You are on page 1of 5
Rev. Soc. Colomb. Endocrinol. 13: 8-12, 1981 / Articulo Original OBESIDAD E HIPOTIROIDISMO Dr. Julio C. G6mez Afanador* RESUMEN Se estudian 355 casos obesos de 1a consulta privada, en quienes por Ia sinto- matologis clfnica y pruebas de laboratorio, se confirma el diagnéstico de hipo- tiroidismo en un cuarenta y seis por clento. EI andlisis de los resultados do las pruebas de T4 y T4 normalizado permis Probar que existen obesos hipotiroideos con sumento de prote(nas portadoras de tiroxina, que hacen que la prueba de T4 sea muchas veces normal. Los resultados nos conducen a aceptar, que existe una clara relacion entre ‘obesidad e hipotiroidismo, EI estudio diegnéstico de hipotiroidismo debe ser un complemento necesario ‘en ol paciente obeso. EI tratamiento del obeso con hormona tiroidea, solo tiene justificacion cuando hemos comprobado hipotiroidismo. INTRODUCCION La obesidad, seguramente debido a coneeptos equivocos, la relacionaban con un buen estado de salud o de prosperidad, debido a que se considero mas como sin- toma de alguna enfermedad que como enfermedad en sf, permaneci mucho tiempo sin interesar en forma definitiva a los investigadores. En tiempos recientes debido a la gran incidencia con que se presenta en miilti- ples estados patolégicos, se ha abierto un amplfsimo campo de investigacién sobre obesidad, que ha venido aclarando milti- ples conceptos de su fisiopatologfa y de su relacion con factores ambientales psicosociales y de riesgo. La relacién con los estados tiroideos existe como un sfntoma dependiente del hipotiroidismo desde la descripeién inicial de ésta enfermedad. Posteriormente con la aparicion de la posibilidad de medir el gasto caldrico de un individuo en reposo con la prueba del Metabolismo Basal y considerando que la regulacién de la calorigénesis es una funcién primordial de la hormona tirol- dea, se encontré en un buen nimero de obesos una disminucién del gasto cal6ri- co, lo cual relacioné mas la obesidad con. el hipotiroidismo. Con la aparicién de una serie de prue- bas que buscaban la dosificacion de la hormona tiroidea en sangre y con las pruebas de captacion con yodo radioacti- vo se encontraba poca o ninguna relacion entre los dos estados, Entonces a esos obesos con Metabolis- mo Basal bajo se les llem6 hipometab6- licos a pesar de que en algunos de ellos habfa signos y pruebas de laboratorio de hipotiroidismo y otros disminufan de peso con la administracion de hormona tiroidea. Un profesor tan autorizado como Williams en su tratado de Endocrinolog(a dice “La hormona tiroidea no tener una importancia primordial em la etiologfa de la obesidad y no es UP agente satisfactorio para promover 18 pérdida de peso en la mayorfa de los enfermos afectos de éste trastorno” (1): * Miembro de namero de la Sociedad Colombiana de Endocrinologia, Bogots, Colombia. Rev. Soc. Colomb. Endocrinol. Vol. 13 No. 1 — Enero 1981 Nuestro propésito en este trabajo es el de analizar un grupo de pacientes Sbesos de nuestra consulta privada, a fravés de las pruebas tiroideas mas recien- fes para investigacién de ésta hormona en Langre y buscar junto con los datos clfni- cos la posible relacién entre obesidad e hipotiroidismo. MATERIAL Y METODOS Se estudian 355 pacientes de la consul- ta privada, quienes habfan consultado por obesidad y que corresponden a 314 muje- res y 41 hombres, de los cuales un setenta por ciento tienen més de veinte aos y un treinta por ciento menos de ésta edad. El estudio se realiza con base a una historia clfnica orientada al andlisis del paciente obeso donde ademés de los datos generales se investiga la edad de aparicion de la obesidad, los anteceden- tes familiares de obesidad y diabetes, el tanto por ciento de sobrepeso basado en edad, estatura y peso, exploraci6n de sig- nos y sintomas relacionados especialmen- te con enfermedades del tiroides y diabe- tes, estado de la glandula tiroides in situ y pruebas de laboratorio especialmente relacionadas con metabolismo intermedio y de funci6n tiroidea, Con anterioridad y debido a la gran importancia que tiene la