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    Vis Ether Ma detbedinte/ acher Vea ao Giada Astnoma de Buenos Aire: EGodt Ageing, 220. S8ap. 23 15cm ISDN 98.97 4066822 1: Pein, 2. Litrstra Perini, Th Cop ses01 (0 Ls presente a sido ena a Ediciones Gor poral pitied le derehor en espa, Capit Swing, or median de OhBooks Agen Lira stracone Jala Long // Ingram Bongajaiea (Correcion Renata ety Henin Lopes Wie ‘nc de tape siaterors Vigor Matos Primera icin eber de 2029 Tere ain sponte de 2020 Gauri: debe de 220, (© Ediciones Godot swevreticoncgedst come [nltiedcionegadot om a Frerbook com! EdeionrGadot ‘witeroom/Edionetodot Invtaran somfEconesGodot YouTbecomEdioneodot Benoe Anes, Arges, 2020 Inpro eT Geos Poe, Plaza 1202, Chidad Atxinoma de Bugnon Aes Replica Argento, 2020 Prdlogo a la edicién argentina yoria en sintonia con los contenidos, otros expresando algu nas diferencis, pero todos con la firme voluntad de apoyar 2 las madres, Creo que es fundamental contar con profesionales| que desde el respeto y la escuchs estén al lado de las mujeres. Asimismo, es imprescindible establecer puentes de didlogo con ellos para cambiar todo fo que no funciona en laatencion ssnitaria al embarazo, el part y el posparto. Si en alguna me- ida esta obra contribuye a ello, me doy por satisfecha Espero que esta edicin en Argentina egue también a muchas mujeres, sean madees o no, y a muchos hombres, porque la maternidad y la crianza nos implican a todos. En te pees ae ele ramet) pers nt poy pera Coad end y Coc por pacera lation + abordo vs anplio baci de toman,2 mewado tenladen, “ema los problemas de infertlided, el duelogetacona le Niners eb la deprsionpospartola imposible com- Uliacin © ls difalades para car de maman etre otras uesiones. Coffe que agul enconrtis reapucsan, refugiy SSrerdedy apoyo. Tos derechos de Is madtesy los bebés som 2 menu- do pisoeadas Lo analizo ene libro poniendoénfas en un Spo de violencia profandamente normalirady la violencia cbs won expresion mis de a violencia de gearo, Ea ‘Argentine; eset ambi une realidad. Un ejemplo lo ene” tnosen el levado numero decesiveas qe st elizan Un 67% tla sanidad privaday un 31% en ln pablica,sogin datos dl informe Tiempo de pri presotedo pore equipo Pasy Nace en 201g, a Orgaizacon Mundial del alo sala tue un porcnaj pein a 14-15% no ent justo! Else innecnarto de et pricca ene conecuens graves tn asl fisieay mena de madres y Bebe, De hecho, se trata de una valencia no solo fia sino tambign verbs que puede cxpresrse meiane un to paternal, ifaie Jere hulle hain In madre. Una rilenla que es nee- Sato erin Tl auge dela neva oa feminna que estamos viviendo sun oportunidad para sear la oe pabintodss a ore Sion, lenis y Gsiguaades que sultimos ls mutes i Riedel ovat anes ree sige eta lagado de dscriminacioncs, "aussie ‘SARRUURMNNRNRNNNOI. Lateridad encendida como el derecho de as meres «desde sobre uesro coer po. deecho al abort, derecho a quedar embarazadas cand Uoseamon, derecho adsidr score moeatroenburtso, porto 7 1 Stach, Gy Radegur,Y, Tiempo de Pari sip, Disponible e: hips) Bisson 2.OMS, Declan de Fortlens, 198 Disponible: pls 7o¥e lactancia derecho a poder criar y a tener vida propia més alls de a erianza, He aqui esa maternidad feminista, desobediemte c insumiss que tanta falta nos hace. Propose ediin rein: Introducci6n Aauxreasapxo ¥ 7000 lo quel rodea, como el embarszo, Ininfertliad, el pato, el duclo gestaciona, el puerperio, “A is crianza, son temas que demasiado a menudo quedan invisbilizados en lSmbito doméstico. El ideal materno oscil entre la madre sacrifcad,al servicio de la familia y las eiaturas, y la saperwomen, capaz de compaginar trabajo y erianza y de umpir con todo. Por suerte, ls cosa empiezan a cambiar Los tnewosfeminismos han sacado del armario una sere de temas in csmodor y lsmaternidad es uno de ellos El presente libro quiere refleionar sobre qué supone ser madre hoy, sefalando que no hy una materidad