INTRODUCCIÓN

1
 INDICE

INTRODUCCIÓN 04

1 El marco normativo de la generación 05

distribuida en República Dominicana

2 La generación distribuida en República 07

Dominicana en números

3 Conceptos teóricos sobre los esquemas tarifarios 09

aplicados a la generación distribuida

4 14
de la generación distribuida

5 Impacto de la generación distribuida 19

6 La generación distribuida en América Latina, España 27

Consideraciones sobre el borrador del nuevo 35

7 “Reglamento para la aprobación, interconexión y operación
de instalaciones de generación distribuida de energía”

Conclusiones 39

Bibliografía 42

Anexo 1 44
Consideraciones metodológicas sobre la estimación de
pérdidas de las EDEs originadas en la generación distribuida.
Anexo 2
Consideraciones metodológicas sobre la estimación 46
del gasto tributario originado en los incentivos tributarios
concedidos a la generación distribuida.
Anexo 3
Consideraciones metodológicas sobre la estimación 38
 INTRODUCCIÓN

La generación distribuida de energía de la estimación del impacto financiero de la

eléctrica puede definirse como
aquella basada en pequeñas fuentes
de energía no convencional (solar
y eólica, entre otras) instaladas
en puntos cercanos al consumo, que el cliente
utiliza para autoabastecer total o parcialmente su
demanda de energía eléctrica y, eventualmente,
para inyectar sus excedentes a la red de distribución.
República Dominicana ha promovido y continúa
promoviendo la generación distribuida. En concreto,
se conceden incentivos -tarifarios y tributarios- a los
clientes residenciales cuya capacidad instalada sea
menor o igual a 25 kW y a los clientes comerciales e
industriales que no superen 1 MW.
La sustitución de los combustibles fósiles por
fuentes renovables de energía es, sin dudas, un
objetivo no solo deseable sino, además, necesario.
La capacidad instalada de generación distribuida en
el país posibilita una disminución de la emisión de
CO2 de 1.2 millones de toneladas al año en el caso
de que dicha generación sustituya al carbón.
No obstante, se considera necesario plantear y
responder algunas preguntas sobre cómo se está
promoviendo esta microgeneración en el país,
sobre el diseño de esta promoción y sus diferentes
impactos. Este documento pretende analizar,
entre otros aspectos, el régimen tarifario vigente
y su impacto en las finanzas de las Empresas de
Distribución Eléctrica (EDEs) y, por otra parte, los
incentivos tributarios concedidos y su impacto en
las finanzas públicas.
generación distribuida sobre las EDEs.
En la sección 5 del documento se describen los
incentivos tributarios concedidos en República
Dominicana a la generación distribuida y se estima el
correspondiente gasto tributario (renuncia fiscal).
El análisis se completa estimando el beneficio de
la microgeneración y realizando un análisis costo-
beneficio.
La sección 6 se dedica a un análisis internacional
comparado de la generación distribuida en diez
países de América Latina más España y Estados
Unidos (California). Se revisan las principales
definiciones de los esquemas tarifarios aplicados y
la concesión (o no) de incentivos fiscales.
Actualmente está en proceso de consulta pública
el borrador de un nuevo “Reglamento para
la aprobación, interconexión y operación de
instalaciones de generación distribuida de energía”.
La sección 7 se dedica a la revisión de este borrador,
con particular énfasis en analizar si solucionaría
o no los problemas actuales, identificados en las
secciones anteriores del documento.
La sección 8 concluye.

En la sección 1 del documento, se describe el

marco normativo de la generación distribuida en
República Dominicana. La sección 2 contiene datos
sobre la evolución de la generación distribuida en la
última década, en particular sobre la evolución del
número de clientes y de la capacidad instalada.

Los principales conceptos teóricos sobre los

esquemas tarifarios aplicados a la generación
distribuida y su impacto en las finanzas de las
distribuidoras se revisan en detalle en la sección 3,
en la que también se señalan las particularidades
del caso dominicano. Una vez realizada esa revisión
teórica, en la sección 4 se presentan los resultados

4

1. El marco normativo de
la generación distribuida
en República Dominicana
1.1. PRINCIPALES DEFINICIONES - La normativa que
regula el funcionamiento de la generación distribuida en
República Dominicana está contenida en el Reglamento
de Interconexión de Generación Distribuida y,
fundamentalmente, en el Reglamento de Medición Neta,
ambos de julio de 2012. Deben considerarse, además, la
Ley de Incentivo al desarrollo de las Energías Renovables
y sus Regímenes Especiales (Ley 57-07, de mayo de 2007)
y su Reglamento de aplicación (Decreto 202-08, de mayo
de 2008).
El Reglamento de Interconexión define a la generación
distribuida como “la generación que se conecta a la red
de distribución de energía eléctrica y se caracteriza por
encontrarse instalada en puntos cercanos al consumo.
Consiste básicamente en la generación de energía eléctrica
por medio de muchas pequeñas fuentes de energía”. Por
su parte, el Reglamento de Medición Neta, que contiene
el régimen tarifario aplicable a la generación distribuida,
define al sistema de generación renovable como aquel
basado en fuentes de energía no convencionales (solar,
eólica, entre otras) que el cliente¹ utiliza para autoabastecer
total o parcialmente su demanda de energía eléctrica.
“Este sistema incluye inversores, equipos de protección,
seguridad, interconexión y equipos necesarios para
producir energía eléctrica en la instalación del cliente y ser
capaz de operar en paralelo con el sistema de distribución
del distribuidor”.
La generación distribuida es regulada por el Programa de
Medición Neta, detallado en el Reglamento de Medición
Neta, que aplica a los sistemas propios de generación
renovable cuya capacidad sea i) menor o igual a 25 KW
para clientes residenciales; y ii) no mayor a 1 MW para
clientes comerciales e industriales. Estos límites son
definidos por el Reglamento de Medición Neta, pese a
que el Reglamento de Generación Distribuida establece el
límite de capacidad instalada en 1 MW.
1.2. ESQUEMA TARIFARIO - El esquema tarifario aplicado a
la generación distribuida en República Dominicana es el de
¹ A lo largo del documento se utilizarán diversos sinónimos para referirse a los clientes de generación distribuida, a saber: usuario, autoproductor,
microgenerador, prosumidor.
² Artículo 11 del Reglamento de Medición Neta.
INTRODUCCIÓN
medición neta (net metering). En este esquema, en cada
periodo de facturación el distribuidor mide la energía que
el cliente consume (retira) y la que exporta (inyecta) a la
red. Pueden darse dos situaciones, a saber:²
i) Consumo neto - Si en el periodo de facturación el
distribuidor suministra al cliente más energía de la que
éste exporta, el cliente deberá pagar los siguientes cargos:
a) consumo neto de energía (la energía consumida menos
la exportada), valorado según el bloque tarifario que le
corresponda al cliente;
b) cargo fijo mensual correspondiente a su tarifa y a su
nivel de consumo; y
c) cargo por potencia máxima, potencia máxima
fuera de punta y potencia máxima en horas de punta
correspondiente a su tarifa y a su nivel de consumo.
ii) Exportación neta - Si en el periodo de facturación el
cliente exporta más energía de la que consume:
a) la distribuidora le realiza un débito por potencia y cargo
fijo, considerando su máxima potencia de exportación
como si ésta fuera de consumo y tomando en cuenta
la tarifa aplicada para dicho consumo en el periodo de
facturación;
b) la distribuidora le acredita el exceso de energía durante
el periodo de facturación, crédito que se aplicará a la
factura del siguiente periodo de facturación;
c) cualquier crédito por exportación de energía que
no haya sido utilizado a diciembre de cada año, será
compensado del siguiente modo: antes del 31 de enero, el
distribuidor pagará al cliente el 75% del crédito acumulado
al precio del primer bloque tarifario BTS1, y el restante 25%
“será utilizado por las distribuidoras para los programas
de Eficiencia Energética y reducción de pérdidas”.
Los costos en los que tenga que incurrir el distribuidor para
incorporar a un cliente de generación distribuida deben
ser asumidos por éste, y el distribuidor lo compensará a
través del correspondiente peaje.
Sobre el cargo por potencia - Es necesario aclarar que,
pese a que tanto el Reglamento de Medición Neta como
el Acuerdo correspondiente que firman el cliente y la
distribuidora estipulan el cobro del cargo por potencia, la
Resolución 106-2019 de la Superintendencia de Electricidad
5
 INTRODUCCIÓN

(SIE) dispuso que las distribuidoras del Sistema Eléctrico
Nacional Integrado (SENI) no lo cobren cuando la potencia
instalada de los clientes BTS -en general, no solo los de
generación distribuida-³ sea menor a 10 kW. Sin embargo, es
importante precisar que resulta claro que esta resolución
se emitió para implementar el “Reglamento para la
fijación del valor agregado de distribución de referencia”
de EDENORTE, EDEESTE y EDESUR y, por tanto, no alcanza
a los Sistemas Aislados.⁴
Sobre la medición neta - La medición neta exige la
instalación de un medidor bidireccional, que registra tanto
la energía retirada por el cliente como la inyectada por
él a la red de distribución.⁵ Es importante señalar que los
medidores bidireccionales no están conectados al sistema
en República Dominicana. Por tanto, la información sobre
la energía inyectada por el cliente se carga manualmente y
se acredita con un rezago de un mes.
En las siguientes secciones del documento se discuten en
detalle las implicaciones del sistema de medición neta,
que es minoritario, en particular comparándolo con el
de facturación neta (net billing). A manera de adelanto,
es oportuno señalar que en el esquema de medición neta
la energía inyectada es remunerada a la misma tarifa que
la energía retirada.⁶ Como se verá, la tarifa incluye parte
de los costos de red, por lo que la distribuidora está, de
hecho, subsidiando al autoproductor cuando remunera a
esta tarifa la energía que él inyecta.
Además, es importante señalar que la normativa vigente
no establece un límite a la potencia contratada en relación
a la energía que consume el autoproductor y tampoco
establece un límite a la energía que éste inyecta a la red.
Esto, junto con el subsidio implícito en la tarifa de medición
neta, puede dar lugar a la aparición de generadores puros,
es decir, autoproductores interesados en vender energía
a la distribuidora antes que satisfacer su consumo de
energía. Dicho de otro modo, el sistema actual no define
con precisión que su objetivo central es el autoconsumo
y no un negocio de venta de energía a las distribuidoras.
Los países han adoptado diferentes soluciones para
lograr que el objetivo central del sistema de generación
distribuida sea el autoconsumo, evitando la aparición de
generadores puros. Por ejemplo, algunos países exigen
un balance neto anual, es decir, que la energía inyectada
sea menor o igual a la consumida. Otros establecen límites
a la energía inyectada como porcentaje de la energía
autoproducida. En el mismo sentido, junto a alguna de las
medidas anteriores, algunos países exigen que la potencia
contratada sea mayor a la potencia que se va a instalar.
Esto elimina varias situaciones problemáticas pues
presiona a que las obras se hagan por la demanda y no por
la generación.
El borrador de nuevo Reglamento de la generación
distribuida, actualmente en vista pública, que se discute
en detalle en la sección 7 del documento, propone algunas
de estas soluciones para corregir los problemas de la
normativa actual.
Sobre los límites técnicos - La normativa actual sí define
algunos límites técnicos. En efecto, además de los límites
de capacidad ya vistos -25 KW para clientes residenciales
y 1 MW para clientes comerciales e industriales-, el
Reglamento de Interconexión exige que: i) la capacidad
agregada de todos los sistemas de generación renovable
conectados en la misma red troncal no puede exceder el
15% de la demanda pico anual de dicha red; ii) la capacidad
agregada de los sistemas de generación renovable
conectados a un transformador deberá ser menor o igual
a la capacidad del mismo; y iii) la capacidad agregada
de los sistemas de generación renovable conectados al
sistema de distribución deberá ser menor o igual al 1% de la
demanda pico del sistema eléctrico del distribuidor.
Nótese que definir un límite de conexión con base en la
capacidad del transformador (punto ii anterior), y no con
base en el consumo de los autoproductores, puede dar
lugar a que pocos clientes acaparen las conexiones y que,
dado que no hay límites a la energía exportada, terminen
siendo exportadores netos.

³ No obstante, el interés de este documento se centra en los clientes de generación distribuida.

⁴ Una resolución anterior, la 237-98, emitida en 1998 por la Secretaría de Estado de Industria y Comercio (hoy Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes)
estableció que la tarifa BTS, tarifa simple, comprende los cargos definidos como a) cargo fijo mensual y b) cargo por energía, y que solo podían optar a esta
tarifa los clientes cuya potencia conectada fuese inferior a 10 kW. No obstante, también es muy claro que esta resolución solo alcanza a las EDEs, además de
que su vigencia fue hasta el 31 de diciembre de 2006. La Oficina de Protección al Consumidor (PROTECOM) de la SIE, citando ambas resoluciones, considera
que los Sistemas Aislados tampoco deben cobrar el cargo por potencia a este grupo de clientes.
⁵ Este medidor es instalado por la distribuidora y la diferencia entre el costo del medidor bidireccional y el tradicional, que será sustituido, debe ser pagada
por el cliente.
⁶ Como se dijo, solo es remunerado a la tarifa del primer bloque, la menor, el (75%) del crédito por exportación de energía que hubiese a fin de año.

6
 INTRODUCCIÓN

2. La generación la dinámica penetración de la generación distribuida en los

últimos años.
distribuida en República Finalmente, siempre en el periodo 2018-2022, el número

Dominicana en números de kW por cliente se ha mantenido relativamente estable

en torno a una media de 26 kW.

A septiembre de 2023, último dato disponible al cierre Cuadro 1 – Generación distribuida – Capacidad Instalada
– Participación de las EDEs, los Sistemas Aislados y la
de este informe, la capacidad instalada de la generación Autoproducción a septiembre de 2023
distribuida había alcanzado los 380.6 MW, representando
poco menos del 6% de la capacidad instalada total del país. MW %
(Cuadro 1). EDEs 331.0 87.0
De ese total, el 87% está conectado a las redes de Autoproducción 34.0 8.9
distribución de las EDEs, poco más del 4% a los Sistemas Sistemas Aislados 15.6 4.1
Aislados y el restante 9% es autoproducción. Total 380.6 100.0
El cuadro 2 y la gráfica 1 muestran la evolución del número
Fuente: Comisión Nacional de Energía
de clientes y de la capacidad instalada de la generación
distribuida interconectada a las redes de distribución del
SENI en el marco del Programa de Medición Neta. Dejando Respecto a la capacidad instalada vinculada a las EDEs,
de lado el año 2023, aún en curso, en el periodo 2018-2022 casi el 80% corresponde a los sectores industrial (59.7%) y
ingresaron al Programa más de 8,800 clientes, casi 1,800 comercial (17.4%), mientras que los clientes residenciales
por año. En el mismo periodo, se instalaron 224 MW, casi representan el restante 23%. (Cuadro 3).
un 70% de la capacidad instalada actual, un promedio de
45 MW por año, lo que supone una tasa de crecimiento
promedio anual de casi 40%. Estas cifras señalan claramente

Cuadro 2 – Generación distribuida – Evolución del número de clientes y de la

capacidad instalada del Programa de Medición Neta – Datos a septiembre de 2023

Acum Prom kW x
Años Clientes Var abs Var % Acum MW Var abs Var % Cliente

Fuente: elaboración propia con base en Comisión Nacional de Energía

7
 INTRODUCCIÓN

Gráfica 1: Generación distribuida en Medición Neta-Evolución

acumulada de clientes y de capacidad instalada

Fuente: elaboración propia con base en Comisión Nacional de Energía

Cuadro 3 – Generación distribuida – Capacidad Cuadro 4 – Generación distribuida – Capacidad

instalada relacionada a las EDEs por sector instalada relacionada a EDEs por opción tarifaria

MWp % kWp %
Industrial 197.7 59.7 MTD1 132,109 39.9
Residencial 75.6 22.9 BTS1 75,626 22.8
Comercial 57.7 17.4 MTD2 57,323 17.3
Total 331.0 100.0 BTS2 39,100 11.8

Nota: BTD 9,765 3.0

MWp = potencia pico BTH 8,779 2.7
Fuente: Comisión Nacional de Energía MTH 8,277 2.5

En línea con el resultado anterior, el 60% de la capacidad Total 330,979 100.0

instalada corresponde a clientes conectados en media
tensión, en particular MTD1 -que corresponde, por lo
general, a comercios medianos y grandes- y MTD2 -opción Baja Tensión 133,270 40.3
tarifaria de las Zonas Francas y las empresas industriales
con procesamiento de materias primas-. (Cuadro 4). Media Tensión 197,709 59.7
Fuente: Comisión Nacional de Energía

