You are on page 1of 16

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

“DERECHO AMBIENTAL”

CURSO: CARGAS Y DEUDAS TRIBUTARIAS

DOCENTE: MIRKO GALARRETA

CICLO: V–B

INTEGRANTES: LEYVA BLAS NASHASHY

CHIMBOTE – PERÚ
INTRODUCCIÓN

En primer lugar, se comenzará definiendo el objeto de análisis de este trabajo. Con la


muerte del causante tiene lugar la apertura de la sucesión y durante este momento y hasta
la aceptación de la herencia, es decir la situación en que se encuentra el patrimonio de la
persona fallecida, desde el momento que se produce la muerte hasta la aceptación de la
herencia.
El heredero al acepta la herencia del difunto, se convierte en titular de sus derechos, sujeto
activo o pasivo de sus relaciones jurídicas y deudor de las obligaciones que aquel tenía.
Ello encuentra su reflejo en la responsabilidad patrimonial universal del art. 661 CC, en
sede de obligaciones. Por tanto, será el heredero quien tendrá que hacer frente a las cargas
de la herencia, ya que los derechos de los acreedores frente al causante –deudor en vida-
, quedan protegidos por nuestro ordenamiento.
El Patrimonio hereditario no solo está integrado por el activo, referido a los bienes reales
e ideales que fueron del causante, sino también por un pasivo, lo cual comprende las
obligaciones contraídas, por el causante en vida y que a su muerte se encuentren sin pago
y así se transmiten a los herederos, también las otras obligaciones que nacen a raíz de la
muerte del de cujus, esto es, que a su muerte se devenga una serie de pagos que deben ser
atendidos con carga de masa hereditaria. Como por ejemplo los gatos de la funeraria.
1. CARGAS

1.1. Patrimonio hereditario

1.2. CARGAS

Las cargas están referidas a los gastos ocasionados como consecuencia directa de la muerte
del causante, obligaciones, que nacen después de la muerte del autor de la herencia. Otros
refieren que se trata de obligaciones derivadas del propio desenvolvimiento de la herencia,
tales como el pago por inventario, tasación, honorarios del administrador y demás.

 Gastos consecuentes del fallecimiento del causante.


 Son pasivos que no consiste en deudas del difunto, sino en cargas que nacen a
causa de la herencia, por primera vez, como cargas originarias, en la persona del
heredero.
Nuestro código civil, en su artículo 689, señala que los gastos que se computan como
cargas serán a cuenta de la masa hereditaria.

I. MASA HEREDITARIA
1. Es la herencia en sí.
2. Conjunto de bienes, derechos y obligaciones que no se extinguen por la
muerte del causante, entendiéndose por ellos, el activo y pasivo, del cual es
titular la persona al momento de su fallecimiento.
3. Patrimonio dejado por el causante.
A. CARGAS DE LA HERENCIA
1. Gastos de funeral y, en su caso, los de. Incineración, que se pagan
preferentemente: Sobre el particular, diremos que es el primer pago, necesario y
urgente, que de inmediato deberá ser afrontado por el albacea, u directamente por
los sucesores, pago que afecta el patrimonio hereditario.
2. Gastos de la última enfermedad del Causante: Sobre esta carga, deja mucho que
desear el que se considere corno tal, en virtud de que en puridad estas obligaciones
se dan cuando el causante está vivo, y por lo tanto deberían comprenderse como
deudas de la herencia; sin embargo, el legislador ha considerado prudente
considerarles corno cargas, en tanto que son pagos a realizarse con preferencia a
otros que puedan presentarse. Empero, es de observar que no se establece término
alguno, lo cual podría llevar a considerar gastos de la última enfermedad del
causante remontándose a muchos años antes de que se produzca el deceso, lo que
terminarla afectando a los sucesores. Por ello, estos gastos no deberían superar los
6 meses antes de la muerte del causante.
3. Gastos de Administración: Se comprenden dentro de este rubro los derivados de
la función del albacea, la del administrador, o los judiciales, relativos a la sucesión.
4. Gastos de alimentación a favor de personas que hayan vivido en casa del
causante: El artículo 870 del Código Civil regula está carga que resulta peculiar,
en tanto que está referida a los alimentos de la persona que, sin ser necesariamente
familiar del causante, ha sido atendido por este al darle vivienda y alimentación, y
ello seguro debido a razones muy personalísimas e incluso de honda sensibilidad
social del causante. Pues bien, muerto éste, quizás los herederos no comulguen con
esta sensibilidad, suerte de solidaridad social, y pretendan deshacerse de aquel que
se alimentó a costa del causante. En esa circunstancia, surge el derecho de éste a
solicitar a la sucesión que continúe la atención y hasta por tres meses, y de no
verificarse ello tendrá derecho de demandar a la sucesión para el pago de lo que
represente esa alimentación.
2. DEUDAS DE LA HERENCIA

