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CAP{TULO II CONFERENCIAS ‘PREMISAS FUNDAMENTALES PARA UNA INVESTIGACION DE LA DRAMATURGIA DE ANTON CHEJOV Aspectos relievantes del teatro de Ant6n Chéjov Por Santiago Garcia Director del Centro de Experimentacién Escénica. Introduccién Si se tratara de hacer un estudio profundo y completo sobre la dramaturgia chejoviana, siempre, estoy seguro, ese inten- to resultarfa cojo. Tal es la extensidn del trabajo, no a causa del material en si, que son apenas 15 obras, sino por los al- cances desde sus primeras presentaciones hasta hoy, por su profundo significado, por la influencia y repercusién que ha tenido en la dramaturgia contempordnea y, la compleja rela- cién entre el texto escrito y las multiples posibilidaces en lo que podrfamos Ilamar el texto de la representacidn. De acuerdo con Harold Bloom! pienso que la mejor y mas . eficiente manera de leer a Chéjov es a través de una “mala lectura”. Es decir, un estudio con fines no académicos como para recabar de él erudicién, sino para encontrar la eficacia Necesaria en un arte teatral propio. Tiene que ser una explo * BLOOM, Harold. La angustia de las influencias, Monte Avila Editores, Caracas 1976. 61 covaneauy con Cam Santiago Garcia racién que permita traicionar su influencia 0, paraddjicame™™ te, su eficacia. Con esta intencion, como premisa fundame’" ai nuestro trabajo en el taller sobre Chéjov del Centro de acion Escénica de la UN, encaramos el dificil Experiment . i ve : tomar la dramaturgia y la narrativa chejoviana cometido de como materia de investigacion. EI grupo de trabajo se dividio en tres equipos; fueron toma- das las 15 obras de teatro como corpus de experimentacion. Estas se dividieron en 3 grupos de cinco obras y con ellas se hicieron 12 improvisaciones 0 ‘estudios’ (tomando el térmi- no usado por Stanislavski) con el propésito de que cada equi- po pudiera hacer 3 trabajos sobre cada grupo de cinco obras y uno que procurara globalizar la experiencia. Los resultados de esta, Ilamémosla primera etapa de la inves- tigacion, son los productos tedricos, 0 las reflexiones de cada grupo sobre su trabajo y los ‘canovaccios’ o guiones de las 12 improvisaciones, que se publicardn en un cuaderno de trabajo. Como pautas de las improvisaciones se tomaron algunos aspec- tos (los mas relievantes de la dramaturgia chejoviana) que en- contramos en un primer estadio de informacién sobre el tema. Se procuré que las improvisaciones fueran cortas, 10 a 12 minutos, que requirieran de un minimo de elementos 0 ac- cesorios (para tener en cuenta el axioma: de lo menos lo mas) Y que apuntaran a los aspectos relievantes del estudio de las cinco obras que el equipo tenia a mano. Una segunda etapa tendrd como material de trabajo los tos, cuentos y novelas cortas de Chéjov, para tratar de || aes las al plano de la escena. Es decir, pasar del texto n, ae de Chéjov hacia uno teatral. Este transito pensamos cee de ser el mas eficiente del trabajo de experimentacién - Pue- Ue se 62 covaneauy con Cam \ Aspectos relievantes del teatro de Antén, Chéjoy puedo decir que uno de los creadores de la dramaturgia de nuestro presente que mas ha influido en mi trabajo teatral es Anton Chejov. Los otros dos que ‘marcan’ de una manera particular los métodos o sistemas de trabajo en la escena, tanto a mi como al Teatro La Candelaria son Bertolt Brecht y muy especialmente, por el tipo de relacién permanente que hemos tenido, Enrique Buenaventura. Del segundo hemos realizado varios talleres y seminarios sobre sus teorias y la validez de ellas en los tiltimos cuarenta afios; del tercero - nuestro dramaturgo latinoamericano- estamos esperando que se publique la obra completa para tenerlo como tema “nece- sario” de estudio para una proxima sesidn de trabajo’ . En cuanto a Chéjov, que es nuestro tema actual de experi- mentacion y busqueda, he tenido de su dramaturgia un co- nocimiento desde el campo de la practica con el montaje de dos de sus obras EI jardin de los cerezos en 1965 con el tea- tro Estudio de la UN y La gaviota en 1967 con el Teatro La Candelaria (primera etapa como Casa de la Cultura); y desde el otro campo de estudio, seminarios y observacién de otros montajes, a través de mi