You are on page 1of 1

HOME ABOUT WHAT WE DO PEOPLE EXPERIENCE JOIN US

May 19, 2020

La Historia de Los Jardines de La Tropical


Cuba es Tropical, seamos tropicalistas…

ése era uno de los varios lemas elegidos por Las Cerverias “La Tropical y Tívoli”, la compañía que
creó unas de las más conocidas marcas de cerveza cubana.

La Historia de Los Jardines empieza con la adquisición de la Tropical por Cosme Blanco Herrera
en el 1897.

En 1888 la familia Herrera fundó la “Nueva


Fábrica de Hielo”, desplazando de su
monopolio a la ya existente “La Habanera de
Hielo” su monopolio de la producción de
hielo. El gran éxito financiero luego permitió
la adquisición de “La Tropical”.

La Tropical posee una ubicación estratégica,


situada a orillas del Rio Almendares, por lo
cual utilizaba energía hidráulica para echar
a andar sus maquinarias. Dicha tecnología fue
imitada posteriormente por la Cervecería
Internacional y Cuba Cerveza.
Anuncios publicitarios de La Tropical tomados de la
La calidad de la cerveza producida adquirió prensa periodica habanera. Fuente: Los Jardines de
La Tropical, Yaneli Leal del Ojo de la Cruz
rápidamente a una fama internacional, debido
en parte a la participación deconsagrados
maestros cerveceros alemanes y franceses, residentes en la Fábrica.

En 1909, La Tropical absorbió a una de las más grandes fábricas cerveceras norteamericanas: la
Havana Brewery, la cuál era propietaria de la Fábrica de Cerveza y Hielo Tívoli. Nace así la
cervecería La Tropical y Tívoli que llegó a emplear en 1953 a más de 820 personas, y se mantuvo
activa hasta el año 2004.

Los Jardines nacieron principalmente como fruto de la estrategia comercial, fueron creados
en 1904 junto a la Fábrica de Puentes Grandes y acogieron eventos privados y públicos para
favorecer la promoción de las cervezas. Se dice que por cada entrada comprada para los
Jardines seincluía, a modo de bienvenida, una “Media Tropical” para los hombres y una flor para
las mujeres.

Ante el éxito de los Jardines, la Cervecería Internacional y La Casa Bacardí respondieron con su
propia estrategia de “Social marketing”, estableciendo respectivamente Los Jardines de La Polar
en La Habana y Los Jardines de la Casa Bacardí en Santiago de Cuba.

Sala Central del Castillo. Foto: Rama Knight

Los Jardines fueron diseñados por el maestro de obras Ramón Magriña, quien también tiene la
autoría de la decoración de la laguna ubicada en la finca del presidente de La República,
José Miguel Gómez (1909-1913). Actualmente este lugar es conocido como “El Club 1830”.

Los Jardines poseen en su estructura tres salones: “Ensueño”, “El Mamoncillo” y “La Cúpula”, los
cuales están sostenidos y ornamentados por imponentes columnas que imitan la forma y la
textura de troncos de árboles en una de las primeras y máximas manifestaciones de la
utilización del cemento, producido por la primera fábrica de cemento en Cuba e Iberoamérica.
Uno de los principales salones de baile fue construido alrededor de un árbol de mamoncillo.
Barandas, cenadores, barras de cerveza, bancos y salones reproducen a su vez formas y texturas
imitando la naturaleza del paisaje.

Salon Ensueño. Foto: Getty Center

Ante un panorama donde las iniciativas públicas no lograron desarrollar proyectos urbanísticos y
arquitectónicos como parques, jardines públicos o centros para el disfrute en exteriores, Los
Jardines constituyeron una iniciativa privada que proporcionaba a la ciudad un espacio exterior
de disfrute público, único dentro de la Capital. Además, fueron los primeros en Cuba en
recrear el estilo modernista – tanto para la arquitectura como para el paisajismo - inspirado
por los jardines orgánicos españoles, en completa armonía con la naturaleza local.

Arriba de los Jardines se alza El Castillo, construido en el año 1911, diseñado por Jaime
Crunyas quien también diseñó la Iglesia de San Francisco, la Iglesia del Sagrado corazón de
Jesús y la Ermita de Montserrat.

Realizado en estilo Neo-Árabe, con sus hermosos mosaicos, sus nichos de madera labrada y sus
arcos de herradura que reflejen estilo Nazarí, El Castillo tuvo sus fuentes de inspiración en las
más grandes obras arquitectónicas del último periodo de dominación musulmana en la península
española (1230-1492): el Gran Alhambra. Además, en sus techos lucen hermosas flores de
granito blanco y amarillo que recuerdan los diseños de la Mezquita de Córdoba.

Una vez inaugurado, el edificio del Castillo, funcionó en combinación con Los Jardines como
lugar que recibió a personas de diferentes clases sociales, en oposición a un panorama donde
los vínculos sociales en muchos casos eran limitados solamente a las personas asociadas a los
clubs de la época.