2.1 CLASES DE DEUDAS

A. DEUDAS DE LA HERENCIA

Se trata de obligaciones contraídas por el causante, las mismas que a su muerte se


encuentran impagas, obligaciones que, por el fenómeno de la sucesión, ahora deben ser
asumidas por los sucesores del causante, debiendo tenerse presente para ello revisado
sobre los límites de la responsabilidad limitada de las herederos, quienes, ahora, asumen
esas obligaciones en proporción a su participación en la herencia. En electo, el artículo
1218 del Código Civil señala... La obligación se transmite a los herederos, salvo cuando
es inherente a la persona, lo prohíbe la ley o se ha pactado en contrario».1
El trato legal que le da el Código Civil a estas deudas parte de la separación que hace el
legislador, trátese de la herencia indivisa o cuando esta ya ha desaparecido corno
consecuencia de haberse dado la partición. En efecto, el artículo 871 refiere que mientras
la herencia permanece indivisa, la obligación de pagar las deudas del causante gravita
sobre la masa hereditaria, pero hecha la partición, se entiende sin haberse pagado las
deudas, entonces cada uno de los herederos responde de esas deudas en proporción a su
cuota hereditaria.
Es de verse que en nuestro sistema legal no hay obligación solidaria de los coherederos,
ni cuando la sucesión es indivisa, en la que, estando integro el patrimonio hereditario,
de allí se sacará lo necesario para el pago, que deberá ser realizado por los herederos, o
si fuere el caso, el albacea, y menos cuando se hizo partición, en tanto que aquí es clara
la norma al especificar que la obligación es mancomunada, pues cada coheredero
responde por la deuda hasta donde alcance su participación en la herencia.

B. PREFERENCIA DE LOS ACREEDORES DEL CAUSANTE


Señala el artículo 872 que los acreedores del causante tienen preferencia para ser
pagados con cargo a la masa hereditaria, respecto a los acreedores de los herederos,
regla que resulta obvia, pues si los acreedores que fueron del causante y ahora lo son de
la sucesión tienen preferencia sobre los mismos herederos, con mayor razón tendrán
preferencia sobre los acreedores de los herederos, sin embargo el legislador ha creído
necesario su tratamiento.

1
BENJAMIN AGUILAR LLANOS – Derecho de Sucesiones. Ediciones Legales. 2011. Pág. 583
C. El HEREDERO PUEDE PEDIR QUE ANTES DE LA PARTICIÓN SE PAGUEN
DEUDAS
Facultad del heredero de solicitar que las deudas de la herencia, que estén debidamente
acreditadas y que carezcan de garantía real, sean pagadas o se asegure su pago antes de
la partición. Ahora bien se entiende la norma en tanto que resulta de intereses y
conveniencia para el heredero que se salden todas las deudas existentes, antes de
efectuar la división del patrimonio hereditario, posibilitando con ello que reciban bienes
sin compromiso alguno, para evitar el riesgo de que, luego de recibir bienes de la
herencia, deba comprometerlos para hacer frente al pago de obligaciones. En
consecuencia, el heredero piensa que una partición estará totalmente saneada, si no tiene
que reservar parte de los bienes que recibirá para pagos futuros.

D. EL PAGO A FAVOR DEL HIJO ALIMENTISTA, ES DEUDA ALIMENTARIA


La regla contemplada en el artículo 874 Código Civil, parte del supuesto de la obligación
alimentaria a la que estaba sometido el causante en vida, como resultado de un juicio de
alimentos promovido para el extramatrimonial no reconocido ni declarado, pero que
probó que su madre tuvo trato íntimo en la época de la concepción con el causante. En
esa circunstancia, se fijó alimentos a favor de este alimentista tal como lo regula el
artículo 415 del Código Civil. Ahora bien en vida del causante, este estuvo pagando
dicha prestación, pero al ocurrir su deceso, esta obligación será asumida por sus
herederos. 2