dosificacion de hormona tiroidea para diagndstico de enfermedades del tiroides, hemos buscado datos de normalidad de estas pruebas en nuestro medio, estableciendo compara- cién con los estados de anormalidad, estando siempre alerta ante las dificulta- des para dosificacion de la hormona como son la alteracion de las protefnas trans- portadoras de tiroxina y la contamina- cién con sustancias yodadas; pero que gracias al progreso de la técnica se ha llegado a pruebas de funcién como T4 y T4 normalizado que nos permiten un satisfactorio fndice de confiabilidad diag- nédstica. RESULTADOS Se estudian 355 obes0s que se presen- tan en grupos de porcentaje de aumento He pero come indica la gréfica No, 1, TOTAL DE O8ESO5 355 100 % GRAFICA No.1 Con base a la sintomatologfa clinica y los andlisis de laboratorio se encuentra un 54 por ciento de pacientes eutiroideos y un 46 por ciento de hipotiroideos, En ambos grupos existe una ingesta dietaria, muy rica en calorfas dependiente especialmente de harinas y aztcares, con gran desorganizacion en los habitos dietéticos y con una clara disminucion en el gasto calorico, quiz debida a la situa- cién socio-econémica imperante. EDAD DE INICIACION Hemos analizado los pacientes ya clasi- ficados por su funcién tiroidea en grupos por edad de iniciacién de la obesidad pensando més en la idea de celularidad del tejido adiposo y en la mayor época de multiplicaci6n celular de los primeros altos de vida, ‘Al comparar los dos grupos observa- mos que los hipotiroideos inician la obe- sidad en su gran mayorfa antes de los 15 afios mientras los eutiroideos empiezan a aumentar de peso més frecuentemente después de los 20 aos, lo cual nos permi- te pensar que en los hipotiroideos pueden existir factores congénitos o genéticos que actuarfan en la obesidad desde los primeros afios de vida o también en facto- res fisiolégicos como el crecimiento y la pubertad que influyen sobre la funcién de la glindula tiroides y sobre el aumento 10 de peso, en tanto que en los eutiroideos: podrfan influir més los factores ambien- tales (Cuacro No. 1). Comparando otros EDAD INICIACION OBESIDAD Hipotiroideos Eutiroideos fons} No. Casos /o No. Casos Yo oak] se ao 9080.08 Yay Menosde10ahos 44 12 42 12 ee ee 10 - 15 afios 49 4 31 9 Be 15 - 20 afios Sine WAvos Ole B) Ms de 20 atos ba "17 a3 26 eee (CUADRO No.1 datos relacionados con la obesidad como Aaah los presentados en el cuadro No. 2 obser- em aan vamos en los eutiroideos una mayor frecuencia en los antecedentes familiares de obesidad y de diabetes y en la presen- cia de diabetes mellitus, mientras que el bocio es coman en los hipotiroideos. GRAFICA No.2 COMPARACION DE ALGUNOS DATOS TOTAL OBESOS 355. Hipotiroidismo Eutiroidismo No. Casos % No. Casos lo Antecedsntes de obesided 24 120 34 Antecedentes de Diabetes 10 7 19 Diabetes 1 7 5 Bocio 23 17 10 CUADRO No.2 Estos bocios, son tanto difusos como nedulares y de pequefio tamaiio, lo cual puede ester mds en relacion con altera- ciones de la funcién de la gléndula que con otros estados del tiroides. PRUEBA DE T4 y T4 NORMALIZADO Analizandoestas pruebas, practicadas en los dos grupos, por el método de “E; lace Competitive” para ‘I'4 y sus modifi- caciones para T4 normalizado, encontra- mos como se observa en Ia grafica No. 2 que las pruebas son normales ina eutiroideos, valoe En el total de hipotiroideos el T4 fué de 4,86 + 1,8 microgramos, ‘mientras el T4 normalizado fué de 0,40 £ 0,08. Discriminando los datos de hipotiroi deos hallamos un grupo con T4 normal ¥ T4 normalizado. bajo, mientras en otro grupo ambas pruebas estén por debaj@ del normal. Aceptando que la prueba de T4 noF malizado, excluye la influencia de protel nas transportadoras de tiroxina en Ia dosificacion de la hormona, podemos: Rev, Soc. Colomb. Endocrinol, Vol. 13 No. 1 — Enero 1981 deducir que existe un grupo de hipotiroi- deos obesos con aumento de proteina transportadora de tiroxina que altera la prueba de T4, mientras en el otro grupo ambas pruebas son bajas, DISCUSION CALORIGENESIS; Una de las acciones biol6gicas més importantes de la hormona tiroidea, es