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El discurso televisivo ESTRUCTURA FUNCIONAL Pero es necesario todavia jvstificar nuestra propuesta mostrar en qué medida cl conjuuato de la programacién constieuye tuna unidad diseursiva de, rango superior a las unidades que contiene y capaz de someterlas a su propia logic, Siegfried Schmidt ha definido asi la nocion de texto —y recuérdese que, en el ambito de la «lingilistica textual» las nocio- nes de adiscursom y «texto» son usadas indistintameate: ‘eseructuras funcionales de organizicién para les consticuyentes cuya importancie es sociocomunicativa! El eoncepto de funcidn combnicativa resulia aqui fundamental pee tsicea dd ae Se See Sélo por la funcién iloetiva (wociocomunieativa)reaicad en una sitwacién comunieativa, provocads por «nm hablance percentile para los interlocwore, um eanttlad de cnuneaco. nes del lengunje se convieete en un proceso de texto (una tmanifestciin de textuaidad) coherente, regulado por reglis onsueuives y que funciona sociocomunicaivanteme con La actuacién de 1a insritaci6n emisora tele: sect : iva como destins dor del conjunto de mensajes que constituyen Ia progeamacién y aque son aftecidos coma tal conjunto las eprerentacionet» distor © Sexi J, Sebi, Tora af txt, Madd, Cited 19:8. pg os 2 Se Scum op yp 93 igs 30 de la progesmacisn, al igual que hts wdespedidac» que ancicipan la programacién de! dia siguiente lo acreditan de manera sobrada— alos telespectadores permite reconocer en Ia progrimacin televi vi esa funcién sociocomunicativa que caructetiza al diseurso Por ello mismo, la considerable longitud y complejidad de ‘estos discursos:no es obsticulo pata su teconocimiento como tales, Schmidt ha insistido en ello de maneta’ precisa al referisse a los discussos lingiiisticos: [La catacterizacion es indepentiiente del niimera de elemen- tos y la complejidad de la enunciacon, De esia. forma el problema de que longitud 9 complejidad ha de tenet ums Suession verbal para que sea un texto, cs totalmente superflao, i la definicion del texto 4e renliza por medio de Ia fonciin FRAGMENTACION Nada se opone, por tanto, a que existan diseursos compuestos por gran nimero de elementos y que presupongan formas com- pleas y variadas de articulacion enunciativa "Nada se opone, tampoco, como ha sefialado Garcla Bertio‘. a que estos discursos se hallen a. su vez compuestos por otros discursos de orden inferior, los diversos programas, por ejemplo, Pero es sin embargo nevesario que estos elementos (consisten- tes en diseursos de orden inferior como Los programas, 0 en fragmenios carentes de entidad discursiva autonoma, como los segmentos de continuidad) se hallen sometidos a unt fuerza integradora de orden superior constituida, en nuestro caso, por I programacién como estructura discarsiva autSnoma. Porque, como ha indicado Schmidt: Los textos parcales son componentes integrados, 0 subsiotemas, en e) sistema de conjunco atexion; se definen pos su funcidn en el sistema de coajuaco del texto (sistema de ‘cohereacia)’. Esta fuerza integradora ha de someter a los textos parciales a las exigencias de la estructura de orden supetior que constituye el FS Selmi, #6 city pigs 135 Javon 8 Baki yA Cece Bei, Lines di! texto, Madd, Aberto Cored, 175 Pl 56 PS semi, op i, pigs 136 a fexto global a costa, necesariamente, de uns ciert violencia que felativiza su autonomia discursiva En el imbito del discurso televisivo, esta fuerza integradora se ‘maniflesta prtotitariamente en ia intensa fragmentacin de la que son objeto los textos parcales para someterlos a las exigencias de funcionalidad que les asigna su lugar en la estructura general de la programacién. Enumeraremos, a continuacidn, algunas de las formas mis caraceristicas de este proceso de fragmentacién: 2. Las emisiones televisivas son las primeras en poner en. ccuestién ls autonomia de los programas que contienen. De hecho, estos son constanemente frigmentados, ya sea por In introduc. ciém en sa interior de mensajes extranos, spots publicitarios, informaciones de dleimz hora, advertencias Sobre futures proge:. 2, Divisida de multitud de programas en capitulos u otros tipos de subunidades emitidos periddicamente (telefilms, teledis~ 108, informativos, concurvos..) y, por tanto, fntecrumpidos por Programas toralmente diferentes. 