Alas mujeres séricas que me regalan su amistad quiero
agradecerles su cari y eva capacidad que tienen para hacer
luminosos hasta mis peores momentos: Irma Gutiérrez, Celsi
Garefa, Yolanda Suite, Dori Santolay2, Anna Dalmau, [nma
Muro y Pilar Velasco,
‘A Luisa Antolin y Rocfo Leéa haberme enseRado todo lo
que significa ser Feminina,
‘A Pedro Adrados sus portacionesal eapitula de a mascu-
lnidad pero sobre rodo, le agradezco su confianza en la yevo-
lucién permanente
‘A mis padees todo, como siempre
Yami abuels el ejemplo de una gran mujer
ne
1
QUE ES EL FEMINISMO?
La metifora de la gafas violetas
‘Me declaro en contra de todo poder cimenta~
do en preuicios aunque sean antiguos.
Many WOLLSTONECRAFT
Elfeminismo esunimpertinente—come lama laReal Aca
emia Espafiols a todo aquello que molesta de palabra 0 de
obre—: Esmuy él hacerla prueba, Basra can mencionarlo.Se
dice feminismo y cual palabra magia, inmediatamente, mues-
tras interlocutores tuercen el esto, muestran desagrado, se
ponena ls defensivao,directamente,comienzala reriegs,
{Por qué? Porqueelfeminismo cuestiona el orden estble
cido. ¥ el orden establecido esté muy bien estblecido para
4uienes lo estableieron, es decis pars quienes se henefician
dled
Elfeminismefuemuy impertinentecoande naci8. Corse
Jo XVilly los revolucionatis ¢ilustradosfranceses —tam-
inlasfrancesas—,comenzabanadefenderlasideasde sigual-
dd, libertad y faternidads, Por primera vez en la historia,
secuestionabanpoliicamence los privilegiosdecunayaparecia
clprincipiodeigualdsd. Sin embargo,ellas, las quedefendieron
-B«que ros derechos inlufana todos lo sceshumanos —am-
bisa slashamanas—,terminarones le guillosina mientras que
cllosigueron pensano que el neve orden stablecido sign
ficabaquelasibertades ylosdetechosslocorrespondianalos
‘varonts, Todas a libertadesy todos os derechos (politicos,
sociales, econémicos... As aunque esstn precedents femi-
stat antes del siglo vt, podemosesableee-que,comodice
‘Amelia Valeieel, el femiaismo es hijo no querido de la
Tustin». Esenesemomento euando secomienzaa. hacse
las preguntasimpentinentes:,Por qué estén exchidas arm
res? gPor qué los derechos sélocorresponden la mitad del
snundo, los varones? 2Déndecstéelorigen desta discrimins-
«idm? Qué podemos hace puta combate? Preguntasqueno
hemos deadodehacee
El feminism es dscurso pol
que se basa en jus-
ctea politica articulda
por mujeres que tras analizarla realidad ena que viven toman
sanciencia de las discriminaciones que sufren port la tniea
«azn de see mujeres y deciden organizarse para acabar con
clas, para cambiar la sociedad. Partendo des realidad el fe-
‘nism se articula como filosofia politica y, al mist viempo,
como movimiento social. Con tes sighos de historia asus es
paldas, ha habido épocas en ls que a sido més teora politica
Y ras, como el sufragismo, donde el énfasis extavo puesto en
movimiento social
Peso ademas de impertinemte, 0 precisamente por seo,
feminismo es un desconocido, , dice Amelia Val-
creel Ambas evestiones son fasas. El trabajo feminists de los
‘ltimos altos ha proporcionado material suficiente como para
rastrear Ia historia escondida ysilenciada y eecuperar loetex-
‘os y la aportaciones del feminismo durante todo.ste tiempo.
ticia, BL feminiemo es una tora y pi
1. VALCARCEL, Ama, La memorecletos le rete del fon
‘mo, Nasions Unidas Suniage de Chil, 2001, pi.
Hasido tan beligerant el oculamientodel wabsjofeministaa
lo largo dela historia gue saberos que este libro, cn el paso
del tiempo, a guedaré viejo no s6lo por las nvevssaportacio-
‘es, cambios, értos sociales o nuevas correntes que icin aps
recendo, sino porque el trabajo de recuperacién de nuestra
bistora sade ala genealogia del feminine nombres, accio-
nes y textos desconocidos hasta ahora
Sobre le segondaafrmacién, que xyaesté muerton, mocho
rns tememos que corresponde mis a un desco de quienes lo
dicen ques una eaidad. Todo lo contario. A estas altos de
Ia historia Jo que paceceincorrecto es hablar de feminismo y
no defemninismos, ea plural, haciendo as ineapié en as dife-
Fentes corrientes que surgen en todo mundo. De hecho, po-
demos hablar de sufragismo y feminismo dea igualdad odela
dliferencia, pero también de ecofemiismo, feminism instira-
ional, iberfeminismo..y podefamos deterernos tanto tn cl
feminismo lasinoamericano como en lafricano ene astico
‘9 en el afroamericano, Como se cantaba en las revoluciones
centroamericanas del siglo XX: «Porque esto ya comenz6 y
nadie lo va apatar» Y es que uno de les perfls que diferen-
canal ferinismo de otras corrientes de pensamiento politico
«es que est constituido por el acer y pensar de millones de
tnujeres que se sgeupan o van por libre y estén dscrinadas
por todo el mundo. £] femme es ua movimiento no dirigi-
doy esessmente, por no deci nada, jerarguizade
‘Adernis de see una teoriapolitia y una prctica social, el
Feminisoyo es mucho més? Fl discurso, la reflexiGa y la préet-
ca feministaconllevan también una ica y wna forma de estar
tn el mundo. Latomna de conciznciafeministacambia,inevita-
blemente la vida de cada una delas mujeres que seacercana
Como dice Viviana Erazo: «Para rillones de mujeres [ele
pismo] ha sido una conmocién intransferible desde Is propia
2. Elfeminismo,porropuestyno diene mada que ver con elmachisno.
Ver explo 14, ePruiciosy pica.
—15—biogetiay circunstancia, y pars la humanida, a més grande
conteibucign colectva de ls mujeres. Removi6 canciencias,
replantes individualdades y revolucioné, sobre tado en ells,
‘una manera de estaren el mundo.=?
