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Yue et al. Revista de Cuidados Intensivos (2024) 12:4

Revista de cuidados intensivos
https://doi.org/10.1186/s40560­024­00717­3

INVESTIGACIÓN Acceso abierto

Eficacia de la alimentación insuficiente permisiva

para pacientes críticamente enfermos: una revisión sistemática
actualizada y un metanálisis secuencial de ensayos
Han yang Yue1†, Wei Peng1†, Jun Zeng1,2†, Yang Zhang1 , Yu Wang3 y Hua Jiang1,2*

Abstracto
Antecedentes Nuestro estudio anterior de 2011 concluyó que la alimentación insuficiente permisiva puede mejorar los resultados en pacientes que
reciben terapia de nutrición parenteral. Esta conclusión fue provisional, dado el pequeño tamaño de la muestra. Nosotros con
Realicé la presente revisión sistemática y metanálisis secuencial de ensayos para actualizar el estado de la subalimentación permisiva.
ing en pacientes que fueron admitidos en la unidad de cuidados intensivos (UCI).

Métodos Se realizaron búsquedas en siete bases de datos: PubMed, Embase, Web of Science, China National Knowledge Infraestructura.
ture, Wanfang, base de datos de literatura biomédica china y Biblioteca Cochrane. Se incluyeron ensayos controlados aleatorios (ECA). Se utilizó la
herramienta Cochrane revisada de riesgo de sesgo (ROB 2) para evaluar el riesgo de sesgo en los ensayos incluidos.
Se utilizó el software RevMan para la síntesis de datos. Se realizaron análisis secuenciales de ensayos (TSA) de la mortalidad general y en la UCI.

Resultados Se incluyeron veintitrés ECA con 11.444 pacientes en estado crítico. No hubo diferencias significativas
diferencias en la mortalidad general, la mortalidad hospitalaria, la duración de las estancias hospitalarias y la incidencia de infección general. En comparación
con el grupo de control, la alimentación insuficiente permisiva redujo significativamente la mortalidad en la UCI (cociente de riesgos [RR] = 0,90;
intervalo de confianza [IC] del 95 %, [0,81, 0,99]; P = 0,02; I 2 = 0 %), y la incidencia de los eventos adversos gastrointestinales disminuyeron (RR = 0,79; IC
del 95 %, [0,69, 0,90]; P = 0,0003; I 2 = 56 %). Además, se redujo la duración de la ventilación mecánica (diferencia de medias (DM) = − 1,85 días; IC del 95 %,
[− 3,44, − 0,27]; P = 0,02; I 2 = 0 %).

Conclusiones La alimentación insuficiente permisiva puede reducir la mortalidad en la UCI en pacientes críticamente enfermos y ayudar a acortar los mecanismos.
duración de la ventilación cal, pero la mortalidad general no mejora. Debido al tamaño de la muestra y a la heterogeneidad de los pacientes
idad, las conclusiones aún deben ser verificadas mediante ECA a gran escala bien diseñados.

Registro de ensayos El protocolo para nuestro metanálisis y revisión sistemática se registró y registró en PROSPERO (n.º de registro CRD42023451308).
Registrado el 14 de agosto de 2023

Palabras clave Subalimentación permisiva, hipocalórica, baja en calorías, críticamente enfermo, metanálisis, revisión sistemática, análisis secuenciales
de ensayos (TSA)

†
Han­yang Yue, Wei Peng y Jun Zeng contribuyeron igualmente a este estudio.

*Correspondencia:
Hua Jiang
jianghua@uestc.edu.cn
La lista completa de información del autor está disponible al final del artículo.

