You are on page 1of 18

LANGOSTA: No sé ¿Qué tal?

LOS PECES DEL ACUARIO PEZ DORADO: ¿Son nervios o miedo?

De José Gabriel Núñez LANGOSTA: ¿Qué te pasa? Te he saludado.

ACTO ÚNICO PEZ DORADO: ¡Hola!

Al iniciarse la acción La Langosta está de pie en medio del escenario. LANGOSTA: ¡Hola!
Mira de un lado a otro. Muy tensa, va a la mesa de maquillaje y PEZ DORADO: Te pregunté y aún no me has contestado.
comienza a trabajar con las barras sobre su cara. Arroja
nerviosamente la pintura de un lado y toma el libreto de la obra. LANGOSTA: ¿Qué cosa?

LA LANGOSTA: Lo difícil es el comienzo. Siempre he tenido un terror PEZ DORADO: Cuando entré, escuché que mencionabas la palabra
casi indescriptible de que a mí me tocase la primera escena… y como “miedo”
por arte de magia, ¡Zas!, me ofrecen este papel, y aquí me tienen, yo
LANGOSTA: ¡Ah!, era eso. Pues no sé... o serán los nervios.
sola, en el medio del escenario, entre las luces, frente al público.
(Pausa). Siempre hay ruido al comienzo de todas las obras. El Telón se PEZ DORADO: ¡Los nervios del estreno!
abre o se levanta y siempre hay gente que está entrando en la sala, los
retrasados de siempre que esperan a que las luces se apaguen para LANGOSTA: Puede ser. Pero a mí siempre me ocurre. También la
hacer su entrada triunfal. Los otros están acomodándose en las segunda, la tercera, todas las veces.
butacas, comiendo chocolates. Y una aquí muriéndose. ¡Parece que no PEZ DORADO: ¿Y qué? Eso puede ser natural.
se dan cuenta de que molestan! (Transición). Pero, una vez dicha la
primera frase, el primer parlamento… (Toma el libreto y lee, LANGOSTA: Tal vez, no sé. ¿Y los demás?
repasando). Estaba nuevamente en el café, delante de mí, a través del
PEZ DORADO: Tomando té en el cafetín.
tenue humo de mi taza de café excesivamente caliente, los veía pasar.
Eran jóvenes y hermosos, con una asombrosa fuerza para destruir el LANGOSTA: (Divertida). ¿Todos?
pasado y quienes sólo conocen el tiempo presente. A veces, una
PEZ DORADO: Casi todos. Algunos toman refrescos.
narcisista comparsa de lycras y zapatos de marca… (Se detiene. Deja
ansiosamente el libreto a un lado). Es horrible el momento de LANGOSTA: Eso les hará daño para la garganta, tú sabes, por el frío.
comenzar, lo he repasado todo cientos de veces y parece ser que una Espera, si quieres te ayudo a maquillarte.
nunca se acordase de lo que tiene que decir… No sé cómo voy a tener
suficiente valor. A medida que se aproxima el momento pareciera ser PEZ DORADO: Como quieras. (Él se sienta y ella comienza a
que el miedo avanzase con mayor velocidad. maquillarlo).

Entra el Pez Dorado. La ha escuchado. LANGOSTA: ¿Y?

PEZ DORADO: ¿Miedo? PEZ DORADO: ¿Qué quieres?

LANGOSTA: ¡Hola! LANGOSTA: Nada, no hablas.

PEZ DORADO: ¿Nerviosa?

1
PEZ DORADO: No debo hablar mientras me maquillas, vas a PEZ LUNA: ¿Es conmigo?... ¡Hola!
estropearlo todo.
LANGOSTA: Es con todos.
LANGOSTA: No te preocupes, ya estoy acostumbrada a hacerlo.
PEZ ESPADA: Puntualiza, querida, entonces deberías decir: “Holas”
Tengo bastante experiencia en esto. El maquillaje es un elemento del
cotidiano camuflaje de los humanos. PEZ BETA: ¡Ay, qué chiste tan malo! Tú y tus chistes pesados. ¿Por
qué no comenzamos?
PEZ DORADO: ¡Sí es así, sigue adelante! (Ella prosigue en silencio).
Todos se movilizan a maquillarse, ayudándose mutuamente. La escena
LANGOSTA: Pero bueno, ¿Qué pasa? Te dije que podías hablar,
debe dar la impresión de una informalidad total. Se piden pinturas,
cualquier cosa.
pinceles, polvos, en fin, todo lo necesario. Al mismo tiempo, el
PEZ DORADO: Es que no se me ocurre nada ahora. nerviosismo comienza a manifestarse.
LANGOSTA: Bien, yo llegué de primera al camerino. No los vi afuera y PEZ LUNA: Creo que ya estoy lista. (Al Dorado). ¿Qué tal me veo?
entré. Como estaba sola, me puse un poco nerviosa y comencé a
PEZ DORADO: Yo te veo bien.
repasar el papel. Yo creo que todos hacemos eso.
PEZ LUNA: ¿No tengo demasiada pintura?
PEZ DORADO: ¿Qué parte repasabas?
PEZ BETA: Estás bien. Alcánzame la base, necesito un poco más en la
LANGOSTA: El comienzo. Siempre es lo más difícil. El resto sale solo.
frente.
PEZ DORADO: ¿Aún te sientes nerviosa?
LANGOSTA: ¿Ha llegado mucha gente?
LANGOSTA: Hasta el final, te lo he dicho. Luego mañana, será igual.
PEZ ESPADA: Afuera sí, pero todavía no he visto la sala.
¿Y tú cómo te sientes?
PEZ LUNA: No te guíes por eso, no todos entran. Además, creo que es
PEZ DORADO: También estoy un poco nervioso.
mejor que no se llene el teatro
LANGOSTA: Entonces ya somos dos. ¿Y los otros?
LANGOSTA: ¿Y eso por qué?
PEZ DORADO: Creo que están asustados también. No sé por qué no
PEZ LUNA: No sé, me impresiona ver tanto público.
vienen. (Se escuchan murmullos afuera). ¡Parece que me oyeron, allí
vienen! PEZ ESPADA: Y todo porque a una cuerdita de tontos se le ha ocurrido
montar un espectáculo.
Entran los otros personajes
PEZ DORADO: Si es que resulta un espectáculo.
PEZ ESPADA: ¡Qué bien! Veo que se adelantan.
PEZ BETA: ¡Cállense ya! ¿Por qué hablan tonterías? Desde los
PEZ LUNA: O que nosotros llegamos retrasados, podrías decir.
ensayos no han hecho más que hablar sobre lo mismo, que si gustará
PEZ ESPADA: Bah, no nos falta más que maquillarnos, ya estamos la obra, que si daré el papel…
vestidos y asustados, es todo lo que queda para ambientar el estreno.
PEZ LUNA: Hija, tonterías son las que vamos a hablar aquí.
LANGOSTA: ¡Hola!