8

3. Conceptos teóricos
sobre los esquemas
tarifarios aplicados a la
generación distribuida
3.1. CONCEPTOS INTRODUCTORIOS²
El costo total de ofrecer el suministro eléctrico está
compuesto por i) el costo de generar la energía; ii) el costo
de amortizar, operar y expandir las redes eléctricas; y el
iii) costo comercial. El costo de la energía generada (i) se
paga a través de la factura por energía y el costo comercial
(iii) mediante el cargo fijo.
Respecto al costo de uso de la red (ii), hay que señalar que,
en baja tensión, de acuerdo a las reglamentaciones de cada
país, las tarifas suelen ser monómicas y/o binómicas. Si la
tarifa es monómica, existe un único cargo; el consumidor
paga equis $/kWh. En este caso, los costos de uso de
red suelen estar energizados, es decir, incorporados a la
tarifa en función de la energía consumida. Si la tarifa es
binómica, existe un cargo por potencia contratada ($/
kW) -por el cual se cobra un porcentaje del costo de uso
de la red- y un cargo por energía consumida ($/kWh) -que
incluye la otra parte del costo del uso de la red-. Para
tener una referencia, en Uruguay, un 30% de la factura por
energía corresponde al costo de red.
Las razones por las que se fijan tarifas monómicas son,
básicamente:
i) Simplificar las señales tarifarias: al cliente le resulta más
sencillo comprender el gasto en energía eléctrica si está
asociado a su consumo mensual en vez de a la gestión y
control de la potencia.
ii) Evitar que altos costos fijos excluyan del servicio a los
sectores de la población de menores ingresos. En efecto,
la asignación de todos los costos de red a un cargo por
potencia implicaría un gasto fijo significativo, asociado a la
potencia contratada, a los kW contratados, independiente
del consumo.
iii) Minimizar los costos de las distribuidoras asociados a la
contratación, medición y control de las potencias.
⁷ Las secciones 3.1 y 3.2 se basan en Di Lavello (2023).
INTRODUCCIÓN
Como se dijo, la tarifa binómica tiene dos componentes,
uno asociado a la potencia contratada y otro al consumo
de energía. Habitualmente, el componente asociado a la
potencia contratada no refleja la totalidad de los costos
de uso de la red, básicamente por las mismas razones
por las que se fijan las tarifas monómicas. La otra parte
de los costos de uso de red está energizada, es decir,
incluida en la tarifa por energía. Por tanto, quien consume
más energía, paga más costos de uso de red. (Véase el
diagrama 1).
Diagrama 1 – Relación entre los costos del
sistema eléctrico y los cargos de la tarifa.
COSTOS TARIFA
Generación
Cargo por
Energía
Redes
Cargo por
potencia
Costo
Cargo Fijo
Comercial
Fuente: con base en Di Lavello (2023).
3.2. IMPACTO EN LAS FINANZAS DE LAS DISTRIBUIDORAS
3.2.1. AUTOCONSUMO
Dicho esto, en un escenario de generación distribuida
en baja tensión, ¿cuál sería el impacto económico del
autoconsumo sobre las finanzas de las distribuidoras? El
autoconsumo, es decir, la sustitución de consumo que
realizan los clientes de generación distribuida -que pasan
a consumir la energía que autoproducen, dejando de
retirarla de la red-, implica una pérdida de ingresos para las
distribuidoras. Esta pérdida es inevitable, es consecuencia
de la propia definición del modelo. No obstante, y a
manera de adelanto, téngase presente que, en República
Dominicana, dado que la tarifa eléctrica está congelada
(generalmente), esta pérdida de las distribuidoras tiene
un impacto fiscal, porque el Gobierno Central tendrá que
realizar transferencias a las EDEs para que la financien,
agravando el problema eléctrico.
9
 INTRODUCCIÓN

No obstante, como se verá a continuación, hay pérdidas relacionadas al autoconsumo que son evitables.

Uso de la red - Si bien es cierto que el menor retiro de energía implica el ahorro de parte de los costos de generación,
hay otros costos que el autoproductor deja de pagar pero que el sistema sigue afrontando; en particular, los
costos de red. (Véase el diagrama 2). En efecto, como ya se dijo, el cargo por potencia contratada solo cubre parte
del costo de uso de red, mientras que la otra parte de este costo se energiza. Por tanto, el autoconsumo de los
microgeneradores implicará que la distribuidora dejará de ser remunerada por los costos de uso de red que han
sido energizados en la tarifa.

Diagrama 2 – Autoconsumo: sustitución de consumo eléctrico

Fuente: con base en Di Lavello (2023).

Este no pago de los costos de red por parte de la generación
distribuida en baja tensión debería originar, a mediano
plazo, un aumento de la tarifa para el resto de los usuarios
del sistema, a quienes sería distribuido este costo de red
no cubierto. Esto, a su vez, podría provocar que nuevos
usuarios instalaran generación, lo que incrementaría el
desbalance de costos y originaría, por tanto, un nuevo
incremento de tarifas, y así sucesivamente. La literatura
del tema suele llamar “círculo de la muerte” a este bucle.⁸
Adicionalmente, los usuarios con mayores ingresos serían
los que primero instalarían generación, lo que introduce
un componente de inequidad.
En resumen, si se mantienen los mismos cargos tarifarios
a los clientes de generación distribuida que al resto
de clientes, se deja de percibir una parte del costo de
generación (los costos fijos de generación) y una parte
del costo de amortización, operación y expansión de las
redes. Paradójicamente, los clientes que hacen un mayor
uso de la red, porque eventualmente retiran y/o inyectan
energía, son los que menos pagan por el uso de la red.
Además de recuperar la remuneración por el uso de red
incluida en la tarifa de energía, hay dos razones adicionales
por las que debería cobrarse un cargo por potencia más
alto a los clientes de generación distribuida que al resto
de clientes. En primer lugar, debe tenerse en cuenta que
estos clientes, en su mayoría fotovoltaicos, inyectan en las
primeras horas del día, cuando la energía es más barata
(demanda mínima y oferta máxima) y retiran al final del
día, cuando la energía es más cara (demanda máxima y
oferta mínima).

⁸ En República Dominicana, las tarifas están congeladas, por lo que, como se dijo, el impacto es fiscal. Este punto se analiza en detalle más adelante.

10

En segundo lugar, es necesario que el sistema de
distribución sea seguro, estable, es decir, se debe
garantizar la distribución 24/7. Para ello es necesario tener
un respaldo, que se logra con una fuente de energía rápida
(como turbinas a gas) siempre disponible.⁹ El costo de este
respaldo debería ser pagado por todos los participantes del
mercado, y especialmente por los clientes de generación
distribuida, cuyo factor de conversión¹⁰ (relación entre
la capacidad instalada y la generación efectiva) es bajo
y, por tanto, agregan inestabilidad al sistema. Dicha
inestabilidad, y el correspondiente costo de respaldo,
serán mayores cuanto mayor sea la participación en el
total de la generación de las fuentes renovables de bajo
factor de conversión.
Para corregir esta situación, como se verá en la sección 6
del documento, varios países cobran cargos por potencia
-o cargos fijos- más altos a los clientes de generación
distribuida que al resto, dado el mayor uso que hacen de
la red. Como se adelantó, éste no es el caso de República
Dominicana.
3.2.2. ENERGÍA INYECTADA
Adicionalmente, un prosumidor de energía (cliente con
generación) puede compatibilizar su curva de producción
con su curva de demanda inyectando energía a la red de la
distribuidora cuando su producción supera a su consumo
y retirando energía de la red cuando su demanda supera a
su generación.
Como se vio en la sección 1, en el esquema de medición
neta, el ingreso de la distribuidora por consumo neto del
cliente es igual a (Energía Retirada – Energía Inyectada)
x Tarifa. Dado que la tarifa, como se dijo, incluye la
remuneración de parte de los costos de red, al pagar dicha
tarifa por la energía inyectada, la distribuidora no cobra
esa parte de los costos de red al cliente, lo cual constituye
otro subsidio y, como contracara, otra pérdida de las
distribuidoras. (Véase el diagrama 3).
Como se dijo, estos clientes, en su mayoría fotovoltaicos,
inyectan en las primeras horas del día, cuando la energía es
más barata (demanda mínima y oferta máxima) y retiran
al final del día, cuando la energía es más cara (demanda
máxima y oferta mínima), y pese a eso son remunerados a
una tarifa única.
⁹ Eventualmente podría lograrse obligando a los microgeneradores a tener baterías, pero la reglamentación dominicana no lo exige.
¹⁰ Electricity availability factor (EAF).
INTRODUCCIÓN
Para corregir estos problemas propios del esquema de
medición neta, la mayoría de los países de la región, tal
cual se verá en detalle en la sección 6, han adoptado el
esquema tarifario de facturación neta (net billing). En este
esquema, el neteo entre la energía retirada y la inyectada a
la red no se realiza kW a kW, como en la medición neta, sino
mediante la facturación. Es decir, la distribuidora factura
al cliente toda la energía que retiró aplicando la tarifa 1,
y descuenta de dicho monto toda la energía inyectada
valorizada a la tarifa 2, fijada en la reglamentación.
Facturación neta = Energía retirada x Tarifa 1 – Energía
inyectada x Tarifa 2.
La solución radica, claro está, en que la Tarifa 1 sea
mayor que la Tarifa 2. Si la energía inyectada a la red se
factura a precios muy próximos a la tarifa cobrada por la
energía retirada y, además, no hay un límite a la energía
inyectada a la red, esto puede incentivar el surgimiento de
generadores puros conectados a la red de baja tensión.
Adicionalmente, cabe la alternativa de que la Tarifa 1,
cobrada por la energía retirada, sea más cara que la que
paga el resto de los usuarios, para contemplar el mayor
uso de la red de los microgeneradores.
A modo de resumen, de los dos puntos analizados
-autoconsumo y energía inyectada-: los microgeneradores
no solo no pagan los costos de red que están energizados
cuando autoconsumen, sino que, en el esquema de
medición neta, vigente actualmente en República
Dominicana, tampoco los pagan cuando inyectan energía
a la red. Entonces, paradójicamente, los clientes que más
utilizan la red -porque eventualmente retiran y/o inyectan-
son los que menos costos de red pagan. En concreto, si
se les mantienen los mismos cargos y tarifas que al resto,
estos clientes solo pagan una parte de los costos de red
a) cuando se les cobra el cargo por potencia y b) por la
diferencia entre la energía retirada menos la inyectada
cuando ésta es positiva.
Dado esto, se insiste, varios países de la región cobran
cargos por potencia -o cargos fijos- más altos a los clientes
de generación distribuida que al resto, dado el mayor uso
que hacen de la red y, adicionalmente, han adoptado el
esquema de facturación neta.
11
 INTRODUCCIÓN

Diagrama 3 – Pago por energía inyectada a la red eléctrica

CLIENTE SISTEMA ELÉCTRICO DESAJUSTE

Ingreso por la Costo ahorrado Costos que se
energía inyectada mantienen

Generación

Cargo de Energía Se paga más que el

ahorro del sistema =>
subsidio

Fuente: con base en Di Lavello (2023).

3.3. PECULIARIDADES DEL CASO DOMINICANO
Como se explicó en la sección 1, la Resolución 106-2019 de
la Superintendencia de Electricidad (SIE) dispuso que las
distribuidoras del Sistema Eléctrico Nacional Integrado
(SENI) no cobren el cargo por potencia cuando la
capacidad instalada de los clientes -en general, no solo los
de generación distribuida- sea menor a 10 kW. Esto implica
que este grupo de clientes no pague por el uso de red ni
cuando autoconsumen ni cuando inyectan, porque, como
se explicó, el esquema de medición neta vigente remunera
la energía inyectada a la misma tarifa que se cobra por la
energía retirada.
En resumen:
a) para los clientes BTS de generación distribuida con
potencia contratada menor a 10 kW (Diagrama 4):
i) no se recupera la parte del costo de red que está en el
cargo por potencia, del cual están exonerados;
ii) cuando autoconsumen, no se recupera la parte del
costo de red que está energizada, porque no se cobra a
estos clientes un cargo por potencia -o cargo fijo- más alto
que el del resto de los clientes;
iii) no se toma en cuenta que estos clientes inyectan cuando
la energía es barata y retiran cuando es cara (“Horario” en
Diagrama 4), y por esta razón también deberían pagar un
cargo por potencia -o cargo fijo- más alto que el del resto
de los clientes;
iv) no se considera que estos contribuyentes deben
contribuir a financiar el costo de la seguridad de que el
sistema funcione 24/7 (“24/7” en Diagrama 4); y
v) al estar vigente un esquema de medición neta, que paga
una tarifa por la energía inyectada igual a la que cobra por
la energía retirada, este grupo de clientes tampoco pagan
por el uso de red cuando inyectan energía.
vi) En definitiva, solo pagan por el uso de red por la

Diagrama 4

Clientes BTS con potencia contratada menor o igual a 10 kW

Costos Costos Costos

Costos de Energía Comerciales
de Red de Red
Costos =>
Cargo Factura por Energía
por Cargo Fijo
Cargos/Tarifas => Potencia <-------> <------------------------>

Costos que no se pagan <--- Costos de Red ---> <-- Horario + 24/7 -->

Nota: en rojo, los costos que el cliente no paga; en azul, los que sí paga.
Fuente: elaboración propia

12
 INTRODUCCIÓN

diferencia entre energía retirada menos inyectada cuando b) para el resto de los clientes de generación distribuida,
ésta es positiva. que sí pagan el cargo por potencia, son válidos los puntos
ii a v anteriores. (Diagrama 5).

Diagrama 5

Clientes BTS con potencia contratada menor o igual a 10 kW

Costos Costos Costos

Costos de Energía Comerciales
de Red de Red
Costos =>
Cargo Factura por Energía
por Cargo Fijo
Cargos/Tarifas => Potencia <-------> <------------------------>

Costos que no se pagan <--- Costos de Red ---> <-- Horario + 24/7 -->
Nota: en rojo, los costos que el cliente no paga; en azul, los que sí paga.
Fuente: elaboración propia

Se insiste en que estas pérdidas de las distribuidoras no pueden trasladarse al resto de los usuarios desde que las
tarifas están congeladas. Esto agrava el problema eléctrico de República Dominicana, que explica poco menos de
la mitad del déficit fiscal, y termina impactando en las finanzas públicas, porque el Gobierno Central debe transferir
a las distribuidoras los montos necesarios para las pérdidas de las EDEs.

13
 INTRODUCCIÓN

4. Estimación del impacto de los clientes de generación distribuida, ii) el no cobro

del cargo por potencia a los clientes BTS con capacidad
sobre las finanzas de instalada menor a 10 kW, y iii) la sobre-remuneración
de la energía que estos clientes inyectan a la red de
las distribuidoras de distribución.

República Dominicana La suma de las pérdidas de las tres distribuidoras pasó

de RD$ 1,147.7 millones en 2018 (US$ 23.2 millones)
de la tarificación de la a RD$ 4,990.4 millones en 2023 (US$89.1 millones),

generación distribuida multiplicándose por más de 4 veces en términos

Una vez presentados los conceptos teóricos de los
esquemas tarifarios aplicados a la generación distribuida
y sus impactos en las finanzas de las distribuidoras, en
esta sección se estima dicho impacto para las EDEs de
República Dominicana, considerando, claro está, las
particularidades del esquema tarifario aplicado en el país.
4.1. PÉRDIDA TOTAL
El cuadro 5 muestra la estimación de la pérdida de las
EDEs originada en la generación distribuida en el periodo
2018-2023. Esta pérdida se origina en i) el autoconsumo
nominales entre ambos años, lo que evidencia el impacto
creciente de la generación distribuida en las finanzas
de las distribuidoras. En el caso de EDENORTE, esta
tendencia creciente ha sido aún más marcada, pasando
de RD$ 107.5 millones en 2018 (US$ 2.2 millones) a RD$
2,973.2 millones en 2023 (US$ 53.1), multiplicándose por
más de 27 veces en términos nominales entre ambos
años.
EDENORTE también es la distribuidora que actualmente
registra la pérdida más alta (RD$ 2,973.2 millones en
2023; US$ 53.1 millones), lo que representa casi el 60% de
la suma de las pérdidas de las tres distribuidoras. Por su
parte, la pérdida de EDESUR es poco menos del 28% del
total y la de EDEESTE roza el 13%.

Cuadro 5

Fuente: elaboración propia.

¹¹ La información utilizada, sus fuentes, los supuestos realizados y las demás consideraciones metodológicas están explicitados en el Anexo 1.

