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Sergio Almaraz Paz Requiem para Una Repu
Sergio Almaraz Paz Requiem para Una Repu
http://www.bv.umsa.bo
La Paz- Bolivia
1969
DERECHOS RESERVADOS
CONFORME A LEY
Carátula:
Luis Zilveti
Editores e Impresores:
Universidad Mayor de San Andrés
SUMARIO
PRESENTACION ...................................................................................... 4
CAPITULO I ............................................................................................ 5
CAPITULO II ......................................................................................... 11
CAPITULO IV ........................................................................................ 48
CAPITULO V ......................................................................................... 58
CAPITULO VI ........................................................................................ 70
PRESENTACION
“Réquiem para una República”, titulo con que Almaráz resumió el contenido
del libro, llamando la atención sobre la hora luctuosa que vive Bolivia, es una
obra de lúcida madurez como crítica de una realidad política y social
presentada con el magistral estilo del que, seguramente, era el mejor escritor
político contemporáneo de nuestro país.
Los originales de “Réquiem para una República” han sido conservados por la
Sra. Elena Ossio de Almaráz y entregados a la Universidad tal como el autor
los había dejado al momento de fallecer. Son la expresión fiel de un legado
político a la República, de una profundidad y valor civil sin paralelos en
nuestros días.
Los Editores
CAPITULO I
La tierra y la minería son las bases materiales. Los mineros ganan mucho,
pero ninguno de ellos deja de construir palacetes rurales, de comprar tierras o
invertir en las que ya tenían. Arce, Pacheco, Alonso, tienen sus haciendas. Los
del estaño también las tienen. Aramayo, “Chajrahuasi”; Patiño, “Pairumani”. A
Hochschild que es alemán no le interesa la “casa solariega” y prefiere Buenos
Aires y Viña del Mar a Bolivia. Es un país en e1 que el viejo prestigio se da con
y por la tierra, es decir en función del pasado y la tradición, en el que las
gentes de “posición” se esfuerzan por encontrar abuelos españoles, la
vinculación con la tierra es fundamental; solamente ella separa a los
advenedizos de la familia de rango y tradición. He aquí una forma cómo la
oligarquía minera se inserta en la sociedad boliviana, pero también es éste el
rasgo exterior de una minería que nació más o menos soldada con la
propiedad feudal de la tierra. Es lógico: la actividad minera no necesita un
mercado interno y por tanto no sólo no le interesa eliminar los obstáculos que
estancan el progreso del país, sino más bien le favorece mantenerlos en cuanto
que de ellos resulta una mano de obra barata para el laboreo minero y un
Esta élite es la que se llamó Tosca minera, cuya más concentrada expresión
fue el bufete Calvo. Hoschschild contraté los servicios del Estudio en enero de
1924, Patiño lo hizo dos años más tarde y Aramayo poco después. La lucha
entre las empresas, agudizada por los cupos de producción, de-terminó que ti
Estudio quedara desde 1938 con Hochschild con el que a lo largo de 30 años
se mantuvieron las relaciones más estrechas. Pero estos abogados también
trabajaron para la Railway, la Standard Oil y empresas mineras tan
importantes como la American Smelting. En determinado momento los
negocios más importantes del país estaban concentrados en las oficinas de
este Estudio, situadas primero en la calle Comercio y después en el Edificio
“Ultima Hora” de la avenida Camacho.
El Jefe del Estudio era el ahogado chuquisaqueño Carlos Calvo y sus sucios e
inmediatos, los ahogados cochabambinos Manuel Carrasco y Néstor y.
Galindo; los tres dirigentes del partido liberal, varias veces ministros,
parlamentarios y embajadores.
CAPITULO II
EL TIEMPO DE LAS COSAS PEQUEÑAS
Albert Camus.
1
En Laicacota, elevación estratégica en La Paz, un grupo de civiles armados del MNR intentó una
resistencia desesperada el 4 de noviembre de 1964. El gobierno habla caído dos horas antes. El reducto
fue bombardeado y ametrallado por la aviación y sus ocupantes murieron o tuvieron que buir. La acción
fue innecesaria y Sangrienta, y no tiene otra explicación que cl ardor combativo de algunos aviadores
militares. Los milicianos habrían depuesto las armas si se les daba la oportunidad. Pero estaban los que
deseaban que el 4 de Noviembre se produjera el derrocamiento en forma, que el adversario fuera. de-
finitivamente aplastado, que se viera su sangre en las calles y se lo pasara aplastado por la humillación y
la derrota. Pero como era demasiado débil para ofrecer resistencia se hundió blandamente dejando des-
concertados y jadeantes a los grupos más agresivos de la contrarrevolución, que horas después se
vengaron rechiflando al general Ovando e,’ la plaza Murillo. Lo consideraban cómplice del MNR. por
haber facilitado cl exilio del presidente Paz Estenssoro.
Estaba solo. En las cuarenta y ocho horas que precedieron a su caída tuvo que
pagar agravios y errores. El pueblo quedó espectante, atrapado por una som-
bría duda. Abandonado por sus dirigentes, él también estaba solo.
las minas está en marcha; en este otro sentido, e1 retroceso ha sido fácil y
posible.
a los ex-barones. Entonces se pensó: “se llevan el petróleo, pero nos dejan el
estaño. Con el tiempo no solamente se perdió el petróleo, 22 millones de
dólares por concepto de indemnización a los ex-propietarios de las minas, se
arruinó la economía y la organización de COMIBOL, se debilitó a YPFB con el
enfrentamiento de Gulf, sino que se predispuso la pérdida del estaño.
Como era lógico, las concesiones se hicieron mayores y más frecuentes en una
dinámica en la que no es posible distinguir la gravedad de cada paso que se
da. Todas las cesiones fueron comprometedoras en grados y medidas siempre
crecientes. La revolución no se derrumbó de un solo golpe: cayó poco a poco,
pedazo a pedazo. La contrarrevolución no pasó sobre el país como una
aplanadora y si sus efectos fueron demoledores, necesitó varios años para
echar abajo lo que encontraba a su paso. Porque se resistió. Se resistió mal,
con debilidades y aturdimiento, pero se resistió. Alexander Firfer, jefe de la
misión económica americana, cuando regresó a Washington después de
Noviembre del 64, dijo de los militares: “con este gobierno trabajamos mucho
mejor...” Las discusiones con Paz Estenssoro tomaban meses y a veces anos.
Por su parte Paz Estenssoro pensaba: “Nuestra posición se manifestaba en los
detalles....
2
Al hablar de la “izquierda tradicional” nos referimos al Partido de la Izquierda Revolucionaria (PW), Partido
Obrero revolucionario (POR) y a los dos partidos comunistas, descendientes ambos del viejo PIEL El 21 de Julio
fue posible por la acción combinada del PIR y la rosca. La muerte de Villarroel es el estigma de esta izquierda.
Nacida antes del Citado, con los primeros grupos marxistas, en la post-guerra se transformó en la corriente obrera y
popular que, encabezada por intelectuales y líderes estudiantiles, organizara el PIR en 1940. (N. del A.)
33 Mucho tiempo después del 4 de Noviembre el Ministro de Gobierno del nuevo régimen Dr. Antonio Arguedas, sin medir el
paso que daba, acusó al ex-titular en el cargo, Dr. José Antonio Arze Murillo, Ministro dc Gobierno del MNR, de haber retenido
arbitrariamente un vehículo oficial en su poder. Arze Murillo no hizo más que dirigir una carta a Henderson en la que recordaba
que se trataba de la donación de 30 vehículos para los servicios de seguridad del Estado (Control Político) que, por razón
desconocida, fueron inscritos bajo nombres de oficiales y funcionarios bolivianos. Los norteamericanos no querían aparecer
reforzando públicamente el aparato policial del MNR. Henderson, en cuanto recibió la carta de Arze Murillo, se dirigió a
Arguedas advirtiéndole que no se debía volver a recordar cl asunto ni a molestar al ex-ministro porque éste había amenazado
con efectuar una denuncia pública. Desde entonces Arze Murillo pudo seguir viviendo tranquilo. (N. del A.)
hombre que jugó el primer papel en todo lo sucedido fue el coronel Julio
Sanjinés Goitia, hijo de los propietarios de Pillapi y estudiante de West Point.
