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CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA SAN MARTIN -

Sistema de Notificaciones Electronicas SINOE


SEDE TARAPOTO - JR. MARTINEZ DE COMPAGÑON N° 933,
Juez:QUIROZ CASTILLO Cinthia Mirella FAU 20542260476 soft
Fecha: 25/01/2024 12:24:11,Razón: RESOLUCIÓN JUDICIAL,D.Judicial:
SAN MARTIN / SAN MARTIN,FIRMA DIGITAL

JUZGADO DE TRABAJO - TARAPOTO


EXPEDIENTE : 00169-2020-0-2208-JR-LA-01
CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA
SAN MARTIN - Sistema de MATERIA : INDEMNIZACION POR DESPIDO ARBITRARIO Y
Notificaciones Electronicas SINOE
OTROS
SEDE TARAPOTO - JR.
MARTINEZ DE COMPAGÑON N° JUEZ : QUIROZ CASTILLO CINTHIA MIRELLA
933,
Secretario:LLANCA PÉREZ Sandra
Rocío FAU 20542260476 soft
ESPECIALISTA : LLANCA PÉREZ SANDRA ROCÍO T
Fecha: 25/01/2024 12:41:15,Razón:
RESOLUCIÓN
DEMANDADO : EMPRESA MUNICIPAL DE SERVICIO DE AGUA
JUDICIAL,D.Judicial: SAN MARTIN
/ SAN MARTIN,FIRMA DIGITAL POTABLE Y ALCANTARILLADO EMAPA SAN MARTIN SA,
DEMANDANTE : HIDALGO RAMIREZ, ROMER

SENTENCIA

RESOLUCIÓN NÚMERO: ONCE.


Tarapoto, veintitrés de enero
Del dos mil veinticuatro. –

I. PARTE EXPOSITIVA:

El escrito de demanda y sus respectivos anexos, que obra de folios 209 a


225, se tiene que ROMER HIDALGO RAMIREZ interpone demanda contra
LA EMPRESA MUNICIPAL DE SERVICIOS DE AGUA POTABLE Y
ALCANTARILLADO, EMAPA SAN MARTIN, sobre DESPIDO
INCAUSADO, REPOSICIÓN Y PAGO DE INDEMNIZACIÓN POR DAÑO
MORAL Y LUCRO CESANTE.

1.1. PRETENSIONES: Como PRETENSIÓN PRINCIPAL; interpone


demanda de despido incausado, solicitando sea repuesto a su puesto
de trabajo que venía ocupando al momento en que se materializó el
despido. Y como PRETENSIÓN ACCESORIA; se le pague como
indemnización por daño moral la suma de S/. 30,000.00 soles y como
lucro cesante el importe de S/. 1,0000 soles, a consecuencia del
despido incausado más el pago de intereses legales generados, con
pago de costas y costos del proceso.

1.2. FUNDAMENTOS DEL PETITORIO:

- Señala que con fecha 10 de febrero del año 2010, ingresó a laborar
en el cargo de oficial y almacenero, percibiendo una remuneración
mensual de S/. 956.00 soles, labores que por su naturaleza y función
corresponde a una labor encomendada a un trabajador con contrato
laboral, más no a un contrato de locación de servicios, ya que se le
exigía hacer cumplir el reglamento interno de trabajo, habiendo
mantenido un contrato sin solución de continuidad hasta el 15 de
octubre de 2020, fecha en que fu despedido de manera incausada.
- El actor indica que su contrato de locación de servicios en base al
principio de primacía de la realidad fue desnaturalizado, por las
actividades encomendadas que establecieron una relación laboral de
prestación de servicios personales, remunerados y subordinados, y
cumpliendo un horario de trabajo establecido, asimismo señala
haber sido capacitados para realizar sus labores como trabajador,
demostrando su rango de laboralidad.
- Refiere que la demandada desde el 22 de agosto de 2011 hasta el
31 de noviembre de 2011 le ha incluido en planilla, emitiendo boletas
de pago por su trabajo, señalándole que está recibiendo todos sus
beneficios laborales, sin embargo el actor nunca ha recibido dichos
ingresos, pues solo ha recibido su jornal mensual, asimismo señala
que con dichas boletas de trabajo de los periodos 22 de agosto a 31
de noviembre del 2011, demuestra que su empleadora le ha
reconocido como trabajador por contrato de trabajo a plazo
indeterminado al haber sido puesto en planilla.
- Que, a pesar de dicho reconocimiento por planilla la demandada
desde que ingresó a trabajar siempre le han considerado como un
trabajador con contrato de locación de servicios, y que habiendo
vencido su último contrato el 31 de diciembre de 2019, recién
procedió a renovarle su contrato con fecha 20 de enero del 2020,
habiendo laborado por 20 días sin contrato.
- Que, mediante acta de infracción Nº 0000037-2018, contenido en el
expediente sancionador Nº 185-2019-SUNAFIL/RE-SMA, la
Dirección Regional de Trabajo y Promoción del Empleo y Sunafil, la
demandada fue multada por infracciones muy graves a
consecuencia de la inspección laboral mediante el cual determinó
que distintos trabajadores, en donde también se encontraba el actor,
no obraban en el registro de planilla de diversos trabajadores,
otorgándole un plazo de 04 días a fin de cumpla con regístralos en el
libro de planillas como trabajadores permanentes.
- Asimismo, señala que luego de producirse el despido y al intervenir
SUNAFIL ha expresado el argumento que el actor ha sido despedido
porque ya no contaba con presupuesto, lo cual se materializó con el
despido sin causa. Sostiene además que fue despedido en una
situación de vulnerabilidad en que se encontraban todos los
ciudadanos, a consecuencia del brote del COVID 19, por tanto la
demandada ha cometido un despido incausado, generándole un
daño moral incalculable, ya que ha vulnerado su derecho al trabajo.

