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atin el sbi sal is Wisi FF ee sieic seta ca ee ene ae Ba hadnchiepark lS ic ud, deseos de hacer cosas y posibilidad de realizarlas. icilimenty see cease nea sa yates aor cane Same 4 ANAITELMAN Nacida en Santiago de Chile, Ana Itelman, la me- nor de cuatro hermanos, fruto de la unién de Rosa Reiti- ch'y Schalim Itelman se sintié desde pequesia atraiada por la miisiea y el baile. Respondiendo a esa llamada, Estudia en Buenos Aires (ciudad a la que llegé a 1a edad de un af, danza clésica con Ekaterina de Galantha y ‘Aida Mastrazzi. Al propio tiempo, sigue la carrera de pro- fesora en la Escuela Nacional de Danzas, en Ia que se Gradua, Aprende también danzas espafiolas con la gran Erusta Irma Villamil mientras cursa la carrera de perito mercantil ‘Al trabajar en ese estudio con profesores de la com- ‘pasifa de Miriam Winslow, inggresa en su elenco, pues sien- fe nacer su interés por la danza moderna. ‘Asi llega a los dieciocho afios de edad y es entonces que, al viajar a los Estados Unidos, acompafiando a una Ge sus hermanas que iba a Nueva York a contraer matri- monio, cumple el dorado swefo de todos los cultores ar- gentinos de la danza moderna: estudiar con los maestros fundadores de la escuela moderna americana, Louis Horst, Hanya Holm, Martha Graham, siendo condisci- pula del genial y personal renovador creador Alvin Ni- cholais. Regresa a Buenos Aires en 1947 y permanece en ‘esta ciudad durante diez afios, brindando recitales en istintos teatros, de los que mencionaré: el Smart, Ami- {gos del Arte, Presidente Alvear, Circulo de Rosario. ‘Los afiches publicitarios en los que se destacaba la Tama roja de su eabellera, fueron un llamado de aten- eign que atrajo gran cantidad de publico a una sala en la ‘cual la audiencia estaba formada por mucha gente del arte, us ‘Los espectadores quedaron presa dela magia de su danza desde el primer nmero. Ana era muy personal, ‘poseta un extraordinario dominio isico puesto al servicio Se un temperamento vigoroso y una enorme creatividad. ‘Todavia se podrian reproducir fragmentos que se ‘han grabado en la memoria, de sus danzas: Disco virgen, Negros yorubas, en la que la asombrosa blancura de sus, hombros y brazos disehaban éngulos méviles siguiendo clritmo de la danza negra. Génesis, en el transcurso de ‘a cual bruscos cambios lumfnieos marcaban el pasaje a las diferentes situaciones, también un preludio de Cho- pin en cuyo final daba dos tres golpes de pusno contra el Piso, algo que no era muy imaginable con esa musica que, {leede Fokine habia sido tratada como “ensuetio romantica" Inmediatamente conquists la entusiasta adhesin del pablico que en su gran mayoria integraban cultores doa danza, es decir colegas. Bs més, hubo un consenso general acerea do su indiseutible calidad de bailarina y treadora de sus propios solos. Debe, de haber sido, con seguridad, la nica de las bailarinas argentinas que 2025 desde un principio del reconocimiento general No obstante, quiz4 por una autocxigencia excesiva parece haber sentido la necesidad de verse resistida por sus colegas; prucba de ello es un escrito de Jorge Luis Borges, quien probablemente después de verla bailar co- ‘ment6:“Ana Itelman es una bailarina notable puesto que sus colegas la odian y la encuentran antipatica, pero le econocen el genio que no pueden negarle; cuando uno se topa con el genio y hay que resignarse a éI”. Del libro Mundo ancho y propio, editado en Madrid en 1979. ‘Ana tenta la conviecién de que l coreégrafo podia y debia abarear todos los géneros y obedeciendo e ese pen- samiento compuso bailes para sitios de menor prestigio Jerérquico como la boite Embassy, Copacabana, en Bra- Sil y Micheléngelo, en Buenos Aires, asf como en come- dias musicales, considerados comerciales. Ksa actitud pro- fesional y rebelde era conceptuada negativamente en esos ue tiempos en los que haba una clara divisién jerarquica sernv tg arlistica de alta categoria y lo de carscter ligero He todas maneras, su intensa actividad de coreégrafa se Aesplegé en teatros importantes como el Colén y el Gene- tal San Martin de Buenos Aires, el Sodre, de Montevi- Geo, con obras que fueron luego representadas en paises como Rusia, Suiza, Alemania, Inglaterra, Italia, Holan- dda, Espana, Austria y Checoslovaquia, ode América, como Ganadd, los Estados Unidos, Brasil, Chile, Uruguay y Keuador. En 1957 se traslada nuevamente a los Estados Unidos. Ya se habfa hecho piblica su decisién de abando- nar la carrera de bailarina por razones de salud. Efecti vamente, antes de los espectéculos que la lanzaron al es- trellato, una afeccién renal la postré en cama durante Pero ello no fue obstdculo para seguir enriquecien- do sus conocimientos con el estudio de las danzas: fla- ‘menca, india, zapateo americano y jazz, as{ como en areas paralelas, pintura con Emilio Petorutti, Oscar Mara y en, <1 Museo de Arte de Brooklyn. Asimismo, estudio direc. cign de television en la Universidad de Nueva York, ilu- minacién y maquillaje y concurrié dos afios al Actors Stu aio, aprendiendo con Lee Strassberg. “Mientras esto sucedi sra permanentemente invi- tada a realizar coreografias en la Argentina, Brasil y ‘Uruguay. En un momento dado tanta actividad no es #1 ficiente para atenuar su nostalgia de Buenos Aires. Re- kgresa, entonces, en 1957 y sera en forma definitiva. La recuerdo emocionada en su reencuentro con los coreszra- fos argentinos, cuando asistié, por primera vez tras su regreso, a un espoctéculo en el teatro San Martin. Poco tiempo después fundaria su propia escuela, que bautiz6: Escuela de Teatro Danza, Su gran capacidad creativa se puso de manifiesto no solamente en el nimero sino principalmente en la ca- lidad de sus coreografias, que se distinguian por una per- sonalidad rica en matices. ut esta re sats apna ae een cor en Amigos de la Danza fue Casa de pucrins basedo sg eecnea rennet ce Perens siempre esperada y ovacionada. En el oxtranjero estrené SUSE ima as el ene regen anny et ae See eres ———— See ae oe eee Bete a es ms a see ay Be ee oe mie eee eee re a ns i re Br mingetcieee ie ouaet Be Set ee gre Cael Sa neers ener as ase gens aah Lae ee orl rei ra de danza en el Bard College y presidente de la Divi- eSeaaaie Sle poane peatland 118 ipatidad de 1a Civdad de za Contempordaca « in Murisipalidad de 18 Ferner ae fue apayado fnancieaent Por Been A Nieiona de la Artes, para el ea fa Becucla Teatro Danse Teta ace aor ius dpoma Konex de music, oe cain etada de concurrir, debido a su desfalleci- eibitade er ats Sehottclis que Fed riento antmico, sjistincidn, El 16 de setiembre de 1989 Pi in asuvion bs En su memoria, con