14

Para poner en contexto estas cifras, en el cuadro 6
se muestra que la suma de las pérdidas de las tres
distribuidoras originada en la generación distribuida pasó
de 1.2% a 3.0% de su compra de energía entre 2018 y 2023.
Por su parte, las pérdidas como porcentaje del cobro de
energía, que en 2018 eran 1.5%, alcanzan ahora el 4.6%.
Cuadro 6
Fuente: elaboración propia.
4.2. AUTOCONSUMO DE LOS MICROGENERADORES
Para estimar la pérdida de ingresos que sufren las
distribuidoras por el autoconsumo -sustitución de
consumo- de los microgeneradores, se multiplicó el
autoconsumo por la tarifa correspondiente. Debe
reconocerse que ésta no es la pérdida neta de las
distribuidoras porque, como se dijo, hay ciertos ahorros
en la compra de energía, producto de la menor energía
retirada, ahorros respecto a los cuales no se cuenta
con información. (Véase nuevamente el diagrama 2).
No obstante, como se discutió más arriba, hay costos
que se mantienen, como los costos fijos asociados a
la compra de energía y el costo de dar estabilidad a la
red distribución 24/7, que es más alto cuando mayor
penetración tengan las renovables, cuyo capacity
factor es menor que el de las demás energías. En las
consideraciones metodológicas incluidas en el Anexo
1, se detallan la información utilizada y los supuestos
adoptados para realizar esta estimación.
INTRODUCCIÓN
También desde esta perspectiva la pérdida de EDENORTE
es actualmente la más alta (5.8% de su compra de energía
y 7.7% de su cobro de energía), seguida de EDESUR (2.3%
y 3.1%, respectivamente) y de EDEESTE (1.1% y 2.4%),
respectivamente.
En el cuadro 7 se muestra la pérdida de las distribuidoras
originada exclusivamente en el autoconsumo
-sustitución de consumo- de los clientes de generación
distribuida en el periodo 2018-2023.
La suma de las pérdidas de las tres distribuidoras por
este concepto pasó de RD$ 945.7 millones en 2018 (US$
19.1 millones) a RD$ 4,013.8 millones en 2023 (US$ 71.7
millones), multiplicándose por 4.2 veces en términos
nominales entre ambos años, lo que evidencia el
impacto creciente de la generación distribuida en las
finanzas de las distribuidoras. En el caso de EDENORTE,
esta tendencia creciente ha sido aún más marcada,
pasando de solo RD$ 83.8 millones en 2018 (US$ 1.7
millones) a RD$ 2,332.0 millones en 2023 (US$ 41.6),
multiplicándose por más de 27 veces en términos
nominales entre ambos años.
En el periodo analizado, la pérdida por autoconsumo
representó, en promedio, el 81% de la pérdida total.
15
 INTRODUCCIÓN

Cuadro 7

Fuente: elaboración propia.

Nuevamente, para poner en contexto estas cifras, en el cuadro 8 se muestra que la suma de las pérdidas de las
tres distribuidoras originada en el autoconsumo de los clientes de generación distribuida pasó de 1.0% a 2.4% de su
compra de energía entre 2018 y 2023. Por su parte, las pérdidas como porcentaje del cobro de energía pasaron de
1.2% en 2018 a 3.7% en 2023.

Cuadro 8

Fuente: elaboración propia.

4.3. MICROGENERADORES BTS CON POTENCIA
CONTRATADA MENOR A 10 KW
Como ya se dijo, una Resolución de la SIE dispuso que las
distribuidoras del SENI -no los Sistemas Aislados- no cobren
el cargo por potencia a los clientes BTS -tarifa simple-
cuando su potencia instalada sea menor o igual a 10 kW.
Para estimar la pérdida de las EDEs por este concepto se tomó
el número de clientes BTS con potencia contratada menor
a 10 kW y se les aplicó el cargo por potencia promedio del
resto de los contribuyentes, que sí lo pagan. La información

16
 INTRODUCCIÓN

utilizada y sus fuentes, los supuestos utilizados para realizar
la estimación y otras consideraciones metodológicas están
explicitadas en el Anexo 1.
La suma de las pérdidas de las EDEs por este concepto pasó
de RD$ 55.5 millones en 2018 (US$ 1.1 millones) a RD$ 334.1
en 2023 (US$ 6.0 millones). Actualmente representan un
0.2% de su compra de energía y un 0.3% de su cobro por la
venta de energía. (Cuadros 9 y 10). En el periodo analizado,
la pérdida por este concepto representó, en promedio, el
6% de la pérdida total.

Cuadro 9

Fuente: elaboración propia.

Cuadro 10

Fuente: elaboración propia.

4.4. VENTA DE EXCEDENTES DE LA GENERACIÓN
DISTRIBUIDA
Como se vio, en términos generales¹², en el esquema
tarifario de medición neta vigente en República Dominicana,
la energía inyectada es remunerada a la misma tarifa que la
distribuidora cobra por la energía retirada. Dado que esta
tarifa, como se ha explicado, contiene parte de los costos
de red, la generación distribuida no paga este costo, lo cual
constituye un subsidio para el cliente y una pérdida para la
distribuidora.

¹² Esto no es así cuando a fin de año el cliente tiene un crédito por energía inyectada mayor a la retirada. Ese caso se discutió en detalle en la sección 1 del
documento.

17
 INTRODUCCIÓN

Para estimar esta pérdida se simuló que, en vez del esquema
tarifario actual de medición neta, ha estado vigente uno de
facturación neta y la energía inyectada ha sido remunerada a
las 2/3 partes de la tarifa vigente. Dicho de otro modo, que la
pérdida ha sido equivalente a 1/3 de la tarifa. La información
utilizada, sus fuentes, los supuestos utilizados para realizar
la estimación y otras consideraciones metodológicas se
explicitan en el Anexo 1.
El cuadro 11 muestra que la suma de las pérdidas de las
tres distribuidoras por este concepto pasó de RD$ 146.6
millones en 2018 (US$ 3.0 millones) a RD$ 642.6 millones en
2023 (US$ 11.5 millones), multiplicándose por más de 4 veces
(4.4) en términos nominales entre ambos años, lo que ilustra
sobre el impacto creciente de la generación distribuida
en las finanzas de las distribuidoras. Nuevamente, en el
caso de EDENORTE, esta tendencia creciente ha sido aún
más marcada, pasando de solo RD$ 17.9 millones en 2018
(US$ 0.4 millones) a RD$ 432.8 millones en 2023 (US$ 7.7),
multiplicándose por más de 24 veces en términos nominales
entre ambos años.
En el periodo analizado, la pérdida por autoconsumo
representó, en promedio, el 13% de la pérdida total.

Cuadro 11

Fuente: elaboración propia.

Nuevamente, para poner en contexto estas cifras, en el cuadro 12 se muestra que la suma de las pérdidas de las tres
distribuidoras originada en la sobre-remuneración de la energía inyectada por los clientes de generación distribuida pasó de
0.2% a 0.4% de su compra de energía entre 2018 y 2023. Por su parte, las pérdidas como porcentaje del cobro de energía, que
en 2018 eran 0.2%, alcanzan actualmente el 0.6%.

Cuadro 12

Fuente: elaboración propia.

18

5. Impacto de la
generación distribuida en
las finanzas públicas
Además de regímenes tarifarios generosos, otra de
las herramientas utilizadas para promover las energías
renovables en general, y la generación distribuida en
particular, ha sido la concesión de incentivos tributarios
a su instalación. En esta sección del documento se
revisan los incentivos tributarios otorgados en República
Dominicana, su impacto en la recaudación y, finalmente,
se realiza un análisis costo-beneficio de dichos incentivos.
5.1. Los incentivos tributarios a la generación distribuida
en República Dominicana
El artículo 5 de la Ley 57-07, sobre Incentivo al desarrollo de
fuentes renovables de energía y sus regímenes especiales,
define el ámbito de aplicación de los incentivos tributarios,
es decir, cuáles son los proyectos de producción de
energías renovables beneficiados. A los fines de este
trabajo interesa destacar las instalaciones electro-solares
(fotovoltaicas) de cualquier tipo y de cualquier nivel de
potencia y las instalaciones termo-solares (energía solar
concentrada) de hasta 120 MW de potencia por central.
También están comprendidos, entre otros, los parques
eólicos cuya potencia no supere los 50 MW; las micro y
pequeñas instalaciones hidroeléctricas cuya potencia no
supere los 5 MW; las centrales eléctricas que utilicen como
combustible principal la biomasa primaria y cuya potencia
instalada no supere los 80 MW por central; y las plantas de
producción de bio-combustibles de cualquier magnitud o
volumen de producción.
Los incentivos tributarios otorgados son los siguientes:
i) Exoneración de todo impuesto a la importación - El
artículo 9 de la Ley 57-07 dispone la exención de todo
impuesto sobre la importación (arancel e ITBIS) de
equipos, maquinarias y accesorios necesarios para la
producción de energía de fuentes renovables. Por el
tratamiento igualitario que dispone el Código Tributario,
también están exentas de ITBIS las compras locales.
El párrafo II de este artículo lista los equipos, partes y
¹³ El concepto de gasto tributario fue utilizado por primera vez por Stanley Surrey, en noviembre de 1967. El entonces secretario asistente para Política Fiscal
del Departamento del Tesoro de Estados Unidos sostenía que las deducciones, exenciones y otros beneficios concedidos en el Impuesto sobre la Renta
no formaban parte de la estructura propia del impuesto y constituían, en realidad, gasto público ejecutado a través del sistema tributario en lugar de ser
realizado directamente a través del Presupuesto.
INTRODUCCIÓN
sistemas exentos, dentro de los cuales interesa destacar
los paneles fotovoltaicos y celdas solares individuales
para ensamblar los paneles; acumuladores estacionarios
de larga duración; inversores y/o convertidores
indispensables para el funcionamiento de los sistemas de
energías renovables; e inversores sincrónicos para poder
despachar a la red la energía sobrante.
ii) Crédito a la inversión en el Impuesto sobre la Renta
– Está vigente un crédito en el Impuesto sobre la Renta
(ISR) de hasta un 40% del costo de la inversión en equipos.
Este crédito fiscal debe ser descontado en tres años, a
razón de 1/3 cada año.
Es importante señalar que este incentivo es otorgado
exclusivamente “a los propietarios o inquilinos de
viviendas familiares, casas comerciales o industriales que
cambien o amplíen para sistemas de fuentes renovables
en la provisión de su autoconsumo energético privado”,
es decir, solo se les otorga a los clientes de generación
distribuida. El resto de los beneficiarios de la Ley 57-07 no
acceden al crédito en el ISR.
Inicialmente, el artículo 12 de la Ley 57-07 dispuso que
este crédito en el ISR fuese del 75%, pero el artículo 32
de la Ley 253-12, de noviembre de 2012, lo redujo al 40%.
Cabe destacar, además, que el artículo 10 de la Ley 57-07
disponía la exoneración del ISR por un periodo de diez
años, con vigencia máxima hasta el año 2020, sobre la
renta proveniente de la generación y venta de electricidad
y otras formas de energía generadas con fuentes
renovables. El artículo 32 de la Ley 253-12 derogó esta
exoneración.
iii) Reducción de la retención por pago de intereses
al exterior – El artículo 5 de la Ley 57-07 dispone que la
retención de Impuesto sobre la Renta sobre el pago
de intereses al exterior se reduzca de 27% a 5% para
los proyectos de generación de energía con fuentes
renovables desarrollados al amparo de dicha ley.
5.2. Estimación del gasto tributario
La concesión de estos incentivos tributarios implica
una renuncia de recaudación que suele llamarse gasto
tributario.¹³ La información utilizada, sus fuentes, los
supuestos adoptados y las demás consideraciones
metodológicas de la estimación del gasto tributario
realizada, están explicitados en el Anexo 2 del documento.
19
 INTRODUCCIÓN

Se ha estimado que los incentivos tributarios otorgados a la generación distribuida implicaron una renuncia fiscal de
RD$ 12,740 millones en los últimos diez años (2014-2023), aproximadamente US$ 250 millones, un promedio de US$ 25
millones por año. (Cuadro 13).

Cuadro 13 – Estimación del gasto tributario asociado a la generación distribuida

Fuente: elaboración propia.

Es importante remarcar que las pérdidas que el régimen
de generación distribuida ocasiona a las EDEs, estimadas
en la sección anterior del documento, no se trasladan
a la tarifa de los demás usuarios, que está congelada.
Por tanto, estas pérdidas de las distribuidoras deben ser
financiadas con transferencias del Gobierno Central a las
distribuidoras. En consecuencia, no solo los incentivos
tributarios tienen un impacto fiscal (directo) sino que
también lo tienen (indirectamente) las pérdidas de las
distribuidoras originadas en el régimen tarifario de la
generación distribuida, por lo que, desde este punto de
vista, deberían sumarse al gasto tributario aquí estimado.
5.3. ESTIMACIÓN DEL BENEFICIO Y ANÁLISIS COSTO-
BENEFICIO
Para realizar un análisis costo-beneficio, hay que i) definir y
ii) valorizar el beneficio atribuible al régimen de generación
distribuida.¹⁴
En primer lugar, el principal beneficio de la generación
distribuida -y de todas las fuentes renovables- es la menor
emisión de dióxido de carbono (CO2) respecto a las demás
fuentes de energía.¹⁵ Las tasas de emisión de CO2 por tipo de
combustible deben considerarse como cifras aproximadas,
puesto que pueden variar según las tecnologías y prácticas
específicas utilizadas en la producción y uso de cada
combustible, entre otras variables. Las tasas de emisión de
CO2 consideradas en este trabajo son: i) carbón: entre 2.2
y 2.7 kgs de CO2 por kWh; y ii) gasoil: entre 2.2 y 2.5 kgs de
CO2 por kWh. Por su parte, en esta estimación, la energía
solar fotovoltaica fue considerada una fuente de energía
limpia, debido a que no emite CO2 durante su operación
directa. ¹⁶
De acuerdo a la estimaciones realizadas en este trabajo, en
el caso de que la generación distribuida hubiese sustituido
al carbón o al gasoil, la menor emisión ya habría superado
al millón de toneladas de CO2 por año en 2022 y 2023.
En segundo lugar, para darle valor al ahorro implícito en la
sustitución de combustibles fósiles por fuentes de energía
limpia, es necesario considerar el llamado precio del
carbono o precio social del carbono. El precio del carbono
es el precio/costo de emitir gases de efecto invernadero a
la atmósfera; permite estimar monetariamente los costos
de los daños ambientales causados por la emisión de CO2 o,
visto desde el otro lado, el ahorro que implica la sustitución
de los combustibles fósiles por energías limpias.

¹⁴ Todas las consideraciones metodológicas relativas a la estimación del beneficio y al análisis costo-beneficio, se explicitan en el Anexo 3.
¹⁵ Entre los beneficios debería incluirse el número (y la calidad) de los empleos que crea la generación distribuida. Esto excede el alcance de este trabajo. No
obstante, debe tenerse presente que si los proyectos de generación distribuida ocupan a personas que ya estaban trabajando, dichos empleos serán costos (y
no beneficios) de los proyectos.
¹⁶ Es decir, no se consideraron las emisiones de CO2 originadas en la fabricación de los paneles solares.

20
 INTRODUCCIÓN

En este trabajo, para estimar el beneficio de sustituir el
carbón y el gasoil por energía proveniente de la generación
distribuida se consideraron dos escenarios. En el primer
escenario, se tomó un precio del carbono de US$ 32.6 por
tonelada de CO2 equivalente emitida, que es la mediana de
los precios del carbono en los países seleccionados por el
Banco Mundial. En el segundo escenario, se tomó el precio
del carbono implícito en el Impuesto a las Emisiones de
CO2 vigente en República Dominicana.
Escenario 1 - A partir de la capacidad de generación
distribuida instalada por año y del factor de planta o
factor de capacidad (capacity factor), se calculó la energía
generada por la generación distribuida. A partir de ahí se
supuso, en primer lugar, que toda esa generación sustituyó
al carbón y, en segundo lugar, que sustituyó al gasoil.
Cuadro 14 - Escenario 1 - Estimación del beneficio de
sustituir carbón y gasoil por generación distribuida
Si se compara la renuncia fiscal estimada en la sección 5.2
del documento con el beneficio aquí estimado, se tiene
una idea del costo-beneficio de la generación distribuida
en República Dominicana.
Por un lado, la renuncia fiscal de US$ 247.5 millones en 2014-
2023 fue un casi un 50% superior al beneficio de sustituir
el carbón por generación distribuida en dicho periodo
(US$ 167.0 millones). Por otro lado, esa renuncia fiscal
fue un 55% superior al beneficio de sustituir el gasoil por
generación distribuida en 2014-2023 (US$ 160.2 millones).
Como se ve, en ambos casos la relación costo-beneficio
es claramente negativa. Pero, además, es importante
tener en cuenta que, como se ve más adelante, existen
indicios claros de que el beneficio se obtendría igualmente
en ausencia de la renuncia fiscal aquí estimada, es decir,
que la instalación de generación distribuida igualmente
se concretaría aun en ausencia de todos o algunos de los
incentivos tributarios otorgados actualmente (que serían,
por tanto, redundantes).