E. EL ACREEDOR DE LA HERENCIA PUEDE OPONERSE A LA PARTICIÓN


Conocemos la preferencia del acreedor de la sucesión en cuanto al cobro de las deudas,
por lo tanto lo aconsejable es que la partición no se lleve adelante mientras no se hayan
pagado éstas; y si los herederos pretenden realizar la partición, entonces la ley faculta al
acreedor para la oposición a la misma, mientras no se le pague o se le asegure su pago.
En efecto el artículo 675 refiere que el acreedor de la herencia puede oponerse a la

2
BENJAMIN AGUILAR LLANOS – Derecho de Sucesiones. Ediciones Legales. 2011. Pág. 585
partición y al pago o entrega de los legados mientras no se le satisfaga su deuda (debió
decir crédito) ose le asegure su pago.
Se dictan reglas procesales para viabilizar la oposición, y así se señala que la oposición
se ejerce a través de demanda o como tercero con interés en el proceso existente, de
ser el caso, y que también puede demandar la tutela preventiva de su derecho, todavía
no exigible.

F. HEREDERO QUE PAGA DEUDA DE HERENCIA


Deuda de la herencia debidamente acreditada y cuyo pago ha sido efectuado en su
totalidad por el heredero o que hubiese sido ejecutado por este, en este supuesto tiene
derecho a ser resarcido por sus coherederos en la parte proporcional que a cada uno de
ellos corresponda; en efecto, tal como lo manda el artículo 877, y en atención a que las
deudas se transmiten a los herederos, quienes resultan obligados a pagar estas, de
acuerdo a la cuota hereditaria que les corresponde; en esa medida, si uno solo de estos
herederos resulta pagando el total de esa deuda, justo es que los coherederos que no
participaron en el pago deban entregar al heredero que pagó lo que le corresponde según
su participación en la herencia. Ahora bien, si uno de los coherederos fuere insolvente
al momento del pago, en este caso, dice el artículo 878 del Código Civil, norma que
debemos concordar con lo dispuesto por el artículo 1204 del mismo cuerpo de leyes, se
perjudican a prorrata el heredero que pagó como sus coherederos. En pocas palabras, si
alguno de los coherederos es insolvente, su porción se distribuye ente las demás.

G. EL LEGATARIO NO ASUME DEUDAS DE LA HERENCIA


Una de las diferencias sustantivas can el sucesor a título universal (herederos) y el
sucesor a título particular (legatario) este referida a que el primero hace suyas las
deudas de la herencia porque entra en la posición jurídica del causante; mientras que
el segundo no está obligado a pagar las deudas de la herencia, salvo que el testador
expresamente lo haya establecido, y no está obligado, pues, como sabernos, el legatario
no sucede al causante, solo es llamado a recoger un bien, o parte de un bien singular.
Así lo encontrarnos en el artículo 879 que a la letra dice: “El legatario no está obligado
a pagar las deudas de la herencia, salvo disposición contraria del testador. Si hubiera
pagado alguna deuda debidamente acreditada y que grave específicamente el bien
legado, deberá resarcírsele por los herederos lo que hubiere pagado”.
H. HEREDERO O LEGATARIO ACREEDOR DEL CAUSANTE
El artículo 880 del Código Civil, alude a este tema, señalando que el heredero o legatario
que fuere acreedor del causante conserva los derechos derivados de su crédito, sin
perjuicio de la consolidación que pudiera operar; en efecto, no existe incompatibilidad en
la calidad de sucesor y acreedor a la vez, en ese sentido, si el causante instituye a su
acreedor como su heredero, este conserva dos calidades en una misma persona: la de
sucesor del causante, y mantiene la de acreedor del que ahora es su causante; ahora bien,
la misma norma alude que en este caso puede efectuarse la consolidación, la misma que
puede operar de toda la obligación o de parte de esta.

