(Qué es
la democracia?
ALAIN TOURAINE1. Una idea nueva
Un triunfo dudoso
LA DEMOCRACIA es una idea nueva. Como en el Este y en el Sur
se derrumbaron los regimenes autoritarios y Estados Unidos ga-
né la guerra fria contra una Union Soviética que, después de ha-
ber perdido su imperio, su partido todopoderoso y su adelanto
tecnolégico, terminé por desaparecer, creemos.que la:democracia’
dacecenlontametlonercnlcecontfseyirentoouenye
eXpresiényculturales:la.secularizacion. Pero esta idea, por mas
tranquilizadora que pueda ser para los occidentales, es de una li-
gereza que deberia inquietarlos. Un»mercado» politico abiertoy
compettivorno-es-plnamnentsdentifesbie-com ta democracin
no hay, en efecto, democracia sin la libre eleccion de los gober-
nantes por los gobernados, sin pluralismo politico, pero no pue-
de hablarse de democracia si los electores s6lo pueden optar en-
tre dos fracciones de la oligarquia, del ejército o del aparato del
Estado. Del mismo modo, la economia de mercado asegura la in-
dependencia de la economia con respecto a un Estado, una Igle-
sia o una casta, -
i a
hal indusi geno (self-
sustaining growth).
En lavactualidad-muchos'signos pueden Ilevarnos'@ pensar-que
los tegimenes:que:llamamos'democraticos'se debilitan tanto'co-
moslos:regimenes-autoritarios, y estén sometidos a las exigencias
1516 {QUE ES LA DEMOCRACIA?
del mercado mundial protegido y regulado por el poderio de Ey
tados Unidos y por acuerdos entre los tres principales centros qe
poder econdmico. Este mercado mundial tolera la participaciin
de unos paises que tienen gobiernos autoritarios fuertes, de otros
con regimenes autoritarios en descomposicion, de otros, atin, con
regimenes oligdrquicos y, por dltimo, de algunos cuyos regimenes
pueden considerarse democraticos, es decir donde los goberna.
dos eligen libremente a los gobernantes que los representan,
poder»yy-a-vecesy-inelusovel "enriquecimiento»personalydessus,
miembros. La conciencia de ciudadanfa se debilita, ya sea porque
muchos individuos se sienten mas consumidores que ciudadanos
y mAs cosmopolitas que nacionales, ya porque, al contrario, cier-
to némero de ellos se sienten marginados o excluidos de una so-
ciedad en la cual no sienten que participan, por razones econd-
micas, politicas, étnicas 0 culturales.
arribay/por un poder autoritario;"yardesde-abajoy"por elcaospla:
unos citidadanos reducidos’alypapel"de"electores» El siglo XX ha
estado tan fuertemente marcado por los regimenes totalitarios,
que la destruccién de éstos pudo parecer a muchos como una
prueba suficiente del triunfo de la democracia. Pero contentarse
con definiciones meramente indirectas, negativas de la democra-
cia significa restringir el andlisis de una manera inaceptable. Tan~
eee : +S
‘Fecordar’swunidad. Tiene, incluso, doblemente raz6n: en primer
lugar, dado que no podria emplearse el mismo término para de
signar dos realidades diferentes si no tuvieran importantes lemi
UNA IDEA NUEVA 7
entos comunes entre sf y, en segundo lugar, porque un discurso
que conduce a llamar democracia a un régimen autoritario y has-
ta totalitario se destruye a si mismo.
Serd preciso que nos contentemos con acompaiiar al péndulo
en su movimiento de retorno a las libertades constitucionales,
después de haber buscado extender durante un largo siglo que
comenz6 en 1848 en Francia, la libertad politica a la vida econé-
mica y social? Una actitud semejante no aportaria ninguna res-
puesta a la pregunta: gc6 i i
i Ut
1
futuro della democrazia, p. 5); a continuacién, diciendo que un
régimen es tanto mas democratico cuanto una mayor cantidad de
personas participa directa o indirectamente en la toma de deci-
siones; por dltimo, subrayando que las elecciones a hacer deben
ser reales, Aceptemos también decir con él que la democracia
descansa sobre la sustitucién de una concepcidn organica de la
sociedad por una visin individualista cuyos elementos principa-
les son la idea de contrato,
. Pero después
su biisqueda de_la-felicidad para el mayor nimero.