En los primeros años de la revolución vivió fuera del país. Los obreros
armados de fusiles y ametralladoras constituían un espectáculo intolerable
para su sensibilidad de militar “pure sang”. Vuelto a Bolivia, encontró
colocación inmediata en un organismo norteamericano. Para sus modestas
funciones de ingeniero, tenía demasiada influencia, como que un técnico
norteamericano fije retirado del servicio porque tuvo dificultades con él. Un
amigo suyo cuenta que en las cordiales disputas que mantenía con él, solía
decir: ustedes los del Pentágono sostienen al presidente norteamericano
solamente porque se sirven de él. A veces impresionaba a sus íntimos
declarando: yo soy el hombre de confianza de los norteamericanos”. Su
mediano talento no le permitió proteger su porvenir político sacrificado a la
vanidad de hombre influyente. Sus primeros pasos fueron cautelosos. Salvaba
del hambre a sus camaradas de armas, les brindaba iniciativas y los
vinculaba. En reuniones íntimas y entre marchas alemanas se recordaba el
pasado con nostalgia. En 1964 proclamaba abiertamente que la solución era el
gobierno militar. Fue detenido pocos días antes del 4 de Noviembre con lo que
recibió su consagración política de valiente que enfrenta las hordas policiales.
Después del golpe, fue nombrado ministro de Economía y más tarde
embajador en Washington. Su paso por el ministerio dejó el recuerdo del
negociado de la harina. Cuando un periodista le preguntó por qué no llamó a
licitación para conceder el permiso para importarla, contestó con ingenuidad:
“porque no hubo tiempo.
líderes de mayor prestigio en los niveles obreros y populares del MNR. En los
años que siguieron, los conflictos sociales a los que dio lugar la política
ambigua del MNR en materia económica, motivada directa o indirectamente
por la intervención americana, colocaron a Lechín ante alternativas extremas.
Para mantener sus posibilidades presidenciales debía plegarse a la línea
norteamericana. Trató de hacerlo; hasta se impuso un viaje a Formosa. Pero a
Stephansky interesaba más lo que Lechín podía hacer ce las minas, que las
relaciones de aquél con Chiang Kai Shek. En la medida en que Lechín fuese
leal a los trabajadores era un obstáculo, y en esa misma medida las razones
para descartarlo de la sucesión presidencial se hicieron imperativas. 5e
quien, entre otras acusaciones, hizo víctima de cargos tan graves como los de
tráfico ilegal de estupefacientes. La lucha política estaba reducida al nivel
gangsteril norteamericano.
“El Diario” es un buen ejemplo de lo que pasaba con la prensa. Cuando el Dr.
Mario Holón Anaya se hizo cargo de su dirección, un día encontró junto al
cheque pagado por la empresa, otro por 500 dólares que procedía de la
Embajada Americana. Lo rechazó dando lugar a que Mario Carrasco
comentara que “por primera vez “El Diario” tenía un director honesto”. Además
de esta modesta asignación, por tratarse de la dirección del diario más
importante del país, la embajada paga 1.500 dólares mensuales a la empresa.
No se puede decir que a los norteamericanos les cueste mucho controlar la
opinión pública en Bolivia.
Miseria y propaganda.
El embajador Henderson, en una entrevista con dirigentes del MNR, pocos días
después del 4 de Noviembre, y cuando algunos ingenuos o cómplices acuñaron
la fórmula de “revolución dentro de la revolución”, se mostró descontento con
los militares porque no habían cumplido su promesa de dejar tranquilo a Paz
Estenssoro por “unos seis meses más”. Henderson nunca aceptó de buen gra-
do el derrocamiento de Paz Estenssoro, a quien definió ante una delegación de
parlamentarios bolivianos, invitados a visitar los Estados Unidos, como “el
corcho que impedía que se vertiera el contenido de la botella”. No es pues
inexplicable el desagrado de Henderson ante Noviembre. No era partidario de
la revolución ni tenía pacto alguno con Paz Estenssoro; simplemente el control
de la situación escapé de sus manos. Otra vez, como en la Argentina y el
Brasil, el Pentágono desplazaba al Departamento de Estado. En Bolivia ganó la
Los vínculos de éste con Barrientos eran antiguos. Veinte años antes, había
sido su instructor militar y lo que sucedió entre ellos en los años siguientes,
demuestra hasta dónde la camaradería con los hombres del Pentágono puede
servir a la acción política cuando ésta se la planea desde un servicio secreto.
tina de las actuaciones decisivas de Fox en la preparación del golpe militar, fue
impedir el exilio de Barrientos simulando un atentado criminal- Después de la
última convención del M.N.R., que no pudo resolver la designación de can-
didato vicepresidencial y cuando el país todo comprendía que marchaba
directamente a un golpe militar, por gestiones de Paz Estenssoro, Henderson
intervino para persuadir a Barrientos y a los miembros de la misión militar, de
que era prudente que éste se alejara del país temporalmente para evitar una
crisis que podía desembocar en la violencia más sangrienta. Barrientos se dejó
convencer. Paz Estenssoro todavía podía amenazar. Viajaría a Londres, todo
estaba listo, dinero, pasajes y valijas. Pero en la víspera, después de asistir a
una reunión social de militares, se produjo e1 misterioso atentado contra
Barrientos. Ningún médico boliviano tuvo oportunidad de verlo y en la madru-
gada partía a Panamá en un avión de la misión norteamericana, que estaba
listo desde la víspera en el aeropuerto de La Paz. Pocos días después, Ba-
rrientos recibía en su lecho del Hospital Militar de la Zona del Canal un cable
de Paz Estenssoro invitándolo a integrar su candidatura como vicepresidente.
El más experimentado dirigente del nacionalismo boliviano había sido vencido
por Fox.
Ben, como lo llamaban los ministros empleando ese tono familiar que tanto le
complacía, mostró la mano dura en el conflicto minero de 1963. La huelga
4
El otro americano resultó ser homosexual y causo escándalo cuando al ayudante del ministro le
propuso una aventura pon cincuenta dólares. La reunión terminó en un aquelarre cuando Martín,
ya borracho, desafió al ministro a beber un trago por tres suyos, luego retó a un funcionario
boliviano a tirar con pistola. Martín hizo algunos servicios a Ponce, a cambio de los cuales tuvo
acceso a los centros campesinos en los que distribuía cuadernos escolares en cuyas carátulas
aparecía en gran tamaño el símbolo de la “Alianza para el Progreso”. Estos eran los nuevos
métodos de la diplomacia directa de Ben Stephansky. (N. del A.)
empezó con un paro en el nivel 650 del Siglo XX. La Corporación Minera de
Bolivia tenía un plan para la reorganización de Catavi, que fue rechazado por
los dirigentes sindicales. La huelga se amplié y paralizó la actividad durante
tres meses. El duelo entre los dirigentes sindicales y la empresa daba la
oportunidad a Benn. Aquellos proclamaron con ingenuidad que estaban
dispuestos a llegar “hasta las últimas consecuencias”. Pensaban que se batían
bizarramente contra el oportunismo del gobierno de Paz Estenssoro, perdiendo
de vista que la verdadera batalla se producía silenciosamente entre éste y los
americanos. Ben se mantenía expectante y no perdía oportunidad para
demostrar al gobierno que frente a la anarquía sindical no tenía otro recurso
que emplear métodos drásticos. El gobierno vacilaba; se sentía aplastado por
dos presiones. Los dirigentes mineros habituados al viejo estilo de lucha, no
sabían o no querían saber que los norteamericanos tenían la cuerda puesta en
el cuello del gobierno: sin la reorganización de Catavi no concederían el dinero
que requería COMIBOL para proseguir sus operaciones. Catavi no era más que
un punto en una estrategia más ambiciosa. Lo que se buscaba era la
liquidación del sindicalismo minero, 1as negociaciones se suspendieron y los
dirigentes sindicales comprendieron tardíamente que no tenían otra
alternativa que buscar la retirada honorable. El último encuentro tuvo lugar
en el Ministerio de Minas a gestión personal del ministro, que a duras penas
convenció a COMIBOL para que enviara representantes. Los dirigentes obreros
alertados sobre la situación, se mostraron comprensivos. Aceptaron el
convenio formulando reservas sobre detalles poco significativos.