© El Autor(es) 2024. Acceso Abierto Este artículo está bajo una Licencia Internacional Creative Commons Attribution 4.0, que permite su
uso, intercambio, adaptación, distribución y reproducción en cualquier medio o formato, siempre y cuando se dé el crédito apropiado al
original. autor(es) y la fuente, proporcione un enlace a la licencia Creative Commons e indique si se realizaron cambios. Las imágenes u
otro material de terceros en este artículo están incluidos en la licencia Creative Commons del artículo, a menos que se indique lo contrario en
una línea de crédito al material. Si el material no está incluido en la licencia Creative Commons del artículo y su uso previsto no está permitido
por la normativa legal o excede el uso permitido, deberá obtener permiso directamente del titular de los derechos de autor. Para ver una
copia de esta licencia, visite http://creativecommons.org/licenses/by/4.0/. La exención de dedicación de dominio público de Creative Commons (http://creativecom
mons.org/publicdomain/zero/1.0/) se aplica a los datos puestos a disposición en este artículo, a menos que se indique lo contrario en una línea de crédito a los datos.
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Fondo
La terapia nutricional juega un papel fundamental en los cuidados
intensivos [1, 2]. La desnutrición en pacientes críticos se relaciona
con una estancia prolongada en la unidad de cuidados intensivos
(UCI), un aumento de las complicaciones e incluso se asocia con un
riesgo elevado de muerte [2, 3]. Una ingesta nutricional adecuada
ayuda a los pacientes críticamente enfermos a mantener las funciones
inmunes. También puede mejorar el estado hipercatabólico y reducir
la aparición de desnutrición, lo que da como resultado mejores
resultados clínicos [1, 4].
Según las últimas directrices para la nutrición en la UCI de la
Sociedad Europea de Nutrición Clínica y Metabolismo (ESPEN), la
nutrición hipocalórica (que no supere el 70% del gasto energético)
en la fase temprana de la enfermedad aguda limita la aparición de
sobrealimentación y otros resultados adversos [5]. La sobrealimentación
se asocia con complicaciones como esteatosis hepática y aumento de
los esfuerzos respiratorios, que tienen efectos adversos en los
resultados clínicos [1, 6]. Un estudio reciente de 1.206 pacientes en
26 UCI encontró que la alimentación temprana de alta energía era
perjudicial en pacientes críticamente enfermos [7]. Después de
décadas de exploración, la subalimentación permisiva es una solución
que equilibra los beneficios del apoyo nutricional con los efectos
adversos de la sobrealimentación durante la etapa temprana del
ingreso en la UCI [7­11]. En 2011, nuestro equipo realizó una revisión
sistemática de ensayos controlados aleatorios (ECA) para evaluar la
eficacia clínica de la nutrición hipocalórica en pacientes que recibieron
nutrición parenteral. Aunque llegamos a la conclusión de que la
nutrición parenteral hipocalórica puede acortar la duración de la
estancia hospitalaria (LOS) y reducir la incidencia de infección, el
estudio estuvo limitado por su número relativamente pequeño de
pacientes, con sólo 359 participantes [12]. Posteriormente, se
publicaron múltiples estudios bien diseñados que proporcionaron
más datos sobre la desnutrición permisiva en pacientes críticos [9,
13]. Por lo tanto, es necesario realizar una nueva revisión sistemática
y metanálisis para actualizar esta evidencia. Además, han surgido
técnicas de metanálisis secuencial de ensayos que pueden ayudar a
los investigadores a evaluar el poder de la evidencia.
Por lo tanto, realizamos una revisión sistemática y un metanálisis
secuencial de ensayos para evaluar la eficacia de la subalimentación
permisiva en pacientes críticamente enfermos.
Métodos
Protocolo y registro
Diseñamos y realizamos esta revisión sistemática y metanálisis
siguiendo las pautas PRISMA (Preferred Report­ing Items for
Systematic Reviews and Meta­Analysis). El protocolo para nuestro
metanálisis y revisión sistemática fue registrado y registrado en
PROS­PERO (n.º de registro CRD42023451308, registrado el 14 de
agosto de 2023).
Página 2 de 12
Criterios de inclusión
Los criterios de inclusión se establecieron siguiendo el
Método PICOS, como se describe a continuación:
• P (Participantes): Pacientes adultos (edad≥18 años) ingresados
en UCI con puntuaciones APACHE II≥10 puntos
• I (Intervención): Subalimentación permisiva (ingesta real de
calorías <70 % de las calorías objetivo o <20 kcal/kg. d)
• C (Comparación): Administración de alimentación isocalórica
(ingesta real de calorías≥70% de las calorías objetivo o≥20 kcal/
kg. d)
• O (Resultados): Resultados primarios: mortalidad general;
resultados secundarios: duración de la ventilación mecánica
(días), mortalidad en la UCI, mortalidad hospitalaria, duración
de la estancia hospitalaria (días), incidencia de infección general,
incidencia de eventos adversos gastrointestinales
• S (Diseño del estudio): ensayos controlados aleatorios
Criterio de exclusión
Los criterios de exclusión abarcaron lo siguiente: (a) análisis post hoc
de un ensayo controlado aleatorio, (b) ensayo aleatorio cruzado, (c)
estudios que no abordaron ningún resultado primario o secundario,
(d) mujeres embarazadas o lactantes, (e) pacientes que recibieron
soporte nutricional previo durante el mismo período de hospitalización,
(f) estudios que involucran programas de trasplante, y (g) aquellos
específicamente enfocados a pacientes con cáncer.
Fuentes bibliográficas y estrategia de recuperación.
Para lograr una búsqueda exhaustiva de estudios, dos revisores
(YHY y WP) buscaron de forma independiente en siete bases de
datos: PubMed, Embase, Web of Science, China National Knowledge
Infrastructure (CNKI), Wanfang, Chi­nese Biomedical Literature
Database (SinoMed). ) y Biblioteca Cochrane. Los ECA publicados
antes del 31 de octubre de 2023 que cumplieron con los criterios de
inclusión se incluyeron para análisis adicionales. El proceso de
recuperación se resume en el archivo adicional 1: Tabla S1.
