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FryaL DOCUMENTOS Suplemento de Ia edicién N° 175 de PUNTO FINAL — Martes 16 de enero de 1973. Santiago ~ Chile FORO POLITICO EL PODER POPULAR Y LOS COMANDOS DE TRABAJADORES © Organizado por el sindicato de trabajadores del diarlo “Clarin” se efectué en la Casa de In Cultura “Gabriela Mistral” (ex edificio de Ia UNCTAD), un foro sobre el poder popular y los Comandos Comunales de Trabajadores. Participa- ron en el foro Luls Maira, de la Inquierda Crls- tiana; Vietor Warberls, del Partido Socialista; Pa- blo Richard, del movimiento Cristianos por el So- clalismo; Miguel Enriquez, de Movimiento de t2- quierda Revoluctonaria; y Oscar Garretém, del MAPU. Debido a su enorme interés y actualidad, al pro- fundizar en temas que esta revista ha venido avordando, PF reproduce la version de ese foro, tomada de una grabacién magnetofénica, Documento: INTERVENCION DE LUIS MAIRA, DE LA IZQUIERDA CRISTIANA Compafieras, compafieros: Quisiera al iniciar nuestra participacion en esta discusion colectiva, hacer llegar en nom- bre de nuestra organizacién, un saludo al Sindicato de Trabajadores de “Clarin”, que celebra su semana sindical y dentro de ella programa esta discusion, por su preocupa- cién unitaria, por habernos puesto Ja oportu- nidad para debatir un tema de fondo, y po- der plantear a través de representantes de Jas diferentes fuerzas de la izquierda del pais un debate que si concita la presencia que ve mos esta tarde, es precisamente por la exi- gencia de que sea un debate distinto, dife- Fente de los que son ya tradiclonales y que esterilizan la posibilidad de esclarecer lar cuestiones sustantivas para nuestro proceso. Por-eso, yo entiendo que esta discusién no €s solo un cambio de ideas entre las perso- ns que estén en la tribuna, Sino, fundamen- talmente, una oportunidad para recibir, des- pués del’ intereambio de ideas, las opiniones, las objeciones, las rectificaciones 0 las ¢o1 firmaciones de nuestros juicios por parte de todos los compafieros qué estan aqui partici pando. Entrando al tema propuesto que, es: el po- der popular y las organizaciones de trabaja- dores luego de la crisis de octubre, yo creo que el problema puede ser situado ¥, aborda- a partir de la descripcion de] que, proba- blemente, sea uno de los fenomenos mas ca- racteristicos de la etapa politica que hoy yi- ve nuestro pais, El conflicto entre el poder institucional y el poder social, el poder de los trabajadores. Es este un fendmeno que no tiene nada de casual, y que constituye algo necesario y caracteristico en un momento co- mo el que s¢ vive en Chile. El que dentro del aparato del Estado, dentro de la estructura de poder tradicional consagrada en la vieja Constitucién de 1925, fuerzas populares sean capaces de ganar el control y el ejercicio de una de las franjas de poder, de uno de los Organos de poder del Estado, pero a] mismo tiempo son violentamente rechazados, con- tradichos, enfrentados por e] resto de esa @s- truetura de poder. Al aparecer eSa contradiccién, ese conflic- to que hoy se vive en la estructura de poder de] Estado, en la estructura institucional, se plantea el’ problema de la aparicién de’ un poder popular. De un poder popular que sur- ¢ Obviamente en la base del pueblo, que se ia formas proplas y caracteristicas de orga- nizacion para resolver sus problemas inme- diatos, para imponer al conjunto de Ja so- ciedad sus proplos intereses de clase. Lo que no es todavia un poder popular consolidado, victorioso, capaz de ejercitar el control pleno de) aparato del Estado en su conjunto y en forma més caracteristica y peculiar con aque- jlos sectores de la estructura de poder vigen- te que controlan los reaccionarios E] surgimiento de esta organizacién popular, sigue en Chile las caracteristicas de un pro- ceso revolucionario, Es dinamica, es progre- siva, es experimental. No nace de una mane- Ta organizada y sistematica. Tienta, busca, apunta encontrar sus formas correctas de expresion y organizacién, Pasa por momen- 2 tos de prueba y fallas iniclales. ¥ va descu- briendo en el curso de su propio camino la forma mas adecuada para estructurarse y poder cumplir los objetivos que a si misma se sefiala, Hay a] respecto tantos y tantos testimonios, no solo desde el punto de las ci- fras, de como nan crecido las organizaciones de los trabajadores, y las organizaciones po- pulares en un sentido mas amplio desde 1970 hasta hoy. Sino, precisamente, de la forma aparentemente casual, sorpresiva, en que el pueblo inventa las formas de organizarse pa- fa dar sus Ichas, para resolver sus proble- mas. Con ocasién de esta discusion revisaba un trabajo de sistematizacion de datos re- cientemente hecho por el compafiero Jorge Gusti sobre las JAP, donde e] companero ve- rifica, trabajando con toda la informacion de prensa y los datos internos de las organi- Zaclones para el control de los abastecimien- tos y precios, eomo el surgimiento de la es tructura misma de las Juntas de Abasteci- mientos y Precios no es otra cOsa que una respuesta propuesta el 29 de julio de 1971, se- gim sus datos, en una reunion efectuada en €] Estadio Chile por sectores femeninos de la UP, que discuten sus problemas con el minis- trode Economia, Pedro Vuskovic. Compafie- ras duefias de casa que ya emplezan a vivir el problema del desabastecimiento, de la es- peculacion, de la creacion de] mercado negro bor parte de los grupos de comerciantes més conspicuos de la alta y mediana burguesia. Y que frente al surgimiento de problemas que comienzan a influir 7 que las afectan de manera directa, plantedn la neeesidad dé crear un organismo que no estaba en e] pro- grama de la UP, que no estaba en la discu- sion previa de los otros partidos de la izquier- da, ¥ que surge como una respuesta de los afec- tados en el campo de la especulacion para organizarse, para responder, para evitar las maniobras de la derecha y los sectores capl- talistas de ese sector. Y lo propio, por si hu- biera la necesidad de abundar en las demos- traciones, es lo que ocurre durante la crisis de octubre. El paro patronal fracasado de octubre es la mayor incubadora de organiza- Giones populares que ha habido nunca en Chite, Los que por las razones de funciones que desempenabamos en ese