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TRIENIO Mustraciin y Literals MADRID MAYO 2010 NUMERO : 55 REVISTA DE HISTORIA Trerio, $5, Mayo 2010, 131-175 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETANA, 1820-1850* ___ Esteban Contles Gili Angeles Carvajal Azcona Este articulo analiza, mediante el erapleo de una seleccién de fuentes impreses cocténeas y de la Literatura posterior sobre el tema, las caracter y alcance de Ia adulteracién de alimeatos en Gren Bretafia durante las décadas 4e 1820, 1830 y 1840, centréndose en algunos de los comestibles y bebidas mas usuales ¥ con mayor incidencia en los presupuestos familiares: el pan y la hstina con la que se claboraba, la cerveza, el café y el t&. Consiata la continuidad de les précticas fraudulentes, en auge desde comienzos de la Rovolucién Industriel, e intenta buscar wma explicaciéa 2 la amplitud y persistencia de diches pricticas Palabras clave: Gran Bretaia. Adulteracién. Alimentos. Pan. Harina, Cerveza Café. Té, Revoluciéa Industrial. Cet texte anslyse, on utilisant une sélection de sources impriméss ct la littérature contemporaine sur le sujet, a nature et 'ampleur de la falsification es aliments en Grende-Bretagne durant les années 1820, 1830 et 1840, en se concentrant sur certains des aliments et des boissons les plus courantes et avec plus dimpact sur les budgets des ménages: le pain et la farine avec laquelle ila été fait, la bitre, le café et le thé. IL note Ie contimuité des pratiques freuduleuses, & la beusse depuis le début de le révolution industille, et essaie de trouver une explication de Tampleur et la persistance de telles pratiques. Mots-clés: Grande-Bretaghe. Adultération, Aliments. Pain, Farine. Biéze, Caf, The. Revolution Industrielle ‘This paper analyzes, using a selection of contemporary printed sources aad literature on the subject, the mature and extent of the adulteration of food ia Britein during the 1820s, 1830s and 1840s, focusing on some of the usual food and drinks of more impact on housebold budgets: bread and flour with which it 2 ‘LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETANA ‘was made, beer, coffte and tea. It notes the continuity of fraudulent practices, on the rise since the beginning of the Industrial Revolution, and tries to find an explanation of the extent and persistence of such practices. Keywords: Britain Adulteration. Food, Bread, Flour. Beer. Coffee. Tea, Industrial Revolution. Ea 1820 Friedrich Accum, un quimico alemdn residente en el Reino Unido, acababa de publicer en Londres un sensacionalista y polémico tretado sobre la adulteracién de alimentos en su época’. En 1845 se editaba en ‘Alemania la denuncia de las condiciones de vida de la poblaciéa trabajedora britinica, que el joven Friedrich Engels habia tenido ocasin de observar durante su primera estancia en Manchester, entre 1842 y 1844", Por entonces la adulteracién de alimentos seguia siendo una realidad ampliameate extendida — como el libro de Engels demostrabe-y poco reconocida en los medios oficiales, que afectaba principalmente a los grupos sociales con menor poder adquisitive. Este articulo analiza, mediante el empleo de una seleccién de fuentes impresas de aquellos alos y de la lteratara posterior sobre el tems, las ‘aracterstcas y alcance de la adulteracién de alimentos en Gran Bretaia durante las décadas de 1820, 1830 y 1840, coutrindose en algunos de los comestibes y bebidas més usuales y con mayor incidencia en Tos presupuestos farsiliares ~cl pan y Ia harina con ie que se elaborabe, la cerveza, el café y el 1é-, constata Ja continuidad de las pricticas frndulestas en’ ange desde comienzos de la Revolucién Industrial e intenta buscar una explicacién a la -mplitad y persistencia de dichas practices Introducciéa Bn las tres décadas que siguicron @ la aparicién del libro de Accum no ‘majoré la condicién sanitarie de los alimentos existentes en el mercado. A pesar del éxito inicial de la campatia para desprestigiar al quimico de origen alemso, ‘Agdccemos a Maia Gonalize Femindes sx stcsoramicato ea mata guinica, { Redcch Ace, d Treatise on adulerations of fod and ealinery polons, Lense, 1820, 2 Flerich Engels, Die Lage cr arbutenden Klasse in England, agai, 185. Versinelesrénica x cavielane, con enotacionss a cauléa a cugo de Joan Serallonga, accesible desde iowa cat cast ceranasgto fete 10 Gullo de 200). 7 * Par la adaleracién de aliens oa Jas décadas previts vénwe Esteban Canales y Angeles (Cubs, “La sduleraciin de alimertos en Gran. Besta ca los inicios de ls. Revolcién [eusea,pubicado en el admero anterior de eta misma revista (noviembre de 2008), ESTEBAN CANALES GIL ANGELES CARBAJAL AZCONA 135 con la que se protendia acallar Ia slerma despertada entre le poblecién, continuaron las denuncias contra le adulteracién. También prosiguié el desinterés de los gobieraos de la época por tomar cartas ea un asunto cuya solucién, segtin la imperante ideologia liberal, habria de venir de la mano de las, iniciativas generedas por el funcionamiento corrector del mercado. Son rnumerosos los indicios demostrativos de le persistencia del problema y de la creciente sensibilizaciOn de Ia opinién piblica por sus efectos sobre la salud. Uno de ellos es la expansiéa del movimiento cooperativo y su vinealacién con le oferta de alimentos més seguros a sus miembros. No por casuelidad las primeras cooperativas nacieron en las tiltimas décadas del siglo XVI pera suministrar 2 los trabajadores asociedos harina y pan no adulteredos y se bicieroa més numeroses tras el final de las guerras napotednicas’. La Sheerness Economical Society, creada en 1816 por los wrabajadores de los astilleros de Kent, fue uns de elles. Se inicié en protesta por la adulteracién, el freude en el peso y los altos precios impuestos por los panaderos locales*. La explosion del movimiento asociativo se produjo una gencracién més tarde y tuvo en los Pioneros de Rochdale (1844) su ejemplo mas caracteristico, pero no el primero de equella década, puss ye en 1840 se hebia formado en el barrio londinense de Lambeth una sociedad cooperativa entre cuyos objetivos figuraba “la venta de axticalos libres de adulteracién”*. En 1848, en el curso de un mitin celebrado por una sociedad cooperativa establecida en la localidad escocesa de Coupar “Angus, uno de sus oradores “criticé severamente la forma en que se adulteraban los alimentos ¢ indicé la gran utilidad de sociedades como aquella carentes de Jos motives egoistas que propiciaban tan nefastas précticas™”. El mismo aio la Sociedad Industrial Cooperativa de Leeds habia comprado un molino para asegurar a sus miembros el suministro de pan de calidad a precios razonables*. (Orzo de los indicios de la persistencia de la adulteracién de los alimentos y del fnterés que el esunto despertaba es la publicacién de sendas obras que lo abordan de forma sistemdtica, la anénima Deadly adulteration (1830) y el “Joan Buren, The History of Food diutration in Great Briain i the Netcom Centay, with ‘Seecel Reference to Breed Tea and Beer, PD. Thess, Uaives'y of Londen, 1958, 9.52 SE C.F. Lassbery, Government and poles n Kem, 1640-1914, Boydell & Brever, 2001, 100. The Northern Star, 9 de zayo de 1880, p.2. 1 The Northern Star, 29 de enero de 1858, p * George Jacob Holyouke, The Jubilee History of the Leeds Industriel Co-operative Scie, from 4847 to 1897, Levis, Cowal Co-operative Offices, 1897, cap. "1848". Balen elecucaice co nspulpainehooslbvarysinenn eu bbincbooloccnideewnelbat2759 Gulo de 2008). 136 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETARA, Treatise on the falsifications (1848), escrito por cl analiste quimico Icha ‘Mitchell. Junto a ellas, proliferan los trabejos dedicados a la alimentacién, lz gastronomia o la medicine que incluyen partados dedicados a la adulteracién, ‘También el tema figura en articulos de revistas, en editorales y en las noticias y Jos anuncios insertos en la prensa, asi como en las vitietas de los humoristas, sgrificos. Unos y owes contribuyeron a mantener viva la preocupacién por la adulteracién y prepararon las condiciones que hicieron posible, recién mediado al siglo, el éxito de la cempatia en pro del control sanitario de la alimentaci6n y ‘de la persecucién de los abusos en este terreno, Las dos obras mencionadas Deadly adulteration? y Treatise on the Jalsifications!’