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ÉTICA - SECCIÓN 14

ESCUELA DE ANTROPOLOGÍA
Lic. Reynaldo Antonio Rivas 
AGOSTO
 Mar.-09 El planteamiento fundamental de la ética La especificación
moral de los actos humanos
 Jue.-11 La especificación moral de los actos humanos Corto 1
 Sáb.-13 Ensayo: ¿Para qué sirve la ética?
 Mar.-16 Las Teorías Axiológicas y Jue.-18 Las Teorías axiológicas
 Sáb.-20 Infografía: Las teorías axiológicas y la jerarquía personal
 Mar.-23 PRIMER EXAMEN PARCIAL ORDINARIO
 Jue.-25 Retroalimentación, presentación e introducción a la Unidad
2
Actividad 1: Control de lectura: Diferencia entre ética y moral
15% sábado, 30 de julio de 2022, 23:59
El pdf titulado “Lectura 1 – Distinción entre ética y moral”. hacer un
cuadro comparativo donde establezcan la diferencia entre estos dos
conceptos. No debe exceder dos páginas.
Actividad 2: Corto 1 10% Jueves 11 de agosto, en el Aula Virtual
Evaluaremos los contenidos vistos en clases hasta ese momento
Actividad 3: Ensayo: ¿Para qué sirve la ética? 15%
Leer el texto de la “Lectura 2 - ¿Para qué sirve realmente… la ética?, de
Adela Cortina, comprenderlo y asimilarlo. Después, escribir un ensayo de
3 páginas máximo donde usted exponga el valor de la ética para labrarse
un buen carácter y lo aplique a su carrera; es decir, ¿para qué sirve la
ética a usted como persona y en su carrera profesional?
Actividad 4: Infografía: las teorías axiológicas y la jerarquía personal
20% Sábado 20 de agosto. Formato PDF en el aula virtual.
Actividad 5: Primer examen parcial ordinario 40% martes 23 de
agosto.
UNIDAD 1: VALORES, EDUCACIÓN Y DERECHOS HUMANOS
26 de julio al 23 de agosto
Martes 26 de Julio de 2022
¿QUÉ ES ÉTICA?
Utilidad Dificultad Sistematicidad
¿ES VÁLIDO HABLAR DE ÉTICA HOY?
• Hacia el lado que miremos percibimos Crisis: sistemas políticos,
económicos, sociales, de salud, sistemas religiosos… etc., en Crisis.
Crisis quizá sea la palabra que define la era del desencanto, la era de la
información en la palma de la mano, etc. Y sin embargo… la ética.
¿SIRVE REALMENTE LA ÉTICA?
En nuestra sociedad parece ser que aquellos que se saltan las normas,
viven mejor; aquellos que practican el mal, vive mejor; los egoístas, los
usureros, los corruptos, viven mejor… entonces: ¿Para qué sirve
realmente la ética? Hablamos de tiempos de crisis, nos quejamos de la
corrupción, posteamos en Facebook que nos indigna el enriquecimiento
ilícito, el nepotismo, el abuso de poder, el desfalco del país, las
contrataciones por cuello, etc. Sí, pero… ¿por qué muchos consideran la
materia como un relleno en su pensum académico? muchos piensan que
estudian ética para cuando sean profesionales?
… ¿PARA QUÉ SIRVE REALMENTE LA ÉTICA?
Ninguna sociedad puede funcionar si sus miembros no mantienen una
actitud ética. Ningún país puede salir de la crisis si las conductas
inmorales de sus ciudadanos y políticos siguen proliferando con toda
impunidad (A. Cortina, 2013)
1. EL MULTICULTURALISMO
Reconoce la existencia de diferentes culturas y diferentes cosmovisiones
La única posibilidad de afrontar éticamente el multiculturalismo consiste
en instaurar el pluralismo como valor, que reconoce la autonomía de las
distintas culturas sobre las bases de una axiología común.
2. LA MODERNIDAD LÍQUIDA
La «vida líquida» es la manera habitual de vivir en nuestras sociedades
modernas contemporáneas. Esta vida se caracteriza por no mantener
ningún rumbo determinado, puesto que se desarrolla en una sociedad
que, en cuanto líquida, no mantiene mucho tiempo la misma forma. Y
ello hace que nuestras vidas se definan por la precariedad y la
incertidumbre constantes. En esa sociedad, nada puede declararse
exento de la norma universal de la «desechabilidad» y nada puede
permitirse perdurar más de lo debido.

