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$8 ELARTECONTEMPORANEO EN EL FOST-POST «que continuaban operando las categorias del ace romntico “aun cuando ls formas del arte ya no tenfan nada que ver ‘con estas categorfas: qué relacin puede existir entre un Picasso o un Pollock y el romantcismo sino el mito de la ‘obra maestrs?— a un mundo multicultural, pluralist, pos- colonial pea tambien productvista, masficado y enfocado alconsumo en que el arte ya no est en la cspde del siste- mma simblico de a cultura sno que funge solamente como un clemento de este sistema. De ahi que l sublimidad de las experencias que el Gran Ane pretendia wer se factus, Sin embargo, no estamos prvados de arte: hay mucho arte, demasiado, Hasta va sobrando: hay atte por doguier bajo ‘oda las formas posible. “Tado esto pucde desconcera y pertubar cuando uno se queda aferado a las categoraseséticas modemnas que toda- ‘a nos hablan de rupeurs, de adeantos, de obras decisivas y de progresoy ques ta con experienciascuyo caret pro liferanteydifso slo es ordenado por la sucesién de modss yytendencas. Lo que puede desconcerar también cuando los, tinicos rituales de saraizacién del arte que subsisten son los del impo libre y del urismo, ocas dos formas oranipre sentes dela experiencia esti contemporsna El fldsofo norteamericano Nelson Goodman dio en 1991 el ads al aa: yey, aural! Para los que ni siquie- +4 conocieron los tiempos modernas, no hay ni pertutba- idm ni ers: el arte se voli el er del vida, ps6 al esta- do gascoso. °°, Gonna, “Lat en ston" es Cain de mde ial de mde mi 4, 1986. IM], HACIA LA ESTETICA DE LOS TIEMPOS DEL TRIUNFO DE LA ESTETICA La esverica defnid y practcada como rama de la flosola tratando del ace y su experiencia es de origen reciente, El ‘uso mismo del tétmino fue inroducido por el filsofoale- smn Baumgarten 2 mediados dl siglo xv! CClaro que los ildsofos no habian tendo necsidad dela palabra par watar do bello, dela belle y de las ares. Sin embargo, lo hacian en el context de reflesiones mis genera les sin equerir una nibica especial. No hay una etética de Pattin aunque la idea del bello y a diferencia entre ares yylas cencias estinen el centeo de su pensamiento. No hay una estécicaaristorliea aunque Arsttelesreflexioné sobre posta, erica yas artes. Incluso hay filsofos para los que To bello ye arte nunce fueron, por ejemplo, objets de refle- dn en ningin momento: Descartes, Locke o Russl. ‘Mucho antes del nacimiento de la estética, principal- ‘mente a partir dl Renacimiento, se desarolaron reflexio- nes sobre las artes, enfocadas en primera instancia hacia ‘consideraciones pricticas, denicas y pedagsgcas. Naceron ‘en los imbitos arcsticos: academias,tallers,sociedades 0 asociaciones de artistas. BI historiador de las ideas, Paul ‘Oskar Kristeller describié de manera erudita el desarollo de estas teoras de las bells artes harta el momento de ss isin con la extética en el siglo xv” AG, Baamganen Aiki 1750-1758 9-0. Kealr, Le Ste made deat de die dF 90 LOS TIEMPOS DEL-TRIUNFO DELA ESTETICA En cuano a as primeras eflexiones“esttca” en cl siglo ‘xv (Fluccheson, Hume, Du Bos, Diderot) se enfocaron & La apreciacién, el gusto, la erica dela obras. Surgicron al mismo tiempo que se iba formand un espacio plblico de recepcin de las obras de arte —el Salén—, que se desaro- lab el juicio de los “expertos” —lo conacedrer—, que claboraban normas arsticas —principalmente en el sno de asacademias aristicas—. Polo tanto, asta fue desde su macimiento una teria dela recepcin y de a evalua, ddelas obras de ate y vent a sustguirlo que ets hasta enton- ‘es una reflec “pidica” de os artistas sobre su manera de proceder en ef mateo de su oii, Algunas décadas mis tarde, en ol marco de su empresa de clasilicacin sistemdtia de las actividades intelectules, en Critica del uiio Kan se dedi a establece las condici nes légicas del juicio de gusto y buscé en las nociones de ideas exis y de talento una expicacin de las obras de ar- te, aungue la relacgn entre su concepcin dels obras y su niliss dela condiciones lgicas del juicio estéico no est precisamentedefnida Los flésoforromntcos seguir ol ‘mismo camino privlegiando el estadio de la creacin y las producciones del talento en relacién con as que se formu lan los jicioseséticos. Un poco mis tarde, Hegel relacions ‘ta reflex a una histori de las manifestaciones del esp- rita. La sintesis hegeliana presupone wna historia del ate I. 9.28 LOS TIEMPOS DEL TRIUNFO DELAESTETICA 107 con Adorno com respecco a su ensayo giré precisamente alrededor de esta deus, "Adorno reconoca, adems el proceso moderna de dese cralzacién de arte y el lugar preponderance de I técnica en la produccidn de la obra —haciendo referencia sabre este punto a Mallarmé o a