Gnica, pero s{ modelos impuestos que supe- lan la experiencia mater alos dictados del patrareado y de capitalismo, Parece incompatible ser madre y feminists, pues la mater nidad carga con una pesada mochila de abnegacin, dependencia culpa, ante Is cual as feminists de los aos sesentay setenta se rebelaron — tales es contrario ala vida misma ‘Varios son los factores que influyen en esta tendenca: el aumento de la edad para emanciparse a causa de la prolongacién de fos estudio y cl parojuvenil, la dficltad para acceder a una viviends digna a rai de ow encarecimiento, la precariedad del mercado de trabajo, la penalizacin laboral alas mujeres que son rmadkes y la falta de medidas reales para laconciliacida y el apoyo fla maternidad. Estos procesos se han agudizado con la crisis ‘econémics yempiezan a afectar toda una generacincuyo sala- Flo apenas aleanza para vie. Un gran mimero de parejas jvenes| ni siquiera se plantean tener criaturas porque cuando suman los| ‘salarios de ambos no llegana un sueldo tinio decent. Una de las consecweacias directas dela postergacién de la smaternidad esa dficultad para quedar embarazada. Lo confirma ‘una investigacin sobre la infecundidad en el Estado espariol,en que se comstata que el motivo principal por el cual las mujeres no tienen descendencia es el aplazamiento de la maternidad por razones faniliaes y econémicas, vinculadas en est timo caso con el empleo”, De tal mado que cuando te planteas o ves la ‘posibilidad real de ser madre, porque has conseguido finalmente ‘un rabsjo fijo 0 tienes una pareja etabe, te encuentras con wna 15.INE, *Moimieoto Natur dele Pola (Ncimiets,Defuncionesy Matin) Indsadoes Derogriio Bisco Abo 217 Datos provision Teta depen ty dejan dex. 16 Wess, *Estadincde sinement 017, Det provisional’ nota de pre ss devoid 21 {V-Estes, Ry Dee, D-y Domingo, Ao e206 edad en la que tasa de fertilidad ha disminuide deisticamente,y «esto puede complica dicho ankelo. A partir delos reintay cinco aos los aveles de fertildad dela mujer empiezana descender, y ‘es mis cil soir una inferlidadsobrevenida por la edad ‘Ante esta realidad, empiczan a surgi voces de mujeres de veintitantos que desean ser madres y se preguntan si paracvando recinan los requisitos necesarios para sero, dspondin atin de Ia ferilidad suficiente para tener craturss La periodsta Noemi Lépez Trujillo eseribe: “En unos meses compli esta aos y ‘cada vez mis imagino mi vientre como una tumba al que algin diallevaré lores. Un lugar en el que nunca habré nada, que siem- pre estuvo muerto, Soy una madre sin hijo. Y eso meaterra[. Empecé a tabsjar en 2011, el mismo afo en el que en Espaia Jk inceridumbre e materalzaba ene ema ‘Sin casa, sin custo, sin ‘pensin, sin miedo’, Pienso:'Y sin hijs™ EL Estado espaio se sia ala cabeza dl retraso de lama: ternidad en Europa y la edad de las madres cuando tienen su pri ‘mera cratura es la mis ala del mundo. Sien 1985 la edad media de la primera materidad se situaba en los 6 afos, en 2016 esta leanzaba ya los 32. Esto tiene un impacto directo en ls niveles| dle infecundidad. La gran mayorfa de mujeres sin descendientes ‘ya no los tendré, a pesar aun de desearlo, por motivos socioeco- ‘némsicos 0 por infertilidad. En realidad, se calcula que solo un 2% de las majeres no puede tener erarura por motivos biologi- 06 ytnicamente un 5% no lo quiere y mantione esta dessin a To largo de su vida. El Estado espaol es uno de los paises de Ia ‘Unién Europea con la mayor distancia entre el nimero de hijos « hijas que se tienen y el que se desea. De hecho, wn 47% de las mujeres, segin datos de 2017, querra tener al menos dos eiata- as y un 26% tres o mas, mientras que la media sestda en 1,32" 11. Lpex Trujillo, N"Cumplr jo con gana de se sade y tro pecs: {plea ls jor hats gu quidem tres Elian 1 demas son Disonblec: hap assUT 19, Dutorobeidorrespectvamentede:Exeve,ADevolenD.y Domingo, (op city aot6 INE, “Ease de Feunddad. At 208, Datos ance’ noted