2.2 ARTÍCULO 660 DEL CÓDIGO CIVIL. TRANSMISIÓN SUCESORIA

“Desde el momento de la muerte de una persona, bienes, derechos y obligaciones


que constituyen la herencia se transmiten a sus sucesores”.
Según la doctrina nos dice que desde el momento de deceso de una persona, se
transmiten a los herederos sus derechos, bienes y obligaciones, en realidad los
herederos se colocan en la posición jurídica de su causante respecto al conjunto
patrimonial de éste.
Es decir al heredero se le transmite un conjunto patrimonial y, en principio, tendrá
que responder por las obligaciones del causante igual que cualquier persona responde
por las suyas: con todo su patrimonio, el propio y el recibido por herencia.
No necesita explicación el hecho de que así como se transmiten los bienes, también
han de transmitirse las deudas. Pero además de las deudas propias del causante, su
muerte determina que surjan otras obligaciones, llamadas cargas de la masa
hereditaria: los gastos de su funeral y los de administración y partición de la herencia,
además de los previstos en el artículo 870 del Código Civil.
Nuestro Código también ha catalogado a los gastos de última enfermedad del
causante como carga de la herencia, heredadas por sus sucesores precisamente
porque no han sido pagadas antes de la muerte.
Ahora el conflictivo existe cuando la suma de las cargas y las obligaciones del
causante es superior al activo que deja, por ser considerado heredero universal
integrándose ese todo heredado al patrimonio del heredero, Ahora bien, ante el
posible perjuicio para el heredero por una herencia cuyo pasivo sea superior al activo,
se han vertido diversas teorías. Una, la de responsabilidad limitada o de
responsabilidad intra vires pura y otra corresponde al sistema de responsabilidad
ultra vires, conforme al cual el heredero se sucede en las obligaciones y es deudor de
ellas, pero puede, bajo ciertos supuestos, atenuar su responsabilidad para el pago de
las mismas, buscando de una o otra manera primero cuidar al heredero y la otra al
acreedor.

2.3. SUCESION INTRA VIRES HEREDITATIS


1. DEFINICIÓN.- Es definida como "En interior de las fuerzas de la herencia"; se
difumina por ella que el heredero responderá por las deudas y cargas de la herencia
sólo hasta donde alcancen los bienes de ésta, es una limitación de las obligaciones del
heredero frente a los acreedores de su causante. Cuando el heredero goza del beneficio
de inventario judicial, no tendría que probar el exceso. Es decir, que el heredero nunca
respondería por obligaciones heredadas en cuanto superen el activo heredado.

2. UBICACIÓN DENTRO DEL CODIGO CIVIL:


Nuestra ley no establece un sistema de responsabilidad limitada, sino uno de
responsabilidad limitable sólo si se cumplen ciertos presupuestos. 0, dicho con otras
palabras, conceptúo que la regla general es que el heredero responde ilimitadamente
por las obligaciones porque las hereda, es decir el heredero puede gozar la excepción
que le otorga el ordenamiento para limitar su responsabilidad, sobre las obligaciones
y no de las deudas como lo encontramos regulado en el artículo 661: “El heredero
responde de las deudas y cargas de la herencia solo hasta donde alcancen los bienes de
este. Concierne al heredero la prueba del exceso, salvo cuando exista inventario
judicial”.
La regla general, contenida en el artículo 661º del Código Civil, es que el "heredero
responde de las deudas y cargas de la herencia sólo hasta donde alcancen los bienes
de ésta [6]...". Por tanto, las obligaciones contraídas en vida por el causante, serán
satisfechas hasta cubrir el importe de los bienes dejados a su muerte. En este caso, y a
falta de albacea en la sucesión testamentaria, los herederos se convierten en
administradores del patrimonio del causante, a efectos de cumplir con las obligaciones
adquiridas por éste, en vida; pero únicamente hasta donde alcance la totalidad de los
bienes dejados al momento de producirse el deceso.
La aceptación puede ser simple, cuando el heredero mayor de edad y capaz a quien
se ha deferido una sucesión abierta por muerte real, opta por la aceptación sin pedir
inventario de bienes, de modo que la consecuencia jurídica es la siguiente: se produce
la confusión de patrimonios entre el suyo y el heredado, de modo que todo el pasivo
de la sucesión gravita en adelante sobre el patrimonio del aceptante simple.
La aceptación es considerada con beneficio de inventario cuando el heredero acepta
la sucesión previo inventario de los bienes de la herencia y la consecuencia es la
siguiente: con esta forma de aceptación condicionada también se produce la
transmisión y adquisición de la sucesión. Pero la traslación del patrimonio importa
esta vez una sucesión en los bienes y no en la persona del causante, con lo cual se
define la responsabilidad patrimonial del sucesor universal: exclusivamente debe
hacer frente a las deudas y cargas de la sucesión aceptada beneficiariamente, intra
vires hereditatis.
Las deudas a que se refiere este artículo son únicamente las trasmisibles, pues las
personalísimas no son objeto de trasmisión. Las deudas difieren de las cargas, en que
estas son obligaciones nacidas después de la muerte, como los son los gastos del
funeral o de incineración, de habitación y alimentación de sus dependientes y el caso
que erróneamente califica el código como tales: los gastos de la última enfermedad
del causante.