de haber planteado estos principios “liberales”, Bobbio-nos hace”
deseubrie’ que la realidad politica es muy diferente del modelo.
sindicatos, tienen un peso creciente sobre la vida politica, lo que
a menudo quita toda realidad al pueblo “supuestamente sobera~
. Por ultimo, el funciona-
miento democratico no penetra en la mayor parte de los domi-
ni
BI
k
jios de la vida social, y contrario a la democracia, si-
sue desempefiando un papel importante;is 2QUE ES LA DEMOCRACIA?
y los aparatos.A estas inquietudes se agrega un interrogante més
fundamental: CeIn TCNeNr eonere
glas y procedimientos, zpor qué los cit a ee
fenderla activamente? S6lo algunos diputados se hacen matar
por una ley electoral.
: impedir la arbi-
trariedad y el secreto, responder a las demandas de la mayoria,
garantizar la participacién de la mayor cantidad posible de perso-
nas en la vida publica. Hoy, cuando retroceden los regimenes au-
toritarios y han desaparecido las “democracias populares” que no
eran sino dictaduras ejercidas por un partido Gnico sobre un pue-
blo, ya no podemos contentarnos con garantias constitucionales
juridicas, en tanto la vida econémica y social permaneceria dom
nada por oligarqufas cada vex mas inalcanzables.
Tal es el objeto de este libro. Desconfiado con respecto'a'la'de-
mocracia participativa, inquieto ante todas'las formas de influen-
blica, hostil 216s Tlamados al pueblo, la nacién’o la historia, que
siempre terminan por darval’ Estado una legitimidad que ya no
proviene de una’eleccién libreyse"préguntavacerca'del contenido
le hoy'en dia? A fines del siglo
XIX, las democracias limitadas fueron desbordadas, por un lado,
por la aparicién de la democracia industrial y la formacién de
gobiernos socialdemécratas apoyados por los sindicatos y, por el
otro, por la formacién de partidos revolucionarios originados en
el pensamiento de Lenin y de todos los que daban prioridad a la
caida de un antiguo régimen sobre la instauracién de la democra-
cia. Esa.época.de-los-debates:sobre la democracia “social” esta
cerrada, pero'en ausencia de todo conteni ocra~
cia se degrada en libertad de consumo, en-supermercado politico...
La opini6n se content6 con esta concepcién empobrecida en elUNA IDEA NUEVA, 19
momento en que se derrumbaban el régimen y el imperio soviéti-
cos, pero no es posible abandonarse durante mucho tiempo a las,
facilidades de una definicién puramente negativa de la democra-
cia. Ta
nes.y-las-esperanzas. Privatizacién de los problemas sociales
aqui, movilizacin “integrista” en otra parte; gno'se ve a las ins-
tituciones democraticas |
nv segoaissoeeoverstlororsreocarnetnanioids
3?
Batconta'ds a pérdida de sentido, es preciso recurrit a una
concepcién que d
los individuos:y los grupos dominados por la légica de un poder,
es decir sometidos al control ejercido por los duefios y los geren-
tes-de sist
temas para los cuales aquéllos no son’mas que recursos.
En contra de las monarqufas absolutistas, algunos convocaron a
los pueblos a la toma del poder; pero esta convocatoria revolucio-
naria condujo a la creacién de nuevas oligarquias o a despotismos
populares. Ei
Iturales 0 econémicas, es nece-
jireccidn opuesta. Por esa raz6n asistimos al
retorno de la idea de derechos del hombre, més fuerte que nunca
porque fue enarbolada por los resistentes, los disidentes y los espi-
ritus criticos que lucharon en los momentos més negros del siglo
contra los poderes totalitarios. De los obreros e intelectuales de
Gdansk a los de Tien An Men, de los militantes americanos de los
Civil Rights a los estudiantes europeos de mayo de 1968, de quie-
nes combatieron el apartheid a quienes atin luchan contra la dicta-
dura en Birmania, de la Vicaria de la Solidaridad chilena a los
opositores serbios y los resistentes bosnios, de Salman Rushdie a
los intelectuales argelinos amenazados, elespiritw democratico' fie”
vivificado por todos aquellos que opusieron st derecho fundamen-
tal de vivir libres a poderes cada vez mas absolutos.
La democracia seria una palabra muy pobre si no fuera defini-
da por los campos de batalla en los que tantos hombres y muje-
res combatieron por ella. Si necesitamos una definicién fuerte deoe
.