1.3. PRETENSIÓN DE LA PARTE DEMANDADA: La Empresa


Municipal de Agua Potable y Alcantarillado, mediante escrito de
folios 249 a 267, absuelve el traslado de la demanda, negándola y
contradiciéndola, señala que, el presente caso es errado y carece de
sustento fáctico y legal lo señalado por el demandante, pues no
existe medio probatorio alguno que demuestre que el accionante
haya laborado bajo un contrato de trabajo, pues sus servicios no eran
subordinados, sino autónomos mediante contrato de locación de
servicios que feneció con fecha 15/10/2020, es decir no ha existido
despido incausado, sino conclusión de contrato, por lo que no le
corresponde el reconocimiento de los contratos celebrados a tiempo
indeterminado, asimismo tampoco le asiste el derecho de ser
reconocido como trabajador permanente e ininterrumpido, puesto
que la actual legislación prohíbe el reconocimiento del vínculo laboral
en una entidad del Sector Público –EMAPA San Martín SA, a los
trabajadores que no ingresaron a laborar por concurso público.
Respecto al Acta de Infracción Nº 00000037-2018, Exp. Sancionador
Nº 185-2019-SUNAFIL/IRE-SMA, se tiene que dicha documental
carece de valor probatorio toda vez de que se encuentra en trámite.

1.4. SÍNTESIS DE LOS ACTOS PROCESALES: Mediante resolución


número uno de folios 226/227, se admitió a trámite la presente
demanda interpuesta por la accionante contra Emapa San Martin.
Mediante resolución número dos de folios 268, se resuelve tener por
contestada la demanda y por ofrecidos los medios probatorios de la
demandada Emapa San Martin, programándose fecha de realización
de audiencia única. Posteriormente en audiencia única de folios
325/327, se declara saneado el proceso, se fijaron los puntos
controvertidos, se admitieron y actuaron los medios probatorios
presentados por las partes y se requirió como exhibicional para que
SUNAFIL remita copias certificadas del Acta de Inspección N° 037-
2018, mediante resolución seis de folios 519/520 se declara
infundada la nulidad de todo lo actuado deducida por la demandada,
mediante resolución siete de folios 523/524 y nueve de fojas 553, se
admite los medios probatorios extemporáneos presentado por la
demandada y demandante respectivamente, asimismo se dispone
pasar los autos a despacho para sentenciar.

II. PARTE CONSIDERATIVA:

PRIMERO.- El artículo 1° de la CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL PER Ú,


señala: “La defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son
el fin supremo de la sociedad y del Estado”; por su parte el Principio de
Igualdad consagrado en el inciso 2 del artículo 2º de la citada Constitución
Política del Estado, a la vista del TRIBUNAL CONSTITUCIONAL -en la
Sentencia recaída en el Expediente Nº 0271-2003-AA/TC- sostiene que:
“La igualdad es un principio de derecho que instala a las personas situadas
en idéntica condición, en un plano de equivalencia (…), de modo tal que no
se establezcan excepciones o privilegios que excluyan a una persona de
los derechos que se conceden a otra, en paridad sincrónica o por
concurrencia de razones y que además el derecho a la igualdad supone
tratar igual a los que son iguales y desigual a los que son desiguales;
constituyéndose así como la exteriorización de la garantía a los Derechos
Humanos”.

SEGUNDO.- El artículo 139° inciso 3 de la Constitución del Es tado,


consagra el derecho al debido proceso legal o lo que con más propiedad,
se denomina también “tutela procesal efectiva”, mediante el cual se
garantiza un diverso haz de atributos, que sí inicialmente surgieron como
garantías del individuo dentro de un proceso, ahora se ha convertido en
una institución que asegura la eficacia de la potestad jurisdiccional del
Estado. La finalidad concreta del proceso es resolver un conflicto de
intereses o eliminar una incertidumbre, ambas con relevancia jurídica,
haciendo efectivos los derechos sustanciales, mientras que la finalidad
abstracta es lograr la paz social en justicia.