pen, a8 de awe dso En su novela autobiogrifica Quit quiere ser made, Silvia [Nanclaes eserbia:“Fstdbamos progeamadas para apurar y esti rar nuestra juventud, para dejar la maternidad para ese momento en que la extabildad laboral (qué quimera) y feetiva —otra qui- mera creara un suelo sobre el que soltar los huevos maduros. [.n] Ser madre alsa o acja podia legar a considerarse una es pecie de medalla, un trofeo con muescas de otra batalla, pero también una medalla engaiosa © con doble fondo: la edad de nuestros ovarios no aiende alas supuestas conquists feminists ni alas ransformaciones sociales”™. ee aqut el despertar de esa ecrns juventud pars muchas mujeres en aera del eapitalismo moderne. El auge de los tatamientos de reproduccisn aistids en los “ltimos afios es una buena muestra de este problema, aunque las causas de lt infertilidad pueden ser varias, a pear del peso impor- tante de a postergacida de la maternidad. En 2015, en el Estado cespafol se realizaron 167.00 tratamientos de ferildad, entre ci clos de fecundacisn in vitro (FIV) ¢inseminaciones artifiiales, tuna cifra que erece anualmente, watamientos que condujeron al nacimiento de 36.200 bebés". Las mujeres que se someten a estas ‘nics tienen que pasar por un periplo que, mis alla desu ee vdo costo econdmico, puede llegar a ser exhaustivamente duro, nivel psquico yfisica, coco afios Lo sé por propia experiencia. Cuando hacia poco que habia cum- pido treinta y cuatro aos, mi pareja y yo pensamos que por qué ‘no tener una criaturay fuimos en su bisqueda; pero no fue hasta los treinta y neve que tuve a mi hijo. A menudo habia pensado {que no seria madre: tenia una vida activa, con mil y una cosas 28 Nala, Qui usr mad, Made, lagu, 7B 9 2. Sciedad Espa de ered “Snares un 9% el mero det ‘amis Se frundasn in vio (1V) ex Eats, open el Registro Ncioal {EeActidad acu Reps SEE* ota depen tod ochre de 27. que hacer, y no senta ninguna necesidad de tener un bebé; mi pareja le hacia més ilusién, y al final me dejé convener. Le debo luna. De hecho, como con todo en la vida, no sabes cémo vivirés Ia experiencia de ser madre hasta que te encuentas con ells, y para cada mujer es distinto. Habré quien legve ala maccrnidad sin quererlo, quien lo querrd desde pequesa, quien después se arrepentci, quien estardexultante. No fue un camino ficil. Cuando empezamos a imentarlo pensaba que quedaria embarazada de un dia para oto. Tantos aos vigilando que no se rompiera el preservativo, que quedara bien puesto, que no resbalara..que pensé que seris sacar ytra- basjo hecho. No fue as, Creo que alas mujeres de mi generacin, las nacidas en los ais setenta, nos hicieron creer el cuento de que esto de quodarse embarazada ea algo que sucedia en un abrit y czrrar de ojos, que cuando querias podias. Nuestras madres, mu- chas de las cuales nos tavieron a los veintipacos, no padecieron sings tipo de problema, y pensibamos que nosot posponer a maternidad, tampoco lo te -socigoulturses, Somos hijas de una generacion que luchd,y nt “cho, para hacer dela maternidad una eleccin; nosotrascreamos “que tenlamos la batalla ganada, pero no éramos conscientes de los condicionantes sociales, econémicos y ambientales que nos so dificaleaeian, aso un ao y otro y otro. ¥ més allé de mi vida activa de siempre tenia oxra vida, una vida seereta, Is de intentar quedar cembarazads, una vida que no compartia ms que con mi pare, porque no queriamos ofr eso de que "es cuestin de paciencia”, “dienes que estar tranquil", "todo es psicoldgico” yun largo t= cétera. Demasiados son atin los 16pios sobre la infertildad. No «sti nada normalizado hablar al respecto —aunque cada ver hay nds personas y parejas que la sufren— y atin menos hacerlo sin culpabilzar ala mujer Fue una wavesia de cinco a8os que conts con milkiples erapas. Un primer afo que pasa ripido, entre intento eintento, pensando que "ya llegars”. Un segundo en el que te preguntas por qué no quedo embarazada" y empiezas