You are on page 1of 12
CAPITULO 1 Pats fragmentado: continuidad y cambio en la geografia econdmica de Colombia EN SU RETRATO DEL AISLAMIENTO del pueblo de Macondo en Cien anos de soledad, Gabriel Garcia Marquez sefiala un aspec- istorica de Colombia. Durante la la poblacion to fundamental de la mayor parte de su historia después de la Conquista, ha sido escasa y ha vivido esparcida en comunidades pequefias y desligadas. Los pocos relatos de viajeros del siglo xvill y los mu- chos del siglo xix describen grandes extensiones del territorio casi sin habitantes, Esta escasez y dispersin de la poblacion han difi- cultado el desarrollo de las vias de comunicaci6n y la integracion econémica de Colombi; Otras dos caracteristicas de la geografia son fundamentales: sus regiones mas pobladas son a la vez tropicales y montafiosas. Lalinea ecuatorial atraviesa el pais, de cuyo territorio dos terceras partes quedan en el hemisferio norte y el tercio restante en el sur. Aunque algunos territorios llegan hasta los cuatro grados de latitud sur, la mayoria de la poblacién vive entre los tres y once grados de latitud norte. Debido ala ubicacién tropical, las temperaturas de cualquier localidad permanecen mas 0 menos constantes a lo largo del afio. Las variaciones dependen principalmente de la altitud. Bogota', situada a 2.600 metros sobre el nivel del mar, goza de una prima- vera fria con una temperatura promedio anual de 13 grados centi- grados, mientras que Cali, a un poco mas de 1.000 metros, disfruta de un verano permanente. La poblacién que habita en el nivel del mar, como en la costa atlantica o en altitudes muy bajas, en los valles del rio Magdalena o en los Llanos Orientales, debe soportar tempe- raturas atin mayores, de 27 a 30 grados centigrados en promedio. El clima colombiano es tropical no sélo por la constancia de las temperaturas locales sino por la abundancia de Iluvias en casi todo el territorio. Temperatura constante y lluvia abundante producen una vigorosa vegetacion. Esto es cierto en las tierras bajas y en las montafias que, por lo general, ofrecen un tono verde esmeralda que contrasta con la desolada aridez de la vertiente occidental de los Andes peruanos. 1. Desde la conquista espanola la capital de Colombia, al igual que el pais, ha recibido distintos nombres. En la Colonia se la conocié como Santa Fe 0 Santafé, seguida de Bogoti. En el periodo republicano se la Ilamé simplemente Bogota. Sin consultar a nadie, los constituyentes de 1991 resolvieron volver al nombre colonial. En este texto la Hamaremos Santa Fe durante la Colonia y Bogoti después de c. 1819, 15 Colombia: pais fragmentado, sociedad dividida Historicamente las cordilleras de los Andes han dominado la topografia colombiana y, en muchos aspectos fundamentales, han establecido las condiciones de vida. Al menos desde la époc conquista espaiiola y, por lo que se sabe, también en la era preco- lombina, las mayores densidades humanas se encontraban cn las altiplanicies que permitian escapar del calor y de las enferme des tropicales y ofrecian condiciones favorables ala agricultura. Un nueve por ciento del territorio colombiano se localiza entre los 1.000 y 2.000 metros, en vertientes o valles interandinos de clima templado y confortable, y un seis por ciento por encima de los 2.000 metros, donde las temperaturas son frias, similares a la primavera © el otofio de la zona templada del planeta. En este 15 por ciento del territorio vive la mayoria de la poblacién; casi dos tercios en cl siglo x1x, en 1964 un poco mas del 60 por ciento. En contraste, la poblacién es escasa en las tierras célidas, por debajo de los 1.000 metros. En el ultimo siglo y medio han albergado un poco menos de un tercio de la poblacién total. Ios I lanos Orientales ylare- gién amazénica, en el sur, que conforman mas itad del te- rritorio (56 por ciento), albergan un poco mas del uno por ciento de la poblacién nacional. Las selvas tropicales del Choco, en el noroccidente, y la semidesértica peninsula de la Guajira, en el nororiente, también estén muy poco pobladas. Sin embargo, con el tiempo se fueron sucediendo migraciones importantes hacia las tierras bajas, proceso que se aceleré en el siglo xx. A lo largo de la historia colombiana, la zona baja de mayor po- blamiento ha sido la costa atlantica. Antes de la conquista espafiola, la costa caribe parece haber albergado importantes concentraciones de poblacién. Después de la conquista, estas poblaciones indigenas fueron diezmadas. No obstante, bajo la dominacion espafiola la region caribe adquirié una nueva funcién como intermediaria en~ tre las zonas mas pobladas del interior y el mundo exterior. Las ciu- dades costeras ~—Cartagena, Santa Marta colonial, dela y Riohacha en el periodo , y Barranquilla a partir de la segunda mitad del siglo xix— fueron lugares de transito de los bienes que se importaban y cx- portaban. Sobre todo para Cartagena, Santa Marta y Barranqui- Ila, su conexién con el rio Magdalena, que vinculaba la costa con 2. Allberto Pardo Pardo, Geografia econimicay humana de Colombia, BogO- t4, 1972, pp.79-80. Pais fragmentado cl interior del pais, fue de suma importancia. Otra zona destacada sobre el Caribe, el istmo de Panama, también fue un importante centro de transito, en este caso entre los océanos Atlantico y Paci- fico y sus costas en América. En gran parte por su estrecho vincu- lo con el comercio exterior, y con el mundo en general, la zona caribe se desarrollé con caracteristicas muy propias, que la dife- rencian de las apartadas regiones