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UN ANO DE SOLEDAD Croénicas y lecciones de un politico primiparo Ariel Powered by (3 CamScanner Un libro necesario Mosits Nain La mejor mane de conocer un pass es participando en una campana electoral, Este es un frecuente comentario de Jos po- liticos que he conocido a través de Jos aiios, Una campatia electoral implica viajar por todo el pais y Negar a sus lugares mas recénditos, a los mas présperos y a los mas abandonados, Significa, por lo tanto, interactuar con la gente mas rica y la mas pobre del pafs, escuchar las quejas y reclamos, conversar con ancianos y jovenes, madres y jefes de familia (con frecuen- cia son la misma persona), ladrones y policfas, Se descubren conductas humanas inimaginables, unas por su virtud y otras por su maldad. No hay mejor manera de acercarse a Jas esperanzas, frus- traciones y alegrias de la gente. Es una forma muy tnica de escudrifiar el alma de un pais. La interacci6n con personas que son compatriotas, pero también muy diferentes a uno, lleva a hacer amigos y ganar enemigos, aguantar reganios y, por supuesto, recibir duras criticas y feroces ataques. No es comin entre los politicos que después de partici- par en campaiias que han api Su experic torales reflexionen en piiblico sobre lo vablar de dido. Sobre todo, les cu y los esl6- ia a través de las tipicas frases he anes que oimos enuna campaiia tras otra, cada cuatro anos. 15 Powered by CamScanner Unaito de soledad han hecho ptiblica su sintesis |— de lo que vivieron ro no sabian Son pocos los politicos que —muy personal, intima y ¢ durante la campaiia. De lo que saben ahora, pe! antes de emprenderla. Esa es justamente la reflexion en la que se Juan Carlos Echeverry, a quien me atrevi a animar para que la escribiera. Poco tiempo después de que Echeverry decidiese ncial, el 13 de enero de 2022, espiritua ha embarcado abandonar su aspiracién preside lo insté a que compartiese con los colombianos —y con otros latinoamericanos— las experiencias, percepciones y sentimien- tos que le dejé su intento de llegar a la presidencia de su pais. ‘Afortunadamente, no eché en saco roto mi sugerencia. No habjan pasado dos meses desde esa conversacién, cuando trajo a mis manos este fascinante recuento de la campana elec- toral y, por lo tanto, su visién de la Colombia profunda del siglo x1, justo después de que fuese terriblemente sacudida por la pandemia. Uno se entera de que la verdadera guerra de Colombia . no se libra solamente en las selvas del sur y el occidente, entre carteles de la droga y las Fuerzas Armadas. Cada dia en las pla- zas, parques y calles de ciudades y pueblos hay enfrentamien- tos por el control del microtrdfico de las drogas. Esta maldicion avanza cada dia mas y corroe a las familias, ante la inactividad ya veces complicidad de la Policia. Echeverry nos lleva a escuchar la conversaci6n con el se- for que esta construyendo su casa en la ciénaga de La Virgen, en Cartagena, dentro del agua, en palafitos, como las casas que encontraron los espafoles cuando llegaron a Venezuela, y que motivé el nombre de mi pais (soy venezolano). Ese hom- bre pobre esta leno de esperanza y de hambre de progreso, a pesar de que sus tancias sugieran lo contrario, i r la violencia por dentro, el autor nos rsacion que tayo con un maton de Medellin. estremecedora como la que describe un Buscando entende comparte la conve Es una histo Powered by CamScanner Un libro necesario militar cuando habla de lo que sucede a diario en la peligrosa frontera con Ecuador. En la galeria de Popayan, Guillermina Gutiérrez le dice al candidato que busca su voto: “Ojala sirva pa’ algo”. Pues con este libro, Juan Carlos Echeverry nos va a servira todos para mucho, y le vaa cumplir a dofia Guillermina. Este libro también documenta la ineficacia de las agencias supuestamente dedicadas al cuidado del medio ambiente, que por su caracter auténomo y por la corrupcién han mutado en camarillas que agobian a los agricultores, industriales y mine- ros. Y no es este el tinico sector en el cual la corrupcién choca de frente con el progreso, derrotandolo. Estas paginas nos revelan tragedias, pero también nos abren ventanas que muestran la potencia que tienen la recon- ciliacion y la esperanza, en un pais largamente agrietado por los conflictos armados. El barrio Petecuy, de Cali, por ejem- plo, era uno de los mas pobres y violentos de esa ciudad. Alli, la violencia era incesante e impulsada por una larga y san- grienta disputa entre grupos locales y de recién llegados que se vieron desplazados por la violencia de Buenaventura. Estos choques armados escalaron hasta convertirse en guerras abiertas que produjeron un sinnimero de muertos. Un dia, sin embargo, una avalancha del rio Cauca los uni6, y puso a los jovenes de un lado a entretener a los nifios del otro lado. Ese dia nacié una luz de futuro y reconciliacion entre los dos lados de una calle que por mucho tiempo los habia dividido. Agradezco a Juan Carlos Echeverry que no haya escrito un libro técnico, de esos que, como decia Julio Cortazar, vie- nen con las polillas puestas. Al contrario, este es un libro tan vivo y presente como los protagonistas de las conversaciones que aparecen en él, Powered by CamScanner Caminar, mirat, escuchar y entender Colombia sale maltrecha de la pandemia. Ante un pais que ha vivido dos aiios de padecimientos de salud, muertes, quie- bras, desempleo y hambre, el pronéstico politico es reservado. Los candidatos presidenciales que lideraron las encuestas de los mas recientes comicios proponian poco, y el que mas ha- blaba proponia varias cosas disparatadas. Las noticias que llegan de paises vecinos muestran que la gente siente rabia y desesperacién. Lo mismo sucede en Co- lombia. Hay hastio y asco frente a la corrupcion y la ineficacia estatales. En el chat de los compaiieros del colegio, en las con- versaciones casuales con amigos y conocidos, asi como en los articulos de prensa, se siente que muchas personas se inclinan por propuestas extremas, que descreen de las instituciones, de la empresa privada y de la forma como se han hecho las cosas en décadas recientes. Es previsible que, en caso de aplicarse, algunas de las pro- puestas que hay sobre la mesa empeorarian la situaci6n, en vez de mejorarla. Si hay un momento en el que sea urgente actuar, €s ahora. Ese convencimiento me Ilev6, a principios de 2021, a entrar ala carrera presidencial, Una vez tomada la decision, era impe- rativo allegar la mejor informacion disponible sobre los proble- mas y las alternativas sensatas de solucién y, ante todo, caminar Qi Powered by § CamScanner Un aio de soledad -uchar, dialogar con mucha gente, barrios, calles, conversa ais (lar, ; : aera Ver con mis propios Q)08 yorr ra parques y patios qué es lo que Ja gente esta pensando. Esta fue la motivaci6n para em) ccarnos durante 2021 en viajes para recorrer el pais y hacer un esfuerzo por entender Jo que pasaen Jas casas y las calles de Colombia. Estefania Gon- zilez mandaba sobre el viaje, la log’ ‘stica, las citas y el cumpli- que, twas un par de chascos, se nos miento de los horarios, yolvié un asunto religioso. Arquimedes Jaime conducia y re- gentaba la utileria, y Camilo Monsalve no paraba de tomar fotos, hacer videos, editarlos y enviarlos a Bogota para que los subieran a las redes y los enviaran a la prensa. Andabamos en una camioneta Toyota blindada, que nos presté mi hermano Gonzalo y su hijo Sebastidn, que yo conducia por tramos, por el gusto de manejar y dejar que Arquimedes descansara. El disefio de las giras cumplia con la estrategia que definimos en el grupo de direccién de la campaiia, y, por supuesto, con la disponibilidad de amigos y voluntarios que nos pudieran reci- bir y guiar en las ciudades, de lo cual hablo més adelante. Al tiempo que lo haciamos, ibamos de ciudad en ciudad contando a la gente las ideas que teniamos, y que nos lleva- ban a querer participar en una carrera presidencial. Estas son las dos cosas que hemos reunido en este libro: las con- versaciones que mantuvimos en muchas partes de Colombia y las historias que contamos sobre cémo resolver los pt blemas del pais. ice pa nea eee iene crénicas, narraciones y ¢O™ versaciones que tuvimoss aciones que tuvimos a lo largo del pais, y muestra a Colon bia en esta Gltima etap aba de la pandemiz Bo p ‘a pandemia, cuando se pre] para la campaiia presidencial, La segun por fas cuales nos embarcamos en u ideas que propusimos —y que nes, las traicione: ampaiia politic las nos vigentes—, las lece lo” ‘as resurrecciones, los reve : 22 Powered by CamScanner Caminar, 1, escuchar y entender que tuvimos. Todo el registro fotografico y audiovisual de estos recorridos se puede visitar en www,juancarlosecheverry.soy Este es el relato del pafs que vi, que recorri motivado por unaaspiracién politica, es la naci6n que encontré. Quienes sean los préximos congresistas y quien ocupe la Presidencia de Co- lombia no podran seguir evadiéndolo. Presento una fotografia, o mejor, una pelicula de un pajs que necesita de la experiencia de quienes han gobernado exitosamente en sus regiones, con la vision de concretar proyectos politicos nuevos que se hagan con transparencia, honestos de coraz6n y con genuina vocaci6n de servicio para levantarlo, con mayor urgencia a medida que va quedando atras la pandemia. Quienes nos gobiernen tienen una oportunidad tinica de cambiar a este maltrecho y golpeado pais. Quienes elegimos mediante el voto también tenemos una responsabilidad enorme de cambiar la realidad. Ojala, por el bien de todos, asumamos con seriedad el reto. Cuando le comenté a Gabriel, mi hijo mayor, de 16 aiios, el nombre que le iba a poner al libro pregunto: “zLo dices por elaiio que nos dejaste solos?”. No pensé en esa interpretacion, pero pronto descubri que cada persona que consulté tenia una interpretaci6n distinta de la soledad, con lo cual el titulo re- flejaba muchas soledades, y no solo una. Gregorio, el segundo, de 13, puso una condicién cuando hablamos de la campaiia: “Primero gana y después hablamos”, Por tiltimo, Julieta de 11, pregunto un dia: “Si ganas la presidencia vas a ser feliz?”