TERCERO.- Los preceptos normativos citados, deben además estar en


armonía con su entorno procesal, por ello ante el derecho laboral y su
carácter protector, es de aplicación el principio de inversión de la carga de
la prueba, prescrito en el artículo 27º de la Ley Procesal de Trabajo Nº
26636: 1. Al trabajador probar la existencia del vínculo laboral. 2. Al
empleador demandado probar el cumplimiento de las obligaciones
contenidas en las normas legales, los convenios colectivos, la costumbre,
el reglamento interno y el contrato individual de trabajo. 3. Al empleador la
causa del despido; al trabajador probar la existencia del despido, su nulidad
cuando la invoque y la hostilidad de la que fuera objeto.

CUARTO.- El artículo 25° de la Ley N° 26636 Ley Procesal del Trabajo,


respecto de los medios probatorios, señala que “Los medios probatorios en
el proceso laboral tienen por finalidad acreditar los hechos expuestos por
las partes, producir certeza en el Juez respecto de los hechos
controvertidos y fundamentar sus decisiones”, asimismo “que en la
resolución solo serán expresadas las valoraciones esenciales y
determinantes que sustenten la decisión tomada”, mandato que se
encuentra conforme a lo señalado por el artículo 197 del Código Procesal
Civil.

QUINTO: En este contexto, a efectos de resolver la pretensión materia de


autos, es preciso señalar los puntos controvertidos del presente proceso:
1. Determinar si en el presente caso se ha producido un despido incausado
en agravio del trabajador actor, y por tanto corresponde declararse la
nulidad del despido y ordenar a la demandada EMAPA San Martín S.A.,
reponga al demandante en el puesto de trabajo que venía ocupando al
momento en que se materializo el despido, además de que se le paguen
todos los derechos que genera el contrato de trabajo durante el tiempo
que dure la suspensión imperfecta de labores; o en caso contrario que
no existe el despido incausado alegado, y por tanto no procede la
nulidad del mismo, y que no procede la reposición solicitada, ni el pago
de los derechos antes indicados.
2. Determinar si en el presente caso se ha producido daño en agravio del
trabajador actor producto del despido incausado alegado, y por tanto
corresponde ordenarse a la demandada cumpla con indemnizarlo por los
conceptos de daño moral por la suma de S/ 30,000.00 soles, y por lucro
cesante por la suma de S/ 10,000.00 soles; o en caso contrario, que no
se ha producido el daño alegado, y por tanto no procede la
indemnización solicitada.
3. Determinar si el actor demandante ha ingresado por concurso público
bajo el régimen laboral del Decreto Legislativo N° 728, o no; y
establecerse si las labores que desempeñó el demandante forma parte
de la carrera administrativa de la función pública conforme a la Ley
Marco del Empleo Público, o no.

SEXTO: Sin duda el contrato de trabajo es aquel acto jurídico por el cual
una persona natural denominada trabajador, se obliga libremente a ejecutar
una obra o a prestar un servicio a otra persona natural o jurídica llamada
empleador, bajo su dirección o dependencia mediante el pago de una
remuneración; es por ello que nuestra legislación ha acogido dicho
concepto siendo reconocido legislativamente en el artículo 4° del Decreto
Supremo 003-97-TR TUO Ley de Productividad y Competitividad Laboral
expresamente señala que “En toda prestación de trabajo personal de
servicios remunerados y subordinados, se presume la existencia de
un contrato de trabajo a plazo indeterminado” (norma que regula la
relación laboral privada) y artículo 1° de la Ley Marco del empleo público,
la que establece: “Es la relación que vincula al Estado como empleador
y a las personas que le prestan servicios remunerados bajo
subordinación. (…)” (norma de naturaleza pública).

SÉPTIMO: Asimismo, corresponde al trabajador probar la existencia del


vínculo laboral, y esta situación ha sido interpretada por la reiterada
jurisprudencia nacional en el sentido que recae sobre el trabajador la carga
de aportar indicios razonables que demuestren la existencia de una
relación laboral. Asimismo, en algunos casos no es posible una prueba
evidente o directa debido a que en toda relación laboral el trabajador es la
parte débil de la misma frente a su empleador; en esa situación, es
importante el denominado Principio Protector, el cual parte de la premisa
que dentro de toda relación laboral el trabajador es la parte débil de la
misma frente a su empleador, por lo que es necesario que la ley acuda en
su amparo para evitar abusos en su contra. Del mismo modo, debe
tomarse en consideración que las normas que regulan el Derecho del
Trabajo son eminentemente de orden público y que su aplicación no puede
ser relajada por convenios entre las partes, por estar dirigida a proteger al
trabajador vinculado a un empleador mediante una relación
manifiestamente desigual en el ámbito económico, refuerza la protección a
los trabajadores evitando contra éstos la comisión de actos destinados a
desconocer sus derechos laborales.