1
PEZ ESPADA: ¡Tienes razón, te aplaudo! Yo creo que lo único serio de PEZ DORADO: Como siempre, como siempre. Así que les aconsejo
este montaje es precisamente este momento. Mi opinión particular es que no los descarguemos mucho.
que el público no va a soportar el resto.
PEZ LUNA: De veras. Por su paciencia y su resignación se merecen
PEZ DORADO: ¿Quién será el más estúpido de todos? una estatua. Pobres. Tener que soportar tantas cosas.
LANGOSTA: ¿A quiénes te refieres? LANGOSTA: Muchachos, tengo un plan. ¿Qué les parece si para
reivindicarnos y reivindicarlos los recibimos con un aplauso?... ¡Ah, y
PEZ DORADO: Tal vez a nosotros, o al público, o al autor.
de paso le damos un susto al director!
PEZ BETA: El autor. A mí francamente, no me agrada la obra.
PEZ LUNA: Chévere, yo juego contigo. ¡De acuerdo!
PEZ LUNA: ¿Por qué aceptaste el papel entonces? Has debido decirlo
LANGOSTA: ¿Y ustedes?
antes.
PEZ LUNA: ¡Si no queda más remedio! (A los otros). ¿Correcto?
PEZ BETA: Porque quería trabajar. No tenía nada que hacer de noche
y tú sabes que los noviazgos no son compensaciones culturales. PEZ DORA: Correcto.
PEZ LUNA: En ese caso, más tonta eres tú que todo el resto. Y PEZ BETA: ¡Correctísimo, me encantan esas bromas! Yo voy a llamar
nosotros somos más estúpidos que el autor si pensamos así. a los otros. (El Pez Beta sale por un momento).
PEZ DORADO: ¡Bravo! Pienso lo mismo que tú. Todo esto no es más LANGOSTA: ¡Ay, esto va a ser genial! ¿Se imaginan lo que dirán
que una estupidez de nuestra parte. Ponernos en esto a estas alturas. cuando en vez de ser ellos quienes aplaudan, nosotros los recibimos
con tremenda ovación?
LANGOSTA: Por lo visto, la obra no va a estrenarse.
PEZ BETA: (Afuera). Vengan, vengan rápido, que tenemos un plan.
PEZ ESPADA: ¿Por qué lo dices?
Se escucha un murmullo de voces y entran los otros tres personajes.
LANGOSTA: Por el optimismo que tienen todos.
PEZ GOURAMY: ¡Hola, qué tal! ¿Qué es lo que pasa?
PEZ LUNA: ¿Y qué me dicen del público?
PEZ MOLY: Hola, Langosta… ¿Qué tal, cómo va la cosa?
PEZ BETA: Los espectadores, por lo general, son los más tontos. Mira
que venir a ver una cosa que apenas entienden y tener luego el valor PEZ GOUPY: ¿Qué pasa? ¿Ya vamos a comenzar? O es que tienen
de discutir sobre eso. Y lo peor es que pagan para quedarse en la luna, un rollo.
como quien dice.
LANGOSTA: Es que se me ocurrió un plan: ¿Qué les parece si
PEZ ESPADA: Claro que pagan, pero la mayoría sale arrepentida. recibimos al público con un aplauso? En lo que entren a la sala,
nosotros los aplaudimos a ellos.
PEZ DORADO: Sí, pero de no ser por ellos, tampoco nosotros
estaríamos aquí. PEZ GOURAMY: ¡Chévere! Seguramente se desconciertan.
PEZ ESPADA: ¡Genial tu observación! PEZ GOUPY: Y después que actuemos van a quedar más
desconcertados.
PEZ BETA: Has estado francamente brillante.
PEZ MOLY: Tú siempre con tus vainas. Yo me anoto en ésa.
1
LANGOSTA: Entonces vamos a prepararnos… y los otros… PEZ BETA: ¿Qué tal?... ¿Cómo se sienten?
PEZ GOURAMY: Ya vienen, ya vienen… epa, vengan, que tenemos un PEZ ESPADA: Buenas noches, damas y caballeros.
plan…
PEZ LUNA: ¿Qué tal, queridísimos?
PEZ DORADO: Pero aquí están todos. (Mira hacia el público)
PEZ MOLY: ¿Creen que la van a pasar muy bien? ¿Ya verán?
PEZ LUNA: ¿Qué dices?...
LANGOSTA: (Con voz coqueta) ¡Hola… hola… hola!...
PEZ DORADO: Que están allí, sentaditos, de lo más tranquilitos y
PEZ BETA: Ya basta de saludos, tenemos que aplaudirlos.
mirándonos como si nada.
PEZ GOUPY: Eso hará que se sientan importantes.
PEZ ESPADA: ¡Entonces, a aplaudirlos, que ya llegaron!
PEZ DORADO: Claro, ya los olvidaba.
Comienzan todos aplaudir. El cardumen de los otros peces entra, pues
dos de los peces mayores les han ido a avisar. Una ligera confusión PEZ ESPADA: (Trata de imponer orden). Niñitas, niñitas, ¡orden en la
cuando le señalan al público al que tienen que aplaudir. A esto se sala! Vengan para este lado… los caballeros de este otro.
suma la entrada de la música que toca la obertura de la pieza. Música:
Obertura. Baile. Al terminar la música y el baile, el cardumen va al TODOS: (A coro) ¡Buenas noches!
fondo y quedan los peces mayores. Se colocan en la posición del saludo final y comienzan a aplaudir.
La Langosta mira al público. PEZ DORADO: Esto va dedicado a ustedes. Agradézcanlo, es lo mejor
LANGOSTA: De modo que llegaron antes y estaban escuchando lo que podemos brindarles.
que decíamos… ¡Bienvenidos! LANGOSTA: No lo creas, lo que viene después tal vez les agrade. A lo
PEZ GOUPY: Ay, si, míralos, todos en sus butacas, de lo más mejor a algunos de ellos les gusta verse merodeando aquí, como
formales. nosotros.

PEZ GOURAMY: ¡Buenas noches, hola, hola! PEZ BETA: Claro que sí, yo te aseguro que hay más de una
masoquista en la sala.
PEZ MOLY ¡Qué tal, distinguidas… qué tal, corruptos del lugar!
PEZ LUNA: Es verdad, cariño. Y también abundan los intelectuales.
PEZ LUNA: Algunos están con corbata y bien vestidos.
PEZ DORADO: ¿Otra vez?
PEZ BETA: Qué bien lucen.
PEZ LUNA: ¿Quiénes? ¿Los intelectuales? ¿Qué hicieron ahora?
PEZ ESPADA: La verdad es que esto promete.
PEZ DORADO: No, los aplausos.
LANGOSTA: (Siempre al público). ¡Hola!... ¡Hola!... ¡Hola!...
PEZ LUNA: ¡Ah, sí, por supuesto! ¿Comenzamos?
PEZ DORADO: Hola, ¿cómo está la familia?
Aplauden nuevamente. Al finalizar los aplausos, todos quedan muy
PEZ GOURAMY: ¿Con quién dejaron al carricito?... ¿Con la cachifa? serios mirando al público.
PEZ MOLY: ¿Se vinieron en carro o en autobús?

1
LANGOSTA: Bien, aquí estamos. No tengo muchas ganas de repetir lo un lado). Por el no comer cuando tengo hambre porque tal vez me
que estaba diciendo anteriormente. De hecho, estaba en un café, haga más falta una frase. Soy así, a veces no siento nada. Ni frío ni
tomándome un café y mirando pasar, tal vez, a uno de ustedes, a sueño. Tal vez un poco de rabia. Hablando con mis padres imagino a
través del humo de mi café. Comenzaba hablándoles de crímenes, de esas ancianas obstinadas que juegan en los casinos de Las Vegas.
dos generaciones, de ustedes y de nosotros. De los muchachos, en fin, Pero con mayor probabilidad de ganar. Introduzco una moneda en
todo. (Los otros comienzan a retirarse hacia el fondo). Por si no lo forma de palabra y obtengo comida, dinero y paz. Una manzana, un
sabían, los que aquí estamos somos todos peces de un acuario. Muy disco y un yesquero. Si me asomo a la ventana de mi cuarto, veo
ornamentales y de vida muy pacífica. Excepto yo, que soy una algunos árboles, antenas parabólicas, autobuses, carros y algunas
langosta. Preguntarán qué hace una langosta en un acuario, y muchos gentes. Gentes que se empujan, se atropellan y se insultan desde los
dirán que estoy coleada y los otros celebrarán ese mal chiste. autos, gesticulando… Me gustaría hablar un poco, pero todos estamos
Posiblemente sea verdad. A esos quisiera preguntarles qué hacen aquí solos. Solos frente a esa paranoia que empuja por la calle. Igualmente
en el teatro. De todas formas, tal vez eso no importa. Nosotros solos, con la misma soledad de mis amaneceres cuando amanece.
tenemos una ventaja sobre ustedes: podemos mirarlos a través del
La reflexión es interrumpida por la entrada del cardumen de pavos.
agua cristalina en que vivimos y a través del cristal más cristalino aun
Vienen apantallando, caminan marchando cierto compás. Del otro del
que sostiene esa agua. Estamos bien, vivimos cómodamente, ustedes
escenario irrumpe el cardumen de pavas que los miran sacudidas.
nos alimentan, si bien es cierto que de vez en cuando ensucian el
cristal cuando se acercan al acuario a ver qué hacemos, cuándo PEZ LUNA: ¡Los pavos, los pavos! ¡Aaaay! ¡Llegaron los pavos!!Las
dormimos o cuándo bebemos agua. Pero luego lo limpian. Gracias, nos motos, los pavos! !Aaaay, que me desmayo, que me mato, que me da
encanta la limpieza. Ahora, por favor, no empañen el cristal. Si nos un mal!
observan bien, tal vez al final puedan decirnos qué tal lo hemos hecho.
Nosotros, los peces, después de observarlos durante mucho tiempo, PEZ BETA: ¡Aaay, mírame esas camisas… mírame esas franelitas…
vamos a tratar de parecernos e imitarlos un poco a ustedes los las camisas… las camisas, rojas, amarillas, moradas… ¡Y se les ve el
humanos. Si no hemos interpretado bien la forma en que viven, pecho y los brazotes! ¡Yo estoy revuelta! ¡Los pavos!
discúlpennos, no somos más que unos inofensivos animalitos. (Pausa). PEZ GOUPY: ¡Mírame aquél…lo tiene todo, esta completito no le falta
¿Por dónde les gustaría que comenzáramos? nada! ¡Así me lo mandaron a mí! ¡Ay, y mira ese otro! ¡A mí me va a
PEZ DORADO: (Se vuelve al fondo). ¡Por mi soledad! dar algo!

