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Siglo veintiuno editores Argentina Ce ees feeerichin mca Seer ents eee else ee re eee p eee ee eee REED ie bro y Revistas "be an eS, DULLED > Siglo veintiuno editores Argentina s. Siglo veintiuno editores, s.a. de Se Ak ERAGE COON AH {370.1 Frere, Paulo FRE. El grito manso- 1% ed Buenos Ares: Siglo XXI itres Argentina, 2008 TS ps2 cn Euan) ISN 9871108904 1. Tito 1, Pedagogta Portada: Exudio Acevedo & Gracia Ioseracin de tap de Claudius Cecon 1 ediciin argentina: 2.000 ejemplares {© 2008, Siglo XXI Editors Argentina SA. ISBN 967.1105504 Impreso en Industria Grifica Argentina Gaal, Fruceoso Rivera 1085, Capital Federal, ‘ened mes de marzo de 2008, Hecho el depésito que marca I ley 11.729 Impreso en Argentina ~Made in Argentina gic 1 Trabajar con la gente Por Roberts Iltee ‘a: La construccién de Ia propia existencia Der les soordinadev Orlando Bab y Auge Bionco b> Feliz y desaflado (al recibir el Honoris Causa) Par Pale reve 4 Practica de la pedagosia critica {Seminario Parte 1) Por Pele Frere 5- Elementos de la situacion educ (Seminario - Parte 2) Per Peale Fete 6- La lucha no se acaba, se reinventa (Respuesta s preguntas) Per Peale Preite 7+ La confrontacién no es padagégica sino politica (Conferencia de prensa) Dor Dene Frere {El conocimiento como mercancta, la escu ‘como shopping, los docentes como proletarios Per able men 9- sDesde dénde, cémo, con quién, con qué valores? Per Roberts Iglesias 1o- “At6 mais, maestro” Por Caras Felsehs 3 1” a 49 Una pedogoata PAULO FRERE dad histérica actual: Les he dicho que no hay préctica decent sin cuiosidad, sin incompletud, sn ser capaces de intervie en la realidad, sn er capaces de ser hace- ores dela historia y 2 la ver siendo hechos por la his: tori Les he dicho que una de la tress fundamentals, tanto aqui como en Brasil y en el mundo entero, es ela borar una pedagogia critica. Y se jos digo, no como alguien que “ya fue", se os digo como alguien que esté siendo, Igual que toda la gente yo también estoy sien- do, @ pesar de la edad. En funcién y en respuesta a nuestra propia condicién humana, como seres cons ientes,cutiosos y cries, la practca del educador, de la educadora, consiste en luchar por una pedagoaia crtlea que nos de instrumentos para asumirnos como sujetos de la historia, Préctien que deberd basarse ‘en la solidaridad. Quiza nunca como en este momen- te necesitamas tanto dela signifcacén y de la prctica de la solidaridad. Para terminar, reitero: sigo con la misma esperanca, con la misma voluntad de lucha de cuando empecé, Me resist a la palabra viejo, no me siento viejo, en todo cas0 me siento ullizado, leno de cesperanzas y de ganas de luchar. ELEMENTOS DE LA SITUACION EDUCATIVA (5squndo a de Seminario) (anes de nc Reber ges aan Pal rece ‘ercnaba ce eda ben, ge hai ura har y ag erat -Enloshechos, Fee lo deserts: tina haan ce hors) ‘Agradezco la comprension de ustedes. No es sola mente el trabajo, es la emocién y la emacin desgasta Noes solo el encuentro con ustedes, es la memoria, No es solamente por lo que hice ayer, es fo que hice antes de ayer, lo que hice el mes pasado, es la suma de mis las fa que viene cansada, No es simplemente cvestién de apretar un boton y poner la memoria a funciona. Estoy contento de peribir que ustedes me compren- den. Si pudiers me quedara el dia entero. ‘Ahora, respondiendo a una sugerencia de Roberto Iglesias voy a intentar decir algunas cosas, que proba- blemente ustedes ya sepan 0 acivinen, en torno del tema dela educacion de la formacin docente "Me gustaria iniciar con un efercicio intelectual, el de pensar en la situacién que liamamos situacién educa- La situacion educativa no es cualquier situacion, Una situation de almuerz0 por ejemplo, puede tener en si algunos momentos educativos, pero no es necesaria~ PAULO FREIRE mente una stuacidn educativa. Podtiamos pensar en tuna situacion educativa en la casa, en la relaign entre padre, la made y los hljos, per preiero pensar en la relacion educatvatipia, entre as profesorasy ls alum nos. No importa qué escuela sea, primaria, secundaria, Universitaria 0 clrulo de cultura. Lo que quiero hacer eb analizary descubrir con ustedes cusles son ls elemet tos constitutes dela