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sors Galileo Galilei ste libro inicié Ia ciencia moderna, } Cerca de un siglo antes, Copérnico | habia propuesto una nueva ordenacién | del cosmos en la que la Tierra giraba en | {ome al sol; pero aunque los astrénomos usaron sus teorias y cilculos, practicamente nadie creyé | en el movimiento tertestre, GALILEO GALILET sac6 el problema del campo limitado de la astronomia y lo planted en el terreno general de |a filosofia de la naturaleza, La evidencia, de sentido comin, dé que pisamos un suclo firme ¢ inmovil se basaba en una vision aristotélica de la fisica. EL DIALOGO SOBRE LOS DOS MAXIMOS SISTEMAS DEL MUNDO PTOLEMAICO Y COPERNICANO se propuso cambiar la vieja visién fisica y filoséfica, ‘ransformar el sentido comin y la mentalidad que ahora consideramos pre-moderna. Por eso este libro es ala ver de cienciafsica y astronomia, y de epistemologia, lbgicay filosofia y de la culeua, ANTONIO BELTRAN, traductor ¢ introductor £06) Sa Dye CS Fito I. Gan DS Tosegynem © de la obra, acompana al lector con notas que ayudan a comprendcr la profunda transformacion intelectual que supuso el libro, escrito en forma de didlogo para poder ofrecer la dialéetica encre la Vieja y la nueva vision de la naturaleza Galileo Galilei Didlogo sobre los dos maximos sistemas de! mundo ptolemaico y copernicano Dialogo sobre | los dos maximos sistemas del mundo ptolemaico y copernicano HU) d ! Alianza Editorial Il bs rra durante mucho tiempo en el aire, y vagar por él revoloteando de un modo totalmente desordenado, no acabo de entender cémo entre tan gran mezela de ‘movimientos no se confunde y extravia el primer movimiento comin, y de ‘qué modo, al haber sido despojados de dl lo pueden compensare gualaio coq clvuclo y seguir las corres y los érboles que con tan apresurada carrera hus yen hacia levane, Digo tan apresurada porque ene citculo miximo del globo ‘de poco menos de ml millas pr hora, y no creo que las golondrinas vuelen 'SALV. Si los pijaros tovieran que seguir la carrera de los deboles con la ayuda de su alas, estarian frescos. ¥ si fuesen privados dela rotacién universal {guedarian tan atris ys vuelo hacia poniene parecer tan violento a quien ppulese vero, que superaria con mucho el de una flecha. Pero reo que noso- fros no podamos percibirlos, por la mismo que nose ven las balas de aril ria cuando, lanzadas por la aria del fuego, corren pore air. Pero lo cierto es {que el movimiento propio de los pijaros, quiero decir de su volar, no tiene nada que ver con el movimiento univers), al que no aporta ni ayuda ni er torbo. Lo que mantiene insterado dicho movimiento en los péjaros, es el ‘misao are pore cul vagan que, siguiendo naturalmente la rotacin de la Tie- ‘ra del mismo modo que lleva consi las nubes,as{ también leg consigo los péjaror y cualquier otra cosa que est en 6. Asi pues, respecto a seguir ala ‘Tierra, los pijaros no tienen nada de qué preocuparse,y por lo que a esto res pecta podrian estar siempre dormidos. 'SAGR, Comprendo sin ninguna dificultad que el aire pueda llevar consigo las nubs, como materias que, por su lgerea, son facilsimas de mover yestin coma despojadas de evalquier otra inclinacién contraria, mis aun siendo mate- rae que también partiipan de las condiciones y propiedades terrenas. Pero ‘que el aire pueda restiuirselo alos pijaros que, por ser animados, pueden mo- verre con movimiento contraio al diueno, después de interrumpirlo, me p rece un poco durillo; méxime porque son cuerpos slides y graves, y, como se hha dicho més arriba, vemos que as piedrasy otros cuerpos graves se manti~ ‘nen contumaces contr el