que permitan la protección de o los derechos de la persona interesada;
así lo establece el Art. 129. I de la CPE y el Art. 54 del Código Procesal Constitucional".
Sobre el particular, la naturaleza subsidiaria del amparo constitucional ha sido desarrollada por
la abundante jurisprudencia de este Tribunal, que establece: el recurrente debe utilizar cuanto
recurso le franquee la ley, sea ante la autoridad o persona que lesionó su derecho o ante la
instancia superior a la misma en caso de que se trate de autoridad y, en el caso de particulares,
acudir ante la autoridad que conforme a la naturaleza del acto ilegal u omisión indebida le pueda
otorgar protección inmediata".
Por otro lado, la inmediatez apunta al plazo máximo de 6 meses como bien indica el Art. 129
Par, II de la Constitución Política del Estado concordante con lo dispuesto en el Art. 55 de la
Ley No. 254, dicho plazo se computa desde el momento que la vulneración de derechos o
garantías constitucionales alegada o de notificada la última decisión administrativa o judicial. Es
así que en nuestra legislación, no existe caducidad de derechos sino prescripción de la
pretensión procesal (...) esto conlleva a que una vez vencido dicho plazo, la persona afectada
carecerá de posibilidad de interponer una demanda de amparo; sin embargo, esto no implica que
no pueda hacer valer sus derechos por otra vía judicial e incluso en un escenario distinto.
En nuestro ordenamiento jurídico constitucional, el Art. 52 de la Ley NO 254 nos indica quienes
pueden presentar la AAC, conforme la citada normativa indica:
1. Toda persona natural o jurídica cuyos derechos estén siendo restringidos, suprimidos o
amenazados, de serlo, directamente u otra en su nombre con poder suficiente.
2. El Ministerio Público.
3. La Defensoría del Pueblo.
4. La Procuraduría General del Estado.
5. La Defensoría de la Niñez y Adolescencia".
En cuanto a las personas naturales, la legitimación activa para plantear AAC, tiene su
fundamento en el hecho de que siendo una acción tutelar que protege los derechos
fundamentales de la persona, quien debe contar con la capacidad procesal es precisamente el
titular del derecho fundamental vulnerado, pues es el quién tiene la potestad de exigir la
restitución o restablecimiento del derecho vulnerado, en su caso, consentir el acto lesivo en el
marco de la máxima jurídica de que "los derechos se ejercen y las obligaciones se cumplen"...()
(176) aspecto sobre el cual el TCP estableció similar entendimiento, mediante SCP 015/2014 de
10 de enero de 2014 y SC 0400/2006-R de 25 de abril de 2006.
Por lo tanto, no basta con presentar por ejemplo una escritura de modificación en la que aparece
como cogerente, con facultades generales de representación, documentación insuficiente para
los fines de esta acción de defensa tal situación motivará que el accionante carezca de
legitimación activa para plantear la AAC al no haber acreditado debidamente su personería, lo
que determina la improcedencia del recurso e impide conocer el fondo del asunto, a cuyo efecto,
como referencia citaré las Sentencia Constitucionales 1758/2011-R de 07 de noviembre de
2011; 022/2003-R de 08 de enero de 2003; 1121/2006-R de 08 de noviembre de 2006,
1258/2001 -R de 28 de noviembre de 2001.