stuacion educatva. ad ene Imaginemos que estamos en el aula, que est a pro- ‘esora 0 el profesor y los alumnos. ¢Cusl es la tarea de la profesora? En palabras senllas difamos que la tarez de la profesora es ensefar,y la tarea de los alunos, aprender. \Vemos entonces que el primer elemento constitu- tivo de [a stuacin educadora ¢s la presencia de un EL GRITO MANSO sujeto, el educador 0 Ia edueadora, que tiene una eterminada tara espectfica que es la tarea de educa, La stuacion educativa implica fambién I de los educandos, de los alunos, segundo cle- mento de la stuacén educadara Qué mas descubrimos en la prictica de esta expe fiencla? En primer lugar descubrimos que la presencia del educador y de los educandos no se da en el ake. Fducador y educandos se encuentran en un deter nado espacio, Ese espacio es el espacio pedagagico, ‘espacio que los docentes muchas veces no toman en la bia consideracion, Si nosotros nos detuviéramos a ‘analizar la importancia del espacio pedagogico nos pasariamos la mafana dscutlenda por efemplo sobre las implicancias dela falta de respeto de los poderes pab- os con respecto a estos espacos. Aun con diferencias entre sitio y sitio, esta esas! una tradicién histrice en ‘América Latina, Cuando en 1989 ful ivtado a asumir como responsable de la educacion publica de la ciudad de Sao Paulo habia 675 escuelas, cerca de un milln de ‘alumnos y 35.000 profesores. El 60% de as 675 escue~ las estaban en franco proceso de deterioro material, Muchas, en la época oe la informatica, siquiera tenfan tizas. En muchas escueas los bafos eran absoluta- ‘mente inutiizables, era una aventura ingresar a un bato. Elespado pedagoaico ertempo PAULO FRERE Faltaba la merienda escolar, los materiales. De manera ‘que las condiciones materiales del espacio pueden ser 0 no ser en si mismas pedagégicas. ¢Cémo puede la pro- fesora, por més dilgente que sea, por més dscipinada y cuidadosa que se, pedir a los alumnos que no ensucien la sala, que no rompan las sila, que no escriban los pupitres, cuando el propio gobierno que debera dar el «ejemplo no respeta minimamente esos espacios? Cuanto mas la Direccion de la escuela, la Secretaria de edu acon, ls diferentes centros de poder demvestren alos chicos y 2 las familas su celo por el cuidado dela escuela, por reparar el techo y las paredes, por entregar tizasy plantas, tanto més esta demosracin de respeto educa alos niles. Me han gicho,no sé si sed verdad, ‘que en la Administracin de tenes de Sdo Pauio hay un sector encargada de sacar dlariamente los vagones danados © con los asentos ros, Este sector seca el carto, lo repara y lo devueve inmediatamente de mane- a que los carro anden siempre impos yentros. La co- rreccién del caro inibe al destructor de asentos. Hay ‘una relacin indudable ene las condiciones materisesy_ restras condiciones mentale, espittuales,eics, et. “Eltercer elemento constitutvo dela stuacion educa~ tiva es entonces e espacio pedagdsico. ¥ como no hay ‘espacio sin tempo, entonces e! tiempo pedagégico ELGRTO MANSO 5 oro elemento constitutivo de la situacion educative Lamentablemente educadores y Educadoras pocas veces nos preguntamos: qué hago con mi tiempo pedagéaico, cbimo puedo aprovecharia mas eficazmente, Casi nunca nos preguntamos: a servicio de quién, de qué cosa esta ! tiempo educative. Y se trata de una pregunta funds: ‘mental. Obviamente el tiempo educatvo ests al servicio de la produccion del saber. ¥ como no hay praduccién del saber que no estédirectamente ligada o asociada a ideale, la pregunta que debernos hacernos es: al ser cio de quiénes, de qué ideales producimas, conjunta- mente con los alumnos, el saber dentro del tiempo-es- pacio de la escuela. cuando uno se detiene sobre este punto descubre que el tiempo-espacio pedagéajco se usa sobre todo contra los intereses de lo nifios popula- res, aunque no solamente contra ellos. or chicos echando afuera of alma. {yl profesoras ‘nto ale PAULO FREE Pongamos como ejemplo que los niios Negan a la escuela a las 8. A las 8:15 toca la campana, los nitios entran en fils militar, algunos profesores o profesoras todavia no legaron,lamentablemente existe est. Alas 8:20 hs os nis estan legando a la sala. La profesora toma asistencia, ah se van otros