impetu del air y si acaso se dejan superar, nunca 2d- ‘quieren tanta velocidad como el viento que los leva SALV. Sr. Sageedo, no demos, tan poca fuerza al aire movido, que cuando se mucve répidamente es capaz de mover y llevar naves bien cargadas, arrasar bosques y derrumbar torres. ¥no por ello puede decrse que en estas acciones| tan violentas st movimiento sea ni mucho menos tan veloz como el del rot cin diurna, SIMP. He aqui, pues, que el are movido podré también continuar el movi smicnto de los proyectiles, conforme ala docsina de Aristteles. Ya me parecia pi extraio que él pudiese haber erzado en este punto 'SALV. Pod sin duda, si fuesecapaz de continuarlo por si mismo. Pero, ligual que una vez que ha cesado el viento ai las naves avanzan ni los éeboles Jon arrancados, as también al no continuar el movimiento del aire después de {ge [a piedra ha sldo de la mano y el brazo se ha detenido, hace falta que lo fhe hace mover el proyecti sea algo distino de aie. ‘SIMP. ;Ciimo que cesa el movimiento de la save una vez que ha cesado el viento? Mas bien se ve que parado el viento, e incluso arradas la veas el bal sigue desplarindose mills enters. 'SALV. Pero so va contra vos, Sr Simplicio, porque detenido el aie, que al chocar con las velas llevaba el navio, de todos modos éste continéa su curso sin Iaayuda del medio “SIMP. Se podtia decir que el agua era el medio que levaba la nave y la 'SALV. Se podria deci ciertamente para decir todo lo contrario de la ver~ dad, Porque la verdad es que el agua, con su gran resistencia a ser abieta por ‘cuerpo del bajel, se le opone con gran frémito y no le dea alcanzar la mayor parte dela velocidad que el viento Te confers, sino existiese el obsticul del rus. Vos, Se. Simplicio, no debéis haber pensado munca en la furs eon la que agua se arrasra contra la barca mientras és, impulsada velozmente por los Temos o el viento, se desplaza por el agua estaneada. Porque si os hubieses fi- jado en dicho efecto, no se os ocurrefa ahora la idea de plantear tl simpleza, Ya empiezo a darme cuenta de que hasta ahora habérs sido uno de esos que para entender cémo suceden estas cosas y enterarse de los efectos dela natura feza no suben a las embarcaciones ni van junto ala ballestasy cafiones, sino {que se cetiran al estadio a hojeat los indices y repertoris para ver si Arist Tesha dicho algo al respect, a areguraese de que han captado el verdadero sen tido del texto, y ya no desean otra cosa y estiman que no se pueda saber mis ‘SAGR. Gran felicidad, digna de ser enviiada. Porque si el saber es naural- mente deseado por todos y si tanto da ser como aparentar que se e848 Per onas gozan de un grandisimo bien y pueden persuadirse asf mismos de que lo tntinden y saben todo, a expensas de aquellos que conociendo que no saben To que no saben y, en consscuenca, vendo que no saben ni siquiera una pe- ‘quodisima parte de lo puede saberse, se matan con as vigils, a reflxiones y ‘se mortifican con experiencas y observaciones. Pero, por favor, volvamor a nuestros pares, a propésito de los cuales vos oops ced ™ Sor atv cnet sites eS pda penne qe Gale ope nee ign smc dre rn ela coats pas sre es 6 ead) —y ca i man en cen Ia cee in ro span, don ears yen conscenc,dtade mata J moines durin. Fe enmiopin suo vo come pate averine se anpeenin, Ea per gs ea ig Cate nf dogo que manne cn Sanplin= cntimaca on inc stereo or Seo con ene de Soc sl pon re ort abl elo y de re dele pr emp evarcosi sins ons een oan oa pi rn nme rare, ‘ape por sts cnn pert asl argument En mi opin clr que Cae en ides pata Gelso ysarer en eae de satsary queen odo cine protien dd movimen dao dl ae Fleas