3. SUCESION ULTRA VIRES HEREDITATIS


1. DEFINICION. La responsabilidad ultra vires hereditatis operaría cuando el heredero
oculta los bienes hereditarios, simula deudas o dispone de los bienes dejados por el
causante, en perjuicio de los derechos de los acreedores de la sucesión. La
responsabilidad que va más allá de los bienes de la herencia. Pues caben las herencias
en las que hay más pasivo que activo por lo que uno debe pagar por deudas que no
tenías y puede darse la situación de que el heredero tenga que pagar las deudas del
muerto con su patrimonio, con el que tenía antes de ser heredero. Para la doctrina
francesa se le denomina Aceptación forzada,
2. UBICACIÓN DENTRO DEL CODIGO CIVIL
Lo encontramos en el artículo 662 el cual cítalo siguiente: “Pierde el beneficio
otorgado en el artículo 661ª el heredero que:
A. Oculta dolosamente bienes hereditarios
B. Simula deudas o dispone de los bienes dejados por el causante, en perjuicio de los
derechos de los acreedores de la sucesión”.
Se establece excepcionalmente la responsabilidad ultra vires hereditatis en los
casos de ocultación dolosa de bienes hereditarios, simulación de deudas o
disposición de bienes dejados por el causante, en perjuicio de los derechos de los
acreedores de la sucesión, a que se refiere el artículo 662; Las situaciones a las
que se refiere la norma convierten al heredero en forzoso desde el punto de vista
del sucesor, en vista de que no puede sustraerse del proceso sucesoral Como dice
Ferrero Costa[9], éstos no sólo son delitos civiles, por su manifiesta ilicitud y la
evidente intención de causar daño a los derechos de otro, sino que además pueden
revestir los caracteres de delitos penales, sea como substracción o abuso de
confianza..

El artículo 662º del Código Civil sanciona al heredero que dolosamente oculta los
bienes hereditarios o que simula deudas o dispone de los bienes del causante en
perjuicio de los acreedores de la sucesión, con la atribución de responsabilidad
ultra vires hereditatis.
En este caso, además de obligar a recibir la herencia, se obliga al heredero a
satisfacer las deudas y cargas de la herencia incluso con su patrimonio personal,
situación que, según la doctrina mayoritaria, deviene en una sanción demasiado
drástica y hasta injusta
La respuesta al problema que nos planteamos seria:
 Una parte debe responder ante los acreedores solo hasta donde alcance el
valor de los bienes que ha inventariado previo a la sucesión, es decir si por
ejemplo, el monto de los bienes previo inventariado es de S/. 60.000 y la
deuda contraída es de S/. 100.000, el heredero solo responderá solo hasta la
suma de S/. 60.000 frente a los acreedores; y lo restante se extinguirá, (ya
que el deudor ha fallecido y por lo tanto no podrá cobrar la suma restante)
pues no se tocara sus bienes.
 Pero ¿Qué pasaría si no hubiera un inventario que probaría que el heredero
está ocultando bienes para que no se vea disminuido su patrimonio?; la
respuesta seria la siguiente: Por regla general entendemos que el heredero
responderá por las cargas y obligaciones hasta donde alcanza los bienes; de
esta premisa se desprende lo siguiente: 1. Si hay Inventario, probaría que los
bienes que heredero no alcanzaría para pagar la deuda y por consiguiente
solo responderá hasta el valor que tengan dichos bienes. 2. Si no hay
inventario; Tendría que probar que los bienes que heredo no alcanza para
pagar las deudas contraída por el causante, en este caso tendría que
demostrarlo ante un juez si fuera necesario.

 Mientras que la otra parte por haber actuado de mala fe, ocultando un bien
inmueble con la intención de no pagar una deuda contraída por el causante
y a la vez no ver disminuida su herencia, tendrá que responder con el integro
de sus bienes a la deuda contraída por el causante, pues al verse descubierto
se comprobaría que está actuando de mala fe, la ley establece que quien
actúa de mala fe ocultando o simulando que no puede pagar la deuda del
causante hacia los acreedores tendrá que pagar el integro de la deuda con
sus bienes. Afectando su patrimonio solo por el hecho de haber actuado de
mala fe.