momeiito, tuvie mos que tener contacto durante los dias de! agudo enfrentamiento de clases que ahi Se planteé y de la maniobra patronal, pudimos realmente de manera directa verificar como se edificaba, cémo se solidificaba, como se fortalecia dia a dia, por la inieiativa de los trabajadores, expresada en la base, la calidad, Ja _eficiencia y la actividad de sus organiza- ciones, ¥ el tema principal que hoy discuti- mos, 1a existe a de los Coraandos Comuna- les de ‘Trabajadores, no es sino el andlisis de ua consecuencia, de un producto arrojado precisamente por la lucha de esos dias. Los Comandos Comunales de Trabajadores no fueron tampoco el producto de una anti- eipacion teériea, fueron en su expresién y en su diseminacién y desarrollo, manifestacién muy viva de la inquictud de los propios tra- bajadores en sus distintos organismos de cla- se, que entienden que para @nfrentar a un eomando unido y poderoso de la derecha es indispensable que la izquierda, que sus orga- nismos politicos, que su organizacién social, Documento haga lo propio y alcance un grado de unidad eficieneia que Ja magnitud del desatio has- in“entonees o habla hecho indispensable en ese grado tan dramatico y tan urgent, ¥ los Comandos Comunaies de Trabajadores, aqui estan los testimonios, expresados en la wlti- ma revista “Chile Hoy” por dirigentes de to- dos los partidos, surgen precisamente como una respuesta prolstaria, popular, de base, Este es un hecho que nos coloca, entonces, en relacién con un segundo topicd que debs ser analizado en esta polémica, en este cam- bio de ideas, y que no es indiferente para la suerte de la revolucién chilena y que es plan- teado con la mayor franqueza porque apare- ce como el producto objetivo de lo ocurrido en estos 24 meses, Se verifica un desequill- brio ereciente entre la direccién politica y la base, Mientras los trabajadores, mientras 103, Que ‘sostienen la tarea de la creacién de la Tiqueza social aprenden y maduran en ¢] cur- 80 del proceso, son capaccs de ascender, de asumir nucvas tareas, de clevar el grado do su coneiencia, de aproximarse a nuevos sa- crificios, a nuevas exigencias y nuevas rs- Ponsabilidades, en una medida importante 1a Gireccién polities, los dirigentes de los parti- dos asumen, asumimos, una conducta que no es diferente ‘del todo de 1a que esos dirigentes tenian antes de la conuista del poder, antes del triunfo del 4 de septlembze del 70. Este €s un fendmeno que él analisis y el estudio de todas 1as experiencias revolucionarias y de transito hacia el socialismo comprutba, Pero gue en Chile consiituye una brecha mas dra~ matica, mas clara, mayor que en otras expe- rienela’, Preeisamente con las caracteristicas que singularizan 1a lucha actual de Chile, en €l cual jos dirigentes de las vanguardias ‘po- litieas, los dirigentes de los partidos que in legran la UP, en especial, deben desarrollar su trabajo sin abandonar los empleos en que tradicionalmente se desenvolvieron y en este sentido es bastante dificil que aprendan y se coloquen a Ja altura de las nuevas formas de organizacién que en la produceién y en la es- tructura econémica surgen cuando la natu- raleza misma de posibilidades nos sigue man- teniendo atados én forma importante al tta- bajo que realizébamos antes de haber obte. nido el control del gobierno, Ia direecion del oder. ¥ esto es algo que si én periodos de re- Feiva normalidad se tora manifiesto yes posible que cualquiera lo verifique, en pério- dos en Jos cuales el enfrentamiento de clases, €l conflicto social aleanza sus manifestacio- hes mas agudas, se torna también mayor y es una brecha que tiende a ensanchatse con las peligrosas consecuencias que este desequi- Wbrio puede acarreat. Por eso, hay un con- junto de problemas tedricos y practicos al mismo tiempo que surgen en relacién a la aparicién de las nuevas organizaciones po- pulares y a la estructuracion de formas de Poder popular. Es Imposible, en el curso. del tiempo que este debate nos proporciona, abor- darlos en una forma exhaustiva y sistemati- ca, pero al menos me parece conveniente plintearla en su forma mas esencial, E] proceso chileno obliga a plantear de una manera original y creadora las relaciones tra- dicionales entre el partido, la revolucion y la clase; con Ia peculiar cafacteristiea de “que en ei caso chileno no estamos frente a un partido tnico capaz de dar direccién siste~ matica y orgénica a la marcha de los traba- jadores ‘en Ia conquista del Estado, sino que frente a diversas vanguardias que deben coor dinarse para poder hacer eficaz su accién, Parece evidente que octubre es un episodio leno de ensefanzas que nos obligan, a ia luz de lo que alli ocurrié, a reformular ahora practicamente el problema de la allanza de Clases, cuya necesidad se advirtié ya en el curso de Jos primeros meses del gobierno de la UP. El programa de la UP habla teérica- imente de un encuentro, de una alianza social entre el pueblo y las capas medias. La expe- neia lo aprendié en estos meses, la natu- raleza del enfrentamiento que ensehaba ya que no podia ser entre el pusblo y todas las capas medias, Octubre constituye un test que nos indica uno por uno qué integrantes de la pequefia y mediana burgucsia, quiénes pue- Gen ser considerados amigos y quiénes ene- migos del proceso de transformaciones y avances en Chile, Y nosotros decimos a este respecto que octubre tiene la virtud de la cla- ridad, porque permite definir en términos cla ros la alianza de clases y junto al pueblo, jun to a los trabajadores, siftia a todos aquellos sectores patriotas, progresistas, independien- tes, que son capaces de entender que cuando la burguesia Hama a paralizar el pais estan dispuestos a seguir trabajando. ‘Las organizaciones que surgen del proceso, gomo los Comandos Comunales de ‘Trabaja- dores, cuya naturaleza intentaremos precisar en la segunda vuelta desde el punto de vista de nuestra opinion, deben ser fortalecidos, deben ser mantenidos, deben ser desarrolla- dos con amplitud para que cumplan con el papel critico y antiburoeratico con respscto de la marcha del proceso. Porque, ¥ con esto termino mi primera intervenclon, si algo en- sefian estos dos afios del goblerrio del. presl- dente Allende y de trabajo de la UP, es que realmente aqui es pos.ble una