3, _Existe cierto tipo de programas, como los informativos latios y los magazines, euyos limites —esos mismos limites que debieran definir su entidad aueénoma— son netamente indeteitni. fables y que, sin embargo, se hallan compuestos por subunidades internas ——«noticias», «entrevistass, «niimeros musicsles», ete. dotacas de uaa autonomia mucho mis fuerte 4. Algunas de estis subunidades, como las «noticing y Glertos spots que constituyen unidades de campaiias mas amplae, configarin mensajes que, sin resperar las frontetas de la emision iaria, se prolongan durante un tiempo variable de duracién dificlimente determinsble. Una unidad temitiea (por ejemplo, las clecciones en Estados Unidos) se prolonga asi a lo largo de una serie sneermitente de telediarios poseyendo una continuidad ce la ue carece el propio marco programitico (el telediatio) y pose yendo ademis un punto final bien preciso. En ciectas ocasiones cada vex mis frecuentes—, fa contiouidad de esta unidad puede romper incluso el marco programttico desarrollindose a través de diversos programas Teldiarios, En partada, Punto y sparte... (Y ‘abe todavia le posibilidad de un diseflo programatico intermedio: un deserminado debare pucde comenzar en Tetevision Espaiola y prolongarse luego en Redio. Nacional) 5. _Existe ot:0 tipo de programas que, aun poscyende limites femporales més precisos, carecen de toda autonomia. te 32 pues su: dnico objeto es remitir —anunciar, presentar, publicitar ‘ovros programas de la emisora, 6 Otea forma de violencia habitual sobre la autonomin de los programas consiste en la referencia, desde el interior de wao de ellos, # otto w otros programas de la propia emisora 7. Un amplio grupo de segmentos de Ia emisi6n no pueden ser en ningiin caso considerados camo mensifes auténomes, pues se explicitan como fragmentos carentes de toda autonomia discur- siva que reducen su funcidn a la de garantizar la conexién entre Jos segmentos que les preceden y les siguen. Nos referimos 2 los Mamados «segmentos de continuidad» —cartas de ajuste, cabeceras de programas, presentaciones de la programacién diatia, temas musicales 9 visuales de continuidad, etc. La evidencia del fendmeno de fragmentacién a la que el discurso televisivo somete los programas que constituyen sus unidudes permite definir éstos, desde Ia perspectiva de la semidti- G4 textval, yale aetlerdo con la exprenion eseogida. por Schmidt, ‘como intextos las porciones de enuncaciones que realzan actos. leu wensinmgndes 7 ciercocitics sc Unum itexeh aanblen te sone acini co nunc cones por los demi inrerccutotes, evo deste la pesspectiva 4 tablace perenecens un ato docutve) son vids como exten continuo 1a referencia contenida en ests cen a los textos en que incervenen vats iceflocatores en fori de-un dilogo multple revli por lo dems apropladn pun ponmar el sects «politicos i hunch tev ats ene anc por execs de programas de debate o encevitas como, nua vel statu ‘ole pido, od ln miles y ry lvetlacndea Seegas crntitvas elon diferentes programas CoHmRENCIA TEXTUAL DE SUPEREICIE Junto a la funcidn sociocomunicativa In coherencia extusl constituye la segunda categoria fundamental para la definicion del discurso, Teun A. Van Dijk la hn definido a TIPE yA. Gai Ber 9p yi B Iniuidivimente, la cohercncia es uaa propiedad: semaatica de los diseursos, basacn en Ix interpretacion de cada frase iividual relacionads eon la interpreracién de les oreae frases? Por su parte, A.J. Greimas se ha referido a este fendmeno de cohesion del diseurso en términos de isotopi La iteratividad —a lo largo de une cadena sinsagmitice- de clasemas que aseguran al discurso-enunciado su homogerel dad, Ta isotopit 0 cohetencia cexrual es, en cualquier caso, una propiedad seminties det diseurso que, como ha sefialado Rastier?, pueile manifesrarse en cualquiera de sus aiveles de organizacién Sus huellas, por tanto, deben poder ser reconacidas en el Ambito de estructutms de superficie. Garcia Berrio: La coherencia o congrvencia de Un texto es una nodién... {que & nivel de In forma cestusl, se eraduce en un conjunto de ‘mecanismos lingiisticos de cohesion", ste, on cl