— comparten el interés por alertar 2 los lectores de la amensza que para sx salud supone la presencia masiva de sustancias adulterantes en los alimentos que consumen y el reconocimiento de la labor pionera de Accum en ‘este campo, que es mas explicito en el caso de Deadly adulteration. Mas allé de estas similitedes, hay notables diferencias en la forma de abordar la lacra de la adulteracién. La primera obra es escasamente original y esté escrita en el tono sensacionalista del libro de Accum, algo que se refleja en el subtitulo elegido ~ Disease and death in the pot and the botle-, delberadamente cercano al Death in the pot de aquél, pero carece de las cualidades que distinguieron a su modelo: caricter pionero en el tratamiento sistematico del tema, danuncias concretas de préctcas de adulteraci6n, andliss de los alimentos para detectar su pureza, El autor de Deadly adulteration no parece tener especiales conocimientos de andlisis quimico y tampoco se toma la molestia de repasar de ‘manera sistomética le preasa de su época y las resohuciones de los tibunales para oftecer al lector una informacién actualizada. Su referencia en estos casos ¢s, casi siempre, el libro de Accum. Quizé su mayor singulatided consiste en la critica de Ja chatlataneriae incultara de quienes, con conocimiento o sin él, se dedican 2 la prescripeién y venta de medicinas, aspecto que ocupa una sexta parte del espacio del libro. Y es esta singularidad la que, probablemente, desvele Ia autoria de le obra, que se dice eserita por “an enemy to fraud and villany”, pues sus criticas contra la charlataneria de la profesién médica coinciden con las efectuadas en una peticiéa a la Cémmara de los Comunes por John Dingwall Williams, “student at Law”, en fechas muy préximas 2 la * Deadly adviteration end slow poisoning unmasked; or, Disease aud death in the pot and the ‘ole, Londres, 1530. * John Mitcel,Treaie on she ftsfations of fod, and the chemical means employed to detect a, Leees, 148, ESTEBAN CANALES GiLLy ANGELES CARBAJAL AZCONA 135 publicecién del libro”. El impacto de la obra n0 fue desprecieble, sunque quedé muy lejos de la repercusiéa obtenida por su modelo: apareciezon breves reseflas poco coniprometidas en algunas revistas™ y se reedit6 al menos una vez. El libro de Mitchell es un texto escrito por un profesional de Is materia, miembzo de la Chemical Sociey, le esociacién creada en Londres (2841) para el desarrollo y éifusién de la quimica, y autor de otto libzo, Manual of practical assaying, for the use of metallurgiss, captains of mines, and ‘assayers in general (Londres, 1846), con més larga trayectoria que el que nos ‘ocupa, pues en 1873 iba ye por la cuarta edicién. El Treatise se proclama heredero directo de la labor de Accum y no se molesta en citar la obra ‘eparecida en 1830, en un claro imento de distanciarse de esta ultima y de negarle autoridad. Pero no se trata de paraffasear o adaptar el trabajo del autor ‘aleméa, sino de rehacerlo, pues desde entonces “se han introducido muchas adulteraciones nuevas y los avances de la ciencia quimica ban sido tantos que texisten medios mis répidos y certeros de deteccién de las impurezas ordinarias de los alimentos y de las extraordinarias o fraudes més recientes”, de forme que, aunque cl libro de Accum siguiese # la venta, reultaria necesario eseribir ‘uno nuevo, Mitchell acomete esta labor con la contencién y la metodologia cientifiea ausentes en Deadly adulteration. Analiza més de veinte productos, ox su mayoria alimentos, y coment las adulteraciones usuales y los ‘procedimientos usados para detectatlas, pero apenas emplea el microscopio, el instrumento que ya entonces estaba revolucionando las téenieas de detecci6a, y en la mayoria de las veces en que se refiere a él ~a] analizar Ia barina y el café lo hace para dar cuenta de experimentos de otros investigadores. Esta care: se la echa en cara uno de los comentaristas de la obra y es, posiblemente, su 1 pein fe leiden la Ciara el 6 de julio de 1850 Journ of the House of Commons, vol. 155), Willams publicais en 1868 la ediciéa comentéa do uns obra del jurists Blackstone, The Companion Book and Supplement fo Blackstone's Commentaries on the Laws of England. BG. (Chaton tuba Ldeaticado ex 1909 (A sompentuo of fod: mixoscopy with sections on drugs seater end iobacee) aD. Willams como scr de Deodly adulteration, sn explear los ovo, Eeemae oun The Monthly Review, vl. 15, 2, 63 (aoviomlre ee 1830), p. 470; The Imperct “Mogarne (iene de 1830), pp. 11S3-1124, The New Monthly Magaine, ol 33 (ero de YES), p18 El libro fue erunciaga on The Times (I de exer de 1831,p. 1) P Neahel, Treatise, Preface, .V. : (Bp ia recension publicada en The Britsh ond forsgn medlio-chinagica! review or Quarterly journal of proctal medicine and surgery, vol. ra.3 (uiorsetiembre de 1248), pp. 229.230, Oma ieecda def obra, eica oa sig Gs los matoees de andsis empleados por Michel, spacsid {The Landon Medical Gace, vol. VI (1848), 19 de mayo, . 960. 135 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETANA principe defecto, junto a l ausencia de noticias sobre los casos de denuncias y condenes por adulteraciéa que se habien venido produciendo ea los ikimos aiios. La obra no tuvo un impacto duradero, como tampoco lo tuvo la de Nomandy", de parecidas caracteristicas eunque desarrollada en forma de Giceionario y extendida a otros articulos de consumo edemés de los alimentos. ‘A ambas les perjudicd la aparicién pocos afios después de investigaciones més sisteméticas y con metodologia més modema, impulsadas desde The Lancet y con Arthur Hill Hessall como principal protagonista, que tansformarian en la siguiente década el conocimiento de la adulterecién, confirmando la ceavergadura del problema. El estudio publicado en 1855 por Hassall revel6 una extensiéa de la adulteracién en alimentos de emplio consumo que en bastantes casos superaba con ereces la mitad de las miuestras analizadas. Con ello precisaba, poniéndole cifras, las denuncigs de las obras que acabamos de anclizar. Muy probablemente esta ebrumadora presencia de Ja adulteracién no era una novedad, sino la continuacién de una tendencia al alza en las pricticas fraudulentas que venia produciéadose desde décadas atrés. Tampoco podia sorprender a una sociedad ye femilirizada con una siruacién repetidamente ‘expuesta en miltiples escrits, libros y articulos de revista y de prensa, que de forma més 0 menos plena se ocupaben de cuestiones relacionadas con comestibles o bebidas, asi como en los mumerosos anuncies insertas en 10s. periédicos en los que el producto publicitado afirmaba como principal virtud su supuesta autenticidad, pureza y ausencia de adulteraciéa. Lo consideraremos con cierto detalle en las siguientes paginas, centréndones en algunos alimentos 2 modo do ejemplo. Esta extensién del fraude ca materia alimentaria y su conversiém en un elemento de la vida cotidiana dio pie a que los humoristas sgréficos se detuviesen en ella, pues contaben con la complicidad de un publico que se seatia identificedo con lo que se exponfa en las imagenes sin necesidad de mayores explicaciones. George Cruikshank es el caricanurista que mejor supo captar las diversas facetas de Ia problematica que afectaba al consumidor, en vietas como la que representa a cuatro individuos en el acto de cometer cuatro conocidas formas de adulteracién ~la adicién de arena al azticar, de agua le leche, de plaster of Paris (sulfato de calcio hemihidratado) y polvo de ' aiphonse Nomndy, The commercial hand book of chemical ona, Lande, 1850, “Arthur Hil Hassell, Focd and ite oduliorations; comprising the Reports of the Analytical Senitary Commission of "The Lancet”, Londres, 185. ESTEBAN CANALES GIL ANGELES CARBAJAL AZCONA br Tbvesos a Ja masa del pan y do sulfto de hierro al vino!” o la titulada “False weights and measures", que tiene como escenario el interior de una tienda que se anuncia como “The cheapest sbop in London! y defrauda a los clientes empleando pesos y medidas trucados. Hasta qué punto ficcién y realidad se superponian lo meats la informacién inserta ea un periSdico de Manchester, que bajo el titular “Dislogo satrico” reproduce wna escena calleera, en la que un “marinero andrajoso” expone, ante una multtud de curiosos que se habian congregado para escucbarle, una conversacién entre un granjero, un eaznicero, vm molinero, ua vendedor de 18, un lechero, un panadero y un cervecero en la que se contaban sus fechoras, con la aprobacién de un coadjutor pasroguial, No ba do extraiar, por tanto, que un observador extranjero atento a las condiciones de vida de los trebajadores de la época, el joven alemn Friedrich Engels, dedicase algunas piginas ¢ comentar las deficiencias de laelimentacién ¥ viese en la adulteracién de los productos consumidos por las familias obreras vn asunto de la mayor importancia. En su libro, redactado tas su primere estancia en Manchester (1842-1844) y editado en 18¢5 en Alemania, Engels informé de hechos de los que haba sido testigo o habia recogido de los medios islandeses extre Jos que se movié, especialmente a trevés de ou compatiera Mary Burns", pero también se apoy6 en las noticias de la prensa local, sobre todo las publicadas en The Manchesier Guardian durente los meses centrales do 1844, cuando este periédico de fuerte implantacién on el érea y vinculado a Jos intereses mannfactureros insert6 con regulaidad las condenas impuestas @ comerciantes y tenderos de Ja comarca por la venta de productos adulterados, en mal estado 0 con el peso falseado, De haber seguido en Manchester en 1848, ces probable que no hubiesen escapado al ojo critico de Engels la serie de informaciones que este mismo periédico publicé intermitentemente a lo largo de un ato sobre las controversias que estaban teniendo lugar en el seno del Board of Guardians de le Poor Law Union de Manchester, el consejo directvo el organismo que regulsbe la asistencia los pobres en ia ciudad fabril yen ‘once poblaciones cercanas, El debate se suscité cuando el profesor de quimica © The Comic Almanack (1865), p. 54. ° The Comic Almanack (1346) p.116. 