[Angeles Masteetaexplie esta aventura personal com tras>
fondo postico en su libro El cielo de los leones: «Las puectas
‘quebajandel ciclo se abrens6lo por dentro, Para eruzarlas 2
necesrio haberio antes a oto lad con le imaginacin y los
deseos [] Una buena doss dela esenciade est valor impres-
cindible iene que ver, eungue no lo sepa o no quieraacepear
lo un grupo grande de mujeres, coo la tors y lapréctica de
unacorriente del pensamientoy del aecign politicaquese I=
1afeminismo, Sabor estarasolas con a parte desosotros que
nos conoce voees que nunca imaginames, sueRos que nutes
aceptamos, paz que nunca llega, es un privilepio de laestixpe de
los milagrs. Yocreo que ese privilegio, amy a otras mujeres,
nos los dio el feminismo que corria por el sir ar os rimeros,
afios stents. gual que nos dio a posibilidad y las fuerzas
pata saber estar con otros sin perderlaindolede nuestrs con
viciones. Erronces, como ahora, yo queria ir al pataso del
amor y sus desfaleos, pero también queria volver de ahi duets
de mi, de mis pies y mis brazos, mi desafucro y mi cabeza. Y
1p0:03 de esos descos hubieran sido posibles sin la voz, terca y
gener0%3, dl Feminismo, No sé de su exstencia, sino des
complcidad y de su apoyo"
Ladispara sobree! feminism comienza consu propia de-
finicién. Por un lado, como dice Vitoria Sau: «Atareadas en
hace feminisma, ls mujeres feministasnoseban preocupade
5. BRA20, Vivian -Feminsmos fin desig ana eens sin a
menor Fenpres.
1 MASIRETS4, Kgl, ta do lo ene, Ses Bara, Boer,
2004, pigs 533
demasiado en defiiro.»”¥ por otraladosabidoes que quien
viene el poder es quien da nombre als cons. Por ell, el emi
siamo desde sus origenes edo scutando nuevos técminos qe
drintdrieay sstemavcamentshansido recha2ados pore aito-
fidade,porel «poder», neste caso, porla Real Academia Espa
ola RAB) cuya cautoridade hace déeadasqueest{cuestion
dlaporelfeminismo. Ast dice el DicionarodelaRAE jens
‘igésima segunda ediiGndeato2001’ «Feminism: Doctina
socal favorablea la mujer, a quien concede capacidad y dere-
chos reservados antes alos hombres. Movimiento que exige
paralas meres iguales derechos que pralos hombres» Tres
silos y ls academicos ain no se han enterade de que exacta-
seateeso eso que no esl feminine. Labase sobre laquese
thaconetrudo coda le doctina feminists en sus diferentes mo=
dlidades x precisamente lade exablcer ques mujeres son
actoras desu propia vida y el hombve nes ef model el que
quipararseniescfneutoporel quese puede ilizar sin rubor
varéncomosinSnimods persons. Penseréls Academia ques
‘mujereeno tenemos derschoalaborte, por ejemplo, puesto que
Joshombret no pueden sbortar? Sigiendo a Vitoria Sa, sel
feminiso e un movimiento social y polico que se inieia
formalmente a finales del siglo XVI y que supone a toma
de coneienca de ls mujeres como grupo o colectvo hus
1, dela opresion,dominasisn,y exploacin deque han sido
¥20n objeto por parte del colectve de varones en elena del
piriieado bajo sus ditntas fates hstrieas de modelo de
produccéa lo cualla moevea aaccion paral iberacin desu
exocon odssistransformacionesdelasocedadqueaqudllre-
quiers# ¥
Ta la definicisn se ace hincagit ene primer paso pasa
center en el feminism: la voma de coneiencia. Imposible
5. Sau, Veer, Diccionario idol fois vo, eta Dace
oon, 200i 12.
“thio
oesolucionar un problema si antes ést no se reconace. De he-
cho, para Ana de Miguel ecomo ponen de rlicve las recientes
historias de las mujeres, éstss han tenido casi siempre un im-
portanteprotagonismo en lis revueltas y movimientos socia-
Tes, Sin embargo, sila partcipacin de as mujeres no es cons-
ciente de la diseriminaci6n sexual, no puede considerarse
feministar? Por esonos gusta utilizar l metafora dels galas
violets que ya de por eserito Gemma Lienas ensulibro Et
diario violeta de Carlota un estapendo manval para jovencs.
El violea es el color del feminismo. Nadie sabe muy bien por
qué. Laleyeada cuenta que se adopts en honor alas 129 mu-
jeres que mieron en uaa fibria text de Estados Unidos en
1908 cuando el empresario, ante la huelge de as abajadoras,
prendié fuego la empresa con todas las mujeres dentro. Esta
‘esa versin mis aceptada sobre os origenesdelacelebracion
®
El feminism esa iterna que moeste ls sombras de to-
daslas randesidens peta y desarvolladas sin as najeres y
enocasionesacostadeells: demoeraca, desaroloeconémi=
0, benestar juste familia, religion
Las feminists empuitsmes esa linterna coa orgulle por ser
la herencia de millones de mujeres que partiendo de a sumi-
siénforzaday mienteas era atecadas,aiculizadasy vilpen-
diadas, supieeon constr una cult, una étics yuna ideolo~
syanuevssy revolucionariaspaa enriquecery emocratizar el
undo,
La llevamos coo orgullo porque ss luz es la justicia que
itumina las habitaciones oscurecidas por la intoleancin, los
prsjuicios y los abusos. La llevamos con orgullo porque 30
luz nos da la iberead y Ia dignidad que hace ya demasiado
tiempo nos robacon en detrimento de un mundo que sin no-
sotras no puede considerarse humano,
1, Masta, Angels op. cit pig 54
Te2
LA PRIMERA OLA
Comienza Is polémica
[No conozeo casi nada que sea de sentido co:
iin. Cade cosa que se dice que es de sentido
‘camiin ha sido producto de esfuerzos yluchas de
alguna gente por ell,
AMELIA VALCARCEL,
Alsip Xvi seleconoee como siglo del Thstracisa, el,
«Siglode aslcess..y delssombras. La lustracibnylaReve-
lucisn francessalumbreronelfeminisno, peo tarabién su pric
mera derroca. La vide de ls primeras feminists es un buen
«jemplodecllo. En 1791, Olimpia de Gouges eserbia ls «De
. east
articulo X la esritora francesa declaaba: «La mojer tiene e)
derechoaserllevadaaleadaltoy, del mismo modo, clderecho2
subiralaceibuna..»°Yesofueexactameateloquelepas6. Olim-
pinfve guillosnaden 1793 aunque nuneasubi6a ninguna ic
buna y no porgde of ubieraintentado, Unafio antes, erala
inglesa Mary Wollstonecraft quien eseiba Vindieacn dels
derechosdelamsjer,consideradalaobrafundacionaldelferi-
rismo. Wollstonecriftmoria también simbélicamente:acausz
deunainfeecibn ss haberdadaoaluzs nani
Be‘Y EL JOVEN CURA DO: «LA MENTE.