confluéneia en la cual, integrando perspectivas humanistas, integrahdo visiones del hombre, del mundo y la historia, dispuestos a trabajar por abrir eauces al proceso revolucionario, sumando & eristianos, a marxistas y a persotias que estén dispuestas a trabajar en perspectivas revolu- cionarias, es posible aplicar en forma real- mente unitaria y creadora Ja ideologia del proKttariado, que es realmente el marco y el punto de referencia para hacer eficaz nuestra accion, para construir desde 1a base el poder popular y pata asegurar la Estrueturacion y el avance hacia un Estado de trabajadores. INTERVENCION DE PABLO RICHARD, MIEMBRO DEL GRUPO CRISTIANOS: POR EL SOCIALISMO Compafieras y compafieros: Yo represenio o trato de representar a Cristianos por el Socialismo, que no es un Partido politico, Los Cristianos por el Socia- Usmo réconocen vanguardia en los partidos proletarios y esti en los partidos proletarios, Somos, simplemente, la expresion social de los cristiahos que estan Iuchando en las pobla- ciones, fabricas y fundos como clase obrera y Junto a la clase obrera y el pueblo. Somas tristianos y estamos por el socialismo porque 3 Documento €1 cristianismo desde los inlcios tue siempre la religién de los esclavos y la religion de los explotados dei imperio. Hoy dia ese imperio contra el cual se levantaron los cristianos en Jos primeros siglos, ha crecido y se constituye hoy en poder burgués, el poder de los duefios de fébricas y fundos, el poder del imperialis- mo; éstos han constituldo un sistema de vio- leneia Instituctonalizada, que es el capitalis- mo dependiente y subdesarrollado. Nosotros vemos en, las poblaciones, en las fabricas 0 fundos, cémo este sistema de violencia insti- tuclonsilizada asesina nifios, embrutece a la juventud con idolos y gloria, condena a mu- chos al hambre, Ia desnutricién y el analfa- betismo, esclaviza a los trabajadores, diseri- mina y siembra él odio. Los responsables de todos stos males que constatamos en nues— tros lugares de trabajo, los responsables son los duefios de los medios de produccién y el instrumento que los responsables de la Vio- lencia instituctonalizada han creado es el Es- tado burgués, que durante siglo y medio han Ido construyendo laboriosamente. Este es él poder burgiés de los duefios de las fabricas y los fundos. Frente al poder burgués y sus instrumentos de dominacién se ¥, més afios de lucha obrer Elias Lafterte, Clotario Blest y miles y miles de Obreros y ‘campesinos. Y como wn paso fundamental e importante en Ia lucha obre- ra en esta larga lucha contra el poder bur- gu63, se conquista el 4 de septiembre una par- te dél aparato del Estado. Los eristianos que nacimos luchando con- tra el impetio romano iremos ahora a morir si-es preciso junto a la clase obrera, contra el poder de los duefios de las fabricas y los fundos, contra el poder del imperlalismo, En- gels comparaba las primeras comunidades eristianas con grupos obreros socialistas. Vela como las comunidades cristianas, en sus ori- genes, eran comunidades de esclavos, de explotados, que se rebelaban contra el im- perlo y por eso eran echados a la arena a desafiar a los leones. Por todo esto, los eris- tianos debemos hoy dia estar junto @ la clase obrera en sus ochenta y mas afios de lucha, lucha que desde sus inlelos se propuso des— trulr el sistema capitalista y consttulr una sociedad justa y fraternal. La fuerza acum lada en estos Ohenta afios de lucha triunfo el 4 de septiembre y en su camino hacia el poder total para los trabajadores y el pueblo empleza a generar hoy dia, frente al poder burgués e imperialista como un instrumento mas de 1a. clase, como un instrumento de po- der de clase, Jos Comandos Comunales. Queremos ‘denunciar aqui, como Cristianos por ¢] Socialism, frente a las masas, a todos aquellos burgueses y explotadores que, escon- digndose en el nombre de cristianos o’en una traseologia cristiana, traicionan, ai pueblo y por Jo tanto tralcionan su cristianismo, Me Fefiero a todos aquellos burgueses y expiota- dores que usan politicamente, sociolégicamen- te, el nombre de cristianos que se dicen de- mécratas y cristianos;, no se puede servir, y eso es lo que denuncio, a quienes se dicen cristianas, les diria yo que no se puede servir a dos sefiores, no sé puede servir a Dios y al dinero, no se puede servir al Cristo que vive 1 pueblo y a los explotadores que viven del dinero amontonado con la sangre y el su- 4 dor de los pobres de Chile, Quisiera denun- clar todo el uso que se hizo del eristianismo contra los pobres, el uso que se hizo del cris- tanismo contra la clase trabajadora, por ejemplo en “Tele-Trece”. Todo el uso qlie hi- zo ael eristianismo en tal forma que traicio- na lo mas esencial del cristianismo, el uso que hizo del eristianismo el diario “Tribuna”. Ya ver. més 9 menos 25 articulos dond: quieren fundamentar con ¢l cristianismo la yesisten- cle civil. Ineluso han usado del sentimiento religioso popular. Han usado incluso el rosa~ Ho, las procesiones, han querido meter a la Virgen del Carmen como militante del PN. Estos sefiores que se dicen cristianos y que nosotros como grupo, como Cristianos por. el Soclalismo, sentimos’ un deber como cristia~ Ros y por nuestra opcién por el socialismo, denuhciar a estos sefiores que hablan de. jus- ticia y absuelven a un asesino, Hablan de - yertad, que esta amenazada la libertad, cuan- do para los trabajadores con los cuales con- vivimos no ha habido libertad en cuatro si- glos de vida. Se eseandalizan de que ahora se discrimine, qué hipocresia, como ellos han Giseriminaio durante siglos, acusan en forma Dastante faristica de sembrar el odio, que ahora los marxistas slembran el odio, cuando ellos han construido durante un siglé un sis- tema de violencia institucionalizada. Acusan ahora con Ja misma actitud farisdica que di- cen que los marxistas dividen al pais, cuando elios han gozado de la division del pais du- rante mucho tiempo. Frente a los enemigos de los pobres debemos unirnos, Todos los po- biadores y las obreros, todos los campesinos y los obreros, todos los ‘estudiantes y os obre- ros, todas las mujeres y los obreros, en esa unidad esta nuestra fuerza. Por eso’ saluda- mos a los COmandos Comunales y como un paso hacia esa unidad saludamos también 1a