You are on page 1of 131
ABINE:TE DE Pccncrer eee MY cURL) f Arqueologia de una PEC CMON ce arn he E en Boca de Jaruco UG CTA E CTE Trae CEM Tie) Namo ie) MEER Renny oel Informe oe GaBINETE DE ARQUEOLGIA Mis de tres décadas jalonan el decursar de la investigacién arqueoldgica del centrohistérico de la Habana Vieja, pero en los dikimos doce afios esas labores han tomado un cardcter mis sistemdtico y extensivo con la fundacién del Gabinete de Arqucologfa de la Oficina del Historiador, Por lo que l Bole- tin de esta Insttucién, cuyo primer nimero presentamosaqut, no sélo seré una contribucién ala dlivulgacién de los conoci- mientos sobre la arqueologfa histérica cubana, sino también para llenar un gran vacio informativo deesta disciplina en el pais. Muchos de los resultados de esta Arqueologia Urbana Histérica, en general, son desconocidos tanto dentro como fuera de Cuba, pese a su aporte al conocimiento sobre el pasado yel devenirde a Ciudad, y ala formacién de coleccio- nes de la cultura material que se ha recuperado por las cexcavaciones arqueoldgicas. Aunque el mayor énfasis de esta publicacién especializada stand centrado cn la Arqucologfa Urbana, aspiramos aque se convierta también en un vocero de otras dreas dela investign- ign arqucolégica,la conservacién y restauracién del patrimo~ nio edificado y mueble, las indagaciones hist6ricas de inmuebles de valor patrimonial, la numismética y otras cien- ias auniliares de la Arqueologia, Eneste primer niimero, en buena medida experimental en sa formato y composicién temdtica, se agrupa la informacién prefijando secciones permanentes como las de Arqueologi, Historia, Pintura Mural, Catélogo Habanero, Personalidades dela Ancropologia y la Arqueologia, De Nuestra Coleccién, Fondos de la Biblioteca y Noticiario, los que podrian suftir cambios yadiciones en niimetos posteriores, Sistematizar la salida de esta publicacién seriada sera un ver- dadero reto para cl Gabinete de Arqueologla, que esperamos lograr con toda entrega y con el inestimable auspicio de la, Direccién de Patrimonio y Museo de la Oficina del Historia dor dela Ciudad de La Habana. DEDICATORIA Este niimero del boletin ¢s en homenajeal arquitecto y res- taurador colombiano Augusto Martinez Segrera, el Maestro dela ila, como carifiosamentele llamaba el Dr. Eusebio Leal Spengler por su experiencia profesional eimportanteasesorfa alas obras de restauracién de las fortficaciones en la Isla de ‘Tierrabomba en Cartagena de Indias, A este gran hombre, cya vida fue segada por una penosa enfermedad, amigo de CCuabay de los cubanos, donante de os primetos fondos para este boletin, colaborador incansable de nuestra Institucién, gestor de intercambios profesionales y de trabajo entre ‘Cartagena de Indias y La Habana, y uno de los estudiosos del patrimonio cultural hispanoamericano, esté dedicada esta pu- blicacién, Es un modesto respeto todo lo que signifios para nosotros, ya suamplia dedicacién y aporte en el rescate del patrimonio hist6rico de su amada Cartagena de Indias. Sus amigos nunca podremos olvidar su noble vireud de maestro y suyocacién ala amistad profunda. CCatlos A. Hendnder, ali Redriver Gi, Lasene Roun, Li: Carmen Lercana Montes, Daniel Vasconcelos Poruondo, Omar Dieppa Casellanos ‘Consejo Cientfico Dr. Fusco Leal Spengler, Lic. Raida Mara Sure Pore, Dr. Manuel Rivero de la Cll, Dr. José M. Guasch Delmonte, ‘Dra. Lourdes Domingses, Mir. Raméa Dacal Moure, Mr. Alfredo Rankin. Asesoria Dr Fuebio Lal Spengler, Lie Reid Mara