. Le respondi que no. “Entonces, Por qué quieres ser presidente?”, dijo. Este libro es Ia respuesta. Powered by § CamScanner Eliécer quiere boxear El que busca encuentra. El mar es calmado en Santa Marta, pero es una indicacién engafiosa. La ciudad se ve acogedora ycalmada, como su mar, pero esa apariencia oculta tensiones tremendas; no obstante, hay que buscarlas, porque muchas de ellas estan acalladas por la intimidacién. Solo se siente el mie- do al que estan sometidos muchos samarios cuando se intenta hablar con ellos. De entrada, nos llevamos la sorpresa de que, para los lo- cales, quienes estaban a cargo de los problemas preferian tra- barse en disputas politicas mezquinas e interminables que unir esfuerzos y resolverlos. Hubo repetidas quejas de que el gober- nador no se entendia con el alcalde, ni con el gobierno de Bogotd, y que intimidaba a sus gobernados. Encontramos a una Aracataca olvidada, salvo en los cuentos y las novelas de Garcia Marquez. Los empresarios del turismo manifestaron su desesperanza por dificultades que se acumulan por décadas, €n un puerto con un inmenso potencial para atraer viajeros internacionales, pero que no cuenta siquiera con un acueduc- to moderno, de agua realmente potable y con servicio conti- nuo. Por dltimo, hablamos con un niiio que queria aprender a boxear, pero no tenia guantes de boxeo. Empecemos por ese niio: Eliécer Gomez. Lo conoci- Mos en una yisita al barrio San Fernando, una zona que vive 25 Powered by CamScanner Unafio de soledad amar la nueva pobreza de Colombia, n desprovistas de pavimento, nj es son de carton 0 de madera, sino dem, mento. Pero tras esas paredes, Mucha y carga con un sinntimero de proble. cin. Para empezar, los Pobladores 1 misma de pobreza, que no es up asunto eminentemente vital de carencia © desesperanza, sino una linea técnica definida por el Departamento Admj. nistrativo Nacional de Estadistica (DANE) que puede dejarlos por fuera de giros mensuales, esenciales para sobrevivir. Lue. go de visitarlos, los técnicos del DANE los clasificaron como clase media, por no vivir en piso de tierra, y por tener bafio y uno o dos electrodomésticos, a pesar de que no tienen en lo que podriamos Ili calles no & es decir, paredes de sus casas terial, de ladrillo y ce gente aguanta hambre sin esperanza de solu 0 se quejan de la definiciér con qué comer. Eran las 10:00 a. m., y en San Fernando nos recibieron con una tremenda olla de arroz de lisa, ofrecida por Rosa de Guadaiia, lider del barrio que ha trabajado en apoyo de los adultos mayores y las mujeres cuidadoras. Nos sentamos en compaiiia de unas 30 personas alrededor de la olla, en sillas Rimax, y fueron pasando platos de cartén con porciones ge nerosas de un arroz bien condimentado y con recado. Las primeras en hablar fueron las mujeres: Viviana Polo, de 33 anos; Rita Martinez Cabello, de 91 aiios; Rita Isabel Pacheco, de 70 anos; Magaly, de 55 afios. Nadie tuvo que invitarlas 4 contarnos sus Cuitas y sus problemas: tenfan en abundancia de las primeras y los segundos, y no iban a desaprovechar la oportunidad, sand meni a oe sobre el problema de las fact” 8, que cobraban un agua que 10 me al Ila que no les He; aban los giros de! mado Adulto Mayor, del Sishé; mos cotidianos que a | programa gubernament’ i 15 en fin, sus quejas y los Te alguien debia ofr y solucionar de unt vez por todas, 26 Powered by CamScanner Eliécer quiere boxear De pronto se acercé un nifio que estaba junto con sus amigos, a unos 10 metros de distancia, bajo un arbol que to protegia del fuerte sol mati durante media hora. Los vefa expectantes sobre lo que estaba pasando. Cuando se acercaron, el que venia adelante dijo: —cUstedes qué estan haciendo? —Quiero ser presidente —le dije—. ZY usted qué estd haciendo aqui? —Quiero aprender a boxear. —Cémo se lama? —Eliécer Gomez. —:Dénde van a boxear? —Estamos esperando que venga el profe a ensefiarnos a boxear —dijo. — A qué hora quedaron con el profe? Hace como media hora, pero no aparece. —iEs la primera clase que toman? —Tomamos una hace dos dias. — ,Cémo les fue? —j{Muy bien! Estamos contentos. Es muy bueno. —2#l profe es bueno? —Mucho; sabe mucho. —Y los guantes de boxeo? —No tenemos guantes de boxeo. —EI profesor trae guantes de boxeo? —Sf: trae un par. —Entonces, ¢cémo hacen? —Nos turnamos. —:Por qué no entrenan en un sitio que no esté al sol, en. nero. Nos habfan estado mirando una galeria, o un gimnasio? —Hay un gimnasio, pero cobran a dos mil pesos y no te- nemos la plata, —En ese momento agrego algo inesperad estébamos al lado de un puente peatonal, y Eliécer senalé para arriba, sobre el puente, donde se vefa a dos jvenes de unos 27 Powered by CamScanner Un aio de soledad ao Nosaulere chos al ba? Nos quieren ven. ‘a que nos metamos © 1D e%6, dom como diciendos “Usted quig, que puede ayudar aqu tengamos 1”, Eran unos quince NiOS entre jog sdamos hablando con Rita, Magaly y :iécer no se me borr6. He contady c qued6 mir 1 Ser re ser el pres donde aprender a boxe 10 y los 14 aitos. Nos que pero laimagen de : storia a lo largo y ancho del pais, en de. para hablar de por qué Eliécer no pue. de aprender a boxear en un gimnasio y como nos ibaa suceder en Bucaramanga, Neiva y casi cualquier tio de nues- tra geografia— enfrenta inerme Ja amenaza de Ja droga sin que nadie lo proteja. Eliécer 0 alguno de sus amigos pueden terminar delin- quiendo, si los delincuentes logran hacer que prueben la dro- ga, meterlos en el circuito de ese negocio, y después, para mantener el vicio, ponerlos a distribuir y delinquir, que es, en el fondo, lo que quieren los dos veinteafieros que estaban arri- ba del puente, y sus proveedores: vincularlos al negocio, y que se vuelvan no solo compradores, sino, ademas, expendedores ydistribuidores, que busquen a otros nifios, y asi sucesivamente. Es la forma como el negocio de las drogas leva avanzando dé- cadas en nuestras calles y en nuestros pueblos. muc bates y pr Es duro ver cémo son nifios yj6venes inermes que no 8 ben lo que les viene. O tal ve: Si saben, y hasta ahora han re sistido pensando que el boxeo o el fiitl otro lado. Les pregunté que no habia una canc ns bol los pueden sacar al Sijugaban fiitbol, y dijeron que si, per? na cerca, Esto sucede en Santa Matt Unos meses después, al contarle decidié pagar ki amigos por un aio, Yo le : sobre Eliécer a un amigo al gimnasio de boxeo a Eliécer es envié . nvie dos pares de guantes de box? 28 Powered by CamScanner Santa Marta prefiere no ser feliz En Santa Marta es obligatorio escuchar a los empresarios del turismo; hablar con ellos resulté revelador. Expusieron reite- radamente el desencuentro entre el liderazgo empresarial y el politico, que impide resolver los problemas de la industria. En vez de estar dedicados a sacar a la ciudad al otro lado, a gene- rar empleo y bienestar, politicos como el gobernador de turno cuando visitamos la regién consideran que su ideologia rife con la de los empresarios y la del Gobierno nacional. Fue la primera vez que escuchamos esto, pero no la tiltima. Un tema critico es la provision del agua potable de esta capital. Es claro que la sierra nevada de Santa Marta podria solucionar el problema de agua para la ciudad y para El Roda- dero, a un costo razonable. Pero persisten problemas para uti- lizar las lagunas de la sierra. El tema técnico, de infraestructura y tuberia para bajar el agua también esta por resolverse. La otra soluci6n consiste en traer el agua del rio Magda- lena, a cerca de 100 kilémetros de distancia, 60 hasta Ciénaga y 37 hasta a Santa Marta. Puede haber una solucién que com- bine ambas alternativas: tanto el agua de la sierra nevada, como la del rio Magdalena. Es descorazonador que un proble- ma que ha existido por 30 0, incluso, 50 afios de unas conversaciones cruciales. aa la espera 29 Powered by CamScanner Unafo de soledad nigo las cifras de aportes de regalias petrol, feras al departamento de Magdalena y a Sani, dejaban en claro que el problema no es q, de pesos disponibles, Suficiente, alos samarios de agua potable continua. Lo insa}. ctor humano. El desentendimiento y las peleas entre el gobernador, elalcalde, los empresarios y el gobierng nacional no permiten usar de manera efectiva €s0s recursos, Persiste, ademas, un protuberante problema de liderazgo le definir prioridades, de escoger entre alter. dos proyectos y saber ejecutarlos, duce enfermedades entre los po- los mas pobres—, y es uno de los arta como un ambicioso esa _inefectividad son Llevaba con™ ras ¥ carbonil Marta. Esas jaban lata, Habfa casi medio bill6n para dotar vable es el fa y conversaci6n; di nativas, de decidir por uno © Cuando el agua malsana pro bladores —en especial, entre obstaculos para posicionar a Santa Mi destino turistico, esa indolencia y casi criminales. Del tema del agua pasamos al aeropuerto. Los costos de la Aerocivil en Santa Marta hacen excesivamente caro aterrizar en la ciudad; ms costoso que ir a Barranquilla o Cartagena. q iB El aeropuerto fue mejorado recientemente, pero no se pro- longé la pista para permitir el aterrizaje de aviones de mayor a J tamajio. Hay aerolineas internacionales que quieren estable- cer rutas hacia la capital samaria, como la estadounidense South West, pero los yvuelos desde Miami, que a Cartagena pueden costar 300.000 pesos, a Santa Marta, cuando pensaron Ja ruta, salfan a un millén, Una regi6n con el alcance turistico que tienen las play < Ae la ciudad vieja de Santa Marta, la Quinta de San Pedro Alejandrii «6 Rolf ejandrino —donde murié Bolivar—, el parque Tayrona, la Ciudad Perdida, la si Beats ) la sierra nevada, el Macondo de arcia Marquez en Aracataca y la Guaii y las playas de Palomino y de 1 ‘uajira, y que cuenta con una ji petiiva infermacionalays 4 infraestructura hotelera con oe la Aetsekal PERS encuentra que los costos que i” as aerolineas deti eas detienen el desarrollo. 