Selección de literatura y extracción de datos.
Para evitar errores y datos faltantes, dos revisores (YHY y WP)
realizaron de forma independiente una selección de literatura y
extracción de datos siguiendo las pautas PRISMA.
Las controversias se gestionaron inicialmente mediante directrices y
fueron discutidas por el equipo de investigación. Si no se lograba una
resolución inicial, se consultaba a un tercer revisor senior (JH). Los
datos extraídos incluyeron el diseño del estudio, información inicial
del paciente, estadísticas sobre mortalidad en la UCI, mortalidad
general, duración de la ventilación mecánica (días), mortalidad
hospitalaria, duración de la estancia hospitalaria.
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(días), incidencia de infección general, incidencia de eventos
adversos gastrointestinales.
Evaluación del riesgo de sesgo
Para garantizar la confiabilidad de este estudio, dos revisores (YHY
y JZ) evaluaron de forma independiente el riesgo de sesgo en los
estudios incluidos. Se utilizó la herramienta Cochrane revisada de
riesgo de sesgo (ROB 2) para evaluar el riesgo de sesgo en los
ECA. Los ECA cubren cinco dimensiones de sesgo que pueden
afectar la calidad: sesgo que surge del proceso de aleatorización,
desviaciones de las intervenciones previstas, datos faltantes de
resultados, mediciones de resultados y selección del resultado
informado. Inicialmente, las controversias se manejaron mediante
discusiones dentro del equipo de investigación. Si no se lograba
una resolución inicial, se consultaba a un tercer revisor senior (JH).
Análisis estadístico
Se utilizó la versión 5.4 del Review Manager (Rev­Man) de la
Colaboración Cochrane para agrupar los efectos de las
intervenciones. Las variables dicotómicas se agruparon y se
presentaron como cocientes de riesgos (RR) e intervalos de
confianza (IC) del 95% utilizando el método de Mantel­Haenszel.
Las variables continuas se agruparon y se presentaron como
diferencia de medias (DM) e IC del 95 % mediante el método de la varianza inversa.
búsqueda y selección de literatura.
El nivel α estadísticamente significativo se fijó en 0,05. Las
diferencias estadísticas se consideraron significativas en P<0,05.
Existió heterogeneidad estadística si I 2 ≠ 0, y la heterogeneidad
de los resultados agrupados se consideró alta si I 2 > 50%.
Se utilizaron modelos de efectos aleatorios cuando se observó
heterogeneidad (I2>0) [14]; sin embargo, en los casos en que2yo
era
igual a 0, se utilizó en su lugar un modelo de efectos fijos. Se
realizó un análisis de subgrupos si los tipos de pacientes y las
intervenciones incluidas en los estudios no eran idénticos.
El sesgo de publicación se evaluó sólo cuando el número de
estudios incluidos excedía los 10 porque un número limitado de
estudios socavaba el poder de las pruebas. Finalmente, se realizó
un análisis de sensibilidad para evaluar la confiabilidad y autenticidad
de los resultados.
Análisis secuencial de ensayos.
Un metanálisis actualizado con nuevos ECA puede dar lugar a
resultados falsos positivos porque la escasez de datos aumenta el
riesgo de error aleatorio. Los análisis secuenciales de ensayos
(TSA) redujeron el riesgo de errores aleatorios derivados de
tamaños de muestra inadecuados o pruebas repetitivas y ayudaron
a estimar el tamaño de información requerido (RIS) para el
metanálisis. Realizamos TSA para los resultados utilizando el
software TSA versión 0.9.5.10 Beta. El error de tipo 1 y la potencia
se establecieron en 5% y 80%, respectivamente.
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Certeza e importancia de la evidencia
La herramienta en línea GRADEpro, desarrollada por el Grupo de
Trabajo de Evaluación, Desarrollo y Evaluación de Recomendaciones
(GRADE), se utilizó para evaluar la certeza y la importancia de la
evidencia [15]. Se calificaron individualmente los siguientes
elementos: diseño del estudio, riesgo de sesgo, imprecisión,
carácter indirecto e inconsistencia. De acuerdo con las directrices,
la certeza de la evidencia se calificó como “alta, moderada, baja o
muy baja” mediante el uso de GRADEpro. Y la importancia del
resultado se calificó y categorizó en uno de tres niveles: "no
importante", "importante" y "crítico".
Resultados
Resultados y características de la recuperación de la literatura.
Inicialmente se recuperaron 2708 registros. Después de eliminar
duplicados y seleccionar títulos y resúmenes, se retuvieron 52
estudios para la selección de texto completo. Se incluyeron
veintitrés ECA con 11.444 pacientes en estado crítico [9, 11, 13,
16­35]. Los tamaños de muestra de los ECA incluidos oscilaron
entre 16 y 3957. El índice de masa corporal (IMC) medio de 14
ECA fue superior al rango normal, 25 kg/m2 .
Las características básicas
de los ECA incluidos se presentan en el archivo adicional 2: Tabla
S2. En la figura 1 se muestra un diagrama de flujo del proceso de
Evaluación del riesgo de sesgo
Según los criterios de ROB 2, tres ECA se consideraron de alta
calidad. ROB 2 indicó un riesgo alto en nueve ECA porque no
informaron la medición del resultado. En la figura 2 y en el archivo
adicional 3 se muestran gráficos del riesgo de sesgo entre los 23
ECA. Figura S1.
Resultados primarios
Mortalidad general
Diecinueve ECA, que incluyeron 11.181 pacientes, informaron
sobre la mortalidad general [9, 11, 13, 17, 19–22, 24–33, 35]. Los
datos combinados indicaron que no hubo diferencias estadísticamente
significativas en la mortalidad general entre los dos grupos (RR =
0,96; IC del 95 %, [0,91, 1,01]; P = 0,13) sin heterogeneidad (I2 = 0
%). La certeza de la evidencia se consideró moderada. En la Fig. 3
se muestra un gráfico forestal de la mortalidad general.
Resultados secundarios
Mortalidad en UCI
Cinco ECA que incluyeron 4.361 pacientes informaron mortalidad
en la UCI [9, 19, 25, 28, 32]. Los datos agrupados indicaron que la
alimentación insuficiente permisiva en pacientes críticos era
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Registros remoto antes