Sse, Li. Pedro Juan Rosrguc Julce Barday. TraduesinJulc:Barday, Dania Heméndce Recices Disefio Alberto Medina Pei Ismael Morsj6n Alvarez, In Acosta, Fotografias José A. Cabal, Fidel Neva, Viaor Rodrignce Moinelo, Gorrespondencia y canje a Gabinete de Arqucologia, Oficina del Historiador de la Ciudad. de La Habana. ‘Ticén No 12 of O'Reilly y Empedrado, Habana Vieja. C.P. 10100. Ciudad de La Habana, Cuba. E-mail: gabi i Esta es una publiacidn seriada del Gabinete de Arqueologia de la Oficina del Historiéor de la Ciudad, Timagen de la cubierta: Cerdmica tipo México Pintado de Rojo, siglo XVI. Convento de San Francisca de Ass. RNPS 0449 ISSN (Solicitado) Inpice ARQUEOLOGIA 4 Arqueologla de una grada de construccién naval en Boca de Jaruco, Roger Areas Delade,Alesendro Lipee Pérez, Antonio Quevede Herreo,lvali: Rodriquez Git, Gustave Faleén Mendoza, 14 Excavaci6n arqueolégica en la iglesia de convento de San Francisco de Asts, jorge Brit Ni. 22 Institucionalizacién de la arqueologfa en la Habana Vieja. Daniel Vasconcelles Porrwordo, 29 Evidenciasaborigenes de contacto entre Mesoamérica y San Cristdbal de La Habana: Cerimica México Pintado de Rojo. Sonia Menéndez Castro, Karen Mahé Lugo Romera. 36 Reflexiones en tornoal tema dela muerte ‘en la mitologfay la plistica Aruaca. Carlos A. Herndndez Oliva, Lisette Rowra Alvarez. $5 Ontizy la cucva del templo oe informe de Don Fernando. jot Ramin Alon. Restauracién del material 6seo excavado ven la iglesia de San Francisco de Paula. alii Rodrigues Gil, Antonio Quevedo Herrero, Intervencién arqueolégica en Habana 958. Sonia Menéndea Castro. La Geofisica en la investigaciones arquelégicas de la Habana Vieja. Remin Gonzlec Carabalo, Orlando areas Hernindes, Héter Fersindea Nite ‘Restos deanimalesen un yacimiento histérico habanero. José M. Ters Pic, Rolando Cropo Dias, ‘Ricard Vegera Rodriguez HISTORIA 9 8 a + ae El Cementerio de los protestantes de La Habana. Manwel Barcia Paz. Reina 360; Una propuesta de restauracién yconservacién. ‘Ares Heratndex Plasencia $3 Lamujeraborigen al inicio del siglo XVI cen el caribe. Launder. Domingicz 92 Unaepidemia casi olvidada que ocurtié en La Habana en el siglo XVI. fone Mae Gonzdee 33% wun mura g 100 Pintura mural colonial en la Habana Vieja. Maria del Carmen Montes Rodriguez. 104 Casade Asia. Consolidacién y restauracién de sus pineuras murales, Acu/ Sdechez Tons, Tera Abels Aquey Tania Gonadlee Vanes, Anabel Diaz Borris, Aclia Rodriguez Beequer & CATALOGO HABANERO 108 — Pinturas murales en la Casa de la Obrapia. Marka del Carmen Montes Rodrigues. PERSONALIDADES DE LA ANTROPOLOGIA Y LA ARQUEOLOGIA 110 Dr Luis Montané y Dardé. Daniel Vasconcelles Portwond, 2 ® DE NUESTRA COLECCION 113 Mayélica San Luis Polferomo, keer Armacits Del 8 FONDOS DE LA BIBLIOTECA 115 Nuevos libros. Francis Sera Aloaree NOTICIARIO 117 Unhallazgo inusual en Obrapia 55. Lisente Rowra Alvarez, Carles A. Herndndes Oliva. Cahuachi. Centro ceremonial del Peni preincaico. Sendra Y. Rodrigues Pérez Intervenciones preliminares parala restauracién en Trinidad. Tania Cucio y Mario Romay. ‘Unmolusco raro en ladieta de los aborigenes de Cuba. Relendo Crap Hallazgo arqueolégico en elantiguo Hotel Saratoga. Roger Arrazcaeta Delgado. Bioarqueologfa: una nueva inea de investigacién del Gabinete. jo. Tres Pica Excavaciones Arquelégicas en el eafetal El Padre, Lisette Rowra Abvarea. Casa del Marqués de Prado Ameno: Estudios de ppincura mural. Mari del C Paid, Annie Marin Tam Lang y Sendra Pee Rescate