a buscar todo tipo de alternativas desde las mis naturales hast ots muy invasvas, y te plantas hasta dénde estis dispuesta a llegar. Yun tercer y ‘euarto afo, donde tu vida cotidiana se alterna con todo tipo de ‘ratamentos, Desde aquellos mis naturales y respetuosos, en que centras en una dinimica de control del cielo de ovulacién, edlculo de ls temperatura basal y relaciones sexuales por rutin, a otros onde quedssliteralmente sometda a un proceso de reproduc- idm asisida dirigido por terceros. Vives entre la ilusién y la es- peranca antes de que te venga la rep, pensando que esta vez seri It definitiva, el desencamto y la mas profunda tristeza al ‘compeobar que no esas ‘Me resit{ mucho s pasar por un tratamiento de reproduc- cin asstida, y busque altenatvas. La acupunturs fue una op- ibn, pero después de unos meses intentindolo, y en la medida fen que el embarazo no llegaba y el relojbiologico cori, eediy ‘opté por alternrls con wn procedimiento convencional. Guardo los informes de cada una de aquellas inseminaciones, y detrés de las nots esté el eocuerdo de tantas horas de espera en la consulta del servcia de Ginccologia y Obstetrics del Hospital del Mar en Barcelona, Aquellslargs horas de cola, después de dias de est sulaién ovérica pars controlar la evoluciSn del endometro y el tamaflode los foliculos. Las horas comparsdas con todas aquellas| ‘mujeres andnimas; apenas nos mirdbamos, pero todas sabiamos| muy bien qué signifisba no poder tener bebés. Me imaginaba cules sean sus historias, los motivos que las habian empujado hasta ali una infertilidad de origen desconocido como la nuestra, ‘una endometriosis, un sindrome del ovaro poliquistio, una al temacin en el semen dela pareja. A veces me moria de ganas de preguntarles, pero coda cllsbamos, Algunas venfan solas, otas ‘compatiadss por la pareja, la madre o uns amiga. Nunca habia ‘comparido tanto con unas mujeres con las que habia hablado tan poco, Me queda también el recuerdo de dolor fisco, ls pincha- ‘20, la medicacin, el registro personal que llevaba, las jeringas y las dosis de Pergoveris, Fostipur, Cetroide, Ovieele,y las con- ias en mi cuerpo de aquella macroestimulacin ovirica, ‘Y encima yo que nunca tomaba —ni tomo ni una sola pastilla, Me lo joel jefe del servicio de Ginecologia: “Lo peor no seri el dolor isco, sino la earga emocional". Axi fue. La incertidumbre de saber silegaria ono a conseguilo, si aquel proceso, con todo lo que implicaba, vad la pena. NNinguna de las inseminaciones habia funcionado. No me results facil admit que el abanico de oportunidades se ceraba, sobre todo porque ya empezaba a tener una edad, y silo queria seguir ntentando con cietas garantias de éxito, como deci la me- icin convencional no me quedsba mas remedio que someterme 2 una fecundacién in vitro (FIV). Si hubiese sido mis joven me hhubiraresstid, pero no era el caso. La FIV significaba mis dosis de hormonss, con los consiguientes efectos secundatis, para con seguir ms folculos, es decir, mis ovocito los que inseminar pa- sar por el quiréfano y someterme a una puacida foliculs, con una anestesia2 la que le temia. Al final, lo acepxé. Sin embargo, antes de inca el tratamiento, me puse en manos de un médico especialsta en medicina biolégica, pues queria legar 3 Is FIV en ls mgjares condiciones posibles, y durante meses segu dstintostratamientos ‘que pienso, me ayudaron para lo que vendria. Pasé toda la maftana contando cada minuto del relo, el tiempo cas se habia parado, Hasta el mediodia no me llamaran para decirme el resultado del andlsis de sangre: seria positivo, ‘staria embarazada 0 no? Estaba convencida de que ests ver tampoco serfa posible. Unos dias antes habis comprado un test de embarazo, pues no podia esperar, tenia fuertes dolores en los lovarios. Habia dado negativo. Nadie llamaba y la hora en que cetraban la consulta se acereaba peligrosamente. Imposibleseguit con tanta incertidumbre. Levanté el telefono y marque