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im 43 JULIO-SEPTIEMBRE 1996 La restauracion ecolégica EDUARDO MARTINEZ ROMERO L problematica ambiental que vivimos actualmente (como la contaminacién del aire y dél agua) y la degradaci6n de Jas comunidades naturales (como la per dida de las areas selviticas) es resultado de la explotacién y el manejo inadecua- do de los recursos naturales, es decir, de un desconocimiento pricticamente to- c ENCIAS ® tal de los procesos ecolégicos que se dan en los ecosistemas. Hoy dia existen la £895, ros, selvasy bosques que se encuen- tran totalmente alterados en su compo- sicién, estructura y funcionamiento. Es cevidente que ante tal crisis mundial sur- ge la necesidad de tomar medidas efec- tivas que eviten la desaparicién de los ecosistemas, que promuevan su recupe- racion y conservaci6n parcial o total y su posible uso sostenido. Los criterios que se utilicen para tomar una u otra medida deben fundamentarse, en pri- ‘mera instancia, en el estudio cientifico de las interacciones que determinan la distribucién y la abundancia de los or- ganismos. Soberén define la “problematica eco- ogica” como aquella situacién en la que se pretende manejar (amplificar, supri- mir y conservar) un proceso poblacio- nal, sinecol6gico 0 ecosistémico en situa- ciones “naturales”, es decir, aquellas en Jas que participan muchas variables no controladas. Ejemplos de este tipo de st- tuaciones son el aprovechamiento, la conservacién y el manejo de especies sil- vestres, de suelos y de aguas, la reintro- duccién de especies extintas localmen- tey el restablecimiento de comunidades destruidas 0 deterioradas parcial o total- ‘mente. El iiltimo ejemplo es conocido como restauracién ecolégica y es una oportunidad para poner a prueba el marco teérico que subyace a la ecologia, pues se trata del manejo de los ecosiste- mas con base en cierta capacidad pre- dictiva, En la restauracién se intenta di- tigir el sistema por una ruta de estadios sucesivos que recupere la composicién de especies y las interrelaciones que te- nia la comunidad original en un tiempo relativamente corto. El marco teérico: la sucesién ecol6gica La sucesién ecolégica es el marco con- ceptual en el cual se basa la restauracién ‘ecolégica. Los ecosistemas 0 comunida- des que han sido degradados levan a cabo por si mismos eventos de recupera- cin que son parte de un proceso de su- cesién. El conocimiento de los procesos de sucesién de los diversos ecosistemas 0 comunidades permite plantear diferen- tes enfoques para realizar una restaura- i6n ecol6gica con éxito. A continuacién se presentan los principales modelos e hi potesis acerca de la sucesién ecologica, que es un intento por dar una visién ge- neral de esta vertiente de la ecologia. Los cambios en la composicién y es tructura de la vegetaci6n a través del tiempo y del espacio, ie. su dindmica, han sido estudiados por medio de pro- ‘cesos que se conocen como “sucesiones ecol6gicas”. La sucesi6n fue descrita a principios de este siglo por Clements, quien la de- fini6 como un proceso sinecolégico de eventos graduales y recurrentes que tien- den a llegar al equilibrio en las comuni- dades. También conocida como la Hi- potesis de monoclimax, su modelo plan- tea que la sucesién empieza con lallega- que modifican icas como bit cas que facilitan el establecimiento pos terior de nuevas especies, y asf sucesiva- mente, hasta alcanzar el climax de la comunidad, determinado por las condi- ciones climaticas predominantes. Una década después, Gleason propuso la Teo- ria Individualista, de acuerdo con la cual la sustitucién de especies en el proceso de sucesi6n no tiene una secuencia de- terminada, ya que cada especie respon- de de manera especifica alas interaccio- nes bidticas y abiéticas del habitat. Por Jo tanto, la sucesién tiene un cardcter més individualizado, menos predecible yor ende, las comunidades no siempre convergen en el climax climatico. ‘Watt propuso en 1947 el concepto de “sucesi6n ciclica’, el cual postula que las ‘comunidades se encuentran en equil brio y que los cambios que éstas experi menian se deben no a procesos de suce- sin sino a eventos ciclicos a pequefia scala. Es decir, dependiendo de la esca- Ja, encontramos que el cambio en la composicién de especies de una comu- nidad puede ser un