robleos quel dee be neers Yeo quel deo cor cde prs ‘homie dilnet rl exe unt sdb ots go won esr mao io 40a one Sin aquemtmoi ced ate, Vane host comin, Inoue 519 habia dicho que el aie movido con grandisima velocidad les podia devolver la parte del movimiento diurna que entre la pirvets de sus vuelos pudieran haber perdido. A lo que yo contesto que no parece que el aire movido pueda confestr aun cuerpo sido y grave tanta velocidad como tiene él mismo. Y puesto que la velocidad dl aire ex como la de la Tierra, no parecia que el aire focresuficiente para compensarel dao de la perdida en el vuelo de los pija- 'SALV. Vuestro razonamiento es en apariencia muy probable y el dudar al respecto no es de ingenios vulgares. No obstante, dejada de lado ia aparienca, — «reo que en realidad no tiene ni un pelo mis de fuerza que los otros ya consi- derados y resueltos. SAGR. No hay duds alguna de que, sino es concluyente necesariamente, su efieacia slo puede ser abrolutamente aula, porque sia conclusign es nece- sariamente de un determinado modo no se puede aducir razén que valga desde | parte contara ‘SALV. Creo que el que vos tengis mayor dficultad en éta que en las otras objeciones depende de que los pijaros son sees animados y, por ello, pueden usar fuerza a su placer contea el movimiento primario ingénito en las cost t- rena. Por ejemplo, cuando estin vvos, les vemos volar incluso hacia arriba, ‘movimiento que, en cuanto graves les es imposible, De ahi que una ver muer- tos s6lo pueden eaer hacia abajo. Por eso extimais que los argumentos pert- nentes para toda clase de proyeciles mencionados mis arriba, no lo son en el «aso de ls pijaros. Eso es cierto, Sr. Sagredo, yprecsamente porque es verdad ‘no vemos que estos proyectleshagan lo que hacen los pijaros. Puesto que si vos desde lo alto de una torce dejaras caer un pio muerto y uno vivo, el ‘muerto hari lo mismo que hace un pier, ex decir seguiria en primer lugar el ‘movimiento general diurno, y ademés el movimiento hacia abajo, porque és un rave, Pero si el pijaro deado caer estuviera vivo, quién le impide que, aun- 4ue el movimiento diueno permanezca siempre en é, se lance slereando hacia 1a parte del horizonte que le plazea? Ese nuevo movimiento, siendo propio de 41 no participado por nosotros, debe sernos perceptible. Y si con su wuelo se Inubiera movido hacia occident, quién ib a impedir que con otro tant bate de alas no vuelva sobre la torre? Porque, enfin, el emprender el vuelo hacia poniente no consists sino en restar del movimiento diurno, que tiene, vg, diez grados de velocidad, un sdlo grad, por lo que mientras volab le queda. bban nueve. Ys se hubiese posado en Tierra, se le devolvan ls diez comunes, a los cuales volando hacia levante podia afar uno, y con los once volver so- bre la tore. En definitivs, si lo consideramos bien y lo pensanmos més a fondo, los efectos del volar de los pijaros no difieen en nada de los proyectiles hacia ‘todas las parts del mundo, excepto en que estos son movidos por un proyec- torexterno y aquellos por un principio interno, ‘Yaqui, para dejar clara defintivamente la aulidad de todas las experiencias aducidas, me parece que es el lugar y el momento adecuado de mostrar el ‘modo de experimentaras todas failisimamente.Encerraos con alga amigo en a mayor estancia que esté bajo cubierta de algin gran navio, y meted en ella rmoscas, mariposasy animalllos voladores parecidos. Hays también un reci- piente grande de agua con pececillos dentro. Ademis manténgase en alto un cubo, que gota a gota vaya dejando exer el agua en otro recipient de boca es todas estas cosas aunque no haya ninguna duda de que