You are on page 1of 1

Jesús Manifestación De Vida Y Bien, Nuestro Único Defensor

El Apóstol Juan nos enseña las características de la nueva naturaleza, en las personas que deciden
imitar y seguir el ejemplo de Jesús. “andar como el anduvo. 1Juan 2:6”, este pensamiento hoy tiene
muchas ideas erradas, como sucedieron en otros tiempos, la razón humana o la mente natural no
entiende y a la vez limita la experiencia Divina, en los tiempos Bíblicos los gnósticos creían que solo
algunos podían alcanzar esta iluminación especial y gozar de este privilegio, (conocer a Jesús). Pero la
Biblia nos enseña que Él se ha manifestado a toda la humanidad y que todos podemos conocerlo por
medio de una correcta comunión. (1Juan 1:3).
A. Una Palabra que nos da vida 1Juan 1:1-4: La Biblia que es voz escrita de Dios y Jesús la
manifestación viva de esta voz nos explica que la vida es toda aquella carne que se mueve. Genesis
7:21 (vida natural por creación). En Dios está y de El proviene la vida absoluta y envió a su hijo en
forma humana para guiarnos a conocer esa plenitud de vida. (Juan 5:26) y todos lo han conocido
en el mundo. (1 Juan 1:2).
El propósito divino es que toda persona crea y cambie la condición de extravió, producto de una
naturaleza pecaminosa, caída y rebelde. (Efesios 4:18). Necesitamos ser partícipes de esta nueva
naturaleza y es la única manera de ser parte de la familia de Dios y es por la Fe en Jesús, para vida
eterna (Juan 3:15). No es como una fijación solo futura, sino que comienza desde el momento que
uno lo acepta y recibe la acción espiritual y como consecuencia viene la alineación y el
sostenimiento de la manera de vivir que El mismo nos enseña. (Juan 6:35 y 6:63).
B. Nos proporciona él bien 1Juan 1: 5-10: Nos enseña el Apóstol Juan que en Dios no habita el
mal, en tal sentido tenemos que apartarnos de lo que le desagrada (pecado). Y nuestra
tendencia hacer el mal, necesita de la acción transformadora de Jesús en nuestra vida, a través
del reconocimiento y confesión del pecado podemos ser limpios de toda maldad y permanecer
en estrecha comunión con Jesús y las demás personas, porque nos salvó y le pertenecemos por
creación y redención, Él ha pagado por nuestra transgresión y pecado (derramo su sangre) por
todos nosotros y solo él puede perdonarnos de nuestra maldad. Quien no lo acepta y reconoce
que no lo necesita esta fuera de su verdad y ofende su buen nombre.
C. Es nuestro defensor: Jesús como él único, abogado defensor de la humanidad, ante su Padre, se
ha dado como ofrenda por la maldad, por derecho le pertenecemos, no hay nadie más en este
proceso, por eso nos debe quedar claro que hay un solo Salvador, no hay la necesidad de otra
intervención en el Plan de Salvación, que sea varón o mujer, que se le atribuya el mover la
voluntad y actos de Jesús. No es bíblico tal pensamiento.

Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre
(1Timoteo 2:5 RV)

You might also like