PEZ BETA: ¡Por mi soledad! (Volviéndose). PEZ GOURAMY: ¡Me retuerzo… me pica la picazón! ¡Los pavos…dime
si no son como para morirse! ¡Y después no quiere que se pierda nada!
PEZ LUNA: ¡Por mi soledad! (Se vuelve).
PEZ LUNA: ¡Fíjate en los pantalones…forraditos, pegaditos!... ¡Que te
PEZ ESPADA: ¡Por mi soledad! (Se vuelve). enseñan todo! ¡Y tú te pones zarataca! ¡Ayyy, los pavos, los pantalones
forrados al cuerpo! ¡Ayyy que me den aire!
PEZ GOURAMY: ¡Por mi soledad! (Volviéndose).
PEZ GOUPY: Y a mí que me den más, a mí que me traigan otro.
PEZ COUPY: ¡Por mi soledad! (Se vuelve).
PEZ GOURAMY: ¡Pavo, pavo; arrástrame por los caminos del pecado
PEZ MOLY: ¡Por mi soledad! (Se vuelve).
y de la perdición! ¡Aaay, los pavos!
PEZ DORADO: ¡Por mi soledad! La de mis amaneceres cuando
PEZ BETA: ¡Míralo… mira ése…¿Estás viendo lo que yo veo?
amanece. (Comienza a acercarse al centro. La Langosta se desliza a

1
PEZ LUNA: ¡Míralo, allá va otra vez! Vénganse, mi pavo… pavo mío! escultura de sus cuerpos para dar más realce a este fabuloso
concurso. ¡Con ustedes, la elección de Mis Asteroide 1990! Quiero
PEZ BETA: Addio, mío caro ¡Addio!
llamar a las candidatas que clasificaron como semifinalistas, para que
PEZ LUNA: ¡Adiós, pavo salvaje! ¡Atropéllame! ocupen su posición en este escenario… A ver, las bellas semifinalistas,
por favor, por este lado…
Estalla la música y los pavos cantan y bailan la “Salsa de las
braguetas”. Entran las candidatas semifinalistas. Un grupo de unas diez, que
forman un abigarrado conjunto extravagante y que nos muestran unos
PAVOS: Estas son las braguetas seductoras modelos de insólito contraste. Posan, roban cámara.
Para pavas, sifrinas y señoras
Braguetas perturbadoras, braguetas provocadoras PEZ ESPADA: Tengo en mis manos la tarjeta donde aparecen los
pa que las goces y entres en la onda. nombres de las cinco finalistas escogidas entre este delicioso grupo.
Te resuelven los rollos y te animan Vamos a ver quiénes son las que han clasificado para la final de este
Tú las tocas y vuelas para arriba excitante certamen de la belleza nacional… Aquí las tenemos: En
Hay que ver, que te ponen a valer primer lugar…la representante del comité de ayuda antidepresiva para
No pienses tanto y dale que vas bien los políticos corruptos que han sido víctimas de conspiraciones
Chama cuál es la nota
diabólicas y hoy tienen que vivir en el exterior. La candidata luce
Si eres burda e’ sabrosota.
esplendorosa con su modelo exclusivo de chifón verde agua, mangas
Resuélvete tu bragueta
Y no te rayes completa en bomba isabelina y adornos con encajes amatista. (ElPez Beta
Las braguetas son una solución desfila). Aquí la tenemos, la número uno. Buenas noches, señorita.
No intoxican ni tienen polución PEZ BETA: ¡Buenas noches!
Son la paz y el amor de rebeldía
que tus viejos te exigen cada día PEZ ESPADA: Antes de mostrar tus encantos, queremos que el
las braguetas son una perdición público aquí congregado escuche tu voz. Voy a hacerte una pregunta
que te ponen sabrosa y a millón sumamente comprometida, la cual te agradezco respondas
las braguetas a ti se te regalan brevemente: ¿Cuál ha sido tu obra literaria favorita?
y a nosotros nos dan pura pantalla
Chama cuál es la nota PEZ BETA: La fotonovela “Lo que Colón descubrió y no le dijo ni
si eres burda e’ sabrosota… siquiera a Juana la Loca”. Yo lloré y pude apreciar la alta calidad
literaria de las fotos.
Salen los cardúmenes de pavos y entra el Pez Espada, muy PEZ ESPADA: ¿Y qué opinión te merece este concurso?
circunspecto y con pase de animador.
PEZ BETA: Que para mí ha resultado una experiencia inolvidable, y
PEZ ESPADA: Muy buenas noches, señoras y señores. Al fin ha que creo que se deben realizar más a menudo.
llegado el momento de estar aquí reunidos en una noche preciosa
como ésta cuando con sumo placer vamos a presentarles el más PEZ ESPADA: Muchas gracias. Gracias por tu belleza y tus
esplendoroso, y fantabuloso desfile de belleza que jamás concurso respuestas. (Ella saluda y va al fondo). Antes ustedes, la belleza criolla
alguno logró reunir. En breves momentos tendrán ante ustedes reflejada en la figura de la candidata número dos. Ella representa a la
desfilando con sus mejores galas a la más hermosas y distinguidas asociación proletaria de resentidos y reaccionarios. (El Pez Luna
damas de nuestra sociedad, quienes han prestado gentilmente la desfila). Trae aromas de merecure y cotoperí y luce un osado modelo

1
punketo tropical con incrustaciones en pedrería ornamental y minifalda PEZ GOURAMY: Yo quiero llorar… y ustedes me perdonan, pero es
criolla de brocado azul. ¿Qué tal, cómo te sientes? que yo no esperaba clasificar. Yo quiero denunciar que he sido
marginada por muchas personas que me rompieron el vestido y me
PEZ LUNA: Ay, sumamente emocionada.
escondieron los zapatos…Envidiosas; pero ya ven, clasifiqué…
PEZ ESPADA: ¿Podías decirnos cuáles son las actividades de la (Empieza a encenderse la mecha y el disgusto en las otras) Y ahora yo
sociedad que representas? Según tengo entendido, desarrollan una estoy segura que llego. Ay, mi mamá y mi familia…A la abuela Titina
labor sumamente humanitaria. que me hizo el vestido… y a mi hermanita…

