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  • Collinson. La Reforma Protestante

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    La Reforma “Traducci6n de Joré Antonio Brivo q | | PATRICK CGLLINSON seuuoeg san | | | | 1 gLa Reforma? ¢Qué Reforma? Este libro trata del Occidente cristiano, © de la Cristian dad occidental, casi equivalente alo que luego se conver tidia en eEuropas, la Europa de la CE antes de la amplia~ in pero sin Grecia, Porque la Iglesia de Occidente, obedience unas veces y desobediente otras a ese autode_ signado sucesor de san Pedro, el obispo de Roma, nunca hhuzo mucho caso de la Cristiandad oriental, de la que se separé hace mil afios. {Se halla la Cristiandad occidental cn lo justo al contemplarse a si misma tal como viene ha~ cigndolo desde siempre, y sefialadamente al conceder luna especie de importancia césmica a ciertos aconteci- mientos de su historia durante los siglos xv y xvu? Esta ‘yaaa ser una de las interrogantes oculkas que nos acompa~ fiarin en nuestro estudio de la Reforma, Comparada con la occidental, a Cristiandad oriental no es monolitica sino mis bien una familia de Iglesias, Janto a las que reivindican el predicado de sortodoxass y veconocen el primado honoritice del patriarea de Cons tantinopla, llamado «ecuménico», existian y existen otras Iglesias antiguas que se definen tanto étnicamente como por diferencias dogméticas remotas y semiolvidadas pero, lo que parece, insalvables. Estin los armenios, cuyo rey abrazé el cristianismo y lo proclamé religién oficial de sa reino un poco antes de que Constantino hiciese lo mismo para el Imperio romano, Esti la Iglesia copta de 8 a menor Egipto, que emprendio una rata doctrinal divergence de 1k ontodoxia definida por el Conclio de Caleedonia en 451; se Tama woofs porgue cree que Cristo dene una sola maturlera, no las dos naturales de i doceriaa covtodom, y ee un cima que viene dunando més de ail qinientos aos, Tene una bya, la Iglesia efope, que desde 1959 se denomina a i masa Ja Iglesia Ortod'a de Eaopia y que s diferente de aguells, aunque hasta 1959 recibia del parriarcado copto de Alejandia a su finico obispo. Ideanticads insoperblemente con by ma- cin etiope,celebra sus ofcios ea una Jengua que ena forma primitva dels idiomas nacionales del palsy con serra muchos :agosjudicos que posiblemente sn resi duos de las pricticas de los primerosersanos, corso a obxervancia del sbado judo le abstencién de consumit Jos aimentor que el Antiguo Tesamento prohibe por simpurss. Se podei escribir I historia de alguna de eas igle- sis, 0 de todas, porgue han oerido hecho suficientes para hacerlo pose, y sea un ceria interesante. Sin erabargo, ess historias adoleceian de una relativa lla de tansformaciones evolutivs no digamos ya revolu- cionacis. Ninguna de ls Igesis orentales a experi smentado nach comparable ala Reforma y su sépica Contrarteforma. Aungue el cisma de los Vsjos Creyen- tes rusos (desde 1667 asa meses cis) por era ex- cepeién que confers la regla En todas esas manifexaciones de la fe cristiano sin cmbargo (como en todas ls de Ia eligi, desde un punto de vista mis genecly global halamos lor etemnos brincipios dela renovacién y a come, El bautsno de los nis, obigaorio de hecho donequers que a | | | | | | 14 neromnn? JoUE naronsn? 9 religién cristiana se haya extblecide plibica y polities: ‘mente, pareceria sugcrir que una pertenece a le Iglesia deste que mace. En realidad es un rita individual y nico par el bautizado, Cada nifio renuncia a Satanis y asus ‘obras, vse adhiere a Cristo personalmente, sun cuando Ible por mediacion de sus padines, Porque el bautsno 0 deberia ser, segundo nacimieato, tal como explicé Jesis al sabio judo Nicodemo: «Es necesario nacer de ‘msevor. En Buopia tienen una ceremoaia anual en a que sacan de la iglesia el dabot, una réplica del Area de la Alianza de ls judo, que contiene las piedras del akar, y Jo llevan con gran solernnidad a la orila del cutso de gua mis proximo, donde se sumergen Jos Beles en an acto de renovaciGn del bastismo. Esta celebsacin lama 4 eMaskals (que signifcs la Crua) corresponde al esa do de la primavera exfope después de las grandes Iuvias,

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