1 The Observer, 19 de marzo de 1827.2. > Engels, op cit Ocho de las pions do eticién slemans (90-97) etsban dedicedas& Ia slinentcidn, Ls obra no evo repecuisn en la Gran Brtaa dela épce, pes hasta 1892 no ce podlies Ia radueiéa inslesa. ErRoy Wael, “Tee double hfe of Feiesich Engels", Mémohastar Region History Review, vol. 2 2.1 (988), 7p. 1319. 138 ‘LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETARA encargado de inspectionar Jos alimentos destinados al consumo de los aproximadamente dos mil pobres itemos, euyo suministro la instinicién habia contratado con varios proveedores, declaré haber encontrado adulteraciones 0 deficiensis en diversas proporeiones ea las muestras que se le habian enviado a examen”. A la visa de este primer informe, el Consejo acordé regularzar la realizacién de anlisis, pero omitiendo siempre cl nombre de los proveedores, pues el comerciante suministrador del articulo quizé no tuviese intencién deshonesta®, Cuando esta cantela se rompié en el caso de le harina para pan y Ja barina de avena pare las gachas (porridge), articulos que el analista enconttS particulammente defectuosos™, se produjeron airadas protestas de los comerciantes puestos en Is picota, acompafiades de amenazas legates, contaandlisis y, es de suponer, presiones sobre los miembros del Consejo, quienes por mayors y tras ecalorada disousin decidieron pedirles excuses ¥ Aespedir al quimico que habia efectuado los conflictivs informes™. Harina y pan El pan, 0 la herina con le que se clabora, es el producto que en las ‘décadas de 1820, 1830 y 1840 genera un mayor volumen de iaformacién sobre pricticas fraudulentes y adicién de sustancias prohibidas. Probablemente este Juger destacado refleja a la vez la importancis real de la edulteracién del pan y Ja preocupacién de la poblacién ~de la que la prensa se hace portavoz y 331382 PIB. s 9 de disiemtee de 1628, p. 3: The London Literary Gace ad Journal of Bellet Lees, 27 de dices de 1828. Fees ie erry Gace nd Joural of Belles Late, 29 de naverbre de 1828. ee nee eee completa figura eu un atin de M, Kablnann, apreidoiieisiment ce 4 ba jnlormei Eee Geaembre ce. 1830) reprofucizo nel Bullets des, clone Armas oe rama RVIL (S51), Bp. 2636, The Tones do cases det cso ea p 2 Ge 8 ‘soe el 15 de diciembre 6 1828 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETANA, panaderos londinenses4, Coincidiendo con todo ello, de nuevo aparecieron en Ia prensa anuncios oportuxistas, offeciendo pan de manufacture doméstica, elaborado fuera de Londres y no neceseriamente blanco™, otro indicio de la ‘sospecha generalizada sobre ia antenticidad de este tipo de pan y de las argueias de los panaderes de la capital. Por este mismo totivo los manuales domésticos y los bros de cocina insistan en la bondad de le cleboreciin del pan en el propio hogar’, aunque éste era un recurso que quedabe fuera del aleance de la mayoris de la poblacién, especialmente de los trabejadores urbanos. Hasta el final del periodo coasiderado este estado de cosas no experiment6 variaciones sustanciales. Continuaron publicindose regularmente noticias sobre adulteracién de pan y harina, que en la década de 1840 —quizé simplemente por la mayor variedad de Jas fuentes empleadas en este trabajo fectan tanto a Londres como a muchas éreas industraies: los condados de Stafford y Cheshire", las zonas de influencia o los micleos urbanos de las iudades de Manchester‘, Liverpool”, Glasgow", Leeds” y Stourbridge”. Uso de los casos mas sonedos fue al que se juzg6 en Newcastleunder-Lyme, tuna Jocalidad del norte del condado de Stafford, con le sala Lena de “populacho ‘en inequivoco estado de indignacién y excitacién”. Entre los fabricantes de tharina implicados en la adulteracién del producto figuraba el aleelde de le ciudad. Tras una primera sesiéa, a cuyo témino los encausados fueron ‘acosades por la nmultitud “con gruesas emenazas ¢ incluso con lanzamiento de "Fhe Times 13 de febrero de 1829, .4. 4 The Tes 15d iste de S62, 9.1 The Tres, 13d si 129.9) Wainer Copley; The Hotsolenpers Guide: Or. A Plan and Practical Sytem of Domestic ‘Cook, Loaves, 1838, pp 333-238, Una anterior eicin de bro habia aparerdo en 1834 Ez ‘Rotoa, Mocern cookery, mal i branches, Londres 1845, pp 549-550. BRE Menchaster Gucrlin, 8 de seiembre de 1841, p. 2 timbién The Noriern Stor, 11 ds seshmbre de 1841, 7.3. he Chemist, vol. Ih 22 Biiembre ce 1841),p. 381, 1 Fhe Saher Curio 15 de eadembre de 1821, p. 3, ctta de wn useipor. 19 Tre Novem Star 20 dal de 184, pS; The Ties, 10 de noviembre de 1685, . 5. 8 The Tones, & de ootibes de 1847, p. 3. Ba este eso se tata de bara de vera uduiends, pada al soca Gels pores, Spe Times, § de soviembre de 1847, p. 5, y 12 de noviembre de 1847, p, 4 The Manchester urn 10. woven 167, 75,91 dennis ce 17.27 "Tembida en Hlyoxke, ep. ct, 86" PEE Nonhorn Star, 14 de sect de 1849, p. 6 Se tabla, chundo a un peridico Tocal (Kiddomoer Messenger), de was qunientas victimes en Uatanieto midico dsbide « Te Geereiiba, ‘The Manchester Guardian recoge breverente 1a nosis, precisando, que Ia lounge se cebié a tarze “eceleda sceigetaiments con sal blenguradora, ea tuems d= Rey cue son varias as personas que Ean esado a prt de mari (7 de abl de 1849, v6). [ESTEBAN CANALES GILLy ANGELES CARBAJAL. AZCONA 18 piedras", el andlisis de las muestas de baring vendides en lo misma loeaidad Jen la vecina Sandbach demosté le posencia de alumbre, fécula de patata y Xia porcentaje de sulfeto de calcio bidratado (sulphate of lime © sypstn) Supecior al 16%, 10 que segtn clcrtas fuentes podia explicar Ia misterioss Cchermedad sufvida por muches personas que habian consumido dicho producto”. La karina estaba, ademis, contaminada con mimerosos insects Drucba de is mala calidad iniial del grano 0 de sa deficiente estado Ge vemservacién. El proceso se cerré con multas de 20 libras a los principales Geusados y penas menores a otros implicados. La indignacia populer provoceda por el episodio se transform en escamio en las fiestis de Noweastle, donde el tema fue fuente de inspizacién de baladas que Hidiculizaben a los culpables‘, Pero més ellé de esta mofa con la que. le poblecin descargaba la tensién, quodaba patente [a indefeasion ante este tipo The fraudes y a novesidad de que las zutoridedes tomasen medidas eficaces de ‘control de los alimentos puestos als venta™. “Al igual que en el caso comentado, las sales de calcio ~plaster of Paris (eulfato de celeio heasbicratado) y Derbyshire white 0 limestone (carbonato Cilcioo)~suelen estar presentes en la harina aduiterada, a veces en combinacién Gon ottos productos (buesos pulverizados) que, como el alumbre, se mezclan Gon Ia barina o se afiaden durante Ia elaboracién del pan. A pesar de la amplia Drevencia de estas sustancas, el eluanbre parece haber sido el adulterante més Binpleado, Su-uso era reconocido por algunos panaderos como una préctice a It ue se recaria en sa oficio para blanquear y esponjar el pan elaborado con Fesinas de baja calidad”. “The doctor", como era Usrnado.en la jerge del fqremio, fue aceptado por elgtin articulste como un ral menor, pues, en st Spin, si er utlizado en combinacién con potasa (carboueto potisice), que spwalizaba cl exceso de deido sulfirico del alumbre y Iiberabe gas carb6nico, ‘producia el pan blanco esponjado gue el pibico deseaba sin suponer umn dao Dara su salud, Tenia ademds a ventaja de retencr agua en mayer centidad con EiMconsiguiente ahomo de barina. Pero el problema de fondo era la tgenerlizacin de herinas de calidad inferior, que necesitaban el slumbre pars PEE SEEY tetera > The Manchester Guardion 8 de stem de 18614.2 2 The Mancheser Guardian 1 de seis de 1881.2 2 The hanehester Guordign, 2 de seerbre de 1841, 9.2 i The ehester Gucrlan, 25 de eedembre de 1841, 3 ara eter. Fe eend e aaieabre de 1099, p. 3 cara finzada por “A baker's The Times, 16 de seslembre de 1842, p 7, cara de peadero fos: Robins. SE Geom of Heath, vl. XIV, 1.165, eeterbre de 1829, pp. 64-665, I | Mae LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRANBRETANA, hacer que