experiencia en Checoslovaquia du- rante el montaje de La gaviota por el prestigioso director Otomar Krejca en 1961 y otras practicas de gran valor como Las tres hermanas de Peter Stein en el Schaubiihne de Berlin o los montajes de Giorgio Strehler en el Piccolo Teatro de Milan. Ademis de ello, lecturas de libros, ensayos y todo lo que ha caido en mis manos desde mi primer conocimiento sobre Chéjov con el maestro Seki Sano, que nos trajo a Colombia a Stanislavski y su sistema en 1956, y con él, por supuesto, al simbolo del teatro de Arte de Mosc que era precisamente una gaviota. * BUENAVENTURA, Enrique. “Obra completa. | poemas y cantares”. Editorial Universidad de Antioquia, Universidad del Valle. Coleccién Teatro, Febrero 2004, Medellin-Cali. % “os 3 2 covaneauy con Cam antiago Garefa omera cuenta, pero para evitar un 2 o| iero dar st _ . De todo ello quiero de imprecisiones e ideas y jonado torrente engorroso y apasionac tes ae , el ‘I describir estos aspectos~ poner en tela de i De! arte huir de ellz uicio mis propias conclusiones y dle esta suerte huir ‘ ok i ara evilar SU influencia (que en el arte creativo es un desas- tre), las expondré en sels puntos: | concepto de verdad, (Busqueda de la concision) E| subtexto. (El valor de lo no dicho) 3- El antihéroe 4- La incompletud. (EI valor de lo faltante) | 5- La atmésfera. (Un aspecto anti - brechtiano) 6- La evasién de la influencia 1. El concepto de verdad Tal vez una de las enseftanzas que nos dejé Chéjov con su teatro, y que permanece grabada para toda la vida, es su re- laci6n con la verdad. En el teatro de Chéjov hay una deses- perada busqueda de la verdad, pero no de la verdad con mayusculas sino de una verdad. La verdad que esta oculta en cada particula, en cada instante de la vida de los personajes. Una verdad minima pero a la vez trascendente porque es reveladora, de muchas verdades... y uno la puede encontrar ahi, sencilla y comprensible. Esa es su gracia y su mister Tostoi decia de él: “Chéjov es un artista incomp. eso es, incomparable... un artista de la vida yl obra es la de ser comprensible y préxima, Tuso, sino para cada hombre en general. Es En su tiempo el teatro estaba dominado el gran espectaculo, lleno de fatuidad y trds de él uno no encuentra nada... nad. rio. arable. Si, si, a virtud de su No sdlo para cada 0 es lo esencial”?, -al como ahora por de Aparato, pero de. a... sino Confusi6n y * Tomado del libro de |. Ehremburg: Ala rencontre de Teche Ajov~ Les edi, John Didier, Paris, 1962. Traduccién Santiago Garcia,” ” L€S editions ep wae 64 covaieauy von Cam Aspectos relievantes del teatro de Antén Chéjov ‘ nentira. Esta insatisfacci6n lo llev6 a escribir su propio tea- tro donde se pudiera hallar la carencia de lo que tanto recla- maba en el arte: la vida y la verdad. Poco antes de morir en 1902 decia: “... ante todo, amigos mios, nada de mentira... Jo mejor del arte es precisamente que no admite‘mentiras... mentir en el amor, en politica, en medicina, uno aiiar a la gente, hasta a Dios mismo, ha habido “” se puede puede eng: casos, pero es imposible engafar con el arte... Y con esta intransigente actitud fue como pudo influir pro- fundamente en el teatro de comienzos del siglo y continua haciéndolo hoy. Hoy mas que nunca... Esto de hacer, de crear un teatro que tenga como basamento la verdad es exigente, dificil, pero no es enrevesado no puede tener como resulta- do un inexplicable galimatias que trata de explicarlo todo. La verdad no es LA VERDAD “sdlo los imbéciles y los charla- tanes comprenden y saben todo”*. Es un teatro derivado de su experiencia riquisima en la narra- cidn, cuentos y relatos, pero que al mismo tiempo, paraddji- camente, rechaza el dominio de la narracién. O al menos la reduce casi a nada en sus argumentos teatrales. Allies donde aplica su teorfa sobre la concisi6n...: “Yo creo que después de haber escrito un cuento se debe borrar el principio y el final. Es alli donde nosotros los novelistas, mentimos més... es necesario acortar, lo mas corto posible...”°. 2- El subtexto Este aspecto del subtexto, de lo no dicho, de los silencios, de las pausas, es quizds de lo que mas se habla del teatro chejoviano, es, como quien dice, su marca esencial. Desgra- ns du seuil, Paris. 