el efecto estimulador de la calorigénesis, que se manifiesta por el aumento del consumo de oxigeno en el animal com- pleto, o en tejidos aislados invitro (2) Edelman sugiere que la principal vfa por la cual ocurre es estimulando la actividad biologica de la A.T.P. asa de sodio y potasio, para mantener el equilibrio, sodio-potasio, extra -intra celular-. Como resultado se genera A.D.P. el cual controla en forma estrecha el consu- mo de oxfgeno por las mitocondrias, El efecto obvio consiste en aumentar el consumo de oxfgeno y generar mas unidades de A.T\P. de energfa alta -(3). Sobre el metabolismo de proteinas estimula la sintesis de protefnas. Sobre los carbohidratos parece regular la magni- tud de las acciones glucogenolitica e hiperglicémica de la adrenalina y poten- ciar los efectos de la insulina sobre la sfntesis de glucégeno y la utilizacién de glucosa. Sobre los Ifpidos actia en. los procesos de sfntesis, movilizacién y degradacién. CAMBIOS METABOLICOS EN HIPOTI- ROIDISMO Siempre que la liberacién de hormona tiroidea a la periferia sea inadecuada se retardan los procesos oxidativos, se reduce el consumo de energfa y se amortigua la termogénesis. ‘Andlisis dindmicos estén en consonan- cia con el retardo del catabolismo de los "1 Ifpidos preformados en el hipotiroidismo, Estudios in vivo e in vitro han demostrado una disminucion de la capacidad de res. puesta a la accién lipolftica de las cateco- laminas y también in vitro se ha demos. trado la reduccion de la respuesta del tejido adiposo aislado a las otras hormo- nas lipolfticas como A,C.T\H, T.S,H, glucagon y S.T.H. Se ha sugerido que la actividad adenil- ciclasa del tejido adiposo puede estar disminufda. El tratamiento del animal hipotiroideo con hormona tiroidea o la adicién de T3 al tejido adiposo invitro devuelve la sensi- bilidad a todos los agentes lipolfticos. En_hipotiroidismo se disminuye la sfntesis de los Scidos grasos en el hfgado y tejido adiposo. La propensién a almace- nar grasas frente a esta reducida sintesis hace pensar en una disminucion mayor en la destruccién de grasas. En relacién con las protefnas tanto |: sfntesis como su catabolismo estan dism nufdos. En relacién con el metabolismo de glucosa, en el hipotiroidismo la prueba de tolerancia a la glucosa muestra una curva plana lo cual suele atribuirse al retraso de absorcién de la glucosa por el tracto gastro intestinal, pero también puede haber una mayor utilizacion de glucosa por el hfgado bajo la influencia de insu- lina (4). Existen variados informes en 1a litera- tura médiea sobre tratamientos de pacien- tes obesos con hormona tiroidea, con resultados algunas veces satisfactorios, otros negativos (5-6); en todos el! lama la atencién la falta de clasificacion de la obesidad en relacion con posibles trastornos tiroideos. En los pacientes estudiados encontra- mos cuarenta y seis por ciento de obesos hipotiroideos en quienes existe una serie de sintomas clinicos como astenia, abulia, disminucién de actividad ffsica y actividad laboral, sonnolencia etc. Sfnto- mas que conducen por su misma natura- leza a un ahorro en el gasto calérico, 12 fo mientras que la ingesta es similar a la de mismos efectos, por disminuci6n la poblaciOn general normal. nente del estfmulo de la calorigénesi, produciendo una utilizacion cal6rica baja. La disminucion comprobada de la hor- mona tiroidea circulante, conducirfa a los BIBLIOGRAFIA William R. “Tratado de Endocrinologfa’, pagina 1.118- Editorial Salvat 1.971. William R. Tratado de Endocrinologta, p: 182, Editorial Salvat 1.978. Openheimer JH, Surks MI: Accién periférica de la hormona tiroidea, Clinic, med, nort, am, Péginas 1059-1060, septiembre 1975. Boyde E, Freinkel N: paginas 47-550, en El tiroides, por Werner S, Ingbar SM, Salvat 1977. Exhan A, Sims H: Obesided experimental y termogénesis inducida por la dieta y sus implicaciones | clinicas. Clin Endoc, (1977) 4: 96-99 (Ed. Salvat). 6. Bray GA, Greenway B: Aspectos farmacolégicos de! tratamiento del paciente obeso, Clin, Endoc- ‘La Obesidad, péginas 177-185, Saivat, 1971. gn= Ree

You might also like