diez minutos. Son 8:30 ylaprofesora-en esta carcatura que estoy haciendo si ‘estécansada no har nada importante pues ya esta pen= sado que a las 10 hs. siven la merienda. A esa hora toca la campana y ls niles salen corriendo, gitando, ¥ las profesoras se quedan en una sala, no van al re- reo, dejan de particpar de ese momento pedagégico Fiqusime que es el momento en que los chicos estén sacando afuera sus miedos, sus rabia, sus angustias, sus alegrlas, sus titezasy sus deseos. [Los nifios estén cechando su alma afuera en el recteo y las profesoras en fa sala, ajenas a esta experiencia humana esencial! Despus del recreo se toma la leche y aht se van mini mamente teinta minutos, sin contar ots tiempos muertos, Cuando leg el fin del da los nits tuieron, len el espaclo pedagdgico de las cuatro horas, dos horas y media o tes horas de clase. Han perdido una hora Esta hora perdida es una hora de aprendizaje que no hbo. ¥ lo peor es que ni siquiera dscutimos esta per ida de tiempo para la produccion del saber, porque si lo hiiéramos, al menos habriamos aprendido algo. ELGRITO MANSO Lamentablemente la jornada escolar entra en la rutina cotidiana, no se la plensa, simplemente se la vve. ésta es una telecon pendiente que reramente se da en las universidades. Lo digo con tristeza. Como profesores, como profesor, tenemos la obligacion de conacer, de debatit, de analizar estas cosas Hemos visto hasta aqut que no hay situacion educa- tiva sin la figura del profesor y del alurno que se en- cuentran en certo espacio a lo largo de cierto tempo docente, Pero hay algo mas que es esencial ala situa idm educativa, y ese algo. mds son los contenides ‘urriculares, os elementos programiticos dela escue- la, que como profesor tengo la obigacion de ensefar y que los alumnos tienen la obligacion de aprender. Con- tenidos que en lenguaje mas académico, en teora del conocimiento, se llaman objetor cognosciles, abjetas que los jovenes que se forman para ser profesores de- ben conocer. Ceo que incluso en la préctca dela edu- cacion popular el puebo tiene derecho a dominar el en- (uaje académico,.¥ digo esto porque hay educadores populares que en name de la revolucién encuentran {que lo correcta romper con la academia. A mi juicio 5 un error, es una traicién al pueblo. Lo correcta es cambiar la academia y no dar la espalda a la academia Nuestro problema no es estar contra la academia sino Todo tiempo edueativo 25 tempo de pregunta rehacerla, poneria al servicio de los intereses de la ma- ora de! pueblo. Hay que prestigia ala academia, esto «5, ponerla al servicio del pueblo, Desde que hombres y ‘mujeres inventaron la vida en comin, los objetos cog noscibles fueron percibidos y estudiados a través del ejercico dela curisidad. El pueblo tiene derecho a sa- ber, necesta saber que los contenidos escolares se ll- ‘man objetos cognoscibles, es decir: objetos que pueden serconocidos. + Y aqut surge otto tema importante, Les objetos cognoscibles son percibidos mediante del ejerc io de la curiosidad. De all el cuidado que nosotros camo profesores devemos tener en rlacion a preservar la curiesidad de los nos. Cudntas veces habrén obser- vado en casas de amigos, ‘al pap y la mamd conversan- 4d con la vista, de pronto el mito de tes, cuatro af, viene cortiendo con una pregunta yel papa iallasto! {No ves que estoy hablando con otra persona? {Como venis con esa pavada? iPuchal Dios mial A mi no me ‘usta tirar piedras a nadie ni crear sentimientas de culpa, pero esta conducta es absurda. Es un compor, tamiento castrador que cercena una de las cosas mas importantes que tenemos y que es la curiosdad. sin Curosidad siquieratendrfams a posblidad de ser papa ‘© mam&, Todo tiempo educativo es tiempo de pregunta ELGRTTO MANO y de respuesta, tempo de dscipinar, de reglamentar la propia pregunta, la propia respuesta, Una tarde, hace ‘muchos anos, en Recife, el rectoude la Universidad vino a nuestra casa para conversar sobre un problema de la Universidad. Estabamos en la terraza cuando de repen- te uno de mis hijs, que debia tener unos cuata 0 Gnco aos, vino a pregunta algo. Paré la converscion,escu- ché a rio le contesté después le cie: mir, tu paps std conversando con un amigo que también tiene pre- ‘guntas