mientras el bajel ex parado tienen que suceder asi, haced mover lz nave con la velocidad que se. ‘Vertis que (com tal que el movimiento sea uniforme y no fluctuante hacia aqui y hacia alls) no observaréis el mis minimo cambio en ainguno de los efectos Imencionados y que, a partir de ellos, no podréis determina ila nave avanza 0 tsti quiets. Al salar, o- desplszarés en el entablado los mismos espacios que antes y no se dard el caso de que, porque la nave se mueva velocisimamente, davis mayoressaltos hacia popa que hacia proa aunque en el tiempo que ests, nel are el entablado que ex debajo de vos se desplace hacia la parte cont fiaa vuestro salto. ¥allanzar alguna cosa al compatero, no necestaréis trarla ‘con mis fuerza para que le leg, si esti hacia la roa y vos hacia la popa, ‘que si estuvieses al revés, Las gotas caerén como antes en el vaso inferior, sin Que ni siquiera una caigs hacia popa por més que, mientras Ia gota est en el, tire, la nave se desplace muchos palmos. Los peces en su agua no requeririn mayor couerzo para nadar hacia la parte delantea del recipiente que hacia la posterior, sino que llegarin con igual facilidad a la comida puesta sobre cual- fuier lugar del borde del recipient. Finalmente, las mariposasy las moseas Continuarin su vuel indistintamente hacia cualquier lado, y en ningin caso sucederd que se queden hacia la pared” que mira 2 popa como si estuviran f- tigadas de seguir la veloz carera de la nave, dela que habrin estado separadas por mucho tiempo, al mantenerse en el aire. Y si quemis una lgrima de in- flenso se formari un poco de humo que se veri ascender ¥ mantenerse en lo alto como una nubeclla totalmente indiferene a movimiento hacia uno w otro Indo. La causa de la total correspondencia de ests efectos es que el mov imicnto dela nave cx comin a todas las coase contends en deta incluyendo el tire, porque por eso die yo que se estuiese bajo cubiert ‘Pesto ques se etuvise sobre ésta, alate libre que no sigue el curso de lt nave, se verian diferencias mis o menos notables en algunos de los efectos mencionados, No hay duda de que el humo quedariaatris, como el aire ‘mismo. Igualmente las moscasy las mariposas, obstaulizadas por el aire, no podrian seguir el movimiento dela nave si se separasen de éta por un espacio Considerable. Pero si se mantuvieran préximas, puesto que a save, por estar ‘construida con anfractuosidades lleva consigo el aire préximo, seguirian la nave sin dificulad o fatiga. Quizds por esta misma raz6n vemos que, cuando las caballerias corre, las moseasimportunasy los tabanos siguen alos caballos volando ahors en ésta ahora en aquella parte de su cuerpo. Pero por lo que hace alas gotas que caen la diferencia seria poca, yen ls sltos y en los pro- estes graves totalmente imperceptible" ™ Resojo ag! la corecin de Sst qu patil orga de 192, repo pares, dec pre no pete, © ser paca a eamerta Faro Ned eer ime er enna a sarde qu emp eliz,com ere "A Come dcamon xe sgumen musta que Gale, pes de qu en deminalo women digs xplictamente que 4 mantis by in ol a one so i uhh a rc he gh Feld de mcr zur sun cent qucempue mesial El propo Cl nor dice que sl merneto {Elect elcr co at ojo pre ay bari re Bs ec ogi Stender lnpured epop dete emp ae se no a cmport como sodas abs, La com E2Ede nine dlr dino con de a nave depen eq aso parti de wna ex or oes. EL ‘Steen cin os er mpupto odo momenta, prgue de cota seep se doa a La prac «0 twecha, situado debsjo. Cuando la nave esté quicta observad atentamente que los animalillos volates se mueven en todas las direeciones de la estancia com ‘gual velocidad. Vertis que los peces nadan indisintamente