Hora santa cuaresmal marzo 2024 «FIJÉMONOS LOS UNOS EN LOS OTROS PARA ESTÍMULO DE LA CARIDAD Y LAS BUENAS OBRAS» (HB 10, 24)
Monitor: Bienvenidos hermanos a la hora santa del mes de marzo. En
esta noche vamos a disponernos a vivir estos momentos de adoración a Jesús Eucaristía. Hoy tenemos el regalo maravilloso de encontrarnos frente a Él que viene a nuestro encuentro en su presencia Eucarística. Nos preparamos para recibir al Señor en la Eucaristía. Nos ponemos de rodillas. CANTO PARA LA EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO: A TI LEVANTO MIS OJOS - CUARESMA -letra y fijos en las manos de su señora, acordes (youtube.com) así están nuestros ojos en el Señor A TI LEVANTO MIS OJOS, esperando su misericordia. A TI QUE HABITAS EN EL CIELO; 3. Misericordia, Señor, A TI LEVANTO MIS OJOS, misericordia, PORQUE ESPERO TU que estamos saciados de MISERICORDIA. burlas; misericordia, Señor, 1. Como están los ojos de los misericordia, esclavos que estamos saciados de fijos en las manos de sus desprecios. señores, así están nuestros ojos en el 4. Nuestras almas están Señor, saciadas esperando su misericordia. del sarcasmo de los satisfechos; nuestras almas están saciadas 2. Como están los ojos de la del desprecio de los orgullosos. esclava 2
EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO (De la forma acostumbrada)
Monitor: podemos sentarnos o permanecer un tiempo más de rodillas.
La vida del cristiano en la tierra es una peregrinación hacia la casa del Padre. En esta peregrinación, el Señor nos llama a la continua conversión, y este tiempo de la Cuaresma nos ofrece una vez más la oportunidad de reflexionar sobre el corazón de la vida cristiana: «la caridad». El difunto Papa Benedicto XVI nos motivaba en este tiempo privilegiado invitándonos a «Fijarnos los unos en los otros para estimularnos en la caridad y las buenas obras» (Hb 10,24). Él nos recuerda que la Cuaresma nos ofrece un espacio para la oración y para que crezcamos en el compartir. Eso queremos hacer en esta Hora Santa, orar juntos para que el Señor aumente en nosotros la caridad. Atendiendo a su invitación a la conversión en el «darse», nos ponemos ante la presencia de Jesús Eucaristía y le pedimos que vivamos en esta cuaresma aceptando este llamado a compartir.
En estos momentos de oración vamos a fijar la mirada en el otro, ante
todo en Jesús, ya que estamos ante su presencia eucarística, pero, también desde aquí, y sin dejar de mirarlo a Él, vamos a mirar a los demás con sus necesidades, con sus anhelos, con todo lo que sabemos que nos pide ejercer la caridad hacia los demás.
Empecemos reconociendo nuestra pobreza, nuestra condición de
pecadores deseosos de estrenar un corazón nuevo. Adentrémonos en las palabras del salmista que nos invita a la conversión:
ORACIÓN CON EL SALMO 50
Lector 1: Misericordia, Dios mío, por tu bondad; por tu inmensa
compasión borra mi culpa; lava del todo mi delito, limpia mi pecado. Lector 2: Pues yo reconozco mi culpa, tengo siempre presente mi pecado: contra ti, contra ti solo pequé, cometí la maldad que aborreces. Lector 3: En la sentencia tendrás razón, en el juicio brillara tu rectitud. Mira, que en la culpa nací, pecador me concibió mi madre. Todos: Te gusta un corazón sincero, y en mi interior me inculcas sabiduría. Rocíame con el hisopo: quedare limpio; lávame: quedaré más blanco que la nieve. Lector 1: Hazme oír el gozo de la alegría, que se alegren los huesos quebrantados. Aparta de mí pecado tu vista, borra en mi toda culpa. 3
Lector 2: ¡Oh Dios! Crea en mi un corazón puro, renuévame por dentro
con espíritu firme; no me arrojes lejos de tu rostro no me quites tu santo espíritu. Lector 3: Devuélveme la alegría de tu salvación, afiánzame con espíritu generoso: enseñaré a los malvados tus caminos, los pecadores volverán a ti. Lector 1: Líbrame de la sangre, ¡oh Dios, Dios, salvador mío!, y cantará mi lengua tu justicia. Señor, me abrirás los labios, y mi boca proclamará tu alabanza. Lector 2: Los sacrificios no te satisfacen; si te ofreciera un holocausto, no lo querrías. Mi sacrificio es un espíritu quebrantado: un corazón quebrantado y humillado tú no lo desprecias. Lector 3: Señor, por tu bondad, favorece a Sion, reconstruye las murallas de Jerusalén: entonces aceptarás los sacrificios rituales, ofrendas y holocaustos, sobre tu altar se inmolarán novillos.