el pan pareciese bueno, En parte, el deterioro de la harina de trigo se debia 2 su mezcla con otras harinas ~de cereale, judias o guisantes-, algo que estaba permitido si el pan asi elaboredo se distingufa con uma “M, indicadora de mezcla™. Le adicién de fécula de patate 2 Ia berina no era frecuente. Si Io cere, sin embargo, le incorporacién de patetas hervidas a la masa, Los panaderos reconoefan usarlas, en proporciones de una parte por veinte, para acelerar la accién de la levadura y hacer el pan més sustancioso y palatable. La disminucién de la calidad de la harina tenia mucho que ver con la introducciéa, en los grandes mercados urbanos de harina de trigo de clase inferior y coloracién grisicea o amarillenta, obtenida en les fabricas de harina del norte de Inglaterra con motinos generalmente movidos a vapor que apuraban el aprovechamiento de los granos de trigo". A pesar de sa uso extendido, el alumbre era un aditivo probibido por la ley y al que s¢ le suponian efectos ‘t6xicos, si bien sus defensores argiian que, en las proporciones en que se mezcleba, resultzba inofensivo. Probablemente era una cuestidn de proporciones, pero éstas podian variar ampliamente: Accum habia indicado que Je cantidad minima necesaria era tres o cuatro onzas por cada saco de harina™, apenes una parte por mil. Sin embargo parece que los panaderos empleaban bastante mis: uno de ellos, en 1842, decia que se usaban entre 14 y 16 onzes por cada seco; y las muestras analizadas aflos ms tarde por Snow contenian casi un 4,3% de alumbre™, Todos estos adulterantes, y otros similares, eran conocidos al menos desde los tiempos de Accum, hacia 1820. Los tetados posteriores n0 recogea novedades de envergatura y, cuando incluyen en Ia lista de sustancias el sulfto ‘de cobre, lo hacen refiriéndose a su préetice en el continente y no lo relacfonan con casos conocidos de adolteracién en suelo britinico®, Tampoco hay constancia de que se legase a aplicar un proceso de elaboracién del pen, patentado en 1845, que incorporaba dcido clorhidrico (ea solucién acuosa) ¥ 2 Aa lo selaben Ins eyes de 1815 y 1822, vids para Londres yous aededotes, la de splletble al sonjunto de eno, The Fines, 14 de sieabre de 1842, .7 Pesersen op cit, p17. © past, 9p. ci, Pe 134 (9 The Times, 16 de setesbre de 182,07. + Joba Soom, “On the adulteration of bread as a cause of rickets” (Tae Lancet, 1857), 208. ex pemationalYournal of Spidemioigy, v0.32 2003), pp. 336237. ‘Robert Cision, rectise on poisons, Edibuzho, 1836 (1 od, 1829, pp. 424-425; Deadly edulration, p. 89; Michasl Ryan, 4 manual of medical jurisprudence and State medicine, ‘andres, 1836 1" ed, 1852), pp. 481-442; Michell, op et, pp 47 ¥ 38 [ESTEBAN CANALES GULI y ANGELES CARBAJAL AZCONA us carbonato de sedio, permitiendo eamascarar uso de barina de baja calidad Eneesia reaccién se libera gas carbSnico que podria contribuir a la esponjosidad de le masa, Adios mis tarde, cuando Hassall publicé el informe de la comisién sanitaria impulsada por The Lancet, el alumbre era el nico adulterante presente, de forma casi generalizeda, en las muestras analizadas". Es posible que los bajos precios del tigo y del pan a inicios de la désada de 1850%, cuando se recogieron los datos del estudio, facilitasen In desaparicién de muchas de las formas de adulteracién, sobre todo las mas groseras, que tenian ‘como destino final Ja poblaciéa con menor poder adquisitive y menor capacidad de cleccién Los hungry forties babjan quedado aris y las petspectivas econémicas de la poblacién trabajadore estaban comenzando a mejorar. Pero la persistencia del afumbre sugiere que Ja harina usada en la laboracién del pan no era en general de calidad suficiente para poder satisfacer sin 1 a unos consumidores acostumbrados engnfiosamente al pan blanco. ‘Aungue la posesidn de alumbze por harineros y panaderos estaba penada, era Gificil de verificar por muy diversas razones: insuficiencia de controles; revision de los panaderos, que distribuian en lugares recdnditos de sus locales Ya cantidad necesaria para cada homade o compraban la harina con el alumbre ‘ya incorporado en ella®; existencia de agujeros legales, como la indefinicion de responsebilidades una vez el producto habie sido adquirido pot el cliente, lano inspeccion de las tiendas de comestibles que expedian pero no claboraban el pan” ola libertad de venta de alumbre por parte de drogueros y farmacéuticos. ‘La mayoria de estas cirounstancias propicias se repetian en el caso de otros adulterantes, que tembiéa compertien con el elumbre una logislacién que sancionabe con multas de euantie no disuasore las infracciones tpificadas en el 1uso de aditivos y en la comision de fraudes en el peso y calidad del pan y dela ‘harina puestos a la venta: sanciones de hasta 5 libras por fraudes en el pesaje, de diez chelines por cada libra de peso de pan de mezcle vendido como superior, de entre 5 y 10 libras por posesién de pan adulterado (y hasta 20 en el ‘caso de harina), de entre 2 y 10 libras por posesién de adulterantes, ademés de, ‘en ambos casos, la publicacién del nombre de los infractores y el decomiso de 16 The Chemis, vol. VI (geiembre Ge 1945), po. 412-412. arial orgie Labia apres ea ct asso ce Agricultural Garete corespondicte a1 9 de agosto de 1885. FE eacal op. at pp. 123 y 163-166, peteree,ap tp. 272 y 303-304 © The London Medhesi Goce. de agosto de 1883,p. 719: Ure, o. cit. 6. 1 The Timas, 18 de agosto Ge 1826, p2. La ley ertoes vigeats en Lones era ede 1822 pro la _auova ley de 1836, apeable a todo el pis, maztuvo en ext punto el redactao del anterior 6 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETARA, los productos adulterados. La cuantia de las sanciones habia permanecido invariable en Londres desde 1822 y la legislacién londinense se extendié en 1836 al resto del reino, que hesta esta fecha se habia regido por disposiciones contra la edulteracién incluidas en las respectivas Assizes of Bread que hasta entonces regularon la venta del pan, no muy difereates en los castigos contra la adulteracién”. De ecuerdo con estas nommatives, lo habitual eran multas como las impuestas a seis panaderos de Londres en febrero de 1829, cinco libres a ‘inco de ellos por haber adulterado pan con aluwbre y diez libras a un sexto por impedir la ebor del funcionario que investigeba su local”, 0 entre una y doce libras 2 otros catorce panaderos de la capital, en 1832, por estar en posesi6n de alumbre, defreudar en el peso 0 ambes coses”, Pero lo que hacia menos disuasorio el castigo previsto en la ley era la dificultad de poder desoubrir y condenar al infractor. Bjemplos como el expuesto en las péginas de The Times cn los meses de sctiembre y octubre de 1835 muestran hesta qué punto era Gificil demostrar la comisién de un delito de adulteracién y o6mo las responsabilidades podian diluirse hasta quedar en nada: William Fortescue, ua. panadero londinense, zcude a Is policia demunciando que, ante las quejas de sus clientes por el pan que les vendia, habia hecho exeminar la harina que utilizaba yy ésta parecia estar adulterada con lo que, segiin después se provisard, era usa notable proporcion de lime (mezcla de éxido de calcio 0 “cal viva” ¢ hidrdxido de calcio o “cal apagada”). Bl panadero habia conpredo 1M sacos de esta harina (ais de 1.750 Kilos) a un harinero de Woodbridge, en el condado de Suffolk, a través de un agents comercial. El harinero comparecié ante la policia efendiendo su inocencia: llevaba rauchos afios en el oficio y nunca habia sido acusado de adulteracion. A su vez, el agente comercial se presenté dias més tarde en la comiseria de policia de Marylebone, en compaiiia de dos empleados del puerto de Londres, para testificar que él inicamente se habia limitado a hacer de intermediario en la opereciéa y nunca hebia estado en contacto con la hharina que habla viajado de Woodbridge 2 Londres. El magistrado encargado el caso consideré improbable que Mr. Thornhill, el agente comercial, hubiese 7 Ta aomativa sobre adteraign inorperada ew It ley de 28 de julio de 1836 figura x The ‘States ofthe Untied Kingdar of Groat Britain and Ireland. 1836 Loudces 1835), pp 210-215. En Tre Law Magasin. or Quarry Reni of Jarspradence, vel. XVI (1530), pp. 460-462, 33) ‘un ampilo resumen dela minma. La legislacin de 1822, aplicable& Londres, iss dispoicionss ‘igen bass 1836 en ones tetris se pueden cons ea The Jstice ofthe Peace and Parc Gficer.Twergnseth edition (Londres, 1831), ol. 1 pp. 402-485. Te Tes, 13 6 febrero 1828,. 