Solar x Solar x Escenario 2 – Como se dijo, en este escenario se consideró

Carbón - Gasoil -
Mill US$ Mill US$ el precio del carbono implícito en el Impuesto a las
Emisiones de CO2 vigente en República Dominicana. Este
2014 1.3 1.2 impuesto depende de los gramos de CO2 por kilómetro
2015 2.4 2.3 que emitan los vehículos, a saber:
2016 4.0 3.8 - emisiones inferiores a 120 gramos de CO2 por km: 0%
2017 7.3 7.0
del valor CIF del vehículo;

2018 11.7 11.2 - emisiones mayores a 120 y hasta 220 gramos de CO2
por km: 1% del valor CIF del vehículo;
2019 16.5 15.8

2020 19.8 19.0

- emisiones mayores a 220 y hasta 380 gramos de CO2
por km: 2% del valor CIF del vehículo; y
2021 27.7 26.5
- emisiones superiores a 380 gramos de cO2 por km:
2022 35.5 34.1 3% del valor CIF del vehículo.
2023 40.8 39.2
Supongamos el caso de un Hyundai Santa Fé cero km, una
Total 167.0 160.2 de las marcas de automóviles más vendidas en República
Prom anual 16.7 16.0
Dominicana, que tenga un valor CIF de US$ 35,000 y emita
170 gramos de CO2 por kilómetro¹⁷. Si se supone que dicho
Fuente: elaboración propia. vehículo tendrá una vida útil de 400,000 kilómetros, emitirá
a lo largo de dicha vida útil 68 toneladas de CO2 (170 x
El cuadro 14 muestra que, si la generación distribuida 400,000 / 1,000,000). Dado que el impuesto pagado es de
hubiese sustituido al carbón, el beneficio de tal sustitución US$ 350, el precio del carbono implícito en el Impuesto a
habría sido de US$ 167.0 millones en 2014-2023, un las Emisiones de CO2 será de US$ 5.1 la tonelada (350 / 68).
promedio anual de US$ 16.7 millones. Por su parte, si Dicho de otro modo, éste es el costo de la emisión de una
hubiese sustituido al gasoil, el beneficio habría sido muy tonelada de CO2 que supone la aplicación del Impuesto a
similar, de US$ 160.2 millones, un promedio anual de US$ las Emisiones de CO2 vigente en República Dominicana. Es
16.0 millones. un valor equivalente a solo 15% de la mediana de los precios
del carbono en los países relevados por el Banco Mundial.

¹⁷ De acuerdo a la página web oficial del fabricante, la emisión de los Hyundai Santa Fé oscila entre 170 y 230 gramos de CO2 por kilómetro.

21
 INTRODUCCIÓN

En el cuadro 15 se muestra el beneficio de sustituir el carbón
y el gasoil por la generación distribuida si se toma este valor
del precio del carbono. Si la generación distribuida hubiese
sustituido al carbón, el beneficio de tal sustitución habría
sido de US$ 26.1 millones en 2014-2023, un promedio anual
de US$ 2.6 millones. Por su parte, si hubiese sustituido al
gasoil, el beneficio habría sido muy similar, de US$ 25.1
millones, un promedio anual de US$ 2.5 millones.
Si se compara la renuncia fiscal estimada en la sección 5.2
del documento con el beneficio aquí estimado, se tiene
una idea del costo-beneficio de la generación distribuida
en República Dominicana.
Pero, además, se insiste en que, como se ve en otras
secciones del documento, existen indicios claros de que
el beneficio se obtendría igualmente en ausencia de la
renuncia fiscal estimada, es decir, que la instalación de
generación distribuida igualmente se concretaría en
ausencia de todos o algunos de los incentivos tributarios
otorgados actualmente.
Cuadro 15 – Escenario 2 – Estimación del beneficio de
sustituir carbón y gasoil por generación distribuida

Por un lado, la renuncia fiscal de US$ 247.5 millones en

2014-2023 fue casi 10 veces (9.5) el beneficio de sustituir el
carbón por generación distribuida en dicho periodo (US$
26.1 millones). Por otro lado, esa renuncia fiscal también
fue casi 10 veces (9.9) el beneficio de sustituir el gasoil por
generación distribuida en 2014-2023 (US$ 25.1 millones).

Como se ve, en este caso la relación costo-beneficio es

significativamente negativa. Dicho de otro modo, si el
costo para el país de la emisión de la tonelada de CO2 es
el implícito en el diseño del Impuesto a las Emisiones de
CO2 (US$ 5.1), la renuncia fiscal para la promoción de la
generación distribuida es casi 10 veces su beneficio y, por
tanto, no se justificaría. Fuente: elaboración propia.

La estimación del impacto fiscal

realizada por las empresas instaladoras
de paneles solares – Una revisión crítica
Un informe reciente elaborado por una empresa dedicada a la instalación de paneles fotovoltaicos sostiene que
la renuncia fiscal para la promoción de la instalación de estos paneles ha sido superada ampliamente por el
aumento de recaudación del ISR -en cabeza de empresa y por dividendos distribuidos-. Se considera que esta
conclusión es incorrecta por los argumentos que se exponen a continuación.

El razonamiento del informe es el siguiente. Teniendo en cuenta que en los últimos diez años se han instalado
240 MW de paneles solares por un monto de US$ 300 millones, la renuncia fiscal originada en el crédito de 40% de
la inversión contra el ISR, utilizable en tres años, ha sido de US$ 120 millones. Según el informe, quienes instalan
los paneles amortizan la inversión, en promedio, en tres años, por lo que han ahorrado US$ 100 millones por año
(US$ 300 millones/3). Esa reducción de costos representa un beneficio gravable por el ISR en cabeza de empresa
(27%) y sobre los dividendos distribuidos (10%) y, por tanto, implica una recaudación adicional para DGII de US$ 37
millones anuales, US$ 370 millones en los diez años del análisis. Teniendo en cuenta que, a su vez y siempre según
el informe, las empresas instaladoras aportaron durante los diez años unos US$ 11 millones por concepto de ISR,

22
 INTRODUCCIÓN

la suma de nuevos ingresos tributarios (US$ 381 millones) fue más de tres veces el monto del gasto tributario
(US$ 120 millones), resultando un saldo neto a favor del fisco de US$ 261 millones en los diez años considerados.

Según nuestro criterio, este análisis adolece de varios problemas, a saber:

i) La inversión de US$ 300 millones no se realizó el día uno del período de diez años considerado, sino que,
por el contrario, se fue realizando gradualmente a lo largo del mismo.

ii) Si, como dice el informe, la inversión se amortiza en tres años es porque en cada uno de esos primeros tres
años hay un crédito en el ISR equivalente a la tercera parte del 40% de la inversión. Es decir, si el costo de la
inversión fue 30, se amortizó en los primeros 3 años porque en cada uno de esos años hubo 4 de crédito en
el ISR (30 x 0.4 / 3) y 6 de ahorro de costos. Por un lado, este crédito fiscal no representa un ahorro de costos
y, por tanto, no implica una mayor base imponible del ISR; es directamente un crédito contra el ISR a pagar.
Por otro lado, el crédito fiscal no beneficia al contribuyente todos los años, sino solamente los tres primeros.

En resumen: i) el beneficio a considerar a efectos de una (potencial) mayor recaudación es 6 y no 10, y ii) su
extensión es diferente según el momento en que se haya realizado la inversión: será de 10 años si la inversión se
realizó el año 1 pero solamente de un año si se realizó el año 10.

El cuadro adjunto, donde se supone una distribución uniforme de la inversión de US$ 300 millones a lo largo de
los 10 años, muestra que la recaudación adicional -en el supuesto de que el ahorro de costos estimado siempre
tributa ISR en cabeza de empresa y por dividendos distribuidos- es prácticamente la misma (US$ 113,2 millones)
que el gasto tributario (US$ 108,0 millones. Nótese que el gasto tributario en el ISR no es US$ 120 millones sino
US$ 108 pues en los años 9 y 10 la renuncia fiscal es por dos y un año, respectivamente). Por tanto, hasta este
punto del análisis, el incentivo tributario sería neutral y no significativamente positivo para el fisco, como señala
erróneamente el informe analizado.

23
 INTRODUCCIÓN

Pero el análisis debe continuar, porque el informe tiene más limitaciones, a saber:

1) Parte de los paneles solares han sido colocados por personas físicas, no por empresas. En este caso, los ahorros
generados por la instalación de los paneles no se convierten en beneficios gravables -ni por el 27% de ISR Empresas
ni por el 10% sobre dividendos distribuidos-. Es decir, en este caso no hay ningún aumento de recaudación.

Según la CNE, aproximadamente un 25% de la capacidad instalada corresponde a clientes residenciales. Por tanto,
hay que corregir la estimación deduciendo US$ 90 millones (300 x 0.25 x 0.40) en el periodo de 10 años analizado.

2) El informe también calcula mal el ISR sobre los dividendos, aplicando el 10% directamente sobre el ahorro de
costos. Lo que corresponde es aplicar el 10% sobre el ahorro de costos una vez deducido el ISR en cabeza de
empresa, es decir, [Ahorro x (1-0.27) x 0.10]. En consecuencia, por este concepto hay que deducir US$ 27 millones
en el periodo de 10 años analizado.

Por tanto, la ganancia de recaudación de US$ 370 millones se reduce a US$ 32 millones, a saber:

Ganancia en ISR si todos los clientes fueran empresas: US$ 84 millones (ver cuadro anterior)

Ganancia en la recaudación de ISR sobre dividendos: US$ 24 millones (ver cuadro anterior)

Corrección a la baja por clientes residenciales: US$ 92 millones

Ganancia por ISR de las empresas que instalan paneles: US$ 11 millones.

La ganancia de recaudación así corregida representa menos de la décima parte de la estimada por la empresa
instaladora de paneles solares.

3) Respecto a la otra parte de la ecuación, el gasto tributario, el informe solo considera el ISR, olvidando incluir la
renuncia de recaudación de los impuestos a la importación (arancel e ITBIS), del ITBIS por las compras locales y la
reducción de la retención de ISR (de 27% a 5%) por los intereses pagados al exterior. Se estimó que esta renuncia
totalizó US$ 115 millones en la última década (2014-2023). (Véase el punto 5.2 del documento).

4) Adicionalmente, el informe olvida considerar que las pérdidas de las distribuidoras originadas en el régimen
tarifario actualmente vigente para la generación distribuida no se trasladan a la tarifa del resto de los clientes, que
está congelada. Por tanto, estas pérdidas deben ser financiadas mediante transferencias del Gobierno Central,
por lo que, indirectamente, también tienen un impacto fiscal y deberían, desde este punto de vista, ser sumadas
al gasto tributario.

5) Finalmente, el análisis realizado por la empresa instaladora, supone que, en ausencia de los incentivos
tributarios, la inversión en paneles solares no se realizaría. Por el contrario, como se verá a continuación, hay
indicios de que esto no es así.

24

5.5. ¿DEBE REPÚBLICA DOMINICANA MANTENER LOS
INCENTIVOS TRIBUTARIOS?
Como se verá en la próxima sección del documento, son
muy pocos los países que han concedido incentivos fiscales
para impulsar el desarrollo de la generación distribuida.
Entre 12 países analizados, solo dos (Costa Rica y Estados
Unidos) lo han hecho, con la salvedad importante de
que Costa Rica retiró los incentivos a la generación
fotovoltaica cuando la tecnología maduró, siguiendo un
argumento similar al de la industria infantil: proteger solo
hasta que la industria madure. Actualmente, Costa Rica
concede incentivos fiscales temporales -por diez años- a la
generación con base en hidrógeno verde.
República Dominicana no ha seguido la línea de la mayoría
de los países de la región. Si bien el país ha derogado
algunos incentivos tributarios concedidos inicialmente
(la exoneración del ISR sobre la renta proveniente de
la generación y venta de electricidad y otras formas de
energía generadas con fuentes renovables) y ha reducido
otros (el crédito en el ISR del 75% de la inversión), mantiene
un crédito del 40% de la inversión, aunque, como se vio, la
generación distribuida ya se ha desarrollado y, sobre todo,
la tecnología ha madurado.
Prueba de ello es que tanto los costos de instalación de los
paneles fotovoltaicos como los de generación de energía
Gráfica 2 – Paneles fotovoltaicos: costo total de instalación – En US$ por kW
Fuente: IRENA.
INTRODUCCIÓN
eléctrica a partir de ellos son significativamente menores
que una década atrás, cuando comenzó su implementación
en República Dominicana. (Véanse las gráficas 2 y 3). La
fuerte irrupción de China en este mercado, a partir de
2013, provocó una caída del precio del silicio –material del
que se construyen las células fotovoltaicas de los paneles
solares- y, adicionalmente, un avance en la tecnología de
construcción de dichos paneles disminuyó la cantidad
necesaria de silicio.
El costo total de instalación de los paneles fotovoltaicos fue
de US$ 883 / kW en 2020, un 81% menos que en 2010 (US$
4,731 / kW). Por su parte, el costo de generación eléctrica
con paneles fotovoltaicos cayó un 85% entre 2010 y 2020,
pasando de US$ 38.1 centavos / kWh a US$ 5.7 centavos /
kWh.
Tomando como base el año 2012, que es el primero para
el cual la CNE publica información sobre la generación
distribuida en el país, el costo total de instalación de los
paneles fotovoltaicos cayó un 64%, pasando de US$ 3,021
US$ / kW en dicho año a US$ 883 / kW en 2020. A su vez,
el costo de generación eléctrica con paneles fotovoltaicos
cayó un 74% entre 2012 y 2020, pasando de US$ 21.7
centavos / kWh a US$ 5.7 centavos / kWh. Con esta caída tan
significativa de los costos, es difícil encontrar argumentos
para continuar manteniendo los incentivos tributarios, en
particular el crédito del 40% de la inversión en el ISR.
25
 INTRODUCCIÓN

Gráfica 3 – Costo de generación de energía eléctrica con paneles fotovoltaicos – En US$ por kWh

Nota: Costo energético nivelado promedio (LCOE, por sus siglas en inglés).
Fuente: IRENA.

Se estima que, actualmente, los autoproductores

Cuadro 16 – Tiempo de recuperación de la
recuperan su inversión en un plazo de aproximadamente inversión en la situación actual
dos años y medio. (Cuadro 16). En efecto, considérese
un autoproductor que instala 10 kW a un costo total de
instalación de US$ 883 por kW¹⁸. Se supone que este
precio es CIF, es decir, no incluye aranceles ni ITBIS,
ambos exonerados. Por tanto, solo resta deducir el
crédito en el ISR, equivalente a un 40% de la inversión.¹⁹
En consecuencia, resulta que el costo después de los
incentivos es de US$ 5,298.

Si, en un escenario conservador, se considera un

capacity factor de la energía fotovoltaica de 14%, 10 kW
de capacidad instalada generarían 1,042 kWh de energía
al mes, aproximadamente. A una tarifa de RD$ 9.5 el
kWh esto implicaría una generación mensual de energía
de US$ 177. Éste sería el ahorro del autoproductor.
Dividiendo el costo de los paneles después de incentivos
sobre esta energía generada, resulta que la inversión se Fuente: elaboración propia.

recupera en 2 años y medio (5,298 / 177).

¹⁸ Cifra tomada de IRENA para el año 2020, último dato publicado por esa institución. Véase https://www.irena.org/Data/View-data-by-topic/Costs/Global-
Trends.
¹⁹ Como se vio, este crédito debe utilizarse en tres años, a razón de 1/3 cada año. Con fines de simplificar el análisis, aquí se simuló su utilización total el mismo
año de la inversión.

26
 INTRODUCCIÓN

Supóngase ahora que se deroga el crédito en el ISR. No se simula el impacto de la derogación de la

El Cuadro 17 muestra que, en este caso, la inversión se exoneración del ITBIS en la importación porque un
recuperaría en poco más de 4 años. Dicho de otro modo, ITBIS (IVA) bien diseñado es tipo consumo, es decir, no
es sensato pensar que la inversión continuaría siendo grava la importación de bienes de capital (maquinarias y
conveniente en ausencia de este incentivo tributario. Una equipos), categoría en la cual bien podrían clasificarse los
prueba indirecta de ello es que los clientes residenciales paneles fotovoltaicos.
-que, en principio, no tienen posibilidad de beneficiarse
del crédito en el ISR- igualmente invierten en paneles
solares. Como se dijo, de acuerdo a cifras de la CNE, un
25% de la capacidad instalada de la generación distribuida
corresponde actualmente a clientes residenciales.
Cuadro 17 – Tiempo de recuperación de la
inversión en ausencia del crédito del ISR

Fuente: elaboración propia.