Ahora bien, el TCP mediante SCP NO 1389/2014 de 07 de julio de 2014, estableció que; "la
legitimación pasiva se extiende tanto a servidores públicos como a particulares, por creerse que
los mismos hubiesen vulnerado o infringido las normas constitucionales referidas a Derechos
Humanos, conforme lo establecen los Arts. 128 y 129 de la CPE, para que una vez notificados
con la acción de defensa, puedan pronunciarse y presentar sus informes pertinentes ante la
autoridad competente, con referencia a los actos ilegales y omisiones indebidas en los que
hubiesen incurrido y que afecten los derechos y garantías constitucionales"
A momento de plantear la AAC es importante citar el nombre y domicilio del o los terceros
interesados, siendo que se constituye en uno de los requisitos de admisibilidad, esto con la
finalidad de que pueda asumir defensa toda vez que la resolución que el Tribunal de garantías
emita producto de la AAC puede afectar a sus derechos o garantías constitucionales. Así se
tiene establecido la jurisprudencia constitucional, mediante la Sentencia Constitucional
1395/2011 -R de 30 de septiembre de 2011, donde señala lo siguiente:
Para ello, es necesario acudir a los entendimientos jurisprudenciales desplegados por este
Tribunal, en ese sentido en la SC 1351/2003-R de 16 de septiembre, reiterada por la SC
1202/2010-R, de 6 de septiembre, se estableció que: «...en todo proceso judicial o
administrative en el que la decisión final del mismo pudiera afectar los derechos o intereses
legítimos de terceras personas, estas deben ser citadas o notificadas, según el caso, a los fines de
que puedan ejercer, en igualdad de condiciones, el derecho a la defensa, ofreciendo las pruebas
que consideren pertinentes y controvirtiendo las que se presenten en su contra dentro del
proceso, de acuerdo con las formas propias de cada juicio y conforme a la normativa procesal
pertinente"
Sin embargo, dicha motivación no significa que la exposición sea ampulosa de consideraciones
y citas legales, sino que sea concisa, pero clara Y satisfacer todos los puntos demandados,
debiendo expresar el tribunal de garantías, sus convicciones determinativas que justifiquen
razonablemente su decisión.
En virtud al Art. 36 Núm. 8 de la Ley 254 del Código Procesal Constitucional, la resolución que
resuelva la AAC habiéndose fundamentado y motivado puede ser de dos formas:
6.2. Efectos
La resolución emitida por el Tribunal de Garantías debe ser ejecutada de manera inmediata y sin
observaciones. En caso de resistencia al cumplimiento, puede darse lugar a sanciones que va
desde la privación de libertad por comisión del delito de desobediencia a resoluciones en AAC,
establecido en el Art. 179 bis del Código Sustantivo Penal, empero que también está sujeto de
sanción civil y/o administrativa.
Por ello, cabe mencionar que el tribunal debe tomar en cuenta la determinación subjetiva de los
efectos de la sentencia, debiendo señalar la conducta concreta exigible que debe cumplir
aquellos que han vulnerado los derechos; en otras palabras no solo se trata de ordenar la
restitución de los derechos, imponer indicios de responsabilidad, ordenar la nulidad o restitución
del derecho o el cese de la omisión ilegal o indebida, sino que además debe establecer una orden
y definición precisa de la conducta a cumplir el accionado con el fin de hacer efectiva su
sentencia, así como dejar en claro determinada recomendaciones.
el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y la Procuraduría General del Estado, puede
plantear la AP. conforme establece los Arts. 135 y 136 de la Constitución Política del Estado,
cuando con un acto u omisión de servidora o servidor público o persona particular o colectiva
realicen o pretendan con actos a restringir, suprimir o amenazar la restricción o supresión de
derechos fundamentales y garantías constituciones e intereses de un grupo social o nacional,
referentes a su patrimonio, espacio, seguridad y salubridad pública, medio ambiente entre otros
de interés o derecho colectivo.
Ahora bien, como se estudió en el capítulo anterior, qué producto del proceso de saneamiento
ejecutado por el INRA; proceso contencioso administrativo ante el Tribunal Agroambiental y
procesos agrarios que son competencia de los jueces agroambientales; en caso de que se
conculquen derechos y garantías constitucionales las comunidades indígenas originarias
campesinas tienen la facultad de plantear la AP en el marco de su naturaleza jurídica, a cuyo
efecto estudiaremos el procedimiento de dicha acción.
1. Naturaleza jurídica
La AP tiene por objeto garantizar los derechos e intereses colectivos, con una eficaz e inmediata
defensa, cuando se lesionen o amenacen lesionar derechos e intereses colectivos, relacionados
con el patrimonio, el espacio, la seguridad y salubridad pública, el medio ambiente y otros de
similar naturaleza, reconocidas por la Norma Suprema constituyendo de esta forma un
verdadero proceso de naturaleza constitucional.
Por otra parte, la Ley Suprema del ordenamiento jurídico, establece que los derechos
reconocidos por ella son inviolables, universales, interdependientes e teniendo el Estado el
deber de promoverlos protegerlos y respetarlos.