 Un sentido de equidad nos impulsa a pensar que éstos debieran ser


responsables por las obligaciones del causante únicamente en proporción a
su participación en la herencia; no así por la totalidad. No obstante, la ley
no dilucida el problema, y podría temerariamente interpretarse que el
responsable ultra vires hereditatis debe obligarse por todas las deudas del
causante.

 Para Ferrero Costa, se debe modificar el artículo 662ª del código civil, pues
considera que se ha formulado la norma sólo para la ocultación de bienes y
para la simulación de deudas, debiendo darse en ambos casos el perjuicio de
los acreedores de la sucesión. Se ha eliminado la figura de la disposición de
bienes, por estar ésta legislada en el artículo 1540 como venta parcial de lo
ajeno, con su sanción correspondiente.
4. LA MATERIA DE LA RESPONSABILIDAD.
Régimen de responsabilidad El artículo 661 del Código Civil estatuye que el heredero
responde de las deudas y cargas de la herencia. La redacción del párrafo no ha sido
afortunada. Efectivamente, las deudas (rectius, obligaciones) no son deudas de la
herencia, sino del causante, y por tanto preceden a la herencia, aunque la constituyen.
En cambio, las cargas, en cuanto las haya, surgen precisamente por la muerte del
testador y constituyen pasivo a cargo de los herederos aunque no existan activos en la
masa hereditaria.
Hecha esta salvedad, lo primero que se impone precisar es que por deudas ha querido
decirse obligaciones en cuanto sean transmisibles. No se trata solamente, pues, de
deudas de dinero, sino de todo aquello respecto de lo cual el causante tuviera una
posición jurídica de deudor, con prescindencia de su origen. Ha de quedar claro, en
consecuencia, que al transmitirse las obligaciones se transmiten con todo que les es
propio a cada una de ellas y permite, por lo tanto, que el sucesor pueda invocar las
excepciones personales que hubiera podido esgrimir el causante. El precepto incluye
también a las cargas. Por tales se entienden las contempladas en los artículos 869 y 870
del Código.
CONCLUSIONES

En primer lugar, hemos entendido que sí, el heredero finalmente decide aceptar la
herencia de su causante le sustituye en todas sus relaciones jurídicas, de modo que no sólo
se beneficiará del patrimonio que reciba, sino que habrá de hacer frente a las deudas que
se deriven de la herencia. No obstante, dependerá del modo de aceptar la herencia el que
responda de esas deudas con todo su patrimonio, o simplemente con los bienes
hereditarios

Se ha visto también la responsabilidad del legitimario estricto respecto de las deudas del
causante. Analizadas las dos vertientes que existen en la doctrina, parece que, la que tiene
mayor peso y, en nuestra opinión, la acertada, consiste en considerar que el legitimario
estricto no responde por las deudas del causante siempre y cuando exceda del monto
heredado.

No obstante, en el caso de que el legitimario decidiese aceptar, ya sea la herencia o el


legado, si es que el testador se lo ofrece, aquel abandonaría el régimen de legitimario
estricto para incardinarse en el régimen del heredero o del legatario, con sus respectivas
consecuencias, por lo que pasaría de ser un acreedor a un deudor, dependiendo de la
situación.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

Castro J.(2015). “el límite de la responsabilidad en el cumplimiento de las cargas y


deudasque se trasmiten al heredero”.[Temas de Derecho]. Recuperado de:
http://jorgeluiscastrovillacortaabogados.blogspot.com/2015/09/el-limite-de-
laresponsabilidad-
en-el.html
Juristas Editores (2016). “Codigo Civil Cpodigo Procesal Civil, Codigo de los niños y
Adolecentes”. Lima. Juristas.
Lohmann G.(1993). “Responsabilidad Patrimonial del Heredero”. Lima. Recuperado de:
file:///C:/Users/uuser/Downloads/11459-45530-1-PB%20(4).pdf.
Mendizal W.(2013).”Derecho Civil VII Sucesiones, Obligaciones, cargas y deudas”.
Lima.
Recuperado de:
https://es.slideshare.net/siempreinigualable2000/8-cargas-y-deudas-de-la-sucesin

You might also like