realizacion de este foro. A nosatros nos ha tocado muchas veces ha- ser la experiencia, y trabajamos_principal- mente en pobiaciones, cémo los pobladores, especialmente la juventud, o las mujeres y muchos otros trabajadores que no_trabajan en las grandes industrias, que estén en la peguefia industria o incluso que son cesantes, cémo no tienen ninguna bandera de lucha, como no tienen voz, no tienen voto, no saber por qué luchar, son’ engafiados por la ideolo- Bia Durguesa, por el poder burgués, Por eso saludamos que ahora en los Comandos tenga- mos la posibilidad de expresar la voz de estos pobladores, mujeres, estudiantes y también pequefia burguesia que no tienen bandera de lucha, todos los cesantes ahi en los Comandos, ahi se da la union, ahi tenemos fuerza y es por eso que nos parece muy importante desde el punto de vista de nuestra experiencia; ¢s- tamos presentes en mas de 600 poblaciones a lo largo de todo Chile y cuando surgieron los Comandos saludamos esta iniclativa por- que realmente se podian agrupar, junto a la clase obrera, que es la motriz, del proceso en la construccion del socialismo, todos estos sectores que no tienen bandera’ de lucha. Bs ahi donde se da la unin entre estudiantes y obreros, entre pobladores y obreros, eNtre mu- jeres y’ otras personas que estén inarginadas de esie proceso de consttuccion del socialis- mo; ahi en los Comandos tenemos 1a oportu- nidad de unlmnos y de expresar nuestra voz, Documento Por eso queremos felicitar al sindicato de “Clarin” por esta iniclativa; ojala pudieran renlizatse todas las semanas en algin sindi- cato, en algiin Comité Coordinador, organi- zarse estos foros, entre los dirigentés politi- cos y entre los dirigentes obreros de 10s Co- mandos Comunales. Sobre temas diferentes, temas no faltan, el interés que ha habido hoy por este foro demuestra que es algo necesa- rio, Agradecemos entonces al sindicato de “Clarin” por esta iniciativa, y pedimos a los dirigentes de los Comandos que sigan orga- nizando estos foros, ereemos que asi realmen- te vamos reforzando nuestras esperanzas en este socialismo por el cual todos luchamos: no debemos perder de vista nuestra meta, el socialismo es posible. No hace mucho volvi- mos un grupo de sacerdotes de la isla de Cu- ba, primer territorio libre de América; en Cu ba'nos dimos cuenta que el socialismo es po- sible, que es Itberador. No debemos perder esa meta, y luchar por esa meta desde las bases, especialmente en los Comandos Comunales dé ‘Trabajadores. INTERVENCION DE MIGUEL ENRIQUEZ, DEL MOVIMIENTO DE IZQUIERDA REVOLUCIONARIA Compafieras y compafieros: Queremos empezar por donde terminé el compafiero, Queremos empezar por agradecer al sindi- cato de trabajadores de “Clarin” la realiza- cién de foro, felicitarlos y agradecerles. Es extrafio realmente y poco frecuente que nos Inviten a nosotros, al Movimiento de Izquier- da Revolucionaria, a participar en foros con otras organizaciones politicas. No es extrafio eso si, que haya sido un sin- dicato de trabajadores, el que haya tomado Ja iniclativa. El tema propuesto por los compafieros tra- bajadores de “Clarin” es el tema probable- mente fundamental en discusién hoy dia: el problema de la lucha por el poder, Hamado agui popular, y toda lucha politica es en il tima instancia una lucha por el poder, y la otra parte la lucha por los Comandos Gomu- nales, que es la forma conereta que est asu- miendo acd la lucha por el poder, 0 una de las formas. La tnica limitacion que tendremos y por eso tendremos que galopar sobre los temas, sera el problema del tiempo. Pensamos que no es posible hablar de lucha Ror el poder 0 del poder popular sin hablar lel Estado. Del Estado burgués, del aparato del Estado capitalista. ‘No diremos ni aportaremos ninguna novedad tedriea pero ocurre un poco en Chile que la suma de téctleas, la flexibilidad tactiea va ra- yando en oportinismo, y es poco frecuente mecordar cual es la esencia real de las cosas y como realmente se ordenan las fuerzas y los aparatos dentro de una sociedad. El Estado es en esenela un instrumento de dominacién de clase. Busea y ejeree fun- damentalmente wna coercién, se trata de man- tener una mayoria explotada dominada por una minoria explotadora, Lo hace a través de dos formas fundamentales: formas repre- sivas: alli estan las masacres —Pisagua para los que Jo olvidan—, los desalojos, 1a represion policial o militar en sus distintas instancias, y tiene también componentes y formas ideol6- gieas que son la moral, el derecho, la lega- Iidad, etc. Todo alli esta construldo justa- mente para mantener 1a explotacion y ia do- minacion de una clase por otra. Tiene varios componentes, entre ellos esté el aparato eje- cutivo, esté él aparato armado, verdadero es- queleto de aparato del Estado, ias FF.AA., es- ta el aparato burocratico, esté el parlamento, esté la justicla y una serie de otros compo- nentes, ‘cada uno encargado de especificas funclones. La base fundamental de é! empla sociedad ‘capitalista es el Estado de dere- cho que se consagra por escrito en la llamada. Constitucién, en las leyes. Por escrito se re- presentan los intereses de una minoria para, cxplotar a una mayoria, por escrito se con- sagra el derecho a la represion y a la explo- taclén de una mayoria por una minoria. Le Constitucién, y no hay ningun teérico capaz de demostrar lo contrario, no representa los intereses de la nacién, de ‘todo el pueblo, re- presenta los intereses de una minoria, y esta y existe en funcion de explotar, reprimir y mantener la dominacion de una minoria so- bre una mayoria. E] Estado sufrié transfor- maeiones en el caso particular chileno; tlene Por un lado caracteristicas especificas'y por otto sufrié modificaciones con el ascenso del goblerno de la UP. En Chile, el Estado es también un aparato de coercién de clase. En Chile eso si, adopta, al mismo tlempo una de- terminada forma, la forma més elevada de Estado burgués, la forma en la cual la dic- tadura de Ia burguesia sobre el proletariado Se expresa en la forma de democracia repre- sentativa y Chile es uno de los paises que ha. jogrado ‘generar una de las mas estables ¥ solidas, ‘No s6lo eso, el Estado chileno también por muchas razones tuvo un enorme crecimiento en décadas pasadas, crecimiento que se