del interior del pais. Su pobla- cién se identifica con la vida y la cultura del Caribe, en contraste con la mayor parte de la poblacién de las zonas mas aisladas de los Andes. . i , Si los altiplanos brindaron a la poblacién un ambiente propi- cio, también dividieron el pais econémica, cultural y politicamen- te. Los Andes colombianos no forman una sola cadena montafosa sino tres imponentes cordilleras que nacen justo al norte de. la fron- tera con el Ecuador o menos paralelas en direccién norte-noreste. No alcanzan éstas las impresionantes alturas de los Andes peruanos y bolivianos. Algunos picos de las cordilleras Cen- tral y Oriental estan por encima de los 5.500 metros, pero la alti- tud promedio en las dos es de unos 3.000 metros. La — Occidental, que establece el limite con la region de la costa del Pacifico, tiene una altitud promedio de 2.000 metros. Aun asi, las tres cadenas han sido formidables barreras para la comunicacién de las regiones colombianas y del interior del pais con el mundo sta dificultades pueden ilustrarse con el caso de la apertura del llamado paso del Quindio que, siendo una de las principales rutas de la cordillera Central a fines del periodo colonial, dificil- mente podia atravesarse en mula. Hasta bien entrado el siglo xix muchos viajeros debian ser cargados en sillas, atadas a las espaldas de otros hombres considerados mas seguros que las bestias. Mu- chas rutas de las tres cordilleras presentaban dificultades simila- res y hasta terminar el siglo se cruzaban a lomo de mula 0 a caballo, si las condiciones eran favorables. Los viajeros de la Colonia y del siglo x1x dejaron vividos rela- tos de los horrores de ascender o descender el camino de herra- dura que unjaa la Sabana de Bogota con Honda, el principal puerto del rio Magdalena en el interior. Este camino fue la ruta obligada de los viajeros y del comercio con la costa atlantica y de gran parte del trafico entre el oriente y el occidente del pais; aun asi, durante Colombia: pais fragmentado, sociedad dividida mas de trescientos afios fue una aventura recorrerlo. Desde el rie hasta la Sabana de Bogota el camino ascendia y des pliegues sucesivos, antes de remontar el tronco principal de la cor- dillera. En el corto trayecto de 77 kilémetros ganaba los 2.600 metros. A los inconvenientes del relieve se afiadia el clima de la region que atravesaba. Furiosas y frecuentes tormentas tropicales arrasaban tramos de la via y dejaban impasables otros. Un viajero britanico recordé asi su des cipios de la década de 1820: india por re so por el camino de Honda a prin- «+. €spantoso, subiendo y bajando siempre por un empedrado aspero, roto por los torrentes violentos de la montafia... Las mulas se mantienen de pie con la mayor dificultad saltando de un promontorio a otro y poniendo al jinete en peligro inmi- nente de desnucarse. Donde el camino no esta empedrado, cl trafico constante y la humedad del ambiente forman charcos profundos en los que las bestias se hunden a cada paso hasta la cincha’. Seguin la opinién establecida, esta parte alta de la ruta no era la Peor. Los tramos bajos eran pavorosos. Asi lo hizo constar un via- Jero norteamericano por los mismos afios: En Villeta llegamos a la conclusion de que nada podia ser peor al camino que hasta alli descendia. El tramo a Guaduas demos- tr6 nuestro error. Era horrible: jbajar, bajar, bajar! rocas, barran- Cos, precipicios, acantilados, pantanos, asi una y otra vez. Los desfiladeros ascendian pareciendo absorber la humedad de una atmésfera calurosa y desmoronarse al contacto; colinas que ha- bian cedido en la base, inclinando los barrancos y hondonadas empinandas, lavadas por la inundacién de la montafia que de- jaba sueltas y desnudas las grandes rocas sobre las cuales, y s6lo sobre las cuales, yacia el camino para el hombre y la bestia... Los peligros de este camino eran tales que los propietarios de recuas no aceptaban carga en las épocas de crudo invierno debido 3. Letters written from Colombia...1823, p.78. 4. Duane, p. 577- Pais fragmentado al gran riesgo para los animales. Aun durante el verano, los fletes de mula fueron relativamente altos: de 22 a 34 centavos por tone- lada-kilometro a mediados del siglo xix. En estaciones de Iluvia o cuando la guerra civil hacia escasear las mulas, los fletes se dupli- caban (40 a 60 centavos por tonelada-kilémetro). Por la misma épo- ca la construccién de canales y ferrocarriles en los Estados Unidos habia logrado abatir los costos de transporte terrestre a cerca de 1,25 centavos por tonelada-kilémetro, Puesto que el camino de Honda a Bogota fue muy utilizado por la clase alta y los viajeros extranjeros, fue objeto de muchas maldi- ciones y lamentos. Pero no fue excepcional. Casi todos los pasos montafiosos, como los que comunicaban las poblaciones de Boyaca y Santander en el oriente y Antioquia y el valle geografico del Cauca en el occidente con el rio Magdalena, ofrecian condiciones seme- jantes aunque fueron descritos con menor frecuencia. La dificultad del transporte mantuvo separados a los habitan- tes de las altiplanicies en dos zonas claramente demarcadas. La de lacordillera Oriental, el oriente, formada por sus numerosos flan- cos, repliegues y valles interiores, incluido el piedemonte que daa los Llanos, y la regién occidental, formada por las cordilleras Cen- tral y Occidental, con el valle del rio Cauca flanqueado por am- bas. Si las comunicaciones entre las grandes zonas fueron dificiles hasta bien avanzado el siglo xx, el transporte dentro de cada una de ellas