3. LA GLOBALIZACIÓN DEL PARADIGMA TECNOCRÁTICO


La humanidad ha asumido la tecnología y su desarrollo junto con un
paradigma homogéneo y unidimensional. Según este paradigma, todos
los problemas de la humanidad serán resueltos por la técnica y la
tecnología.
El problema: El avance tecnológico no estuvo acompañado de un
auténtico desarrollo humano.

28 de julio de 2022
4. NUEVAS TECNOLOGÍAS DE LA INFORMACIÓN
Problemas éticos:
• Amenazas a la privacidad: ojo con tus datos.
• “Decisiones” tomadas por ordenadores
• La realidad virtual y la inteligencia artificial
• Violaciones al respeto interpersonal: en la sombra del anonimato, todo
es posible.
• Comunidades virtuales y ciberaislamiento
• La ciberalfabetización: no te creas todo lo que dicen las redes
El relativismo sostiene que no hay verdades absolutas, que lo bueno lo
malo, lo verdadero y lo falso cada uno lo determina según sus propias
apetencias, es decir que esto depende según la percepción, siendo una
postura filosófica y ética. En Filosofía el relativismo niega la existencia
de verdades absolutas, y en Ética niega los principios de valor absoluto
ADELA CORTINEZ dice que existen unos mínimos sobre los cuales
podemos estar de acuerdo Ejemplo: No se puede matar a alguien porque
detrás esta la dignidad inalienable de alguien, cuyo su principio
fundamental es el respeto a la vida (siendo el primero de nuestros
derechos.
COMO SE CONSTRUYE LA ETICA Y LA MORAL:
La Ética es de valor universal y la moral es de valor particular, la moral
depende de nuestra educación, formación, de nuestras experiencias,
convicciones, etc. La Ética esta llamada a orientar principios de valor
universal que son los principios mínimos que rigen la conducta humana.
Es por eso que sobre el consenso de unos principios universales es que
se establecen las leyes particulares, LA PERCEPCIÓN es la que puede
cambiar, por ende, matar a alguien es un acto objetivo que no depende
de la percepción, es objetivamente que ha sucedido.
Hoy la sociedad vive tan presta e inmediata a llevar todo a la
subjetividad, a los gustos personales, apetencias, a las propias
opiniones.
LA OPINION: En epistemología se define como el estado en el que la
mente fluctúa un 50% y 50 %. Pero más allá de las opiniones están las
certezas, que son realidades externas que no dependen de la persona
5. LA DICTADURA DEL RELATIVISMO
Se va constituyendo una dictadura del relativismo que no reconoce nada
como definitivo y que deja sólo como medida última al propio yo y sus
apetencias. El relativismo abandona la posibilidad del diálogo para
alcanzar una verdad común sobre la que construir la convivencia
humana, el desarrollo como personas y como sociedad, e introduce una
dictadura, la del propio yo y sus apetencias…
6. LA LAICIDAD DE LA RELIGIÓN
- La ética ligada a la religión se establecía como bastión. - Tiempos
fueron en que la religión era la norma de conducta y la pretensión de
una civilta’ cattolica quedó atrás como suspiro medieval. - Hay una lucha
por relegar la religión al ámbito de la privacidad - Se busca una
separación neta entre vida pública civil y religión