HO TENE SEXO»
Antes de naciento del feminism, ls mujeresyz habian
slenunciado la stuacién en la que vivian por see mujeres y ls
carencias que tenien que soports.Esas quejas y denuncias no
seconsideran feminists puesto que no cuestionaban cl origen|
de esa subordinacign femenina. Tampoce ze habia aticulado
siquiera un penssmiento destinado + recuperur los derechos
arrebatedos alas mujeres
A partir del Renacimiento, que es cuando se transite el
ideal del ehombre renacentistae —que lejos de ser un ideal
hhumano, sélo se wataba de un ideal mateulino—, se abre un
debate sobre la naruralezay los deberes de los sexos. Un pee
sedente importantes laobra de Christine Pizan Le cided
de las demas, escrita ea 495.
Christine de Pizan es una mujer absolutamente inusual
paras 6poca, Naci6 en Venecia en 1364 aunque, cuando tan
slo renta cuatro afios familias casa a Francia y alli se
ceducé y vivis haste sa muerte. Es la primera maar esritora
reconocida,dlotada adems de gran eapacidad polémicalo que
le permit rerciar en los debates literarios del momento
(Christine de Pizan rotaré un terceno que teansitarén, ademas
de las mistcas, las humanistas del Renacimiento y destacadas
poetsas.' En pleno sigh x1v, ests mje hija deun astsnomo,
casada cuando tenia quince sfos con ua hombre diez ates
mayor quc ella, se queda viuda cuando apenas habia cumplido
los veitiinco aiosyaleargo desus tres hijos, su madre cla
na yuna sobrina sin recursos.
in Lacindad de as darnas reflexiona sobre cima serfs
ciudad donde no habia ni las guesras ai el caos promovidos
porel hombre. Christine asegura quest obra naeié sr haber-
1. ANRC, Cal, Tempo defini Sabre foo preset
‘redo ypmoderni, tea co. Feminine, Mats 197 9.
a
se hecho una sere de preguntas clave. Ast, lata ene primer
capitulo desu Cindadcdmo ojeandlo us ibrto muy ofeasivo
‘contra fas mujeres se puso a pensar: «Me preguntaba cudles
podrin ser las razones quellevan cantos hombres cléigos y
laos, wtuperar alas mujeres, eticndola bien de palabra,
bien enesertosytatados. Noes que sea cosadeun hombre o
dos sino queno hay texto que exé-exenco de misoginia. AT
contrario,flsofos, poetas, moralistas, todos —y alan sala
Aemasiado larga, parecen hablar con la misma vor (1 $i
‘ereemos a esos abtores la mojer seria una vasija que contiene
¢]poso de todos los vcios y males.» La autora decide fiarse
amis de suexperiencia que de los esritos masculinos y con esa
iexeseribe Lecindad de as damas, En ella defiende a imagen
positiva del cuerpo femenino, algo ios6lita en su época,y ase-
gura que otra aubiera sido la historia de os mujeres sno hu-
biesen sido edueadas por hombres. Sorprendentemente, clogia
Iavida independiente y eserbe: ?
Los CUADERNOS DE QUEIAS
[Nolo hemos estudiade en el coogi, pero aquellos grandes
principios con los que la Tustracign y la Revolucisn francesa
cambiaron la historia libertad, igualdady fratemidad—, n0
tuvieron nada queer com las meses: Todo lo contrario, ls
Srancesas y todas las europene salieron de aquella gran cevel-
ta peordelo que entesron
‘Los limes aio del siglo xv y los primeros del xx se-
Jalan lateansiciin de a edad moderna la contemporsnea. Las
caracterfsticas de erteperioda histSrico son el desarrollo cien
tifco y téenico y 9s fandamentos fueron tres: el racionalismo
—todis reslided puede ser cientiicamente analizada segt
principios racionales—; el empirismo —Ia experiencia de los
6 COBO, Ros pe ph 12-0.
7, bidersoig 20
7hechos produce su conocimiento—y ehutitarismo el gre-
do de vordad de una teria reside en su valor prictico
‘Al mundo que anunciaban teéricamente los iloxofos dela
Tlastracion se lega graciasa dos procesos revolucionaries: Por
‘un lado, las evoluciones politicas que derribarin el absobais-
‘mo y eamiaarfn por un priitivo embrién de demoeraciay la
revolueiéa industrial, que tansformari los métodos tradicio-
rales de produccién en formas de producciSn masiva. Asi el4
de julio de 1776, Thomas Jefferson redscta ls Declaracin de
Independenciade Estados Unidos, queen realidad consste en
Ia primera formulacin de los derechos del hombre: vida, i
bberad y bisqueda dela felicidad. En Francia, en pleno proce-
0 evolucionarie, el 28 de agosto de 1789, se proclamala De-
claracién de los Derechos del Hombre: reeonocimiento de la
propiedad como inviolable y sagrada; derecho de resistencia
In opresin seguridad e iualdad juridica y libertad personal
sarantizada
En ambos casos, no hay un uso sexista del lengua Real-
mente cando escrbieroa shombre» no quefan decir ser hu-
‘mano 0 persona, se relerianexlosivamentea los varones. Nin-
juno de eos derechos fue reconocico para les mujeres.