Finalmente, supóngase que se derogan tanto la

exoneración del arancel como el crédito del ISR. En
este caso, tal cual muestra el Cuadro 18, la inversión se
recuperaría en 4.7 años. Nuevamente, se considera que
éste es un plazo que no hace inviable a la inversión.
Cuadro 18 – Tiempo de recuperación de la
inversión en ausencia del crédito del ISR

Fuente: elaboración propia.

27
 INTRODUCCIÓN
6. La generación
distribuida en América
Latina, España y Estados
Unidos: definiciones
generales, esquemas
tarifarios y la concesión
(o no) de incentivos
fiscales²⁰
Esta sección se dedica a describir las principales
características de la generación distribuida en varios
países de América Latina más España y Estados Unidos
(en especial, en California). En particular, se describen
los esquemas tarifarios aplicados y se revisa si se han
concedido incentivos fiscales para impulsar el desarrollo
de la generación distribuida.
La descripción los esquemas tarifarios se detiene
especialmente en los siguientes puntos: i) pago -o no- del
costo de uso de red por parte de los clientes de generación
distribuida; ii) esquema de medición neta o facturación
neta y, en este último caso, cuál es la remuneración de la
energía inyectada; y iii) la existencia o no de límites para
asegurar que el objetivo central sea el autoconsumo, ya
sea exigiendo un balance neto anual (energía inyectada
menor a la retirada), definiendo el límite como un
porcentaje de la energía producida u otro mecanismo.
Adicionalmente, la revisión cita los límites de potencia
de la generación distribuida definidos por los países;
el tratamiento que dan a los excedentes; y los límites
técnicos para su instalación. Por otra parte, se revisa si los
países han concedido incentivos fiscales -permanentes o
temporales- a la generación distribuida.
Los 12 países considerados en este análisis descriptivo
son: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica,
Ecuador, El Salvador, España, Estados Unidos-California,
Guatemala y Uruguay. Al final del mismo, se plantean
algunas conclusiones.
Argentina sigue un esquema de facturación neta desde
el inicio de la generación distribuida, en 2017 (Ley 27,414
²⁰ Esta sección del documento se basa en Di Lavello (2017 y 2023).
28
de Generación de energía eléctrica de origen renovable y
Reglamento 10-2018). La normativa incluye un límite claro:
la potencia instalada no puede ser mayor a la potencia
contratada. En caso de solicitar mayor potencia, el cliente
necesita autorización del distribuidor. El precio de la
energía inyectada es el precio estacional correspondiente
a cada tipo de usuario que deben pagar los distribuidores
en el Mercado Eléctrico Mayorista. Debe señalarse que, en
el caso de Argentina, donde las tarifas están subsidiadas
y, a diferencia de República Dominicana, los apagones son
excepcionales, existen pocos incentivos económicos para
el desarrollo del autoconsumo de energía eléctrica.
Bolivia – La normativa define a la generación distribuida
como la generación de energía eléctrica a través de
un sistema descentralizado e instalado en el lugar de
consumo, de pequeña a mediana escala, con fuentes
renovables, conectadas a la red de distribución a fin
de inyectar sus excedentes de generación. (Decreto
Supremo 4,477-2021). Se definen tres categorías: i)
nanogeneración: potencia instalada menor o igual a 10
kW; ii) microgeneración: potencia instalada mayor a 10 kW
y menor o igual a 50 kW; y iii) minigeneración: potencia
instalada mayor a 50 kW y menor o igual a 350 kW. La
Autoridad de Fiscalización de Electricidad y Tecnología
Nuclear (AETN), ente regulador del sector eléctrico,
es quien establece el mecanismo de retribución de la
energía inyectada considerando: a) el desarrollo del
mercado eléctrico; b) las categorías de consumo; c) la
energía consumida por el generador distribuido; y d) la
energía inyectada a la red de distribución. Los costos de la
conexión y de la colocación del equipo de medición y otros
accesorios necesarios que deba enfrentar el distribuidor
son deducidos de la retribución del generador distribuido.
Brasil – La normativa inicial de la generación distribuida
con base en fuentes renovables no convencionales definió
como microgeneradores a los de potencia menor o igual
a 75 kW y como minigeneradores a los de potencia mayor
a 75 kW y menor a 5,000 kW. (Resolución Normativa
482/2012 de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica
(ANEEL) y las modificaciones realizadas en noviembre de
2015). Para los microgeneradores con potencia inferior o
igual a 50 kW la conexión a la red es gratis. Si la potencia es
mayor a 50 kW, el generador participa en el financiamiento
de las obras de conexión. La energía generada en una
franja horaria podía utilizarse para compensar el consumo
realizado en la misma franja horaria. El excedente podía
utilizarse en otra franja posterior de la misma unidad
de consumo dentro del mismo ciclo de facturación. De
seguir existiendo un excedente, se podía compensar a

otra unidad de consumo del mismo cliente. Finalmente,
los créditos por excedentes tenían una validez de 60 días,
pasados los cuales se perdían.
En 2023 (a través de la Resolución Normativa de ANEEL
1059/2023), se definieron las plantas de generación de
fuente despachable como aquellas plantas cuya energía
generada puede ser despachada mediante un controlador
local o remoto con las siguientes características:
a) centrales hidroeléctricas de hasta 5 MW de potencia,
b) centrales termoeléctricas de hasta 5 MW, cogeneración,
biomasa o biogas, y
c) centrales fotovoltaicas de hasta 3 MW, que tengan
capacidad de modulación de generación mediante
almacenamiento de energía en baterías, en una cantidad
de al menos el 20% de la capacidad diaria de generación.
A partir de ahí, los microgeneradores fueron redefinidos
como los cogeneradores o generadores a partir de
fuentes renovables de hasta 75 kW de potencia y los
minigeneradores como los cogeneradores o generadores
a partir de fuentes renovables con potencia superior a 75
kW e inferior o igual a:
a) 5 MW para centrales eléctricas de fuentes despachables, y
b) 3 MW para otras fuentes no clasificadas como plantas
de generación de fuente despachable.
La gratuidad de la conexión a la red para la generación
distribuida con potencia menor o igual a 50 kW se mantuvo
siempre que:
i) la potencia instalada sea menor o igual a la potencia
disponible para alimentar la carga de la unidad consumidora
donde se conectará la generación, y
ii) el trabajo requerido para atender la carga sea suficiente
para atender la potencia instalada de la microgeneración
distribuida.
Si la nueva conexión o el aumento de la potencia
inyectada procedente de la micro o minigeneración
distribuida implican una inversión del flujo de potencia
en el centro de transformación de la distribuidora o en el
interruptor del alimentador, el distribuidor debe realizar
estudios para identificar las opciones viables que eliminen
dicha inversión, como:i) reconfiguración de circuitos y
reubicación de cargas;
²¹ Están exceptuados de esta disposición los clientes residenciales con una potencia conectada de hasta 20 kW y las personas jurídicas sin fines de lucro con una
potencia conectada de hasta 50 kW.
INTRODUCCIÓN
ii) definición de otro circuito para la conexión de la
generación distribuida;
iii) conexión a un nivel de tensión superior;
iv) reducción de la potencia inyectable en forma
permanente o en días y horarios preestablecidos o
establecidos dinámicamente.
fuentes renovables siempre que la capacidad instalada
fuera menor a 100 kW. Posteriormente, en 2018 (Ley
21,118) se amplió este límite a 300 kW. Desde el inicio,
Chile adoptó un esquema de facturación neta en el cual
la distribuidora paga por la energía inyectada un 62% de
la tarifa que cobra por la energía retirada. Los excedentes
(energía inyectada mayor a la retirada) se descontaban
en las facturas posteriores. Si persistía un remanente a
los seis meses, la distribuidora los pagaba. Si hubiese que
realizar ampliaciones o adecuaciones de la red, están a
cargo del cliente.
Como se dijo, en 2018 (Ley 21,118) se introdujeron
modificaciones a la normativa. Los excedentes dejaron
de ser pagados por las distribuidoras a los seis meses y,
después de cinco años de haber sido generados, no se
pueden descontar ni se pagan, es decir, esa energía pasa
a ser un beneficio para el resto de los clientes.²¹
Colombia - La regulación de la generación distribuida en
Colombia se inició en 2014 (Ley 1715/2014) y se completó
en 2018 (a través de la Resolución 030/2018 de la Comisión
de Regulación de Energía y Gas, CREG). Colombia tiene
el esquema tarifario de medición neta. Los excedentes
(energía inyectada mayor a la retirada) se liquidan al precio
horario de bolsa de la fuente de energía correspondiente.
La potencia de la generación distribuida a instalar depende
de la capacidad nominal del circuito, transformador o
subestación correspondiente a la solicitud de conexión.
Costa Rica permite la generación de energía eléctrica a
partir de fuentes renovables para satisfacer las necesidades
propias (autoconsumo) debiendo la potencia ser menor o
igual a 1,000 kW, definiéndose como microgeneradores
a aquellos con potencia menor a 100 kW y como
minigeneradores, el resto. Admite que se intercambien
excedentes de producción con la distribuidora hasta un
49% de la energía mensual producida. En el esquema de
medición neta sencilla, hay compensación mensual de
excedentes y el excedente anual no es reconocido.
Por su parte, en el esquema de medición neta completa,
29
 INTRODUCCIÓN
la liquidación (energía retirada versus inyectada) es anual.
En este esquema, y por citar un ejemplo, un cliente cuyo
consumo sea inferior a 200 kWh recibe por la energía que
inyecta un 73% de la tarifa que se le cobra a un cliente
residencial normal. Nótese, por tanto, que más allá de su
nombre, este esquema es, en rigor, uno de facturación
neta, en el que el precio de la energía retirada es mayor
al que la distribuidora paga por la energía inyectada.
Adicionalmente, los micro y minigeneradores deben
pagar un costo de acceso a la red que se aplica sobre su
autoconsumo, que se considera que fue “almacenado” en
la red de la distribuidora. Para continuar con el ejemplo,
un cliente cuyo consumo es menor a 200 kWh debe
pagar por su autoconsumo “almacenado” en la red de la
distribuidora una tarifa equivalente al 37% de la que se le
cobra a un cliente residencial normal.
Es importante señalar que Costa Rica concedió inicialmente
incentivos fiscales a la instalación de paneles fotovoltaicos,
pero los retiró cuando la tecnología maduró.
Ecuador - En 2018, Ecuador autorizó la generación
fotovoltaica para autoconsumo de energía eléctrica (a
través de la Resolución 042/2018 y la Reglamentación
003/2018 de la Agencia de Regulación y Control de
Electricidad, ARCONEL). Para clientes residenciales la
potencia máxima admitida fue hasta 300 kW, y para clientes
comerciales e industriales hasta 1,000 kW. El esquema
tarifario adoptado fue el de medición neta. Aunque el
objetivo es el autoconsumo, se admite la inyección a la
red del distribuidor de eventuales excedentes, que se
computan como créditos a favor del cliente por un periodo
de dos años.
El Salvador – En 2013, la Superintendencia General de
Electricidad y Comunicaciones (SIGET) aprobó la normativa
sobre los “Procesos de libre concurrencia para contratos
de largo plazo respaldados con generación distribuida
renovable” (Acuerdo 120-E-2013), que habilitó la realización
de subastas de generación distribuida renovable de hasta
20 MW. En 2017, se aprobó la “Norma para usuarios finales
productores de energía eléctrica con recursos renovables”
(Acuerdo 367-E-2017). Esta normativa admite, ante una
situación temporal y excepcional, y por un corto periodo,
que el “autoproductor renovable”²² inyecte excedentes
de energía a la red de distribución sin fines comerciales.
Esta energía inyectada se valora al precio vigente de
compra de la energía total del distribuidor y se descuenta
de la facturación de la energía retirada. De existir un
excedente (energía inyectada mayor a la retirada), se
²² Por su parte, el “usuario productor renovable” solo abastece su propia demanda, sin inyectar excedentes a la red de distribución.
30
aplica un descuento al monto facturado en el siguiente
periodo de facturación, hasta totalizar un máximo de tres
ciclos de facturación con descuento.
España – En 2015, España implementó dos modalidades de
autoconsumo de energía eléctrica procedente de fuentes
renovables (Real Decreto 900/2015). En la modalidad
Tipo 1, la potencia contratada del consumidor no puede
superar los 100 kW; la potencia instalada debe ser menor
o igual a la potencia contratada; y los excedentes de
energía no se pagan. En la modalidad Tipo 2, la potencia
contratada puede ser mayor a los 100 kW; la potencia
instalada debe ser menor o igual a la potencia contratada;
y los excedentes de energía se pagan al precio del
mercado mayorista. Por ejemplo, en el caso de un cliente
con potencia contratada mayor a 100 kW, la tarifa que
cobra por la energía inyectada es un 45% de la que paga
por la energía retirada. La normativa del 2015 exigía
balance neto anual (energía inyectada menor o igual a la
retirada), restricción que, como se verá, fue sustituida por
la compensación de excedentes en 2019.
Las instalaciones de autoconsumo conectadas a la red
de distribución deben contribuir a financiar los costos y
servicios del sistema, al igual que el resto de los usuarios.
Los cargos correspondientes son: i) peajes de acceso a las
redes; ii) cargos relacionados con los costos del sistema
eléctrico; y iii) cargos por otros servicios del sistema,
dentro de los que cabe resaltar el pago por el respaldo
del sistema para garantizar el balance entre generación y
demanda de electricidad.
El Real Decreto 244/2019 introdujo varias modificaciones
que flexibilizaron el funcionamiento de la generación
distribuida fotovoltaica, a saber:
i) Derogó el “impuesto al sol”, que se había implementado
para compensar la generosidad de los contratos
inicialmente otorgados a la generación distribuida.
ii) Eliminó los límites de potencia.
iii) Sustituyó la exigencia del balance neto anual por
la compensación de excedentes de consumo, con las
características que se verán a continuación.
iv) Se permitieron el autoconsumo compartido -que las
comunidades de vecinos y asociaciones puedan generar
su propia electricidad- y la producción de terceros -se
permite el alquiler de techos para que terceros generen
electricidad, compartiendo los beneficios-.

