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La Cocina y Sus Misterios-Herve This
La Cocina y Sus Misterios-Herve This
Traducción a cargo de
Explicación científica
de las 55 mejores recetas
de la cocina francesa
Hervé This
I.S.B.N.: 84-200-0871-0
Reservados todos los derechos para los países de habla española. Este hbro no podrá
ser reproducido en forma alguna, total o parcialmente, sin el permiso de los editores.
Imprime: Grafic RM Color, S.L. e/Ganadería, Parcela 27B, Nave 2. 22006 Huesca.1999
-
Indice de contenido
Introducción 1
Los libros de cocina, la historia de la cocina, el orden
de trabajo, los experimentos, las dificultades, la dietética.
no, la espátula, la jarra para medir, las sartenes, las tablas, los
aros, el rodillo, la cazuela de vapor, la mandolina, 1a picadora,
la espumadera, las cacerolas.
EL APERITIVO
LOS ENTRANTES
6. Los panecillos.............................................................. 51
La levadura, el almidón y el gluten, la fermentación,
las reacciones de Maillard.
9. Gazpacho con huevos ...... .......... ...... .... .. .... ...... ........... 73
Los tomates, el escalfado de los huevos.
11. Rollo de pichón a las nueces ...... ............. ...... ...... ........ 83
El caldo, la transparencia, la clarificación, el escalfado,
el enfriamiento, los geles.
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LAS CARNES
LOS POSTRES
42. Las tres hojas de chocolate ... .... .... ... ... ..... ... .. ... ..... ...... 267
El trabajado del chocolate, h\s emulsiones de cacao,
la mousse de chocolate, la holandesa de chocolate.
45. Hojaldres de albaricoques . ....... .... .... ....... ... .. ... ..... .. .. .. 283
La pasta de hojaldre, la regulación del horno,
la crema de almendras.
46. Tarta merengada de limón ... ... ... ..... ... ... ..... .. ... ... ...... ... 289
El merengue francés, el merengue italiano.
Bibliografía . .. .... .... ... ... ... ... ... .... ... ... .... ... ... .... ... ... .... ... ... .. 357
X
Int:roducción
(fJ los libros de cocina se repite lo dicho por muchos «chefs», lo escrito por
* N. de la T.: Estas palabras, al igual que otras que aparecerán después como
mousse o crÉpe ... , son actualmente de uso cort"iente en nuestros restaurantes y libros
de cocina y creo que no requieren traducción, que además de superflua, siempre sería
inexacta.
6
(f) Hasta que no presencie la conversión de la dietética en una ciencia
o exacta, fomentaré el disfrute de los placeres gastronómicos y aconsejaré a
o: mis lectores que sigan el único régimen verdaderamente eficaz: la práctica
w
1- del ejercicio físico. El ejercicio~ no sólo transforma las grasas en músculos,
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¿Los cuchillos? Sean de hoja de sierra o no, deben estar muy afilados z
w
y cortar muy bien. El buen obrero utiliza buenas herramientas: este dicho :J
ro
es especialmente cierto para los cuchillos de cocina. Si es aficionado a la ([J
pastelería tendrá que preparar frecuentemente genovesas y cortarlas en ~
dos discos; para esta operación y también para los aficionados al jamón, es
imprescindible disponer de un cuchillo de lonehear bien afilado, de hoja
larga y extremo redondeado. Otro tipo de cuchillo es el llamado de carni-
cero o chuletero, de hoja corta, más ancha en la parte próxima al mango y
puntiaguda en el extremo, que se utiliza para separar la carne del hueso. La
cuchilla o hacheta es un cuchillo pesado, grueso y resistente; tanto este
cudilllo como el de partir, le servirán para cortar los huesos o para tritu-
rarlos cuando necesite preparar fondos de carne, pero ¡escándalos bien
cuando su pareja sufra un ataque de celos! El abridor de ostras no necesita
presentación; basta con un breve comentario sobre su empleo. Coja la
ostra con la mano izquierda envuelta en un paño de cocina viejo) o mejor
todavía, póngase unos guantes de goma antideslizante forrados de algo-
dón. Para atrapar la ostra que se resiste, agarre el cuchillo por el filo pero
bastante cerca de la punta para no perforarse la mano izquierda en el mo-
mento en el que la ostra ceda a su fuerte presión. Introduzca la punta del
abridor en la charnela de la ostra, que es el punto más estrecho, y corte el
pie; _a continuación, rasque el interior de la valva para separar toda la carne.
Otro cuchillo imprescindible es el de sierra, que se impone para cortar el
pan. ¿El pelapatatas? Hablaremos sobre él más tarde.
A la batidora se le llama también varita de batir. En este caso debe
funcionar a mucha velocidad. Antes de comprar una batidora, se debería
de probar. La mejor comprobación es la preparación de una pasta de oli-
10
(f) vas verdes (ver la receta en la página 29). Si quedan
para el cocinado de las tortillas y que hay que limpiarla de vez en cuando :5
con sal gruesa y vinagre.
ºa:w que ellos? Los aros presentan muchas ventajas; en primer lugar, permiten
desmoldar mucho más fácilmente las tartas. Además, con ellos se pueden
f-- cocinar pasteles de todo tipo: de verduras, con picadillos de carne o pesca-
(f)
2 do, etc. .. Por último, encajan perfectamente unos dentro de los otros ocu-
(f) pando muy poco espacio en la cocina. Compre aros de todos los diáme-
:::J
(f) tros y varios de cada tamaño; son baratos y le resultarán de gran utilidad.
>- ¿Por qué mencionamos el rodillo de pastelería? Todo el mundo co-
<(
z noce este utensilio por su frecuente uso entre las parejas mal avenidas.
ü
o Para los objetivos culinarios, serviría perfectamente una botella, pero un
ü buen rodillo de pastelería es
~ más tradicional y, desde lue-
go, ¡mucho más elegante!
o
a:
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mondaduras transparentes. Es un crimen contra la nación no proporcio- ü
o
narles un pelapatatas con el que podrían cumplir su tarea a la perfección. ü
z
La mandolina. ¿Servirá para seducir a nuestra Dulcinea? Desde lue- w
:::J
go, no esta mandolina que no es familia de la guitarra, sino un utensilio Ol
...J
con el que se preparan julianas, rodajas de patatas onduladas, menestras de w
. verduias .. : Es bastante barato y resulta muy útil desde que entra en la coci- o
(/)
na. ¿Cómo es exactamente? Mide unos 30 centí-
~
metros de largo y 1O centímetros de espesor y z
tiene una pata que lo mantiene con una inclina- w
2
ción de aproximadamente 45 grados. En su cara
superior lleva varias cuchillas, onduladas o no, ~
a:
de forma que al frotar las verduras sobre ella w
I
con un movimiento de va-y-viene, se obtienen
las rodajas lisas u or¡duladas, los bastoncitos, se ~
z
rallan, se cortan las julianas, etc. w
:::J
Ol
La picadora de carne es un apa- (/)
Bocaditos de queso
--
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Vino de naranja
«TapenadeJ>
Hojaldritos de ostras
Buñuelos de bacalao ...
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Bocadit:os de queso
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(f)
corteza
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dorada o
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** N. de la T.: El «vouvray» es un vino blanco de! Valle del Loira; fresco y afrutado.
28
(/)
Este método se utiliza normalmente en Lorena y en Alsacia; alli los
ºa:
lJJ
f-
aguardientes de ciruelas se conservan en grandes garrafones que se llaman
«damasjuanas», en donde se introduce un palo de avellano. Para el vino de
(1) naranja, les recomiendo mejor una ramita de roble sin corteza y que, para
2 reproducir el método tradicional de fabricación de los toneles, previamen-
(/) te hay que quemar un poco con una llama.
:J
(/)
¿Para qué sirve este envejecimiento? Se producen muchas reaccio-
>- nes químicas, entre ellas, la del alcohol con la lignina de la madera; esta
<l'.
z reacción origina una infinidad de compuestos aromáticos, como la vainillina,
ü
o molécula responsable de la mayor parte del aroma de la vainilla. Si no tiene
ü la paciencia de dejar envejecer el vino de naranja, puede añadir una gota de
~ extracto de vainilla líquida. Naturalmente, los gastrónomos a los que dedi-
co mi receta de vino de naranja, se oponen rotundamente a esta «herejía
del palito de madera», pero ¿verdad que nadie se traslada a un nuevo apar-
tamento sin repintarlo a su gusto? ... pues lo mismo me pasa a mí con este
vino de naranja ...
¿Cuánto tiempo debe envejecer el vino de naranja antes de su con-
sumo y hasta cuándo se conserva? Los productores de mistelas*, que son
los «vino generosos» de Charentes y Languedoc, los mantienen por lo menos
durante un año en cuba; así que aprenderemos de su experiencia y hare-
mos lo mismo que ellos.
Sobre el tiempo máximo que se puede conservar este vino no tengo
ni idea porque siempre se termina muy deprisa. En cualquier caso, no hay
que preocuparse porque el alcohol está en suficiente cóncentración como
para garantizar una conservación totalmente satisfactoria.
Si es posible, sirva el vino de naranja con pequeños canapés
recubiertos de «tapenade»: un delicado paté de olivas negras, alcaparras
(<<tapem> en lengua provenzal), filetes de anchoas, coñac, aceite de oliva y
especias provenzales (ver la receta en la página 29).
·* Se llaman «mistelas» a las deliciosas bebidas que se obtienen a partir del mosto
de uva: !a fermentación se-detiene .añadiendo alcohol.
<< T apenade>>
* N. de la T.: La «tapenade» es uria pasta a base de· olivas que debe su nombre a
uno de sus ingredientes, las alcaparras, que en lengua provenzal se llaman «tapéno».
30
(J) Ingredientes
o
rr: ✓ 200 gramos de olivas negras
w ✓ 50 gramos de olivas verdes
1-
(JJ ✓ 50 gramos de alcaparras
2 ✓ 1O filetes de anchoas
(J) ✓ 30 centilitros de aceite de oliva, el zumo de un limón
:)
(J) ✓ 1 hoja de gelatina
>-
..:
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o
O] Triturar muy menudas las alcaparras sin escurrir con
las olivas verdes deshuesadas y el zumo de un limón.
ü
~ La «:tapenade» es una deliciosa emulsión, exactamente igual que las
mayonesas: en una pasta inicial que contiene agua~ se añade el aceite agi-
tando para conseguir su dispersión en forma de gotitas aisladas por las
moléculas que llamamos «tensioactivas». Estas moléculas tienen una parte
que se une al aceite y otra parte que se une al agua; las zonas de estas
moléculas que se unen al aceite se colocan en contacto con las gotitas de
grasa y las partes afines por el agua se orientan al exterior, hacia la fase
En una emulsión, los átomos de cloro y de sodio liberados al disolverse la sal rodean a
las gotitas de aceite.
31
acuo__sa. Así aisladas, las gotas de aceite no se unen entre sí, no confluyen; la
emulsión es estable (no totalmente, pero sí lo suficiente desde el punto de '
w
o
vista culinario). ..;
z
w
Empecemos por la primera de las operaciones: preparar una pasta ll
que contenga el agua y las moléculas tensioactivas. El agua procede de las ~
alcaparras y de las olivas verdes; las moléculas tensioactivas las aportan '
tam.b~én estos dos ingredientes. Para dispersar estas moléculas, es· necesa-
rio nlmper las células vegetales y por eso esta primera operación se realiza
con una batidora. La «tapenade» resulta mucho mejor cuando la pasta está
muy finamente picada. Debemos trabajar con la batidora durante bastante
tiempo, hasta que la consistencia sea homogénea y lisa. Además, el zumo
de limón sirve para acidificar el medio lo que, como veremos después,
estabiliza la emulsión y además potencia el sabor de la mezcla.
Para estar totalmente seguros de tener suficiente cantidad de molé-
culas tensioactivas, se puede añadir ajo (sus moléculas tensioactivas son las
que permiten conseguir la emulsión de aceite en los aliolis) o una hoja de
gelatina disuelta en el zumo de limón caliente Oa gelatina es un poderoso
agente tensioactivo, como veremos al tratar de la mayonesa, página 118).
>-
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Cuando en la preparación de una mayonesa se utiliza poco aceite, la salsa queda muy
fluida porque las gotitas de aceite tienen mucho espacio para moverse. Por el contrario,
cuando se incorpora mucho aceite, la salsa es espesa y firme porque las gotitas son
pequeñasy no disponen de sitio para moverse (a la derecha).
>-
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Vamos a contar otra vez: después de estas dos vueltas, tenemos 162
capas de masa y 81 capas de mantequilla.
Si deseamos preparar el hojaldre con antelación, podemos interrum-
pir la preparación en este momento y envolver la masa en un plástico
alimentario. Conservar en el congelador y antes de su utilización, mante-
nerla en el refrigerador durante 24 horas.
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Los panecillos
Huevo duro a la desesperada
Ensaladas para sibaritas
Gazpacho con huevos
í?.¡,o,lti:Q!.íl:.'~M.
Huevos revueltos con gambas ~~~
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Los panecillos
¡Un pan hecho por uno mismo! Recuperar gestos olvidados (con-
suélese así si no dispone de un robot amasador) y disfrutar del placer de
comer un pan verdaderamente recién hecho. Hay que calcular por lo me-
nos tres panecillos por comensal: son tan buenos que nadie resiste la ten-
tación de comerlos.