El Castillo fachada trasera. Foto: Gaëlle Dickie

De hecho, los Jardines fueron definidos como “uno delos principales atractivos que ofrecía La
Habana y donde se celebraban fiestas y giras dominicales con un promedio de concurrencia
de más de mil personas”.

En su primera etapa, Los Jardines ofrecían una musica más enfocada en las raíces folklóricas
españolas como los pasodobles, charlestón, fox-trot etc. Posteriormente fueron inundados por
los danzones de Antonio María Romeu, Arcaño y sus Maravillas, Belisario López y por orquestas,
como la de Fajardo y sus Estrellas, La Orquesta Aragón y La Sonora Matancera. La mayoría de
los músicos y agrupaciones mencionadas anteriormente poseían una extraordinaria relevancia
social dentro del ambito musical y bailable de la época, lo cual muestra la vertiente cultural
que se desarrolló en este espacio.

Segundo piso del Castillo. Foto: Gaëlle Dickie

Los Jardines de La Tropical fueron nacionalizados, el 13 de octubre de 1960, en virtud de la Ley


no 890, como parte de las propiedades de la Nueva Fábrica de Hielo. Bajo la nueva dirección, el
Salón Stadium Tropical, fue clausurado y Los Jardines se mantuvieron efectuando actividades
hasta el año 1968, cuando fueron cerrados junto a otros establecimientos del país que se
dedicaban al consumo de bebidas alcohólicas.

Apartir de este momento, Los Jardines sufrieron varias modificaciones estructurales y


funcionales, con el objetivo de borrar la memoria de un espacio visto como insignia de una
clase social opuesta a los intereses revolucionarios, a pesar de su estrategia inclusiva. Estas
modificaciones incluyeron: la retirada y posterior fundición de las esculturas monumentales de
Ramón Manuel Herrera Gutiérrez, Cosme Blanco Herrera y Francisco Gelats y Durall.

La falta de mantenimiento causó la pérdida de un buen número de elementos construidos entre


los que se cuentan asientos y cenadores de ferrocemento, las cúpulas del Salón Ensueño, el reloj
de madera que marcaba la hora de cierre de los jardines y su hermosa fuente de base
hexagonal.

Fotografia tomada en el 1929, que muestra una de las tantas estructuras desparecidas que conformaban el
mobiliario urbano de los Jardines de La Tropical. Fuente: Los Jardines de La Tropical, Yaneli Leal del Ojo de la
Cruz

Ápice de la degradación del Castillo fue la construcción de un restaurante de comida criolla,


inaugurado, sin responder a lógica alguna, bajo el nombre de Madrid, el cual funcionó hasta el
año 2000. Esta construcción causó la eliminación del mobiliario del Castillo, las luminarias
originales, y se transformó arquitectónicamente el interior del inmueble para habilitar en su piso
superior una cocina industrial y baños. Muchas de las losas de impecable manufactura
provenientes de España fueron reemplazadas por losas “hechas en China”.

A lo largo de su historia, Los Jardines de la Tropical — y su mágico Castillo — han demostrado


su importancia como instalación cultural, recreativa y comercial imprescindible, en medio
de La Habana. Además, tuvo el gran mérito de introducir en Cuba las corrientes paisajistas y
modernistas europeas, fomentando el uso del cemento en el desarrollo de la arquitectura
moderna.

En los últimos años, el Castillo abrió sus puertas a cubanos y extranjeros que se unen en las
fiestas HAPE para bailar a los ritmosde música electrónica y en vivo de artistas cubanos y de DJ
internacionales. También fue el escenario de talleres organizados con la ONG italiana CISP,
donde DJs enseñaron los fundamentos de la música electrónica a los jóvenes del barrio.

DJ Borchi y Wichy de Vedado enseñan a los jovenes del barrio los fundamentos de la música electrónica en
taller organizado por CISP y HAPE. Foto: Emanuele Mozzetti

Habana Roots Ensemble en concierto en HAPE. Foto: Emanuele Mozzetti, Enero 2020

Evento HAPE Collective. Foto: Gabriele Guerra Bianchini, Julio 2018

Vistas del Castillo. Fuente: Los Jardines de La Tropical, Yaneli Leal del Ojo de la Cruz

Este texto se basa enteramente en el excelente trabajo de investigación de Yaneli Leal del Ojo
de la Cruz, publicado en su libro Los Jardines de La Tropical. Gracias a Paola Larghi y a sus
colegas por sus trabajo en apoyo de este lugar mágico. Escrito por G.S.H., G.D., R.B.

Tagged: #hape_lahabana

 17 Likes  Share

COMMENTS (1) Newest First

Preview POST COMMENT…

Maria 2 years ago · 0 Likes

Mi escuela primaria estaba muy cerca de Los Jardines, así q pasé buena parte de mi
infancia ahí. Fui testigo de sus abandonos y remodelaciones. Es un lugar mágico.

Newer Post Older Post


HAPE Celebtrates its 4th anniversary with Pulo NDJ - Confinement out today!
Dumba Nengue in global online event

let’s make it HAPEn

You might also like