lo fue ligeramente menos. En las estribaciones altas de la cordillera Oriental aparece un conjunto de mesetas comunicadas entre si que permite viajar con facilidad desde Bogota, en el sur, hasta Sogamoso o Moniquira en el norte. Esta region, conformada por los actuales departamentos de Cundinamarca y Boyaca, ha estado integrada, cultural y politi- camente, desde los tiempos precolombinos hasta el presente. Al norte de los altiplanos cundiboyacenses aparece la region de Guane, elactual departamento de Santander, montajiosa y cortada por ca~ fiones profundos; topografia accidentada que le ayuda a conservar una identidad propia. Silas altiplanicies de la cordillera Oriental permitieron una in- tegracién parcial, el valle del rio Cauca desempefié un papel simi- lar en el occidente del pais al facilitar la comunicacién y por lo tanto cierta unificacién politica y cultural. Permitié el transporte desde Popayan, en el sur, hasta Cartago en el norte. Al sur de Popayan, Colombia: pats fragmentado, sociedad dividida hacia la frontera con Ecuador, queda la region de Pasto, de intrin- cados y masivos nudos montafiosos que hacen el acceso dificil; qued6, sin embargo, ligada a Popayan, comercial, administrativa y politicamente. De modo similar, al norte del Valle aparece otro complejo montafioso que el rio Cauca, en su camino hacia el Mag- dalena y el Caribe, corta profundamente: la regién antioquena, que hoy ocupan los departamentos de Antioquia, Caldas, Risaralda y Quindio. Sus habitantes han vivido una relacion ambigua con cl resto del occidente. En los tiempos precolombinos estuvicron li- gados a los demas pueblos occidentales, aunque tuvicron rasgos distintivos y fueron politicamente independientes. Durante gran parte de la Colonia mantuvicron su idiosincrasia cultural, pero quedaron sometidos al dominio politico de Popayan. Ya en la era republicana las dos regiones han sido culturalmente diferentes aunque aliadas politicas en ocasiones. Entre los dos ejes humanos de las altiplanicies orientales y cen- trales fluyen las turbias aguas del rio Magdalena. Hasta el primer tercio del siglo xx, el Magdalena fue para la mayoria de la pobla- cién andina el principal medio de comunicacién con cl mundo exterior. Navegandolo los conquistadores hallaron cl camino ha- cia los altiplanos del oriente. Por cl Magdalena viajaban los admi- nistradores espafioles y se transportaban los bienes importados para el consumo de la clase dominante colonial en el interior. Y por el Magdalena surcaron igualmente las primeras exportaciones de productos tropicales, en pequefias cantidades a fines del periodo colonial, que ya fueron volimenes mayores en la segunda mitad del siglo xix. Rio abajo, la corriente del Magdalena proporcioné transporte relativamente rapido y facil. Sin embargo, como ruta hacia cl inte- rior, la navegacién enfrentaba todo tipo de obstaculos. Entrar en las bocas del rio, en su desembocadura sobre el Caribe, era una empresa dificil y peligrosa, y hasta las tiltimas décadas del siglo xix los viajeros y las mercancias por lo general accedian al Magdalena por vias indirectas como Cartagena o Santa Marta. Muchos pasos estaban obstruidos por bancos de arena, en tanto que en el curso medio del rio, sobre todo en las cercanias de Nare, las embarca- ciones afrontaban peligrosos rapidos y corrientes. Otros rapidos ubicados mas adelante hacian que Honda fuera el final de la nave- gacién rio arriba desde la costa. ais fragmentado Hasta la mitad del siglo x1X, viajar rio arriba fue un purgatorio para quienes tuvieron que vivir la experiencia. Desde la costa atlin- tica hasta Honda, las embarcaciones recorrian 950 kilémetros, mo- vidas por la fuerza muscular de bogas, diestros en el manejo de largas varas de madera con las cuales presionaban contra el lecho del rio. La duracién del viaje dependia en parte de las condiciones del rio. Un oficial espaiiol del siglo xvimt informé que en las mejo- la travesia demoraba unos 25 dias; cuando el rio res condiciones estaba muy crecido por las Iluvias, el viaje podia durar entre 45 dias + dos meses. El tiempo gastado en el viaje variaba también segiin ia clase de embarcacién. En las primeras décadas de la Repiiblica la canoa del correo subia cl rio en 15 dias. Pero botes mas grandes, como los champanes con carga, por lo general requerian mas de dos meses. Durante la travesia en champan, los viajeros sudoro- sos se apifiaban bajo un techo de bambi, a merced de los zancu- dos, mientras que cl monétono recorrido del boga trabajando sobre el techo los Ilenaba de polvo. Tal fue el principal método de trans- porte fluvial disponible hasta que se establecié la navegacién a va- por por cl Magdalena, esporadicamente en las décadas de 1820 y 1830, y ya con servicio continuo a partir de 1847. Desde antes de la legada de los espafioles, la topografia divi- did a la poblacién en tres regiones principales. El oriente, el occi- dente y la costa del Caribe. Esta division distingue a Colombia de otros paises latinoamericanos. Por ejemplo, desde tiempos preco- lombinos México ha estado dominado por el valle Central. En épocas mas recientes, Santiago, en el valle Central de Chile, y las ciudades costeras de Caracas en Venezuela, Buenos Aires en Ar- gentina y Montevideo en Uruguay, consolidaron un poder decisi- vo en cada una de esas naciones. En contraste, Colombia no ha tenido ninguna caracteristica topografica de tipo centralizador. Historicamente Bogota ha dominado en el terreno politico, enfren- tando desafios y teniendo que compartir el poder