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BOLL orsiéall Dis N®8 * Mayo 2020 ~ pepiauy GE AGENDA Mayo 2020 * La formacién analitica: entre rutina e invencién Precariedad Jorge Chamorro 1. El virus No podemos dudar que el virus que nos ocupa ha producido una fragilizacién generalizada: 4) del capitalismo: de trabajar es salud,*... para el capital no necesariamente para los trabajadores, a quedarse en casa, “la fe en el trabajo esté haciendo mucho daffo en el mundo moderno”; b) de los Estados y su falta de recursos; €) de los gobiernos y su falta de politicas; 4d) de las personas y su indefensién frente al virus. 2. eQué hacer? Los psicoan: is deberian ser los expertos en el tratamiento de las fragilidades constitutivas y las provocadas por coyunturas como la que nos ocupa. ‘Somos seres constituidos a partir de la fragilidad, cada uno ha construido sus respuestas para arreglarselas con ella. Sintomas neuréticos, psicéticos y ademés, Fespuestas miltiples, como el arte realizado por Edward Hopper a partir de la soledad. 3. El psicoanalista lacaniano Tiene sus propias inconsistencias. Cuando el psicoanalista es una “formacién del inconsciente” no alcanza a escapar de ella, en todo caso la desplaza. En este Punto pueden pensarse los lapsus posibles del deseo del analista. Hay que considerar también que los lapsus que pueden ocurrirnos no nos hacen ni mejores ni peores, especialmente si no son desplegados. Alejandro Agustin Lanusse presidente de facto hizo un famoso lapsus en Mendoza por cadena Nacional. Dijo: “Vengo a rendirle homenaje a Juan Domingo Sarmiento”. Con esto solo se prueba que el discurso es inconsistente, pero no que el inconsciente esconde ideologia. 4. Elelogio Salvo los psicoterapeutas que tratan la fragilidad por el elogio y por el buen sentido, el psicoanalista no puede permitirse ese camino. Cuando el psicoanalista elogia, adjetiva y peor todavia, mal usa los rigurosos conceptos del psicoanilisis ara declarar su identidad de cualquier orden, no produce una vacilaci6n calculada de su neutralidad sino lisa y llanamente depone su posicién como psicoanalista. éHay con esto algtin problema? Si y no. El dicho popular lo formula asi: “el habito no hace al monje”. Es importante que finalmente el monje se aloje en su templo, de lo contrario confunde, irrita y ataca la solidaridad y la democracia imprescindibles para este momento de la humanidad. 5. Nuevos rituales Hemos trabajado intensamente para levantar los estandares que habian aplastado {os principios del psicoandlisis. Es I6gico que la inercia de nuestra practica haya creado nuevos. Me oriento por una frase que Oscar Masotta me dirigié: “Alli donde esté presente la palabra el psicoanalista tiene un lugar, siempre que no Intervenga con la manguera de! bombero", es decir con el sentido y la ideologia. No creemos en las autodenominaciones, sino en los “actos”. a inercia de los nuevos rituales ha dejado a muchos psicoanalistas fuera de la Préctica que la ciencia nos ofrece. La virtualidad se ha impuesto, Ha posibilitado a {os psicoanalistas a trabajar por fuera de la presencia de las personas. Los argumentos en contra del uso de Ia virtualidad, han sido muy pobres a mi entender, por ejemplo que el analisis con el uso de la palabra y la voz solo seria simbélico, Esto no quiere decir que en algin momento se encuentren otros ‘argumentos més sélidos. Es una buena oportunidad para que los analistas prueben los limites del anélisis telefénico. Por ahora verifico las posibilidades de! uso de la cémara en el andlisis con nifios, y las posibilidades de la voz como objeto Que apunta a la divisién en los distintos momentos de un anilisis, como sujeto dividido © como divisién entre inconsciente y sinthome. 6. Imperativos de los psicoanalistas que se autorizan a si mismos a) Sostener los andlisis bajo cualquier circunstancia y por cualquier medio. bb) Ejercer la eleccién forzada y no el libre albedrio de, por ejemplo, ofrecer ala eleccién del yo neurdtico si quiere 0 no continuar su andlisis. ) No ceder a la demanda del sintoma estimulado por la actualidad. 4d) Sabemos que el sinthome tiene efectos terapéuticos, y la consistencia que nos permite enfrentar contingencias. e) Recordar que el oréculo de Delfos, que es nuestra guia interpretativa, hace ruidos al interpretar, no vaticina lo que va a ocurri. Resulta insistente la frase “Lacan ya lo anuncié” que resuena demasiado cerca de la religiosidad que no es, propia de nuestro campo. Dejemos a los filésofos, sociGlogos hacer anuncios, hipétesis de lo que va a ‘ocurrir, No nos dedicamos a la prevencién primaria sino al sintoma. Conclusién. El sintoma no es optimista, ni pesimista, el analista mismo es un sinthome, que tiene una misién que se llama enfrentar lo que irrumpe contando con la precariedad de las respuestas posibles. 5 de mayo de 2020 Notas: * Russel, B., (1932) Elogio del ocio. Barcelona. Edhasa. 1986. EOL Escuela de la Orientacin Lacanis Nameros anteriores ELSUENO vitualia Maat UTTER) PAUSAN <5, =

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