que hacer y que también contesta preguntas Por eso, si tenés otra pregunta para hace, te sugiero ue la memorices y preguntes despues, asi tu paps puede seguir conversando con su amigo, Es preciso defender el derecho que tiene el nie de preguntay, de satisfacer su curiosdad, pero al mismo tiempo decile ‘que hay momentos para preguntar y momentos para abstenerse, lo que en ética definimos “asumirls limites de la iserad”. sin limites no hay libertad, como ‘tampoco hay autoridad. La formidable cueston que ‘se nos planta a los educadores es cémo establecer los limites, en qué consisten realmente, cules entre todos ellos son las que hay que implementar Volvamos ahora a la cuestion de los objetos del conocimiento. Cusnto més pensamos en qué es ensefiar, qué es aprender, tanto mas descubrimas que no hy libertad Laer en las persons. PAULO FREE no hay una cosa sin la ota, que los dos momentos son simulténeos, que se complementan, de tl manera que quien ensefa, aprende al ensefiar y quien No casualmente en aprende, ensefia al aprende francés e! mismo verbo sigifca ensehar y aprender, verbo apprendre. La cuestion es cbmo lidar con esta ‘aparente contradiccitn. En este momento, hablando ‘on ustedes, yo estoy reconociendo esta cosas, estoy resabiendo estas cosas. De manera que ene! proceso en que ustedes aprenden, ustedes me ensefan. gComo? A ‘tavés de la mizada, de sus actitudes. El profesor atento, profesor despierto, no aprende solamente en los libros, arende en la clase, aprende leyendo en las per- sonas coma si fueran un texto, Mientras le hablo, yo como docente, tengo due desarollar en mila capacdad catia y afectiva de leer en los ojos, en el movimiento el cuerpo, en la incinacion de la cabeza. Debo ser capaz de percbir si hay entre ustedes alguien que no entendié lo que die, y en ese caso tengo la abligacion de repetire!concepto en forma clara para reponer ala petsona en el proceso de mi dscuso. En cierto sentido, Ustédes estan siendo ahore para mi un texto, un libre que necesito ler al mismo tiempo que hablo. En Bras Jos buenos poiicas sabien hacer esto, sabia tocar Ia sensibilidad de quienes los escuchaban. Ahora con la television esto se estS acabando. De manera que la ELGRITO MANO practica docente va més allé del acto de entrar al aulay dar, por ejemplo, la clase de sustantives. La préctca educatva es mucho més que esa, Voluiendo a nuestro tema, no hay entoncesstuacion pedagdgica sin un sujeto que ensei, sin un sueto que~ aprenda, sin un espaciostiempo en que estas rlaciones se dan yno hay ituaciones pedagégicas sn objetos que ppuedan ser conocidos. Peto no termina aqui la cuestion. Hay otra instanciaconstitutiva del stuacion educative, algo que va mas ald de la situacion edicativay que sin embargo forma parte de el, No hay situacion educati- ‘va que 10 apunte a objetivas que estén mas allé de! aula, que no tenga que ver con concegciones, maneras Ge ver e! mundo, anhelos, utopas. Desde el punto de vista ténico, esta instancla, en flosofla dela educaciin recive el nombre de direccionalidad de Ia edu: cacién, Mucha gente confunde direccionalidad con drigismo, con autortarsmo. Sin embargo, la direc. conalidad puede vabilzar tanto la posicién autoitaria como la democratic de la misma manera que la falta de direccinalided puede viabilziar el espontaneismo. Es justamente la direccinalidad la que expica esa cualidad cesencial de la prctica educativa que yo llamo la politi- idad de la educacién. Le policidad de la préctca ceducatva no es una invencin de los subversivos como Ls potiided es Inerente a a prictce PAULO FREE piensan los reaccionaios. Por el contrario, es la natu taleza misma dela préctica educativa la que conduce al ‘educador ase politica. Como educador yo no soy pol 0 porque quera sino porque mi misma condlcion de ceducador me la impone. Esto no significa ser partidario Ge este © de aquel partido, aun cuando yo considero que todo educadr deber asumir una posicion partdaria, La politicidad es entonces inherente a ls prctica ‘educative. Esto significa que como profesor debo tener claras mis opciones politics, mis sues, Porque al final {qué es lo que me mueve, me alienta como profesor, si geno tan poco, si estoy tan desprestgiado en esta sociedad de mercado? {Qué