Se conoce como juicio moral, al acto mental que

establece si una cierta conducta o situación tiene

contenido ético o, por el contrario, carece de estos
principios. Se realiza a partir del sentido moral de cada
persona, de los esquemas, normas y reglas que hemos ido
adquiriendo y aprendiendo a lo largo de nuestra vida.
Valoración que una persona realiza frente a una acción,
calificándola de buena o mala según su conciencia.
Existen dos posiciones fundamentales que explican el
origen de la conciencia moral:
Innata. Supone que la conciencia forma parte del
individuo, que es una capacidad para juzgar lo bueno y
lo malo, es una facultad de la razón humana, que permite
distinguir el sentido del bien y del mal.

Ambiental. Establece que la conciencia moral es

resultado de la educación y/o del ambiente.
Las instituciones sociales que influyen y
determinan los juicios morales son:

*La familia
*Los amigos
*La escuela
*Los medios de comunicación
Entre otros
Un juicio ético es la facultad de razonar y
determinar qué acción, conducta o actitud
es la más adecuada, de entre un conjunto de
alternativas, en función del sistema de
valores que compartimos con la sociedad
donde vivimos.
La importancia de desarrollar la capacidad para el juicio
ético radica en que nos posibilita decidir de manera más
eficiente las razones que justifican nuestras decisiones, así
como comprender mejor dónde se encuentra el problema ético
y cuál es su solución más adecuada.
El juicio ético para que tenga validez deber ser
coherente, razonado. No basta consultar las
normas de moral vigentes
y ceñirme ciegamente a
ellas para aceptar que voy
a actuar éticamente.
Por su propia naturaleza,
la ética es un saber ordenado a la actuación, por
lo tanto, un "saber actuar". En otras palabras, no
es lo mismo conocer la ética, que actuar
éticamente
Juicio ético