1955. * Tehékjov par lui meme. Edi Traduccidn Santiago Garcia. * Ibid, * Ibid. Ye a 65 da” covaneauy con Cam Santiago Garcfa se como un ‘estilo’ y entonces re- trabajarlo muy a fondo, porque su esta solo enta actuacion 0 en la puesta en escena o nel todo. Es la conjuncion de todos los ja representacion. Aun dela ciadamente puede tomar sulta un cliché. Hay que valor no en el montaje, sino &' xtuale’ rativos de | pianos textuales y opera iN” press ci6n._ if y del sonido 40%r a Chéjov es saber ofr el silenciozPorque como él mismo lo recalcaba: “todo el sentido y todo el dra- ma del hombre se encuentra en su interior y no en sus mani- festaciones exteriores””. En los dos montajes que realicé de este autor, La gaviola y El Jardin de los cerezos, mi atencién y la de todo el quipo de actores que trabajaba conmigo se centro en la bisqueda de los momentos culminantes, los silencios. Podria decir que la actuacién y la puesta en escena se construfan para llevar el conflicto hacia esas pausas (en La gaviota eran 14 y en El jar- din de los cerezos 16) porque allf era donde convergia toda la fuerza dramatica de esas minimas tragedias de los personajes, alli donde siempre se desembocaba en esa especie de huecos negros que son los espacios en blanco, las pausas. Jean Louis Barrault, uno de los mas destacados realizadores de las obras de Chéjov en Paris en sus anotaciones decia: “cada minuto es pleno. Esta plenitud no aparece en el did- logo sino en la situacién, en la sensacion de la vida”*. Los personajes hablan, comentan, lanzan sus peroratas, a veces exuberantes, sobre la vida, pero en realidad lo que di- cen esta oculto detras de sus palabras.{Son sus profundos sentimientos los que, como en la vida misma, no podemos verbalizar y ocultamos detras de las palabras y los gestos. A veces detras de un ademan trivial se oculta el veld d una pasién desesperada. ] ee > Ibid. * Ibid. covaneauy con Cam Aspectos relievantes del teatro de Antén Chéjov : Esto lo tienen que conocer y buscar en multiples experimen- tos los actores y el director de las obras de Chéjov, muy de acuerdo con Stanislavski, y con quien mas pudo entenderse, Nemirovich-Danchenko, repetia: “los actores tienen que ser no representar”? . Aqui tenemos que repetir que esta busqueda del interior de los personajes no es una buisqueda de la Verdad 0 de valores les sino una exploraci6n hacia lo que podria ser aje. Muchos parlamentos de las obras sincero, y el mis- trascendenta la verdad del person: hablan de la necesidad del personaje de ser aje lo repite y lo recalca, pero generalmente lo es precisamente lo contrario de lo que es. laza en la obra al punto de a subyacente a la mo person que tanto repite Este subtexto se mueve y se entrel asi una segunda puesta en escen: arente. Y lo interesante es ver en estas estruc- ‘as ocultas o traslapadas proponer c primera, a la ap. turas como todos estos subtextos, est verdades, desembocan en los “silencios"> 3. El antihéroe Cuando Chéjov escribi sus obras mis relievantes a partir de La gaviota, lo hace en un momento en el que la escena rusa estd apabullada por los grandes espectaculos donde la rutina, la banalidad y los estereotipos son su caracteristica general. ‘demas, las obras se montan répidamente para que luzca la primera figura, actriz o actor, alrededor de la cual giran como pantallas de reflejo los personajes secundarios y los figurantes. Este profundo malestar y la necesidad de un teatro nuevo que se sacuda de las antiguas formas lo pone el dramaturgo en boca de sus personajes como Treplev el joven dramaturgo de La gaviota: “Es necesario, en el teatro, una forma nueva. jNue- va! ; y sino la hay, entonces no hay nada!”?®. ee % Revista Europa No 104.105. Dedicada Paris, 1954. Traduccién Santiago Garcia. ® CHEJOV, Antén. Teatro completo. “La gaviota’” Buenos Aires, 2003. a Chéjov. Les editeurs frangais reunis. _ Adriana Hidalgo Editores. 