52
(fJ Ingredientes para 18 panecillos
ºa:w ✓
✓
10 gramos de levadura de panadería
1 cucharilla de azúcar
~ ✓ 35 centilitros de agua tibia
2 ✓ 10 gramos de sal fina
(fJ ✓ 600 gramos de harina corriente, que no esté recién fabricada
:J
(fJ
Durante esta fase, las levaduras y las distintas enzimas, nos relevan
en el trabajo. ¿Las levaduras? Ya hemos hablado antes de ellas ¿Las enzimas?
Son moléculas que se encuentran en todas las células vivas y que son como
pequeños obreros especializados. Por ejemplo, algunas enzimas rompen
las grandes moléculas de almidón, liberando los azúcares de los que se
nutren las levaduras. Es un sistema perfecto en el que todo contribuye al
esponjamiento de la masa. Las enzimas repartidas en ella, preparan los
nutrientes para las levaduras; las levaduras. se alimentan de estos azúcares y
desprenden gas carbónico que hace «subirn la pasta y también producen
distintas moléculas que confieren a la miga su delicioso sabor característi-
co. Durante el trabajado de la masa las levaduras se van multiplicando.
Sin embargo, llega un momento en el que las levaduras, inmovilizadas
en la pasta, no tienen en sus proximidades sustancias accesibles para nu-
54
(/) trirse. Hace falta ayudarles y ponerles en contacto con otras partes de la
1-
(/)
Evite que las bolitas de pasta se peguen entre sí. Se hincharán dos
veces: una vez antes del horneado, durante la hora de reposo prescrita, y
otra vez durante la cocción.
* Preparamos un roux, por ejemplo, para hacer una salsa blanca: en un cazo peque-
ño, se calientan la mantequilla y la harina hasta que esta última se «dora» ligeramente.
~uevoduro
a la desesperada
>-
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z
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59
>- ¡--:;-"] Contar diez minutos desde que vuelve a hervir el agua.
<
z
~ Sacar el huevo inmediatamente y sumergirlo en agua
fría.
ü
o
ü Los huevos duros muy cocidos quedan demasiado firmes, casi se-
~ cos, la yema aparece rodeada de un color verde muy poco estético y la clara
desprende un aroma desagradable.
En efecto, cuando la cocción de los huevos es excesiva, las proteínas
de la clara, que contienen átomos de azufre, se descomponen; en ese pro-
ceso liberan un gas llamado sulfuro de hidrógeno que contamina la yema,
impartiéndole un color verde. ¿Hay alguna duda sobre esta explicación?
En absoluto: hasta un principiante en el estudio de la química reconoce
enseguida el olor del sulfuro de hidrógeno.
Sumergir los huevos recién cocidos en agua fría tiene la doble venta-
ja de enfriarlos y de facilitar su pelado. Cuando la cáscara se enfría se con-
trae, mientras que la masa de huevo, que permanece caliente, conserva
todo su volumen: algunas veces la cáscara se resquebraja.
Hay un fenómeno parecido que me señaló una lectora de Los Secretos
de los Pucheros, Marie Frétigny, en relación con las alubias de una fabada: al
soplar sobre ellas, la piel se resquebraja rápidamente. ¿Será también por- ·
que la alubia se mantiene ciliente, mientras que la fina piel, enfriada por el
aire, se contrae? He aconsejado a la joven «gastrónoma molecular» espe-
cialista eri alubias que haga más pruebas para conocer el fiual de la historia;
espero sus resultados que, por supuesto, les transmitiré inmediatamente.
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Cuanto más aceite se añade, máspequeñas son las gotitas. Cuando la cantidad de agua
resulta insuftdente) la emulsión se invierte: en vez de gotitas de aceite en agua, se forma
una emulsión de agua en aceite.
62
(/) La mostaza se añade para dar sabor, pero no es indispensable. El
o gran Marie-Antoine Careme, en su obra Art de la cuisine franfaise, da una
a: receta de salsa «magnonaise» que sólo contiene huevo, vinagre y aceite.
w
f-
~ En esta mezcla, la yema de huevo aporta a la vez agua, proteínas y
::;
(/) sustancias «tensioactivas)), es decir, moléculas con una parte que se une al
:::J , agua y otra que se une al aceite. En un medio acuoso como eS la yema, las
(/)
>- zonas de la molécula que se unen al agua se disponen hacia la fase acuo-
<( sa, mientras que las que se unen a la grasa, se reagrupan para evitar el
z
ü contacto con el agua. Estas esférulas de moléculas tensioactivas se lla-
o man micelas.
ü
5 La sal también participa en esta sinfonía molecular: los átomos de
sodio, positivaruente cargados (han perdido uno de sus electrones) y los
átomos de cloro, negativamente cargados (han adquirido un electrón su-
plementario) se disponen en una doble capa alrededor de las micelas, por-
que las partes hidrófilas de estas moléculas suelen estar cargadas negativa-
mente. Más concretamente, los átomos de sodio rodean la cabeza de las
moléculas tensioactivas y a continuación una capa de iones cloruro se dis-
pone alrededor de la de iones de sodio. Estas capas mantienen la repulsión
electrostática entre las micelas.
IL7 Añadir
unas gotas de aceite batiendo para incorporarlo
~ perfectamente.
ºw
a:
f--
carnes pero no con las ensaladas verdes. ¡La predicción se confirmó! Lo
único que falta es demostrar esta hipótesis.
en ¿Cómo preparar una buena ensalada que pueda acompañarse con
::;;
en vino? Enseguida nos ocuparemos de este tema, pero antes de empezar a
::i describir los ingredientes de una buena ensalada, invoquemos a nuestro
en
Maestro gastronómico, Brillat-Savarin, que escribió sobre la ensalada: «La
>-
<,'. ensalada, [...], recomiendo su consumo a todos los que confían en nú; la
z ensalada refresca sin debilitar y conforta sin irritar; suelo decir que la ensa-
¡j
o lada rejuvenece». Y además, Brillat-Savarin cuenta como la ensalada tam-
ü
bién sirve para hacerse millonario y narra la historia de un francés que se
~ enriqueció en Londres gracias a su habilidad para preparar ensaladas.
«Era lemosín y, si la memoria me es fiel, se apellidaba d'Aubignac o
d'Albignac. Aunque su pitanza se viera muy restringida por su pésima si-
tuación financiera, fue un día a comer a una de las más famosas tabernas
de Londres; era de los que piensan que se puede comer un solo plato
siempre que sea excelente. IVlientras acababa un suculento rostbeef, cinco o
seis jóvenes de buenas familias (dandies) conúan en una mesa vecina; uno
de ellos se.levantó y, acercándose, le dijo en un tono muy educado: «Señor
francés: se dice que vuestro pais se distingue en el arte de las ensaladas.
¿Seríais tan amable de honrarnos preparándonos una?». D'Albignac, tras
cierta vacilación, accedió a ello; pidió cuanto consideró necesario para ela-
borar la esperada obra maestra, puso en la tarea todo su cuidado y atención
y tuvo la fortuna de acertar. Mientras calculaba las cantidades para su rece-
ta, respondía con franqueza a las preguntas que le hacían los jóvenes sobre
su situación: les dijo que era un emigrante y confesó ruborizado que reci-
bía ayuda de la beneficencia del gobierno inglés, circunstancia que, sin duda,
autorizó a uno de los muchachos a deslizarle en la mano un billete de cinco
'libras, que él aceptó tras una ligera resistencia.
Les había dado su dirección y poco tiempo después, no se sorpren-
dió mucho cuando recibió una carta en la que se le· rogaba, muy cortés-
mente, que fuera a preparar una ensalada a una de las mejores mansiones
de Grosvenor-Square. D'Albiguac, que comenzaba a prever algunos ingre-
sos seguros, no vaciló un instante y se presentó en la casa puntualmente,
provisto de algunos nuevos condimentos que juzgó convenientes para dar
a su obra mayor perfección. Había tenido tiempo de pensar sobre el plato
que iba a elaborar; tuvo la suerte de acertar de nuevo y, esta vez, recibió una
gratificación tal que no hubiera podido rechazarla sin un grave perjuicio.
Como es de suponer, aquellos primeros jóvenes a quienes había atendido,
elogiaron hasta la exageración el mérito de la ensalada que les preparó. La
segunda ocasión fue todavía más sonada y como resultado, la reputación
d'Albignac se extendió rápidamente: se le empezó a conocer como el
67
fashionab!e sa!ad-makery, en aquel país ávido de novedades, lo más elegante (f)
de la capital del Reino Unido «se morfa» por una ensalada al estilo del ~
caballero francés: J die far zr, según la expresión utilizada. a:
<:
[!I
(/)
Désir de Nonne est un feu que dévore,
Désir d'Ang!aise est centfais pire encore1 <:
a:
~
¡Como hombre inteligente, d'Albignac aprovechó su fama; pronto (f)
tuvo iln camk*para trasladarse más deprisa a los diversos lugares de donde ~
Je llamaban y también un criado que llevaba en una caja de caoba todos los ~
ingredientes con los que había enriquecido su repertorio, tales como vina- <:
(f)
gres de diversos aromas, aceites con o sin sabor a frutas, sif*, caviar, tru- z
lJJ
fas, anchoas, ca!chup***, jugos de carne, e incluso yemas de huevo, que son
típicas de la mayonesa.
Posteriormente, hizo fabricar cajas pareddas que, convenientemen-
te equipadas, vendía a cientos. Finalmente, siguiendo con precisión y saga-
cidad en su línea de actuación, consiguió reunir una fortuna de más de
80.000 francos, que se llevó a Francia cuando llegaron tiempos mejores».
Según el <<Larousse gastronomiqueJ>) obra que no me cansaré de. reco-
mendarles que consulten con frecuencia, en esta historia tiene su origen el
nombre del «aliño francés» (French dressing) para la vinagreta, salsa típica-
mente francesa.
Además de esta lección del gran maestro, daremos Unas ideas para
preparar exquisitas ensaladas y, para empezar, vamos a caer en la tentación
de una ensalada verde con colmenillas.
1
N. de la T.: «Deseo de monja es fuego que consume, deseo de Inglés, es cien
veces peor».
*A Brillat-Savarin !e gustaba mucho incluir en sus textos palabras extranjeras.
Un «carrik» era un tipo de carruaje de enganche.
**El soui o soy, es una salsa de origen japonés que se compone de diferentes
jugos de carne, principalmente de ternera asada, con una gran cantidad de especias. Pero
«soy» significa soja en inglés, ¿sería quizá una salsa de soja?
***Mis amigos británicos dicen que el «calchup» es probablemente el ketchup.
68
(f) Ingredientes
o
rr: ✓ 1 manojo de berros
w ✓ 1 achicoria
f-
(f)
✓ 1 lechuga
~ ✓ 200 gramos de hierba de los canónigos
(f)
:i ✓ 4 tomates pequeños
(f) ✓ 5 colmenillas pequeñas lavadas (o desecadas)
>- ✓ 5 centilitros de caldo de ave
<(
z ✓ Perifollo
o ✓ Estragón
o ✓ Perejil no rizado
o
<( ✓ Aceite de oliva
_J
✓ Vinagre balsámico
✓ Sal
✓ Pimienta
✓ Mostaza
✓ 1 diente de ajo
~
Para comprender lo que significa picar las finas hierbas hay que ha- o:
ber visto trabajar a los grandes chefs. En una ocasión pude presenciar en el ~
(/)
restaurante de Joel Robuchon cómo sus dos jefes de cocina preparaban un <(
plato que debía presentarse con ajos tiernos y trufas picados. Para tro.cear o:
estos dos ingredientes, cada uno de los jefes invirtió más de cinco minutos ó':
·absol,1tamente concentrado en la ejecución de un trabajo perfecto. (/)
· Por ejemplo, para picar los ajos colocaron las puntas perfectamente
~
alineadas; a continuación cómodamente instalados y provistos de un buen
'.5
cuchillo, cortaron los tallos al tamaño más pequeño posible. Esta opera- ~
z
ción permite la máxima liberación de los aromas. No hay que olvidar que w
las finas hierbas aportan aromas naturales: en vez de añadir las moléculas
de 1m frasco, que es lo que haría un químico, utilizamos las moléculas
aromáticas contenidas en un vegetal. Estos aromas se encuentran encerra-
dos en unas pequeñas vesículas que son las células vegetales y para liberarlos,
es necesario romperlas todo lo que se pueda.
ºo:w ciento de alcohol etílico, se puede ohtener vinagre, cuya composición in-
cluye de un cinco a un veinte por ciento de ácido acético. Durante el pro-
~ ceso de ehullición, el alcohol nunca se transforma en un ácido; cuando el
~ vino viejo está ácido ¡es que está picado!
(f)
:J
(f)
Madame Saint-Ange dice que los revueltos son los platos más ex-
quisitos y delicados que se pueden preparar a base de huevos; también
advierte que necesitan mucho cuidado y atención para su buen cocinado.