hacia todos los l- dos. Las gotas que caen entrarsn todas en la vaijasituada debajo. Y vos, a un ‘irar algo al amigo, si las distancias son iguales no tendréis que lanzarla com ‘mis fuerza hacia una parte que hacia ota i las distancias son iguales. Y si sal- tis, como suee decise, con los pies juntos, os desplazaris igual espacio con Independencia de la dreccién. Una vez que haysisobservado diligentemente a ea “ane SAGR. Aungue al nvegar nose me ha ocurtido hacer ets observaciones, aposts,esoy mas qu seguro de que sucederin dela manera conta. En con. frmacién de esto, me acuerdo de que més de cien veces me a ocurrido pre- sunt, entando en mi camarote, sla nave avanzaba o estab patada a veces Habiendo fantaeado a respecto, he eeido que extabs avanzando hacia un Indo, euanda el movimiento era el contrario. Por tanto yo, con lo dzho hata ag me doy porstisecho he entendido perfectamente que todas ls expe: riencia adidas para peobar mis bien la negaién quel afrmacién del o- tacién de a Tera notenenningén valor. ‘Queda ahora Is objecisn fundada en la obsevacién experimental de que ‘una roracgn vloz ten la facultad de despediry disperse las materas adh das larefacto que gira Por esta causa pares 3 muchos, incluyendo a Prlo- ‘co, que sla Tires girase sobre x misma con tanta velocidad, as pedras y los animales rendian que sr lnaados hacia las estes, y que no aba arg masa an tenaz para mantener los edifciosunidos ass cimieatosy evita ue también és sufrieran un estago semeant. 'SALV. Antes de entrar en el eslarecimiento de eta objec, no puedo de- int de dece lo que he observado mil veces, no sn reirme, que sels ocutre a Casi todas las personas Ia primera vee que oyen lo de que ls Tierra se mu, [i rein tn fia eine que no slo no habian dudado mancs de tl quie tad, sno que habianereid frmemente que todas as dems personas babin estima como ells que habia sido creadainmévil y que asi se habia mante ido en todos los sigospazados.Imbuidosfrmemente de ext idea se atom bran lof que alguien le atibuye movimiento, casi como s, después de hae tesla cnsiderade uni necatnente pensuse que tase lbiet puesto et mmoviniento en el momeato en que Pégors 0 quienguicra que fuse el pic mero que dijo que se movin, y no antes. Ahors bien, que tan tonsa idea (ene refer al cree que los que admiten el movimiento dela Tera han creido «ve primero estaba quiets desde su crescdn hasta el empo de Ditigoras, y la onsderan mévil slo después de qu Patgoras la etme tl) halle agar en a mente de ls hombres del valgoy deexcsajuicio no me asombra, pero que Jos atstodliosy ls ptolemaios ambin hayanincutido en esa pueridad realmente me parece de un simplsmo bastante exteafo inexcusable SAGR. Ast pues, Sr. Salva, vos cred que Prolomeo pensaba qu tr aque defend Ia inmovilidad de a Tire, disputando conta personas qu, ritindo que éta habia estado queta hasta el tiempo de Pitigoras, afrmaron aque slo partir de entonces, cuando Ptigors le stribuyé el movimiento aba vaceo mévil? SALV. Si consideramos Ia manera que tiene de zefutar sus afrmaciones, slo se puede creer eo. Su raftacin sc basa en la demelicin de los efi, 1b gue sons com lo hanes delete. Ee ds, cube ado Is sbcios orere sign coipreadoe Ig pero el sretiene queer prinina 3 ee pare pode or npg por ls senor de este: Po {Ti dfcine qu dae querer avec clcao expat amber teenre no on eaten logs Pose ‘ents peo anon eects del gmc Ge Gale, no una exc de nue habn connate eno Y ‘tlre emp indecu Ponerormene, em cua jor, nos di qel montanes dain Ai tctondade de anne som lr que epee haces gar conf Tiers: Deput deo gue sma de lee parce ao gue a res ue volar muy alpaca gues ein, porgcno