20 {QUE ES LA DEMOCRACIA? =)
la democracia, es. en parte porque hay que oponerla’a’aquellos \
que, en nombre:de las luchas democraticas antiguas, se constitu~
yeron y siguen constituyéndose en los servidores del absolutismo.
y-la intolerancia. ‘Yano queremos. una democracia de participa-
cién; no podemos contentarnos.con una democracia de delibera-
ciéns necesitamos una democraciaide liberacién. :
Antes que nada hace falta, por cierto, separar las concepciones
que los individuos se forman de la “buena sociedad” de la defini-
cién de un sistema democratico. Yano concebimos una democra-
cia que no sea, pluralistay, en el sentido. mas amplio del término,
laica. Si una sociedad reconoce en sus instituciones una concep-
cién del bien, corre el riesgo de imponer creencias y valores a una
poblacin muy diversificada. Del mismo modo que la escuela pi-
blica separa lo que compete a su ensefianza de lo que corresponde
a la elecci6n de las familias y los individuos, umgobierno no pue-
de imponer una concepciéi it
decisiones pueblo tengan en
cuenta en la mayor medida posible las opiniones expresadas y los
intereses defendidos. En particular, la idea de una religion de Es-
tado, si corresponde a la imposicién por parte del Estado de re~
glas de orden moral o intelectual, es incompatible con la demo-
cracia. La libertad de opini6n, de reunién y de organizacién es
esencial a la democracia, porque no implica ningin juicio del Es-
tado acerca de las creencias morales o religiosas.
No obstante, esta concepcién procesal de la libertad no basta
para organizar la vida social. La ley va més lejos, permite o pro-
hibe, y por consiguiente impone una concepcidn de la vida, de la
propiedad, de la educacién. ¢Cabe imaginarse un derecho social
que se redujera a un cédigo de procedimientos?
Asf, pues, zcOmo responder a dos exigencias que parecen opues-
tas:-por-un lado respetar-lo més posible las libertades personales,
por el otro, organizar-una sociedad que sea considerada justa por
la-mayorfa? Este interrogante atravesaré todo el libro hasta su
conclusién, pero el socidlogo no puede esperar tanto tiempo antes
de presentar una respuesta propiamente sociolgica, es decit, que
explique las conductas de los actores mediante sus relaciones so-UNA IDEA NUEVA,
ciales. Lo que vincula libertad negativa y libertad positiva'es la vo-
I .
némicos, politicos:y:culturales. Es por esa razén que la negocia-
cin colectiva y, mas ampliamente, la democracia industrial, fue-
ron una de las grandes conquistas de la democracia: la accion de
los sindicatos permitié que los asalariados negociaran con sus em-
pleadores en la situaci6n menos desigual posible. De la misma ma-
nera, la libertad de prensa no es s6lo la proteccién de una libertad
individual; da también a los més débiles la posibilidad de ser escu-
chados en tanto que los poderosos pueden defender sus intereses
en la discreci6n y el secreto, movilizando redes de parentesco, de
amistad, de intereses colectivos. Es entre la democracia procesal,
que carece de pasién, y la democracia participativa, que carece de
sabiduria, donde se extiende la accién democrética cuya meta
Principal es liberar a los individuos y a los grupos de las coaccio-
res que pesan sobre ellos. i i
querian crear-el hom|
virtudes republicanas suscitan nuestra desconfianza mas que n
tra admiraci6n; ya no convocamos al Estado para que nos arran
que de las tradiciones y los privilegios;
ormas de poder 08, €
Jo. El llamado a las masas e incluso
al pueblo ha sido con demasiada constancia el lenguaje de los dés-
potas como para que no nos horrorice. Ni siquiera aceptamos ya
las disciplinas impersonales que nos habian sido impuestas en
nombre de la técnica, la eficiencia y la seguridad. La democracia
sélo es vigorosa cuando esta contenida en un deseo de liberacion
que se da constantemente nuevas fronteras, a la vez mas distantes
y més cercanas, puesto que se vuelve contra las formas de autori-
dad y de represin que tocan la experiencia més personal.
Asi definido, ebespfritu democratico
: limitarely
poder»y-responder’a'las demandas ‘dela mayoriay Pero en qué= {QUE ES LA DEMOCRACIA?
condiciones y en qué medida? Es a estos interrogantes que este j-
bro debe esforzarse por responder.