Pero ¿hay en la cocina (o en algún sitio) tareas de las que uno se pueda
sentir satisfecho cuando se realizan con mediocridad? Lo que merece la
pena hacerse, hay que' hacerlo bien. En la cocina, el genio de los grandes
chefs no consiste únicamente en saber mezclar componentes para obtener
combinaciones sabrosas; la genialidad radica en conseguir el punto exacto
de cocinado en los platos. Naturalmente, ese saber hacer es fruto de la
experiencia, pero también del estudio, del conocimiento de cómo ejecutar
con precisión las operaciones culinarias. Un cocinero «revoltoso» nunca
preparará un buen revuelto.
¿Qué significa que el revuelto esté en su punto? Se trata de obtener
una masa cremosa y homogénea, en la que las yemas y las claras estén
perfectamente ligadas. En esta receta, el acompañamiento de unas gambas
realza el placer de este regalo divino.
¿Dónde interviene la ciencia? En todas las etapas de elaboración de
esta receta. Los revueltos son el típico ejemplo de un plato en el que las ideas
claras y sencillas resultan de gran ayuda para tener éxito en la preparación.
78
(fJ Ingredientes para 6 personas
o
a: Para los huevos
w
✓ 14 huevos
tii ✓ 150 gramos de mantequilla
::: ✓ 4 cucharadas de nata fresca
(fJ
:J
(fJ
El pescuezo es la parte del cuello del cerdo; es una carne barata, que
tradicionalmente se utiliza para elaborar salchichas, embutidos y otros ti-
pos de picadillos.
No escatime la sal ni la pimienta: el rollo de pichón se servirá frío y
los sabores siempre se perciben con más intensidad en los platos calientes
que en los fríos.
:5
~ Cuando la carne está «marinada», picar la ·panceta, el <l'.
~ pescuezo que queda por cortar y los higadillos y corazo- z
~es de los pichones. Añadir este picadillo al de las aves y el 'ºüI
Cerdo. Incorporar las nueces trituradas y mezclar hasta ob-
tener una masa homogénea. n.
w
o
Algunas antiguas recetas de este tipo, recomiendan el empleo de o
...!
foie-gras para ligar la carne picada. Esta sofisticación no me parece de gran ...!
Suflé de roquefort::
Ingredientes 1--
a:
✓ 80 gramos de queso roquefort o
lL
✓ 30 gramos de mantequilla w
✓ 50 gramos de harina ::J
a
✓ 6 yemas de huevo oa:
✓ 6 claras de huevo
✓ 25 centilitros de leche w
✓ Sal
o
,w
✓ U~a pizca de nuez moscada ...J
✓
lL
Una pizca de pimienta de Cayena ::J
U)
En la periferia, el ~
agua es atraída
hacia la parte su-
o
lL
perior. lJJ
:J
a
o
a:
lJJ
o
·UJ
...1
lL
:J
(/)
Claras de huevo montadas a punto de nieve con distinta intensidad de batido: poco
firmes (i"zquierda) y muy firmes (derecha).
tacto entre la preparación -que contiene el agua-y el aire (en las burbujas).
Durante el horneado, una superficie mayor permite la evaporación de más
agua, lo que hace esponjar el suflé: más burbujas, mayor superficie de in-
tercambio, o lo que es lo mismo, más vapor se forma y por lo tanto, se
obtiene un suflé más esponjado.
í--zl
Mezclar las claras a punto de nieve con la preparación
~ de roquefort.
([J
ºa:
UJ
f-
([J
pared
::,
([J
:J
([J
>- pectina
<l;
z
ü
o
ü
~
En la degradación de las paredes celulares se liberan las moléculas de pectina que hacen
gelificar la confitura.
Todos los vegetales están constituidos por celulas, que son como
unas pequeñas bolsitas que contienen las moléculas que permiten y man-
tienen la vida. Las células vegetales, a diferencia de las animales, están ro-
deadas por una pared rígida compuesta, especialmente en las manzanas,
por abundantes moléculas de pectinas. Al calentar, las pectinas se disuel-
ven en el jarabe. ¿Para qué añadimos vinagre en esta etapa? Lo veremos en
el párrafo 3.
~
son como unos largos hilos ramificados. Normalmente, los extremos de
las ramificaciones se repelen por efecto de las fuerzas eléctricas, pero, en
(9
medio ácido, los átomos de hidrógeno que éste aporta, se unen al final de l.U
las ramificaciones y neutralizan las cargas. Las moléculas de pectina ya no o
lL
se repelen entre sí y pueden unirse formando un gel en el que quedan
atrapadas las uvas, las manzanas deshechas, el azúcar (que también fija
agua) y el vinagre.
ºo:w
1-
enturbiarían el fondo y le impartirían un sabor amargo.
U)
:e; [}J Pasar el fondo por el chino, eliminar los restos sólidos y
U) desgrasar el líquido.
:::J
U)
>- Para pasar el fondo por el chino el único consejo es presionar con
<l'. fuerza sobre los ingredientes sólidos para extraer todos sus aromas. Para
z
ü desgrasar, un buen sistema consiste en poner el puchero en el arcón o en el
o congelador del refrigerador: la grasa, con menor densidad que la disolu-
ü
ción acuosa, asciende a la superficie y solidifica. Después se elimina muy
~
fácilmente.
¡Ya hemos llegado con éxito al final de la receta! Qué placer y qué o
relieves: los gradientes de textura y de sabores; los contrastes entre el foie, ü
las manzanas, las uvas duras en el agridulce; la oposición del sabor dulce de ~
las manzanas y del foie-gras por una parte y del agrio del agridulce por a:
('J
otra, armonizados por el dulce del propio agridulce... Dejemos las descrip- w'
ciones y degustemos el plato. Ya tendremos ocasión de volver a hablar o
lL
sobre esta receta.
-
..A.spic de sal;,,nón
a la pi;,,nient::a verde
Ahora preparo esta receta fría con mucho menos placer que antes,
porque estoy seguro de su éxito y sé que será la preferida de mis amigos. Su
realización es rápida y seh.cilla, no necesita ninguna operación en el último
minuto ... y les gusta mucho a los gastrónomos. Estoy un poco cansado de
ella, pero corno me han insistido tanto, se la voy a explicar.
Cada vez que sirvo este plato, me preguntan: ¿por qué se llama «áspic»,
1
r-i;] Retirar del fuego el cazo del caldo claro, añadir 10 cen-
L...:'.J tilitros de Cinzano blanco y el zumo de un limón y meter
en el refrigerador. Dejar que el otro caldo se enfríe más
lentamente, en un lugar fresco.
>-
<(
z
ü
o
ü
'.'í
fina se cocina mucho más deprisa que la más gruesa y ya está excesivamen-
te cocida, incluso correosa, cuando la parte central de la clara todavía no ha
coagulado. Si el problema no fuera más que de espesor, no sería muy grave;
pero es que además la temperatura de coagulación de las claras centrales es
unos grados superior a la temperatura de coagulación de las claras que
están en la periferia. ¿A qué se debe esta diferencia en la temperatura de
coagulación? La razón es que las dos partes de la clara no están compues- .
tas por las mismas proteínas.
Las proteínas son moléculas cuya estructura tiene una forma pareci-
da a un ovillo. Por efecto del calor las proteínas se desenrollan o despliegan
y entonces coagulan, porque ru1a vez que su estructura se ha modificado,
los átomos que inicialmente estaban unidos y se han separado por el calor,
tienden a unirse otra vez; las moléculas que están más próximas, se unen
entre sí. Simultáneamente, el agua que estaba unida a las proteínas ~a prue-
ba es que las proteínas sujetan la clara haciendo que se forme ese escalón
que hemos mencionado antes), se evapora. Debajo del huevo que se está
cocinando puede verse el vapor de agua. Por esta razón, la clara excesiva-
123
mente calentada presenta una textura correosa: el agua que conterúa y que
o
le confería una consistencia blanda, se ha perdido. ~
...J
(l
No contento con cocinar los huevos irregularmente, el cocinero ig-
...J
norante los sazona añadiendo la sal y la pimienta por toda la superficie. <(
Cree que lo mejor es asegurarse de que todo el huevo está salpimentado (f)
por igual. Éste es un doble error. La sal capta el agua de la yema y la «cuece» ~
w
dando lugar a la aparición de unas indeseables manchitas oscuras. Además, ::J
generÁ!mente se utiliza pimienta negra, sin ninguna consideración hacia la I
perfecta claridad de la yema; si estuviese repartida uniformemente, un as-
pecto agradable podría contribuir al placer gastronómico, pero el mal coci-
nero suele distribuir la pimienta sin ningún cuidado especial y presenta a
sus invitados un plato que ni siquiera resulta atractivo para la vista. ¿Exage-
ro sobre la estética culinaria? Estoy seguro de que los verdaderos
gastrónomos comparten mi opinión.
>-
<:
z r--:.7 Poner una nuez de mantequilla clarificada en una cazuelita
ü L.:.J de barro o de hierro esmaltado, cuyo diámetro no sea
o mucho mayor que el doble de un huevo, y dejar que se derrita.
ü
::í El diámetro de los platos debe ser de unos 15 centímetros como
máximo para que no se produzca el efecto de dispersión de las claras que
hemos mencionado antes. Si las claras quedan recogidas ahededor de la
yema en una capa de espesor uniforme, se cocerán de forma mucho más
regular.
¿Qué es la mantequilla clarificada? Se trata de un agradable refina-
miento cuyo enorme interés descubrirá haciendo este experimento: calien-
te la mantequilla en una pequeña sartén. El fondo se dora, crepita, después
se oscurece y luego se carboniza. Una vez observado este comportamien-
to, mientras va fregando la sartén, imaginemos que ha preparado una man-
tequilla clarificada: se derrite suavemente, no crepita y no empieza a oscu-
recerse hasta que no se calienta a temperaturas muy altas. ¿Por qué?
La mantequilla normal se carboniza porque está compuesta por
lipidos (las materias grasas), agua (aproximadamente un diez por ciento) y
caseínas, que son las proteínas procedentes de la leche. Cuando esta man-
tequilla se calienta, primero las caseínas coagulan y después se carbonizan
conforme el agua se va evaporando; el vapor es la causa de la crepitación y
de la espuma que se forma. ¿Por qué en la mantequilla clarificada no se
producen estos mismos efectos? Porque es una mantequilla en la que se
han eliminado el agua y las proteínas. Su preparación es muy sencilla.
En un cazo pequeño, mantener la mantequilla a fuego muy suave
durante unos diez minutos por lo menos. Observará cómo se va formando
una fase inferior turbia: es la caseína que ha coagulado. La capa superior,
clara y límpida, es la materia grasa purificada. Decante con cuidado el liqui-
do caliente conservando solamente la parte superior. Dejar que se enfríe:
aquí termina el trabajo.
Esta mantequilla clarificada presenta muchas ventajas para cocinar:
se derrite sin crepitar ni salpicar porque hemos eliminado el agua y tampo-
co se carboniza porque ya no contiene caseínas. Además ¡so]?orta sin des-
componerse calentamientos de hasta 190 grados! Cuando utilice esta man-
125
tequilla para freír, la fritura tendrá un sabor muy superior al que obtendría o
con aceite. Por si fuera poco, la mantequilla clarificada, de la que se han ti:.J
eliminado las proteínas y muchas impurezas, se conserva mucho mejor D.
que la mantequilla normal. Si se toma la molestia de preparar con antela- .J
<1'.
ción una gran .cantidad de mantequilla clarificada, consérvela en botes de (f)
~
mermelada co11 cierres herméticos o en frascos con tapa y junta de goma.
¿Por qué tienen que ser herméticos los cierres? Por que si los envases no
::J
están werfectamente cerrados, la mantequilla captaría todos los olores del I
refrigáador.
Como conclusión antes de volver con nuestra receta: ¿Por qué los
grandes chefs utilizan mantequilla clarificada para preparar los huevos al
plato? Porque no se pondrá negra y preservará el genuino sabor de los
huevos.
i?l Untar los platos para los huevos con la mantequilla de-
L=.J rretida y dejar que se enfríe. A continuación, abrir un
huevo en cada una de las tarteritas.
¿Por qué no hay que salar la yema? Porque en los puntos donde
cayera, la sal absorbería el agua haciendo coagular las proteínas y dando
lugar a la aparición de pequefios puntos oscuros en la superficie de la yema.
¿Por qué solamente hay que salar la parte de la clara que está más
cerca de la yema y no la que se encuentra en zona más externa? Porque
como ya hemos dicho, las proteínas más periféricas coagulan a una tempe-
ratura menor que las proteínas que están en el centro; la sal facilita la coa-
gulación de las proteínas porque favorece el desplegamiento de su estruc-
tura enrollada y así después las proteínas pueden volverse a unir más
fácilmente. Al afiadir sal a las proteínas que coagulan con menos facilidad,
se igualan las temperaturas de cocción de las dos partes de la clara y se
consigue un cocinado más uniforme.
Por último, ¿por qué se utiliza pimienta blanca? Porque así no sem-
bramos los huevos de pequeños puntos negros y los mantenemos limpios
y claros como un espejo ¡lea el siguiente párrafo!
126
U)
JA7 Dejar reposar los huevos salados durante un minuto y a
o L2J continuación cocinarlos en el horno a temperatura muy
ir suave. Servir en el momento que la clara se ponga opaca.
w
f-
(/)
Cocinado en el horno, el huevo tendrá una consistencia homogé-
~
U)
nea: será lo bastante sólido para poder comerse con el tenedor, pero no
:J perderá su cremosidad.