30 Powered by CamScanner Santa Marta prefiere no ser feliz Los hoteleros mencionaron que los bancos consideran de riesgo alto a su industria, y no solo cobran intereses de entre el 12% y el 14%, sino que exigen garantias que dificultan fi- nanciarse. Indagué por la utilidad del Fondo Nacional de Ga- rantias, que puede ayudarlos a mitigar ese problema. “No sirve —dijeron—, porque garantizan solo una porcién del crédito”. Lo mas chocante de esa conversacién fue conocer la frac- tura insalvable entre la administracién nacional y la del depar- tamento, Un desencuentro que lleva a que los problemas permanezcan sin resolver a lo largo de administraciones ente- ras. Las tarifas del aeropuerto, el acueducto, las garantias y los intereses bancarios son temas solucionables con gestién y vo- luntad, De otro modo, seguirén Santa Marta, El Rodadero y Magdalena esperando a que unos funcionarios se pongan de acuerdo. Al final, los mayores perjudicados de esta desco- nexién son los ciudadanos que se privan de mejoras en su ca- lidad de vida, como se mencioné, con algo tan esencial como el agua potable. Estas conversaciones afianzaron mi idea de que la descentralizacién es indispensable para el futuro de Co- lombia. Esta region en particular no puede seguir dependien- do y padeciendo por el desentendimiento entre Bogota y Santa Marta. Los gobernados, bien sea del barrio San Fernan- do o de la industria hotelera, no deben seguir sufriendo la falta de oportunidades por la inefectividad estatal. La descentralizacién es un mandato de la realidad de un Pais extenso, diverso en muchos sentidos, donde Bogota se convirtié en un embudo de las decisiones y la asignacién de recursos, Tenemos que aprender a administrar al departamen- toya la ciudad mirandolos desde sus realidades, no desde las dependencias de una Bogoté lejana e insensible al territorio. Se mencionaron temas como la doble calzada desde Ba Tranquilla hasta Santa Marta, que en su mayor parte esta e0 ciernes. En el Parque Tayrona se estan pudriendo los Eeohabs desde que se los quitaron a la administracion privada, que los 31 Powered by CamScanner Unafo de soledad ejaba bastante bien. Las comunidades indigenas y locale, uentes. Hay que pagara Parques Naciong, servicio de mala calidaq, internacional y nacionaj, man eneran cierres frect 8 Tes, al guia, la silla y Ja carpa por un Ciudad Perdida atrae el interés i ' : Perti y México son ejemplo de como Or ies un turismo res. petuoso con los sitios de interés OE er ener de empleo de buena calidad para las familias local les y rentable para los empresarios. Para eso, la oferta turistica debe adaptarse f Jos visitantes, y no al capricho de las autoridades ni al de al. gunas comunidades locales. Hay comunidades locales organi- zadas, cooperativas, que ofrecen servicios 0 productos, asi como otras que, si bien los ofrecen, también pueden estar orientadas por lideres locales con alguna doble agenda o intereses. Taganga fue igualmente mencionado como ejemplo. Un pueblo de pescadores que se volvié un polo de turismo extran- jero, movido por Io que se conoce como “el cannabis tour’. Empez6 con unos israelitas y se ha popularizado, a pesar de que no haya accesos pavimentados desde la via principal y de que no tiene luz eléctrica, ni acueducto ni alcantarillado. Taganga ilustra como hemos caido en un pierde-pierde: las personas pobres y los empresarios sufren de mala planifi- cacién, mala ejecucién, de la ausencia de un ‘sistema nervioso central’, Ese sistema nervioso debe transmitir el dolor social deere peerelong ee remegee efecivdad para ‘enfrertario, La indo Cece eceaan no se transmite el dolor 0 a te Gietnet ma Seale duce en soluciones, me llevé 7 nivel iesenrae toda es recopilando lo siguiente: “ 4 escribir en las notas que I! “ep mando Io siguiente: “Preferimos tener raz6n a ser felt liens samarios se han resign as Sus gobernantes, Privarlos del derech __ Es decir, alg infelices y reparti nado a no ser felices por cuent Seen llenado de razones pat unas persona poatics felices, i infelichdne on etan de razones para se” ‘ad a Sus semejantes, El gobernado! 32 Powered by § CamScanner Santa Marta prefiere no ser feliz se llena de razones para no hablar con el alcalde; asi mismo, para no hablar con el Gobierno nacional en Bogota. A su vez, el Gobierno nacional tiene una actitud recfproca. Eso reper- cute en miseria ¢ infelicidad, en falta de progreso y de opor- tunidades, que es lo que la gente esté pidiendo, desde los jovenes hasta los mayores. Se desperdician recursos estatales cuantiosos, riquezas naturales, y el trabajo de la gente. En Co- lombia, de Magdalena y Santa Marta para abajo, nos llenamos de razones para ser infelices. Powered by CamScanner Aracataca tiene cilantro Salimos hacia la zona bananera y la primera parada fue en Ja poblacion de Orihueca, para reunirnos con pequefios produc- tores de banano que cultivan entre una y cuatro hectdreas. Nos contaron sus dificultades: necesitan un registro del Instituto Colombiano Agropecuario (1cA) —que es dificil de obtener— para exportar. El otro obstaculo est4 en demostrar la propie- dad de la tierra. Juan Hernandez comenté: “Le compré a una mujer que se fue para Venezuela y no me ha dado el titulo de la propiedad; es una hectarea, pero sin titulo no puedo obte- ner un préstamo. Dole, la multinacional estadounidense del banano, me prest6 para poder producir, con lo que pude des- pegar y adquirir otras dos hectareas. Estoy produciendo bien, pero no he podido resolver lo de la tierra ni con el Incoder ni con la Agencia Nacional de Tierras”. Nicolas Orozco agreg6: “Tengo un problema grande de legalizaci6n de mi pedazo de tierra y eso me aleja del crédito y de la capacidad de crecer”. Son personas exitosas y con todo el potencial de crecer en su negocio a quienes los bancos no les reconocen su flujo esperado de ingreso como aval para Prestarles, Conversé posteriormente con Hernando José 36me: sidente de la Asociacién Bancaria y de Entidades Fi de Colombia (Asobancaria), sobre este tema, y lo insté a que pre- S 35 Powered by § CamScanner ‘Un aio de soledad Jos bancos aprendan a prestarle a lagente contra su capac de pago y su récord crediticio. Conformamos in STupo de tra. bajo para resolver este tema de desligar elcré ito dela Propie, dad de la tierra. De otra manera, Juan Hernandez y Nicolig Orozco estaran condenados a trabajar con su limitado capital de trabajo, 0 con lo que pueda prestar el cliente, Dole. No Pue. de ser que lo que es garantia para Dole no lo sea para el sistema bancario colombiano. No solo resulta paraddjico, sino inaudito, En Aracataca nos reunimos con productores, y nos con. taron algo macondiano: a 15 kilémetros de la cabecera muni- cipal se produce cilantro, porque el 80% del territorio de Aracataca esta en la sierra nevada de Santa Marta. Hay café, cilantro y productos de montafa. Pero el cilantro de Barran- quilla lo traen desde el altiplano cundiboyacense a 1.000 kil6metros de distancia. Los productores dicen necesitar una via para sacar su ci- lantro. La capilaridad de vias dentro de los municipios es un tema que encontramos desde Aracataca, en Magdalena, hasta Tuquerres, en Narifio. Es una verdad de a puiio: en todo el pais, los problemas que uno se encuentra en un departamento en un municipio se los vuelve a encontrar una y otra vez. El tema de mejorar las vias casi que fue lo tinico que pidieron en Aracataca para producir en la sierra nevada. Uno de los concejales de Aracataca dijo: “La sierra nevada produce el mejor café de Colombia, tiene 1.400 mm de lluvia al aio y la carga luminica magnifica de la costa; hay agua, sol, y todas las posibilidades, [y] un café de excelente calidad”. Mencionaron varios productos aparte de café y cilantro, como cacao, zapote, palma y arroz. El problema de la zona bananer para el sur, hacia el fin del Magdalena, no son los productos Hay una zona inmensa con gente, agua, tierra, sol, genética, Y ganas de trabajar. Pero no hay produccién, sino pobreza. Esto Solidificé la vision de que el pais hay que desarrolla™ lo dandole centralidad a cada regién. A Magdalena, lo mis? 36 Powered by CamScanner Areata tlene lantro que a Bolivar; Sucre y Gérdoba, hay que mirarlos desde el de- partamento hacia el resto del pais y hacia el mundo, ynoal revés. Dejar de mirarlo desde Bogoti o, incluso, desde la capi- tal departamental. Ninguno de estos problemas es insoluble, pero se requieren una ate nci6n y una gestién coordinadas para resolver el problema de tenencia de la tierr ary de crédito, el de registros del 1ca, el de agroquimicos, el riego, entre tantos otros. Esta primera entrada a la zona bananera nos abrié los gjos sobre las inmensas posibilidades que hay en cada uno de nuestros departamentos, en términos productivos, Cuando la gente piensa en los departamentos ricos de la costa del Caribe vienen a la mente el norte de Bolivar, alrededor de Cartagena; Adantico y Barranquilla, y tal vez, Santa Marta y las zonas tu- ristica y bananera. Pero la riqueza que se podria generar si le diéramos centralidad al resto del departamento es espectacular. Un tema inescapable de Aracataca es la educacién. Fui- mosa la casa de Gabriel Garcia Marquez. Lo senti como una peregrinacién de un fervoroso creyente a la morada del ilumi- nado, poseedor de una revelacion. Visitar la casa que inspiré Cien aiios de soledad me produjo una tremenda nostalgia y la sensacién de que, mas que verla, queria absorber sus espacios, fotos y ambiente. La educacién surgié como un tema impor tante en nuestra visita a la Universidad de Magdalena, en Ori- hueca y Aracataca, El Sena y la Universidad del Magdalena solo tienen sede en Santa Marta. En un departamento tan extenso, la gente dificilmente puede desplazarse a la ciudad para obte- ner una especializacién, un titulo o una certificaci6n. El turismo cultural en Magdalena y en Arac atractivo de ser Ja tierra de Garcfa Marquez, puede se que dispare la imaginacién de mucha gente. Los locales pien- san en un parque tematico del realismo migico, un centr turistico y un tren turistico. Son proyectos cuya viabilidad eco- N6mica debe y puede evaluarse; pero un festival de Gabo, que con el algo 37 Powered by CamScanner Un aio de soledad atraiga cada vez mas gente, se ve como otro penalti Por patear. M Quiero cerrar este recorrido por Santa Marta y por Mag. dalena con una mencién a los medios de comunicaci6n. Tanty en Santa Marta como en el resto del departamento, nos en. contramos con medios muy activos, con gente muy querida en emisoras como Fuego Estéreo, Radio Rodadero y Radio Mag. dalena y en el periédico El Informador. Los directores de los medios que nos acogieron nos reta- ron. Alguien dijo: —La gente ya no les cree a los politiqueros. ¢Usted qué responde a eso? —Pues que no les crean nada —respondi—. —Y usted, entonces, ¢qué es? —Una persona que por primera vez viene a pedir ak gente que piense en mi para la Presidencia de la Republica. Los periodistas samarios acogen al forastero con calidez, con carifio y con una chispa maravillosa. Hacen las pregunts pertinentes sobre el departamento y el municipio, de mane™ que no queria dejar esta visita que hicimos a Magdalena sin ha- cer un reconocimiento a esos amigos de la radio, de los medios de comunicacién, de los periédicos, con quienes nos sentamos una hora, u hora y media, a conversar, Son medios muy actives incisivos, agudos, criticos, que estan conectados con la gent Powered by CamScanner Tasajera cambid para siempre Teniamos una parada obligatoria en Tasajera, en Pueblo Viejo. Fue la parada més dificil que tuvimos en un afio de trabajo. Primero porque hacia un sol fuerte y un calor sofocante, y lle- gamos tarde, porque venfamos de la zona bananera. Por la via estrecha, los trancones y una parada que hicimos en la Ciénaga Grande, llegamos hora y media después de lo acordado, cosa que nos esforzamos por nunca repetir. Cuando entramos, habia unas 150 personas esperando- nos, entre ellos muchos nijios, lo que hizo nuestra mortifica- cin atin mayor. Eran las 3:00 p. m. Estébamos cerca de la playa. Tasajera es, quiz4, una de las comunidades mas sufridas del pais. Un afio antes —muchas