Dos horas después de la partida del Presidente Paz Estenssoro al exilio, los
militares hacían conocer su primer comunicado sorprendentemente
conciliador: “ni vencedores, ni vencidos”. Era la fórmula apaciguadora. “La
nacionalización de las minas —dijeron— evolucionará rápidamente hacia la
5
El día 6 de Noviembre el primer secretario de la Embajada Americana manifestó
confidencialmente a un alto funcionario de COMIBOL que la embajada había hecho conocer
“extraoficialmente” sus condiciones a la Junta para el reconocimiento entre ellas figuraba la
intervención en los sindicatos mineras. El funcionario boliviano comentó: “Hace más de un año
que el Dr. Paz Estenssoro estuvo luchando para hacerles comprender que no era posible emplear
la violencia. en las minas”. (N. del A.)
CAPITULO III
UNA CENA EN LA EMBAJADA
A los pocos días de esta entrevista, el senador Álvarez Pinta concurrió a una
recepción en la Embajada Británica y allí el Embajador Holliday le preguntó
qué opinaba de la propuesta inglesa El senador pidió detalles y quedó
La noche de la cena en Londres, Álvarez Plata no dijo qué había hecho con la
nota ni qué partido tomó en el asunto, pero sus revelaciones causaron,
sorpresa al Embajador Barran, quien, molesto, empezó exclamando: “Ahora
me doy cuenta por qué Cliffor Waite, (6) siendo amigo mío, me venía rehuyendo
últimamente”. El señor Barrau mencionó a su vez una curiosa experiencia que
con las revelaciones de Álvarez Plata quedaba explicada. Ocurrió que el señor
Holliday pasaba sus vacaciones en Londres y se encontró con el Embajador de
Bolivia en una recepción de Canning House. En cuanto lo distinguiera cruzó el
salón para saludarlo muy cordialmente. En ese momento acertó a pasar cerca
de ellos el Sr. Waite a quien Holliday llamándole le dio: “¿Ha dado usted la
buena nueva a nuestro Embajador?” Waite turhándose no supo qué
responder. Holliday haciéndose cargo de la situación cambió rápidamente de
conversación. EI Sr. Barran concluyó su relación con este comentario: ¿Qué
papel puedo hacer si me ocultan estas cosas? ¿Acaso no se tramitan aquí los
negocios más importantes del estaño?”
6
Prominente ejecutivo de Williams Harvey. (N. del E.)
Lo que ocurría era nuevo y los tiempos parecían haber cambiado para los
productores. El menudeo de buenas ofertas habría sido imposible si no
hubiera un déficit cada vez mayor en la producción mundial de estaño- Lo
esencial es que al mundo le faltaba estaño y había demasiadas fundiciones
que no sabían cómo obtenerlo. En fin, la suerte esta vez estaba del lado del
productor.
Los de Grace son terribles cuando se trata de negocios nuncios. Tienen dos
hábiles conductores, Meister y Speelvogel, este último especializado en
minería. Buen negociador, suave en el trato, emplea ha sugerencia indirecta y
repite -frecuentemente “aquí no hay gato encerrado”. Otro alto funcionario es
Carlos Alberto Echazú, tarijeño simpático, locuaz, que recuerda aún las
maneras que aprendió cuando era estudiante en La Plata. Ha estado presente
en los negocios más importantes de la minería nacionalizada como hombre de
confianza del gobierno. Fue uno de los negociadores que trató con Patiño el
pago de la indemnización. Como miembro de ha Comisión de Operaciones Mi-
neras participo en reuniones donde se trazó la línea de conducta frente ah
Consejo Internacional del Estado y ante has ventas de la reserva estratégica
norteamericana. A su vez como director de COMIBOL ha tenido opinión en
todas las negociaciones importantes para obtener créditos, aprobar los con-
venios de la llamada “operación triangular” (BID, USAID y alemanes) y adoptar
medidas técnicas y administrativas decisivas para la minería nacionalizada.
Un hecho que lo puso en dificultades fue el referente a la compra de dinamita
que realiza COMIBOL de marcas cuya representación comercial la tiene
“Grace”. Con o sin fundamento se dijo que Echazú podía influir en la elección.
Pero si éste era un extremo de susceptibilidad, lo que en efecto parecía ser, el
conflicto para el Sr. Echazú no desaparecía, así quedara formulado solamente
en el campo de ha hipótesis. El Sr. Echazú, un capitán de la industria privada
desempeñaba funciones al servicio de la minería nacionalizada y los conflictos
eran inevitables. En el caso de la dinamita, si el directivo de “Grace” salía
ganando perjudicaba los intereses representados por el director estatal, y a la
inversa.
Se ignora cuál debió ser la condición impuesta por “Grace” para ayudar a Wa-
Chang, pero no debió ser pequeña ya que en cuanto a proporciones Wa-Chang
no sería más que una pieza en la maquinaria de “Grace”.
significación al arrojar luz por primera vez sobre la política minera oficial y los
factotums que la inspiraban. La idea de formar sociedad con Wa-Chang sobre
hierres que se hallaban en los Estados Unidos, fue considerada simplemente
absurda. Esta fue la respuesta que se dio a la proposición del consorcio
norteamericano de formar una sociedad mixta con el Estado Boliviano sobre la
planta de Texas City. El argumento de “hay que quebrar el monopolio
británico” no impresionó a nadie. En el fondo había una situación psicológica
muy interesante- En electo, todo el mundo convenía en que había monopolio
británico. Que detrás de Williams Harvey estaba Patino que seria nuevamente
favorecido si se rechazaba a los americanos. Que la nacionalización de las
minas hasta entonces no había hecho más que trabajar pura Patiño y que ya
era tiempo de pensar en fundiciones propias. Todo esto se admitía, pero a
pesar de todo eran preferibles los ingleses a los americanos. Por esto la
operación Wa-Chang para ser definitivamente apreciada, tendría que ser vista
no solamente como un negocio minero porque, fuera de las relaciones con
Williams Harvey, no había ninguna otra de regular importancia que se hubiera
librado de caer bajo control norteamericano. El estaño era lo último que
quedaba al margen de esa órbita.
El Senador Álvarez Plata sostuvo en esos días una entrevista con el Presidente
de la República. Mientras conversaba con él pasaron al Presidente una
comunicación telefónica del Ministro de Minas. El Dr. Paz Estenssoro cuenta
el Senador Álvarez Plata— instruyó a su ministro que no debía firmar el
Varios hechos producidos en eh gobierno del Dr. Paz Estenssoro no tienen una
explicación clara —dada la Oposición del propio Presidente y muchas veces de
sus colaboradores a aceptar determinadas sugestiones— sino se torna en
cuenta las presiones continuas ejercidas por los norteamericanos. Algunas de
ellas degeneraron casi en batallas como se verá cuando se mencione la
experiencia del Banco Minero y el crédito norteamericano.
7
La creación del Banco Minero determinó la supresión de los comercializadores privados
(Hochschild, Tenant, etc.) que rescataban la materia prima de los productores chicos a los que
explotaban de diversas formas. (N. del E.)
nacional. Uno de los puntos en el que se peleó más duramente, fue el interés
del 12 por ciento que según los americanos debía ser cobrado a los mineros
que se beneficiaran con los créditos. Este criterio fue rechazado de plano
porque la tasa interés no podía ser elevada en el cien por ciento de un día para
otro. A los expertos americanos se les demostró que ninguna institución de
fomento minero en el mundo, cobraba el 12 por ciento. En el Perú, por
ejemplo, se mantenía la tasa del 6 por ciento y en Bolivia, los productores
medianos que podían acudir a los fondos de la Corporación Boliviana de
Fomento recibían créditos al 9 por ciento. Entonces, por qué sacrificar a los
pequeños con intereses tan altos?