evento sucesorio 0 parte de la dindmica interna exclusiva- mente recurrente, Watt dividié la suce- sin cfelica en cuatro fases: pionera, constructiva, madura y degenerativa, Después de la tiltima empieza nueva- ‘mente una fase pionera. El concepto de sucesiGn ciclica lo han retomado ecélo- gos forestales, tanto de zonas templadas como tropicales, y en éste una comuni- dad vegetal presenta un mosaico dind- ico de diferentes fases microsucesorias, En 1954 Egler present6 dos modelos de sucesién. El primero llamado floristica de relevo, que consiste en el remplazo de una comunidad vegetal por otra (Hi- potesis de monoclimax de Clements). El segundo, conocido como el Modelo de a composicion floristica inicial, estable- ‘ce que todaslas diferentes especies carac- teristicas de zina comunidad se encuen- tran desde el inicio del proceso de suce- sin en forma de semillas o propégulos, cada una con tasas diferenciales de esta- blecimento, crecimiento, reproducciény sobrevivencia a través del tiempo. Es de- cir, la composici6n y estructura de la co- munidad varfa gradualmente sin un rem- plazo total de una comunidad por otra. Se han planteado enfoques diferen- tes.a los anteriores sobre el proceso de sucesién, Por ejemplo, el estudio de las secuencias temporales en lugares adya- centes es una metodologia que ha per- mitido el andlisis de los procesos de su- cesiGn para inferir los cambios tempo- rales que se dan en las comunidades. El avance de dichos procesos a través del tiempo trae como consecuencia una se- rie de cambios en las caracteristicas fisi- cas, quimicas y biologicas mediante gra- dientes espaciales, ante los que los orga- nismos responden tanto en tiempo eco- Kogico como evolutivo. En 1975 Whittaker planted el concep- to de pairén climético, que esté deriva- do de la hipétesis clementsiana de mo- noclimax. En un érea con un régimen CIENCIAS @ nim. 43 JULIO-SEPTIEMBRE 1996 limético dominante se identifican dife- rentes condiciones climéticas a menor cescala: en una zona, una localidad 0 un micrositio. Estas condiciones climaticas locales se originan de la combinacién de un conjunto de factores como son el cli ‘ma, el suelo, la topografia y los eventos de perturbaci6n. El resultado de la inte- raccién de estos factores es el estableci miento de un conjunto de comunidades vvegetales que varian en un gradiente am- biental o un patrén climatico. Un afio después, Horn desarrollé el ‘modelo conocido como “remplazamien- to 4rbol por arbol”, que permite prede- cir los cambios en la composicién y es tructura de una comunidad arbérea con base en dos aspectos basicos, 1) la pro- babilidad que tiene un individuo de ser remplazado por otro de la misma o de diferente especie en un intervalo de tiempo determinado,y2) el supuesto de una composicién inicial de especies. Uno de los resultados mas interesantes de este modelo es, independientemen- te de la composicién inicial de especies, que las comunidades alcanzan una situa cién de estabilidad. Posteriomente, Connell y Statyer plantearon tres posibles mecanismos para el proceso sucesorio: facilitacién, tolerancia ¢ inhibicién. En el mecanis mo de facilitaci6n las especies pioneras egan al sitio y modifican las condicio- nes ambientales del medio, haciéndolo adecuado para la entrada de otras espe- cies que resultan competitivamente st- periores. El mecanismo de tolerancia postula que las especies tardias logran establecerse junto a las pioneras debido a que requieren pocos recursos para so- brevivir, por lo tanto especies pioneras y tardias coexisten durante un cierto tiem- po, sin afectarse unas a otras. Finalmen- te, la inhibicién es el mecanismo me- diante el cual las especies tardfas logran establecerse pero no pueden Iegar al estado adulto debido a la existencia de las tempranas. Pickett, Collins y Armes: o criticaron el modelo anterior, argu- daar Maras 0a sea lA rim. 43 JULIO-SEPTIEMBRE 1996 ria general sobre la sucesién ecol6gica sun obstaculo para lograr un mayor co- nocimiento del proceso y que fomenta €l disefio de modelos inadecuados con ‘una trayectoria nica o con un mecanis- mo dominante, por lo que no deben ser considerados como hipdtesis a probar. El cambio de las condiciones abiéti- cas bi6ticas durante un proceso de su- cesién provoca tanto modificaciones en la dinamica y estructura de