personas lo recordaran—, en Ta- sajera, en Ja via entre Santa Marta y Barranquilla, esta comuni- dad, compuesta por unas 400 familias muy pobres, vio un cami6n accidentado en la carretera, a unos 100 metros de sus viviendas, E] carrotanque que se volcé transportaba combusti- ble. Muchas de esas familias salieron a recolectar el liquido que se estaba regando, Cuando estaban en ese proceso, los gases estallaron, lo que Ilevé a la muerte a mas de 50 personas y dej6 heridas a cerca de 200. Fue una tragedia que alert6 a todo el pais, que nos pasé ¢omo un corrientazo por la columna vertebral a los colombia- Nos, al ver a Jas personas que, sumidas en una situaci6n de 39. Powered by § CamScanner Un ao de soledad pobreza, desesperan7a y desprotec ea : Teco, Jectar un combustible para después vei 5 usto terming costindoles la vida o enfermedades, dolencias y sufrin muchos pobladores de Tasaje Lo primero que nos 7 Juana Cueto fue la persona que nos ‘acogig yfue la raz6n por la cual la gente de ‘Tasajera se reunié a hablar con nosotros, y asi nos lo hicieron saber: “Aqui estamos por Juana Cueto, porque a Juana le creemos, porque la queremos, porque Juana ha hecho cosas por nosotros. Es una lider en el municipio, ha trafdo salud, ha traido beneficios para todos, ha promovido la comercializacion de los productos de Tasajera”, Las mujeres que hablaron —Yulitsa Silva, Liliana Ojeda Ortega, Diosa Blanco y Brigitte Vargas, una peluquera venezo- lana que hace las ufias y tenzas— hablaron de su situaci6n, de cémo atraer turistas a las playas, de c6mo la gente vive del dia a dia. En ese momento, ellas les dieron la palabra a los hom- bres: a Justo Bello y Leonel, que dijeron necesitar una comer- cializadora para los mariscos y pescado que sacaban en Tasajera. Discutimos al respecto y llegamos a la conclusién de que debjan hacer una cooperativa, asociarse. Es una necesidad sentida entre los pequerios productores en todo el pais. Pero es més facil decirlo que hacerlo. Los pescadores habian llega- do a esa conclusién dos afios antes, Hicieron una cooperativa para conseguir un motor de 14 millones de pesos, una lancha de motor, de 22 millones, y una nevera para refrigerar el pes cado. Querian llevar ellos mismos el pescado directamente # Barranquilla, y venderlo a restaurantes, hoteles y supermerc™ dos, Podian obtener tres o cuatro veces el precio que les pag” los in iarios en Ia playa. Se organizaron e hici Aparatos y hacer una come nizé la cooperativa se e: desolador para Tas ‘ajera. P go de las mujer on los ahorros para comprar les ializadora, La persona que ons P9 con la plata, Fue un resultado ‘erdieron no solo la plata y un aio? Powered by CamScanner ‘Tusajera cambié para siempre go atin mils profindo: la confianza, La mos y en alguien que era el lide integridad del liderazgo, el compr dos de ahorros, sino confianga en ellos 1 lidad del liderazgo, delliderazgo, el de no pensar en sf mismo, sino en el esfuerzo de no robarle a la gente, fue lo que sufrid, lo que La ca- miso de todos, el sacrifices con ese robo. ajera es un microcosmos del pafs. Por ejemplo, esta historia de un lider que en cierta ocasién concité a la gente, alguien que los unis y los convencis de orientar sus esfuerzos individuales para lograr un fin colectivo, noble, meritorio y le- no de promesas. Pero después, ese lider traicion6 la confianza que todos depositaron en él y dejé a la comunidad desampara- da y desolada. Luego de esa experiencia los habitantes de Ta- sajera se preguntan: “zAhora en quién creemos? {Hay alguien entre nosotros en quien podamos creer?”. Cuando nos reuni- mos con ellos, no habian logrado armar una nueva cooperativa. Después vino el accidente del camién que dejé totalmente de- solada a esta comunidad. Tasajera fue una epifania en varios sentidos: lo dificil que es la situacién, lo desamparados que estan, y también, lo rela- tivamente facil que seria solucionarlo. A finales de 2021, en una iniciativa esperanzadora, un grupo de empresarios cre6 Pais- Sano. La idea es motivar a empresarios establecidos que tienen aja, y que puedan ayudar a empresarios pequefios que por poca plata entran en situaciones que pueden ser desesperadas, y hasta pueden Ilevarlos al fracaso. En Tasajera, la solucién que buscaban los pescadores Ile- vaba a conseguir 40 0 50 millones de pesos que podian, literal- mente, salvar a una comunidad de 400 familias. Por supuesto, ho solo se trata de la plata, sino de construir alrededor de eso Una cooperativa, una asociatividad y un liderazgo sanos ¢ inte- 8T0s, y con eso, la confianza en ellos mismos y en su futuro, _ Les planteé a los amigos de Pais-Sano el diler Jera, para que contemplaran financiar 0, incluso, regalar la a de Tasa- 4) Powered by CamScanner Un aito de sotedad lancha, el motor y el refrigerador. Se pusicron en esa tarea, de modo que, ojalé, Tasajera 5 alga al otro lado con la ayuda de Pafs-Sano. Adicionalmente, pidie : rh ; méntenos la via desde la carretera principa asta las casas" 1, las casas y los servicios puiblicos son preca. le educacién y la de empleo, tremendamen. ron cosas basicas: “Por favor, pay, Las vias del ba rios, y la situaci6n d te defectuosas. . . : Antes de dejar Magdalena y seguir con mis impresiones del resto del pats, quiero hacer dos reflexiones. Primero, una sobre la educaci6n. En Vivir para contarla, su autobiografia, al igual que en muchas entrevistas, Gabriel Garcia Marquez con- t6 que a sus 5 afios se educé en una escuela Montessori. De esto hace cerca de un siglo; es decir, 100 afios atras habia en Aracataca una escuela Montessori. Siempre me llam6 tremen- damente la atencién cémo es que Aracataca tenfa una escuela Montessori a la que el coronel, su abuelo, pudiera llevarlo cada manana. Garcia Marquez dice que alli le dieron una educaci6n sensorial, con los sentidos abiertos al mundo, que le enseiié a absorber todo ‘lo que pasaba en Aracataca, en su casa, con su abuelo, con sus tias abuelas, con la mam: en fin, todo el material que muchos afios después convertiria en los cuentos de Macondo y en Cien avios de soledad. Esta anécdota, sucedida en el coraz6n de la zona banane- ra, enfatiza el papel crucial que tiene la calidad de la educa- oon No solo que haya una escuela, pupitres y el maestro. Lo mas importante es lo que le sucede al nifio en las seis horas que pasa alli. Naturalmente, cuando uno visita hoy a Aracat” ca, dificilmente encuentra una escuela Montessori. ; M © parece razonable conjeturar que en ese momento existfa una escuela Montessori, porque estaba la compaiia be nane zona i : nera y esa zona era una de las mas ricas de Colombia. Des Pués de haber pasado | a Ser una zona rica. Pero a pobreza de la hojarasca, ha vuell ya no tiene el beneficio de contar ©” 42 Powered by CamScanner ‘Tasajera cambi6 para siempre una educacién de la calidad de la que habia e dio para un Premio Nobel de Literatura, Fijense la tremenda ironfa, Hace 100 afios habia mejor ‘i6n en Aracataca qui b ntonces, la que edt ahora, De alguna forma, por mu- cho que se la critique, la compatifa bananera se preocupaba mis por la educacién de los nitios cataqueros que las autori- dades actuales. Sobre la experiencia de la compaiifa en la zona bananera hay un libro maravilloso y riguroso del historiador colombiano Marcelo Bucheli, llamado Después de la hojarasca. United Fruit Company en Colombia, 1899-2000 (el titulo en inglés me gusta mas: Bananas and Business). Bucheli cuenta la experiencia de la bananera en el departamento de Magdalena y los levanta- mientos en Ciénaga y Aracataca; es decir, lo que en Cien aiios de soledad se cuenta como una historia literaria, Bucheli lo es- tudia con el rigor de un historiador. Recomiendo leer esta obra, pues muestra que, probablemente, los estadounidenses sentian que era mas importante educar a los colombianos que Jo que los colombianos sentimos que es importante educarnos a nosotros mismos. Esto parece impensable, pero es una verdad de a puiio. Como epilogo, la mama de Gabo fue una de las que mas se entristecieron con que se hubiera ido la compania banane- ra. Como todas las mamés, sabia que lo importante que estaba sucediendo alli era algo que pasaba en la cabeza de su hijo; algo, tal vez, mas crucial para él, para ella, para su familia, para su pueblo y para su pais que las peleas de los mayores. Lo segundo es sobre la labor del gobernador. Como en una historia macondiana, el gobernador de Magdalena para ¢l periodo 2020-2023 intimida y amedrenta. Cuando nos reu- nimos con los empresarios fue priicticamente de manera clan- destina; ellos pidieron que no se supiera que se habian reunido conmigo, Supimos, por otro lado, que eso le alos mayores empresarios de Magdalena, sino a mas gente, ucedia no solo 43 Powered by CamScanner Un ato de soledad es los per misos y las licencias Para ivi vaban al gobernador. algunas actividades si no apoyaban al gob Los empleados priblicos con los que hablé ¢ a confidencia, que debian compartir en todas las redes sociales los contenidos que cuelgan el gobernador y su gente, y Fepro. ducir en Twitter, Facebook ¢ Instagram todo lo que dice ef gobernador, pues si no lo hacen, los contactan y les dicen: “No retwitteaste en tal red social 0 en tal otra. ¢Es que no estds com. prometido con la causa?”. Espero con esto no darles ideas a otros gobernadores y alcaldes, pues el mal ejemplo cunde. Esto cierra nuestra visita a Magdalena, un departamento colombiano donde se da una versién dramatica y soterrada del socialismo del siglo xxi: la intimidacién a través del poder del Estado para que todos los empleados publicos y los empre- sarios se arrodillen sin libertad para escoger, elegir y expresarse ante la autoridad politica, y se cifian a las directrices de un go- bernador omnimodo, autocratico, que intimida a la gente que lo eligio y que con sus impuestos paga su sueldo y el de su equipo. La gente no quiere reunirse con uno, no quiere hablar, no quiere que se sepa en la Gobernacién que eso sucedi6, que se reunieron con alguien que no es cercano politicamente a la Gobernacién, porque eso trae consecuencias, EI primer departamento que visitamos nos cambié para siempre. Desde Eliécer Gomez hasta las madres y los pescado res de 1 ajera, Jos pequeiios bananeros de Orihueca, los pro- ductores de cilantro en Aracataca y la constatacién sobre la PONVE! Los amenazaban con quitarle TON, en educaci6n. AClONES Con personas generosas, bue- nas, echadas pa'lante, que nos encontramos en ese departa mento hermoso y con un poten , ’ increfble. Nunca vamos # entender a Colombia de manera similar después de esta visi- ta a Magdalena. Powered by CamScanner Barranquilla consiguié hermana Barranquilla es tan acogedora como ambiciosa. Es una ciudad dispuesta a transformarse continuamente. La considero un ejemplo para la costa del Caribe y para toda Colombia. Hace un par de décadas, ante una seguidilla de malos alcaldes, el sector empresarial se reuni6 y se puso a trabajar preparando un programa de gobierno, a la espera de que legara un alcal- de que valiese la pena. Los que habia hasta entonces no dialo- gaban con el sector privado ni admitian el apoyo ni el trabajo conjunto. Esta es, al menos, la version de un eminente empre- sario de la ciudad cuando le pregunté por el milagro de la ciudad en los tiltimos tres lustros. Cuando fui presidente de Ecopetrol, en el afio 2017 hubo una visita de Estado del presidente Juan Manuel Santos al Rei- no Unido. Hicimos un viaje a Aberdeen, en Escocia, la capital petrolera de las islas britanicas, en el mar del Norte. Mi sor- presa fue maytiscula cuando supe que el alcalde de Barran- quilla, Alex Char, iba a participar en la visita a Escocia. ¢Qué podia buscar en esa ciudad? Resulta que iba con un propésito atin mas concreto que el nuestro, y estrechamente relaciona- do: buscaba hermanar a Barranquilla con Aberdeen, en torno a los prospectos de exploracién costa-afuera que se abrian Para la ciudad caribefia, dada la muy promisoria informacion Sismica revelada por la petrolera Anadarko. 