poner en pantalla:
Registros identificados de*
Registros duplicados eliminados (n
Bases de datos (n = 2708)
= 968)
Registros (n = 0)
nóicacifitnedI

Registros marcados como no elegibles

por herramientas de automatización (n = 0)

Registros examinados Registros excluidos**

(n = 1740) (n = 1688)

Informes buscados para su recuperación Informes no recuperados

(n = 52) (norte = 0)
nP
allraetnnoa e
p

Informes evaluados para determinar la elegibilidad Informes excluidos:

(n = 52) No ECA (n = 18)

No designado

intervenciones (n = 11)

Estudios incluidos en cualitativos.

y síntesis cuantitativa
odiulcnI

(n=23)

Fig. 1 Diagrama de flujo del proceso de búsqueda y selección de literatura. *Nombre de la base de datos y número de estudios buscados: PubMed (n=654); Embase
(n=969); Web de la Ciencia (n=58); Biblioteca Cochrane (n=840); SinoMed (n=167); CNKI (n=5); Datos WANFANG (n=15)

asociado con una menor mortalidad en la UCI que en el grupo
de control (RR = 0,90; IC del 95 %, [0,81, 0,99]; P = 0,02) sin
heterogeneidad (I2 = 0 %). La certeza de la evidencia se
consideró moderada. En el archivo adicional 3 se muestra un
diagrama de bosque de la mortalidad en la UCI. Fig. S2.
Duración de la ventilación mecánica (días)
Tres ECA, que incluyeron 411 pacientes, informaron la duración
de la ventilación mecánica [19, 23, 32]. Datos almacenados
indicó que la alimentación insuficiente permisiva en pacientes
críticos se asoció significativamente con duraciones más cortas
de la ventilación mecánica (DM = − 1,85 días; IC del 95 %, [−
3,44, − 0,27]; P = 0,02) sin heterogeneidad (I2 = 0%). La certeza
de la evidencia se consideró moderada. En el archivo adicional
3 se muestra un diagrama de bosque de la duración de la
ventilación mecánica: Fig. S3.
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Fig. 2 Revisión de los juicios de los autores para cada elemento de riesgo de sesgo en los estudios incluidos
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Fig. 3 Diagrama de bosque para comparar la mortalidad general
Mortalidad hospitalaria
Nueve ECA, que incluyeron 9563 pacientes, informaron mortalidad
hospitalaria [9, 13, 19, 20 , 24, 25, 28, 31, 32]. Los datos combinados
no indicaron diferencias estadísticamente significativas en la mortalidad
hospitalaria entre los dos grupos (RR = 0,95; IC del 95 %, [0,89; 1,02];
P = 0,18; I 2 = 1 %). La certeza de la evidencia se consideró moderada.
En el archivo adicional 3 se muestra un diagrama de bosque de las
tasas de mortalidad hospitalaria: Fig.
S4.
Duración de la estancia hospitalaria (días)
Seis ECA, que incluyeron 637 pacientes, informaron la duración de la
estancia hospitalaria [11, 17, 19, 26, 31, 32]. Los datos combinados
no indicaron diferencias estadísticamente significativas en la duración
de la estancia hospitalaria entre los dos grupos (DM = 1,11; IC del 95
% [­ 2,16; 4,38]; P = 0,51; I 2 = 77 %). La certeza de la evidencia se
consideró baja. En el archivo adicional 3 se muestra un diagrama de
bosque de la duración de la estancia hospitalaria: Fig. S5.
Incidencia de infección general
Catorce ECA, incluidos 9782 pacientes, informaron la incidencia de
infección general [9, 11, 13, 17, 18, 20, 21, 25–
28, 30, 33, 34]. Los datos combinados no indicaron diferencias
estadísticamente significativas en la incidencia de infección general
entre los dos grupos (RR = 0,92; IC del 95 %, [0,79; 1,06]; P = 0,25; I
2 = 49 %). La certeza de la evidencia se consideró moderada. En el
archivo adicional 3 se muestra un diagrama de bosque de la incidencia
de infección general: Fig. S6.
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Incidencia de eventos adversos gastrointestinales
Nueve ECA, que incluyeron 8423 pacientes, informaron la incidencia
de eventos adversos gastrointestinales [9, 13, 21, 25, 28, 29, 33­35].
Los datos combinados indicaron que la alimentación insuficiente
permisiva en pacientes críticamente enfermos se asoció
significativamente con una menor incidencia de eventos
gastrointestinales adversos en ambos grupos (RR = 0,79; IC del 95 %,