el niime- +0, El resultado, estaba segura, seria negativo. Entonees mi gine- «6loga, al otro lado del aparato, me dijo que estaba embarazada. Me eché a llorar. Custro aftos después habia sucedido. Someterse 2 un tratamiento de reproduecién asstida no «5 fail: eémo gestionas el proceso, si lo cuentas o no, de qué ‘modo lo enfrenta, ¥ menos an para alguien —como yo to- talmente reacia 2 los métodos farmacoldgicos. El dolor, el males- tar emocional, el seatimiento de facaso, Ia incertidumbre, Por no mencionar Ia pérdida de control sobre el propio cuerpo y la hipermedicalizacion que significan las téenicas de reproduccién asisida, asi como las contradicciones que implica ser partcipe del negocio de la inferilidad, Hablar de ello podefaayudaenos a slestaparlas, romper con ol estigma yn sentimnos tan soas. DDEREOHO A RENDIRSE ‘Yo swe suerte; seguro que otras mujeres que esperaban en aque I ra consulta del Hospital del Maeno tuvieron tanta —aunque algunas quis lo consiguieron antes. Cuando empiezas un tra- tamiento de reproduc asistida no sabes hasta dénde legaris| 1 cdmo acabari. No saber es tal vez una dels cosas mas dficiles| desobrellevar. Algunas mujeres, a pesae de sometersea mulples| inseminaciones y FIV, no han conseguido un embarazo ollevaelo {xérmino. Al fina, como algunas han dicho, tenian “derecho a rendirse™. ‘implies astmiran duelo, "Sete ha micro el sueio de la mater: sida" explica Glors Lab, quien lo estavointentando durante siete aor, pero tras cuatro abortos espontineos y ser considerada omo no ines par a adopcin dijo “bast”. Ahora impulsa fl proyecto La via sin bio, un espacio fisic y virtual de spo- yo alas mujeres que han pusao por ex sivacin. Dasaenes trio, angst, evry ev algo gue aes se vive la mayoria delas veces en silencio ysoledad. a cvlacin actual dala espalda frida, no solo de ls personas sino tambien de animales yexpecis veges, valorandolay proteiéndla poco. Ymisall dels problems de ‘eproducci human, estemodelo de liacin es esponable dla derparcon de muchas formas de vids del biostrs. Hay 22, Feninde- Miran, Mop ty 207.975 2 Balint Ny "Cuando que aoe poder: dul dela materaial” Cie fede nga dest Disponible ce bap by aNMaksG unpaaelismo evident entre lox problemas de eld que van én aumento en ln sociedad y a criss ecologic global en la que “Las nsituciones pias, lor mis de comnicacn y Ja sociedad en general $e lamentan peredicamente del desc so constante de a natalidad, pero equé se hace para evi? ‘Absoltamente nada -vivimos en un entorno que nos dificulta ser madres, que nos obli ‘ss porponerlamateridad,con un mercado de trabsj precio, ‘sisi ayuda ln cranza, con precios abusivos en fa vivind, ‘expuesos «tics y contaminates ambiente, con un l= rentacgn insana-EbEsadonecémplie, cuando no promoton den medio socioesonsmica que nos difcla tener descenden Gi. Todo eto contrbuye a is infertlidad, Pero el dscurso es ‘oo: “La culpa esta, moje por haber experado demasiado” Emenee {i diem. Tenemos, por un lado, un sistema patra! que ansruye un imaginaro que asocia jr con maternal y or toto, un sem capitalisa que nos pone todas as abe del rmunde para consul, y que acaba convendo I inferiidad enn negocio. [UA INFERTILIAD MASCULINA EXISTE A pesar de que se habla mucho de la infertilidad femenina, una ‘vez mis cargando el peso de la culpa en las mujeres, la tasa de inferilidad masculina no hace sino aumencat. La calidad del es- perma, la densidad y el volumen total de espermatozoides de los hhombres en Occidente se ha reducido a mas de la mitad en los 24 Klin Nol cambierdo. El capitesmo conto ima, Barons, ide sory 25 Fora M, Vie my eo Redaciende sic tania nin ‘tales, Barcelona, Gr ” alo, ot “ims caarenta aos", De seguir esta tendenca, en unas poeas| sgeneraciones la mayoris de los varones podelan ser subfériles © fcercarse al borde de a infertlidad. Aun as, el sistema de aten- cin a la sskud reproductva sigue poniendo el acento asi exclu svamente en e cuerpo de las