PEZ LUNA: ¡Fascinada! Pues sí, nosotros organizamos especies de PEZ ESPADA: (Cortándola). Muy bien, es la emoción del momento…la
ágapes de corte socialista con el fin de recolectar fondos para los cuarta finalista…conmocionada, por favor, a tu lugar. (Ella va a su lugar
burgueses y altos dirigentes que por razones de trabajo, no tengan entre gritos sifrinos). Y ahora, el nombre de la última finalista, la
suficiente tiempo de socorrer a la gran cantidad de ejemplares caninos, elección recae en la representante de los puños elevados por la
o sea, perritos, que día tras día sufren polifracturas en las calles de dignidad de Nicaragua y otros países atropellados por los que te
nuestra capital, debido al exceso de velocidad con que conducen los conté…Es una de las candidatas de mayor posibilidad y nos luce un
vehículos. modelo francés realizado en amarillo miel con aderezos de piel de
marta javanesa. ¿Qué tal? Quiero que sepan que es una de las más
PEZ ESPADA: Muy digna de elogios su misión. Ojalá continúen con cultas del concurso, principalmente por sus conocimientos musicales.
mayor ahínco en el socorro de esos fieles animales. (Ella saluda y va al
fondo). Y aquí, la tercera de las finalistas. Ella es la representante del LANGOSTA: Exactamente.
comité pro-fosas de la muerte en América y desaparecidos en el
PEZ ESPADA: Bien, dada tu vasta cultura musical y la asociación que
continente. (Aparece el Pez Goupy fúnebremente). Luce un modelito
representas, quisiera saber tu opinión sobre la música sacra.
fúnebre, adornado con canutillos luctuosos y coronado con un
pañuelito muy a la Madres de Plaza de Mayo. Es una candidata LANGOSTA: Indudablemente que la música sacra ha traspasado ya
polémica, por los ideales que representa… Ha sido seleccionada como los umbrales de las iglesias, llevando sus notas barrocas con
tercera finalista. reminiscencias ojivales góticas a las clases menesterosas y más
necesitadas de los países subdesarrollados.
PEZ GOUPY: Yo represento a esas mujeres de luto… que encuentran
a sus seres queridos en una fosa común…(Llorosa). O que PEZ ESPADA: ¡Muy valiente y acertada tu respuesta! (Ella va al
desaparecen, por eso mis compañeras no me quisieron elegir Mis fondo). Y ahora, se acerca el momento más importante de la noche. Ya
Amistad y me llaman conflictiva. Pero yo sólo quiero saber dónde están la computadora está recibiendo la información de los jueces para saber
los desaparecidos del 27 de febrero, porque en su casa no están y la quién de estas cinco muchachas es Mis Asteroide 1990…(Comienza la
policía no los reporta como muertos. ¿Entonces qué se hicieron? En su agitación en las perdedoras). Niñitas, por favor…las que no han
memoria, desfilo. (Desfila girando y batiendo gasas). clasificado, por favor, pueden pasar al fondo…Un momento de calma,
sin son tan amables.
PEZ ESPADA: Realmente una finalista polémica y admirable… estoy
seguro que contará entre las más populares… y hablando de VOCES: ¡Fraude! ¡Fraude! ¡Esto estaba arreglado! ¡Corrupción!
popularidad, aquí tenemos la cuarta finalista. La escogida ha sido la ¡Fraude! ¡Que la saquen! ¡Pido revisión de votos! ¡Que cuenten
representante de … públicamente!
Grito de alegría del Pez Gouramy, que entra. Se desata la pelea entre las candidatas clasificadas y las finalistas. El
Pez Espada trata de calmarlas.
1
PEZ ESPADA: Por favor, manifiesten sus simpatías por medio de PEZ ESPADA: ¿Remitieron ya la protesta a la Sociedad de Políticos
aplausos, omitiendo otro tipo de exclamaciones (Al público). Niñas, por Excepcionales?
favor, compostura…que estamos al aire… las eliminadas, sin son tan
PEZ BETA: La carta de protesta se encuentra aún en proceso de
amables…Señores del jurado, por favor, hagan algo…! La
clasificación logística a la red Ibertex, señor presidente.
computadora, que verifique los resultados! ¡La computadora!
LANGOSTA: De la Comunidad de políticos honestos que se encuentra
El caos y la confusión reinan por un momento hasta que la lucha se
en franca minoría acaban de solicitar su última relación de gastos.
transforma en una especie de baile en cámara lenta, cuando entran las
computadoras en escena. Las máquinas, de una manera simbólica, PEZ ESPADA: Pásenle por el “Basic” de alto nivel y procure que no se
parecen dominar a las mujeres, quienes esta vez parecen autómatas interrumpa el sistema. ¡Deme los documentos por firmar, por favor, de
detrás de las computadoras, manipulando las procesadoras de prisa!
palabras. Secretarios y oficinistas comienzan a manipular las
computadoras, teléfonos y demás dispositivos digitales, creando una Entra el Pez Dorado, perdido. La Langosta se coloca en el centro.
especie de pesadilla. Durante la escena, algunos entrarán y saldrán PEZ LUNA: (Al Pez Dorado) ¿Qué desea, caballero?
con carpetas y papeles, completando la impresión de caos total.
PEZ DORADO: Quiero ver a mi padre.
PEZ ESPADA: (Repitiendo). La computadora…la computadora no
refleja los datos que yo quiero. Algo extraño está sucediendo. PEZ LUNA: ¿Se puede saber quién es su padre?

PEZ LUNA: Ya las señoritas han recibido las instrucciones pertinentes PEZ DORADO: El Presidente de esta empresa, señorita.
acerca de la responsabilidad del empleo, todas son especialistas en
PEZ LUNA: Ah, comprendo, un momento, por favor.
“software”. Las otras candidatas han sido debidamente notificadas. Se
les explicó por qué no precisábamos de sus servicios. Creo que hemos PEZ DORADO: Señorita, no estoy dispuesto a esperar un momento
seleccionado sabiamente. más. Llevo casi dos horas tratando de entrar en esta maldita oficina, y
nada. Primero con miles de preguntas; luego, la recepcionista con una
PEZ ESPADA: Los expedientes 1.066 y 1067 han sido rechazados en
ficha que nunca terminaba de llenar. Después, el ascensorista, la
la última reunión de directores ejecutivos. Tráigame el último informe
secretaria del vicepresidente…
sobre las acciones de la Enlatadora de Cadáveres Porcinos SRL.
PEZ LUNA: Son las reglas de la compañía para los visitantes. Pero ya
PEZ BETA: Hay que hacer un análisis inmediato de todos los estados
puede estar tranquilo. Déme la tarjeta codificada. Si la computadora no
de cuenta de los clientes del interior y pasarlos a las computadoras
la rechaza, usted podrá ver a su padre. (Manipula la máquina. Ruidos.
electrónicas. Use los disquetes que sean necesarios y procéselos por
Todo se moviliza). Ah, tendrá que darme el pulgar derecho.
redes neuronales.
PEZ DORADO: Oiga, ¿qué es esto?... ¿y para qué?
LANGOSTA: Señor presidente, el disquete de estadísticas de los
concentrados para el cerebro de los niños de Biafra ha desaparecido. PEZ LUNA: Hay que tomar sus impresiones dactilares. (Imprime las
No se sabe si es un robo o es un virus que lo ha atacado. huellas). Ahora puede pasar con la señorita, ella le indicará.
PEZ LUNA: (Entra al Espada) El jefe de personal acaba de informar Él va hacia la Langosta. El Pez Luna vuelve a su máquina.
que no puede venir debido a que su grata preferida sufrió anoche una
crisis nerviosa y hoy se encuentra sumamente deprimida. PEZ DORADO: Perdone, quiero ver a mi padre.

1
LANGOSTA: Creo que está usted en un error, esta no es una oficina PEZ GOURAMY: ¡Vamos a tomarnos veinte miligramos más para
de localización de personas extraviadas. serenarnos!
PEZ DORADO: Por favor, mi padre es el director. LANGOSTA: Tengo una familia que mantener; mi mamá, que teje para
el orfelinato de hijos naturales de damas de la alta sociedad y dos
LANGOSTA: ¡Ay, de cuál película! ¡Ah, me encanta el cine! Los
hermanas menores. Martha y Graciela. Martha pinta grafitos por
sábados prefiero cosas como “Indiana Jones”, pero los domingos, por
lo fastidiosos, me decido por Tom Cruise. encargo en los muros de la ciudad y Graciela se la pasa todo el día
masticando chicles bomba.
PEZ DORADO: No se trata de un director de cine, mi padre es el
presidente de esta empresa. PEZ BETA: El personal System PS1 ha detectado a un joven que está
en el edificio clandestinamente. Omitió la hora de entrada y por las
LANGOSTA: Ah, perdone la confusión. ¿Trae la tarjeta codificada?
señales que presenta, todo parece indicar que se trata de un peligroso
PEZ DORADO: Por aquí la tengo. (Busca en los bolsillos. Se la hampón. Hemos conectado las redes para facilitar su ubicación.
entrega).
PEZ DORADO: (Explotando) ¡Papá, papá, tengo que hablar contigo!
LANGOSTA: La procesadora no la ha rechazado, pero parece haber
PEZ ESPADA: (Sin mirarlo). ¡Hay que llamar nuevamente al cuerpo de
un problema con sus impresiones dactilares. ¡No parece hijo de su
bomberos y al servicio de procesos y sistemas para localizar al
padre! ¡Cuánto lo lamento! Va a tener que volver a bajar. Al llenar la
prófugo! ¡Y usted, conecte su sistema a las funciones de comando y
ficha omitieron la hora de entrada al edificio.
control del Banco Siniestro de Hipotecas Campesinas para saber su
PEZ DORADO: ¿Sabe una cosa? Yo no pienso devolverme como último balance!
tampoco voy a esperar un minuto más para ver mi padre.
PEZ BETA: En seguida, señor presidente.
LANGOSTA: Oiga, no puede pasar así… (Lo detiene). Compréndame,
Las computadoras parecen enloquecer. Ruidos y confusión. El Pez
por favor, soy una empleada nueva en esta oficina, y si lo dejo pasar
Dorado se dirige lentamente al Pez Espada.
con un dato de menos en su tarjeta, con toda seguridad seré
despedida. Si usted entra con su tarjeta en esas condiciones me botan. PEZ DORADO: Papá, quiero hablar contigo.
Comprenda mi posición. No puedo darme el lujo de pasar un mes sin
PEZ ESPADA: (Mirando sorprendido). ¿Qué estás haciendo tú aquí?
empleo. El sueldo no me alcanza para nada…
PEZ DORADO: Necesito hablarte un momento.
PEZ GOUPY: (Alienada). Estoy aterrada con la espiral inflacionaria.
Trabajo tres turnos y apenas me alcanza para comer. ¡El mes que PEZ ESPADA: ¿Aquí?
viene los precios estarán tan altos que ni para eso!
PEZ DORADO: Aquí, en la calle, donde sea.
PEZ GOURAMY: Yo recibí aumento del 20 por ciento y ya la subida del
pan y de la leche se lo tragaron. La inflación me perturba, el tráfico me PEZ ESPADA: Pero ahora estoy sumamente ocupado.
perturba. Voy a buscar un empleo por las noches, aunque no duerma, PEZ DORADO: Es sólo que quería hablar con alguien…no sé por qué
pero una tiene que comer… te escogí a ti cuando comprendo que yo no puedo pedirte tiempo para
PEZ GOUPY: Y vestirse, y comprar cosméticos. Ya ni voy al cine. pensar… de todos modos vine aquí…
PEZ DORADO: ¡Papa, por favor…tengo veinte años!
1
PEZ ESPADA: ¿Y eso es todo? ¡Ya se te pasará! llegó el momento de hablar con alguien, aunque ahora, antes que
hablar con los padres, sea preferible largarse a la calle.

