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Escuela para Padres

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ñ ss Franc sca Díaz Gut rrez c


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c ga telev s n se ha er  do en el med o de
comun cac n mas vo y dom nante y es
adm t do que este poderoso med o aud ov sual
ejerce una cons derable nfluenc a sobre la
estructura fam l ar, super or a la de cualqu er
otra nnovac n tecnol ca.
D  
 

c [r elev s n y v olenc a
c ‰ Publ c dad y consum smo
c 3 end m ento escolar
c 4 Estereot pos
c 5 elev s n prosoc al
c 6 bes dad
c 7 exo y sexual dad
c 8 abaco y alcohol
[ elev s n y v olenc a :

c ga re terada observac n de escenas v olentas en , repercute sobre la


ares v dad del n o, que com enza a re strarse ya a part r de los tres
aos de v da. Hay numerosos estud os que conf rman que el alto
índ ce de v olenc a telev s va nterv ene como factor mportante en la
determ nac n de las conductas mascul nas ( y femen nas ) v olentas.

c Cuanto mayor sea el t empo de expos c n a proramas telev s vos


v olentos , mayor es el r eso de asoc ac n de conductas v olentas en
n os y adolescentes.
c Hay una relac n pos t va entre la v olenc a en
telev s n y la subs u ente conducta ares va,
y como sost ene el ps cloo BANDUA,

 
        

       
  

  
‰ Publ c dad y consum smo:

c ga publ c dad t ene como objet vo est mular el deseo y


la neces dad de consum r , y los n os y jvenes
representan una mportante cuota de mercado.
c ga nfluenc a de la publ c dad en los n os es muy
fuerte, y puede cons derarse como un nstrumento
pel roso, ya que crea apetenc as y neces dades que no
se corresponden con la edad del n o o del adolescente,
y que en la mayoría de los casos no podrá sat sfacer.
c gas tcn cas publ c tar as abusan de las
l m tadas capac dades de anál s s y rac oc n o
del n o y su natural cred b l dad, por lo que
neces tan del consejo y la expl cac n de sus
padres.
3 end m ento escolar:

c Numerosos estud os real zados al efecto, han demostrado


que los alumnos que ven más de dos horas d ar as de
telev s n obt enen rend m entos escolares más bajos . ga
causa de este hecho se debe al retraso del proceso
madurat vo y a una menor capac dad de abstracc n,
cuando ex ste abuso telev s vo desde la edad preescolar. ga
UNEC ha llamado la atenc n de que el uso
nd scr m nado y mas vo de la telev s n, puede resultar
pel roso para el aprend zaje del n o, ya que   

  
 
,
   
 
 

     
4 Estereot pos:

c ga telev s n ha lleado a un estado de homoene dad que crea


estereot pos en su proramac n, modelos de conv venc a,
valores y act tudes, que no se corresponden con la real dad
soc al. gos n os y adolescentes pueden extraer, en consecuenc a,
un aprend zaje que no es el más adecuado en aspectos tales
como, la relac n con sus padres y profesores, sexual dad,
modas, al mentac n y comportam ento soc al.

c ga exaltac n de la esbeltez en modelos y presentadoras de ,


se equ para con el x to y la belleza, y este mensaje t ene tal
poder de atracc n que puede llevar a muchas adolescentes al
cuadro de     
5 elev s n prosoc al:

c ga telev s n puede ser un poderoso med o de enseanza o


aprend zaje en valores prosoc ales. ga telev s n es un
form dable nstrumento que puede favorecer la educac n,
la cultura, el oc o, la promoc n de la salud, y una conducta
favorecedora de la toleranc a, respeto y sol dar dad.

c ga telev s n supone un potenc al, que  


 , m


   
 

  

 m 
  m         , no solo para los n os,
s no para todo el conjunto de la soc edad.
6 bes dad:

c D ferentes estud os nd can que la prevalenc a de obes dad está


d rectamente relac onada con el aumento del t empo dest nado a
ver telev s n, en n os y adolescentes de 6 a [7 aos. Esto es
porque ver telev s n representa una act v dad pas va y porque
muchos telespectadores consumen d versos productos r cos en
calorías m entras ven la telev s n

c ga publ c dad tamb n nfluye de forma mportante. De los m les


de anunc os que ven los n os al ao en telev s n, dos terceras
partes son sobre al mentos con elevado conten do en calorías,
rasas, colesterol, azúcar y sal.
c e ha demostrado que por cada hora de
ncremento de v s n de la , aumenta la
prevalenc a de obes dad, tanto en n os como
en adultos; conv rt ndose el hecho de ver
telev s n en un buen pred ctor de obes dad.
7 exo y sexual dad :

c ñuchos adolescentes dent f can el mundo real


con lo que ve en telev s n, y como consecuenc a
de ello se produce un manten m ento más precoz
de relac ones sexuales, con un ncremento del
porcentaje de embarazos y enfermedades de
transm s n sexual.
c ga telev s n se ha er  do como aente exclus vo
de educac n sexual, y el sexo es ut l zado para
vender cualqu er cosa, desde un champú hasta un
automv l.
8 abaco y alcohol:

c gos anunc os de beb das alcohl cas van d r  dos


preferentemente a los jvenes con el claro mensaje de que el
consumo de alcohol fac l ta la d vers n y el x to con las
ch cas.
c Actualmente la ley prohíbe los anunc os de tabaco y beb das
alcohl cas de más de ‰ en la telev s n, no así los suest vos
anunc os de cerveza.
c Ex ste una relac n clara entre la v s n de c ertos proramas,
la publ c dad y c ertos v deos mus cales, con el consumo de
alcohol, tabaco y droas entre los adolescentes.
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c Aunque es una cuest n d fíc l de contestar, la respuesta parece ser,


no. gos pr meros estud os nd caban que los n os eran más
suscept bles, pero en la actual dad se cree que las n as son
ualmente vulnerables.

c ga mayoría de los estud os sobre el rado de nfluenc a de la , han


encontrado que los mayores consum dores de telev s n están en
mayor r eso que los pequeos consum dores.

c El t empo de expos c n es un factor determ nante, para la apar c n


de efectos adversos, como lo es tamb n el hecho de ver la telev s n
en sol tar o.
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c elecc onar los proramas cuando los n os son pequeos, y


hacerlo conjuntamente cuando son mayores

c ecordar que es nd spensable dos f car el t empo de v s n; no


más de una o dos horas d ar as, seún la edad.

c gos n os menores de dos aos no han de ver la telev s n.

c No sacr f car por la telev s n la real zac n de otras


act v dades ( jueos , lectura, deportes«etc)

c Hacer comentar os y crít cas sobre los proramas.


c Alertar a los h jos sobre los efectos de la publ c dad.

c No dejar a los n os solos frente al telev sor. Neces tan de los
adultos para juzar lo que ven.
c No encender la telev s n durante las com das, sería desaprovechar
para el d áloo, uno de los pocos momentos en que la fam l a está
reun da.
c El abuso telev s vo t ene una nfluenc a neat va sobre el
rend m ento escolar.
c gos padres no deben olv dar que sus prop os háb tos telev s vos
serán adoptados frecuentemente por sus h jos.

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