el apoyo Sart Sporn gunmen zon the Drama Da ecadores de danza, productores de aa sate Soe norman eben Obras rat or ade Tos becarios ¥ #0 AE” miento, juntamente con Renate Schot- t de sus hermanos, ol ‘el “Ana Itelman Pri- 19 J peare y Pablo Coelho. La eson cia del ser humano se la la gente de otra época, que lictos, mientras encuentra en los clasicos y en I tenia sabiduria para traducir esos cont “De moss uc dria que uno enaonta Lamenaverde ra eehiit nyse Cia gon mnie a cael encom ze do vertan hey opuriantniendo i mis vigenls Serta oer ncn soos min viene Sr cee porn ano my maga pare ton Saunas net ae tects ie guste we anil debe ears eres se done aetna on Se a gee mes Fo ers pr Seam arrasaete deine gle oman erste ee ea a Bee caalae nalas ee e ee Seay ee ee ne espigada, tomada obedientemente de una barra dema- ee Se a ee eae ANA MARIA STEKELMAN A la vuelta de Ia casa de Ia pequefia Ana estaba el cine Lumiere que mas tarde se llamaria Ala, dos nombres que quedaron grabados en su memoria, quiz4 por tener resonancia de vuelo luminoso, que vaticiné en cierto modo su futuro, pues la danza es es0 para quien nacié con tal vocacién. ‘Alli un dia domingo vieron anunciada I del ballet infantil de Beatriz Ferrari. Quizé pidié verlo, ‘ya nolo recuerda bien, pero lo cierto es que Ia llevaron al Sapectaculo, Quedé sumida en un encantamiento; se ena- moré de la danza e, inevitablemente, del principe de todo ballet clasico. ‘Su embeleso la hizo desear y pedir aprender danza. Y, como en los cuentos, Ia condujeron precisamente al es- tudio de Beatriz Ferrari, “Alli el encantamiento un poco se rompié porque el estudio de la danza la sorprendié por lo severo y duro. Sin embargo, alentada por Ia enorme admiracién que le producian los primeros bailarines: Graciela Genoud, Pochita Serrania y Emilio Wis, que bailaban extraordinariamente bien, perseveré en el es- tudio y legé a integrar el ballet. Recuerda su primera intervencién, cuando, vistiendo una malla gris de la peinada con flequillo y el resto del pelo atado en forma de cola de caballo, se sumergié en la poesfa de Ondine per- jonificando un pez entre el séquito de pececillos que pro- tegia a la protagonista. Su voz toma matices dulces en la evocacién cuando sonriente comenta “mis alumnos se rien cuando les narro esta actuacién, pero era muy poético”. Estudié también en el salén de la sociedad Unione e Benevolenza con un maestro que recuerda como un hom- bre muy atractivo y muy buen profesor: Enrique Lomi, a quien aprecié danzando en un ballet que le encanta: “EL actuacion 229 nifo brujo de Jack Carter. Por coincidencia del destino, hoy a la fecha de esta entrevista ensefia, precisamente, ‘en el estudio de Enrique Lommi. En esa época, afirma, la situacién de la danza era otra, muy distinta de la de hoy. Para dar una idea de la diferencia pone como ejemplo la revista que era Radiolan- dia, en cuyas paginas siempre se reporteaba a artistas de ine y directores de peliculas pero también publicaban noticias del ballet del Teatro Colén. Entonces a los bailarines se los consideraba artistas en igualdad con los actores. Era un arte més cercano ala gente, mas popular y no de estrellas sino de artistas. “Eso se perdié completamente, la danza ha pasado a la clandestinidad.” Es un hecho muy contradictorio y controvertido, pues siendo la TV. un medio audiovisual, el hecho de que la danza haya desaparecido, como también desaparecié del cine, a excepcisn del director Carlos Saura, fs algo que tiene que ver con el poco acercamiento del hombre actual a la sensibilidad. Posteriormente a aquella etapa infantil eidflica con el baile, que se desarrollé entre los diez y doce afios, Ana ingresa en la Escuela Nacional de Danzas. Fue durante ese segundo periodo, a partir de los quince afios, que su embeleso comenz6 a desvanecerse ‘ante un nuevo y sorprendente estado de énimo: empez6 a aburrirse. ‘Justo en ese momento eritico y peligroso sobrevic~ ne un acontecimiento inesperado: la Escuela Nacional de Danzas incorpora a sus programas la ensefianza de la Danza Moderna. Volvié entonces a sentir la avidez de la infancia; habia reencontrado la danza en una forma que correspondia a su personalidad en crecimiento. ‘Aparecieron profesores de danza moderna como Paulina Ossona y Renate Schottelius (esta altima en un seminario) y de composicién, como Luisa Grimberg y Ce- cilia Ingenieros. ““Bste hallazgo me abrié todo un mundo, cambié com- 230 pletamente de orientacién. {Que importante es eso! En- fontrar dentro de un arte lo que uno desea hacer. Ahora hay estudios vocacionales, pero creo que hubo en mi des- tino una mezcla de azar y de paciencia, en el sentido de que, aun sintiendo algo de hastfo no dejé de estudiar, y lo que querfa leg6 a mf.” 'Y después de Hegar la condujo hacia su futuro en el arte, La reaccién familiar ante el llamado dela danza para destino fue, dice Stekelman, “como en todos los casos” la madre apoyaba su vocacién, mientras que el padre ‘abogaba por una carrera mds formal, especificamente el derecho, que Ana Marfa comenz6 a cursar. Curiosamente, en ese hogar de cuatro hermanos la particion de inclinaciones fue cabalmente equilibrada: uno tligié por profesién la de médico, otro la de abogado, otro te xil6grafo y Ana siguié el camino del baile. ‘Las influencias mayores que recibié durante su for- ‘macién y el comienzo de su carrera fueron: la aparicién de ladanza moderna, el aprendizaje de esa disciplina bajo la tutela de Paulina Ossona y el ingreso a su grupo Nueva Danza, “Participante en ese grupo senti por primera vez en mi vida que estaban atravesada por la emocién de la danza,” Ocurrié durante el ensayo de un diio sobre musica del Padre Soler. “Fue muy fuerte, creo que tiene que ver con la aparicién de lo ritual; cuando se completa el propio mundo inexplicablemente, sintiéndose formar parte del cosmos, de algo mas grande, indescifrable.” “Tengo el recuerdo de otro momento parecido... fue cuando bailé el personaje de La Doneella de Consagracién de la prima- vera, Entonces legué a sentir muy fuertemente lo ritual de la danza, la posibilidad de salir de si mismo o sea de ‘usar el cuerpo, salir de él, y eso es muy fuerte.” ‘Acsta etapa de revelacién siguié un periodo en los Estados Unidos, Alli estudié una técnica que la fasciné y atin la fascina; que considera maravillosa aun cuando fi- nalmente la abandoné porque sintié que no le servia para 231 « expresarse: fue la ese! “Es una técnica Prodigiosa.” ‘uela de Martha Graham. ue se queda en el cuerpo y que es ese método a la edad de diecio- = primeras personas que salicron dete danza cldsicay abricron el mundo del movinients Hablando de su primera intervencién en pablico Ana Marfa memora: “En mi primera actuacidn on pablice eae Ligaduras, con coreogratia de Paulina Ossona shad con, Junto Nueva Danca en una salita muy chauita etna tensacion rara... me gusto pero el propio temp evs a ‘uy temible: el publco estaba muy cerca la obra erainey Sresgada. Por esa razon tengo mejores rector de las actuaciones que tuvimos despues por el interior: Ia Patagonia y el Chaco”. 