La escena se detiene y comienza a cambiar. Ahora estamos en un


restaurante. El Pez Dorado y el Pez Espada sentados uno frente a otro. LANGOSTA: Aquí tiene. Su aroma es delicioso y su sabor más aún.
La Langosta los atiende. ¿Sabe? Es falso eso de que la langosta indigesta. Si está fresca y bien
preparada como ésta, es el plato más inofensivo que hay. Aquí tiene el
vino. Pruébelo a ver si es de su agrado.
LANGOSTA: Buenas tarde, caballero, es un placer servirlo.
PEZ ESPADA: (Probando). Perfecto… perfecto.
PEZ ESPADA: Muchas gracias. ¿Me puede traer la carta, por favor?
LANGOSTA: Bien, si necesita algo más, no tiene sino que llamarme.
LANGOSTA: Aquí la tiene. (Se la entrega. El la lee). Si me lo permite,
PEZ ESPADA: Tenía razón la muchacha, esta langosta está
puedo recomendarle algo la especialidad de la casa para el día de hoy.
verdaderamente exquisita… si no fuera por esta bendita úlcera… ya
Un suculento, delicado y raro, concebido especialmente para paladares
me imagino lo que voy a tener que soportar esta noche: la digestión
refinados y gente que sólo quiere lo mejor.
pesada, la acidez…! ¡Y de nuevo tener que recurrir a las pastillas!
PEZ ESPADA: Sí, si, cómo no, me encantan estas sorpresas.
PEZ DORADO: ¿Cómo puedes conformarte con lo que crees saber de
LANGOSTA: Es una receta especial de langosta al ajillo. mí? ¿Acaso es una garantía para ti que haya sido un buen
estudiante… o que haya guardado largos silencios en la mesa?
PEZ ESPADA: Muy bien, no lo pienso más. Pongo en sus manos mi Escucha, somos iguales: dos hombres. En tu caso, un hombre
estómago. Tráigame también un poco de vino. encadenado a compromisos que no has tenido el valor de romper. Yo
LANGOSTA: Servido, señor. En seguida. (Ella sale. Entra el Pez te veo así, te comprendo… pero, ¿sabes tú de lo que soy capaz?
Dorado). ¿Hasta dónde podría llegar? No te conformes con lo que crees saber
de mí, papá.
PEZ ESPADA: ¡Efectivamente, tal como lo presentía! Ya me empezó a
La langosta sale. El Pez Espada comienza a comer mientras el Pez arder el estómago. Con toda seguridad, mañana voy a amanecer tan
Dorado comienza a hablar al fondo dando el distanciamiento. mal que voy a tener que visitar al médico.
PEZ DORADO: Papá, ahora estoy frente a ti, hablándote y PEZ DORADO: ¿Por qué no me ves como yo puedo verte? Sólo tienes
preguntándome por qué te estoy hablando. Hoy, nosotros no hablamos más años que yo, un poco de experiencia y más dinero con que
con ustedes, simplemente nos marchamos de casa para buscar otras comprarte un color para camuflarte, pero ni tú ni yo sabemos cómo
gente con quienes hablar en la calle. ¡Hablar contigo es como callar! llenar el silencio, llenarlo con algo que realmente nos importa, no con
Yo emitiendo sonidos y conceptos y tú… tú vas a seguir allí para que un orgasmo pagado con el dinero que te impide mirarme. (Comienza a
mis palabras reboten más secas. De todas formas, antes de largarme a violentarse). ¿Por qué no te vuelves y respondes? ¿No vives, no
la calle, pasé por aquí… (Transición). Estoy frente a ti, después de sueñas, no piensas? (Transición) ¿Quién sabe protegerme mejor? Me
haber dudado mucho, de haberle dado vueltas a las cosas, porque he pregunté lo mismo cuando hablé con mis compañeros… tratando de
tomado una pequeña decisión… no sabes cómo me gustaría que la hablar… hablar, tratar, tratar…unos tienen miedo y los que no lo tienen
comprendieras. Te escogí como última oportunidad porque para mí igual guardan silencio, evitando esa palabra, la que importa, la que

1
puede unirnos. No, eso no, descubrirse nunca, para eso está la música LANGOSTA: Vamos, donde sea. Vamos detrás de él, no hay que
y un buen pase de coca, cualquier cosa para no hablar…eso, vodka, dejarlo escapar.
ginebra, ron, estar aislados, abrazándonos, a mil kilómetros de
Ella sale en carrera. El Pez Dorado la sigue. Dan la vuelta al escenario
distancia. (Estalla súbitamente). Mira mi vida, papá… dime si me siento
por la parte trasera y entran por lado opuesto. Primero el Pez Espada,
así porque tengo hambre o porque me duele algo, como cuando era
luego la Langosta y el Pez Dorado. El Pez Espada ha llegado a su
niño. Tienes que tener una explicación, ahora que por primera vez te lo
casa. La Langosta, en la carrera, sigue alentando al Pez Dorado.
estoy diciendo con palabras.
LANGOSTA: ¡Vamos, adelante! ¡No te detengas! Sígueme a mí y ya
PEZ ESPADA: (Eructando). ¡No puedo más! ¡Ah, maldita úlcera que no
verás lo que pasa. Ya se cansará él primero que nosotros. Hay que
acaba de cerrarse! (Llama a la Langosta, dando palmadas).
hacerlo reventar.
LANGOSTA: (Entrando). ¿Llama el señor?
El Pez Espada se desploma agotado en una butaca.
PEZ ESPADA: ¡Efectivamente! Tráigame la cuenta, por favor.
PEZ ESPADA: ¡Por fin, que día!... Pleitos, líos, informes, ascensores
LANGOSTA: ¿Qué pasó? ¿No le agradó el plato? atacados, bomberos, partos, langostas supersazonadas…(Llamando).
¡Alejandra…Alejandra!
PEZ ESPADA: No ha sido eso. Estaba francamente delicioso. (Ella le
da la cuenta y él paga). Pero nosotros, los que padecemos de úlcera, VOZ ADENTRO: La señora acaba de salir.
no podemos excedernos con ciertas comidas. Ya puede imaginarse los
PEZ ESPADA: ¿Por qué se han llevado el televisor de aquí?
resultados. De todas formas, muchas gracias.
VOZ ADENTRO: ¡Ya se lo llevo, señor!
LANGOSTA: Gracias a usted. Y permítame recomendarle una visita los
días martes, tenemos platos especiales para vegetarianos o para La Langosta y el Pez Dorado hacen gesto de complicidad.
personas con úlceras como usted.
LANGOSTA: (Por lo bajo). Esta es nuestra oportunidad. Ahora verás.
PEZ ESPADA: Pues con toda seguridad me tendrá el martes por aquí. ¿Sigues conmigo?
Hasta luego.
PEZ DORADO: Claro que sí.
PEZ DORADO: (Al Pez Espada) ¡Papá, siento como si algo se
estuviese quebrando dentro de mí! (Transición. La Langosta se le Entra un Pez y coloca el televisor frente al Pez Dorado.
acerca). Simula encenderlo y graduarlo. La Langosta y el Pez Dorado toman
LANGOSTA: Lo lamento. ¿Ves? Es bastante difícil lograr algo con lugar en la zona de representación. Entran el Pez Goupy y el Pez
ellos. Apenas logramos irritarle el estómago, probablemente pase una Gouramy. Al comienzo con tono erótico.
mala noche a causa de ello… pero si insistimos, tal vez lo podamos PEZ GOUPY: ¿Ha comido usted cebollas crudas?
hacer reventar.
PEZ GOURAMY: ¿Ajoporros o ajos machacados?
PEZ DORADO: ¿Con qué cosa?
LAS DOS: ¿Tiene ese sospechoso olor a licor en la boca?
LANGOSTA: Algo que ellos mismos financian. No perdamos tiempo,
vamos detrás de él. Sonríen. Se parten. Muestran los traseros como en un comercial clip,
agitan tubos de crema dental. Música: merengue instrumental.
PEZ DORADO: Espera… ¿qué vas hacer?
1
PEZ GOUPY: Entonces usted ya tiene lo último en cremitas. PEZ DORADO: Pero esto no puede ser. Usted tiene que estar en un
lamentable error, señora.
PEZ GOURAMY: ¡La crema dental Sonrisa!
LANGOSTA: Hay un clamor batiéndose en mi alma. ¡Como un alarido
LAS DOS: (Orgásmicas). ¡Aaaah! (Mueven los traseros).
de bestia herida que estremece la tierra y quema mi garganta! Y son
PEZ GOUPY: Cepille sus dientes, su boca, sus encías, con la crema esas palabras que desde hace tantos años vengo repitiendo: ¿Dónde
dental Sonrisa. está mi hijo? ¡Mi hijo!