mujeres. Pero gcuiles som las causas de esta caida de la ferilidad masculina? El hecho de que ese declive se dé, en particular en los patses occidentale apunta al peso que puede tener la comercia- Hzaciéa y el uso generalizado de productos quimicos. Varios in- {otmes han sefalado motivos ambientales, como lz exposicién a pliguicidas w otros quimicos,yfactores relacionados cone estilo Ue vida, como los habitosalimentaios el consumo de deogas, el ‘sis, el sdentatismo, Son necesarios y urgentes més estudios, ‘como reclaman los investigadores en la materia”. Sin embargo, fen ver de abordar las causas reales dela inferlidad, se deja la Solucién en manos de los tratamientos de reproduccin asistida| con el consiguiente negocio econémico—, como sila tecnolo a pudese solucionar los problemas politicos. “Lainfetlidad mascuina, en tna sociedad pateateal como. ‘a muesttayes tabs. Muchos hombres que la padecen se niegan a reconocero,inchuso en la misma consulta médica. Melo contaba tan acupuntor: “En mis de una ocasion he tratado por infertili- dad ala mojer, cuando ol problema en realidad lo tenia su parca. ‘Aunque todas las prucbas lo indiquen, muchos no quieren admi- tila, yaque consideran que esto pone en cuestin su viilida En vista de esta tendencia a l baja dela fecundidad tanto -masculina como femenina, el fururo distépico al que apuntan no- velas como El cuento de lacriada de Margaret Atwood” levada con gran éxito als pequeda pantalla, o peliculas como Nitios del 24 Levine, Hal, “Pempoal reds in sper count 2 sptemaic review nd mer iegrssion soayee, Haman predation Update 3 (0227 PP 27 Grad M, Ay La citadel exprma de os ozidearaes ha bajo at Inked eng aoe Ea 25 duo 307 28, Atwooth Me El cunt del evada,Barcelon, Ediciones Sslamanda, 2017098. hombre de Alfonso Cuarén, con sociedades que llegan al colapso tras una epidemia de infertlidad generalzada, no parece algo tan lejos dela realidad, LOS MALABARISMOS DE LA MATERNIDAD Sillegas.a pais le ralabarismos cotidianos para compatibilizar la cranza, la vida ‘personaly el empleo. La conciliacién ha demostrado ser una far- 52, que obliga a subordinar el cuidado de las eraturas «un mer- «ado de trabajo precario, con horarios variables, saris bajos y jornadas interminables, donde las mujeres, ademis, nos encon- ‘amos en inferioridad de condiciones respecto los hombres. (Cada aio en Espafia cobramos una media de seis mil euros menos ‘que nuestros colegas y a brecha salarial —la diferencia entre el salario de los hombres y el de ls mujeres se siti en el 2436". Enel Estado espafiol, en comparacién con ottos paises eu- ropeos, en especial los nérdicos, la baja por maternidad es una tomadura de pelo. Las escasas diecsts semanas” alas cuales las ‘mujeres tenemos derecho obligan 2 muchas mamis que desean ‘estar con sus bebés a volver al trabsjo apenas cuateo meses des- puts de haber dado aluz, para no perder el empleo, para no que ddar mal con sus compatiros o porque necestan esos ingresos. En genera, sn las mujeres més vulnerables las que se encuentran en dicha situacidn. Las que se lo pueden permiti, con mas 0 me- nos posibilidades econémicaso familiares, toman, sin cobra, una ‘excedencia, Hay mujeres, en particular aquellas que tienen una carrera profesional, que al cabo de pocas semanas de haber pai- do quieren reincorporarse al empleo, pero las que no queremos 29. UGT, La igualdad salar objeto penne, Maids UGT Secretaria te tgualdad, sre 30. De estas icine semana debs por materiales rina despues (put son aligns eitanstrle yal pond boise mace, Inctrs den son vluntarasy tana es dey spd relat lnmat ‘© compote com el oro progenitor, sug en solos) 8 de loses ls ermios de maerbidad vor comparsdo cnr ambos progenitors deberiamos tener el derecho a poder estar con nuestros bebés. [Los padres, por su parte, tienen actualmente cinco semanas de permiso intransferible, Fast el ato 2016, solo dispoatan de dos Semanas. A parr de enero de 2017, el permiso