You are on page 1of 6
puesto. Ia coincidencia de los opuestos, hfe 433) trans-racional. Dios, y la eriatura en Ja + intuitivos. explican- io de todo gran época moderna, — na con Bacon de Vo. fia: havitle de Ceer sin te, Madi, (436.44 paced (Cap.A. "Las cuatm fases dala Plain yd totade actanl el enérgicn y puro Pero por esto mise a Tos méto- como al arables nine la obser- - BE porvenir dele tei ea en Ta que —16 — BRENTANO, Frmaseo. 04.4844, tad. Kt X-Babin”, Ja experienc’ » por este camino, También Leib- en ojo psicoldgico. Solamente ividad no le permitié dedi- sino Ia parte menor de su genial ente surgié una perturba- Ja que se presenté en la antigiiedad desarrollo ascendente incomparable 1 ora en- muchos respectos 6e- ienzo de la deeadencia griega. La re~ cjereia su antigno poder sobre dominio politico todo lo tradi- mbién a vacilar. Nuevamente 86 partes de 1a filosofia como me- tico fué reprimido de mano en to ina. El puro interés 160 evo por el interés: practice, Y se presentaron las nneias que en Ta antigitedad. Le: filo- sofia se trivializé y, a pesar de sus numerosos prrti- | no aumenté, sino perdié su significacién cien- as cons ‘én francesa y Ia alemana so fa Hama sar de su interna diversidad, una prueba de lo «de Locke, y a Ja segunda una t zacién de la filosofia de Leibnitz. Hume hace notar que los escrites de Locke apenas ya si se len —w— a eg erode] Woy “o1ueuoud oxsanu y atito;u0D 1 9s sesoo su] sepor aub esoRe soutau vy outcoyu09 wey, os o]UOLTUFONID ONsoNT ond oF vow ford soy opal nuormypodoad juny ‘soponf: 1 spun oT ozty ow th o8pe anor anb sorornf 1 [9p soar an “ony MOpIAd Jas Uys ouLUT risa sauoinisedoad vax oyp Y ofopyH pour ap ym 289 of ourstondaosa ye Hos zaqee aeurpy Uy —a- apuayta |2,, ‘estos uou ceuraye 4 ‘,xunuroo oupmmne TOpuaTT? [P,, “954 rp ‘epouaprso woo Sout fauoo wants eso B BYCUILLT “BAOUSPIAD fon onbuny “sortzo sourrysa sapena FO 9p “4 un apes oaqedoy, Ep? op a soong op ee too TL wo nqeuay LOY 04 pjonosa vp ssoumura gy 2ate U9 1098 vaaoneysup UST soumep snutep 08 ofp snug, By uo UE ap osnpur a or ae 9 soupnent am uo [> sorpour sod anb soe anb ymbe oy XSL mb oquouurisnt aie Jo ecto pay woo anna Jo vv a conn & ous sop ns 0 eand ayns oF pp exgaaay J 19 0 J sapuns® sop op £0} amauta juosajod scopy oonnd yo uo umatuop oygs ub ra insuperable, pe jutéticos a priori, sus vietoriosamente. ntigua de las ser rechazalos 1 magnifico si la mis decuada a la natura Pouo esto seria dos hipdtesis no fuese 1a tiniew eza de las cosas, al paso que la in antinatural. o, Kant intenta hacerla ph te de los ebjetos a los que se todos los obje- 0 tales se nuestra subjetivided. Por fos « priori habran de var esta parte de Tos objetos, y ¢8 ab- 1 gue vaya mas alli de posible experiencia, De nueva aparece come asible, ha- imposible um minio de una jain Kant, lo mismo que segtin Hume, jas supremas investigaciones sobre Dios, Ja libertad, el comienzo 0 10 ¢o- {acién o ilimitacién del universo, et- ‘a. Por mucho que el espiritu humano ‘onocimiento sobre estos puntos, Te seré posible lograr un saber sobse ellos. javeial en el intento un ct alié esto un éxito muy P: tin de manos del scepticism, si es éxito ninguno. Pues en rigor que haya existido el me- ar el damente objetos que sean fendémenos tamente, ‘en algin modo condiciona- muestros pueden ballarse —20— a de ser por nuestra subjetividad; stra en manera alguna que por ello se en el curso de los fenémenos los pero ell hayan de Thergamos en nosotros. Suponer ontece esto ex algo légicamente inad- in mas que misible; y si pretendemos edificar una ciencia sobre esta suposicién. nuestro proceder se ver sometido a . sein In enal Ios prineipios son la critica eseéptic: se Ja enenta de esta deb Sin embargo. Kant ni dad de su dortrina, Lo que més le preoenpa no es la d del saber nomenal, sino In con- ndonado a los eseépticos la pa mejor y mis sublime del conocimiento. Y por esto 1 ello un sustitntivo de otra especie. excogita pa os conocimientos sintéticos a priori son algo en que 1 