PEZ GOURAMY: Cepíllese toda, con el flúor protector y el cloro PEZ DORADO: Oh, pavorosa confusión de sentimientos.
blanqueador de la crema dental Sonrisa…
LANGOSTA: Y desde el día que llegaste a esta casa, algo nació en mí,
Se pasan los tubos de crema por la entrepierna y los senos. como una esperanza que repite perennemente: “Tienes que ser tú,
tienes que ser tú”… y vuelven a mí los recuerdos de aquella noche
LAS DOS: ¡Aaaaahhg! ¡Sonría con sonrisa! ¡Aaaahhhg! sombría, cuando aún debatiéndome con la fiebre del parto, coloqué a
PEZ GOUPY: Ponga una fiera en su boca…en su piel, en todas partes. mi hijo acabado de nacer una medalla en el pecho. Yo sabía que me lo
iban a arrebatar y quería dejarle aquella marca para poder identificarlo
PEZ GOURAMY: Vuélvase peligrosamente peligrosa con Sonrisa. cuando el destino lo pusiese en mi camino.
PEZ GOUPY: Extraiga el eros de su boca…de su cuerpo, de su toalla PEZ DORADO: Pero esto no puede ser, señora. Yo no he conocido a
sanitaria con la crema dental Sonrisa. otra madre que Mamá Candelaria. Esa negra noble y buena que ha
trabajado como una bestia toda su vida para darme comida y
PEZ GOURAMY: Para reír y besar sin temor y sin pesar, la crema
educación.
dental Sonrisa, que al mal aliento pulveriza.
LANGOSTA: ¿Pero no te das cuenta de que esa mujer no puede ser tu
Se echan eróticamente crema en la boca, se empatucan el cuello y los
madre?
dedos, chupan, maman. Luego se enfrentan seriamente a la cámara,
moviendo siempre los traseros. PEZ DORADO: Y si no lo fuera, es a ella a quien reconozco como tal.
Por su sacrificio, por su abnegación. Y si ella misma me dijese aquí, en
PEZ GOUPY: Y ahora con ustedes otro emocionante capítulo de la
este momento, que no es mi madre, sino que mi verdadera madre es
desgarradora telenovela “¿Dónde está mi hijo”?
usted, ¿cómo podría yo quererla, señora, si apenas la conozco?
PEZ GORAMY: ¡Original de la escritora Maritza Butterfly, la novelista
LANGOSTA: ¡Oh, Dios del Sinaí! ¡Oh, Jehová! ¡Oh, Zeus y todos los
que llega al corazón de las madres!
dioses del Olimpo! ¡Oh! ¡Oh! ¡Oh!...!Tened piedad de mí, de esta pobre
Música, efecto dramático. Langosta y el Pez Dorado se disponen a mujer desecho de la sociedad, abrojo del arroyuelo, cuyo único delito
actuar. es haber sido una madre soltera por creer en un canalla que me
engañó vil y cobardemente! Mi dolor de madre expósita traspasa cada
LA LANGOSTA: Es un presentimiento que me lleva casi a la certeza. una de las fibras de mi corazón como si fuera lanza que traspasó a
Es un algo en mis extrañas que me grita y me aprisiona, sacudiendo Cristo en la Cruz.
hasta la más honda fibra de mí ser. Es mi instinto de madre, la fuerza
de la sangre lo que me arroja hacia ti. ¡No puedo estar engañada, tú PEZ DORADO: ¡Señora, por piedad! Quisiera apaciguar su dolor y
tienes que ser mi hijo! poder darle un poco de esa felicidad que tanto ansía, pero mis labios
se resisten a pronunciar ante usted la palabra Madre.

1
LANGOSTA: ¡Sácame al menos de esta duda! LANGOSTA: ¿Cómo has osado traspasar el umbral de mi habitación?
PEZ DORADO: Decidme qué puedo hacer, para que con alas tan PEZ BETA: Con el mismo derecho con que mi hijo lo ha traspasado.
veloces como la fantasía, arranque yo también de mi regazo este puñal
LANGOSTA: ¡Tu hijo, no! Querrás decir: ¡mi hijo!
ensangrentado que han clavado en mí sus palabras.
PEZ BETA: Es mío y nadie podrá arrebatármelo. Yo lo tuve y lo crié. Es
LANGOSTA: Descúbrete el pecho. Quiero ver si llevas la medalla.
un hijo bastardo de un malvado que me abandonó después de
PEZ DORADO: Llevo una desde que me conozco, es un regalo de deshonrarme, sin que nunca jamás volviera a verlo. Tenía yo quince
mamá Candelaria. años. Y desde entonces he vivido con una cruz a cuestas por el triste
calvario de mi vida.
LANGOSTA: ¿Lo ves? ¡Es mi medalla! Hijo de mi alma, ábrete el
pecho, por favor, y aparta de una vez de mí este cáliz de amargura. LANGOSTA: ¡Mentira! Yo lo tuve, es mi hijo.
El Pez Dorado se lleva lentamente las manos al pecho. Música de PEZ BETA: Es mío. Yo lo parí. Y nunca he conocido a su padre ni a
fondo. La escena se congela cuando entra el Pez Luna. usted hasta hace unas semanas, cuando me contrató como ama de
llaves.
PEZ LUNA: Señora mamá. Para ese delicado pimpollo que es su más
preciado tesoro y toda su vida, nada mejor que la leche en polvo. LANGOSTA: ¿Cómo has podido tener tú un hijo blanco?
Tetafina. (Entra el Pez Molly y juega con una pelota como un bebé). Y
PEZ BETA: Su padre era blanco y hermoso como él.
es que la leche en polvo Tetafina ha sido elaborada científicamente y
con los métodos lácteos más modernos, para lograr así un producto LANGOSTA: ¡Falso! ¡Todo lo que sale de tu boca es sólo mentira! La
idénticamente igual al que elaboran sus senos. Usted puede dársela a maldición de los dioses caiga sobre tu cabeza cada vez que prefieras
su bebé con toda la confianza y garantía de que la diferencia no se una falsía. ¡No has podido tener un hijo blanco, porque tú eres negra,
nota. Además, la leche en polvo Tetafina viene en dos deliciosos negra como el carbón, eres negra y mentirosa! ¡Negra falsa,
sabores: Limón y Fresa. Por eso, su bebé la sorprenderá diciéndole. carambulé!
(Cantando).
El Pez Beta amenaza con atacarla, pero el Pez Dorado la detiene.
“Quiero mi biberón
De Tetafina PEZ DORADO: ¡No, madre, no, detente, por favor!
De fresa y limón…” ( Bis, Sale)
PEZ BETA: ¡Deja que la asesine con mis propias manos!!Ladrona de
LANGOSTA: Oh, la luz de mis ojos se eclipsa ante el presagio que roe hijos!
todas las fibras de mi ser. ¡Abre! ¡Abre esa camisa y descubre el velo LANGOSTA: ¡Falsaria! Oh, Salomón, deberías volver a tus cenizas.
que oculta la fatal verdad de mi vida!
PEZ BETA: No, que no traiga a Salomón. (Comienza a llorar).
En el momento en que el Pez Dorado va a abrir la camisa, entra el Pez
Beta. PEZ DORADO: Madre, madrecita, cálmate. Tú sabes que yo no puedo
reconocer ni querer a otra madre que tú. Y si eres negra, no importa,
PEZ BETA: Un momento… detente, Satanás, apártate de mi camino. eres la más noble, buena y abnegada de todas las madres. (Llora
PEZ DORADO: ¡Mamá Candelaria! también). Sí, madre querida.