por paternidad se smpliga cuatro semanas, y en julio de 2018 se sumé una semana més, Aunque la baja por paternidad continda siendo insuficien- te, en poco més de aio y medio ha aumentado un 152% ls de imaternidad continta siendo la misma desde 1985, cuando pas6 ide catorce a diecsts semanas. No se ha ampliado un Spice en Los paises nérdicos som los que cuentan con bajas por ma- ternidad y patemidad mis extenas y dan mayores ayudas aquie~ ae enon descndeein Suc eels ens emuneade mis larg, casi 69 semanas, con noventa das exclsivos para la ‘madre y noventa para el padre; el resto pueden reparirlas como ‘quieran. Le sigue Noruega, que puede legar 2 las $9 semanas pagadas, que inclayen setenta dias de baja intranserible para la ‘made y setenta para el padre®. Ea el eso de Alemania, aunque formalmente la baja por maternidad es solo de eatorce semanas (exis antes del parto y ocho después), la madre oel padre pueden acogerse a una excedenci laboral de hasta tes afos, la cual seré subvencionada con aproximadamente un 65% del salaio, entre Jos doce y los eatorce primeros meses de la criatur Incluso en cf Reino Unido e Irland a baja por maternidad remunerada es dderiueve meses. En muchos paises de Europa occidental, como Holanda, Francia, Austria, Belgica e Iai, la bajas por maternidad acos- ‘umbran ser dediecsts semanss,y algunas incluyen un periodo 31 Los pads een do isd ermiso po acnieto mis cinco semanas A blurs nasil gue pelen toma jo deus del pro {de fom determina de scar co empresa de nr meses Sissi. d aint de scons, pose deber tomate de ‘inca iicrumpiexepol kina ema. 32, The Loc "Dads in Sweden ae king more parental ae thn ee" htc nde mv de sory Dap: egy seen Norge Hiring hill Now, sot. Disponible en hpi iis antes del parto, La diferencia de todos estos patses respecto al Estado espafiol es que dichas prestaciones pueden contar con una syuds monetara al margen del salaio 0 complementarse con li- cencias parental remuneradas, lo que aqut equivalria ala ex: cedencia por maternidad y pateridad, que no reibe ni un euro. Las licenciasparentles, accesbles tanto a madres como a pares, las encontramos en todo el continente y su duraci6n es variable ‘en funcidn de cada pais asf como su remuneracién, que pusde ser mis 0 menos cuantioss, De aqut que cuando analizamos las prestaciones alas mares, el tiempo del que disponen para estar ‘on las eratuas ts el parto, es fundamental no solo considerar la baja por maternidad, sino también las icencias parentales y ‘otro tipo de ayudas ass que pueden tener acceso, Si tenemos en ‘stents esto iltimo, legamos a la conclusién de que las madres con los permisos mis cortos y a los que se destinan menos re- ‘cursos econémicos de tods la Unién Europea son las del Estado cspafol y Malta" Sil puerperi Ia famosa cuarentena—, yl posparto son de por sfun momen: twintenso y agotador pars ls madres, as escasasdiecsts sema~ nas de bsjade las que dsponemos nos ponen, a muchas las cosas todavia mas difiles. El recién nacido es unser totalmente depen- diente en sus primeros meses de vida, y necesita de sus padres. Su jor alimento, siempre que sea posible, es la leche materna en exclusiva, que Is Organizacin Mundial de la Salud (OMS) reco- tienda tomar hasta los scis meses de vida cuando se empiczacon Ja alimentacin complementaia, lo que implica que antes de eso |i madre tiene que estar cerca y disponible. Cualquiera que haya tenido un bebé se dard cuenta de eémo una criatura de cuatro ‘meses 6s un ser extremadamente vulnerable. Por qué entonces no nos queda mis remedio que dejarlo a cargo de terceros, ya sea ‘en tuna guarderis, con los abuelos o con otros cuidadores? zPor ‘qué muchas mamés tienen que enfrentarse a stuaciones de esrés es deci, assis seman después del parto al tener que volver tan pronto al trabajo, cuando lo que querrian Sh Meroe, Matermdad pula» Fraser. La ads como ato pao at ceeds polaboraly, Made, Clave eee, 217. esestar con el bebé? :Por qué