[0,69, 0,90]; P = 0,0003; I 2 = 56%). La certeza de la evidencia se
consideró alta. En el archivo adicional 3 se muestra un diagrama de
bosque de la incidencia de eventos adversos gastrointestinales: Fig.
S7.
Análisis de subgrupos
Con base en los diversos períodos de intervención, realizamos análisis
de subgrupos de mortalidad general, mortalidad hospitalaria e
incidencia de infección general. Después de excluir los estudios que
no informaron los períodos de intervención, los datos agrupados
mostraron que no había diferencias significativas en la mortalidad
general (RR = 1,01; IC del 95 %, [0,88, 1,16]; P = 0,89; I 2 = 0 %), en
mortalidad hospitalaria (RR = 1,06; IC del 95%, [0,82, 1,37]; P = 0,66; I
2 = 8%) e incidencia de infección general (RR = 0,83; IC del 95%,
[0,48, 1,43]); P = 0,50; I 2 = 75 %) entre los dos grupos en ECA con un
período de intervención de <7 días. Asimismo, los datos agrupados no
mostraron diferencias significativas en la mortalidad general (RR =
0,96; IC del 95 %, [0,90, 1,02]; P = 0,16; I 2 = 0 %), mortalidad
hospitalaria (RR = 0,96; 95 % IC, [0,89, 1,03]; P = 0,22; I 2 = 0%), e
incidencia de infección general (RR = 0,93; IC del 95 %, [0,81, 1,07]; P
= 0,30; I 2 = 41%) entre los dos grupos en
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ECA con un período de intervención de ≥7 días. Los detalles del
análisis de subgrupos se muestran en el archivo adicional 3: Fig.
S8­10.
El sesgo de publicación
Los gráficos en embudo utilizados para evaluar el sesgo de
publicación fueron simétricos, lo que indica que no se observó sesgo
de publicación. Los gráficos en embudo de los resultados informados
en más de 10 estudios se muestran en el archivo adicional 3: Fig. S11­12.
Análisis de sensibilidad
Se realizó un análisis de sensibilidad para evaluar la estabilidad de
los resultados. En cuanto a la mortalidad general, la exclusión de los
estudios individuales no tuvo impacto en los resultados en
comparación con el resultado combinado. En cuanto a la mortalidad
en UCI, la exclusión del estudio de Reignier et al. [9] cambiaron los
resultados en comparación con los resultados agrupados.
En cuanto a la mortalidad hospitalaria, la exclusión de estudios
individuales no tuvo impacto en los resultados en comparación con
los resultados agrupados. Los detalles se muestran en el archivo
adicional 3: Fig. S13­15.
Análisis secuencial de ensayos.
La TSA de mortalidad general mostró que la curva Z acumulada
cruzó la línea sin límites. Se estimó que el RIS era 16,789 según lo
determinado a través de la TSA, y la curva Z acumulativa no alcanzó
el RIS. Los detalles se muestran en la Fig. 4. La TSA de mortalidad
en la UCI mostró que la curva Z acumulada cruzó el límite tradicional
Fig. 4 Análisis secuencial de los ensayos para la mortalidad general
Página 7 de 12
y no cruzó las otras líneas fronterizas. Se estimó que el RIS era
6955 según lo determinado a través de la TSA, y la curva Z
acumulada no logró exceder el RIS, lo que significó que la asociación
entre la desnutrición permisiva y la menor mortalidad en la UCI fue
un falso positivo y se necesitan más estudios para verificar esto.
asociación. Los detalles se muestran en la Fig. 5.
Tabla de resumen de evidencia GRADE para resultados clave
La certeza de la incidencia de eventos adversos gastrointestinales
se consideró alta. La certeza de la evidencia sobre la mortalidad en
la UCI y la mortalidad hospitalaria se calificó como moderada porque
los estudios no informaron si las mediciones de los resultados
estaban cegadas. La certeza de la evidencia sobre la mortalidad
general se calificó como moderada porque diferentes estudios
proporcionaron resultados inconsistentes debido a diferentes
tamaños de muestra. La certeza general de la evidencia de esta
revisión sistemática y metanálisis se consideró moderada. Los
detalles se resumen en la Tabla 1.
Discusión
Los beneficios del tratamiento nutricional en pacientes críticos han
sido demostrados repetidamente en diversos estudios. Sin embargo,
la cuestión de cómo proporcionar una nutrición adecuada y