PEZ BETA: ¡Sí, yo, la misma que viste y calza! ¡Tu madre!
1
PEZ BETA: Hijo, hijo de mi alma, ¿verdad que soy tu verdadera PEZ GOUPY: Asexuada comparsa de travestis, caras pintarrajeadas y
madre? noche de luna roja. Sexos insaciables que se retuercen contra una
pared, que se revuelcan sobre la tierra como fieras y gritan el vacío de
PEZ DORADO: Lo eres, madrecita del alma. Eres la más buena y
su estéril orgasmo. Sexo inútil, rock inútil, amor inútil, rapto inútil y sin
santa de todas las madres. Eres para mí la virgencita María Negra,
sentido. Hastío.
reina de mis cielos. (Todos lloran de manera insoportable).
PEZ BETA: PEZ BETA: ¡A la calle! A adherirnos a las puertas de los
LANGOSTA: ¡No! ¡No me puede dejar con esta duda! ¡Déjenme ver la
hoteles y a las paredes desnudas, solitarias a veces. Otras, con una
medalla que pende de tu pecho! Quiero arrancarme esta desazón que
como yo, o con miles como yo. De pie, esperando ver pasar a alguien
me corroe el alma. ¡Enséñame la medalla!
que nos haga una señal o nos encienda un cigarrillo. Inútil pareja de
Ella trata de abrirle la camisa, los tres forcejean. Entra el Pez Luna, una noche. Anonimato para un sexo violento e instantáneo. Nada más.
también llorando Luego, la misma historia. En la calle. ¡A la calle!

PEZ LUNA: ¿Logrará la desesperada madre abrir la camisa del PEZ GOURAMY: A la calle. Donde puedo estar yo, sencillamente
muchacho? ¿Tendrá o no tendrá la medalla que ella le colocó al nacer? sentada en los bancos de una plaza. En una plaza de cualquier pueblo
¿Se haría mamá Candelaria la cirugía plástica? No dejen de ver o de cualquier ciudad. Como isla en las calles, bajo un cielo de
ustedes el próximo y apasionante capítulo de “¿Dónde está mi hijo?”, bostezos y con el deseo ardiente de olvidar.
patrocinado en forma exclusiva por la crema dental Sonrisa y la leche
PEZ DORADO: De olvidarlo todo, para tratar así de rescatar la risa que
en polvo Tetafina, la leche que hace decir a su bebé “…Quiero mi
desde niño se nos ha borrado. Una risa insignificante capaz de
biberón / de tetafina / de fresa y limón”.
enfrentar la lenta procesión de un mundo que sólo parece querer
El Pez Espada se levanta desesperadamente y comienza a gritar subsistir para terminar con sus posibilidades de ser feliz
mientras los otros personajes se retiran para hacer su entrada
PEZ LUNA: (Entrando). ¡A la calle! Con el tumulto de los anacoretas y
posterior.
de los olvidados. Con las hormigas desapercibas o con el rebaño.
PEZ ESPADA: ¡Basta! ¡Basta! ¡A la calle! ¡Quiero salir a la calle… Mirando los ojos tristes de la gente que pasa y sus rostros alargados.
déjenme salir a la calle!... ¡A la calle! (Pausado). ¡En silencio, o con Soledades pobladas. Viejos que palidecen con su fatiga de los veinte
todo el ruido del mundo a mi alrededor! ¡Quiero salir a la calle! (Corre años.
de un lado a otro, tratando de salir. Luego prosigue más calmado) ¡A la
LANGOSTA: (Entrando). Hombres y mujeres en un café, con un vaso o
calle! Simplemente a la calle. A las calles largas y nocturnas,
una taza por delante, abandonados. Mirando las siluetas desplazarse y
entrecruzadas como un laberinto. Todas igualmente largas y
comiéndose las uñas. Tragándose las uñas para aligerar la digestión
silenciosas, como monumentos erigidos al tedio…(Entra el Pez
de las verdades. Miles de hombres y mujeres fragmentados, a la
Dorado). Absorbentes como una droga.
espera de una palabra. Palideciendo por la angustia de una carta que
PEZ DORADO: ¡A la calle! Todos a la calle. En donde todo el cuerpo no acaba de llegar. Temblando ante un reloj por un encuentro que se
parece convertirse en una inmensa pupila que no mira jamás al cielo. retrasa cinco…diez…quince largos minutos.
Por la calle caminamos todos, buscándonos los unos a los otros con el
PEZ MOLY: Mortal carroza de adefesios sin sexo, largos cabellos y
miedo presente de levantar la cabeza. Todos entregados a la
rostros de mortajas. Cuerpos para el placer de un momento y el olvido
búsqueda solitaria de la noche, como gatos en celo. Mujeres mirando
perenne. Ciegos ojos que siguen las mortecinas luces de neón de un
una vidriera. Hombres hurgando los urinarios.
callejón oscuro y húmedo, oloroso a orín y a heces, a licor rancio y a

1
llanto contenido. Solitarios caminantes de una senda de nocturno PEZ LUNA: Yo no fui, yo no seré.
orgasmo sin placer ni amor.
PEZ GOUPY: Yo no seré, yo no he sido.
PEZ GOUPY: Un minuto solamente, una palabra. Una caricia
PEZ GOURAMY: Yo no fui, yo no soy.
comprada. Dos billetes y un cigarro. Ya no hay nada que decir. Un
adiós sin despedida y el espacio suficiente para volver a comenzar la PEZ MOLY: Yo no fui, yo no he sido.
ronda.
LANGOSTA: Nosotros no seremos, ustedes no serán.
PEZ BETA: ¡A la calle! A tratar de acoplarnos al rebaño silencioso de
alienado que ni siquiera se entrega al laberinto. El rebaño que sólo TODOS: Yo no soy, yo no seré.
hace ruido al pisar, sin dejar huellas. Andar despreciando la PEZ DORADO: ¡A la calle, donde todos esperan y esperamos!
ternura, el efecto, lo vital. Adoradores perpetuos de sus propios LANGOSTA: ¡A la calle, donde día tras día se me cansan los ojos de
cuerpos. Multitud andina que marcha, puebla, pasa y se escapa como verlos
agua.
caminar! ¡De escuchar un jazz sin gloria y de tomar café!
PEZ GOURAMY: ¡A la calle! ¡A buscar la frase que un rock silente no
me dice y que yo necesito para poder aullar! PEZ BETA: A la calle, donde me han visto con el pelo teñido,
oxigenado. ¡Con el estómago vacío, llena de presagios!
PEZ LUNA: A la calle, repleta de logotipo, marcas, estereotipos y
señuelos. PEZ LUNA: Y a mí, en un carro con un desconocido que pretende
encontrar una definición del amor y solamente se otorga el lecho de un
PEZ ESPADA: Identidades perdidas buscando su identificación. motel.
Anonimato, ambigüedad. Vacío.
PEZ ESPADA: Y a mí, incapaz de ver el fondo de una juventud lúdica,
PEZ MOLY: Desertores del calor de una sonrisa. Analfabetas de sordo a los bullidos, pulverizado en el espacio y el tiempo como
cualquier sentimiento. alucinado por una droga, pero completamente árido.
PEZ GOUPY: Caos, confusión, ruido, furia contenida, sometimiento. Se congelan. Entra el Pez Dorado niño.
PEZ GOURAMY: Pasividad, conformismo, extravagante libertad, PEZ DORADO NIÑO: El árbol creció conmigo. Y hoy me planto bajo su
manipulación. sombra, y tengo que preguntar por aquello de vivir: si ya he dejado la
PEZ MOLLY: Desenfreno, desborde, exhibicionismo, misóginos inocencia, solamente puedo sustituirla por una mujer, unos hijos y un
anarquistas. sueldo, una casa vacía donde siempre se repite lo mismo. Tengo que
preguntar qué es la ternura… ¿Qué cosa es un verso olvidado? ¿Qué
PEZ DORADO: Gentes que sin saberlo están conjugando cosa es mi impaciencia por las cosas que vendrán y por las que no
perennemente el verbo ser: Yo soy- Tu eres-Yo no soy. quiero olvidar?
Comienzan a caminar en círculo Estalla la música. Se rompe el grupo. Entran nuevos peces. Todo
parece una escena callejera de gente alienada y desesperada.
PEZ ESPADA: Yo no soy, yo no seré
Aparece el Pez Dorado en un extremo, como si buscase a alguien.
PEZ BETA: Yo no soy, yo no fui