Pero es importante hacer notar que los asesores americanos procedieron como
conspiradores para lograr sus propósitos. Apoyados por abogados bolivianos y
periodistas sobornados, realizaron campañas de desprestigio contra el Banco.
Incitaron al embajador norteamericano para que presionara en la Presidencia
de la República buscando la forma (le desplazar a las autoridades de la
institución. Se hicieron correr rumores referentes a la inoperabilidad del
presidente y directores y al supuesto sabotaje de éstos contra el crédito
americano- La primera victoria que lograron fue el retiro del Sr. Haus de la
presidencia de la institución. Luego, con el 4 de noviembre alcanzaron sus
demás objetivos.
CAPITULO IV
LOS CEMENTERIOS MINEROS
8
(1) En las minas grandes el trabajo se realiza en tres turnos (“puntas”). El “veintiecuatreo”
es la jornada de veinticuatro horas que tiene lugar en el interior de la mina, suelen cumplirla
campamento está simplemente ahí, perdido en algún rincón; fuera de él, la so-
ledad; dentro, la pobreza. En esta eternidad sórdida sus habitantes recuerdan
a los penados de la aldea zarista porque se los siente igualmente segregados y
pesando una condena sobre sus vidas. Es el exilio minero.
Esta vida no puede resistir mucho tiempo. Los obreros de 38 años ya son
viejos. Por cada año de trabajo en minas profundas, calurosas, mal ventiladas,
envejecen tres. Las partículas de sílice producidas por los taladros al perforar
la roca, quedan adheridas en los pulmones endureciéndolos gradualmente
hasta producir la muerte lúcida y lentamente. Ha concluido la “punta”:
enjutos, la tez mortecina, los ojos inflamados, dominados por una enorme
fatiga, retornan del socavón los que han tomado su dosis diaria de
aniquilamiento. La enfermedad para la cual no hay cura ni drogas se la oculta
hasta donde es posible, pero los ojos ardientes, la piel pegada como cuero seco
en los pómulos y la fatiga constante, no pueden esconderse mucho tiempo. El
y sus camaradas saben lo que pasa; las mujeres también: cuando aparecen los
primeros síntomas —vómitos de sangre— callan. No hay gestos desesperados.
Ellas comprenden y se resignan. Cuando van a la chichería, dicen
afectuosamente al marido, eliminando el acento del verbo: “tomate nomás”. Y
beben olvidando. De todos modos no podrían hacer mucho adoptando normas
de sobriedad, esto es si la miseria fuese compatible con esta virtud para ricos.
El alcohol es la mas inocente de las evasiones y la única de sus fugas (9).
generalmente los contratistas, obreros a destajo que a su vez contratan otros trabajadores. El
“maquipura”, obrero temporatio, es un paria: no se le reconoce ningún derecho y es
descendiente directo de los mitayos y los mingados de la colonia. Actualmente, en las minas
nacionalizadas, hay algunos miles de maquipuras. (N. del A.)
9
“Existen aproximadamente siete mil mineros silicosos con diferentes grados de evolución de
la enfermedad y que actualmente trabajan en la Corporación Minera de Bolivia y empresas
privadas. Muchos de ellos mueren antes de iniciarse el trámite de indemnización o renta ante la
Ha terminado una breve e intensa existencia. Podría ser una absurda aventura
si en el momento del parpadeo final el recuerdo de los que van a quedar sin
protección no penetrase punzante en esa conciencia desfalleciente. Aquí está
la realidad: no es el fin de una aventura solitaria. El hombre no se marcha
solo, su ser queda desgarrado porque parte de él quedará con los suyos a los
que no podrá rescatar de un destino del que él se siente culpable.
sed de oro” de la que habla Virgilio; extraños a su propio destino han sido
clavados allí por el mecanismo de la economía mundial. Austeros, más
indiferentes que resignados, protegen sus esperanzas con cierta postura
escéptica. Ni tristeza ni amargura. Frecuentemente sus tensiones interiores
encuentran alivio en la chichería donde se los puede ver alegres y
pendencieros. En ellos no es evidente que “todo el valor que un oprimido
puede tener a sus propios ojos, lo comprende en el odio que tiene para otros
hombres: Y la amistad a sus compañeros pasa por el odio que siente por sus
enemigos” (10). Son de la estirpe de los que no viven la venganza sino la vida y
para el rencor no han tenido tiempo. El mayor número de mineros está
formado todavía por muchachos tímidos que hasta no hace mucho labraban la
tierra; la mina los tentó con el salario y la pulpería (11). En la política son
seducidos por las causas apasionadas, pues contra todo lo que se piense,
siguen creyendo en la política. Si ellos pudieran resistir algunos meses
cortarían el flujo de los minerales y aplastarían con el desastre económico la
parte parasitaria de la sociedad boliviana. Pero no pueden hacerlo: sus víveres
dependen de las ciudades y es fácil rendirlos por el hambre. No obstante todo,
su escepticismo es liviano para sofocar un corazón ardiente. En ellos el amor,
la amistad, la lealtad, son ásperos y fuertes- Hay mujeres que han sido tres
veces viudas, A la mujer de un camarada muerto se la busca y se le pide que
cuide de uno. Son vidas y sentimientos depurados. No hay gestos ampulosos;
la moral, despojada de lo innecesario, es escueta y firme una oscura ansiedad
de justicia, un inconsciente saberse superiores, los predispone a solidarizarse
con la aventura humana.
10
Carta de Jean Paul Sartre a Albert Camus
11
Monopolio de víveres y otros artículos, controlado por la Empresa minera que los vende a los obrero (N. del E.)
No hay familia minera que no tenga alguien por quien llorar. Los hombres
están habituados a la idea de su fin prematuro, pero no renuncian a su
condición, la aceptan llanamente y cuando protestan lo hacen por el salario o
contra los excesos de la empresa. Entiéndase bien: han abandonado el móvil
mayor de la rebelión decidiendo quedarse mineros. ¿Quién se atrevería a
pedirles más? Sus reivindicaciones no invocan la civilización. Y bien podrían
hacerlo en un tiempo de grandes palabras como “derechos humanos” o
“defensa de la dignidad del hombre”. Un pudor velado les impide establecer
parangones o referirse a su miseria sentimentalmente. Prefieren la arrogancia:
es la mejor manera de señalar la miseria al extraño que aún se atreve a
proclamar derechos humanos en un país que se esfuerza por suprimir al
hombre. Su futuro ha sido delegado en los hijos a quienes no quisieran ver
convertidos en mineros. Esta es la expresión más íntima de su rebelión. La
austeridad de sus demandas es la medida de su exilio; la defensa de sus
derechos, el movimiento primario para salvar a los suyos del hambre. Por lo
menos eso, puesto que contra la áspera existencia minera, contra el
hacinamiento y la suciedad de los campamentos, contra la enfermedad y la
muerte, no hay defensa posible.
La vaga idea que el mundo tiene de Bolivia se la debe al estaño y sus hombres.
La división internacional del trabajo y un orden económico que es reflejo de la
incoherencia contemporánea, han impuesto sobre aquellos una doble
tributación: el fruto de su trabajo se aprovechará más en Nueva York y
Londres que en la solitaria montaña donde se realiza, y lo poco que deje el
despojo servirá para alimentar la parte parasitaria de un país que no tiene otra
existencia que la del estaño.
12
Terrenos ricos en salitre. Vocablo que se usa en Chile, Bolivia y Perú. (N. del E.)