La libertad del sujeto
‘Todos estos temas se retinen en un tema central, la libertad del
sujeto. Llamo sujeto a la construccién del individu (o del gru-
po) como actor, por la. asociacién de su libertad afirmada y su
experiencia vivida; asumida y reinterpretada: El sujeto es el es-
fuerzo de transformacién de una situaci6n vivida en accién libre;
introduce libertad en lo que en principio se manifestaba como
unos determinantes sociales y una herencia cultural.
zCémo se ejerce esta accién de la libertad? Es puro no com-
promiso, repliegue en la conciencia de si, meditacién del ser? No;
lo propio de la sociedad moderna es que esta afirmaci6n de la li-
bertad se expresa antes que nada por la resistencia a la domina-
cidn creciente del poder social sobre la personalidad y la cultura.
El poder in: ap n
mada cientifica del trabajo, la st
trabajo impuestas; luego; en las
impuso el mayor consumo posible de signos de participacién;
por su lado, ei poder politico movilizador impuso unas manifes-
taciones de pertenencia y lealtad. Contra todos esos poderes que,
como ya lo anunciaba Tocqueville, constrifien a los espiritus atin
més que a los cuerpos, que imponen una imagen de si y del mun-
do més que el respeto a la ley y el ordenamiento, el sujeto resiste_
y se afirma al mismo tiempo mediante su particularismo y su de-
seo de libertad, es decir de creacién de si mismo como actor, Ca
paz de transformar su medio ambiente.
La democracia no es dnicamente un conjunto de garantias ins-
titucionales, una libertad negativa. Es la lucha de unos sujetos,
en su cultura y su libertad, contra la légica dominadora de los
sistemas; es, segtin la expresién propuesta por Robert Fraisse, la
politica del sujeto. El gran cambio es que a comienzos de la €P0-
ca moderna, cuando la mayoria de los seres humanos estaban
confinados en colectividades restringidas y sometidos al peso 4°
los sistemas de reproduccién mas que a la influencia de las fuer”UNA IDEA NUEVA 2B
zas productivas, el sujeto se afirmé identificéndose con la razn
y el trabajo, mientras que en las sociedades invadidas por las téc-
nicas de produccién, de consumo y de comunicacién de masas, la
libertad se separa de la razén instrumental, con el riesgo, a veces,
de volverse contra ella, para defender o recrear un espacio de in-
vencién al mismo tiempo que de memoria, para hacer aparecer
tun sujeto que sea, a la vez, ser y cambio, pertenencia y proyecto,
cuerpo y espiritu. Para la democraci 6
defenderse y prod )
La.cultura politica francesa ha Hlevado lo més lejos posible la
idea republicana, la identificacién de la libertad personal con el
trabajo de la ley, la asimilacién del hombre al ciudadano y de la
~ nacién al contrato social. -asf'misma’co-
|. tesus particularidades y hasta swmemoria, creando una sociedad"
_tacionales. Hee eee Troponin ere teak
rura'democrética; tal'como'se la'define aqui, y 1a cultura republi
cana-a la francesa como se comprende mejor la-transformaciom™
“de la idea democratica. demo-
eratica | rsidad; i | con
la-ciudadania; la”segunda*opone:los derechos del-hombre a los
deberes’del ciudadano’o'a las demanidas del consuimidor. El po-
der del pueblo no significa, para los demécratas, que el pueblo se
siente en el trono del principe sino, como lo dijo Claude Lefort,
que ya no haya trono. El poder del pueblo significa la capacidad,
para la mayor cantidad posible de personas, de vivir libremente,
ts decir de construir su vida individual asociando lo que se es y
Jo que se quiere ser, oponiendo resistencia al poder a la vez en
nombre de la libertad y de la fidelidad a una herencia cultural.