arquelégico en Mercaderes 15. Andi Prado Flores, Joyce Rossi Aloaree, Rolando Crespo Diaz Arqucologfa en la fortaleza de San Salvadarde la Panta, Alin Lait Gémee Roger Arrazcaeta Delgado, Alessandro Lopez Pérez, Antonio Quevedo Herrero, ali Rodriguez Gil, Gustavo Faloén Mendoza, Resumen Este reporte preliminar recoge a invstigacion sobre una grada de construccién naval ubicada en ero Jarueo (Boca de Jruco), en ta provincia de La Habana 1a informacién hisriea reunida, el estudio tipolgico y earacteriza- ién; el incento de inexpretar su funcién y de eablecer su cronole- sla, nos permitié adquirir tuna percepeién de aspectasdesconocidos de lo que fuera un genino astllero de los primeros tiempos dal periodo colonial de Cuba Abstract This isa preliminary fepore om a shipbuilding yard located in the Januco River, in Havana Province. The hisotcal documentation gathered, the sypologiel study and charsceerization: the axtempt o inerpres is function and to establish its chronology, allowed us to gain an insight into unknown aspects of & ‘genuine shipyard that lates back wo the beginnings of the Cuban colonial period, Gasine a sihinhen event OR cet arts ont pt (opt ni) Bllecseere men L perspective de estudiarla grada de cons- traccién naval de Boca de Januco fe estimula- dda porel hallazgo de los restos de wna estructu- ra similar en a antigua casa de Don Pablo Pedroso, sito en la calle Baratillo N° 101, es- quinaa Obrapia. Las investigaciones arqueol6- gieasen este significativo inmueble de la Ha- bana Vieja se efectuaron en ‘campafias entre los afios 1990-1995, permitiendo la lo- calizacién, entre otras evideneias, de unas [LSE ten ae tne gene rs [a inp [5 ]opetaie timed gates (Er ete aad ores zanjas abiertas en el subsuelo calizo, que pat sus rasgos inusuales no fueron identificadss a mediatamente en cuanto a su origen y usa Después de su estudio y comparacién se pude litud tipolégica con una es tructura que afios antes habjamos explorada énel rio Jaruco. La tradicién oral en el publ de Boca de Jaruco marca a este paraje como un antiguoasillero de la época colonial, pero nunc antes se realizaron investigaciones al respecta. constatar su si Oricina pet Histor odo, y después de consultar bibliografia sobreel tema, d6 dudas de que se tratabadde restos de un astllero del exe colonial -cmera.aproximacién al yacimiento arqueolégico indi- omendable de realizar una investigacion hist6rico- gica inmediata, pues ademés de verificar quela es- podéa ser tan antigua como lalocalzadaen lacasade 2050, presentaba dimensiones mayoresy elementos > mas completos que a primera; propiciando la posi cuciar un ejemplar excepcional delo que fue una seats para fabricar barcos en los primeros siglos dela colonia = por fo que se hizo patente ef interés que podrfa centre ls investigadores del campo dela arqucolo- ica y dle otras ramas afines al tema. ots de haber sondeado algunas fuentes: documentos s,bibliografia especalizada, conversacién yon: nas autoridades nacionales internacionales de at: 2 os estudios navales (Dr. José L. Casado Soto, Dr. Smith, Dra. Pilar Luna, Dr, César Gareia del Pino, Dr » Ortega) se lleg al consenso de que los restos de la Boca de Jaruco podian ser los més antiguos y com- iscentesen el palsy, probablemente, en el restodelas joy proteccién como Patrimonio las porloquesuest Civpap peta Hasana LocaLizaciOn y ENTORNO NATURAL El sitio estd ubicado a 19.3 millas al este del faro dela Forta~ leza del Morro de La Habana, en la margen oriental de la cdesernbocaclura del ri Jaruco, cerca del casero conocido como Bocade Jaruco, provincia La Habana. Seencuentraa 23° 10! 