econémico con rivales importantes de otras regiones. Las realidades geograficas impidieron la emergencia de una ciudad y una regién dominantes, Las divisiones regionales influ- yeron en la diferenciacién de las culturas indigenas de la era pre- colombina. La divisién fisica entre oriente y occidente, decretada por la imponente masividad de la cordillera Central, quedé refor- zada por el accidente hist6rico que vio al pais avasallado y poblado 21 Colombia: pais fragmentado, sociedad dividida direcciones. Los efectivamente por espafioles que Hegaron de varia conquistadores procedentes del Caribe se establecicron en la cor- dillera Oriental y los valles del Magdalena. Pero gran parte del occidente, particularmente la region de Pasto, cl valle del rio Cauca y la costa pacifica, fue descubierto y luego controlado por huestes que particron del Pert. Este patron de poblamiento, afadido a la dificultad de cruzar la cordillera Central, promovio el estableci- miento de autoridades politicas separadas cn cl oriente y el occiden- te. En parte por esta raz6n, cl oriente y el occidente de Colombia tuvieron en los siglos xvi y xvii distintas jurisdicciones adminis- trativas. En el periodo colonial las tr ron, ademas, caractcristic: onomicas diferentes. a mineria del oro fue el motor de la economia del occidente, y Ia agricultura, ademas de atender los mercados locales, también abastecié a los mineros en varias regioncs, La mincria fue menos importante cn eloriente, donde el fuerte cran la agricultura y la produccién ma- nufacturera artesanal, parte de la cual se destinaba al occidente, por lo menos hasta mediados del siglo xix. En la costa atlantica, Car- tagena se concentré en la importacién de esclavos y el comercio de bienes de consumo, la exportacién de oro y el abastecimicnto de alimentos y otros productos tanto a las naves que atracaban cn su puerto, como a otras regiones del Caribe. Las tres regiones también Hegaron a tener caracteristicas étni y culturales diversas, E] rapido descenso de las poblaciones indi- Benas en la costa atlantica y en Jas regiones mineras del occidente condujo a su reemplazo por fuerza de trabajo africana. Como re- sultado, las regiones caribefias y del occidente quedaron cultural- mente marcadas Por el ancestro africano de los esclavos negros y sus descendientes. En las regiones montafiosas del oriente, por el Contrario, los aborigenes sobreviveron en mayor numero y se in- trodujeron pocos esclavos afticanos. Por consiguiente, en el oriente se conservé una poblacién campesina mestiza con rasgos fisioné- micos y culturales de los muiscas precolombinos. Las diferencias en las bases poblacionales de las regiones en- oe expresi6n en sus identidades culturales regionales. El predominio de la poblacién de clase alta de origen criollo, descen- diente de los gspafioles, ha sido evidente en las tres regiones; sin embargo, efalante de las relaciones entre dominantes y domina- s regiones principales desarrolla- Pais fragmentado dos ha difcrido entre ellas. En las regiones montafiosas del orien- es entre la clase alta y los sirvientes y peones deal- guna ascendencia indigena se caracterizaron siempre por una rigida arrogancia por parte de los primeros y por una actitud de subor- dinacidi y humildad por parte de los ultimos. En Cartagena y el Cauca, el dominio aristocratico fue tan evidente como en Bogota 0 Tunja. No obstante, en Ta region caribe y en algunas localidades del occidente, las relaciones entre la clase dominante y la fogosa fuerza de trabajo afrocolombiana se han caracterizado por una mayor naturalidad e informalidad. ‘Durante el siglo x1x, las tres regiones principales fueron anta- gonistas en lo politico y las zonas occidental y caribefia compar- tieron la antipatia que les despertaba la ciudad capital en el oriente. En estas rivalidades regionalistas subyace la tradicién de varios si- glos de autonomia de ciudades como Popayan y Cartagena. Tal sentido de importancia regional tuvo un cimiento en el poder eco- nomico y otro en la tradicién politica. Cada una de las tres regio- nes controlé medios tinicos. Bogota conté principalmente con el poder politico, resentido en las demas regiones. Como respaldo de este poder, la cordillera Oriental poseia ricos recursos agropecua- rios, una fuerza laboral indigena sobreviviente y una poblacién mucho mayor que la de cualquiera de las otras dos regiones. En el occidente estaba el grueso de los depésitos de oro, el tinico pro- ducto importante de exportacion durante la Colonia y la primera mitad del siglo x1x. Sobre el oro se erigieron la riqueza e influen- cia de Popayan en el valle del rio Cauca y de Medellin y otras ciuda- des en Antioquia. Por su parte, en la era colonial Cartagena controlé el comercio exterior legal y buena parte del contrabando. Ademias de las divisiones econémicas, culturales y politicas en- tre las tres regiones principales, la historia colombiana aparece marcada por otra fragmentaci6n: la originada dentro de cada una de aquéllas por la dispersién de los habitantes. Durante el siglo xv y principios del siguiente, la mayor parte de los colonizadores espa- fioles estaba concentrada en unas cuantas ciudades estables: Santa Fe de Bogota, Tunja y Pamplona en la cordillera Oriental; Popa- yan y Pasto en la Occidental, y Cartagena en la costa atléntica. Tam- bién pululaban las comunidades pequefias ¢ inestables, fundadas por espafioles aventureros que buscaban fortuna en Areas remotas. Muchas comunidades espafiolas desaparecieron, particularmente te, las relacion Colombia: pais fragmentado, sociedad dividida en el occidente y en el valle del Alto Magdalena, bien fuera por la resistencia o la mortandad de la poblacién indigena, o por cl ago- tamiento de los depésitos auriferos. Desde el siglo xvm hasta el xix las comunidades asentadas so- bre todo en las regiones santandergana y antioquciia dicron origen a movimientos colonizadores que establecieron una cadena de po- blados en los nichos cultivables de las vertientes. En las laderas santandereanas se fundaron mis de 70 poblaciones. De la zona de Santa Fe de Antioquia salieron colonos hacia todas las direcciones, aunque el empuje mas vigoroso se dio hacia el sur, siguiendo la cor- dillera Central. Estas dos regiones Ilegarian a contarse entre las de mayor densidad humana del pais, pero su topografia contribuyé a una mayor atomizaci6n aldeana. Sin embargo, la artesania santan- dereana de textiles dio pic al desarrollo de centros urbanos mas sustanciales. Por su parte, en las ticrras bajas del valle del Magdalena, la costa atlantica y los Llanos Orientales la poblacién tendié a dispersarse en comunidades atin mas pequeiias, pero por razones distintas. Gran parte de la tierra en estas regiones se utilizaba para el levan- te de ganado, que requeria poca fuerza de trabajo. Durante la Co- Jonia las lanuras del valle del Bajo Magdalena abastccicron de ganado vacuno, porcino y de cereales a las ciudades de la costa, a Ja flota espafiola y en cierta medida a las islas del Caribe. Sin em- bargo, las inundaciones invernales durante gran parte del aio obli- gaban el traslado del ganado a tierras més altas y muchas veces dificultaban el abastecimiento de carne y alimentos a los consumi- dores de la costa. Las inundaciones también afectaban a buena parte de los Llanos Orientales. Comunidades pequeiias y dispersas también caracterizaron 70- nas de ecologia muy diferente, como las selvas chocoanas y ama- z6nicas. Estas ultimas permanecieron practicamente ignoradas por los colombianos hispanoparlantes hasta el siglo xx e inclusive hoy en dia tales regiones estan apenas parcialmente integradas a la po- litica y la economia nacionales, A largo plazo, la colonizacién centrifuga reforz6 la dispersién de la poblacién. A mediados del siglo xix Colombia era un pais sin ciudades grandes pero con un gran numero de pueblos medianos y pequefios. En 1851 una sola ciudad, Bogota, tenia mas de 30.000 habitantes. Habia 30 municipios que tenian entre 8.000 y 15.000 Pais fragmentado habitantes, casi 150 que tenian entre 4.000 y 8.000, otros 230 que estaban entre los 2.000 a 4.000 y mas de 300 con menos de 2.000 habitantes. La rivalidad entre estas poblaciones ha sido una caracteristica continua de la politica colombiana desde la Colonia hasta hoy. Car- tagena y Popayan rivalizaban con Santa Fe de Bogota en la era co- lonial. Medellin, como centro financicro en el siglo x1x e industrial en cl siglo xx compitié con la capital nacional, Bogota. El cambio econdémico hacia que ciudades y pueblos que alguna vez fueron dominantes tuvieran que ceder el paso a sus rivales, En el norocci- dente, Santa Fe de Antioquia perdié su ascendencia sobre Medellin a fines del siglo xvii y por esa misma época Medellin consiguié afirmarse sobre Rionegro. Mientras tanto Rionegro encontré un rival en la emergente Marinilla y asi sucesivamente. Popayan, la ciudad dominante de la regién caucana en la Colonia, tuvo en Cali un adversario permanente, pero Cali debia cuidarse de Buga. En el siglo xix Popayan y Buga se rezagaron y Cali surgié como el cen- tro regional mas importante. En el siglo xv, Cartagena, que con- trolaba la mayor parte del comercio exterior legal, encontré un rival en Mompox, un emporio para bienes de contrabando traidos des- de Santa Marta, Riohacha y otros lugares costeros. En la era re- publicana, cuando se instauré un sistema comercial mas abierto, Cartagena perdié el liderazgo como puerto caribefio primero frente a Santa Marta y més tarde frente a Barranquilla. El comercio entre las tres regiones ha sido relativamente esca- so. Esto puede atribuirse en parte a los altos fletes del transporte terrestre, debidos en gran medida al clima y a la topografia. La construccién y e] mantenimiento de caminos o vias férreas eran muy Costosos, especialmente en los terrenos de pendiente barri- dos por las tormentas. En la década de 1870 se calculé que el costo de construccién de ferrocarriles en los Andes mas o menos dupli- caba el de los Estados Unidos y Canada. La dispersién demografica también entorpecia el comercio de larga distancia. En casi todos los nticleos habitados la mayor parte de la alimentacién y del vestuario se producian localmente y habia solo un comercio limitado fuera de la comarca inmediata. Segura- mente bastante tuvieron que ver los costos de transporte en esta tendencia a Ja autarquia local. Pero también es cierto que las condi- ciones de la ecologia andina permiten producir una variedad con- Colombia: pats fragmentado, sociedad dividida | La integracién vertical permitio diversificar la dieta sin recu- trir al comercio de larga distancia. Por tanto, si cl clima y la topogra- fia obstaculizaban el comercio interregional, también lo hacian superfluo. Este factor pudo retardar la mejoria del transporte. Po- cos bienes tenian que moverse entre las grandes regiones. En con- secuencia, mientras que a lo largo del siglo x1x las elites escribieron sobre la necesidad de mejorar los transportes, las realidades de una cémoda complementariedad local debilitaron quizas este sentido de urgencia. Hasta el