Los hombres en las minas mueren por hambre y abandono como en tiempos
de la peste o la guerra, ¿quién, que sea extraño a ellos, podría hablar en estas
13
Trabajo forzoso a que estaban obligados los indios en las minas durante la dominación
española. (N. del E,)
CAPITULO V
ALTCAR, BOOTLE, LIVERPOOL
Los concentrados desde el momento en que han sido puestos en sacos, están
listos para iniciar el viaje por el segundo cielo del estaño. Si en la mina reina el
ajetreo, el estampido de los “tiros” de dinamita, el fragor de las plantas
concentrado ras, estrepitosas y vibrantes, el polvo, el frío y el calor, con la
fundición se inicia una serie de movimientos que no carecen de cierta
parsimonia-Hasta el lenguaje ha sufrido una sutil transformación: del minera!
ya no se dice “barrilla”, ni “concentrados”, ni “estaño” a secas, se le llama “ma-
terial” que debe ser tratado, retratado, lixiviado, limpiado, tostado- Los obreros
y técnicos que operan las fundiciones, poco numerosos en comparación con
los mineros (cuatrocientos obreros de Williams Harvey dan cuenta del trabajo
1911 es el año clave para la minería boliviana- Ese año una fundición inglesa
hizo variar el destino de un mineral y el de un pueblo. Los que acordaron el
Conocimos Williams Harvey a fines del año 1963 (14). El encuentro con sus
directivos se inicio en una pequeña y vetusta oficina, cosa por lo demás
normal en un país como Inglaterra en el que las apariencias no interesan.
Pasadas las presentaciones y las frases impuestas por la cortesía, nuestros
anfitriones nos brindaron una explicación informativa sobre la planta. Luego
iniciamos el recorrido por las instalaciones. Ingresamos en la sección donde se
encuentran los seis hornos con los que se cubre una capacidad de 50 mil
toneladas anuales. Vimos el trabajo y la forma del vaciado del reluciente metal
en las lingoteras. Allí nos dijeron que el estaño boliviano para un mejor rendi-
miento tenía que ser mezclado con el nigeriano o malayo. No era siempre fácil
seguir la explicación por las referencias técnicas pero teníamos la impresión de
estar presenciando una tarea sin duda muy complicada.
Cuando uno visita una fundición se sorprende por lo que supone suciedad y
desorden debidos al descuido; hay escorias en el piso y otros deshechos que
caen de los hornos. Es una impresión falsa porque nada está fuera de lugar y
hasta lo que parece basura forma parte de un trabajo escrupulosamente
realizado. En Williams Harvey esa impresión de desaliño es mayor porque los
hornos, los equipos, paredes, tuberías y cuanto hay está recubierto por una
pátina negrusca y por oxidaciones producidas por el tiempo.
14
Invitado a visitar Inglaterra por el gobierno de dicho país en una delegación integrada también por dirigentes
sindicales, el autor del presente libro conoció la fundición Williams Harvey. (N. del E.)
15
Henry Harris, ingeniero metalurgista del más alto nivel en la fundición Willams Harvey. Actualmente se
encuentra cmi Bolivia ocupando la dirección del Instituto Minero Metalúrgico en Oruro, por designación conjunta
de Naciones Unidas y el gobierno nacional. A él se le ha confiado la investigación do los procesos de volatilización
y fundición. (Ñ. del E.)
mucha más autonomía que el propio Estado boliviano dueño del estaño desde
1952.
Los británicos deben elevar el rendimiento por hombre de modo que los
artículos producidos en la Isla no sean excluidos de los mercados. Inglaterra
dispuesta a no perder la batalla, de seguro que saldrá victoriosa. Tiene dinero,
experiencia y una admirable disposición de ánimo para las empresas difíciles.
Si es conservadora y lenta en ciertas transformaciones, desconfiada con todo
lo que no ha experimentado en largo tiempo, procede con audacia en lo
tocante a su desarrollo económico.
Pero cuando se visita Williams Harvey, surgen las dudas; parece uno
retroceder al siglo pasado- La planta sin duda no es técnicamente anticuada,
pero es cuestión de apariencia. Hay en ella algo victoriano. Quien visite
“Steward” encontrará diferencias deprimente5~ no solamente en tamaño, como
es lógico, sino en el aspecto. Hay talleres en los que podrían instalarse dos
campos de fútbol y todo posee un tamaño y una sonoridad impresionantes. Es
la viva imagen del presente con su fragor y fuerza. Un funcionario de Foreign
Office ya nos había advertido contra las sorpresas desagradables que podrían
resultar de una visita a Williams Harvey. Lo que no pudimos evitar fue caer en
el absurdo de comparar el acero con el estaño. Williams Harvey con sus
50.000 toneladas de capacidad anual, es una de las fundiciones más grandes
del mundo y con esa apariencia un tanto de cacharro, opera un mineral
infinitamente más valioso que el hierro y el carbón con procesos metalúrgicos
frente a los cuales los del acero son juego de niños.
fundía sus minerales mientras que todos los demás lo hacían. Nigeria, por
ejemplo, no hacía más de un año que habla puesto en operación una planta
construida precisamente por técnicos de Williams Harvey. En cambio la
actitud hacia Bolivia, expresamos nos parecía poco realista, tanto más cuanto
no se podía perder de vista que el “peso específico” de los intereses extranjeros
en Bolivia era norteamericano, lo que hacia suponer que las 5 mil toneladas
destinad-as a Wa-Chang serían, eventualmente, sólo la primera cuota de otras
que podían ir ampliándose hasta dejar a los británicos sin estaño boliviano.
¿Por qué los británicos no se adelantaban proponiendo una fórmula que per-
mita establecer la fundición en Bolivia y encontrar un punto de contacto entre
los intereses bolivianos y británicos?
La sugestión no fue absuelta, lo sería pocos días más tarde, en otro nivel. Los
directivos de Williams Harvey, así lo comprendimos, no tenían facultades para
tratar determinados asuntos; la propia estrechez de sus puntos de vista
revelaban la limitación.
Unos días después establecimos relación con el señor Chiffor Waite, director
de Williams Harvey, de Consohidated Tin Smehters y de otras compañías
dedicadas al estaño. Viendo en la calle ah señor Waite podría uno elegirlo
entre centenares como representativo de los altos negocios británicos. Su
cabellera blanca, su ropa oscura, la expresión un tanto severa de su rostro, la
mirada penetrante le confieren tanta dignidad domo la que debe poseer un
representante de Su Majestad un tanto entrado en años o un hombre de
negocios que se desempeña en la cumbre de las finanzas británicas.
los agentes de Wa-Chang logró resultados favorables sin que, empero, pudiera
evitar que los norteamericanos se llevaran una parte del botín. Su nombre,
como el de media docena de británicos más, representa el negocio del estaño y
en este caso, el de Patiño. Eh señor Waite está ubicado en el centro de muchas
combinaciones, acuerdos, círculos de ese abigarrado conjunto como se ofrecen
a ha vista del observador los intereses del estaño. Para él y sus colegas los
negocios son mucho más sencillos. Todo está racionalmente ordenado, en ha
industria no se permiten intrusos, pues dígase lo que se diga el estaño es un
solo negocio mundial ah que los norteamericanos llaman con despecho “british
bussines”.
CAPITULO VI
LOS DISTINTIVOS DEL OCUPANTE
Los norteamericanos utilizaron a los militares sin que por ello hubieran
resuelto el problema del poder. Tuvieron que recurrir a ha masacre. Una vez,
dos, tres veces. En mayo se los ve intervenir claramente; en San Juan no
participan: el gobierno de Barrientos es el único responsable. El ejército
nacional va asimilándose así al papel de la legión romana, sin ha dignidad del
patriciado ni la ambición del imperio. ¡Y hasta toma los distintivos del
ocupante! Eh uniforme de boina verde que Barrientos vistió en mayo es más
elocuente que ha presencia de Henderson en el palacio. Este general -de
aviación que como se dijera alguna vez de Kao Ky ha confundido el país con
un aeródromo, presenta el punto más bajo en la historia del ejército. Curioso
vientre el de esta institución que en media -centuria sólo ha concebido un
Busch y un Villarroel, mientras estremece en fecundidad con los Peñaranda y
los Ovidio Quiroga. Hay pecados que desde el fondo de la historia siguen
condenando. El golpe de estado contra Salamanca, en plena guerra
internacional y cuando visitaba a los militares en el frente, impresiona por ese
feroz desprecio contra un país y sus instituciones. Busch y Villarroel murieron
abandonados por sus camaradas. La rosca colgó eh cuerpo de Villarroel en un
poste de alumbrado, pero sus camaradas de armas no hicieron nada para
impedirlo. Estaban en sus cuarteles salvando su institución. Pero el 9 de abril,
salieron de ellos y encontraron al pueblo en las calles:
¿Estaban también salvando su institución? Si se puede sostener que ni la idea
más grande merece el sacrificio de una vida, no hay institución que merezca
sobrevivir ah precio de envilecer a un pueblo.