EL DRAMA DEL HUMANISMO ATEO


Se entiende por humanismo el ideal formativo del renacimiento (italiano)
de los siglos XV y XVI, orientado al estudio de la antigüedad clásica. Sin
embargo, después de Nietzsche, el antropocentrismo gira en torno a un
humanismo lapidariamente ateo, que busca la realización plena de la
persona fuera de cualquier referencia a Dios, a la trascendencia: un
humanismo ateo.
• Nietzsche ha formulado esta concepción en la FróWiche Wissenschaft
(La gaya, ciencia) (cf fragmento n. 285) con una imagen impresionante: el
creyente es comparado con un lago cuyas aguas van a desembocar en el
mar, perdiendo con ello la posibilidad de realizarse a sí mismo. Sólo
cuando se cierra herméticamente el lago con un dique el agua deja de
fluir (hacia Dios), comienza a elevarse y el hombre puede (ahora sin Dios)
conseguir realizarse.
• Es necesaria la muerte de Dios para que el hombre viva.
• En Así habló Zaratusra, Nietzsche habla De las tres transformaciones
del espíritu, en su camino de emancipación de la idea de Dios, de los
valores, las costumbres y tradiciones, y su ascenso al superhombre.
• El espíritu se convierte en camello: refiere al ser humano cargado con
la joroba de los valores recibidos, las costumbres y tradiciones.
• El camello en león: es el camello que quiere conquistar su libertad; es el
león que no hace caso del “tú debes” y lo cambia por el “yo quiero”.
• El león en niño: inocencia es el niño, y olvido, y un nuevo comienzo, un
juego, una rueda que se mueve por sí misma, un primer movimiento, un
santo decir sí. Y así es como se construye el superhombre, emancipado
de todo y, sobre todo, de Dios.
7. LA SEGMENTACIÓN DE LAS GENERACIONES EN LA ERA DIGITAL
«Estamos en plena cultura del envase. El contrato de matrimonio
importa más que el amor, el funeral más que el muerto, la ropa más que
el cuerpo, y la misa más que Dios. La cultura del envase desprecia los
contenidos» E. Galeano
SISTEMATICIDAD
• UA-1: VALORES, EDUCACIÓN Y DERECHOS HUMANOS
• UA-2: ÉTICA PROFESIONAL
• UA-3: SOLIDARIDAD EN EL DESEMPEÑO PROFESIONAL
• UA-4: VALOR, JUSTICIA Y DIGNIDAD: ÉTICA EMPRESARIAL
• UA-5: ÉTICA PÚBLICA Y TRANSPARENCIA

Clase 1
1. ALGUNOS PRECONCEPTOS DE ÉTICA
Punto de partida: las crisis que ahora vivimos (económica, política,
social, ecológica, etc.) tienen como raíz profunda una crisis ética y moral.
En contra partida, la tendencia actual es acentuar los deseos de un
actuar ético y ponderar las figuras éticas cuales paradigmas a seguir.
Asistimos a una especie de “revalorización de la ética”.
Pero… ¿Qué entendemos por ética? Veamos algunas aproximaciones que
son formas insuficientes de entender la ética.
1) Para algunos la ética es algo exclusivamente dependiente de la
religión. Esta opinión es difícil de aceptar a poco que se piensa un poco
en sus consecuencias. Pero responde a la costumbre muy extendida de
ver cómo el debate ético es protagonizado de forma muy relevante por las
instituciones religiosas. Frente a esta postura, más práctica que teórica,
hay que afirmar que la ética es una dimensión de toda existencia
humana, en la medida en que toda persona se comporta de acuerdo con
unos valores. El ser humano es, por su propia naturaleza, sujeto ético.
2) También es frecuente reducir la ética a un conjunto de normas. De
nuevo estamos ante una postura eminentemente práctica: de hecho,
muchas personas la viven así. Ahora bien, entendida de este modo, la
ética apenas deja espacio para el ejercicio de la libertad y la
responsabilidad.
Una ética así no hace al ser humano más persona, sino que lo infantiliza.
Frente a este enfoque hay que afirmar el carácter personal de la ética es
irrenunciable. Por eso, no es admisible entender la ética como un puro
conjunto de normas que se nos imponen desde una autoridad exterior a
nosotros, sea religiosa o no (puede serlo una persona que nos merece
confianza, un ambiente determinado o la sociedad en su conjunto).