tantas otras acaban tomindose una cexcedencia, que pagan de su bolsillo,o inluso dejan el trabajo? {Por qué sencillamente no se legisla a favor de unas bajas por ‘maternidad o uns lencias parentales mas extensas? PERMISOS IGUALES E INTRANSFERIBLES Mientras que ls revindicaciones para alargar los permisos de smaternidad han sido sistemticamente ninguneadas, el permiso patemal no ha hecho sino aumentar. En Espafa, la Ley para la Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres aprobada en el Congreso de los Diputados en 2007, con el gobierno socialist de José Luis Rodriguez.Zapatero, ya contemplaba ampliar la duracin del per- ‘miso de os padres de dos a cuatro semanas, aunque fnalmente esta propuiests no se implements. En 2012, Comisién de Igualdad {el Congreso aprobs, con el apoyo de todos los grupos parlamen- tari, una proposicidn no deley que instaba al gobierno a refor- ‘mat ls actual estructura de permisos de maternidad y paternidad para que estos fuersn igualese inransfribles, eomando en con- sideracin ls demandas de la Plataforma por Permisos Iguales © Intransferbles de Nacimiento y Adopeiém (PPiINA). En 2016, el ‘Congreso de los Diputados, con solo dos votos en contra, apro- 'b6 comprometerse a estableer un calendario para aleanzar dicho ‘objetivo, En enero de 2017, la baja paternal se ampliaba de dos a ‘cuatro semanas, innterrumpidas e intransferibes, El debate para seguir aumentando el permiso del padre ‘continué abierto. En enero de 2017, Unidos Podemos reget una proposicion de ley en el Congreso para amplir los perm sos de paternidad a diecistis semanas, equipardndolos con los de maternidad, y exigiendo que fuesen intransferibles, recogiendo las demandss de Is PPiNA; pero su tamitacién parlamentaria fue vetada por el gobierno del Partido Popular (PP), alegando el sobrecorte presupuestario que esto supondeis™. En septiembre 14. PPNA,“Refocnaleili’ ualerinransferblesor 218. Disponible fe: ply TTA de 2017, el gobierno del PR, con el apoyo del partido acolberal de cenroderecha Ciudadans, en el marco de ls negocaciones dels prerupustor generals del Estado ds! fo siguiente, incre sent6 de niovo el permiso paternal a cinco semanas. sts me dia tena que entrar en vigor en enero de 218, pero al final no sellevé a cabo, seg fuentes oficiales, por fla de presupuesta. Sin embargo, cl acuerdo se implementara meses después. El de julio de 218, con a publicacién en el Bolen Oficial dal Estado (BOE) de los presupuestos generale dees ao, los skimos del, Gobierno de Mariano Rajo, aba paternal se ampli defi tivamente als cinco semanas. 1a PPAINA todavia legis més lejos com su reivindics cién. En junio de 2015, con el inesperad cambio de gobiemo ¥ con el sovaistaPedeo inches al freme del nuevo jeutvo, grupo paclamentario Unidos Podemos presents tea vez en «Congreso uns proposicin de leys favor de nos permisos de paternidad y materidad iguales,ieansfribles y pagados sobre el cien por cen del suldo. En esta ocsi, ef Congreso apoy6 por unnimided a demands, simando incluso Ios votos de los populares, que acerormente habia vetado a inicitvs. Con esa proposicdn de ley, se contemplaban unos per ‘mos igules inansferibes para madres y pades de dos se- ‘manasobligatoris a pate del nacimieno ola adopeida dela cviatura y de catorce semanas mis que pin tomarse alo argo del primer afa de vida (custo de ells obligtorias y ora diez ‘oluntaras) A paride entoncesemper6 una tamiacia pre Jamentaria en que los partidos podian presenta eniendas, que smientrasesrbo este libro continGa birt. De hecho el PSOE puesta por una ley donde extos permisos se watenoblgatorise mente dspoés del paroolaadopeién yen consecuenca sean s- rultanes: y Unidos Fodemos, como exige la PPHNA, defiende ‘que el permiso de a madre y el padce puedaninerclarse,y ah ambos progenitors desarollen plenamentesurol de cuidadore 25 PPI, “Aula wai dale de peemisos gualitarog I POND

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