Is misiea dodecafanica més que al ‘ine. En cambio, no admitia quel separacign del arce de a magia pudiese deserbocar pura y simplemente en negae cl ace para rebasarlo en la distaccin, El “aura magia” es na cot, la obra de arte auénoma, tra: “El centro de la cobra de arte auténoma no pertencce por s misma ala ver- siente rite. De hecho, Adorno se obstinaba en defen- der a cencia formal de a obra coma subjetividad objetivs- a sobreviviendo a a disolucign dela magia Su postura vale lo que vale cualquier defensa del forma- lismo y del arte por el arte: dicho en ottostérminos, casi nada, aparte de la afiemacién (platénicay platoniana) de aque la forma se transforma en cos Sobre este punto, Ben- jamin tena azn y a historia le dio efecivamente la raza, Pero Adorno tampococrelaen la potenca dialética de diseacciéns tema la porencia de sienacién del cine, su “simple” porenia de usin y divertiniento. Acuss « Ben- jamin de romanticismo anarquista, de haberse dejado inlur demasiado por Brecht y de tener “una fe ciega en a sutoconrticién del proletaiado en el seno de un proceso histérico™'6 Sobre este punto esta ver él tenia razén y la historia lo demoseré: no basta con “darle directamente a Benjamin, Er fg pp 134138. 2 "Peo uns deca de real ecb que cms, ‘ers Ferma encom (Dingrm)~ no coainde con oq ers Seegereron go Wein fama p19 105 LOS TIEMPOS DEL TRIUNFO DE A ESTETICA proletariado ef crédito"™” de una capacidad de iberacién para que esa liberacin se produzea, Por su parte, Adorno ‘quedaba totalmente prisionero del “romanticsmo burgues ‘que, por otra parte, denunciaba para suponer que en sociedad socilista ‘el abajo vendra organizado de tal ‘manera que los hombres ya no se cansaria ni se arontarian ‘anc para tener necesdad dela distaccie" En otros tdrminos, y para resumir las dos caras de la postura de Adorno, la misica de Schonberg no es Sutica, eto, por su esenia formal, dberia poder llenary eleva el tiempo libre del proletriado emancipada que ya no neces tava la dstacién. Otra ver, evident ydesafortunadamen- te, Benjamin avo la razén cuando sabemos lo que advino del tiempo libre de un proletaiado emancipado que requie- ‘re ms que nunca dea distacién yescoge, cada vez que se le presenta a ocasi, no a Schénbergsino ala peor mica entre todas las que puede escoger. ‘Cuando las vanguardias conservaban todavia toda su fucraa subversiva, pero se enfientaban con proyectos poll «os toraltarios drgidos alas masa bajo grandiosas formas ceiadas, cuando estaba naciendo ls industria de la cultura Y se inicaba la produccin industrial de los bienes culta- ‘ales y del sc, Benjamin capes con una perspicaciadinica y conmovedora las lineas de fuerza de una evolucign que ina del aura a reproducibilidad generaizada, del culto dl arte su consumo en la exporicin, de a aren captada a Ia lstracein dispers, de la obra la belleza que divirt y «fim, de lo sublime al bienestar en el que solamente uno siente cool No podiarenuncia lat esperanzas de a libera- ° dam thie p37. LOSTIEMPOS DEL TRIUNFO DELASTETICA 109 idm evolucionai, pero este resduo de utopta no impedia tun oscuro diagnéstico. Hoy en da nos encontramos en a situacién de tener que suscribit todo su diagndstio sin siquiera poder espantarnos de sus los oscutos porque ya nos hace falta también la dimensin de la utopia. No sol mente el mundo rebora de belles sino que, emis, esta mos tremendamente felces en dl, Estamos nadando en las aguas tibias dela belles. Apenas unos aos después de Benjamin, el citico exta- ddunidense Clement Greenberg emprendis la formulacién de una esdtica de acuerdo con la modernidad. Sus dos pri- meros textos imporeances: “Vanguard y kitsch" y "Hacia tun Laocoonte més nuevo" datas, respectivamente, de 1939 1940. Esta estéica que emana de un ettico y no den fléso- fo profesional ene una imporanciadecsiva. Es una teora de as obras maestrasy de los citeros para juga dew xi- ‘oy al mismo tiempo que una expliacin de la gia de los aadelants artisticos, De hecho, se traa de una ambiciosa ‘entativa para cumplieel programma de wna estétia elisa en a continuidad de Kant y de Hegel. Pero el precio por pagar es triple: Greenberg dal estvics Kantian un carde- ter sistemtico y una dimensién psicaligica que no tenie; realza una operacién de “clasczacién’ foraada de las obras ‘modermas; las somete a una teleologiahistéica, con la que la historia hegeiana dl arte resula comparativamente eas del ipo de una fantasia novelads. sea teoria,en el fondo bastante simple y a menudo °C Gene “Avane gid hich (1939), ac ® G.Grecaberg “Towards Newer Lane (1940), Te el By ad Cc yep 1986, pp. 2-38, M10 LOS TIEMPOS DEL TRIUNFO DELAESTENICA simplitaen su fundamento, tuvo una enorme importancia. histrica que influyé con mucho en ss importancia