OCTAVO: Sobre la naturaleza jurídica de EMAPA; Según se advierte de


consultada la web oficial de la entidad emplazada:
https://emapasanmartin.com/articulo/reglamento-de-organizacion-y-
funciones-rof-eps-san-martin-s-a
El Reglamento de Organización y Funciones de EMAPA SAC, en su
artículo 2° regula: “EMAPA SAN MARTIN S.A. es una E mpresa Prestadora
de Servicios de Saneamiento conforme se establece en el artículo 13 de la
Ley Marco de la Gestión y Prestación de Servicios de Saneamiento Ley N°
1280, en adelante Ley Marco, posee, patrimonio propio y goza de
autonomía administrativa, económica y de gestión.
EPS EMAPA SAN MARTIN S.A. ha sido reconocida como Empresa
Prestadora de Servicio., mediante Decreto Supremo N° 027-91-PCM.
Por otro lado, conforme lo dispone el artículo 4° s eñala que: “Sus
accionistas son las Municipalidades Provinciales de San Martin, Lamas,
Bellavista, Huallaga, El Dorado, Picota y Tocache”
Asimismo, en su artículo 102° establece: “ Los funcionarios y trabajadores
de EPS EMAPA SAN MARTIN S.A se encuentran comprendidos en el
Régimen Laboral de la Actividad Privada. Los procedimiento y procesos
laborales se rigen por lo establecido en el Texto Único Ordenado del
Decreto Legislativo N° 728 – Ley de Productividad y Competitividad
Laboral, aprobado por Decreto Supremo N° 003-97-TR y demás normas
modificatorias y complementarias”.

NOVENO: Que en aplicación del principio proteccionista propio del derecho


de trabajo, es que el legislador ha previsto en el artículo 77° del Decreto
Supremo N° 003-97-TR la figura de la desnaturalización de los contratos
modales, la que es considerada como un mecanismo “antifraude” a través
del cual la ley laboral sanciona al empleador con reconocer que el contrato
modal (determinado) es verdaderamente un contrato “indeterminado”,
procediendo a reconocer todos los derechos del trabajador en su condición
de trabajador permanente. Dentro de los supuestos que prevé el artículo
en mención, como causal de desnaturalización está la existencia de
simulación y fraude de las normas laborales, como es el caso que siendo la
naturaleza de la labor que se contrata de naturaleza permanente, el
empleador lo contrata fraudulentamente bajo la forma de contratación
modal, como también cuando se empieza a laborar verbalmente y luego se
regulariza con un supuesto contrato modal con fecha posterior al inició de
la prestación subordinada, o cuando habiéndose culminado un contrato
modal esta persona continua laborando, así como cuando se contrata para
una labor específica, pero labora en otro puesto distinto al contratado, entre
otros supuestos.

DÉCIMO: En el presente caso el demandante pretende que se declare


nulo el despido incausado ocurrido el 15 de octubre del 2020 y como
consecuencia de ello se ordene a la demandada lo reponga a su puesto de
trabajo que venía ocupando, y se ordene el pago de una indemnización
por daño moral por la suma de S/. 30,000.00 soles y por lucro cesante por
la suma de S/. 1,0000.00 soles, más los intereses legales generados con
condena de costos y costas del proceso. Igualmente señala que mediante
sentencia judicial recaído en el expediente judicial Nº 39-2020-0-2208-JR-
LA-02 se ha desnaturalizado los contratos por Locación de Servicios
suscritos con la demandada desde el 01 de diciembre del 2014, y se
declaró la existencia de una relación laboral entre el demandante y la
demandada sujeto al Régimen Laboral Privado regulado por el D. L Nº 728
así como el pago de sus beneficios hasta el 30 de junio del 2020.
DÉCIMO PRIMERO: Bajo ese contexto, se tiene que de revisado el SIJ del
Poder Judicial, se advierte que en efecto mediante sentencia judicial
contenido en la Resolución número diecinueve de fecha 06 de octubre del
2023 recaído en el Expediente Judicial Nº 00039-2020-0-2208-JR-LA-02,
este Despacho Judicial, ha resuelto “Declarar fundada en parte la
demanda interpuesto Romer Hidalgo Ramírez contra la Empresa
Municipal de Servicios de Agua Potable y Alcantarillado – EMAPA San
Martín, SOBRE Desnaturalización de Contrato y otros. Declara la
existencia de una relación laboral entre el demandante y la entidad
demandada sujeto al régimen laboral de la actividad privada regulado por
el D. L. Nº 728 – Ley de Productividad y Competitividad Laboral, desde el
01 de diciembre de 2014 hasta el 30 de junio del 2020 (…)”. En ese
sentido, habiendo ya éste despacho emitido pronunciamiento sobre la
existencia de un vínculo laboral entre las partes bajo el régimen laboral de
la actividad privada D. L. 728, corresponde únicamente determinar si se ha
producido un despido incausado en agravio del actor, y por tanto
corresponde declararse la nulidad del despido y ordenar a la demandada
EMAPA San Martín S.A., reponga al demandante en el puesto de trabajo
que venía ocupando al momento en que se materializo el despido, esto es
el 15 de octubre del 2020.