Las revoluciones fueron posibles porque, ademas de una
serie de razones econémicasobjetivas —malas cosechtss ham
bran, fluctuaciones demogréficasy econémicss,alea de los
precios, comenzaba una nueva forma le pensar Por pri
‘mera ver en la historia se defiende cl principio de igualdad y
ciudadania
Sin embargo, Rousseau, uno de los te6ricos principales de
1a lastacin, wo fildsofo radical que pretende desenmases-
rar cuslguier poder ilegitimo, que ni siquiera admit la fuer
73 como erteio de desigualdad, que apea ala libertad como
tun tipo de bien que nadie estéantorizadoa enajenary quesde-
fiende la idea de dstibuit el poder iguaiaramente entre
todos los individuos afirma que, por el contri, la sujecién
¥ exclusi de las mujeres es deseable. Es més, construye el
a2
nuevo modelo de familia moderna y el nuevo ideal de femi-
nidad*
Fl ejemplo de Rousseau es probablemente el mejor paca
identifies lo ocurido en aquella época. Todo el cambio liber
tari y politico que supone la Revolucidn Frances, sus ft6-
solos, sus politicos, sus declaeaciones de derechos, por un
Indo traen como consecuenci inevitable el nacimiento del e-
ininismoyy por oto, suabsoluto rechazo y represion violent
Como seas Ana ce Miguel: «Las mujeres de la Revolucion
Francesa observaton con estupor emo el nuevo Estado revor
lucionario no encontraba contraiccidn alguna en pregonae a
Fos eatro viens a igualdad universal y dejar sin derechos i=
vile y politicos a todas las mujeres»?
‘Ast el nacimiento del feminismo fue inevitable porque
hubese sido wn ailagro que ante el desarrollo de ls nuevas
aseveraciones potters —todos los civdadanos nacen libres €
iguaes ance laley—-y €lcomienzo dela incipiente democra-
jo, derechos matrimonials y especto alos hijos y derecho al
voto.” Mary Nash aiade que también quedaban reflejados en
lor Cuadernos de Quejas de as mujeres su deseo de que ls
prostitucién fuese aholida asf como los malos tatosy los abu
08 denteo del matrimonio. También formulaban la necesidad
dde una mayor proteccgn de los intereses personales y econ6:
sicas de lat meres en el matrimonio y Is familisy se hacian
planteamientos politicos nitidos como el que recoge El Cua
ero de Quejas y Reclemaciones dela anénimoa Madame B.B
del Pais de Caux:
Se podria responder que estando demostrado, y con
razén, que un noble no puede representar a un plebeyoy ni
4te a un noble, del mismo modo un hembre no podtis,
‘con mayor equidad, representar a una mujer, puesto que
los representantes deben tener bsolutamente los mist0s
incereses que los representados: las mujeres uo podsfan
pues, estat representadas eas que por mujeres.”
Los Cuadernos de Quejasdelas mujeres no fueron ends
cencuenta. En agastode 178, n Asamble2 Nacional proclama-
ba la Declaracign de los Derechos del Hombre y del Ciuda~
ano.
rence 14st texto, dos afios més tare, Olimpia de Gouges
‘publics la rSplic Feminists: Ia «Declaracion de los Derechos
12, Skncne2, Cini ope pl, 29.
$3, ALENGO, fy BELINCHON, (ede), 1289-799, La woe de ls
majererenla Recolacin Freer. Cunderncde gas yaar
Sah Barslona, 1909, ig 1, ead en NAS, Mary. Mujeres enel mera
‘iors etry xrintet, lanza, Mari 204 pl, 5.
=nde la Mujer y de la Cindadanas,* que consttuy6 wna de las
formulaciones polficas mésclarasendefensadeese derecho a
Iaciudadantafemenina. Consu Dedlaracién, Olimpia denua-
ciabaquelaRevolucién habia denegedo lo derechos politicos
4 las ners y, por lo tant, gue ls evoluctonarios mentian
‘vando a es lenaba la boca de peincipios -universaless como
Inigualdad ylaibenad pero no digectan mujeres lees igual
‘Olimpia, sin dda, no enejaba en su Epos. Segin Oliva
Blanco, ena todo. favor para escandalzar al opinién pabii-
cadesu tiempo. Y fue castigads, Auna mujer gue tiene mis de
uatea mil piginas de esritos revolucionscos que abarcan
‘obras de teatro, pan‘letos ibelos, novelas autobiogréfica,
tonto filossfios, saticicos, s6pieos..s le acus6 d= que no
sabia lee ni eeribie Olimpia enviuds siendo muy joven, cee
‘sunstancia que parece no sntié mucho ya que se refera al
‘matrimonio como ela nba del amor y de la confianzay. Fue
-pasionada defensora del divorcioy la uni libre,aatcipsn~
doze as‘a ns stnt-simonianss en mis decincuentaaosycien-
to cinouenta aos antes de que Simone de Beauvoir planteara
uns portura similan®
“ras la mvert desu esposo,renunca a apellido desu ma
Sido, se hace lamar Olimpia de Gougesy se wasada a P
“Tena 22 af y ea inteligente,indomable, bell, expert @
smenudo en provocaral sexo masculino yapisonada cu la de-
fensa de los asuntos mis comprometes: " Asi, Obligado
ros presenta Wollsonecraftcomo una cri isa y fatasio-
sa que sélo desea emanciparsep2ro sn pasae por el matrima-
slo, alg cas) milagroso en su época. Enllaseartas que esribia|
con IS afos, ya se ve asi mismna como «tina vieja solterona» €
insiste en st voluntad de no casaese jamés.® Mary lo consi-
.gvecon empleos propios dela mujeeos de su paca. Entre sus
19 y 28 afos, Mary Wollstoneccafe fue dama de compaii,
2, OVLIGADO, Clara, Mujeres conracorniee La ra a de
Dinara, Dna & jms, Bae, 2004, pig 10} ss
2. BUADIE, fal, Introduce e9 WOLESTONECRAFT, Mary
niacin des derechos de emer, Cael col Fenn Madi
2000, pig. 28
Bommaesra en unacscue para stort establecia conus here
imanasy su ran amiga Frances Blood ,finalmente,siutiz
"
‘Al movimiento sufragisealedebela politica democrstica, al.
menos, dos grandes aportaciones —explca Valercel—. Una
‘slapalabrasolidaridad. Otros métodos de lucha civica ne-
twales. La palabra solidaidad fue elegda para sustitira frat
sidad, que en realidad sigoiicaba hermano varén, lo que tenia
demasindes connotaciones masculinas, La otra aGn es ma im
portant. El sufragismo se vio obligado a intervene en po-
Ikea deste fuera, lamando la atenciSn sabre su catia y Con
‘yocacin de no violencia Ast que tuvo que ensayar y probar
nuevas formas de protest Y acert El sufragismo seinvents
Jas manifesaciones, ninterrupsidn de oradores mediante pre-
_guness sistemsices, fa huelga de hambre, el auroencadens
mento, Ja tirada de panflets revindicativos... Todos &3tos
fueron sus métodos habituales. El sfeagism innové ls for.
mas degtacién einveacé la lucha Pacifica queluega sguieron
‘movimiento politicos posterior coma sindicalismoy el mo~
vimiento en pro delos Derechos Civiles.