4 ” The Times, 21 6 cies de 1832, p4 ESTEBAN CANALES GILTy ANGELES CARBAJAL AZCONA ur adulterado la herina ¢ interpel6 al analista quimico que habia realizado la primera inspecciéa, que a sa vez admitié que el resultado del andlisis no era {ndiscutible, Finalmente, fa berina se somete a un auevo examen y el perito ‘encargado de efectuarlo concluye que no puede hablarse de adulteraciéa, pues “cualquier hatina ... estaba impregnada con cal y .. la materia terrosa presente cen Ia harina de Mr. Fortescue no superaba cl 0,646 ... un poreentaje dentro de lo habitual”, Para entender por qué abundan las adulteraciones y fraudes también hay que considerar las condiciones en que se deserrlla e] negocio de Is venta de pan. Le cémoda posicién en le que se encontraban los panaderos hasta casi el final del siglo XVII, al abrigo de une reglamentaciéa (Assize of bread) que fjaba las caracteristicas de Ia elaborecién y venta del pan y el precio del producto pero también les esegurabe una modesta recompenss, babia ‘comenzado a desmoronarse con le creciente fuerza adquirida por los molineros, cen libertad para fijer el precio de la harina. Antes de acabar el siglo babjan surgido empresarios en este sector con capital suficiente para prestar dinero @ los panatieros y asegurarse el control, de manera directa y sobre todo indirects, de los panaderos a quienes prestaban y aprovisionaban de harina, imponiendo ‘sus condiciones, Era un escenario destinado a perduras”, Ademis, la erosi6n de la Assize of bread habia facilitado, en Londres, el aumento del niimero de ponaderos, que casi se doblan entre 1793 y 1815, y lz competeacia eatze ellos, parte de los cuales recurrieron a vender el pan por debajo del precio establecido!’. Con la abolicién de la Assize en Londres (1815) y la posterior abolicién de las restricciones que todavia subsistion sobze el peso y Ja denominacién del pan (1822) se dio libre curso a la competencia entre panaderos, una competencia que se extendi6 ea 1836 al resto del reino, al ponerse fin en esta fecha a les reglamentsciones por las que ain se regia siquiera nominalmente el negocio del pan fuera de Londres. Aunque el mimero de panaderias no crecié més de lo que lo hizo la poblacién londinense, ‘aumentaron las que pusieron a la vents el pan a bajo precio”, desatando una ‘guerra comercial que condujo a una dréstica reduccién de los margenes de bbeneficio, imposible de sostener sin merma de la calidad del pan, Esta situacién 5 7he Tine, 29 doom de 1835,p. $ dz oabre de 1835, p77 de ovtbre de 1835, 9.4 12.decerbre de 1835, 9.6. Pe Times, 24 de sederbre de 1828p. 3, cara de un pinadero. 7% Jon Busners The Histon of Food Jdueration oe Great Brian in the Nineteenth Cony, Pb D. Thesis p24 peteraen op. et P73. ue [LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETANA, consolids la presencia en la capital de dos tipos de establecimicntos, drigidos a piblicos distintos ls panaderias bareies, destinadas a la clientele de los barrios Populares, y las cares, sits en c] West End y otras zonas respetables de Ia ‘Giudad, con diferencias de precios de dos peniques o mis en une pieza de cuatro Iibras, equivalentes al 25% de su importe, En palabras de un articulista de le Goce, semejante disperidad solamente podia deberse a “una gencralizada y culpable adulteracién” y se reflejaba en la calidad e incluso en la apariencia del pan cousumido por ticos y pobres, aunque tazmpeco los que mis pagaban por él {enian gerentizada la excelencia del producto, pues habia panederos que cedian a latentacién de engatiar a quienes creian que todo lo caro es bueno" Cerveza Después del pan, bebidas como le cerveza, el té y el café figuraban entre los productos més ampliamente consumidos por la poblacién, xpocialmente entre los seotores de menor poder adquisitivo, para los que otras bebidas mas matrtivas “leche 0 asociadss a cierto estatus social ~vino, brandy 6 Ticores de importacién- no formaban parte de Su diets habitual, Los datos fxisentes permiten, con un cierto margen de indeterminacién, evaluer la fimportancia relaiiva de estos artioulos dentro de la cesta de compra: la sums de fa cerveza, té y café, suponia en 1841 més del 20% del total de los gastos en. comestibles y bebidas de la poblacién britinica”, que a su ver representabas, para la mayoria de componentes de la poblaciéa trabajadora, entre al 65% y el 70% de todos sus gastos (1840-1854)". ‘La cerveza hebia sido tradicionalmente la bebida mas popular y mis consumnida, superande largamente otras bebidas alcohélicas y las nuevas modas os y café- que durante el siglo XVII comenzaron a difundirse desde los circulos elitisas. Lo seguiria siendo todavia a lo largo de la primera mitad del siglo XIX, aunque le Llevarfa tres décadas recuperar el nivel aleanzado bacis 1800, evanda la ingesta media de cerveza en Inglaterra y Gales se situd en F cuavies Wats “On de celica of bread" The Chemist, vol Ia. 9 (Getierbre de 2840), 2p. 26078 Sars Home! “Home dewand and Brith industalicatoa”, Journal of Eeoomle Hisar, vl 56,3 G90), pp, S614, 399, El esloul agrogado de era sutra m9 ince os productos lates, ve pobablemente egivalian a ov0 15% Semel ap ct, 7.569. [ESTEBAN CANALES GILTy ANGELES CARBAJAL AZCONA, “9 tomo a los 35 bartiles per eépita", impulsada por la reduccién en 1830 de la Escatidad que sobre ella recaia. Una citre que tardaria otros treinta afos ex superarse, pues las dificultades econémices de le década de 1840 probablemente hicieron dsmimuir su consumo ente los tabajadores, ue por si olos suponian zproximadamente las tres cuarlas partes del mercado de Ja Cerveza, Bn cualquier caso, la ingesta de esta bebida era elevada, incluso si Gemos por buenas las cifras anteriores, que exctuyon una pequeda parte de le decadente produccién domestica y la incipiente importacién procedente de Stianda y Eseocia, dreas menos aficionadas a la cerveze. En 1844, un ato rrormal de aquella década, el consumo medio de cerveza entre la poblacién vreoulina aduilta fue de 72 gelones!, equivalentes a casi un lito diacio. Para Sntensas capas de trabsjadores la cerveza estaba en el contro de una cultura de jp sociabilidad y la masculinidad asociada al consumo de bebidas alcobélitas fn establosimientos publicas, Al mediar el siglo la producciéa doméstice de Gerveza, antazo tipica de las areas rureles, habia casi desaparecido ~excepto Gane los granjeros mis acomodados y los hacendados-, vietime del cmpobrecimiento general dl cempesinado, pare el que resultaban muy difiiles de asumir 1os costes de su fabricacién, y de la ereciente urbanizacién. La Gerveva que se tomeba en las decenas de miles de cerveceras, tabernas y Ipeales babiitados para su venta era preferentemente cerveze negra, de gusto amargo y fuerte con una graduacién en origen que oscilaba entre los 7.25" de la brown stout y los 5,25° de la més popular porter, ea contraposicion con la més puliga y lige ale, eunque ésta munce habia desaparecigo en las reas de les Midlands y del norte de Inglaterra y comenzaba a adguirir auevos adeptos entre Ia clase modis", No por casualidad David Copperfield, el protagonists de la novela homdnima de Dickens, en su camino hacia Ja respetabilidad pide que le seen mr vaso (glass) de ale no una jarra (por) de porter™. La produesién de gerveze teodi6 a estar controlads, en Londres y otras ciudades, por grandes faopresas que a su vez crearon redes de distbucion, pero hasta més allt de ls Gerdes cevtrles del siglo XIX todavia mubo hueco pare el cerverero TER Geurish y RG, Wilson, The Brite browing inte, 1$30-1980, Candee, CUP 1998, ie B Soa Wiser, o. tp 38 een sy soil Risto of drinks in modem Brian, Lents, Reuse, 1998,9. BL 1998-2 PL ey, “Dik in Devil Coperit’, Wiliam Bek ¢ a Bret Wael (0) Be ee mee on trans and aol nro of Jose Meee Ma, Se ace Oey Prt 2008 92-39. 130 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETARA, independiente, que le fabricaba para la venta en su propia tabema 0, desde 1830, en los establecimmientos que habian adquitido licencia para ello™. {a adulteracién de la cervera tiene une lerga historia, con expertos y divulgedores que habian dado a conocer los secretes del ofii0, nclvido el ws0 de ingredientes prohibides, desde mucho tiempo atris. Una de las obras mds Gifundidas, 1a de Samuel Child, habia aparecido en la sltima década del siglo XVII y se reedité en numerosas ocesiones®, Accum, en su popular tretado sobre adulteracin de alimentos, detall6 las condenas impuestas a fabricantes,y endedores de cerveza entre 1813 y 1819 por uso de aditivos prohibidos™, Zunque su arapia lista no reflejaba la realidad en toda su dimensi6n, La razén de fondo de la difusién de Ia adulteracién en aquellos aos era la dependencia on que se encontreban Ta mayoria de minorists, vinculados a una empresa ervecera, que les hnbis prestado el capital necesario o les babia amrendado el Tocal, una situsci6o que les obligaba a aceptar unas condiciones leoninas pot parte de sus proveedores y a explotar a su vez a los parroquianos si querian Eubsistir en el negocio, De poco sirvieron las revelaciones de Accum ante Ie perviseneia de estas condiciones tan propicia a le adulteraciOn y al Saude. EL faricter dudoso