45 Powered by § CamScanner Unaio de soledad darko se habfa especializado en analiza, posibi idades de depésito, Juras de los Hamados Pro. torrios; esto es, los ant stdricos eels grandes -tuales, En ese empeiio, Anadarko descubrié en Mozam, embocadura del rio Rovuma, un megacampo de gas natural. Eso cambié la historia de Anadarko yla de Mo. zambique. Entre los otros protorrfos que Anadarko investigg estaba el rio Grande de la Magdalena, en Colombia. A unos 40 km de la costa, entre Cartagena y Barranquilla, esa compa. iia petrolera norteamericana realiz6 la investigacion sismica costa-afuera mas grande del mundo hasta Ja fecha. Los resultados fueron presentados a Ecopetrol, y los téc- nicos, los geofisicos, los gedlogos, los ingenieros de petréleos y los demas especialistas del ramo que tuvieron acceso a la in- formacién quedaron positivamente impresionados. En la ac- tualidad, es dificil encontrar megacampos de petrdleo y gas, dado que el mundo ha sido auscultado palmo a palmo. Guyana tuvo hace un par de afios un megadescubrimiento, lo cual ha posicionado a ese pais en el mapa petrolero mundial. Estos, por ahora, son tan solo prospectos que sera nece- sario validar con perforaci6n in situ. Pero en caso de compro- barse lo que indica la siempre riesgosa informaci6n sismica, lo cierto es que Barranquilla y Cartagena pueden estar cerca de uno de los pocos megacampos de gas o petrdleo que que- dan en el mundo. Ahora bien, primero hay que explorar para esto hay un desafio maylisculo por superar, Los prospeC tos quedan en aguas ultraprofundas, con una columna d¢ agua superior a 4 km, Una vez se Hegue al suelo marino, 8° estima que habra que perforar 2 0 3 km, La tecnologia pa™ Semejante proyecto exploratorio no existia, pero ya esta sie” do desarrollada. En fin, esto implica costa del Caribe— ecto, Ani Enel por todo el planeta, cuale de hidrocarburos en las ¢ 1 bique, en la de Prepararnos —especialmente, 7 ha para el eventual megadesarrollo que de abi 46 Powered by CamScanner Barranquilla consigulé hermana se puede derivar. Esa, y no otra, era la raz6n por la que el al- calde Char estaba acompanindonos en Aberdeen. El ministro de Minas y Energfa, el alcalde Char y yo, como presidente de Ecopetrol, hicimos sendas presentaciones ante las autoridades britanicas y la comunidad de negocios de la ciudad. Me impre- sioné la calidad de la presentacién y de la visién de la ciudad. Si tuviéramos 20 alcaldes de ese calibre, el desarrollo regional y urbano colombianos serfan a otro precio. Con esa visita Ba- rranquilla consiguio hermana en el mar del Norte y Colombia avanz6 un paso mas hacia su futuro. 47 Powered by CamScanner Villa Caracas, lejos de Venezuela El padre holandés Cyrillus Swinne parece sacado de una his- toria de Joseph Conrad. Son historias en las que un ser ilumi- nado u obseso se extravia en geografias extrafias a su tierra natal, y nunca mas logra regresar. Cincuenta afios atras, Cyri- llus Swinne lleg6 a Barranquilla y se dedic6 a transformarla, un barrio a la vez. Con terquedad, olfato, mutieca y tes6n, el padre ha construido un centro de salud, un centro para ni ios con discapacidad, un ancianato, un centro cultural, un vivero (La Paz), una casa hidica y un centro de aprendizaje de oficios: peluqueria, carpinteria, etc. Gracias a él, el barrio La Paz y el suroccidente de Barranquilla tienen una nueva cara. Contrario a muchos funcionarios, el trabajo que hace el padre Cyrillus da trabajo. Muchos jévenes que viven en el ba- trio La Paz, como Yacep Charris, de 25 afios, se dedican a la autosiembra, dados los altos costos de alimentar a una familia. Como éI mismo dice, con 15,000 pesos al dia —que es lo que se gana en el rebusque— no vive una familia de cuatro perso- nas, Junto con su mamé, su hermana y su sobrina, ha logrado que la huerta casera complemente el dinero que consiguen; una practica extendida entre muchas familia Cyrillus y Yacep hablan de los emprendimientos que estan contemplando, basados en Ja ansformacién y la reutilizacion de plasticos. No se contentan con lo mucho que han aleanzado. 49 Powered by CamScanner Unaiio de soledad jativa, nune: Jan por mi empre. Mantienen viva laini NCA paran, hen que en el momento en que se detengan, las fuerzas de} 10. Sicmpre dep » haber proyectos nuevos, que ocupen la imaginacién, la caber, eleorazsn y losintestinos, No se puede parar sobre loaleanzado, El trabajo del padre ha logrado mantenerse porque logré que la comunidad trabaje para sf misma, que esté organizadg ysea solidaria, porque, en palabras del padre: “Lo que busca eg que la gente se encuentre”, a través de iniciativas que transfor. men el ambiente, el entorno y las personas. Dice, ademas “Je. stisno hizo ota cosa; necesitamos pastores, gente que acompaiie y viva con su pueblo”. Frente de la casa del padre hay una estatua: una persona agachada mirando al suelo. Le pregunté qué representa. “[A] la persona que se rinde, que deja de luchar’”, dijo. Caminamos por el barrio, y sefialé una casa, de aspecto comtin y corriente, pero situada en la via més concurrida, llena de comercioy gen- te pasando de prisa, de un lado para el otro. Almacenes de todo tipo ofrecian de todo lo imaginable. Nos cont6: “Esa casa la vendio su duefio hace un mes, por 600 millones de pesos”. Ese solo hecho muestra el tremendo progreso que se daba en la vida de los pobladores, por la simple valorizacién de vivien- das que hace 20 0 30 afios habian sido de invasién. Justamente, nos dirigiamos a Villa Caracas, un barrio de invasion al lado de La Paz, En el recorrido, el padre Cyrillus hizo unas paradas para mostrar los diferentes proyectos que Podrian hacerse en los aiios venideros, Villa Caracas es un pr yecto con migrantes de Venenu entre sal | é desorden y la desidia empezanin a ganar terr Son casi 2.000 personas, Jas cuales hay unos 400 ninios ycerca de 200 adolescentes- Estas familias han invadido Progresivamente el lugar en los tit timos tres afios, Villa Caracas esta construido sobre escombros, El terren? es considerado de alto riesgo, por lo cual las autoridacdes de BX rranquilla determinaron que las familias deben ser evacuadas 50 Powered by CamScanner Villa Caracas, lejos de Venezuela Lo primero que se encuentra a la vista fon casas de madera y de carton, con bardas © rejas hechizas, detras de las cuales, aqui y alld, se ve a madres de familia, jovencitas, nifios y hombres espe- rando por algo que no parece legar. A Godot. Hay un comedor comunitario para los niiios. Ese dia les sirvieron pastas con salsa bolofiesa y galletas Saltinas. Hay cua- tro turnos, que empiezan desde las 10:30 a. m., y los nifios van legando segtin un orden establecido. El padre conté cémo ha tenido que ir adecuando ese es- pacio como un refugio para las personas migrantes. Narré cémo llegé a poner electricidad de manera ilegal. Porque ante el papeleo, que todavia estaban estudiando en las entidades publicas, y ante la necesidad imperiosa de luz para el barrio, con una autorizacién que no llegaba para conectar la electri- cidad y el resto de servicios publicos, concluyé Cyrillus que “es un problema legal, pero prima la parte ética sobre la situaci6n legal”. Era entendible que los permisos se demoraran, dado que la zona, a la postre, debia ser desocupada. Pero ante ta- mafio predicamento, de familias noche tras noche sin luz, de- cidieron tomar Ia electricidad de los postes aledafios. Hay un descomunal contraste entre la Barranquilla mo- derna, ambiciosa, empresarial y que avizora en el horizonte una posibilidad, como los hidrocarburos costa-afuera, y se lan- za a conseguirla, y, de otro lado, la ciudad que recibe desde hace un siglo oleadas de familias pobres provenientes de toda la costa del Caribe, y recientemente, de Venezuela. Es el con- traste de las ‘ciudades latinoamericanas, y de lo que eran las ciudades inglesas de las novelas de Charles Dickens e, incluso, mas recientemente, las ciudades europeas de lo: ta del siglo xx, tras la destruccién de la guerra, y lenas de po- breza y desconcierto. —Ehecho de quelas ciudades conjuguen al tiempo la ma- Yor riqueza y la mayor pobreza se cita a menudo como eviden- cia del fracaso dé “nuestra economia, regional, nacional cel fra economia, regi i ional y anos cincuen- BL Powered by CamScanner Unaiio de soledad asciudades son un tremendo iman econdmico, Siempre tienen barrios ee Salsa i Be contintia Hegando, y porque el camp’ y — Ney. pulsando migrantes. Asi mismo, por eT « Prospe dad, que se da generacién tras generacion ce inmigrantes, Si se observa una familia que hace 20 afios lleg6 pobre 4 Barranquilla, no sera raro encontrar que ha cambiado tres ° cuatro veces de barrio, y mejorado paulatinamente, acercén. dose a mejores escuelas, a calles mas seguras, a centros de salud mas préximos, a sitios de recreo para los nifios y a puestos de trabajo para los padres y los jévenes. Lo que nos dicen a gritos estas ciudades es que se necesi- tan més puestos de trabajo, mds negocios, més actividad. ;Lo que hay hoy no alcanza! Los empresarios y las autoridades de- ben emplearse a fondo, primero, en no ahogar lo que ya exis- te, a punta de trabas, de impuestos, de cuotas, de tasas, de tarifas. Y segundo, en promover y atraer sin descanso mas y mas empresas. La Colombia actual no alcanza, sus propias ne- cesidades la sobrepasan: nos lo dice Villa Caracas. Pero la Co- Jombia actual ha avanzado mucho, como nos lo dicen el barrio La Paz, el padre Cyrillus, Yacep y su familia, continental. No es cierto. 