Adicionalmente, el Real Decreto 244/2019 clarificó las
modalidades de autoconsumo provenientes de paneles
solares en dos categorías principales: sin y con excedentes.
a) Sin excedentes - Refiere a las instalaciones que no
producen más energía de la que demandan y que cuentan
con un sistema antivertido que asegura que si se producen
excedentes no serán inyectados a la red.
b) Con excedentes – La potencia instalada debe ser menor
a 100 kW. Dentro de esta categoría hay dos alternativas:
b.1) Con compensación de consumo: el contador
bidireccional cuenta los kWh vertidos a la red y la
distribuidora asigna un precio a éstos (que dependerá
del precio del pool en el momento de la inyección y de
las ofertas que realice cada compañía), restándolos de la
factura.
b.2) Sin compensación: la energía excedentaria es vendida
al precio que se pacta con la distribuidora.
Estados Unidos – California – A partir de 1996, el estado
de California impulsó el desarrollo de instalaciones de
generación distribuida de fuente fotovoltaica de potencia
de hasta 1 MW. Para ello, la Iniciativa Solar de California,
el programa que promueve el autoconsumo, otorgó
créditos fiscales de hasta el 30% de las inversiones. Más de
40 estados han concedido créditos fiscales para impulsar
las inversiones en generación solar. El esquema tarifario
INTRODUCCIÓN
de California, al igual que el de los demás estados, es la
facturación neta. La distribuidora San Diego Gas & Electric
paga por la energía inyectada un 12% de la tarifa que paga
un cliente residencial por su consumo. Si al cierre del año
el saldo neto del cliente es positivo, recibe un pago con
base en tarifas especiales definidas por el distribuidor.
Como no se exige el uso de medidores bidireccionales,
los autoconsumidores podrían cambiar energía barata
por cara. Estos usuarios dejan de contribuir al pago de
los costos fijos, que deben ser asumidos por el resto de
los usuarios. No obstante, es importante señalar que en
los últimos años se ha agregado una serie de costos en
la factura de los autoconsumidores para corregir este
problema.
Guatemala - En 2008, la resolución 171-2008 de la Comisión
Nacional de Energía Eléctrica (CNEE) de Guatemala
estableció las condiciones técnico-económicas para el
desarrollo de la generación distribuida renovable, cuya
potencia máxima era de 5 MW, exigiéndose medición
bidireccional. Inicialmente, el esquema tarifario fue de
medición neta, exigiéndose balance neto (la energía
inyectada no podía ser superior a la retirada). En el
esquema tarifario de Guatemala, los usuarios con tarifas
monómicas no pagaban cargo por potencia y, por tanto,
no pagaban los costos de uso de red. Adicionalmente,
debido a la medición neta, algunos usuarios solo pagaban
el cargo fijo, es decir, estaban siendo subsidiados pues
hacían uso de la red en los momentos de demanda
31
 INTRODUCCIÓN
máxima sin aportar al financiamiento de los costos de uso
de la red.
Para corregir estos problemas, en 2014, a través de
la resolución 2227-2014 de la CNEE, se creó una tarifa
dedicada para los clientes de generación distribuida por
la cual deben pagar los cargos por potencia. Es decir que,
en todos los casos, el distribuidor cobra el cargo fijo y los
cargos por potencia que correspondan. Si el usuario no
cuenta con medidor de potencia, el distribuidor cobra
el cargo por potencia en función de la energía retirada.
Además, es importante remarcar que a los clientes de
generación distribuida se les comenzó a cobrar un cargo
fijo 20% más caro que a los clientes sin generación y un
cargo único por energía que implica que su tarifa sea
5% más cara que la de los clientes sin generación, para
contemplar su mayor uso de la red.
Para corregir estos problemas, en 2014, a través de
la resolución 2227-2014 de la CNEE, se creó una tarifa
dedicada para los clientes de generación distribuida por
la cual deben pagar los cargos por potencia. Es decir que,
en todos los casos, el distribuidor cobra el cargo fijo y los
cargos por potencia que correspondan. Si el usuario no
cuenta con medidor de potencia, el distribuidor cobra
el cargo por potencia en función de la energía retirada.
Además, es importante remarcar que a los clientes de
generación distribuida se les comenzó a cobrar un cargo
fijo 20% más caro que a los clientes sin generación y un
cargo único por energía que implica que su tarifa sea
5% más cara que la de los clientes sin generación, para
contemplar su mayor uso de la red.
Uruguay – En 2010 (a través del Decreto 173-2010 del
Ministerio de Industria, Energía y Minería, MIEM),
Uruguay permitió conectar generación de origen
renovable (solar, eólica, biomasa y mini-hidráulica) en
baja tensión. Los límites son de 100 kW para 230 V y de 150
kW para 400 V. El cliente intercambia bidireccionalmente
con la red de distribución de UTE, la empresa monopólica
estatal, que le compra toda la energía que entregue.
Aunque el esquema tarifario elegido fue el de facturación
neta, el precio pagado por la energía inyectada era
igual a la tarifa cobrada por la energía retirada, por un
plazo de diez años, como un estímulo al desarrollo de la
generación distribuida. Si hubiese necesidad de realizar
modificaciones en la red de baja tensión, los costos
correspondientes son a cargo del cliente.
En los primeros siete años de funcionamiento del sistema
se comprobó la existencia de instalaciones con un muy
bajo autoconsumo y una potencia media igual a 29 kW,
tres veces superior al promedio de los países de la región.
32
La razón es que el diseño del esquema tarifario alentó
la aparición de generadores puros en baja tensión que
se favorecían de que el precio al que se les compraba
la energía inyectada era tres veces mayor al precio de
venta en el mercado spot o al fijado en los contratos
de generación distribuida en media tensión. Esto se dio
pese a que la reglamentación exigía que la potencia
contratada fuera mayor que la potencia a instalar. Como
consecuencia, se verificó un desfase en los ingresos
del distribuidor porque el 28% del precio de venta de la
energía en baja tensión corresponde a costos de red.
Para corregir esta situación, a partir del 2017, por una
resolución del MIEM, se comenzó a exigir el cumplimiento
de balance anual, es decir, que la energía inyectada no
podía ser superior a la retirada. Como consecuencia, la
potencia media de las instalaciones tendió a bajar luego
de esta disposición.
En 2020 (Decreto 27/20 del MIEM) se autorizó la instalación
de acumulación de energía por medio de baterías en las
instalaciones de los clientes. Éstas operan en paralelo con
la red, pero no está permitida la inyección de energía a la
red del distribuidor desde ellas. Las obras necesarias en la
red y puesto de conexión para su funcionamiento son a
cargo del cliente.
Actualmente, Uruguay está decidiendo a qué valor
comprar la energía inyectada dado que están venciendo
los contratos iniciales, que fueron otorgados, como se
dijo, a diez años.
Principales conclusiones - Esta revisión de la normativa
permite obtener algunas conclusiones, a saber:
i) Muy pocos países han concedido incentivos fiscales
para impulsar el desarrollo de la generación distribuida.
En esta revisión, la lista se reduce a Costa Rica y Estados
Unidos. Además, en el caso de Costa Rica, retiró los
incentivos cuando la tecnología fotovoltaica maduró,
siguiendo un argumento similar al de la industria infantil:
proteger hasta que la industria madure. Actualmente,
Costa Rica concede incentivos fiscales temporales -por
diez años- a la generación con base en hidrógeno verde.
Por tanto, República Dominicana no ha seguido la línea
de la mayoría de los países de la región. Si bien el país
ha derogado algunos incentivos tributarios concedidos
inicialmente (la exoneración del ISR a la venta de energía
de fuentes renovables) y ha reducido otros (el crédito
vigente en el ISR era originalmente el 75% de la inversión),
mantiene el crédito del 40% de la inversión aunque, como
se vio, la generación distribuida ya se ha desarrollado
y, sobre todo, la tecnología ha madurado, siendo los
 INTRODUCCIÓN

costos significativamente menores que una década atrás,
cuando inició el proceso de instalación.
ii) República Dominicana pertenece al grupo minoritario
de países que mantiene un esquema tarifario de medición
neta que, como se dijo, implica un subsidio. La mayoría de
los países de la región tiene un esquema de facturación
neta, porque lo adoptaron desde un principio o porque
lo introdujeron una vez que la generación distribuida se
desarrolló. Adicionalmente, la mayoría de los países que
han adoptado el esquema de facturación neta se han
preocupado por remunerar la energía inyectada a un
precio menor que el que cobran por la energía retirada
y/o cobrar cargos por potencia o fijos más altos a la
generación distribuida, de modo de que paguen más por
el mayor uso que hacen de la red.
iii) La normativa de la mayoría de los países analizados
ha adoptado diferentes soluciones para lograr que el
objetivo central del sistema de generación distribuida
sea el autoconsumo y no un negocio de venta de energía
a las distribuidoras por parte de generadores puros.
Como se vio, algunos países exigen un balance neto
anual, es decir, que la energía inyectada sea menor o
igual a la consumida. Otros establecen límites a la energía
inyectada como porcentaje de la energía autoproducida.
En el mismo sentido, junto a alguna de las medidas
anteriores, algunos países exigen que la potencia
contratada sea mayor a la potencia que se va a instalar,
lo que presiona a que las obras se hagan por la demanda
y no por la generación.
En República Dominicana, por el contrario, la normativa
vigente no establece un límite a la potencia contratada
en relación a la energía que consume el autoproductor
y tampoco establece un límite a la energía que éste
inyecta a la red. Esto, junto con el subsidio implícito en
la tarifa de medición neta, puede dar lugar a la aparición
de generadores puros, es decir, autoproductores
interesados en vender energía a la distribuidora antes
que satisfacer su consumo de energía. Dicho de otro
modo, el sistema actual no define con precisión que su
objetivo central es el autoconsumo y no un negocio de
venta de energía a las distribuidoras.
iv) Finalmente, entre los países analizados no hay
homogeneidad en el tratamiento de los excedentes, que
se gestionan de diferentes modos.
En la siguiente tabla se resumen las principales
definiciones de la normativa de la generación distribuida
de los países seleccionados.

Tabla 1 – Principales definiciones de la generación distribuida en países seleccionados

A. Cobro de costos por el uso de la red

País Cargos
Costa Rica Los micro y minigeneradores deben pagar un costo de acceso a la red que se aplica sobre
su autoconsumo, que se considera fue “almacenado” en la red de la distribuidora. Un
cliente cuyo consumo es menor a 200 kWh debe pagar por este concepto una tarifa
equivalente a un 37% de la que se le cobra a un cliente residencial.
España

Estados Unidos;
en particular, Cali-
fornia
Guatemala

Fuente: elaboración propia.

33
 INTRODUCCIÓN

B. Esquemas tarifarios

34
 INTRODUCCIÓN

C. Disposiciones para asegurar que el objetivo central sea el autoconsumo

35
 INTRODUCCIÓN
7. Consideraciones
sobre el borrador del
nuevo “Reglamento
para la aprobación,
interconexión
y operación de
instalaciones de
generación distribuida de
energía”
Actualmente está en proceso de consulta pública el
borrador de un nuevo “Reglamento para la aprobación,
interconexión y operación de instalaciones de generación
distribuida de energía”. En términos generales, i) el
problema de la no recuperación de los costos de red se
mantiene; ii) se pasa de un régimen de medición neta a
uno de facturación neta, en el cual la energía inyectada
es remunerada a un precio inferior al que se paga por
la retirada; y iii) se implementan límites para asegurar
que el objetivo central de la generación distribuida
sea el autoconsumo y desincentivar el surgimiento de
proveedores netos.
A continuación, se analizan brevemente los principales
puntos de la propuesta.
i. Sobre la recuperación (o no) de los costos de red – El
esquema de facturación neta, que se describe en detalle
más adelante, dispone que al autoproductor se le cobrará
un cargo por potencia facturable, que se define como la
mayor entre la potencia retirada y la potencia inyectada
en la red, registradas por el medidor bidireccional en
cada periodo de facturación.
Sin embargo, es importante señalar que el borrador de
nuevo Reglamento explicita que este cargo por potencia
no aplica a las tarifas BTS de potencia contratada menor
a 10 kW. Como se dijo, actualmente, por una disposición
de la SIE, no se cobra este cargo los clientes BTS de
generación distribuida con potencia menor a 10 kW
pese a que el Reglamento de Medición Neta dispone su
cobro. Por tanto, el nuevo Reglamento de Generación
Distribuida legitima la situación actual, exonerando
explícitamente del cargo por potencia a las tarifas BTS
36
con capacidad instalada menor a 10 kW, sin referencia
alguna a que el mismo se energizará. En consecuencia,
se confirma -y reafirma- un problema de la situación
actual que, como se vio, implica una pérdida para las
distribuidoras porque estos usuarios no pagan nada por
el uso de red cuando autoconsumen.
En resumen:
a) para los clientes BTS de generación distribuida con
potencia contratada menor a 10 kW:
i) no se recupera la parte del costo de red que está en el
cargo por potencia, porque están exonerados del mismo;
ii) cuando autoconsumen, no se recupera la parte del
costo de red energizada porque, a diferencia de otros
países, no se implementa para estos clientes un cargo
por potencia -o cargo fijo- más alto que el del resto de
los clientes;
iii) no se toma en cuenta que estos clientes inyectan
cuando la energía es barata y retiran cuando es cara y
por esta razón también deberían pagar un cargo por
potencia -o cargo fijo- más alto que el del resto de los
clientes;
iv) no se considera que estos contribuyentes deben
contribuir a financiar el costo de la seguridad de que el
sistema funcione 24/7; y
v) como se verá, al pasar a un esquema de facturación
neta, que paga una tarifa por la energía inyectada menor
a la recibida, se recupera parte de los costos de red
cuando estos clientes inyectan energía.
b) para el resto de los clientes de generación distribuida,
que sí continuarán pagando el cargo por potencia, son
válidos los puntos ii a v anteriores.
Se insiste en que estas pérdidas de las distribuidoras no
pueden trasladarse al resto de los usuarios desde que
las tarifas están congeladas. Esto agrava el problema
eléctrico, que explica algo menos de la mitad del déficit
fiscal, y termina impactando en las finanzas públicas,
porque el Gobierno Central debe transferir a las
distribuidoras los montos necesarios para financiarlas.
ii. De Medición Neta a Facturación Neta – El borrador
de nuevo Reglamento propone pasar del esquema
tarifario de medición neta, actualmente vigente, a uno
de facturación neta. De este modo, se corregirían los
problemas relacionados con la medición neta, analizados
en detalle en secciones anteriores de este documento.
Autoproductores conectados a EDEs - Para los

autoproductores conectados a EDEs, en cada periodo de
facturación la distribuidora medirá la energía y potencia
que consuma el cliente y la que exporte a la red de
distribución. Siguiendo el esquema de facturación neta:
a) Al autoproductor se le cobrará un cargo fijo
teniendo en cuenta su tarifa o su nivel de consumo,
independientemente de que éste sea nulo en el periodo
de facturación correspondiente.
b) El autoproductor también deberá pagar una
valorización por la energía retirada. Esta valorización
se calculará como el producto de la cantidad de energía
retirada en el periodo de facturación correspondiente
por el precio de la energía según el bloque tarifario que
le corresponda al autoproductor.
c) Se acreditará a favor del autoproductor una
valorización por la energía inyectada. Esta valorización
se calculará como el producto de la energía inyectada
por el precio medio de compra de la distribuidora.²³ Por
tanto, el precio pagado por la energía inyectada será
inferior al cobrado por la energía consumida, dado que
aquél no incluye el valor agregado de la distribución.
De este modo, se corrigen los problemas derivados de
la aplicación de la misma tarifa a la energía consumida e
inyectada, vistos en detalles en secciones anteriores del
documento.
d) Finalmente, como se analizó en el punto i, al
autoproductor se le cobrará un cargo por potencia
facturable, que se define como la mayor entre la potencia
retirada y la potencia inyectada en la red, registradas por
el medidor bidireccional en cada periodo de facturación.
Una vez determinados los cargos anteriores, se realiza el
siguiente cálculo:
Cargo por energía retirada – cargo por energía inyectada
+ Cargo por potencia + Cargo fijo.
Si la expresión anterior es positiva, hay un saldo a favor
de la distribuidora que el cliente deberá pagar.
Por el contrario, si es negativa, hay un saldo a favor del
cliente que la distribuidora le acreditará en el periodo de
facturación y lo aplicará en la facturación del siguiente
periodo. A fin de año, la distribuidora deberá reconocer
el crédito acumulado que no haya sido utilizado y deberá
pagar el 100% del mismo antes del 31 de enero de cada
año, siempre que la energía inyectada no supere al 50%
de la energía producida. (Sobre este punto se vuelve más
adelante). Recuérdese que el Reglamento de Medición
²³ Para los usuarios no regulados, el precio será definido por contrato con la distribuidora.
INTRODUCCIÓN
Neta actualmente vigente dispone la devolución de 75%
del crédito acumulado, mientras que el restante 25%
“será utilizado por las distribuidoras para los programas
de Eficiencia Energética y reducción de pérdidas”.
Para aplicar este esquema de tarificación neta, se asignan
las siguientes tarifas:
a) A los clientes que tengan tarifas BTS y pasen a ser
autoproductores con potencia autorizada menor a 10 kW
se les asignará una tarifa monómica. Se insiste en que el
borrador de Reglamento dispone que a estos clientes
no se les cobrará el cargo por potencia ni explicita
que se energizará. A aquellos clientes que pasen a ser
autoproductores con potencia autorizada mayor a 10 kW
se les asignará una tarifa binómica.
b) Los clientes que tengan tarifas BTD, MTD-1 y MTD-2 y
pasen a ser autoproductores serán encuadrados en una
tarifa binómica.
c) A los clientes que tengan tarifas BTH y MTH y pasen
a ser autoproductores se les asignará una tarifa horaria.
Autoproductores que se encuentran actualmente en el
esquema de Medición Neta – Por respeto a las reglas de
juego, podrán permanecer en este esquema por hasta
cinco años contados desde la publicación del nuevo
Reglamento.
Empresas distribuidoras con régimen tarifario no
establecido por la SIE – Los concesionarios de
distribución, los Sistemas Aislados y los propietarios de
redes de distribución también deberán seguir el esquema
de facturación neta y aplicar los mismos cargos aplicados
a los autoproductores interconectados a las EDEs, a las
tarifas correspondientes vigentes en sus respectivos
sistemas.
Con respecto a la valorización de la energía inyectada, el
borrador de Reglamento propone que se considere para
cada ciclo de facturación “el costo marginal promedio
trimestral de la energía en barra de referencia afectado
por el correspondiente factor de expansión de las
pérdidas, valor que será publicado por la SIE”.
iii. Definición del autoconsumo como objetivo central
de la generación distribuida – El borrador de nuevo
Reglamento incluye límites tanto a la potencia máxima
permitida como a la energía inyectada que pretenden
definir al autoconsumo como el objetivo central de la
generación distribuida.
37
 INTRODUCCIÓN