67 covaneauy con Cam 10 Gareta Por ello, Chéjov propone al teatro de Arte obras en las cuales no hay una primera figura sino grupos de personajes que eigen un riguroso trabajo actoral de conjunto, para encon- trar por un lado esa verdad profunda de la vida cotidiana, y por otro el despojo de lo patético, de lo rimbombante y am- puloso que tanto detestaba. Los personajes no son héroes, ni figuras aplastantes, no son modelos ni positivos ni negativos. Son comunes y Corrientes, comen, beben, aman, hablan, hacen el amor y mueren. Son lo que mas adelante Brecht denominarfa el antihéroe. Ese tipo de personaje, dual, ambiguo, en el que es imposible una total identificacién, pero que lleva dentro de sf todo el drama de contradicciones y dolores, virtuces y defectos que permi- te crear tramas 0 ‘fabulas’ complejas, reveladoras cle la con- dicidn humana. Para Chéjov un personaje ideal hubiera sido el Charlot del ingenioso Charles Chaplin. Sus personajes mas elaborados pertenecen a grupos que con- viven en un espacio determinado, como una casa de cam- po, una finca en la provincia, lejos de Moscti, o un pabellén de alienados de un hospital de una pequefa ciudad, 0 una residencia a punto de ser rematada por las deudas. Ya no se puede montar una obra de este tipo en 9 ensayos sino son necesarios meses de trabajo con un elenco, o mejor, un grupo de actores sometidos a una rigurosa disciplina ae estudio e investigacién como lo era el teatro de Arte dle Nemirovich-Danchenko y Stanislavki. Chéjov insistia segt su bidgrafa Vera Volmena'', en que lo mas importante es “obligar al actor a desprenderse de sus coturnos y ahs = ‘impostada’, a hablar simplemente y a guardar silencio nae do la situacién lo exige. Es el primero en escribir eae conjunto, pues si algunos papeles son més largos Giese s ** VOLMENA, Vera. “Tchékjov et le Theatre d'Art”. Revista Europa cit. ps 4 Traduccidn Santiago Garcia. OU Pag tag. B68 cocaneauy cull Cam Aspectos relievantes del teatro de Antén Chéjov ninguno es accesorio, ninguno esta destinado a ser ‘de relle- no’: el mas pequefio personaje tiene su importancia, es in- dispensable para el desarrollo de la acci6n”"”. Y los persona- jes principales tienen que ‘rebajarse’ a hablar, andar, pensar, como el comtin de las gentes. Tienen que ser antihéroes que “muestran la vida tal como es, las gentes tal como son”. 4. La incompletud: el valor de lo faltante Se me leer durante siete aiios 0 siete afios y medio —le de- cia Chéjov a una amiga, poco antes de su muerte— después me olvidaran, y luego de una pausa, agregd - entonces pasa- rd algtin tiempo y me volveran a leer, y esta vez se me leer durante mucho tiempo”™. Y ahora, después de cien afios de su muerte, seguimos leyen- do, explorando, investigando ese maravilloso mundo que nos dejé en su narrativa voluminosa y en sus apenas quince obras de teatro. Porque seguimos necesitando, los empefiados en crear un mundo nuevo en el arte, de sus consejos, directos, tajantes, dificiles, como ese que le daba a un hermano en una de sus cartas: “no corregir, no pulir. Debes ser por el contrario tosco e insolente. El tema debe ser nuevo, en cuan- toa la critica, puede no existir”'>. De todo lo que podemos recabar de Chéjov hay un concepto que casi es como el sillar de sus construcciones dramattirgicas, me refiero a la concisién y dentro de ella al escamoteo per- manente de lo aparentemente principal. Como si lo que po- dria ser fundamental en la historia de un personaje o de un grupo familiar se sacara casi de tajo de la escena, 0 las esce- nas mas importantes del conflicto fueran reemplazadas por " BLOOM, Harold. La angustia de las influencias. Monte Avila Editores, Caracas, 1976. Revista cit, ““TRIOLET, Elsa. L’histoire D’Anton Chejov. Les editeurs frangais reunis. Paris, 1954. Traduccién Santiago Garcia. Obra cit. Tchekjov par lui meme. 69 covaneauy con Cam intiago Garcia trivial. De la totalidad se saca lo mas y arentemente < una aparent menos resulta ser mas revelador, i este se deja lo menos. Y &s b mas ae teatralmente que lo aparentemente fundamental. Es mas importante el residuo, lo faltante quel principal FS la pieza. Este concepto podriamos ue lo ie prvilegio ee la incompletud”. La estética de las sobras, del desecho. En sus obras este ‘mecanismo" funciona casi matematicamente. Por ejemplo, cuando en EI tio Vania el médico Astrov -en la escena final del cuarto acto, después de una embarazosa es- cena de despedida- se acerca a un mapa de Africa, que ha estado ahi todo el tiempo y que aparentemente no servia para nada, y después de una pausa dice: “Qué calor hara en esta Africa, ;Da miedo!”"