OBJETIVO: IDENTIFICAR LAS CARACTERÍSTICAS DEL TEXTO
CIENTÍFICO Y LOS TIPOS A TRAVÉS DE LA LECTURA PARA ESCRIBIR CORRECTAMENTE Y COMPARTIR CON LA COMUNIDAD EDUCATIVA. REFLEXIÓN TIPOS DE TEXTOS CIENTÍFICOS LA ERA NUCLEAR …Mientras tanto había aparecido otro combustible fisionable. El uranio se forma, al absorber un neutrón termal, el uranio, que se desintegra rápidamente para constituir el neptunio, el cual se desintegra a su vez con casi idéntica rapidez y forma el plutonio. Ahora bien, el núcleo del plutonio tiene un número impar de neutrones y es más complejo que el uranio, por tanto debería ser altamente inestable. Parecía razonable suponer que el plutonio, tal como el uranio, se sometería a la fisión con neutrones termales. En 1941 se confirmó así por vía experimental. No sabiendo todavía a ciencia cierta si la preparación del uranio sería práctica, los físicos decidieron arriesgarse a fabricar plutonio en grandes cantidades. Se construyeron reactores especiales en Oak Ridge y Hanford, estado de Washington, en el año 1943 con la finalidad de producir plutonio. Aquellos reactores representaron un gran avance comparados con la primera pila de Chicago. Por una parte los nuevos reactores estaban diseñados de tal forma que se podía extraer el uranio periódicamente de la pila, se separaba el plutonio del uranio mediante procedimientos químicos y se podían aprovechar los productos de la fisión, entre los cuales había algunos absorbentes muy poderosos de neutrones. Por añadidura los nuevos reactores tenían refrigeración de agua para evitar el calentamiento excesivo (la pila de Chicago sólo podía funcionar durante breves períodos porque se la enfriaba meramente con aire.)… 2. ARTÍCULOS DE DIVULGACIÓN CIENTÍFICA PASOS PARA ELABORAR UN ARTÍCULO CIENTÍFICO 1. Elabore un esquema de lo que se va a tratar: tema, tesis, problemática y método. 2. Elija un tema concreto y claro, que describa el contenido del trabajo. 3. Organice por autores según su investigación y anótelos después del título. 4. Revise las fuentes bibliográficas y su contenido, si son confiables colóquelos en su lista. 5. Redacte la introducción con las fuentes verificadas que aclaren el problema. 6. Distribuya los materiales y métodos para que se pueda producir el experimento. 7. Organice jerárquicamente según su importancia los gráficos, tablas, mapas conceptuales e imágenes que se utilizarán para dar mejor compresión a los resultados. 8. Escriba los resultados y su proceso lógico dando mayor comprensión al texto. 9. Reflexione si los resultados son correctos o no, compárelos con las otras investigaciones y corríjalos si es necesario. 10. Prepare las conclusiones con claridad. 11. Redacte las discusiones que podrían darse en su trabajo. 12. Anexe los agradecimientos si los cree convenientes. 13. Organice las referencias bibliográficas. 14. Revise minuciosamente el artículo. 15. Pida ayuda a un compañero que lea su trabajo y le haga algunas correcciones. 16. Puede cambiar el título si así lo quiere. 17. Redacte una vez más el artículo, tomando en cuenta las debidas correcciones. 18. Lea en clases y recepte opiniones. Hacer ejercicio mejora la salud mental El deporte es uno de los mejores aliados de la salud mental. La práctica de ejercicio físico, tanto en las actividades de la vida diaria como de forma reglada, contribuye a que nos encontremos mejor. Pero, ¿eso significa que previene la aparición de trastornos psiquiátricos como la ansiedad o la depresión? Hay múltiples estudios que responden de forma afirmativa a esta pregunta. Por ejemplo, el realizado por el equipo de investigación de gabriel rodríguez, profesor titular de la facultad de ciencias de la actividad física y del deporte (INEF) de la universidad politécnica de madrid, que se publicó en 2015 en revista de psicología del deporte. La principal conclusión fue que “los sujetos con niveles altos o moderados de actividad física total y en el tiempo libre presentan niveles de salud mental superiores a los de aquellos que realizan un nivel bajo de actividad física”. Además, los autores del estudio constataron que “el nivel de la actividad física realizada en el tiempo libre se relaciona de forma inversa con la vulnerabilidad a los trastornos mentales”.
La investigación se llevó a cabo con una
muestra de más de 1.400 personas de entre 15 y 74 años residentes en la Comunidad de Madrid, a las que se entrevistó para conocer tanto la actividad física que practicaban –en su tiempo libre, en el trabajo y en sus desplazamientos- como su estado de salud mental. El 15 por ciento padecían algún tipo de trastorno mental y el 19,8 por ciento realizaban ejercicio de forma insuficiente. Al evaluar solo la actividad física en el tiempo libre se observó que el riesgo de padecer enfermedades mentales en los individuos suficientemente activos (los que se situaban en niveles altos o moderados de ejercicio) se reducía más de un 50 por ciento cuando se comparaba con los insuficientemente activos.
¿Cómo modifica el deporte nuestro cerebro?
Los autores de esta investigación afirman que todavía no hay evidencias científicas suficientes que permitan explicar el poder del ejercicio frente a la patología mental. “Se ha intentado establecer una causalidad bioquímica del efecto de la actividad física sobre la salud mental, sin resultados definitivos”, relatan. No obstante, “se ha encontrado evidencia de que el apoyo social y el compromiso que se genera alrededor de la actividad física podrían explicar en gran medida los efectos observados en los cambios de ánimo”…