ace- leré durante el gobierno de Frei y en parti cular durante el gobierno de Allende. A fines de la década del 60, finalizando el gobierno de Frel, distintas otras causas que seria largo de exponer aca, hicieron que estas formas re- presentativas, estas formas democrdticas de expresin de ia dictadura de la burguesia so- bre el proletariado dejaran de ser tan demo- crdticas, y fue acercéndose a democracias re- presentativas un tanto mds represivas. Y fueron hacléndose més coereltivos los meca- nismos de dominacién politica al interlor de este pais y ahi esta la “mano dura” de Pérez Zijovie, las masacres de Frei, las torturas, la represién, los decretos de reanudacién de faenas, fenémeno general expresado en mil- tiples formas en los titimos afios del gobler- no de Frei, Esto era por muchas otras ra- zones que a los finales iban germinando y generando lo que después iba a cristalizarse: Un_periodo prerrevolucionario. Entraban en crisis las clases dominantes al mismo tiempo que se producia un marcado, notorio y cualitativo ascenso de las luchas del pueblo, eneabezadas por la clase obrera, que fundamentalmente cuestionaban el sistema. de dominaclén mismo; ya no sélo se trataba de la lucha entre fracciones de la burguesia, Este periodo generd un momento en su de- sarrollo. La formulacién y configuracion de las earacteristicas de este periodo que lama- 5 Documento: mos: prerrevolucionario cristalizé un momen- to, que fue generado por causas que van mu- cho més alla de algunos partidos o de algu- has condueciones particulares: el gobierno de 1a UP. Se produjo a partir de la generacién de ese goblerno una particular situacién en Chile. El aparato del Estado siguié siendo un. instrumento de dominacion capitalist y bur- guesa pero sufrié importantes modificaciones. Al interior de su cuspide, en la parte mas alta de él, en el poder Ejecutivo, se Instal6 una fuerza soclal, un frente politico que no representaba los intereses de la clase domi- nante y, al contrario, tenia fundamentales contradicciones con ella. El resto del sistema eso si, sigulé establecldo para lo cual habia sido construldo, y siguié funcionando. siguié slendo el aparato del Estado capitalista que tenia insertado dentro de si un componente que estaba ocupado por otros sectores socia- les, por otros frentes politicos. Pata el resto de’ los componentes del aparato del Estado, la norma de conducta siguié siendo 1a norma, de, condueta del aparato del Estado capita sta, Alli se fortaleclé, en determinados eompo- nentes del aparato del Estado, la clase domi- nante, En el Parlamento, en la Justicla, en 1a Contraloria, ete. ‘A partir de eso comenz6 una lucha deno- dada al interior del aparato del Estado, a la vez que se daba en el conjunto de la sociedad, por, detinir cul era la clase y cuales eran j0s intereses que hegemonizaban el control del aparato del Estado. Pero esta Iicha se daba sobre clertas garantias y sobre ciertos mar- cos. Los marcos los establecia el respeto a la legalidad, el, respeto ala Constitucton, el respeto a aquella formulacién por escrito de dominio de la burguesia. Podia operar y moyerse el pueblo, podian moverse las fucr~ zas politicas, incltiso teniendo en la céspide del aparato’del Estado, el control de. ella, fuerzas que no eran de la clase dominan- te, slempre que lo hicleran dentro de de- tetminados moldes y marcos del sistema de dominactén eapitalista. Ese fue el cardeter de Jas garantias constitucionales exigidas por la DC en el Parlamento. La lectura de ellas es- tablece claramente eémo puede diferenciarse lo que es el sistema de dominacién capita~ Usta. de lo que es el ejercicio 0 el dominio de un sector 0 una parte del aparato del Estado. Esas mismas garantias son Jo que otros han Mamado “el Mose”, como Claudio Orrego Vi- cuiia, idedlogo De que ha levantado la de- fensa de la legalidad, la defensa de los par- tidos politicos, 1a defensa de la educacion privada, la defensa y el establecer la per- manencia intacta de las FF.AA., de la pro- pledad privada, son considerados’ el Moscii, a artir del cual habia que dar cualquier ba- lalla por defenderlo, desde el punto de vista de Ia burguesia. Andrés Zaldivar lo llamaba en entrevista de prensa “los pilares de la democracia”, eran los pilares de la dictadura de la burguesia. Cul era en esa pecullar situacién la tarea que los revolucionarios debimos y debleron proponerse otros. Fundamentalmente desarro- Har la politica concreta que permitiera ha- cer madurar un period. prerrevoluclonarlo @ una situacién revolucionaria y que luehara tenlendo como objetivo fundamental la con- autista del poder. Todo esto entendido en la particular forma, que adoptaba la lucha de clases en Chile No se trataba de ir conquistando el poder por pedazos, como quien corta un salchichén en pedazos, 'y cada euota que se va ganando g conquistando es una supuesta euota de po- er. Ei hecho de conguistar el gobierno no per- mitia hablar de una cuota de poder al inte- rior de la sociedad. Mas bien decimos son po- siciones que son valorables y hay que valo- rarlas como positivas, a partir de las cuales puede realmente, combatirse, si se colocan en sentido correcto," por Ja conquista del poder. Pero no puede entenderse que toda posicién que se tome en el aparato del Estado es una euota de poder que se va tomando, Por la via de Ja caricatura gar incluso a decir que cuand era _diputado, hace muchas déeadas, habia ya una cuota de poder en manos -del’ proletarlado, 0 cuando tonemos a un suboficial de faquierda tenemos gna cuota ge poder al interior del aparato del Estado. Y si exageramos esto, cuando te- hemos una oficina piblica que controlamos, © tenemos algin fncionarlo publico, ten- @riamos otra rebanada del salehichén iama- ao poder. Nosotros no estamos con esto subvalorando Jo que puede entenderse como el uso del Ins- trumento que pudiera haberse hecho del go- bierno en manos de fuerzas de izqulerda, ni mucho menos. Pensamos que era de verdad un poderoso instrumento que, orientado en sentido eorrecto, pudo haber permitido avan- za mucho, 0 por lo menos mas de lo que realmente se avanz6, ¢Qué entendiamos que habia que hacer? Entendiamos que habia que acumular fuerzas y la fuerza no se podia en- contrar al interlor del aparato del Estado. Esa fuerza no