comercio local fue bastante restringido, un hecho re~ flejado en las condiciones primitivas de las vias de comunicacién. En la provincia del Socorro, donde los rios pasaban por hondas ba- rrancas, los viajeros tenian que cruzar jalados por sogas de cuero, de las cuales pendian plataformas precarias en las que iban los pa- sajeros y sus cargas, mientras sus bestias pasaban a nado. Este sis tema se llamaba “cabuya” en el Socorro y “tarabita” en el sur de la cordillera Central. — La dispersién de la poblacién ofrecia pocos mercados suficien- temente amplios como para estimular la inversién en caminos, puentes y ferrocarriles, o para convencer a los politicos de definir un interés nacional. Dadas la topografia y la distribucion de los habitantes, s6lo un proyecto, la mejoria de la navegacién en el rio Magdalena, fue considerado en el interés inmediato de la mayoria de las regiones. La construccién de caminos, y mas tarde de ferro- carriles, desde los altiplanos hasta el Magdalena, dio pie, sin em- bargo, a un sinntimero de conflictos entre regiones y localidades porque cualquiera que estableciera comunicaciones mis eficientes podria dominar comercialmente a las demas. Estas rivalidades se replicaban hasta el mas infimo nivel local. Pais fragmentado Entre 1833 ¥ 1844, la irrisoria suma de dinero disponible para 7 icas se distribuia entre las provincias sobre una base per capita, con el resultado obvio de que ninguna ruta progresé demasiado. En los anos cuarenta hubo intentos de con- centrar los fondos del presupuesto en algunos proyectos naciona- les, abortados por la reaccién federalista de la década siguiente. Durante los siguientes 30 afios, no hubo demasiado empefio en trazar un cuadro de prioridades nacionales y el desarrollo de los transportes qued6 en gran parte a cargo de las regiones. En la dé- cada de 1870, un intento de utilizar fondos nacionales para cons- truir un ferrocarril que beneficiaria cl oriente desaté un intenso antagonismo en el occidente va costa y terminé desempefiando un importante papel en la reorientacién de la politica colombiana. Durante casi todo cl siglo x1x los politicos colombianos enfrenta- ronel problema de las prioridades haciendo caso omiso de él. Como resultado, proliferaron los proyectos pequefios mal financiados y lidos y no hubo mayor avance en el transporte te- muchas ve rrestre hasta cl siglo > Pese a estas limitaciones, hubo algtin comercio entre las regio~ nes, tanto cn la era pr -colombina como en tiempos mis recientes. El intercambio se limité a unos pocos bienes que eran escasos en ciertas regiones y con un valor suficientemente alto para justificar los costos del transporte. Los muiscas, por ejemplo, intercambia- ban textiles de algodén y sal (escasa en casi todas las demas regio- conchas de mar, con las comunidades de la hoya del nes) por oro y En el periodo colonial y hasta unas décadas después, la cordi llera Oriental abastccié a Antioquia con tejidos de lana y algodén. Entre los bienes del comercio de larga distancia, dos fueron alta- su venta fue monopolio estatal: mente valorados y €6rdillera Oriental, Pocos alimentos ingresaban al comercio inter- regional de larga distancia. El mas importante fue quizas el gana- do, que tenia la gran ventaja de transportarse por si mismo. En la Colonia, el ganado que se criaba en los valles del Alto Magdalena abastecia mercados tanto de la cordillera Oriental como de la re- gién caucana. Ademis/deliganadoyel/cacao, cultivado con éxito en Colombia: pats fragmentado, sociedad dividida unas pocas regiones, tenia un precio suficientemente alto como para pagar los fletes de mula. Como resultado de la fragmentacién histérica de Colombia, la escala del comercio interno era demasiado pequefia de modo que no estimulé un crecimiento dinamico. Por esto, se necesitaba el im- pulso del comercio externo para propiciar un crecimiento econd- mico vigoroso. Sin embargo, durante mucho tiempo, casi dos siglos, el crecimiento del comercio exterior ayud6 a agudizar la fragmen- tacién del mercado interno y no a fomentar su integracidn. Fl efecto de fragmentacién que ejercié el comercio exterior empezé a hacerse evidente a comienzos del siglo xvi. Durante el siglo xvut la harina de trigo se despachaba desde los altiplanos orientales hasta el rio Magdalena y de alli a los mercados de la costa, de Antioquia y de otras regiones del occidente. Pero desde comienzos del siglo xvi fue mas viable y mas barato para la costa abastecerse de harina de trigo proveniente de Norteamérica. La pérdida de los mercados de harina de trigo por la compe- tencia de productores externos fuc parte del proceso general de fragmentaci6n regional que se/dio/en’el siglo xvi, pero atin mas marcadamente en el siguiente. Durante la era precolombina y la mayor parte del periodo colonial, el comercio interregional se vio limitado por los altos costos del transporte. Sin embargo, en los Ultimos afios del siglo xvi y durante el siglo x1x, el debilitamiento de los pocos lazos comerciales entre las regiones se acentué con la eficiencia creciente de las economias del Atlntico Norte. A media- dos del siglo x1x los campesinos del interior todavia usaban arados de madera y trillaban el trigo haciendo correr caballos sobre mon- tones de espigas recién segadas; los artesanos hilaban y tejian con técnicas antiquisimas y los bienes se transportaban a lomo de mula. Mientras tanto, en Europa occidental y los Estados Unidos la agri- cultura y la industria se transformaban velozmente. Los canales y luego los ferrocarriles redujeron