las poblacio- nes como en la composicién de las co- munidades. La reproduccién, el estable- cimiento, el crecimiento yla mortalidad son procesos que definen la dinamica y Ja estructura poblacional resultante y se encuentran directamente relacionados con los cambios en la estructura y com- posicién de la comunidad. Algunos au- tores proponen que la sucesi6n es el re- sultado de un proceso demografico don- de las poblaciones forman parte de las comunidades en diferentes etapas sera- les, €s decir, el cambio en una comuni- dad es el resultado de los cambios que se originan en Ia poblaciones de las di- ferentes especies que la componen. Otro de los aspectos fundamentales en la teorfa ecolégica de la sucesion es elestudio de los disturbios yla dinamica de parches en las comunidades natura- les. Los sistemas naturales son dinémi- os, tanto en el tiempo como en el espa- io, es decir, la frecuencia y la escala de tales eventos pueden influir de manera decisiva en el proceso sucesional. El ex tudio de las perturbacionesy su dindmi- ca nos permitira entender su efecto en las poblaciones, las comunidades y los ecosistemas mediante el proceso de su- cesi6n, Por lo tanto, dado que los distur bios desempeiian un papel importante al frenar o acelerar la sucesién, proba- blemente éstos deban usarse como posi- bles herramientas para obtener estruc- turas y composiciones deseadas en la res- tauracién, ‘Un método de investigacién basica La restauracién ecol6gica es importan- te no solamente por ser una técnica de recuperacién de comunidades naturales sino también como un método de inves- tigacién basica en ecologia. Bl funda- mento de la idea anterior es que para poder reparar algiin objeto es necesario conocer y estudiar cada una de sus par tes as{ como su mecanismo. Es decir, la restauracién ecolbgica es una técnica de recuperacién de comunidades que per- ENCIAS ® mite generar nuevos conocimientos y plantear hipétesi “De acuerdo con Ewel, en una técnica de restauracién ecolégica se deben to- mar en cuenta los siguientes aspectos fundamentales, trétese de una pobla- ci6n, una comunidad o un ecosistema: Autosustentabilidad, Se refiere a que el ecosistema a restaurar sea capaz, en un momento dado, de autoperpetuarse, inclusive sin ayuda del hombre. El co- nocimiento de los procesos de germina- Gi6n, establecimiento, y disturbio de las, plantas en fases tempranas de la restau- racién son fundamentales para lograr este propésito, ya que se podrén enten- der los requerimientos de regeneraci6n, de las especies. Invasién. Implica reconocer las espe- ies que invadan comunidades perturba- das, ya que éstas podrfan ser muy com- petitivas y desplazar a especies clave den- tro del proceso de sucesién natural, En general, las comunidades naturales son. ‘menos susceptibles a la invasion de es- pecies no originales. Productividad, Depende del uso eficaz del recurso por la comunidad. Una co- munidad restaurada debe ser tan pro- ductiva como la original. Retencién de nutrientes. Las comunida- des son sistemas abiertos en el flujo de nutrientes; una comunidad restaurada debe perder la menor cantidad posible de nutrientes, Interacciones bisticas. El ensamblaje de los organismos en una comunidad es un aspecto fundamental al que debe enfo- ccarse una restauracién ecolégica. El co- nocimiento de las especies clave es fun- damental para alcanzar este objetivo. Harper y Peters plantean que la eco- logfa debe pasar de una etapa meramen- te descriptiva a una explicativa y final- ‘mente a una etapa de prediccién o ma- nejo. En el intento de pasar de un plano meramente descriptivo a uno explicati- vo, destaca la importancia de la mani- pulaci6n y del enfoque experimental en la investigacién ecolégi todologia basica de la restauracién, Por Jo tame, la restanracion ecologica offre: ce un valor heuristico; la cantidad de informacion que se puede obtener de tun manejo de este tipo es sumamente importante en relacién con un conjun- to de hipotesis que se trata de aceptar rechazar. Larestauracién de un ecosistema: aprueba a la teoria ecolégica? Larelaci6n que se establece entre la res- tauracién de un ecosistema y la teoria ‘ecol6gica es la aplicacién de los conoct- mientos ecol6gicos basicosa un proble- ‘ma concreto de restauracion y de con- servaci6n. Es decir, para poder restau- rar