svefio tengo para soar, para discutir con mis alumnos? La poltcidad revela ‘otras dos caracteristicas de la situacion educativa Revela que en la practice educatva, estética y ética vvan de la mano. La prctica educatva es bella como es bells fa formacion dela cultura, la formacion de un individuo lie, Y al mismo tiempo esa esttica es ética, pues tata de la mora. bifcimente una cosa bella sea inmoral. Esto nos pone frente a la necesidad de recha- za el puritanisma que mas que ético es hipocresay fal sificacion dela ética, dela libertad y de la pureza Recapitulando entonces: no hay prctica educative sin sujetos, sin sujeto educador y sin sujeto educando; EL GRITO MANSO no hay prctica educativa fuera de ese espacio-tiempo que es el espacio-tiempo pedagdgic; no hay prictica educativa fuera de la experiencia Ye conacer que téc- nicamente llamamos experiencia gnoseolégica, ue 5 la experiencia del proceso de produccién del comocimiento en st; no hay prctica educative que no se2 politica; no hay prictica educativa que no esté fenvueta en suefos; no hay préctica educativa que no Ivolucte valores, proyectos, utoplas. No hay entonces, practice educativa sin etic, - la educacion no puede dejar de tomar en cuenta todos estos elementos. Se trata de una tare seria y compleja y como tal deberd ser afrontada tanto pot los responsables de ls polices educativas como por los propios dacentes.Tenemos la responsabilidad, no de in- tentar amoldar a los alurmnos sino de desafiaros en sentido de que ellos paticipen como sujetos de su pro- ia formacion, En estos das estoy terminando un libra riuevo con ideas vieja, donde trato este tema de la formacion docente y donde resalto dos o tres saberes 0 ‘méximas que creo deberian formar parte del bagaje de todo profesor o profesora. Una de estas mamas, que me acompafa desde hace tiempo, es la que sostiene: cambiar os dificl pero es posible. {Qué testimonio Podta dar alos jovenes si mi posicidn frente al mundo 1 alan como sujt0 si su propia formal | | PAULO FREE fuera la de quien estd convencido de que nada puede ser hecho, que nada puede ser cambiado? Yo dria que fen ese caso es mejor que abandone el magistrio, que Intente sobrevvir de alguna otra manera. Nadie puede dar clases sin tener Ia convccion de lo que hace. No puede deci: yo soy simplemente un téenico, dstante del mundo, de la historia No solamente debo dar test monia de mi voluntad de cambio, sino que ademas debo demastrar que en mi, més que una creencla, es una con- viccién. Simo soy capaz de dar tstimonio de mis conve lanes perdo mi base ética y soy un pésimo educador Porque no sé transmit valor dela transformacion tra convicién que considero fundamental, es la que sostiene: es necesario aprender a escuch Hay quienes creen que hablando se aprende a hablar, cuanda en realidad es escuchando que se aprende hablar. No puede hablar bien quien no sabe escuchar. ¥ escuchar implica siempre no disriminar. ¢Cémo puedo comprender ales alumnos de[s villa si estoy convencl- do de que son sucios, que tienen mal olor? {5 soy inca- paz de comprender que estén sucios porque no tienen ‘agua para bararse? Nadie opta por la miseria En Rio de Janeiro, un hombre que organiza una de las Escolas de ‘samba del carnaval, io una vez una gran verdad: “Slo ‘los intelectuaes pequeroburgueses les gust a mise ELGRTO MANSO ia, Al pueblo les gustan ls cosas bonitas”. Obviamente al pueblo le gusta el bienestar, aquello que no puede tenet, Lo que nosotros debernos"querer, no es que el pueblo siga en la miseria, ino que supere la miseria Hay que pelea para que el pueblo viva bien, que tenga camisas como ésta, queen los afiossetentahubier sido considerada seal de burguesia. Hay que demacratizar las cosas buenas y no suprimilas. Yo no rechazo las sas burguesas sin la concepcién burguesa de la vida, Hay que superar algunos equlvocos del-pasado, como pensar que la solidaridad con los oprimidos es una cuestion de geograta, que es necesario salir del area clogante de la ciudad e ir a vivir en fa miseria para centonces si ser absolutamente solidario con las oprimi- dos. Esto no siempre resulta. Aprender a escuchar impl- ‘ano minimizar lotro, no ridiculatizaro,

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