¿Por qué fracasó? Los hechos están a la vista. No hay nada en el país que no
esté en descomposición y crisis. Mírese en cualquier dirección y se encontrará
que en las condiciones actuales, ningún problema boliviano puede resolverse-
16
Irpavi, zona de la ciudad de La Paz, donde se encuentra ubicado el Colegio Militar (N. Del E.)
CAPITULO VII
“EL SISTEMA DE MAYO”
El negocio es más que bueno. Pasó la alarma causada por los norteamericanos
cuando anunciaron que venderían su reserva para detener el alza de precios.
La presión del consumo es grande, el precio se mantendrá por mucho tiempo
bordeando los Sus. 1.50 la libra con tendencia a subir. Explotando estaño
siempre se gana mucho dinero, pero este es uno de los mejores momentos.
(Años 1965 y 66 N. del E.)
17
De este partido —Partido Social Demócrata — dijo un dirigente despectivamente que era un “taxi-partido”
porque todos sus integrantes cabían en un taxi. A pesar de su pequeñez tienen influencia. Alienta, la secreta
En Turqui ocurrió algo parecido. Este distrito ubicado en la provincia Fijas del
departamento de Potosí, es rico en estaño y bismuto. El bismuto tiene una
magnifica cotización y los yacimientos descubiertos de ley alta)
esperanza de encontrarse un día convertido en legatarios del poder de la vieja “rosca” minera, pero es la aspiración
del sirviente leal que imita los gestos del amo desaparecido. En este sentido el destino de los PSD está disminuido.
En un tiempo casi todo ellos eran gerentes y abogados cesantes. Ya han logrado colocarse. Sus empleadores ac-
tuales, yanquis, o empresas mineras recién llegadas, no tienen la apostura ni la magnificencia del viejo acre, su
tosquedad y tacañería hiere la sensibilidad del PSR.
René Ballivián Calderón, hombre de confianza de Aramayo, es Gerente del Banco Industrial y Asesor Económico
de la Presidencia de la República (cl Banco Industrial ha sido organizado con dinero norteamericano); Rolando
Kempf Mercado, socio de Jorge Lavadenz, está vinculado a negocios petroleros privados y en particular a Gulf.
Roberto Arce, funcionario de Naciones Unidas en Nueva York, no deja de tener contactos con varios negocios
mineros en Bolivia. y ha utilizado su influencia en Naciones Unidas en servicio de ellos. Luis Soux es
abogado asesor del grupo de expertos en minería de USAID/B; ha intervenido prácticamente
en todo; levantamiento de la reserva fiscal de Lípez y Turquí, dictación de nuevo Código de
Minería, adopción de la nueva escala de regalías, negociación del crédito norteamericano al
Banco Minero de Bolivia, etc. Mario Estensoro, el delicado artista del Partido Social Demócrata
también se cobija en el Banco Industrial y cumple recados de Aramayo y Patiño. El bufete de
Luis Adolfo Siles, actual Vicepresidente de la República, atendía asuntos de las empresas
petroleras (N. Del A.).
18
Comunicado del Ministerio dc Minas, 22 de enero dc 1966.
“Matilde” era una de las mas estimables posesiones del grupo H0chschild el
minero sentía crecer su orgullo al saberse dueño de un yacimiento realmente
importante. Invirtió dos millones de dólares en trabajos de exploración y
desarrollo. Cuando el yacimiento paso a la Corporación) Minera de Bolivia se
pensó en explotarlo por gestión directa, pero las dificultades con las grandes
minas de estaño, la falta de dinero y las dudas sobre la propia capacidad
La suspicacia con que la opinión pública vio esta operación, obligó al gobierno
a revisar las bases del llamamiento. Se anunció oficialmente que para definir
la cuestión se efectuarían consultas. El Cnl. Lechín, recordando seguramente
su infortunada actuación en el contrato de “colas” y desmontes, prefirió la
prudencia. Declaró a la prensa que las negociaciones con las firmas
interesadas se desenvolvieron en un “alto nivel moral” y recalcó haber pedido
la intervención de los “ingenieros mineros y grupos selectos y representativos
del país, para que los debates en nivel de gobierno sean democráticos y la
adjudicación justa” (Presencia, 20-V-66). Lo raro es que el cuidadoso coronel
hubiese olvidado invitar precisamente a los ingenieros bolivianos de la
Corporación Minera de Bolivia a dos de los cuales destituyó días después “por
indisciplina”, como dijo él mismo, sintiéndose sin duda todavía comandante de
la Quinta División, porque observaron que las gerencias de la empresa estaban
cubiertas por personal extranjero incompetente. Aquellos dejaron constancia
de eximirse de toda responsabilidad en la adjudicación de “Matilde” por no
haber sido consultados.
19
La refinería de zinc tiene las siguientes etapas: concentración, testación, lixiviación,
electrósis; el punto final es el zinc electrolítico que tiene alto precio dos o tres veces mayor que
el minera1 fino. En cl mundo operan varias fundiciones de zinc para el tratamiento de cantidades
pequeñas. Las grandes plantas son de refinación del tipo de la que está construyendo el Perú en
Cerro de Paseo para complejos de zinc- En la refinería no se emplea carbón como reductor ni
petróleo como combustible. El consumo de energía eléctrica es alto. (N. del A.)
20
Este razonamiento es relativo dada la tosquedad política de Aramayo. Lo que se sabe es que
la entrevista de un alto personero de gobierno con Aramayo en Paris, no fue del todo
satisfactoria. El referido representante le anuncio que la devolución de Chajrahuasi era un gesto
que el minero debía interpretar como expresión de buena voluntad de parte dcl gobierno
Aramayo respondió como en sus mejores tiempos: estoy dispuesto a apoyar al gobierno si mc
devuelven las minas. No es esta la respuesta textual pero el sentido que el magnate quiso dar a
sus palabras es precisamente ése. (N. del A.)
El grupo Patiño que con mucho signe siendo el más poderoso, tiene
reivindicaciones pendientes. La actual situación le satisface. —Lechín firmó un
nuevo convenio por cuatro años con Williams Harvey- sin que por ello se
sienta demasiado tranquilo puesto que la amenaza subsistirá mientras (ENAE)
continúe ampliando sus operaciones. El crecimiento inevitable de la fundición
nacional será la piel de zapa para los suministros de Williams Harvey.
Los tres grandes mineros, otrora celosos de la competencia, hoy con el rostro
agrio, alientan la expansión de intereses privados con los que forman un frente
interno que ya es lo suficientemente poderoso como para barrer todo vestigio
nacionalista- No ignoran que con la liquidación de la gran minería en 1952, se
produjo un vacío de poder porque el lugar del sector desplazado no pudo ser
cubierto por una clase dirigente con firmes asideros económicos y encarrilada
en una perspectiva propia. Los gobiernos del Movimiento Nacionalista
Revolucionario constituyen la tentativa nacional más seria para la
organización de un poder popular por el activo rol de renovación social y
21
Gerardo fue un problema para su padre. En una oportunidad, cuando era jovenzuelo, Hochschild lo hizo venir
desde Holanda para castigarlo en Machacamarca donde lo tuvo durante un mes corno obrero de planta. Dio órdenes
estrictas para que no se le hiciera ninguna preferencia. Gerardo, hijo de un primer matrimonio, se volvió rencoroso;
más tarde empezó a vengarse del viejo, impidiendo que viera a los nietos por los que sentía cario. Hochschild,
ordinario, sucio, distraído y ególatra, según personas que lo conocieron, era un sentimental a su minería. Murió en
un hotel de Paris cuando desayunaba ci’ cama y leía los periódicos; le falló el corazón: el día anterior había recibido
la notificación judicial por la que Gerardo demandaba el pago de tres millones de dólares (N. del A.)