estaba en los pasillos del Congreso, en los pasillos del ministerlo; esos eran Ins: trumentos, posiciones que, colocadas al ser- viclo de Ia busqueda de la fuerza en la fuente fundamental, el movimtento de masas, po- dian permitir acumular realmente la fuerza suficiente y revertir la correlacién de fuer- zas a favor del pueblo. Hsa era la tarea fun- damental, es la tarea fundamental, y la re- Iacion entre el movimiento de masas y el go- bierno debio haber sido y debe ser el uso del instramento gobierno al servielo de las luchas del pueblo. Para acumular esa fuerza al in- terlor del pueblo, No en su freno, no al con- trario, el ‘movimiento de masas detras y te- niendo al gobierno de la UP como meta ini ca, ineluso tltima en oportunidad. ¢Cémo en- tendiamos que eso podia hacerse? Habia que levantar un programa y hacer las adecuacio- nes al programa de la UP que fueran nece- sarias, Después habrian de emerger progra- mas adecuados. Habia, al mismo tiempo que as tareas politicas, las alianzas, las movili- zaciones del pueblo, que identificar a los ene- migos politicos y no confundirlos, y para an- dar rapido no ahondo sobre eso, habia a la vez, ¥ aqui legamos a los Comandos Comu- nales, que ir estructurando al interior de esta particular situacién, Grganos autonomos del pueblo, organos auténomos de clase, que fuc- ran independientes del aparato del Estado & independientes de las clases dominantes. Es0s Documento 6rganos autonomos son los que empiezan hoy @ germinar en los Comandos Comunales. Esta no es una tarea que esté permanentemente planteada en cualquier pais, en cualquier mo- mento; pero en un periodo ‘prerrevolucionario es justamente una de las tareas fundamen- tales y la herramienta fundamental, y no el gobierno, que permitia acumular la fuerza y realmente caminar hacia la conquista del Po- der. Se trataba de organizaciones que fueran independientes de las clases dominantes, de la burguesia. Se trataba de organizaclones de masas que fueran Independientes del aparato del Estado y no que estuvieran sujetas a él. Sin temores y pacateces de ningiin tipo, di- cho claramente, caminar germinalmente’ ha- cla Ia dualidad de poder, que es el unico ca- mino que realmente podria ir construyendo un poder alternativo. Dicho por decreto, ar- bitrariamente y artificialmente y no enten- diendo que es un problema que tiene que ger- minar progresivamente y de acuerdo a las correlaciones de fuerzas y al tenor de la fuerza que se acumule, es evidentemente una sinrazén. Pero puesto en la realidad concre- ta, como octubre lo demostré, era un camino posible y al que las masas estaban mas que dis- Duestas y estén hoy mas que dispuestas. Esto era, ms o menos, lo que entendiamos por las tareas que habia’ que levantar alrededor de los Comandos Comtinales. No podia ser hecho por decreto, no podia ser hecho artificlal- mente, no se podia tratar de plantear como tarea ‘inmediata el asalto al poder, eso era caer en ultraizqulerdismo, nadie lo ‘ha plan- teado asi ‘Tampoco, y estamos todos de acuerdo, esos 6rganos tenian que tener como eje una’ pol tica contra el gobierno, nl mucho menos. Pe- ro tampoeo podia, a partir de que se habia conguistado €! gobierno, confundir en el he- cho y en la practica y trabajar sobre la base de que se habia conquistado el poder 0 cuotas de aquel salchiehén de poder. En particular, Pensamos que la generacién de los Coman- dos Comunales tiene que estar regida por una orientacion de este tipo. Establecer como al- gunos quieren establecer los Comandos Co- Mmunales, no como embriones de poder, sino como organismos dependientes del aparato del Estado y subordinados a él, es justamente anular su “desarrollo. La polémica no esta puesta en que tienen que desarroliarse contra el gobierno 0 a favor del gobierno, la politi- ca tlene que ser otra, como se articula la utilizacién del instrumento del gobierno in- dependizado de la generacién de érganos de Roder progresivo al interior del’ movimiento le masas y la resultante de ambos factores e instrumentos avanzar. Habia que hacerlo entendiendo realmente cual era la situacion particular que teniamos. Santiago no era Petrogrado, ni el afio 72 te nia mucho que yer con 1917, pero algo tenia que ver. No habia acd una crisis general del sistema en Ja cual las tareas que los bolehe- viques entonces se plantearon estuvieran a la orden del dia; pero si las Iineas esenclales del desarrollo ‘de la lucha de clases, en los Periodos fundamentalmente definidos, si que tenian un hilo conductor similar. Habia que hacerlo en Chile entendiendo que permanecia el sistema de dominacién capitalista y que el puede permitirnos realmente Estado burgués existia como tal. Entendien- do a la vez que dentro de aque! aparato del Estado habian posiciones ganadas por {uerzas politicas que no eran de la clase dominante, que el goblerno estaba en manos de la Iz- quierda: y habia que entender también que se daba ‘un movimiento de masas, con la clase obrera como vanguardia en ascenso y a la ofensiva en términos globales, y por tan- to, que era posible plantearse la’ generacién de estos organismos autonomos. Entendiendo que esto iba a establecer contradicciones con el aparato del Estado y con el sistema de do- minacién. Pero alli no eabia vacilacién. Si de revolucién estabamos hablando, y ese es el objetivo, asi entendiamos ia generacién de los Consejos Comunales de Trabajadores. Llamabamos y lamamos a los Consejos Co- munales de Trabajadores, aquellos organismos, en los que ya cristalizan’tareas de poder. No es Ja situaclén de hoy dia, hoy hablamos de Comités Coordinadores 0 Gomandos Comuna- es en los cuales van germinando recién coor- dinaciones, incluso muchas de ellas todavia en una fase burocratica y que todavia no lo- gran ser democraticas y convocar al conjunto del pueblo. ¢Por qué entendiamos esto de esta manera? Entendiamos que en el caso particular de muchas socledades latinoamerieanas y en par- ticular de Chile, decir alianza obrero-campe- sina era insuficiente, y habia que establecer también la alianza con los que Mamabamos los “pobres de la ciudad”, y la unica forma gue, teniamos, de incorporarlos, 0 forma mas actible que teniamos presente, era la posi- bilidad de incorporarios a través de lo que lamabamos los Consejos Comunales. En