4 oe " i Cuando le comento sus actuaciones enol estilo elé- sco afirma no tener recuerdos fsicos, pues era muy chic, solo ve las fotos en su caracterizacian de pececillo ¥ 96 encanta, En cambio, las experiencias de las que antes hhablé vuelven como sensaciones muy vividas, sobre tod losentido en Consagraciin y en la Sonata del padre So. ler, cuando estaba més formada y tenta conseiencia deo auuele pasaba, aunque siente que esta haya sido mex Interrogada sobre au primera corcogratia, medita y ara sf “Io mio fue muy lento. ereo que tt acion coreografica fue un ado que hice para Ana Deutch y Margarita Bali titulado Las hermanas, con una mesa y dos sillas... después... jqué se yo! Me hundt en un olvido, creo que retomé cuando asumy 1a direecién del Teatro San Martin (refiriéndose al grupo de danza)” Con mucho temor hizo allf una obra que titulé Memorias, sobre el Carnaval de Schumann. Fue casi como una pri- mera composicién, con la que siente que realiz6 una co- reografia para otra gente Aunque en el interin, cuando dejé el ballet de Oscar Araiz, bail6 con el Grupo de Accién Instrumental con el que tenia que hacer sus propias danzas, no sentfa que estaba haciendo una obra coreogréfica, sino que tenfa que ‘componer unas danzas por la sola razén de queno.contaba con coreégrafo, pues no lo habia en el grupo. ‘Al comentario acerea de un solo muy largo, de la duracién de un espectéculo, presentado en la Sala Plane- ta recuerda... “Si, se trataba de un solo que titulé El dis curso... nacié a causa de la enorme impresién que le pro- vocs la muerte de Kennedy y era una obra sobre la muer- te, sobre el corte del discurso; ademas de eso, recuerda que bailé con José Carlos Campitelli un dio también ex- tenso en duraci6n, que le dejé muy buen recuerdo. Este ‘emprendimiento tuvo lugar cuando ain estaba bailando con Oscar Araiz. “Fue como un ataque”, analiza, después de cinco afios de estar bajo la tutea de Araiz, necesité hacer algo personalmente. “Aunque fue muy bueno para mf y lo disfruté mucho, tanto eso como Las hermanas fueron cosas esporddicas, nacidas de la curiosidad de ver cémo era yo sin él refiriéndose a Araiz. Mas adelante, juntamente con Alejandro Cervera realizaron dos obras: Copelia y La valse. A partir del momento en que asume la direccién del Ballet del San ‘Martin comienza a hacer una obra por afio, De estas re- ‘cuerda Movimientos, sobre misica de Chopin, y a partirde allf abandona la direccién “porque yo queria estudiar co- reografia”. Comenz6, pues, a trabajar en el taller del ba- let del San Martin con las alumnas, asf tuvo una evolu- 233 ign distinta, ya que no necesitaba apremiantemente cise eatpara aor presentado en el escenario, Esto fue paste le acontecié con Movimientos, de Chopin, pues la wedgimuy de sorpresa “y yo no me sentfa una coreégrafa, siieiuna persona que tenfa ganas de hacer cosas pero no manejaba el "métier", aunque podfa hacerlo. ‘Sobre Memorias agrega, es una obra muy estética pero muy pensada, probablemente hoy ne la harfa, pero Flene eu idea y poseyé su encanto en su momento”, Cuando volvié a dirigir, en las temporadas 88 y 89, hizo obras que le gustaron mis, entre ellas Triple tiempo, Bailando en la oscuridad, y una obra que “no le gusts a adic", so trata de la bellisima Suenos olvidados; sobre Ta zage de Sir Lancelot. En ese momento “se me hizo muy claro que mi mundo era ese, que queria componer cosas ho sélo a través del movimiento, sino que hay muchas cocas que se expresan mediante lo que uno hace, "En Ta Sbra llamada La tarde cae sobre una mesa trabajé sobre tun poema que leo hace diez aflos, es de Eliot, me gusta y pude pasar algunas imagenes de ese poema, al movimien- 1%, digo ast, modestamente, algunas, sin embargo, esa sensaciOn de poder crear un mundo es algo muy lindo, es Tomejor. No se trata de una obra que surgi6 de inmediato tras la leetura del poema de Eliot, sino que es un pooma {que leo hace mucho, en el que hay muchas ideas... ideas Sobre lo femenino, io masculino, la msica, la vida, la ‘ejez, la belleza, menciona mucho a Miguel Angel y yo tise iindgenes extraidos de cuadros de Miguel Angel, que aparecen aunque quiza nadie las capte pero las usamos como fuente de inspiracién "Siento que ese tipo de ereacion es muy fuerte en cuanto a mi evolucion interior, luego la obra puede salir ‘mejor o peor, pero es muy positive el trabajo con uno mis mo, el trabajo espiritual, que no es simplemente poner movimiento a los bailarines y dejar que bailen, “En lo que respecta a mis maestros, ellos fueron: Paulina Ossona y, durante el perfodo que este en los Es- 234 tados Unidos, Martha Grabam, més tarde Renate Scho | sae ido Mido y tambien en cierto modo Oscar Arai, talus on Pallas sus coreograftastomé muchfsitmo su len: aera gr clorta forma hay cosas que las aprendi dehy foal eo nla compositon de mis bras. Aun cuando ara ten mache que ver eon él hay elementos de ane Man que siento internamente, cosas que estan aon mt * “En lo referente a la ensefianza como actividad, sien- toque stampre fi muestra, aunque win aaber por qué. Sel eho on que cuando vole! de los Estados Uni dos ontabe oh povcnign do una tecnica que ac, en ose Stenson eae’ poca gent; ontonces, empece a enseh ar. mien tompateree y por ello tenia alumnoe de i ‘misma edad “Durante ls clases estaba muy concentrad, a tl unto que slecpre reoyerdy una van en que ee extaba i Exndiande el ertudioy yo me enoontraba ensefande a tres Slugs yno me di uonta del ncondol Salimos dela clase calla Guando el sgundo pao estaba yn casi en fuego, “de profesor ge un a que siempre ave, me ts me recut natural, Después do eso inicio ensene un tmpo on la Hecuela Nasional do Dantas, qu fe donde youludiéy, mas tarde, on el estudio de Otto Werberg. “Sienapre di sages; desde quo comene® a Ton dec ocho aon hasta sora Bn ento moteontodicterclase oo iene jorge me manten nena, que no ons asoe hace tompo, pues me da mucha peters pore me ducle mucho el cuerpo. i “Bor ofva parte la docencia me mantione en contac- to.con los mis fovenea- Hay une edad donde ol contacto con a genta joven ee may pelive porque uno cesta tnorgaque ellos loan, acu ver aloe preccan a expe, FHencia que uno tiene, Creo que ena ein docenci, eo intercactbto do energian que os