22
Jorge Lavadenz es titular dcl grupo COPER que representa a PARKER Drilliug (equipo petrolero), GULF y
SAMINCORP (Hochscliild). Su historia tiene su lado penoso. Su nombre recuerda la creación de YFPB y la
expulsión de la Standard Oil, pero el prefiere no hablar del pasado desde que se convirtió en gestor de intereses
petroleros privados. Es cuestión de escrúpulos. Su fortuna actual contradice su pasado honorable. Le sucede lo que
a ciertos hombres: no puede enorgullecerse por lo que fue ni sentir satisfacción por lo que es (N. del A.)
en Bolivia. Entre estos y la minería del pasado hay una diferencia: la gran
minería era formalmente menos extranjera que el nuevo poder.
Por otra parte, fuera del ámbito oficial de la Embajada, integrando lo más
escogido de los dispositivos de fuerza, están Grace, Philips Brothers, Tennant,
Gulf y otros cien por cien americanos que además de reforzar el poder
extranjero desde su campo específico, definen con su presencia el carácter de
la estrategia de conquista: la subordinación de la minería boliviana a la
expansión norteamericana.
23
En cambio la vinculación entre los americanos y el círculo doméstico que los rolen es visible. El personal
boliviano contratado en las oficinas norteamericanas es generalmente recomendado por influyentes del círculo
doméstico. De modo semejante, en las designaciones oficiales observadas por los norteamericanos después de
Noviembre, también puede hallarse la sugestión oportuna de esos amigos y confidentes que se muestran más
vigilantes que el mismo servicio americano de información. Las promociones de cierta importancia en organismos
mineros y financieros en los don últimos años han recaído especialmente en gente de la derecha católica y dcl
Partido Social Demócrata. (N. del A.)
Hace diez años se prepararon los primeros proyectos para un nuevo Código de
Minería; el que se adoptó finalmente fue elaborado en el Ministerio de Minas
por técnicos y juristas bolivianos. Era un buen proyecto, pero no complacía a
USAID. Firfer intentó descartarlo esto son suficientes has garantías a la
inversión privada”. La mesa de conferencias del Ministerio de Minas se
transformó en el campo de la contienda. La discusión sobre determinados
aspectos fue sumamente lúcida demarcando las diferencias fundamentales.
Noviembre y ha aparición de Roberto Arce, reforzando la línea extranjera
impusieron la deformación del proyecto original.
Sobre las áreas de reserva fiscal contra las que USAID se empeñó a fondo, se
adoptó un criterio estrictamente liberal: se las establecería únicamente cuando
resulte técnicamente inobjetable que en la zona sólo pueden trabajar empresas
de gran capacidad económica” como si la seguridad del Estado, la protección
de los recursos o la programación nacional del desarrollo no contaran para
nada.
Del reconocimiento aéreo los mineros pequeños dijeron que debía ser
“competencia privativa del Estado” mientras que los medianos y CMB preferían
el concurso de compañías privadas especializadas.
El artículo 201. del proyecto original del Ministerio de Minas, decía: “Los
productores mineros podrán comercializar libremente sus minerales dentro y
fuera del país, vendiéndolos al comprador de su preferencia, exceptuándose
los mineros pequeños que comercializaran sus minerales a través del Banco
Minero de Bolivia”
El refrán dice que el apetito viene comiendo. Los intereses extranjeros tuvieron
su hors d’ oevre en el Código de ha Minería y el primer plato fuerte con la libre
comercialización. Siguieron bocados mejores, la nueva escala de regalías fue
uno de ellos- Pero son insaciables. En 1964 se bajaron las regalías, pero
porque dos o tres empresas ——entre ellas tenía que estar desde luego
“Fabulosa”— no estaban satisfechas, se procedió a una nueva rebaja- El
manipuleo en la escala de regalías beneficia exclusivamente a los medianos
que como disponen de plantas e instalaciones de concentración pueden fijar
ha ley de sus concentrados en e1 punto que más les convenga. Es un juego in-
teresante, pero insuficiente para la voracidad que traen: quieren concluir el
banquete con la supresión del “global complementario”.
En los últimos veinte años la cotización del estaño no ha sido más alta que la
actual. Eh escamoteo en las contribuciones fiscales determinará que has
utilidades derivadas de los altos precios vayan a caer en la bolsa de los
especuladores. Estos parásitos incrustados en los tejidos del organismo
nacional fagocitándose a los productores y ah Estado, debilitarán a ambos
anulando la oportunidad de compensar parcialmente e1 agotamiento de ha
minería boliviana.
finas. Los mineros más hábiles saben lo que valen las “colas” y desmontes.
Hay un potosino, el señor Canaviri, cuya fortuna le permite pasar sus
vacaciones en Europa y EE.UU. Descubrió que podría tener éxito explotando
los desmontes del Cerro Rico en un pequeño ingenio instalado en su casa.
En los últimos años el interés de los técnicos fue creciendo respecto del
aprovechamiento de esta reserva. CMB investigó en sus laboratorios de Oruro.
El Ing. Goosen Broersma informó en 1961: “Existen tremendas reservas de
estaño de baja ley en los desmontes y relaves”. La fundición nacional de
estaño, el agotamiento de las minas en actual explotación, la caída de las
“leyes de cabeza”, son razones imperativas para iniciar la explotación de esa
reserva que ya está libre de los costos de extracción que constituyen el
capítulo más oneroso en las minas nacionalizadas.
La historia de las “colas” merece figurar junto a los negocios más absurdos de
la historia boliviana. Su irónico desenlace está dado por dos hechos. CMB
como si deseara premiar la habilidad de los timadores, proyecta comprar la
patente de IMPC que nunca se sabrá si es de IMPC o es la que salió de los
laboratorios de Oruro. En el trámite de la personería jurídica, que como otros
negocios estuvo a cargo del abogado Luis Soux, ha compañía declaró que tenía
un capital de cinco mil dólares. ¡He aquí un ejemplo de lo que debe entenderse
por cooperación de la inversión extranjera al progreso nacional!
Uno no sabe si salir por los fueros del buen sentido o echarse a reír por la
ingeniosa bellaquería de los que gravemente se llaman a si mismos “hombres
de Estado”. Estos “estadistas” cuyas olfateantes narices recuerdan la
rapacidad de los jeques árabes, pusieron un hito más en la incoherencia
nacional, pero como se conducen con la arrogancia del jefe guerrero para el
que no cuenta la opinión de su tribu, dejaron una segunda constancia de su
abrumador poder con ha entrega de “Matilde”.
Historia de “Matilde”.
El gobierno para justificar la entrega insistió una y otra vez en que la reserva
de “Matilde” sólo representaba el 1,5 % de la reserva mundial (“No es tan
grande como se pensaba”, comentó Barrientos complacido en una conferencia
de prensa como si se pudiera calcular esa relación). Era más fácil decir que ha
ley de los yacimientos de zinc en los Estados Unidos es apenas de 1 y 1/2 por
ciento mientras que “Matilde” tiene 18 por ciento, que la United State Steel
está buscando desesperadamente zinc, que el “World Minning” ya en 1963
pronosticaba un fuerte incremento en el consumo de zinc. Si “Matilde” fuera
realmente una mina de segundo orden los intereses extranjeros no habrían
librado por ella una batalla durante tres años ni el gobierno pulverizando su
prestigio político, se hubiera visto obligado a declarar dramáticamente “‘romo
bajo mi responsabilidad personal la aprobación de este contrato....” (Gral.
Barrientos, conferencia de prensa, sábado 4 de Febrero de 1967).