LA PROTES7A SLICIDA DE EMILY W, DAVISON
‘A las sufragistasinglesas se les acabé a paciencia antes que
4 las norteamericanas. La primera paticin de voto para las
mujeres presentada al Parlamento britsnico extéfechads en
agosto de 1832. Tres décadas mis tarde, en junio de 1866,
Emily Davies y Elizabeth Gaeret Anderson clevan otra nve-
va cLadies Petition firmada por 1499 mujerse, que e3 Pte-
1. FRICDN, ey, La mica dle foie, cone Sugai,
Baeelons 1965, pig. 18
a=sentada ala Cimara de los Comunes por los dipusados John
Stuart Mill y Henry Faweert. Al ser rechazada, se crea un
‘movimiento permanente: l Sociedad Nacional pro Sufragioy
dle la Mujes,liderada por Lidia Becker A} aflo siguiente,
1867, cuando sees debaviendo una segunda reforma de laley
‘lcecoral para incrementar cl niimero de varones adultos con
eeecho al sufragio, ol mismo Mill presenta una enmien-
dla para que se sustituya Ia palabra thombrex por «personas,
lo que daria el voto a aquells mujeres que cumpliesen los
mmismos equisivas que se les pedfan a los hombres. Fue recha-
ada.
Las sufrgistasinglesastavieron dos grandes aliados:John
‘Stuare Milly Jacob Brigt. Este tltimo eraun parlamentario que
insistent infatigablemente presenté una y otra vez propues-
rasen la Cémara Baja para conseguir el derecho politico de las
‘mujeres. En 1867 Jacob Brigt asegucs que silos mitinescare-
‘cen de efecta, sila expresin precisa y easi universal de la p=
‘ida no tiene influcncia ni ena Adwiniseracin ai en el Para
mento, inevitablemente las mujeres buscarsn otros siscemas|
para aregurarse estos derechos que les son constantementere-
usados».
Brigenoseequivacd, Aunguelassufragisasinglesssaguan
taron casi cuarenta aos mis defendiendo el fominismo por
medias legeles. Hasta 1903, cuando, cansadas de que nose les
Iriciera eas, pasion a a lucha directs. Describe Maria Salas
aque laeStics que empleatoa fue inrerumpir los discorsos de
los ministos y presencase en todas la reuniones del partido
liberal paraplantear sus demandas, La policl las expulsaba de
los acsosy les imponia mult que ells no pazaban, asi gue
iban a la eécel, Ali, eran consideradas presas comunes y'n0
politicas coma reivindicabsn,
‘Aun en la cétcel, no desistieron. Iniciaron una hugs de
1S, Mans, Alii, Safina op. pp 7.
16, Cade Saas Mai op. ct
2
Ihambre en prisién. Gladstone, ef primer ministca en aquel
mower, oené que hs aimentaran aly fuerza, Comens
entonees una espital de violencia ener ls feminstat yl poi-
is ingles. En jolio de 1902, lady Pankhurst, presidents de
Ia National Union of Women Suffeage, fue condenada eres
aftosde rabsosforzados, pero ls sufragistsJoraron i eve
SiG dela creel”
El presidente Wilson Ia invité a Estados Unidos Se habia
convertide en una liguracaslegendara, aunque no selibrode
volver aprisién en cuanto segresé a Inglaterra En e508 aos,
las sufragitas umbign levaron acabo una serie de actos vio=
lens contra diversosedifiies pablieos aunque nun reii=
2acon nga atentae personal, nina result herido come
consecuencia de ss protests. Lani pérdida se repiats en
sus propasfiles, con inmuecte de Emily W. Davidson eel i
pédromo de Epson. Como hemos dich, el funeral de Emily
LW. Davidson hc un grandioso act femvnsc sein reaian as
Fiscoriadoras, Desenbe Maria Salas gue entre ls decenas de
-arrozes que sepuin el eto dela joven desi una vaca con
Ins cortinasbyjadas Eealade dy Pankhurst queno podoseu-
dir porque de nuovo, estaba serestada
Sin embargo ni siguera el saerifiio dela joven Davidson
fue sufieienceni puso fina a lucha. Tuve que esa a Prime
1a Guerra Mundial Eley Jorge V arnt todas as suf
ists encarg6 aly Pankehorstelreclatamiento yl organi
2acin de las mujeres para susuituic alos hombres que debian
alstarse. «Un buen ejemplo del pragmatism inglés, seRala
Soke
Por fin e128 demayo de 1917 fue aprobada laley de sufea-
tio femenino por 364 votas favor y 2 en contra, esi como
ontraprestcin alas servicios prestados durante la avers,
iespuésde2.588peicionespresentadas enelPacamento! De
todas formes, las nglesastuieron que esperar atin oxo diez
17. howe
=a«ios. quelss condiciones para sv derecho al voto fueran idén-
ticas als de los varones ya queen a primera ley se decia que
podiaa vorar las mujeres mayores de 30 aRos. Diez afos més
tarde, coda las mayores de 21, la misma edad quelos varones,
ppodian vorar y ser voradas.