1 52 Powered by CamScanner El hombre que queria votar dos veces Una playa, una hamaca, un atardecer, un pescado frito, un arroz con coco, muisica de champeta en algtin quiosco de los alrededores, gente caminando en vestido de bafio, un picadito de fiitbol que se juega cerca, un libro para quedarse dormido enel chinchorro después de dos paginas... Eso es Manzanillo. Aunos 10 km al norte de Cartagena, en la playa del pa- rrafo anterior, nos sentamos con un nutrido grupo de lideres afrodescendientes de quince comunidades cercanas a Manza- nilloy cuatro jévenes —una mujer y tres muchachos—, y todos preocupados por Ia atraccién de turistas. “Esos turistas que legan alld [dijo alguien sefialando en direccién a Cartagena de Indias], cuando van a venir a esta playa, a gozar del mar y la tranquilidad? Esta playa es vacia, agradable, muy bonita”. Mientras que los asistentes de mas edad hablaban de las regalias, del mal acueducto de su localidad, de los problemas de los pescadores, de si servian 0 no los consejos comunitarios, los cuatro jévenes reiteraban el tema de los turistas y, en par- ticular, que necesitaban Ja ayuda de la Secretaria de Turismo de Cartagena para hacer una pagina web que les permitiera promover su playa y su producto turistico. Después de una hora de estar charlando, de escucharlos y tomar notas, les dije: “No entiendo por qué se quedan espe- rando a que Cartagena les haga cosas. ¢Ustede duclen a Cartagena? gCreen que ustedes le du creen que le a Bogota”, 53 Powered by CamScanner Un aio de soledad quedaron mirindome, un tanto asombrados POF la pre, gunta, Espe ndo a que yo la respondiera. Dije, entonces; “Us tedes no le duelen a Cartagena, y no le duelen a Bogor, Reaccionaron como si hubiera dicho algo que ellos tenian Pen. sado y que nadie queria decir, Insistf en que si querfan lograr sus cosas tenian que hacerlas ellos mismos, en vez de Ponerse a esperar que unos funcionarios de Cartagena, de la Secretaria de Turismo de la ciudad o la Secretaria de Turismo de Bolivar vinieran a hacerlo. Insté a los cuatro jévenes: si tanto querfan una pagina web, podfan ponerse inmediatamente a la tarea en el computador de uno de ellos. Debian tomar las fotos de las playas, de los restaurantes, de los pescadores y de ellos mismos, montarlas y empezar a divulgar la pagina por todos lados. “Nadie va a venir a hacerlo por ustedes —les dije—, y si Vienen, sera después de una tramitologia insufrible y solo si ustedes tienen un amigo politico, o lo que sea. Avanzaran muy poco por esa via y perderdn un tiempo valioso para atraera los turistas. Necesitamos vender mas rébalo maiiana, mas turismo en Manzanillo este fin de semana, y no cuando les paren bolas unos burécratas. Necesitan tomar su destino en sus manos y sacar esto al otro lado”. Nos comprometimos con los cuatro jévenes a que ellos mismos harian la pagina web. Uno de los Iideres de més edad me pregunté: —Cuando usted esté en el Palacio de Nariiio, si llega ala Presidencia de la Reptiblica, ese va a acordar de nosotros? —Por supuesto que no —respondf, para su sorpresa—* cuando esté alld voy a estar tan ocupado, va a haber tantos pt blemas, tanta gente diciendo cosas y ofuscando el tiempo ¥ agenda del president que dificilmente voy a estar pendient de la playa de Manzanillo, Hoy estamos aqué; los temas que tengamos que hablar hablémoslos ya, aqui, entre ustedes ¥)* os que habla s ce sont —iEchel, ui ya eres presidente —reaccioné con som uno de los asistent Powered by CamScanner Elhombre que queria votar dos veces —Pues, para efectos practicos, tenemos que funcionar mentalmente como si estuviéramos gobernando ya y teniendo que solucionar los problemas ya. No podemos esperar un aio, blemas intactos, como en tna vitrina, mirandolos con los pro! aver si alguien viene a pensar en ellos y solucionarlos por nosotros. Eso cambié las miradas de los asistentes y el tono de la reuni6n. Siento que mi esfuerzo de sinceridad modificé la for- ma como me estaban viendo. Mi lectura de lo que pasé en adelante se puede resumir en que sentian que no habia ido a decir mentiras; por lo menos, estaba diciendo la verdad: que iba a ser un tipo ocupado, y que estabamos alli juntos para pensar en ese momento, en ese dia, qué nos faltaba por hacer porlos problemas de Manzanillo. Tomé muchas notas y adqui- ri gran claridad sobre sus prioridades. Al momento de despedirnos hubo un toque de simpatia socarrona, muy de la politica colombiana. En el momento en que me despedfa, uno de los hombres de mas edad se acercé y dijo: “Voy a votar por ti”, me cogié la mano. “;Dos veces!” y se rio. Sonref sabiendo que era una broma, muestra de sentido de humor repentista y calido del Caribe, ya que en muchas regiones del pais si se da esa practica ilegal. Eso pasé en la playa de Manzanillo, cerca de Cartagena. Powered by CamScanner La casa en el aire Durante ese invierno inesperado iba a cambiar la idea que te- nia de qué significa progresar. Tantos afios de quemarme las pestaiias leyendo libros de economia, entendiendo ecuaciones ysacando estadisticas, estaban por volverse aiicos al borde de la ciénaga de La Virgen, en el barrio Olaya Herrera, de Carta- gena, donde ocurrié uno de los episodios fundamentales de ese trayecto por el pais. Primero, no nos querian recibir. Estefania Gonzalez, la jefa de nuestra gira, y que mandaba sobre la hora de desper- tarse, sobre los minutos de desayuno, almuerzo y comida o sobre si, de hecho, iba o no a haber las tres comidas, las citas, la logistica y el orden de las cosas, pasé dos horas en el teléfo- no para lograr que nos dejaran entrar al barrio. El Olaya Herrera es uno de los barrios mas pobres de Car- tagena. Alli no querfan ver mas politicos. La raz6n, dijeron, es que llegaban a las 5:00 o 6:00 p. m., habia que reunirles 100 0 200 personas para que dijeran cuatro bobadas y pidieran votos, y chao, Estefania les dijo que tenfamos pensadollegaralas 10:00. m., y que no necesitbamos un lugar donde sentarnos y reuntmos, pues querfamos caminar por el barrio, tal como habiamos he- cho en San Fernando, en Santa Marta, Bus Abamos conocer a la gente y hablar con algunos de ellos. Al final, algo que dijo 57 Powered by CamScanner Li ake dhe waheatadt Extetania persnadis a Jonny, un joven de la Fundacién de Baz, que de nos tecibieran al dia siguiente, como sticede en TAN, EL recurrido soto se puede hac " se va acompaiado por gente dy enten a los forasterog ho saben a que van, y puede pasiralgo inesperado. La gente n, las cindades de Colombia hurtin, De Lo contratio, los veeinos resi acimite que uno se presente porque si, sin avisan y que ange Porat, como si nada, Hay reticencia a hablar con un compless extratio, Solo cuando vienen acompanados de personas fami. Yiates al barrio, conocidas por los vecinos, con credibilidag, tajan la guardia y lo admiten a uno caminado y conversando, Ese tite el caso en el bartio San Ignacio, de Manizales; en bh Comuna & de Ibagué, yen Petecuy; en Cali, pormencionar ois ejemplos, En todas las ciudades buscamos visitar algunos de los banios mis golpeados y dificiles, y hablar con la gente. Ex fue, por mucho, la mejor experiencia que tuvimos, la que mis ener gia nos dio para continuar en campaiia, la que mis claridad nos Aporté sobre los problemas y la urgencia para abordarlos, El be mio Olaya Herrera seria, de muevo, una: experiencia impactante. Caminamos con Jonny y algunos de sus compaiieros de kt fundacién durante cuatro horas, Recortimos las calles y nos fuk mos acercando a la ciénaga de La Virgen, Aprendimos que kis Ukimas seis cuadras antes de la ciénaga le habian pertenecidoal agua hace pocos aiios, El barrio las habia ido ganando paula hamente, a punta de rellenos con material de esecho de cons trucciones, Hlantas y desperdicios de todo tipo, Ponen anes troncos clavados en ARM, Y Sobre ellos tiran unos maderes que sosticnen el piso, Alli levantan lac uncidn, Al principio, 200.30 m dentro del agua, as sobre el agua, para Hegars Anu que ir hasta L stiteralmente en lait aw como dice la “ construceidn puede es que hacen un camino de mader! les dle que el camino este listo, bY Montado en una barea unino de madera, encontré una ba uma batiera de tibra de Vidrio, sostenid mejor dicho, 58 Powered by CamScanner Laat por dos grandes trozos de icopor. Dentro de ella estaba senta- dio Mario Espriella, que acababa dle Hevarle una bolsa de pro- jones a st mujer, Una joven que nos miraba desde una casa que ya tenia las paredes, pero con un techo que parecia atin a medio construit, Mario era la persona que estaba construyen- dlo la tiltima casa del barrio, sola, dentro de la ciénaga, La gente con la que fbamos caminando se quedé en el punto donde se estrechaba el camino de madera sobre el agua, con lo cual, cuando Mario embarcaba y desembarcaba, est4- bamos solo cuatro chicos que se zambullian en el agua, él yo. Mario justo acababa de llegar sobre la baiiera, impulsada con un palo largo que tenfa amarrada en la punta la tapa de una caneca. Era su remo. —Hombre, Mario: si la vida aca est tan dura, epor qué decidiste venirte? —Porque me toca, Ahora no hay trabajo, con la pandemia esa. Los trabajos que hay no alcanzan, gme entiende? Uno paga 300.000 pesos, 400.000 pesos de arriendo, cuando se gana 20.000 pesos, [0] 25.000 pesos al dia. —2Qué hacias? —Yo vendo pan por ahi, me rebusco por ahi, de ambu- lante, pero no me alcanzaban los recursos para pagar ese Poco’e plata, y un buen dia me vine pa’ca, con mi mujer. —éTienes chicos? —Los chicos los tengo en Villanueva, Bolivar, porque no he hecho el puente, Los traigo cuando termine el puente —y senalé desde donde estaba parado yo hasta el sitio donde su mujer nos vefa conversar—, Va pegado aqui —dijo seiialando ¢lsitio donde estaba entrevistindolo. —¢Cudnto te demoras completando el puente hasta alla? —Una semana —dijo, mientras miraba de extremo a ex: tremo, come un ingeniero que calcula el esfuerzo que le ‘omar la obra, —éLos materiales de donde los s 59 Powered by CamScanner Unanos™ un tanto asombrados por la re. -spondiera. Dije, entonces; “Us y no le duelen a Bogoty ira eC, Se quedaron mirandom| erando uelen ja re aque yO lar a Cartagena, i f ‘ idicho algo que ellos tenian pep, tedes no led : Sanaron C si hubiera . . Reaccionaron ¢ omo «a deci Insisti en que SI querian lograr sado y que nadie quer? . 