3) Para otros, la ética se reduce a un conjunto de prohibiciones: viene a
entenderse como el instrumento que sirve para establecer esa frontera
que no se puede traspasar, más acá de la cual todo está permitido. Una
vez que se evita lo prohibido (el mal), todo lo demás sería ya indiferente:
por consiguiente, dentro del ámbito de lo no prohibido cada uno puede
actuar sin más criterio que el de sus propias conveniencias. Al igual que
las anteriores, esta versión empobrece enormemente el alcance de la
ética, ya que prescinde de toda dimensión positiva y olvida que la ética
es, ante todo, opción por determinados valores y voluntad de hacerlos
realidad. Por eso, frente a una ética de la prohibición (ética negativa), hay
que pronunciarse por una ética de los valores (ética afirmativa).
4) Otros, por fin, establecen una separación tajante entre la vida privada
y la pública. Según ellos, la ética pertenecería sólo a la vida privada de
cada uno, mientras que la vida pública estaría regida sólo por el criterio
de la competencia y de la pura supervivencia: sólo en la primera cabría
hablar de responsabilidad, pues ahí todo dependería del sujeto; pero en
la segunda estaríamos obligados a movernos siguiendo pautas que se
nos marcan desde fuera y que no está en nuestras manos determinar.
Sin embargo, tal esquizofrenia permanente sería, a la larga, imposible de
mantener, porque no hace justicia a una elemental coherencia humana.
En este sentido hay que optar por una ética que abarca todos los
ámbitos de la existencia, no sólo la vida privada, aunque en cada uno el
comportamiento ético tenga sus condicionamientos propios.
De estas cuatro concepciones de ética que nos encontramos con
frecuencia en el entorno se derivan otros tantos elementos útiles para
una primera aproximación a lo que es la ética. Resumiendo, en pocas
palabras, para hablar correctamente de ética hay que entenderla como
ética humana (propia de todo ser humano), como ética personal (no
reducida a normas), como ética de los valores (no de meras
prohibiciones) y como ética totalizante (que abarca todas las dimensiones
de la existencia, porque en todas ellas hay valores en juego). Estas
cuatro notas pueden reducirse aún más: en realidad todas ellas apuntan
al carácter personal de toda auténtica ética, ya que en ella lo que se pone
en juego es la persona misma, con todo lo que tiene de más específico: su
libertad y su responsabilidad.
2. POR UNA DEFINICIÓN DE ÉTICA
- El término procede del griego ethos que refiere las costumbres,
comportamientos, actitudes, maneras habituales de obrar, carácter.
- En latín se usa el término mos, moris del cual en español usamos
moral.
- Ética y moral desde el punto de vista etimológico son equivalentes.
- Definición etimológica: es la ciencia que estudia las costumbres o
modos de obrar de la persona singular o de una sociedad determinada.
Social
- Socius; societas: implica la idea de bienes en común. En enfermería: el
paciente presenta una necesidad, el profesional un servicio.
- La sociedad está regida por normas que regulan el ejercicio de la
libertad, de los deberes y derechos de las personas. El límite está
establecido por la libertad de cada uno: mi libertad termina ahí donde
comienza la tuya.
Definición real de ética social:
- La ética social estudia el fenómeno social en su relación con la norma
moral, es la ciencia normativa de los actos humanos.
- Objeto material: la actividad y relación de las personas físicas o
morales.
- Objeto formal: la rectitud u honestidad de las relaciones sociales.
- La ética social es una ciencia teórica-práctica-normativa.
o Teórica: busca la verdad y el bien
o Práctica: ordena la vida según la verdad y el bien
o Normativa: regula las actividades de las personas en el ámbito social,
las relaciones de las personas entre sí, la apertura de las personas hacia
la comunidad, la recepción de la comunidad de la persona y la
convivencia de la comunidad entre sí