8° delatirud norte y a 82° 00" 5” delongitud ocste, enclava- doen una llanura de tipo abrasivo-acumulativa formada por biocalcarenitas de cuareo semidesnuudo, Aflorac lapiez 0 dierte de perro, producido por la erosiin eblica y marina. Desde la orilla del mar se puede observar como la llanura va ganando cen latitud mediante terrazas escalonadas. En la actualidad la vegetacid predominance es de tipo xeromorfo costero y subcostero con abundancia de suculen- tas-manigua costera- similar la que originalmente debis cexistir. Esta formacién vegetal ocupa una franja de 2 km. desde el mat, y de aqui hasta los 4 km. se extienden pastos con focos de cultivo como el henequén, sabanas naturales y vegetacién secundaria, corte rectangular de ens 29 matros de longitud en el earso costero denota su Bibliografia: de Arrate, José Martin Fix: Llave del ‘Nuevo Mundo antemural de las Indias Oceidenta- les. La Habana descripea, noticias de su fundacién, aumentos y estados, La Habana, 1964, Casado Sora, José L., Gerardo Garcia: Castillo Riesgo ¥ ‘otros: Barcos y Asailleos. La Construccién. Naval en Cantabria. Puerto de Santander, 1993, Castanedo Galin, Juan M., Rafael Palacios Ramos y otros: ‘Veeros y Vapors. Barcos emblemdticos en el Pueno de Santander Sigo XVEXIX. Puerto de Santander, 1995, de tas Casas, Fray Bartolomé: Historia General y Natural de las Indias, M. Aguilar, Editor marqués de Urquio. 39, Madrid (Tomo Il, Dian del Castillo, Bernal: Hiseoria werdadera de la conquista de Ia Nueva ‘Espatia, Ediciones Casa de las Américas (Toros [-). Feeninder de y Valdés, Gonzalo: Historia General y Natural de las Indias, Madrid, 1851 (Tome 1) Friedlaender, Heinsich: Historia Econémica de Cuba (Tomo D. Piano que muesira los restos de la ‘grada de construccién naval de la Boca de Jaruce Elbioclima es del tipo medianamente seco (3- 4 meses de sequia), como en casi todo el archi- pidlago cubano. Los suelos son de ph bisico siempre oxidados. En las riberas del rio se aprecia el manglar y, masal interior, donde éte se encafa entreem- pinados farallones, sunge un bosque de galerfas muy impactado por las intervenciones antrépicas. En los valles, hoy desbrozados de su vegetacién original, debieron crecer exce- lentes drboles de maderas apropiadas para todo tipo de construccidn, especialmente naviera, prueba de ello son los pedimentos ce tierrasal Cabildo habanero para aserraderos y fomento deingenios azucarcros desde el siglo XVII. RESULTADOos DEL TRABAJO DE CAMPO. Los trabajosin sit se orientaron hacia el cono- del sitio arqueolégico, lo que OR i es ttre dna) a ess spas yr Arn [pment ec pri Gasinet conlleyé a dos exploraciones: la primera en septiembre de 1995 y la segunda en diciem- bre del mismo aio. Laprospeccién tuvo dos puntos de interés: sector dela grada propiamente dicho, que ocu- pala margen rocosa no sumergida, y la antegrada o drea sumergida. Lacxploracién de la grada incluyé no sélo una determinacién visual de todos sus rasgos ar- queoldgicos, sino también una serie de calas para liberar de arena los picaderos abiertosen el carso costero, que se encontraban alineados al centro de la estructura, muchos totalmente cubiertos, Asimismo se hicieron otras biisque- das y limpiezas de yerbasy arenaen los canales dela grada, hallindose restos de clavos de hic- tro forjado y una micracuenta de coral rojo de factura colonial. Se detectaron ademés una