1 " sado y que nadie qu hacerlas ellos mismos, €n1 Vez de ponerse sus cosas tenian que ha ; Cartagena, de la Secretar unos funcionarios de Cartagena tari ola Secretaria de Turismo de Bolivar alos cuatro jovenes: si tanto querian F ‘ i i ente ala una pagina web, podfan ponerse inmediatam ‘ea tareaen el computador de uno de ellos. Debjan tomar las fotos de las playas, de los restaurantes, de los pescadores y de ellos mismos, montarlas y empezar a divulgar la pagina por todos lados. “Nadie va a venir a hacerlo por ustedes —les dije—, y si vienen, sera después de una tramitologia insufrible y solo si ustedes tienen un amigo politico, o lo que sea. Avanzaran muy poco por esa viay perderan un tiempo valioso para atraer alos turistas. Necesitamos vender mas robalo mafiana, mds turismo en Manzanillo este fin de semana, y no cuando les paren bolas unos burdcratas. Necesitan tomar su destino en sus manos y sacar esto al otro lado”. : Nos comprometimos con los cuatro jévenes a que ellos mismos harian la pagina web. Uno de los lideres de mas edad me pregunt6: - s vando usted esté en el Palacio de Nariiio, si llega ala residencia bli > le la Reptiblica, se va a acordar de nosotros? —*or supuesto que no —respondi, para Orpres. cuando esté alla voy a estar tai eae blemas, tanta'ce hie Nn Ocupado, va haber tantos pro aren 8 oe diciendo cosas y ofuscando el tiempo y !# de la ple Presidente, que dificilmente vo ie la playa de Manzanillo, Hoy e: ngamos que hablar hablémos| —iEchel, ti ya eres uno de los asistentes, gunta. Espe aesperar que de Turismo de la ciudad vinieran a hacerlo. Insté y a estar pendiente ‘stamos aqui; los temas que 08 ya, aqui, entre ustedes y Y° Presidente —reaccioné con som 54 Powered by CamScanner Elhombre que queria votar dos veces —Pues, para efectos pricticos, tenemos que funcionar amos gober nando ya y teniendo que solucionar los problemas ya. No podemos esperar un afio, con los problemas intactos, como en tina vitrina, mirandolos aver si alguien viene a pensar en ellos y solucionarlos por nosotros. mentalmente como si estuvi Eso cambié las miradas de los asistentes y el tono de la reunion. Siento que mi esfuerzo de sinceridad modificé la for- ma como me estaban viendo. Mi lectura de lo que pasé en adelante se puede resumir en que sentian que no habja ido a decir mentiras; por lo menos, estaba diciendo la verdad: que iba a ser un tipo ocupado, y que estébamos alli juntos para pensar en ese momento, en ese dia, qué nos faltaba por hacer por los problemas de Manzanillo. Tomé muchas notas y adqui- ri gran claridad sobre sus prioridades. Al momento de despedirnos hubo un toque de simpatia socarrona, muy de la politica colombiana. En el momento en que me despedia, uno de los hombres de mas edad se acercé y dijo: “Voy a votar por ti”, me cogié la mano. “;Dos veces!” y se rio. Sonref sabiendo que era una broma, muestra de sentido de humor repentista y cdlido del Caribe, ya que en muchas tegiones del pais sf se da esa practica ilegal. Eso paso en la playa de Manzanillo, cerca de Cartagena. 55 Powered by CamScanner La casa en el aire Durante ese invierno inesperado iba a cambiar la idea que te- nia de qué significa progresar. Tantos aiios de quemarme las pestaiias leyendo libros de economia, entendiendo ecuaciones ysacando estadisticas, estaban por volverse afiicos al borde de la ciénaga de La Virgen, en el barrio Olaya Herrera, de Carta- gena, donde ocurrié uno de los episodios fundamentales de ese trayecto por el pais. Primero, no nos querian recibir. Estefania Gonzalez, la jefa de nuestra gira, y que mandaba sobre la hora de desper- tarse, sobre los minutos de desayuno, almuerzo y comida o sobre si, de hecho, iba o no a haber las tres comidas, las citas, la logistica y el orden de las cosas, pas6 dos horas en el teléfo- no para lograr que nos dejaran entrar al barrio. El Olaya Herrera es uno de los barrios mas pobres de Car- tagena. Allf no querian ver més politicos. La raz6n, dijeron, es que llegaban a las 5:00 0 6:00 p. m., habfa que reunirles 100 0 200 personas para que dijeran cuatro bobadas y pidieran Votos, y chao. Estefania les dijo que tenfamos pensado llegaralas 10:00a, m., Yque no necesitabamos un lugar donde sentarnos y reunirnos, Pues querfamos caminar por el barrio, tal como habiamos he- cho en San Fernando, en Santa Marta. Buscabamos conocer a la gente y hablar con algunos de ellos. Al final, algo que dijo 57 Powered by CamScanner dle la Fundacion Gran, un jove : siguiente, Jonny. Estefania persuadio a Jou bi nal dia se hacer, Como suce: > ode nos Ve de Paz, que de nos Son ilo solo se pul todas si se va acompafiado por gente de} esienten a los forasteros, EL recor las cindades de Colom! vt i yecinos bartio, De lo contrario, los vec! ‘ ede pasar algo ines} no saben a qué van, y puede pasar algo t spe i ste porque si, sin avisar, y que ande por ahi, como si nada, Hay reticent ablar con un complet, extraiio, Solo cuando vienen acompaiiados de Personas fami. liares al barrio, conocidas por los vecinos, con credibilidad, bajan la guardia y lo admiten a uno caminado y conversando, "Ese fine el caso en el barrio San Ignacio, de Manizales; en Comuna8, de Ibagué, yen Petecuy, en Cali, por mencionar otros ejemplos. En todas las ciudades buscamos visitar algunos de los barrios mas golpeados y dificiles, y hablar con la gente. Esa fue, por mucho, la mejor experiencia que tuvimos, la que mas ener- gia nos dio para continuar en campaiia, la que més claridad nos aporté sobre los problemas y la urgencia para abordarlos, El ba- trio Olaya Herrera serfa, de nuevo, una experiencia impactante. Caminamos con Jonny y algunos de sus compaiieros de la fundaci6n durante cuatro horas, Recorrimos las calles y nos fui- mos acercando a la ciénaga de La Virgen. Aprendimos que las ultimas seis cuadras antes de la ciénaga le habjan pertenecidoal agua hace pocos afios, El barrio las habfa ido ganando paulati hamente, a punta de rellenos con material de desecho de cons- trucciones, Hantas y desperdicios de todo tipo. Ponen unos eae seas Rapti y sobre ellos tiran unos maderos como dice la cancién, Al rincioh i a0 tealmente en els 20030 m dentro del teas nal enet fe coteernesie pra sobre el agua, para llegar, eae “un une de mater : que ir hasta la nueva c atruccia si eta hasneaherahuane Alllegar al final delcaminode ce ne es Oe quita; mejor dicho, una baie; ee eel encontré una ba “nera de fibra de vidrio, sostenid@ do, La gente ng admite que uno se pr 58 Powered by § CamScanner Lacasaenelaire 1 dos grandes trozos de icopor. Dentro de ell: do Mario Espriella, qu er, U fa estaba senta- acababa de Hevarle una bolsa de pro- joven que nos miraba desde una casa paredes, pero con un techo que Pparecfa atin a medio construir, Mario era la persona que estaba construyen- do la tiltima casa del barrio, sola, dentro de la ciénaga. La gente con la que fbamos caminando se quedo en el punto donde se estrechaba el camino de madera sobre el agua, con lo cual, cuando Mario embarcaba y desembarcaba, est4- bamos solo cuatro chicos que se zambullian en el agua, él yyo. Mario justo acababa de llegar sobre la bafiera, impulsada con un palo largo que tenfa amarrada en la punta la tapa de una caneca. Era su remo. —Hombre, Mario: si la vida acd esta tan dura, gpor qué decidiste venirte? —Porque me toca. Ahora no hay trabajo, con la pandemia esa. Los trabajos que hay no alcanzan, ¢me entiende? Uno paga 300.000 pesos, 400.000 pesos de arriendo, cuando se gana 20.000 pesos, [0] 25.000 pesos al dia. —Qué hacias? —Yo vendo pan por ahi, me rebusco por ahi, de ambu- lante, pero no me alcanzaban los recursos para pagar ese poco’e plata, y un buen dia me vine pa’ca, con mi mujer. —Tienes chicos? —Los chicos los tengo en Villanueva, Bolivar, porque no he hecho el puente. Los traigo cuando termine el puente —y seiialé desde donde estaba parado yo hasta el sitio donde su mujer nos vefa conversar—. Va pegado aqui —dijo sefialando €l sitio donde estaba entrevisténdolo. —;CuAnto te demoras completando el puente hasta alld? —Una semana —dijo, mientras miraba de extremo a ex- ‘emo, como un ingeniero que calcula el esfuerzo que le tomar la obra. —¢Los materiales de dénde los sacas? yisiones a su mu} que ya tenia la 59 Powered by CamScanner Un ano de sotedad Lox comprabar en ef asertf03 0 $1 HO, los corto aci tan, sata nan ose ceveano—y EN CL MANKLE, Asi ogy, us, hechas de mangle: / nv hacer el relleno? bien todas las ¢ —2Cudinto te demoras e —Pues, depende, patron. demora. el relleno co ! mes. Daindole constantemente, 91 ¢ Depende del relleno, Eso 5 ante, de pronto dura hasta un | material esta demorado, se demor : Hace cuiinto llegaste aqui? : —Ya tengo rato, A Cartagena, [hace] tres afios. Pero y. ya tengo como un mes. —En ese momento Ip viendo por aca corrigié su esposa desde la casa, y le aclaré que Mevaban quin. ce dias viviendo alli—. Pues llevo mas, pero hace quince dias ya no aguanté mas la presidn de esa gente, de “Te vas de aqui; si no me pagas el arriendo, te vas de aqui”. Eso le da penaa uno con la myjer y los hijos. A veces nos tocé dormir en el patio, compa; a veces. Yo veia a los hijos mios ahi; eso me par tia el alma, compa. Por eso fue que yo invadi por acd e hice mi casa. Gracias a Dios, estoy bien. Gracias a Dios. —Hombre, Mario, gy por qué hacer eso allé, tan lejos? —Para progresar. —Chocamos putios en el aire, pues él hablaba desde su barca hechiza, yyo, desde el camino en elaire. Presumo que el material de relleno para la calle debe lle gar hasta un punto en un cami6n, y luego habra que llevarlo por carretilla hasta el limite de la ciénaga; es decir, se trata de un esfi nero descomunal para una Persona que apenas si tiene con qué comer, Su esposa estaba sentada alld, afuera de la cas’, y Mario acababa de levarle, en una bolsa de plastico, tal ver. el almuerzo, esoneanute ae. 1a persona, el colombiano que estaba inhdspito de todo, deamparade catch lito mas cies de la ayuda del Estado, del * rc Sao aes manage la persona que se pod an nce del municipio de Cartage™ ‘sentir mas desoladay desatendida, esti 60 Powered by CamScanner La casa en el aire completamente tranqu estaba haciendo lo que » Espriclla, a pesar de tener pa progresando, Como resultado del desatio de la pandemia, de ins progreso le iba a signific todo en contra, sentia que es que su ado, de que habia us hijos a donde los abuelos, de que allé sentada, como resultado de todas estas cosas, Mario Espriclla estaba jugindosela para construir una a nueva. Esto fue para mi, y espero que lo sea para quien lea esto, algo tremendamente conmovedor. Me hipnotizé el optimismo, sin ningtin aspaviento, con el que veia su situacién. Sentir uno que esta progresando y sacando provecho de lasituacin mas dificil y comprometida de su vida es el reflejo de lo mejor de Colombia, de su esencia mds intima. La emo- cién, la fuerza, la potencia, las ganas que produjo hablar con Mario o con Eliécer Gémez, el nifio que queria aprender a boxear en el barrio de San Fernando de Santa Marta, 0 con Jos pobladores de Tasajera, al lado del mar, cerca de la ciénaga Grande, ejercen en uno como una central energética que pro- rebusque vendiendo pan se habfa complica e Su espos dujera miles de megavatios. El pundonor de cada una de las personas que se encuen- tran a lo largo del pais hace sentir que este esfuerzo vale la pena. Nadie en una situacién tan comprometida como los se- tes humanos que he mencionado transpira e inspira més se- tiedad, mas aplomo y més ganas de echar pa’lante. Alanalizar lo que seguramente va a pasar en los proximos dos, cinco y diez afios con Ja casa de Mario Espriella, construi- da con migajas, con lo poco que tiene, tengo la certidumbre de que el futuro le daré la raz6n, Una vez la calle sea rellenada con material de escombros hasta la entrada de su nueva casa lo cual ocurriré en un lapso de entre seis meses y un ahlo—, empevara su relleno para levantarla y transformarla en una més de las casas de ladrillo y cemento como las que haya todo lo largo de esa calle, Todas empezaron igual que la de Mario. 