En el momento en que escribo, en 1993, el ataque més violen-
to contra la democracia es el efectuado por el régimen y los ejér-
Gitos serbios en nombre de la purificaciGn étnica y la homogenei-
zacién cultural de la nacién, y Bosnia, donde vivian desde hace
Siglos personas de afiliaciones nacionales o religiosas diferentes,a {QUE ES LA DEMOCRACTS?
es de miles de individuos son expulsa-
Ia violacién, el saqueo, el
Estados éticamente homo-
es desmembrada; centenar
dos de su territorio por las armas,
hambre, a fin de que se constituyan te hor
géneos. La mejor forma de defini a la democrscis Te cada épo-
rene cdiante los ataques que sufre. Hoy en dia, en Europa, los
demoeratas se reconocen por el hecho de ser adversarios de la
purificacién étnica. Un régimen democratico no habria podido
proclamar un objetivo semejantes hacia falta una dictadura anti-
democratica para lanzarse a una politica de ¢sa naturaleza, ¢ im-
iin mas extremistas
vorta poco que Milosevic y los nacionalistas atin mas eX
gue el repce : 1a opinién serbia. Lov
Que él representen una fuerte mayoria de I
Rocraries y Ieediversidad, Es también por esta razon que hemos
weet ccmo una victoria de la democracia el fin del apartheid
en Sudifrica, $i mafiana una elecci6n directa con sufragio univer-
sal permitiera a la mayoria negra eliminar a la minoria blanca,
we Piyocarfamos a la democracia para justificar esa politica de
imtolerancia; al contrario, nos parece que el acuerdo de De Klerk.
Mandela, el reconocimiento de la diversidad de un. pais en el
ue viven negros africanos, afrikaners, briténicos, indios y otros
marca un gran paso hacia adelante.
Nuestros Estados nacionales europeos, que tan a menudo fue-
ron gobernados por monarquias, se convirtieron en democracias
porque las més de las veces reconocieron —de buen grado o a la
Fhersa— su diversidad social y cultural, en contra del territorialis-
mo religioso —cuius regio, huius religio— que se habia expandido
durante los siglos XVI y XVI. Los Estados, en los que el poder cen-
tral penetraba cada ver més en la vida cotidiana de los individuos
y las colectividades, aprendieron a combinar centralizaciOn y reco-
Focimiento de las diversidades. Estados Unidos, y mas atin Cana-
44, se construyeron como sociedades reconociendo el pluralismo
de las culturas y lo combinaron con el respeto a las leyes, la inde-
pendencia del Estado y el recurso a las ciencias y las técnicas. La
Gemocracia no existe al margen del reconocimiento de la diversi-
dad de las ereencias, los origenes, las opiniones y los proyectos.
‘Asi pues, Io que define a la democracia no es slo un conjunto
de garantias institucionales 0 el reino de la mayoria sino, ante t0-UNA IDEA NUEVA, as
do, el respeto a los proyectos individuales y colectivos, que com-
binan la afirmacién de una libertad personal con el derecho a
identificarse con una colectividad social, nacional o religiosa par-
ticular. La democracia no se basa tinicamente en leyes sino sobre
todo en una cultura politica. Con frecuencia, la cultura democré-
tica fue definida por la igualdad. Es verdad, si se interpreta esta
nocién como lo hizo Tocqueville, pues la*democracia’ supone la
i6n de un si >
igualdad, para ser democratica, debe significar el derecho de cada
uno a escoger y gobernar su propia existencia, el derecho a la in-
dividuacién contra todas las presiones que se ejercen en favor de
la “moralizaci6n” y la normalizacién. Es sobre todo en este senti
do que los defensores de Ia libertad negativa tienen razén contra
Jos defensores de la libertad positiva. Su posicién puede ser insa-
tisfactoria, pero su principio es justo, asi como el de la libertad
positiva, por més atractivo que sea, est cargado de peligros.
Conclusién que lleva a su punto extremo la oposicion entre la
libertad de los antiguos y la de los modernos y nos obliga a dis-
tanciarnos de las imagenes ms heroicas de la tradici6n democra-
tica, las de las revoluciones populares que movilizan a las nacio-
nes contra sus enemigos interiores y exteriores. Las revoluciones
quisieron a menudo salvar a la democracia de sus enemigos; pero
dieron a luz regimenes antirrevolucionarios al concentrar el po-
der, al convocar a la unidad nacional y la unanimidad del com-
promiso, al denunciar a adversarios con los cuales se juzgaba im-
posible la cohabitacién pues se los consideraba como traidores
ms que como portadores de intereses o ideas diferentes.