U)
>- Como los huevos se han horneado, la yema aparece recubierta con
<(
z un suave y ligero velo blanco: por eso en el comentario anterior evocam.os
ü un espejo. Como resultado final se obtiene el efecto recomendado por
o Madame Saint-Ange: "La yema todavía líquida, aunque espesa, recubierta
ü
de un fino velo blanco en el que se refleja la luz, razón por la que este plato
::í se llamaba antiguamente «huevos al espejo»".
1\!Iousse .de janzón
al oport:o
"t1~f'.(~,,.,,,.t,
._,,,= J, .,\ ~ ,b, ,.-et· ,
-~ f'l-" r
~ ' • .. ¿
J,
gelatina -/
""1 ji ~,, '(
,.Jxw .?""
. ,.,,;, 'f~
'
Una farsa muy fina así preparada está compuesta esencialmente por
proteínas. Actuará como «cemento» porque durante el cocinado estas pro-
teínas coagulan.
l'iil Retirar
la galantina de fo brasera, ponerla en un escu-
~ rridor y sumergirlo en agua fría en el fregadero. Cubrir
con una tabla sobre la que se colocan objetos pesados. Dejar
en reposo durante una noche.
ºa:
w
I-
(es suficiente uno por persona)
✓ 500 gramos de harina
r,') ✓ 4 huevos (para la pasta)
::, ✓ 6 huevos
(fJ ✓ 200 gramos de queso parmesano añejo
:::i
(fJ ✓ Sal
>- ✓ Pimienta
0: ✓ Salvia (abundante)
z ✓ 1 cucharada de aceite de oliva
ü
o
ü
:5
r17 Preparar la pasta para los raviolis. Poner sobre una ta-
~ bla 500 gramos de harina de trigo (duro si es posible),
formar un hoyo en el centro e introducir cuatro huevos ente-
ros, una cucharada de aceite de oliva, sal y unas gotas de
agua. Trabajar la pasta hasta que no se pegue en las manos y
hacer una bola. Cubrirla con un paño y dejar en reposo durante
media hora.
¿Qué podemos hacer con las claras que sobran? Hay pocas cosas
más molestas en una cocina que dejar las claras en el refrigerador, esperan-
do utilizarlas en otra ocasión que generalmente no llega nunca; después de
unos cuantos días acaban en la basura y así no hay quien cuadre las cuentas
de la economía doméstica. ¿No es mejor tener siempre a mano en la cocina
una serie de recetas para aprovechar las claras de huevo? Les voy a sugerir
algunas posibilidades:
- Los merengues: se baten las claras a punto de nieve, se añade
azúcar refinada y se cocinan en el horno suave durante bastante tiempo.
Por ejemplo, hay pasteles que se preparan a partir de discos de merengue al
praliné, separados por capas de distintas cremas.
- Las tejas: se mezclan 30 gramos de mantequilla fundida, 200 gra-
mos de praliné y tres claras de huevo; después se añaden 30 gramos de
harina y se deja reposar por lo menos durante una hora. Se cortan círculos
muy delgados y se colocan sobre una placa de horno forrada con una hoja
de papel sulfurizado engrasado. Hornear a 180 grados hasta que la masa
tome color. Vigilar atentamente las tejas y nada más sacarlas del horno,
darles la forma adecuada con una botella, un rodillo de pastelería o cual-
quier otro objeto que sirva para ello.
- Una muselina de salmón: mezclar la carne de salmón con jerez
previamente calentado y en donde se ha disuelto gelatina, zumo de limón
y un poco de mantequilla fundida; a continuación incorporar,nata monta-
da y las claras de huevo batidas a punto de nieve. Hornear a una tempera-
tura de 150 grados durante un tiempo que depende de la masa (aproxima-
damente 20 minutos).
ºa:w agua, pero se disuelven muy bien en las grasas. Al triturar las hojas de
salvia, se rompen las células vegetales liberándose las moléculas aromáti-
tñ cas que se disuelven en la mantequilla fundida. Este mismo principio se
~ puede aplicar a otras preparaciones: ¿por qué no extraer en aceite o en
(/) mantequilla los aromas del tomillo, del laurel, de las especias en polvo?
:J
(/) ¿por qué no orquestar la sucesión de dos extracciones complementarias,
>- primero en agua, en frío o en caliente y despu_és en una grasa, sea aceite
<l'.
z o mantequilla?
ü
o
ü
rA7 Una vez preparada la mantequilla a la salvia, cocer los
~ ~ raviolis en agua hirviendo con sal durante tres minutos.
Repartirlos en platos calientes y añadir una cucharilla de man-
tequilla aromatizada a la salvia. Servir inmediatamente.
>-
<,:
z
ü
o
ü
~
149
Ingredientes para 6 personas
~
::J
✓ 6 trufas cepilladas a:
✓ 4 huevos r
✓ Sal w
✓ Pimienta
o
..J
✓ 200 gramos de harina w
✓ 200 gramos de mantequilla r
(/)
✓ 10 centilitros de agua ~
2
(f)
::J 177 Girar el cuadrado un cuarto de vuelta y extender otra
(f)
~ vez formando un nuevo rectángulo. Doblar en tres. Man-
>-
<
z
tener en el refrigerador durante un cuarto de hora.
ü
o Se deja reposar para que se enfrien tanto la mantequilla como la
ü
masa. La pasta aprovecha este reposo: sus proteínas, que se han estirado
:5 mucho, podrían después encoger la masa (podrían contraerse); durante el
reposo, las proteínas vuelven a su configuración original en forma de ovi-
llo y así la pasta final mantendrá la forma deseada.
>-<(
z
ü
o
ü
<(
..J
--
--
L,,,os pesca.dos
y
crust:á.ceos
--
--
Lucio con salsa bearnesa
Truchas esca!fadas a la mantequilla blanca
--
--
Langosta a la infusión de verduras
Salmón al cocinado desigual .-.
Muselina de trucha
Quenelles de trucha
-- _
st•.·
,.' X
--
--
--
--
--
---
p¡¡{:!¾"~k
~~
Lucio
con salsa bearnesa
* N. de la T.: El cocinado «au bleu» es la cocción del pescado vivo en un caldo corto
de agua y vinagre.
156
U) Ingredientes
o
a: ✓ 1 lucio
w ✓ 4 cucharadas de un buen vinagre
f--
U) ✓ 4 cucharadas de vino blanco
2 ✓ 15 gramos de chalotas
U) ✓ 1 ramita de estragón
:J ✓ 2 pequeños ramitos de perifollo
U)
✓ 1 pizca de pimienta molida (granos de pimienta blanca aplastados
>- en un cazo con la ayuda de otro cazo de diámetro más pequeño)
<(
z ✓ 2 yemas de huevo
ü ✓ 1 pizca de harina
o ✓ 200 gramos de mantequilla
ü
✓ El zumo de un limón
:5
117 Lavar el pescado, limpiarlo cuidadosamente y cortar las
~ aletas y la cola. Una vez vaciado, hacer en cada lado
unas incisiones profundas de un centímetro, separadas entre sí
unos dos centímetros. Poner el pescado en una fuente honda y
salpimentar. Rociarlo con un chorrito de aceite de oliva y el
zumo de un limón. Esparcir las cebollas en rodajas finas, el
perejil muy menudo, el tomillo y una hoja de laurel picada.
Mantener a temperatura fresca durante una media hora; dar
la vuelta al pescado y marinar durante otra media hora.
La propiedad, es el robo.
Pierre-] oseph Proudhon
Tengo que confesarlo: le quité la comida a, uno de mis hijos ... pero
fue por una buena causa.
Estábamos un día en el restaurante del cocinero-poeta de Laguiole,
en la cima de su montaña de hierbas, en el comedor de Michel Bras quien,
mucho antes de que se pusieran de moda, se especializó en infusiones,
decocciones, maceraciones ... Yo encargué un menú «Évasion et Terre» y
para mis hijos pedimos el menú ,cinfantih: salmón, solomillo de ternera de
Aubrac, puré de patatas con tomate y ajo y de postre, fresas del bosque.
¡Ah, que salmón!, con ese color rosa tan delicado y atractivo ... No
pude resistir la tentación y blandiendo mi tenedor de gastrónomo, lo pro-
bé. ¿Cómo estaba cocinado? De forma tan suave que se presentía la jugo-
sidad conservada en la carne. No era uno de esos pescados insuficiente-
162
(/) mente cocidos con los que durante un tiempo nos ha estado castigando lo
(fJ do mis pruebas con el verdadero «modelo de langostai>. La receta que aho-
>-
<(
z
ü
o
ü
'.'í
169
~
Cf)
117 Preparar la infusión de verduras en un puchero grande y o
~ de paredes muy altas. Poner en muchos litros de agua (9
las zanahorias cortadas en daditos pequeños, las cebollas, el z
apio, el hinojo y los puerros picados. Añadir también el tallo :'í
del hinojo, el tomillo y una cucharilla colmada de sal gruesa.
Ta par y cocer a fuego muy lento durante tres horas.
>-
<(
z !Al Sobre una tabla colocada encima de una bandeja de
ü L_2J horno (para recuperar los líquidos que escurren), partir
o las langostas vivas en dos mitades en sentido longitudinal,
ü comenzando a cortar con el cuchillo desde la cabeza, Incorpo-
'.) rar el líquido recuperado al concentrado de verduras, Retirar
la tabla y colocar en la bandeja del horno las mitades de cada
langosta una junto a otra. Asarlas en el horno previamente
calentado a 250 grados, durante aproximadamente un cuarto
de hora,
>-
<: r::;i Incorporar al fondo de pescado 10 centilitros de nata,
z
ü ~ batiendo con fuerza. Recubrir los filetes con esta salsa.
o
ü
¡Otra emulsión más!
'.'í
También se puede sustituir el recubrimiento de verduras por una
capa de algas comestibles: wakame, porfire, cabellos de mar...
__J_\(Cuselina de t:rucha
CTJ ducirlas
Eliminar los rabillos de las espinacas y lavarlas. Intro-
en agua salada hirviendo. Cuando el agua vuelva
a hervir, sacar las espinacas, escurrirlas y rehogarlas enmante-
quilla a fuego muy lento hasta la completa evaporación de los
restos de agua.
¿Cómo se sala el agua? ¿Hay que esperar a añadir la sal hasta que el
agua esté hirviendo, como recomiendan algunos chefs? El argumento de
estos cocineros es que la sal prolonga el tiempo necesario para que el agua
empiece a hervir. Es una razón lógica, porque el agua salada tiene un punto
de ebullición más alto que el agua pura y además, la masa total que hay que
calentar es mayor. Así que ... Sin embargo, para demostrar la inutilidad de
este consejo, realicé el siguiente experimento: llené dos vasos- con 25
centilitros de agua del grifo y esperé hasta que su temperatura se equilibró
con la ambiental. Después, puse el agua de uno de los vasos en un cazo
pequeño y .Ja- calenté en una placa eléctrica- a intensidad máxima; medí con-
tinuamente la temperatura hasta que el agua empezó a hervir, ebullición
que comenzó a los cuatro minutos aproximadamente. Vacié el cazo, lo lavé
y esperé hasta que se enfrió la placa. Entonces vertí el contenido del segun-
do vaso en el mismo .cazo y añadí en el agua 50 gramos de sal (es una
181
concentración salina muy alta, pero pensé que así sería más fácil compro- <{
bar su posible efecto). Calenté el cazo en la misma placa y a la misma I
ü
potencia y volví a medir la temperatura hasta la ebullición. El agua tardó en ::J
a:
empezar a hervir el mismo tiempo, con una diferencia de unos 1O segun- f-
dos según las pruebas (repetí el experimento ante los cocineros que parti- w
o
cipaban en los cursos de formación de la Fundación Auguste Escoffier y <{
en esa ocasión observamos que en el cazo de agua salada comenzó antes la z
::;
ebullición que en el otro). ¿Cuál es la conclusión? Pues que si el efecto de w
(/J
la sal n6 es perceptible con una concentración tan elevada, con las cantida- ::J
des que habitualmente se utilizan en la cocina, la sal no prolongará el tiem- 2
po que tarda el agua en hervir.
Para el cocinado de las espinacas, les recomiendo una cocción rápi-
da que permite conservar el buen sabor de la verdura. 12sta es una forma
de cocinarlas, pero no olvido de que hay otra posibilidad, magistralmente
descrita por Brillat-Savarin: «Es también la presencia del osmazomo lo que
empujó al canónigo Chevrier a inventar sus famosas «ollas cerradas con
llave»; el mismo cura a quien le servían las espinacas los viernes solamente
cuando habían sido cocidas el domingo anterior y recalentadas cada día
con un poco de mantequilla fresca».
>-
<(
z
ü
o
ü
::í
Quenelles de 1::rucha
* N. de la T.: Quenelle es una palabra que procede de la voz alemana knOdel, que
quiere decir bola. En términos culinarios significa una pasta con forma de albóndiga.
184
~
poramos un emulsionante de sabor neutro: la gelatina. En las recetas clási-
cas, esta gelatina se extrae, por ejemplo, a partir de huesos de vaca, prepa- (/)
.J
rando previamente un fondo; pero la médula nos espera con impaciencia. <{
Puesto que la salsa tiene que contener gelatina, añadámosla. El producto w
o
que se adquiere en hojas es químicamente igual al obtenido a partir de los
huesos. Aunque el sabor de un foñdo de vaca es bastante neutro, como
[(
desean¡ios el verdadero y genuino sabor de nuestro plato ¿por qué no sus- o
z
. tituir e) fondo por gelatina pura? Resulta mucho más fácil.
t5
z
Una vez que tenemos los dos primeros ingredientes de la emulsión a.