Todos: Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. Amén.
ORACIÓN RESPONSORIAL CUARESMAL
Monitor: Cada año, el tiempo de Cuaresma actualiza esa llamada a la
conversión en el compartir. Es lo que llamamos: "Limosna". Le rogamos al Señor, presente en la Eucaristía, que nos cambie el corazón de piedra por un corazón de carne, semejante al suyo; un corazón lleno del Espíritu Santo, purificado de todo afecto desordenado, deseoso de alimentarse de la Palabra, libre de toda atadura, disponible a la voluntad del Padre para darse y para dar como Él, que pasó por el mundo haciendo el bien.
Todos: Jesús, que todos te conozcan y te amen es la única
recompensa que quiero.
Lector 1: La Cuaresma es tiempo de preparación para el Triduo
Pascual, centro y cumbre del Año litúrgico, celebración intensa del acontecimiento esencial de nuestra fe: "La muerte y resurrección de Jesucristo".
Todos: Jesús, que todos te conozcan y te amen es la única
recompensa que quiero. 4
Lector 2: Esta Hora eucarística, en el tiempo de Cuaresma, queremos
vivirla adorando a Jesús Sacramentado y escuchando su Palabra: el Cristo vivo que contemplamos en su presencia eucarística es el mismo Cristo-Palabra que nos habla en su Evangelio y nos invita a salir al encuentro del hermano pobre y desamparado, del vecino que está solo, del pariente alejado, del prójimo que necesita de nuestro amor.
Todos: Jesús, que todos te conozcan y te amen es la única
recompensa que quiero.
Lector 3: El Cristo que nos habla es el Cristo que se parte y se queda
con nosotros todos los días hasta el fin del mundo. Es el mismo Jesús que nos enseña a rechazar el mal cuando somos tentados por el egoísmo, a rechazar el mal con la fuerza y la verdad de su Palabra. Así nos lo muestra en su combate en el desierto: «Está escrito: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios» (Mt 4,4).
Todos: Jesús, que todos te conozcan y te amen es la única
recompensa que quiero.
CANTO PARA MEDITAR: devuélvame la vida tu palabra.
CANTOS PARA MISA - TU PALABRA ME DA Mi alma está llena de tristeza, VIDA - SALMO 18 - LETRA Y ACORDES - consuélame, Señor, con tus CATÓLICO (youtube.com) promesas. TU PALABRA ME DA VIDA, 3. Escogí el camino verdadero, CONFÍO EN TI, SEÑOR. y he tenido presente tus TU PALABRA ES ETERNA, decretos. EN ELLA ESPERARÉ. Correré por el camino del Señor, cuando me hayas ensanchado el 1. Dichoso el que con vida corazón. intachable, camina por la senda del Señor, 4. Este es mi consuelo en la dichoso el que guardando sus tristeza, preceptos, sentir que tu Palabra me da vida. lo busca de todo corazón. Por las noches me acuerdo de tu nombre, 2. Postrada en el polvo está mi recorriendo tu camino dame alma, vida. 5
Mi herencia son tus mandatos,
5. Repleta está la tierra de tu alegría de nuestro corazón. gracia; enséñame, Señor, tus decretos.
LITURGIA DE LA PALABRA
Monitor: ahora escuchemos la palabra de Dios por medio del
profeta Joel. Lector 1: Del libro del Profeta Joel (2,12-18).