Ambito de las emisiones celevisivas, toda una amplia serie de clementos constitutives de la programacion que sin embargo earecen de la autonomia —relativa~ discursiva de los programas. Nos referimos a los segmentos de continuidad: cartes de ajuste, eabecerts de programas, presentaciones de la progeimacion diatia, temas musicales 0 visuales de continuidad, etc, Su. mera existencia, carente, como hemos dicho, de toda antonomia diseur- siva, e8 ya una prucha inequivoca de que In programacién posce los mecanismos semidticos ce cohesi6n que ponen las bases de su fa. Ademis de actuar como constantes acutali: dores de la funcidn fitiea del Lenguaje (Jakobson)!!, constituyen inequivocos conectores. semidticos. Algunos de ellos, como los temas musiciles o visuales de continuidid, actéan a Ia vex como elementos de puntuacion y como elementos copulativos (y en tal caso deszmpeian un papel Feu A. Ma Dit, Teatro, Made, Cited, 197, pg # AJ: Grinas y J Counts, Sse Dedoaete moos thet aga, Madd, Grelos ofa, pig 90 ” Vraesow Rarer, Siseoatiee des Wotoplny, en A.J. Gila otton, Ele de hip Pci, Laos voy iy A. Garg Beto, 9, pig 9, (oman Jakeotoy, Ena & npc art Madd, Seb Baral, 197. bien semejante al de lis conjuaciones lingiiisticas), Otros, como lay presentaciones de la programaciéa diasia, gon en todo equiva- leares a los indices que sintetizan las diversas partes constieutivas de un discurso literario. Pero el fenémeno de la continuidad ap debe reducirse a estos elementos, Hay que considerar, para comprender toda su majgni- ud, otros fietores relevanter como to 1. La referencia, desce el interior de un programa, a otro a octos programas de In propia emisora. 2. La intercalacion, junto a los spots publicitarios, de otros segmentos discursivos que tienen. por objeto publicitar fururos programas, . La existencia de programas, a veces de duracion considera bie, que tienen por tinico objeto presencar y publicirar el eonjunto deh programacin semanal. 4. La presencia recurrente de ciertos fragmentos {spots publi- citatios, segmentos de continuidad) 0 ciertas figuras (presentado- res, locutores) Pero no pretendemos trazar ahora un inventario. sistematico de los procedimientos de continvidad —y de cohesion— de: los discursos televisivos. Nos interesa, en cambio, anowr que todos cllos, por su reaparicion constante a lo largo de la emision, actualizan ca cl coujunto programitico el. piocedimients gené- rico de la recurreacia, que consiste, como ha sefialado Gateia Be hh presencia peridica [en el rextol de-uno o varios elementos [que] va determinando su coptinuicad in:terrumpids!2 Y constituyen, por ello, mecanismos conectores que garanti- aan la coherencia del discurso global en lo referente a sus estruc- turas de superficie FRAGMENTAGION ¥ CONTINLIDAD ‘Todos estos hechos ponen le luz dos cucationes de excepcio- ral importaneia: por una parte, el grado de fragmentacién al que se yen sometidos Tos progeamas que configuran una programa cidn televisiva; por otra, Ia importancia euantitativa y cualitativa J Peay A. Gave Beri a. op 6a 3 del fendmeno de 1a continuidad, constitwido por una gran divers: dha de segmenios que, aun eneclendo de toda autotest Sea F800 Pudiendo, por tanto, set considemdos propiamente como discursos— constirayen, a igual titulo que los-diverons Programas, elementos de ta programacién, Desde el punto de vista det nndlisis textual, lt ragnitud del $i no el complements lgico, de la sistemitica frapmenter ue son cero tos itetos revi nen HaBMEMAIN Ce Kei tt Sstemitica fragmentacién, junto a la indefinicion de limites de gran parte de los progmmas, testifies de mececs inequivoca el sometimients de cada discurso pardal al device Blobal progremitico —y 1 sus propios eviterios de funder Gad, ba continuidad acti de inmediato como el procedimenty gue elgn os feegmentos en fancica a la exigencies uo ya de los textos parciales de origen, sing a las de la estraenuta general de le programacién, " mec ‘Ast, los intextos se nos descubren como fagmentos a su yeu fragmentados del (macro)discutso televisivo. JNos encontramos a3i con una sistemitica de la fragmentacion a la que eada uno de los frapmentos elementales —~ee losin cca uno de los fragmentos en que son fragmentados