DÉCIMO SEGUNDO; DEL DESPIDO INCAUSADO:


Cabe señalar que el Tribunal Constitucional, en la Sentencia emitida en el
Expediente Nª 976-2001-AA/TC (caso Eusebio Llanos Huasco) –
fundamento 15, ha definido al despido arbitrario (incausado), como aquel
que se produce: “cuando: Se despide al trabajador, ya sea de manera
verbal o mediante comunicación escrita, sin expresarle causa alguna
derivada de la conducta o la labor que la justifique”. De acuerdo a ello, si el
despido se realizó en base a una causa justa contemplada en la ley y
debidamente comprobada en el procedimiento de despido, respetando las
garantías mínimas del trabajador, entonces no se configuraría el despido
incausado, caso contrario, de evidenciarse que el despido fue sin una
causa justa o sin respetar el procedimiento debido, tal despido se
configuraría.

DÉCIMO TERCERO: En el íter expuesto, estando a que mediante


Sentencia Judicial del Expediente Judicial Nº 00039-2020-0-2208-JR-LA-
02, se ha reconocido la naturaleza indeterminada de los contratos suscritos
por el actor y la demandada, bajo el régimen laboral de la actividad privada
regulado por el Texto Único Ordenado del Decreto Legislativo N° 728 - Ley
de Productividad y Competitividad Laboral, aprobado por Decreto Supremo
N° 003-97-TR; por lo que en aplicación de la misma normativa, el
accionante sólo podría haber sido despedido por alguna de las causas
justas de despido precisadas en el artículo 22º de la norma antes citada,
las mismas que admiten dos causales de despido justificado: i)
relacionadas con la capacidad del trabajador; y ii) relacionadas con la
conducta del trabajador, siendo además, la existencia de una causa
justa contemplada en la ley y debidamente comprobada,
correspondiendo al empleador la demostración de la causa de
despido, circunstancia última que concuerda con lo señalado en el artículo
27º numeral 3) de la Ley Procesal del Trabajo Nº 26636 (cuerpo normativo,
bajo el cual se tramita la presente causa), que señala respecto a la carga
probatoria de las partes: “Corresponde a las partes probar sus afirmaciones
y esencialmente: 3. Al empleador la causa del despido (…)”.

DÉCIMO CUARTO: En el caso concreto de autos, de los argumentos


señalados en la propia contestación de demanda por parte de la Empresa
Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de San Martín, se tiene que ha
dado por finalizado la contratación del demandante por haber fenecido su
contrato de locación de servicios el 15/10/2020, causal que no se
encuentra regulada en los supuestos de despido justificado precisados en
el artículo 22º de la el Texto Único Ordenado del Decreto Legislativo N°
728-Ley de Productividad y Competitividad Laboral, aprobado por Decreto
Supremo N° 003-97-TR; por lo que, evidentemente la culminación de la
relación laboral antes indicada, no ha sido sustentada por la demandada
en una causa relacionada con la capacidad o la conducta del
trabajador – hoy demandante, y al no haberse expresado la existencia
de una causa justa establecida por ley y debidamente comprobada;
por lo que se concluye que, en efecto, se ha configurado un despido
incausado.

DÉCIMO QUINTO: En mérito a lo expuesto, queda establecido que entre


las partes ha existido una relación de naturaleza laboral y no civil, toda vez
que la relación contractual que mantuvieron la parte demandante y la
emplazada se ha desnaturalizado conforme al pronunciamiento emitido en
la Sentencia Judicial recaído en el Expediente Judicial Nº 00039-2020-0-
2208-JR-LA-02 . Por esta razón, para el cese del demandante debió
imputarse una causa relativa a su conducta o capacidad laboral que lo
justifique, otorgándole los plazos y derechos a fin de que haga valer su
defensa, lo que no ha ocurrido en el presente caso, por lo tanto
corresponde la reposición en su puesto de trabajo1.

DÉCIMO SEXTO: INDEMNIZACIÓN POR LUCRO CESANTE Y DAÑO


MORAL:
El demandante pretende que la emplazada le pague la suma de S/.
10,000.00 soles por concepto de lucro cesante y S/. 30,000.00 soles por
concepto daño moral; por lo que se analizará la existencia de los elementos
configurantes: i) la ilicitud (“antijuridicidad”) o la infracción del deber de no
dañar, ii) el daño, iii) la relación de causalidad y, el iv) factor de atribución
de la responsabilidad civil. El hecho invocado en su demanda es que le
corresponde una indemnización por daños y perjuicios a consecuencia del
despido incausado.