los costos de transporte terrestre a menos de un décimo de su nivel anterior; el vapor incrementaba la velocidad y seguridad del comercio fluvial y maritimo. No sélo Pais fragmentado Asi, una economia fragmentada por la topografia se desintegré ain mas por cl atraso tecnoldgico relativo. Esta situacion contribuyé a acentuar la desintegracién politica que, desde 1840 hasta fines de la década de 1870, encontré su expresién formal en el federalismo. Hasta bien entrado el siglo x1x el crecimiento del comercio terior malogré los intentos de Colombia por integrar un mercado interno, porque su volumen cra demasiado escaso para justificar el mejoramiento del transporte terrestre. Durante la primera mi- tad del siglo xix Colombia se rezagé bastante como exportador si se compara con otros paises latinoamericanos, en especial con la dueeion azuiearera de CubayIncluso como pais exportador, Colom- bia se rezagé frente a naciones como Ecuador y Venezuela. En efecto, en cl siglo xvii Venezuela\y Ecuador se convirtieron en téicasi/exclusivamente oro. Desde 1820 hasta fines de la década de 1860, el periodo de mayor desintegracién econémica y politica, el pais buscé sin mayor éxito productos de exportacién adecuados a sus necesidades de divisas. Sélovel\tabacoya\partir'de 1845) regis- trollina (ciertalmedidadevéxito, aunque relativamente modesto; otros productos tropicales tuvieron periodos de comercializacién externa de muy corta duracién y en muy baja cuantia. Hasta el despegue del tabaco, el oro continud siendo el producto predomi- nante de exportacion. Primero el comercio del tabaco (1845-1865) y luego, en una escala mucho mas importante, el del café, incre- mentaron el valor de las exportaciones colombianas per cépita. Sin embargo, la situacién relativa del pais como exportador en el con- junto latinoamericano no varié mayor cosa (Véase el cuadro 1.1). Elatraso relativo de Colombia como exportador de productos tropicales, sobre todo en comparacién con Venezuela o Guayaquil, es un dilema que exige por lo menos un intento de explicacién. Es Posible que las condiciones para el cultivo y el transporte de algu- nos productos exitosos de exportacién durante la Colonia, como el cacao, fueran menos favorables en algunas regiones de la Nueva Granada que en las zonas costeras de Venezuela o Ecuador. Aunque el valle del Bajo Magdalena tenia una ubicacién privilegiada para la exportacién de productos tropicales, estaba sujeto a inundaciones periddicas. Sin embargo, algunas zonas de la costa tenian un gran Colombia: pats fragmentado, sociedad dividida CUADRO 1 Exportaciones per capita de algunos paises latinoamericanos hacia 1850, 1870, 1890, 1912 (en délares norteamericanos) Pals 1850 1870 1890 1912 Uruguay 54,9 46,6 44,6 50,3 Cuba 22,2 443 55,7 64.7 Costa Rica 11,4 ae aie 271 Argentina 10,3 16,5 32,4 62.0 Chile 78 14.2 203 44,3 Bolivia 55 86 12,4 18,6 Latinoamérica en conjunto 52 89 7 20,4 Brasil 5.0 86 96 14,2 Pera 3,7 10,1 3,3 94 Venezuela 33 68 83 10,5 México. 3,2 rey 44 10,7 Ecuador 2.0 5.0 81 15.5 Colombia 19 66 57 64 Guatemala 7 25 75 72 Paraguay 13 58 85 86 Fuente: con base en Victor Bulmer-Thomas, The Economic History of Latin America since Independence, Cambridge University Press, 1994, Tabla 3.5 potencial agricola, pero no se explotaban con fines de exportacién. Asi pues, es preciso recurrir a otras explicaciones para entender el atraso de Colombia como exportador de bienes agricolas. La existencia de oro en lingotes para la exportacién parece ha- | di lemas, dado el alto valor del oro en relacién con su neo g 6 < é € 3 & 8 2 8 3 3 & 5 @ g 3 3 e g g Z. 5 3 a 8 & a = es a & 3 &. ¢ g 3 a a = 7 | 3 &. 3 8 2 8 a B 8 3 2 g. 3 3 8 Es & B § 2 3 a 8 x 8 3 ¢ g Q 8 5 2. a £ ¢ 3 5 B : En los tiltimos decenios de la Colonia, tanto miembros la elite criolla como algunos administradores espafioles si favorecieron la exportacién de bienes distintos del oro. Pero se encontraron con que nia los comerciantes nia los funcionarios del gobierno espaifiol les interesaban los productos tropicales prove- nientes de la Nueva Granada. A fines del siglo xvim los comerciantes espafioles solian negarse a aceptar cualquier otro producto distinto del oro como medio de pago; por otra parte, quienes formulaban las politicas en Espafia no se mostraron dispuestos a conceder a la Pais fragmentado Nueva Granada las ventajas comerciales que si otorgaron a Cuba yaVenezuela. Asi pues, ademas de la costumbre de la Nueva Gra- nada de utilizar el oro como medio de intercambio, también pare- ce haber existido en Espatia un habito, si es que no una politica consciente, de percibir a la NuevalGranada primordialmentelcomo proveedor del metal precioso, y no como una fuente de productos tropicales) Otra posible consecuencia de este patron colonial de de- pendencia de las exportaciones auriferas, reforzado por las politicas espafiolas, fue que Ia Nueva Granada dio inicio a la era republica- na sin haber desarrollado modelos para el cultivo y la exportacién de productos tropicales. Pero es preciso sefialar que esta explica- cién que hace énfasis en la dependencia del oro como producto de exportacién se ofrece aqui apenas comolunalhipétesis para despe- jar la incégnita del rezago en comparacidn con los demas paises de la region. Después de los afortunados empeiios por exportar tabaco (1845- 1865), seguidos de los menos fructiferos y mas efimeros experi- mentos con la corteza de quina y los frustrados conatos con el aiiil delGaueavEn la década de 1880 el café llegé a convertirse en el principal producto de