Esto dice el Señor: Todavía es tiempo. Vuélvanse a mi de todo
corazón, con ayunos, con lágrimas y llanto; enluten su corazón y no sus vestidos. Vuélvanse al Señor, Dios nuestro, porque es compasivo y misericordioso, lento a la cólera, rico en clemencia, y se conmueve ante la desgracia. Quizá se arrepienta. Se compadezca de nosotros y nos deje una bendición, que nos haga posible las ofrendas y libaciones al Señor. Toquen la trompeta en Sión, promulguen un ayuno, convoquen a la asamblea, reúnan al pueblo, santifiquen la reunión, junten a los ancianos, convoquen a los niños, aún a los de pecho. Que el casado deje su alcoba y su tálamo la mujer casada. Entre el vestíbulo y el altar lloren los sacerdotes, ministros del Señor, diciendo: Perdona, Señor, perdona a tu pueblo. No entregues tu heredad a la burla de las naciones. Que no digan los paganos: ¿dónde está el Dios de Israel? Y el Señor se llenó de celo por su tierra y tuvo piedad de su pueblo. Palabra de Dios. Todos: Te alabamos Señor.
Monitor: dejemos unos momentos en silencio para meditación
personal.
REFLEXIÓN EN COMUNIDAD DEJANDO REPOSAR LA PALABRA DE
DIOS
Monitor: ¡Oh Señor nuestro Sacramentado! Míranos aquí en tu
adorable presencia. Venimos a bendecirte y alabarte en unión de los ángeles que invisiblemente rodean esa Hostia Divina. Venimos a consagrarte esta Hora Santa, gozándonos de estar aquí, en tu acatamiento, a gustar de tu compañía y a conversar contigo, que tienes palabras de vida eterna que nos invitan a ser como tú. 6
Lector 1: Sí, Dios nuestro. Quisiéramos contemplarte a través de esa
Hostia Santa con el tiernísimo afecto con que te miraba tu Madre: con aquella devoción con que te seguían tus discípulos, y muy singularmente el Discípulo Amado, cuando la noche de la Cena reclinó su cabeza sobre tu ardiente Corazón.
Monitor: Nos sentimos felices de hallarnos junto a ti, y queremos
aprovechar este momento para hacerte compañía. Concédenos, oh Jesús, responder a la invitación del Santo Padre, porque sabemos que para crecer en la caridad es necesario, en primer lugar, fijarnos en Ti, Palabra que te hiciste carne entre nosotros (Cf. Jn 1, 14).
Lector 2: Mirar a Jesús conlleva convertir nuestro corazón a Dios que
nos permita no sólo “ver a Jesús” (Cf Jn 12, 21), sino profundizar en las riquezas del misterio pascual de Cristo para que, renovados en la penitencia, podamos disfrutar de los frutos de la redención, porque “nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos” (Cf. Jn 15,13).
Lector 3: Míranos tú también a nosotros Señor; somos tus hermanos
y amigos, a quienes tantas veces haz alimentado con tu mismo Cuerpo y Sangre. ¡Señor! Vuelve hacia nosotros tus ojos misericordiosos; pon en nuestros pensamientos una ráfaga de la luz de tu Rostro, y en nuestros corazones una centellita siquiera del fuego que abrasa tu dulcísimo Corazón.
Monitor: Concédenos, oh Jesús, sentir hondamente la verdad de
estas palabras: "Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor". Meditemos este canto.