Dela épicade la sufragisasinglesas dan cuenta os recucr
dos de Ida Alexa Ross Wylie, quien dj6 esrit:
‘Ante mii asombro, he vista que las mujeres,» pesar de
lafakade entrenamienta y del hecho de que durante siglos
nose podia hablar de ls piernas de una mujer respetable,
podian, en un momento dado, correr més que cualquier
policia londinense[..] Su eapacidad para improvisa,pa-
ra guardar el secretoy ser leales, su iconoclasta desprecio
de las cases sociales y del orden extablecido, foeron una
zevelacisn para todos, pero especialmente para ellst mis-
mas]
‘Durante dos afios de locas y 3 veces peligrosas aventu~
135, taba) yluché homabro con hombro con mujeres sen~
sates, vigoross, feces, que reian a carcajadas en ver de
‘irae por lo bajo, que etminaban libremente en vez de
contenerse, que podian ayunar mis que Gandhi salir del
‘ance con una sonriss y uns broms. Dorm sobre el duro
suelo entee viejas duquesss, robustas cocinerasy jévenes
dependientas. A menudo estébamos fatigidas, coacusiona-
das 0 asustadss, Pero éramos tan felices como nunca lo
habfamos side, Compartiamos con jibilo une vida que
nunca habiamos conocido, La mayoria de mis compaferas
deluchaeranesposss y madres, ¥ ocurrieron cosas ins6li-
tas en su vids doméstica, Los esposos llegaban a su casa,
por la noche, con una nueva nsiedad... Los hijos cambia
‘ron ripidamente su activud de condescendenciaafectuest
hacia la apobre y querida mam» por una de admirado
asombco. Al dsipacse Is humaveda de amor maternal —ya
{que la madee estaba demasiado ocupada para poder pre-
oe
‘ocuparse par elas mis que de vex en cuando, los bijos
descubrieron que les era simpitia, que eera un gran tipo>.
Que tenia ella."
EL DERECHO AL VOTO, UNA ESTRATEGIA
DE FUTURO.
Las sufragistas no revindicaban slo el derecho al Yor, al
suftagio universal Seles conoce por ee nombre porque fue en
, en palabras de Amelia Walesa»
Para levanaro, ls principales esbezas del siglo XIX eorizas
ron sabre porqué ls mujeres debian estar excludas. Ast que
stodolo dicho por Rousseau sesumaron as eoras de Hegel,
Schopenhauer, Kierkegaard, Nietasche.. que ademas ifla-
yeron en todos los eampos del saber que paraddjicamente
. Bn él
describe a horrible situacidn en la que vivian la eabajadoras
—apotta informacién de primera mano, Ia Flora reportera
aparece alo liege de todo eeapieulo—, y segura que si n0 se
‘educa alas mujeres ¢s porque econdmicamente es muy Feta
bile para la sociedad:
En lugar de enviar ls escuela, ela guardard en casa
con preerencia sobre sus hermanos, porque se le rics me=
jor patida en las tteas de a cass, yasea para acunar los
nis, hacer recados, cuida Ie comida, etc. Alos doceatos
sela coloca de sprendiza all continvaré siendo esplovada
porlapatrona y amenudo también maleratada como cvan-
estaba en casa de sus padees*
Flora Tistin defiende que sen a vida de os obreros la
mmujerloes todo»? y por esoles insta aque haga su luchs
porlaigualded:
4, BLOCH DAN, Evens, Fora Tid lamer mss Mae Mar
«id, pig.22,cindoen DEMUCUEL, Arey ROMERO, Roan op Ot 17.
“. DEMIGUFL, Anay ROwERD, Rosai op cit pit 4
46, hide, pig 34.
4. Wider, 9g 8.
—Avosorrosobreros, que sols viedimas de le desigual-
dad de hecho y dee injutics a wosotrs 0s toca estab
cera fin, sobre Ia era el sina dela justicia y des igual:
dadabsolutaeatzeelhombeey ki mujer"®
FEMINISMO Y MARXISNO: UN MATRIMONIO
MAL AVENIDO
Hay socalistas que se oponen ala emancipacién dela
mujer con la misma obstinaciéa que los capitalists al sor
ciulismo, Todo socialstareconoce la dependencis del tr
bjador con respecto al eapitalista [..] pero ese mismo so-
cialistaFreeuentomente no reconoce la dependencia de las
mujeres con respecto a los hombres porque esta cvestion
atafiea su propio yo.
Sonpalabras de August Bebe, e] hombre que procuré de-
sarrollar las sis marxistas sobre a eeuestén femenina>. Con
el socilismo seinaugeca una nueva corriente de pensamiento
dentro del feminismo. Y a mediados del sigla XIX camenzs a
imponerse en el movimiento obzero el socialisimo de inspira
cidn marasta La atraccin inicial entre marsiemo y feminis-
mo fte mucua. Ambas son teariaserteas, que contersplan a
realidad con disgusto y que todo la que toesn, lo politizan, Por
cjemplo, cuando el marsismo habla de clase socal o plusvalia
«st politizando ls sealidad y poniendo las bases del sindcalis-
‘mo internacional. El feminismo igual: cvande habla de acoso
sexual oferinizscién de la pobreza ests haciendo polis
El feminism, en cuanto nace el marzismo,establece rla-
«igncon él porquees a primera teoria etic de a historia que
8 ide ig 66
49. ROWBOTHAM, Shs, Finney alain, Debate, Mai,
197% pg 188
ne
‘contempl las celaciones humanss enclave de dominacisn y
subordinacén, lomismo que efeminismo..con un dferen
ca. El marxismo no dene ninguna capacdad explicasiva para
analiza ouo sistema de dominacin: el patarcad, la domi-
nacién de las horbees sobre las mujeres. Deahique se sientan
préximes yl mista tiempo, polemiven constantemente””
Asis anto Marx como Engels deseriben ls opresion dels
rmvjee como una explotsciéaéeonémica. A Mars, a emanci-
pacidn de ls mujeres no le lleva ni impo ni espacio en
obra, cuando tat, tan sélo es un apénice de aemancipa-
‘6nd proletariado. Engels silo intend y fate deus eahver
20s e+ la obra El origon dele familia lnpropiedad privaday el
Estado. En lla Engels sefal6 que a origen de la sujecion de
fas mujeres estat en caus bold, la cepacia ropro=
dluctorao la constitu fsa, sin sociales. Bn conereo, en
laapariién dela propiedad privada y la exelasia dels mu-
jeres de aesfora dela produccién socal. Sogn est ass, la
tmancipacién elas mujeres ligada uindependenciaeco-
sémica
‘Bebe estimul6 mds que Marx y Engels I igualad dedese-
chos ye sufragiofemenino aunque no leg a dar el paso de-
fintvo sobre libertad de los mujeres. Asegucaba que en la
farura sociedad socialists, ls mujeres relizaian areas aap-
tadae a ss eapacdades por insinia mucho en quesertn dis-
ties dlasdelos hombres. Yesque Bebe ampocose dstas-
ciaba demasiado dela ida aeptads socianentssobce lo que
eran debian set as mujeres y dfenaque tap exaban adap