(el agua aportada por el vino pinot y el emulsionante, que es la gelatina), '
.J
añadimos la materia grasa poco a poco y batiendo intensamente con el fin <{
de dividirla y así dar cuerpo a la salsa. Esta salsa es una emulsión parecida >-w
a la mayonesa, pero caliente. Recuerde los buenos principios evocados ::J
aJ
durante la preparación de los huevos duros: la firmeza de la salsa depende- w
rá de las proporciones de agua y de grasa. Para obtener una salsa espesa, es o
preferible partir de un jugo muy reducido. No olvide tampoco que la con- o
.J
.J
sistencia de la salsa también depende de la fuerza con la que se bate.
¿
o
.J
o
177 Servir rápidamente la carne en platos muy calientes. (/)
~ Espolvorear con sal gruesa y pimienta molida. Repartir
la médula cortada en pequeños trocitos y napar con la salsa.
Acompañar con las rodajas de patata dispuestas en forma de
hélice alrededor del solomillo.
_l\,(Carinada de pollo
aro,,,-nat:izada
al rábano blanco
Ya sabernos que las claras a punto de nieve son una espuma con
innumerables burbujas de aire separadas por una solución acuosa en que
están disueltas las proteínas. Esta espuma se añade a la masa que hemos
preparado antes: la mezcla se hace físico-qtúmicarnentc todavía más com-
pleja.
En el transcurso de la cocción, observe la masa a través del cristal de
la puerta del horno. La pasta debe subir. El horneado termina cuando se
alcanza el máximo volumen y la superficie ha tomado color.
>-
<l'.
z Existen dos corrientes de opinión discrepantes sobre la utilidad de
ü
o bardar la carne con lonchas de tocino. Después volveremos sobre estas
ü teorías (ver la receta de las codornices asadas).
~
>- actualmente se consideran los mejores cocineros de Francia: cada uno pre-
,,: para sus patatas fritas con la variedad que más le gusta, e incluso algunos
z
ü reconocen que es un aspecto que no tienen en cuenta. En el Instituto de la
o Patata se ha estudiado la aptitud para la fritura de distintas variedades, pero
ü
con el objetivo de preparar patatas fritas precocinadas, que es un tema que
~ no nos atañe en este libro. Por otra parte, en sus investigaciones tienen
mucha importancia los imperativos agronómicos y la gastronomía tarupo-
co tiene nada que ver con este tipo de consideraciones. Utilice cualquiera
de las patatas que se encuentran en el mercado hasta que sepamos cuál es
la mejor para freír en base a unos conocimientos sólidos, racionales y defi-
nitivos.
>-
.,;
z
ü
o
ü
~
Codornices asadas
con puré de pat:at:a
Las codornices son unas aves a las que hasta hace poco tiempo se
les atribuían propiedades afrodisíacas: tener una codorniz en una casa
hubiera sido peligroso. Las codornices de monte no se encuentran fácil-
mente pero las de las p9'llerías o carnicerías también tienen una carne y
un aroma muy delicados. Esto explica el reiterado consejo de que nunca
hay que dejar estas aves en contacto con el líquido de cocinado: perde-
rían todo su aroma. En esta receta no hay razones para preocuparse por
la pérdida del sutil perfume de las codornices. Se servirán, por ejemplo,
con un puré de patatas.
¿Qué aspectos científico-culinarios descubriremos en esta ocasión?
El papel que desempeña la reacción de Maillard en el asado y los misterios
del puré de patatas.
214
(/) Ingredientes para 6 personas
o ✓ 6 codornices
a:
w
1- Para el puré
(/)
✓ 1 kilo de patatas (.Toel Robuchon recomienda las variedades Ratte
2
(/) o BF15)
:i ✓ 25 centilitros de leche entera
(/)
✓ 200 gramos de mantequilla sin sal
)-
✓ Sal
<
z
ü
o 117 Embroquetar las codornices, bardarlas y envolverlas en
ü
L.:.J hojas de vid; si no se dispone de estas hojas, se pueden
~ sustituir por papel blanco.
ºa:w culinarios.
~
2 ~ Lavar las patatas sin pelar. Colocarlas en una cacerola
(f) ~ grande y cubrirlas con agua. Salar (10 gramos de sal
::i por litro de agua). Cocer con el recipiente cerrado a fuego
(f)
medio durante 25 minutos.
>-
<l;
z Una patata está compuesta por millones de células que contienen
ü
o gránulos de almidón. Cuando estos granos se calientan absorben el agua
ü y se hinchan. El almidón forma un engrudo (un gel) que rellena las célu-
:5 las. Mi amigo Jeffrey Steingarten, crítico gastronómico de la revista Vogue
en Nueva York, escribió que cuando las patatas no están bien cocidas, las
células permanecen .fuertemente unidas entre sí. En esas condiciones, al
machacar las patatas, las células se rompen en vez de separarse y el gel de
almidón sale al exterior: las-patatas resultan correosas. Por el conttario, si
las patatas están bien cocidas, el «cemento» entre las células se degrada y
pueden separarse sin romperse. No obstante, la cocción no debe prolon-
garse en exceso: las células se debilitarían demasiado y el gel de almidón
se escaparía al agua de cocción antes de triturar las patatas para hacer el
puré.
¿Qué pensar sobre esta teoría? Es interesante y merece alt,JUI10s ex-
perimentos de confirmación que demostrarían que la descripción no es
muy exacta.
¿Qué puede añadir aquí el químico? Nada más que desearles bnen
provecho.
G-uiso de faisán
con past:afresca
ºa:w te para matar los microorganismos que pudieran haber colonizado el apa-
rato digestivo del animal. También se dice que durante el faisandaje, el jugo
1- de las plumas es reabsorbido a través de la caña y difunde por la carne
(!J
::; impartiéndole un aroma característico (¿no podríamos comprobar esta teoría
(!J inyectando un colorante en las plumas y observando si migra hacia el inte-
:i
(!J rior de la carne?). Sin embargo el I.arousse gastronomique dice que los anima-
>- les de granja no deben faisandarse porque «se corre el riesgo de que su
<
z carne se parezca a la de pollo». ¿A quién creer?
ü
o Por último les cuento una maledicencia, que espero sea una calum-
ü nia, según la cual Brillat-Savarin asistía a las sesiones de la Corte de Casa-
:5 ción llevando los faisanes en los bolsillos de su toga de magistrado para
mantenerlos bien calientes y que su faisandaje fuese mejor; dicen que el
olor que desprendía molestaba a todos sus colegas. Dudo mucho que el
delicado Profesor, como él se autodenomina en su inmortal obra, hiciera
tales excentricidades; él, que tanto tiempo estuvo indeciso hasta que publi-
có su libro. Lo cierto es que muchos celosos se han dedicado a caricaturi-
zar su pasión gastronómica.
229
Ingredientes para 4 personas <(
ü
✓ 2 faisanes (/)
✓ 2 rebanadas gruesas de pan de hogaza w
rr
lL
Para la salsa
✓
~
20 gramos de harina (/)
✓ 20 gramos de mantequilla if
✓ 4 decilitros de caldo o de fondo de ternera z
✓ 1 zanahoria o
✓
ü
1 cebolla
✓ 1 chalota
z
,<(
✓ 4 champiñones (/)
✓ 1 rama de tomillo ~
✓ 1 hoja de laurel w
✓ 1 hoja de perejil o
✓ 250 centilitros de vino blanco o(/)
✓ 10 centilitros de coñac
:J
✓ 50 gramos de mantequilla ('.)
✓ 1 cucharada de aceite de oliva
Para las pastas frescas
✓ 250 gramos de harina
✓ 1 pizca de sal
✓ 2 huevos
✓ 1 cucharada de aceite de oliva
Saltear hasta que toda el agua que sale de los champiñones se eva-
pore.
En esta etapa no hay que cocinar por completo los faisanes porque
todavía se hornearán antes de servirlos con su salsa; es entonces cuando
terminarán de cocinarse. Además, durante los tiempos de espera, la coc-
ción no se detiene y la carne se sigue ablandando. Quien- no tenga especia-
les dotes como asador, que calcule unos 20 minutos de cocinado por libra
de peso.
Para asar los faisanes, se deben seguir las mismas instrucciones da-
das para el asado de las codorcices: envolverlos con el tocino y el papel,
embrochados delante del fuego y no sobre el mismo, colocar una grasera
debajo de las aves para recoger el jugo que escurre durante el asado... Reti-
rar la grasa y reservarla en un cuenco pequeño.
!
IJ!D Formar la pasta y cocerla. z
o
ü
Resulta muy útil disponer de una máquina para hacer hojas muy
z
•<(
(/)
finas de pasta y cortarla en espaguetis u otras formas distintas. Se cuecen
solamente durante cuatro minutos en agua hirviendo salada. r
w
o
o
(/)
¡:¡-:;-i Cinco minutos antes de servir el plato, verter la mitad
~ de la salsa clarificada sobre los trozos de faisán con- ::J
('.I
servados en la sartén. Ponerla en el horno precalentado a 80
grados.
l1ii7
Poner los tostones de pan en la fuente de servir y colo-
~ car los trozos de faisán napados con la salsa. Acotnpa-
ñar con la pasta bien escurrida.
Braseado de conejo
con t:ort:it:as
de pat:at:a
El gran plato del gran país de la gran cocina, según el gran Careme,
es el braseado. En este plato rey, todo gira en función de la carne que se
cocina: se le dispensan mil cuidados, se rodea de mil ingredientes para
darle un sabor inigualable. Quienes pretendan ahorrar, será mejor que ol-
viden esta receta: hacen falta el doble de los ingredientes normales. Más
aún, el braseado es un guiso que exige una cocción durante un tiempo muy
largo. Para compensar, la carne braseada es de una terneza incomparable y
sus aromas son de una extraordinaria sutileza.
¿Qué vamos a descubrir en este plato? Uno de principios más im-
portantes del cocinado de la carne.
236
(/) Ingredientes
o
ir Para el braseado
w
~ ✓ 1 conejo limpio de 1 kilo
✓ 1 loncha de jamón
;;;;
✓ 2 zanahorias grandes
(/)
:J ✓ 3 cebollas
(/) ✓ 1 ramita de tomillo
>- ✓ 1 hoja de laurel
<: ✓ 3 lonchas de tocino de un centímetro de grosor
z
ü ✓ 1/2 botella de vino blanco (un borgoña resulta muy adecuado)
o ✓ 1 diente de ajo
ü ✓ 10 gramos de harina
'.:i ✓ 5 centilitros de coñac
✓ 25 gramos de mantequilla
✓ Sal
✓ Pimienta
Para las tortitas de patata
✓ 2 patatas grandes por persona
177 A fuego muy lento, mezclar bien el jugo del cocinado del
~ conejo con el roux y dejar cocer durante una hora,
espumando periódicamente.
Se dice que hay que añadir la pimienta a la salsa ocho minutos antes
de servirla porque si se añade con anterioridad, le comunica un sabor amar-
go. Consultar la receta de los hojaldres de ostras (página 38).
~
r:t'nl Calentar en una sartén un litro de aceite, salar las tor- ~
~ titas y freírlas dándoles la vuelta a media cocción, has- ~
t<l que estén bien crujientes. z
o
ü
El aceite tiene que estar muy caliente para rehogar las pat,~tas y for- o
-,
mar rápidamente una costra superficial impermeable. La temperatura de w
fritura más adecuada para este tipo de corte de patatas es de aproximada- z
o
mente 160 grados. En esta operación se consiguen dos efectos simultá- ü
neos: el calor forma la costra crujiente al mismo tiempo que cocina el w
o
interior de las tortitas de patata. ¿Por qué no recomendamos dos frituras o
consecutivas, como en el caso de las patatas fritas? Porque las patatas con o<(
las que hemos formado las tortitas están cortadas tan finas que se cocinan w
Cf)
en su interior a la vez que se forma la corteza. <(
rr
Ol
El civet es uno de los sabrosos guisos caseros que s_e suele reservar
para el cocinado de las liebres. Estos animales no son fáciles de encontrar
en los mercados urbanos,. pero esto no es razón suficiente para privarse de
este delicioso plato: prepárelo con un conejo y con sangre que tendrá que
encargar a su carnicero (avísele con unos días de antelación).
¿Qué descubrimiento físico-químico acompaña a este guiso? La li-
gazón con sangre de una salsa.
242
([) Ingredientes para 6-8 personas
ºo:w
1-
✓ Un conejo grande de 2 a 2,5 kilos
✓ 1 bol de sangre
~
¿ Para la marinada
([)
✓ 3 cucharadas de aceite de oliva
:J
((J ✓ 5 cucharadas de coñac
>- ✓ 1 cebolla grande
<( ✓
z 3 chalotas
✓ 1 rama de perejil
ü
o ✓ 1 hoja de laurel
ü ✓ 1 ramita de tomillo
'.S ✓ 1 diente de ajo
Para la guarnición
✓ 250 gramos de tocino de cerdo
✓ 20 cebollas blancas pequeñas
✓ 250 gramos de champiñones
✓ 2 rebanadas gruesas de pan de hogaza (para los tostones)
Para la salsa
✓ 50 gramos de mantequilla
✓ 2 cebollas
✓ 50 gramos de harina
✓ 1 litro de un buen vino tinto de Borgoña
✓ 2 decilitros de caldo
✓ 1 diente de ajo
✓ Perejil
✓ Laurel
✓ 1O gramos de sal
✓ Pimienta
Una vez extraída toda la sustancia de las verduras y las especies, las
eliminamos para obtener una salsa fina y clara.