En primer lugar, la potencia máxima que los iv) Otros temas

autoproductores podrán solicitar es la potencia
máxima permitida, definida como aquella que permite
al autoproductor generar en un año calendario la
energía equivalente a su consumo de energía en los
últimos doce meses previos a su solicitud de pasar a
ser autoproductor.²⁴ Si no existen restricciones en el
sistema de distribución, la potencia autorizada será
igual a la potencia máxima permitida.²⁵ En caso de existir
restricciones: a) si el autoproductor acepta pagar el costo
de las obras que permitan eliminar dichas restricciones,
la potencia autorizada será igual a la potencia máxima
permitida;²⁶ b) si el autoproductor no acepta financiar
las obras, la potencia autorizada será la que resulte de
los estudios de interconexión (potencia autorizada <
potencia máxima permitida).
De este modo, limitando la potencia solicitada a la
potencia demandada: i) se da una señal clara de que
el objetivo central de la generación distribuida es el
autoconsumo y no un negocio de venta de excedentes
a las distribuidoras; ii) se cierra la puerta a la aparición
de generadores puros; y iii) se evita el perjuicio a las
distribuidoras, en particular a las de los Sistemas Aislados,
derivado de que los autoproductores puedan requerir
una potencia elevada aunque tengan un consumo de
energía mucho menor, teniendo que trasladarse el costo
de las redes adicionales al resto de los usuarios.
En segundo lugar, como se dijo, el borrador de nuevo
Reglamento establece un límite a la energía inyectada
a la red de distribución por los autoproductores.²⁷ En
efecto, se dispone que todo autoproductor deberá tener
una producción de energía bruta anual tal que se destine
por lo menos el 50% para el consumo propio; el restante
50% podrá ser inyectado a la red. Como se adelantó,
las inyecciones de energía que excedan el 50% de la
generación no serán remuneradas por la distribuidora.
Aunque 50% puede resultar un límite alto, al igual que la
disposición anterior, señala como objetivo principal de la
generación distribuida el autoconsumo, desalentando la
aparición de generadores puros.
Nuevo límite de potencia – Como se vio, el Programa de
Medición Neta actualmente vigente aplica a los sistemas
propios de generación renovable cuya capacidad sea i)
menor o igual a 25 KW para clientes residenciales y ii) no
mayor a 1 MW para clientes comerciales e industriales.
El borrador de nuevo Reglamento eleva el límite de la
potencia máxima a 1.5 MW, sin distinguir entre clientes
residenciales y clientes comerciales e industriales.²⁸ ²⁹
Esta nueva capacidad máxima de generación permitida
ha sido propuesta considerando el tamaño del SENI.
Debería tenerse en cuenta que los Sistemas Aislados
tienen características propias (pequeños sistemas, bajas
potencias de cortocircuito, dificultad para compensar
las bajadas de producción con servicios auxiliares) y, por
tanto, sería sensato que el límite de potencia a instalar
fuera diferente al del SENI. No hace sentido que sistemas
de 10 MW o 150 MW (los Sistemas Aislados) tengan el
mismo límite que un sistema de 2,000 MW (el SENI).
Fijar un límite para los Sistemas Aislados relacionado
al tamaño específico de éstos permitiría proteger la
estabilidad dinámica de dichos sistemas.
Límites técnicos – Algunos de los límites técnicos
impuestos actualmente a la interconexión de la
generación distribuida se mantienen en el borrador de
nuevo Reglamento.
En primer lugar, se exige que la capacidad agregada
de la generación distribuida sea menor que el 15% de la
demanda máxima del alimentador.³⁰ El objetivo del límite
es poder garantizar la sistema tanto para los clientes
de baja como de media tensión. El nuevo Reglamento
aclara que “El porcentaje límite del 15% es un valor que
sirve de límite conservador por default de todos los
alimentadores, pero que podrá y deberá ser modificado
en función de los estudios que realicen las distribuidoras
en sus redes”.
En segundo lugar, se exige que la capacidad agregada
de los sistemas de generación renovable conectados a
un transformador sea menor o igual a la capacidad del
mismo.³¹

²⁴ Artículo 13 del borrador de nuevo Reglamento. “En el caso de aquellos usuarios que no cuenten con historial de consumo, el mismo podrá obtenerse
del empleado para determinar la fianza y en aquellos casos en que los usuarios cuenten con un historial inferior a los doce meses, el consumo anual podrá
estimarse a partir de la información disponible”.
²⁵ Artículo 8 del borrador de nuevo Reglamento.
²⁶ En algunos países, como Uruguay, los estudios necesarios para estimar el costo de las obras son pagados por el autoproductor y, de concretarse dichas obras,
le queda como un crédito. El costo de las obras en sí es financiado en parte por el autoproductor y en parte por la distribuidora.
²⁷ Artículo 11 del borrador de nuevo Reglamento.
²⁸ Artículo 5 del borrador de nuevo Reglamento.
²⁹ Resulta oportuno aclarar que este límite no rige para los Productores de Electricidad con Energía Renovable (PEER), que no son alcanzados por el nuevo
Reglamento sino que serán regulados por otra normativa específicamente emitida por la SIE. (Artículo 3, Párrafo I del borrador de nuevo Reglamento).
³⁰ Numeral 5 del Anexo E del borrador de nuevo Reglamento.

38
 INTRODUCCIÓN

En tercer lugar, un límite que impone la actual normativa

no ha sido incluido en el borrador de nuevo Reglamento.
En efecto, no se exige que la capacidad agregada de los
sistemas de generación renovable conectados al sistema de
distribución sea menor o igual al 1% de la demanda pico del
sistema eléctrico del distribuidor.³²

Finalmente, es importante señalar que el nuevo Reglamento

dispone que la interconexión de la generación distribuida
a los Sistema Aislados no puede seguir el procedimiento
simplificado (evaluación simple), sino que exige la realización
de estudios suplementarios. Este análisis más exhaustivo se
exige en consideración de las características especiales de
los Sistemas Aislados (menores potencias de cortocircuito,
menores capacidades de regulación de tensión y frecuencia,
entre otras).

³¹ Numeral 4 del Anexo E del borrador de nuevo Reglamento.

³² Literal e del artículo 17 del Reglamento de Interconexión vigente.

39
 CONCLUSIONES
8. Conclusiones
La generación distribuida de energía eléctrica puede
definirse como aquella basada en pequeñas fuentes de
energía no convencional (solar y eólica, entre otras),
instaladas en puntos cercanos al consumo, que el
cliente utiliza para autoabastecer total o parcialmente
su demanda de energía eléctrica y, eventualmente, para
inyectar sus excedentes a la red de distribución.
República Dominicana ha promovido y continúa
promoviendo la generación distribuida. En concreto, se
conceden incentivos -tarifarios y tributarios- a los clientes
residenciales cuya capacidad instalada sea menor o igual
a 25 kW y a los clientes comerciales e industriales que no
superen 1 MW.
La sustitución de los combustibles fósiles por fuentes
renovables de energía es, sin dudas, un objetivo no solo
deseable sino, además, necesario. La capacidad instalada
de generación distribuida en el país ya permite que se
emitan al año 1.2 millones de toneladas de CO2 menos que
la generación eléctrica en base a carbón.
No obstante, en este documento se procuró plantear
y responder algunas preguntas sobre cómo se está
promoviendo esta microgeneración en el país, sobre el
diseño de esta promoción y sus diferentes impactos.
En concreto, se analizó el régimen tarifario vigente y su
impacto sobre las finanzas de las Empresas de Distribución
Eléctrica (EDEs) y, por otra parte, los incentivos tributarios
concedidos y su impacto en las finanzas públicas.
i. El autoconsumo, es decir, la sustitución de consumo que
realizan los clientes de generación distribuida, que pasan
a consumir la energía que autoproducen, dejando de
retirarla de la red, ha supuesto una pérdida para las EDEs
de más de US$ 240 millones en el periodo 2018-2023, un
promedio de US$ 40.5 millones por año.
Esta pérdida es inevitable cuando se decide promover
la generación distribuida, es parte de la definición del
modelo. No obstante, debe tenerse presente que el
impacto directo del autoconsumo es una pérdida de las
EDEs pero, dado que no se aumenta la tarifa del resto de
los clientes para financiar esta pérdida, porque la tarifa
eléctrica está congelada, esta pérdida acaba teniendo un
impacto fiscal, porque el Gobierno Central debe realizar
transferencias a las distribuidoras para que la financien.
La capacidad instalada se ha multiplicado por 29 en los
últimos diez años, pasando de de 11 MW en 2014 a 324 MW
en 2013. Si continúa creciendo, aunque lo haga a un menor
ritmo, esto implicará que se agrave el problema eléctrico.
40
ii. Si bien la pérdida por sustitución de consumo es
inevitable, hay otras pérdidas asociadas a la generación
distribuida que son evitables, y así lo demuestra la
experiencia de varios países de la región. En primer lugar,
estos microgeneradores deberían pagar los costos por el
uso de la red, máxime teniendo en cuenta que hacen un
mayor uso de la misma, porque eventualmente retiran y/o
inyectan, además de autoconsumir.
En República Dominicana, en el caso de los
microgeneradores BTS con potencia contratada menor
a 10 kW: i) no se recupera la parte del costo de red que
está en el cargo por potencia, porque están exonerados
de dicho cargo; ii) cuando autoconsumen, no se recupera
la parte del costo de red incluida en la factura de energía,
porque no se implementa para estos clientes un cargo
por potencia -o cargo fijo- más alto que el del resto de
los clientes, como hacen varios países; iii) no se toma en
cuenta que estos clientes inyectan cuando la energía es
barata y retiran cuando es cara y por esta razón también
deberían pagar un cargo por potencia -o cargo fijo- más
alto que el del resto de los clientes; y iv) no se considera
que estos contribuyentes deben contribuir a financiar el
costo de la seguridad de que el sistema funcione 24/7,
la estabilidad del sistema, máxime cuando ellos son los
que introducen mayor inestabilidad por ser los de menor
capacity factor.
Para el resto de los clientes de generación distribuida, que
sí pagan el cargo por potencia, son válidos los puntos ii, iv
y v anteriores.
Se ha estimado que la pérdida del no cobro por potencia
de red a los clientes BTS con capacidad instalada menor a
10 kW será de US$ 6 millones en 2023.
iii. República Dominicana está en el grupo minoritario de
países que tiene un régimen tarifario de medición neta
para la generación distribuida, como se analizó en la
sección 6 del documento. La mayoría de los países tiene
un régimen de facturación neta, porque lo adoptaron
desde un principio o porque lo introdujeron una vez que
la generación distribuida se hubo desarrollado. Al estar
vigente el esquema de medición neta, que paga una
tarifa por la energía inyectada igual a la que cobra por la
energía retirada, estos clientes tampoco pagan por el uso
de red cuando inyectan energía, es decir, son subsidiados.
Se ha estimado que la pérdida de las EDEs por esta
sobremuneración de la energía inyectada será de US$ 11.5
millones al cierre de 2023.
iv. Respecto a los incentivos fiscales, muy pocos países
los han concedido para impulsar el desarrollo de la
generación distribuida. En la revisión que se ha realizado
(sección 6 del documento), la lista se reduce a Costa Rica
y Estados Unidos. Además, en el caso de Costa Rica, retiró

los incentivos cuando la tecnología fotovoltaica maduró,
siguiendo un argumento similar al de la industria infantil:
proteger hasta que la industria madure.
República Dominicana no ha seguido la línea de la mayoría
de los países de la región. Si bien el país ha derogado o
rebajado algunos incentivos tributarios concedidos
inicialmente, continúa otorgando otros pese a que la
generación distribuida ya se ha desarrollado y, sobre
todo, la tecnología ha madurado, siendo los costos
significativamente menores que una década atrás, cuando
se inició el proceso de instalación.
v. El gasto tributario producto de estos incentivos
tributarios en la última década (2014-2023) se ha estimado
en aproximadamente US$ 250 millones, un promedio de
US$ 25 por año.
vi. Si se considera que tanto los costos de instalación de los
paneles fotovoltaicos como los costos de generación con
dichos paneles han caído más de 80% en los últimos diez
años, parece insostenible argumentar que los incentivos
tributarios deben continuar vigentes.
vii. Por otra parte, el tiempo de recuperación de la inversión
en paneles fotovoltaicos para quien se beneficia de todos
los incentivos tributarios vigentes es de aproximadamente
2.5 años. Si se derogara el crédito en el ISR, el tiempo de
recuperación pasaría a ser de 4.2 años, por lo que es sensato
suponer que la inversión continuaría siendo rentable. Una
prueba indirecta de ello es que los clientes residenciales
-personas físicas que no tienen posibilidad de beneficiarse
del crédito en el ISR- igualmente invierten en paneles
solares. De acuerdo a cifras de la CNE, poco menos de un
25% de la capacidad instalada de la generación distribuida
CONCLUSIONES
corresponde actualmente a clientes residenciales.
viii. El beneficio más relevante de la generación distribuida
es la menor emisión de CO2 respecto a la generación
con combustibles fósiles. El resultado obtenido por
República Dominicana es muy interesante: de acuerdo a
las estimaciones realizadas en este trabajo, en caso de que
la generación distribuida hubiese sustituido al carbón o al
gasoil, la menor emisión ya habría superado al millón de
toneladas de CO2 por año en 2022 (1.0 millón) y 2023 (1.2
millones, aproximadamente).
ix. Sin embargo, cuando se valoriza este impacto positivo,
utilizando la mediana de los precios del carbono en los
países relevados por el Banco Mundial (US$ 32.6 por
tonelada de CO2 emitida), resulta que el costo (gasto
tributario) es entre un 50% y un 55% superior al beneficio
(valor de la menor emisión de CO2), es decir, la relación
costo-beneficio es claramente negativa. Y esto sin
considerar que las pérdidas de las distribuidoras también
tienen un impacto fiscal, como fue explicado.
x. Actualmente está en proceso de consulta pública el
borrador de un nuevo “Reglamento para la aprobación,
interconexión y operación de instalaciones de generación
distribuida de energía”. En términos generales, se
considera que el problema de la no recuperación de los
costos de red se mantiene. No obstante, como aspectos
positivos, debe señalarse que se pasa de un régimen de
medición neta a uno de facturación neta, en el cual toda
la energía inyectada es remunerada a un precio inferior al
que se paga por la retirada; y que se implementan límites
para asegurar que el objetivo central de la generación
distribuida sea el autoconsumo, desincentivando el
surgimiento de proveedores netos.
41
 CONCLUSIONES

42
 BIBLIOGRAFÍA

Bibliografía
Bollen M.H.J. y F. Hassan: Integration of distributed generation in the power
system. IEEE Press Series on Power Engineering. 2011.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

CECACIER: Planificación Clásica de las redes de distribución y el nuevo entorno

(aumento de variables). 2017.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Banco Mundial: https://carbonpricingdashboard.worldbank.org/what-carbon-

pricing. Estadísticas varias sobre el precio del carbono.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Comisión Nacional de Energía de República Dominicana (CNE): varias

publicaciones.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Di Lavello, Tomás: Comparación de la Normativa de Autoconsumo de España y

diferentes países de América. 2017.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Di Lavello, Tomás: Generación distribuida: ¿un reto o una oportunidad para las
empresas eléctricas? Curso de CECACIER. 2023.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

EDEESTE: información aportada luego de un pedido de información a través del

Sistema de Acceso a la Información Pública (SAIP).

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

EDENORTE: información aportada luego de un pedido de información a través

del Sistema de Acceso a la Información Pública (SAIP).

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

IRENA: https://www.irena.org. Varias publicaciones.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Mena, Carlos: “Metodología para la estimación del precio social del carbono
en Chile y fortalecimiento de capacidades para su aplicación en los países de
América Latina y el Caribe”. 2021.

43
 BIBLIOGRAFÍA

Bibliografía
Ministerio de Hacienda y otros: Estimación del gasto tributario en República
Dominicana. Varios años.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

OLADE: Impacto de la generación distribuida en las redes de distribución. 2014.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

República Dominicana - Ley 57-07, de Incentivo al desarrollo de las Energías

Renovables y sus Regímenes Especiales. Mayo de 2007.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

República Dominicana – Decreto 202-08, Reglamento de aplicación de la Ley

57-07. Mayo de 2008.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

República Dominicana - Reglamento de Interconexión de Generación

Distribuida. Julio de 2012.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

República Dominicana - Reglamento de Medición Neta. Julio de 2012.

44
 ANEXO 1

Anexo 1 – Consideraciones metodológicas

sobre la estimación de pérdidas de las EDEs
originadas en la generación distribuida.
A través del Sistema de Acceso a la Información Pública (SAIP) se solicitó a las EDEs la información necesaria para estimar
la pérdida de las distribuidoras por el autoconsumo -sustitución de consumo- de los clientes de generación distribuida,
el no cobro del cargo por potencia a los clientes BTS con capacidad instalada menor o igual a 10 kW, y por la sobre-
remuneración de la energía que inyectan a la red.

