"Los Heraldos Negros" es uno de los poemas más emblemáticos del poeta

peruano César Vallejo. Fue publicado por primera vez en 1918 como parte de su
obra "Los Heraldos Negros", y es considerado un poema emblemático de la
poesía hispanoamericana moderna. A continuación, te ofrezco una
interpretación de este poema:

En "Los Heraldos Negros", Vallejo expresa una profunda reflexión sobre la

naturaleza humana, la tragedia y el sufrimiento. El título mismo sugiere la
llegada de malas noticias o anuncios ominosos, representados aquí por los
"Heraldos Negros", que simbolizan la fatalidad y el destino adverso que acecha
al ser humano.

El poema se estructura en cinco estrofas, cada una con versos breves y concisos
que generan un ritmo pausado y reflexivo. El lenguaje es metafórico y oscuro, lo
que aumenta la sensación de pesimismo y desolación.

En la primera estrofa, Vallejo presenta imágenes poderosas de la naturaleza

hostil y sombría. Los "Heraldos Negros" son descritos como "siniestros" y
"agoreros", anunciando una realidad llena de dolor y sufrimiento.

En la segunda estrofa, el poeta hace referencia a su propia vida ya la de

aquellos que lo rodean. Muestra cómo la vida es efímera y frágil, representada
por "la flor tardía" y "la tarde" que cae sin remedio, simbolizando la
inevitabilidad de la muerte y la desesperanza.

La tercera estrofa ahonda en la desolación humana, retratando la soledad y el

dolor de aquellos que sufren y mueren en el mundo, sin que nadie se dé cuenta
de su dolor y agonía.

En la cuarta estrofa, Vallejo evoca una imagen de la humanidad sumisa en el

sufrimiento y la injusticia. Los "ojos atados" sugieren la ceguera ante el dolor
ajeno y la falta de compasión en el mundo.

Finalmente, en la última estrofa, el poeta se pregunta por qué hay tanto dolor y
miseria en la vida, sin encontrar una respuesta. La repetición del verso "hay
golpes en la vida, tan fuertes... Yo no sé" enfatiza la impotencia y el
desconcierto ante el sufrimiento humano.

"Los Heraldos Negros" es una reflexión existencialista que plantea preguntas

sobre la condición humana y la inevitabilidad del dolor y la muerte. Vallejo nos
confronta con la oscuridad y la tragedia de la vida, invitándonos a reflexionar
sobre nuestra propia existencia y la de aquellos que nos rodean. Es un poema
profundo y conmovedor que ha resonado en generaciones de lectores por su
poderosa expresión de la fragilidad y la belleza trágica de la vida.