245
rol Cortar el tallo de los champiñones, lavarlos y partirlos
o
~ en dos o en cuatro trozos según su tamaño. Añadirlos al -,
guiso. Dejar que vuelva a hervir y cocer a fuego lento durante w
z
20 minutos. o
ü
w
El cocinado de los champiñones en la salsa conserva todos sus aro- o
mas; la salsa se Enriquece mientras los champiñones se cuecen. 1-
w
>
ü
ITn7 Preparar una mantequilla clarificada derritiendo lenta-
~ mente la mantequilla en un cazo pequeño: el suero queda
en el fondo y se forma una «piel» en la superficie. Eliminar la
piel y el suero. En esta mantequilla clarificada freír los tostones
de pan. Utilizar una sartén bastante grande para que todos los
tostones estén en contacto directo con el fondo. Cortar trozos
de pan de hogaza (daditos de un centímetro de lado) y añadir-
los a la mantequilla caliente removiendo con una cuchara de
madera. El pan tiene que quedar con un color dorado claro y la
mantequilla no debe ponerse negra.
Así no se reblandecen.
Para· preparar esta ligazón con sangie, rec:uerde Jo que sabemos so-
bre la ligazón con huevo: simplemente se incorpora el elemento de traba-
zón (el huevo, o en este caso, la sangre), cuyas proteínas, al coagular por
efecto del calor, espesan la disolución. Añadir una pizca de harina para
evitar la formación de grumos y remover durante el calentamiento hasta
que la salsa espese.
246
(J)
Si no ha podido conseguir sangre, emplee el hígado del conejo mez-
o clado con vino tinto. Conserve esta ligazón e incorpórela en el momento
o: de servir, sin hervir, porque la salsa formaría muchos grumos.
w
~
2
(J) ¡-:¡-;;-] En el momento de servir, retirar la cacerola del fuego y
::, ~ eliminar la grasa que asciende a la superficie con una
(J)
cuchara sopera. Colocar los trozos de conejo y la guarnición en
>- una fuente.
<1'.
z
ü
o
ü l1A7 En un cazo pequeño, batir la salsa con un batidor de va-
~ ~ rillas durante aproximadamente tres minutos, calentan-
do intensamente. Verterla sobre los trozos de carne.
La fruslería, la ciencia,
las quimeras, la nada) todo es bueno;yo mantengo
que todo es necesario para el disfrute:
es un jardín donde Fiara esparce sus bienes;
sobre diferentes flores la abeja se posa,
y elabora miel de cualquier cosa.
Jean de La Fontaine, Discours d Nladame de La S abliere
¿Por qué hacemos esta operación? Porque después vamos a freír las
berenjenas y sin esta precaución, lo que obtendremos serán esponjas de
aceite. ¿Cómo extraer el agua? Leí en un libro de cocina una receta en la
que las berenjenas se rallaban y se secaban; el autor aconsejaba ponerlas
con sal durante una hora. ¿Por qué una hora? Cuando leí este consejo, me
lo pregunté y decidí comprobarlo, ni remotamente sospechaba que sería
una aventura internacional. Les contaré.
receta del asado de buey, página 210). También la cocción de las patatas en o
.J
agua es larga; fo siento, pero no puedo hacer nada al respecto. ¡::
(l)
w
.J
.,:
í""""ji7 Retirar la carne de la cacerola y conservarla caliente.
L..2..1 Reducir o
la marinada a la mitad. A continuación hacer la o
ligazón con un roux preparado con 30 gramos de harina y 20 a:
w
gramos de mantequilla. ü
w
o
Unos buenos viejos principios para una antigua receta. No abuse de o
la harina para ligar la salsa. Para aligerar el plato, si se puede, es mejor o
.,:
reducir un poco más la marinada. (l)
.,:
:var. <t
<t
,z
Esta fruta servirá para acompañar el plato. a.
z
o
ü
r?7 Centrifugar la pulpa de la segunda piña o exprimirla pa- o
L...=..J ra recuperar su zumo.
o
a:
w
ü
El zumo contiene las enzimas proteolíticas que actuarán ablandan- w
do la carne de cerdo. El efecto es espectacular: un escuadrón de la armada
o
o
inglesa durante la segunda guerra mundial en Asia, se guareció en la selva y o
<t
finalmente terminó en una plantación de piñas, disponiendo <Jce esta fruta (J)
como único sustento. Al cabo de unas semanas, los soldados empezaron a <t
perder los dientes porque las enzimas del zumo de piña atacalpn sus en-
cías.
ivlousse de limón
Las tres hojas de chocolate
Mousse helada de guindas
--
k
'
w!l!'.',"Eli
~-,,,,~i
,,,·-,
'º '.
'
Tarta de ruibarbo
Hojaldres de albaricoques
Tarta merengada de limón
Melocotones al sabayón de gewurtztraminer
Sorbete de melocotón
..
.J~-~
Eiili1
..·.· ·. ·.,'.~:¡\¡¡¡¡m¡..·.•
Isla flotante
' «Bolsitas)> de manzana a la canela
- Fondant de naranja
Tarta selva-negra
Carlota de frambuesas .,.
Magdalenas con miely limón
Confitura de moras ·
--
••
--
--
--
~
--
l\.(Cousse de li-;-n6n
ºa:w deseamos cocinar, necesitaremos mezclar una base viscosa con el limón; o
sea que nos hará falta limón.
~ Hasta el momento, tenemos el siguiente esquema de elaboración: en
::; primer lugar prepararemos una crema de limón a la que incorporaremos
(fJ
:i las claras batidas a punto de nieve y la nata montada.
(fJ
>- Es obvio que nos hace falta una crema de limón ¿cómo la cocina-
<l;
z mos? Lo más importante es que sea muy espesa para obtener una espuma
¡j muy estable y que no se deshaga. Las claras batidas no se mantienen duran-
o te mucho tiempo a punto de nieve porque el agua, que constituye una
ü
película líquida entre las burbujas de aire, tiende a descender debido a su
~
peso. Por la ruisma razón se obtienen mejores claras a punto de nieve
partiendo de huevos más viejos que a partir de huevos muy frescos: como
los huevos menos frescos han perdido una parte del agua por evaporación
a través de la cáscara, sus claras son más viscosas que las de los huevos
frescos, es decir, son disoluciones de proteínas más concentradas; las bur-
bujas de aire que se incorporan en las disoluciones viscosas son más esta-
bles porque el agua de las paredes que separan las burbujas de aire, escurre
con mayor dificultad.
¿Cómo preparar una crema de limón espesa? Sabemos que en la
cocina los huevos son unos espesantes perfectos porque coagulan cuando
se calientan. Por lo tanto, nuestra crema de limón contendrá huevos.
Por otra parte, pretendemos obtener una preparación dulce y para
contrarrestar la acidez del zumo de limón, la crema debe contener azúcar.
Ya tenemos la base de la receta: para la preparación de la crema de
limón, batiremos las yemas de huevo ·con azúcar.
¿Cómo y para qué batimos? Porque al batir las yemas con el azúcar
se introducen millones de burbujas de aire que esponjan la crema. Es im-
prescindible batir enérgicamente hasta que la mezda adquiera un color
blanquecino que indica la presencia de burbujas de aire. Para esta opera-
ción emplearemos el utensilio culinario por excelencia para introducir bur-
bujas de aire: el batidor de varillas.
A esta base añadiremos un líquido, igual que para preparar un
sabayón. ¿Qué tipo de líquido? Como el limón es bastante ácido, necesita-
mos suavizar un poco la crema. Hace falta leche. Procederemos de la si-
guiente forma: agregarnos un vaso de leche a la mezcla de las yemas con el
azúcar y después calentamos el cazo muy lentamente, sin parar de batir
con fuerza.
Haciendo esta operación, llega un momento en el que la crema ... se
corta.
263
Es entonces cuando los chefs nos llevan ventaja a los que somos z
novatos en la cocina: los expertos saben muy bien que una pizca de harina ·O
2
en una crema inglesa (así se llama la que acabamos de preparar), evita que :::i
se formen grumos incluso aunque la preparación hierva. Ni los físicos ni w
los químicos· tie.1.1en una buena explicación para este misterioso efecto: se o
w
supone que, en' la harina, los gránulos de almidón se hinchan y liberan (fJ
(fJ
moléculas muy largas que impiden la a¡,,>regación de las proteínas del huevo :::J
(que es /o que origina los grumos). o
2
Pero volvamos a nuestra crema: calentamos y batim.os con fuerza
hasta que la mezcla hierva y la cacerola se llene de burbujas.
A continuación, para espesar la preparación, añadimos hojas de ge-
latina previamente remojadas en agua: así obtenernos un gel que estabiliza
la espuma. Después la aromatizamos incorporando a la crema el zumo del
limón y unas ralladuras de corteza.
Por último, cuando la crema de limón se enfría, incorporarnos las
claras batidas a punto de nieve y la nata montada y ponemos la mezcla en
el refrigerador, o mejor, en una habitación o lugar fresco.
Después de unas horas, ya solamente nos queda saborear el resulta-
do de unos razonamientos que están al alcance de cualquier cocinero o
cocinera.
Éstos son los ingredientes y las cantidades comprobadas para tener
un éxito seguro en la preparación de esta receta.
264
(fJ Ingredientes para 8 personas
o
rr: ✓ 6 limones
w ✓ 160 gramos de azúcar
1-
(,) ✓ 35 centilitros de leche
2 ✓ 3 yemas de huevo
(fJ ✓ 3 claras de huevo
::i ✓ 4 hojas de gelatina
(fJ
✓ 10 centilitros de nata
>-
,,:
z
ü 117 En un cazo pequeño, hervir 25 centilitros de leche y co-
o ~ cer a fuego muy lento durante un cuarto de hora, hasta
ü
reducir el volumen aproximadamente a la mitad. -
'.'í
La leche es una emulsión, es decir, una dispersión de glóbulos grasos
en el agua, donde además se encuentran otras moléculas. Reducir la leche
es muy fácil, consiste en concentrar la emulsión evaporando el agua.
Lavamos los limones para eliminar todas las sustancias amargas con
las que hayan podido ser trat,~dos.
¿Por qué hay que remojar las hojas de gelatina antes de su empleo?
Lo ignoro, pero por experiencia propia sé muy bien que las hojas de gela-
tina que no se han remojado previamente, fonnan muchos hilos y son
difíciles de utilizar.
La nata montada es una espuma, igual que las claras batidas a punto
de nieve: se incorporan burbujas de aire y quedan atrapadas en la espuma.
266
C[) Como la nata montada es bastante viscosa, la espuma obtenida es muy
o estable (más que la que forman las claras batidas a punto de nieve). En las
ir claras, las burbujas están rodeadas por las proteínas de esta parte del huevo
w
1- que constituyen da armadura)) que les confiere rigidez impidiendo la rotu-
([)
::;; ra y la fusión de las burbujas. También en la nata montada las proteínas
C[) estabilizan las burbujas de aire.
:i
C[)
>-
<(
z rol Mezclar la nata montada, las claras batidas a punto de
ü ~ nieve y la crema de limón. Repartir la mousse en copas
o bajas y mantenerlas en el refrigerador durante varias horas
ü
antes de servir.
~
L a s 1::res hojas
de chocolat::e
ü ✓ 1 rama de vainilla
o ✓ Canela
ü ✓
.,: Pimienta negra
..J ✓ Azúcar glasé
r-:.1 Forrar la bandeja del horno con una hoja grande de pa-
L....::J pel de aluminio.
También lo sabemos: para preparar una mousse hace falta nata mon-
tada, o claras a punto de nieve... o una mezcla de ambos ingredientes, como
en esta receta.
.1\!Iousse he lada
de guindas
ra7
En el momento de servir, desrnoldar las rnousseS intro-
~ duciendo los moldes rápidamente en agua caliente. Co-
locarlas sobre los platos y recubrir con la salsa de guindas.
Los cocineros novatos siempre se hacen un lío con las pastas. ¿Hay
alguna familia que no tenga su propia receta de masa para la tarta? ¿Qué
pasta será? ¿Una pasta brisa? ¿Una pasta arenilla? ¿Una pasta para mol-
dear? ¿Una pasta azucarada? Muchas veces los ingredientes son los mis-
mos, pero los resultados .p:iuy distintos. La única masa que está perfecta-
mente definida y claramente separada del resto, es la pasta de hojaldre (ver
la receta de los hojaldritos de ostras, página 33).
Como hay discrepancias incluso entre los c,odneros y los pasteleros,
me he dedicado a hacer una tabla comparativa con todas las recetas de
pastas brisas, arenillas, para moldear y azucaradas que tengo en mis libros
de cocina, antiguos y modernos, comprobando en primer lugar cuáles son
las diferencias en cuanto a los ingredientes utilizados: inútil tarea porque
he encontrado absolutamente todas las combinaciones posibles.