del liquide que con el nombre de porter se vendia en las tabernes de Londres 0 de otras ciudades britincas se convirio cn los afos siguientes en un tépico que podia denunciarse o comentarse de forma més o menos frivola. En 1822 surgisn rsas de los bancos del Parlamento cuando una de aus tetiorias se quejaba de la adulteracién de la cerveza a la ver que tconfesaba no haber “probado ni el daiino cocculus indicus, ni la cuasia, ni la mux vomica™®, todos ellos conocidos adulterantes empleados en su elaboracién. En 1829 las paginas de The Times acogian wna carta cuyo firmante, experto en clandlisis de la composiciéa de la. cerveza londinense, indicaba haber detectado “algunas muy euriosas y desagredables adultcraciones". El remitente no sebia si atribui la responsebilided al fabricante o al tabernero, quien a menudo altereba Ja composicidn dela cerveza, aunque ecertadamente exponia Ja dependencia en 3 Fick 0. Win, “Sling born Vitor Sra", Geotey Youssy Nicolas J. Mors a a caren he own Brewer A mail ete, elanng the rad mony of brewing porter, le ovporny, ond be ber, Lantet 170. atu oh cpp ISIS y ETT. * Se idonehate Guardian 27 jo 1822p, itrensin de Broaghes ca e isan de tee Conaer cn dsr dizi de a cones de exits de venta de cove EL EuSo paltcrctrio oboe, Hanson's Partomenory Debates, eee I iakeventén peo puns (Socnd Serie, vol 7,18 ul 6 182. ESTEBAN CANALES GILT y ANGELES CARBAIAL AZCONA 1 que se eacontrabs el minorista, “obligado a recibir el producto, por muy Spominable que fuese, pues si estaba atrasado en sus pagos no podia rechazar tun mal ariculo™®, El mismo ao The Manchester Guardian reproducia de ua “Deriédico de Londres” le préxima aplicacién de fuertes castigos 2 $00 6 600 ‘tabemeros acusados de adulteracién, informacién que el mencionado periédico decia proceder de fuentes de la méxima eredibilidad”, Esta ultima noticia probablemente exageraba las dimensiones legales del problema pero no estzba demesiado alejada de Ia realidad: @ comienzos de 1831 el Parlamento comunicabe, respondiendo a la solicitud de “tna relacién del niémero de condenas por adulteracién de cerveza, desde 1827 hasta lz Setualidad”, efectuada por tin miembro de los Comunes”, que desde enero de 1827 habian sido declarados culpables 16 cerveceros, 231 minoristas y 5 rogueroso similares”, No he de extraar, por tanto, la preseacia persistente de Seferencias sobre delitos de adulteracién de cerveza ea la prense de la époce ¥ {lque ésta al exponer un caso selalase la existencia de otros muchos parecidos. Conndo todavia estaban frescas as demuncias contenidas en el libro de Acct, ‘Tae Times dabe cuenta de la condena a un tabernero por hallérsele en posesion de granos del paraiso, cuasia y otros “ingredieates pemiciosos", sentencis que segin el periédico suscit6 gran interés por estar unos novents tabemneros jmaplicedos en pricticas similares". Uno de los ejemplos més ilustativos de 1a amogencia y Telativa imponided oon la que se movian quienes cometian prdcticas iictas es la demanda que el duefo del negocio de amargantes Tpaperial Stomackic Bitters interpuso contra el propietario d= un dominicel Iendinense de amplia circulacién, Bell’s Life in London, por baber éste publieado una carta al editor en la que se decia que uno de los productos Peadidos ere un preparado para adulterar la cerveza que contenis vitriolo verde (Gulfao feroso) y alumbre, BI deaiandante, Manning, impuso al semanario uo fectiffcccién y, no contento con ella, exigi6 una campensacién econémica, pues habia perdido muchos clisates a raiz de aquella informacién porque los tabernsros dajeron . 3. Wits Blas, sor de wn mans pat Pa eee orschaa! geste on broving, Leics, 1838) y defer del couporamiecto de Teer GSC cs Saco conicrte qu no abi ant par probes us, dade sn abepon 156 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETARA, extrafar, ante tanta mezcla, que los efectos embriagadores de la cerveza consumide ex muchos establecimientos estuviesen muy por encima de lo que Podtia espererse de su rebajedo contenido de alcobol. La insuficiente vigilancia de la adulteracion y la dificultad de detectar cn la cerveza la presencia de ingredientes ilegales resultaron elementos poco disuasorios para quienes, forzados por Ia necesidad o por el ansia de lucro, dévidieron transgredir la ley. Esta siguié siendo hasta 1830 la vigente desde 1816, que imponia 200 libras de multa al cervecero o vendedor de cerveza que tuviese o usase para su claboracin cualquier producto distinto de la malta y el ipulo y penaba con 500 libras a los drogueros que lo vendiesen con este fin" El Beer Act de 1830 intodujo unos nuevos baremos claramente inferiores, aplicables tinicamente a los establecimientos licenciados de acuerdo con la suova ley: les multas por adulteracién oscilaban entre en un minimo de 10 bras en caso de primera sancién y un méximo de $0 libres y dos aios de pérdida de fa licencia, si se reineidfa por segunda vez", Pero el mantenimiento de la legislecida anterior pare los restantes casos ocasioné dudas sobre la Giscriminacién que generaria su eplicacién'*. En la prictica, se entendi6 que también las beerhouses estaban sujetas 2 las penas por aduiteraciéa vigentes anterionmente’” pero al mismo tiempo se rebajaron notablemente les sanciones, impuestas, como ya se venia haciendo antes de octubre de 1830, de forma que Jas multas eplicadas @ unos y otros apenas si quedaron por encima de las indicades en el Beer Act de 1830. Casos como los de William Kettle Graddon, Juzgedo por veader en dos acasiones botellas de colorante a un tabemero, con ‘una peticién de mil libras de mutta Inego rebajada a 25 libras', 0 el de John Spencer, tabemero de Londres, quien por estar en posesiéa de un preparado ‘para oscurecer el color de la cerveza se exponia a una sancién de 200 libras que fue reducida a 20 libres! son frecuentes. Por otra parte, los drogueros, & quienes muchos observadores responsabilizaben del comercio de preparados adulterantes, conseguian escapar impunes recurricndo 2 estratagemas como la 8 George Chetwynd, The Justice of Peace, and Parsk Offer (hy Richard Burn). The Twens) ‘Third ediion, Londres, 1890, a "Excise", pp. 68.71 18 fn det to permit ihe penercl Sale af Bear ond Cyd by Retall in Engl, ex The Stanton ofthe Usted Kingdom ofthe Great Briain and Ireland. 1830, Londres, 1830, p. 372-386. "The Mowhiy Review, vol. 15,n, 62 (ecsore de 1850), pp, 180-188 ° Reports of ases argued and detennined In he Cours of xchoauer and Exchequer Chamber 1836 10 187, VoLI7: A General nde, “Libiity cereale of oe a pensles” Lanes, 1849, The Times, 23 de mayo de 1638, 9.6. The Times, 20 de dieiembre de 1839, p.6 ESTEBAN CANALES GILIy ANGELES CARBAJAL AZCONA 187 ‘venta a terceros de estos productos, Pese a las voces que se alzaron considerando que la escasez de adulteraciones que acababvan descubridndose y sulténdose no offecia suficiente proteccién al piblica”” y que se necesitaben castigos con mayor poder disuasorio, como la pérdida de Ie licencia, nada se hizo. Es dificil precisar la extensién de Ja adulteracién en estos aos. Sendas ‘estedisticas de la segunda mitad de la década de 1830 proporcionan un indicio de su amplia presencia, Ambas proceden de fuentes oficiales y, aunque contienen datos contradictorios entre si, coinciden en offecer unas cifras de delitos por adulteracién equiparables a las anteriores 2 1830: la relaciéa de condenas contra personas por adulterar cerveza” on Ingleterre y Gales durante Jos tres afios comprendidos entre el 11 de octubre de 1834 y el 10 de ocnubre de 1837 da una suma de 213 senciones; Ia relacién citada en el curso de un debate parlamentario para la misme érea y un periodo similar ~Ios aiios 1835, arroja Ia cifta de 325 delites'™. Los dos periédicos consultados emdtica The Times y The Manchester Guardian siguca proporcionando en los veinte silos posteiores al Beer Act de 1830 un goteo de informaciones sobre juicios por adulteracién de cerveza, pero ninguno de ellos parece tener gran cntidad y el conjunto de los casos notificados queda muy por debajo de las cifras antes mencionadas. Apareatemente, resultaba acercada la optimista vision del anénimo cervecero que en, 1834 afirmaba que Ja competencia habia mejorado la calidad de la cerveza™™, Aparentemente, porque el problema no estabe tanto en la cerveza producida por los febricantes ~aunque la proliferaciéa temporal de pequefios cerveceros al amparo de la legislacién de eI hesho oo remalaba desconoci, pues Charles Villers, une de los miembros éel comité parlamentario ncarpado de investiga: sobre la aulieraciéa 6 fos alimectos, pregunta per él uo eis tessigos Joie Michell, quien lo confi, Parliamentary Papers. Repora from Cononiees (13 Decener 1884 ~ 18 dngust 1859), vol. Il First Report from the Select Comittee on Aditeration on Food. Mires of evidence, p98. Chures Wat, "On