tan fucrteY tan natone- fo, puss tants ol maesiey caine al mine ects ou oa Intercambio necaeari™ 235 ain A pesarde su amor por la docencia, Stekelman nun- ca puso avisos para conseguir alumnos: esto se debe a aque su ereencia, apoyada en lo que affrman los orienta: Tea, es que el alumno tiene que busear al que quiere coma profesor, que desee esa técnica en especial y que si no la encuentra es porque no tiene que estadiar con ese profe. Basada en esta creencia, cada ver quo so tontaba en poner un aviso cambiaba rapidamente de opinion; “as lagente que lega a mis clases acude porque vio una obra que lo atrajo o bien se entern por otra persona s, en con Secuencia, ed verdaderemente interesada en i véeniea aque imparto, En ese acereamiento a mi persona come Taostra los alurpnos son quienes me eigen y no‘ a ine "Por otro lado, mi técnica fue enmbiando muchar al principio facia eaccela do Martha Graham, ta quo mpar- Eas tuego, cuando dirigia el ballet, halle a ios varones les costaba muchola apertura enol suelo, comencé entonces tim clase moderna on barra, Cuando hog® ala Argentina ‘ennlflor Maller me encontrécon que cla estaba hacionde precisamente eso, pore tenfa sobre mila ventaja do aon ohhistoria Ba esa tapa comence.a hacer mins las onse- anzas de olla y'a partir de alli mo puse a mezclarele- thentee y princpiog do ins antiguos mnostros: Paulioh Osoona, Kenate Schottalium,y todo To que one, on tote material de Jenifer Miler. Hay algo on estas artistas maestras, como tam- bin lohay on Oscar Arai quo es una esendia intrinseca dal movintionto'y de la coordinacion del movimiento, tinbon Factores que aon de origen muy europea y que te fon fuerte valor oxpresivo de danza. Al leger a ota ta- pur Martha Gratin se fue borrando y fue dando paso y Scjandg ugar al regreso de ustedes, mis primeros maes- aflaron lo curopoo,y a mescl6 con Ta tecnica er Miller, que tone a tu ven ascendencia de n descionde da Laban, Ee muy aiff ya decir cudl es la téenica que importa, seria casi necosario para sannTigue to quiere saber, que tome una clase, enc aoe a say otrn manora de saberio ode explicaro done profesora no tengo ideales; no trato car Y fe rin alumao excepcional a fin de enviarlo 8 Ca arya ponerioen mi grupo. No pienso donde aera eee ya a entrar en 1a vida profesional 00. El Miotnanto de ensenar os de intereambio. - oe ae do como profesora su mayor interés €S 0 eat atarano siente Ia felicidad de bailar. Ex se eae tideal no evo do conducie ol alumno baci wn Lec Qe ue haya que sacrificarsey trabajar dura futuro para ot Went, Considera, en cambio, que lo im- ono Preertes amar la danza ¥ para lograrlo es Po ee Giafruton de cla. "No me interesa conse- rere eo. decir tn balarin profesional, af me For dectvento dla clase on si, el estudio de las ater Cheimovimnfento,Yograr quo la gente sienta st cal a jarante ol movimento para que después apli- caput su quchacer, tanto st es pintor como ae Somaatco, que To utiice para To que quiera. See. dont porsig que sentan placer en esa dincp nae omar una clase daria, de lograr algo en el ‘movimiento y eonsigo mismo” ere Jorimiento de cudles son sus actividades ac- tualog vontbata que on 1908 y desde el ano 1984 est do- Fraga Gt tango. Admira a Copes, del que vio todo desde oiGm 1967 6 68. Bn Jasmines, que fue su primera ineur- canon toe genero, slo puso on la danza el esprit del Teen S Dspace lefntereséla forma, su asimetria, el fuer- {2eBfane an lo femeninoy lo masculino, el hecho de que eaeletpe leve al otro. “El tango-danza tione cosas muy eae ay diferentes dal tango misica, por eso utili eres jaca dana con otras misieas, porque tiene wn 2 ates oe Lonorme y cada ver se reitera clespiritu de cee eanelda en Ta que los cuerpos se imbrican, #0 ela- cionan fuerte y limpiamente. 237 & “Tengo programas como Tango kinesis, que se acer- can al show y otras coreografias, en cambio, como La tar de cae sobre una mesa, que tiene pasos de tango en otro contexto. Estoy preparando Concierto para bong, en el que se entremezclan lenguajes de tango, danza moderna y salsa, todo eso es muy costoso de elaborar y la prepara- ‘eign de cada obra lleva mucho tiempo. “En lo referente al estado actual de la danza es mi opinién que ésta, por ser el arte mas antiguo, més primi- tivo, es también a veces el arte que esté més avanzado. Precisamente, conversando con un pianista de nacionali dad Yugoslava, que estuvo actuando en el Colén, él me decfa, cosa que no creo con tanto conviceidn, que la dan. za, en el panorama mundial, esté adelantada con rela~ cién ala musica. Lo cierto es que la danza, por estar tan separada de los medios, tiene que estar muy atrds, 0 muy adelante y creo que ol estar muy atrés significa a veces estar en ia avanzada, porque eso la mantiene fuera de los prejuicios referentes a lo moderno y lo antiguo del mereado. Ademés, tiene eso de primitive la danza, eso de basico; que es algo que se hace con el cuerpo y la mente, algo que de alguna manera es esencial al hombre, que se puede hacer con mfnimas producciones. Ademas, como no est ayudada, hay mucha pulsién en cierta gente, en- tre la cual me incluyo, para hacer cosas. “Volviendo al tema anterior, hace poco tiempo tuve Ja experiencia de ver una obra de un coreégrafo israclt que me impresion6 a la vez. como muy antigua y muy de avanzada, se llamaba Diluvio, era ademas de muy ritual, muy lanzada hacia adelante y muy perfecta y pensando en Io que afirmé el pianista del que antes hablé, deduzco sf, que en la actualidad la danza esta muy avanzada ‘sentido, mientras que por otro lado, como todo, cae jereado de las estrellas, en mundo de la TV. y de la le los medios en fin, en los que estamos inmersos podamos salir aunque luchaemos para ello; yo Imente lucho para no eaer en esas cosas y hacer lo que uno realmente desea, sin escuchar ningtin tipo de marketing. La condicién de la danza es, pues, eso: una parte que avanza como un tren en la oscuridad, una que Fesponde al marketing y una estancada como en todas las artes. “De todas maneras, me parece grandioso que con la orfandad de produccién’ sigan apareciendo coreégrafos importantes y bailarines extraordinarios, es algo que late debajo de toda esta vulgaridad, algo que esos mamuts de log shopping center no logran enterrar. Ciertas pulsiones ancestrales que se siguen produciendo. ¥ la danza tiene que ver con ellas. “Refiriéndome a la Argentina, puedo afirmar que aquf hay muy buenos maestros y muy buenos bailarines, “Digo esto no solo teniendo en cuenta lo que suce- 46 en mi época sino también por lo que acontece en la actualidad; es inusual la cantidad de buenos bailarines que hay en proporeién a la cantidad de habitantes