con- ceptual. Su fortuna se identifica con la del arte modern cstadunidense de la misma época (el arte de Pollock, de Gorky, de Motherwell de manera general, con el expre sonismo absracto). Greenberg asegur la defens, Ia lus traci y a promocién de este art yale, en el momento ‘oportuno y de una manera excepcionalmente legible y efi- cuz, as justfcacionestesricas deun éxito comercial y de tun dinamism culeural de por ya muy fuer. El "rian del arte norteamericano", pars retomar la expresién de living Sandler: fue tambign suyo. Es asi como Greenberg dejé una profunda huellaen la manera de ver el arte ot- ‘dental en el sgl xx, modelando el paradigma del his ria del arte modern Por todas estas razones, el pensamiento de Greenberg consttuye —para nuestea felicidad o no— la referencia icva 0 negatva, pero en todo caso imprescindible, dela cstética del arte moderno, Su articulacién en torno a tres ideas (de obra maesta, de invencién ereadoray de expe- riencia del valor en la percepeidn esética) contibuye, bajo la aparienca de un elogio de I ‘modernidad modernisa”y dela vanguard, a una tora clisica del Gran Arte y de as ‘experiencia concentradasy captadas que todavia produce. La cesedtica de Greenberg tiene dos aspectos. E! primero se refee a alga dela evolu dels artes, desde medias de! sgl 20, lo que ha llamado el “mode nismo” de Greenberg El segundo acar las bases del juicio csetico yeonstieuye, propiamente dicho, su fotmalisno, 21, Sane, Le Triomphe de Yar amin (1970), dlr ins Ca Pry 1998 LOS TIEMPOS DEL TRIUNEO DELA STETICA 111 Es comin presentar estos dos aspectos come sil igica dela historia moderista determinara el juicio formalista aplicado alas obras, ya que, sein parece, la ligica moder: nse corresponde a la concentracion progresiva de cada arte sobre los medios formals que le proporcionan su propia Aefinicidn. Eso explicarta por qué la pintur, desde el siglo 0s habrfa ido cerrando sob la gic de lo plano del color y la esculeura, sobre la gia de a presentacin del es pacio puro. Sin embargo, esa articulacién no da ninguna respuesta al porqué de una ldgica moderistade este tipo para las ares el problema se pospone, no se soluciona En realidad, todos los textos de Greenberg indican que :modernismo y formalism estin, paa él, inexrcablemente tunidos en un nileo comin, o sea, la afirmacién del valor propiamente estético del Gran Arte y de las experiencias ‘que de él tenemos. Silos artistas se han ido refugiando pro _gresivamente en la l6gica del medio atistico ex, como lo dice de entrada “Vanguard y kitsch", para defender sus clevadas ambiciones arsicas contra el hitch popular y el academicismo calfcado de “slejandrinists'.” Por lo tanto, para salvarse como arc, cada ace debe regresar alo que lo ‘consttuye como nico. Es el medio el nileo duro de cada ate, lo que hace su pureza. De abi que los artistas "moder nists" no busquen el arte por el arte en una indagacid for tal y de hecho bastante arbitrara, Buscan simplemente la Sobrevivencia del are como ta. Correlativament, y como lo dice el mismo ariulo, lo que el espectadorexigente capa en las grandes obras es la «experiencia de lo mejor del at. El juico estétco es correla: tivo a la realizacién modernista, La idea de que el mejor 6. Gree, “Arne ide ia pi 112 LOS TIEMPOS DEL TRIUNFO DELLA ESTENICA gusto se pule ante el mejor arte y el mejor arte frente al mejor gusto, es un kiemori de la obra de Greenberg.” Entonces, la preocupacidn eséica esl que viene primero tanto para los artistas como para los que se benefcian de sus obras En cuanto al formalismo del juico extévco su significa «ién es, también, esética més que formalita propiamente dicha. Greenberg ditingue de mancrasorprendence a pri mera vista entre sujeto y contenido de las obras El sjeco dela obra de arte fue sempre su referencia: una mujer des- nda, una batalla, un arreglo floral. Con el modernismo, el sujeto se encarga de las posibilidades del medio, Un atreglo de peonias de Manet es menos un arreglo de peonias que ‘una manera de pintar un arzeglo de pooniss. El contenido «todavia otra cosa, es el valor o la culidad de la obra lo que produced efecto estéico sobre expeceador. Entonces, efecto esttico tene que ver con el contenido, y las isc: pretaciones comunes, sein que Greenberg estuviers vlo- rizando la forma pars si mismas, resultan por lo tanto bas- ‘ante simplistas. De hecho, el contenido esética nada ase se rfiere al efecto estétcoy, por ende, no se puede decir algo mas del efecto estéxco ytampoco del contenido de la ‘obra: no hay més que un juicio de gusto, una apreciacién cestécica Tl es el elemento kantiano por excelencia del 26. Grebe "Can Tee be Obj e973. p28 YC. Grebe, "Compo of an Art Cee” (1967

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