La libertad, la memoria y la raz6n
Amenazada por un poder popular que se sirve del racionalismo
para imponer la destruccién de todas las pertenencias sociales y7.
a QUE ES LA DEMOCRACIA?
culturales y para suprimir asi todo contrapeso a su propio poder,
degradada por la reduccién del sistema politico a un mercado
politico, la. democracia es atacada desde un tercer lado porun
culturalismo que impulsa el respeto a las minorfas hasta la supre-
sién de la idea misma de'mayoria y a una reduccién extrema de|
dominio'de'la ley. El peligro reside aqui en favorecer, en nombre
del respeto por las diferencias, la formacién de poderes comuni-
tarios que imponen, en el interior de un medio particular, una
autoridad antidemocratica. La sociedad politica ya no" serfa-en-
tonces mas-que un»mercado de transacciones'vagamente regla-
mentadas entre comunidades encerradas en'la obsesién de su
identidad y su homogeneidad.
Contra ese encierro comunitario, que amenaza directamente a
la democracia, la tinica defensa es la accién racional, es decir, si-
multéneamente el llamado al razonamiento cientifico, el recurso al
juicio critico y la aceptacién de reglas universalistas que protejan
la libertad de los individuos. Lo que coincide:con lamas antigua
tradicién. democraticaebllamamiento, a la vez, al conocimiento’y-
ala libertad contra todos los poderes. Llamamiento tanto mas ne-
cesario por el hecho de que los Estados autoritarios tienden cada
vez mds a atribuirse una legitimidad comunitaria y ya no “progre-
sista”, como lo hacian los regimenes comunistas y sus aliados.
Estos tres combates definen Ia cultura politica sobre la cual
descansa la democracia: no se reduce al poder de la razén nia la
libertad de los grupos de interés nival-nacionalismo comunitario;
combina’elementos que tienden.constantemente a separarse ¥
que, cuando estan asi islados se-degradan en: Principios de go-
bierno autoritario. La nacién, que fue liberadora, se degrada en
s} f comunidades cerradas y agresivas; la razén, que atacé las desi-
gualdades transmitidas, se degrada en “socialismo cientifico”; el
individualismo, asociado a la libertad, puede reducir al ciudada-
no a no ser mas que un consumidor politico.
Porque la modernidad descansa sobre la dificil gestion de las re-
laciones de la raz6n y el sujeto, de la racionalizacién y la subjetiva-
cidn, porque el sujeto mismo es un esfuerzo por asociar la razn
instrumental con la identidad personal y colectiva, la democracia
se define de la mejor manera mediante la voluntad de combinar el
pensamiento racional, la libertad personal y la identid.
lad cultural.—
UNA IDEA NUEVA 27
Un individuo es un sujeto si asocia en sus conductas el deseo
de libertad, la pertenencia a una cultura y el llamado a la razén,
por lo tanto un principio de individualidad, un principio de par-
ficularismo-y-un principio universalista. De la misma manera y
por los mismos motives, una sociedad democratica combina la
libertad de los individuos y el respeto a las diferencias con la or-
rnizacion racional de la vida colectiva por las técnicas y las le-
yes de la administracion publica y privada. El individualismo no
ts un principio suficiente de construccin de la democracia. El
individuo guiado por sus intereses, la satisfaccin de sus necesi-
dades o incluso el rechazo a los modelos centrales de conducta,
no es siempre portador de una cultura democrética, aun cuando
|e sea més facil prosperar en una sociedad democrdtica que en
otra, pues la democracia no se reduce a un mercado politi
abierto. Quienes se gu‘an por sus intereses no siempre defienden
ala sociedad democratica en la que viven; a menudo prefieren
salvar sus bienes mediante la huida o simplemente por la biisque-
da de las estrategias mas eficaces y sin tomar en consideraci6n la
defensa de principios e instituciones. 1:
puede nacer'si'la*sociedad:politica’es’concebidaycomo unaicons,
ea ( . . -
fe 1, lo que a menudo se deno
mina la concepcién republicana 0 ; pero la cultura de-
mocratica no puede ser identificada ni con uno ni con el otro.
echaza con la misma fuerza
jerra a cada uno en una comunit
espacio de tolerancia, lo que de hecho deja el campo libre a la se-
gregacion, el sectarismo y las guerras sancas, y el espiritujacobino
fue, en nombre de su universalismo, condena y rechaza la diversi
Sea de las creencias, las pertenencias y las memorias privadas. La
cattura democratica se define como un esfuerzo de combinacién
Ge te unidad y la diversidad, de la libertad y la integracion. Es
por eso que aqur se Ia definio desde el principio como la aso