®. Como si en esa frase trivial, inoportu- na, estuviera de pronto todo el pesar, el tedio, el profundo aburrimiento y la inutilidad de las vidas de unos seres que hemos visto sufrir durante dos horas. O ese faltante, que se vuelve presente en la vida de las tres hermanas, la ausencia de Moscti que jams seré alcanzado. Asi que lo que falta, la pieza restante del rompecabezas de esas existencias, se vuel- ve un lamento indtil: , —";Cuando partiremos a Mosc? ;Cudndo?”!7, Esta estrategia en la manera de narrar es lo que han tomado los grandes cuentistas contempordneos en sus relatos def mentos truncados de la existencia cotidiana, como R rag- Carver 0 Somerset Maugham. ‘aymond 5, La atmésfera Este concepto de la puesta en escena —del que Bi ba pestes, puesto que era el que colaboraba ache habla- actuacién empatica, a hacer que los espectadores Mas de fa Se identifi i- ‘© “Tio Vania”. Obra cit. Teatro Completo. ¥ “Las tres hermanas”. Obra cit. Teatro completo. covaneauy cull Cam Agpectos relievantes del teatro de Antén Chéjov caran con Ta escena, quedaran envueltos en el sopor de la atmosfera y, por lo tanto, impecidos para reflexionar, es de- cir, para encontrar placer, no en los hechos, sino en la causa de los acontecimientos, en el descubrimiento del cémo su- ceden las cosas y no absorbidos por la magia del qué suce- de- este concepto de atmdsfera en Chéjov, pensamos, se debe explorar desde otro punto de vista. Es evidente que en los cuadros de las escenas chejovianas todo se desarrolla, 0 va encaminado a crear una atmédsfera, generalmente de te- dio, de profundo aburrimiento, para casi congelar el trans- curso del tiempo, en los jardines, en los salones, en los vesti- bulos y tocadores, donde de repente, a lo lejos se rompe la cuerda de un instrumento musical. Se procede pausadamen- te con la clara intencidn de penetrar alli donde apuntan siem- pre los conflictos superficiales de los personajes: a la verdad de la existencia humana. Se trabaja la atmédsfera no para pro- ducir una empatia sino para cerrar, para enmarcar la deten- cidn del tiempo. Para poder juzgar la inutilidad del esfuerzo humano por lograr la felicidad perenne. Para que el especta- dor, en presencia de un acto espontaneo, en vez de registrar pura y simplemente ese acto, ademas de ‘sentirlo’, lo juzgue. Es una atmédsfera que subraya las profundas contradicciones de la conducta humana valiéndose de elementos que bien podriamos calificar de ‘extrafiamientos’. La atmdsfera de la escena no la dan los elementos ambientadores que tanto usaba Stanislavki cuando montaba sus obras y que llevaban a Chéjov irénicamente a comentar: “ En mi préxima obra lo primero que diran los personajes al salir a escena sera: -“Qué agrada- ble se siente uno aqui, no ladran los perros a lo lejos, ni se oye el pito de trenes en el horizonte, no hay luna Ilena, ni mosquitos’'®, ———— " Obra cit. Tchekjov par lui meme, 71 covaneauy cul Cam santiago Garefa de ambientar, sino de crear espacios iblico sienta como un impacto las pro- de la vida; como cuando al final de a escena, mientras se juega a las cartas, se bebe y departe, Dorn S© leva ih ecole a Trigorin y le dice en voz baja: - Llévese d ‘i i a i Nikolaievna. Es que.. Constantin se ha pegado Alli se debe crear un clima, una No se trata, entonces, que permitan que el p! fundas contradicciones La gaviota, al fondo de | atmésfera de aparente intrascen- dencia pero en la que “flota en el aire” el eee de la muer. te, de lo inevitable. Ello no requiere de la ambientacién de tne sala, con todos sus cortinajes, ventanas... columnas, sino ese aire propicio para impactar al puiblico con la pre- sencia contradictoria de la muerte y de la vida. O como tam- bién al final de El jardin de los cerezos: qué atmédsfera es necesaria -y repito no una ambientacién— para crear ese es- pacio frio, desolado, propio para que ‘suene’ con toda su estremecedora significacién, “una cuerda que se rompe a lo lejos, un sonido triste, que vibra y se apaga lentamente. Se hace el silencio y solo se oye, a_lo lejos, en el huerto, el golpe del hacha contra los cerezos””®. Esta la acotacién de Chéjov, en tanto que en la sala, cuando toda