los intexton dad discursive de los programas diferenciados temite al fenoneey de la continuidad, como éste remite a aque. Encontremos aqui, por otra. purte, un apo is por otra parte, un apoyo suplementatio a auestra propuesta de consstuir el Discuiso Télericivo en obi prior de In inventigtcin semidtica wobee la television, ues si este mucroclisentso aflora a la superficie de una manny bien definide desde que afrontsmos de leno le cusiron wen Continued —y au reverto, lade la Gaginentacién—-, ee tambalen to que hasta ahora se aceptaba como la evidlencia indiseutble: configuracién de la emisién televisiva como el encadcoamicare aditivo de discursos auténomos bien dliferenciadon: El dato empirico de la constante fragmentacion de 6 Guando no el mis decisivo de ls identfoaion de am limiter Por tanto, de su propia ideatidad discursiva, nos obliga, en sume 36 a considerarlor como frazmentos a su ver fragmentados. de esa eatidad discarsiva que identificamos como el Discurso Televisivo, Un. macrodiscusso para el cual i. siguicra llama ae games, tiene ur, secret; turalmer * ou puerta; Fang resuelve marado,. Natuanlmente bay vasiosdesenlacce pout: Fan peehe 1 incruso, el intruso puede matara Fang, ambos pueden salvarse, ambos pueden moris, ete, Ea la obra de Ts'ui Pia, todos lor devenlaces ocurren; cada uno es el punto de partida de otras bifuresciones. Algona ver, los senderos de ese aberin- to convergen.. Tendencia interna que, cle realizarse, conduciria, de acuerdo con Ja teoria de la comunicacién, seyrin la cual informacion se define por lis elecciones operadas sobre un cOdigo preexistente, a Ih ausencia —por anulacion— de toda informacion, de todo sentido. En suma: ¢l Discurso Televisivo tiende a evacuar el sentido, En sunna: el Discurso Televisivo tlnde a aacuar ef sentida y ‘hacer que ol raado (ue rida renitiple 3 consante) eeepe 1a lygar. Anotemos, en todo caso, que lo que ayul decimos, aun cuando responde 1 lis lineas dominantes de evoluciéa de la televisiGn mundial, se manifiesta de mancra mis contandente en las sociedades democriticas occidentales. En las cotaliterias, en cambio, esta (endeneia dominante, aun cuando tiende a manifes- arse progeesivamente, se halla concrapesada por la voluatad del Zstado de erigirse en. hien explicivo sujeco de la enuneiacién, tanto por lo que dice (cuidando de manera obsesiva su imagen), como por Io que calla y censura. Se produce asi una notable paradoja: el discurso televisivo de los paises totaltarios, en cuanto discurso de Estado, es informati- xo (en tanto que censura) mientras que el que cafactetiza a las democracias occidentales no lo es (porque lo dice todo desde todos los iingulos), (Lo mismo, evidentemente, diremos de los sstedos de excepcion televisiva; pignsese, por ejemplo, en el breve, pero no por ello menos ominoso, de la tarde-noche del 23-F.) ExeNenscion ‘Todo discarso habla sobre-algo —su hipotético referente—, pero puedle ser concebido, también, eomo lt palabra de alguien de aquel, precisameate, que roma lt palabra. La teorla de la enunclacida se ocupa de ello ea términos de sujeto de Ia enuaciseién: la figura diseursiva que, independiente meate de cualquier eventualidad peicaldgica 0 biogeéfies, puede ser deducida del discurto entendido como ua gran envinciado. Tones Las Borest, El jai ea srs gu bie, Pras omplte, vo atedora, Brujuea, 186 pag «70. 43 r No se reflete a scto del diseurso individeal en. que es Pronuncindo, y cuyo lecor designa... instincia del discarse, ANE Ro tne pera ceerencia que Ia actual. La realided la que femice ea la fealicad del discurso, Es en la instareia 4c] dlvcurso en que yo designa el locutor donde éste se enunca Camo eujeton. Asi, es verdad, al pie de la tetta, que el Bitemenco de ls tubjetiviad eatéen ef ejericio dela lengus Por poco que se picnse, se advertira que no hay otto weston, nnlo Objetivo de Ia identidad del svjeto que el que ail x ea a] mismo sobre sf mismo! Como ‘efi’ Renvenisie, cl papel desempenando por el len ampli, dela subjcsividad— del individua sea ant el discurso, una ver que el individu » del aparato formal de Is enunciaeitn, Por ello, el estudio de ht problemitica de tw ehuneacion

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