se- gundo lugar, entendiamos que el pueblo es- taba fragmentado, que la clase obrera estaba, dividida por la unidad de produecién y que estaba el pueblo fragmentado por sector s0- cial, que los pobladores no estaban unidos a los obreros, que la clase obrera no podia ser vanguardia de las clases en forma global y plena en la medida en que estaban fragmen- tados campesinos de obreros, pobladores de obreros, estudiantes de obreros, que habia que buscar un mecanismo unifieador de todo el pueblo, un mecanismo que, al mismo tiempo que unificara, que incorporara a capas que estaban mas retrasadas o que estaban pasi- vas, esto es lo que planteabamos alrededor de ‘los Consejos Comunales. A partir de eso entendiamos que se podian plantear las tareas del control del aparato burocratico del Esta- do, en las cuales se levantara y reconociera, la contradiccién fundamental que habia y hay entre el movimiento de masas y el aparato del Estado, entendido como el aparato buro- eratico del Estado, las tareas y la lucha an- tiburoeratiea que él pueblo vive minuto a mi- nuto en la salud, en la vivienda, en la edu- cacién, y del cual se defiende y ‘tiene el de- recho y el deber de combatir, y es la tnica forma también de incorporar fuerzas y ca- pas del pueblo, Esto entendiamos que eran Jas tareas que tenian que plantearse alrede- dor de la generacin de este tipo de organis- mos. Alli 5¢ encontraria la fuerza y la con- ciencia para enfrentar a la burguesia, por un lado, y para ir generando érganos de poder; y esto manejando la contradiccién de que en la realidad el aparato del Estado capitalista a Documento: estaba atin alli, que habia un gobierno de iz- quierda, eso era real, y que al mismo tiempo teniamos que generar esos organismos. La crisis de octubre, y galopo un tanto, pues ya se termina mi tempo, hizo evidente todo esto. Ante la ofensiva patronal, la clase obrera y cl pueblo dieron un enorme. salto adelante, un gigantesco paso adelante. Antes habian germinado algunos factores de_estos en las crisis de agosto y septiembre. En la crisis de octubre tomaron en sus manos el aparato productive casi en su totalidad, de- mostraron que los patrones estaban de ‘més, como formulaban nuestras consignas; esta- blecieron control obrero sobre wna enorme parte del aparato productivo y distributivo, rompleron 1a. polaridad gobierno-oposicion_y lograron establecer una polaridad de clases, aislando a la DC de la base obrera que habia logrado ganar en cl periodo anterior. Se le- vantaron programas y adecuaciones ‘peo! maticas conocidas como el Pliego del Pueblo y el Manifiesto del Pueblo; embrionarlamente Surgtan sintomas de una ‘contraofensiva po- pular que debié haber sido 1a senda funda- mental a partir de Ja cual debié ser orienta- do el movimiento de izquierda y el pueblo después de la crisis de octubre. Pero la cri- sis de conduccion y las vacilaciones reformis- tas hieleron que esto no se establecier Hablendo germinado organos, _germinal- mente de poder local en un ascenso que era earacteristieo del periodo, pero que aca to- maba connotaciones importantes, habiéndose generado mas de medio centenar de Coman- dos Comunales que abrian embrionariamente Ja generacion de un poder popular, la _con- duccién reformista que predomind, y no ful- mos capaces de revertiria, establecio lo con- trario, buscé una salida distinta; el_gabine- te, el llamado por ellos gabinete civico-mi- Utar, por nosotros UP-generales, El reformismo fundamentalmente planted y logré predominar en las fuerzas de iaquierda y sabemos que en esto tuvo que “predominar” porque el conjunto de la fuerza de izquierda no participaba de esto y levanto la formula de Jo que lamabamos gabinete UP-genera- les. Qué estaba realmente haciendo? Acep- tando imposiciones de la clase dominante o de fracciones de ella; no eaia el gobierno, Pero al mismo tiempo, eso si, se consolidaba el sistema de dominacién burgués. Las fuerzas armadas son un componente del aparato del Estado burgués y en este mo- mento, a partir de particulares situaciones que sc han dado en Chile, se han ido inde- Pendizando o autonomizando, como algunos Maman, de la representacion del jarpismo o del freismo, y se levantan como’ sacerdotes defensores del Estado de derecho, de la le- galidad, del sistema de dominacién capita- lista, y esa es la realidad, y esto es lo que se ha estado consagrando de hecho, a partir de la generacién dei gabinete UP-generales, Es- to para nosotros no significa tener que decir que “el gobierno es burgués”, ni “abajo cl go- Dierno”, ni tampoco “abajo ios ministros mi- Iitares”. Decimos que eso es un problema que la tactica tiene que resolver. Pero debe reco- nocerse que lo que se estaba consolidando eran el Moseit de Orrego, los pilares de Zal- divar, 0 el Estado de derecho, como lo ha lla~ mado el mismo ministro del Interior; y al interior de él habia que devolver determina- das {abrieas, habia que “no hacer antimpe- rialismo” contra el gobierno norteamericano sino que contra algunas empresas, habia que levantar no la lucha por un poder popular, sino algunas transformaciones econémicas, se estaba consolidando el sistema de domina- cion capitalista, se estaban sentando las re- glas del juego én las que el pueblo tenia que dar su lucha Nosotros no dejamos de valorar posiciones, especialmente del PS y de la IC, que favore- cieron y apoyaron Ia generacién de Coman- dos Comunates desde su partida, también en- tendemos lo hizo después el MAPU, incluso el PC. Todas ellas las consideramos positivas aun cuando con algunos de ellos tenemos to- davia diferencias en Ja forma y en Ia adecua- cién que deben tomar en su desarrollo. Las consecuencias de lo que lamamos no- sotros el cambio de earacter del gobierno, pa~ ra nosotros consiste fundamentalmente en que el eje del gobierno se ha desplazado, se ha recoldado o se Intenta resoldar el apatato del Fstado, se intenta, por tanto, se intenta impedir cl desarrollo de un, poder popular. Se intenta resoldar el aparato del Estado y un sistema de dominacion. Esto dificultaré él desarrollo de un poder popular y debe ser entendido asi; no signifiea que lo sefiala en definitiva. Esto también es Independiente de que vatoremos declaraciones de determinadas alas jerarquias militares que podamos con- siderar