la familia ha partido, solo el viejo criado Frirs, que deambulando en medio de sus farfullos ininteligibles, al fin, se acuesta en un divan mientras dice: - “La vida pasé fom i uno no hubiese vivido... me recostaré... No tienes fi no te ha quedado nada, nada. jEh tu, torpe! - pe recostado, inmévil)??. ued Podriamos agregar que en el planteamiento d, | sobre todo en los montajes 0 puestas en esc lela considerar_cémo puede llegarse a una ea ena, rentes extremos. Por un lado el concepto Gee atmodsfera, habria que de dos apa- htiano &pico “La gaviota’, Obra cit. Teatro Completo, 2 Acotacidn final “El jardin de los cerezos" i ane - Obra cit. Teatro Comp) leto, | Covdiicauyu wull Cam Aspectos relievantes del teatro de Antin Chéjov que declara que “pata la aplicacién del efecto de distancia- miento es condicién previa que tanto el escenario como la gala se encuentran limpios de todo elemento ‘magico’ y que de ninguna manera pueda llegar a producirse un ‘campo hip- notico’. Se renuncia, por tanto, al intento de crear en escena Ja atmdsfera de un determinado lugar...”"*, donde deja bien claro su rechazo a la ‘atmésfera’, y por otro lado la sugeren- cia implicita en Chéjov para crear esos espacios, esos nece- sarios climas. En esta contradiccién aparente esta precisa- mente el valor de las puestas en escena contempordneas don- de se pueda resolver la contradiccién y, por lo tanto, se enri- quezca el profundo significado de las acciones dramaticas. Porque, por un lado, se logra asi despertar en el espectador su espiritu critico, su goce por el descubrimiento de los gra- ves conflictos de las relaciones humanas, el placer de descu- brir las causas de los hechos y, por otro, impactarlo profun- damente en sus sentimientos para que esta reflexidn no se quede solo en el frfo terreno de lo racional. El mismo Brecht asf lo apunta (claro que no refiriéndose preci- samente a Chéjov): “cuando en el teatro épico sea preciso ha- cer de una determinada atmésfera el eje de la presentacién, porque sirve para aclarar comportamientos de personajes, esa 23 atmésfera o clima debe ser a su vez distanciada””’. Claro que aqui la atmésfera se permite para aumentar el grado de claridad en los conflictos pero nuestra sugerencia es que ademés ‘toque’ la otra zona no racional, sentimental, del es- pectador para elevar el nivel de su goce en la comprension. Este, me parece, es uno de los aspectos mis interesantes en el estudio o exploracién de las obras del dramaturgo ruso. * BRECHT, Bertolt. Escritos sobre teatro, Ediciones Nueva Visién. Buenos Aires, 1973. * Ibid. Apéndice del capitulo Nueva técnica de la interpretacién. 73 covaneauy cull Cam Santiago Gar in Ry: 6. La evasion de las influencias fe parec ‘ | Taller de invest , hacia la verdadera cre Este Gltimo punto m para el desarrollo del | encaminar las experimentacion dad que en realidad es el obj cuenta una investigacion sobre el artista, la razon de ser de una experimentacion no darse solo en el terreno de la erudicién, de la act datos o si se quiere de ensefianzas, hay que buisquedas hacia el enriquecimiento de la capa del actor, del director 0 del teatrero. Otra cosa pue critico o el teatrdlogo. Ese no es nue: e| arte, Par: De acuerdo con el pensamiento de Harold Bloom en tudios sobre este problema de las influencias, sobre todo en su ensayo “La angustia de las influencias” " la dramaturgia de Chéjov se nos presente como un fuerte y poderoso, como lo puede ser Shakespeare o L Vega, que para poderlo ‘aprovechar’ hay que hacer de él una ‘mala lectura’ de tal suerte que nui cidad de invencién evada la necesaria ‘influencia’ . rae ee asi perder su fuerza creadora lentos mas débiles idealizan las cosas; las figuras d Racion capaz se apropian de lo que e cuentr: propi q ni Bloom?