tats por saturalze ala maternided yl cianzadelos hos y
aque, debecho, las mujeres ran impulses yemgeional y
Camtente no eransptas parsel trabajo manval pesado, que des-
tras su eFeminidads
52. Coo, Rota enrevistcom a aur ie 208
SL. De Maute, Ans Feminnes op pl, 232
52 Mavates, Alo Safmpioo ope pp 0
oeAsi que quien realmente puso ls bases para un moviescn=
to socialistafemenino fuelaalemana Clara Zetkin (1854-1933)
quien dirigis la evista fomonina Igualdad y organizs uns
CConferencia Internacional de Mujeres en 190? que se mantic
‘nc viva hasea hoy —aunque en 1978 cambis el nombre por el
de Internacional Socialisa de Mujeres En aquella primera
Confercncis liderada por Zetkin se eeamievon 58 delegadas de
paises evropeos pero también de otras regiones del mundo
‘como Inia o Japén,
“Zeckin Fue una activa miliante comonista que tuvo mucha,
‘nis importanciaen la préctica que enka ceora feminists Escr=
big sobre todo conferencias y panfletos, ya que su intencida
«era persuadira las masis, hacer una tarea de educacin y pro
selitsme
Explica Ana de Miguel que para Zethn, los problems de
{a prolearia no tenan nada que ver con sus maridos ni con los
hombres desu misma clase social, los obreras. Los problemas
de las mujeres proletarias s6lo tenian que ver con el sistema,
capitalist y la explotacin econSmica.Sin embargo aactivis-
ts socialsta defiende el apoyo las eeivindicaciones del movi-
mien feminista burgués, especialmente el derecho al voto. Y
paraclla la aportaciGn fandamental que hace el marxismo. las
imujeres es defender que éstas deben entear en el sisterna de
producsi6n, Pero, como ya adenintaBebel, esto neeza ni mus
ho menos compartido ea as filas del movimiento obrero. De
hecho, Clara Zetkin tuvo problemas incluso dentro desu pro-
pio partido como demuestra una regafina de Lenin que no tie
ne desperdcio:
(Clara, atin no he acabado de enumerat la lista de vues-
tras falls. Me haa dicho que en las velodas de lecturas
y discasién con las abrerss se examinan preferancemen-
53, DEMICUEL, Ans Eleaf lenge kre
iia pig 9.
7
relos problemas sexual y dl marimonio. Como s ee
aera el objetivo dea atenciGn principal en In educcin
police y en el abajo edvestivo. No pe dar crédixo
Sesto cuando ig mis os Bl primer ertado dela di
tau proletaria lucha contra lor revocionaros de to-
deel mind. enna tanto conniinta sea exh
nan lox problemas sexual le cuestin de es formas de
mteimonioen el present, en pasado yen el porvenit!™
Fue Heidi Hartmann quien describis la relacin eatse mar-
xismo y feminisma come in matrimonio mal avenida® pero
son muchas ls autoras gue hablan de ella, De hecho, a pesar
dela buena voluntad de Bebel, el divorcio entre sufragismo y
socialismo en Europa a finales del siglo XIX era patente. Es
cierto que tenia seivindicaciones comunes —educacidn, me-
joras ene eabsjo,igualdad desalarios, derecho al sufragio—y
pero las estrategia politcas eran muy distintas, Todo el, 2
pesar de los esfucrzos y la sagacidad de Zetkin para integear
1 las mujeres dentro del partido con la Internacional Socialis:
tade Mujeres."
‘Quedsba claro quel scuestin dela mujer» era més com-
pleja que lo que los marxitasclisicos habian senalado, Solo
diciendo que ls mujer estaba oprimida y que la cxuse de esa
‘opresign cra el sistema capitalists, como bacfan Mars y En-
gels, ni se soluctonaba nada, nse llegabaal centro de proble~
rma y adem, ls socialists tenian dud de fideidad encre la
‘ortodoxia de su partido y los intereses especificos de las ma-
jeres*™
54, LENDN,Vi, Laemancipacin dea mujer al 197401,
lado en De Mic, Ana. op. ps 9556.
‘6. HARTMANN, Haid, Un mtrimenio mal evnide: hacia uns
nin mis progcsiva etre maine ¥ feninismos, cn Zone Abit
19°24, 198 pe 85-113, "
‘SANCHEZ, Crise op PS 82
57 Bidem,
aAsise desarroll6 un ferninismo de le, socialisea y come
‘isa, junto al feminismo delas eufeagista y en ocastonesfren=
ea 4. Cuando Is feminists socialists ratan de empujara sus
camacadas lleva sus promesas a préeties, entonces suften
Lasambivaiencas y los conflietos.En certos momentos inclu-
50, las mujeres socialistas no se atreven a insistir demasiado
cen sus objetivos feministas por emor a perjudicat la causa so-
cialista, Lae mujeres continuaban siendo «la causa aplazada>
“Ahora, eambin por los msesstae para quisnes lo importante
ceralzrevolucign del proleariado y nolade las mujeses. Daban
por hecho que, conseguida la primera, conseguida la segun~
dda, Muchse mujeres sospschaban que no seria estas tantas|
tesiciones acumvuladas yaa ests akuras. Le historia les dari a
sxzdn,
ALEJANDRA KOLLONTAE: LA MUJER NUEVA,
Fue Alejandra Kollontai quien dio un paso misallé dentro
del matsismo y sus idess se acexcacon macho ale que seria
feminismo sadieal delos sos serenta,
[Auague mi cors2én no aguante ly pena de perder el
amor de Kolloncaiycengo otras tareas en a via mis impor
tants quela felicidad familias Quiero hichar por lalibera~
citi del clase obrera,porlos derechos de las mujeres, por
pueblo uso
Es a carta que Alsjandea Kollonti le esribe «su amiga
Zoia desde! tren quelaaleja de su nable y rea familia russ, de
‘51 marido—so primo, ageniero joven y sin fortuna con el que
58, KOLLOINL Aland, Memoris, bat, Madd, 1979, cisdo
‘eaDF MIGUEL, Ana Abjendra Kalle 1¥72195), aioe el Oo,
Biblioteca de Mujeres Made, 2001, pi 1
=n
sehabja easado poramor—, y de su hijo,rumbo a Zrich para
prosepair sus estdios marxistas en la universidad dela ciudad
Suiza. Kollontai labia nacido en 1872 y cuando inicia ese prix
ret viaje tiene 26 aoe. Ya no parara. De vuelta San Peters-
burgo ingress en el partido socialdemserar, en la Faccn
meachevigue ileal en aquellos momentos. Kollomtai taba
tia como eserizara y propagandistaa favor de la clase obrera
pero también ella comprobs el poco interés del partido por la
liberacibn de las mujeres. Asi que, como sefiala Ana de Miguel,
suid la doble misidn gue marcaria su vida: luchar contra el
potente movin ferninsta de su época intentando atraee 3
Jas Feministes al Partido y, a} mismo tiempo, contra la indlife-
rencia dela clase obreray sus drigentes porla apresién espe
cifica de las mujeres.”