que tiene la Argentina, y esos bailarines estan tanto aqui como en el exterior, eso sin duda habla de buenos maestros, de buena escuela. No tenemos apoyo y, sin embargo, hay muchas compafifas de danza funcionando y eso es impor tante. En general tendemos a minimizar lo nuestro, es tun complejo de inferioridad, mientras que por otro lado nos sentimos muy por encima, siempre estamos fluctuan- do entre los dos extremos, : “La realidad es que hay mucha gente que baila, es- tudia y es dirigida por muy buenos maestros. Lo que no hay es produccién ni difusién, “Los medios de comunicacién debieran ocuparse més de las actividades artisticas en general, porque hay una preponderancia de noticias malas, cuando hay muchas cosas buenas que suceden, lo que es una pena. “Hay que solicitar a nuestras autoridades que ten- gan un minimo cuidado por el patrimonio cultural que se festa perdiendo, o mas bien que ya se perdic. “Todos los presupuestos de los teatros se han baja- 239 dn ner batt bom sate secacear eda eect ton. SENT ence a seer a prs gn re Sse es Haan sn pair ay gare tnd natant cede Soostenrn orients sages Se Sc tnt ein gente sin cultura y sin sanidad, creo que es el are zn jonqnaaaene Spuand sc tn, see ria pe Seca ewe Sait Linear Sata ett rate gaa de hc lene cece eins nap La ieurvacsene peta pn rr ae so ee py a Sea aa octeceal aoe penaliecatrae ents epee bio se enriquece cuando se abre el panorama. Sete cn pse cin on eae cae re Da eae OSCAR ARAIZ Sentt por primera vez atraccién por 1a danza a 5 és doin sdunaeion del movimiento, en relaciGn con 198 Xe de te enasicales (ritmo, melodia, frase) Notenge ea clomenido eato comenz6. Parte de estos estimules mun de cs las partituras que mi madre, Elvira, elecwtaa calos Rucron proximadamente a los seis afios, en a ciudad en a Pian tance, Bivira me describié un especticulo de Ganza al que habia asistido 1a} due gen de un pafuelo que se transformaba ©” diferentes objetos en manos de la bailarina (un bebé, one fiferentee caus una gran impresiGn. Muchos aos mas hhorea) me Sque se trataba de La letra escarlata por 10 Tan aaa de Myriam Winslow, prosentada por la Aspe Compaitural. También Ia danza a través del cine me rin ce can expecial placer. Creo que intentaba transpor‘ar daba UMociones al dibujo, que fue siempre uno de mi cntretenimientos favorito ‘eaulcecente, entré por primera vor. al Teatro Colén participando de un concurso de manchas, un domingo Feeeievnana, Mi fascinacién por los teatros aparecia en mis Eungenes o en Ia imaginacién que depositaba detras de {os telones cerrados. ‘Comencé a asistir a los espectéculos del Ballet del Colsn desde la tertulia, asf como a conciertos y exposicio- Como mi infancia y adolescencia fue un ir y venir entre Bahia Blanca y Buenos Aires, mis estudios y amis- ence ge vefan afectados. Bn Bahn comencé a tomar cla- wae Ge pintura con la profesora que parecia més “avanza- Sa" o por lo menos en oposicién a ciertos “académicos” Sali eseuché Ios nombres dela pintura actual argentina y sy cue mismo estudio tuve la oportunidad de conocer ® 241 Blide Locardi, que deseaba instalarse en el interior. Le mostré algunos dibujos inspirados por La consagracién dela primavera. Eran croquis de cuerpos corriendo, arras- trados por torrentes como remolinos humanos. lide me ofrecié tuna beca para tomar sus clases, que provisoriamente daba en los salones del Club Argen- tino. En las primeras de estas clases nos hacia improvi- sar y me dijo, con cierta gravedad, que iba a ser coreégra- fe. La amistad que establect con Elide me hizo tener tuna nocién mas clara de lo que era el arte moderno en todas sus expresiones. Recuerdo haber pasado muchas horas haciéndole preguntas, revolviendo sus libros (espe- cialmente el de las fotografias de barbara Morgan sobre Martha Graham). Elide rechazaba los distanciamientos, entre las artes. Le fascinaban el circo, el cine, el humor, la naturaleza, las tormentas, la entrega. Entendi lo que era la pasion. Durante el segundo aio del curso, todavia becado, Elide comenzé a coreografiar unos estudios con sus alumnos. Me gustaba verla trabajar con nifios pequefios, con quienes establecia relaciones Idicas. Recuerdo que pi- dié partituras a Buenos Aires, posiblemente a Luisa Grin berg. Satie, Honneger, Griog, Gershwin. Durante esta etapa tan excitante (lide estaba preparando un solo para mi sobre el Golliwoggs Cake Walk, de Debussy) ocurrié algo muy lamentable. Fui obligado a mudarme a la capital interrumpiendo una experiencia que gentfa muy importan- te para mf. Fue decepcionante para Elide y cref traicionar a todo lo que ella me habia ensefado. Mi madre nunca me habia impedido estas activida- des, pero yo sabia que no era recomendable para un va- én confasarlas en el ambiente de mis compafieros de es- tudios secundarios. Ese mismo afio, también se produjo un despegue de ‘mis lazos familiares, y sin impedimentos dejé mis estu- 24, dios y me trasladé a la ciudad de La Plata. Habia conoci- {doa Renate Schottelius durante un Concurso de Croquis en el Teatro Alvear, organizado por Cecilio Madanes y gané una meneién especial con dos trabajos; uno sobre tunos Spirituals de Renate y otro sobre un solo de Cecilia Bullaude, Calor. El premio fue un hermoso libro sobre la obra de Pallidre. Me presenté a Renate y supe que estaba Sando clases en la Escuela de Bellas Artes de La Plata, Seguf sus clases, en donde deseubri la composicién. Me ingeribf en la Escuela de Danzas del teatro Argentino ¥ aprendf la técnica académica con Pedro Martinez. Tra- bajaba como figurante en la mayoria de las éperas del ‘Teatro, a veces me tocaba fusilar como soldado en Tos- ea.o matar a los esclavos con cimitarra en Scheresza- da, Mi primera actuacién como bailarén fue haciendo los roles que generalmente tenfan los alumnos de la escuela: ladanza delos muchachitos de Principe Igor. Ver Tamara Grigorieva montar estas obras, ast eomo todo el repertorio de Fokine 0 Massine también era como una revelacion fe impresionaban sus manos, sus ojos y mas que todo, sumusicalidad, Pics Hiice muchos croquis durante los ensayos, especial- mente de Apollon musagéte, de Balanchine, descubri Jos juegos de la geometria y ia pureza del clasicismo, En esta época, hice una fuerte amistad con Beatriz Marg nat, quien también estudiaba en la escuela. Nos diver. {amos improvisando, buscando misieas, a veces bailan- do en los rugosos tablones del escenario del teatro, solos, cuando la compatifa habja terminado y con el telon de grucso terciopelo cerrado, mientras en el foso ensayaba "a orquesta sin que nadie’nosabservara, que consideré mi primera coreogratfia en reali- dad eran vestigios de mis ejercicios