CANTO PARA MEDITAR
CANTOS PARA MISA - SI YO NO TENGO AMOR 1. El amor es comprensivo, - LETRA Y ACORDES - COMUNIÓN - BODA el amor es servicial, (youtube.com) el amor no tiene envidia, el amor no busca el mal. SI YO NO TENGO AMOR, YO NADA SOY SEÑOR. 2. El amor nunca se irrita, SI YO NO TENGO AMOR, el amor no es descortés, YO NADA SOY SEÑOR. el amor no es egoísta, el amor nunca es doblez. 7
el amor es siempre fiel.
3. El amor disculpa todo, el amor es caridad, 5. Nuestra fe, nuestra no se alegra de lo injusto, esperanza, sólo goza en la verdad. junto a Dios terminarán; el amor es algo eterno, 4. El amor soporta todo, nunca, nunca pasará. el amor todo lo cree, el amor todo lo espera,
Monitor: dejemos unos momentos en silencio para meditación
personal.
ACCIÓN DE GRACIAS POR EL TIEMPO DE CUARESMA CON
SIGNOS PARA VIVIR EN COMUNIDAD
Monitor: ahora vamos a dar gracias al Señor por este tiempo de
conversión que nos otorga. Algunos signos nos ayudarán a vivir en comunidad de amor, en una Iglesia como la pide Jesús.
Lector 1: Gracias, Señor, por tu Palabra, que nos invita a ser
caritativos como tú, ayúdanos a que de nuestra boca salga siempre un mensaje edificante hacia quienes nos escuchen. (Se ofrece una Biblia y se abre dejándola en un lugar visible y mirando a la asamblea)
Lector 2: Gracias, Señor, por el tiempo de Cuaresma, que nos invita a
compartir lo que somos, lo que sabemos hacer y lo que tenemos, con los demás. (Se presenta como signo de conversión un recipiente con ceniza)
Lector 3: Gracias, Señor, por enseñarnos que el amor consiste en
gestos sencillos y pequeños como el lavar los pies a los hermanos. (Se presenta un lavamanos, una jofaina y una toalla como signo de servicio)
Lector 1: Gracias, Señor, por haberte quedado en la Eucaristía, para
invitarnos a ser pan partido que alimente a los demás con tu amor. (Se presenta un corazón grande con las letras "JHS" como signo de donación) 8
Lector 2: Gracias, Señor, por el don del sacerdocio, porque de él
recibimos tu perdón cuando faltamos a la caridad. (Se presenta una estola morada como signo del perdón)
Lector 3: Gracias, Señor, por habernos dejado a tu Madre, mujer de
ardiente caridad y servicio a los demás. (Se presenta una imagen de la Santísima Virgen o la imagen de la Anunciación de la estación)
CANTO banquete del Señor,
Donde Hay Caridad y Amor, Pbro. Joaquín recordamos su mandato de vivir Madurga (con acordes) (youtube.com) en el amor. Comulgamos en el Cuerpo y en DONDE HAY CARIDAD Y la Sangre que él nos da, AMOR, ALLÍ ESTÁ EL SEÑOR, y también en el hermano, si lo ALLÍ ESTÁ EL SEÑOR. amamos de verdad. 1. Una sala y una mesa, una 3. Este pan que da la vida y este copa, vino y pan, cáliz de salud los hermanos compartiendo en nos reúne a los hermanos en el amor y en unidad. nombre de Jesús. Nos reúne la presencia y el Anunciamos su memoria, recuerdo del Señor, celebramos su pasión, celebramos su memoria y la el misterio de su muerte y de su entrega de su amor. resurrección. 2. Invitados a la mesa del
Monitor: terminemos nuestro encuentro con el Señor Jesús con la
oración que nos enseñó y del cual le pedimos que en esta cuaresma nos perdone con el compromiso de que también los haremos con nuestros semejantes. Digamos juntos: Padrenuestro...
Monitor: Agradecemos la presencia y oración de ustedes en esta hora
santa de marzo. Esperemos en silencio la bendición (o reserva) con el santísimo sacramento. Buenas noches. (Bendición o reserva)