personalizada todavía presenta desafíos para los profesionales
clínicos [36, 37]. El reciente estudio de la Encuesta nutricional de
las UCI de habla francesa (FRANS) y
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Fig. 5 Análisis secuencial de ensayos para la mortalidad en la UCI
Las directrices ESPEN revisadas se inclinan por apoyar un
enfoque bajo en calorías [5, 7].
La mortalidad en la UCI fue menor en los pacientes desnutridos.
Sin embargo, la mortalidad general y la mortalidad hospitalaria no
fueron significativamente diferentes entre los dos grupos.
La interpretación de la diferencia es que la mortalidad en la UCI
es un resultado más representativo en la fase aguda y la mortalidad
general/hospitalaria representa los resultados a largo plazo.
Además de los efectos de las intervenciones nutricionales, hay
una serie de factores complicados que influyen en los resultados
a largo plazo. Además, el tamaño de la muestra de nuestro
estudio no fue suficiente (aproximadamente el 70% del RIS) y
puede conducir a un resultado tentativo. Puede cambiar en el
futuro mediante ensayos a gran escala. Nuestros hallazgos no
son del todo consistentes con los de estudios anteriores. Un
metanálisis realizado por Zhou et al. concluyó que no había
beneficios en términos de reducción de la mortalidad a corto plazo
o la duración de la ventilación mecánica [38]. Un metaanálisis
realizado por Pertzov et al. Llegó a la conclusión de que la nutrición
isocalórica se asociaba con una menor mortalidad a los 28 días y
no se observó ninguna diferencia significativa en la mortalidad en
la UCI entre los dos grupos [39].
Sin embargo, estos dos informes incluyeron menos estudios e
inscribieron a menos pacientes (1052–6986), lo que puede causar
sesgo en sus resultados.
Nuestra revisión sistemática y metanálisis revelaron que la
alimentación insuficiente permisiva se asoció con una menor
mortalidad en la UCI y una menor duración de la ventilación
mecánica en pacientes críticamente enfermos. Teniendo en cuenta el impacto
48 a 72 de la lugar de recibir una nutrición completa (70 a 100 % en 3 a 7 días). . En
Página 8 de 12
período de intervención sobre los resultados, se realizaron
análisis de subgrupos dependiendo de si el período de intervención
fue <7 días. Los resultados mostraron que, independientemente
de si el período de intervención de alimentación insuficiente
permisiva fue <7 días, no hubo diferencias significativas en la
mortalidad general, la mortalidad hospitalaria y la incidencia de
infección general. En nuestro metanálisis, la ingesta temprana de
alto contenido energético se asoció con una mala tolerancia. Esto
es consistente con las directrices ESPEN más recientes [5]. Berger
et al. indicaron que los pacientes críticamente enfermos que son
intolerantes a una nutrición completa temprana tienen producciones
endógenas de 100 a 300 g de glucosa por día para mantener un
suministro continuo de glucosa en sangre a los órganos vitales. La
producción no se reprime durante al menos 9 días si persiste la infamación.
La ingesta excesiva de energía puede provocar una
sobrealimentación. La intolerancia a la sobrealimentación, que
provoca una mayor mortalidad, está ahora bien demostrada y, por
tanto, debe evitarse [40]. Debido a la producción de glucosa
endógena, la racionalidad de una alimentación hipocalórica
temprana (primeras 48 a 72 h) en pacientes críticamente enfermos
es sólida. Sin embargo, las guías ESPEN recomiendan que se
prescriba una nutrición completa (70­100%) de forma progresiva
en un plazo de 3­7 días. Esta recomendación se basó en un
metanálisis de 2016 que comparó el impacto de diferentes vías
enteral­parenterales en pacientes críticos [5, 41]. Al tener en
cuenta la glucosa endógena, conjeturamos que los pacientes en
estado crítico pueden tener mejores resultados clínicos si
continúan con una alimentación hipocalórica durante las primeras
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6
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Yue et al. Revista de cuidados intensivos (2024) 12:4 Página 10 de 12