El zinc y el plomo tienen cotización “débil”, pero los precios siendo bajos son
estables. Alcanzaron su punto más alto con 16 centavos de dólar la libra
durante la guerra de Corea- El 22 de Septiembre de 1965, cumpliendo la
preparación de la entrega, el gobierno decretó que el zinc no pagaría regalías
mientras la cotización no sea mayor a los 16 centavos, de donde resulta que de
momento el único hecho real es que los yacimientos de zinc serán vaciados sin
ningún provecho para el Estado.
también lo es del zinc. Pero con este último hay una tragedia. Sin la refinería
es casi un mineral marginal porque de cada cien dólares que recibe e1
productor, cerca de 65 se van en la maquina. Es pues muy probable que de los
14 o 15 millones de dólares que exportará anualmente “Matilde” más de la
mitad se pierda en gastos de fundición, mermas, castigos y otras deducciones.
En Bolivia hay yacimientos más ricos con leyes del 45 al 56 por ciento y aún
no se puede afirmar que se hubiera desarrollado la minería del zinc. La
barrera insuperable está en la refinería; sin ella no se aprovechará el potencial
de varios yacimientos ni los formidables costos de la maquila podrán ser
retenidos en el país.
El contrato actual es malo no tanto por sus términos como por tender a
reforzar la base colonial de la minería. El Estado no obtendrá utilidad alguna y
e1 resultado será e1 de Venezuela cuando cedió la explotación de Cerro Bolívar
a un consorcio norteamericano del hierro: la tributación era tan baja que no
alcanzaba a pagar al personal del Departamento de Minas del Gobierno.
La opinión pública clamó por todos los medios para impedir ha entrega del
zinc. El gobierno se defendió reiterando que no retrocedería en la condición de
la refinería, pero de las “consultas de alto nivel” efectuadas por el Presidente
de la Corporación Minera de Bolivia en las que en lugar de hacer participar a
los ingenieros de la entidad se escuchó a los representantes de la minería me-
diana, resultó el parto de los montes: la compañía se “obliga” a estudiar la
“factibilidad” del proyecto en 30 meses y después la Corporación Minera de
Bolivia verá qué le conviene. (En Bolivia estudiar la “factibilidad” es la
hiperbólica manera de postergar un proyecto; en realidad con esta triquiñuela
inventada por los yanquis, lo que se hace es acumular elementos opuestos al
deseo inicial) -Para vencer la oposición al contrato eh gobierno anuncié que
establecería la refinería por cuenta propia. La planta costará dos o tres veces
más que la del estaño y desde luego la promesa empeñada es otro truco más
para saquear la riqueza minera de Bolivia.
Las “colas” y desmontes y “Matilde” son los símbolos de una época y de una
mentalidad. El gobierno obsequió a Philips Brothers los cuatro millones de
dólares que Hochschild y la Corporación Minera de Bolivia invirtieron en la
preparación del yacimiento. .Tanta magnanimidad contrasta con la tacañería
24
Entre, los directores y otros funcionarios de rango, la oposición contra CMB es virulenta.
Así, por ejemplo, el ingeniero Ricardo Urquidi que nada sabe de la minería y es director de la
entidad sostuvo que la minería privada nada debe pagar al Estado. En otra oportunidad,
indignado y golpeando la mesa, salió en defensa de la Railway cuando denunció que la empresa
ferroviaria debía a CMB 1 500 000 de dólares por fletes cobrados ilegalmente. La jornada del 4
de Noviembre que rodea a Lechín ha sido reclutada por sus conexiones con las empresas
petroleras y otros consorcios yanquis, de modo que en el nivel de dirección, varios son los cabos
Alumno aplicado.
que se atan firmemente para formar el nudo más peligroso dc la conspiración antinacional. (N.
del A-)
25
Además de dócil, Lechín ha sido agradecido con los maestros que le brindaron una sinopsis
para aficionados de la minería como sucedió en un almuerzo de los medianos: “Agradezco
públicamente —dijo en su discurso— al ingeniero Carlos Alberto Echazú a quien considero mi
asesor personal” (N. del A.)
Cuando una vez más el estaño vertió sangre boliviana ni la menor duda le
impidió elegir su papel- Las masacres se planearon fríamente, pero para
ponerlas en marcha hacía falta un hombre determinado. Si el patriotismo es la
primera virtud que se pierde en un gobierno rosquero, eh holocausto de Catan
tuvo al menos el efecto de recordar a los militares que la vida sería intolerable
sin un mínimo do pudor. Es algo que esta más allá de lo político para definirse
en lo puramente humano. Las razones últimas del genocido de 1952 encubren
algo monstruoso que se vuelve a descubrir en mayo y septiembre de 1965. La
premisa simple y escalofriante, es que el rendimiento minero debe elevarse aún
al precio de la vida de los trabajadores cuando su miseria y degradación no
son suficientes para mantener la rentabilidad de un determinado nivel. En la
economía capitalista el salario sirve para reponer y conservar la fuerza de tra-
bajo. En la semicolonia, tributaria de sobreganancias para la metrópoli, esta
ley económica funciona sólo parcialmente, la fuerza de trabajo puede ser
destruida, y de hecho lo es, si con ello queda asegurada ha sobreganancía.
Entre 1942 y 1965 hay también diferencias que es necesario ver y que no
radican precisamente en el empleo de mayores medios de violencia (aviones de
combate, etc.), y en la movilización de tropas entrenadas en la técnica del
pogrom (paracaidistas y rangers), sino en la comisión de un daño más
penetrante que radicaliza la acción de todos los factores que tienden a la
disociación de la sociedad boliviana. Por otra parte, los norteamericanos no
estuvieron comprometidos en 1942, en 1965 fueron los inspiradores.
La barbarie en las minas se intentó cubrir con una enorme ciénaga a la que el
país fue empujado por los que en la mirada de cada boliviano encontraron la
condenación y el desprecio.
26
Declaración del Cnl. Lechín, “El Diario” 24 de mayo de 1965.
27
La misma declaración.
28
“El Diario”, 25 de Mayo de 1965.
29
Id.id.
30
Un año más tarde CMB ordenó incursiones terroristas de la recientemente creada Policía
Minera contra “Karazapato” de Huanuni. consiguiendo la destrucción de la cooperativa y la
cesantía de más de mil trabajadores. Los familiares de estos fueron auxiliados con alimentos
donados por el Ministerio de Trabajo y S. S. y Naciones Unidas.
Las promesas de Lechín no trasuntan precisamente su preocupación por la historia. El primer día que llegó a CMB
declaró ante la estupefacción de todos que renunciaba su sueldo de 3.000 dólares como presidente de la entidad
porque continuarla viviendo con su salario do coronel del ejército. En agosto de 1065 más interesado en la
economía doméstica que en la historia, cobró a CMB todo lo que le adeudaba, si deuda puedo llamarse a un
derecho al que se ha denunciado voluntariamente. (N. del A-)
31
“Presencia” 24 de noviembre de 1965.
obligación de mostrar que somos un país solvente” (2). Puesto que c-l país
tenía toda la obligación y ningún derecho, el ministro Gallardo fue echado del
gabinete y alejado del país, era una forma de demostrar solvencia.
La gente podía morir de hambre en las minas, el sistema tenía que ser salvado.
32
Las negociaciones del monstruoso embeleco llamado Tercera Fase de la
“Operación Triangular”, tomaron tres años, dos de los cuales corresponden a
la gestión de Lechín. En lugar de 10,5 millones de dólares los enérgicos
directivos de CMB obtuvieron 400 mil. (N. del A.)
CAPITULO VIII
PSICOLOGIA DE LA NUEVA ROSCA
33
Léase las notas de la página de redacción de “El Diario” y se verificará que
los ideólogos de la derecha, por ejemplo el señor Jorge Siles Salinas, se
complace en estancar sus ideas en el Siglo XVIII; y hombres de empresa como
René Ballivián a qUien también le gusta escribir sobre los mismos temas, sería
echado del “Fígaro” por demasiado derechista. (N.del A.)
34
Alienación: Humildad con los yanquis, arrogancia con los bolivianos. (N. del
A)