Siendo nuestra intención tratar aquí de cosas pertenecientes a la moral, lo primero


que tenemos que hacer es averiguar exactamente de qué ciencia forma parte. La
moral, a mi juicio, sólo puede formar parte de la política. En política no es posible
cosa alguna sin estar dotado de ciertas cualidades; quiero decir, sin ser hombre de
bien. Pero ser hombre de bien equivale a tener virtudes; y por tanto, si en política se
quiere hacer algo, es preciso ser moralmente virtuoso. Esto hace que parezca el
estudio de la moral como una parte y aun como el principio de la política, y por
consiguiente sostengo que al conjunto de este estudio debe dársele el nombre de
política más bien que el de moral. Aristóteles, Moral a Eudemo, I, 1.

CLASE 2

1. EL PLANTEAMIENTO FUNDAMENTAL DE LA ÉTICA


- El punto de partida de la ética: la experiencia moral “haz el bien, evita
el mal”. Tal experiencia no es elaborada por cada persona a partir de la
nada, sino que tiene unos presupuestos:
o Presupuestos naturales específicos: los primeros principios prácticos:
Bonun facendum et prosequendum et malum vitandum.
o Presupuestos experienciales: las verdades morales no se alcanzan por
la sola razón, sino en la práctica. No basta “saber lo que es bueno”, sino
hacerlo experiencia.
o Presupuestos históricos-sociales: el ethos del grupo (familia, sociedad,
estado, comunidad religiosa, cultura, etc.) es anterior al ethos de la
persona singular.
- La experiencia moral es diferente para cada persona. Esto genera que la
reflexión moral tenga variantes en sus expresiones, aun manteniendo
sus contenidos. Es posible, pues, registrar diversos modos de vivir y de
interpretar la propia existencia y experiencia moral. De aquí surgen las
distintas figuras de ética.
2.1. Las principales figuras de ética
- Una figura ética es un modo de entender cuál es el objeto principal de
la investigación ética o, si se prefiere, una idea acerca de la pregunta
fundamental a la que la ética debería dar una respuesta filosófica: el
objeto principal del saber ético y la concepción del sujeto moral.
a. La ética como investigación acerca del tipo de vida que es mejor para
el hombre. Este es el planteamiento clásico (filosofía griega y medieval
cristiana). Es una ética de la virtud. (Aristóteles – Santo Tomás)
b. La ética como indagación de la ley moral que ha de ser observada. Se
centra no sobre el bien de la vida humana, sino sobre el bien o el mal de
la acción singular, que se discierne con lo que la ley manda o prohíbe. Es
una ética de la observancia de la norma. (D. Escoto, Ockam, Kant)
c. La ética como búsqueda y fundamentación de las reglas para la
convivencia y la colaboración social. Es la ética de la conveniencia social.
(Habermas, Opel)
d. La ética como explicación naturalista del comportamiento humano.
Busca explicar el comportamiento humano sin recurrir a la ley divina. Se
entiende el comportamiento humano como una consecuencia “natural-
física” del cosmos. Es una ética del devenir del cosmos. (Hume)
e. La ética como saber ordenado a la producción de una buena (o de la
mejor) situación vital para individuo o para la colectividad. Es la ética
utilitarista, consecuencialista y proporcionalista. (visión protestante)
2.2. El punto de vista de la “primera persona”. Nuestra propuesta.
- De todas estas figuras éticas, solo la primera tiene como objeto el bien
de la persona humana considerada como un todo (integral). El obrar
humano es visto desde el sujeto que persigue lavirtud. Es una ética
elaborada a partir de la primera persona, del yo.
- La ética de la primera persona pone su atención, en primer lugar, al
deseo del bien humano
completo que constituye el horizonte del obrar y el fundamento dinámico
de la razón práctica. En segundo lugar, pone atención a las virtudes que
son los principios específicos de la razón prácticaque garantizan su
rectitud y de las acciones elegidas. La virtus (areté) es un hábito o
disposición estable que busca siempre el bien y que no se usa para el
mal.
- La ética elaborada a partir de la primera persona reconoce que es
posible conocer el bien supremo y lo que es bueno para la persona, y
sobre esa base se estructura como una ética de las virtudes.
- Admite que el sujeto humano es moralmente competente, es decir, tiene
los recursos necesarios y suficientes para vivir bien, y las exigencias
morales no le resultan, por tanto, ni exteriores ni impuestas. Quien obra
mal, antes que oponerse a una ley, se contradice a sí mismo, contradice
su propia identidad.