un ecosistemia es necesario conocer al menos los procesos que subyacen a su funcionamiento y su estructura para identificar cada uno de los elementos que los conforman y la forma en que se ensamblan. Una restauraci6n ecolégica de éxito es aquella que es capaz. de acelerar un proceso sucesorio en un tiempo relati- vamente corto comparado con otro evento en el que no se haya levado a cabo ninguna manipulacién. Los ecélogos todavia tienen mucho que aprender acerca de la estructura y el funcionamiento de los ecosistemas y comunidades por medio de la observa i6n de sus partes y sus procesos. Sin em- bargo, la rapida degradacién de los eco- sistemas nos lleva, por un lado, a tomar medidas urgentes tanto politicas como econémicas para evitar su completa des truccién y, por otro lado, a plantear ‘medidas cientificas para su recuperacién a partir de los avances que, hasta la fe- cha se tienen en ecologia bsica. Realizar una restauracién ecol6gica implica poner a prueba una de las teo- rias mas relevarites de la ecologia: la teo- ria de la sucesién. Entender eventos ‘como la sucesiGn primaria, la sucesién secundaria, los diferentes mecanismos ‘que se han propuesto en la invasién de especies, la importancia del banco de semillas en la regeneracién de comut dades, la identificacién de especies cla- ve en el proceso sucesional ysu compor tamiento demogratico, los procesos fe- nol6gicos, el papel que desempefian las pertubaciones y la formacién de claros en la estructura de una comunidad y la dindmica de los ciclos biogeoquimicos. El conocimiento de los fendmenos an- teriores nos permitird identificar los fac- tores mas relevantes del proceso, y pos teriormente su manipulacién para ace- lerar la via sucesoria que recupere una composicién de especies yas interaccio- nes semejantes al ecosistema original. eFiccién o realidad? La restauracién ecolégica tiene que to- ‘mar en cuenta varios aspectos importan- tes, como son la rapidez.con que se lleva a cabo la formacién de suelo (pedogé- nesis), la recuperacién de la cubierta vegetal, el establecimiento de lasrelacio- nes bidticas y los costos econémicos de la restauracién. En este sentido, es im- portante evaluar qué tan factible es rea- lizar una restauraci6n ecol6gica, no so- lamente al confrontar el marco teérico con la aplicacién, sino también en tér- c ENC AS @ nim. 43 JULIO-SEPTIEMBRE 1996 ‘minos de los problemas politicos y eco- némicos, eternamente presentes. La restauraci6n ecolégica no puede ser un fenémeno aislado del contexto politico. Una politica ambiental permi- te, por ejemplo, el establecimiento de reservas y la rehabilitacién de zonas de importancia ecolégica, como son las reas de gran biodiversidad 0 de recar- gade los mantos acuiferos. Por otro lado, ‘econémicamente, la restauracién ecol6- gica puede ser un proceso caro o bara to, todo depende de los objetivos que se pretenda alcanzar. En suma, cabria pre- guntarse, ante esta problematica pricti- a, politica y econémica, si en la reali- dad es posible llevar a cabo una restau- racién ecolgica. Una manera de contestar la pregun- ta anterior es revisar algunos de los di- ferentes trabajos que se han realizado en restauracién ecolégica. Bradshaw Teconoce cuatro tipos de reconstruc- cién artificial de ecosistemas con base en experiencias practicas: 1) la restau raci6n, que consiste en la recuperacién total del ecosistema original, 2) la re- habilitacién, que es la recuperacién parcial del ecosistema, 3) el remplaza- miento, es decir, la formacién de un ecosistema diferente al original y 4) el rim. 43 JULIO-SEPTIEMBRE 1996 Restaurcién ecoligca en el Ajusco Medio ‘Actuamente el Laborairio Especialzad de Ecobaa de a Facultad de Circias yl Laboratorio de Ecologia de Poblaconas del Cento de Ecologia de ia UNAM tabejan en el ooyecto “‘Restauracion ‘ecoldgice del Ajusco Medio’ enol Paque Ecolgica dela Ciudad de México en Lomas del Seminario, al surdela Ciudad de México El paigue es una zona de recara de los acilerosy un area donde ent una oran dversidad biolégica, Debido a su orgen volo, lz regi cuenta con un susrato sumaments pemeable, y presentauna dela puiosidades mas atas del Vale de Méce, porlo que elparque forme parte dl area prindpal de recarg del sisloma de aculferos del sur dela cuenca de México. Lo he'eogéneo 6lsustratoy la condiciones