ROB2
En nuestro metanálisis, la alimentación hipocalórica continua Herramienta Cochrane revisada de riesgo de sesgo

Gerente de revisión de RevMan

durante y después de las primeras 48 a 72 h dio lugar a RR Ratios de riesgo

mejores resultados clínicos que los del grupo de control. CI Intervalos de confianza

Dados los datos limitados informados, no pudimos realizar Maryland diferencia media
ESPÉN Sociedad Europea de Nutrición Clínica y Metabolismo
análisis de subgrupos adicionales utilizando un límite de 3 CALIFICACIÓN
Calificación de la valoración, desarrollo y evaluación de recomendaciones.
días, y aún se desconoce si los mejores resultados clínicos se
RIS
debieron a la alimentación hipocalórica durante los primeros Tamaño de información requerida
FRANCOS Encuesta nutricional de las UCI francófonas
tres días o a la alimentación hipocalórica continua después de IMC Índice de masa corporal
tres días, lo que debería ser el foco de futuros estudios. En
general, la alimentación hipocalórica fue más efectiva.
Información suplementaria
La versión en línea contiene material complementario disponible en https://doi.
Limitaciones org/10.1186/s40560­024­00717­3.

Esta revisión sistemática y metanálisis incluyeron más ECA y

tamaños de muestra; sin embargo, todavía no es suficiente
sacar conclusiones de toda la población de pacientes en
estado crítico porque la mayoría de los ECA se realizaron en
países desarrollados, y solo unos pocos informes provinieron
de países en desarrollo. En los países de ingresos altos,
Archivo adicional 1. Tabla S1: El proceso de recuperación.
Archivo adicional 2. Tabla S2: Características básicas de los ECA incluidos.
Archivo adicional 3. Fig. S1: Revisión de los juicios de los autores para cada elemento de
riesgo de sesgo presentado como porcentaje en todos los estudios incluidos. Fig. S2: Diagrama
de bosque para comparar la mortalidad en la UCI. Fig. S3: Diagrama de bosque para comparar
la duración de la ventilación mecánica. Fig. S4: Diagrama de bosque para comparar la mortalidad

especialmente en Estados Unidos, los pacientes tenían hospitalaria. Fig. S5: Diagrama de bosque para la com
comparación de la duración de la estancia hospitalaria. Fig. S6: Diagrama de bosque para
valores básicos de IMC más altos y, por lo tanto, los hallazgos comparar la incidencia de infección general. Fig. S7: Diagrama de bosque para comparar la
no son generalizables a los países asiáticos y africanos. Es incidencia de eventos adversos gastrointestinales. Fig. S8: Análisis de subgrupos de mortalidad

posible que el resultado no se pueda extrapolar a pacientes general según el período de intervención. Fig. S9: Análisis de subgrupos de mortalidad
hospitalaria según el período de intervención. Fig. S10: Análisis de subgrupos de la incidencia de
desnutridos, ya que pocos pacientes incluidos tenían un IMC infección general según la intervención
inicial bajo. Además, algunos ECA no informaron si estaban período de ción. Fig. S11: Gráfico en embudo de la mortalidad general. Fig. S12: Gráfico en