1
PEZ LUNA: ¿Qué pasó, chamo? ¿Te perdiste? ¿Buscas una PEZ DORADO: Por favor, déjenme ir, tengo prisa. ¿Langosta qué se
dirección? ha hecho? ¿Dónde se ha ido? Parece que me ha dejado solo, ¿qué ha
pasado aquí? (Da vueltas de un lado a otro entre las risas). Langosta…
PEZ BETA: ¿Qué tienes? ¿Cuál es el atore?
Langosta…¿Dónde estás?... Se ha escondido, si se ha escondido..,
PEZ GOUPY: Vente conmigo, mi pavo, que yo te resuelvo rápido y te pero no, no puede ser, ella no puede haberse ido con los demás… (Les
quito esas inquietudes. pregunta). ¿Dónde está ella?... ¿Ustedes saben dónde está? Ella tiene
que estar aquí con ellos, de lo contrario, para qué hizo todo esto. ¿Para
PEZ GOURAMY: ¡Ay, pero si está nervioso! Tienes que quemar las que vinieron ustedes? (Cae de rodillas en el escenario, comienza a
energías con un trote. ¿Es que no te gusta trotar? llorar desesperado). No, no es verdad, esto sólo está ocurriendo en mi
PEZ DORADO: ¡Déjenme!... !Déjenme ir! Estoy buscando a alguien. cabeza…

BEZ BETA: Pero si aquí me tienes. ¿Qué pasa? TODOS: Tic tac…tic…tic tac…

PEZ LUNA: ¿Y a mí no me vas a parar pelota? No me digas que estás PEZ DORADO: Tic tac…tic tac… Es mentira, esto lo estoy
conflictuado. imaginando… no es verdad…

PEZ DORADO: Déjenme, déjenme, no me cierren el paso TODOS: (Más fuerte). Tic tac…tic tac…tic tac.

PEZ GOUPY: Tú como que piensas mucho, Tienes ojeras y cara de El Pez Dorado trata de salir, se tropieza con unos compañeros.
atormentado. Mira, chamo, mejor es que no tengas recuerdos, cuando PEZ MOLY: ¿Qué te pasa? ¿Para dónde vas?
uno es joven los mata.
PEZ CEBRA: ¿Qué tienes? ¿Te pasó algo?
PEZ GOURAMY: ¿Qué es lo que tú quieres? ¿A tu mamacita? ¿La
tetica?... ¿La casita Chamo, resuélvete en la calle? ¿No quieres venir PEZ DORADO: Déjenme salir, tengo que salir.
un rato con nosotras?
PEZ MOLY: Vente con nosotros, vamos a visitar un par de chicas que
PEZ DORADO: Por favor, déjenme, tengo prisa…quiero…quiero. están solas en su casa…

PEZ LUNA: Yo sé que es lo que tú quieres. Yo te lo doy. Y te juro que PEZ CEBRA: Bueno, tú sabes, a esas les gusta la movida…
yo no te controlo. Libre, chamo, libre, sin rollos.
PEZ DORADO: ¡No, déjenme! ¿Por qué tuvo que haberse ido?
PEZ BETA: ¿Por qué quieres ser como los de antes? A nosotros no se
PEZ MOLY: Tú estás mal, chamo. ¿No será que necesitas meterte una
nos puede exigir ser igual que ellos, ya sus símbolos murieron.
dosis?
PEZ LUNA: ¿Tú quieres escribir tu página en blanco? Escríbela con tu
PEZ CEBRA: Típico, necesitas algo que te haga saltar la conciencia.
propia historia, contigo.
PEZ CEBRA: ¡Es que te falta fibra muscular, desenfreno!
PEZ GOUPY: Nosotros queremos buscar nuestros propios dueños.
PEZ MOLY: Yo soy un malandro bien: ¿de qué tienes miedo entonces?
PEZ GOURAMY: Sin líderes, sin banderas, sin símbolos, tranquilo,
pana. PEZ DORADO: Basta, basta ya, déjenme salir…
BEZ PETA: Mira, ¿por qué no nos resolvemos? Corre. Lo rodean todos.

1
PEZ LUNA: Chamo, vuélvete dark, posmo, teddy boy. ¿Qué es lo tuyo? Comienza a escucharse nuevamente la música, vertiginosa,
estruendosa, que aturde. El Pez Dorado pasa de unos brazos a otros,
PEZ BETA: ¿Es que no te gusta? ¡Mira, sin rollos, yo uso tu cuerpo, tú
en medio del juego y del canto.
usas mi cuerpo y ya!
PEZ DORADO: ¡Basta, basta ya! ¿Pero dónde puede estar ella?... !
PEZ DORADO: Déjenme salir…déjenme salir…Langosta…Langosta.
Langosta!...!Langosta!
Entra la Langosta, pero no puede romper el cerco de la confusión.
LANGOSTA: Aquí estoy… ¿Pero por qué no me escuchas?
LANGOSTA: Aquí estoy. Aquí estoy… Escúchame. Escúchame, por favor.

PEZ GOUPY: No te vamos a controlar, resuélvete con nosotras. Los dos no logran encontrarse en medio de la confusión. El Pez
Dorado se suelta. Los otros siguen bailando. El Pez Dorado va tocando
PEZ GOURAMY: ¿Para qué necesitas gritar? Nosotros estamos el cristal que delimita el acuario con gesto desesperado, como si se
ignorados, si gritamos nos meten presos. asfixiara.
PEZ DORADO: Déjenme pasar, déjenme pasar, me marean… PEZ DORADO: Basta ya, cállense todos… van a volverme loco…!
¡Langosta!... Langosta!...!Basta ya… bastaaaa!
LANGOSTA: Aquí estoy… ¿por qué no me oyes? El desenfreno ha llegado al paroxismo. Bailan con estruendo. El Pez
PEZ LUNA: Tú siempre tan serio. Deja ya de pensar tanto y ven a jugar Dorado corre al fondo y desde allí arremete hacia proscenio, chocando
con nosotras. con el supuesto cristal. Cae estrellado contra el vidrio del acuario que
acaba de romper. Los demás personajes de tambalean hasta caer
PEZ BETA: No vas a decirnos ahora que no te gusta jugar. agonizantes, aleteando.
PEZ GOUPY: ¡Un jueguito muy sabroso, como el de papá y mamá! Sólo la Langosta no se mueve y mira con terror la escena.
PEZ GOURAMY: A todas nosotras nos gusta jugar. ¿A ti no? LANGOSTA: ¡Oh, no! ¡El agua! ¡El agua se escapa! ¡Has destrozado el
cristal!.. (Corre hacia el Pez Dorado, pero este ya está muerto). Yo no
PEZ DORADO: Sí me gusta, pero ahora no… Déjenme pasar.
te había abandonado… ¿Por qué tuvo que ser así? (Mirando a los
PEZ BETA: No seas tonto, ¿no sabes respirar acaso? otros peces muertos). ¡Cómo son de repulsivos aun después de su
muerte! ¡Todos, todos muertos! ¡No queda ya ni una gota de agua en
PEZ LUNA: ¿No sabes comer ni dormir? este acuario!... Todos muertos, como si en realidad esto hubiese
PEZ BETA: ¿Cómo no vas a poder jugar entonces? ocurrido a seres humanos. (Recordando uno de sus diálogos con el
Pez Dorado) Como una gran bomba que arrasa con todo… Pero no
Lo atrapan. Él trata de zafarse. Todos ríen. sólo ha destruido sus propios cadáveres. ¿Será esta la última forma de
destruir nuestra propia soledad? (Pausa. Transición, como tratando de
PEZ DORADO: Oye, suéltame…Suéltame, por favor… !Suéltame, te
aferrarse a un último hilo de optimismo). No, aún tengo esta ventaja.
digo!
Yo puedo vivir muchas horas sin estar dentro del agua. ¡Tendré el
LANGOSTA: Defiéndete, por favor, ahora no puedo ayudarte, pero tiempo suficiente para vivir sin estar dentro del agua ¡Tendré el tiempo
aquí estoy. Tienes que verme, tienes que encontrarme. suficiente para que los dueños regresen a casa, vean lo que ha
ocurrido y repongan el cristal! Seguramente mañana mismo traerán
peces nuevos… y tal vez sólo traigan peces dorados al acuario…
1
(Transición). ¿Pero qué estoy diciendo? ¡Yo no pertenecía a este
acuario! Ahora, cuando regresen, se asombrarán de lo ocurrido y su
asombro será mayor cuando vean que aquí vivía también una
langosta… (Al público). Y seré yo quien les dará la única satisfacción
por este acuario roto y por la muerte de sus peces…Mañana, en el
almuerzo, tendrán invitados especiales. ¡Van a obsequiarles langosta a
la vinagreta!
FIN

You might also like