positivas, pero la ubjeacion que las fuerzas armadas bistérleamente estan toman- doy que objetivamente tienen cn estos ins- tantes es la que deseribimos; y lamarse a en- gafio a partir de una w otra declaracion es no entender Ja esencla de las cosas y de lo que ha ocurrido. Terminemos diciendo una cosa, la generacién de este gabinete y la for- mulacién de las vertientes que tomara el de- sarrollo de la Iucha de clases en Chile en los préximos meses pasarén Importantemente por el fenémeno electoral y esto guarda relacién con la generacion de wn poder popular. En conereto, para nosotros, el problema de la importanela de las elecciones no puede Ia mar a confundir a nadie y no puede Namarse a engaho a nadie. Por la via electoral nadie puede conquistar el poder, pero si es un he- cho que en determinadas oportunidades es posible hacer uso de las elecciones como ins- trumento téetico que fortalezca las Iuchas del pueblo por la conguista del poder. En la par- tienlar situacion de Chile, las eleeciones de marzo tendran importancia y seran funda- mentales por Ia convocatoria que generaran y también por las consecuencias que puedan tener. Desde ese punto de vista planteamos Ja necesidad de que tanto los revolucionarios como el pueblo participen dentro de ella, pe- To sobre la base de dos euestiones: la prime- ya de ellas que 10 hagan a partir y levantan- do un programa que sea un programa que quiebre las polaridades de oposicién-gobierno y que levante polaridades y enfrentamtentos de clase. y le quite el apoyo popular a la bur- guesia. ¥ por el otro, que declare no la con- Soiidacién del sistema de dominacién bur- gués, no el apoyo o el aplauso al Parlamento, sino ‘la Iucha por la Asamblea de! Pueblo, ¢o- ronacion final del desarrollo progresivo de tos Comandos Comunales. Eso es todo. Documento PARTE DE 10S asistentes a! foro organizado por ei sindicato de “Clarin”. UTOR BARBERIS, de! Partido Sccialista Todas las revolueiones de 1a historia, triun- fantes 0 no, han Nevado en su vientze el po- der dual. ‘Todas las clases que han insurgido por el poder, han Ilevado en su seno el germen de a dualidad de Poder, puesto que han habla- doen nombre de Ja nacién para poder ven- cer. La burguesia hace algunos siglos lanz6 la consigna de libertad, igualdad y fraternidad para arrastrar tras si no s6lo a'su clase, sino para arvastrar tras sia los sectores mas po- bres de la sociedad francesa: a los artesanos ya los obreros nacientes. ¥ hubo alli una dualidad de poder. Hubo ahi una izquierda ~-si se me permite la li- cencia de lenguaje— la izquierda de Robes- pierre, que fracasa en su intento de Hevar la Tevoluicion burguesa més allé de los marcos gie la historia ie permitia, En el caso conereto de as revoluciones al sotialismo, todas aqucllas qve an triunfado, © que han sido derrotadas, porque no olvide- mos compaieros que no todas han sido triun- fmtes, el fenémeno ha sido atin mas claro. Fn eleaso de la Revolucion Rusa, el Soviet frente al gobierno provisional. En el caso de ln Revolucion Cubana, el ejército serrano fiente a la pequena burguesia que tal vor puede simboliar cl ex presidente Urrutia, que la acompatia en un trecho, pero la fi na cuando la revolueién no se detiene en los limites democraticos, sino que avanza hacia Ig revolucion obrera’y_socialista. Hay también easos de re der dual, en que la revoluc’ ada; el caso de Aleman ts de Ba- Viera, aizamiento heroico pero frustrado. Los soviets de Hungria, aplastados por la burgue- sia_y por ios ejercitos extranjerom Y yo quievo traer aqui estos reeuerdos histérieos no por hacer academia, sino que pienso, que cuando 1a izquterda se, pian- tea —y debe plantearse— la perspectiva de ja dualidad de poder, y la creacion del poder popular, tiene que recordar que tiene que eniocario en términos objetivos, leninistas, vale decir cientificos. Tiene que entender que cuando se comien- za a crear el poder dual, 1a aventura tiene que Hegar hasta el fin; y'el poder dual y el poder poptlar s6io tienen ia alternativa de yencer 0 de mori. Y que es justo, entonces, minar. no s6lo las condiciones’ generales, teér.eas, en que se estd dando. sino las con- diciones concretas en que se da, ia insereién ge la coneepelon general dei poder dual, ea las condiciones cone-etas del ¢aso chileno. fero decir que’ mi partido ha dicho —¥ lo reiteca ahora a través mio— que no hay dos sociatismos. No hay dos vias al socia- ismo. Entiende mi’ partido que el sovialismo no significa expropiar las fuentes de produc- edn, nifiear 1a economia. Que el cami- cialismo sdlo se garantiza por la he- gemonia de} proletariado, por ei cambio del cardcter de clase de un Fstado. El avance al socialismo, 0 el grado socialista de un gobier- no. y asi lo entiende mi partido, no lo mide lo el grado de bienestar que esté entregan- do & los trabajadores, sino el grado de con- trol que los trabajadozes estén ejerciende so- bre el Rstado. Vale decir. nosotros rechazamos 1a concep- ion de aprovechar o heredar el Estado bur- gués para aprovechario técnicamente mejor, para los intcreses de ja clase obrera, sino que planteamos la transformacion revoiucionaria, de! Estado burgués, en Estado al servicio de clase obrera en la etapa de transicion ha- cia el sociaiismo. Si nosotros apiicamos y asimilamos ésta, que es una verdad mundial, al caso chileno, nos enconiramos con que hay tres particula- tidades que diferencian 1a revolucion chilena de otros intentos vietociosos o frustrados ha- ca el socialisn ¥ lo difevencian no en el contenido de fon- do, que iecién he dejado establecido clara entc. sino en cuanto a las singularidades proplas en que se da. En primer lugar, se tiene el acceso a parte gel poder por una via no insurreccional. Por una via que podriamos Mamar politiea, que es una palabra mas nentral y menos polémi- ca, En segundo lugar, el hecho de que el acce- so'a parte del poder, como la propia palabra lo esta diciendo, deje intacto al resto de la inst:tucionalidad’ bureuesa, ha hecho que esa parte del poder se debata, tratando de que- brar al resto de la institucionalidad burgue- Sa, pero en el curso concreto de la realidad v de Ja vida de Jos tiitimos meses, ellos han ido demostrando que la parte de’poder que la

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