>, - que pue- n”, dice Hay aspectos enormemente atractivos en lo que diado y estudiaremos en Chéjov, pero si no los Para pervertir su imitacién caerfamos de bruces on cmos ver admiracion que anula toda la fuerza que requ, muna indeil lidad que es la base del Peon hemos estu- | arte verdader Orig; ©. Tal com, gina- IS Io Hoon '0 apunta SSeS eee eee * Ibid, * Ibid. 74 covaneauy coun Cam Aspectos relievantes del teatro de Anton Chéjov “Estoy interesado solamente en los poetas fuertes, en las gran- des figuras que persisten en luchar con sus grandes precurso- res, incluso hasta la muerte”. Este mismo pensamiento lo ex- pone mas ampliamente en su magnifico estudio sobre Shakespeare’®. La investigacién que se ahoga en el corpus de lo que estudia, y en estos casos en las cumbres eminentes del arte teatral, no logra -paraddjicamente- en los resultados 0 en la parte prac- tica del estudio, hacer lo que podrfamos lamar un ‘desvio’ de las ensefianzas, es decir, conocerlas, pero para poder des- viarlas, ‘pervertirlas’ en el sentido original de la acepcién que es el de cambiar de direccién. Escapar de las influencias es “matar al padre”, es encontrar los propios medios expresi- vos, los pensamientos naturales, la verdadera naturaleza de los sentimientos y pasiones. El caso del mismo Chéjov en este sentido es ejemplar ya que él mismo logra escapar de la influencia de fortisimas perso- nalidades como la de Tolstoi a quien admiraba mas que a cualquier otro creador de su tiempo. Sin embargo, recono- ciendo la genialidad del gran novelista, se enfrenta y ‘lee mal’ al maestro, lo pervierte sobre todo en sus tiltimos trabajos “EI pabellén No 6” 0 mas atin en “Mi vida. Relato de un hom- bre de provincia”**, donde el desarrollo de la trama va, casi de una manera irénica y ‘perversa’, echando por tierra los dogmas tolstocianos. Demostrando con el fracaso y el de- rrumbe de la vida de sus antihéroes cémo todo ese castillo de naipes se viene abajo. Cémo escapa también de las in- fluencias de uno de los mas elevados valores del momento que es Ivan Serguéievich Turgueniev y lo hace precisamente colocandolo como antimodelo de su personaje, el joven dramaturgo Treplev en La gaviota. *” BLOOM, Harold. Shakespeare. La inversién de lo humano. Editorial Norma. Bogota, 2001. ® Maestros Rusos. Tomo II A.P. Chéjov. Editorial Planeta. Barcelona. 1966. 28 Mi vida. Relato de un hombre de provincia. Alianza Editorial. Madrid, 2003. tes y, 75 ae” covaneauy vun Cam Santiago Garcia ‘dramatismo” desmesurado de Guy de de Fedor Dostoievski. Cémo en- ‘manera’ absolutamente propia Cémo evitar el Maupassant. Como ‘huit’ contrar una concision y Une ¢ irrepetible. Esa la gran leccidn. La leccién del clinamen palabra que propone Bloom la cual en su acepcion original significa el desvio de su precursor, tomada de Lucrecio, en cuya obra es el ‘desvio’ brusco de los atomos con el objeto de hacer posi- ble el cambio en el universo. “Un poeta se desvia brusca- mente de su precursor leyendo el poema de este de tal modo que ejecuta un clinamen con respecto a él Queda, por ultimo, hablar del aspecto tal vez mas polémico © controvertido de la obra de Ant6n Chéjov, que es el que podriamos denominar social. Creo que es muy elemental considerar que Chéjov no se ocu- p6 profundamente del contexto sociopolitico de su momen- to histdrico. Lo que sucede es que nunca lo expresa directa- mente en sus obras y menos atin en las dramaticas. Sus per- sonajes hablan de sus ideas y sentimientos que tienen que ver con sus ideologias, pero son pensamientos e ideas de los personajes, no los suyos propios, aunque a veces haya una buena dosis de ellos en algunos parlamentos. Este, tal : Z, @S otro de los valores mas elevados de su dramaturgia No c jarse arrastrar por sus opiniones personales para pone! I : boca de esos seres atormentados, a veces con |a ee perdida de cualquier futuro, 0, por el contrario, oe mismo desaforado. Si hay muchos aspectos aut ce uno ti- en algunos de sus médicos, escritores o poeta ° riograficos esos personajes es Chéjov. S, Ninguno de _ 2” Obra cit. BLOOM, Harold. La angustia de las influencias 76 covaneauy vun Cam Aspeclos relievantes del teatro de Anton Chéjov El libro de Elia Ehremburg Al encuentro de Chéjov"” que se ocupa en gran parte dle este problema arroja datos importan- tes sobre Ia actitud ‘personal’ del autor hacia los aconteci- mientos y la vida social de su momento. Pero faltaria adn encontrar un estudio que se ocupe de una manera mas pro- funda en relacionar su estética, sobre todo la de su obra dramattirgica, con su contexto social. Ehremburg habla de su profundo interés sobre la situacion de la clase humilde, de los desamparados, de la humillante