EDESUR no proporcionó información alguna y los datos enviados por EDENORTE y EDEESTE presentaban inconsistencias.
Por este motivo, solo se utilizaron algunos de los datos proporcionados por estas dos distribuidoras.

Podría decirse, por tanto, que las estimaciones siguieron un enfoque macro, fundamentalmente en base a números
agregados, y no micro, en base a la información detallada que fue solicitada a cada distribuidora.

Estimación de las pérdidas por autoconsumo y por sobre-remuneración de la energía inyectada.

1. Las cifras del año 2023 fueron extrapoladas, de modo de considerar el año completo. Pese a que CNE publica datos
sobre la generación distribuida desde 2012 y los datos aportados por EDEESTE comienzan en 2014, las estimaciones aquí
presentadas comienzan en 2018 porque los datos enviados por EDENORTE comienzan ese año.

2. Los pasos seguidos en las estimaciones fueron los siguientes:

i) A partir de la capacidad instalada de cada EDE y usando el factor de capacidad (capacity factor) publicado por
IRENA³³, se estimó la energía generada por cada EDE en cada uno de los años del periodo 2018-2023.

EDENORTE y EDEESTE enviaron información sobre la capacidad instalada y, por su parte, la capacidad instalada total
de las EDEs es publicada por CNE. Por tanto, la capacidad instalada de EDESUR se estimó por diferencia.

ii) Respecto a cuánto de la energía generada es autoconsumo y cuánto es excedente que se inyecta a la red,
EDENORTE aportó esta información. En los casos de EDEESTE y EDESUR se estimó el coeficiente que fuera coherente
con el último dato publicado por CNE de energía inyectada (igual a energía generada menos autoconsumo) y se
utilizó ese coeficiente para todos los años.

iii) Para estimar la pérdida por autoconsumo, dado que no se contó con la apertura del mismo por tipo de tarifa, se
consideró la tarifa promedio de las categorías BTS1, BTS2, MTD1 y MTD2, que son las más relevantes en capacidad
instalada y/o generación.

Es necesario precisar que no se contó con información para descontar los ahorros de compras de energía de las
distribuidoras producto de la sustitución de consumo de los clientes de generación distribuida. No obstante, como
se discutió antes, hay costos que se mantienen, como los costos fijos asociados a las compras de energía y el costo
de dar estabilidad al sistema de distribución 24/7, más relevante cuanto mayor sea la penetración de las fuentes
renovables, que tienen un menor capacity factor.

iv) Como se dijo, para estimar la pérdida originada por la sobre-remuneración de la energía inyectada por los clientes
de generación distribuida, se consideró que, si se pasara del esquema tarifario actual de medición neta a uno de
facturación neta, la energía inyectada debería ser remunerada a las 2/3 partes de la tarifa vigente. Dicho de otro
modo, se estimó que la pérdida actual equivale a 1/3 de la tarifa.

Es justo reconocer que, de este modo, se está sobreestimando la pérdida, pero no se cuenta con información para

³³ https://www.irena.org/Data/View-data-by-topic/Costs/Global-Trends.

45
 ANEXO 1

afinarla. La estimación es correcta para aquellos clientes que, a lo largo del año, retiran más de lo que inyectan. Pero
para aquellos clientes que finalizan el año con un crédito de energía, porque inyectan más de lo que retiran, esa
diferencia entre la energía inyectada menos la retirada es remunerada a la tarifa del primer bloque tarifario, la más
baja, como se dijo en la sección 1. Adicionalmente, como también se adelantó, solo se les devuelve el 75% de dicho
crédito. Por tanto, en el caso de estos contribuyentes, la forma de remunerar su crédito a fin de año, contempla -para
esa fracción de energía- el uso de red.

En principio, los clientes que inyectan más de lo que retiran deberían ser la minoría y sus créditos no deberían ser
relevantes, salvo en el caso de proveedores netos, que no deberían surgir si el objetivo es el autoconsumo.

v) Al igual que en el caso del autoconsumo, no se contó con la apertura de la energía inyectada por tipo de tarifa,
razón por la cual se consideró la tarifa promedio de las categorías BTS1, BTS2, MTD1 y MTD2.

Estimación de la pérdida de las EDEs por no cobrar el cargo por potencia a los clientes BTS con capacidad instalada
menor o igual a 10 kW

1. Número de clientes BTS con capacidad instalada menor o igual a 10 kW - El total de clientes de cada una de las
distribuidoras es publicado en la página web de la CNE. EDENORTE y EDEESTE enviaron esta información. Por tanto, el
total de clientes de EDESUR se obtuvo por diferencia. En el año 2023, se tomó el total de clientes a agosto, publicado por
la CNE, es decir, se decidió ser conservador y no extrapolar el número de clientes al año completo.

EDENORTE y EDEESTE informaron el total de clientes BTS con capacidad instalada igual o menor a 10 kW. En ambas
distribuidoras, estos clientes representaron, en promedio, poco más de la mitad (53%) de los clientes de generación
distribuida en el periodo 2018-2022. En consecuencia, se aplicó este porcentaje para estimar los clientes BTS de EDESUR
con capacidad instalada igual o menor a 10 kW.

2. Capacidad instalada promedio de los clientes BTS con capacidad instalada menor o igual a 10 kW - Solo en el caso de
EDEESTE fue posible cuantificar la capacidad instalada promedio de los clientes con potencia contratada menor o igual a
10 kW, que resultó ser igual a 6.3 kW, en promedio, en el periodo 2018-2023. Para poder realizar la estimación, los valores
anuales de EDESTE se aplicaron a las otras dos distribuidoras.

3. Cargo por potencia – El cargo por potencia de cada una de las distribuidoras se tomó de las diferentes resoluciones
sobre tarifas de la SIE. Se consideró el promedio de los cargos por potencia de los tipos tarifarios que actualmente lo
pagan: BTD, BTH, MTD1, MTD2 y MTH.

46
 ANEXO 1

Anexo 2. Estimación del gasto tributario

originado en los incentivos tributarios
otorgados a la generación distribuida

El Departamento de Incentivos de la Comisión Nacional de Energía (CNE) procesa las solicitudes realizadas para recibir
los incentivos tributarios y publica la renuncia de recaudación asociada a los mismos, clasificándola en: i) autorización
de crédito fiscal (en el ISR); ii) exención a las importaciones de autoproductores; iii) exención a las importaciones de
concesionarios (biomasa, eólico, solar); y iv) exención de ITBIS.³⁴

Por otro lado, un equipo multidisciplinario, encabezado por el Ministerio de Hacienda, publica anualmente un informe
(de aquí en adelante, el informe del Ministerio de Hacienda) que contiene una estimación del gasto tributario originado
en los incentivos concedidos a la generación de energía de fuentes renovables, clasificándolo en: i) Impuesto sobre la
Renta³⁵; ii) arancel y iii) ITBIS³⁶.

Es conveniente realizar algunas precisiones respecto a esta información. En primer lugar, como ya se vio, el crédito en
ISR por el 40% de la inversión realizada, utilizable en 3 años, solo beneficia a la generación distribuida y, por tanto, no
hay problemas para identificarlo. En segundo lugar, en el caso de la exención a las importaciones, la CNE distingue la
correspondiente a la generación distribuida (autoproductores) de la correspondiente a los concesionarios, distinción
que no realiza el informe del Ministerio de Hacienda. Finalmente, ni la CNE ni el informe del Ministerio de Hacienda
distinguen la exoneración de ITBIS correspondiente a la generación distribuida de la del resto de beneficiarios.

Dadas estas limitaciones de la información disponible, se procedió del siguiente modo para estimar la renuncia fiscal
asociada a la promoción de la generación distribuida:

i) El gasto tributario por la concesión del crédito en el ISR se tomó del informe del Ministerio de Hacienda. La renuncia
fiscal totalizó US$ 132.9 millones en la última década (2014-2023), un promedio anual de US$ 13,3 millones.

Si se estima esta renuncia fiscal a partir de la capacidad instalada anualmente de generación distribuida, informada por
la CNE³⁷, valorada utilizando el costo total de instalación publicado por la Agencia Internacional de Energías Renovables
(IRENA por sus siglas en inglés)³⁸, el resultado es muy similar: US$ 135.1 millones³⁹. Es probable, por tanto, que la cifra del
informe del Ministerio de Hacienda incluya tanto a clientes comerciales e industriales como a residenciales. En líneas
generales, estos últimos no tienen modo de beneficiarse del crédito en el ISR, razón por la cual su inversión debería
ser excluida cuando se estima el gasto tributario. Según la CNE, la capacidad instalada residencial de la generación
distribuida es actualmente 25% de la total, aproximadamente. Como no se cuenta con información para corregir toda
la serie (2014-2023), se mantiene la estimación dejando constancia del problema.

ii) La renuncia fiscal por la exoneración del arancel a las importaciones se estimó a partir de la capacidad instalada
anualmente de generación distribuida, informada por la CNE, valorada utilizando el costo total de instalación publicado
por IRENA. La capacidad instalada de generación distribuida en 2023, informada por la CNE, está publicada hasta
agosto inclusive, pero las cifras se extrapolaron de modo de considerar el año completo.

³⁴ Cuando publica el listado con los nombres de los solicitantes de los incentivos, la CNE utiliza otra clasificación, a saber: i) exoneración de impuestos a la
importación (arancel e ITBIS); ii) exoneración de ITBIS a las compras locales; iii) crédito de 40% de la inversión en el ISR.
³⁵ Se incluye aquí la exoneración al Impuesto sobre Activos que es, en rigor, un impuesto mínimo sobre la renta empresarial: solo los contribuyentes cuyo ISR a
pagar sea menor al 1% de sus activos deberán pagar la diferencia.
³⁶ Distinguiendo ITBIS externo (cobrado en la importación) e interno. En el periodo 2014-2023, el ITBIS interno informado por DGII es poco más de 1% del ITBIS
externo.
³⁷ https://www.cne.gob.do/documentos/medicion-neta-documentos/
³⁸ https://www.irena.org/Data/View-data-by-topic/Costs/Global-Trends
³⁹ La cifra informada por la CNE es menor, de solo US$ 63.8 millones entre 2014 y septiembre de 2022, última cifra disponible.

47
 ANEXO 1

Se aplicó un arancel de 12%, que es el que correspondería si no estuviese vigente la exoneración. Este gasto tributario
se estimó en US$ 42.8 millones en 2014-2023, un promedio anual de US$ 4.3 millones.

iii) Finalmente, la renuncia por la exoneración de ITBIS a la importación también se estimó a partir de la capacidad
instalada anualmente de generación distribuida, informada por la CNE, valorada utilizando el costo total de instalación
publicado por IRENA.⁴⁰ ⁴¹ Este gasto tributario se estimó en US$ 71.9 millones en 2014-2023, un promedio anual de US$
7.2 millones.

⁴⁰ Recuérdese que el arancel forma parte de la base imponible del ITBIS.

⁴¹ En este caso, al igual que en el anterior, las cifras de 2023 se extrapolaron de modo de considerar el año completo.

48
 ANEXO 1

Anexo 3. Consideraciones metodológicas

sobre la estimación del beneficio y el
análisis costo-beneficio

Para realizar un análisis costo-beneficio, hay que i) definir y ii) valorizar el beneficio atribuible al régimen de generación
distribuida.

En primer lugar, las tasas de emisión de CO2 por tipo de combustible deben considerarse como cifras aproximadas,
que pueden variar según las tecnologías y prácticas específicas utilizadas en la producción y uso de cada combustible.
Además, la cantidad exacta de emisiones también depende de factores como la eficiencia de la combustión y la
infraestructura asociada. Dicho esto, las tasas de emisión de CO2 por tipo de combustible consideradas en este trabajo
son:

• Carbón: entre 2.2 y 2.7 kgs de CO2 por kWh;

• Gasoil: entre 2.2 y 2.5 kgs de CO2 por kWh; y

• Gas natural: entre 1.6 y 2.2 kgs por MWh.

Por su parte, la energía solar fotovoltaica es considerada una fuente de energía limpia debido a que no emite CO2
durante su operación directa. No obstante, deberían considerarse las emisiones indirectas asociadas con la fabricación,
transporte e instalación de los paneles solares. La fabricación de los paneles implica procesos industriales que pueden
generar emisiones de gases de efecto invernadero, aunque estas emisiones se han reducido significativamente por
mejoras en la eficiencia y la adopción de prácticas más sostenibles. La relación entre la energía producida por un panel
solar y las emisiones de carbono asociadas a su fabricación se conoce como tiempo de retorno energético o período
de recuperación energética. Este período ha disminuido a medida que la tecnología ha avanzado. En la estimación de
este trabajo, la energía solar fotovoltaica se consideró una fuente de energía 100% limpia, es decir, no se consideraron
los efectos indirectos asociados a la fabricación de los paneles solares.

En la estimación aquí realizada, se consideró una tasa de emisión para el carbón de 2.45 kgs de CO2 por kwh (valor
medio entre 2.2 y 2.7) y de 2.35 para el gasoil (valor medio entre 2.2 y 2.5).

En segundo lugar, para darle valor al ahorro implícito en la sustitución de combustibles fósiles por fuentes de energía
limpia, es necesario considerar el llamado precio del carbono o precio social del carbono. El precio del carbono es el
precio/costo de emitir gases de efecto invernadero a la atmósfera; permite estimar monetariamente los costos de los
daños ambientales causados por la emisión de CO2 o, visto desde el otro lado, el ahorro que implica la sustitución de
los combustibles fósiles por energías limpias.

El análisis técnico de las metodologías de estimación del precio social del carbono excede el alcance de este trabajo⁴².
No obstante, es preciso indicar que en su implementación práctica influyen consideraciones de economía política y/o
ambiental. Por ejemplo, algunos gobiernos establecen directamente un precio a las emisiones de carbono a través de
un impuesto al carbono, es decir, un impuesto por cada unidad de emisión de CO2, que puede ser fijo o escalonado a lo
largo del tiempo. Estos impuestos tienden a proporcionar una señal clara de precios y permiten a las empresas decidir
internamente cómo reducir sus emisiones para minimizar costos.

⁴² Los tres modelos más reconocidos y que son aplicados para determinar el costo social del carbono son Dynamic Integrated Climate-Economy model (DICE-
RICE), Policy Analysis of the Greenhouse Effect (PAGE) y Climate Framework for Uncertainty, Negotiation and Distribution (FUND). Pueden consultarse en
Cartes Mena, Fernando: “Metodología para la estimación del precio social del carbono en Chile y fortalecimiento de capacidades para su aplicación en los
países de América Latina y el Caribe”.

49
 ANEXO 1

Alternativamente, algunos gobiernos implementan sistemas de comercio de emisiones (cap and trade). En estos
sistemas, se establece un límite o tope a las emisiones permitidas y se emiten permisos equivalentes a ese límite total.
Las empresas pueden comprar o vender estos permisos entre ellas. En este caso, el precio del carbono se determina
por la oferta y la demanda en el mercado de permisos de emisión. Los sistemas de comercio de emisiones permiten
flexibilidad y pueden llevar a reducciones de emisiones donde sea más rentable. Sin embargo, el precio del carbono
puede ser más volátil en comparación con un impuesto fijo.⁴³

En la gráfica 4 se muestra el precio del carbono, en dólares por tonelada de CO2 emitida, vigente actualmente a nivel
nacional en los países que, según el Banco Mundial⁴⁴, han tomado la iniciativa de implementarlo. (En algunos países
se han establecido precios al carbono a nivel de región o de ciudad, como en Quebec y Ontario en Canadá, Beijing y
Shanghai en China, y Tamaulipas y Zacatecas en Mexico). La alta dispersión de los precios (media = 42.4, mediana = 32.6
y coeficiente de variación = 1.0) da cuenta de las consideraciones de economía política y/o ambiental, a las que se aludía
anteriormente, que se toman en cuenta a la hora de implementar los precios al carbono.

En 2017, un reporte de Joseph Stiglitz y Nicholas Stern a la High-Level Commission on Carbon Prices, de la Carbon
Pricing Leadership Coalition, una iniciativa administrada por el Banco Mundial, recomendó que el precio del carbono
debía alcanzar los US$ 40 por tonelada de CO2 equivalente en 2020 y entre US$ 50 y US$ 100 en 2030 (entre US$ 61
y US$ 122 a precios de 2023) para limitar el calentamiento global por debajo de 2 grados centígrados. Iniciativas más
recientes proponen metas similares.

⁴³ Para un análisis de los principales métodos para determinar el precio del carbono, véase Banco Mundial: https://carbonpricingdashboard.worldbank.org/
what-carbon-pricing.
⁴⁴ https://carbonpricingdashboard.worldbank.org/map_data

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