con Elide, sobre el Preludio N°2 de Gershwin. Casi todos mis primerosinten- tos fueron dios y a veces solos. El Preludio se estreng.en tun teatro en los s6tanos de La Lechuza, en La Plata, a 243, beneficio para los gastos Ballet que se habia ahogad tarde ingrosé por concurso, tino. Mis improvisaciones le entierro de un bailarin del loen Punta Lara, Un ano mas en el Ballet del Teatro Argen. Burana gu hae See ee tii Behan ates val Ballet; de alguna u otra manera me sentia muy man. eado por lo que vefa. hee na ime presents pts teenie eral Hes ou percness isla aantny Ma ‘ws einen tentatvanratjn oe. pene re rar a See Brg ened gta we ec ce ps ann ‘enact, fone sean ce Se a greener ag er ae scape SH aie raatae Seca acted Recency ier ra hee cena te ei pian ue cont aucie sinner acest a Soa to asoe ge zeme Iodine rir Do an sma nn tee angcan secon ar cen sta orn peur sine ea aac a ni, rear nl Nain se vaio Pi titan pn omar sus clases, entre cuyas condiciones estaba la entroga in- Condicional de tiempo. Remuneté a mi puesto en el ballet Scomena6 un ano de intenso trabajo on el que diviis a Josalummos en dos niveles. Con el primero fermarta un frupo de solistasy, eon ol otro, lo que seria el Coro de Siovimiento. Al fnalizar Ia teraporada se hizo Ia selec- Gan qucaé como unico varén de un grupo de ocho sol fan Dore mont Cadena de fugas para ol grupo y La idea {Goire grabados de Massorel) para los dos grupos juntos. SPREE que hacia con cl Coro de Movimiento era de Ths eran simplicidad, pero de resultados muy fuertes tea- Teote: Fat asiotonte de estas producciones y tome fiuchas notas y dibujos de las mismos, " ‘eg de las presentaciones nei Teatro Argentina yl teatro Can de Buon Aira, Dore rests voWer ‘lemaniay os grupos fueron disueltos, ‘esidc que cra un buen momento para salir del pais, Beatnis Margenat quiso acompaharme, vend! mi pe tadicteta cn fo que pade comprar mi pasaje a Europa meer vapor Salta, y zarpamos con un badl Ueno de Gueticuras, vestuarios, discos y tres cartas” de Pcomendacion firmadas por Fernando Emery eon el que {enia una entrafable relacion a causa de sus Suprestonantes eonocimientosy su humor Laa cartasiban dingidas a Alfredo Allaria, Maurice Béjarty Gert Reinbolm Taprimora que entrogue fueen Madrid a Allaria, que nos Sirécig trabajo on sus grupos, shows para television, f- ‘may teatros Gon Aliredo Allaria tuve acceso al género del show musical, lo que incluta diferentes estilo folklérios, de Xinmarco do muy dura dscplina. Mientras tanto, Beaty Yo continuamos preparania un programa con pequenas Soras imprognadas de todo o que eotabamos viviendo en Bapaaa, Bl Bosco, Velazquez, Goya. Lo sagrado y To prutano,Allgatey Falla, Gawd Lorca, el futoy la cal Rise programa con mis primeras obras fe presenta doen el Teatro Guimerd, de Bareslona, gracias ala amistad 245, ET con Alfredo Cobos, su empresario y director teatral, que ‘ela en lo nuestro “algo diferente’ En aquellos afos ne texistfa on Expafia ninguna actividad ni pedagégiea ni creative, relacionada con la danza moderna. ue presenta- do on el Instituto de Teatro. Podria extenderme mucho sobre este periodo, pero serfa puramente ancedotico. ‘Nuestro objetivo era llegar a Siona. Donde Clotilde y Alejandro Sakkharofdictaban cursos. Una cierta "mis- tica” nos identifieaba con estos pootas do la danza, habia legado a recibir una media beca directamente de Clotilde Sakkharof, pero algunas circunstancias perso- nales nes obligaron a retornar al pais precipitadaments. ‘Me reincorporé al Teatro Argentino de La Plata formé mi primer grupo independiente con mis compane- ros del Ballet. Con él prosonte mis primeros trabajos gru- pales, Ritos, sobre la Toceata pare pereuiin de Carlos Chaves (a quien habia tenido la suerte de ver, escuchar y conocer personalmente en #4 visita a Buenos Aires) Rite fue uno de los tants onsayos do aproximacién a la obra ‘que me continuaba absesionando, La consagractén ei e investigué apasionadamente todo lo qua He- aba a mia manos cuanto se referia a la antropologia, el {rte primitivo y ol mundo tribal. Los otros ensayos Fao- ron La cantata para América magica, de Ginastera y la Sinfonta india de Carlos Chévex “Junto a Ritos presents La ultima flor basada en une parabola de James Thurber sabre la repeticin efelica de Inguerra y el misterio de a sobrevivencia, Para este traba- je realicé mi primer intento de montaje sonoro con frag- ‘entos de obras musicales y la incorporacin de sonidos ¥ voce reelaborados TReferente a vestuarios y esconografia, en Ritos utili zaba mallas y tinicas primitivas y unos sombreros de gran ‘Volumen construidos con cajas de fesforos yon La ultima Tor vestidos de arpillera y eascos de guerrere similares a Ciertos modelos griegos. Solo en Ritos habia un elemento escenografic, un sol de oro suspendido. 246 vncesa atravesado por dos rieles inamovibles corres. ‘ntes a la obra de teatro en cartel. ‘Ese mismo afio tuve también mi primera experien- cia con actores colaborando en el movimiento de Marat ‘Sade, y también fui seleccionado por Crandall Dhiel, el coreggrafo norteamericano que fue responsable de la puesta y coreografia de Kiss me Kate, de la que participé como bailarin, entrando en el aprendizaje del jazz Al mismo tiempo, recibi mi primer contrato como coreégrafo para montar Ritos para el Ballet del Teatro Argentino de La Plata. "Ana Itelman lleg6 al pats (residfa on los Estados Unidos) para realizar un proyecto en el Argentino, que luego de algunos obstaculos quedé anulado. La conoct y fui se- eceionado y llegamos a realizar algunos ensayos. Antes de su partida, Ana realiz6 una audicién para un show ‘musical que monté en el Copacabana Palace, de Rio de Janeiro, yen el cual también participé. “Antes de viajar a ese pais, tuve oportunidad de inter- pretar uno de los roles mas queridos por mf: Petruchska, de Stravinsky, coreografia original de Fokine, remontada por Tamara Grigorieva, que descifraba la coreografia desde ‘unas arrugadas eartas escritas en ruso. Ese papel, junto a Cadena de fugas de Dore Hoyer y el Tango, de Ana Itelmann, fueron mis interpretacio- hes mas trascendentales desde un punto de vista muy intimo y personal. En realidad, nunca coreografié espe- cialmente para m{y el hecho de haber interpretado el rol, protagénico de mi propia versién de La consagracién se debié a que Gustavo Molajolli, con quien venia ensayai {do la obra no pudo realizarlo, con una semana previa al estreno. Fue tuna dificultad que redundé en una enorme satisfaccién, Esta obra fue presentada gracias a la con- fianza de la Asociacién Amigos de la Danza en Ia sala ‘Martin Coronado del Teatro San Martin, el 4 de julio de 1966, reuniendo