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AGNES HELLER oo AGNES HELLER ganz1912 TEORIA DE LA HISTORIA Titulo ONginal: 4 The, Traduccion Javier Honorees ("tons 1982 Primera edici¢, pm ed in i faitoriat Fontamara, § 4 Ba sequent cant 986 uCiones Fontamara, SA. a ms Tercera ediciébn: 1989 Cuarte edition: 1993 Quinta edicién: 1997 ones Heller ISTRIRUCION) ; ES Foi AV. Hidalg, Cole i is S74. 1 piso, Colonia del Gan rene won Coyoacan, 04100 Méxi, “me ONos; 6359 7) T7y 659 79 78, Tac as * FAX, 658 42 g9 ISBN 968-476-0) {6 Impreso ¥ bech 10 en Méxi Printed and. Made in X fexeo SSS Be OBSERVACION En este libro he quetido evitar, en la medida de !o posible, las remisio- Nes y las citas. Las obras historiograficas y las del campo de Ia filosofia de Ja historia consideradas cldsicas forman parte del objeto de este estudio y, por consiguiente, a ellas me he referido cuando convenia, Sin embargo, he omitido las citas -a excepcién de algunas muy breves y significativas~ cuando se trata de autores y obras bien conocidas. Soy completamente consciente del hecho de que la nocién de “‘cldsico” es muy vaga y de que, en parte, depende de la postura del autor e} que incluyamos en este grupo a ufas U otras obras. Es comprensible que alguien no esté de acuerdo conmigo en considerar “‘clasicos” en este terreno a We- ber, Durkheim, Croce y Lukacs, mientras me olvido de otros. Por otra parte, sélo me he referido, fundamentalmente, a autores de quienes he to- mado prestadas determinadas propuestas y soluciones teéricas y, en oca- siones, también a algunos otros cuyas formulaciones, concisas € ingenio- sas, he considerado esclarecedoras en algun aspecto particular. Los problemas que he tratado en la presente obra constituyen temas basicos actuales y de ellos se han ocupado muchos eminentes estudiosos de nuestro siglo. Con todo y con eso, no me parecid adecuado incluir en la exposicién la recapitulacién de las soluciones propuestas sdlo para mostrar que no estoy de acuerdo con eJlas. Lo cual no impide que me considere deudora de todas estas personas, porque ellas han puesto el dedo en los problemas reales y me han inducido a considerarlos a mi ma- nera. Si menciono sus nombres con gratitud, no es cuestién de simple cortesia, sitio de expresat mi reconocimiento a la comunidad cientifica de ayer y de hoy. Independientemente de que haya 0 no citado sus obras y nombres, me. considero especialmente deudora de: Adorno, Aron. Apel, L.C. Becher, Berlin, C. Blake, E. Bloch, M. Bloch, W.B.Gallie, E. Gell- ner, C. A. Beard, Danto, Gurwitch, Gadamer, Gardiner, L. Goldmann, Habermas, Hempel, Kuhn, Luhmann, H. Meyerhoff, Murray, Meinec- ke, Foucault, A. O. Lovejoy, E. Nage!, O. Marquard, M. Mandelbaum, Mesarovic, Levi-Strauss, Pestel, Service, Schulin, Spubler, Troeltsch, Sauvy, A. Schmidt, Toynbee, Sorokin, Rusell, W. H. Waish, Wittgens- tein, Whitehead, Popper, M. Scriven, H. Pirenne, M. White, Leach, Sah- fins, K. Polanyi. . . Un autor y un libro sobresalen por el considerable impacto eyercido so- bre esta obra: Collingwood y su libro The Idea of History. Antes de leer- lo, en mi mente reinaba el caos con respecto al objeto de estudio; al ter- minarlo, sabia perfectamente los argumentos que debia esgrimir. Vaya mi mas profunda gratitud hacia este autor injustamente olvidado. Dedico este libro a su memoria. Quiero expresar aqui mi gratitud a Ferenc Fehér por su concienzuda OS

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