Clase 4
LA ESPECIFICACIÓN MORAL DE LOS ACTOS HUMANOS
1. Los actos humanos y los actos del hombre
Los actos humanos son aquellos que proceden de la voluntad
deliberada del hombre, es decir, los que realiza con conocimiento y
libre voluntad (cfr. S.Th., I-II, q.1, a.1, c.).
En ellos, interviene primero el entendimiento o sea la inteligencia, porque
no se puede querer o desear lo que no se conoce: con el entendimiento el
hombre advierte el objeto y delibera si puede y debe tender a él, o no.
Una vez conocido el objeto, la voluntad se inclina hacia él porque lo
desea, o se aparta de él, rechazándolo. Sólo en este caso cuando
intervienen inteligencia y voluntad el hombre es dueño de sus actos, y,
por tanto, plenamente responsable de ellos. Y sólo en los actos humanos
puede darse valoración moral.
No todos los actos que realiza el hombre son propiamente humanos,
pueden ser también:
 Meramente naturales: los que proceden de las potencias vegetativas y
sensitivas, sobre las que el hombre no tiene control voluntario alguno, y
son comunes con los animales: por ejemplo, la nutrición, circulación de
la sangre, respiración, la percepción visual o auditiva, el sentir dolor o
placer, etc.
 Actos del hombre: los que proceden del hombre, pero faltando ya la
advertencia (niños pequeños, distracción total), ya la voluntariedad (por
coacción física, por ejemplo), ya ambas (por ejemplo, en el que duerme).
1.1.División del acto humano
Por su relación con la moralidad, el acto humano puede ser:
 Bueno o lícito, si está conforme con la ley moral (por ejemplo, el dar
limosna).
 Malo o ilícito, si le es contrario (por ejemplo, mentir).
 Indiferente, cuando ni le es contrario ni conforme a la moral (por
ejemplo, el caminar)
1.2.Elementos del acto humano: la advertencia y el consentimiento
El acto humano exige la intervención de las potencias racionales,
inteligencia y voluntad, que determinan sus elementos constitutivos: la
advertencia en la inteligencia y el consentimiento en la voluntad.
a. La advertencia:
Por la advertencia, el hombre percibe la acción que va a realizar, o que ya
está realizando. Esta advertencia puede ser plena o semiplena, según se
advierta la acción con toda perfección o sólo imperfectamente (por
ejemplo, estando semi-dormido).
Obviamente, todo acto humano requiere necesariamente de esa
advertencia, de tal modo que un hombre que actúa a tal punto distraído
que no advierte de ninguna manera lo que hace, no realizaría un acto
humano.
No basta, sin embargo, que el acto sea advertido para que pueda ser
imputado moralmente: en este caso es necesaria, además, la advertencia
de la relación que tiene el acto con la moralidad (por ejemplo, el que
advierte que está conduciendo un automóvil, pero no se da cuenta que
tomo un carril no permitido, realiza un acto humano que, sin embargo,
no es imputable moralmente).
La advertencia, pues, ha de ser doble:
 advertencia del acto en sí y
 advertencia de la moralidad del acto.
b. El consentimiento
Lleva al hombre a querer realizar ese acto previamente conocido,
buscando con ello un fin. Como señala Santo Tomás (S. Th, I-II, q. 6, a.
1), acto voluntario o consentido es “el que procede de un principio
intrínseco con conocimiento del fin”.
Ese acto voluntario consentido puede ser:
 perfecto o imperfecto: según se realice con pleno o semipleno
consentimiento;
 directo o indirecto: por la importancia que tiene en la práctica,
estudiaremos con más detenimiento lo que se entiende por acto
voluntario indirecto y directo en el tema de la acción con doble efecto.
2. EL ACTO VOLUNTARIO INDIRECTO o ACCIÓN CON DOBLE
EFECTO
El principio de doble efecto es un principio de razonamiento práctico que
sirve para determinar la licitud o ilicitud de una acción que produce o
puede producir dos efectos, de los cuales uno es bueno y el otro es malo.
El acto voluntario indirecto se da cuando al realizar una acción, además
del efecto que se persigue de modo directo con ella, se sigue otro efecto
adicional, que no se pretende sino sólo se tolera por venir unido al
primero (por ejemplo, el militar que bombardea una ciudad enemiga, a
sabiendas de que morirán muchos inocentes: quiere directamente
destruir al enemigo -voluntario directo-, y tolera la muerte de inocentes -
voluntario indirecto-).
Es un acto, por tanto, del que se sigue un efecto bueno y otro malo, y por
eso se le llama también voluntario de doble efecto.
Es importante percatarse de que no es un acto hecho con doble fin (por
ejemplo, robar al rico para darle al pobre), sino un acto del que se siguen
dos efectos: doble efecto, no doble fin. Por ejemplo, Robin Hood realiza
acciones con doble fin: el fin inmediato es robar al rico, el fin mediato es
darle ese dinero a los pobres. No es una acción de doble efecto, sino una
acción con un fin propio y un fin ulterior.