61 Powered by CamScanner Un aio de sotedad sp costado mucho esfuerzo, fisico +. habe asa pasar de hab pero muy pace ¢ es de pesos en 08 ¢ I sudory kigrimi avaler 10 millon on pesos para su COnStrucciéy, » tres afios. En adelan, te, que es lo que apre. cir, subir] ese] agua. Con Pos. » emplearan a fondo en “manera, la visi6n actual de “0 afios; es di ciaen piso, de ta terioridad, Mario, su esposa y Sus construir el s Mario se materia nida de enorme progreso. P teneruna fuente de ingreso mas estable que el pan y el rebusque, Al regresar al barrio después de la visita donde Mario Es. priella, se nos vino encima un aguacero. Alo largo de la calle hay una especie de vallado donde se acumulan aguas negras, Es un sitio fétido, del cual nos advirtieron varias veces: “Tienen que ver lo que es esto cuando Ilueve”. Como si lo hubiéramos invocado, empezé a llover como Dios manda y, de afan, para guarecernos, nos acogieron en la casa de una sefiora suprema- mente amable, joven y sonriente. Pregunté por su nombre, y respondio: Maria del Carmen Bolivar. Si hubiéramos pedido un personaje mas emblemiatico en el departamento de Bolivar, para saber cémo una mujer sola y su hija salen adelante, no lo habriamos logrado mejor que con Maria, Ella vende minutos de celular, cubetas y cultivos de Jardin. Las cubetas son bolsas de agua que mete en un reftige- rador que compré con ahorros, En el Ppequenio patio trasero de su casa tiene un vivero para cultivar hierbabuena, albahaca, ‘microgreens de remolacha y Pak choi verde Y rojo, que vende# Jos ene de cocina gourmet de Cartagena. naba al mesente a arimprudente le pregunté cudnto g* ne i as de hielo, los minutos de celulat y el vivero, con Ja intencién de conocer la ec x una madre cabeza de familia que sol, nt eon He : ‘amilia que sobrevive en el reb “Entre 500,000 y 600.000 pe: rebusque. y Pesos por mes; con eso vivo” —dijo— fi ijo— ‘iar una aye. Para que esto se dé, Mario necesita 62 Powered by CamScanner Lacasaen el aire una empresaria magnifica, con una sonrisa espectacular de optimismo, Ella vive en casa propia, de material, con dos cuar- tos, un baiio y un patio, a tres cuadras de donde Mario Esprie- lla estaba construyendo su casa en palafitos. Como Mario, Maria no le pedia nada a nadie; de hecho, acababa de graduar- se de un curso en el Senay estaba pagando la deuda que habia adquirido para inscribirse, Powered by CamScanner La pistola no la venden con las giievas *;La comuna es una chimba!” —dijo nuestro interlocutor cuando hablabamos de la vida en las comunas de Medellin. Estibamos sentados conversando sobre el crimen en la ciudad, con alguien que lo conoce bien. Contrario a lo que pensaba, a lo que dicen los estudios, lo que publica la prensa, lo que se ve desde la lejania, donde las comunas aparecen como enjambres intimidantes de casas irregulares que cubren casi por completo los cerros, habitadas por familias sometidas aldesempleo, el hambre y el crimen... contrarioa eso, nuestro interlocutor nos presentaba una versi6n distinta. Es una verdad de a pufio que la inseguridad en las calles esté fuera de control; todo el mundo se queja a lo largo y an- cho del pais, En un articulo de prensa describi a Bogotd como Ciudad Gética. Esa ciudad de Batman, en Ia cual no hay go- biero, donde no hay orden ni ley, a'tal punto que un vigilante Nocturno como Batman se dedica a imponer algo de ley en las calles cadticas, donde asaltan a la gente, la atracan, la roban y fa asesinan ante Ja mirada indolente de las autoridades, que Parecen parte del problema mas que de la solucién. La verdad & que el pafs se convirtié en Colombia Gética. En uno de los viajes a Medellin, consulté con un grupo investigadores liderado por Santiago Tobén y Felipe M Rez, que han trabajado con los combos de Medellin, con las 65 Powered by CamScanner Un aio de soledad serimen. Le dijea Santiago que, COMO qUeriamo, le Le di " pandillas d ee \ aa jedad el tema del crimen en el pais y en las ci, Jades, me gustart conocerlo de primera mano; es decir, sen. tamos ona que conociera por dentry convers cl crimen, que lo hubiera perpetrado y vivido de €l. No dy lado de Batman, sino del de los malos. Santiago accedid, y bus. c6 una persona que pudiera hablar con nosotros, Esa tarde, después de recorrer el barrio El Pesebre, clava. do como una cufia entre las comunas 13 y 7, recostado en la colina, al lado de una autopista moderna que no los beneficia de a mucho; y de caminar entre el contagioso bullicio del co- mercio del barrio Moravia, nos encontramos con esta persona. Estabamos citados en un pasadizo largo, en el primer piso de un edificio, con entradas libres en los extremos y unas 20 mesas, para cuatro o seis personas cada ‘una, organizadas en dos hileras. Nos situamos en una que estaba hacia la mitad de Ia hilera izquierda, lejos de los extremos. Desde ese punto se vefan muy claras las dos entradas al corredor, y lo iluminaban levemente. Cuando esta persona empez6 a caminar solo veia su silueta; la de un hombre avanzando hacia nosotros a contraluz. Cuando llegé a donde lo estabamos esperando, constata- mos que se trataba de un muchacho con aspecto juvenil. Era delgado, de 1,70 m de estatura, y tenia una cara tremendame te amable, Nos saludé con un dejo cordial y clido, natural en los paisas, con argot de las comunas: “Qué hubo, parceros”- Pact sabe ycercana que nos hizo olvidar el aire ect ace eet ae hizo sentir cémodos de i nie ee Le ofrecimos una bot eee Tse een hacen si lo Podtamos filmar. "Por supues amih ie irekainge ia vied exc eg penn Fe guntamos si le seen a Filmar, ni de fundas’, Le pl? 8 Brabar, y tampoco accedid, Nos 4? 66 | Powered by CamScanner | | | {a pistola no la venden con las gtievas que habia pedido permiso para hacer la entrevista con noso- trosy que Tos de arriba se lo habjan dado, y que en Medellin, hoy por hoy —como vamos a ver en este relato—, no se hacia nada sin permiso. Entonces tomé el cuaderno y el esfero, que en Medellin se Hama lapicero, y empezamos. Lo que voy acon- tar no es exacto, pero es lo mas cercano a lo que fue tra conversacién, Recorrimos, primero, la trayectoria de su vida. Le pregunté emo empezé a involucrarse con el crimen. Mencioné que su mami se habia casado, o arrejuntado, con alguien distinto de su padre biol6gico, quien los habia abandonado. Ese sefior habia traido a sus hijos a vivir con ellos. Tenia unos hermanastros con los que no se entendia bien y un padrastro con el que se enten- dia atin peor, y por eso se la pasaba afuera de la casa. Cuando salia a la calle, a unos 100 m de su casa, habia siempre un grupo de muchachos con edades entre los 15 y los I6afios. El,tenfa en esé momento 8. En una de esas salidas, los muchachos le preguntaron cémo estaba; y él les dijo que tenia problemas en el colegio, con las tablas de multiplicar. Entonces uno de ellos le dijo: “Venga, y le ayudo a aprendérselas”, y em- Pez6 a hacer que repitiera las tablas, y cuando se equivocaba, a pegarle carifiosamente en la cabeza, con la cacha de un re- Volver, Hoy se refiere a esos jévenes como “Los que me ensefia- Ton las tablas”, Desde ese encuentro les cogié carifio. Lo protegian, le daban seguridad y lo acogian de una manera como nolo hacfa su familia; rapidamente se volvieron las personas mas cercanas Para él. A sus 10 afios les cont a sus amigos de la cuadra que “ muchachito en el colegio le robaba la lonchera. Uno de ellos Propuso darle una pufialada para salir del problema. Di- choy hecho: fueron y apufialaron al muchachito, lo cual levé ist lo expulsaran del colegio y a que iniciara su vida de ma- = e al lado de sus amigos. Decfa que iba al colegio, pero ‘ente se quedaba con ellos durante el resto del dia. nues- 67 Powered by CamScanner Un an VEvanos te dieron lat primera pistola, De wh ‘ H “La pistola no la Venlo H se las pe Cuando tent la valentia la consignio por si miso. con las gtievas nos dijom. Las gue eno", y adennin, con mano temblorasi: “Qué tl uy, » del stst0, Pues fg entonces hizo el sacar una pistola, un revolver, asi, mut matan ano con la misma pistol, De manera que cuandy rlo con kas gitevas puestage pa de la parte bi : Uno saea un revdlver, tiene que saci En el barrio, su pandilla se ocuy ba, en To alto de la comuna, el control lo tenfan guerrilleros, que Namaban milicianos, Un dfa, Jos muchachos decidieron limpiar el barrio de los milicianos y planific Guando Hegaron a la parte de arriba ¢ varon la sorpresa de que los milicianos los estaban esperando, preparados para una batalla campal. Uno de los de abajo los taicioné. Hubo una balacera tenaz, que se extendié por varias horas. Muertos y heridos de lado y lado, hasta que, al fin, los guerrilleros los repelieron y los hicieron huir hacia abajo, Cuando volvieron a su calle, la Policfa los estaba esperando, y entonces se armé otra balacera tremenda con las fuerzas del orden. De nuevo, muertos y heridos. Esa era la dindmica de aos y crimen en las comunas hace 25 aiios. En un trabajo que le encargaron —esto es una cosa grt fica y horrible, pero fue como nos la conté—, tenfan que qui tarle la parte inferior de una pierna a una sefiora que estaba engafando al marido, El hombre pidié especificamente que Ja hirieran de esa manera. En el asalto a la sefiora, capturaron a un amigo, que era el hermano menor de uno de los que ke habian ensefado Jas tablas de multiplicar, Sus amigos le pidie- ron que se entregara, para que pudiera salir el muchacho. S¢ entregé y pasé tres aiios en la carcel. Al salir, estuvo en el cel tro de Medellin dedicado al quieto, —éQué es el quicto? le pregunté, —Myy sencillo: es que, entonces, uno ve a. una pel lacalle, saca el revélver y le dice: "{Quietol”, y uno le roba tol onaell 68 Powered by CamScanner

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