the adalteraton of poe, The Chemist, vol yn. 5 (uno de 1840), p. 175 os ftereccion eo os Comunes de Charles Sioherp. Hansard’: Parliomentary Debates, Third Sorte, vol. 1 (2 de ditenbre de 1830). "F parliamentary Papers (13 november 1857 ~ 16 august 1836), vo. 42, p. 325. Los dats procedian dela cficina del Excite ex Londres y Se clsboraca a peiiéa de la Cizam de los Eossunes, que cs teed el 9 de julio de 1838. The Monchasier Guardion pubic un resumen (& de agosto de 1838 9.2) Hansard’ Parliamentary Debates, Third Series, vel. 48 (27 de junio de 1839). Los datos tos ‘mensional patlamentrio radial Joseph Hume duraze Ia dscisin Ge ax nuevo Beer Bil Procedian deta informe pedido por el ministo de Hacienda. phe Timer, 8 de mayo de 1854, p 2. Crt de“A brewer and ax exezy te monopoly" al editor 138 LA ADULTERACION DE ALIMENTOS EN GRAN BRETANA, 1830 tampoco era una garantia de buen producto” como ea la manipulaciéa ue dicha cerveza recibia en los puntos de venta y porque por aquellos adios ua. lector atento podia encontrar indicios poco tanquilizadores entre las noticias del mismo periédico que habia publicado le carta del ansnimo cervecero. El 23 de febrero de 1833, 2 los pocos dias de haberse condenado & un cervecero londinense por el empleo de vitriolo verde en la eleboraciGa de la bebida, se apuncizba un test pera detectar el sulfato de hierro, “con el que la cerveza es tan. ‘frecuentemente eavenenada”, embotellado y apto para ser usado por personas, sin conocimientos quimicos™. La prueba se comercializaba como Faraday’s Beer Test, Michael Faraday, posteriormente conocido por sus descubrimientos en el campo de la electricidad, era por entonces analista y director del lboratorio de la Royal Institution de Londses y su test para descubrir la presencia de vitiolo en la cerveza se habia empleado en el caso recientemente Jjuzgado en el tribunal del Excise™. En 1835 aparecfa un anuncio de cerveze ‘porter embotellada, a la venta en una tienda del Soho por un precio poco mayor que el de la cerveza a granel y “libre de les debilitadoras y pernicioses adulteraciones que son caracteristicas, como se sabe, de muchas de les porter cordinarias"™5, E] embotellado y etiquetedo se iba sbriendo paso con cierto retraso en el caso de la cervera, un producto apegado a las trediviones y en que los grandes fabricantes tenfan asegurada la salida de su produccin a través de Jos mizoristas entre los que Ja distribuian. Podia ser una garantia contra la adulteraciéa, como insinuaba el anuncio, pero no ere una gerantia absolute, Guinness, la empresa cervecera dublinese que se estaba haciendo un hueco en el mercado britinico, suiti6 repetidas falsificaciones de su etiquetado’™. Con motivo de una de ellas informé al piilico de Londres de “la extrenaa dificultad de prevenir tees fraudes”, por lo que habia ordenado retirar su norabre de las efiquetas de las botellas vendidas en Londres y comercializar en adelante el producto exclusivamente a través de una devens de puntos de venta, alos que remitia a detallistas y consumidores privados™”. Goundthy Wika. op 66 p19 "The ina, 2 ebro 8 1653, p.7. The Tce 19 beers do 183, 4 ljulo habia tere ingar ol ia ete. 8 The Ta, de oosee de 185,91 3+ Fel Dog coge oso cass de Bae ol equenoo en el produto cate 1838 y 167 eo Is reece incomplcta “Developing te Brad: The Cave of Aleaial, 1600550", rrerprie Sot, vo a3 (2003), p, 405-44, 20. 2 The Fines, 20 ce dicinbre de 182, 8. ESTEBAN CANALES GILTy ANGELES CARBAJAL AZCONA 189 Noticias como éstas permiten entrever una realidad peor de lo que podtla esperarse de tomar como referencia los casos de adulteraciGn juzgados fn es tribuneles del Excise, pero en consonancia con lo que se sabe por otras fuentes algo posteriores. John Mitchell, el anelista quimico auter del ya comentado Treatise on the falsifications, declaré en 1855 haber examinado 2 10 largo do su carrera profesional unas 200 ruesiras de cerveza procedentes de cerveceros y taberneros y que todas las de estos dtimos tenian algin tipo de adulteraci6a, prefereotemente 1 adicién de sulfeto de hierso"™. Muy poco tiempo después Hassall resumia Tas conchusiones del andlisis de las muestras de dos vatiedades de cerveza negra (London stout y porter) obtenidas de los principales cerveceros de Londres y de los taberneros. En casi todas elas Ia sal tstabe presente, a meatdo en considerable cantidad, mientras que la cerveza procedente de las tabernas tenia una graduacién alcohélice inferior (més de un grado en ol caso de la stout y mis de medio grado en el caso de la porter) ale Ge las cervecerias, “que sélo podis ser explicada satisfactoriamente por la adicién en muchos casos de agua"™”. no aleohélicas, el té y el café fueron las de consumo rods habitual, en una época en la que el agua sin hervir no resuliaba recomendable, en especial en las éreas urbanas, y en le que Ja leche no estaba todavia incorporada a la dicta diaria del grueso de le poblacién’™, para cuyas ccapas inferiores era un producto prescindible en épocas de crisis". Al igual ' Pariamennary Popes. Repors from Commitee: (12 December 1854 ~ 16 August 1859). ok Ik ‘Fir kegort ftom the Seen! Commitee on Adatortion Food. Minutes of evidence, p. 94, Se ‘puicé toa ven snplificaa com el contenido dels declaracionesefeersadss por les xperos Ehados por # Comte cone ula Achiteraton of food, drink and drugs (Lendres, 1833) ‘Arbus HI Hasell, Pood and edultrations,"atrodvetion”, pp. XOXVIIXXVIB. 1 versasestinacozes stan a consumo por éebajo del Lito sematal per efpita: John Wedge, (Goneral Vew of te Agrcetare of the Covnty of Warsick (Lonics, 173, pp. \ei5) ofc Us ‘Gato apeoninado, prs Londres y sbi, ee ea 10 lanes de gatos avales,equivaeates SESSios Ue og lines poe sexoany DT. Oddy, “Food i minetwata centuy Englané: marion int ‘i eat slag Proceeds of te Muartion Socie, 2.29 (1970), . 155, 1 fj en 09 Uses ‘or sma en 1841 coe la poblscifn wabojadora de Manchester y Dukiaeld Ir re i en 1863, cuando ol coarumo ene or tb acer wrbunos sfetados por el jaro y ch sabonpleo ae sedujoo in mites D.. Oddy, “Ushan famine in Ninetenth-Century Bric: tie Chtct of he Lasaskie cotton famine on working-class diet and teal", Beonomic History Review, vol 36,0. 1 (1983) pp 6886 160 LA ADULTERACION DE ALIMGINTOS EN GRAN BRETARA que el té, el café se introdujo en el siglo XVII entre las élites y durante la primera mited del siglo XVIII la cafeteria fue wn lugar de sociabilidad donde ‘una clientela no necesariamente acomodada podia tomar café, funar, leer el periddico y conversar. Pero en le segunds mitad del siglo XVIII algunos de sus ris selectos usuarios habjan pasado a frecuentar los clubs privados y el nimero de cafeterias comenzé a declnar, de fomaa que a comicazos del siglo UX estaban desepareciendo del paisaje de Londres! A pesar de este pasajero éxito inical, el café siempre habia sido una bebida escasamente difimdida fuera de los circulos urbanos y menos consumida que el té: los datos de la dltima década del siglo XVIII apuntan hacia un consunno entre diez y veinte veces. inferior al del 16°, Una dasigualdad en parte explicable por razoaes de precio: aunque el café comprado en granos tostzdos 0 molido costaba aproximadamente la mitad que el, una misma cantidad de 18 en forma de hj secas offeoia un rendimiento superior, pues admitia dos o tres veces mis agua que el café", y podia reutilizarse sin demasiade merma de calidad. Pero también por la mayor palatabilidad del té, ue 2 diferencia del caft no precisabe mezelarse con leche para contrarrester el sabor amargo, y cuyas hojas 3° ‘conservaban mejor que el café tostado y molido™, Sin embargo, la distintz politica tarifaria seguida con uno y otro producto permitié en las primeras décadas del siglo XIX un fuerte crecimiento del consumo del café, al tiempo que se estancabe el del té, si hemos de dar crédito a las cifras oficiales de iportaciones, de origen fiscel, que enmascaren el contrsbando que favo que arse con tarfas aduaneras elevadas. Los impuestos que gravaban el café se redyjeron drésticamente en 1808 -pasaron de 26 a 7 peniques por libra de ppeso- y, con alguna oscilaci6n, siguicron bajando hasta los 4 peniques por libra aque desde 1842 pagaba el café procedente de las plantaciones briténicas de las %3 Bennet Alan Weinbergy Bonsie K Bealer, The world of caffeine he scence and cure ofthe sworl’s most popular dig, Londres, Resiledge, 2002, zp. 158-163. Segin el palamentrio ‘Wisco Bar solamente queda waa cafeteria en 1811: Hansords Perlzmontary Debares, Third Series, val. 3 @1 de marzo e 1844) Baa R Mitchel, Bch Historical Stans, Cambridge, CUP, 1988, p. 709. 1 Tebles of dhe revenue, popultion, commerce, & af the Crit Kingda and ts dependences. Part XVII, 1648, Londres, 1850, 9. 