bailarines que provenfan del Teatro Co- 247 — zaFrai pon in, Argentina de La Plata, de danan moderna’o eng Sélo en la oportunidad di unirse completamente. Tio adel pute safer a o carrera. Conflufan en mf experiencise rary ane me daba placer armonizar. Me ‘interesaba Benaato tees ailarines independientes id del estreno legaron a re- Coniderado modern, especialmente el’ universe teste Proponderaneia de lo musiealtassiien hak composi icién somaeal especialmente el serialismo). fia lunea desayrollé un aspecto pedagogies evo son tia que a través del hecho do corcogratins teanneienn cxperitpentabe, -y desarrollaba una forma de conocimien., fn el que me lncluta junto alos inearneten Miscliomas tarde por soliceud de Sees ttoresados, 4i algunos cursos de composieon con une metaeiagt pero que obataculizaba a experionca yal cuanan de los alumnos. oo Fone Mi desompoio como director fue forzoxo, ya que era la Sinica forma de continuar ereando, y continua viendo diticultoso para mim posar do toda ia Saporioneia ee Una manera docontrarrestar en dineultentete teens eatuipas de colaboradores en los cuales seston, “Muchos de mis bilarines ereciorony som aha co Kecgrafos,diroctores, macstros o asistenten ante ona ‘Argentina como fuera del pals, Mi juice sabre see cele lonon y resultados ea muy avons Groot transformacin que abarea otapan may pastas, 1a busqueda de las “nuvas tendeneins® ae oeena ‘ cepafismo'y a una absorvacion supusfinal cokes Kean teria dota danza. Aunque considorsguctontaneetaine tina manera de descubrir la constrnesion ae fa es ‘pronder de allo, Ia busqueda des orgmnediiad ora 72 - hoy en da una regla y no el resultado de un proceso. ye Considero a las actuales generaciones de la profe- sion con grandes carencias de curiosidad sobre los orfge- flo, los maestros, todo lo que nos antecede, Solo sobresa- isagat que eonsiraye su propio programe de entndioy To cumple con rigor y con pasion ailar es un prvilegio pocas veces presente en la conciencia, La competencia, la moda, el consumismo, el seottado, la erica parecen bastardear esta actividad. ‘Dafiiel Ballet Contempordnco del Teatro San Martin de Busnoy Aires, junto a Doris Ptroniy Renate Schotteius Sti objetivo es transmitir una experiencia interior, que no eee ey encuadrada con palabras, aunque encuentro Placer on In enertaray extn agpecto que mo gustaria aaa ollar Bor ahora sigo considerando que el fenémeno oie Gana ce lo mas intenso en mi vida. Bso ha producido gertce descuides en lo personal, social y privado, Mia wravectou aon rectficar esos errares creando en Primer [ager propia vida. Wear Siento que en el interior del pats, aun con grandes diicultades, hay senales de ereadores menos contamina dun, ea algo absolutamente intimo y delicado, pero arrios arin deciries los bailarines que la nica gratificacion ye doben esperar, y nada menos, os la de sentir a inten- SMjad del tiempo en Ia materia de sus euerpos, solos 0 olectivamente, y que esa es la metafora mayor de lo que Sepnesenta el momento anieo del presente. Alos creadores, Guevuelven permanentemente asus rafees, para ser ellos thismos y dar un paso mas adelante, y que sean conscien- tos de la importancia de ese paso. A los maestros, que fprendan y's0.cuestionen dinamizando Tos concepts ¥ vitando las estratificaciones. “Aloe artistas en general, ies pediria compromiso, més responsabilidades y menos encasillamientos. ‘Aine nutordads deta Cultura, lesdira que la cultora nose mancja porque es independiente de toda autoridad, Tocrea en forma espontanea si se eat al servicio de ella, i” facilitando el terreno, enriqueciéndolo, educando, sensi- bilizando, resguardando, creando memoria, estimulon do, y que para esto sélo puede partirse de la educacion, Produciendo en cada ciudadano un concepto més amplio de cultura como un aspecto del que cada uno debe hacer, se cargo. NORMA BINAGHL ‘Al evocar su infancia Norma Binaghi se recuerda siempre jugando en danza, tenfa unas zapatillas duras en la punta entonces se subia a la punta para bailar como Jas bailarinas, En fin, comenta todas esas cosas que hacen las chi- cas cuando tienen atraccién hacia el movimiento. Es, dice, uun recuerdo que me acomete en tode momento por que me descubre que desde que tuve conciencia del movimien- to lo conducia al terreno de la danza, ‘Mas tarde, en la escuela primaria, aunque todavia no estudiaba danza siempre me pedian bailar y estaba ligada a todo lo que fuera espectacuo. Las cosas conti- nuaron asf hasta que un dia se enterd que en el barrio habfa una profesora que ensenaba danza. Fué porque en ‘ese momento tenia una compafiera que cursaba con ésta or lo que la llevaban alo de una profesora. “Tonfamos (dice) aproximadamente unos diez afios. Averigué donde quedaba, fui a donde ella trabajaba, consulté los dias y los horarios de clase y me allegué a mama diciéndole que queria estudiar danza y pidiéndole que por favor me lle. Norma vivia en Parque de los Patricios y la profe- sora en Villa Urquiza, por lo quela mama selo coment a 1a abuela. La abuela, entonces, oping que si ala chica le gustaba la danza habia que Hevarla para que aprendie ra, Se dio pues con naturalidad la aprobacion de toda la, familia, aunque en general se suponia que estudiaba s6lo porque eso le gustaba y porque era chica. De modo que coneurrié a sus primeas clases en Villa Urquiza con una profesora que impartia clases de elésico y de espasiol, como 251 nie roan en Soiatntrapaneitns tiene Harton enosopeniyaogas se aaa otros artistas, coma musica ovens es eae ee ss yocaua fo cra ae ae eee a7aates frente yumi acide ain. at batman ate erli,alinm Se ace caren ae on ce sans abet ents came eae ane ee scr proverton dee lng ele, ao euslen a t Se rare a ener a pape panel es i eae ssanaibeenin oe ol tes oie, oe gg cree a ee serene dale tis suet eae Se ee te ee merece Gnd xan Me Se Boece aay beste tae rey ana ramon hacia deere 7 pn Ie relict scale qu enero tan MAURICIO WAINROT Cuando se le pregunta a Mauricio Wainrot en que momento de su vida sinti¢ la atraccidn de la danza, con- testa que desde que nacié y recuerda que desde Ia més temprana edad quiso ser bailarin, Se memora en el al- macén de sus padres, disfrazado con ropas de los mayo- res, representando por uno y otro lado. ‘Sus padres eran emigrantes de origen muy pobre, de modo que no habian tenido acceso a la cultura, sin Gmbargo tentan devocién por los bienes culturales die Ubicaban como ideal y modelo. Su madre no habia estu- Giade misica, pero cantaba muy bien y Io hacia perma- guutemente. Su padre, un socialista polaco no militante, mabe apasionadamente la lectura; fue él quien condyjo Al pequeho Mauricio a 1a Escuela