Empezando por la pasta brisa, las distintas recetas indican una can-
tidad de mantequilla entre 200 y 450 gramos por cada 500 gramos de hari-
na ... y ¡ésta es la masa en la que existe un mayor acuerdo entre los autores!
Las recetas de pastas arenillas, solamente tienen en común la utilización de
huevos y de azúcar o almendras molidas, pero ]as proporciones varían eón-
278
(/) siderablemente. En las pastas azucaradas, la única indicación igual es el
o empleo de harina y azúcar.
a:
w Ante esta caótica situación, ¿cómo voy a darles la receta de una tarta
1-
(/) de ruibarbo? He llegado a la conclusión de que si las proporciones no son
:;;
determinantes para la obtención de uno u otro tipo de pasta, probable-
(/)
::J mente, el que una masa sea brisa o arenilla, dependerá del modo de prepa-
(/)
ración. En este aspecto sí hay coincidencia entre las distintas recetas: para
>- elaborar una pasta brisa, se tamiza la harina, se forma un hoyo y en el
<(
z centro se coloca el resto de los ingredientes que se mezclan bien aplastan-
ü
o do con la palma de la mano apretando con fuerza; dependiendo de las
ü recetas, la operación puede repetirse hasta tres veces, pero, en todas ellas,
'.'í siempre se aconseja dejar reposar la masa antes del horneado.
En la elaboración de la pasta arenill.a, la forma de trabajar es com-
pletamente distinta (solamente uno de nuestros grandes pasteleros escribe:
el método es el mismo que para la pasta brisa; las únicas diferencias con la
pasta arenilla son la cantidad de azúcar y la inclusión de almendras moli-
das): comenzamos por mezclar el azúcar, la sal y los huevos; a Continua-
ción se añade la harina y se trabaja un poco la masa antes de dejarla en
reposo.
Este estudio, en especial el de los libros antiguos, demuestra rotun-
damente que la distinción entre las pastas arenilla y brisa es bastante re-
ciente y muy poco concreta. Hay multitud de variaciones posibles, pero
siempre obtenemos masas que se pueden utilizar para moldear, es decir,
para recubrir el fondo de un molde. Con una mayor c;antidad de mantequi-
lla, la pasta resultante es más suave y más sabrosa. Es evidente que
<<pasteamos» con mayor refinamiento que nuestros antepasados.
¿Qué dice la ciencia sobre este tema?
En la pasta brisa, cuya receta más común es la mezcla de una parte
de mantequilla con dos partes de harina, parece que el trabajado sirve para
envolver los granos de harina con una capa de grasa antes de que el agua
los espese formando un engrudo: la mantequilla evita que los granos se
peguen y formen una capa continua y dura después del cocinado. Así,
durante el horneado, los granos de almidón espesan individualizadamentc,
la mantequilla se derrite y sirve para unir todos los gránulos. En caliente, la
pasta permanece friable porque la mantequilla está blanda. Después, cuan-
do la masa se enfría, la mantequilla actúa como cemento manteniendo
únidos los granos hinchados. La pasta se funde en la boca porque la man-
tequilla, aunque esté fría, nunca es excesivamente dura.
En la pasta arenilla, el azúcar y las yemas de huevo forman una
especie de granulado grueso sobre el que se absorbe la harina. El huevo,
por su viscosidad, penetra con mayor dificultad que la harina, que además
279
está en una cantidad menor; como resultado la pasta es más frágil. La coa- o
gulación de la yema, que se produce localmente en la «masa granulosa)) ro
a:
formada, imparte a este tipo de masa su característica textura «arenosa». Es <(
ro
preferible no trabajar excesivamente la pasta para conservar esa textura :::J
que se perdería si se formara una red de gluten. a:
w
¿Y la pasta para moldear? Los diccionarios nos aconsejan indirecta- o
mente olvidarnos de ese nombre. Es una pasta que se utiliza para forrar los ~
moldes, ;es decir, que se pone en el fondo. Los moldes se pueden forrar
a:
tanto con una pasta brisa como con una pasta arenilla. Por último, hablar
~
simplemente de pasta azucarada, tampoco resulta ilustrativo porque se puede
preparar una pasta brisa salada o dulce y también una pasta arenilla puede
contener sal o azúcar.
280
(/) Ingredientes
o
a:w ✓ 500 gramos de harina
✓ 200 gramos de azúcar
1-
(/) ✓ 150 gramos de mantequilla
2 ✓ 2 huevos
(/) ✓ Un poco de leche
::i
(/) ✓ 10 gramos de sal
✓ 1 kilo de ruibarbos
>-
<(
z
ü 117 Tamizar la harina sobre la superficie de trabajo, un
o ~ mármol o una tabla pastelera.
ü
'.'í
El tamizado de la harina resulta imprescindible para los profesiona-
les de la hostelería, que compran la harina al por mayor; no es necesario en
el caso de los particulares, que normalmente adquirimos paquetes peque-
ños en los que la harina ya está bien cribada.
rA7
En el momento de preparar la tarta, sacar la masa del
~ refrigerador, colocarla sobre la superficie de trabajo y
281
sin amasarla, extender con un rodillo formando un círculo del
o
diámetro del molde. m
rr:<(
Trabaje la masa lo menos posible. Si se amasa, le pasará como en el m
:J
juego de la oca, que será enviado a la casilla de partida y tendrá que volver rr:
a dejar la masa dtra vez en reposo. w
o
~
rr:
ni,l Añadir azúcar en el fondo de la tarta y agregar el rui- ~
L..::'...J barbo en trozos pelados hasta llenar el molde.
Durante este horneado, el agua que contienen los huevos hincha los
gránulos de almidón, que forman un engrudo. Simultáneamente, la mante-
quilla se derrite envolviendo por completo los granos de harina y además
las proteínas del huevo coagulan. _Los granos de harina se sueldan entre sí.
>- ✓ 1 huevo
✓ 50 gramos de azúcar
z-< ✓ 15 centilitros de agua
ü
o
ü
::í 117 Sobre una tabla de madera, poner 300 gramos de hari-
~ na, una cucharadita de sal y 10 centilitros de agua.
Trabajar la masa con las manos. Ir añadiendo el resto del
agua hasta que la pasta ya no se pegue a los dedos. Hacer una
bola y dejarla en reposo durante un cuarto de hora.
¿Por qué se doblan sobre el tercio central los dos tercios más exter-
nos, plegando el uno sobre el otro? ¿No podríamos doblar una de las par-
tes exteriores por encima del tercio central y la otra por debajo? Es mejor
la primera técnica porque solamente deja a la mantequilla la posibilidad de
fluir por uno de los lados pequeños del rectángulo, en vez de por los dos
(el otro lado pequeño queda en el centro, rodeado y cerrado por la masa).
r-'7l
.Justo antes de proceder al horneado, dar a la masa las
~ dos últimas vueltas. Cortar y separar seis pequeños
286
(/)
rectángulos del mismo tamaño. Precalentar el horno a 220
o grados y cuando esté a esa temperatura, introducir los rec-
ii: tángulos sobre una bandeja enharinada y hornear durante una
llJ
media hora.
~
::;
(/) La masa de hojaldre que se adquiere congelada es más difícil de
:::J hornear: si se cocina demasiado, se oscurece y se seca. Esto no ocurre
(/)
Para el merengue
✓ 3 claras de huevo
✓ 125 gramos de azúcar
Para preparar una crema de limón blanda, hay que cocinarla aparte
de la pasta; por eso la masa se «cuece en blanco» (se hornea la base de la
tarta sin el relleno).
Unas claras a punto de nievey las mismas claras «endurecidas;> con azficar: las burbu-
jas de aire se hacen más pequeñas.
292
(f) más duras incorporándoles el azúcar en polvo. Con un microscopio, se
o puede apreciar perfectamente la disminución de tamaño de las burbujas de
a:w aire. El azúcar capta una parte del agua que formaba parte de las finas
~ paredes que separan las burbujas. Las claras a punto de nieve se tornan
2 más brillantes.
(f)
::i
(f)
ºa:w
f--
la deseada crema esponjosa que no se corta gracias al efecto protector que
ejerce la harina.
(f)
;:;
(f) ~ Cuando la mezcla comience a formar espuma; retirarla
::i
(f)
~ del fuego sin dejar de batir y verter el sabayón en los
platos, alrededor de los trozos de melocotón. Servir de inme-
>-
<( diato.
z
ü
o Parte de la exquisitez de este postre reside en la sensación que pro-
ü duce la combinación de las frutas frías con el sabayón caliente. ¿Verdad
~ que es delicioso? Y al más gourmet de los gastrónomos le recuerdo que el
sabayón también se puede servir después de la comida: en una taza de café,
naturalmente sin los melocotones, hará las veces de café y de digestivo.
>-
<(
z 117 Cortar a lo largo una vaina de vainilla y hervir en medio
ü ~ litro de leche. Bajar el fuego para que la temperatura
o no sobrepase los 85 grados (en el límite de un hervor suave).
ü
:5 La extracción de los aromas de la vainilla por la leche caliente no
puede realizarse a una temperatura muy alta: si la leche hierve, el vapor se
escapa a borbotones arrastrando los aromas de la vainilla.
También se puede utilizar un aromatizante artificial. El sabor es bas-
tante parecido aunque no exactamente igual. ¿Hay que rechazarlo por eso?
Lo cierto es que no merece la condena que algunos propugnan. La princi-
pal molécula aromática de la vainilla es la vainillina, único componente de
los extractos artificiales; en la vainilla natural hay otras sustancias que con-
tribuyen a su delicioso aroma. Es decir, el «cocktail» aromático de la vaini-
lla es más complejo que el de los extractos sintéticos y la química no puede
reproducir exactamente el aroma natural. Pero, ¿por qué no unir los dos
para reforzar el aroma cuando el de la rama de vainilla natural no resulta
suficiente ... ? En caso de necesidad ...
>-
<>:
z ¡---¡-, Sin dejar de batir, verter sobre las yemas banqueadas
ü ~ la leche hervida utilizada para escalfar las claras. Vol-
o ver a poner la cacerola en el fuego y, siempre batiendo, ca-
ü lentar sin llegar a hervir. Cuando la mezcla está lo suficiente-
'.'i mente espesa para recubrir una cuchara, retirar la cacerola
del fuego. Llenar con agua fría el fondo de la fregadero y
sumergir la cacerola para interrumpir la cocción. Batir durante
algunos minutos para enfriar más rápidamente.
>-
<,:
z
ü
o
ü
~
309
Ingredientes para 6 personas
:sw
Para las crepes z
<1:
✓ 250 gramos de harina ü
✓ 1/2 litro de leche
✓ 3 huevos enteros
:s
✓ 1 pizca de sal <1:
✓ 50 gramos de azúcar
<1:
z
✓ 40 grpmos de mantequilla <1:
N
✓ 2 cucraradas soperas de ron z
<1:
Para las manzanas 2
w
✓ 1 kilo de manzanas para asar o
✓ Canela
(/)
~
Es muy importante empezar a batir la mezcla de las yemas y el azú- '.'.l
car desde el mismo instante en el que se juntan los dos ingredientes. Si no o
al
se baten enseguida, resulta imposible obtener la preparación esponjosa y
lisa que deseamos. Cuando el azúcar contacta con las yemas, capta el agua
de las proteínas del huevo y provoca su coagulación antes de que las pro-
teínas puedan recubrir las burbujas de aire que introducimos durante el
batido.
r:inl
Cocinar las crepes en una sartén grande, bien untada
~ con mantequilla y muy caliente.
r:i""i7 Re.llenar las crepes con las manzanas _ligadas con la ere-
~ ma. Cerrarlas en forma de bolsita con unos palillos y
colocarlas en los platos en los que se van a servir. Cubrir el
fondo del plato con la crema pastelera y en un lateral, poner
una nuez de chocolate fundido en zumo de naranja. Peinar la
crema con las púas de un tenedor, dibujando un adorno de
chocolate sobre el fondo color claro de la crema.
Se suele decir que las claras de huevo son muy difíciles de montar s'
contienen o si contactan con alguna partícula de yema o de grasa. También
es sabido que a las claras a punto de nieve no se puede incorporar el azúcar
para endurecerlas hasta que están firmemente montadas.
Paradójicamente, para preparar una genovesa, que es la base de este
suculento fondant de naranja, batimos los huevos enteros -sí, lo ha leído
bien: las yemas y las claras a la vez- y ¡además se baten con el azúcar! La
contrapartida de todas estas incoherencias culinarias, es la necesidad de
batir durante un cuarto de hora, en caliente, para conseguir una genovesa
digna de llamarse así.
El primer recuerdo que tengo de las genovesas, demuestra la impor-
tancia de la ciencia: no había preparado nunca una genovesa y la cociné
según la receta de un libro de un conocido repostero. Seguí las indicacio-
314
(fJ nes meticulosamente al pie de la letra ... pero el resultado fue desastroso:
o una fina torta de un centímetro escaso de espesor, que ni siquiera pude
a: partir para obtener las dos mitades del bizcocho de mis sueños.
w
1-
(f)
Intenté descubrir los motivos del fracaso: una genovesa se bate du-
¿
rante mucho tiempo ¿por qué? Porque queremos aumentar el volumen de
(fJ
:J la preparación y corno las claras están mezcladas con las yemas, resulta
(fJ
muy difícil obtener una espuma. El objetivo está perfectamente definido:
>- conseguir una espuma. Comprobé con el microscopio si mi genovesa era
<(
z una espuma: las burbujas se veían perfectamente; era una espuma. A con-
ü
o tinuación, repasé las operaciones que había realizado siguiendo el libro,
ü que eran, más o menos, las mismas que se indican para todas las genovesas.
