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FUENTES DE LA HISTORIA
Se considera fuente de la Historia, todo lo que nos ha llegado del pasado y que, en
consecuencia, sirve al historiador para reconstruir, comprender e interpretar ese mismo
pasado. También podríamos decir que las fuentes de la historia puede ser cualquier objeto
o resto realizado o utilizado por el hombre, que es susceptible de aportarnos información,
parcial o total, sobre los hechos pretéritos
Evidentemente, las fuentes históricas no son inocentes, y a menudo pueden ofrecer una
visión deformada de la realidad que el historiador pretende reconstruir. Por esta razón el
Historiador, una vez encontradas estas fuentes (fase de la investigación que se conoce
con el nombre de heurística), debe someterlas a la crítica histórica (fase de la
investigación que se conoce con el nombre de hermenéutica), mediante la metodología
oportuna.
Fuentes escritas. Como su nombre indica, son todas aquellas transmitidas por el hombre
sobre un soporte determinado (piedra, papiro, pergamino, papel, etc.), en unos casos
realizadas a mano (fuentes manuscritas), en otros casos realizadas mediante medios
técnicos (fuentes impresas). El tipo de soporte sobre el que aparecen escritas estas
fuentes implica la especialización de los investigadores que se ocupan de su estudio:
Epigrafía, Papirología, Diplomática, Codicología, etc.
Se entiende por crónica la historia detallada de un país, de una localidad, de una época o
de un hombre, o de un acontecimiento en general, escrita por un testigo ocular o por un
contemporáneo que ha registrado sin comentarios todos los pormenores que ha visto, y
aún todos los que le han sido transmitidos. Tales son por ejemplo, las crónicas latinas de
Flodoart, canónigo de Reimns, y de Guillermo de Naugis y las crónicas francesas de
Froissart y de Monstrelet. De todos los países europeos acaso los más ricos en crónicas
sean Francia, España, Italia e Inglaterra.
Las crónicas son también un género periodístico. Se las clasifica como "amarillas" o
"blancas" según su contenido. Las "amarillas" tienen material más subjetivo y
generalmente la voz autorizada es una persona o ciudadano común; las "blancas" usan
material más objetivo y la voz autorizada es, generalmente, la autoridad, un profesional,
etc.