262-203, datos cel qunguenio 1844-18, 5 Gooege Dodd, The ood of Landon, Locdres, 1856, 9.414, 26 Burnet, Liguidplonraree,p. 80. Sobre las zones Ge la tempraca pre‘erencia brisnia pr el, SD. Stith, "Accouating for user Ents coffee consumption historia! perspective", Journal of Inserlscipinary Histor, vel. 27,2. 2 (1996), Pp. 182214. ESTEBAN CANALES GILLy ANGELES CARBAIAL AZCONA 1a ‘Atlas, principales proveedoras del café consumido en el Reino Unido™”. Los impuestos sobre el té siguieron durante la mayor parte de este periodo una trayectoria divergente, desde la levedad de un 12,5% sobre el valor del producto (1784-1796) hasta la alta tasa de 25 peniques por libra fuese cual fiese el precio del té (1836), que on sus variedades inferiores se situaba en 11 penigues Ia libra’. Pero en ningim momento el consumo anual de café por persona en Gran Breiala, que se habia multiplicado por mas de veinte entre 1801 (30,9 gramos) y 1841 (667.6 gramos)™, llegé a superar al de té, aunque estuvo cerca de lograrlo a comienz0s de la década de 1840, cuando todavia este ‘ikimo no habia salido de su estancemiento"™. Tampoco era equipareble al do tes areas de Europa, con consumos por persona cercanos o superiores a tes (rusia), cinco Dinamarea) 0 incluso siete veces (Bélgica) el del Reino Unido", La relativa populasizacion del café se acompaiis de una floracién de cafeterias, as dos mil solamente en Londres al decir de un parlamentari'®, y de una apertura de Ia clientela hacia sectores tabsjadores cualificados, que gracias al abaratamsieno del café habian convetido esta infusién en una de las altemativas a la cerveza y otras bebidas alcobélicas, para contento del {ncipiente movimiento en pro de la abstincncis de alcohol. De todas formas, el café seguia resutando un producto relstivamente caro para los bolsillos populares, tanto frente a la cerveza ~en 1840 una taza de café con leche y azicar costaba entre uno y tres penigues cuando por este titimo precio se podian conseguir dos pitas de cerveze™— como frente al té, que se podia preparer con més facilidad en casa ‘Una de las razones del nuevo cambio de cilo ea el consumo de café y & que se produjo a mediados de la década de 1840 fue esta caresta del café. Este tendi6 de forma temporal a aumentar su procio en tomo a la segunda mitad IR Moculoch, A Dictionary, praseal, theoretical, and historical of commerce ond conmerciel navigation, Lonéres, 185, vol. 1, pp. 215-316. TR Meculloch, 4 Distonary, practical, theoretical, ond historical of commerce and commercial ravgaton, Plladelga, 1852, vol. 2 pp. 28 y 631-632; Hanserd’s Perilzmeniory ‘Debotas, Tied Series, vol, 73 (29 de marzo de (844), aterveaci de Wiliam Wiis. OF George R Pores, The progress of tke nation in is various social ond econcmis! relations, Lovers, 1881, p-548, {rant este priodo cl consumo de tex edo el Reino Unido fue apenas ua 25% supecior al de afé en Gran Brows: Poe, op. cit pp. $50 583. ‘atom Ceswfoed, “Hise of collec, ournol of the Reyel Statstcal Sacer of London, vol. 15 (1849), pp. 50058, 56. Se ansend’s Parliamentary Debcts, Third Seris, vol. 73 Q1 do marzo de 1844), Inervencién de ‘walle Ewa, Porter ap. cit, p £795 Bune, Plenty nd wor, p. 86 | | I 1s [LA ADULTERACION DE ALDMENTOS EN GRAN BRETANA, de la déceda de 1830", un hecho al que posiblemente no fueron ajenos los desajustes on el mercado de trabajo que sc dieron en las plantaciones de las Indias occidentales briténicas en los 2iios que siguieron a la abolicién de la esclavitud (1834), mientras el precio del t€ comenzaba a descender tras Ja desaparicién (1833) del monopolio que sobre su comercio habia mantenido la East India Company y a pesar de seguir estando fuertemente gravado, Como se ha sefialado, era natural que en tiempos de crisis “Io fueron los aos cuarenta- 2 optase por reducir el consumo de lo que todavia se consideraba un bien n0 consolidado a favor del més barato y arraigado té", Apenas una veintena de afios més tarde el consumo anual per cdpita de tf en el Reino Unido triplicaba al de café tra razén de las diferentes trayectorias seguidas por ambas infusiones fue la baja calidad y escasa fabilidad del producto vendido como café desde el ‘momento en que se renuncié a perseguir su mezcla con la achicoria (1840). La riz seca, tostada y molida de este vegetal venia siendo cultivada y empleada en cL continente desde finales del siglo XVIII como un aditivo barato con el que rezclar el café. Durante los afios de las guerras napolednicas se difundié alli por Is dificultad do importer café, pero no se us6 para este fin en el Reino Unido hasta después de 1820, La legislacién contra la adulteracién vigente desde 1803 prohibia bajo multa de cien libras la tenencia y venta por parte de comerciantes y tenderos de guisantes,judias 0 abas y otros granos y sustancias, vvegetales en lugar del café o del cacao, pero sin mencioner explicitamente Ta chicoria. Tampoco la mencionaba la nueva disposicin que en 1822 permnitia la venta de cereal tostado, guisantes, judias o habes y chirivies, sin moler y en recipientes etiquetados con su nombre, con sencién de 50 libras a los infractores, ni lo habia hecho Accum en su conocido Treatise de 1820, donde dodicabs varias paginas a la adulteracién de café y daba cuenta de diversas ‘condenas por mezcla del producto con vegetales molidos™”. Hasta 1832 no bay constancia de adulteracién del café con achicoria, aunque sf existen claras 3 Thomas Tocks, 4 history af prices, and ofthe state of the circulation, from 1793 co 1857, Losdzes, 1838, vol.2, p. 39,1. T, Danson, “Some parcalr of te commercial progress of the colonial dependencies ofthe Uniked Kingdom, dming the twenty yeas 1827-26", Journal of the Royal Stctsicl Society of London, vo. 13 (1849), pp. 349-439, 396 18 Bamen,Ligud plomrurer 9.8 Mitchel, Brick Hiri! States, p. 710; CH. Denyer, “The consumption of tea aud otber pple dis", The Economic Journ, vl. 30.9 (1893), pp. 33-1, $0. H'Chemwynd The Hace of Peace, ond Parish Oficer (yy Richard Burn). The Twonty Ninh edition, Londees, 1845, ar “Exaise and customs" p. 748; Acca op. ot, pp 23-260, BSTEBAN CANALES GILL ANGELES CARBAJAL AZCONA 163 ruestras de su mezcla con otros vegetales, probibida por ley. Desde mediados de la década enterior la East India Tea Company, wna compatia dedicada a Ia istribucién de té y café por el Reino Unido, anuncia la venta a través de sus agentes autorizados de café tostado en grano en paquetes de entre una libre (454 gramos) y una onza (28 gramos) de peso, cantidad esta itima penseda para que también puedan adquirilos las clases trabsjadores, advirtiendo que “el café molido se adultora con més frecuencia que el café en grano y la adulteracién es menos fécil de detectar”™*, En 1832 una revista de literatura médica publica un método para descubrir la mezcla del café con centeno, usado muy fiecuentemente” como adulterante!®, De este afio data la primere mencién de la achicoria, “importada de Holanda y comprada a 4 peniques por libra por los comerciantes de comestibles, que Ia usan en grandes cantidades para adulterar e] café que venden”, a razén de entre un tercio y la mitad por cada Ubra de café, En 1832 se hebia autorizado Ja importacién de athicoria, bajo la snisma tarifa que recaia sobre el café de origen colonial, y la venta del producto cn polvo, con la probibiciéa de su mezcle con el café. Esta prohibicién se levanté de hecho en 1840, al renunciar el gobierno presidido por el whig Melboume a investiger la naturaleza del café que se expendia en los establecimients habilitados al efecto, desbordado por el enorme esfuerzo que implicaba un efectivo control de las mezclas"™. Deus de esta devisidn también existia el deseo de facilitara I poblaciéa con menos recursos el acceso al café ‘a precios més baratos y con ello eumentar su consumo, pero le medida navo el efecto colateral de generar un fraude masivo en el café puesto @ la venta, pues ‘una vez desaparecidos los consoles oficiales, alos establecimientos les salia 2 ‘cuenta vender a precio de café y bajo este nombre un producto mezclado con la hhasta cuatro o cinco veces mis barata achicoria unos cuatro peniques por libra, frente al chelin y medio que podia costar el café a mediedos de la década de 1840, que también habia comenzado a cultivarse en suelo britéaico, en este caso libre de impuestos"*. Desde 1832, y en especial @ partir de 1840, la achicoria, sola o mezclada coh otros ingredientes espurios, se convierte en la principal amenaza pera la integrided del café: se vende 2 precio de café lo que 16 The Times, 19 de setiembre ce 1825,p. 6 9 The Landon Medial Gaze, vO. X O29 Ge sete de 1832), p. 822-823. 1 Fhe Times, 20 de ensto de 1832p. 4 eat al eltr "8 Ronson’ Parlementary Debetes, Teed Soir, vl. 103 (38 de marco de 1888), Interven Charles Wood, Minisee de Hacienda. 1 The Times, 17 de abel 1888, p. 6; Dod, The food of London, p15.

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