:5 No fui capaz de encontrar ningún fallo importante. Pero cuando volví a
preparar de nuevo la receta, me di cuenta de que la primera vez había
utilizado un batidor eléctrico sujetándolo verticalmente, que no es un buen
sistema para incorporar aire en una genovesa. Aunque se produzca alguna
salpicadura, hay que inclinar el batidor para introducir con las palas la máxi-
. ma cantidad de aire, que es el objetivo fundamental del batido. Con esta
rectificación, mi pasta genovesa duplicó su volumen. La puse en el fuego,
seguro de que saldría bien y, esta vez ... el éxito fue total. Cuando elabore el
fondant siguiendo la receta que le voy a dar, tenga también muy presentes
las burbujas de aire que debe incorporar a la masa.
En general, -ya se habrán dado cuenta de que me gustan mucho los
principios generales- siempre que cocine una preparación de base para un
plato que tiene que aumentar de volumen, recuerde que esponja porque
inicialmente contiene burbujas de aire; es necesario hab~r introducido pre-
viamente esas burbujas. Por otra parte, ya hemos comentado que el au-
mento de volumen se debe al vapor de agua y, por lo tanto, la preparación
tiene que contener agua para que pueda evaporarse.
315
Ingredientes para 8 personas <(
-,
z
Para la genovesa
~
✓ 4 huevos <(
✓ 125 gramos de azúcar z
✓ 20 gramos de mantequilla
w
o
✓ 125 gramos de harina f---
z
Para /a crema ~
1
✓ 3 yemas de huevo z
✓ 250 gramos de azúcar ~
✓ 1 rama de vainilla
✓ 1 cuarto de litro de leche
✓ 40 gramos de maicena o de harina
✓ 10 centilitros de nata espesa o 15 centilitros de nata UHT
✓ 3 hojas de gelatina
✓ 4 naranjas
~
el batido, !anata yun poco de leche. El recipiente, su contenido ye! batidor
U) de varillas se enfrían en el refrigerador o en el congelador. Después de un
:::J buen rato, se sacan y se comienza el batido pensando que hay que introdu-
U)
>- cir mucho aire. La nata está suficientemente montada cuando las varillas
z-< del batidor dejan surcos en la nata y cuando al retirar el batidor, la nata
ü montada queda formando un copete. Durante este proceso, la materia gra-
o sa de la nata y de la leche se distribuyen alrededor de las burbujas de aire
ü
constituyendo un envoltorio rígido en el que quedan atrapadas las burbujas.
~
i?l Batir las claras con una pizca de sal hasta un punto de
L....=..J nieve muy firme.
Esta mezcla debe realizarse con delicadeza para que las burbujas de
aire no estallen ni confluyan. Durante la cocción a temperatura superior a
100 grados, el calor se introduce lentamente en la masa y coagula las pro-
teínas. Una parte del agua superficial se evapora. Esto origina la formación
de la corteza.
Si se utiliza un molde de diámetro pequeño, la cocción debe reali-
zarse a menos temperatura y durante más tiempo; si el molde es muy
grande, hay que poner el horno más fuerte pero cocinar la masa menos
tiempo.
322
(f)
í,i7 Preparar un almíbar hirviendo 5 centilitros de agua y 50
o L...2J gramos de azúcar. Fuera del fuego, añadir 5 centilitros
ce de kirsch.
w
1-
(f)
El calentamiento facilita la disolución del azúcar. El kirsch se debe
2
(f)
añadir cuando el almíbar esté frío para que el alcohol no se evapore.
::,
(f)
El batidor debe ser bastante grande y con muchas varillas para que
el ejercicio de batir resulte menos agotador. Todos los ingredientes y el
recipiente tienen que estar muy fríos para evitar la ftansformadón de la
nata en mantequilla. Duranteft'hlontado de la nata, igual que en las claras
a punto de nieve, hay que introducir la mayor cantidad posible de burbujas
de aire. La nata y la leche contienen muchas moléculas tensioactivas que
estabilizan la espuma.
El orden de los platos es desde los más sustanciosos a los más ligeros.
Jean-Anthelme Brillat-Savarin, La Physio/ogie du goút
Hay que batir los huevos con el azúcar desde el mismo momento en
el que los dos ingredientes contactan. Como ya hemos explicado, el azúcar
«cuece» la yema de huevo al absorber el agua que contiene. El efecto es el
mismo que el que se produce cuando se frota un pescado con sal gruesa o
cuando se deshidratan unos charupiñones muy húmedos cubriéndolos con
sal gruesa, por ejemplo, en un colador. Las moléculas de agua, que se mue-
ven al azar, tienden a igualar su concentración en toda la disolución que
tienen disponible: pasan desde las zonas en las que la concentración de sal
o de azúcar es .menor, a las zonas en donde es más elevada.
Como la preparación de esta mezcla consiste en hacer que adquiera
un color blanco por efecto de la introducción de burbujas de aire en el
batido (visibles perfectamente con un microscopio), es evidente que no
hay que dejar que el azúcar cueza las yemas: cuando la masa está cocida no
se pueden incorporar más burbujas de aire. Por el contrario, si introduci-
mos inmediataruente las burbujas de aire, después permanecen en el inte-
rior de la masa porque sus paredes se hacen más sólidas durante la cocción
de la yemas.
>-
,,: rii7 Decorar con un poco de puré de frambuesas. Para finali-
z ~ zar, espolvorear con azúcar glasé.
ü
o
ü
Recuperemos el espíritu infantil para adornar los pasteles con el azúcar
~ glasé: tamizándolo a través de moldes con distintas formas, este fino polvo
dibujará su firma en los. pasteles.
~agdalenas
con naiel y linaón
Ese era e! sabor del pequeño trozo de magdalena que cada domingo
por !a mañana en Cambray (ese día no salía hasta la hora de la misa),
cuando iba a su habitación a darle !os buenos días, mi tía Uonie me daba
después de mo;ar!o en su infusión de té o de tila.
Marce! Proust, A la recherche du te1nps perdu
1 Receta 2 I
¿Cuáles son los puntos comunes en las dos recetas? En ambos ca-
sos, las claras de huevo aportan las burbujas gracias a las cuales las
magdalenas se esponjan, no por la dilatación del aire de las burbujas, sino
porque el agua de la masa se evapora y se acumula en las burbujas.
331
Observe que en la primera receta se incluyen yemas de huevo y en la z
segunda no. Por el contrario, sólo en esta última receta se incorporan al- ·O
¿
mendras molidas. También en esta segunda receta, que no contiene yemas ..J
que aportan materia grasa, es en la que se emplea 1nás cantidad de mante- >-
..J
quilla y, además, clarificada. w
2
¿Qué efectos tienen estas diferencias sobre los resultados? Les su-
z
giero que preparen las magdalenas siguiendo las dos recetas simultánea- o
mente\ es decir, obteniendo un total de 24 magdalenas. Así, dispondrá de ü
(f)
una cantidad suficiente para organizar una degustación comparativa (para <:
que la comparación sea justa, hay que hornear las 24 magdalenas al mismo
z
w
..J
tiempo).
~
(9
Posteriormente, podrá modificar los ingredientes y diseñar su pro- <:
pia receta, que seguramente será intermedia y se ada!Jtará mejor a sus gus- 2
tos particulares.
-
Confit:ura de nzoras
2
(fJ
:J
(fJ
>-
ITI Dejar las moras mezcladas con el azúcar durante algu-
<: nas horas.
z
ü Así deshidratamos las frutas: el azúcar absorbe el agua, rompiendo
o
ü las paredes y las membranas celulares y preparando la extracción de las
s moléculas _de pectina que harán gelificar la confitura.
>-
<(
z
ü
o
ü
~
Epflogo
Aceite: Los aceites son líquidos com- las moléculas. Finalmente, cuando la tem-
puestos por moléculas insolubles en agua peratura alcanza los 100ºC, los movimien-
y son capaces de soportar temperaturas tos son tan rápidos que las moléculas de
de hasta 200 grados sin hervir. Por enci- agua pueden separarse del líquido ven-
ma de esa temperatura, los aceites comien- ciendo las fuerzas que las mantenían uni-
zan a humear y a degradarse químicamen- das: el agua se evapora, o dicho de otra
te: los átomos de las moléculas de aceite forma, las moléculas de agua se separan
se redisponen, reaccionan ~ntre sí y origi- del líquido en forma de vapor. A la inver-
nan la formación de un compuesto pican- sa, cuando el agua se enfría, el movimien-
te que hace llorar, la acroleína. Los distin- to de las moléculas se ralentiza y a la tem-
tos aceites (de girasol, de soja; de nueces, peratura de OºC se inmovilizan formando
de oliva ...) alcanzan temperaturas máxi- un cristal: el hielo.
mas diferentes que permiten caracteri-
Almidón: Es la parte del trigo que
zarlos en función de su «punto de humo)).
no son proteínas. El almidón contiene dos
Agua: Sabemos que es un liquido tipos de moléculas: las de amilosa son
transparente, incoloro, inodoro e insípi- solubles en agua caliente; las de
do. Está constituido por un único tipo de amilopectina quedan retenidas en los gra-
moléculas: las moléculas de agua. Cada nos. Así por ejemplo, en la preparación
molécula de agua contiene tres átomos: de una salsa blanca, el espesamiento se
un átomo de oxígeno unido a dos áto- produce por la disolución de las molécu-
mos de hidrógeno. En el agua líquida, las las de amilosa y por el hinchamiento de
moléculas se mueven constantemente en los gránulos de almidón, en los que el or-
todas las direcciones. Cuanto más se ca- denamiento cristalino de las moléculas de
lienta el agua, mayor velocidad adquieren amilopectina se desorganiza por las mo-
344
(/)
léculas de agua. La viscosidad que adquie- los químicos llaman sacarosa: sus molé-
o re la salsa se debe a los dos efectos que culas son unas cadenas formadas por una
a: tienen lugar simultáneamente. molécula de glucosa Oa molécula que sir-
w ve de carburante para nuestro organismo)
f- Aminoácidos: Son las «perlas)) que
(/) y una molécula de fructosa Oa molécula
::, engarzadas componen una proteína. Es-
que imparte su sabor dulce a las frutas),
(/) tas moléculas se llaman aminoácidos por-
La sacarosa es solamente uno de los
:::J que son ácidos y además contienen un
(/) miembros de la gran familia: la glucosa y
grupo amino, formado por un átomo de
>- nitrógeno y dos átomos de hidrógeno.
la fructosa son dos de sus hermanitos;
<(
también estas sustancias son azúcares.
z Aparejo: En cocina, no se trata de Pero la familia no se limita a estos tres
ü
o ningún utensilio de pesca ni de un siste- miembros: la lactosa (el azúcar de la le-
ü ma mecánico. Se llama así a una mezcla che), la manosa, la maltosa ... son t;imbién
::í de ingredientes que sirve como prepara- azúcares bastante simples; naturalmen-
ción de base para elaborar un plato o un te, no debemos olvidar todo el resto de
postre. azúcares ((Complejos)), que son molécu-
Aplastar: Operación que permite las mucho más largas generalmente for-
mezclar la mantequilla con la harina y el madas por el encadenamiento de azúca-
agua cuando se prepara una masa. Se res simples.
aplasta con la palma de la mano. Baño-maría: Representa la conexión
Arreglar: Las mujeres «se arreglam> entre la cocina y la alquimia porque su
para realzar su belleza, pero además sig- invención se atribuye a la alquimista
nifica acondicionar o preparar, por ejem- Myriam o Marie d'Alexandrie en el siglo
plo, una carne, eliminando los tendones, XIII. Cocinando un plato sumergido en
los excesos de grasa, etc ... ¡Les aconsejo un baño de agua, evitamos que la tempe-
que no se equivoquen! ratura sobrepase los 100 grados.
>-
<:
z
ü
o
ü
'.'í
Bibliograf-ía
But the crackling is superb, sous la direction de Nicholas et Giana Kurti, Éditions
Adarn Hilger.
Hervé This, Les secrets de !a casserole, Éditions Belin.
Ménon, La science du maítre d'hótel cuisínier
Antonin Careme, L'art de !a cuisine franraise, Éditions Payot.
Pierre Hermé, ·5ecrets gourmands, Éditions Larousse.
Pierre Gaertnér y Robert Frédérick, La cuisine a!sacienne, Éditions
Flammarion.
Joel Robuchon y Patricia Wells, Le meil/euret le plus simple de Robuchon, Éditions
Robert Laffont.
Dorninique y Martine Izambard, La Grande cuisine de l'Alsace, Éditions So-
lar.
Michel Bras, Les carnets de Miche! Bras, Éditions du Rouergue.
E. Darenne y E. Duval, Traité de pátisserie moderne, Éditions Flammarion.
Harold Me Gee, On food and cooking, Éditions Macrnillan.