se- rie de huecos enfilados a ambos lados de los canales, que pudieron haberse cavado para las ‘escoras, 0 come soporte para los horcones de tuna aearazana; junto a esta tarea de campo se realiz6 un plano dela grada y un registro foro- grifico detallado, Ortcina vet History oes EOLOGIA En el sector de la antegrada se llevé a cabo una prospeceién con equipas de buceo auténomos, lo que permitié compro- bar las excelentes condiciones nécnicas de ésta para faciicar la botadura de embarcaciones construidasen elastillero. En los akededores de la antegrada se recolectaron numerosos guija- ros de astres; se trata de rocas muy duras, probablemente setamérficas, que tienen pirita en su composici6n, de acuer- doalo cual es posible atribuirles una pracedencia sevillana, Peto por supuesto ello es dificil de demostrar atin haciendo studios de seecién delgada, Hasta aqui un resumen de las investigaciones preliminares elsitio, aunque es evidente la necesaria consecucién de tra- Bajos con miras a descubrir vestigias de otras instalaciones componentes del astillero tales como almacenes, carpinterfas, ormioriosy otras; y ademés, ampliarlas exploraciones sub- smarinasen éreas creundantes ala antegrada. DESCRIPCION ¥: PROBABLE FUNCIONAMIENTO DE LA GRADA El lugar de ubicacién del astillero fue seleccionado cuida- dosamente porsu constructor, escogié una porcién firmeen la riberacste del rfo, sobre el plano inclinado deun pequenio salicnte arrampado, en donde se practioé un cone abertura de 11 m. de ancho en ef carso litoral (diente de perro 0 Lapiet), quedando un 2écalo rectangular que entraal mar con pendiente de unos 52a 10°, siendo su dngulo mayor el mas cercano al agua. Ese rectingulo es perpendiculara la orilla yest divididoen dos sectores: la grada propiamente dicha y la antegrada, Ciuvap peta Hapana Laprimera es la parte que queda fuera del agua en las mayo- res mareas,y la segunda es la seccién sumergida del plano inclinado que seextiende longicudinalmentecon una mayor caida, Al construiese esta estructura se abrieron en el lapiez del sec- tor della grada veinticinco canales alo ancho de ella, separa- dos por unos cangilones paralelos entre siy divididos en su crujia por una linca de aberturas cilindricas de diferentes dliémettos y profundidades, también excavadas en el carso, que no aleanaan al tercio. del reeténgulo Formado por la antegrada. Los canales tenfan la funcién de hacer firme a tunos grucsos dados de madera llamados madres, que eran ‘empotrados en posicidn horizontal en ellos. Lalinea de aberturas cilindricas corre desde el primer tercio dela grada hastzel extremo opuesto al mar o rumbo este, yen «stos huecos iban encastrados unos rollizos de madera nom- brados picaderos 0 muertos, y a cuyos ladosirfan las madres, quedando dichos picaderosen la crujfa de la grada. Ya en el sigloXIX éstos e montaban encima de las maares. Sobre los picaderos descansaba la quilla dela embarcacién que se cons- truia, pero sélo en algunos puntos, porque era necesario que 1a quilla ylos fondos del casco fueran accesibles durante la fabrica, Como la quillaera el ¢je longitudinal principal dela armazén del barco y partir deella se consolidaban las demds cestructuras que formaban el vaso, era imprescindible que los ‘picaceros fueran de madera dura, macizos y resistentes como para soportarla mayor carga o fuerza normal constiwuida por el peso completo de la embarcacién. Unos huecos més pequeiios, encontrades en el sitio, estaban asociados alas madres y parecen