Hay casos en que es lícito realizar acciones en que, junto a un efecto


bueno se seguirá otro malo. Para que sea lícito realizar una acción de la
que se siguen dos efectos: bueno uno (voluntario directo) y malo el otro
(voluntario indirecto), es necesario que se reúnan determinadas
condiciones:
1. Que la acción sea buena en sí misma, o al menos indiferente: Así,
nunca es lícito realizar acciones malas (por ejemplo, mentir, jurar en
falso, etc.), aunque con ellas se alcanzaran óptimos efectos, ya que el fin
nunca justifica los medios, y por tanto no se puede hacer el mal para
obtener un bien. Para saber si la acción es buena o indiferente habrá que
atender, cómo se verá más adelante, a su objeto, fin y circunstancias.
2. Que el efecto inmediato o primero que se produce sea el bueno, y el
malo sea sólo su consecuencia necesaria: Es un principio que se deriva
del anterior. Es necesario que el buen efecto derive directamente de la
acción, y no del efecto malo (por ejemplo, no sería lícito que por salvar la
fama de una muchacha se procurara el aborto, pues el efecto primero es
el aborto; no sería lícito matar a un inocente para después llegar hasta
donde está el culpable, porque el efecto primero es la muerte del
inocente).
3. Que uno se proponga el fin bueno, es decir, el resultado del efecto
bueno, y no el malo, que solamente se tolera: Si se intentara el fin malo,
aunque fuera a través del bueno, la acción sería inmoral, por la
perversidad de la intención. El fin malo sólo se tolera por ser imposible
separarlo del bueno, con disgusto o desagrado. Ni siquiera es lícito
intentar los dos efectos, sino únicamente el bueno, permitiendo el malo
solamente por su absoluta inseparabilidad del primero (por ejemplo, el
empleado que amenazado de muerte da el dinero a los asaltantes, ha de
tener como fin salvar su vida, y no que le roben al patrón). Aun teniendo
los dos fines a la vez, el acto sería inmoral.
4. Que haya un motivo proporcionado para permitir el efecto malo:
Porque el efecto malo, aunque vaya junto con el bueno y se le permita
sólo de modo indirecto, es siempre materialmente malo, por eso, no se
puede permitir sin causa proporcionada. No sería lícito, por ejemplo, que
para conseguir un pequeño arsenal de municiones del ejército enemigo
haya que arrasar a todo un pueblo: el motivo no es proporcionado al
efecto malo.
5. Ultima ratio: que no haya otra opción, pues si la hubiere, debe ser
elegida.
3. LA MORALIDAD DEL ACTO HUMANO
La acción voluntaria va especificada moralmente; es decir, se debe
determinar si lo que hacemos es bueno o malo éticamente hablando.
Para ello, hemos de conocer las fuentes de la moralidad, pues
dependiendo de la calificación moral que hace el sujeto a partir de esas
"fuentes", de las que se deduce la moralidad de una acción. El acto
humano no es una estructura simple, sino integrada por elementos
diversos. ¿En cuáles de ellos estriba la moralidad de la acción? Se
responde diciendo que, en el juicio sobre la bondad o maldad de un acto,
es preciso considerar: Objeto, Fin y Circunstancias.

a. El objeto (¿Qué hago?)