Con relación a tales derechos, el Estado garantiza a todas las personas y colectividades, sin
discriminación alguna, el libre y eficaz ejercicio de los mismos y para hacerlos efectivos, se ha
instituido, además de la acción de amparo constitucional antes instituida como (recurso de
amparo constitucional), así como otra acción de defensa, la acción popular, que procede contra
todo acto u omisión de las autoridades o personas individuales y colectivas que violen o
amenacen con violar derechos colectivos, relacionados con el patrimonio, el espacio, la
seguridad salubridad pública, el medio ambiente y otros de similar naturaleza, de acuerdo a lo
previsto por el Art. 135 de la CPE". indivisibles,
1. Toda persona natural o jurídica, por si o en representación de una colectividad, que considere
violados o amenazados derechos o intereses colectivos señalados en el Artículo anterior.
2. El Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo, con carácter obligatorio, cuando por el
ejercicio de sus funciones tengan conocimiento de esos actos.
En esa misma línea el TCP mediante SCP N° 0276/2012-R sobre la legitimación activa,
estableció que: "De lo anotado, se tiene que esta acción puede ser presentada por cualquier
persona, a sea a título personal o en representación de una colectividad, cuando se alegue lesión
a derechos comunes, donde el titular de los derechos violados es la colectividad en general y
para ellos cuanto lo haga en representación de una colectividad, este no requiere de poder
alguno.
Por otro lado, como señal le Ley Fundamental, están obligados también a presentar esta acción
el Ministerio Público y el Defensor del Pueblo, cuando éstos en el ejercicio de sus funciones
tomen conocimiento de actos que lesionen derechos e intereses colectivos; de lo anotado, se
tiene que para la presentación de la acción popular no se requiere cumplir con ningún requisito
formal porque la legitimación activa es amplia".
Asimismo, la SCP No. 487/2014 señala que: la acción popular es el mecanismo idóneo, para la
tutela de los derechos de las naciones y pueblos indígenas, originamos campesinos, frente a
actos u omisiones de las autoridades o personas individuales o colectivas que violen los
derechos colectivos previstos en el artículo 30 de la CPE.
En el Convenio 169 de la OIT y la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de
los pueblos indígenas, así como los otros derechos subjetivos previstos tanto en nuestra
Constitución como los Pactos Internacionales sobre Derechos Humanos, ejercitados
colectivamente por las naciones y pueblos indígena originario campesinos, en el marco de lo
previsto por el artículo 1 de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los
Pueblos Indígenas.
En nuestro ordenamiento jurídico constitucional, para plantear la AP no está regida por los
principios de subsidiariedad y caducidad; pues, en el marco de lo dispuesto por el Art. 36 de la
Constitución Política del Estado la AP señala que puede interponerse durante el tiempo que
subsista la vulneración o la amenaza a los derechos intereses colectivos y que para interponer
esta acción no es necesaria agotar la vía judicial 0 administrativa, extremo que es concordante
con el Art. 70 del Código Procesal Constitucional y la jurisprudencia constitucional (SCP
1018/2011-R, entre otras).
Conforme se puede advertir, se anularon obrados por causas de terceras personas, que tenían
interés en el proceso de saneamiento de tierras y no fueron consideradas, posteriormente
mediante la presente acción popular, se solicita se deje sin efecto las resoluciones de nulidad de
saneamiento, sin proceder a citar a los terceros interesados, omisión atribuible al Juez de
garantías, quien no tuvo en cuenta que la resolución a ser emitida en la acción tutelar, puede
afectar a los derechos de dichos terceros interesados, motivo por el cual, debió observar a
tiempo de admitir la acción para que la parte accionante identifique a los mismos.
En virtud del Art. 36 numeral 8 de la Ley 254 (Código Procesal Constitucional), la resolución
que resuelva la Acción Popular habiéndose fundamentado y motivado puede ser de dos formas:
6.2. Efectos
La resolución emitida por el Tribunal de Garantías debe ser ejecutada de manera inmediata y sin
observaciones. En caso de resistencia al cumplimiento, puede darse lugar a sanciones penal,
civil y/o administrativo, es por ello que el tribunal debe tomar en cuenta la determinación
subjetiva de los efectos de la sentencia, debiendo señalar la conducta concreta exigible que debe
cumplir aquellos que han vulnerado los derechos; es decir no solo se trata de ordenar la
restitución de los derechos, imponer indicios de responsabilidad, ordenar la nulidad o restitución
del derecho o el cese de la omisión ilegal o indebida sino que además debe establecer una orden
y definición precisa de la conducta a cumplir por el accionado con el fin de hacer efectiva el
cumplimiento de la resolución.