haber sido soportes de pun- tales auniliares que servian para darle estabilidad a algunas picras dela estructura del casco en el momento de montarse; también podian servir para las escoras, pero los que mds se acercan a esta iltima categorfa.son un grupo de huecos que se encuentran alineados a ambos lados de los canales o soportes de madres: en lacara norte hay cinco yen lacara surla misma cantidad, ya que estas escoras o puntales de maderase siuaban longitudes variables a uno y otro lado del casco para man- tenetlo en construceién. Otra hipGtesis sugiere (Ovidio Or- toga Pereyra, comunicacién personal, 1996) que servian para las horeonaduras de una atarazana o espacio cubierto, que protegfa alos construetores yal barco en grada de mencias del tiempo; es de observar, que algunos de estos huecos eran naturales del carso dell ribera A medida que la grada avanza hacia tierra (rumbo este), los canales y cangilones van desapareciendo, ya que! perfil dela grada se hace menos profundo y las madres eran sustituidas porla basada (tablones en forma de planchas que hacen un. piso de madera). Mientras que en sentido contratio, es decir, hacia el may, las madres se inerementan para soportar toda la estructura del barco. Asociado al sector sur de esta estructura naval, cerca de la orilladel mar, aparece un corte perpendicularal borde delos canalesdelas madres, practicado posiblemente para desaguar cl agua que chocaba con las primeras lineas madres durante las marejadas, pero la res- puesta definitivaal uso de este canal todavia no: Lagrada mideen toda su extensién 28.88 m. de longitud y 11.16 m, de ancho, dimensiones calcu- ladas en base al contacto de la grada con la antegrada, al diltimo Gasinets de los huccos de picaderos ya los orficios de las escoras. Por otra parte, la antegrada, que como hemos dicho es la que estd bajo el mar, se caracteriza por no poser canales para las maeres ni orificios para picaderos, ademds, su plano es mucho mis inclinado para ayudar la botadura. Estaseintemaen el mar hasta caer en un talud, donde se imponia que el barco al deslizarse hacia el agua no tocara fonclo al pasar este declive. Una vez descrito este astllero con sus partes principales, pa- semosa explicar su utlizacidn en la construccién naval, pero antes, recordaremos que esta grada contiene veinticinco zan- jas donde estaban insertadas las madres. durmientes dem deraa todo lo ancho, y que éstas estan atravesadas por una hilera de huccos de picaderosdispuestos en sentido perpen cular acllas, dividiendolas en carrileras, Sobre las madres, es decir, a ambos lados de los dados de madera que formaban el picadero, e fijaban unos tablones denominados éasada, que era una estructura en forma de bastidor. Su funcién: a de erearun solado para trabajar coda Detalles de 10s canales cavados en el carso para insercién de las «madre Historia Oricina Det QUEOLOGIA lnestructura del barco, 0 sea, pordonde se des- plazaban los operarios, carpinteros, calafatesy Encima de la basada se colocaban dos hileras cdemadera en forma de carrl, ambos ados de los picaderos, que se llamaban fmadas, y eran las encargadas de guiar ala cuna hacia el mara tshorade la botadura. La euna, como su nom- bre indica, es un soporte que rodaba por enci- sma de las imadas, como un carro porlos rails, yy se le introduea al barco por la parte de la grada que quedaba opuesta al mar. Una vez colocada debajo del bareo, poco a poco se iban sustituyendo los dados de los picaderos y las

You might also like