ciegamente. Ia existencia de Dios, ‘I del alma, In Tibertad de Ia voluntad, tenemos que ¢ leo en que debemos ercer ciegamente. Son postulador de la razin pura préetica. No posce- mos evidencia ninguna ésbre sn verdad: pero nucs- tra conviecién acerca de ellos no cs por esto menos solvent 10 menor que en mi propia dimidad moral. Ast ¢ Kant habernos precurado también una certeza acer+ ca de I limes ideas. Pero a jcolis de Cusa atribu aan ine onecbible. asi tami “sanén_préctica” una tellectus un me parece que Kant atribuyé a su = 2 — g ft sgub 4 ops vy ugrornys | WY op sgndsop onto. b onomova x aL uy Ops vy oquouney, Au opy fora [oa do] “uPy 9; oub of Boy urs) LOPE JOG 9919 “vogue op a -efot ‘upiorsod ‘sodways sour op syduoo un wo -vou ‘opfeg op cosvd op aytos eum ap sgndsap < +o onjoa Jo ugnvdou vy op -eip osoaiioad [op op oo ap ofA aMoMEIUjoSqE oruoTUEUod uN a ap anaed oaainb poopy vpor pepava vy oqes owos ost fs op < ownyur se aod donpoados 93 oni o dso X ppanyeu o, sryumpsuad un ous $0 ou pet opunut jo onb vange onb ‘eynposqe vyjosoyy us u poopy opaons fi 5 0 ougit -030]5 Bp & oIELLLOD AvYWs Pa goad 20 ‘ou tznduout offe viuon wo ojUdU {Hg © A “PP ¥ voanpuos ond o. Juju aponb ow onb opout [st sap esaad dqoNRNALOUAS OYOLUIEHOD 9p OpouE uN “PMP & stsay ugoMIUy ns woo iuyjoyog “yor v tsIs0iNE ‘SISO BL op OpoiguE us wos “IYOLE Op paquos Jo aod *wruPMiafy Wo “SBs09 sey arxoady © ospous “ur cmypu spat opom un t 9s! JOY 9p Lwsvaus opuNsos Je ua une oub oyone op ‘prog, tod 0 pp tod wosongisord 0 “s0a1x spwoy, paisa & puasduta 0 so] sunuoyyy “SozuoywtoD sns Wo ouIS vu 189 OU UYKIOKOL HISO ‘OHAwquD WIS 389 opuniios Jo I, Jeanjouny spun ‘sosopsul spuropy uo ‘vouoproap e[ 9p -uoy ugioovad vf ap vaody v[ Uo oxdto1s zapaons ojous ouroo ‘oproouses) olumpeamvunuy enuonous os somstondoosa Jo twiodns vied oquompvat aystos voip and nb eyo wo Avy owns opoy, “opqYor9U! vYoude.0 pesmoemeoese ne _cpreemeeremnnner ann rr el eq Kant? ;No iencia que » on la historia de que ak atamente despw guien h In que antes? a éste y otros muchos argumentos contun- fiar por Ia opie hremos de blica contempa rumente no. + rejnvence también su inicio ne puede poscer opinién priblen’ contem- inistra nniil- jonas se ha une asién de mm hoy vasallaje al inhumano rsehe. Y én, respec ° Tos iz ores se han Kant entera- piensa acerca > v To del otro. ¥ mas 4 Jzunos intelee! inién sobre Kant. exela- conspienos, mos exda uno con na les, ante los ales manifest, man: “;Cuanto me alegro de ofvselo a usted! Es exac- . Pero no se puede manifestar.” amente =a Yo no conozco semejantes respetos humanos, An- ° como un deber cientifieo confesar verdadera opinion en 1 cl mundo actual. Fs también provechoso ravancar la filosofia vol tes bien, con: paladinamen a cuestién 1 ver eémo en Ios ii ndo a Kant 1 nido el menor éxito. ¥ emo aquellos que Jo han clegido por maestro se ven forzados al mismo y que hacer d Kant, Mientras ensalzan algunas de sus obr: cialmente Ia Critica de ta razén pura. dese Jos sobre otras. esp gan pe almente sobre Ia Gritien de le rasén préctien. Asi Schopenhauer; asi también—sc- fin decia al principio—nmestro Lorm. Por tanto, re- sulta que no s ente los demas se han extraviado completamente después que Kant les mostrara el ver- dadero camino, sino que también el propio Kant ha vagado orrante después de haberlo encontrado. ;Ni es esto alzo solremanera extraiio? incluso de Ja Critica do ta razén pura © dejan partes considerables como inaceptables y sin valors y en aquellas que se mantionen yalidas, dese de haber cribado varias veces 1a doctrina, 20 precisan ciertas_ mo jonces con ciortas intuiciones y jones, a que condure Ia moderna cieneia natn- ral, como, por ejemplo, con In teorfa de la energia especifien de Ios sentidos de Juan Miller, 0 con Ja hipstesis de reprecentaciones y juicios hereditarios, 25 — —B- bydoag “uy opssu0 ap ousip adware so iyaouo, {9 PX oles “vabune “sop soa So & quay [ oub of 20g, “suso9 sean aepuoade onb sey opuop Wo opor aaqoe 9 waLpor

You might also like