You are on page 1of 1

Santa Catalina

de Tekakwitha
Santa Catalina de Tekakwitha fue una santa católica que vivió en América del Norte
en el siglo XVII. Fue considerada un ejemplo de humildad, paciencia y amor por los
demás. Se dedicó a la oración y la penitencia, y vivió una vida de pureza y castidad.

Vida, cualidades y
virtudes
Santa Catalina de Tekakwitha nació en 1656 en una
región habitada por la tribu Mohawk. A una edad
temprana, sufrió la pérdida de sus padres debido a
una epidemia de viruela, que también la dejó con
cicatrices en su rostro y daños en su visión. Fue
bautizada por un misionero jesuita y tomó el
nombre de Catalina. Es conocida por su fuerte fe y
devoción a Dios, a pesar de las adversidades que
enfrentó en su vida.

Misión y devoción
Catalina tuvo una profunda devoción a
Jesucristo y a la Virgen María.
Desarrolló una vida de oración
constante y ayudó a los enfermos y
necesitados en su comunidad. A pesar
de la oposición de su tribu y la
persecución religiosa en su entorno,
mantuvo su fe y sirvió como modelo de
santidad para otros.

Santificación
Fue canonizada el 21 de octubre de 2012 por el
Papa Benedicto XVI. Su santificación se basa en
su vida de virtud, sacrificio y su capacidad para
mantener su fe en circunstancias difíciles.
También es un símbolo de la inculturación del
cristianismo en América del Norte, ya que
combinó su herencia indígena con su fe católica.

Anécdota
Una anécdota interesante sobre Santa
Catalina de Tekakwitha es que se le
atribuyen numerosos milagros. Se dice
que sus cicatrices desaparecieron
milagrosamente después de su muerte,
y se le atribuyen curaciones y
protección de enfermedades. Esto
contribuyó a su proceso de
canonización.

LUCÍA RIVERO REGUERA

You might also like