cimticas permiten of crecimiento de comunidades coma breques de enoinos y matorrales xrios, Debico a su gran importancia, esta zona se axpropiéy se cred all El Parque Ecolégica de la Ciudad de México (Diario Ocal, 1989), con un dea de 728 hetdreas en a parte mecla a serra nia del Ausco. Dentro dela zona expropiada exsie una zone de 200 heciveas donde se habian iniciado esentamintos urbanos iregulares, que alecaron en oiferentes grads las comunidades naturales. Acualmente el area se encuenra en un estado de sucesién tenprano. El proyecto de restauracon ecoidicaen su primers fase tivo como objetivo estudiar a ecofsiologa, a exoiogla de poblaciores los patones de sucesion de clertas especies que se sugiten como ciaves en este proceso: Salvia sap. Sedum oxypetalum y Bude cordata. Una vez que se tenga claro qué papel desempefian estas especies en el proceso de sucssion, e siguiente paso seréo! manejo experimen: tal de los facores abidicosy bibtics, con el “objetivo de restaurar la composcény la estucura de las iteraclones ecol6gicas originales”. Finalmerte, esta expeiencia represanta un vinci ente a investigacién bésica yl apicada que tendré que ser evaluada constantemene, para asi aprender de los ertores y consol los acters laissez faire, donde se tiene una mani- pulacién limitada y se permite un de- sarrollo natural del ecosistema Funcionamiento del ecosistema Rempiazo Ecosistema soca /~ Biomasa y contenido de nutrientes Abandonado? Los resultados obtenidos reflejan aciertos yerrores en diferentes procesos. Por ejemplo, la formacién de otra comu- Remplazo total Z, Roandonado? yes Desarrollo normal del ecosistema ——> complejidad estructural del ecosistema Figura 1, Alernativas de la restauracin ecolégica comparadas con la regeneracion de los ecosistemas (modificado de Bradshaw, 1984). nidad diferente a la original se puede considerar como una desviacién de los objetivos de una restauracién ecol6gica; por otro lado un acierto seria acelerar los procesos pedogenéticos, como un factor clave para el proceso de sucesién. Algunos estudios han tomado en cuen- ta los anilisis costo-beneficio en la recu- peraci6n de comunidades naturales con 1 objetivo de realizar una evaluacion ‘econémica de los procesos de restaura- i6n, La restauracién ecolégica también se relaciona con Ia ecologia del paisaje, al watar de reintegrar los fragmentos de vegetacién original a partir de corredo- res que se restauran ecol6gicamente. Holland, Risser y Naiman estudiaron la importancia de los ecotonos en el ma- nejo y restauracién de los ecosistemas, y destacaron su importancia por su gran biodiversidad. Es facil percatarse de la diversidad de estudios y objetivos que se pueden lle- var a cabo con la técnica de restauracion ecolégica. Sin embargo, lo mas impor- tante es que a partir de estos trabajos se hha generado mucha informacién basi- ca, y se ha obtenido experiencia en los procesos de rehabilitacién, con lo que la restauracién ecolégica puede llegar a ser un hecho. Conctusiones Las comunidades naturales son comple- jas, pero no por eso incomprensibles. Por lo tanto, es necesario que la investi- gaci6n basica continiie. También es im- portante aplicar estos conocimientos en. lamanipulacin y la prediccién del com- portamiento de los ecosistemas. Ante la problemética ambiental de la pérdida de sistemas completos, larestau- racién ecolégica debe ser tomada en ‘cuenta como una posible respuesta para el manejo cientifico de comunidades y ecosistemas muy perturbados. La impor- tancia de esta técnica como una forma de ecologia aplicada y el valor para la investigacién bésica la sitdan como una rama de la ecologia con amplias expec tativas a futuro. Las medidas para la res- tauracién 0 reconstruccién ecolégica pueden tener un enfoque multidiscip! nario. Sin embargo sélo el ecélogo tie- ne el criterio biolégico y ambiental que le daria coherencia a un estudio de esta naturaleza. Agradecimientos Deseo agradecer a la M. en C. Ivonne Vargas, al Dr. Jorge Meave del Castillo y ala M. en C. Irene Pisanty por la cuida- dosa revisi6n y sus valiosos comentarios realizados a este articulo. 9 Bibliografia Baines, J.C 1989, “Choice in habitat recreation”, en GP. Buckley (e4.) Biolpial Habitat Recons- ‘ructon, Belhaven Press, Londres. 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