Kollontaiabrié en 1997 el primer Circulo de Obreras y al
afio siguiente tuvo que hit de Rusia, Hasta 1917 vive esliada
fen Europa y Estados Unidos, cuando regresa a Rusia, forma,
parte del primer gobierno de Lenin como Comisaria del Pue-
blo para la Asistencia Publica. Ties aflos después, se une 2
la Oposicién Obrera, mostrando asi ss discrepancias con la
"Nueva Politica Eeonémsica de Lenin. partir de 19223 envi
a2 i delegacién diplomética de Oslo. Desde entonces, 20
deja de recorrerembajadas. La fuerza de Kollontai ers tl que
‘a pesarde sufir una apoplejiaen (942, durante tres aos diri=
ft la delegacidn diplomstica de Oslo en silla de ruedas. Ko-
Tlontai muris en 1952 en Motes, pero unos aos antes leg6 a
ser candidat al Premio Nobel dela Pax por susesfuerzos pars
poner fn la guerra uso-finlandes
JLo mds sgnifcativo desu diseuiso fue hacer suyala idea de
‘Marx de que para construirun mundo mejor, ademas de came
biar la economi, tenia quesurgi el hombre nuevo. Ash, defen-
6 el amor libre, igual salasio para las meres, a legalizacicn|
del abort y Is socalizaci6n de trabajo doméstico y del euida-
59, Ihidom
7dodelos nitos, pero, sobre coo, sia a necesidad de cambiar
Ja vida fncima y seual de las mujeres. Para Kollonta, era nece-
saria Le mnjernweva que, ademis deindependieateeconémica-
mente, también tenia que sero psicolégieay sentimentalmente
Por estas razones, para muchas expertas como Ana de Mi-
uel, Alejandra Kellontai fue quien aticulé de forma mis x
‘ional ysistemiticsfeminisma y marxiemo, Porque Kolloatai
noselimitéa inclu ala mujer en larevolucisn socialist, sino
que definis qué tipo de revoluciSn necesitaban las mujeres.
aca lla, abolir I propiedad priveda y que las mujeres $e in-
corporaran al rabajo fuera de casa no era suficiente ni mucho
menos. La revolicién que necesiaban Iss mujeres era la rev0-
Jucin de I vida cotidiana, de las costumbeesy sobreodo, de
Ise relaciones entre los sexos. Rovands, para Kollontai no te-
re sentido hablar de un waplazamiento» del iberacin dela
_mjer en todo caso, habria que hablar de un aplazamiento de
Ja revolucién. Con estas ideas, esto est, Kollontaituvo mu
chos enfrentansientos con sus camradas varones que megabaa
I necesidad de una lucha espocifica de las mujeres Como
anéedota en al local donde se iba a celebrar I primera asa
bles de mujeres que Kolloncai convocé, aparecié el siguiente
cartel: «La asamblea slo para mujeres se suspende, mafiana
asamblea s6lo pasa hombres.»
EMMA GOLDMAN: MUJERES LIBRES
La arrestiron tana menuda gue ends ver que habs en
piblicollevabs contigo un bra para leer en la cicel. Bra
Emma Goldnan y su delitodoble: ser anargustay feminist,
2. DeMicure, An, El cnft cave eaer es iran so
ites St i,
GU De MiCUeL, Ana, Alsi Kenta (1872-1952, op ci,
Pig,
—
‘orgullosarepresentante de las mujeres que se aurodesignaban
cmujereslibresa, ¥ eso que no fue el anarquismo un movie
‘miento que teorirara sobre los derechos de as roujeres: inclu
so su misimo repeesentante, Pierre ]. Proudhom defend
posturas aniigualiterista. Sin embargo, dentro del anarquis-
mo fueron muchas las «mujeres libres» que como Goldman
trabajaron y defendieron Ia igualdad. Consideraban que la i
bertad era el principio de todo y que ls rlaciones entte los
sexos tenfan que ser absolutamente libres. Siempre se manta
vieron en tierra de nadie. Por un lado, como estaban en contra
delaautoridad y del Estado, quitaban importancia ala reivin-
dicacign de as sufragitas sobreel derecho al voro, y por otto,
para lls a propuesta zomonista —que el Estado regulara a
procreacion, la edueaci6a y el cuidado de los nifios— era una
ides, evanto menos, peigrosa.#
Goldman habia nacido en 1869 en un gueto de la Rusia
zarista, murié en 1940.en Canad y fue enterrada en Chicago
Escapé de st pais hac Estados Unidos huyendo de ela pesa=
dilla der infencias —zomo se refeviaasu padre yal golpes
‘que le propinsba—. También sbandoné enesa huida un mat
tronio ques padre le habia atnaiado cuando ten 18 aos. A
tsa edad, Goldman ya llevaba dos afi trabajando en una f-
briea dondese habia sumado al eminisme de as mujeres evo-
Iucionarias que all conoei6. En Estados Unidos encontes 13-
bajo en otra fabric, se volvié 2 casae —y divorciar al poco
tiempo con un compadero iamigrante y comen26 intere-
sasse por el anarquismo. A partird entoness en sus discursos|
¥eseits, Emma siempre unité anarguisme y feminismo.
El desarollode a mujes sulibercad, suindependencia,
eben surgi de ella misma y es ell quien debersllevarlos
‘Leabo. Primero, afirnindose como personalidad y no
‘como una mercanefa sexual. Segundo, reehazandael dere
162, DE MIGUEL, Ans Feminimos, op. cits pg. 238.
=ncho que cualquiera prewnda ejercer sobre sv everpo; ne-
sgindose a engendear hijos, a menos gue ses ella quien los
dese; epindose a ser Is sierva de Dios, del Estado, de la
sociedad, dela familia.
BL 28 de marzo de 1915, ante una audioncia mists de ses-