Nacional de Danzas cuando éste contaba seis afios de edad. ‘De esa temprana experiencia Mauricio recuerda una ‘escuela con muchos chicos y muchas madres y 1a impo- Sente mesa examinadora, uno de cuyos miembros le pe- Gia que cantara o bailara, en fin que hiciera algo. ‘Asustadisimo, el nifiose qued6 quieto y como petrificadoy os examinadores pidieron a su padre que lo volviese a tracr un ako més tarde, debido a su gran timidez. Su vocacién queds adormecida, pero siempre gus- taba dela musica, bailaba con pasidn los bailes de moda y dibujaba, aunque en forma rebelde y creativa “A Ios diecisiete afios st vocacién lo condujo hacia el teatro y comenz6 a estudiar en el conjunto Los Tndepenidientes con Onofre Lovero, Carlos Serrano ¥ Roberto Castro. Ton ocasion en que seguia un curso con Carlos os admiraba, envidiaba su Gandolfo, viendo a los bailarines| Gepecto oon sus mallas blancas y deseaba ser bailarin cisco 259 El primer contacto que tuvo con una bailarina fue en un curso de teatro en el que Susana Zimmermann, bailarina y coreégrafa, dictaba In materia expresién cor- ‘A los veinte asos, se decidié a estudiar danza mo- derna con su amigo Otto Werberg y en su mismo estudio ‘danza clésica con Ana Marini. ‘La elecei6n de Ia danza como carrera produjo una situacién conflictiva en la familia, el padre al fallocer habia dejado una empresa con varios negocios, su her- ‘mana, seis afios mayor que éI y la madre trabajaban en Ia empresa y suponian que Mauricio debia hacerse cargo de una parte, pero él no queria acoptar tal situacién, Pese ‘ala confusa circunstancia familiar, tuvo el apoyo de su madre, que no quiso interferir en su vocacin. (Que un hombre elija la profesién de bailarin no es, ‘entre nosotros un hecho cotidiano y sus amigos se sor- prendieron grandemente; poco a poco se produjo la sepa- Facién del crecimiento, ruptura acentuada cuando dejé el Gomicilio familiar para mudarse corca del Teatro Colén. Mas tarde, agrega Mauricio, con los primeros éxitos retornaron Tos amigos. Poco tiempo después vio, en una funcién dela sociedad Amigos de la Danza, la obra de Oscar Araiz El Unicornio, la Gorgona y la Manticora, y en ese momento se dio cuenta de que ego era lo que queria bailar; coincidentemente, tiempo después seria la primera obra de ese coreégrafo que 61 bailaria. "Mauricio Wainrot considera que las primeras sen- saciones y contactos constituyen las mas importantes influencias que tuvo durante su formacién: su trabajo con Paulina Ossona, con quien represent6 por primera vez danza moderna, su impresién durante la primera repre- ‘sentacién que vio en Amigos de la danza, su contacto con Otto Werberg al ver trabajar a Esmeralda Agoglia y Ba- ‘il Tupin, que fue su maestro en el Colén, y Eda Aizem- berg, persona con la eual conocié la danza moderna, puesto que fue su primera maestra en el Colén, a su clase asisti6 x primera vex forzado y sintiondo una. gran resisten Per Pham, como todos sus comparieros, amaba la escuela Sapa ero después de a primera lecci6n,sintié que Te peer Otra de las grandes emociones de su carrera fue su estreno como director del Grupo de Danza Contomporé- fea del Teatro Municipal General San Martin, otra, 1a Ultima funeign que reali con ese grupo y otras, por fn, las primeras veoos que bailé en el extranjero, ‘Su primera creacién coreografica fue un dio muy breve y simple, con entrelazamiento de pareja, sobre la musiea La Cancion dela estrella, de Ricardo Wagner; la Ghra se eetrend en los Ballets de Oscar Araiz en el Teatro Odes. ‘Despuss de esta coreografia compuso Tiempos, una piesa para siete personas sobre el tereero y cuarto mov Inientos de la tercera Sinfonta de Mahler, eomposicion aie se estrené con sl grupo Orin, del que era uno de los Cuatro directores [Las abras que considera de mayor trascendencia en sucarrern pertoneciontos a otros coredgrafos fueron Ada- Bietioy Escenas de Pama, de Oscar Araiz, Memorias, de ‘Ana Marfa Stekelman, Halo, de Oscar Araiz, Casas de Catomba, de Ana Heiman, esos, una composiin p= pia la que considera su primera obra de importancia, freada sobre las Canciones para los niios muertos, de Gustav Mahler, esto es con referencia a las danzas que interpretéen cuanto las que vio considera muy importan ves Lugar de contacto, de Pina Bauch, Bl lago de foe cis nes, devJohn Neumayer y Amor de poeta, de Maurice BS jt ‘Wainrot considera las etapas de formacién de su carrera, su iniciacién en el teatro, las clases privadas, los studios en el Teatro Colén, sus diez afios con Oscar Araiz, su labor como bailarin y asistente de coredgrafo en el Grupo de Danza del San Martin junto a Ana Maria Stekelman, a quien admira profundamente, y su funcién 261 como director del mismo grupo, al que considera ¥6 ala categoria de compaiiia internacional Te De su labor de coredgrafo opina que hubo mucha evolucién en ella y afirma que sus trabajssae dicen en considerablemente los unos de los olise, Lae arena antes las considera muy elaboradas Durante varios aftos dieté clases en el taller de danza del San Martin y antes de ello ha dictado clases privadae durante cinco anos, Ie gratifica ver el erecimiente yal aprendizaje de los bailarines y Ie gusta formar bailarines tal como tuvo oportunidad de hacerlo en el San Martin, Sa trabajo docente es en base a métodos propios aplicanda su propia formacién heterogénea y sinticndose mas corea de la escuela alemana que de la técnica Graham. Partié en gira de coredgrafo, que abarcarla pafses de Europa y Canada. Cuando se fe inquiere su opinion ‘acerca de cémo ve la situacién de la danza tanto en al orden nacional como.en el mundial, expresa que: “en eate momento hay muchos grupos interesantes, lo que pronostica un gran futuro para la danza argentina. “Sin cl orden mundial estamos asistiendo a una co- rrionte naturalista que abarea deporte, gimnasia, aero- Dismo, ete, ¥ siendo la danza la expresién artition de todo eile hay también una gran bisqueda y necesided de bailar”. ‘Su consejo a los jovenes en formacién ea no ence- rraree en una sola diodiplina ni pensar en la danza como cn alge de orden tenice; la danza ee una expresién filo- be estar ligada a lo social lo politico y lo estéti facionada a la plastica especialmente a la o3- eine. ‘artistas do otras disciplinas les pediria que se n de igual manera porque, “cuando mas ence- ue pedirfa ala gente do la danza es que wr Ine suteridades para obtener conus, ino seguir apoyoe de empresas privadas. Asegura que para vislumbrar un buen futuro h. que tener conocimiento de eémo fue nuestro pasado, tun hecho fundamental y tiene que ver con la cultura los bailarines.

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