Por objeto no se entiende la materialidad de algo, es decir, un objeto
físico, sino en cuanto una acción está ordenada a la moralidad. El objeto
es aquello a lo que tiende la acción, considerada desde un punto de vista
moral (a veces se lo llama también finis operis, fin de la obra). Por su
objeto, los actos pueden ser buenos (tratar bien al prójimo, cumplir los
propios deberes, ser castos) malos (robar, mentir, matar) o indiferentes
(pasear, dormir). Al hablar del objeto, se deja de lado —por abstracción—
la intención del agente o fin: dar limosna siempre es un objeto bueno,
aunque el que da tenga intención torcida. Para que un acto humano sea
bueno se requiere en primer lugar la bondad del objeto.
b. El fin (¿Por qué, para qué lo hago?)
Se entiende por "fin", la finalidad o intención que el sujeto imprime a su
acción. O sea, aquello por lo que la ejecuta.
Toda acción —como todo objeto— tienen un fin marcado: la limosna, por
sí misma, es una ayuda al que lo necesita; todo servicio social contribuye
al bien común. Este "fin" se le denomina finis operis. Pero no se
considera en sí mismo como fuente de moralidad. Lo que aquí se
entiende por fin, es la finalidad que se propone el agente en su
acción, o sea, el finis operantis.
Así una persona puede ejecutar un trabajo para cumplir con un deber,
para servir a los demás, o por puro amor propio; se puede decir una
verdad por simple afán de justicia, o por caridad, o para herir al prójimo,
etc. No basta la bondad del objeto, para que la acción sea buena, sino
que se requiere además que concurra la bondad del fin, que es la bondad
ex parte agentis, normalmente llamada intención recta.
Querer un objetivo es tener intenciones. La intención es el acto de la
voluntad que mueve al hombre a conseguir, por medio de acciones
subsiguientes, un determinado objetivo. La intención no es el fin,
aunque el fin perseguido es lo que nos permite describir con palabras la
intención.
c. Las circunstancias
Las circunstancias constituyen el tercer principio o "fuente" que entra
como componente de la moralidad de un acto. "Circunstancias" son
condiciones que acompañan la acción y que, en consecuencia, atañen a
su valoración moral.
Las circunstancias afectan a todos los componentes que constituyen la
actividad humana: conciernen a la persona, al objeto, al lugar, a los
medios que se usan, al motivo de la acción, al cómo se realiza y al tiempo
en que ha tenido lugar. Es clásico enumerar siete circunstancias, que se
encuentran en los escritos de Tomás de Aquino. Son las siguientes:
— Quién (quis). Hace referencia a la persona concreta que actúa. Es
lógico que la moralidad de un acto varíe según quien lo lleva a cabo. La
mentira de un niño difiere de la dicha por un adulto, máxime si está
constituido en dignidad y debe fidelidad a un colectivo humano. Tal
puede ser la mentira de un jerarca de la Iglesia o de un político en una
sociedad democrática.
— Qué (quid). Alude a la cualidad del objeto. No es lo mismo un hurto
que un robo sagrado, aunque materialmente represente el mismo valor
económico. La injuria a los padres difiere de la que cabe hacer a un
amigo o desconocido.
— Dónde (ubi). Se refiere a que la circunstancia del lugar en el que se
comete un acto añade o quita malicia a la acción. Tal es el caso de un
delito cometido en público, que provoca el escándalo, o la calumnia
hecha en un medio de comunicación, con el consiguiente eco social.
— Con qué medios (quibus auxiliis). Atañe al tema de los medios con los
que la acción se ha llevado a cabo. Por ejemplo, el soborno para
descubrir un secreto o medios no lícitos para adquirir unos bienes. Aquí
entran también los casos en que se obtiene algo por medios ilícitos, como
el fraude o la violencia. La licitud de los medios pertenece a esta
circunstancia que afecta a la moralidad.
— Por qué (cur). Se trata de examinar el motivo de la acción. Es la razón
que inclina al sujeto a actuar. De hecho, es el fin, que, por su
importancia, se trata como "fuente" distinta. Como circunstancia, el "fin"
tiene aplicación para juzgar las acciones en sí indiferentes, pero que se
convierten en buenas o malas por razón del motivo. Pasear, acción moral
en sí indiferente, puede ser una acción buena, si se hace por motivos de
acompañar a alguien que experimenta soledad.
— Cómo (quomodo). La circunstancia del modo concreto en que la
acción se ha realizado puede modificar la valoración moral. Así ocurre
cuando una acción se comete con deliberación y alevosía, o por, el
contrario, acusa cierta precipitación o improvisación. La acción
provocada por la ira no se identifica en el modo como si se está sereno.
— Cuándo (quando) hace referencia al tiempo en el que se comete la
acción. Supone, al menos, dos aplicaciones concretas: la cualidad del
tiempo (la noche, un tiempo determinado) y la cantidad o duración. La
persistencia en el tiempo puede agravar una acción o, por el contrario,
disminuirlo, por la fugacidad en que se ha cometido.
Algunos autores añaden una nueva circunstancia: la cantidad
(quantum). No es lo mismo el robo de una cantidad de dinero mayor o
menor.
Como es lógico, las "circunstancias" no se aplican sólo a los actos malos,
sino que afectan también a las buenas acciones, por lo que,
"circunstancialmente", aumentan el mérito.

«Bonum ex integra parte; malum a qualunque defectu»


Jueves 18 de agosto de 2022

TEORIAS AXIOLICAS
Nosotros escogemos los valores, a través de la comparación y tiene lugar
tanto a nivel individual como el orden social e histórico. La ética es de
construcción tanto individual como historicosocial. Ahora el resultado de
esta construcción de valores se llama CULTURA
¿Qué es la cultura desde el punto de vista Ético? La cultura es el
depósito de valores de una sociedad. (el trato a los demás, como se
hablan, como se llevan con los vecinos).

EL CONSTRUCCIONISMO AXIOLÓGICO
Los valores se hayan construidos en la cultura de una sociedad y es por
medio de la tradición que se nos trasmite a nosotros y sobre la base de
estos valores que recibimos es que nosotros podemos construir nuevos
valores, siendo la cultura el deposito de los valores en una sociedad

Los actos Humanos son aquellos que proceden de un principio intrínseco


(es decir de la voluntad con conocimiento)

Especificación moral de los actos humanos


Hay dos elementos objetivos en
Los elementos constitutivos para los actos humanos
Advertencia: puede ser plena y semi plena (según cuan consiente
estemos de lo que estamos haciendo)
La advertencia del acto en si mismo y de la moralidad del acto
y el consentimiento
Atenuantes: La imputabilidad de alguien disminuya

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