1
Al respecto el Tribunal Constitucional se ha pronunciado en la Sentencia N° 4375-2017-PA/TC- San Mart ín de fecha
20 de marzo del 2019, sobre pretensión de reposición de locador de servicios en la misma empresa demandada.
DÉCIMO SÉPTIMO: Es importante subrayar que la indemnización por
daños y perjuicios derivado sólo por lucro cesante, derivada del contrato de
trabajo, debe ser analizado dentro del ámbito de la responsabilidad civil,
regulado en los artículos 1321° y 1322° del Código Civil, que comprende
los conceptos de: daño emergente, lucro cesante y daño moral; es decir el
resarcimiento económico del daño o perjuicio causado, por inejecución de
las obligaciones contractuales. Es así que las obligaciones de carácter
laboral pueden ser objeto de inejecución, o de cumplimiento parcial, tardío
o defectuoso, y en caso de que ello obedezca al dolo, culpa inexcusable o
culpa leve de una de las partes, ésta queda sujeta al pago de la
indemnización de daños y perjuicios, es decir, si el empleador o trabajador
incurre en actos u omisiones de sus obligaciones causando perjuicio a la
otra parte, tendrá que responder, de conformidad con los artículos 1321°
del Código Civil.

DÉCIMO OCTAVO: La antijuricidad es la ilicitud o la infracción del deber


de no dañar. Sobre ello, es de precisar que: “Se entiende que sólo nace la
obligación legal de indemnizar cuando: se causa daño a otro u otros
mediante un comportamiento o conducta que no es amparada por el
Derecho se contraviene: a) una norma imperativa, b) los principios que
conforman el orden público, o c) a las reglas de convivencia social que
constituyen las buenas costumbres2”.

DÉCIMO NOVENO: Al respecto, habiéndose determinado en el presente


proceso que el demandante ha sido despedido sin causa justa,
configurándose el despido incausado conforme a lo señalado en el
considerando cuarto y quinto; se advierte que el accionar de la demandada
ha ocasionado un perjuicio económico a la demandante, haciendo que
dejara de percibir ingresos proveniente de sus remuneraciones durante
más de tres años, por ende queda acreditado que la emplazada vulneró su
derecho al trabajo. En consecuencia en el presente caso nos encontramos
ante la comisión de una conducta antijurídica por parte de la emplazada,
puesto que cesó de manera arbitraria la relación laboral con el
demandante, encontrándose por lo tanto en la obligación de indemnizarlo
por los daños ocasionados.

VIGÉSIMO: Respecto al Daño causado sobre el lucro cesante; el Pleno


Jurisdiccional Nacional Laboral y Procesal Laboral realizado en Tacna, los
días 23 y 24 de mayo del 2019 se acordó lo siguiente:
“El Pleno acordó por MAYORÍA “En las pretensiones
indemnizatorias derivadas de un despido inconstitucional, incausado
o fraudulento declarados judicialmente como tales; el daño
patrimonial invocado a título de lucro cesante, debe ser entendido

2
TABOADA CORDOVA, Lizardo. Responsabilidad Civil Extracontractual. Lima, Academia de la Magistratura, 2000, p.
27
como todos los ingresos dejados de percibir como consecuencia
directa e inmediata del despido y no como las remuneraciones
dejadas de percibir; y cuya existencia real y objetiva deberán ser
acreditadas a fin de determinar la cuantificación que se sustentará
en un parámetro temporal referido al tiempo de duración del cese; un
parámetro cuantitativo referido al importe de los ingresos ciertos que
hubiera dejado de percibir; y cualquier otra circunstancia que tuviera
incidencia directa en dicha cuantificación; deduciéndose los ingresos
que hubiese obtenido el demandante por servicios realizados en
dicho período de cese y los gastos que hubiera efectuado en el caso
de continuar laborando, para la obtención de sus remuneraciones.

VIGÉSIMO PRIMERO: En tal sentido es cierto que, el despido incausado


efectuado al demandante le ocasionó daño patrimonial, en la modalidad de
lucro cesante, configurándose éste como la ganancia dejada de obtener o
la pérdida de ingresos, como consecuencia directa e inmediata de un
hecho lesivo. Sin embargo, de ninguna forma puede asimilarse ello a las
remuneraciones, toda vez que constituiría enriquecimiento indebido y pago
por labor no efectuada.
En ese contexto debe tenerse en cuenta que el lucro cesante en
comparación con las remuneraciones dejados de percibir tienen naturaleza
jurídica distinta. En efecto, mientras que el primero es una forma de daño
patrimonial que consiste en la pérdida de una ganancia legítima o de una
utilidad económica como consecuencia del daño; el segundo son las
remuneraciones y beneficios sociales que el trabajador no pudo cobrar por
falta de contraprestación efectiva de trabajo que tiene naturaleza retributiva
y no indemnizatoria a diferencia del primero que implica establecer una
diferencia conceptual y de categoría jurídica, cuyo resarcimiento y quantum
debe efectuarse teniendo en cuenta el artículo 1332° del Código Civil que
señala: “Si el resarcimiento del daño no pudiera ser probado en su
monto preciso, deberá fijarlo el juez con valoración equitativa”.