poe aha ar el ite gu 0 pripr del moviniens dra Reece sie se asec, XLVI 2, 164 yen el anzamiento de las piedras, de los animales y de los hombres mismos facia el cielo. Y puesto que tal ruina y lanzamiento no puede darse de anima- les y edificios que antes no estuvieran en la Tierra, y dado que en la Tierra no pueden colocatse hombres y fabricarse edificios més que cuando ésta estu- era quiets, de ahi, pues, resulta manifesto que Ptolomeo procede contra los {que habiendo conccbido durante algsn tempo Ia quietud de la Terra, es decir tnientrs ls animales as piedrs y los constructores pudieron permanecer en lla y fabricar los palacios y las ciudades, después la hacen impetuosamente ‘vl, para ruina y destrucién de los eificios y de los animales, etc. Puesto {que si hubiese propuesto dsputarcontea los que hubieran aribuido ala Tie- tra al rotacin desde su primera creacién, lo habria refurado dicendo que si [a Terra se hubiese movido siempre, aunca se habria podido colocaren ella ni fiers, ni hombres, ni piedras y mucho menos construir edificios yfundar ciu- dades etc. ‘SAGR. No acabo de entender este desatinoarstselco y ptolemaico. SALV. O bien Prolomea arguments conta los que han considerado Ia Tie- ‘ra siempre inmévil, 0 bien contra quien ha estimado que esta habia estado aguieta durante algn tiempo y después se ha puesto en movimiento. Si es con tra los primeros, enia que decir: «a Tierra no se ha movido siempre, porque fnunca habrian exstdo hombre, ni animales ni eificios en la Terra, pues la ‘rotacinterrestre no les habria permitido permanecer en el». Pero dado que fen su argumento dice: «la Tierra no se mueve, porque las fers, los hombres, los edifcios, ya puestos en l Tierra, se prciptarans, supone que la Tierra ya se ha encontrado ental estado alguna vez, es decir que ha permitido a hombres Y ficras permaneceren ella y contrur, Lo que se deduce consecuentemente es ‘que en alga momento ha estado quiets, es decir, apta para la estancia de ai tales y Ia fabriacign de eificios. Entendéis ahora lo que he querido decir 'SIMP., Lo entiendo y no lo entiendo, Pero es0 poco importa para el mé= rito de la causa, yun errorillocometido inadvertidamente por Prolomeo no ts suficiente para mover Ia Tierra si est4inmévil. Pero dejémonos de bromas Y vayamos al meollo del argumentacién que me parece insoluble. SALV. Pues yo, Sr. Simplicio, todavia quiero ary apretar mis ese nud, smostrando de modo aun mis manifesto que es certo que los cuerpos graves que se hacen giarvelozmente en torn aun centro fj, adquierenimpetu ce movers Alejndose de dicho centro, incluso aun cuando tengan la propensin de irmatu- ralmente hacia te. Atese al extremo de una cuerda un eubo pequefi, en cuyo interior haya agua y,aguantando firmemente el otto extemo,formando un semi- dismetro com la euerda y el brazo, y haciendo de centro la artieulaciin del hom bro higasegirar el cubo velozmente, de modo que describ la circunferencia de ‘un circulo. Tanto s este et parse al horizonte, como i lees perpendicular, 0 incinado de cualquier modo, siempre sucederd que el agua no caers fuera del cubo; al contario quien lo gra sentir en todo momento que la cuerda tray hace fuerza par alejarse més del hombro. ¥ sien en centro del fondo del cubo se hi- era un agujero, se veria que el agua chorrea fuera tanto hacia el cel, como lte- ‘alent, como hacia ters. Y, sien haga de agua se metenpiedrecils, girando del mismo modo se sentir que hacen Ia misma fuerza contra la cuerda.Y,final- mente, se ve que los nifos tran las piedras a gran distancia haciendo girar un Legit sie a iohoncy

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