exportacién colombiano. Su expansién con- Con todo, la construccién de ferrocarriles procedié con lenti- tud. Hacia 1904, después de un cuarto de siglo de expansién cafete- ra, el pais tenia poco mas de 565 kilémetros de vias férreas. El fondos hacia el gasto militar, Ademas, seguian contando los mismos factores de fragmentacion tantas veces mencionados, que impi- dieron establecer prioridades claras en la construccién de ferro- carriles. Colombia: pats fragmentado, sociedad dividida A partir de 1905 fue palpable cl mejoramiento de los transpor- es, Sin embargo Medellinglasegun: enarg2gydespués de construir un tinel de mas de tres kilometro: Hacia 1930 Colombia todavia estaba lejos de tener una red inte- grada de transportes. Incluso las dos ciudades principales, Bogota y Medellin, no estaban comunicadas directamente por tren Al fin y al cabo, la integracién econémica se verificé principal- mente por medio de carreteras. Bliferrocarrilyconiswexigenciade mejoralageografiacolombianayA partir de 1910 se emprendié un Programa serio de construcci6n de carreteras, aunque también seo obstaculizado por la incapacidad de establecer prioridade Aunque haci: el sistema vii z i ia sit que hacia 1950 el sistema vial de Colombia seguia siendo bas. tante deficiente, ii i an deficiente, por lo menos habia permitido una cierta integ! clon econémica nacional. ste sia inensificacn del comercio exterior en la segunda mitad del nal integrada Taner movimiento hacia una economia nacio- Muchas de ne Cetaanaron los Patrones de desarrollo urbano. debido asus ai \ es que florecieron entre los siglos xvi y XVUI So ecturn les economicos y istema colonial ancaron en los siglos x1x urbanos dominantes cedié pai les permitia aprovec sistema de comercio liber s itia ay i io lib do que Ps a eprove har un sistema i izado que Se concentraba cada vez mas en el comer: politicos bajo el s xx. Su importancia como centros so a ciudades cuya mejor ubicacién io internacional ar de acaudalados Fééastne vy hoga ‘dos empresarios en la extraccién aurifera, Pero, con el cre cimiento de las exportaciones tabacaleras en Palmira en la segun- Popayans)A partir de ; partir de 1915, cuando las conexiones férreas con la Pais fragmentado costa pacifica conectaron efectivamente a Cali con el mundo exte- rior, ésta se convirtio en la ciudad principal de la region del Cauca En el curso de los siguientes cincuenta atos, Cali fue la ciudad grande de mayor erecimiento de Colombia, y su poblacién se mul- tiplicd 14 veces entre 1918 y 1964 \ semejanza de Popayan en el Cauca, Ca wion atkintica durante ka Colonia, Gracias a su puerto fortificado euardaba la plata zena domino la re- \ asu proximidad al istmo de Panama, donde a peruana, Cartagena lego a ser paso obligado para las flotas e: ad abas- olas que transportaban los tesoros americanos, [at ciuds Jas naves peninsulares y les brindaba tecia de alimentos y vituallas a proteceidn militar, AL mismo tiempo era el centro de la exporta- Gion legal de oro y de la importacién de eselavos para la Nueva Granada. En efecto, Cartagena llegé a ser un importante centro de tar era garante de la mis actividad comercial, donde el poder mi ma; con cl establecimiento del Tribunal de la Inquisicion, también fuc asiento de la autoridad eclesiasticageroreonelicolapsodelsis tema colonial la importancia de Cartagena menguo. 1-1 fin del sis tema de comercio controlado redujo el movimiento comercial de in la era la ciudad y, por kas mismas razones, su dominio militar, por no conservar su coneyidn al rio Mag- 6 frente Santa Marta republicana Cartag dalena por medio del Canal del Dique, se rezag en ladécada de 1830. Mas tarde, en la segunda mitad del siglo x1%, tanto Cartagena como Santa Marta perdicron su dominio comer- Gal frentela Bareanguillay)sobre todo cuando ésta logré explotar con mayor cficiencia su ubicacién en la desembocadura del Mag- dalena, Mientras la poblacién de Cartagena bajé entre 1850 y 1870, la de Barranquilla crecié en un go por ciento. A partir de 1870 el crecimiento de Barranquilla se manzuvo gracias ala conexién por Por otro lado, en la segunda mitad del siglo xvmi el Socorro y otras ciudades de lo que hoy es el departamento de Santander imiento importante en parte por la produccién tuyieron un ¢ anal de textiles, parte de la cual se comercializaba en Antioquia y otras regioncs. Pero haciaymediados del siglo xix los tejidos de Gi favor de los textilessimportados. Tos intentos de sustituir la produceién de sombreros de fibra de palma, tanto para exporta- artes: cién como para consumo interno, sostuvieron temporalmente a los Colombia; pais fragmentado, sociedad dividida artesanos, santandereanos y a los de otras regiones. Novobstanrey a Asi, mientras numerosas ciudades que gozaron de importaneia durante la Colonia decayeron o se estancaron en la segunda mitad del siglo x1x, otra: de exportacién © importacion, er nas de & mas concetadas con el desarrollo del comercio icron notablemente. En algu- simiento ya cra como Medellin o Barranquilla, este © evidente entre 1850 y 1870; en otras, como Cali o Bucaramanga, la dinamica del crecimiento vino despues. Pesce al crecimiento relativamente rapido de los centros de im- pequeias, F'sta dispersion urbana, reflejo de la fragmentacion eco- némica del pai ando al pais hasta que las redes vial y ferroviaria construidas durante laiprimeramitad del siglosx nacional) Con la integracién cconémica del pais empezd un noto- rio crecimiento urbano en las cuatro principales ciudades|Bogo- s, Siguid caracteri:

You might also like