cegados a la evaluación de resultados, lo que podría aumentar
el riesgo potencial de sesgo. La mayoría de los estudios
informaron resultados como la duración de la estancia
hospitalaria y la duración de la ventilación mecánica, mientras
que pocos estudios informaron "días libres", lo que nos limitó
a realizar un análisis de estos parámetros más completos. En
los análisis de subgrupos, no fue posible analizar todos los
resultados después de excluir los estudios que no informaron
los períodos de intervención porque los datos restantes eran
embudo de la incidencia de infección general. Fig. S13: Análisis de sensibilidad de la
mortalidad general. Fig. S14: Análisis de sensibilidad de la mortalidad en la UCI. Fig. S15: Análisis
de sensibilidad de la mortalidad hospitalaria.
Agradecimientos
No aplica.
Contribuciones de autor
H­YY, WP y HJ conceptualizaron y diseñaron el estudio. H­YY redactó el manuscrito. H­YY y
WP recuperaron bases de datos relevantes. H­YY y WP realizaron una selección de literatura y
extracción de datos. H­YY y JZ evaluaron el riesgo de sesgo. H­YY, JZ, YZ y YW prepararon las tablas

limitados. Por la misma razón, no pudimos realizar análisis de
subgrupos basados en los períodos de intervención de tres o
diez días. Finalmente, incluimos cualquier ruta de apoyo
nutricional que sea más relevante para el mundo real, que
también puede servir como fuente de heterogeneidad potencial.
Conclusiones
La alimentación insuficiente permisiva puede reducir la
y figuras. HJ resolvió cualquier controversia y revisó el manuscrito en consecuencia. HJ revisó el
manuscrito y mejoró la redacción en inglés. Todos los autores leyeron y aprobaron el manuscrito
final.
Fondos
Este trabajo fue apoyado por el Programa de Apoyo a la Ciencia y la Tecnología de Sichuan [ID de
subvención: 2021YFS0378 a Hua Jiang] y el Comité de Atención Médica de Sichuan [ID de
subvención: ChuanGanYan ZH2022­202 a Ping Zhou].
Disponibilidad de datos y materiales.

mortalidad en la UCI en pacientes críticos y ayudar a acortar Todos los datos y materiales relacionados con esta revisión sistemática y metanálisis están disponibles
del autor correspondiente.
la duración de la ventilación mecánica, pero la mortalidad
general no mejora. Debido al tamaño de la muestra y la
Declaraciones
heterogeneidad de los pacientes, las conclusiones deben
verificarse mediante ECA a gran escala bien diseñados. Aprobación ética y consentimiento para participar.
No aplica.

Abreviaturas Consentimiento para publicación

LOS Duración de la estancia hospitalaria
No aplica.
PRISMA Elementos de informes preferidos para revisiones sistemáticas y metanálisis
UCI Unidad de Cuidados Intensivos Conflicto de intereses
ECA Ensayos controlados aleatorios Los autores declaran que no tienen intereses financieros o intereses personales en competencia.
CNKI Infraestructura nacional de conocimiento de China relaciones personales que pueden haber influido en el trabajo reportado en este estudio.
Base de datos de literatura biomédica china SinoMed
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Yue et al. Revista de cuidados intensivos (2024) 12:4 Página 11 de 12

Detalles del autor
1
Instituto de Medicina de Emergencias y Desastres, Academia de Ciencias Médicas de Sichuan,
Hospital Popular Provincial de Sichuan, Facultad de Medicina, Universidad de Ciencia y Tecnología
Electrónica de China, Chengdu 610072, China.
2
Centro Provincial de Investigación de Medicina de Emergencia y Enfermedades Críticas de
Sichuan, Academia de Ciencias Médicas de Sichuan, Hospital Popular Provincial de Sichuan,
Facultad de Medicina, Universidad de Ciencia y Tecnología Electrónica de China, Chengdu 610072,
3 0127538.
China. ment of Health Medicine, Peking Departamento de Nutrición Clínica, Departamento
Union Medical College Hospital, Academia China de Ciencias Médicas y Peking Union Medical
College, No. 1 Shuai Fu Yuan Wang Fu Jing, Dong Cheng District, Beijing 100730, China.
Recibido: 26 de noviembre de 2023 Aceptado: 17 de enero de 2024
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Nota del editor Springer Nature

se mantiene neutral con respecto a reclamos jurisdiccionales en mapas publicados y afiliaciones

institucionales.