vida de los Mujics, y de las esperanzas 0 posibilidades de un nece- sario cambio. Da cuenta, como otros bidgrafos, de un viaje hasta el otro extremo del imperio ruso, la isla de Sajalin, para conocer de primera mano la terrible realidad de los presos en ese confin del mundo. Del impacto que produjo en su espiritu esa penosisima experiencia, como médico, como periodista pero también como narrador y como pensador de un momen- to crucial, casi decisivo, de la politica de su tiempo. Hay que pensar que Chéjov vive en los albores de la Revolu- cidn Soviética, que muere apenas un aio antes de la que Lenin llam6 el ensayo general (como en teatro) dle la Revolu- cidn, que es el levantamiento de 1905. Esto lo sabia y lo sentia, lo preveia el escritor. Sin embargo, y ahf esta lo interesante, en ninguna de sus 15 obras de teatro, encontramos personajes importantes, destaca- dos, que sean o representen al proletariado, a las clases traba- jadoras, futuros protagonistas del acontecimiento mas impor- tante del siglo XX. Los encontramos por ahi rondando, casi como figurantes, medio mudos, sometidos, serviles a los ca- prichos de sus sefiores. Como Frirs. O las abnegadas amas de casa 0 criadas. O los timidos profesores de provincia. 89 Obra cit, A la rencontre de Chejov. Traduccién Santiago Garcia. 77 (3a covaneauy con Cam Santiago Garcfa 4 el conflicto. Allies, en, aplicar con toda su fuerza y eficg. anteriormente, del subtexto, de de los lenguajes no verbales, d, de lo faltante. asi nula presencia est se pueden umerados atmésfera, 1a incompletu Pero en esa tonces, donde cia los aspectos en lo no dicho, de la del antihéroe o de I ace imperecedera la obra de ogra, sin ‘modernizarla’, que sus piezas ha. r presente, en cualquier espacio, donde la a o la utopia por una vida mejor y no se ha ganado. ecer, hi Ello es fo que, a su parecer, Chéjov. Lo que lo blen de cualquier prese lucha contra la injustici mas digna del ser humano, ‘erebrov recogid en una conversaci6n en la noche, uno de los ultimos comentarios de Chéjov, poco an. tes de su muerte, que para este tema de su preocupacién sobre los problemas sociales de su tiempo, me parece muy esclarecedor: El estudiante A. S' “Dice usted que ha llorado en mis obras (...) no es para eso que las he escrito. Lo he hecho para decir a la gente s6lo una cosa: -Miraos bien y fijaos en la vida inttil y triste que llevais, Lo més importante es que la gente se de cuenta de esto. Y cuando lo entiendan seguro que construirdn otra vida mejor (...) Yo no lo veré, pero lo sé, serd una vida completamente nueva (...) gy los que ya la han entendido? Bien, éstos ya encontraran el camino sin mi... Bueno, vémonos a dormir, se acerca una tormenta (...)3". ‘ ee "Ibi bid. Mi vida. Relato de un hombre de Provincia. Ps ia. Pag.A5, 78 csvaieauy con Cam Aspectos relievantes del teatro de Antén Chéjov Referencias Bibliograficas Acerca de la Obra de Antén Chéjov BLOOM, Harold. La angustia de las influencias. Monte Avila Editores, Caracas, 1976. BUENAVENTURA, Enrique. Obra completa. “I poemas y can- tares”. Editorial Universidad de Antioquia, Universidad del Valle. Coleccién Teatro, Medellin-Cali, febrero 2004. CHEJOV, Anton. Letters of Anton Chekhov. Selected and Edited by Avrahm Yarmolinsky. The Viking Press. New York (USA), 1973. CHEJOV, Antén. Obras Completas. Traduccién Manuel Puen- te y C. Podgurski. Aguilar S.A. Ediciones. Madrid (Espafia), 1979. CHEJOV, Marfa Pavlovna. Museo de A. Chéjov en Yalta. Edi- ciones en Lenguas Extranjeras. Moscti (URSS), 1958. GORKI, Maximo. Tres Rusos. Editorial Calomino. La Plata (Argentina), 1944. MANN, Thomas, “Chéjov”. En : ULIANOVA, Olga. Un Chéjov desconocido: Platonov o la pieza sin nombre. Universidad Nacional Andrés Bello. Ril Editores. Santiago (Chile), 2000. MARTINEZ, Olga Helena. Ant6n Chéjov: Entre la pluma y el escalpelo. Editorial Pontificia Universidad Bolivariana. Medellin (Colombia), 1999. NEMIROVSKY, Irene. La draméatica vida de Antén Chéjov. Libros de Mirasol. Compafiia Editora S.A., Buenos Aires (Ar- gentina), 1961. RITZEN, Quentin. Chéjov. Editorial Tantanella S. A. Barce- lona (Espaiia), 1963. 79 covaneauy con Cam — Tomo | Anton Chéjov 100 anos

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