) soma,
ran medida la organi-
< 2 a fa sido presentado en el De-
OIOn & acién de la London School
9, 2000 y 2001. Cuando mi
ea
Andrew Barry, Howie Bec-
Didier Debaise, Cerard de
8, Noortje Marres, Shicley
uni y Edgar WI
a. Finalmente fue
ttrone, Isabelle Stengers y
ue aun pueden haser que-
trabajo es tan dogmatico. A\
Social alternativa ha sido presentada de manera
los leetores podrén optar por , distorsionarl
puto de que sea irreconocible o, lo mas probable, de
pletamente de lado, pero a sabiendas de lo que se tara Er
toa mi, al escribir este libro descubri las condiciones
baie les cuales podria estar orgulloso de que se me coneele
sociSlogo,
Latour, Brena, 2005, " vreelcten :
Gomo sefomer tm Faia de pasheor asoce cious’
y ooe® cles p hye ntrevedig acerca Gh mone
sekd on Rocasambley (0 Sraaf- Ones
feoria Gl Getor-cel Ed- Manat Buenos
Ayre. -
Introduccién:
como retomar la tarea
de rastrear asociaciones*
du sujet
EL TARDE.
o de este libro puede expresarsé de modo muy
‘cuando los cies ‘ales agregan el adjetivo “social”
in fendmeno designan un estado de cosas estabilizado, un
de vinculos que, luego, podrd ser puesto en juego para
ro fenémeno. Este uso
mientras designe lo que ya es
supuestos superfluos acerca de la naturaleza de le que esté
tnsamblado. Peto surgen problemas cuando “soc
signi tipo de material, como si el adjetivo
ble en tétminos generales a otros califica
“de acero”,
“de madera”,
“organizal
En ese punt palaora se des-
dado que ra designa dos cosas enteramente
f0, un movimiento en un proéeso de ensanblado y,4 REENSAMBLAR LO SOCIAL
segundo, un tipo es le ingrediente que supue
Ste ios macnn“ MENS 988 sume
Mi Propésito en esta obra es mostrar por qué lo social n
Puede ser considerado como wn tipo de thaternl ode?
Susstionar el proyecto de dar una “explicacién social” de 4
se ae ec? ae C0888. Si bien ese proyecto ha sido produean
srobablemente necesario en el pasado, en gran medida ha dejado.
gf Stl sracias al éxito de las ciencias sociales, Era sero etapa
de su desarrollo, ya no es posible inspeccionar los ingredientes
dere ha cmtTan en la composicin del dominio soeia Lo que
Senge hacet 8 redefinir la roci6n de lo socal regeesande ae
Senificado original y restiuyéndole Ia capacidad de rourear eon
crates aHevamente. Entonces serd posible retomar el objeto
imbicional de las ciencias sociales, pero con herranietens an,
‘decuadas a la tarea. Después de desarrolla tina lator ea
{ial examinar los “ensamblados” de la naturalea, cree mann,
ssamente el contenido preciso de lo que esta
‘el latin como del griego, Ia palabra ‘socio,
SinifiealaYeenca deb social™ La taprecde wa oe
faite salvo por dos problemas, a saber, el smine eseci yel
laceano “ciencia”, Las virtudes que hoy en dia les econocemes
las empresas centificasy ténicas guardan excasa relaerng > lo
Gu los fundadores de las ciencias sociales tenfan en mane ‘cuan-
do inventaron sus disciplinas, Cuando la moderna
en pleno auge, la
4, Esta expresién es ex
life gether ia the Worl
"A science of
ico -los ensamblados de la soc
fs exactamente lo contrario de cdma yo
Demoeracy~ fueron escritos rche
ia social alerrativa
(05 ego de realizar nuesto tra
INTRODUCCION as
longarse indefinidamente, sin dudas que pudieran trabar sus
evances. No se tenia idea de que su extensién putiera hacer coin.
cidir sus limites con los del testo de los intercamibios sociales, Lo
cue quejian decir con “sociedad” ha sufrido una transforma
Fo menos radical, lo que se debe en gran medida a la expansion
misma de los productos de la ciencia y la tecnolaysfa. Ya no esta
claro si txisten relaciones que scan lo sufivientemente especificas
como para que se las llame “sociales” y que puedan agruparse
para conformar un dominio especial qué funcioné como “una
sociedad”. Lo social parece estar diluido en todas partes, y sm
embargo en ninguna parte er particular. De modo que ni la cien-
ca ni la sociedad se han mantenido lo suficientemente estables
como para cumplir con la promesa de una “socio-logia” solida
Pese a esta doble metariorfosis, son pocos. los cientificos
sociales que han sacado la conclusi6n extrema de que tanto él
‘onjeto como la metodologia de las ciencias sociales deben ser
ados en concordancia. Después de haber caido en la desi-
lusign tantas veces, atin esperan alcanzar un dia [a tierra orometi-
dda de una verdadera ciencia de un verdadero mundo social. No
hay estudiosos mas conscien:es de esta dolorosa vacilacion que
guienes, ‘an pasado muchos aifos pratticando este ox
moron: “sociologia de la ciercia”. Debido a las muchas parado-
jas provocadas por este subcampo vivaz pero mas que ligeramen-
te petverso y a los numercsos cambios en el significado de
“ciencia”, creo que ha llegade el nto de modificar lo que se
busca expresar con “social”. Por lo tanto quiero ideat una defini-