VIGÉSIMO SEGUNDO: Al respecto Mario Castillo Freyre señala que la


interpretación que usualmente se efectúa del artículo 1332° del Código
Civil, gira en torno a señalar que puede haberse probado el daño alegado,
pero tal vez no se haya probado dicho daño en su monto preciso; en
consecuencia, el juzgador no tiene un elemento absolutamente objetivo en
el cual basarse a efectos de ordenar la indemnización. Es así que los
jueces, ante tales circunstancias, y habiéndose demostrado la
existencia del daño, deberán actuar con criterio de equidad dentro de
los límites de la pretensión indemnizatoria del demandante y
estimando equitativamente qué proporción del total de esos daños y
perjuicios reclamados, realmente tiene algún asidero legal. El citado
autor; agrega que, “(…) el juzgador no tiene un elemento absolutamente
objetivo en el cual basarse a efectos de ordenar esa indemnización, pues
resulta evidente que, si el tema hubiese sido absoluta y pulcramente
probado en juicio, simplemente no se tendría que recurrir al artículo 1332 y
esa indemnización no se basaría en los criterios que inspiran esta norma,
sino en las pruebas fehacientes aportadas en ese juicio.”3

VIGÉSIMO TERCERO: En ese sentido, se tiene que el despido arbitrario


efectuado por la demandada evidentemente perjudicó al demandante, pues
dejó de percibir los ingresos que venía obteniendo con su trabajo, lo que
hubiera continuado percibiendo si no se habría producido el despido; por lo
que a fin de establecer el quantum indemnizatorio deben analizarse
criterios objetivos, teniéndose en cuenta la duración del despido alegado
por el demandante, en tanto que si bien se trata de una demanda
planteada en el año 2020, debe ponderarse además que el demandante
según su documento de identidad de folios 02 es una persona adulta, por
ende la cuantía del lucro cesante debe considerar la probabilidad de
obtención de ingresos posteriores al despido. Por otro lado, cabe precisar
que, pese a la existencia de un despido, como sucedió en el caso de autos,
dentro de la teoría de la responsabilidad civil, la víctima tiene la carga de
acreditar los cuatro elementos de la responsabilidad civil, entre ellos el
daño. Además, el artículo 1321° del Código Civil, señala claramente que:
El resarcimiento por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento
parcial, tardío o defectuoso, comprende tanto el daño emergente como el
lucro cesante, en cuanto sean consecuencia inmediata y directa de tal
inejecución” (subrayado agregado); es decir, existe la obligación de
indemnizar sólo los daños directos e inmediatos, los que se originan en una
unidad de tiempo.
En ese orden de ideas, resulta pertinente incluso remitirnos a lo previsto
por el artículo 1332 del Código Civil, que señala que “si el resarcimiento
del daño no pudiera ser probado en su monto preciso, deberá fijarlo el juez
con valoración equitativa”; supuesto que resulta aplicable al caso, pues el
demandante únicamente acredito el despido, mas no algún daño en
especial, aparte de las remuneraciones que dejó de percibir como
consecuencia del despido; remuneraciones que tampoco pueden abonarse
por todo el periodo materia de despido, pues la indemnización debe
pagarse únicamente por los daños directos e inmediatos. Por lo tanto, se
fija como indemnización por lucro cesante la cantidad de TRES MIL Y
00/100 SOLES (S/. 3000.00).

VIGÉSIMO CUARTO: Sobre el Daño Moral; El recurrente solicita además


el pago por daño moral. Así, debe precisarse que el daño moral está
regulado específicamente en el artículo 1322° del C ódigo Civil establece:
“El daño moral, cuando él se hubiere irrogado, también es susceptible de
resarcimiento”, asimismo el art. 1984°, en aplicaci ón sistemática, establece:
“el daño moral es indemnizado considerando su magnitud y menoscabo
producido a la víctima y a su familia”, por lo tanto, el juez deberá tener en
cuenta estos parámetros para cuantificar su monto.

VIGÉSIMO QUINTO: Es de mencionar la Casación N° 4393-2013-La


Libertad que describe la naturaleza del daño moral de la siguiente manera:
3
Ver sexto considerando de CASACIÓN LABORAL N° 0896 0-2018 LIMA.
“Sexto: […], esta aflicción o sufrimiento es de orden transitorio y no surge
de afección patológica, sino de un acto dañino sufrido en la vida en
relación. Es además, un daño totalmente subjetivo, impreciso, inasible, no
posible de medir y, por lo tanto, de difícil percepción y de aún más difícil
cuantificación. Pero que eso sea así no significa que el referido daño sea
deleznable, sino que su valoración deberá efectuarse por medios distintos
a los ordinarios, dando singular importancia a sucedáneos probatorios y a
las máximas de experiencia”.

VIGÉSIMO SEXTO: Asimismo en el Pleno Jurisdiccional Nacional Laboral


y Procesal Laboral realizado en Tacna, los días 23 y 24 de mayo del 2019;
se acordó lo siguiente:
“El Pleno acordó por MAYORÍA “En las pretensiones
indemnizatorias derivadas de un despido inconstitucional, incausado,
fraudulento o arbitrario declarados judicialmente como tales; el daño
extra patrimonial invocado a título de daño moral, que comprende
además al daño a la persona y otros similares; no cabe presumir la
existencia del daño moral, y su existencia deberá ser acreditada ya
sea con medios probatorios directos o indirectos, salvo los casos en
los que además de vulnerarse el derecho al trabajo, también se
hubieran vulnerado otros derechos fundamentales como el honor, la
dignidad, u otros derechos de la personalidad, en cuyo caso deberá
presumirse el daño moral; sin embargo la cuantificación deberá
sustentarse en la prueba aportada o en la invocación de
determinados parámetros o criterios y sólo en ausencia de ellos
podrá acudirse a la valoración equitativa conforme al artículo 1332°
del Código Civil”

VIGÉSIMO SÉPTIMO: En ese sentido de los medios probatorios aportados


por el demandante en el presente proceso, no se advierte medio probatorio
alguno que acredite el daño psicológico y la afectación causado a la
demandante derivado de la conducta de la demandada (informe y/o pericia
psicológica), debiendo aplicar lo prescrito en el artículo 200º del Código
Procesal Civil, en cuanto si la parte no acredita con medios probatorios lo
hechos que ha afirmado en su demanda, será declarada infundada, norma
procesal de aplicación supletoria al presente proceso, conforme lo dispone
la Primera Disposición Complementaria Final de la Ley 29497. Siendo así,
no corresponde amparar este extremo de la demanda.

VIGESIMO OCTAVO: En cuanto a los intereses corresponde aplicar la


Ley N° 25920, que en su artículo primero 4 establece que el interés
aplicable es el legal fijado por el Banco Central de Reserva del Perú,
mientras que su artículo 3 señala que el referido interés legal sobre deudas
del empleador “(…) se devengan a partir del siguiente de aquél en que se
produjo el incumplimiento y hasta el día de su pago efectivo, sin que sea

4
Artículo 1.- A partir de la vigencia del presente Decreto Ley, el interés que corresponda pagar por adeudos de carácter
laboral, es el interés legal fijado por el Banco Central de Reserva del Perú. El referido interés no es capitalizable.
necesario que el trabajador afectado exija, judicial o extrajudicialmente, el
cumplimiento de la obligación al empleador o pruebe haber sufrido algún
daño”; lo que implica que para efectuar un cálculo con arreglo a ley debe
tomarse de referencia el interés legal fijado por el Banco Central de
Reserva y su pago se calculara desde la omisión de pago de la obligación
hasta su pago efectivo, para cuyos fines debe recurrirse al apoyo de un
órgano de auxilio especializado.

VIGESIMO NOVENO: Costas y costos del proceso.


El artículo 412º del Código Procesal Civil señala que “la imposición de la
condena de costas y costos no requiere ser demandada y es de cargo de la
parte vencida, salvo declaración judicial expresa y motivada de la
exoneración”; por lo que en el presente caso corresponde amparar el pago
de costas del proceso.
En cuando a los costos, del artículo 411° del Códig o Procesal Civil, estos
comprenden el honorario del Abogado de la parte vencedora, más un
cinco por ciento destinado al Colegio de Abogados; por lo que a la
parte accionante le corresponde dicho derecho al resultar fundada en parte
la demanda.

III. DECISIÓN:
Por los fundamentos de hecho y derecho antes expuestos, de conformidad
con las normas de la Ley Procesal del Trabajo - Ley N° 26636; y, en
atención a las atribuciones conferidas por el artículo 1° de la Ley Orgánica
del Poder Judicial, valorando las pruebas de manera conjunta y aplicando
las reglas de la sana crítica, Impartiendo Justicia a Nombre de la Nación:
FALLO:

1. DECLARAR FUNDADA EN PARTE la demanda interpuesta por


ROMER HIDALGO RAMIREZ contra LA EMPRESA MUNICIPAL DE
SERVICIOS DE AGUA POTABLE Y ALCANTARILLADO, EMAPA
SAN MARTIN, sobre DESPIDO INCAUSADO, REPOSICIÓN Y PAGO
DE INDEMNIZACIÓN POR DAÑO MORAL Y LUCRO CESANTE;
2. DECLARO NULO el despido incausado, en consecuencia, ORDENO
que la Empresa Municipal De Servicios De Agua Potable Y
Alcantarillado, Emapa San Martin, reponga al demandante a su puesto
de oficial y almacenero u en otro cargo similar y de igual nivel
remunerativo.
3. DECLARO FUNDADA EN PARTE la pretensión referida a pago
Indemnización por lucro cesante y daño moral; ORDENO que la
demandada cumpla con pagar a favor de la demandante la suma de S/.
3000.00 (TRES MIL SOLES), por concepto de LUCRO CESANTE,
más Intereses legales de conformidad con el Decreto Ley N° 25920
que deberán liquidarse en ejecución de sentencia. Con costas y costas.
4. INFUNDADA LA DEMANDA respecto INDEMNIZACIÓN por concepto
de DAÑO MORAL.
5. CONSENTIDA o ejecutoriada que sea la presente, cúmplase lo
ordenado y archívense en la forma y modo de ley. NOTIFIQUESE con
las formalidades de ley.-

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